fernando de rojas resumen la celestina

7/23/2019 Fernando de Rojas Resumen La Celestina

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i.e.s. bachiller sabuco lengua y literatura 1º bach int

fernando de rojas: la celestina

época

El periodo en que reinan los Reyes Católicos, de 1474 a 1516, es un lapso detiepo en que se !unde la "ie#a entalidad edie"al y el nue"o aire reno"adorprerrenacentista. En este periodo de mezcla de tendencias es cuando aparece

La Celestina.

Históricamente el s.$% !ue un siglo re"uelto, en el que el poder on&rquico sehab'a "isto uy debilitado. (sabel y )ernando !renan los despropósitos de la

clase noble para a*an+ar el poder on&rquico e intentar reorgani+ar lasinstituciones pol'ticas con la iplantación de un centraliso absolutista. ograncierta unidad entre sus reinos -solo aparente, pues abos conser"aron suspropias leyes, !ueros y costubres, recortan el poder y las rentas de los noblesen bene*cio de la Corona, consiguen que el Estado adquiera algunos pri"ilegiossobre la iglesia, crean una especie de polic'a rural, la /anta 0erandad, quehar& algo enos peligroso "ia#ar por los cainos y establecen el ribunal de la(nquisición, una suerte de polic'a religiosa, que *rar& algunas de las p&ginas&s tristes de nuestra historia.2or otra parte, siguen una pol'tica e3pansionista que los lle"a a reconquistarranada1, a abrirse hacia el editerr&neo con la toa de algunas pla+asnortea!ricanas y gracias a la herencia aragonesa de (talia, a *nali+ar la toa deCanarias y a coen+ar la conquista de rica.2ero 1489 no solo es un a:o cla"e por las cuestiones relati"as al descubriientode Colón, sino que tabin queda arcado, en este caso para la historia de laignoinia y la in!aia, por una de las edidas &s dr&sticas, in#ustas yseguraente per#udiciales desde los puntos de "ista econóico y social; lae3pulsión de los #ud'os9 que no se con"irtieran al cristianiso. partir de aqu',la (nquisición, que solo ten'a poder sobre cristianos, no sobre usulanes ni

#ud'os, soeter& a una presión enore especialente a los #udeocon"ersos<.

1 La defnitiva unidad de los reinos que componen España se conseguirá en 1512 con la anexión de Navarra.2 Felipe ! durante los primeros años del s."#! expulsará tam$i%n a los moriscos.& 'esulta este un (ec(o de relativa importancia para la lectura ) comprensión total de La Celestina! puesto queFernando de 'o*as (u$o de vivir directamente la persecución inquisitorial al ser %l converso o descendiente deconversos.

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Culturalmente, el s.$% ha de#ado penetrar progresi"aente el in=u#o italiano,que acabar& despla+ando la preponderancia !rancesa en Espa:a que se hab'anotado durante toda la Edad edia. Renobrados huanistas italianos "iene aEspa:a y propician que el 0uaniso eche ra'ces dentro de nuestras !ronteras./e despierta un "erdadero inters por las lenguas cl&sicas y por sus culturas,con lo que se abrir& el paso de*niti"aente a lo que pronto ser& ya el

Renaciiento. >e este inters *lológico surge la priera Gramática de lalengua castellana, escrita por E. ntonio de ?ebri#a en 1489. abin ser& unhecho rele"ante la progresi"a iplantación de la iprenta por toda la 2en'nsula.>el 0uaniso depender& el cabio de entalidad ocurrido en la poca; delteocentriso pasareos a tener al ser huano coo centro y edida de lascosas.

Literariamente, la poca de los RR.CC. sigue esencialente las l'neas de locortés, y los cancioneros son el no "a &s de la e3presión potica y de ladi!usión literaria. >el iso odo, tabin podeos considerar de tono cortésla prosa no"elesca de estilo caballeresco - Amadís de Gaula aparece a principiosdel s.$%( y la de estilo sentiental -Cárcel de amor !ue el best-seller de su

oento. La Celestina "endr& a superar este tipo de aor conteplati"o.El teatro despegar& por *n. /e consigue superar el "ac'o que la Edad edia harepresentado y se sientan las bases, con obras de autores coo orres ?aharro,

@uan del Encina o ucas )ern&nde+, de lo que en enos de un siglo se con"ertir&en el teatro cl&sico espa:ol.

publicación, ediciones, título, autoría

a1A edición de la obra que hoy conoceos coo La Celestina apareció enBurgos en 1488 y se titula Comedia de Calisto y Melibea. iene dieciséis actos.

