la tierra hidalga: periódico...

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Toda JI al Dlreetor. anuRcl ••, .ellTln \arif,. Prohibid. I1 repr.du.GI6n •• ori.inall.lllc.,to "".I.gnln- dOle IU proc.d.neia. No •• d6vu'lveriéstol,.ni •• m.ntlen. cOlt.Spendenei. de los mismos. Red.cchin" Atlminlll,.cI6n: S.n AGuann, 1.-Tel.fono, S ,. s.os SlÁliU.. OOS ... Je.Qs .... z Rodrfguez SwecrIIMlen... : Un mes. 0'10 pt••• -UI'I afil. 5 pe.et'l NUMEftO SUELTO: DIEZCENTMOf i{raIga PERIÓDl.OO INDEPENl:):I;:JiJNT"'EJ í .";; cJ-riet NUM. 58 - ." .------ '. .f < IUh. TOMÁS ALMODÓVAR. TODO MUV DE PELíCULA... :Redactor Jefe: DAVID !AYO .. . : . De nU2VO, el blanco pañuelo, saca el «señor Presidente .... Sale el toro del toril... ¡Y así sucesivamente... ! Practicando el «volapié. en esta forma tan -pura., el estoque, en todo lo alto, metehasta la empuñadura; pero si el toro no -dobla. tendrá que «descabellar., para lo que, previamente, tiene que hacerle «humillar., porque todo el mundo sabe, que estando la res «tapada,. intentar el -descabello. . es cosa descabellada. Al «acostarse. el «bure!. se aproxima el «puntillero., que al instante lo de un "puntillazo» certero; y d ')jJué, de los torme'ntos y «la,fiP'" ha pasado en el "rcdonde!», se ve, el pobre «bicho>, arrastradt; ... Con la «escopeta. a la cara, piensa el .diestro. la manera de «entrar por uvas., sin que le dé un disgusto la fiera, hasta que al fin se decide;': a entrar «corto y por derecho., «volcarse. sobre el «morrilllo., dando a las astas el pecho, " y .vaciando. con la izquierda despacito y sin .azares., salir oIimpio» de la «súerte» rozando los -costillares., 'Encuanto .cuadra. el n;ina inquietante ansiedad, lo que prueba que ha llegado .Ia hora de la verdad». COLABORACION: AleJanho AlGaI- de, Carloe Calalayud, An,el Dotor, PranclBQO Tolaada,Luclano 98 C.a, Ramón earando, .MIca.1 Mi- lallón, Pranci8ol,) Morayta, Artaro Gómea Lobo, Ham6n Solano, •• el Tom4, Jo.é Lópea BarberáD., Aatonlo Aluado Marlnoni, Ramón Otd64u Boixer, JOlé Ramón QIle.ada, Claro CaeUo, Manuel Gómea M.oarólI, Jo•• MaI1úlea Rm, M.ergodc, PiatO'7 Aa. toDio AlargÓJl C&p1l1a. RBDACCION: Manuel Be- neytez,.Director; David, Rayo., Redac- tor Jefe; Je8ús Gómez R041r'l,uez; re- dactor y Admini8trad,or; Tomás .Al- modóvar, Rufo Pernánde,¡, Alberto López, RogeUo Hernán4eade la Torre Gabriel Vicente Ruiz MUdoa, Alfred,o Calvo, Luia ReUmpio, Ramón CaiUaa- J oaé Almod,ovar Mú¡tca, Alejan- 411:'0 Alealae Redondo y Ramón C.- ba"as. LA TIBRRA HIDALGA Be halla ID- telrada por 108 ei¡mente.. rcWtore. y Qolaborad,orel: ,,/. '_ Entre los presuntos autores de! expreso de Andalucía, figura, nuestros lectores, Honorio Sánchez Malina, muy conocido en esta población" P?r correr a cargo de su nIstracl6n de una finca deno meda. perteneciente a los de la Concepción, hijos de esta ciudad. La noticia de que Honorio Sánchez era coautor del de- lito que conmueve hoy a España entera, ha causado aquí, y en toda la Mancha' mente, una profunda sensación Excusado es decir que nosotros podíamos dedicar a este asunto una docu- mentada y amplia información; petlJ"'no en- tra en nuestra «manera., en nuestro «modo» de apreciar las cosas, el someter a la' veri.ci- dad del público-público apasionado;y,jen- siblero de tendido de plaza de toros-apre- ciaciones y conceptos hijos de un incomliCien- te nerviosismo esclavizado a las des neurasténicas de la «galería •. y desalmada. .. Nos repugna el folletín. Nos asquea lago a la satisfacción de malsanas curiosida- des. Tenemos del delito, como de ,cjisi rodas las cosas, unas ideas «especiales. que no sa- crificamos fáciles En el numeroproxlmo, acaso podatbos mostrarnos más explícitos. .., PAJARITAS DE PAPEL· Si el toro pega de firme, sin tibiezas ni desmayos, el público enloquecido pide: «¡Caballos! ¡Caballos!.; dando con el sanguinario furor de su paroxism), un lamentable espectáculo de incultura y salvajismo ... Háse cambiado de «tercio», y decidido y ufano «surge. un torero, con dos «banderillas. en la mano; se va hacia el toro, ligero, y hurtando sus cabezadas, enhiestas, las «banderillas. deja en el lomo clavadas, 'Y al sentir los arponcillos clavados en lé..s costillas, de fijo le sienta al toro «¡como un par de banderillas!., porque sale de «estampía., dando vueltas y saltitos, y muge, como diciendo: .¡Cuán gritan esos malditos!» L.legó el «tercio« y con palabra elocuente . y cortés, el «Maestro espá. brinda al «Señor A continuación, armado del 'estoque. y la «muleta., paso a paso, de la res llega hasta la misma «jeta •• Si hace COn el «trapo rojo. una apretada «faena., al momento, una ovación ensorde\:edora suena, a la que el «pópulo bárbaro. mezclará ¡Olésl a millares, si déja que los «pitones. le rocen los alamares; y si hay «hule., el entusiasmo aumentará de medida, ' porque hay quien no se divierte mas que si ve una t<coj"ida». Si lo «pasa. distanciado oirá pitoa abundantes, a su familia ¡ cepítetoli mal sonantes-, En cambio, el pobre caballo -torpe, desmedrado y viejo- esta amena diversión la paga con el pellejo, yen cuanto muere, una mano piadosa pone ligera sobre su hípico cadáver un «sudario» de harpillera. . Ya está en «suerte. el .noble astado» y con gana de pelea; mas la «grey picaderil», medrosa remolonea, y al contemplar su actitud desaprensiva y tumbona, les gritan, desde el «tendido.: «¡Al toro, que es una mona!» Como ya se ha inaugurado la <temporada» formal, os quiero hacer un bosquejo de la «fiesta nacional •. Antes de que dé principio el taurómaco festejo, salen los «alguacilillos. al .ruedo», a hacer el «despejo», y después se hace el vistoso .paseo de las cuadrillas., en el que lucen los .diestros» sus gallardas figurillas. Una vez que se ha cambiado .Ia seda por el percal., se abre el «portón de los sustos., y sale el fiero animal, al que, para contener, su incesante correteo, le dan los .peones« unos capotazos de «tanteo., y cuando ya eSlá cansada de dar carreras la res, sale el· espada para .pararle los piés.; operación que realiza, con proporciones armónicas, dándole llna larga serie de «navarras» y «verónicas., y por si el bruto no ve, deslumbrado por el Sol, el espada, compasivo, le intercala algún darol». lO FlESIR IDCllllBl ALM "RO 26 ABRIL DE 1924 " / Manuel CAMACaQ B2NBYTBZ. 10 iguala... J:n as tes d. amor, de.lara- ba Venette, <los hombres no pen más ql1e nifios compandos con la m1ij8r; para estos tornees, las ;'Dujerestienen la ima- ginación más vivi y por lo general dis- ponen de más d. ocio en que dedi- carse a las preq:::uJlllaciones del amor.• Exacta observui6n. El "arte de agratiar· y las minucias del. mor, son innatas en su alma. Por eso el.iastante de emitir su sufragio o de otra misien al- ta y solemnp, nl!. podríamos asegurar nosotros que la del acto ciuda- dano pesase más su magín que el ade- " mán presuntaoso alisarse los adalares encrf'spados o la1coqueterfa zozoerante de no perder el ribJo de su cautivadora alacridad... ¿No "I,reciais aquí la nota có- mica, ·sangrientsmente· fdvola y cástica ...? Lo p'rentorio, en concisión de hechos, fS señalar los cauces donde haya de circular la linfa D'teva para la 'vigoriZ'l- ción intelectiva d. f la mujer, y ya adies- trada en la gimoll"iia del firme raciocinio I y las ideas que el mundo alientan, cabría discutir el benefbo y la ventaja' de las actuaciones femeninas en la vida pú- blica... partes que a la vista humana cubrió la honestidad, sólo la discreta consideración puede encarecerlas y no comparariRs·, ¡yatiene voto la mujer.. ! *** N. hay peor familia que aquella en la que manda la mujer.-SAN AGUSTIN. Las promesas de la mujer deben escribirse en el agua o en el aire.-HIPÓCRATES. La fué en tudo tiempo patrimonio de las mu- jeres.-PROPERCIO. , Fragilidad; ¡tu nombre es lile mujlr.. .l.-SHAKESPEARE. DE LA REFORMA ELECTORAL *** Dir.cior: KANT11L CAKACHO BmrEY9Z La trllgicomedia del voto femenino paradoja, ironía... La mujer, en España, no es dueña de sí mis- ma; es algo a la merced del capricho aje- no; es una linda ficción encanüdon; es un falso valor mediatiz Ido en todas h s esferas de su cotidiana actvidarl; es, des dichadamente, un precioso fdiche inspi rador de galanteos fáciles, de vana ver- borrea donjuanesca, de deslumbrantes de rutinas domésticas y lán- guidas; es una prisionera del hogar, del padre, del marido, de los hijos; es la vf.c- *** tima consuetudinaria del egoismo y la A Ja mujer deben brindarse nuevas ambición sin li.mites por p ute de todos orientaciones de vida, noJiPdamentadas los que la rodean y la ·ad'uiran·. en la trag'cómica prodigaHdad cívica de Será inútil, completamente inúti', cuan- erigirlas en "conc.!j"las", en "diputadas· to se haga en favor m joramiento de o" gob sino en el sentido- la mujer, mientras ésta no sea dueñ 1, en como p imer jaló;O¡ en la enno- su vida privada, de sí mism ; mientras no blecer su persoue:idad, de afiánzarla pa. pueda equipararse en culturll, en sensibi. ra el esfLlerzo deJa lucha por la vid ... ; de lidad y en ,eces de e8píritu, a la otorgarle otros que hoy no tie- mujer de otras mientras de- Uf'; de roturar S.l inteligencia como se pendan de la del medio·, y rotura un páramo inf 1cundo; de destruir mientras sus cualidades retentivas supe- su bochornosa capitis diminutio; de libe- ren a sus condiciones creadoras. La na- rarla del Derecho romano, de ofrecerle turaleza de la mujer culmina 1 n un fX- "una sensación jU'ridica profunda basa- tremo máximo: el imtinto maternal. "Una mentada en el respeto social y en el Es la mujer del mundo lo más bueno, mujer sin in!>tinto maternal t s como un apoyo desprendid .; de inculcarle a todos es la mujer del mundo lo más mal.; Hasta que uno se decide, sacerdote sin creencias". U L1 ejemplo de hondameOle la idea de que-empleando su dicha suele ser y su regalo, después de ímprobos trabajos, Goyau nos bastará acerca de ellto: las la frase de un nltable escritor contem- ¡su pena suele ser y su veneno...1 . Y «pone una pica en flandes,' madres de Bacón y de Goethe, ambas poráneo,- <en tafia población bien edu- (vulgo, los Países Bajos), Abstrayéndonos de una posible reali- muy notables, no hubiesen podido, sin cada!a muj"r que,vásola porla callé, va ponerla, recibe, dad contradictoria, C()B1place impo- embargo, escribir el "Novum Organum" con los fueros rtina>. En la calle, una tremenda cafda, nernus creeaeilt .• ....__.... t-----..................... .,- ...... ..... ,it buenas... Muy 'buenas, si, muy resigna- ra debilitado la potencia generatriz en o del taller, la cerca, acomete o injuria, de la fiera acometida, das, muy virtuJsas, may dóciles; aCaso virtud de un gasto intelectual exagerado, cobardemente, rufianescamente, la gru- que el «piquero», en previsión demasiado buenas, demasiado resigna- no hubieran podido tener por hijos a sería vestida de blúsa, de americana o de de cualquier riesgo inminente, das, demasiado virtuosas, demasiado dó- Bacón ni a Goethe. Esta, y solo esta, es levita. Ved cuál ha de ser el primer paso: lleva una «mona" de hierro ciles... Y por todo esto, sabemos q1'le no para muchos la misión de la mujer, sin el respeto a las mujeres, mediante enér- y otra « mona" de aguardiente. ha de costaros gran esfuerzo el indultar- que deba debilitarse pór el ob;tinado gicos castigos. Sin este respeto, sin esta nos, en el supuesto de que al finar este prejuicio de situarse en un plano jurídico, lealtad personal, el ejercicio del derecho articulo hayais creído ver algo maltrata- político y social, igual al hombre, No es electoral, como el de cualesquiera otro, do ese <geniecillodaeño del mundo> que compartible para nosotros este crited:> de rendirá siempre frutos negativos ... Blienta en vuestra alma, y que, por andar limitaciones. ¿Qué la mayoría de los hombres-se ••• demasiado afanoso a caza de mariposas, nos seguramente-tampoco en- se ha quedado dormido, en pleno día, el Inicia su camino la mujer española en . cuéntranse capacitados para dillfrular ese h1 •. las púbUcas .ontiendas... Y colocada ante d h?'D d 1 ·dé· o gazao... ere e o... I e acuer o por 1 ntlea las urnas ¿cómo va a ese derecho, razón el voto mascu'in0 no hl& pasado de esa augusta función de ciud!\d"nía exqui- ser I1na tragicomedia semejante a la que sita ...? La flor de su ctrebro, gracil como se V<i a inIciar ahora con a las una margadta de los sinuGls0s atajos cam- mujeres, de las que no por esto preten- pesinos, no entraña el jugo neQesario pira llamas hfirmar nosotros que no sean dig- los problemas tra.nscendentes; carece de nas de f:sLÍma, bajo otro orden de argu- preparación, de reciedumbre iL tensa, de mentos, en el <stvero> acto dd exteriolÍ- cultivo... El sufragio, en sus mano " será Zólr su voluntad-su alada voluntad-ba- como un armapeligrasa en las tiernas jo lQS pócticos de los comicios ... En pugna manos de un infante.., Comprendemos con tal conjetura, muy distante de nue,,- que la moderna sociología les impone tro ánimo, bien podemos proc1clrnar ante avanzar pero el aV<lnce los <afortunados> que obtengan el ñ"agio debe praetlcarse con las más sólidas ga- cómico voto femenino, los rt;;velentes relndas de éxit". De otro modo, con una VdfllOS que ofrendó Von Quijote a aque- ausencia casi total de base, de fllndamen- Has dODceHas, "traíd<ls y !levad.u,", que to y dd capacidad, no puede contar con le desarmarOD, en la venta, de sus precia- un arraigo fi' md la creación de novísimos das e iumortales armaduras: derecho:, que siendo iustol en el fondo, N unca fuera c<iballero resultan extemporáneos en all crítica eon· d . de damas tan bien sel vido... cesión por falta a hOllzontes adecuados donde germinar abiertamente... ¿No veis Contra la mujer se han fulminado ho- aquí la mueca trágica para el triunfo· nibles anatem/lS, iuclementes dktt;;rios, .. , consciente y /Inhalado del engrandeci- Vtsde San Cü:.óstomo a miento de EspañlJ?.. pasando por una inmensa munüud de fi· L':\ refi.Jada del espíritu fe· lósofos, de literatos y de hi-itllon menino-finura de olfato, iBstinto previo blanco en eUa todo ll:éuero de en sor, discernimiento astuto, destreza ma- las citas eXhumadas a la cabeZ4 de tllite ilosa-no es suficiente para garantizar el anículo hay de ello una prueba harto 'buen de un dert;;cho... No somos palmaria... !'iOlSotU,)S, a pesar de todo, no nOllotrOs, empero, de loa que opinamos queremo& decir que las muj'jres bean que la muier ha de habilttarlle úuicamen- "monomaniacas, aOsorvenles, te para la espllma del cocido, pa- y superfiCiales", como álguien, aCéll:íO io- ra restaurar los calceünts averiados, pa- l\latamente, latí ha dt;;nowiuado, .. ra tornar alba la r ... pa maculaea, o para ¡Tal veZ alilo ... l Q ... izá de bido, a la mirilla de la persiana o que exilStiendo \ln l.onSlderable t:xcello del visillo -primores de barala ejecII- de pob.acioo femeniua, la competencia, ción... Muy por el conlrario, sostenemos bajo todai sus caracterí:)ucas, inl1úcelas '\le el sexo bello ha de osttlntar prono- a guardar en bUS alllüudeli Y opIniones gauvai; merece reivindicarae a grandel muy escala firmez:l... Y esta cooaición, pasos, pero por su orden., en suón de como electoras, elt un tanto sensible, •• circunbtaBciaa, Entretanto, ., a\lOque DO Exceptuanclo, pues, tales cdetahell), na- tuvie.en otros, nadie le negaría IU dere- cla... .KUas.....eapl,éndidas femeoinas cho IBás honcl() y más lelidmo; el de en búcaro afiligranado a" 80n amar "Ier amacla. como sllpremaa dei- habUt;;s, inteligentes, adaptl:lb.elS, sumi.s/ls, dades del enl_e1'1' 1 como diosa. indiacu- halaiadoras, I1pLas, •• tibies del amor qU4t-a semeianza de la .. maerte-DO reconoce cateloda. ni lina.. ¡". PQr,ue a influjo .10 domlua 'Y Verbo, esencia, fIIzón y ellcanto de la vida, es la mujer. No' podría cellcebirse el mundo sin el hechizo de la mujer, sin la gracia de su rl¡¡a ni el ritmo de su voz, sin la luz ardientes de 8US ojos, ni la dul- ce amenSH de sus redes... Vírgenes blan- cas de ondulosos cabellos, solteritas nos- tálgicas que vivis al borde de la vida sin penetrar en sus emociones más profun- das, sensitivas muiiecas de bazar lujoso, matronas opulentas y magníficas, carnes plegada'il en ca pulió que el viento toda- vía no agitó, almas de menestralas humil- dísimas esclavas de un trabaio agotador, Dianas de cuerpos arrogantes, recatadas doncellas que parbis fdvolamente a toda hora, ángeles humanos sin alas en el co- razón, bellas rosas de perfume oculto, pa- lomas melancólicas bajo un fanal ic¡que- brantable de ansiedades; nosotros, que os amamos como a las estrellas, c;:omo a las flores de invdrnadero, como a los cana- rios enjaulados, como a las ondas lejanas de las aguas, os pedimos con verdadero arrobami8nto, con verdadera unción, que tengais la lealtad de perdonarnos si en algún'desliz incurriese nuestra pluma, ya ,ue no (S posib!e, hablando de vosotras, observar un tratamiento rectilíneo... Nues- tro Lope de Vega lo expresó magistral- mente: El reciente Decreto estableciendo el ntlbV.J régimen de las mauicipalidades es- pañolas, otorga a la mujer el derecho electoral; todas las:mujeres, por virtud de - la nueva reforma aluaida y de una di!>po- sición complementaria, podrán ser electo- ras y elegidas; basta que sean mayores de edad y no estén sometidas, lt' galmen- te, 'a la compafiía mabcu.ina, al sagrado lazo indisoluble, que regala en nueltro de- recho pObitivo preceptos tan anacrónicos y vacuos como elte: El marido debe <proteger> al la mujer, y éita "obedecer· al marido·. Protección oprobioBa, obe· diencia humillante... L::\ de la mujer casada, el estltdo jurídico de la mujer casada, dentro de nuestras leyes i actuales, su eficada civil, su libertad, su indfpendencia, hasta su delicadeu y su decoro, aparecen sensiblemente mutila· dosa .. ; Má.s no es eUe hoy nuestro objeti- vo, y b{ el de poner algunos comentarios al público ·carácter" de que las inviste el rt:ciente Estatuto Municipal, acerca del que bmpliaremos en 10 sucesiv.J nUdstro 'análisis para pottmtiur el error, vulgar- .. mente propalado, de la fl4mante fiodaU- en que la obra del St. Calvo Sotélo se ha fl1ndido... Lo cier- to ahora, para la debida fijación dtll móvil que nos guía en este instante, es que ya tiene voto la muj8r, con lAS ex- ct'pclones legales consiguientes; la muier, calificada por Milton como cel defecto más bello de toda la Niituraleza>; la mu- jer, de la que Loire nos dice que 8S ·una aanta en la 19l1 aia, un án.el en la c:al1e, un diablo en la caaa, cotorra en la puerta y una cabra en el jardín·; la mil- idr enaltecida por Cervantea al poner on boca del Quijote la descrJpciónde Du!ci- nea, asegluándonos que ·su. eaDellos son oro, su frente campoa eliseos, SUI cejas arcos del cielo, sus ojos 10le8, suameiillal rosas, sus labios coralea, perla. aUI dien- tes, cuello, diármol su pecho, IUI I;I D 9', ,\1 gltA9\UI 11 .' o. :. : . . Originales pertenecientes a D. José Luis López Bermejo. Digitalización: Centro de Estudios de Castilla-La Mancha (UCLM)

