El lenguaje como herramienta de transformaciónEES nº 8 de Brandsen - Pág 4

EES n° 4 de Alejandro Korn - Pág 8

Año 2 - Número 6 - Octubre 2018

Publicación de la direcciónde educación Secundaria

"En la escuela me siento apoyada, es comomi segunda casa"

Para cada número de Catalejo nos sentamos previamente a pensar y planificar qué vamos a abordar, recorriendo los números anteriores y los lugares a los que nos y les acercamos; pensamos en todas las experiencias que conocemos y comenzamos una nueva búsqueda de experiencias, intentando llegar a cada una de esas comunidades y cada escuela, entendiendo que las particularidades están definidas por variados factores.

Pensar políticas de cuidado implica no ser ajenos a la temporalidad de las instituciones y su coyuntura, a las demandas de las/os estudiantes imponiendo temas que las/os atraviesan en todos los sentidos, a su participación en todos los espacios. Existe una evidente necesidad de aggiornarse a tiempos que no son los nuestros, sino de ellas/os, de las/os estudiantes. Animarnos a temas que muchas veces como adultas/os nos superan porque crecimos de otra manera, pero que como parte de la comunidad educativa no podemos dejar que nos pasen por delante sin involucrarnos.

En la Provincia de Buenos Aires existen innumerables equipos escolares que no hacen caso omiso, sino que se acercan, abrazan e intentan desandar éstas temáticas junto a las/os estudiantes, que nos obligan a aprender con ellas/os. Trabajar desde el debate y el respeto cada uno de esos temas que además de

estar en la currícula se filtran en el aula, en los pasillos, en el patio y en las propias casas. Escuelas que ante la irrupción de éstos nuevos ejes, que surgen muchas veces desde los propios intereses y cotidianidades de las/os estudiantes,

dan respuestas.

Existe una transformación real de una escuela que se pensó recientemente para todas/os, todes, que se concreta en cuestiones como éstas: una piba trans, el lenguaje construido socialmente, lo público y lo privado, lo que está dentro y fuera de la escuela, las redes sociales y la complejidad de todos esos nuevos mundos en los que ellas/os, las/os jóvenes, conviven. No podemos ser ajenas/os, las cosas pasan.

En este sentido, desde Catalejo quisimos acercarnos a algunas de éstas situaciones como reflejo de lo que pasa en las escuelas, quizás no en todas, pero sí en muchas, y que son parte de una cultura cambiante, que en estos tiempos pareciera ir más rápido. Las/os invitamos a leer y desandar todas éstas complejidades del cotidiano de las/os estudiantes, docentes y equipos. Las/os invitamos a acompañar como adultas/os a nuestras/os jóvenes, que no son nuestras/os, sino de la vida.

2

EDITORIAL_______________________

SUMARIO

Editorial

Convivir en la escuela: las redes sociales como realidad

“En la escuela me siento apoyada, es como mi segunda casa"

El lenguaje como herramienta de transformación

En primera persona

¡Lo llenan uds.!

_____________________________

2

3

4

8

10

11

Pág.

Pág. 3Publicación de la Direcciónde Educación Secundaria

Convivir en la escuela:las redes sociales como realidadUna de las características de los tiempos que corren se relaciona fuertemente a la transformación de los vínculos por la expansión del uso de las redes sociales. Esto es algo que se entromete en en el tejido social y que así como potencia las relaciones, también genera conflictos. En ese entramado está la escuela las/os estudiantes y toda la comunidad educativa. Desde este número de Catalejo queremos retomar las conversaciones que pudimos entablar con la Inspectora de Enseñanza de Nivel Secundario, Natalia Chapartegui, quien nos comparte la propuesta de la EES Nº 5 de Carmen de Areco, “Convivencia Digital”.Nos cuenta que la iniciativa “es el resultado del constante trabajo del Equipo Directivo, Docentes, Preceptores, Bibliotecaria y Equipos de Orientación escolar”, identificando que la mayor parte de los conflictos que se presentan en el ámbito escolar son una proyección de los que suceden en las redes sociales. El uso de grupos de WhatsApp de alumnas/os, grupos de WhatsApp de madres y padres, y la multiplicidad de redes en las cuales se dan los intercambios: Facebook, Instagram, Twitter, Telegram, Messenger, Snapchat, entre otras”.

