MÓDULO 4

DESARROLLO DE LAS HABILIDADES DEL LIDERAZGO OBJETIVO ESPECÍFICO

• Al término del módulo el participante analizará las principales habilidades humanas del liderazgo, identificando la importancia que estas tienen en la conducción de equipos de trabajo de alto desempeño.

El verdadero liderazgo no es sinónimo de un conjunto de habilidades administrativas orientadas a la conducción de equipos de trabajo, sino un conjunto de características de personalidad y valores mediante los cuales una persona confía en su talento para favorecer el desarrollo intelectual, espiritual, emocional, social y laboral de quienes le rodean.

4.1. LAS 21 LEYES DEL LIDERAZGO En 2007 John C. Maxwell, autor y orador estadounidense, publicó el libro “Las 21 Leyes Irrefutables del Liderazgo”, de donde partimos para realizar el siguiente análisis:

1. La ley del tope : es el hecho de que la capacidad de liderazgo determina el nivel de eficiencia de una persona, es decir, entre mayor sea la capacidad del líder para orientar y dirigir, mayor será la capacidad del colaborador para desempeñarse correctamente en una función determinada.

2. La ley de la influencia : se refiere a que la verdadera medida del liderazgo es la capacidad para estimular el cambio positivo en las personas, bajo la premisa de que el liderazgo no es algo que se da por nombramiento, sino algo que se ejerce sobre las personas sin que medie coacción o manipulación.

3. La ley del proceso : afirma que el liderazgo es algo que se desarrolla diariamente, de manera continua y permanente y, por lo tanto, no es algo que se aprende en un día y que dura toda la vida.

4. La ley de la navegación : determina que cualquier persona puede gobernar un barco pero se necesita que un líder planee la ruta. Es decir, que cualquier persona pueda administrar un equipo de trabajo, pero solamente un líder puede conducir a sus colaboradores para alcanzar sus objetivos personales y profesionales.

5. La ley de E.F. Hutton 1: cuando un verdadero líder habla, la gente lo escucha debido a la calidad de su carácter, relaciones, conocimientos, intuición, experiencias y éxitos pasados, lo que lo convierte en fuente de inspiración.

6. La ley del terreno firme : establece que la confianza entre el líder y sus colaboradores es el fundamento del liderazgo, ya que es a través de esta que se consigue la cooperación y el compromiso real.

7. La ley del respeto : señala que por naturaleza, la gente sigue a los líderes que son más fuertes que ellos mismos. Esto significa que las personas nos sentimos más seguras con aquellos que saben más que nosotros y que pueden ser un ejemplo a seguir, independientemente de la posición que ocupen en un organigrama.

8. La ley de la intuición : los líderes tienen la capacidad de interpretar lo que para muchos es intangible, por ejemplo: las necesidades de sus colaboradores, las tendencias sociales, los estados de ánimo y las prioridades, de manera que están en la posibilidad de actuar de manera oportuna para facilitar la actuación de sus colaboradores y compañeros así como para favorecer la aceptación al cambio.

9. Ley del magnetismo : establece que un líder se rodea de personas cuyas características de personalidad y hábitos laborales son similares a las suyas, por lo que es muy importante que aprenda a identificar sus debilidades y a encontrar la manera de subsanarlas, de manera que

1 Se trata de un personaje admirado por Maxwell, quien fue corredor de bolsa norteamericano, fundador de la firma de valores EF Hutton & Co., hoy parte de Citigroup.

atraiga a personas que refuercen y consoliden sus nuevos objetivos de comportamiento.

10. La ley de la conexión : los líderes se interesan primero en las personas y después en las funciones y tareas, lo que confirma la importancia de saberse ganar la confianza de los colaboradores para que estos participen de manera propositiva para alcanzar las metas.

11. La ley del círculo íntimo : el potencial de un líder está determinado por el tipo de personas que están más cerca de él, por lo que resulta evidente la necesidad de confiar en las habilidades de los demás para permitir que se integren de manera activa al proyecto.

12. Ley del otorgamiento de poderes : sólo los líderes con una alta autoestima son capaces de compartir el poder con otros, de manera que todo el equipo de trabajo esté facultado para trabajar de manera autónoma y creativa en beneficio de la organización.

13. La ley de la reproducción : un líder no puede permanecer como única figura durante mucho tiempo, lo que significa que debe entrenar y orientar a otros para que a su vez se conviertan en figuras orientadoras para los nuevos equipos de trabajo. Mediante esta ley, se garantiza también el crecimiento y la promoción de los líderes actuales hacia posiciones más ambiciosas.