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:Redactor Jefe: DAVID !AYO

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saca el «señor Presidente ....Sale el toro del toril...¡Y así sucesivamente... !

Practicando el «volapié.en esta forma tan -pura.,el estoque, en todo lo alto,metehasta la empuñadura;pero si el toro no -dobla.tendrá que «descabellar.,para lo que, previamente,tiene que hacerle «humillar.,porque todo el mundo sabe,que estando la res «tapada,.intentar el -descabello. .es cosa descabellada.

Al «acostarse. el «bure!.se aproxima el «puntillero.,que al instante lo «remata~

de un "puntillazo» certero;y d ')jJué, de los torme'ntosy «la,fiP'" qu~ ha pasadoen el "rcdonde!», se ve,el pobre «bicho>, arrastradt; ...

Con la «escopeta. a la cara,piensa el .diestro. la manerade «entrar por uvas., sin quele dé un disgusto la fiera,hasta que al fin se decide;': ~,!"

a entrar «corto y por derecho.,«volcarse. sobre el «morrilllo.,dando a las astas el pecho, "y .vaciando. con la izquierdadespacito y sin .azares.,salir oIimpio» de la «súerte» .,'""a:~

rozando los -costillares.,

'Encuanto .cuadra. el ~butÓ.

n;ina inquietante ansiedad,lo que prueba que ha llegado.Ia hora de la verdad».

COLABORACION: AleJanho AlGaI­de, Carloe Calalayud, An,el Dotor,PranclBQO Tolaada,Luclano 98 C.a,Ramón earando, .MIca.1 SánQ~ Mi­lallón, Pranci8ol,) Morayta, ArtaroGómea Lobo, Ham6n Solano, ~,••elTom4, Jo.é Lópea BarberáD., AatonloAluado Marlnoni, Ramón Otd64uBoixer, JOlé Ramón QIle.ada, ClaroCaeUo, Manuel Gómea M.oarólI, Jo••MaI1úlea Rm, M.ergodc, PiatO'7 Aa.toDio AlargÓJl C&p1l1a.

