mÉxico y la hegemonÍa mundial …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · web...

55
"La consolidación del imperialismo norteamericano en México durante la época de Juárez” Arturo Lomas Maldonado Universidad Autónoma Metropolitana Área de Historia del Estado y la Sociedad En la historia de nuestro país no existe un personaje tan controvertido como Juárez. De tal suerte que si por un lado hay quien, como Justo Sierra, asegura que: "...nadie creerá en la nación mexicana, nadie, nunca, que Juárez fue un traidor a la patria" 1 , por otro lado hay quien, como Ignacio Ramírez “El Nigromante”, se pregunte: "¿Donde están los títulos que acreditan la grandeza de Juárez?, La escasez de vergüenza y patriotismo es la única herencia que nos ha dejado" 2 . En la actualidad es fácil encontrar manifestaciones encendidas que llegan a asegurar que para transformar la realidad de México “ necesitamos juarismo en lo político y cardenismo en lo social, una síntesis armónica de lo mejor de nuestra experiencia histórica” 3 toda vez que según esto “en circunstancias adversas, manteniendo principios, se pudo cambiar en lo estructural y gobernar con apego a las reglas de la Constitución, con transparencia, honestidad y defendiendo la soberanía nacional”. Así mismo un articulista de dudosa solvencia intelectual afirma 1 Justo Sierra, Juárez su obra y su tiempo p 563 2 Ralph Roeder Juárez y su México p 1075 3 Palabras de Manuel López Obrador en el evento organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM “Actualidad de Juárez, encuentro conmemorativo”, Karina Aviles, La Jornada 20 marzo 2003

Upload: others

Post on 07-Mar-2020

0 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

"La consolidación del imperialismo norteamericano

en México durante la época de Juárez”

Arturo Lomas MaldonadoUniversidad Autónoma Metropolitana

Área de Historia del Estado y la Sociedad

En la historia de nuestro país no existe un personaje tan controvertido como Juárez. De tal

suerte que si por un lado hay quien, como Justo Sierra, asegura que: "...nadie creerá en la nación

mexicana, nadie, nunca, que Juárez fue un traidor a la patria"1, por otro lado hay quien, como

Ignacio Ramírez “El Nigromante”, se pregunte: "¿Donde están los títulos que acreditan la grandeza

de Juárez?, La escasez de vergüenza y patriotismo es la única herencia que nos ha dejado"2.

En la actualidad es fácil encontrar manifestaciones encendidas que llegan a asegurar que

para transformar la realidad de México “ necesitamos juarismo en lo político y cardenismo en lo

social, una síntesis armónica de lo mejor de nuestra experiencia histórica”3 toda vez que según esto

“en circunstancias adversas, manteniendo principios, se pudo cambiar en lo estructural y gobernar

con apego a las reglas de la Constitución, con transparencia, honestidad y defendiendo la soberanía

nacional”. Así mismo un articulista de dudosa solvencia intelectual afirma “no es redituable, desde

el punto de vista ético, intelectual, político y constitucional, ser antijuarista”4

Igualmente son frecuentes las frases como las pronunciadas por Ramón de la Fuente que

señala: “Juárez supo claramente que el pueblo y sólo el pueblo es la única fuente legítima del poder

y de la autoridad, que el poder tiene el límite que les imponen las leyes y que éstas no deben

perseguir otro fin que el de la justicia”, siendo que el rector de la UNAM jamás ha tomado en

cuenta siquiera la opinión de su comunidad.

Lo curioso es que las anteriores aseveraciones coinciden plenamente con las pronunciadas

por el actual Presidente Vicente Fox, quien acusado de antijuarista y declarándose adversario

político de los anteriores, que se lanzan acusaciones mutuas de comprometer la soberanía nacional

y de querer entregar el país al exterior. El actual presidente de la República resaltó la figura de

Juárez asegurando que su gobierno “se rige por el ejemplo juarista, al empeñarse en hacer valer el

estado de derecho, en fortalecer el Poder Judicial y en hacer cumplir las decisiones de los

tribunales, incluyendo los electorales”5 y en un discurso en que todo “fue una apología juarista”,

1 Justo Sierra, Juárez su obra y su tiempo p 5632 Ralph Roeder Juárez y su México p 10753 Palabras de Manuel López Obrador en el evento organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM “Actualidad de Juárez, encuentro conmemorativo”, Karina Aviles, La Jornada 20 marzo 20034 Carlos Monsiváis, ibídem, La Jornada 20 de marzo de 20035 “Juárez a los Pinos” El Universal 21 de marzo de 2001

Page 2: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

según el reportero, todavía se dio tiempo para evocar al “indígena del pueblo zapoteco que se

aseguró un lugar central en la historia por su tenaz defensa de la República contra el invasor y por

lograr el acuerdo nacional definitivo respecto del Estado secular, la división de poderes, el sistema

de representación popular y el sistema federal”, expresiones que desde luego nos obligan a una

revisión mas profunda de un personaje que permite armonizar posiciones aparentemente

irreconciliables.

Por su parte un columnista del periódico El Universal, José Antonio Crespo, al comentar la

exclamación de Roberto Madrazo, actual dirigente del Partido Revolucionario Institucional en el

sentido de que "En la mente de los priístas está regresar a Benito Juárez a Los Pinos", en alusión al

cuadro de Juárez que el presidente Fox sustituyó por el de Francisco Madero, el analista afirma que

efectivamente “El PRI siempre se ha ostentado como heredero directo de Juárez, el máximo héroe

de la República”.

“El PRI como Benito Juárez - nos asegura Crespo - mostró históricamente un largo y

retorcido colmillo para darle la vuelta a la legalidad aparentando cumplirla”. La frase "Querer que

un poder extraordinario, creado por la necesidad y por la voluntad nacional, obre con estricta

sujeción a la ley, es querer un imposible", atribuida por Crespo a Juárez, “concuerda perfectamente

con la práctica del priísmo histórico.

Después de la guerra, Juárez llegó a la misma conclusión que antes Ignacio Comonfort: que

con la Constitución de 1857 no se podía gobernar por los pocos poderes que otorgaba a la

institución presidencial. Ante ello, Comonfort intentó dar un cuartelazo que, al frustrarse, desató la

Guerra de Reforma (1858). Juárez, al enfrentar más tarde esos mismos límites constitucionales,

simplemente decidió gobernar por encima de la Carta Magna, como hizo más tarde Porfirio Díaz.

“Y aunque los priístas gobernaron con una Constitución que fortaleció la institución presidencial la

de 1917, en realidad recurrieron más a los poderes metaconstitucionales en lugar de apegarse a los

preceptos constitucionales”.

“Finalmente viene el nacionalismo a toda prueba de Juárez, - concluye el articulista - otra

virtud que el PRI se apropia y de la que se ufana. Pero resulta que Juárez no fue tan nacionalista

como se nos cuenta en la escuela; baste recordar las enormes cesiones de soberanía que quiso hacer

a Estados Unidos a cambio de ayuda política, financiera, diplomática y militar. Un botón de

muestra (de muchos) ocurrió durante la Guerra de Reforma, cuando Juárez solicitó, apelando al

famoso Tratado Mac Lane-Ocampo, la intervención de la armada estadounidense en las aguas

veracruzanas de Antón Lizardo para detener unas fragatas conservadoras que se dirigían al puerto,

donde radicaba el gobierno juarista. Dicha intrusión inclinó la balanza en favor de los liberales. Por

lo cual Juárez, eufórico, escribió a su yerno: "El triunfo de la sagrada causa que defendemos está

asegurado. Un gran pueblo (Estados Unidos) ha hecho alianza con nosotros... el hecho será

inolvidable para México y para el corazón de los demócratas, el nombre de Turner, el capitán de la

Page 3: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

escuadra estadounidense, vivirá eternamente". Los priístas no mostraron una conducta muy

distinta. Desgarrándose las vestiduras nacionalistas en el discurso, incluso con altisonantes

proclamas antiyanquis, negociaron siempre por debajo de la mesa su subordinación a las causas

importantes del vecino del Norte”.

“Así pues, probablemente tiene razón Madrazo al afirmar que, de regresar el PRI a Los

Pinos, retornaría también el verdadero espíritu de Juárez: el de las chicanadas legales, los fraudes

electorales, el gobierno metaconstitucional y el nacionalismo simulado.”, culmina el autor.

La actitud de Juárez, ante la guerra civil, ante la intervención y gracias a sus sucesivas y

anticonstitucionales reelecciones, merece un examen detenido con el objeto de precisar hasta donde

la causa y las acciones de tan controvertida figura pública merece toda una gama de calificativos,

algunos de ellos francamente desmesurados "Juárez recibió entonces de muchos de sus amigos la

calificación de obstinado y pertinaz, que se repitió más tarde, cuando con el mismo tesón se negó a

aceptar la conciliación con los reaccionarios y la mediación de las potencias extranjeras en el

arreglo de nuestros asuntos interiores"6.

“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un modesto

traje negro, tranquilo y pausado, Juárez daba la impresión de una persona que piensa mucho las

cosas antes de actuar, pero que, una vez tomada una decisión, jamás renuncia a ella...Este indio

sumamente modesto, insignificante a primera vista y ya maduro, poseía una energía inmensa y una

voluntad de hierro y nunca conoció el miedo, ni el pánico"7

Castelnau, enviado de Napoleón III en 1865 para convencer a Maximiliano de lo imposible

de la Intervención, señalaba: "Se me pinta a Juárez como una especie de romano antiguo, animado

por el patrio mas ardiente y acrisolado, pronto a sacrificar su ambición en aras de la patria"8.

El día de su segunda entrada triunfal a la ciudad de México, ahora ante el retiro de las

tropas francesas, el 17 de julio de 1867, "el hombre que la multitud aclamaba era la personificación

de la revolución democrática iniciada diez años antes, el héroe colectivo de un pueblo que había

conquistado al fin, la libertad interna y la independencia nacional, gracias a la fe, la fortaleza, la

tenacidad, la constancia de su máximo representante"9 "porque Juárez no sólo era una gloria para su

patria, sino un timbre de honor para la humanidad"10

Justo Sierra, uno de los primeros y mas grandes admiradores de Juárez le dedica las

siguientes palabras: "¡Gran padre de la patria, viste el triunfo de tu perseverancia, de tu obra, de tu

fe, en ese triunfo te dejamos...y quisiste levantar al pueblo mexicano...al grado a que tú habías

6 Roeder op cit p 7637 A Belenki Intervención extranjera en México 1861-1867 Ediciones de Cultura Popular México 1975 p 358 Ibídem Roeder p 9449 Ibídem Roeder p 99310 Ibídem Roeder p 1063

Page 4: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

ascendido, transformando las condiciones del trabajo nacional, protegiendo las grandes empresas

de progreso material"11.

Pero así como hay quien le ofrece vasta poesía a Juárez, existe otro extremo de críticos

muy severos, entre los que hay que contar a Don Francisco Bulnes, sociólogo e historiador y quién

le dedica dos de sus obras* con el único objeto de tratar de desentrañar su misteriosa personalidad:

"¿Representaba en esos momentos la causa de Juárez la República?” se pregunta Bulnes, "Nunca

había habido verdadera República...¿Representaba la prosperidad del país? El gobierno de Juárez,

como todos los anteriores, no había expresado mas que un calvario de miserias en un viacrucis de

desmoralización"12. Manuel Doblado, compañero de Juárez durante la Reforma y la Intervención,

para el año de 1861 ya decía "Este es un desconcierto espantoso; el Ejecutivo generalmente no obra

y cuando algo hace, es tan mal, que más valía que nada hiciera"13

A la oposición juarista se le escuchaba decir "El Presidente es una roca, nada lo conmueve,

nada lo obliga, nada escucha y de consiguiente de nada sirve...Al igual que Lerdo, don Jesús

(González Ortega) se había acostumbrado a dirigir su dependencia independientemente y a hacer

poco caso al Presidente...al ser preguntado una vez si tenía aprobada una orden que dictaba

contestó llanamente: ‘acabo de entregarle sus cien pesos diarios, es lo único que le importa’ "14.

Por su parte, Ignacio Altamirano le concede una admonición en tono compasivo: "Juárez

siente y ama las ideas democráticas, pero creo que no las comprende...es un obstáculo  para la

marcha de la democracia...El Presidente Benito Juárez - nos dice - no es a propósito para

gobernar...nosotros convenimos en ello...de buena fe y principios firmes, demócrata, firme en sus

resoluciones, honrado, de exquisito sentido y ama demasiado a su patria, pero muy deficiente en

dotes políticas"15.

“Toda la prensa independiente de 1861 lo acusaba de inacción (viendo la amenaza de la

intervención extranjera); acusación justa porque era precisamente la aptitud estadista de Juárez: la

inacción"16.