14. Ley del apoyo : las personas apoyan primero al líder y después se comprometen con la visión, lo que refuerza la idea de que más allá de la administración el líder debe dedicar gran parte de sus esfuerzos al establecimiento de relaciones interpersonales honestas mediante las que se pueda generar confianza.

15. La ley de la victoria : los líderes encuentran la forma de compartir el reconocimiento con cada uno de sus colaboradores de manera justa y equitativa, sin apropiarse de los méritos ajenos.

16. La ley del gran impulso : como figura ejemplar, el líder debe ser la primera persona en manifestar su disposición para hacer las cosas, de manera que sirva de fuente de inspiración para la constitución de equipos de trabajo de alto desempeño.

17. La ley de las prioridades : los líderes fundamentan su actuación en el principio de las tres R: ¿cuáles son los requisitos?, ¿cómo retorna el entrenamiento que da a sus colaboradores? y ¿qué tipo de recompensa es justa en función del esfuerzo dado?

18. Ley del sacrificio : un líder debe pensar primero en el bienestar y el reconocimiento de sus colaboradores antes que en el propio, lo que significa dejar de lado el derecho a pensar en sí mismo para dar prioridad al grupo.

19. La ley del momento oportuno : significa adquirir la habilidad para sincronizar el tiempo y la forma en los que han de realizarse las cosas, de tal manera que se pueden establecer cuatro situaciones:

a) La acción equivocada en el momento equivocado lleva al desastre.

b) La acción acertada en el momento equivocado provoca resistencia.

c) La acción equivocada en el momento adecuado es un error.

d) La acción acertada en el momento adecuado tiene buen éxito.

20. Ley del crecimiento explosivo : establece que cuando un líder se ocupa únicamente de dirigir a sus colaboradores, se queda estancado. Pero cuando orienta sus esfuerzos a desarrollar nuevos líderes, su camino profesional se abre a nuevas posibilidades de crecimiento.

21. Ley del legado : el valor verdadero del líder se mide en el momento de la sucesión, mismo que se presenta cuando es tiempo de que este deje la organización, por lo que debe estar dispuesto a irse y permitir que su sucesor haga lo que tiene que hacer de manera libre y autónoma ya que al entrometerse sólo se hace daño a sí mismo y a la organización.

4.2. MITOS DEL LIDERAZGO Debido a sus implicaciones sociales, el liderazgo se confunde frecuentemente como una habilidad relacionada con una jerarquía, sin embargo, tal y como analizaremos a continuación, el verdadero liderazgo es un estilo de vida que no tiene relación directa con una posición organizacional en particular. Es así que diversos autores han identificado algunos de los principales mitos que rodean a la figura del líder, entre los que se encuentran:

1. El mito de la gerencia : una creencia popularizada es que la posición jerárquica va de la mano con el liderazgo. Ser gerente no significa que necesariamente seas un líder, ya que como mencionamos anteriormente existe una gran diferencia entre las funciones administrativas y las habilidades del liderazgo.

2. El mito del empresario : de igual manera, ser el dueño de una empresa no te hace un líder sino que te otorga el poder para tomar las decisiones administrativas más importantes, pero cabe recordar que el liderazgo se orienta hacia la conducción de los grupos de trabajo en su dimensión de desarrollo y crecimiento personal y profesional.

3. El mito del conocimiento : el conocimiento especializado en algún tópico representa poder y autoridad, más no liderazgo. Se deben desarrollar conocimientos complementarios para desarrollar esta habilidad.

4. El mito del precursor : ser la primera persona en idear, desarrollar o

implementar una nueva idea tampoco representa liderazgo. Este se consigue cuando dicha innovación repercute de manera positiva en un cambio radical en el pensamiento o comportamiento de otras personas.

5. El mito de la posición : el liderazgo no se encuentra necesariamente en la cima de la pirámide organizacional, ya que como hemos mencionado, el verdadero líder puede surgir desde cualquier posición y los colaboradores son quienes determinan cuál es la figura que les representa un modelo a seguir.