RBDACCION: Manuel Cama~hoBe­neytez,.Director; David, Rayo., Redac­tor Jefe; Je8ús Gómez R041r'l,uez; re­dactor y Admini8trad,or; Tomás .Al­modóvar, Rufo Pernánde,¡, AlbertoLópez, RogeUo Hernán4eade la TorreGabriel Vicente Ruiz MUdoa, Alfred,oCalvo, Luia ReUmpio, Ramón CaiUaa­r~, J oaé Almod,ovar Mú¡tca, Alejan­411:'0 Alealae Redondo y Ramón C.­ba"as.

LA TIBRRA HIDALGA Be halla ID­telrada por 108 ei¡mente.. rcWtore.y Qolaborad,orel:

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expreso de Andalucía, figura, coínó~abennuestros lectores, Honorio Sánchez Malina,muy conocido en esta población" desd~ anti~

g~o, P?r correr a cargo de su padre.l~ ~9mi­

nIstracl6n de una finca deno min~da ~~ll,~la­

meda. perteneciente a los Marqu.~s~s de laConcepción, hijos de esta ciudad. La noticiade que Honorio Sánchez era coautor del de­lito que conmueve hoy a España entera, hacausado aquí, y en toda la Mancha' ~{tal­mente, una profunda sensación desOt~sa.

Excusado es decir que nosotros podíamosdedicar a este asunto una (de~lJ.a_ docu­mentada y amplia información; petlJ"'no en­tra en nuestra «manera., en nuestro «modo»de apreciar las cosas, el someter a la' veri.ci­dad del público-público apasionado;y,jen­siblero de tendido de plaza de toros-apre­ciaciones y conceptos hijos de un incomliCien­te nerviosismo esclavizado a las morb9~tda­des neurasténicas de la «galería•. ÓFi~~ ydesalmada. . .

Nos repugna el folletín. Nos asquea 'el;~ba­lago a la satisfacción de malsanas curiosida­des. Tenemos del delito, como de ,cjisi rodaslas cosas, unas ideas «especiales. que no sa­crificamos ~ fáciles r~s~nancias perio~tif.as.

En el numeroproxlmo, acaso podatbosmostrarnos más explícitos. ..,

PAJARITAS DE PAPEL·

Si el toro pega de firme,sin tibiezas ni desmayos,el público enloquecidopide: «¡Caballos! ¡Caballos!.;

dando con el sanguinariofuror de su paroxism),un lamentable espectáculode incultura y salvajismo...

Háse cambiado de «tercio»,y decidido y ufano«surge. un torero, con dos«banderillas. en la mano;

se va hacia el toro, ligero,y hurtando sus cabezadas,enhiestas, las «banderillas.deja en el lomo clavadas,'Y al sentir los arponcillosclavados en lé..s costillas,de fijo le sienta al toro«¡como un par de banderillas!.,porque sale de «estampía.,dando vueltas y saltitos,y muge, como diciendo:.¡Cuán gritan esos malditos!»

L.legó el «tercio« postrim~r9,

y con palabra elocuente .y cortés, el «Maestro espá.brinda al «Señor Presidente~.

A continuación, armadodel 'estoque. y la «muleta.,paso a paso, de la resllega hasta la misma «jeta••

Si hace COn el «trapo rojo.una apretada «faena.,al momento, una ovaciónensorde\:edora suena,a la que el «pópulo bárbaro.mezclará ¡Olésl a millares,si déja que los «pitones.le rocen los alamares;y si hay «hule., el entusiasmoaumentará de medida, 'porque hay quien no se diviertemas que si ve una t<coj"ida».

Si lo «pasa. distanciadooirá pitoa abundantes,.re~uerdos· a su familia¡ cepítetoli mal sonantes-,

En cambio, el pobre caballo-torpe, desmedrado y viejo­esta amena diversiónla paga con el pellejo,yen cuanto muere, una manopiadosa pone ligerasobre su hípico cadáverun «sudario» de harpillera.

. Ya está en «suerte. el .noble astado»y con gana de pelea;mas la «grey picaderil»,medrosa remolonea,y al contemplar su actituddesaprensiva y tumbona,les gritan, desde el «tendido.:«¡Al toro, que es una mona!»

Como ya se ha inauguradola <temporada» formal,os quiero hacer un bosquejode la «fiesta nacional •.

Antes de que dé principioel taurómaco festejo,salen los «alguacilillos.al .ruedo», a hacer el «despejo»,y después se hace el vistoso.paseo de las cuadrillas.,en el que lucen los .diestros»sus gallardas figurillas.

Una vez que se ha cambiado.Ia seda por el percal.,se abre el «portón de los sustos.,y sale el fiero animal,al que, para contener,su incesante correteo,le dan los .peones« unoscapotazos de «tanteo.,y cuando ya eSlá cansadade dar carreras la res,entonce~ sale el· espadapara .pararle los piés.;operación que realiza,con proporciones armónicas,dándole llna larga seriede «navarras» y «verónicas.,y por si el bruto no ve,deslumbrado por el Sol,el espada, compasivo,le intercala algún darol».

lO FlESIR IDCllllBl

ALM "RO 26 ABRIL DE 1924

" /

Manuel CAMACaQ B2NBYTBZ.

10 iguala... J:n as tes d. amor, de.lara­ba Venette, <los hombres no pen másql1e nifios compandos con la m1ij8r; paraestos tornees, las ;'Dujerestienen la ima­ginación más vivi y por lo general dis­ponen de más rat~ d. ocio en que dedi­carse a las preq:::uJlllaciones del amor.•Exacta observui6n. El "arte de agratiar·y las minucias del.mor, son innatas ensu alma. Por eso ~ el.iastante de emitirsu sufragio o de ~"acticar otra misien al­ta y solemnp, nl!. podríamos asegurarnosotros que la s~iedad del acto ciuda­dano pesase más ~n su magín que el ade-

"mán presuntaoso ~Je alisarse los adalaresencrf'spados o la1coqueterfa zozoerantede no perder el ribJo de su cautivadoraalacridad... ¿No "I,reciais aquí la nota có­mica, ·sangrientsmente· fdvola y sar~

cástica...?Lo p'rentorio, en concisión de hechos,

fS señalar los cauces p~r donde haya decircular la linfa D'teva para la 'vigoriZ'l­ción intelectiva d.f la mujer, y ya adies­trada en la gimoll"iia del firme raciocinio

Iy las ideas que elmundo alientan, cabríadiscutir el benefbo y la ventaja' de lasactuaciones femeninas en la vida pú­blica...

partes que a la vista humana cubrió lahonestidad, sólo la discreta consideraciónpuede encarecerlas y no comparariRs·,

¡yatiene voto la mujer.. ! •

***

N. hay peor familia que aquella en la que manda lamujer.-SAN AGUSTIN.

Las promesas de la mujer deben escribirse en el aguao en el aire.-HIPÓCRATES.

La li~ereza fué en tudo tiempo patrimonio de las mu-jeres.-PROPERCIO. ,

Fragilidad; ¡tu nombre es lile mujlr...l.-SHAKESPEARE.

DE LA REFORMA ELECTORAL

***

Dir.cior: KANT11L CAKACHO BmrEY9Z

La trllgicomedia del voto femenino

Contr8s~ntido, paradoja, ironía... Lamujer, en España, no es dueña de sí mis­ma; es algo a la merced del capricho aje­no; es una linda ficción encanüdon; esun falso valor mediatiz Ido en todas h sesferas de su cotidiana actvidarl; es, desdichadamente, un precioso fdiche inspirador de galanteos fáciles, de vana ver­borrea donjuanesca, de deslumbrantespleit~a~, de rutinas domésticas y lán­guidas; es una prisionera del hogar, delpadre, del marido, de los hijos; es la vf.c- ***tima consuetudinaria del egoismo y la A Ja mujer deben brindarse nuevasambición sin li.mites por p ute de todos orientaciones de vida, noJiPdamentadaslos que la rodean y la ·ad'uiran·. en la trag'cómica prodigaHdad cívica de

Será inútil, completamente inúti', cuan- erigirlas en "conc.!j"las", en "diputadas·to se haga en favor d~1 m joramiento de o"gob ~rnadori:ls", sino en el sentido­la mujer, mientras ésta no sea dueñ 1, en como p imer jaló;O¡ en la ruta~de enno­su vida privada, de sí mism ; mientras no blecer su persoue:idad, de afiánzarla pa.pueda equipararse en culturll, en sensibi. ra el esfLlerzo deJa lucha por la vid ... ; delidad y en exqui~i ,eces de e8píritu, a la otorgarle otros d~\rechos que hoy no tie­mujer de otras nacione~; mientras de- Uf'; de roturar S.l inteligencia como sependan de la ·influenci~ del medio·, y rotura un páramo inf 1cundo; de destruirmientras sus cualidades retentivas supe- su bochornosa capitis diminutio; de libe­ren a sus condiciones creadoras. La na- rarla del Derecho romano, de ofrecerleturaleza de la mujer culmina 1 n un fX- "una sensación jU'ridica profunda basa­tremo máximo: el imtinto maternal. "Una mentada en el respeto social y en el

Es la mujer del mundo lo más bueno, mujer sin in!>tinto maternal t s como un apoyo desprendid .; de inculcarle a todoses la mujer del mundo lo más mal.; Hasta que uno se decide,

sacerdote sin creencias". U L1 ejemplo de hondameOle la idea de que-empleandosu dicha suele ser y su regalo, después de ímprobos trabajos,

Goyau nos bastará acerca de ellto: las la frase de un nltable escritor contem-¡su pena suele ser y su veneno...1 . Y«pone una pica en flandes,'

madres de Bacón y de Goethe, ambas poráneo,- <en tafia población bien edu­ (vulgo, los Países Bajos),Abstrayéndonos de una posible reali- muy notables, no hubiesen podido, sin cada!a muj"r que,vásola porla callé, va yal.Wqu~,alponerla, recibe, ~.

dad contradictoria, ~ C()B1place impo- embargo, escribir el "Novum Organum" con los fueros de,~.Tla rtina>. En la calle, una tremenda cafda,nernus • creeaeilt~~e .•~~....__....;"'...4""'ht-"'ti'1R'11I'1'1"""""ft1l¡m~Mrñn'e;:Ma;;;s:0-7se~~u~~l~e:-_+'m'I"'Tll'-ml't1"'lrnr~'"itL;c·l!tttmrmr;ltnnrttl!tlr'!l":t--c~"'m'emmnme~rm:eñm~e'------t-----......................,-...........,itbuenas... Muy 'buenas, si, muy resigna- ra debilitado la potencia generatriz en o del taller, la cerca, acomete o injuria, de la fiera acometida,das, muy virtuJsas, may dóciles; aCaso virtud de un gasto intelectual exagerado, cobardemente, rufianescamente, la gru- que el «piquero», en previsióndemasiado buenas, demasiado resigna- no hubieran podido tener por hijos a sería vestida de blúsa, de americana o de de cualquier riesgo inminente,das, demasiado virtuosas, demasiado dó- Bacón ni a Goethe. Esta, y solo esta, es levita. Ved cuál ha de ser el primer paso: lleva una «mona" de hierrociles... Y por todo esto, sabemos q1'le no para muchos la misión de la mujer, sin el respeto a las mujeres, mediante enér- y otra « mona" de aguardiente.ha de costaros gran esfuerzo el indultar- que deba debilitarse pór el ob;tinado gicos castigos. Sin este respeto, sin estanos, en el supuesto de que al finar este prejuicio de situarse en un plano jurídico, lealtad personal, el ejercicio del derechoarticulo hayais creído ver algo maltrata- político y social, igual al hombre, No es electoral, como el de cualesquiera otro,do ese <geniecillodaeño del mundo> que compartible para nosotros este crited:> de rendirá siempre frutos negativos...Blienta en vuestra alma, y que, por andar limitaciones. ¿Qué la mayoría de los hombres-se