Al comentar lo sucedido alrededor de la Comisión de Reclamaciones, fabricada por las

grandes potencias en contra de nuestro país, en la que el gobierno mexicano no tenía parte, Bulnes

resuelve "no se reconocía a México ni como Nación, ni como tribu, ni como rebaño, ni como

nada...estaba obligado a indemnizar hasta a los filibusteros por sus proyectos fracasados contra la

nación mexicana y debía pagar hasta lo que los rateros robasen a los súbditos franceses - ¿Y qué

11 Justo Sierra op cit p 564* El verdadero Juárez y la verdad sobre la intervención y el Imperio y la verdad sobre la Revolución de Ayutla y la Guerra de Reforma12 Francisco Bulnes "El verdadero Juárez" p 29013 Jorge L. Tamayo, Doblado Manuel en Benito Juárez Documentos, discursos y correspondencia, selección y notas de, Ed Libros de México S.A. 1974 Tomo 5 p 62514 Citado por Roeder op cit p 43815 Ibídem Citado por Roeder p 55516 F. Bulnes op cit p 103

Page 5: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

hacía Juárez? – se pregunta - ¿Para qué servía? ¿Era el Presidente de la República? ¿Por qué deja

humillar a su patria, a su gobierno, a su persona, de un modo que no tiene ejemplo en los anales de

la diplomacia y que según Don Matías Romero, parece apenas creíble?"17

El mismo Roeder llega a consignar que aunque Juárez estuvo mas de dos años huyendo de

los franceses, "cansado del papel necesario, pero sin gloria, del civil dirigiendo la batalla detrás de

las líneas"18, destaca que en el año de 1867 se llega a saber que Juárez y otros se han hecho pagar

"no 90 mil pesos como equivocadamente dijimos, sino cerca de 200 mil por haber llevado al Paso

del Norte su carácter de Presidente, viajando siempre con toda comodidad y sin exponerse a peligro

alguno...en fin, por sí y ante sí y contra la Constitución, reelegídose Presidente, suscitando con ese

ilegal procedimiento un conflicto innoble en momentos en que toda ambición debía deponerse ante

el peligro de la patria"19.

“¡Juárez , salvador de la república! lo único que procuró siempre don Benito Juárez fue

poner a salvo su persona...era enérgico y valiente únicamente contra cualquier pretendiente a su

silla presidencial"20. A Juárez "lo fuimos a buscar al confín de la nación - dijo “El Nigromante” -

palpitante bajo los pliegues de una bandera extranjera (sic), mientras los buenos mexicanos median

sus armas contra los invasores...los insensatos que recomiendan a Juárez...se estiman muy poco no

ya como republicanos sino como hombres, al creerse incapaces de hacer lo que ha hecho Juárez"21.

En la obra biográfica de Ralph Roeder aparece el siguiente anécdota‚ que parece definir un

poco mas acertadamente la personalidad de Juárez: El general Márquez de León en un libro

titulado Juárez a la luz de la verdad, denunciaba que en plática sostenida con Juárez ante el

nombramiento hecho en favor de González Ortega en la segunda defensa de Puebla (1863), Juárez

dijo "ya sé lo que me va a decir, que González Ortega es un pen..." (sic) añadiendo: "demasiado lo

conozco, pero la nación ha dado en tenerlo por hombre grande, y lo coloco aquí para que se ponga

en evidencia"..."¡Entonces usted, por deshacerse de un rival, sacrifica al ejército‚ y acaso la

República!" interpeló Márquez de León, "a lo que Juárez contestó con irritación ‘¿y para qué sirven

ustedes? Ningún hombre es necesario; las ideas son las que valen únicamente’, ‘¿y Comonfort,

autor del golpe de Estado?’ a lo que Juárez contestó: ‘¿y creen ustedes que yo le he dado ese lugar

para que se eleve?...también se nulifica’. Márquez de León concluyó francamente desanimado que

entonces ‘para aquel hombre no había mas patria ni mas gloria que su ambición de poder’ "22

Para saber nosotros a donde vamos, debemos primero saber en donde estamos, para lo cual

es indispensable conocer cómo fue que llegamos hasta aquí. Por lo tanto la Historia nos debe

permitir diseñar nuestro futuro.

17 Ibídem F. Bulnes pp 69-7118 Citado por Roeder op cit p 96919 Ibídem citado por Roeder p 101820 Ibídem Citado por Roeder p 105521 cit col22 Ibídem Roeder p 724

Page 6: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Es imposible obviar el hecho de que el estado de miserable atraso en que se encuentra

nuestro país, está ligado a la intromisión extranjera en nuestros asuntos, intromisión que ha

contado, y aún cuenta, con la aquiescencia de nuestras clases dirigentes.

El Imperialismo norteamericana se ha ido construyendo a través del tiempo, pero si

consultamos la Historia de México, podremos entenderlo en toda su magnitud y en toda su

complejidad, pues el nuestro ha sufrido ya por más de 180 años la agresión constante de aquel país,

al grado de no solamente arrebatarnos más de la mitad de nuestro territorio, sino interviniendo

directamente en nuestros asuntos: imponiendo sus puntos de vista, sometiéndonos, explotando

nuestros recursos naturales, abriendo nuestras fronteras para deshacerse de los excedentes de sus

mercaderías, imponiendo funcionarios y hasta presidentes, dirigiendo nuestra política y nuestra

economía o firmando tratados ominosos, ya sea a través de la fuerza militar, el chantaje o la

corrupción desembozada, actuando, pues, como un país imperialista.

La política de expansionismo, intervencionismo y sujeción llevada a cabo por los Estados

Unidos en nuestra contra, en franca alianza con grupos de nacionales, se inicia desde el momento

mismo de obtenida nuestra independencia de España.

Para nadie es un secreto que aún antes del 27 de septiembre de 1821, en nuestro país

funcionaban dos sectas masónicas de tendencias extranjerizantes: la del Rito escocés, patrocinada

por el agente diplomático de Inglaterra, Henry George Ward, y la del Rito yorkino, impulsada por

Joel Roberts Poinsset, Embajador Plenipotenciario de los Estados Unidos en México, llamado el

“predecesor de la CIA”, quien tenía en la mira entre otras, de que México suscribiera un tratado de

límites que incluyera a Texas dentro del mapa de los Estados Unidos.

Poinsett “tan penumbroso personaje” no traía otra misión “que dividir fraticidamente al

pueblo Mexicano...y preparar la escisión de Texas del territorio de Coahuila”23 “...Poinsett había

abandonado su curul en el Congreso de Estados Unidos desde agosto desde 1822 hasta enero de

1823…Pero de esos cinco meses, sólo permaneció en nuestro país dos meses y días, tiempo

suficiente para apoyar la caída de Iturbide y ayudar a fundar la República con la complicidad de

Antonio López de Santa Ana”24

El discurso de Poinsset al ocupar nuevamente su curul como diputado por Charleston,

EUA, el 8 de marzo de 1822, “muestra con claridad hasta qué punto monroísmo y poinsettismo

eran dos formas de decir la misma cosa: expansión imperial de Estados Unidos para ensanchar su

territorio y preservar a los países de origen hispánico de cualquier intervención monárquica

europea, todo ello revestido de un lenguaje republicanizante y cuaqueroide”25. “A Poinsett no le

interesaba sino el triunfo de los republicanos, cuyos intereses concretos nacionales e ideario

23 Iturriaga, México en el Congreso de los Estados Unidos, FCE, México 1976, p 2724 Iturriaga, op. cit, p 76 25 Iturriaga, op. cit. p 42

Page 7: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

anticolonialista coincidían, lamentablemente, con los intereses expansionistas norteamericanos”26 Y

no es casual que la Constitución promulgada en 1824 sea de corte estadounidense, misma en la que

se establece el presidencialismo, el sistema bicameral y el federalismo, a imagen y semejanza del

vecino del norte, en la cual ni rastros quedaron de la Constitución promulgada por Morelos en

Apatzingán el año de 1814.

Poinsett nunca dejó de intervenir en los asuntos de la recién fundada República. Conspiraba

abiertamente en contra del gobierno de Victoria y lograba afiliar a su partido a personajes

reputados hasta entonces como patriotas. Incluso hombres como Lorenzo de Zavala27 se

constituyeron en sus admiradores. Poinsett consideró triunfos suyos tanto el inconcebible

nombramiento acordado por el Presidente Victoria del ciudadano norteamericano David Porter

como comandante en jefe de la Armada Mexicana, tanto como la frustrada presidencia a favor de

Manuel Gómez Pedraza, electo para sustituir a Guadalupe Victoria, obligándolo a entregársela a

Vicente Guerrero.

La injerencia descarnada del embajador poco a poco fue formando una opinión pública que

reclamaba su expulsión del país, en donde las legislaturas de Veracruz y Puebla resolvieron

solicitársela directamente al Ejecutivo. De esto da fe el folleto que bajo el título “Terribles cargos

contra el Ministro Poinsett” declara que “El establecimiento del rito de York no tuvo entre nosotros

otro objeto que el de destruir el rito de Escocia, cuyos miembros se suponía dirigían los negocios

públicos...Se confirma con el renombre de eminentes patriotas que tomaron para sí los iniciados en

el rito de York...Su institución, organización e incremento no tenía más objeto que la dirección de

la causa pública, ni podía ocuparse de discusiones políticas, que debían refluir inmediatamente en

los intereses nacionales... Su conducta ha sido criminal y ofensiva al derecho de gente y al decoro

de los Mexicanos”28, concluían con sobradas razones.

Costelau no deja de reconocer en qué consistió la labor de Poinsett “en términos generales

favoreció las aspiraciones iniciales de la sociedad en tanto en cuanto se trataba de defender la

federación contra la influencia centralista (para los escoceses) si no su creador...fue su mentor y

guía político, y casi el único responsable de la larga y dura campaña contra ellos”29

El Presidente Jackson extendió órdenes precisas a Pionsett en que se le imponía el deseo

expansionista para que “sin dilación ninguna abra negociaciones con el Gobierno Mexicano para la

compra de una extensión de la provincia de Texas”30

26 Ibídem. P 7127 Liberal yucateco, ocupó varios cargos públicos entre ellos el de gobernador del Estado de México mediante un fraudulento procedimiento; gran admirador de los EU; expulsado de México fue a residir a Texas en donde sostenía negocios con varios esclavistas, fue el encargado de redactar la Constitución de la ilegítima República independiente de Texas y nombrado su primer vicepresidente junto con Samuel Houston como Presidente. 28 Lafrauga, imprenta a cargo de Rivera, México 1827, pp 4-629 Costeloe, Michael, La primera República Federal , Fondo de Cultura Económica, México, pp123-12430 Iturriaga p 92 citando a Fuentes Mares, José en Poinsett .Historia de una intriga, editorial Jus, México 1951, p 173.

Page 8: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Vicente Guerrero, en quién “las masas solían ver un amigo cercano de Poinsett, como en

efecto lo era”, paradójicamente fue el encargado de darle el pasaporte a su país a tan siniestro

personaje en el año de 1830, quien como reflejo íntegro de su actividad, escribió a William Johnson

el 22 de febrero de 1829 “No obstante, he tenido aquí un éxito sorprendente y al abandonar este

país dejaré un poderoso partido favorable a Estados Unidos y un sentimiento pronorteamericano”31.

La política expansionista de los EU, continuada aún sin Poinsett, los llevó a que en el año

de 1836 un grupo de mercenarios norteamericanos dirigidos por el ex Gobernador de Tennessee,

Samuel Houston, y acompañados por la traición de Lorenzo de Zavala, declaran la independencia

de Texas, que lleva a decir a William E. Channing “Texas es un país conquistado por nuestros

ciudadanos; y su agregación a nuestra Unión será el principio de una serie de conquistas, que sólo

hallará término en el istmo de Darén, a menos que la enfrente y rechace una providencia justa y

bondadosa. En adelante (1836) deberemos abstenernos de gritar al mundo ¡paz!, ¡paz! Nuestra

águila aumentará, no saciará su apetito en su primera víctima, y olfateará una presa más tentadora,

sangre más atractiva, en cada nueva región que se extienda al sur de nuestra frontera. Agregar a

Texas es declarar a México guerra perpetua. Esta palabra, México, asociada en los ánimos con

riqueza infinita, ha despertado ya la rapacidad de la raza anglosajona que está destinada a regir ese

magnífico reino, y que la ruda forma social establecida allí por España, debe ceder y disiparse ante

una civilización más perfecta. Aún sin esa revelación de planes de subyugación y rapiña, el

resultado no sería menos evidente en cuanto puede ser determinado por nuestra voluntad. Texas es

el primer paso hacia México…paso - escribiendo a Clay - a otra consideración, gravísima, y es que

ese acto hará entrar a nuestro país en una carrera de usurpación, guerra y crimen, haciéndole

merecer y recibir al cabo el castigo debido a una repetición agravante de injusticias. La usurpación

de Texas no se quedará aislada. Oscurecerá nuestra historia futura, y una necesidad férrea la

eslabonará con larga sucesión de actos de rapiña y sangre”32

Para comprender el problema texano es necesario desterrar el mito de los “intereses de los

colonos texanos”, pues en la cuestión de Texas no había más interés que el hegemónico

norteamericano, “La acción dramática y política de los colonos fue insignificante y el colaborador

de las miras ambiciosas de los esclavistas americanos fue en primer lugar nuestro infeliz

gobierno”33.