Entre las situaciones de conflicto que pudieron diagnosticar y que consideraron fundamental trabajar con las/os estudiantes, se encuentran el grooming (Acoso de un adulto hacia un niña/o mediante la red social), ciberbullyng o ciberacoso (Acoso mediante la red social entre pares) y el sexting (envío de contenido sexual mediante el celular, también entre pares). Por esta razón se propusieron la realización de Jornadas específicas de convivencia digital en el marco de los Acuerdos Institucionales de Convivencia. Uno de los conceptos que se pone de relevancia en este trabajo es el de “ciudadanía digital”, ya que pone el foco en la responsabilidad de nuestras acciones y el ejercicio de la ciudadanía, también en el ámbito virtual.

Desde la fundamentación de la propuesta se plantea que “lamentablemente lo que es diferente se percibe como inferior. Esta actitud se refleja en numerosas situaciones de injusticia, pelea y maltrato que se dan indistintamente en el mundo virtual o en el mundo real. (...) Sin lugar a dudas se ha desarrollado una verdadera cultura digital que inspira a los jóvenes a explorar, ser creativos, a comunicarse y a aprender, pero es importante que cuenten también con información y estrategias de protección ante los posibles riesgos que pueden surgir en los espacios digitales”.

Entre las actividades que se propusieron, realizaron un mural callejero y afiches, difusión en las redes sociales, spot publicitarios, jornadas de reflexión a partir de recursos propuestos por las/os docentes. También es de destacar que se trabaja pedagógicamente desde las diversas materias abordando de manera transversal la inclusión y la utilización responsable de las redes sociales.

Hablamos con la Directora de la institución, Rosa Oppizzi, y dijo que según pudo registrar en las Jornadas de reflexión realizadas con las/os estudiantes, hubo un impacto favorable en relación a la convivencia democrática, fortaleciendo los vínculos entre las/os jóvenes y con las/os docentes. Destacó que entienden a la convivencia como algo que trasciende las paredes de la escuela y que se proyecta fuertemente en la virtualidad de las redes sociales. La escuela es conocida distritalmente por la propuesta de uso responsable del celular, fundamentada en la Res. 778/161, y por el trabajo de acompañamiento del Equipo de Orientación Escolar. También comentó que están por presentar el proyecto a nivel distrital en el Parlamento Juvenil del Mercosur.

El objetivo de esta sección es retomar experiencias que suceden en las escuelas y las diversas formas de abordaje que se construyen en relación a los nuevos lenguajes. Esperamos que sirva como insumo para pensar mejores formas de vincularnos.

Si quieren contarnos su experiencia con la incorporación de los nuevos lenguajes con sentido pedagógico en el aula, pueden escribirnos al email con el asunto “Dinámicas TIC”.

Contacto:comunicacion.secundaria@abc.gob.ar

La Dirección General de Cultura y Educación dictó la Resolución Nº 778, publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Buenos Aires el 10 de noviembre de 2016. La misma deroga la Resolución Nº 1728/06 que prohibía el uso de celulares a los alumnos y docentes en los establecimientos educativos de su jurisdicción. Asimismo habilita el uso de distintos dispositivos tecnológicos didácticos enmarcados dentro del Proyecto Educativo Institucional.

La secundaria comparte edificio con la EEP Nº 17 y funciona en dos turnos: 1ero y 2do año a la mañana y 3ero, 4to, 5to y 6to en vespertino. Recibe a 116 estudiantes y es una de las llamadas Escuelas Promotoras, con única orientación en Ciencias Sociales.

“Este año creció la matrícula”, comenta Claudia Cornet, la Directora, agregando que en primer año muchas/os provienen de otras escuelas, en varios casos por repetir el año. Claudia cree que deben trabajar más fuertemente la articulación entre la primaria y la secundaria. En este sentido, se encuentran planificando actividades para que las y los estudiantes del último año de primaria comiencen a vincularse con la secundaria.