4.3. DESAFÍOS DEL LIDERAZGO Debido a su complejidad, el desarrollo de las habilidades del liderazgo requiere de la superación de ciertos desafíos, mismos que representan la confrontación entre nuestros modelos mentales, nuestras expectativas y las necesidades reales que demanda nuestra posición laboral. Entre los desafíos más recurrentes que debe vencer cualquier líder se encuentran:

1. El desafío de la tensión : se refiere al hecho de que en la gran mayoría de las ocasiones, el reconocimiento al mérito y al esfuerzo solamente se hace público cuando este proviene de los líderes que ocupan la cima de la pirámide organizacional. Sin embargo, es importante destacar el verdadero reconocimiento debe provenir de ti mismo y de las palabras de tus colaboradores, jefes y compañeros, sean estas en público o en privado.

2. El desafío de la frustración : también es frecuente confundir el hecho de que nuestro jefe necesariamente deba ser un líder. Tal como hemos analizado, el liderazgo no es una habilidad heredada del puesto de trabajo, sino que es una actitud de vida. De tal manera que en muchas ocasiones debe ser el colaborador quien ayude al jefe a convertirse en un verdadero líder.

3. El desafío del ego : es la necesidad por obtener el reconocimiento a nuestras habilidades de liderazgo. Pero como ya se ha descrito, el

verdadero liderazgo no requiere de mayor recompensa que el saber que eres el responsable de los resultados obtenidos, así como de la influencia positiva que representas para tus colaboradores, compañeros y jefes.

4. El desafío de la realización : es la falsa creencia que se tiene de que los líderes únicamente se encuentran en las posiciones jerárquicas más altas de la organización y que, por lo tanto, son las personas que tienen mayores ingresos y mejores condiciones laborales. Es importante que recuerdes que la realización significa alcanzar tus objetivos personales sin el afán de competir y estar en una constante comparación con otras personas.

5. El desafío de la visión : ya hemos mencionado que el líder debe ser una figura que inspire a los demás para alcanzar una visión. Sin embargo, cuando esta no proviene del propio líder, resulta más difícil realizar los esfuerzos necesarios para conducir al equipo de trabajo hacia esa dirección. No obstante, el verdadero líder invierte gran parte de su energía en comprenderla hasta apropiarse de ella, de manera que pueda comunicarla correctamente y de manera entusiasta a su equipo de colaboradores.

6. El desafío de la influencia : el verdadero líder busca la satisfacción en la influencia que puede ejercer para que sus compañeros y colaboradores puedan encontrar distintas rutas para su crecimiento personal y profesional. De tal forma que resulta mucho más importante ser una figura influyente, que ocupar una posición jerárquica que denote poder y autoridad.

4.4. PRINCIPIOS DEL LIDERAZGO Dentro de las habilidades del liderazgo destacan algunas conductas y actitudes que diferencian al líder de la persona común y para desarrollarlas te recomendamos:

1. Dirígete a ti mismo excepcionalmente bien : ya que como hemos descrito, el liderazgo tiene como fundamento servir de guía y ejemplo para los demás, por lo que es muy importante que te sientas orgulloso y satisfecho por tu actuación personal y profesional en todo momento.

2. Ofrécete para realizar lo que muchas otras personas no están

dispuestas a hacer : frecuentemente son las tareas más rechazadas aquellas que representan un mayor reto y compromiso, lo que se traduce en una mayor oportunidad de crecimiento y aprendizaje así como un ejemplo de servicio para tu equipo de colaboradores.

3. Invierte en las relaciones interpersonales : de manera que en tu círculo de colaboradores exista confianza, armonía y cooperación, ya que todos estos son los elementos indispensables para generar sinergia y cohesión para la conformación de equipos de alto desempeño.

4. Complementa a otros líderes : recuerda que el verdadero líder es aquel

que tiene la capacidad para ser un buen colaborador, lo que significa que también es un compañero confiable que tiene la disposición para ayudar a sus pares organizacionales a desarrollar su potencial.

5. Permite que la mejor idea triunfe : entre mayor sea el abanico de posibilidades de solución a un problema, así como de iniciativas para la mejora continua, mayor será la posibilidad de que todos los integrantes de una organización puedan alcanzar tanto sus objetivos personales como aquellos que les hayan sido asignados en función de sus responsabilidades laborales. Ser el líder no quiere decir que seas la única persona poseedora de las respuestas, sino que eres la persona más capacitada para permitir el ejercicio de la libertad de pensamiento de quienes te rodean.

6. No finjas ser perfecto : el verdadero líder conoce sus limitaciones, las acepta y asume el compromiso para subsanarlas. De igual manera, se rodea de la gente necesaria para complementarse, lo que es el inicio de la constitución de los equipos de trabajo de alto desempeño.

