Descubriendo la lectura de la Palabra de Dios

Descubriendo la lectura de la palabra de DiosPermanezco firme en la Palabra de Dios

Lleno con la vida divina.El Espíritu de Dios vive en cada palabra,

Y Él se mueve en cada columna.

--E. M. WadsworthLa presente serie de lecciones está preparado para ayudarnos a entender la relevancia e importancia de la

Lectura de las Escrituras. Este es una combinación de algunos capítulos claves del Libro: The Keys to Spiritual Growth (Capítulo 1) por John MacArthur and cinco capítulos de Essential Truths of the Christian Faith by RC Sproul. Estos capítulos fueron adaptados para el presente formato para que pueda trabajar con cada lección, una por semana, siguiendo las diferentes secciones: Resumen, Estudio personal y Profundizando en la Palabra.

Es nuestra oración que usted puede ser capaz de tener una comprensión clara de porque debe tomar tiempo durante su día para la lectura de la Biblia. Usted encontrará suficiente material para ayudarle a disfrutar de la palabra revelada de Dios cual Dios hablandole en forma personal. Descubra lo que el Señor que quiere revelarle al leer la Biblia sistemáticamente.

A Él sea la gloria

Rev. German Cob Guatemala, Noviembre 2012

1. La llave maestra

Un recordatorio

La Biblia es viva: “Ciertamente, la palabra de Dios es viva y poderosa, y más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos, y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón.” (Hebreos 4.12) Pedro habla de la Palabra de Dios como algo “que vive y permanece” (1 Pedo 1.23). Pablo se refiere a la Biblia como “la palabra de vida” (FIlipenses 2.16).

Los signos vitales de la Biblia

¿En que sentido es la Palabra de Dios viva? Podemos mejor observar esto comparándolo con la decadencia, destrucción y corrupción que nos rodea. La muerte es el monarca de este mundo. Este mundo es nada mas que un gran cementerio; todos están muriendo. Algunas personas piensan que están viviendo. De hecho es todo lo contrario, porque “todo mortal es como la hierba y

toda su gloria como la flor del campo; la hierba se seca y la flor se cae” (1 Pedro 1.24).

En contraste, la Biblia es inagotable, inapagable y es dador de vida. La muerte y la descomposición de este sistema del mundo no puede tocarlo.

La Biblia tiene vida en sí misma. La Biblia permanece siempre fresca. En cada generación y en cada época, la Biblia prueba que es viva y relevante. Sus riquezas son inagotables, y sus profundidades insondable.

Hace algunos años decidí escoger un libro de la Biblia y leer ese mismo libro cada día por 30 días. Pensé que al final de mes yo conocería muy bien aquel libro. Después de eso sentía que todavía no conocía 1 Juan como me gustaría conocerlo; así que lo leí otros 30 días. ¿Sabe algo? 1 Juan todavía oculta muchos misterios para mí que no he logrado descifrar. ¡Cada vez que la leo, me emociona!

Otra razón porque decimos que la Biblia es viva es porque se mantiene al día. ¿Ha visto sus libros de textos de la escuela secundaria o de la sexta forma? La mayoría son obsoletos. La marcha del progreso y el descubrimiento los ha sobrepasado. Pero la Biblia habla perceptible y definitivamente al siglo XXI como lo hizo en el siglo I.

La Biblia discierne el corazón. Tiene una percepción que nos sacude. Es una espada de doble filo que corta nuestro ser más interno. Juzga nuestros pensamientos y las intenciones del corazón (Hebreos 4.12). Nos revela lo que somos exactamente, por eso aquellos que se aferran a su pecado no la leen -no quieren ser convencidos de

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pecado. Estos son algunas razones por la que decimos que la Palabra de Dios es viva.

La Biblia es dadora de vida. La Biblia no solamente tiene vida --también da vida. El poder para reproducir es una característica fundamental de vida. Solo pensamientos y palabras humanas no pueden impartir vida espiritual. Pero la Palabra viviente de Dios si puede. Santiago 1.18 dice, "Por su propia voluntad nos hizo nacer mediante la palabra de verdad." El Espíritu Santo usa la Palabra para traer el nuevo nacimiento. La única manera para ser hijo de Dios es por medio de la Palabra viviente: "Así que la fe viene como resultado de oír el mensaje, y el mensaje que se oye es la palabra de Cristo" (Romanos 10.17). "Ustedes han nacido de nuevo, no de simiente perecedera, sino de simiente imperecedera, mediante la palabra de Dios que vive y permanece" (1 Pedro 1.23).

Consideremos la parábola del sembrador de Lucas 8. La Palabra de Dios es la semilla que se esparce por todo el mundo (v. 11). Unas caen sobre el camino y son arrebatadas por el diablo para que la gente no crea y no sean salvadas. ¿Qué es el germen de vida que la gente tiene que creer para ser salvadas? La Palabra que da vida.