La Guerra de Texas sobrevino en mayores desventuras para el pueblo y el ejército

mexicano, pues por ejemplo en la batalla de San Jacinto queda palmariamente demostrada no sólo

la impericia de la oficialidad mexicana representada por Santa Anna, en donde lo menos que se le

acusa era de falta de previsión por traer a la tropa agotada, por no mantener un vigía y aún cuando

31 Iturriaga pp 106-10832 Las invasiones norteamericanas en México Gastón García Cantú Serie Popular Era segunda edición 1974 citando a William E. Channing pp 57-5833 Ibídem f 49

Page 9: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

hubiera habido sorpresa, por falta de vigilancia, aún así “la derrota no hubiera alcanzado las

terribles proporciones de una catástrofe completa, sin la posición escogida por el general Santa

Anna y definida para él como ventajosa, teniendo una laguna fangosa a la retaguardia”34, pues de

haber dispuesto una posición distinta, las posibilidades de volver a reorganizar sus fuerzas pasada

la batalla hubieran sido mayores.35

Bulnes no vacila al calificar la conducta de Santa Anna, no sólo “por la depredación, por la

falta de virilidad”, sino por los crasos errores militares “Este rasgo criminal ante la Ordenanza de

Santa Anna, - que Filisola no moviera a su ejército de donde se encontraba, estando en peligro la

vida del dictador - lo ponía bajo una sentencia de degradación militar y muerte, abrumándolo el

desprecio de toda la humanidad. Pues bien, el gobierno mejicano (sic), tal vez para moralizar a

nuestro ejército y enseñarle el código de honor, discurrió decretar a Santa Anna honores de héroe,

precisamente cuando se mostraba traidor, cobarde y despreciable como el más inmundo de los

hombres”36.

Después de la derrota de San Jacinto, el expansionismo norteamericano obtuvo sus

primeros frutos, pero la ambición del Tío Sam no paraba con la anexión de Texas, pues en ese

momento los estadounidenses aspiraban a quedarse con los estados de Nuevo México y la Alta

California.

La declaración de guerra contra México ocurrida en 1846, también provocó que voces

dentro de los mismos Estados Unidos, que abominaban de la política de su país, como la del

senador por New Hampshire, John Parker Hale quién declaró “Desde su principio hasta su fin, en

lugar de aumentar nuestra gloria nacional la ha disminuido; en lugar de investir de fama legítima

nuestro carácter nacional, ha tornado el nombre de Estados Unidos en una vergüenza y en un

reproche formulado por los amigos de los principios libres dondequiera que se conozca la historia

de nuestras acciones en contra de México”37

En la guerra del ’47 volvió a surgir la improvisación de la oficialidad en el ejército

mexicano, así como la impericia, la falta de carácter, la franca cobardía (como ocurrió en la batalla

de Monterrey), pero sobre todo, la traición desembozada por parte de Santa Anna en las

memorables batallas de la Angostura y Cerro Gordo, no obstante las pruebas de valentía y

pundonor mostrados por la tropa y por la misma ciudadanía abandonada por quienes se decían sus

defensores (Veracruz, Padierna, Churubusco, Molino del Rey, Chapultepec y el centro de la capital

son claros ejemplos de ello).

34 Bulnes f 62 Texas35 Refiere Bulnes en una de sus obras “En San Jacinto no hubo derrota, sino completo desastre; los muertos, por no tener retirada el ejército, llegaron a 500, porque el pánico favoreció una enérgica persecución, y sobre todo la inmovilidad de los fugitivos espantados en la laguna fangosa de la retaguardia” Bulnes, Francisco, Las grandes mentiras de nuestra historia, Editora Nacional, México 1973 pp 585-586.36 Bulnes f 761) La verdad desnuda sobre la guerra de Tejas, p.53.37 Iturriaga, op. cit. pp 19-20

Page 10: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Una vez que fuimos despojados de más de la mitad de nuestro territorio mediante los

tratados de Guadalupe Hidalgo, los Estados Unidos no cesaron de inmiscuirse en nuestros asuntos,

pues aprovechándose de las disensiones internas, ahora durante la Guerra de los Tres Años,

también conocida como de Reforma, se acercaron a los dos grupos en pugna de liberales y

conservadores, para ofrecerles ayuda y el reconocimiento a cambio de concesiones, demostrando

que la ambición norteamericana no parece tener fin.

Lo ocurrido el 6 de marzo de 1959 confirma el aserto, pues ante el ataque de Miguel

Miramón por tierra sobre Veracruz, donde se encontraban Juárez y sus ministros, el general

mexicano Tomás Marín se presentó frente al puerto por órdenes de Miramón, a fin de atacarlo con

dos pequeños buques, fue entonces el marino norteamericano Turner, mandando la corbeta de

guerra “Saratoga”, norteamericana también “atacó la escuadrilla de Marín, se apoderó de ella y

salvó a Juárez”38

Sobre el incidente de “Antón Lizardo” en que Juárez, sitiado por Miramón, solicitó el

auxilio de la armada norteamericana, para aprehender a los barcos del segundo, Bulnes comenta:

“Al pedir la ayuda de la armada norteamericana, Juárez deshonró a su gobierno y su nombre ante la

historia”39

Se dice que “Ya desde los tiempos de la Guerra de Reforma, D. Benito Juárez contó con la

simpatía de los norteamericanos. Esto que era una verdad en público, encontró cabida en la

correspondencia personal...el 1° de marzo de 1858 el Sr. Miguel López...escribió al Sr. Juárez

felicitándolo por la ‘adhesión de los Estados Unidos a su persona’, según vemos a páginas 115 del

libro del Dr. Fernando Ocaranza Juárez y sus amigos...’Ya el Ministro americano Mr. Forsyth

había propuesto en marzo del año pasado, una nueva demarcación de límites y había intentado

seducir el patriotismo del Gobierno (Conservador), indicándole en la nota que pasó al Ministerio,

que debía aprovechar la ocasión que se le presentaba para hacerse de algunos millones de pesos en

un lance comprometido; es decir, en la lucha que sostenía contra las fuerzas constitucionalistas”40

“Efectivamente, viendo los norteamericanos que les fallaban los propósitos que perseguían

cerca de Miramón, desconocieron al Gobierno de éste y reconocieron al de D. Benito Juárez el 6 de

abril de 1859. El Ministro que comunicó la nueva al Gobierno liberal fue Mr. Mac Lane, el cual

dijo al Sr. Juárez ‘Confío en que la administración de V. E. En los asuntos públicos de su patria,

sea distinguida por la perfección y consolidación de aquellos principios de libertad constitucional

que forman los elementos fundamentales de la verdadera libertad...El patriotismo ilustrado y el

vivo anhelo de V. E., por dichos principios, son altamente reconocidos por el pueblo como por el

Gobierno de los Estados Unidos’ ¡Que enorme hipocresía: dirigirse en esos términos al bando

38 González Ortega, José, El golpe de Estado de Juárez, A. Del Bosque Impresor, México 1941, p 1939 Apud. E. Zondowics en “Francisco Bulnes y su visión de las relaciones diplomáticas en la época de Juárez” en Estudios de Historia Moderna y Contemporánea de México, p 13940 González pp 168-169

Page 11: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

liberal, cuando uno o dos meses antes había procurado negociar con el bando conservador – Desde

luego principiaron los Estados Unidos a impartir amplia protección al Gobierno del señor Juárez, y

entre otros hechos en que ésta se manifestó podemos citar la actitud de la corbeta americana

Saratoga en Veracruz durante el primer tercio del año de 59...Correspondió D. Benito a esta buena

voluntad de los americanos, autorizando el 1° de diciembre de 59 el tratado Mc Lane –

Ocampo...Mr. M. X. Mc Lane, Ministro Plenipotenciario de los Estados Unidos en México”41

Efectivamente, el 14 de diciembre de 1859 el gobierno juarista firmó con el representante

del gobierno norteamericano uno de los convenios que mayor repulsa han provocado entre los

mexicanos, en donde se comprometía la soberanía territorial, comercial y política de la nación tan

sólo para obtener el reconocimiento y el apoyo norteamericano en la guerra civil entre liberales y

conservadores, recordándonos la sentencia de Poinsett al partir de nuestro país en 1830 “...he tenido

aquí un éxito sorprendente y al abandonar este país dejaré un poderoso partido favorable a Estados

Unidos y un sentimiento pronorteamericano”. El convenio lleva el nombre de “Tratado de Tránsito

y Comercio entre los Estados Unidos y México” y fue suscrito por Robert Mac Lane, Ministro de

los Estados Unidos en México y Melchor Ocampo, Ministro de Relaciones Exteriores de México.

Por dentro y por fuera el tratado constituye una agresión a los principios mínimos de la

convivencia entre las naciones42, ya que el gobierno mexicano se comprometía a ceder todo a

cambio de nada, pues por ejemplo en el Articulo 1º se acuerda que por vía de ampliación del

Articulo 8º del tratado del 1º de diciembre 1853, cede la República Mexicana a los Estados

Unidos...en perpetuidad, el derecho de tránsito por el istmo de Tehuantepec. En el Art.4º se

establece que en el caso excepcional de peligro imprevisto o inminente para la vida o las

propiedades de los ciudadanos de los Estados Unidos, quedan autorizadas las fuerzas de dichas

repúblicas para obrar en protección de aquéllos, sin haber obtenido previo consentimiento, y se

retirarán dichas fuerzas cuando cese la necesidad de emplearlas.

En el Art 6º la república de México concede a los Estados Unidos el simple tránsito de sus

tropas, abastos militares y pertrechos de guerra por el istmo de Tehuantepec, y por el tránsito o ruta

de comunicación a que se alude en este convenio desde la ciudad de Guaymas, en el golfo de

California hasta el rancho de Nogales. En el Artículo 7º la república mexicana cede por el presente

a Estados Unidos, a perpetuidad, y a sus ciudadanos y propiedades, el derecho de vía o tránsito al

través del territorio de la república de México, de las ciudades de Camargo y Matamoros...hasta el

puerto de Mazatlán...Por cualquier ferrocarril o ruta de comunicación, natural o artificial, que exista

actualmente o existiera.

En el Art 10º se señala que “en consideración a las precedentes estipulaciones y por vía de

compensación a las rentas a que renuncia México permitiendo el transporte de mercancías libre de

41 González p 16942 “Tiene eso algo de siniestro y de infernal, parecía un pacto de venta de alma al diablo” Sierra, Justo, Juárez su obra y su tiempo, Editorial Porrúa, México 1970, p 152-153

Page 12: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

derecho por el territorio de la república, conviene el gobierno de Estados Unidos en pagar al

gobierno de México la suma de cuatro millones de duros...Dos millones quedarán en poder del

gobierno de Estados Unidos, para pagar las reclamaciones de ciudadanos de los Estados Unidos

contra el gobierno de la república mexicana”. O sea que a cambio de 2 millones de pesos, los

deseos de libre comercio de los EU hacia México quedaban saldados.

Es curioso, pero nada casual, que en los artículos convencionales se plantee la intervención

norteamericana, misma a la que aludió el Presidente Vicente Fox en un viaje a Vancouver a

principios de 2002, en que solicitó que el TIAR fuera sustituido por un mecanismo más moderno,

en el cual los gobiernos del área (léase: el ejército de lo Estados Unidos) se comprometieran a

reinstalar por la vía de la fuerza, al gobierno electo democráticamente. El artículo de los tratados

autorizados por Juárez dice: “Artículo 1º Si se violara en algunas de las estipulaciones de los

tratados existentes entre México y los Estados Unidos o si peligrara la seguridad de los ciudadanos

de una de las dos repúblicas dentro del territorio de la otra y el gobierno legítimo y reconocido de

aquella no pudiera, por cualquier motivo, hacer cumplir dichas estipulaciones o proveer a esa

seguridad, será obligatorio para ese gobierno el recurrir al otro para que le ayude a hacer ejecutar lo

pactado y a conservar el orden y la seguridad en el territorio de la dicha república donde ocurra tal

desorden y discordia”43

Por lo que es correcto afirmar que en los tratados de McLane-Ocampo se pacta la

intervención norteamericana a cada momento en que se vea en peligro “la paz de la república” (el

gobierno de Juárez) arriesgándose a perder más de la mitad de nuestro territorio y a la primera

guerra civil el resto, pues en el tratado de McLane-Ocampo, “Juárez no sólo pactó una

intervención, sino a cada guerra civil su correspondiente intervención, todo esto independiente de

la cesión que se hace tanto del Istmo de Tehuantepec, como de la soberanía del estado de Sonora y

del Territorio de la Baja California”44.

“...Es un contrato terrible, escribió Justo Sierra…¿Puede imaginarse más incalificable acto

de sumisión que la aceptada por Juárez en este infortunadísimo documento?” Para Justo Sierra “El

Tratado o seudo Tratado Mc lane-Ocampo no es defendible; todos cuantos lo han refutado, lo han

refutado bien; casi siempre han tenido razón y formidablemente contra él. Estudiándolo hace la

impresión de un pacto, no entre dos potencias iguales, sino entre una potencia dominante y otra

sirviente; es la constitución de una servidumbre interminable”45

Mucho se ha insistido con respecto a que dichos tratados no tuvieron vigencia, toda vez que

no fueron ratificados por el Senado norteamericano, pero hasta donde sabemos una acta de

43 Matute, Álvaro, México en el siglo XIX, Antologías universitarias, UNAM, México 1981, pp 489-49344 “Desde el primer artículo hasta el último, el tratado es un modelo de crimen político, de indignidad y de desprecio para el decoro de la nación e integridad de su territorio” Bulnes, Francisco. Juárez y la revolución de Ayutla, p 46945 González p 172

Page 13: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

rendición, como lo son, no requieren la aprobación de ningún Senado, independientemente que el

incidente de Antón Lizardo prueba que aún antes de firmarse ya estaban en operación.