El priero parece ser obra de un autor cuya *liación no es del todo segura-probableente sea de un tal Rodrigo Cota, autor que aparece en algnCancionero; en realidad, los an&lisis estil'sticos, lingD'sticos y de !uentesliterarias que se han reali+ado, parece que deuestran que la !ora de escribires de p&rra!os &s bre"es y estilo &s conciso, lo que lle"a a pensar queseguraente sea cierta la e3istencia de un autor pre"io los restantes, segnaparece en los versos acrósticos incluidos en el 2rólogo, ser'an !actura de)ernando de Ro#as. Fna 9A edición "io la lu+ en 15G9 ba#o el nobre deTragicomedia de Calisto y Melibea, e incorpora cinco actos más -conocidoscoo Tratado de Centurio, insertos entre los actos $(% y $% priiti"os, con loque la obra pasa a tener "eintin actos, y amplía los anteriores4. ?o obstante,la obra no ser& conocida ni coo Comedia ni coo Tragicomedia de Calisto y

Melibea, sino que ser& uno de sus persona#es el que le d nobre; hoy esuni"ersalente conocida coo La Celestina, denoinación con la que ya seconoc'a incluso en "ida del autor.

>e )ernando de Ro#as se sabe poco. 2robableente "i"ió entre 1476 y 1541. Hldice en los "ersos acrósticos que nació en a 2uebla de ontalb&n -oledo, yestudió eyes y tal "e+ 0uanidades en /alaanca. l parecer "i"ió en ala"era

y !ue alcalde un tiepo de esta localidad, si bien se dedicó a la abogac'a durantetoda su "ida. /eguraente poseyó una e3tensa biblioteca, con libros en espa:ol

y en lat'n, entre los que *gurar'a la obra en lat'n de 2etrarca -autor del s.$(%,cuya huella es abundante en a Celestina a partir del cto ((. uy

+ La ma)or,a de las ediciones actuales de La Celestina lo son de la Tragicomedia. -or lo general! en todos losactos! los añadidos que (io 'o*as so$re la primitiva Comedia aparecen destacados en cursiva. /s, se puedeo$servar de manera clara las di0erencias entre las dos versiones.

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probableente !uera un judío converso o descendiente de ellos, y estacircunstancia e3plicar'a el pesiiso y el desenga:o "ital que, en el !ondo, sedesprende de la obra.

género de la obra

/igue siendo contro"ertido adscribir la obra a un gnero literario u otro. 0ahabido cr'ticos que, bas&ndose en las di*cultades que iplica su puesta enescena -deasiado e3tensa, deasiados escenarios niegan su car&cterdra&tico y "en en ella una novela dialogada. Itros la sitan, tal "e+ con &sacierto, dentro del subgnero dra&tico de la Comedia Humanística, que secaracteri+a por;

⋅ tener una traa sencilla en prosa, desarrollada igualente con unarguento siple,

⋅ un gran realiso en la pintura de los abientes y de los tipos,

⋅ inters por los sectores huildes y por lo pintoresco de la "ida cotidiana,⋅ tea de aor il'cito con inter"ención de terceros,⋅ aparición de saberes cl&sicos que deuestran la cultura del autor,⋅ "ariedad de di&logo, con lengua#e culto y en ocasiones arti*cioso

e+clado con la con"ersación noral,⋅ acción de rito lento y⋅ poca puntuali+ación a la hora de ubicar espacial y teporalente los

aconteciientos, ropiendo en ocasiones la lógica, lo que puede llegar aatentar contra la "erosiilitud.

/in ebargo, la coedia huan'stica estaba escrita en lat'n, y La Celestina lo

est& en castellano su *nal es tr&gico, y el de la coedia huan'stica no lo es La Celestina incorpora la lengua coloquial, y la coedia huan'stica no lo hace.

?o obstante, hoy pocos discuten la índole esencialmente dramática de la obra,dado que lo esencial en ella es el di&logo y de l surgen la acción y la e"oluciónde los persona#es. /in ebargo, no es una obra pensada para ser representada,sino para ser le'da en "o+ alta.

lo medieval en la obra

La Celestina reproduce un conocido arguento edie"al. E3ist'a una coediaescrita en lat'n en el s.$((, conocida coo Pam!ilus" que relataba el acoso deun enaorado a una u#er a la que consigue ediante la inter"ención de una

"ie#a tercera. El rcipreste de 0ita, en su Libro de buen amor , lle"ó a cabo una "ersión de esta obra al narrar los aores de >. elón y >A Endrinainterediados por la "ie#a rotacon"entos, arquetipo de las entroetidas que sepon'an al ser"icio de los uchachos para doblegar las "oluntades de las #ó"enes.

s' las describ'a el rcipreste;

JKLtoa dM unas "ie#as,que andan las iglesias e saben lascalle#as;grandes cuentas al cuello, saben uchas

conse#as,con l&grias de oysn1 escantan9 lasore#as.

