la inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones:...

8
22 n SUIS Nº 96 Abril 2013 ARTÍCULOS La inmunocastración como alternativa a la castración quirúrgica y al cebo de cerdas enteras en porcino Ibérico Contacto con los autores: 1 Centro de Pruebas de Porcino. Instituto Tecnológico Agrario. Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León. Carretera de Riaza a Toro, s/n. 40353 Hontalbilla (Segovia). [email protected] 2 Centro de Investigación y Tecnología Animal (CITA-IVIA) de Castellón. Resumen El artículo presenta la primera experiencia de inmunocastración en cer- das (hembras) de una raza mediterránea como la Ibérica, realizada en un centro público de investigación. El diseño experimental se adaptó a las particularidades de producción de esta raza y permitió la comparación de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los resultados, los autores re- comiendan una pauta de aplicación de la inmunocastración que permite alcanzar el mayor beneficio posible, tanto en el cebo como en el rendi- miento de matadero. Palabras clave: cerda Ibérica, inmunocastración, castración, crecimiento, calidad de la canal, rendimiento de piezas nobles. Summary The effect of immunocastration on growth performance in fattening period of Iberian female pigs The article explains the first research about immunocastration on Iberian pigs (females) during their fattening period and its effect on growth per- formance and carcass quality. The experimental design included three treatments (surgically castrated, entire female and immunocastrated) and was adapted to the particularities of the breeding and marketing of a Me- diterranean race like the Iberian, and it found a guideline of application to get the most advantageous results. Key words: Iberian female, immunocastration, castration, growth performance, carcass quality, prime cuts performance. Eduardo de Mercado de la Peña 1 , Cristina Tomás Almenar 2 , Emilio Gómez Izquierdo 1 y José Gómez Fernández 1 Imágenes cedidas por los autores Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Upload: duongtuong

Post on 03-Nov-2018

215 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

22 n SUIS Nº 96 Abril 2013

ARTÍCULOS

La inmunocastración como alternativa a la castración quirúrgica y al cebo de cerdas enteras en porcino Ibérico

Contacto con los autores: 1 Centro de Pruebas de Porcino. Instituto Tecnológico Agrario. Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León. Carretera de Riaza a Toro, s/n. 40353 Hontalbilla (Segovia). [email protected] Centro de Investigación y Tecnología Animal (CITA-IVIA) de Castellón.

Resumen

El artículo presenta la primera experiencia de inmunocastración en cer-das (hembras) de una raza mediterránea como la Ibérica, realizada en un centro público de investigación. El diseño experimental se adaptó a las particularidades de producción de esta raza y permitió la comparación de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los resultados, los autores re-comiendan una pauta de aplicación de la inmunocastración que permite alcanzar el mayor beneficio posible, tanto en el cebo como en el rendi-miento de matadero.

Palabras clave: cerda Ibérica, inmunocastración, castración, crecimiento, calidad de la canal, rendimiento de piezas nobles.

Summary

The effect of immunocastration on growth performance in fattening period of Iberian female pigs

The article explains the first research about immunocastration on Iberian pigs (females) during their fattening period and its effect on growth per-formance and carcass quality. The experimental design included three treatments (surgically castrated, entire female and immunocastrated) and was adapted to the particularities of the breeding and marketing of a Me-diterranean race like the Iberian, and it found a guideline of application to get the most advantageous results.

Key words: Iberian female, immunocastration, castration, growth performance, carcass quality, prime cuts performance.