Ahora bien, si no atenemos a la política juarista de “nacionalización de los bienes del

clero” revelan que ahí no había ni interés laico, ni nacional, ni popular, ni democrático, era sin más,

que el grupo de Juárez requería fondos económicos para sostenerse, y para ello echó mano de

bienes que no le pertenecían, tal como él lo confiesa: “con la determinación de hacer ingresar al

tesoro público de la República los bienes que sólo sirven para mantener a los que destrozan a la

nación...(con esto) se alcanza el importante bien de quitar a la reacción el fondo de que se provee

para oprimir, y esta medida de evidente justicia (¿?) hará que pronto luzca para México el día de la

paz”46

Desde luego que son ilegales los decretos de fecha 30 de agosto y 3 de noviembre en los

que Ocampo especifica respectivamente “que son denunciables las fincas desamortizadas devueltas

por los adjudicatarios de acuerdo con la ley de 25 de junio de 1856”47 y “que se declaran

irredimibles los capitales que se reconozcan a la mano muerta”48, pero es pertinente establecer que

aunque es cierto auténticamente que estas disposiciones obraban de acuerdo a la lógica de la

guerra, tanto en su forma legal como en su fondo económico, lo que aquí cuestionamos es tanto que

las medidas que se adoptaron busquen inútilmente el amparo de la Constitución o que se cobijen

bajo la consabida frase de la “protección del bien común”, cuando que de lo que se trataba a ojos

vista, era despojar al contrario de sus fuentes de financiamiento y volverlas en propias, para hacer

posible la victoria de un ejército sobre otro, en donde “el bien común” brilla por su ausencia.

Tan se trata de esto que por ejemplo una de las primeras disposiciones dadas por Juárez fue

la de enviar a José Maria Mata el 2 de marzo de 1858 a los Estados Unidos, con el objeto de

“gestionar un préstamo de 25 millones de pesos, ofreciendo como hipoteca los bienes del clero

secular y regular”49

En el mismo tenor, y en franco olvido de lo que son las formas, Santos Degollado (a la vez

Secretario de Estado, del despacho de Guerra y la Marina y General en Jefe del ejército federal)

(sic), decreta un préstamo forzoso de dos y medio millones de pesos a la iglesia “a fin de que la

cantidad que se emplee por las fuerzas que sostienen la causa de la nación, sean exactamente igual

a las que invierten los que pretenden oprimirla y atropellar su sacrosanto derecho”50 sin detenerse a

especificar cual es ese “sacrosanto derecho”, ni desde luego en qué consiste la invocada “causa de

la nación”.

Pero hay más, pues “La causa de la nación” podríamos ilustrarla, a menos que se nos

juzgue de extremistas, con el ejemplo siguiente: Era del conocimiento general el interés que el 46 Ibídem, dcto 5052, p 67847 Ibídem, dcto 5036, p 65648 Ibídem, dcto 5038, p 65749 Op. cit. Tamayo, p 39950 Op. cit. Legislación..., dcto 5040, p 659

Page 14: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Presidente Buchanan, de los Estados Unidos, manejaba como un asunto oficial el tránsito por el

Istmo de Tehuantepec. Mata en sus incursiones por los pasillos del gobierno norteamericano

conoció del proyecto “Emile Le Sueur y Judah Benjamín de Louisiana, eran amigos personales y

políticos del Presidente, y el negocio circulaba por los conductos oficiales”51 de tal forma que el 28

de marzo ya de 1859, se publica un decreto juarista más, que “modificaba la concesión para la

apertura del Istmo de Tehuantepec” otorgándose a la Cia. Louisiana F.C. “1.- La ampliación de uno

a dos años para comenzar las obras; 2.- El otorgamiento de una legua cuadrada de cada dos que se

encuentren contiguas; y 6.- La concesión se amplía de 60 a 75 años” 52, firmando al calce Juárez con

su ahora Secretario (que no Ministro) Miguel Lerdo de Tejada, de Fomento, Colonización,

Industria y Comercio. Indudablemente ocurrió lo mismo en el caso de la empresa del ferrocarril de

Veracruz a Medellín, en donde según inconstitucional decreto se concedían “terrenos a perpetuidad

y se hacía referencia a cierto tipo de subvenciones”53, con lo quedan a la vista cual era la “causa de

la nación”, la “causa de la República”, “el bien nacional” tantas veces invocados.

Pero probablemente lo más reprobable en la conducta de Juárez es que el mismo tratado de

que Mac Lane le ofreció a nombre del gobierno norteamericano, se lo hayan ofrecido con

anterioridad a los conservadores quienes lo habían rechazado, no por patriotismo, que sería mucho

pedirles: “Efectivamente, viendo los norteamericanos que les fallaban los propósitos que

perseguían cerca de Miramón, desconocieron al Gobierno de éste y reconocieron al de D. Benito

Juárez el 6 de abril de 1859. El Ministro que comunicó la nueva al Gobierno liberal fue Mr. Mac

Lane, el cual dijo al Sr. Juárez ‘Confío en que la administración de V. E. en los asuntos públicos de

su patria, sea distinguida por la perfección y consolidación de aquellos principios de libertad

constitucional que forman los elementos fundamentales de la verdadera libertad...El patriotismo

ilustrado y el vivo anhelo de V. E., por dichos principios, son altamente reconocidos por el pueblo

como por el Gobierno de los Estados Unidos (50)”.

El relato que recopila Tamayo confirma plenamente la especie "Forsyth creyendo que la

situación había madurado, el 22 de marzo plantea al Secretario de Relaciones Exteriores del

Régimen conservador, Luis G. Cuevas, la petición de mover la frontera hacia el sur y ceder Baja

California, a la vez ampliar y reglamentar el derecho de paso por el Istmo de Tehuantepec. Las

bases para el tratado son las mismas presentadas anteriormente a Comonfort y más tarde a

Ocampo... Dos semanas después, el 5 de abril, el Secretario de Relaciones Exteriores del Gobierno

Conservador, rechaza categóricamente examinar la cesión de territorio... El Gobierno Conservador

pide su retiro, pero antes de que se conozca el resultado, Forsyth, el 21 de junio, ‘suspende las

51 Roeder, Op. cit, p 26752 Legislación... Op. cit, dcto 5045, p 666.53 Ibídem, dcto 5107, p 750.

Page 15: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

relaciones políticas de esta Legación con el Gobierno de México hasta recibir instrucciones de su

Gobierno’. Estas se le envían el 15 de julio, ratificando la determinación tomada”.54

Las aseveraciones descritas las apoya una carta que John Forsyth, Ministro de los Estados

Unidos en México, envió a Lewis Cass, Secretario de Estado de los Estados Unidos, en fecha 17 de

junio de 1858, en la que queda de manifiesto tanto la perfidia del gobierno norteamericano, como la

insolente injerencia de ese país en nuestros asuntos

“Un nuevo episodio ha ocurrido en la historia de las negociaciones sobre cesión de territorio y, con el fin de mantener a ese Departamento enterado de todo lo acontecido, juzgo conveniente relatarlo. Hace ocho días recibí un mensaje del Presidente indicándonos que la contribución del decreto del 15 de mayo no había rendido los resultados esperados por la tesorería y que no le quedaba otra alternativa que una venta de territorio; para disponer de dinero con que salvar su Gobierno deseaba reanudar conmigo las negociaciones rechazadas hace unas semanas...Asistí a la cita con el Gral. Zuloaga para las nueve de la noche del día siguiente y en ella el Presidente me confirmó el recado de su mensajero...en dos horas de conferencia me confió sus problemas y necesidades y concluyó manifestando que estaba decidido a realizar ese gran sacrificio por el bien de su país y su propia salvación. Le observé que podrían presentarse obstáculos en el Gabinete y mencioné la hostilidad del Sr. Cuevas, en general a todo lo que tuviera que ver con el americanismo...Determinamos un plan definitivo de acción, calculando que toda la transacción fuera completada con tiempo para enviar el tratado a Estados Unidos por el vapor del día 21. Decidió que al otro día haría los siguientes cambios en su gabinete: Elguero saldría de la Secretaría de Gobernación para ir a Justicia remplazándolo por Pesado que favorecía en todo esta solución. En esta forma Cuevas quedaría solo en la oposición y se adhería al proyecto o se retiraba…(quedamos) en que a los dos días me informaría si el asunto estaba arreglado...sin recibir las noticias que me había prometido...me enteré que le había faltado valor para poner en práctica lo estipulado y se disculpó diciendo que el Gabinete lo obligaba a hacer un último intento para poner en vigor la ejecución del decreto antes de recurrir a tan extrema medida”55

Al fracasar los planes frente a los conservadores, en carta a Lewis Cass, Secretario de Estado

de los Estados Unidos, de fecha del primero de julio 1858, John Forsyth informa desalentado “ya

es visible que el presente Gobierno no puede controlar la situación política de sentar su autoridad

en todo el país” para confirmarnos que “...Un afortunado movimiento liberal en la capital

derrumbaría toda la estructura del Gobierno de Zuloaga... Una revolución, basada en estas ideas,

está en marcha y casi madura para estallar...” descubriendo en los juaristas a quienes vendrían a

cubrir sus aspiraciones imperiales: “A la vez, puedo decir que algunos de los líderes del nuevo

movimiento, se han expresado favorablemente al tratado de cesión y al pedido de protección a los

Estados Unidos” terminando con el siguiente colofón: “Mi experiencia me ha enseñado que todo

los partidos y los Gobiernos que se cambian en México son tan parecidos, que no creo que la

política que nuestro Gobierno considere conveniente adoptar respecto a este país, pueda variar en

esencia, ya sea el partido conservador o el Liberal.”56

54 Tamayo, Jorge L., Benito Juárez, Documentos, Discursos y Correspondencia, selección y notas de Jorge L. Tamayo, Secretaría del Patrimonio Nacional, México 1965, Tomo 3, pp 401-40255 Tamayo op. cit., T 3, pp 425-426.56 Tamayo, op. cit. T 3, pp.440-441

Page 16: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

“Desde el primer artículo hasta el último, el tratado es un modelo de crimen político, de

indignidad y de desprecio para el decoro de la nación e integridad de su territorio”57 resume Bulnes.

Todavía el 21 de abril de 1861, una vez concluida la Guerra de Tres Años, Francisco de P.

Gochicoa en una circular de la Secretaría de Hacienda del gobierno juarista, después de señalar que

“El Excm. Sr. Presidente interino no quiere que sean ocupados los empleos públicos por personas

que se hayan hecho indignas de la confianza del supremo gobierno, por haber vituperado sus actos

de una manera pública”, ordena separar de sus empleos “a quienes hayan firmado las protestas

hechas contra las leyes de reforma” así como al “tratado McLane”58

“Yo busco para mi – nos dice un aparentemente consternado Justo Sierra - una explicación

de este fenómeno del orden sicológico (sic) ¿cómo es que hombres de una moral cívica excelsa, de

un patriotismo tal que ha sobrevivido incólume y espléndido, no sólo a los ataques de estupenda

violencia de que han sido víctimas en vida y muerte, sino al hecho mismo, al acto que constituyó su

falta suprema, acto de irreductible gravedad para su memoria, cómo es, en suma, que repúblicos

como Juárez, Ocampo, Lerdo, compaginaron esa obra de tan claro aspecto antinacional?”