N/on uy grandes aestras aquestaspa"iotas<,andan por todo el undo, por plaOas e

por cotas4,a >ios alOan las cuentas, querellando suscoytas5;

&




PayQ Pqu&nto al que saben estas "ie#asarlotas6Q

Noa de unas "ie#as, que se !asener"eras7,andan de casa en casa e ll&anseparterascon pol"os e a!eytes e con alcoholeras,

echan la oOa en o#o8 e Oiegan bien de "eras.

NE busca esa#era de unas negras patas,que usan uncho los !rayres, las on#as ebeatas;son ucho andariegas e eresOen lasOapatas;

estas trotacon"entos !asen uchas baratas1G.

N>o est&n estas u#eres uncho se "analegrar;pocas ugeres pueden dellas se despagar.porque a ty non ienta s&belas !alagar,ca11 tal escanto usan, que saben bien Oegar.

N>M aquestas "ie#as todas esta es la e#orrruegalM que te non ienta, ustrale buenaor;que uncha ala bestia "ende buencorredore uncha ala rropa cubre buen cobertor.

N!"#; 1.S ipo de seilla con que se hac'an collares 9.S encantan <.S intrigantes 4.S casas, terrenosacotados 5.S proclaando sus preocupaciones 6.S bribonas 7.S herberas, herboristas, que entienden dehierbas .S hace re!erencia a costicos de la poca; en estos tiepos, alcohol era pol"o de antionio con elque se pintaban los p&rpados las pesta:as o las ce#as 8.S echar al de o#o, ebru#ar 1G.S !echor'as 11.Spuesto que, pues.

a terna !undaental de persona#es-CalistoSelibeaSCelestina la toa, pues, Ro#as de latradición medieval. 2ero ade&s, en estas pocas,estas u#eres TcasaenterasU supon'an un gra"eproblea oral. /in ebargo, ientras que el

rcipreste se con!ora con construir un bre"eepisodio cóico de *nal !eli+ ->A. Endrina y >.elón se casan, Ro#as le"anta alrededor de la*gura de la tercera y la pare#a una obra degrand'sia agnitud y repercusión, haciendo de lacodicia, la ruindad y la pasión causa de la tragediade todos los persona#es.

2or otra parte, era propio de la mentalidadmedieval no distinguir entre lo natural y losobrenatural -recordeos, por e#eplo, los Milagrosde Berceo, en que la %irgen se aparece coo si nada a sus de"otos, pero en elRenaciiento esta indistinción ya no se produce. En La Celestina, obra detransición entre abos oentos, todo trascurre en un plano estrictaentenatural y real, pero todos los persona#es pagan su per"ersidad o su locura,coo si la ano di"ina inter"iniese para castigarlos, aparte de la Tinter"enciónUde los hechos ligados a la agia de Celestina, &s propios del undosobrenatural.

a obra de Ro#as se nutre de elementos medievales pero distingue entrelos planos mundano y ultraterreno, interes&ndose enos por este ltio y*#&ndose en el coportaiento undano de los persona#es, e3plorando suspasiones y coportaientos.

los acontecimientos

Estructuralente, la obra est& "ertebrada en un 2rólogo -escenas iniciales delacto ( y dos partes; resto del acto ( al $(% y desde el $% al $$(.

a acción arranca -prólogo de un odo !ortuito; Calisto persigue a un a"e decetrer'a de su propiedad que ha entrado en el #ard'n de elibea. l "erla queda

+




prendado de su herosura y le declara inediataente su aor, pero ella lorecha+a al darse cuenta de lo que quiere -digaos que las intenciones de Calistono son todo lo honestas que requerir'a una relación U!oralU. Este hechodesencadena el con=icto dra&tico; Calisto se debate entre la realidadiposible de tener a elibea y el deseo de tenerla, lo que originar& su caosmental y emocional.

2ara dar gusto a su apetito -$% parte habr& de contar con la ayuda deCelestina. Ella, o"ida por la codicia, igual que /epronio, se dispone a actuar.Celestina contará con la ayuda del criado, con su trayectoria profesional y,especialente, con sus dotes naturales; la perspicacia, la sagacidad, laastucia, la elocuencia, la ipro"isaciónK la inteligencia, en sua. 2ero hallar&una serie de obst&culos; la priera oposición de 2&reno, que al principio seuestra leal a su ao Calisto, y el recha+o de elibea. 2&reno lo "encer&recurriendo a la codicia y la lu#uria elibea caer& en sus redes con la ayuda dela agia y los hechi+os y gracias a la iprudencia e insensate+ de lisa.-unque en realidad el prier recha+o de elibea hacia Calisto no !ue &s queun odo de preser"ar la &onra !ailiar porque en el !ondo ella tabin se ha

sentido atra'da por Calisto; desde el prier oento en elibea luchan eldeseo amoroso y e l temor por transgredir las noras sociales que le haninculcado y que tan "i"as est&n en esa sociedad en que se ue"en.2aradó#icaente, Celestina, tan sabia ella en todo lo re!erente a las pasioneshuanas, orir& víctima de la codicia; coo se niega a repartir el bot'nobtenido por los ser"icios hechos a Calisto, 2&reno y /epronio le dan uerte.Esto, coo es noral, les costar& caro y no tardar&n en ser a#usticiados.ientras tanto, el par de aantes se entrega al goce de sus desatadaspasiones bastante a#enos a las desgracias que a su alrededor est&n ocurriendo.