Eduardo de Mercado de la Peña1, Cristina Tomás Almenar2, Emilio Gómez Izquierdo1 y José Gómez Fernández1

Imágenes cedidas por los autores

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Page 2: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

SUIS Nº 96 Abril 2013 n 23

ARTÍCULOS

La producción porcina en la Unión Europea (UE) está con-dicionada por las políticas de calidad vigentes. Dicha calidad,

hoy, se entiende en varios sentidos: cali-dad del sistema de producción (bienestar animal, respeto al medio ambiente, segu-ridad laboral, etc.) y calidad de los pro-ductos (seguridad alimentaria, certifica-ciones, figuras de calidad, etc.) [1]. Estas políticas persiguen un doble propósito. Por un lado, la protección de consumido-res y mercados y, por otro lado, facilitar una oferta diferenciada a esos mismos consumidores y mercados, que gozan de poder adquisitivo y no presentan proble-mas perentorios de abastecimiento.La preocupación de consumidores y me-dios de comunicación [2] de la UE por la calidad en los sistemas de producción ha logrado que se prohíba la castración de las cerdas [3] y se obligue a la anestesia y la analgesia prolongada en caso de castra-ción de los machos. Y, en la misma línea, la FVE [4] ha propuesto el abandono to-tal de dicha práctica de manejo a partir de 2018.La castración en la especie porcina no ha sido sólo una práctica común en la UE [5], con más de 100 millones de cerdos machos castrados anualmente, sino que también es –en ciertos casos– un requisito del mercado [6], inexcusable para alcan-zar la calidad de la carne destinada a pro-ductos curados. También en el caso de las hembras, la castración ha sido defendida por unos [7] y cuestionada por otros [8]. De hecho, la castración de éstas beneficia, como en los machos, varios parámetros determinantes, como el contenido y la composición de la grasa intramuscular, entre otros aspectos [9].En lo que respecta a la raza Ibérica (Sus ibericus, Sanson 1878), dadas las pecu-liaridades de su sistema de producción [10 y 11], la castración quirúrgica de las hembras [12] se ha practicado de forma rutinaria [13 y 14] para evitar la apari-ción de la pubertad e impedir la reproduc-ción indiscriminada –en montanera– y los comportamientos sexuales agresivos, para mejorar la calidad de la carne y para evitar la aparición de aromas indeseables que pueden desarrollarse en la carne de animales enteros, debido a los pesos tan elevados de sacrificio (RD 1469/2007).De cualquier modo, la preocupación de los consumidores por –y los condiciona-mientos legales a– la producción porcina

en la UE han motivado la búsqueda de diversas alternativas [15] a la castración quirúrgica tradicional, aunque, a corto y medio plazo, la inmunocastración parece una de las mejores alternativas a la castra-ción (de los machos), por sus beneficios en producción [16], la calidad de la canal y de la carne [17 y 18], la calidad de los productos curados [19] y su efectividad en el control del olor sexual [20 y 21]. Sin embargo, esta técnica ha sido apenas estu-diada en hembras de la especie porcina y, nunca, en cerdas de razas mediterráneas como la Ibérica (el producto utilizado no tiene registro para usarse en hembras). De ahí que nos planteáramos [22 y 23] el estudio de la castración y la inmunocas-tración en hembras Ibéricas, con el fin de comparar ambos manejos en intensivo y su influencia en los parámetros zootécni-cos de cebo y matadero. Voilà la novedad y el interés de nuestro trabajo.

¿QUÉ QUERÍAMOS SABER?En definitiva, buscábamos conocer si la inmunocastración era efectiva en el cebo de cerdas Ibéricas y si había o no ventajas significativas frente a la castración quirúr-gica tradicional o, incluso, sobre el cebo de cerdas enteras. Las particularidades de la explotación y la variabilidad del peso al sacrificio en la raza Ibérica [24] nos ha-cían suponer, a priori, que no era posible recomendar una única pauta de inmuno-castración, sino que debería adaptarse a

las condiciones propias de cada granja y mercado. También era necesario, por tanto, definir los periodos del efecto del producto utilizado: cuándo era percepti-ble en forma de resultados productivos, cuándo se alcanzaba el máximo efecto y hasta cuándo se mantenía.