7. Desarrolla a cada miembro de tu equipo individualme nte : en función de sus habilidades, características y competencias; de manera que además del intercambio natural de conocimientos y experiencias que se viven al interior de cualquier grupo, todos tus colaboradores tengan la oportunidad de diseñar las estrategias necesarias para satisfacer sus expectativas, lo que en el corto plazo se traduce en un elemento para la generación de la sinergia y la cohesión así como para el establecimiento de actitudes orientadas hacia el compromiso y la responsabilidad.

8. Reconoce que los colaboradores determinan el potenc ial de la organización : ya que del grado de motivación, compromiso y confianza que tengan dependerá el nivel de desempeño, lo que a su vez representa el nivel de productividad, así como de la calidad del acervo de la organización.

9. Mantente enfocado en que las relaciones determinan la moral de la organización : debido a que la dinámica interpersonal es uno de los elementos fundamentales para la generación de un clima laboral idóneo, esto representa en gran medida el ánimo generalizado que se exprese en la vida organizacional, así como la fundamentación de los valores institucionales.

10. No olvides que la estructura determina el tamaño de la organización : no importa si esta cuenta con muchos o pocos colaboradores, el verdadero tamaño y valor organizacional se miden por el talento, la participación y el compromiso que se generen en su interior.

11. Asume que la visión determina la dirección de la or ganización : entre más ambiciosa sea la visión, mayor será la necesidad de una

administración y un liderazgo orientado hacia las personas, ya que es de ellas de quien depende el éxito en la consecución de los objetivos.

12. Recuerda que el liderazgo determina el éxito de la organización : en función del tipo de liderazgo que predomine en la organización esta tendrá mayores posibilidades de crecimiento y permanencia en el mercado, porque tal y como lo hemos mencionado, es del compromiso, la sinergia y la cohesión que se constituyen los equipos de trabajo de alto desempeño.

Dentro de las habilidades mentales más importantes que debes desarrollar se encuentran los denominados medios de expresión, mismos que constituyen una serie de pasos mediante los cuales se logra alcanzar el liderazgo:

1. La reflexión : es importante razonar acerca de la importancia que tiene ser el responsable de la conducción de un equipo de trabajo, ya que como hemos señalado, no se trata únicamente de administrar recursos sino de hacer crecer al factor humano. Esta reflexión tiene como consecuencia natural un cambio de actitud, mediante el cual tus niveles de confianza y autoestima se incrementan dotándote de la seguridad necesaria para hacer frente a cualquier situación.

2. La resolución : una vez que adquieres la suficiente seguridad para actuar, es decir, el valor necesario para encarar tus responsabilidades, te será más sencillo identificarte y comprometerte con la visión, al mismo tiempo que estarás en la posibilidad de transmitirla a tus colaboradores.

3. La perspectiva : mediante la resolución y el valor por encarar la visión se construye el panorama al que han de dirigirse todas tus acciones y las de tus colaboradores. La perspectiva te da la posibilidad de analizar y comprender la dimensión del impacto que tendrá el esfuerzo del equipo de trabajo, tanto al interior de la organización como en el desarrollo personal y colectivo.

4. El punto de vista : surge a partir de la perspectiva y se traduce en el hecho de que seas capaz de determinar qué estrategias y acciones se deberán ejecutar para alcanzar el objetivo. De igual manera, te permite identificar los puntos de mejora en los métodos y procedimientos, de forma que las funciones y actividades de todos tus colaboradores se desarrollen bajo parámetros de eficiencia y eficacia.

5. Las pruebas y los medios : las pruebas son los resultados parciales obtenidos durante un periodo determinado, mientras que los medios son los canales mediante los cuales se recoge la información necesaria para plantear la brecha entre los objetivos preestablecidos y el progreso del proyecto. La interpretación de ambos elementos tiene como consecuencia el planteamiento de nuevas metas, así como la reorientación de estrategias para alcanzar el éxito.

6. El deseo : surge a partir de los resultados de las pruebas y los medios, como una condición inherente al ser humano para orientarse hacia la perfección. El deseo es la motivación resultante de las expectativas, tanto del líder como de sus colaboradores, de obtener reconocimiento por sus esfuerzos.

7. La maestría : es el dominio de una actividad, en este caso, de la conducción eficaz de los grupos de trabajo, ya que como hemos mencionado anteriormente, el líder no tiene razón de ser si no es a través del desarrollo de sus colaboradores.