Jesús enfatizó la importancia de la Palabra en el proceso de la regeneración. "El Espíritu da vida; la carne no vale para nada. Las palabras que les he hablado son espíritu y son vida" (Juan 6.63). El Espíritu de Dios usa la Palabra de Dios para producir vida.

La Biblia sostiene la vida espiritual. Como decía el puritano Thomas Watson,

La Escritura es tanto lo que da y sostiene la vida. Por medio de ella nacemos espiritualmente, y por ella nos somos nutridos a la madurez. Pedro dijo, "deseen con ansias la leche pura de la palabra,897 como niños recién nacidos. Así, por medio de ella, crecerán en su salvación" (1 Pedro 2.2).

¿Ha visto alguna vez a un recién niño hambriento? El bebé no está interesado en escucharle hablar, o jugar con usted, o que se le acaricie. Nada lo satisface sino el alimento. Pedro nos dice que así de fuerte debe ser nuestro deseo por la Palabra.

Muchos cristianos no desean fuertemente la Palabra. Como resultado están demacrados y malnutridos, sufriendo de una malnutrición espiritual. Ellas deben recordar las palabras de Jeremías, "Al encontrarme con tus palabras, yo las devoraba; ellas eran mi gozo y la alegría de mi corazón" (Jeremías 15.16).

Pablo recordó a Timoteo de esa verdad: "Si enseñas estas cosas a los hermanos, serás un buen servidor de Cristo Jesús, nutrido con las verdades de la fe y de la buena enseñanza que paso a paso has seguido" (1 Timoteo 4.6).

La Palabra de Dios nutre a los creyentes. Lo necesitamos como el bebé necesita la leche, pero también necesitamos crecer para consumir comida sólida (Hebreos 5.13-14).

La Biblia transforma la vida. Pablo animó a los Efesios a ser renovados en el espíritu de sus mentes (Efesios 4.23). En Romanos 12.2 el dijo que la renovación de nuestra mente nos transforma. Como creyentes, necesitamos ser transformados por la

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Palabra. No llegamos a ser perfectos cuando creemos. El Espíritu Santo tiene mucho que hacer para moldearnos a la imagen de Cristo. Siempre batallamos con nuestros patrones antiguos pecaminosos (véase Romanos 7.15-25). Solo cuando llenamos nuestra mente de la Palabra y vivimos en obediencia según esos principios es que nuestros patrones pueden ser cambiados.

Muchos cristianos luchan con el problema de como comprometerse más con el Señor. Asisten a seminarios, leen libros, buscan ciertos dones espirituales, vean consejeros, escuchan predicaciones --todo lo imaginable, menos ir a la Biblia. Si somos negligentes a la Palabra, el resultado es poco o ningún cambio. Solo el Espíritu Santo, trabajando por medio de la Palabra, tiene el poder para traernos a la madurez en Cristo.

Pablo le recordó a los corintios de esa verdad: "Así, todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu" (2 Corintios 3.18). ¿Qué es el espejo del que habla aquí? La Escritura. Santiago escribió, "El que escucha la palabra pero no la pone en práctica es como el que se mira el rostro en un espejo y, después de mirarse, se va y se olvida en seguida de cómo es" (Santiago 1.23-24). ¿Cómo llegamos a ser transformados como Cristo? Al ver la gloria de Jesucristo revelado en el espejo de la Escritura, el Espíritu de Dios nos transforma a la imagen de Jesucristo. Este es la llave maestra para el crecimiento espiritual.

El Puritano Philip Henry escribió:

La conversión nos lleva a la Palabra de Dios, como nuestra piedra angular, para examinarnos … como el espejo para vestirnos (Santiago 1); como nuestra regla para caminar y trabajar (Gálatas 6.16); como nuestra agua, para llevarnos (Salmos 119.9); como nuestro fuego para calentarnos (Lucas 24); como nuestro alimento para nutrirnos (Job 23.12); como nuestra espada para pelear (Efesios 6); como nuestro consejero en nuestras dudas (Salmos 119.24); como nuestro consolador para consolarnos; como nuestra herencia para enriquecernos.

Resumen1. La Biblia es viva.

2. La Biblia nos da vida.

3. La Biblia sustenta la vida espiritual.

4. La Biblia transforma nuestras vidas.

Estudio personal1. Tome tiempo para leer esta lección.

2. Subraya los puntos principales de esta lección.

3. Escriba sus pensamientos personales sobre la Biblia como la llave maestra para venir a la presencia del rey.

4. Escoja 5 versículos (uno para cada día de la semana) de esta lección para memorizar.

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Profundizando en la Palabra

1. ¿Qué evidencias tiene que la Palabra es viva?

2. Si el mensaje de la Biblia no queda rancia, ¿por qué el creyente promedio no tiene tiempo para leer la Biblia, y menos estudiarla?