La de Agustina es una historia de búsqueda de identidad, de encuentro con los propios deseos, de sentir y decidir quién querer ser. Tiene 17 años, vividos intensamente. Claudia nos habla de Agustina como su debilidad, su figurita difícil, su obsesión. No es para menos. Se trata de una estudiante que era Brian y hoy es Agustina, se trata de una historia de vida fuerte, que decidieron mirar, atender

y no dejar pasar. Un proceso de libertad del que forman parte.“Esto es como una novela”, dice Claudia, riendo, mirando a Agustina que se tapa la cara y se suma a las carcajadas. A pesar de tener una asistencia fluctuante, siempre hacen esfuerzos para que siga, para que vaya a la escuela pase lo que pase. Este año

le dijo “¿pero vas a venir en serio a estudiar?”. La respuesta de Agustina fue: “este año vengo a terminar, Claudia”. La secundaria fue siempre un lugar al que volvió, allí encontró un refugio.

Así fue que en este ciclo 2018 Agustina hizo una tregua y decidió estabilizar su trayectoria. Nos hablan de su vínculo, Claudia no tiene hijos, así lo decidió. Agustina, por su parte, transita una relación difícil con sus padres.

La Directora nos ceba mate y nos cuenta: “Acá los chicos tienen muchos problemas, tenemos que acompañarlos. Lo de sus trayectorias es lo que más nos interesa, que

Agustina es una estudiante trans que cursa el 3er año de la EES Nº 8 de Brandsen, en el Barrio La Dolly. Catalejo se acercó para conocer esta escuela, en la que se trabaja fuertemente para generar estrategias inclusivas y abordar situaciones de vulnerabilidad, siempre con el foco puesto en las/os estudiantes.

4

"En la escuela me siento apoyada, es como mi segunda casa"

“Lo que quiero esque se generen espacios

de oportunidades para todos, que sigan sus estudios

y trabajen”, dice Claudia.

el aprendizaje sea desde su propia historia, con exigencias, nada es regalado, pero que tengamos otra mirada, más amorosa; trabajamos fuertemente la circulación de la palabra y a partir de eso aparecieron historias de vida muy fuertes”. Nos confiesa que al ver esas historias de sus estudiantes propuso: “En esta escuela no quiero gritos, porque para grito ya está la vida”.“Con Agustina tenemos estados de amor y odio, cuando yo le marco algo ella se enoja. Pero siempre pensamos en su futuro”, dice Claudia. “Yo creo que la escuela te marca la diferencia en la vida”, agrega.Agustina tiene hermanos, vivió algunos años con su papá y otros con su mamá. También vivió sola. Convivió en familias ensambladas y vivió experiencias que la marcaron. Decidir cambiar su identidad de varón a mujer fue un proceso largo. Ella nos dice que desde los cuatro años quiere ser mujer pero no sabía cómo decirlo.En la escuela lo percibían y en ese sentido aplicaron el Protocolo1 normativo, entonces Agustina usa el nombre que ella eligió para su identidad, todos la llaman así y va al baño de mujeres.

Un día, en la escuela, Agustina contó que estaba atravesando situaciones conflictivas en su casa. La preceptora Cecilia Castro y Claudia, deciden apoyarla, buscaron las formas de acompañarla, de dar apoyo y contención. Pero Agustina dejó de asistir a la escuela, a pesar de los esfuerzos por retenerla.

La estudiante recuerda: “Llorábamos juntas, ella (Claudia) me acompañó en todo siempre”. La Directora nos sigue cebando mate, vemos en ambas mujeres el vínculo propio de haber pasado la tormenta. “A veces de afuera no lo veo pero ella está trabajando mucho desde adentro”, dice Agustina, reconociendo el trabajo directivo.

“Hoy soy profesora de baile en una comparsa y a veces falto a la escuela por el trabajo. Me gusta poder alentar a las demás chicas trans de que se puede. Estoy orgullosa”, cuenta. Vive con su mamá, a quien le rindió homenaje con tinta en su piel: Se tatuó Mamiii así, con tres i, y agrega “Mi

punto débil es mi mamá”.“El grupo que tengo de compañeras/os es espectacular, es el mejor que tuve”, dice la estudiante. También recuerda que tenía conflictos con otras/os compañeras/os hace un tiempo, porque se peleaban mucho. Claudia interviene y explica “Los chicos jamás se quejaron de que ella fuera trans, sino de los

malos tratos que recibían de ella”. La joven reconoce “Yo voy mucho al choque” y a lo largo de la charla entendimos por qué. Es que Agustina tiene la sangre en ebullición y la vida la ha acostumbrado a defenderse.