•••demasiado afanoso a caza de mariposas, nos ar~uirá seguramente-tampoco en-se ha quedado dormido, en pleno día, el Inicia su camino la mujer española en . cuéntranse capacitados para dillfrular ese

h 1 •. las púbUcas .ontiendas... Y colocada ante d h?'D d 1 Y· ·dé·o gazao... eree o... I e acuer o por 1 ntlealas urnas ¿cómo va a ej~rcitar ese derecho, razón el voto mascu'in0 no hl& pasado deesa augusta función de ciud!\d"nía exqui- ser I1na tragicomedia semejante a la quesita...? La flor de su ctrebro, gracil como se V<i a inIciar ahora con H~lación a lasuna margadta de los sinuGls0s atajos cam- mujeres, de las que no por esto preten­pesinos, no entraña el jugo neQesario pira llamas hfirmar nosotros que no sean dig­los problemas tra.nscendentes; carece de nas de f:sLÍma, bajo otro orden de argu­preparación, de reciedumbre iL tensa, de mentos, en el <stvero> acto dd exteriolÍ­cultivo... El sufragio, en sus mano " será Zólr su voluntad-su alada voluntad-ba­como un armapeligrasa en las tiernas jo lQS pócticos de los comicios... En pugnamanos de un infante.., Comprendemos con tal conjetura, muy distante de nue,,­que la moderna sociología les impone tro ánimo, bien podemos proc1clrnar anteavanzar re~uelt/lmente; pero el aV<lnce los <afortunados> que obtengan el ñ"agiodebe praetlcarse con las más sólidas ga- cómico voto femenino, los rt;;velentesrelndas de éxit". De otro modo, con una VdfllOS que ofrendó Von Quijote a aque­ausencia casi total de base, de fllndamen- Has dODceHas, "traíd<ls y !levad.u,", queto y dd capacidad, no puede contar con le desarmarOD, en la venta, de sus precia­un arraigo fi' md la creación de novísimos das e iumortales armaduras:derecho:, que siendo iustol en el fondo,

N unca fuera c<iballeroresultan extemporáneos en all crítica eon·d . de damas tan bien sel vido...cesión por falta a hOllzontes adecuados

donde germinar abiertamente... ¿No veis Contra la mujer se han fulminado ho­aquí la mueca trágica para el triunfo· nibles anatem/lS, iuclementes dktt;;rios,..

, consciente y /Inhalado del engrandeci- Vtsde San Cü:.óstomo a ~(;hopenh<iuer,

miento de EspañlJ?.. pasando por una inmensa munüud de fi·L':\ s,g4cid~d refi.Jada del espíritu fe· lósofos, de literatos y de po~tas, hi-itllon

menino-finura de olfato, iBstinto previo blanco en eUa todo ll:éuero de dardo~; ensor, discernimiento astuto, destreza ma- las citas eXhumadas a la cabeZ4 de tlliteilosa-no es suficiente para garantizar el anículo hay de ello una prueba harto'buen llao~ de un dert;;cho... No somos palmaria... !'iOlSotU,)S, a pesar de todo, nonOllotrOs, empero, de loa que opinamos queremo& decir que las muj'jres beanque la muier ha de habilttarlle úuicamen- "monomaniacas, aOsorvenles, luJudo~as

te para tX~raer la espllma del cocido, pa- y superfiCiales", como álguien, aCéll:íO io­ra restaurar los calceünts averiados, pa- l\latamente, latí ha dt;;nowiuado,..ra tornar alba la r ...pa maculaea, o para ¡Tal veZ alilo !ig~rcls...l Q ... izá de bido, aconstr.ir~traa la mirilla de la persiana o que exilStiendo \ln l.onSlderable t:xcellodel visillo -primores de barala ejecII- de pob.acioo femeniua, la competencia,ción... Muy por el conlrario, sostenemos bajo todai sus caracterí:)ucas, inl1úcelas'\le el sexo bello ha de osttlntar prono- a guardar en bUS alllüudeli Y opInionesgauvai; merece reivindicarae a grandel muy escala firmez:l... Y esta cooaición,pasos, pero por su orden., en suón de como electoras, elt un tanto sensible,••circunbtaBciaa, Entretanto, ., a\lOque DO Exceptuanclo, pues, tales cdetahell), na­tuvie.en otros, nadie le negaría IU dere- cla... .KUas.....eapl,éndidas fl~res femeoinascho IBás honcl() y más lelidmo; el de en búcaro afiligranado a" ~évreli- 80namar "Ier amacla. como sllpremaa dei- habUt;;s, inteligentes, adaptl:lb.elS, sumi.s/ls,dades del enl_e1'1'1 como diosa. indiacu- halaiadoras, I1pLas,••tibies del amor qU4t-a semeianza de la .PeH~,..maerte-DO reconoce cateloda. ni lina..

¡". PQr,ue ~odo a ~u influjo .10 domlua 'Y

Verbo, esencia, fIIzón y ellcanto de lavida, es la mujer. No' podría cellcebirseel mundo sin el hechizo de la mujer, sinla gracia de su rl¡¡a ni el ritmo de su voz,sin la luz ardientes de 8US ojos, ni la dul­ce amenSH de sus redes... Vírgenes blan­cas de ondulosos cabellos, solteritas nos­tálgicas que vivis al borde de la vida sinpenetrar en sus emociones más profun­das, sensitivas muiiecas de bazar lujoso,matronas opulentas y magníficas, carnesplegada'il en capulió que el viento toda­vía no agitó, almas de menestralas humil­dísimas esclavas de un trabaio agotador,Dianas de cuerpos arrogantes, recatadasdoncellas que parbis fdvolamente a todahora, ángeles humanos sin alas en el co­razón, bellas rosas de perfume oculto, pa­lomas melancólicas bajo un fanal ic¡que­brantable de ansiedades; nosotros, que osamamos como a las estrellas, c;:omo a lasflores de invdrnadero, como a los cana­rios enjaulados, como a las ondas lejanasde las aguas, os pedimos con verdaderoarrobami8nto, con verdadera unción, quetengais la lealtad de perdonarnos si enalgún'desliz incurriese nuestra pluma, ya,ue no (S posib!e, hablando de vosotras,observar un tratamiento rectilíneo... Nues­tro Lope de Vega lo expresó magistral­mente:

El reciente Decreto estableciendo elntlbV.J régimen de las mauicipalidades es­pañolas, otorga a la mujer el derechoelectoral; todas las:mujeres, por virtud de

- la nueva reforma aluaida y de una di!>po­sición complementaria, podrán ser electo­ras y elegidas; basta que sean mayoresde edad y no estén sometidas, lt' galmen­te, 'a la compafiía mabcu.ina, al sagradolazo indisoluble, que regala en nueltro de­recho pObitivo preceptos tan anacrónicosy vacuos como elte: •El marido debe<proteger> al la mujer, y éita "obedecer·al marido·. Protección oprobioBa, obe·diencia humillante... L::\ per~onalidad dela mujer casada, el estltdo jurídico de lamujer casada, dentro de nuestras leyes

iactuales, su eficada civil, su libertad, suindfpendencia, hasta su delicadeu y sudecoro, aparecen sensiblemente mutila·dosa..; Má.s no es eUe hoy nuestro objeti­vo, y b{ el de poner algunos comentariosal público ·carácter" de que las invisteel rt:ciente Estatuto Municipal, acerca delque bmpliaremos en 10 sucesiv.J nUdstro'análisis para pottmtiur el error, vulgar­

.. mente propalado, de la fl4mante fiodaU-d~,! "d~mocrática· en que la obra delSt. Calvo Sotélo se ha fl1ndido... Lo cier­to ahora, para la debida fijación dtllmóvil que nos guía en este instante, esque ya tiene voto la muj8r, con lAS ex­ct'pclones legales consiguientes; la muier,calificada por Milton como cel defectomás bello de toda la Niituraleza>; la mu­jer, de la que Loire nos dice que 8S ·unaaanta en la 19l1 aia, un án.el en la c:al1e,un diablo en la caaa, un~ cotorra en lapuerta y una cabra en el jardín·; la mil­idr enaltecida por Cervantea al poner onboca del Quijote la descrJpciónde Du!ci­nea, asegluándonos que ·su. eaDellos sonoro, su frente campoa eliseos, SUI cejasarcos del cielo, sus ojos 10le8, suameiillalrosas, sus labios coralea, perla. aUI dien­

tes, ~«b"8trO'Ucuello, diármol su pecho,

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Originales pertenecientes a D. José Luis López Bermejo. Digitalización: Centro de Estudios de Castilla-La Mancha (UCLM)

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26 AIJ,rl1te~ ~

C. R..I: Tlp, .EL PROGRf:SO"

Este número se publi­cacon la censura militar~

enffrmos.Nuestro buen am:go y reputado médico matlrí­

I~ño D. José Roales Nieto, ha tenida atacada,4.una fuerte bronquitis a una de sus hijas, .en easade los .abuelos. de la paciente Sres. de la 'Fu.é.­te (D. Aurelio). Con este motivo, pasaniui.osdías en esta población los padres de' la nUla, tll­ya mejoria celebramos.

-Se haya repuesta de la recaída op.rada en IU

enfermedad, la distinguida Srta. Elisa ParrasGil.

-Ha experimentado una franca mej.r~,.Ja

niña Concha Fisac, hija de nuestro .uen amll.,Registrador de este partido, D. Raimundo.

el lllego de las •patás >

ña PiJar de la Rubia de Comlis, tío del .ovio tiprimero y hermana politica I~ segunda',LoI padri­nos filbseqularon espléndidamente a loa co.vida­dos en la casa del Jtovio. ¡Felicida.reJ, plilles...!

- También contraj. matrimoni., el día 23,nuestra estimado amigo el industrial de ésta d.nRafael AguiJar, con la simpática Srta. Benita Le­zano, siendo apadrinad('\slos contrayentes por tamadre y hermano del n!avio D.a Asc.nsió. Nietoy D. Manuel Aguilar. Los novios, a los 1Illle le.deseamos una ventura eterna, han salido paraMadrid y otras poblaciones. ¡Bien por la pare­jita...!

Lf)(!AL

REPORTAJE

enlacesEsta vez ha correspondido caer en el terri­

ble lazo, a un empedernido solterófilo, al acredi·tado industrial y amigo D. Francisco Condés Se­rrano que en la Parroquia de S. Bartolomé, COA­trajo nupcias COA la Srta. Paquita Tejero el día 20del corrilmte.

Apadrinaron la unión D. Emilio Serrano y do·

•de todosvoz

y Compañra

¡que los .hermanos. de San Jorgese .desenojan. cOn mirarla...!

De un gran .artísta que no suena»este es el cuadro soberano,..¡Gloria al «c'oloso. del pincel»!¡Honor a Sánchez (Don Adriano)!

Bl 8ncesodel díaEn todas partes, lectores,

se discute con excesoel robo y asesinatoperpetrado en el expreso.

Por tal causa el empltadono hace nada en la oficina,y las mujeres apenasse ocupan de la cocina,dando frecuentes motivoscon estas anomalíasa que se .suste. el cocidoO se 'peguen. las judias.

Si continúa má., tiempoocurriendo estos dislates,¡vamos a terminar toolosen una casa de .orates ....!

ARLEQUIN.

LA TIERRA HIDALGA

La

aunque el .bombeado» esta vez seareporter gráfico de «casa»,

el que, cumpliendo los mandatos'de la ruidosa .grey jorgista»,ha demostrado poseerdotes espléndidos de artista,

pintando, para la banderade esta importante cofradía,la «vera efigie. de San Jorge,con .rafaélica. maestda...

Va cabalgando en un caballodigno del nunmen velazqueño,lo que demustra que el artistasalió triunfante de su empeño.

Sobre su casco relucientevemos ergirse, con sorpresa,un hermosísímo plumero,de un delicioso color fresa...

Es un prodigio la figura,del Santo mártir y guerrero,que con su enorme lanza .en ristre.mata al dragón taimado y fiero.