¿CÓMO SE DISEÑÓ EL ENSAYO?Desarrollamos la investigación en las ins-talaciones del Centro de Pruebas de Por-cino, en Hontalbilla (Segovia). Para ello, utilizamos 192 cerdas Ibéricas (Duroc × Ibérica) con 110 días de vida y un peso de 44,94 ± 3,41 kg que distribuimos al azar entre los tres tratamientos experimen-tales: castradas quirúrgicamente (CC), inmunocastradas (CI) y enteras (CE). En total, hubo 48 réplicas totales, de cuatro cerdas cada una y 16 réplicas por trata-miento. En cuanto a las condiciones de manejo, hay que resaltar lo siguiente: las celdas (réplicas, con 1,4 m2 por cerda) tu-vieron cama de paja, bebedero de chupete y tolva holandesa.Tras un periodo de adaptación de dos se-manas, comenzó el periodo experimental propiamente dicho. Mientras que la cas-tración quirúrgica de las cerdas corres-pondientes se había realizado con ante-rioridad, en la explotación de origen de los animales, a los dos meses de edad y se-gún indica la normativa vigente, la inmu-nocastración se llevaría a cabo durante

Los animales se pesaron individualmente cada ± 14 días, registrándose 11 pesadas en total.

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Page 3: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

24 n SUIS Nº 96 Abril 2013

ARTÍCULOS

el periodo experimental citado, según esta pauta: una primera dosis a las 18 sema-nas de edad (y 60 kg de peso vivo) y una segunda dosis a las 22 semanas de edad (y 84,2 kg de peso vivo).

¿QUÉ INFORMACIÓN SE REGISTRÓ?Durante el mismo periodo experimental, los animales se pesaron individualmente cada ±14 días, registrándose 11 pesadas en total: la inicial -P0- y las pesadas P1 a P10. La pesada P4 coincidió 10 días des-pués de la aplicación de la segunda dosis de producto. En cada una de las pesadas se determinó el consumo total por celda y, a partir de ahí, el consumo medio dia-rio por animal (CMD), la ganancia media diaria (GMD) y el índice de conversión (IC) alcanzado (kg de pienso/kg repues-tos). Los piensos utilizados, en gránulo de 2,5 mm, se administraron ad líbitum de acuerdo con la edad de los animales: cebo, hasta los 170 días de edad y 94,73 kg de peso vivo, y acabado, hasta el mo-

mento del sacrificio, a los 259 días de edad. Las fórmulas de los piensos pueden verse en la tabla 1.Los animales se sacrificaron 99 días des-pués de la segunda dosis de producto, en dos lotes, aunque sólo el primero de ellos se controló en matadero, registrándose los pesos de canales, paletas, jamones y lomos.

¿QUÉ OCURRIÓ CON EL PESO VIVO?La evolución del peso vivo la hemos re-presentado en la figura 1, en forma de di-ferencias de peso entre los tres tratamien-tos experimentales.De este modo, pueden verse varias cosas. En primer lugar, en el momento de la pe-sada P4 (10 días después de la 2ª dosis de producto), las cerdas inmunocastradas (CI) presentaron una diferencia de peso vivo despreciable (1,15 kg) frente a las cerdas enteras (CE). Sin embargo, sólo dos semanas después, en la pesada P5, las CI ya tuvieron 4,69 kg más que las CE.

Esta ventaja de peso vivo alcanzó valo-res máximos en la pesada P8, con 10,34 kg (10 semanas tras la aplicación de la segunda dosis de producto). Después, la diferencia de peso entre CI y CE disminu-yó, aunque en P9 la ventaja fue, todavía, similar a la registrada en P7.Por su parte, las CI comenzaron (P4) con un menor peso (-3,41 kg) que las cerdas castradas (CC). Sin embargo, el efecto de la inmunocastración hizo que tales dife-rencias se anularan ya en P5 y se invir-tieran a favor de las CI durante todo el periodo experimental: rápidamente hasta P8 y, todavía después, a un ritmo menor, hasta el momento del sacrificio (P10), 14 semanas tras la aplicación de la segunda dosis de producto.Finalmente, subrayamos el hecho de que las CC tuvieron un mayor peso vivo que las CE (máximo de 4,93 kg en P5), aun-que esta ventaja disminuyó progresiva-mente, de tal manera que fue desprecia-ble en P9 (1,27 kg), invirtiéndose en P10 (-1,75 kg) a favor de CE.