La joven comparte el mate con nosotras mientras espía el celular. Cuando se empezó a sentir más cómoda, a medida que avanzaba la charla, sus manos se movían acompañando a sus palabras. Sus pulseras chocaban en la mesa de formica. “Yo me levanto con una sonrisa, aunque a veces este mal”, confiesa. “Soy profesora de baile en la Comparsa Sapucai, escribo canciones, la mayoría melancólicas, una le escribí a mi mamá, otra para mi ex, escribo frases, me pongo a coser, me armé todo el vestuario de la comparsa”, nos cuenta con entusiasmo.

Siempre a la escuela

A pesar de su asistencia irregular, Agustina regresa siempre a la secundaria: “Quería volver, para dar este ejemplo de

“...sabemos que la vidaya es diferente para un trans que para quien no lo es. Por eso queremos darles las herramientas”,

dice la directora.

Pág. 5Publicación de la Direcciónde Educación Secundaria

1PROTOCOLO PARA EL ABORDAJE DE LA IDENTIDAD DE GÉNERO EN LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS DE LA PCIA. DE BS. AS. Comunicación 6-15. Anexo 1. “Llamar al alumnx por el nombre de pila elegido, relegando a segundo lugar si hay adecuación con el DNI (Art 12, Ley 26.743)”. Disponible en abc.gob.ar. Agustina y Claudia

que las chicas trans también podemos. Para ser el ejemplo de otros chicos que quieren ser mujer, que pueden tener sus estudios, su trabajo. Que es lo que yo estoy logrando en este tiempo. Para que los demás también se animen”.No es necesario dar detalles aquí de momentos oscuros que vivió la estudiante. Lo que ella resalta es que en esas situaciones de mayor fragilidad y desesperación su directora le dio la contención que necesitaba: “Me sentí re acompañada por Claudia, por todo lo que había hecho ella por mí; lo valore”. “Me hizo volver a la escuela esto, me siento acompañada, el grupo de compañeros que tengo ahora me gusta mucho. Es donde me siento apoyada y es como mi segunda casa”, dice Agustina y agrega que los profesores “son un amor”.

Nos confiesa que la noche anterior a la entrevista no durmió, un poco por nervios y otro poco porque se quedó escribiendo canciones para la Comparsa; se acercaba el Día del Niño y una correcaminatas.

“A la noche me pongo a pensar…estoy dejando la escuela por el baile. Ya debo estar libre por las inasistencias”, dice Agustina; junto a Claudia expusimos una batería de argumentos de por qué no debe dejar la escuela. Ella agrega: “Me gustaría ser actriz cómica, por ejemplo. Me gusta mucho el baile, me gusta ser profesora, armar coreografías, mostrar lo que yo enseño, mis alumnas que me quieren, nos ayudamos”.

Claudia destaca: “Yo la reto, insisto, la sostengo, nunca la doy como desertora (...) prefiero que siga perteneciendo a la escuela, yo quiero que termine”. Para todos sus objetivos cuenta con un equipo “muy comprometido”, Gustavo Corrieri, el secretario y Cecilia, la preceptora, más los profesores que hacen un gran trabajo.

Es una estudiante “sumamente capaz, los dos primeros años que concurrió a la escuela tenía muy buenas notas, no era ninguna improvisada, todo lo contrario. Es mi lucha constante, no puede desperdiciarlo. Ella es tan importante como cualquier otro chico, pero más aún porque queremos que tenga

otros logros, porque sabemos que la vida ya es diferente para una trans que para quien no lo es. Por eso queremos darles las herramientas”, dice la directora.

Claudia cuenta que, trabajando en las escuelas públicas aprendió de las historias de vida de sus estudiantes y vivió

experiencias que nunca creyó que iba a vivir: “Hay cimbronazos que te posicionan como mejor persona”. Ella sale a buscar a sus estudiantes si no asisten, dice que es “muy feliz trabajando en las escuelas públicas, acá trabajás con buena madera, podés hacer maravillas”.

“Claudia me dice que yo me tengo que juntar con amistades que me hagan bien, que me ayuden a seguir adelante, a progresar, no a retroceder, y yo me enojo con ella”, dice la estudiante.“Agustina es como mi obsesión. Me enojo cuando falta, digo ́ qué tengo que hacer para que venga´”, se pregunta la Directora con un tono más arriba en su voz. Sabemos que ese es un desafío que se le presenta a muchos directivos de muchas escuelas de nuestra provincia.