Tan acertada inspiracióntuvo el artifice al pintarla,

n

VltENTE ~UIZEXQUISITOS VINOS DE ::hl[ESA

COS:ElCHEEOS- EXPORTADORESTBLBPeNe,15. ALMAGRO

La .manfa> oratoria

Recordando de Basalloel abnegado valor,en el Gran Casino el lunes,sedió un «banquete. en su honor.

Resultó un acto de muchabrillantez, porque no en baldecon su peculiar .acierto>)0 organizó nuestro Alcalde.

el cual, como aperitivo,.soltó. un pequeño sermón,para del homenajeadohacer la presentación.

y mientras la perorataalcaldiloia atento,de seguro pensariael heróico ex sargento

que es mejor el inhumanocauliverio de Marruecos,¡que aquel .ameno- discursode tonos cursis y huecos. .1

Un artista que no suenaPara loar como merece

a un «compañero. de Muril1o,por excepción vamos a haciruso del «bombo. y del .platillo».

En su alabanza merecidano hemos querido poner tasa,

SOLACE~ PINTOR~SCO~

Bf\Gf\TELtJS

Número 38

alcad.\1z O eaDl'eló., y tstar.. repantin.gados •• el UDte luelo, 11.ail1.018 deltormigaa y asándose a 101 rayos del n,·bieu.do F ebe?

Lo cierto es q•• don Faustino y su fa- En esta sección, donde ptJdrá traer: el pilblico. . rt emos Gan saUdomilla 1. p,saron grandeM~nteen la man· IIIS múltiples y variadas impreslones,mse ar ~

. dí d t.J Id" b . s 'gual una que,'a que unos Para Madrid, Ruestr'ls buenos amigos O. Mar-Nada más dehcioso que un a El cam- sión de Flora, muriéndose todos de hamo ha c ase e rra aJo; I

D F i I'ó I último I verSBs, lo mismo un grito de pr9testa que IIn en- tín Múgica, D. José Almodóvar y D. Juan Josepo en familia. . aust 00 5a 1 e bre, de Md y ie ealor, al susurco de tsayo literario. Tres condiciones Ixigimos en ~s a Miguel.

domingo a disfrutarle con BU cara consor- agua cristalina que serpenteaba en bulli· indole de temas: corrección en la forma, rectitud -Para Toledo, D. José Luis Jorreto y D. Alber-te y sus adorados hijuelos. Lo~ que el ciosos arroYlo1elos, salpicando las flores y en el fondo y brevedad' en la exposición; media to y D. Julián Calero.buen hombre se divirtió es difícil descri- cubriéndolas de ·perlas· por el perfume CBlumna aproximadamente. -Para Valdelaguna, (Madrid) O.José Hemán-birlo: lo ensayaremos sin embargo. con que embalsamaban aquella deliciosa Se pr.pone asi LA TIf:RRA HIDALG\ mtJstrarse dez y señora.

1 'd ' d F t' acoiYedora para ttldos,amparad y oir la voz de -Para zaragoza, D. Pablo Milla..Desde e saba o empezo on aus lno a morada que hacían más amena los du!ci· ,"' B d' El pasado domingo, día 20, cele~rise en é8tatQd.s, ~n distinci.n de rategorias ni maJiees. -Para la Corte, D. Carmelo oron o y Joven

divertirse consultando con su barómetro, simos "gorjeos" de las ranas. esposa. un encuentro amistoso de balompié entre los pri-su termómetro, su hidrómetre, sus callos Después de la campestre y opípara co· -Para el mismo punto, D. Emilio Peñuela. meros equipos de la Deportiva Valpeiense 1Y la ]. aqueca de su mu]'er, para saber si al 1 f''': t·d' Para.1 "'" Alc·alde· -Para Sevilla, las encantadoras señoritas Lo- Deportiva Almagreña. Esta última se alíaea si.

mida, abandonase a /lmha a o ras. lver- senor su interior izquierda y notable jUlta~or J.rretodía siguiente haría buen día. Sus callos siones semi·aimnásticas. Mientras la roa· la y Pilar Pérez Huertas. . (l.) que no pudo J'ugar por causas J'ustifieadas.

• -Para Murcia, el joven estudiante D. Joaqulllanunciaban buen tiempo, la jaqueca de clre daba "la teta" al l1ene menor, q1l8 Llorca. La alineación de los nuestros fué:< QIIUezsu mujer vientos, yel barómetro lluvias. lloraba el ángel de Dios porque segura- En su reciente v¡ale a la culta y har· -Para Madrid, el jefe de esta estación tele- (A) _ Beneytez-Jorreto (E).- Chaió;: "Olleiie,El domingo apareció sin lluvias, sin vien- mente .0 le mudaban los pañalitos,' cuyo mosa capital alicantina, ¿no ha fijade usted gráfica D. José Relimpio Diaz, particular amigo Ruíz.-Rayo, Quilez (F.) Lastres, Delmas, Mlluel.to y sin buen tiempo, D. orque estaba cal- b' f h í b I fJi nuestro. Correspfilnde el saque a los almagreños que

aroIllátite y am artno per ..Ole ac a as· su atencien en o~ maga cos paseos, inician una arrancaca que pone en peligro. la por-moso y nublado. tante contraste con el de las flores, el pa· bellamente fxornaaos de gallardas y ~an lIe§ado teria forastera. Consecuencia de la m'agó¡hcaJa-

PCirfectamente, dijo don Fliustino, así pá Faustino ayadaba al mayorazgo en la genlilísimas palmeras, que al suave em- De Almodóvar, D. Luis Cañadas. bor de medios principalmente de Calero que e.táh· h á 1S 1 Al t d 1 1 l' . -De Ciudad Real, la Srta. Bernardina López. . b 1 té . .no nos ac IC affar e . o. as cua ro e diversión de hacer vo ar a cometa, a 01· pu]'e de la brisa mediterránea, ]uguetoaa jugando cuanto qUIere y 5a e, e es neo se-1ft-

-De Alicante, D. José Beneytez, señora y t d·"E relala madrugada ya estaba ea dann nues- ña mayor estaba c02'iendo cardos para cual irieada maripo,'a, columpia COI1 infi- terna pocas veces en nues ros OmInIOS, n. _bellas hiJ'as Lola y Pilar. ó t d .. 'e e el prl'-ert ro héroe. Entre él y su cara mitad líen-ll I f d á b d d ci n con nues ro omlOla a poco VI n , .' _

ornar con e os a rente e su caro pap, nita dulzura las e.eulB ra as copas e -De Madrid, D. Antonio García Mullor. tanto de los de acá magist,almellte ef~~utadopian a los chiquillos, les ponen. el vesti- y el cuarto nene que era otra nena por tan esbeltos árboles, que son los que más -Del mismo punto, las Srtas. de D. Antonio por Quilez (F.) de un magnifico tiro al án¡uledo nuevo... y al avio. Emprenden en ayu- cierto, dábase prisa en atracarse de man- ostensiblemente patentizan el grado de Hernández y viuda de Piñuela (D. G.) que le valió una enorme y merecida ovación. En

nas la marcha porque es preciso guardar zaaas verdes que; le dieron un cólico sensibilidad artística de los pueblos? - También de Madrid, las bellas Srtas. Isabel y este tiempo se tiraron seis .comers. contra elloSI T 1 d· Lola Rayo. después de una .concísa. temporada I tOé d' dasapetito para e campo. oman a Irec- atroz, muy divertido para todos. A usted que quiero supon,erle un fer· por uno contra os nues ros. espu i e Jugaen la Villa del Oso y del Madroño. t d 'b . t .ción de la Sierrezulla todos a pie; es muy Así se pasaron algunas horas, hasta voroso admirador de la fauna-femenina, -De la Corte también, el distinguido procu- algo vistosas por par e e am os equipos erutl-d

. b t d d El nó el primer tiempo. , . ,. ',.divertido an ar a pIe, y so re o o muy que sonó la de regreso a la duda • df sie luego; como a mí me acontece- rador de los Tribunales, D. Julián Arredondo En el segundo tiempo es de notar el afán,.\lfestomacal. El ejercicio es mf)y sano, y cansancio se había aumentado con el go· ¿no es, al mismo tiempo, un amante, un Gascón y señora, completamente restablecida de los de fuera de conseguir el empate desarrollan­para comer como Heliogábalo, no hay ce de tantos <placeres> y había que an- contemplativo, de las bellezas incompa- la operación quirúrgica que le fué practicada. do jugadas violentisimas que se estrel1an antecomo hacer antes un buen rato de tjer- dar dos horas a patlta como dice el vul- rabies de Flora, que cautiva, sugestiona, -Hemos tenido la satisfacción de estrechar la Calero y Ruiz.

cicio. go. El cielo se había nublado de nuevo encanta, h8chiz.i, fascina, extasl.a, embe- mano de nue;;tro apreciable amigo el teniente de Según era de esperar de esta vielenci« dejue.A la. med.ia ho.ra. de estar en marcha b 11' N' I'd Veterinaría, D. Francisco Serrano que en unión go viene a los pocos momentos el primer tanto

y empeza a a ovunar, o era cosa aun les8... y embriaga os sentl os con su aro· de sus padres y de paso para Melilla donde ha de ellos, tanto que nuestro portero no. pudo de­aparece el Sol con toda su fueru y es- de guarecerse debajo del paraguas. Cuan- ma, y calma las ansias del espíritu con sido destinado, ha"pasado en esta unos días con tener a causa de la aglomeración de 'publicó ellplendor. ¡Qué magníficlJ es el rey de los do hace calor, no viene mal una rocia- sus fragancias, y pone fulgaraciones en el objeto de despedirse de su familia y numero- la porteria. El empate tra~ aun mayor impetu enastros cuando perpendicnlarmente se de· diadita, nuestras almas, cuando se viste con sus sas amistades. las jugadas destacándose los nuestros quehae~Jlja caer sobre el caminante en lo más d- Carga la madre con el nene más chi· más ricos, espléndidos y vistosos atavíos 'De cu.ándo acá...? arrancadas peligrosas, pero limpias; A poci?Ca-

é "Ierorecibe una enorme .patada•. de Taran~inguroso de la canícula! Qui n no envidia- quidn, y el padre toma en sus brazos a de mujer divinamente aprehensora de -¿De cuándo acá se ha visto en el vetusto Co- (a..) qne le h 'ce caer al suelo sin sentido... ¡Deli-rá la aiversión de D. Faustino al verle su- la niña del cólico ¡Qué cuadro tan intere- voluntades, de hurí tIue tiene la rara vir- liseo almagreño representar tan a la perfección cioso! A raíz de esto los nuestros dtbilitados tlft

dar cada gota como una avellana, sin duo sante y encantador para los que conOCf n tud de esc.avizar corazones, de ninfa que una compañía de aficionados de la localidad, fun- su parte mtdia sufren el acoso de los foraster~,ciones teatrales de nada somera técnica, propor- . :...t~da, del placer que su parlida de campo le el amor paternol Quié.l no envidiará la con sus du'ces coqueteos, sabli rendir y acoso que trae el tanto de la victona, conse¡u,,,,,,cionándonos unas gratas horas de refinadas emo- , Acausab

a? ·suerte- de don Faustinol Además de la encender a lo" más castos.•.? . 'd al interponerse Beneytez a Lastres, que actu.a:~e~ ciones artisticas, a la par que ocasIOnan onos fi dYa llegó toda aquella Ídmllia feliz al 11 b 11 I t • ñ Al Id d' . d I 't d d' defensa, y que éste no pudo evitar a n e no

niña que eva en razls, eVa a come a Pues siendo esto aSI, se or ca e, igualmente el 'para ISlaco. e el e e a mirar bstimarlo. El partido terminó, con el re~ltad.sitio destinado para celebrar la suspirada en las espaldas y a su primogénito de la ¿no es cierto que nosotros, los almagre- la pujante fragancia juvenil de las bellas figuras 2 a 1, a su favor. .