3. Describa su experiencia de como la Biblia le ha dado vida.

4. Escriba una cosa en su vida personal que cree que la Palabra de Dios ha cambiado en usted desde que conoció al Señor como Señor y Salvador.

5. Escriba una aplicación para su vida personal de lo que ha estudiado esta semana.

2. Revelación divina

Todo lo que debemos saber acerca del cristianismo has sido revelado por Dios. Revelar significa "quitar el velo." Involucra el remover la cubierta sobre algo que está escondido. La especulación sin sentido acerca de Dios es cosas de tontos. Si deseamos conocerle en verdad, tenemos que depender de lo que Él nos dice acerca de sí mismo.

La Biblia indica que Dios se reveló en varias maneras. El despliega Su gloria en y por medio de la naturaleza. El se reveló a sí mismo por medio de sueños y visiones en tiempo antiguos. la marca de Su providencia se muestra en las páginas de la historia. El se revela a sí mismo en la inspirada Escritura. El clímax de Su revelación se ve en Jesucristo haciéndose humano --lo que los teólogos llaman "la encarnación".

El autor de Hebreos escribe: "Dios, que muchas veces y de varias maneras habló a nuestros antepasados en otras épocas por medio de los profetas, en estos días finales nos ha hablado por

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medio de su Hijo. A éste lo designó heredero de todo, y por medio de él hizo el universo" (Hebreos 1.1-2).

Aun cuando la Biblia habla de "varias maneras" que Dios se ha revelado a sí mismo, distinguimos entre dos tipos principales de revelación --general y especial.

La revelación general se llama "general" por dos razones: (1) su contenido es general, y (2) se revela a una público general.

Contenido general

La revelación general nos provee de un conocimiento que Dios existe. "Los cielos declaran la gloria de Dios", dijo el salmista (Salmos 19.1). La gloria de Dios se despliega en las obras de Sus manos. Esta manifestación es tan clara y manifiesta que ninguna criatura puede pasarla desapercibida. Desvela el eterno poder y deidad (Romanos 1.18-23). La revelación en la naturaleza no nos da una revelación completa de Dios. No nos provee la información acerca de Dios como Redentor que encontramos en la Biblia. Pero el Dios que se revela en la naturaleza es el mismo Dios que se revela en las Escrituras.

Público general

No todos en el mundo han leído la Biblia o han escuchado la proclamación del evangelio. Pero la luz de la naturaleza se refleja en todos en todo lugar y en todo tiempo. La revelación general de Dios se lleva acabo cada día. Dios nunca ha quedado sin testimonio. El mundo visible es como un espejo que refleja la gloria de su Creador.

El mundo es un teatro para Dios. El es el actor principal que aparece al frente y en el centro. Ninguna cortina puede caer y oscurecer Su presencia. Podemos ver con un vistazo a la creación que ella no es su propia madre. No hay tal cosa como "madre naturaleza". La naturaleza no tiene poder para producir vida de ninguna clase. En sí misma, la naturaleza es estéril. El poder para producir vida reside en el Autor de la naturaleza --Dios. Sustituir la naturaleza como la fuente de vida es confundir la creación con el Creador. Toda clase de adoración a la naturaleza es un acto de idolatría que Dios detesta.

Por medio de la fuerza de la revelación general, todo ser humano sabe que Dios existe.

Quien tenga una mente y corazón abierto puede ver la maravillosa gloria de Dios --desde los billones de universos en los cielos hasta las partículas sub-atómicas que componen la molécula más pequeña. Servimos a un Dios increíble.Resumen1. El cristianismo es una religión de

revelación.2. La revelación de Dios es un auto-

descubrimiento. El remueve el velo que nos impide conocerle.

3. No llegamos a conocer a Dios por medio de especulación.

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4. Dios se ha revelado en varias maneras a través de la historia.

5. Todos los seres humanos han recibido la revelación general.

6. Negar a Dios es de tontos.7. La sabiduría se fundamenta en el

temor a Dios.

Estudio personal1. Lea esta lección.2. ¿Qué significa que Dios se ha

revelado?3. ¿Qué es lo que Dios ha revelado

acerca de sí mismo?4. Escoja 5 versículos para memorizar

en esta semana.Profundizando en la Palabra1. ¿Qué nos dicen los siguientes

pasajes acerca de la revelación divina?Salmos 19.1-14Efesios 3.1-132 Timoteo 3.14-17Hebreos 1.1-4

2. Si Dios se ha revelado a sí mismo, ¿qué clase de revelación ha provisto para el NO-cristiano?

3. Si Dios se ha revelado a sí mismo, ¿qué clase de revelación ha provisto para los creyentes?

3. Revelación general Inmediata y mediata

Cuando era pequeño y me madre quería que yo hiciese algo sin demora, ella enfatizaba sus órdenes usando el adverbio inmediatamente. Ella diría, "hijo, ve a tu cuarto inmediatamente."