8. El pensamiento estratégico : se trata de un recurso para conseguir lo que uno quiere contestando a cuatro preguntas:

a. ¿Dónde estaba ayer?

b. ¿Dónde estoy hoy?

c. ¿En dónde quiero estar mañana?

d. ¿Qué haré para conseguirlo?

De manera que se trata de un análisis acerca de las estrategias necesarias para poder identificar las posibles amenazas en la consecución de un objetivo, de tal forma que te encuentres en la posibilidad de anticiparte a cualquier desviación u obstáculo.

9. La autoexpresión plena : es la habilidad para sentir pasión por cada una de las cosas que haces, sin importar si estás están relacionadas con el éxito o el fracaso, sino con el hecho mismo de saberte partícipe de un proyecto mediante el cual se obtendrá como resultado un beneficio social a gran escala.

10. Liderazgo : es la habilidad de comprender, ejecutar y compartir las nueve habilidades mentales anteriormente descritas, de manera que representes una figura inspiradora para el crecimiento personal y profesional de tus colaboradores, así como una pieza fundamental dentro del capital intelectual de tu organización.

4. 5. CARACTERÍSTICAS DE LOS NUEVOS LÍDERES Tal y como hemos mencionado a lo largo del curso, existe una diferencia importante entre el administrador tradicional y el líder, misma que surge a partir del reconocimiento de las siguientes funciones diferenciales:

• Definir la misión de la compañía, de modo que se puedan enmarcar sus actividades e informar a la fuerza a todos los colaboradores para que orienten todos sus esfuerzos a la consecución de objetivos claros y bien definidos.

• Crear un ambiente flexible, en el cual las personas sean apreciadas y valoradas, a través de la estimulación para que desarrollen todo su potencial y sean tratadas como a iguales más que como a subalternas.

• Darle nueva forma a la cultura organizacional, favoreciendo la creatividad, la autonomía y el aprendizaje continuo para reemplazar el conformismo, la obediencia y la rutina; y tener como meta el crecimiento a largo plazo, no las utilidades a corto plazo.

• Transformar la organización, de una estructura piramidal rígida a una red de unidades autónomas en permanente evolución.

• Estimular la innovación, la experimentación y el riesgo como parte de la adaptación a las necesidades cambiantes de la sociedad actual.

• Anticipar el futuro conforme a los resultados presentes, de tal forma que se puedan establecer estrategias de mejora antes de que se presenten desviaciones y contingencias.

• Generar nuevos modelos para el establecimiento de relaciones, tanto

internas como externas, que favorezcan la permanencia y la expansión de la organización.

• Identificar nuevas necesidades de la fuerza laboral y responder a ellas de manera oportuna, garantizando la buena voluntad de la organización para participar en su crecimiento individual y profesional.

• Aprender a manejar la ambigüedad y la incertidumbre, de manera que exista una anticipación a los hechos, más que una reacción.

Para complementar el punto anterior, analizaremos los diez factores del futuro señalados por Bennis (1990) en su libro “Cómo llegar a ser líder”:

1. Los líderes administran el sueño : Max De Pree (1988) afirma que “la primera responsabilidad de un líder es definir la realidad. La última es dar las gracias. En el medio, el líder es el sirviente”. Lo que significa que es el líder la persona encargada de conducir al equipo de trabajo para la comprensión y apropiación del objetivo que deben alcanzar, siendo su función principal atender a las necesidades de sus colaboradores de manera que estos puedan explotar su potencial.

2. Los líderes abrazan el error : tal como hemos insistido con anterioridad, el error resulta fundamental para al adquisición de cualquier habilidad gerencial y directiva, pero específicamente en relación al liderazgo se convierte en un instrumento de aprendizaje incomparable, ya que es a través del fracaso y de las desviaciones que se pueden reestructurar las metodologías de trabajo, de manera que los individuos y las organizaciones se encuentren siempre a la vanguardia.

3. Los líderes estimulan la réplica reflectante : es decir, que quien se considere un verdadero líder acepta la necesidad de tener a una persona que no tenga temor de confrontarlo con la realidad, sino que se convierta en un aliado que sea capaz de hacerle notar al líder que no siempre tiene la razón ni el conocimiento absoluto, sino que requiere de la complementariedad que caracteriza a todos los grupos humanos.

4. Los líderes estimulan la disensión : lo que significa que es en las diferencias de pensamiento en donde se encuentran las mejores oportunidades de mejora continua, tanto en la perspectiva individual como en la colectiva. Cabe recordar que cuando en un equipo de trabajo en un inicio todos están de acuerdo en una solución, esto representa que no están atendiendo al problema en toda su complejidad. La

disensión es el punto de partida para el diseño de estrategias de solución de conflictos y para la reingeniería de procesos.