comida. mano. El mocito tiene ya stis o siete años ños, no podemos vanagloriarnos, de te- femeninas, intérpretes inspiradisimas de sus res- Imparcialmente la impresión que ROS merecí'é d h d b • . d 1 pectivos papeles, y la afortunada actuación tam- d d h b d t dDespu s e una ora e reposo so re y muestra una aficion decldi a por a ca- ner la más rudimentaria noción estética, el encuentro es la e que e a erse preo.en a obién del sexo .feo., todos ellos-mujeres y va- .el rocoso suelo y al aire libre, porque no rrera mLitllf. Gasta salacof de cartón, y puesto que nuestros paseos en 511 mise- rones-altamente acreedores a escuchar los con Jorreto (J.) nuestro equipo, la victona nos

hb bía casa uiDgrina en ninguno de aqueo el enorme paraguas de su padre le sir- __ el. 1 D S . 'b t' 1 hubiera correspondido por una diferencia de 2 ariosa desnudez-iq~ca veros, . antla- aplausos que el público les tn u o por sus oa- 3 tantos y aun en las condiciones que salió a ju­

llos alrtJdedores, empezaron los nenes a ve de fusil. De este modo emprende su gol-dicen a los transeuntes y a los fo- bilisimas andanzas escénicas en este .Iugar de gar de no haber tenido los nuestros .el sant" de. , h b 1 "d' h "f .,. . I Al la Mancha. que-como otros tantos-tiene per- b' 11 dgrttar que teman am re. regreso a lC osa amt la... rasteros muy espeCIa mente, que ma- d espaldas> los valdepeñeros no hu leran. ela o

durablemente diluído el aroma i ealista del Ca-Don Faustino no podía permanecer sor- Para colmo de diversión, les coge un gro no siente la necesidad de verse ro- t' al empate. ¡Pero los santos casi siempre estánballero más Caballero y que con mayor en uSlas-do a la voz de la naturaleza, y da la or- fuerte aguacero media hora antes de peado de un inmenso plantel de árboles, l' h? de espaldas.. .!100 enalteció a a mUjer manc ega.... De los nuestros Calero, Ruiz y Aquilez (1".) yden para que la comida empiece. Apare- llegar a su casa, y aunque se apiñaron de evónimos, de rOllales, de plantas tre- -lOe cuándo acá se ha visto al público-des- é

... en general todos ju~aron con gran inter s con-ce un ped¡,zo de carnero asado envuelto todos para gltarecerse debajo dAI para' parloras, etc., etc.? ¿Por qué no despierta de el anciano al adolescente, desde el Iimpiabo- fiados en la victoria. No pudo Beneytez Aa! .1D b te ... de tel J más d é 1 l· 1 b '1 tas al prócer, desde la petulante .señora. a la t' ben un e a que SlrvlO man . a guas, no pu o 3te sa Var os ne aque usted a este pue :0, que tranqut amen.te J'uego a que nos tiene tantas veces acos.. um ra-El D b t discreta o indiscreta fámula-.sorberse. los pe- 1había estado tan interesante e a e, diluvio, porque el hi]'o de Marte empe- dorml'ta a la sombra de ·Ia más enervante b dos, a consecuenc'a de una dolencia que e aque-riódlcos con avidez terrible, dislocada, carre a-

su aspecto hizo palpitar todos los corazo-. zó a llorar y a gritar desaforadamente y indiferencb? ¡Despiértelo, señor Atcal- tándolos. a los vendedores de las manos-¡ahora jaba, y que a no ser por su gran aficióna~l1J,por-nM;hab~mosdclupec~de~l~c=a~r~n~e~ro~.~~~~~~~~~~~~~_~~ -~~~~~~~~~~ ---~~----~~~SI~q~U~e~n~o~e;s~u~n~~~o~p~IM~~.~ri~ar~~m~s~~.=~~~r~ar~~~~~~_~:~~~i~;~::I::I:::~~

'-M--a-s··~¡a-yl en medto del eo-tusiasmo ge- A 1 ev de 1 noche tropezando y l' ., d 1 lito de trañar el misterio sangrante de un 'suceso· nun- . 1 .,.neral, repara don Fanstino que se han 01- resbal~:::se,ecasi <~avega~do" cayend~ los p~::t:: ~:o~:.eC::u~o:s:n~~:I~ente ca imaginado, ¡nunca visto!, en el que se relata mente: ¡Dolores FLlertes de Barnga... '.' ~~.vl'dado el pan en casa. Nada importa, es y levanta'ndose llegaron caladl'tos a casa. minuciosamente si los .detenidos. toman leche, Un bomtDale " ;--;?'

hemos tratado, ¿tendrá unos "adarmes" buevos o vizcochos, ~i les flaquean las piernas o\loa diversión en elcuripo comer sin pan Figúrese el curioso lector con qué gusto de tiempo para preocuparse de la repo· la voz, si suspiran alto o baja, si el color de sus Con motivo de encontrarse pasando unos dlasasí como se come sin platos, ni cucharas, se acurrucarían entre sábanas, soñando sición de los evónimos del paseo de la rostros es más o menos sQnrojado, si permane- en ésta, en unión de su bella esposa, y allad04enl' t~nedorc s, ni cuchil:os, ni mesa, ni si- 1" d . 1 r d' Icen serios o sonrien, si hablan o callan al .ope- su familia, el heróico ex sargento BasaIlo,~~ < ya con e proxlmo orntngo para Vv ve Estación, tan frecuenta o slempre por e tro alcalde dispuso en su honor un banqiléU~ ...-ed t t 'b " .. "d d' d rarse. la captura..... etc., etc., etc... permanecien- "V'l1as, ni vasos, porque to o es o con r1 u- a disfrutar las dehclas e un la e público? I tuvo lugar en uno de los salones del Gran C4sí.

do en ·cambio "sordo. ese mismo púb ico a otrasye a hacer más ameno un día de holgura. campo... in~umerablesdesventura acaso más desgarrado- no en la noche del dia 21. Con el anfttrión, sen-¿Hay placer que pueda igualarse al de JosÉ P. ALONSO. ras, aunque menos henchidas de aparatosidad...? tá:onse a la mesa 17 o 18 co~res, reinandod JOSÉ R. QUESADA. d' I'd d H' lá s tabeber todos con un mismo cacharro e -¿De cuándo acá se l1a visto un Alcalde alma- en el acto la mayor cor la 1 a. IZO pre en _

greño, tan escrupuloso defensor de la moral ~ris- ción del agasajado, en frases, ¡seria superfluo. de­tiana, que ordene colocar en todas las esqumas cír elocuentes!, el Sr. Trujilll), y BasaIlo en p-ala­unos pasquines prohibiendo blasfemar, bajo la bras sencillas dió las gracias a todos los que ha­amenaza de una multa de dos o cinco pesetas, bian honrado el acto con su presencia, a la vezolvidando, sin duda que la blasfemia es una falta que relató escenas vividas por él ensu largo.castígada en el artículo 586 del Código Penal infortunado cautiverio. El precio del cubierto filécon arresto de uno a diez días y multa de 5 a 25 7 pesetas.pesetas, sanción más efi~az que la presentadaen los alcaldiles avisos, los que parece que másque la prohibición establecen la admisión de tanperniciosa costumbre, siempre que al que lapractique no le duela desprenderse de dos mo­destas .beatas. o de un orondo y rduciente.,machacante»...?

-¿De cuándo acá se ha visto que el precitadoAlcalde mar.ifieste un punible descuido en laaplicación del artículo 67 del Reglamento de Po­licía de Espectáculos, permitiendo que se fumeen la sala del Teatro, con grave olvido no solode la disposición arriba mencionada, sino de lasmás elementales reglas de la Higiene, y con os­tensible falta de cortesia para con las señoras,que sopartan con resignada mansedumbre quelos caballeros les .echen el humo>, con fanfarró­nica actitud de muy dudosa galanteria...?

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Dra de campo

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-.1eonau.,) seis LiTRes '01' lOO KI~.hllitrO.

rr=- M .A. T :e: ::t SLA ROLLS-ROYCe BE LAS VOITUIETTBS

¿Es V. Industrial, cem.rclanfe, m'dlco. Inganlero, aa.lÍl~Pida el catálogo de los coches cM"TRI 5. y ea él encon.trar'., ,V, el QUe Dec._ para duplicar el renctiml8llto de 811 'rid..

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Originales pertenecientes a D. José Luis López Bermejo. Digitalización: Centro de Estudios de Castilla-La Mancha (UCLM)

Page 4: La Tierra Hidalga: periódico independientebiblioteca2.uclm.es/biblioteca/CECLM/ARTREVISTAS/CIUDAD_REAL/... · le dé un disgusto la fiera, hasta que al fin se decide;': ... y al

,N(ímero 58- LA TIERRA HIDALGA 26 '; tirU" 1924

LA TRAMOYA POLlTICA A TRAVÉS DE MIS LENTES FRAGMENTOS DE UNA CARTA

.PATRIOTERIA EXTEMPORANEA ~a8 mioú~e~118 ebxervaeims---- " ~e DO mlDns~nlo o~servl~tr

Unos CHantos epatriotap alMagreños, iafllDla4.s de devoción admirativa, rinden alsarGento Buallo ua b••e.ale pantagruélict. JlI com¡elzo del -acto", el Alcalde de

. Ilmalro luce la bengala mágica de su oratoria cbisporroteante, en un discursito muyluddo, muy mono...

~BOn[B _una informacióna8 "LB TIERRn HIDRlGH"

EN EL AYUNTAMIENTO

Bajo la presidencia del Sr. Trujillo se reu­nió la Comisión municipal permanente elpasado jueves, a las doce de la mañana, ensesión ordinaria. Nada que despierte interésocupó la atención de los concurrentes, limi­tándose a prestar su aprobación a la subastadel Teatro Principal que fué adjudicada endefinitiva a D. Ignacio Alvarez Alcázar por lacantidad de 2.100 pesetas anuales; en la su­basta presentó plieit0 en representación deotro señor D. Víctor Milla; hoy ambos con­cursantes han llegado a completo acuerdo,debiendo, según nuestras referencias, conti­near en lo sucesivo el negocio por cuenta yriesgo de los señores aspirantes, quienes consu demostrada seriedad y conocimiento pro­porcionarán beneficios y plácemes a losamantes del arte y d~l regocijo, pues no he­mos de poner en dnda las buenas prendasque pose;)n D. Jesús Arias Higueruela y elcontratista Sr. Alvarez, a quienes deseamosacierto y suerte en su gestión.

También intervino la Comisión en el re­parto, en calidad de préstamo, que habrá dehacerse entre los labradores necesitados quelo pretendan, de ocho mil pesetas de los fon­dos del Púsito de esta Ciudad. Para proce­der a cumplir el acuerdo se han fijado anun­cios con objeto de que puedan solicitarse in­dicados préstamos.

Por no considerar existen más cuestionesde importancia, se levantó la sesión despi­diéndose los concurrentes hasta la próxima.

Que si es tan interesante como ésta, valdrámás no ocuparse de ella...

¿Qué hace el nuevo Ayuntamiento...? ¿Dón­de están sus .rasgos. geniales...? ¿Dónde susiniciativas...? ¿Dónde la «chispa. del Al­caIde...?

¡Señores!

...

El Ilmo. Sr. Obispo Priorde las Ordenes Militaresamonesta cariñosamente...