Ella usaba la palabra inmediatamente para referirse a un evento en el tiempo que ocurre sin la intervención de un bloque de tiempo. En teología el término significa algo más. Significa que algo sucede sin pasar por la intervención de un agente, algo o medio. Es una acción que toma lugar sin un intermediario.

En la teología bíblica distinguimos entre dos tipos de revelación general --aquello que es comunicado por un intermediario y aquello que es directo. Cuando hablamos de revelación general mediata, se refiere a una revelación que se transmite por medio de algo. Cuando los cielos revelan a Dios, ellos se convierten en el medio por el cual Dios despliega su gloria. En este sentido, todo el universo es un medio para la revelación divina. La creación da testimonio de su Creador.

La Biblia dice que toda la tierra está llena de la gloria de Dios. Tristemente, frecuentemente no vemos la misma gloria que nos rodea. Tendemos a vivir en la superficie de las cosas. Estamos dormidos a la maravilla y asombro que Dios provee en Su creación gloriosa. Hemos apagado la sintonía. Estamos

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fuera de contacto con Dios. Las ideas religiosas no tienen valor si no expresan algo real.

La presencia sublime de Dios nos rodea. Sin embargo, frecuentemente estamos ciegos y sordos a ello. No entendemos su lenguaje. Es más que detenerse a olor las flores. Las flores contienen más que un aroma o fragancia dulce. Desprenden la gloria de su Creador. Estamos en contacto con la revelación divina cuando estamos conscientes de la gloria de Dios en la naturaleza. La naturaleza no es divina. Pero la gloria de Dios llena la naturaleza y se revela en ella y por media de ella.

Además de revelar Su gloria indirectamente en la creación, Dios también se revela a sí mismo directamente en la mente humana. Esta revelación se llama revelación general inmediata.

El apóstol Pablo habla de la ley de Dios que está escrita en nuestros corazones (Romanos 2.12-16). Juan

Calvino habla del sentido del divino que Dios implanta en la mente de cada persona. El dice: "Existe en la mente humana y sin duda en el instinto natural, un sentido de la divinidad, nosotros vamos más allá de la disputa, ya que Dios mismo ha dado a los hombres, si, especialmente idolatría, evidencia de este conocimiento innato que puede ser distorsionado pero nunca arrasado.

Profundamente en nuestra alma nosotros sabemos que Dios existe y que El nos ha dado Su Ley. nosotros buscamos suprimir este conocimiento a fin de escapar de los mandamientos de Dios. Pero no importa cuan duro lo intentemos, no podemos silenciar la voz interna. Puede ser tapada pero nunca destruida.

Resumen1. La gloria de Dios es evidente a

nuestro alrededor. Es mediado por medio de la creación de Dios.

2. Los seres humanos son religiosos por naturaleza.

3. Dios implanta en todo ser humano un conocimiento innato de Sí mismo. Esto se llama revelación general inmediata.

Estudio personal1. Lea la lección

2. Lea las siguientes secciones. Luego lea cada capítulo completo durante cada día de la semana.

Salmos 19.1-4 (Capítulo 19)

Hechos 4.8-18 (Capítulo 4)

Hechos 17.16.34 (Capítulo 17)

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Romanos 1.18-23 (Capítulo 1)

Romanos 2.14-15 (Capítulo 2)

3. Seleccione un versículo para memorizar cada día de la semana.

Profundizando en la Palabra

1. ¿Cuál es la diferencia entre la palabra inmediatamente y la palabra como se usa en teología (según los primeros dos párrafos de esta lección)?

2. ¿Por qué no es la revelación general mediata suficiente para la salvación de los seres humanos?

3. ¿Por qué se hace necesario e importante la revelación general inmediata para conocer a Dios y Su salvación?

4. Entonces, ¿por qué debe leer la Escritura?

5. Escriba (en un párrafo) su compromiso para LEER la Escritura diariamente.

4. Revelación especial y la Biblia

Cuando Jesús fue tentado por Satanás en el desierto, El reprendió al diablo con las palabras, “No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” (Mateo 4.4) Históricamente, la iglesia ha hecho eco de las enseñanzas de Jesus afirmando que la Biblia es la vox Dei, la "voz de Dios" o el verbum Dei, la "Palabra de Dios". Llamar a la Biblia como Palabra de Dios no sugiere que fue escrito con la propia mano divina de Dios o que cayó del cielo en un paracaídas. La Biblia claramente llama la atención a su autores humanos. En un estudio cuidadoso de las Escrituras se observa que cada autor humano tenía un estilo literario propio, vocabulario, énfasis especial, perspectiva y más. Ya que la producción de la Biblia involucró el esfuerzo humano, ¿cómo puede ser tratado como la Palabra de Dios?