5. Los líderes tienen el factor Nobel : mismo que se constituye por el optimismo, la fe y la esperanza en encontrar nuevas alternativas para satisfacer las necesidades específicas de una situación y un momento determinado. Sin estas tres características la persona responsable de conducir al equipo de trabajo no deja de ser más que un administrador. Cabe recordar que el líder debe ser una figura que inspire a los demás para trabajar con pasión y compromiso.

6. Los líderes entienden el efecto Pigmalión : mismo que se traduce en el fenómeno mediante el que la gente responde de acuerdo a la forma en la que son tratados, por ejemplo, si se trata a un colaborador con desconfianza, este hará todo lo posible por demostrar que es merecedor de dicho adjetivo. De tal forma que el líder debe aprovechar este fenómeno para establecer, mediante juicios de valor anticipados, las conductas positivas que desea obtener por parte de su equipo de trabajo.

7. Los líderes tienen “cierto toque”: un líder sabe desde el principio y de manera intuitiva dónde está la cultura organizacional y hacia dónde debe estar la empresa para poder crecer y mantenerse en el mercado.

8. Los líderes ven a lo lejos : ya que no se conforman con una visión a corto plazo, sino que enfocan todos sus esfuerzos y los de sus colaboradores hacia actividades que requieran de innovación, creatividad y actualización constante, de manera que cada una de las personas que integran la organización tengan la oportunidad de planificar una ruta de carrera y capacitación congruente con la realidad.

9. Los líderes comprenden que hay intereses creados : es decir, están conscientes de que su actuación no se limita a un impacto local, sino que genera y transforma a múltiples núcleos y grupos que le rodean. Por ejemplo, el verdadero líder no se limita a alcanzar el objetivo asignado, sino que contempla las necesidades individuales de sus colaboradores, las áreas de oportunidad en la organización, los requerimientos del mercado y las fortalezas que se poseen frente a la competencia, de manera que está en la facultad de diseñar todas sus estrategias desde una dimensión que atienda a todas estas circunstancias.

10. Los líderes crean alianzas y asociaciones estratégi cas : tanto a nivel intraorganizacional como interorganizacional, con la intención de incrementar las posibilidades de desarrollar todas las alternativas posibles para mantenerse en el mercado en una posición vanguardista, misma que permite y demanda que todos los colaboradores se dirijan hacia la adquisición de competencias cada vez más complejas que resulten en un valor añadido en beneficio de todos quienes se relacionan con ella.

4.6. CUALIDADES DE UN LÍDER Independientemente de las características que debe poseer un líder en relación a sus funciones, son muchos los autores que destacan la necesidad de que este cuente con algunas cualidades de personalidad esenciales, entre las que podemos citar:

1. Carácter : es el conjunto de comportamientos habituales que manifiesta una persona frente a determinadas situaciones. Un líder necesita forjar su carácter más allá del compromiso, es decir, que debe aprender a enfrentarse a las crisis y desarrollar el valor suficiente para establecer metas y prioridades mediante las cuales su equipo de trabajo pueda desempeñarse de manera eficaz.

2. Carisma : no se trata únicamente de una característica de personalidad con la que se describe a una persona simpática y segura de sí misma. El verdadero carisma significa lograr que la gente que te rodea se sienta bien en tu presencia, porque tú mismo eres una fuente de inspiración y de motivación para que los demás alcancen sus propias metas. Por lo tanto, se trata de la capacidad de influir positivamente en el estado de ánimo y en las expectativas de los demás.

3. Compromiso : se trata de una convicción real acerca de que lo que se está realizando tiene un gran valor, para ti mismo y para quienes están cerca de ti. El compromiso no significa limitarte a hacer lo que se te ha asignado, sino hacerlo con pasión y con una visión en la que se contemple un beneficio colectivo.

4. Comunicación : no se limita a la simple transmisión de un mensaje a otras personas. La comunicación de liderazgo es aquella que motiva, inspira y orienta a que los receptores se comprometan con un objetivo, ya que mediante la claridad y honestidad con la que se transmita una idea se podrán establecer las rutas necesarias para que el esfuerzo colectivo se dirija hacia el éxito.

5. Capacidad : es todo aquello que se realiza con la intención de buscar rutas de mejora continua. La capacidad no está determinada únicamente por el conocimiento y la experiencia que posees, sino en la medida que realizas algo útil y productivo con ello.