“En Veracruz se recibió una que lo decidió todo: Degollado había sido derrotado

completamente en LA ESTANCIA DE LAS VACAS (subrayado de Justo Sierra); Miramón, el

invencible, era otra vez dueño del interior. Salamanca, Ahualulco, San Joaquín, Tacubaya, tenían

un coronamiento fatal”59

“...Forsyth en carta enviada a Lewis Cass de fecha 15 de abril de 1858...’los liberales,

desde que están fuera del gobierno, tratan de apoyarse solamente en un protectorado americano”60

“Periódico ‘Guillermo Tell’ de Veracruz,...un vecino rico y poderoso vale más que un desierto

devastado por la miseria y la desolación”61

“Bulnes ‘intervención...desde el momento en que se encomienda al gobierno de los Estados

Unidos cuidar a perpetuidad de la conservación de la paz en México, con lo que México quedaba

sin soberanía, sin honor, sin una piltrafa de vergüenza’ “62

No sólo el dejar en manos del Congreso norteamericano la elección de las mercancías

“sean producto natural, manufacturero o industrial”, que han introducirse libres de impuestos por el

territorio nacional, para dar concreción al artículo 8º de los tratados, sino el acto mismo de permitir

su introducción al país sin cargo fiscal, entre muchos otros, pero muy particularmente “las

máquinas y aparatos para la agricultura, la industria, la minería, las artes y las ciencias, y sus partes

57 Bulnes, Francisco. Juárez y la revolución de Ayutla, p 46958 Ibídem, Legislación… Documento 5325 T IX 59 Justo Sierra op. cit. p 15260 Miramón , Sánchez Navarro y Peón, Carlos, Editorial Patria 2ª edición p 9061 Miramón p 9062 Miramón, p 92

Page 17: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

sueltas o piezas de refacción”63 en una situación de enorme atraso frente a una potencia económica

que estaba en pleno proceso de industrialización, constituye por si sola una auténtica felonía, tal

que hizo declarar a Robert Mc Lane “El señor Buchanan urgía la adquisición de la Baja

California ...(pero) por fortuna, logré ganar su confianza y benevolencia (de Juárez), así como su

deseo por impulsar la amistad y el comercio con Estados Unidos, que consideré resultaría más

ventajosa por medio de Relaciones Comerciales que por la adquisición de territorio” 64, apunte que

irremediablemente nos remite a las palabras que utilizó Al Gore en el año de 1993 “La firma de un

TLC con México representa para nosotros un negocio mil veces superior a la misma adquisición de

la Louisiana”

“...En marzo de este año (1860)...Mr. Aldham, comandante del buque de guerra inglés

‘Valorous’, anclado en Sacrificios...entregó a Miramón copia de un despacho que Lord Russell

dirigía al Encargado de Negocios en México...terminaba en esta forma ‘Ya estaba empezada esta

comunicación cuando llegó aquí el mensaje del Presidente de los Estados Unidos. El Sr. Presidente

propone cambiar la política seguida por Estados Unidos, con el objeto de dar al partido liberal del

Sr. Juárez el triunfo sobre el partido clerical del General Miramón...pocos días después acaeció lo

de Antón Lizardo”65, anotación que se complementa con la carta que le envía Forsyth a Lewis Cass

de fecha 15 de abril de 1858 “Los liberales, desde que están fuera del gobierno, tratan de apoyarse

solamente en un protectorado americano”66 mientras en el periódico “Guillermo Tell” de Veracruz

se señalaba “...un vecino rico y poderoso vale más que un desierto devastado por la miseria y la

desolación”67

Francisco Bulnes recrimina “intervención...desde el momento en que se encomienda al

gobierno de los Estados Unidos cuidar a perpetuidad de la conservación de la paz en México, con

lo que México quedaba sin soberanía, sin honor, sin una piltrafa de vergüenza“68, “Al pedir la

ayuda de la armada norteamericana, Juárez deshonró a su gobierno y su nombre ante la historia”69

“¿Obró Juárez rectamente al acudir a tales medios para triunfar de su adversario Miramón?...Todo país que lucha contra otro está facultado para llamar en su ayuda a una tercer nación...el Derecho Internacional denomina este procedimiento...’coalición’ o ‘alianza’. Pero un partido político que lucha contra otro dentro de un mismo país, no puede llamar en su auxilio a ninguna fuerza extranjera, porque de hacerlo atraerá sobre sí el dictado de traidor con que el propio don Benito y todos sus hombres calificaron a D. José María Hidalgo, a Don Juan N. Almonte y a quienes ofrecieron a Maximiliano el trono de México a cambio de que viniera a domeñar con fuerzas de Francia al partido que había sostenido la Constitución de 57. Nunca podrán contestarse airosamente los cargos que se han formulado contra Juárez por lo de Antón

63 Tamayo op. cit. T 3, pp 757-75964 “La misión diplomática, de Robert M. McLane en México”, en Tamayo op. cit. T 3, p 842.65 González p 17266 Miramón , Sánchez Navarro y Peón, Carlos, Editorial Patria 2ª edición p 9067 Miramón p 9068 Miramón, p 9269 Apud. E. Zondowics en “Francisco Bulnes y su visión de las relaciones diplomáticas en la época de Juárez” en Estudios de Historia Moderna y Contemporánea de México, p 139

Page 18: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Lizardo. No sólo gestionó la intervención de la bandera de las estrellas y de las barras en beneficio de su persona y de la causa que defendía, sino que logró que los marinos de norteamérica viniesen a ejercer actos de soberanía a nuestras aguas territoriales”70

“El Diputado D. José María Aguirre exclamó en la tribuna ‘¿Qué es lo que ha hecho el

Gobierno en cinco meses que ha tenido las facultades omnímodas? Nada, ciertamente ¿O se cree

que ahora, como por encanto, luego que se le concedan esas facultades, ha de hacer efectivo lo que

antes no pudo?...¿Cómo se trata de dar facultades omnímodas al Gobierno que allá en Veracruz ha

puesto a los pies de los norteamericanos la dignidad y decoro nacional, con el tratado Mc Lane, por

el cual se concedía a ellos el derecho de atravesar armados por la República Mexicana?’ ”71

Posteriormente vino la intervención europea, en donde Estados Unidos da nuevamente

sobradas muestras de su injerencismo en nuestros asuntos, contando siempre con la aquiescencia de

Juárez y así el 17 de julio de 1861 el Congreso dictó un decreto que, según el historiador D.

Agustín Rivera, fue obra de Juárez, suspendiendo por dos años el pago de las deudas públicas, aún

aquellas que se tenían hacia las naciones extranjeras. Francia, Inglaterra y España dieron trazas

desde luego de presentar sus respectivas reclamaciones, y el gobierno de Juárez, “comprendiendo

el error cometido, revocó el 23 de noviembre del mismo año el decreto de marras”72

Las huestes de Napoleón III llegaron a Orizaba sin combatir, en donde su jefe “desconoció el

compromiso contraído en el Tratado de Soledad”73

Juárez nombró a Ignacio Zaragoza General en Jefe de las fuerzas destinadas a combatir

contra el invasor, y tras de una infructuosa tentativa en las Cumbres de Aculzingo, Zaragoza se

retiró a la ciudad de Puebla para aguardar el ataque, aunque “El empuje y la pericia de D. Ignacio

Zaragoza, de Porfirio Díaz, de Negrete, de Berriozabal, de Méndez, de Lamadrid...se vieron

eficazmente ayudados por la torpeza del atacante, que lejos de dirigir su golpe contra las partes

llanas de Puebla que eran sin duda las más vulnerables, lo enderezó contra las colinas de

Guadalupe y de Loreto, que por sí mismas y por sus elementales fortificaciones resultaron

inexpugnables para el soldado francés...Las fuerzas de Napoleón se replegaron a Orizaba y de ahí

pretendieron los mexicanos expulsarlas”74

Zaragoza murió de tifo y Juárez designó a González Ortega para substituirlo, allí reunió un

ejército de veinte mil hombres en que “...sólo 16,000 eran combatientes (7)...presentáronse los

franceses el 16 de marzo de 1863 en número de 30,000, de los cuales 22,000 eran franceses y 8,000

traidores mexicanos”75

70 González pp 27-2871 González p 6172 González p 9173 González p 9274 González p 9275 González p 94

Page 19: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Además Juárez dispuso indebidamente dividir al ejército, actuando en contra de la ordenanza

militar que señala el empleo de todos los elementos disponibles para un acto de guerra, de esta

forma Jesús González Ortega es nombrado encargado de la segunda defensa de Puebla e Ignacio

Comonfort para la ciudad de México.

Al amanecer del día 8 de mayo Ignacio Comonfort, “que ningunos avisos había dado a

González Ortega sobre sus movimientos en la forma convenida, fue sorprendido y derrotado en San

Lorenzo, perdiendo armas, bagajes y, lo que fue peor, los víveres que trataba de introducir en

Puebla”76

José González afirma que “Se ha enderezado contra el Gral. Ortega el cargo de impericia

por haberse encerrado en la ciudad para sucumbir necesariamente con su ejército. A tal imputación

habré de contestar que sólo cumplió las órdenes del Gobierno, las cuales obedecieron al propósito

de resistir en Puebla el avance francés, con objeto de organizar mientras tanto la defensa del

país...Si Benito Juárez no supo o no pudo organizarla, si entregó la Capital de la República sin

combatir, y si desbandó el ejército al salir hacia el Norte, cargos serán que a él deban dirigirse y no

al Gral. Ortega...Tres causas originaron, a mi entender, la caída de Puebla: la falta de unidad de

mando sobre los ejércitos de Oriente y del Centro, la escasa suficiencia de D. Ignacio Comonfort

como militar, y los probables fines ocultos que abrigó D. Bento Juárez”77

Los procedimientos seguidos por el señor Juárez hacia el ejército sitiado en Puebla y

principalmente el haber privado al Gral. Ortega de la unidad de mando, el haberle restado

elementos de combate, el haberle ordenado repetidas veces que continuase defendiendo Puebla y el

haberle impedido al fin la ruptura del cerco, hacen pensar en que el Presidente de la República

“alentó ideas encaminadas a cercenar el valimiento que en aquel entonces tenía el vencedor de

Calpulalpan, con tanto mayor razón cuanto que González Ortega no sólo era un poderoso enemigo

político, sino el hombre con quien los franceses deseaban tratar para poner fin a la lucha armada...

¿qué esta manera de apreciar las cosas deriva de mi parentesco con el Gral. Ortega? Es posible,

pero, por otra parte, precisa recordar que no soy el único que las estima en esta forma...” 78

El General Balbontín describe de la siguiente manera los hechos:

“González Ortega previó que si no abandonaba prontamente la plaza, rompiendo el sitio, se vería reducido a rendirse...el plan propuesto por González Ortega era el único razonable...aún cuando sólo pudieran salvar la tercera parte de la guarnición y alguna artillería. Estas fuerzas unidas al Cuerpo de Ejército del Centro y a la guarnición de México, harían un total muy superior al que componía la guarnición de Puebla al principio del sitio, y por lo tanto, no podría avanzar el ejército francés sobre la Capital antes de recibir refuerzos – pero si tal proyecto se llegaba a realizar el Gral. González Ortega aparecería lleno de gloria, y nada más natural que se le encomendara la defensa de México- El caso es que D. Ignacio Comonfort no se atrevió a obrar en el sentido en que lo invitaba González Ortega, sin consultar con el Gobierno, este tomó la decisión más disparatada que puede imaginarse – Previno a González Ortega que se sostuviese en Puebla hasta sucumbir allí…estas disposiciones del gobierno me tenían a mí

76 González p 10577 González p 11178 González p 136

Page 20: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

aturdido, no pudiendo imaginarme que se le pudieran ocultar las anteriores reflexiones – Cuando pasados los años...he llegado a formular una conclusión terrible, pero que es mi sincera convicción, y creo de conciencia consignar a la posteridad: EL GOBIERNO ESTABA CELOSO DE GONZÁLEZ ORTEGA Y DE COMONFORT. No temía que los franceses derrotaran a nuestras tropas, SINO QUE UNO A OTRO DE AQUELLOS GENERALES OBTUVIERA UN TRIUNFO QUE LO HICIERA ADMIRAR DEL PUEBLO Y LO PRESENTARA COMO PRÓXIMO CANDIDATO A LA PRESIDENCIA...El Gral. Comonfort comprendió seguramente lo peligroso de la aventura que se le confiaba, e hizo todas las observaciones que creyó necesarias; pero el Gobierno estaba decidido a llevar a cabo su temerario proyecto, y para realizarlo se presentaron en el campo el Presidente y el Ministro de la Guerra, a fin de empujar a Comonfort al abismo donde había de hundirse el poco prestigio que le quedaba...puede asegurarse que tanto temía el Gobierno el triunfo de nuestras armas como el de las francesas’ ”79

Justo Sierra concuerda con Balbontín en cuanto clasifica de erróneas y hasta absurdas las

órdenes de Juárez; “desde luego que no llega a las tremendas conclusiones a que llegó Balbontín,

(ni podía hacerlo en un libro apologético por excelencia), tampoco puede andar muy lejos de ellas,

aunque no lo confiese...‘Trabajo cuesta creer que haya dado tales instrucciones el Gobierno: el

fracaso de Comonfort era su derrota, y derrotado, no podía auxiliar la salida...El absurdo era

progresivo, pues cada medida tenía menos justificación que la precedente...Lo extraño es que

González Ortega se haya sometido sin protesta. Y aunque aceptara un plan que implicaba la

destrucción indudable de ambos ejércitos”80

Nemesio García Naranjo, historiador, que nada tiene de clerical, refiriéndose a Juárez y al

Gral. Díaz se expresa en la siguiente forma “Juárez hubiera querido que la causa republicana

hubiese triunfado con batallas menos heroicas y brillantes...Los héroes tienen el inconveniente de

convertirse en rivales de los Césares’81

Mientras tanto don Benito había dictado órdenes y más órdenes encaminadas a fortificar y

guarnecer la ciudad de México. Pidió fuerza armada a los Gobernadores de los Estados, impuso

préstamos forzosos a los habitantes de México, metió a la cárcel a los propietarios o comerciantes

que se negaron a pagar los fondos

“ECHÓ LEVA en las calles de la población y soltó a los individuos así enrolados contra su voluntad, y contando con una guarnición de cerca de 12,000 hombres, con una existencia en caja de seiscientos mil pesos y con víveres abundantes... ‘Manifiesto...NO SOLAMENTE LA CAPITAL DE LA REPÚBLICA SE DEFENDERÁ HASTA LA ÚLTIMA EXTREMIDAD