En el grupo de WhatsApp de su curso y a través de Facebook los profesores “me mandaban mensajitos cuando no venía a la escuela, me

“Ser docentete permite ver cosas que

otros no ven. Hay vínculos que te marcan y te hacen crecer. Hay un montón de docentes que se ponen la escuela al hombro”, dice

Claudia.

6

“Un día me peleé con ellay me fui a anotar a otra escuela,

y estaba ella ahí de preceptora, y dije ´¡pero che! esta es como la mugre, está

en todos lados´.Y cuando vine a pedir el pase

me lo rompió así (gesticula con las manos) y me dijo ´vos te quedas acá,

no te vas a ningún lado´”.

CUENTA AGUSTINA

preguntó “qué tengo que hacer yo, acompañar desde qué lugar”.“Ser docente te permite ver cosas que otros no ven. Hay vínculos que te marcan y te hacen crecer. Hay un montón de docentes que se ponen la escuela al hombro”, dice Claudia.

“Somos una escuela que convoca a todos. Mi prioridad son los chicos”, comenta Claudia. Y eso se nota, ponen el cuerpo. “Yo reconozco en Agustina su valentía, porque hay gente que se muere queriendo ser alguien que nunca

va a ser porque no tienen la valentía de decirlo. Y ella a pesar de todo es Agustina”.“Lo que quiero es que se generen espacios de oportunidades para todos, que sigan sus estudios y trabajen”, dice Claudia.

Actualmente Agustina espera cumplir los 18 años para tener su DNI en consonancia con su identidad de género y quiere comenzar el tratamiento hormonal “para ser más femenina”; averiguó que en el

hospital Gutiérrez de La Plata puede hacerlo.“Yo me propongo metas y las cumplo”, dice la joven, y no nos quedan dudas.

Nos fuimos de la charla, después de sacar algunas fotos, con ganas de que todos conozcan la historia de Agustina, una historia de búsqueda y afirmación de la propia identidad, de valentía y esfuerzo. La historia de una escuela y su equipo, que ante los desafíos, retoman sus compromisos para educar ciudadanos libres y en pleno ejercicio de sus derechos.

Pág. 7

“Yo reconozco en Agustina su valentía,

porque hay genteque se muere queriendo ser alguien que nunca va a ser porque no tienenla valentía de decirlo.Y ella a pesar de todo

es Agustina”,dice Claudia.

decían ´Agustina qué te está pasando que no venís, tenés algún problema?´”. En la EES N° 8 se generan distintas estrategias para que la estudiante no pierda la regularidad. “Me dicen ´si no podés venir te preparo un trabajo práctico, pero favor no dejes la escuela´, o , ´Si quedás libre seguí viniendo igual, asi te tomamos trabajo práctico más adelante y completas el año´”.

La Educación Sexual Integral y transversal

En la EES N° 8 se trabajan los temas que la realidad y las/os estudiantes proponen, que los diseños curriculares establecen y que lo cotidiano trae. Claudia asegura que la ESI atraviesa todas las materias y los contenidos. En el primer cuatrimestre fue necesario abordar la temática de la despenalización del aborto y su tratamiento en la cámara de senadores y diputados. Ese tratamiento se hizo en el espacio de Construcción de Ciudadanía.

“Trabajamos por una sexualidad responsable. La sexualidad tiene que ser vivida libremente. Pero es un trabajo de todos los días”, explica la Directora. La estudiante destaca: “Aprendí acá lo que era cuidarme con un preservativo, lo que era el HIV”.