12

10

8

6

4

2

0

-2

-4Peso

(kg)

P4 (+10 días) P5 (+29 días) P6 (+42 días) P7 (+56 días) P8 (+70 días) P9 (+84 días) P10 (+99 días)

n Inmunocastradas versus castradas n Inmunocastradas versus enteras n Castradas versus enteras

Figura 1. Diferencias de peso (kg) según pesadas (y días tras la 2ª dosis de producto).

Tabla 1. Composición formulada de las dietas.

Fases MS PB GB FB Lys Met+Cys Thr Trp EN

Cebo 89,9 14,7 7,0 5,8 0,72 0,54 0,52 0,16 2445

Acabado 89,9 11,5 8,4 5,0 0,56 0,44 0,41 0,14 2484

MS = materia seca, PB = proteína bruta, GB = grasa bruta, FB = fibra bruta, Lys = lisina, Met+Cys = metionina + cisteína, Thr = treonina, Trp = triptófano, EN = energía neta kcal/kg.

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Page 4: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

26 n SUIS Nº 96 Abril 2013

ARTÍCULOS

¿Y CON EL CONSUMO, LA GANANCIA Y LA CONVERSIÓN?Estos resultados se muestran en las figu-ras 2 y 3. Para su interpretación, debe-mos aclarar que hemos considerado dos periodos distintos: preinmunocastración y posinmunocastración, separados por la pesada P4 (remarcada por la flecha). Ya hemos dicho que esta pesada P4 es la siguiente a la segunda dosis. Y es que, de acuerdo con la bibliografía, la inmu-nocastración sólo es operativa a partir de esa segunda dosis: hasta ese momento, los animales se comportarían como enteros.

Además, el periodo de posinmunocastra-ción lo hemos dividido en varias etapas, tantas como pesadas hay después de P4, debido a que la literatura científica sobre la inmunocastración en razas blancas demues-tra que, tras la aplicación de la segunda dosis, hay un intervalo mínimo de tiempo para la aparición de un efecto significativo y mensurable, sobre los rendimientos pro-ductivos. Y, de la misma manera, pueden señalarse unos tiempos de efecto máximo y otros de duración máxima del efecto del an-tagonista hormonal. Dado que todos estos intervalos eran desconocidos en el caso de la raza Ibérica, nos pareció oportuno anali-

zar todos los periodos posibles, desde P4 a cada una de las pesadas siguientes, P5 a P10 (99 días -14 semanas- tras esa dosis).De este modo obtuvimos los datos de consumo medio diario (CMD), ganancia media diaria (GMD) e índice de conver-sión (IC) para siete periodos distintos: la preinmunocastración 0-4 (intervalo entre pesadas P0 y P4) y los posinmunocastra-ción 4-5 (hasta los 29 días tras la 2ª dosis de producto), 4-6 (hasta los 42 días), 4-7 (hasta los 56 días), 4-8 (hasta los 70 días), 4-9 (hasta los 84 días) y 4-10 (hasta los 99 días, es decir, el periodo de posinmu-nocastración completo).

1,0

0,8

0,6

0,4

0,2

0,0

-0,2

-0,4

-0,6

-0,8

-1,0Peso

(kg)

P0 a P4 (preinmunocastración)

hasta +29 días (posinmunocastración)

hasta +42 días (Id.) hasta +56 días (Id.) hasta +70 días (Id.) hasta +84 días (Id.) hasta +99 días (Id.)

n Consumo n Ganancia n Conversión

Figura 2. Inmunocastradas versus enteras. Diferencias acumuladas (kg) de consumo, ganancia y conversión en los periodos de preinmunocastración (desde P0 a pesada P4) y posinmunocastración (desde P4).