Elicia y resa, a!ectadas por lasuertes de Celestina y de los criados-'% parte, traan la "engan+a contraelibea, a la que culpan de todas lasdesgracias. /e hacen ayudar por /osiapara conocer el lugar y la hora deencuentro de los aantes y encargan aCenturio que lle"e a cabo su plan.Centurio en"'a a unos subordinados quesolo se dedican a eter ruido, pero todoocurre con tan ala !ortuna que Calisto,

al o'rle esc&ndalo, pretende salir a la calle ba#ando una escalera que hab'acolocado para escalar la tapia de la casa de elibea, se tropie+a, cae y se abre

la cabe+a. uere en el acto, claro. V elibea, desesperada tras saber la uertede su aado, se suicida.

personajes

Fno de los logros &s iportantes de Ro#as es la singulari(ación de lospersonajes, que se ale#an del ero tipo para aparecer coo persona#esindi"iduali+ados.

calisto

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Calisto es un #o"en fatuo doinado por la pasión aorosa, a "eces melancólico y retraído, a "eces furibundo y e)altado. iene poca con*an(a en s' iso,por lo que se "e incapacitado para actuar y, al no saber coo enaorar aelibea, recurre a la ayuda de /epronio y a las alas artes de Celestina.Calisto es egoísta y hasta amoral; se gu'a por el deseo de poseer se)ualmente a elibea, y para ello transgredir& cuantas noras orales y

sociales se opongan a la satis!acción de su apetito. Eparenta con losenaorados edie"ales en su e3altación aorosa y en el hecho de di"ini+ar a laaada, pero llega a perder la dignidad iplorando a sus criados y a la tercera,

y se aparta de ellos en su deseo !ogoso ya coentado arriba.

melibea

Bastante &s cople#a que Calisto, elibea oscila entre los atributos positi"os ylos negati"os.Recha+a casi "iolentaente las insinuaciones prieras del uchacho, perodespus duda y "acila y se entrega *nalente a l sin reparos. Es auda( yapasionada en el aor es decidida y práctica una "e+ que ha "encido sus

titubeos iniciales. Es arrogante con Celestina y suscriados. Es falsa cuando iente a sus padres ocuando acta con disiulo ante la "ie#a bru#a. Es,seguraente, el personaje más &umano de laobra. un siendo consciente del deshonor !ailiaren que est& incurriendo, desea a Calisto y hastasiente a!ecto por Celestina, que la lle"a a enga:ar alos de&s y a enga:arse a s' isa.

celestina

El antecedente &s claro del persona#e de Celestinaes el de rotacon"entos en el Libro de buen amor ,del rcipreste de 0ita; una tercera o alca&ueta quese encarga de !acilitar una relación aorosa ose3ual entre otras dos personas.Es, coo otros en la obra, un persona#e apasionado,pero su pasión no es la se3ual, sino aquella que tiene que "er con la codicia;desea la rique+a, y a su ser"icio o"ili+ar& todas sus dotes naturales.Celestina es perspica( y saga(, pues entiende con rapide+ cuantas situacionesse le plantean. Es astuta e inteligente, lo que le perite improvisar sobre lamarc&a para salir del paso de los &s "ariados conte3tos. /abe cóo manejar a las personas; conoce la naturale+a huana porque tiene una gran

e3periencia "ital. Es seductora y enga:osa, h&bil para enga:ar y capa+ decon"encer con su natural don de la elocuencia. /abe qu decirle a cada uno ycóo dec'rselo; con cada uno usa el registro que le con"iene para halagarlo,para tenderle la trapa en que caer&. Resulta superior a todos porque a todoslos hace caer en sus trapas. Es lcida y uy inteligente, pero tabiWn !alsa,a"ara y cruel y un e3ceso de esas cualidades la terinar& lle"ando a la uerte.

los criados + las prostitutas

2&reno y /epronio est&n unidos a sus aos por una era relacióncontractual; solo el interés económico los antiene *eles a ellos. 2or otraparte son, coo otros persona#es, interesados y lu#uriosos, !alsos cuando sientenla necesidad de serlo, desleales, cobardes y "iolentos.




a conducta de Elicia y de resa tabin "iene gobernada por la bs-uedadel provec&o. En ocasiones, se uestran en"idiosas y resentidas contra la clasedoinante.