La Biblia se llama la Palabra de Dios porque sus reclamos, creídos por la iglesia, que los escritores humanos no escribieron sus propias opiniones, sino que sus palabras fueron inspirados por Dios. El apóstol Pablo escribe: "Toda la Escritura es inspirada por Dios" (2 Timoteo 3.16). La palabra inspiración es una traducción de una palabra griega que significa "aliento de Dios". Dios exhaló la Biblia. Así como debemos exhalar el aire de nuestras bocas cuando hablamos, así mismo la Escritura es el habla de Dios.

Aun cuando la Escritura vino a nosotros de varias plumas de los escritores humanos, la fuente última de la

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Escritura es Dios. Es por eso que los profetas podían escribir sus prefacios diciendo, "Así dice el Señor." También Jesús pudo decir, "Tus palabras son verdad" (Juan 17.17), y "la Escritura no puede ser quebrantada" (Juan 10.35).

La palabra inspiración llama la atención al proceso por el cual el Espíritu Santo supervisó la producción de la Escritura. El Espíritu Santo guió a los escritores humanos para que sus palabras no fuesen menos que la Palabra de Dios. Cómo Dios supervisó los escritos originales de la Biblia no es desconocido. Pero inspiración no significa que Dios dictó Su mensaje a aquellos que escribieron la Biblia. Por otra parte, el Espíritu Santo comunicó por medio de los escritores humanos las mismas palabras de Dios.

Los cristianos afirman la infalibilidad e inerrancia de la Biblia porque Dios es finalmente el autor de la Biblia. Y porque Dios es incapaz de inspirar falsedad, Sus palabras son totalmente verdad y digno de confianza. Normalmente, cualquier producto literario humano es puede fácilmente contener errores. Pero la Biblia no es un proyecto humano normal. Si la Biblia es inspirada y supervisada por Dios, entonces, no puede contener error.

Esto no significa que las traducciones de la Biblia hoy en día sean sin error, pero que los manuscritos original fueron absolutamente libres de error. Tampoco significa que todas las declaraciones en

la Biblia sean verdad. El escritor del libro de Eclesiastés, por ejemplo, declara "porque en el sepulcro, adonde te diriges, no hay trabajo ni planes ni conocimiento ni sabiduría" (Eclesiastés 9.10). El escritor estaba hablando desde el punto de desesperación humana, y nosotros sabemos que esta declaración no es verdad porque otras partes de la Escritura lo niegan. Aun cuando se revela el razonamiento falso de un hombre desesperado, la Biblia siempre habla la verdad.

Resumen1. Inspiración es el proceso por el

cual Dios exhala Su Palabra.

2. Dios es la fuente final de la Biblia.

3. Dios es el superintendente final de la Biblia.

4. Sólo los manuscritos originales de la Biblia están sin error.

Estudio personal1. Lea la lección cuidadosamente.

2. Lea los siguientes pasajes bíblicos

Salmos 119

Juan 17.17

1 Tesalonicenses 2.13

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2 Timoteo 3.15-17

2 Pedro 1.20-21

3. Memorice los versículos que ha leído. Uno por cada día.

4. Escriba con sus propias palabras porque la Biblia es tan importante y relevante para el pueblo de Dios hoy en día.

5. De sus razones por leer la Escritura cada día.

Profundizando en la Palabra1. La Biblia es el "aliento de Dios".

Cierre sus ojos y imagínese que Dios está parado en frente de usted. El está tan cerca que cuando habla, usted puede sentir su respiración en su rostro. Este es el sentimiento que usted debe tener cuando abre la Biblia y la lee. ¿Cuál es la diferencia que esto hará en su vida si verdaderamente cree que la Biblia que usted tiene es Dios revelándose a usted?

2. Tome cinco minutos cada día de esta semana para leer la Biblia. Puede contar el tiempo. Después de terminar de leer por cinco minutos, escriba la referencia de su lectura del día

5. La Ley de Dios

Dios gobierna Su universo por medio de leyes. La naturaleza opera bajo Su gobierno providencial. Las llamadas leyes de naturaleza meramente describe la manera de Dios de ordenar el universo. Estas "leyes" son expresiones de Su voluntad soberano.

Dios no es responsable a ninguna ley fuera de Si mismo. No hay reglas cósmicas independientes que Dios tiene que obedecer. Por el contrario, Dios es una ley en Sí mismo. Esto simplemente significa que Dios actúa según Su propio carácter moral. Su propio carácter no es moralmente perfecto y que El siempre actúa según Su naturaleza. Dios por lo tanto, no es arbitrario, caprichoso o enigmático. El siempre hace las cosas que son correctas.

Como criaturas de Dios, se nos requiere que hagamos lo que es recto. Dios demanda que vivíamos según Su ley moral, que Él ha revelado en la Biblia. La ley de Dios es el estándar final para la rectitud y la norma suprema para juzgar lo bueno y lo malo. Como nuestro Dios soberano, Él tiene autoridad para imponer sus obligaciones en nosotros,

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nos manda obedecerle y ata nuestra consciencia. El también tiene el poder y derecho de castigar la desobediencia cuando nosotros violamos Su ley. (El pecado puede ser definido como desobediencia a la Ley de Dios.)