Control de las canales procesadas según el método europeo de referencia. La castración beneficia el contenido y la composición de la grasa intramuscular, entre otros.

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Page 5: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

SUIS Nº 96 Abril 2013 n 27

ARTÍCULOS

En la figura 2 se han representado las diferencias entre CI y CE. Durante todo el periodo de preinmunocastración (0-4), las diferencias en cuanto a consumo medio diario (CMD) y ganancia media diaria (GMD) no fueron significativas en-tre ambos grupos experimentales. Sólo la conversión (IC) fue distinta entre ellos y mayor en las CE (3,38), lo que podría ex-plicarse admitiendo que alguna cerda CI respondiera precozmente al tratamiento, desde algún momento anterior a la 2ª do-sis de producto, lo que mejoraría su con-versión, como se menciona en algún caso de la bibliografía.

En el periodo de posinmunocastración re-sultó incuestionable el aumento casi inme-diato del consumo, porque las diferencias, en el primer intervalo de este periodo (de P4 a P5, es decir, hasta los 29 días tras la 2ª dosis), son de 813 g y, en intervalo siguien-te, de 879 g, siempre a favor de las CI.Durante este mismo periodo, la ganan-cia fue, para cualquiera de los intervalos, superior en CI que en CE, de tal modo que las diferencias permanecieron signifi-cativas hasta el momento del sacrificio y fue máxima en el primer intervalo (224 g), disminuyendo paulatinamente tras ese momento.

Por lo que respecta a la conversión, las diferencias no fueron significativas hasta el intervalo 4-9 (hasta los 84 días), cuan-do las CE presentaron un IC acumulado para el periodo de posinmunocastración de 190 g menos que las CI (en el inter-valo 4-10, es decir, en todo el periodo de posinmunocastración, la diferencia alcanzó los 270 g), hasta ese momento, los 84 días tras la 2ª dosis de producto, las conversiones de ambos grupos fueron similares.En la figura 3 se han representado las diferencias entre CI y CC. Durante el periodo de preinmunocastración, las

1,0

0,8

0,6

0,4

0,2

0,0

-0,2

-0,4

-0,6

-0,8

-1,0Peso

(kg)

P0 a P4 (preinmunocastración)

hasta +29 días (posinmunocastración)

hasta +42 días (Id.) hasta +56 días (Id.) hasta +70 días (Id.) hasta +84 días (Id.) hasta +99 días (Id.)

n Consumo n Ganancia n Conversión

Figura 3. Inmunocastradas versus Castradas. Diferencias acumuladas (kg) de consumo, ganancia y conversión en los periodos de preinmunocastración (desde P0 a pesada P4) y posinmunocastración (desde P4).

Pautas para una correcta inmunocastración.

Inicio de la prueba1ª dosis a las 18

semanas de edad

Inmunocastración

2ª dosis a las 22 semanas de edad

Envío a matadero

55 kg PV 80 kg PV

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Page 6: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

28 n SUIS Nº 96 Abril 2013

ARTÍCULOS

diferencias fueron claras entre ambos grupos experimentales: las castradas consumieron 460 g al día más que las CI, tuvieron una mayor ganancia media dia-ria (59 g) y presentaron un mayor (peor) índice de conversión (310 g).Ya en el periodo de posinmunocastra-ción, el consumo “disparado” de las cerdas inmunocastradas superó desde el primer momento al de las castradas y las diferencias, significativas y muy marcadas, se mantuvieron hasta el sa-crificio, con máximos en el intervalo 4-8 (520 g/día), a favor de las primeras. En consecuencia, la ganancia media diaria también fue superior en las inmunocas-tradas, aunque con una mejor (menor) conversión, principalmente en los prime-ros intervalos.