padres de melibea

lisa es una gran se:orona orgullosa y alti"a, pero bastante insensata 2leberio,por su parte, representa al padre que se des"i"e por su hi#a, tierno, cari:osoKaunque tal "e+ deasiado con*ado y negligente. parece ya tarde en la obra,pero adquiere iportancia especialente si lo coparaos con otros padres denuestra literatura que se ostrar&n autoritarios, que ipondr&n su "oluntad siniportarles la de sus hi#os -enos an la de sus hi#as. Respeta la independenciade elibea y ser& quien &s su!ra por su prdida.

otros

rist&n y /osia son criados *eles, que aparecen cuando los anteriores ueren.Centurio, persona#e cóico, es un !an!arrón cobarde que ser& usado por resa

para "engarse. ucrecia ayuda a elibea en sus encuentros con Calisto. Critosolo sir"e para poner de ani*esto la !alsedad de Celestina y Elicia en el acto (.

tiempo y espacio

)rente a otras obras de la poca, llaa la atención cóo Ro#as trata tanto elespacio coo el tiepo en La Celestina.

2or la obra aparecen espacios uy concretos que nos o!recen a la par unpanoraa *dedigno de lo real social de su poca; calles ebarradas, casas con

cuadras para aniales, huertas, patiosK El espacio no est& constre:ido por lascon"enciones de los gneros dra&ticos, sino que surge del di&logo, lo e3ige laacción. a traa se desarrolla en multitud de lugares, tanto interiores cooe3teriores; las casas de Calisto, de Celestina, de 2leberio, las calles, el #ard'nKCoo en cualquier obra que atienda al decoro, los espacios condicionan laactuación y el &abla de los persona#es5, y no ser& la isa actuación la quetenga Celestina cuando est en su casa y con persona#es de su clase que cuandoest en casa de elibea con ella, por poner un e#eplo cualquiera.

En cuanto al tiempo, este se desarrolla de la !ora &s natural posible, demodo diacrónico ascendente. ?o obstante, para representar situaciones -ueocurren al mismo tiempo en distintos espacios, Ro#as acude a lapresentación del tiempo en paralelo6, recurriendo al siple procediiento deir dando la palabra alternati"aente a distintos grupos de persona#es.

>e la isa anera que en la inensa ayor'a de las obras literariasnarrati"as o dra&ticas, el tiepo de La Celestina se puede conteplar desdeun doble plano; el tiepo e3pl'cito, en el que la acción a"an+a de !oracontinua, sin interrupciones, y es un tiepo relati"aente corto aunque sinprecisar y el tiepo ipl'cito, &s largo necesariaente, en el que sedesarrollan los aconteciientos que no se nos cuentan, necesario para la

"erosiilitud dra&tica y la aduración psicológica de los persona#es.

5 El decoro no solo viene condicionado por los espacios! sino por el cúmulo de circunstancias que se dan cita

en cada momento espacio! tiempo! persona*es! acción! tema del que se (a$la! circunstancias sociales3 4i estuvi%semos ante una o$ra narrativa! aqu, nos re0erir,amos a lo que se conoce comonarración enparalelo o narración simultánea.




modos de e)presión + estilo

En La Celestina con"i"e el registroidio&tico culto con el popular .

⋅ El culto se de#a "er en e3presionesprocedentes de la retórica clásica-paralelisos, ant'tesis, o3'oros,concatenaciones, hiprboles,ep'tetosK, en estructuras propiasde un uso latini(ante delcastellano -cultisos, hiprbatos,construcciones de in*niti"o y departicipio, "erbos en posición*nalK y en las !recuentes alusiones históricas, b'blicas y itológicas

-que de#an entre"er el conociiento que ten'a Ro#as de autores cl&sicoscoo ristóteles, 2lauto, /neca o de renacentistas coo 2etrarca oBoccaccio.

⋅ El popular , siguiendo la tendencia iniciada en el s.$(% por el rciprestede 0ita en su Libro de buen amor , se ani*esta en el uso de unae3presión directa y espont&nea, e3presi"a y abundante en re!ranes.

os persona#es usan uno u otro segn las necesidades comunicativas, peroespecialente es Celestina quien llaa la atención a este respecto, pues cuidaucho su discurso en presencia de los se:ores y suelta retah'las de dichos ye3presiones populares con los o+os o con las prostitutas.

2or otra parte, diálogos, monólogos y apartes son los odos de e3presión queusa Ro#as para su obra7.

⋅ /e llegan a distinguir tres tipos de diálogo; el oratorio, largo y de ritobien r&pido, bien reposado segn la intención y actitud de los persona#esel de parlamentos largos con réplicas cortas y el conversacional,con inter"enciones bre"es.