79 González p 138 Balbontín Manuel 1824-1894 Militar e historiador, nació en la Cd. de México. Se alistó para combatir la invasión norteamericana de ’46. Hizo la campaña del norte y combatió en la Angostura en 1847; después realizó la campaña del Valle de México. Con los elementos liberales combatió en Michoacán y Jalisco, participando en el Plan de Ayutla. En 1856 combatió contra los conservadores en Puebla. En 1857 siguió brevemente a los que dieron el golpe de Estado de Comonfort, pero luego marchó con los liberales a Veracruz. Fue Jefe y comandante militar en Tampico en 1861-1862. Combatió contra el Imperio participando en la batalla de San Lorenzo, en 1863. Después marchó al norte para asistir al sitio de Querétaro. Escribió La Invasión Americana (1846 a 1848), Mex. 1883; Memorias (1846-1876) Mex; 1846, y Tulitas La Pelona, novela militar Mex., 1893; Un día del mes de enero a los 40° de latitud norte, Mex., 1873. M. En la Cd. De Mex. Porrúa 1995, p 333 80 Sierra, Justo, Juárez, su obra y su tiempo, p 358, citado por González p 14081 González p 141

Page 21: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

CON TODOS LOS ELEMENTOS DE QUE PODEMOS DISPONER’...bástenos saber que el señor Presidente envió a D. Porfirio Díaz hasta el Peñón, sobre el camino de Puebla, para que estorbase el avance de los franceses; que mandó por el camino de Toluca el ejército que debió defender México para que detuviese a los reaccionarios que por allí pudieran atacar, y que él, don Benito, llevando consigo la tesorería, salió por Guadalupe Hidalgo, rumbo a San Luis Potosí”82

Probablemente existan incertidumbre con respecto a la responsabilidad de Juárez en el

desastre poblano, pero lo que no deja lugar a dudas es que Juárez enajenó la soberanía nacional a la

ayuda que pudiera prestarle el “Coloso del Norte”, quien, comprometido como estaba en su propia

guerra intestina, se dio tiempo para sacar ventaja de la situación en México, primero fungiendo

como aval de las deudas de México con Francia, Inglaterra y España, en las que ofreció como

garantía las rentas que se obtuvieran en las aduanas de México, o sea, dándonos un trato de colonia;

posteriormente; vendiendo pertrechos de guerra a cambio de soberanía; permitiendo la

organización de filibusteros nortemericanos para venir a combatir a los franceses a cambio de

cesiones de territorio, y por último amagando a Napoleón III para que saliera de lo que

históricamente han considerado su traspatio.

Por es a razón Ireneo Paz señala que el avance francés puso fin tras la toma de Richmond

por el norte el 3 de abril de 65, “con lo que terminó la guerra civil en los Estados Unidos.”83, al

mismo tiempo que recibía Napoleón III las conminaciones de los Estados Unidos, presenciaba el

crecimiento de Prusia y la derrota de la poderosa Austria en la batalla de Sadowa “Cambió

Napoleón entonces de actitud, retiró toda protección a Maximiliano y se dispuso a replegar sus

tropas para repatriarlas”84

Mientras José María Iglesias afirma que Juárez “tenía notoria capacidad y no carecía de

instrucción, ni su erudición, ni su inteligencia eran de primer orden” Ignacio Ramírez, que conocía

bien a Juárez por haber sido Ministro suyo, dijo:

“Existía cuando la ocupación de México (1861), un ejército organizado...pero ese ejército se componía de voluntarios, organizados por las autoridades civiles y militares de los estados vencedores. El Gobierno General en su fuga (1863) había perdido soldados, armas, generales, banderas, todo, hasta el honor, SIN HABERSE SALVADO EN CAMBIO MÁS QUE D. BENITO’ ...’Se fue al Paso del Norte cuando la Invasión Francesa - ¡SI! Comenzó por tratar con los enemigos; puso a Zaragoza en lucha con los franceses y con las órdenes suspicaces de Doblado. No mandó un buen ejército de observación sobre Forey; abandonó la Capital antes de tiempo; disolvió catorce mil hombres en Querétaro; desorganizó otras fuerzas, introdujo la guerra civil en muchos Estados; se aseguró de no despreciables cantidades, y aprovechó el triunfo ajeno...¡OTROS FUERON LOS QUE LUCHARON!85

Matías Romero encomendó a D. Ignacio Mariscal, entonces Secretario de la Embajada, que

fuese a entrevistar a Schofield, en que le encomiaba para que, una vez terminada la guerra civil en

82 González pp 148-14983 González p 15784 González p 16185 González p 166

Page 22: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

E. U. “ha dejado o va a dejar sin ocupación a multitud de gente que no desea volver a la vida

pacífica sino después de ver arrojados a los franceses de México...nosotros nos proponemos

fomentar su emigración...y para que este movimiento se organice y produzca los mejores resultados

posibles a México...necesitamos que lo encabece una persona de reconocido mérito y aptitud...el

general Schofield tendría el mando de las fuerzas de los Estados Unidos que se reúnan en México,

y podrían probablemente llevar de aquí las que quisiera...terminando la guerra, esa misma gente

nos serviría para ayudarnos a desarrollar los elementos del país, y para dar a los capitalistas y a los

hombres emprendedores de los Estados Unidos, la confianza necesaria a fin de decidirlos a invertir

su dinero y consagrar sus trabajos...en México86

Igualmente el Gral. Grant informó a D. Matías Romero que el 28 de mayo había salido la

primera expedición de City Point para Brazos de Santiago “Las fuerzas de los Estados Unidos –

comunicó el Sr. Romero – ocuparán la frontera desde Brownsville hasta Roma, y todo hace creer

que en dichas fuerzas tendremos nosotros amigos decididos’...no para la soberanía, sino para D.

Benito y su Gobierno” 87

Justo Sierra, en el libro Juarez y su tiempo, no pudo menos que confesar que el convenio

Romero-Schfield serviría “para traernos una invasión más funesta que la de los franceses’ “ 88, el

convenio dejó de llevarse a cabo, no por reprobación de D. Benito, sino porque México no pudo

colocar su empréstito y porque el general Schofield “fue designado para desempeñar una comisión

en Paris...y por la oposición de Mr. Seward”89

“La expedición Schofield no vino a México, pero D. Matías Romero siguió insistiendo con

el Gobierno norteamericano...a partir de octubre de 65 Mr. Seward adoptó una actitud más

decidida, iniciando correspondencia diplomática con M. Drouyn de Lhuys, Ministro de Negocios

Extranjeros de Francia ‘A sus notas – dice Zamacois a páginas 302 de su tomo XVIII – en una de

las cuales llega hasta amenazar con la posibilidad de que los Estados Unidos intervinieron con las

armas en la cuestión de México, el Ministro francés contestaba unas veces con concesiones y otras

con evasivas...y era que al par que recuperaban los Estados Unidos su vigor, se formaban

tremendas nubes sobre el reinado de Napoleón, amagándolo con lo que habría de ser la guerra de

70, que a él le costaría el trono y a Francia la Alsacia y la Lorena”.90

Seward contestó a Montholon con fecha 6 de diciembre de 65 diciéndole “He comunicado al

presidente de los Estados Unidos las intenciones del Emperador (Napoleón) respecto a México, que

me dio usted parte el 20 del mes último...creo que la causa del descontento producido en los

Estados Unidos por la ocupación de México, no ha sido comprendida por el Gobierno del 86 González p 18287 González p 18288 González p 18489 González p 18690 González p 188-189

Page 23: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Emperador...no es la presencia de un ejército extranjero en México y mucho menos de un ejército

francés. Reconocemos el derecho que tienen las naciones para hacerse la guerra, mientras no

ataquen a nuestros derechos y a nuestra justa influencia. La verdadera razón del descontento de los

Estados Unidos consiste en que el Gobierno francés, al invadir a México, ataca a un Gobierno

republicano, profundamente simpático a los Estados Unidos y elegido por la nación”91, con lo cual

el pretendido patriotismo de Juárez cae por los suelos.

Ignacio Ramírez midió en esta forma la figura de Juárez “Alegraos, naciones

extranjeras...Cuando abandonasteis los campos de batalla, levantamos frente a nuestros reyes y

caudillos al más despreciable de nuestros personajes, como un insulto” Y en el periódico L’Ere

Nouvelle, citado por México a través de los siglos, Tomo V, pag. 729, pintó la valentía personal de

D. Benito en esta forma: “En cuanto al valor desplegado por el Sr. Juárez, en lo que él llama

pomposamente la defensa de su país, nos parece haber consistido únicamente en hacer combatir a

los demás”.

Se ha dicho que la permanencia del Sr. Juárez al frente del poder, era indispensable para que

se obtuviera el triunfo contra los franceses,

“Esto es un sofisma...A fines de 64 y dada la política que estaban siguiendo los Estados Unidos con relación a Francia, no era aventurado predecir que las huestes de Napoleón se retirarían en breve, dejando a Maximiliano abandonado a sus propias fuerzas...Lerdo de Tejada a Ortega 16 de marzo de 1864: ‘Las últimas noticias del exterior explican bien los motivos de esa conducta...ya necesita el gobierno francés abreviar el término y dejar los compromisos de la expedición, poniendo grande empeño en apresurar la retirada de su ejército que se anuncia para octubre o noviembre’...Y falto Maximiliano del apoyo extranjero, tampoco era difícil suponer con visos de seguridad que caería a los pocos ataques que los liberales le dirigiesen...¿Dónde estaba, pues, la necesidad de que D. Benito continuase en el poder, si el triunfo se veía perfilarse en un futuro próximo y era lógico que se pudiera obtener con solo continuar los lineamientos que hasta entonces se habían seguido?...‘¿Qué cosa puede saber Juárez que no sepan mil, diez mil, cien mil, en la nación? – decía D. Ignacio Ramírez – Los insensatos que recomiendan a Juárez como un hombre necesario, ¿no tienen instinto de que procediendo de ese modo se degradan a sí mismos? Es estimarse muy poco, no ya como republicano, ni siquiera como hombre, el creerse uno incapaz de hacer lo que ha hecho Juárez' (84) 92

No retuvo el poder D. Benito para salvar a México, lo retuvo por morbosa pasión de

mando, la misma que lo hizo retener la presidencia en dos reelecciones sucesivas, hasta que la

muerte lo arrancó del sillón presidencial. Con esta pasión violó la ley en el caso de González

Ortega, y con ella, obligó a que se levantasen en armas soldados que antes combatieran en el

campo juarista: Marcelino Villafaña en Yucatán, Felipe Mendoza en Perote, el Gral. Negrete en

Puebla, los coroneles Toledo, Palacios y Granados en Sinaloa, Pedro Martínez y Francisco Aguirre

en San Luis Potosi, Trinidad García de la Cadena en Zacatecas, Vizcaíno en Guaymas, Calleja en

Molina en Tampico y Jerónimo Treviño, Francisco Naranjo, Donato Guerra y Porfirio Díaz en

diversas partes del país “¿Por qué se sublevaban estos hombres? Porque D. Benito,, con las

91 González p 19092 González p 237

Page 24: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

elecciones que él dirigía y en las que, según decir del Nigromante, ‘empleaba todas las rentas de la

Nación en comprar gobernadores, generales, periodistas, diputados, ayuntamientos, legislaturas y

electores’ y en las que ‘merced al telégrafo derramaba sobre las urnas hasta hacerlas rebosar,

torrentes de oro con una mano y con la otra torrentes de sangre’ (86) (González ‘ después de medio

siglo no hemos conquistado la libertad ni la República’ (88)”93

"¡Juárez, salvador de la república! lo único que procuró siempre don Benito Juárez fue

poner a salvo su persona...(pues Juárez era) enérgico y valiente únicamente contra cualquier

pretendiente a su silla presidencial"94. El Nigromante acusaba “A Juárez lo fuimos a buscar al

confín de la nación, palpitante bajo los pliegues de una bandera extranjera (sic), mientras los

buenos mexicanos median sus armas contra los invasores...los insensatos que recomiendan a

Juárez...se estiman muy poco no ya como republicanos sino como hombres, al creerse incapaces de

hacer lo que ha hecho Juárez"95.

Don Matías Romero, (Ministro Plenipotenciario de México ante el gobierno de

Washington) comenta "...mientras Seward está en el Departamento de Estado (del gobierno de

Abraham Lincoln), los E.U. toman parte en nuestras dificultades con las naciones europeas, solo

para sacar a nuestro costo el provecho que puedan de ellas, y no porque tengan el mas ligero deseo

de ayudarnos de buena fe a sostener nuestra nacionalidad y nuestras libertades"96.

Juárez en tono resignado, decía: "si nosotros, pues, hemos de tener que recurrir alguna vez

a este país (E.U.) para que nos ayude a arrojar a los franceses del nuestro; (y si) hay peligro grave

de que perdamos una porción de territorio, parece que la política más sabia y patriótica (sic) sería la

que tratara de reducir la pérdida a la menor porción posible"97.