¿CÓMO AFECTÓ A LOS DÍAS NECESARIOS PARA COMPLETAR EL CEBO?Las distintas velocidades de crecimiento (ganancias medias diarias) entre grupos experimentales provocaron distintos “tiempos de llegada” a cada uno de los posibles pesos de sacrificio: se representa en la figura 4.En función de los distintos mercados y pe-sos de sacrificio bajo los que se comercia-liza el ganado ibérico, hemos optado por representar el intervalo de 130 a 170 kg de peso vivo en esta figura. Las cerdas CI

alcanzaron los 130 kg de peso ocho días antes que las cerdas CC y 12 días antes que las cerdas enteras, mientras que las CC llegaron a ese peso cuatro días antes que las CE.Se observa también que las CC ralen-tizaron, cada vez más su velocidad de crecimiento (GMD), por lo que, prime-ro, perdieron la ventaja que presentaban frente a CE hasta los 150 kg y, segundo,

el retraso aumentó progresivamente. Y, por su parte, las cerdas CI mantuvieron una ventaja de 11 días de media, tanto sobre las cerdas CC como sobre las cer-das CE.Hay que recordar que, en el caso de las cerdas inmunocastradas (CI) estos pesos (130, 140, 150, 160 y 170 kg) se alcanza-ron al cabo de 46, 60, 74, 88 y 101 días tras la revacunación.

14

12

10

8

6

4

2

0

-2

-4

-6Días

130 kg 140 kg 150 kg 160 kg 170 kg

n Inmunocastradas versus castradas n Inmunocastradas versus enteras n Castradas versus enteras

Figura 4. Diferencias (días) para llegar a cada posible peso de sacrificio.

Pesos de sacrificio

Instalaciones del Centro de Pruebas de Porcino en Hontalbilla (Segovia).

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Page 7: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

30 n SUIS Nº 96 Abril 2013

ARTÍCULOS

¿QUÉ OCURRIÓ EN EL MATADERO?En la tabla 2 se muestran los resultados de calidad de la canal del primero de los lotes enviados a matadero.Las canales fueron procesadas de acuer-do al método europeo de referencia [25],

aunque, dada la falta de uniformidad en el peso al sacrificio de todo el lote de cer-das, en razón al diseño del experimento, no se encontraron diferencias significati-vas entre los tres grupos experimentales ni en este peso ni en el del peso de la ca-nal. Sí que pudo demostrarse un menor

rendimiento de la canal de las cerdas enteras, seguramente por su menor con-tenido graso. Por lo que respecta a las piezas nobles, el peso de los jamones, las paletas y los lomos fue siempre superior tanto en cerdas enteras como en inmu-nocastradas.

Esquema inmunocastración

En las cerdas inmunocastradas, los anticuerpos anti-GnRH evitan temporalmente la estimulación hipofisaria y la liberación de FSH y LH. Mientras persista el bloqueo, los ovarios tampoco liberarán estrógenos y quedará inhibida la actividad asociada: fertilidad, libido, comportamiento, etc.

Hipotálamo

Ovarios

FertilidadLíbido

Comportamiento

Hipófisis

GnRH

InmunocastraciónAnti-GnRH

FSH y LH

Estrógenos

Tabla 2. Calidad de canal y rendimiento de piezas nobles.

Variables (kg)1 Castradas (n=31) Enteras (n=29) Inmunocastradas (n=31) eem2 sig3

Peso de sacrificio 161,33 165,21 169,96 2,63 0,068

Peso canal 127,67 129,05 133,89 2,16 0,10

Rdto. canal (%) 79,14a 78,02b 78,79a 0,28 **

Jamones perfilados 12,57a 13,50b 13,27b 0,19 **

Paletas perfiladas 7,59a 8,28b 8,02b 0,11 ***

Lomos 2,71a 3,05b 2,82a 0,05 ***

1 Los datos de jamones, paletas y lomos, son la media de los dos lados.2 eem = error estándar de la media.3 Letras diferentes en la misma fila indican diferencias significativas (*P<0,05; **P<0,01; ***P<0,001).