⋅ os monólogos, por su parte, suelen ser e)tensos, y e3presan lainterioridad de quien los eite, sus eociones, sus ansias, sus con=ictos

interiores, su car&cter. /on, pues, un agn'*co recurso de caracteri+aciónde los persona#es.Estil'sticaente, abundan en ellos las interrogaciones retóricas, losparalelisos, las enueraciones, las ant'tesisK

⋅ os apartes son un con"encionaliso dra&tico ediante el cual unpersona#e hace un coentario que no es percibido por su interlocutor sinoque es captado por el pblico o por otros persona#es que haya en escena.>entro de los apartes, cobran en La Celestina especial iportanciaaquellos que son captados a medias por los personajes -ue no

En realidad! tam$i%n existen las acotaciones! pero no de la misma 0orma que las podemos tener en una o$radramática al uso 6las llamadas acotaciones explícitas que suelen aparecer destacadas entre par%ntesis o encursiva del resto del texto7! sino que aparecen de un modo implícito! intercaladas en el monólogo o en eldiálogo.

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debían oírlos; en estos casos, quien habla para no ser entendido, al serrequerido y responder en "o+ alta, disiula sus palabras anteriores y lescabia el sentido para no ponerse en e"idencia. >e esta anera, pore#eplo, se ani*esta lo !alsa que llega a ser Celestina o lo desleales quepueden ser los criados que en presencia de sus se:ores *ngen respetopero a la enor oportunidad los critican o ridiculi+an.

Coo es e"idente, a los dos undos que aparecenre=e#ados les suelen corresponder odos dee3presión di!erenciados. s', Calisto y .elibea -yel resto de persona#es de tragedia se e3presan demodo culto y re*nado en sus con"ersaciones, una!ora de hablar propia de las clases altas einstruidas de la poca, incluso llegando a loe)agerado y lo arti*cioso -sobre todo Calisto estaes una caracter'stica propia de la coediahuan'stica, coo ya se:alaos arriba. 2or sulado, los ru*anes y las rameras -y el resto de

persona#es de coedia tienen conversacionesmás vivas, más /reales0; intercalan re!ranes einsultos, usan !rases hechas, entrecortan elensa#e, tienden a la estructuración sencillaKCelestina, por su parte, adaptará su discurso a la

situación counicati"a; usar& un ni"el &s ele"ado cuando hable con lospersona#es y el ni"el &s popular con criados y con las chicas.

temas

or, codicia, !ortuna, agiaK se dan la ano en La Celestina y nos o!recen unraillete te&tico llaati"o y atrayente, incluso para el lector de nuestraactualidad.

el amor

unque en algunos aspectos est algo ligado a la tradici#n ro$enzal-recurdese todo lo "isto relati"o al amor cortés, el aor en La Celestinasupera con creces el mero contemplar a la amada y se uestra, ante todo,coo pasión incontrolable que ciega a los aantes y los lle"a al desastre &str&gico. El aor es algo ena#enador, desestabili+a y pone !uera de s' a losaantes, los desordena oralente y los destruye. El aor, en La Celestina,engendra caos, destrucción y uerte. a pasión aorosa, segn entendeos, nonos lle"ar& a ningn buen puerto. /eaos prudentes y coedidos y noe3cesi"aente apasionados, pues.

la codicia

a codicia es otra de las pasiones que ue"en el undo de La Celestina. acodicia enloquece a los criados, "ence a Celestina, ue"e a Elicia y resaK

8 / todo esto (a) que añadir que! en ocasiones! algunos representantes del sector social más $a*o se expresancon discursos comple*os ) llenos de reminiscencias clásicas. /s,! 4empronio! $astante al principio de la o$ra usaun estilo $astante ale*ado de lo popular en un discurso misógino Lee los historiales, estudia los flósoos, miralos poetas. Llenos están los libros de sus viles y malos ejemplos, y de las caídas ue llevaron los ue en algo,como t!, las reputaron. "ye a #alomón do dice ue las mujeres y el vino hacen a los hombres renegar.Cons$jate con #$neca y verás en u$ las tiene. %scucha al &ristóteles, mira a 'ernardo.()* La 9elestina! /cto .

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apoco la codicia nos lle"ar& a ningn buen puerto; por codicia uereCelestina, por codicia caen a#usticiados /epronio y 2&renoK /eaosdesprendidos y generosos, y no codiciosos, pues.

la fortuna

a !ortuna cabiante, la suertebuena o ala, es una !uer+acaprichosa, ciega, quearbitrariaente reparte alegr'ao pena por doquier, a unosencubra y hunde a otros, aeste lo ayuda y a aquel lodestro+a. a !ortuna, con suscabios continuos, se con"ierte

en !uente del desorden y del caos que gobiernan en el undo.

los tópicos del tempus fugit y del carpe diem

?o solo el tea tópico de la %ortuna mudable aparece en la obra. os persona#esde La Celestina son absolutaente conscientes del paso !uga+ del tiepo8 y

"i"en "erdaderaente acosados por l. 2or eso, se lan(an con ansia aldisfrute de sus pasiones, al goce de los placeres. Temus %ugit y care diemaparecen, por tanto, irreisibleente unidos; apro"echa el oento, pues eltiepo pasa presuroso.