Lo que constituye una espléndida confesión de que la actuación del juarismo se limitaba a

aguardar que los yanquis arrojarán a nuestro invasor, es la carta de Pedro Santacilia dirigida a su

suegro el 2 de diciembre de 1865.98 “yo no puedo comprender que los enemigos abandonen así

enteramente toda la frontera cuando tenemos desde Bagdad hasta Laredo setenta mil yanquis que

simpatizan con nuestra causa...Ayer dijo un periódico que el Gobierno americano había autorizado

al Gral. Logan para ofrecer diez millones de pesos a cambio de no se qué pedazo de territorio

nacional. Hace algunos días me habló Plumb de alguna cosa parecida, a la que no di ninguna

importancia como era natural ¿Qué habrá? ¿Pensarán sacar otra vez a Ud. los proyectos de Doblado

en que figuró también el amigo Mr. Plumb?...Dicen los papeles que Napoleón ha diferido la

reunión del Cuerpo Legislativo hasta saber lo que dice Johnson en su esperado mensaje...Hemos

93 González pp 237-23994 Ibídem Citado por Roeder p 105595 Col. Cit. 96 Ibídem Roeder p 54697 Justo Sierra op cit p 43498 Caja 12/156/1364

Page 25: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

perdido nueve meses desde abril hasta la fecha, esperando la acción oficial del gabinete americano’

(Espléndida confesión).”99

Cuando Napoleón se convence de la inutilidad de mantener un ejército de ocupación en

este continente y apurado por sus conflictos en Europa, retira a los 25,000 soldados franceses que

sostenían a Maximiliano, es la acción norteamericana, a la que con tanta fruición apela Juárez, la

que decide a final de cuentas el fin del Imperio, veamos: “De Juárez a Santacilia. El Paso, 12 de

enero de 1866. ‘La noticias que me comunica Ud. de México son muy importantes, no menos que

las resoluciones de Mr. Johnson de sostener invariablemente la doctrina Monroe, y todo indica que

la causa de México saldrá triunfante al fin, a pesar de cuanto más hagan los invasores para

conservarse otro poco de tiempo en el país”100

Un aspecto revelador de la actitud que guardaron los juaristas durante la intervención

francesa, es esta carta que Matías Romero envía a Juárez

“De Romero a Juárez, Nueva York, 9 de agosto de 1865. Caja 12/119/1327: ‘Mi muy querido amigo...Por ahora sólo diré a usted que estoy plenamente seguro, por el conocimiento que tengo de esta gente, de que mientras no venga la ratificación del Gobierno, si es que la concede (sobre) el Ferrocarril de Matamoros a Mazatlán (que estaba negociándose en Nueva cork, no adelantará la compañía al Gral. Carvajal, no digo los tres millones que él dice...pero ni treinta mil pesos...Como el contrato está ya perfeccionado por lo que hace a las concesiones en los Estados de Tamaulipas y S. Luis, la Compañía puede muy bien obligar al Gral. Carvajal a expedir los bonos por cincuenta millones de pesos y hacer que se los entregue, sin ninguna garantía...Aunque el mal ya está hecho, y como he dicho a usted, de este negocio espero sólo males y ningún bien, creo sin embargo que el único medio de componerlo, es que el Gobierno lo desacuerde en su totalidad declarándolo nulo por haber excedido el Gral. Carvajal sus facultades, pues verá Ud. que asume la representación del Gobierno General, en cuyo nombre ha obrado, y el carácter de Gobernador del Estado de S. Luis con facultades legislativas...Firmado M. Romero”101

Por la correspondencia entre Juárez y su yerno Santacilia, podemos fácilmente llegar a las

mismas conclusiones que hemos adelantado:

“De Juárez a Santacilia. El Paso, 31 de agosto de 1865: Mi querido Santa...Mañana llegará el

correo y tal vez pueda recibir carta de Ud., para saber algo de lo que pasa en México, pues de ahí

no tenemos más noticias que las que nos vinieron por esa ciudad (Nueva York) y que alcanzan al

23 de junio...Firmado Benito Juárez’ “102

“De Juárez a Santacilia. El Paso, 13 de octubre de 1865 ‘Mi querido hijo Santa: -...Quedo

enterado de que el día 1° de octubre debió Ud. escribir a Herrera de Veracruz sobre lo de mi acción

en la empresa del ferrocarril de Medellín...Si los franceses vinieran aquí, me iré probablemente

para Coahuila...Suyo Afmo., padre y amigo.- Juárez’ era mucho decir que D. Benito solo se

cuidaba de la defensa nacional...es claro que a los hombres que peleaban en tales regiones, ni les

mandaba parque, ni armas, ni mucho menos, los dirigía en la campaña...Limitábase D. Benito a ser

emblema en la defensa y a expedir uno que otro nombramiento. Lo demás, el empuje, la iniciativa, 99 González op. cit. p 294100 González op. cit. p 310101 González p 271102 González p 271

Page 26: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

las penalidades, seguían siendo correspondiendo a los hombres de combate, como les habían

correspondido en tiempos de la Reforma”103

“De Romero a Juárez. Washington, 19 de octubre de 1865. Caja 12/130/1338. ‘Me he

impuesto con mucho interés de lo que me comunica Ud. respecto del período constitucional de la

Presidencia...declarar que tal período queda prorrogado hasta que haya nueva elección

popular...Acabo de saber que en un discurso que pronunció ayer Mr. Balir en Nueva York, presentó

como la doctrina del partido demócrata, la que reconoce a los Estados Unidos el derecho de

intervenir en la cuestión mexicana, en los términos que expresa el memorándum que Ud. conoce.

Espero que esto produzca muy buen resultado’...”104

“Las iras del Sr. Santacilia contra Prieto eran el resultado de las ideas que éste expresaba a

todo aquel que quería escucharlo ‘El pronunciamiento del Sr. Juárez en contra de la Constitución

para retener el poder supremo (escribía Prieto a D. Lorenzo Vega, Caja 12/100(1308) me separó

del Gobierno como me separé de Comonfort en aquel golpe de estado más disculpable siquiera por

no tener al extranjero invadiéndonos’ 105

Pero tal vez quien mejor comprendía el interés norteamericano en nuestros asuntos,

después de Juárez, sea Matías Romero, (Ministro Plenipotenciario de México ante el gobierno de

Washington) quien comenta "...mientras Seward está en el Departamento de Estado (del gobierno

de Abraham Lincoln), los E.U. toman parte en nuestras dificultades con las naciones europeas, solo

para sacar a nuestro costo el provecho que puedan de ellas, y no porque tengan el mas ligero deseo

de ayudarnos de buena fe a sostener nuestra nacionalidad y nuestras libertades"106.

La amenaza extranjera se reflejaba entonces en la frase que mandaron acuñar los franceses

y que Roeder consigna: "En el estado actual de la civilización mundial, la prosperidad de

América‚ no puede dejar indiferente a Europa, puesto que América - reconocían - alimenta nuestra

industria y da vida a nuestro comercio...los imperativos de nuestra política y los intereses de

nuestro comercio y de nuestra industria, se combinan todos para imponernos el deber de marchar

sobre México"107.

Y ante la actitud de algunos mexicanos frente la agresión, que reflejaba impotencia y

mezquindad "como el gobierno nunca abandonó la esperanza de obtener ayuda real de los Estados

Unidos, el ‘Periódico’ repetidamente mencionaba la justificación de la doctrina Monroe" 108

añadiendo que esta doctrina, que no significa otra cosa que un atentado a la soberanía de las

naciones latinoamericanas la cual mostró su verdadera dimensión durante la guerra del '47, en la

que México fue despojado de mas de la mitad de su territorio por los mismos Estados Unidos de

103 González p 275104 González entre 275 y 281105 González p 281106 Ibídem Roeder p 546107 Ibídem Roeder p 628108 Scholes Walter V. Política mexicana durante el régimen de Juárez 1855-1872 FCE México 1972 p 151

Page 27: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

América con su "Destino Manifiesto", por lo que apelar a la doctrina del Presidente norteamericano

James Monroe, para oponerse a las vicisitudes de la intervención europea, correspondía, por lo

menos, a echarse en brazos de un verdugo para que nos librara de otro, sin rasgo de dignidad y en

que la soberanía quedaba hecha añicos.

Walter Scholes, ubica la intervención francesa "estando los Estados Unidos comprometidos

en una guerra civil, se presentaba una maravillosa oportunidad, pues uno de los principales

objetivos de la política francesa era dar jaque mate a Norteamérica"109.

Matías Romero en su correspondencia daba también fe, tanto de los deseos

norteamericanos de "ayuda", como de la impotencia de saberse envueltos en una guerra intestina.

Dice Matías Romero acerca de la creencia de que si los E.U. no estuvieran empeñados en su actual

guerra civil, las potencias europeas no hubieran intentado siquiera intervenir en México: "...mas de

una persona me dijo - refiere el diplomático oaxaqueño - <<sosténganse ustedes un poco, que

cuando nosotros terminemos nuestra guerra civil nos encontraremos mas fuertes que nunca con un

ejército de 500 mil hombres>>"110, a pesar de lo anterior los objetivos confesados por Romero no

eran otros que "comprar armas y mantener nuestros ejército...(pretendiéndoles enganchar con la

amenaza de que) la considerable fuerza naval (de los invasores) es demasiada grande para México

y no puede estar dirigida sino contra los Estados Unidos"111.

Y este recurrir al expediente de solicitar la "ayuda" estadounidense para resolver nuestros

conflictos, no obstante la amarga experiencia sufrida no hacía menos de 15 años a manos de ellos

mismos, resulta inverosímil ¿por qué razón - nos preguntamos nosotros - no existe antecedente de

algún auxilio solicitado por ejemplo a Sudamérica‚ o a cualquier otro país que no aspirara a

retribución alguna, ni guardaban ilusiones imperialistas con nuestro país?

En cambio nos encontramos en boca del Presidente Juárez que, en tono resignado, nos dice:

"si nosotros, pues, hemos de tener que recurrir alguna vez a este país (E.U.) para que nos ayude a

arrojar a los franceses del nuestro; (y si) hay peligro grave de que perdamos una porción de

territorio, parece que la política más sabia y patriótica (sic) sería la que tratara de reducir la pérdida

a la menor porción posible"112.

Manuel Doblado, que se jactaba de estar facultado para concertar tratados internacionales

sin la sanción congresional, y cuyo único requisito exigido era la ratificación del Presidente, acordó

con Sir Charles Wyke el 9 de abril de 1862 que la deuda inglesa estaba garantizada "por un

préstamo norteamericano en proyecto, de 11 millones de dólares...hipotecando los terrenos baldíos

y los bienes del clero todavía disponibles en México (los que) serían adjudicados al gobierno

británico"113. 109 Ibídem Scholes p 111110 Tamayo op cit Tomo 5, p 531111 Col. Cit.112 Justo Sierra op cit p 434113 Roeder op cit p 628

Page 28: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Las verdaderas intenciones de Tom Corwin (representante norteamericano en México)

quedaron reflejadas en la propuesta que con total desparpajo hizo a Seward: "...que el gobierno

norteamericano afianzara la deuda exterior de México y garantizara el interés‚ por espacio de cinco

años...(por lo que) México estaría dispuesto a empeñar todos los terrenos baldíos y los recursos

minerales de Baja California, Sonora y Sinaloa, así como su honor nacional, en pago de esta

garantía, (y añadiendo, en desdoro de Juárez) pues no veo en esta república hombres de ningún

partido mejor dotado, en mi concepto, para su cometido, que los que se encuentran actualmente en

el poder"114. Y aún Roeder intenta justificar la ambición yanqui diciendo que "la ayuda propuesta

era valiosa porque no era desinteresada", lo que equivale a decir que por el hecho de ser sincera o

cínica, era un poco leonina.

Scholes, ante las quejas de Romero por la poca ayuda del gobierno de Lincoln, afirma que

"aunque los Estados Unidos nunca convinieron formalmente en proporcionar ayuda, lo cierto es

que el gobierno liberal recibió armas de aquel país incluso durante la guerra de secesión, y el

abastecimiento aumentó una vez que los Estados Unidos dieron fin a su conflicto". "Por ejemplo –

siguiendo con Scholes - W. W. Mills, cobrador de aduanas en El Paso durante el período en que

Juárez se hallaba precisamente al otro lado del Río...declaró que había proporcionado armas al

gobierno republicano por diversos medios. El General Sheridan asentó en sus memorias: `Durante

el invierno y la primavera de 1866, continuamos proporcionando secretamente armas y municiones

a los liberales enviándoles hasta 30,000 mosquetes' solo de Baton Rouge"115.

Fuentes Mares, pretendiendo minimizar la injerencia norteamericana durante la

intervención francesa, afirma que "el punto de queja, en lo fundamental, radicaba no en el hecho de

que el ejército francés se encontrara en México, sino en haber arruinado un gobierno republicano

`con el que los Estados Unidos simpatizaban muy profundamente' "116 lo que aparte de representar

una “confesión de parte” ante la que se harían innecesarias las pruebas, queda la duda acerca de lo

correcto que es alardear de simpatizarle al coloso, quien desde nuestro surgimiento a la vida

independiente no cesó de hostigarnos, de intervenirnos, de invadirnos y hasta de mutilarnos. Ahora,

que pretender que el país que cuenta en su haber la negación de cualquier aspiración republicana,

como lo es precisamente el vecino del norte, decir que guardaba simpatías por la república juarista

es un exceso retórico.

Roeder no duda al declarar que "las dimensiones de la crisis superaban a la destreza

diplomática...el Presidente...afrontó la situación con franqueza y dio un ejemplo de honradez

política que lo acreditaba como hombre de Estado, reconociendo la debilidad del país y la

necesidad de acomodamientos y concesiones"117, lo que no es otra cosa que aceptar el menosprecio

114 Ibídem Roeder pp 520-522115 Scholes op cit p 150116 Mares Fuentes, José‚ Juárez el Imperio y la República, Grijalbo México 1982 p 120117 Roeder op cit p 570

Page 29: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

al valor y al arrojo de la sociedad civil, demostrada desde que el país fue invadido por los

españoles.