Algunas leyes en la Biblia se basan directamente en el carácter de Dios. Estas leyes reflejan los elementos permanentes, transculturales de las relaciones, tanto divino como humano. Otras leyes tienen la intención de ser condiciones temporales para la sociedad. Esto significa que algunas leyes son absolutos y eternos, mientras otros son anulados por Dios por razones históricas, tales como leyes dietéticas y ceremoniales de Israel. Solo Dios mismo puede poner a un lado dichas leyes. Los seres humanos nunca tienen autoridad para establecer leyes aparte de la Ley de Dios.

No somos autónomos. Esto esto, no podemos vivir según nuestras propias leyes. La condición moral de la humanidad es aquella de la "heteronomía": vivimos bajo la ley de otro. La forma específica de la heteronomía bajo la que vivimos es la theonomía, o la ley de Dios.

Autonomía = Auto nomos propia ley

Heteronomía = Hetero nomos Otro ley

Theonomía = Theos nomos Dios ley

Resumen1. Dios gobierna su universo por

leyes. La gravedad es un ejemplo de la leyes de la naturaleza de Dios. La ley moral de Dios se exhiben en los Diez Mandamientos.

2. Dios tiene la autoridad de imponer sus obligaciones sobre Sus criaturas.

3. Dios actúa según la ley de Su propio carácter.

4. Dios revela Su ley moral a nuestras consciencias y en las Escrituras.

Estudio personal1. Lea la lección cuidadosamente.

Preste atención cuidadosa a la importancia de la Ley de Dios.

2. Lea los pasajes bíblicosExodo 20:1-17 Salmos 115:3 Mateo 5:17-20 Romanos 7:7-25 Gálatas 3:23-29

3. ¿Cómo sabe lo que es correcto y lo que es malo?

4. Si la Biblia es la Ley de Dios que nos dice lo que es correcto y lo que es incorrecto, ¿por qué será que la mayoría de creyentes no consideran importante leer la Biblia diariamente?

5. Escoja 5 versículos bíblicos y memorícelo durante esta semana.

Profundizando en la Palabra1. Siguiendo lo que hicieron la

semana pasada (leer durante 5 minutos), tome tiempo para leer la Biblia por cinco minutos y tome tiempo para leer cinco minutos por la noche antes de ir a la cama. (Al final del día habrá leído durante 10 minutos.)

2. ¿Por qué se siente impulsado a obedecer la Ley de Dios?

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6. Los profetas de Dios

Los profetas del Antiguo Testamento eran personas únicas, llamados por Dios con un mensaje sobrenatural dado por Dios que se cumplía. Dios habló Sus palabras por medio de los labios y escritos de los profetas.

La profecía involucraba tanto predicciones futuras (predecir) y la proclamación presente y exhortación de la Palabra de Dios (amonestar). Los profetas fueron empoderados por el Espíritu Santo que sus palabras eran las palabras de Dios. Por eso los mensajes proféticos frecuentemente se iniciaban con la frase, "Así dice el Señor."

Los profetas fueron reformadores de la religión de Israel. Ellos llamaban al pueblo a regresar a la adoración y obediencia a Dios. Aunque los profetas fueron críticos de la manera de adoración que los judíos que se degeneraban en meros ritos, ellos no condenaban ni atacaban las formas originales de la adoración a Dios que había dado a Su pueblo. Los profetas no eran revolucio-narios o anarquistas religiosos. Su tarea era purificar, no destruir; era reformar, no reemplazar la adoración de Israel.

Los profetas estaban profundamente preocupados por la justicia social y la rectitud. Eran la consciencia de Israel, llamado al pueblo al arrepentimiento. También funcionaron como los abogados a favor de las leyes pactales de Dios. Ellos "servían citaciones" en la nación por violar los términos del pacto con Dios.

Los profetas hablaron con autoridad divina porque Dios los llamó específicamente a ser su portavoz. Ellos no recibían en herencia su oficio, tampoco eran elegidos a ello. El llamado inmediato de Dios unido con el poder del Espíritu Santo constituyó las credenciales de los profetas.

Los profetas falsos fueron un constante problema en Israel. En vez de hablar los oráculos de Dio, ellos daban a conocer sus propios sueños y opiniones --diciendo a la gente solamente lo que ellos querían oír. Los verdaderos profetas fueron perseguidos frecuentemente y rechazados por sus contemporáneos al rehusar comprometer la proclamación de todo el consejo de Dios.

Algunas veces los libros de los profetas están divididos en "profetas mayores" y "profetas menores". Esta distinción es una referencia no a la importancia mayor o menor del profeta, sino al volumen de sus escritos canónicos. Isaías, Jeremías, Ezequiel, y Daniel son llamados profetas mayores porque escribieron mucho; mientras Amós, Oseas, Miqueas, Jonás, etc. son referidos como profetas menores porque sus libros son más pequeños.