COMPAÑIA DE AfiCIONADOS

nos

nero de actos públicos es «siempre. obligadapara los inspiradores o eucargados de la ges­tión distribuitiva de las cantidades recauda­das. Ni antes ni ahora, dudamos de la hon­rada aplicación de los ingresos, ni jamás es­tuvo en nuestra intención ni en nuestras ver­bales expresionei el poner en tela de juiciola integridad de la conciencia ajena. Lo queafirmamos, y volvemos a afirmar, es que alanunciarse un espectáculo benéfico se debeformular la determinación .concreta» del finpara que se celebra, al objeto de que el pú­blico, si simpatiza con .el fin benéfico»-ono benéfico, puesto que puede haber otrosfines muy respetables sin ser benéficos-acu­da con su dinero a la taquilla, y en caso con­trario pueda resolver opuestamente. Es decir;

Con posterioridad ha todo_ esto, circuló que la finalidad de esta índole de funcionespor la población un breve impreso anun- ha de especializarse apriori, no aposteriori...ciando la repetición de-la velada, .ajustándo- ¿Está claro?se en todo al programa de la noche anterior. , ' y ahora, para terminar, unicamente deplo­pira ayer viernes por la noche, 'yen .dicho ramos que se haya «echado por delante. aimpreso, que firma -La Compañia., añádese LA COMPANIA, llevándola a hrmar un «do­que el producto se destinará a .otro fir¡ be- cumento. comprensivo de reticencias' y con­néfico» y que el público tendrá n:oti<;ia de los ceptos insólitos, que correspondería sostener,fngresos y los gastos, -así ,como de las necesi-' directamente, a las personas que se conside­daaes a que se aplicarán dichos rendimientos. raSen aludidas, siquiera fuese por un exceso

En el nÚffieroanterio{ de LA TieRRA HI- de 'Suspicacia o por una interpretación arbi­

PAI.OA ~iji~osIJ VQlyem.~5,,~):e~Urr ;,'1ue la ·tr¡ria, caprichoaae infundada, de nUCi\rMCff~IIQI~IQa' ~'l.fin btRtaft'i'R 19;'9'... , l.-\9tM'VCrl'fii9n",

Con un lleno rebosante, se celebró el miér­coles último una función •benéfica.,-sindeterminarse nada más acerca de este extre­mo-en la que tomaron parte bellísimas se­ñoritas y distinguidos jóvenes de esta ciudad,cuyos ingresos, se dijo serían destinados alobjeto de contribuir a la suscripción abiertaen toda la provincia, para erigir en CiudadReal un monumento al Príncipe de las letras,Miguel de Cervantes Saavedra, sin que en losprogramas se haya querldo concretar, paraconocimiento del público .pagano. la inver­sión que, en definitiva, se piense dar a refe- .ridos fondos.

Primeramente, fueron representados dosjuguetes cómicos titulados «El Sueño Dora­do» y «La Casa de los Milagros», los que ob­tuvieron una esmarada interpretación porparte de las Srtas. Cristobela González, Con­cha Macias, Pilar Malagón, María Rodrígueze Isabel Gil, así como por los Sres. Rodrí­guez, Dominguez, fernández y Cuadra.

Después se PU:iO en escena la inspiradísimazarzuela del maestro Ch ueca. «La Alegría dela Huerta', que constituyó un verdadero.acontecimiento artístico, siendo cantada conexquisito gusto y gran afinación por las seño­ritas laabel Gil y Cristobela González y losSres. González y Rodriguez. Los Sres. Do­minguez, Hernández, Cárdenas, Caralla, Cua­dra, Rayo, Quilez y Olmo hicieron sus res­pectivos papeles con extraordinaria .vis có~

mica», haciendo las delicias del .respetable•.Los coros integrados por las Srtas. CristobelaGonzalez, María Rodriguez, Pilar Malagón,Magdalena Malagón, Enriqueta Gíl, EngraciaMarquez, Concha Macías. Concha lmedio yMaría Juana Goméz, muy entonados, notán­dose el supremo acierto con que fueron con­certados por el Sr. Buades, que además diri­gió la orquesta con insuperable maestría.

Durante los intermedios, -La AgrupaciónMusical Almagreña. interpretó con su pro­verbial destreza nUmerosas piezas de su se­lecto repertorio.

Al final de tonos los actos hubo nutridosaplausos para los intérpretes, y cuando aca­bó la función, las ovaciones estallaron impo­nentes, subiéndose la «cortína.muchas ve­ces, y teniendo que salir a escena, acompa­ñando a las arnstas, el director D. ManÍlelCalvo, que recibió muchos Plécemes por suacertada labor. .

En suma; una grata velada, que supo a po­co a los numerOS05concurrentes, no obstan­acabar la tunción a hora muy avanzada de lanocile,

Se reitera de usted afectísimo servidor y Capellán, que con todo respeto 1. e. I. m.

El Obispo Prior.

Si yo ahora pudiera compaginar el cumplimiento de mi deber sin contrariedad alguna parausted, gustosísimo lo haría. Dígole todo esto, para que no vea en estas líneas, ahora ni nunca,nada, absolutamente nada personal. Más aún; puédole decir que a medida que hoy leía LATIERRA HIDALGA, mi sorpresa corría parejas con mi pesadumbre.

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Teatro Principal HUSBnCia dB Inlciatiyas

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A mayor abundamiento ¿no se tira LA TIERR.A HIDALOA en la imprenta .Progreso Manche­go», donde, además de otras razones, también como accionista tiene el Obispado influenciadecisiva?

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Reiteramos lo dicho en las lineas preliminares a la carta precedente, esto es, que hace honor elcontenido de ésta a la misión de la dignidad eclesiástica que le ha informado. Lo único que nos pro­duce una leve extrañeza, considerando la elevada categoria y austera silnificación de nuestro .cari­ñJSO amonestante. es la invocación a su -influencia decisiva. en el establecimiento tipográfico don­de LA TIERRA HIDALGA se edita actualmente.

¡Ah...! y conste que nosotros, por ahora, no volveremos a incurrir en «pecado. porque no pensa­mos tratar de asuntos religiosos hasta la Semana Santa próxima... ¡¡¡si vivimos!!!

Ciudad Real, 22 de Abril de 1924.SR. DON MANUEL CAMACHO BENEYTEZ.

Almagro.

Mi respetable y distinguido Señor: Hoy por la mañana me han traído un número de LATIERRA HIDALGA correspondiente al 19 de este mes. francamente le he de decir a usted, queme ha causado la lectura de su primera plana una dolorosa impresión, de modo principal elúltimo párrafo del artículo de fondo, a cuyo pie aparece la firma de usted.

Yo le ruego, y suplico, que no vuelvan a tratar semejantes temas religiosos en la forma que10 han hecho, ya que por deberes que en sí y en estimación mía son muy graves, me vería enla necesidad dado que se repitiera, de señalar lo susodicho, no a usted sólo ni en particu­lar, sino al pueblo cristiano, que me está encomendado.

Esto para mi habría de ser muy enojoso, por el desagrado que a usted viniera, porque esmi ánimo, no sólo el no causarle molestia alguna personal, por pequeña que sea, sino antesal contrario. Siempr~ me he complacido en ayudar a los que no derriban, sino que edifican,y por temperamento y convicción, soy inclinado a la tolerancia y a dar la mano, y aún el co­razón entero, a cua:lto significa esfuerzo en pro de la sana cultura, mejor dicho, de la cultu­ra la que, no sien jo sana ¿de qué sirve sino de enfermar a las muchedumbres?

Hemos r~cibid() una extensa carta del Sr. Obispo Prior; Palpita en tocla ella un sentimient. de re­ligiosas emociones-todos los credos son respetables-que enaltecen al Prelado. Le reconocemosnoblemente, con la indomable libertad de juicio que caracteriza a quienes, como nosotros, no osten­tan en su programa otras enseñas que la Verdad, la Belleza y la Justicia. y para que nuestros lecto­res vean, una vez más, la rectitud de nuestra conducta, que no oculta nunca nada al público, porquejamás camina entre sombras, ni deja de meditar en todo caso, previamente sus palabras y sus inten­ciones, transcribiremos algunos fragmentos de la expresada misiva episcopal relacionados con la idea'propósito u objeto que más directamente la inspira.

ha visto. La pluma de Zozaya se limita a tra­zar, en cuanto a las solUCIOnes actuales yfuturas, las sigult~ntes líneas: -Mientras lamonogamia, la sol¡cna OblIgada y la inJustt­cía social, hagan pre~Isas las uniones cir­cunstanCIales, habrá mUjeres a qUienes sebusque de ·Ull· modo· trans-I-tonO¡ pero es pre­ciso que estas mUjeres se acerquén más a lahetaira ataniense, a quien se busca por sucultura y rdinamiento de maneras, mas quepor sus canClas, que no a la eSClava embru­teCIda, a qUIen se me"a la humana condición.Todo menos la hipocresia aCLual, que hacede las en uJ eres trapos.» .

Llanamente confesamos, «S. G. d" H.• queesta ·Iumlllosa "«solución. escapó a nUestromeollo... I~ero anora comprenUelllO:i su va­lor, y sigUiendo sus indIcaciones, con ejem­plar dOCilidad, exnortamos a todas las peca­doras (,h: esu;: oaJo mundo a C!.uc reclamen elcuapo L1e ~nsw como -alimeuto. de susde:illledradas eXIstenCias, y -alunelltándolas.tan alto personaje--ya que por lo generalellas no aspIran sino a la manulencion coti­didna-seguramente suspenderán sus profa­nas correnas por el impuro campo del IlOer-·tlllaJe y la licenCIa.

" la Vida, entonces, será un nuevo Paraísoterrenal de candorosas inocencias y blancascaitidades.

¡~m~l·.,

•••Estas son, lectores, algunas de las minús-

culas observaciones que, a través de mis len­tes, he conseguido recopilar.

JE5iÚS GÓ:W:EZ RODRÍGUEZ.

EL TEMA DE NUESTRO TIEMPO.-No creais­aunque lo hayais pensado al leer el título deeste asunto-que voy a hacer la crítica o di­sección de un libro que publicó ha poco elculto escritor José Ortega Gasset. Nada deesto; no me encuentro capacitado para em­presa de tal complejidad. Me refiero única­mente a lo que se abusa en las conversacio­nes del .tópico. del. tiempo. Casi podemosasegurar-como 10 veriamos palpablementesi tuviéramos la cachaza de formar una aca­bada estadística-que la mitad del tiempoinvertido en todas las pláticas, se lo llevaríala cuestión de que me estoy ocupando. ¿Nose inician muchas conversaciones con eie te­ma...? ¿Acaso no se .rompe el hielo» de lasmismas en esa forma...? Pues si esto ocurrefrecuentemente, ¿qué no pasárá ahora conlas inundaciones, los aludes, las granizadasy otros excesivos desencadenamientos...?

Nada... iQue estamos <con el agua al cue­llo» ...!

¿Me comprenden ustedes .bien ....?

EL MIRAR FEMENINO.-Mi aguda .penetra­ción» visual, aunque también • pacífica. ,me hallevado a clasificar en dos categorías las mira­das femeninas: miradas francas o rectas y mi­radas oblicuas o indirectas. Las primeras sonlas que resisten, imperturbables, a la .fusión.de las miradas masculinas. No creais que lamujer que mira de este modo es una mujercasquivana, coqueta...; indica, eso sí, por Idmenos, un temperamento fogoso, sensual, sinque por ello haya padecido en su honesti­dad. No tengo para qué decit que son lasque tienen más admiradores. ¿Quiéri no ha­brá sen tido estremecimientos y arreboles alverse. envuelto» entre las llamas de una mi­rada de tal naturaleza...? iPOCO sistema ner­vioso habría que tener para no sentir .eso.... !

, En cambio, la .segunda» clase de miradas,son de las que «caminan» con .segundas.•Claro es que estas mujeres han de tener me­nos partidarios, pues en todas las cosas de lavida nos agrada la sinceridad... Las mujeresque así miran, pueden ser, a su vez, de doscastas diferentes: unas, ruborosa. y pudibun­das en extremo, que no se atreven a <<levan­tar la vista del suelo.; y otras, alegres, volu­bles, y en una palabra, quieren a todas lucesaparentar 10 que no son ... Las que así se con­ducen, se dice que .miran» de «rabillo deojo» ... y algunas veces... ¡nos presagian tan­tas cosas estos «rabillos» ...!

EL AMIGO INSINCERo.-Harto penoso y de-sagradable es el trop~zar en nuestra vida con

Iamigos de esta catadura. ¿Cómo llevar a fe­li7- término una cue!'.":ón cualquiera cn queintervienen ...? ¿Cómo confiarnos a sus con­sejos? ¿Cómo simpatizar con la falsa caden-cia de sus afectuosas palabras...?