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS

Page 8: La inmunocastración como alternativa a la castración ... · de las tres posibles opciones: inmunocastración, castración quirúrgica y cebo de cerdas enteras. De acuerdo con los

SUIS Nº 96 Abril 2013 n 31

ARTÍCULOS

¿Cómo se traduce esto en la granja?

La inmunocastración está considerado un método eficaz y aceptable desde todos los puntos de vista (calidad en la producción y calidad en los productos, por insistir en el concepto expuesto al principio de este artículo), pero las indicaciones y las pautas de uso deben adaptarse al peculiar sistema productivo del Ibérico.

n Respetar el intervalo entre dosis que recomienda el fabricante. Los efectos pueden demostrarse un mes después de aplicar la segunda dosis, alcanzándose un efecto máximo a las 10 semanas de la revacunación y manteniéndose, como mínimo, hasta 14 semanas tras la dosis de recuerdo. Por lo que puede recomendarse una separación de 8 a 12 semanas entre la revacuna-ción y el momento del sacrificio para obtener los mayores beneficios.

n La inmunocastración puede utilizarse en hembras como alternativa segura a la castración tradicional. Esto se traducirá en un consumo mayor (12% más de media) y un crecimiento más rápido (22,24% de media), con la ventaja adicional de un mejor índice de conversión (-7,6%), 11 días menos de cebo y un mejor despiece en matadero.

n La inmunocastración es una alternativa a la producción de cerdas enteras. En otras palabras, aumentará el consumo (21,25% de media), la velocidad de crecimiento (19,24%) y disminuirán los días de cebo (hasta 11 de media), sin que se penalice la con-versión (1,44%), especialmente a pesos de sacrificio inferiores a 150-160 kg, ni los rendimientos de piezas nobles de la canal.

BIBLIOGRAFÍA1 FABRE-TP, 2011: Strategic Research Agenda. http://

www.fabretp.info/LinkClick.aspx?fileticket=_9y1SEUVX

LA%3d&tabid=2192 Meijer B., Van den Toren W., 2010. A leading role for

supermarkets? A comparison of sustainability practices

in the UK and the Netherlands. En: What´s on the menu?

A comparative analysis of the agenda setting dynamics

of sustainable meat and fish in four European countries.

Roosvelt Academy. Herman Lelieveldt (editor); p. 55-83.3 Directiva 120/2008/CE y RD’s 1135/2002 y

1221/2009.4 Federation of Veterinarians of Europe, 2009: http://

www.fve.org/news/position_papers/animal_welfare/

fve_09_040_castration_pigs_2009.pdf5 PIGCAS, 2009. Report on Attitudes, practices and state

of the art regarding piglet castration in Europe. Delivera-

ble D4.1. Report on recommendations for research and

policy support6 European Declaration on alternatives to surgical castra-

tion of pigs, 2010.7 Peinado J., Medel P., Fuentetaja A., Mateos G.G., 2008.

Influence of sex and castration of females on growth

performance and carcass and meat quality of heavy

pigs destined to the dry cured industry. J. Anim. Sci.

86:1410–1417.8 Mateos G.G., Serrano M.P., Cámara L., Fuentetaja A.,

Valencia D.G., 2009. Factores nutricionales y de manejo

que influyen sobre la calidad de la canal y la carne del

cerdo Ibérico en intensivo. V Congreso Mundial del Ja-

món, Huelva.9 Gispert M., López-Bote C., 2011. La inmunocastración

como una alternativa a la castración quirúrgica de cerdos

machos para la producción de jamón curado. VI Con-

greso Mundial del Jamón, Lugo, 21-23 de septiembre.

396 p.

10 ASICI (Asociación interprofesional del cerdo Ibérico),

2009: Plan estratégico.11 Dalmau A., Temple D. y Velarde A., 2011. Relación

entre el bienestar animal y el cerdo Ibérico en montanera.

Suis, 83: 22-29.12 Alonso de Herrera J.E., 1563. Libro de agricultura: que

es de la labranza y crianza y de muchas otras particula-

ridades y provechos del campo. Libro V, capítulo XXXIV.