Los apóstoles del Nuevo Testamento poseían muchos de las características de los profetas del Antiguo Testamento. Los apóstoles y profetas juntos son llamados la fundación de la iglesia.

Resumen1. Los profetas del Antiguo

Testamento fueron agentes de la revelación divina.

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2. La profecía involucraba el predecir como el amonestar.

3. Los profetas fueron reformadores de la adoración y vida israelita.

4. Solamente aquellos dirigidos directamente por Dios tenían la autoridad de ser Sus profetas.

5. Los falsos profetas expresan sus propias opiniones y le decían al pueblo lo que ellos querían escuchar.

6. Los profetas mayores y menores fueron designados según el volumen de sus escritos, no la importancia de sus obras.

Estudio personal1. Lea los siguientes pasajes bíblicos:

Deuteronomio 18:15-22; Isaías 6; Joel 2:28-32; Mateo 7:15-20; Efesios 4:11-16.

2. Escoja cinco versículos para memorizar esta semana.

3. Esta semana para su tiempo de lectura, incluya otros cinco minutos para leer su Biblia a mitad del día. Ahora estará leyendo la Biblia durante 15 minutos cada día.

Profundizando en la Palabra1. Hay muchísimas personas hoy en

día diciendo que ellos le están dando una palabra de profecía, ¿cuáles deben ser las credenciales de un profeta verdadero que habla de Dios a usted?

2. ¿Cuántos profetas mayores y menores hay en la Biblia?

3. ¿Por qué es tan difícil leer los Profetas de la Biblia?

7. Amar la lectura de la Palabra de Dios -La Biblia

Generalmente pensamos que la Biblia es un enorme libro. En realidad, es una pequeña biblioteca de sesenta y seis libros. Históricamente, la Biblia ha sido la regla autoritaria para la fe y práctica de la iglesia.

En nuestro mundo beliceño, ¿quién tiene el tiempo y la energía para ir a la biblioteca y sacar libros para leer? Ni los niños de la Escuela Primaria van a la biblioteca con una de ella cerca a su casa, menos tomar tiempo para leer algún libro. La misma mentalidad se refleja en nuestra población adulta, para quienes la lectura no es importante. Ahora con la tecnología moderna entrando a nuestros hogares, la lectura está casi fuera del cuadro completamente.

Como creyentes y seguidores de Jesucristo la lectura se convierte en algo importante. La mayoría de los creyentes van a la iglesia para escuchar la Palabra de Dios. Sin embargo, si uno toma el

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tiempo para evaluar un programa de la escuela dominical, no se encuentra un tiempo específico para la lectura del Antiguo y Nuevo Testamento. No hay tiempo en el programa para la lectura. Así que no está de más concluir que la mayoría de nuestros creyentes no leen la Biblia, menos disfrutan la riqueza de ir a la Biblia como una experiencia personal.

Pero si hubiera lectura en la iglesia, la lectura de la Biblia viene como de segunda mano. Hoy en día, muchos de nuestros predicadores están predicando cualquier cosa menos la Palabra de Dios. Con razón hay tanta pobreza espiritual en la vida de los miembros de la iglesia.

Ahora este puede ser el tiempo más oscuro en la historia de la iglesia. Hubo un tiempo en la historia -el Oscurantismo cuando no habían Biblias para que la gente leyera y la gente vivió en el oscurantismo. Parece que la historia se vuelve a repetir. (Algunos han dicho que la Historia es cíclica. Entonces estamos completando un ciclo completo.)

Es por eso que debemos romper este ciclo vicioso. Necesitamos amar la lectura de la Biblia. La Palabra de Dios debe fascinarnos. Cómo ha estudiado en las pasadas semanas, cuando leemos la Biblia están en realidad, leyendo las palabras que vinieron de la boca de Dios --es decir, la revelación de Dios. Entonces, si cree que esta pequeña biblioteca que Dios ha provisto, y está dentro de su hogar, es la palabra revelada de Dios a usted, entonces, usted debe amar la lectura de ella.

Necesita pensar que la Biblia es una carta de amor de Dios escrita especialmente para usted. Usted querrá pasar el mayor tiempo posible en la lectura y volver a leerlo y otra vez y otra

vez porque usted está enamorada del Autor Supremo de la Biblia. No hay nada mejor que conocer lo que Dios ha revelado acerca de Sí mismo en las Escrituras. Para lograr esto, necesitamos concentrarnos en la lectura de Su palabra.

Si usted ha seguido a pie de la letra en las lecciones de este estudio, entonces para esta semana debería estar pasando 15 minutos (distribuido durante el día) para leer la Biblia. Ahora preste atención a lo que sigue. El día se divide en 96 cuartos de hora durante el día para escuchar la voz de su AMADO hablándole. Si usted no ha podido disciplinarse en pasar tiempo en la lectura de la Palabra de Dios, será muy beneficioso para su vida empezar a hacerlo inmediatamente.