Bulnes critica duramente esta concepción, aunque no tan certeramente, cuando declara:

"Había una imbécil preocupación: nuestros gobiernos creían que la soberanía residía en los

diplomáticos...Otway había vendido su reconocimiento el 10 de agosto de 1858 a Zuloaga por el

precio del aumento del 3 al 6% anual del rédito de la Convención inglesa" 118. Decimos que Bulnes

no es tan certero porque llama tontería a la traición.

Ahora ¿se justifica proclamar a Juárez como el vencedor de los franceses? si el mismo

Roeder acepta que "el gobierno de Juárez iba desintegrándose, y sus mejores generales, Uraga,

Doblado y Comonfort le habían dado a entender a los franceses que estaban dispuestos a tratar...un

agente francés había establecido contacto con Sebastián Lerdo de Tejada...obteniendo de él una

carta que indicaba su propia inclinación a considerar un arreglo honorable con los franceses"?119.

La lealtad de los generales de Juárez era tan dudosa, que Zarco desesperaba del porvenir de

la patria: "Las cosas marchan mal, muy mal por acá. Nuestros jefes nos abandonan todos los

días...No hay pueblo en nuestro país...Por mi parte pienso salir a los Estados Unidos y esperar allí

el desenlace de la situación. Nuestro don Benito está perdiendo todo con sus fantasías"120.

Zamacona revela tristemente la situación: "...nuestro gobierno se halla relegado en un

rincón del país, ignorado por las poblaciones...ha tomado un carácter anárquico y destructor,

fecundo solo en ruinas y en mal renombre para nosotros. En el curso de este medio año no hemos

hecho nada contra el enemigo - decía en 1864 - pero hemos dejado que haga mucho contra el país y

sus habitantes"121, Zamacona había sido funcionario en el gobierno de Juárez, encargado de la

negociación de las reclamaciones inglesas en el año de 1861.

Roeder nos da su propia impresión: "Manuel Ruiz fuera de combate, ni acá  ni

allá...Ignacio Ramírez, retirado en un puerto del Pacifico, ridiculizaba al Presidente perpetuo;

Ignacio Altamirano, retirado en Acapulco, leía a Tasso; Zarco contemporizaba en los Estados

Unidos. Doblado había pasado la frontera; los demás no estaban muy lejos de ella"122.

“El Presidente se vio reducido, por fuerza, al papel de un espectador de la lucha, sin la

posibilidad de ejercer mas que un control remoto y formal sobre la resistencia"123, y toda vez que

para él no existía mas que el peso que pudiera existir fuera, cavilaba acerca de que "lo único que

nos puede dar (Washington) que nos sirve de mucho, es su apoyo moral, no reconociendo a

Maximiliano y manifestando su deseo de que Napoleón retire sus fuerzas...el rompimiento de

Austria y la Prusia, una reacción del partido liberal y oposicionista en Francia, y el agotamiento de

118 Bulnes op cit p 44119 Roeder op cit pp 796-799120 Ibídem Roeder p 800121 Roeder op cit p 841122 Ibídem Roeder p 845123 Ibídem Roeder p 844

Page 30: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

los recursos de Maximiliano para crearse un ejército‚ que lo sostenga...la sombra creciente del

militarismo prusiano era un motivo más para expeditar la repatriación de las tropas de México"124.

La situación internacional era tal que Juárez llegó a decir, en una carta dirigida a Santacilia,

"convenga Ud. conmigo que Bismark es un hombre de progreso, porque ha logrado poner alarma y

en movimiento a los demás lobos de Europa. ¡Dios (sic) lo mantenga en su firmeza para que el

incendio no se apague, sino que devore el último opresor de aquella parte del mundo!"125.

Las dos luchas, al norte y al sur de la frontera, siguieron interdependientes, de acuerdo con

Roeder, "y Juárez, identificando su causa con la de Lincoln, le había arrimado el

hombro...autorizando el paso de las tropas del Norte por el territorio mexicano, cerrando la puerta a

los agentes de los confederados, y extendiendo un cordón sanitario en las espaldas de los

rebeldes...’…yo celebro’ - dice Juárez – ‘y aplaudo la inflexibilidad de Mr. Lincoln...pues mas

provechoso nos será su triunfo...nosotros con nuestra tenaz resistencia y con el tiempo aburriremos

a los franceses...los invasores y traidores...deben considerar (que) teniendo al frente un coloso (en

obvia referencia a los Estados Unidos y no precisamente a él) que por los principios de libertad

(sic) que sostiene (harán ) desaparecer de un soplo a invasores y traidores"126.

Sin embargo era indiscutible que Juárez no confiaba todo a la fortuna, (que venciera el

Norte sobre el Sur en E.U.; que venciera Bismark en Europa; que los liberales franceses se

impusieran a Napoleón III; que éste abandone a Maximiliano o que por fin, el Habsburgo se aburra

de una situación insostenible), razón por la cual hubo de mover a sus agentes en Washington o en

cualquier otra parte de Norteamérica para hacer progresar sus planes, pues justamente de esta época

son los tratados a que nos hemos de referir y que prueban fehacientemente que no era el interés

nacional el que importaba en esta situación de emergencia:

Manuel Doblado y Matías Romero urdieron un plan para que el primero se presentara  

"como particular a ofrecer a los Estados Unidos en venta la Baja California y una parte de la

Sonora"127, maquinación un tanto absurda si partimos del hecho de que para las grandes potencias

es más seguro y provechoso tratar de gobierno a gobierno que con un intermediario particular;

maquinación absurda porque parte de la idea de que el gobierno de los E.U. pudieran desconocer

los antecedentes de Doblado; maquinación en fin, que evidencia el carácter indigno de la

representación mexicana en el exterior; los fines declarados (*) muestran infantilismo de ser ciertos

o presuponen estulticia en la opinión publica de ser falsos; en fin que son deleznables desde

cualquier punto de vista que se les mire.

124 Ibídem Roeder pp 927-929125 Apud Roeder op cit p 966126 Apud Roeder op cit pp 875-876127 Ibídem Roeder p 871(*) "Descubrir las intenciones del gobierno norteamericano con respecto al reconocimiento solicitado por el gobierno de Maximiliano"

Page 31: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

También es digno de mención el Tratado José‚ Ma. Carvajal- Daniel Woodhouse (el

primero Gobernador de Tamaulipas y de San Luis Potosí) de fecha 15 de mayo de 1865, en el cual

el primero se comprometía a conceder "250 leguas cuadradas situadas en Tamaulipas y otras 250

en S.L.P a la compañía del segundo; así como 2,136 minas situadas en los mismos estados de la

república, compuestas de siete pertenencias de 240,000 varas cuadradas, equivalentes a 50 acres

cuadrados cada una; con una concesión de 10 años con posterioridad al fin de la guerra a cambio de

recibir y negociar la venta de treinta millones en bonos del Gobierno de los Estados Unidos de

México, gozando la Compañía de una comisión del 5% sobre todas las cantidades realizadas por la

venta de bonos"128.

Justo Sierra al comentar el citado convenio en su Juárez, su obra y su tiempo, se queja de

que "después de causar mil disgustos produjo sólo tres cargamentos de armas y municiones, malas

en su totalidad y de influencia nula en los acontecimientos"129.

El triunfo en Richmond del Norte sobre el Sur en abril de 1865, trajo nuevas propuestas,

pues fue entonces cuando Juárez le dio instrucciones a Romero para que gestionara ante el

Presidente Johnson "la entrada de sesenta mil hombres de los que iban a ser inmediatamente

licenciados" a cambio de ofrecerles tierras mexicanas para que se quedaran y a los generales y a los

oficiales de ese ejército norteamericano, fuertes sumas de dinero por si preferían regresar a su país,

y la opción de que "el jefe de la expedición y el ejército‚ auxiliar estarían sujetos a las leyes

mexicanas y a las órdenes del gobierno de la República"130, sin embargo al final del texto del

Artículo 3ro del Tratado Schofield-Romero se estableció que "por creerse así conveniente, la

organización de este cuerpo de ejército‚ será la que previenen las leyes de los Estados Unidos"131.

Juárez pretende que Matías Romero "actúa de muy buena intención gestionando

compromisos inconvenientes para México"132 intentando deslindar a su gobierno del asunto, no

obstante Roeder en su obra Juárez y su México no deja dudas en tanto que pone en boca del

entonces Presidente lo siguiente: "Si esa República...quisiera prestarnos un auxilio de fuerza o de

dinero, sin exigirnos condiciones humillantes...nosotros aceptaríamos y en ese sentido se le han

dado instrucciones a nuestro ministro"133.

Lo mismo debe suponerse que existió en el caso del Convenio José María Iglesias-Jacobo

P. Leese de fecha 30 de marzo de 1864, mediante el cual se le cedía la península de Baja California

al norteamericano para su colonización.

128 Romero, Matías. Contratos hechos en los Estados Unidos por los comisionados del gobierno de México durante los años de 1865 y 1866, p 55, Secretaría de Relaciones Exteriores, México 1868.129 Justo Sierra op. cit. p 517-518130 Ibídem Justo Sierra pp 518-519131 Iglesias Calderón, Fernando. Las supuestas traiciones de Juárez FCE México 1972 p 567132 Ibídem Iglesias p 569133 Roeder op. cit. p 876

Page 32: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

Seward “invitó” al gobierno francés a fijar una fecha para la evacuación; y sin esperar otra

intimación, Napoleón la anticipó para enero de 1866; y simultáneamente informó a Washington en

el mismo sentido “Seward había iniciado el principio del fin" 134 según las propias palabras de

Roeder, al que se le puede acusar de todo, menos de ser antijuarista.

Juárez reconoce y agradece a su aliado norteamericano el que haya definido la terminación

de la guerra, "Las contestaciones de Mr. Seward al gobierno francés‚ equivalen a una batalla

ganada y me confirman el cálculo que había yo formado de que en este año, si no triunfamos por

completo, por lo menos mejorar  nuestra causa un ciento por ciento"135, y como corolario y para que

no quedara ninguna duda con respecto a la intromisión norteamericana en la conclusión de la

guerra de intervención francesa "Su esposa (Margarita Maza) de repente se encontró con asombro

suyo en plena actividad política. Las tarjetas de visita...llenaron la legación; en la Casa Blanca se

organizó en su honor una recepción, la primera...desde la toma de posesión del Presidente Johnson.

Seward la agasajó...con una cena íntima...dos días mas tarde, la invitó a visitar el Departamento de

Estado...el general Grant le ofreció un baile que hizo sensación en el mundo oficial...(el)

Presidente...abandonó una vez mas su acostumbrado retiro para hacer honor a su huésped."136.

Todo esto por lo que toca al mayor abundamiento con respecto a las causas de fondo que

orillaron a Napoleón III a abandonar su aventura en nuestro país, lo que por ende facilitó “el

triunfo” de Juárez sobre los ejércitos de Miramón, Mejía y del propio Maximiliano, y lo único que

tal vez faltaría por demostrar los beneficios que los Estados Unidos alcanzaron con la victoria de

Juárez o de la forma en que Norteamérica se cobró su intervención en los asuntos de México.

Después de las evidencias tan terribles, resulta lógico suponer que la injerencia del Imperio

norteamericano en nuestro país se consolidó en la época de Juárez, pues antes tendría que soportar

dos invasiones francesas, una española y otra inglesa, las cuales resolvió de acuerdo a sus

particulares intereses contando siempre con la franca colaboración de nuestras clases dirigentes.

Ahora bien, el culto indebido a Juárez debe buscarse en los intereses que persiguen quienes

lo promueven, por ejemplo, Porfirio Díaz, quien lo combatió con las armas en la mano, fue el que

ordenó la erección de un Hemiciclo en su honor, y hasta dispuso de un concurso entre los

historiadores de la época para motivar el falseamiento de la historia, nuestra labor consiste

principalmente en rescatar la historia, no para exclusivamente no volverla a repetir, sino para

promover las modificaciones que nuestro país necesita para salir del atraso, a pesar de y por aparte

de quienes se dicen nuestros representantes.

Como vemos, la tarea por recuperar la soberanía y construir un futuro mejor no sólo es

titánica, sino podría pensarse como casi imposible, pues por todos lados observamos que en pleno

siglo XXI el Imperio avanza arrasando cualquier vestigio de civilización, pero si hacemos cuentas,

134 Ibídem Roeder p 906135 Ibídem Roeder p 924136 Col. Cit.

Page 33: MÉXICO Y LA HEGEMONÍA MUNDIAL …sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/loma/juarez-2.doc · Web view“De mediana estatura, moreno, ojos negros y penetrantes, vestido siempre con un

actualmente la población mundial alcanza los aproximadamente 6,300 millones de personas, la

población de Estados Unidos es apenas de 250 millones, ni siquiera el 5% del total, es decir, que

por más que el Imperio pretenda dominar a la humanidad, simplemente no le alcanzarían las manos

para conseguirlo. Si nosotros aprendemos de la Historia estaremos en mejores condiciones de

poder vencer las vicisitudes que enfrenta nuestro pueblo todavía, y después de más de 180 años.