la magia

/eguraente contribuya la agia a generar un clia &s TliterarioU, peroesencialente tiene coo coetido !uncional el de despertar a .elibea a lapasión amorosa. 0oy d'a la agia nos puede parecer un tea e3ótico oe3tepor&neo, pero en el oento de la obra es una realidad palpable; se cre'aen el poder de algunas personas, especialente u#eres, las agas ohechiceras, para in=uir sobre la naturale+a ediante la anipulación dedeterinadas sustancias o con ciertos con#uros pretendidaente &gicos.Celestina recurre, por tanto, a sus saberes &gicos para hallar una solución alrecha+o de elibea. /i este tea, el de la agia, es solo un adorno o es uno delos otores de la tragedia es asunto contro"ertido que ha en!rentado y en!rentaa los cr'ticos. o que es innegable es que la presencia de la agia es innegable;est& en la descripción porenori+ada del gabinete de la "ie#a o en el !aosocon#uro a 2lutón, dios de los in*ernos.

Celestina sale a escena despus de que 2&reno nos la haya descrito coohechicera, y la aceptación de elibea de los aores de Calisto no se produceantes de que la "ie#a realice su con#uro sobre el cordón que aquella le dio.2arece, pues, innegable el car&cter &gico -o hechicero de este persona#e.El conte3to de la poca en que se escribe la obra era procli"e a la creencia enlas artes &gicas, especialente en lo tocante a su !uer+a en las relacionesaorosas, y la principal !unción te&tica de la "ie#a Celestina en la obra deRo#as es la de producir -ya lo anticipaos arriba, sir"indose de un pacto con el>iablo, un caso de !ilocatio cuya "'ctia es elibea; la !ilocatio consist'aen suscitar por edios &gicos en la "'ctia del hechi+o una "iolenta pasiónaorosa hacia una persona deterinada sin que sta se diese cuenta de quealgo anoral hab'a ocurrido. Esta, la de la !ilocatio, era una de las pr&cticas

: Este sentimiento de lo e0,mero del tiempo se manifesta vivamente en la o$ra con numerosas alusiones a las(oras ) a los relo*es.

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docuentadas &s !recuentes en las artes ThechicerilesU de la poca. ella, ypor tanto a la inter"ención deon'aca, hay que atribuir la repentina ansia deelibea y su incendiada pasión hacia Calisto. 2or otra parte, nada e#or que larapide+ y la "eheencia del sentiiento para hacer "er a los lectores las!unestas consecuencias del hecho de recurrir a la "ie#a hechicera; &o'as no solonos alerta contra el desbocado imulso aasionado" también contra los tratos

con ciertos ersona'es comunes en su momento.a presencia y la e*cacia de la agia en la obra -al enos de la agia o de lahechicer'a al ser"icio del aor es e"idente. En el undo de Celestina, y acasoen la sociedad que a Ro#as rodeaba, la agia se ten'a en cuenta, y eso esprecisaente lo que Ro#as quiere denunciar y criticar.

la sociedad

El hecho anteriorente "isto de la rele"ancia social que la agia o la hechicer'apudiera tener en la poca del autor no es el nico re=e#o de la realidad socialque aparece en La Celestina. Con este, Ro#as incorpora otros uchos eleentosque nos dan una buena uestra de lo social y de lo histórico de su tiepo.

La Celestina poco o nada tiene que "er con otras narraciones contepor&neas aella en que se e+claban de"aneos aatorios iposibles, hroes casi 'ticos,lugares e3traordinarios y tiepos inubicables; presenta criaturas Tde carne yhuesoU que se ue"en por las calles de una ciudad cualquiera de su poca. Ro#as le interesa dar rele"ancia a su intenci#n moralizante -apartar a los #ó"enesde la locura aorosa y por ello sita su historia en el presente y en un espacioper!ectaente habitable en el que un lector se pueda reconocer. 2or ello en LaCelestina encontraos usos aorosos del oento, retrato de las relacionesentre aos y criados, el ercantiliso naciente, la ya por e3tenso encionadahechicer'aK Es decir; un *dedigno re=e#o de los usos sociales del oento.

este respecto, en la obra de Ro#as es e"idente el cambio -ue la sociedadmedieval va sufriendo. )undaentalente se aprecia en;

⋅ El estableciiento de nuevas relaciones entre distintos estamentossociales; la noble+a ha sido despla+ada en la cspide de la escala socialpor la alta burgues'a y ya no iporta tanto el lina#e coo el podereconóico los la+os de a!ecti"idad rec'proca que un'an a aos y criadosen pocas anteriores se han roto y han sido sustituidos por erasrelaciones econóicas -traba#o a cabio de un salario. s', la codicia y laconciencia de su origen plebeyo despiertan en los criados los sentiientosde rencor y antipat'a hacia sus aos.