6. Valentía : es la disposición a enfrentar los riesgos necesarios para conducir a un equipo de trabajo hacia la consecución de cualquier objetivo, por más ambicioso que este sea. El verdadero líder actúa aun a pesar del miedo y de la tensión, de otra manera, es simplemente un seguidor.

7. Discernimiento : es la capacidad de identificar la raíz de un problema y encontrar la solución necesaria. El diseño de estrategias superficiales no resuelve de forma permanente una situación, sino que por el contrario, la agrava de manera considerable. Para desarrollar la capacidad de

discernimiento, es necesario que el líder sea un buen observador y que escuche con atención todo lo que sucede a su alrededor, de manera que su panorama sea lo más extenso posible.

8. Concentración : es la habilidad para establecer prioridades tanto en la realización de las actividades cotidianas, como en los procesos mentales necesarios para organizar las ideas de manera efectiva de manera que puedas focalizarlas en la solución de problemas y en la identificación de puntos de oportunidad.

9. Generosidad : el verdadero líder no trabaja para sí mismo, trabaja para que los demás encuentren una ruta de crecimiento personal y profesional mediante la cual puedan hacer realidad sus expectativas. La generosidad no significa dar algo material a otras personas, significa darte a ti mismo con la convicción de que tus conocimientos, habilidades y valores morales son un recurso que puede alimentar el intelecto y el corazón de quienes te rodean.

10. Iniciativa : es la habilidad para detectar las necesidades de una situación o una persona en un momento próximo, de manera que el líder se anticipa y no espera a que se convierta en una crisis, sino que se enfrenta al riesgo y actúa de manera segura para diseñar las estrategias más convenientes para tal fin.

11. Escuchar : esta es una habilidad que no limita únicamente al conocimiento de las personas o los hechos, sino que es una de las herramientas indispensables para que el líder alcance mejores niveles de crecimiento, ya que es a partir del entendimiento del mundo que lo rodea que puede establecer prioridades en relación con las necesidades detectadas, de manera que se encuentre siempre a la vanguardia en la solución de problemas.

12. Pasión : significa que debes concentrarte en lo que estás haciendo, con el pensamiento y la convicción de que lo haces mejor que nadie y que, a partir de los resultados obtenidos, mucha gente se beneficia de tus acciones. Significa amar profundamente tu trabajo, tu organización y tu vida, de manera que tengas el entusiasmo suficiente para entregar toda tu esencia en cada una de tus acciones.

13. Actitud positiva : es la capacidad de ver siempre el lado bueno de las cosas, ya que como hemos mencionado, cualquier circunstancia es una fuente inagotable de aprendizaje, pero solamente tú puedes decidir si estás o no en disposición de identificar qué es lo verdaderamente importante de la situación para enriquecer tu crecimiento personal y profesional.

14. Solución de problemas : esta cualidad generalmente se asocia con el hecho de conseguir el éxito o el fracaso en el proceso de toma de decisiones para la solución de un conflicto. Sin embargo, el verdadero valor de esta cualidad radica en el método utilizado y no en el resultado,

es decir, lo que en realidad importa es el compromiso y la dedicación que se ofrezca para buscar alternativas que coadyuven al crecimiento colectivo.

15. Relaciones : al verdadero líder no le importa que sus colaboradores lo admiren por sus conocimientos, sino que lo acepten como una figura de orientación porque saben que para él lo más importante es el bienestar de cada persona y de lo que sucede al interior del equipo de trabajo, de manera que la gente sea la prioridad número uno y la tarea la número dos.

16. Responsabilidad : representa el convencimiento de que las cosas se pueden lograr de dos maneras: correctamente y de manera excelente. El líder siempre busca la excelencia y participa en las actividades del equipo de trabajo, de manera que todos los esfuerzos generados en su interior se traduzcan en resultados exitosos que favorezcan el intercambio de experiencias, conocimientos y habilidades entre todos sus integrantes.

17. Seguridad : tal como hemos mencionado, el buen líder debe ser capaz de delegar responsabilidades y empoderar a la gente, de la misma manera que debe poseer la suficiente humildad para compartir el reconocimiento de manera justa y equitativa. De tal manera que la seguridad proveniente del autoconocimiento de nuestras propias capacidades y habilidades nos permita compartir con los demás las fuentes de crecimiento.