Algunas sugerencias generales para que usted lea la Biblia. Use una Biblia con letras claras. Si tiene problemas visuales puede conseguir uno con letra grande. Esto le será útil para leer sin mayor esfuerzo de sus ojos. Muchas veces, el enemigo usará tales cosas para crearle problema que le impedirá que usted pueda leer y disfrutar la Palabra de

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Dios. Así que comprométase a pasar tiempo en la Escritura.

Lea despacio, sin prisa. No recibirá un premio para completar la lectura de la pequeña biblioteca. Así que tome su tiempo y léala como que si fuese una carta de amor. Una carta de amor no puede leerse rápidamente. Toma tiempo para oler el papel, y luego toma tiempo para leer cada palabra y oración y párrafo para no pasar por alto ningún pensamiento de su amado. 1 Corintios 14.19 puede parafrasearse: "prefiero emplear (LEER) cinco palabras comprensibles y que me sirvan para instruir a los demás, que diez mil palabras en lenguas." Así debe leerse la Biblia.

Antes de que usted empiece a leer, pida a Dios que abra su entendimiento. Puede hacer esto en un tiempo de oración. Dios nos ha dado a Su Espíritu Santo nos guía a toda la verdad. Por lo tanto, tome tiempo para orar que Él abra sus ojos para que puede entender el mensaje que Él tiene para usted al abrir la Escritura.

Al leer, pregúntese: ¿Qué me está diciendo Dios o qué quiere de mí? Lea como que si la Biblia fue escrita específicamente y especialmente para usted. Este es un mensaje de Dios para usted. Al leer las amonestaciones y exhortaciones, piense como se aplica a su vida. Todo nos gusta las promesas que encontramos en la Biblia, pero también debemos buscar las condiciones que viene junto con las promesas, que es una sección que se pasan por alto con facilidad.

Finalmente, necesitas leer la Biblia sistemáticamente. Cuando usted lee una historia o una novel, no empieza en

medio del libro o cerca del final, sino que se empieza con la primera página. Esto se aplica a las Escrituras. Aún cuando se puede encontrar el significado de cualquier libro en la biblioteca , será mejor si empieza con el libro de Génesis y continúe a través de los demás libros. ¿Ha pensado alguna vez en leer la biblioteca que tiene en casa? ¿Todos los sesenta y seis libros? Muchos creyentes han descubierto que es una tremenda bendición. Muchos han diseñado planes de lectura diaria. Usted puede conseguir uno para leer la Biblia en un año, si dedica unos 30 a 45 minutos de lectura cada día. Ponga atención a cada palabra. No se salte ningún detalle. Sea como un buen detective y vea que revelación puede descubrir cada vez que usted leer la Palabra de Dios.

Ahora es su turno para abrir el libro sagrado y empiece a disfrutar la maravillosa Palabra que Dios ha exhalado. ¡Disfrute su Biblia!

Resumen1. La Biblia es una biblioteca

completa de sesenta y seis libros.

2. Regresaremos a la Edad del Oscurantismo si no leemos la Biblia.

3. La Biblia es la carta de amor para nosotros por eso debemos leer la Biblia.

4. Use una Biblia con letras grandes y claras.

5. Lea despacio y sin prisa.

6. Empiece su lectura con un tiempo de oración.

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7. Pregúntese: ¿Qué me dice Dios o qué desea Dios de mí?

8. Lea la Biblia sistemáticamente.

Estudio personal1. Lea la lección cuidadosamente.

2. Escoja 5 versículos bíblicos que hablan de promesas y memorice uno cada día.

3. Empiece la lectura de su biblioteca con el primer libro, Génesis.

4. Si usted ha estado leyendo la Biblia tres veces al día como se sugirió anteriormente, ahora debe escoger otros tres momentos adicionales para leer, especialmente en la mañana y por la tarde y otro tiempo del día. Esto tomará 30 minutos cada día que dedicará a la lectura de la Palabra de Dios. Si usted leer por 30 minutos cada día, pronto podrá leer toda la Biblia en un año.

Profundizando en la Palabra

1. Lleve un registro diario de la lectura y de las cosas que Dios le ha estando revelando. Será como un Diario Espiritual. Mientras usted se involucre en la lectura y escritura de lo que Dios le está enseñando, usted descubrirá que crecerá en madurez.

2. Subraye el tema de la Gloria de Dios ya que este es una llave maestra que usted ha estudiando antes. Encontrará este tema a través de todos los libros de la Biblia.

3. Comparta con otros como la Biblia se ha convertido en un libro viviente en su vida. Otras personas se beneficiarán con su experiencia. Esta experiencia es lo que Dios usará para alcanzar a otros.

4. Disfrute de la Palabra de Dios leyendo y subrayando el Salmo 119 lo que dice acerca de la Escritura.

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