Valladolid, Imprenta de Francisco Fernández de Córdoba.

En: http://books.google.es/books?id=4wKQYbw1DBgC

&printsec=frontcover&dq=alonso+de+herrera&hl=e

s&sa=X&ei=9zGZT9SXNseX8gOV8oHqBQ&ved=0CD

AQ6AEwAA#v=onepage&q&f=false13 Aparicio J.B., 1977 Fattening of the Iberian Pig. VII.

Gain in live weight with mountain pasturage diet supple-

mented with soya, flour control of dorsal fat deposit.

Arch. Zootec. 26 (101), pp: 97-110.14 Temple D., Manteca X., Velarde A., Dalmau A., 2011.

Assessment of animal welfare through behavioural pa-

rameters in Iberian pigs in intensive and extensive con-

ditions. Applied Animal Behaviour Science 131: 29-39.15 EFSA, 2004: Opinion of the Scientific Panel on Animal

Health and Welfare (AHAW) on a request from the Com-

mission related to welfare aspects of the castration of

piglets. doi:10.2903/j.efsa.2004.91.16 Batorek N., Candek-Potokar M., Bonneau M., Van Mil-

gen J., 2012. Meta-analysis of the effect of immunocas-

tration on production performance, reproductive organs

and boar taint compounds in pigs. Animal, 6, pp. 1330-

1338 doi: 10.1017/S175173111200014617 Gispert M., Oliver M.A., Velarde A., Suárez P., Pérez

J., Font i Furnols M., 2010. Carcass and meta quality

characteristics of immunocastrated male, surgically cas-

trated male, entire male and female pigs. Meat Science,

85: 664-670. DOI: 10.1016/j.meatsci.2010.03.02118 Pauly C., Ampuero S., Bee G., 2010. Expected effects

on carcass and pork quality when surgical castration is

omitted: results of a meta-analysis study. Symposium:

Alternatives to castration in pigs, EAAP, Crete, August

23-27th.19 Boler D.D., Clark D.L., Baer A.A., Meeuwse D.M., King

V.L., McKeith F.K., Killefer J., 2011. Effects of increasing

lysine on further processed product characteristics from

immunologically castrated male pigs. J Anim Sci., 89

(7): 2200-2209.20 Font i Furnols M., Gispert M., Guerrero L., Velarde

A., Tibau J., Soler J., et al., 2008. Consumers’ sensory

acceptability of pork from immunocastrated male pigs.

Meat Science, 80, 1013–1018.21 Font i Furnols M., González J., Gispert M., Oliver M.A.,

Hortos M., Pérez J., et al., 2009. Sensory characteriza-

tion of meat from immunocastrated pigs compared to

meat from surgically castrated, entire males and female.

Meat Science, 83, 438–442.22 Gómez-Fernández J., Horcajada S., Tomás C., Gómez-

Izquierdo E., De Mercado E., 2012. Efecto de la inmuno-

castración y de la castración quirúrgica sobre los rendi-

mientos productivos y la calidad de la canal en cerdas

Ibéricas de cebo. ITEA, vol. 109 (1), 1-16.23 Mercado E., Tomás C., Gómez-Izquierdo E., Gómez–

Fernández J., 2012. Effect of immune castration on the

evolution of live weight and prediction of the slaugther

weight in Iberian females. 22nd IPVS Congress, Jeju,

Korea.24 Sánchez-Esquiliche F., Rodríguez-Estévez V., 2011.

Meta-análisis de los resultados productivos de las fases

de crecimiento y cebo del cerdo Ibérico. Trabajo de fin de

Máster en Zootecnia y Gestión Sostenible. Universidad

de Córdoba.25 Branscheid W., Dobrowolski A., Sack E. 1990. Simpli-

fication of the EC-reference method for the full dissection

of pig carcasses. Fleischwirtsh, 70: 565-567.

Published in IVIS with the permission of the editor Close window to return to IVIS