⋅ a con*guración de un nuevo código moral y de relacionesinterpersonales; el cabio de una econo'a de trueque a una deercado -o al enos a una econo'a burguesa; ya no se cabian bienespor bienes o ser"icios por ser"icios, sino bienes y ser"icios por dinerotra#o consigo el distanciaiento en las relaciones entre las personas y conello la conciencia de la propia indi"idualidad y de la propiedad indi"idual,el ansia de libertad, la bsqueda del pro"echo y el a!&n deenriqueciiento.

La Celestina, pues, nos uestra dos mundos socialmente separados; lasclases a!ortunadas de los enaorados y las ba#as de Celestina, sus chicas y los

criados. Ro#as nos hace "er que los malos !ábitos" las asiones erniciosas" noson ri$ati$as de este o de a(uel sector social" sino de todos , y que todos los

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sectores se buscan entre s' para satis!acer esos "icios y esas pasiones si esnecesario, porque ni el dinero ni la ascendencia e3ien del pecado; el serhuano es "icioso y apasionado, y no se es e#or o peor persona por habernacido en un sector o en otro. 2arece que Ro#as est e3presando as' una que#asobre los prejuicios en general y sobre los pre#uicios que acerca de loscon"ersos e3ist'an en la sociedad de su oento en particular -recordeos que

Ro#as era o con"erso o descendiente de con"ersos, lo que lo tendr'a en el puntode ira de las cr'ticas de uchos de sus con"ecinos.

Esta e+cla de sectores sociales no se queda solo en lo e3presadoanteriorente -que ya ser'a por s' iportante. de&s, es la rimera $ez (ueen una obra en castellano los sectores sociales ba'os ad(uieren tantaimortancia como los acomodados. Ello hace de La Celestina un bra"o ejemplodel realismo que desde sus or'genes ha caracteri+ado a la literatura espa:ola.

la moral

?o es inhabitual encontrar en La Celestina escenas que podr'aos considerarobscenas e inmorales. En la poca es bastante !recuente hallar contenidoerótico u obsceno en uchas obras, en toda Europa, con una )nalidad

%undamentalmente c#mica. /in ebargo )ernando de Ro#as no trata el erotisocoo algo cóico, sino coo materia dramáticamente necesaria; Celestina se

"ale de la ri#osidad de 2&reno y de /epronio, por e#eplo, para hacer conellos lo que quiera, y de la isa anera gobierna a Elicia y resa. 2or otraparte, los oentos libidinosos entre Calisto y elibea, en los que a "eces no seahorra en lasci"ia, son absolutamente necesarios para el de"enir de losaconteciientos; Ro#as pretende hacernos entender que la pasión nos puedelle"ar al desastre, por lo que el autor no puede de#ar de ostrar esos oentos.

a lasci"ia, la carnalidad, la obscenidad !oran parte esencial de laTragicomedia de Calisto y Melibea, poseen una intensa !uer+a dra&tica que lasale#a de la era sensualidad que se puede obser"ar en otras obras literariascoet&neas o posteriores a ella -o cineatogr&*cas de hoy d'a.

trascendencia de la obra

El 3ito y la repercusión de La Celestina !ue inediato ya desde la edición de laComedia en 1489 -el propio ). de Ro#as dice que se "io oti"ado a apliarla. aedición de la Tragicomedia de 15G9 adquirió tanto prestigio que incluso a

algunas ediciones posteriores se les pon'a ese a:o de ipresión para quetu"ieran &s "entas. >urante el propio s.$%( se hicieron al enos ochentaediciones de la obra y !ue traducida a las principales lenguas europeas; !rancs,holands, italianoK de&s, tra#o consigo una autntica retah'la decontinuadores e iitadores, no solo en Espa:a, que titulaban alegreente susobras coo *egunda Celestina o Tercera Celestina1G. a adiraron los grandesde nuestras letras, coo Cer"antes o ope de %ega -que escribió una obra que lerinde hoena#e; La +orotea y se aprecia su in=u#o en buena parte de lasno"elas cortesanas y picarescas del s.$%((.

1; /s,! por e*emplo! Feliciano de 4ilva #egunda comedia de Celestina o <aspar <óme de =oledo TerceraCelestina! o$ras menores! mu) ale*adas de las calidades literarias de la de 'o*as.

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bibliografía:⋅ lonso )ern&nde+, /. y otros; Literatura ,. %itoria. agisterio y Casals, 9A edición. 1884⋅ &+aro, ). y usón, %.; Literatura esaola. /ac!illerato ,. Estella -?a"arra. naya. 1881

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⋅ http;YYlosedioscooeta!oras.blogspot.co.esY9G11YG8YlaScelestinaSphilocaptioSySelScon#uro\98.htlJ1GS11S14L

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fernando de rojas resumen la celestina

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