18. Autodisciplina : es el hábito de establecer prioridades, diseñar estrategias y enfocar tus esfuerzos en alcanzar tus objetivos. En este caso es muy común que nos auto-saboteemos buscando las excusas y justificaciones que nos resulten convenientes para aplazar las cosas. La falta de autodisciplina revela temor, inseguridad, falta de carácter y ausencia de espíritu de liderazgo.

19. Servicio : quien se considere un buen líder es porque está consciente de que su responsabilidad no se limita al hecho de cumplir con una tarea y orientar a un equipo de trabajo hacia un objetivo preestablecido, sino que se traduce en el ánimo y el carácter para favorecer el progreso de todas las personas que le rodean, de manera constante y permanente.

20. Aprender : es la capacidad para extraer nuevos conocimientos de cualquier situación. Como líder debes aprender de tus acciones, de lo que sucede a tu alrededor y de las personas en general, de manera que te mantengas constantemente actualizado y que desarrolles la facultad de reorganizar tus esquemas de pensamiento de manera constante, de tal forma que tu panorama se oriente hacia el largo plazo y en dimensiones cada vez más complejas.

21. Visión : en función de la distancia de una visión dependerá el grado de compromiso que se deba establecer para alcanzarla. Esto significa que

cuando una visión es de corto plazo, el compromiso del líder y sus colaboradores también es corto. Pero si la visión es inspiradora y se traduce en el establecimiento de expectativas al largo plazo, también la pasión de la gente tendrá una mayor pertenencia y significado en el tiempo.

Otro de los pilares fundamentales del liderazgo es el sentido de vida , mismo que se define como el establecimiento de objetivos ante los cuales una persona desarrolla un elevado compromiso emocional, más allá de cualquier razonamiento intelectual. Estos objetivos no son autoimpuestos, es decir, no provienen del querer agradar o complacer a los demás, sino que son el resultado del autodescubrimiento, mediante el cual nos damos cuenta de qué es lo que verdaderamente necesitamos, queremos y deseamos alcanzar. Es así que el sentido de vida es algo que debe descubrirse con el transcurso de los años y de la experiencia, ya que no es algo que pueda inventarse o copiarse de otra persona, lo que lo dota de un contexto completamente individual. Sin embargo, cuando alguien más nos hace alguna sugerencia en relación a nuestro sentido de vida, tendemos a aceptarla cuando coincide con nuestras expectativas. De otro modo la rechazamos de manera inmediata e irrevocable. El descubrimiento del sentido de vida no responde a la pregunta “por qué”, sino al “para qué”, por ejemplo: “¿para qué estoy en este mundo?, ¿para qué debo esforzarme?, ¿para qué necesito desarrollarme como ser humano?”. De forma tal que el sentido de vida únicamente tiene significado para cada individuo en particular, por lo que la función del líder o del coach se debe centrar en respetar los objetivos del colaborador o coachee para que alcance su propia misión y no una ajena e impuesta de manera arbitraria.

Es así que se concibe que la carrera profesional es un camino individual, autodirigido y probado a través del ensayo y el error que dota al ser humano de un sentido existencial por el cual debe buscar su propia superación, mediante

el diseño de las estrategias que le resulten más adecuadas para lograr sus ideales tal y como él los considere necesarios. La misión personal se genera en función de las expectativas que se tienen de un futuro promisorio, es decir, de lo que se quiere llegar a ser y de todo aquello que se puede realizar para darle sentido a nuestra existencia. Por otra parte, la visión está determinada por lo que queremos llegar a ser, más allá de los miedos, los retos y las propias debilidades, lo que requiere del desarrollo de diversas habilidades que nos faciliten la satisfacción de trascender nuestra situación actual. El coaching tiene como objetivo detectar, detonar y potencializar todas las fuerzas, recursos y talentos de las personas, ya que estos son elementos que permanecen desaprovechados en muchas ocasiones, debido a las falsas creencias que todos los seres humanos desarrollamos a partir de las experiencias negativas, los fracasos y las demandas sociales. Arueste (2006) considera que “la planeación de la vida y carrera es la actitud, arte y disciplina de conocerse a sí mismo, de detectar las fuerzas y debilidades y proyectar auto dirigiendo el propio destino hacia el funcionamiento pleno de las capacidades, motivaciones y objetivos de la vida personal, familiar, social y laboral”. Por lo que podemos concluir que esta es la verdadera esencia del coaching y una de las principales tareas de cualquier líder que esté verdaderamente comprometido con sus colaboradores.

MAPAS CONCEPTUALES