¿No ha de producir desasosiego, y hastacólera, la idea de que siempre les veamos,parapetados tras la barrera de la insinceridadsin sernas posible, en consecuencia, batir susa trincheramientos.. .? Los que sostenernos elculto de la más noble y leal amistad, comul­gando frecuentemente· con su pan sagrado,no nos explicarnos tanta irreverencia...

Necesariamente, la amistad es un fruto ra­ro, de exótico aroma... Por punto general, losamigos que así obran no suelen ser los de lainfancia, que son los que nos distinguen conun afecto puro y desinteresado, aunque casino podrían hacerlo de otro ,modo, toda vezque estamos «en el secreto» de sus distintosprocederes... Los amigos temporales, impro­visados o advenedizos, son los que más amenudo pueden producir en nuestro ánimoacibarados y crueles descorazonamientos...

y entonces, o nos colocamos tamb ién nos­otros el antifaz unos momentos, por el .cere·bralizado» placer-un poco morboso y otropoco metafísico-de dejarnos engañar conamplitud absoluta de conciencia, o les arran­camos de un tirón el suyo para ofrecerlesuna prueba incontrastable de sincera con­ducta...

tras las normas sociales no adquieran suplasmación en otros moldes verdaderamenteoriginales y revolucionarios. Igual criterioratificaríamos hoy. Pero el autor del trabajoreferido, inserto en el indeterminado _perió­dico católico,. señor -S. O. de H.• , nos des­cubre, con una senCillez prodigiosa, po: itiva~

mente sobrenatural por lo inspirada, la' Ple:'­dra filosofal de la .solución. única, eficaz einfalible, para que la prostitución desaparez­ca, y de paso se enfada con nosotros por nohaber tenido la clarividencia indispensable pa­ra -dar a luz» tan genial idea salvadora... ¡Per­dón, Maestro...! ¡Perdón, señor .S. G. de H» ... !

Dice usted, y dice muy bien, que la solu­cióft para las pecadoras, es acudIr a Cristoen demanda de perdón-como nosotros aca­bamos de implorarlo de usted, en nuestrahumilde calidad de - pecadores.-en la segu­ridad de que el ~iJo de Maria, por mediaCIónde sus nünistros, las perdonana sus peca'dosdel mismo modo.que los perdonó a la Mag­dalena... y que después, -en cuerpo y alma.,les servira de -alimento» para librarlas de.~aída-s ulteriores, ..

t.n..un recientdrabajo literario publicado. por ,el notable- croni~ta AntonioZozaya enLa Libertad inspirado en este mismo asunto,•.t¡ijñ¡:io~o; el gran e:iCriLOr nos ofrece solu­ciones, «tampoco. ha tenido Ja suerte, el su­"premo acierto de -ver. la solución que el

p~lletrªnte t\rtic(~li~tll. ~)$:ff~riQ~Q ~~Wli~Q~

Siguiendo nuestra tradicion!ll costum~

bre (¡oh lamentables detractores de nues~

tra obra periodhticó!) LA TIgRRA HIDAL~

GA no asistió al b3nquete en honor delSr. Basallo por significar nuestra rotundaprotesta contra la patriotería enranciaday anacrónica. Entendemos que el acto or­ganizado para loar al ex sarganto, es deuna ironía bufa y descomedida. Y el pre~tender la cooperación de la ciudad, a unaescena de opereta, intolerable y bochor~

nosa. Dígase-es necesario decirlo endescargo de A~m,?gro-que las dos doce­nas exiguas de comensales reclutados pa­ra llenar hueco, no rfpresentaban sino laincondicional lealtad a la ,iniciativa per­personal dd Sr. TlUjillo. Al margen que­dó la ciudad, ríendo a carcaj,¡da limp,ia',e3trepit05amente del denu do ardorosoque precisaron h s auditores y a~istentes

a la cena de las burlas, para actuar deccmparsas en un hecho pasado de moda,ahíto de iofanti idad e inflainado de cur~

siliería. ¿Pero es posible que al Cabo detan disparatadc. s estridencias en honordel Sr. Basalto, (mando este señor tiene

lastimado el eS'ómago de brt::bajes adltlÍ·rativos, cuando la atención esplñola pal­pita por otras emociones más intensas',

VJngamos los almagreños a entregarnosa la sensiblería de un hvmenaje trasno­chado e impertinente? ¿No tieDe una sig­dficación netamente aldeana, lel célzadeun hombre que viene tranquilamente a laciudad a dtpilr,ir con sus familiares u lashoras de descanso y se le obliga a atibo­rrH"e de potage cuaresmal, av.vando elherohmo de¡.plf gado en un helho quejuzga todávía la justicia milital? .son la­mentables estos enternecimientos del se­ños Truii lo. A las cosas como a las comi­das, hay que darles su punto. Y si se pa­sa.n, sabtn mal y si se paladean peor. YcuandQse ostenta la representación civilde una colectividad es imperiosa la pru­dencia en los actos y el tino delicado pa­ra dignificar el decoro público y aureolar­lo de una cvnsciencia fundamentada yseria.

da enternecida a la ini,.jativa luminosa,

pensó el Sr. TrnjUlo queavizorá tambiénla grata posibi idad de pronunciar un dis·cursito con hn patente y propicio acon­tecimiento. Y he aquí al heróico soldado,que probó sus finas disposiciones depracticante en el cautiverio ominoso ca­

zado al cepo de una anfitriónica y opu­lenta operación de asalto a unas delica­das confituras, más du'ces seguramenteque las galletas paladeadas en la playafrontera al fortín de Alhucemas. Heróica­mente, con una heroicidad digna de en­comio, el Sr.. Basalto se dejó homenajear,cediendo al imperativo patriótico del Al­calde de Almagro. Y reclutadas dos d~,.

cenaS de comensales, después de un ojeoloborioso que no pudo levantar más pro­sélitos, se verificó el homenajE', que ajuzgar por las notLias que nosotros tene­mos, resultó conmovedor y patético. ElSr. Trujillo ofreció las primicias del festín y loó la sigoificación de la comida en

un bien pens:.do discursito, elocuente como dicho por su lenglla de oro que envi­diaría el propio Savonarola, y colmadode felices imágenes que hormiguillearon

el corazón derretido de los oyentes. Nopasó má'l ...

[11 tlE:RRH t;JDHtGH noasisti6 al,banquete, por eso.•• porque su bidal·guía no significa ti paladeo gustosode unas fuentes de natillas...

RECOGIENDO ALUSIONES

En un largo y detalladísimoartll.:ulO qu" 1>UIJIILU UH 1>1:110­dicu, lit: "~L" lJfUVIUQU, pu­lIiase dt: malllllt:::;to d trlsto::e::;pe¡,;taculolle la vula lIee::;a::; intt:lica::; t:::;clav~ oe lo::;lus viles plaLertl>, y al h ...1 aparar al LapituloQt: solucío­IIt:S no da ¡lIl11guli_al~l)e un penouu;u católico.)

El -periódico de esta provincia. a que alu­de el • periódi<;o eatólice· en un precioso ytierno artículo de dos columnitas, del queentresacamos las líneas anteriormente copia-

•..das.y cuyo título onlltimos por .la'razó!! que.'.~ el omite el nuestro, es • LA TIJ~R.RA HIDALGA'

yel .largo y detalladísimo» artículo a quehace rekrencia es la información titulada«Las aventureras del placer., inserta en es¡a~.

columnas hace p~cas semanas.Efecijvamente. No _dábamos ninguna .so­

lución .. para que desáparecIt::;t:n ut: la socie­dad las mujeres •prostItuidas'!., como no la.,­gfre~e ningún publicista desl~ado del artifi­Cio ~ delliofisma. La prostitulión, decí¡(ffios,:

.. !l.~,S~iltt~q 'i~.~rrfl ~~!'l' l ;~i'tirál mien-·.,,-"'

...

~.- ..

Cuando el eminente pensador, José Or­tega y Gasset, ha dicho que el ambiente~spiritual de nuestra patria tiene un pro-

, ,.fundo sabor de ruralidad y un matiz pro­.. 'Dunciado de aldeanismo tosco y grueso,t: :haaibujado perfectamente el panorama.,; de. la inteligencia española. No hay sino

.' mfldir la palpitación diaria de las preocu­::.- ,,"oiones generales de las gentes para no-· tar,' destellado, el cúmulo de puerilidades

candóro'sas e iagenuas en que se ceba l~

-: atenci6n multitudinaria con un E:xacel'­

he.WieqtC;l casi heróico. Estos días pasadosde fiestas religiosas, qU) más que estimu­lar el sentimiento piados) del cristianismocentuplican el Ilfán suntuario y la nece'-

• dad exhibicionista, era en España entera¡,viva, la absorci6n del espíritu público por

la cu'm~nacióll emocional de una túnica

·~ D,azarano. Vestirse con los arreos ma g-· 'lificeDtes del ras~ o envo~verse en los

pliegues de s'}da de túnicas rec:amada$~:de bordados y encaperuzuse la testa cOQ

: '-~pil'uc1).os puntiagudos, exaltab1n ast," ~í frenesí, la fruición de no pocas gentes

·;.entregadas a la delicia inefable. de ta?':tr&Dseedentat actividad. Un espíritu agu~

"dóy limpio de tanta preocupación estul­t') tll' preguntaría a presencia del panorama

Ci:ivil de nuestra patria: ¿pero qué contli;.·'ci6n ingénita en la raza florece y aquila~

1: taelsumun de valoración inteligente, enun pueblo despreocupado e insensib~e al

',' proceso más hondo y rná 1 critico de su

;; hidoria, y que cifra la ventura en Cfñirse,,1.una corona de espinas o el peto rutilante

"Ld~: una armadura romana? ¿Acaso n?,~a¡- .""'san más cosas en España que el hormt-;, .gueo santurrón de Una procesional c~bal-• g~ta o el desfile de una legión de cohor-· . tes remedando el ritmo de las hordas que

condenaron a Cristo?No puede e8capar Atm1gro a esta tara

rural palpitante en las entrañas de la ra·z~. Y era obligado en el>tos días, ademásdel candoroso espectáculo de las corazasde hojá de :lata y de los plumeros en­hiestos en los morrioaes de ll)s eanna-

, dos> ügnificásemos de una manera máspatente el profundo sentido aldeano denuestra civilidad bienaventurada y mirí­

-11e8. Y hemos adobado el ·espect~cu]o"

c6n la pimienta cúera y al gu~to maca­irónico de nuestras tradicionales exp!ln~

siones. El h ~cho es (ste: el 8zandereado,

. traido, ;llevado, enslllZ!ldo, glorificado y~!é8lmtificado Sargento Basallo, vino unos"'cUas'anuestra ciudad, dbpuesto a pasar­~'los'tranquilamente con sus familiares y

détidos. Y.aquí discurría por las ruas dela pob~aciónadmirandola marcialidad d~

nuestra cohorte romana. el piadoso y.ejemplar desbordamiento religioso delsermón del Paso y la admirable repro­ducción del prendimiento de Jesús en elhuerto de los olivos', cuando fué <descu­

bierto> por el A'c111de de la localilad donSantiago Truiillo. El Sr. Trujmo que yaha probado en lizas y torneos memora~

bIes sus altas dotes de organizador dehomenajes y devociones públicas y no

:eatá. lDuy lejos la lonmvvedúra (séena de"'ungir con su palabra maravillosa al se­-'fiorTomé como hijo adoptivo de la ciu­

~' da.d por una E:xplosión de oratoria elec-'toren,hayó la oca~ión propicia para rci­

:,¡.terar ostentivamente sus sentimientos de"patriotismo inflamado, rindiendo al enfer·

mero de Axdir la más delicada emoción

,y.el más. entr6.ñable arrtbato de cuantos"recibiera en suya larga experiencia pan-tag~uélica de banquetes providentes. Se­

-gQl'amente que la ciudad entera S6 suma-

Originales pertenecientes a D. José Luis López Bermejo. Digitalización: Centro de Estudios de Castilla-La Mancha (UCLM)