En ese momento recordamos las producciones audiovisuales que nos llegaron a la Dirección de Educación Secundaria, un video llamado “Esta/e soy yo, respétame”, y otro llamado “Pequeñas historias”, donde en un primer plano, las bocas de las/os estudiantes narran diversas situaciones vinculadas a la convivencia, la diversidad y el respeto. Ambas se ríen y nos dicen que Agustina siempre participa mucho en todo lo que tiene que ver con lo artístico. “No es tan fácil desandarse. Nos tenemos que aggiornar y acomodar a los tiempos, es todo un aprendizaje. La historia de Agustina me movilizó porque tenía que aprender”, recuerda Claudia, y nos cuenta que se

Publicación de la Direcciónde Educación Secundaria

Academia Española (RAE) no acepta el lenguaje Inclusivo, en este sentido la profesora comentó que “hay muchas cosas que no acepta la RAE, por ejemplo la incorporación que nosotros tenemos de palabras de los pueblos originarios, ni las formas vulgares que tenemos de las palabras que modificamos”. Mariel nos cuenta que la mayoría de las/os más de treinta estudiantes de este curso estaban a favor del uso del lenguaje inclusivo, pese a que aún no lo incorporan o practican fluidamente, y que también había algunos estudiantes en contra de su utilización.

“Les dije que el lenguaje inclusivo no es obligatorio y que a la larga vamos a hablar así, no nos vamos a dar cuenta, ni siquiera nos vamos a estar acordando de esta discusión”, dijo segura la profesora “porque de hecho no estamos

hablando como hablaban en 1810, el lenguaje es una construcción social”.

Mariel recuerda que ese día particularmente volvió “re contenta” a su casa, por el debate que tuvo lugar en el aula, los argumentos y las ideas que pudieron elaborar las/os estudiantes, “decís, ´realmente sirve lo que estoy dando´. Uno me dijo ´profesora, pero entonces si el lenguaje es una construcción social y nosotros vamos formando las palabras, ¿por qué tenemos que pedir permiso para modificarlo?´, y lo aplaudieron todos. Esa es una buena reflexión”, señala Mariel.

“Me baso en la necesidad de los chicos, son un curso que está muy interesado y debate mucho”, describe Mariel sobre el grupo de más de treinta estudiantes. Ella trabaja en la EES Nº 5, EES Nº 7, EES Nº 4 y un CENS de la misma localidad. Destaca que ve diversidad y heterogeneidad en las/os jóvenes, “no son todos iguales y la dinámica varía según el curso. No todos responden de la misma manera a las consignas ni les interesan las mismas temáticas”.

En la EES Nº4 hablar de lenguaje inclusivo “fue una inquietud de ellos, vi que había mucha incertidumbre, mucho desconocimiento, estaban con el chiste de que todo terminaba con E, entonces dije ´hay que ponerse las pilas y tenemos que trabajar´”, comenta la profesora.“Cuando yo decía ´chicos…” las chicas me decían, `no, chiques´, y los varones se quejaban; cuando empecé a decir chiques empezaron con que todo terminaba en E, me decían `profesore, ¿qué tenemes que hacer?`”. Nos reímos un poco. Así fue que “puse un video en el grupo de WatsApp, donde se explica cómo funciona y por qué se da el lenguaje inclusivo”. Con esa intervención virtual abrió la puerta para un debate que más tarde comenzó en el aula. “Después vamos a charlar al respecto”, escribió.

En un principio trabajaron sobre consignas a modo de guía para que respondiesen sobre lo que habían visto en el video; por qué ocurría el lenguaje inclusivo, qué cambios se iban a producir, entre otras preguntas. Luego tuvo lugar un intercambio de opiniones que derivó en cuestiones lingüísticas, sociales y culturales. En el debate, que por momentos era ferviente y acalorado por posiciones desencontradas, surgió que la Real

“...el lenguaje inclusivo no es obligatorio y que a la larga

vamos hablar así,no nos vamos a dar cuenta,

ni siquiera nos vamosa estar acordando

de esta discusión.”,nos dice Mariel.

El lenguaje como herramienta de transformaciónA pedido de los/as estudiantes de 5to 1era turno mañana de la EES Nº 4 de Alejandro Korn, la Profesora de Literatura, Mariel Sola, abordó el uso del lenguaje inclusivo dando lugar a un interesante proceso de reflexión sobre la historicidad social del lenguaje.Educación Sexual Integral, Despenalización del Aborto, Centro de Estudiantes, Lenguaje Inclusivo, son algunas de las temáticas que más interesan a los/as jóvenes del llamado “Nacional”, Unidad Académica del partido de San Vicente.

8

de estos temas”, dice la profesora. Recuerda que en el `96, apenas un profesor habló de interrupción del embarazo y se generó un debate aislado, “la única que estaba a favor era yo”.

“Los chicos maduran más rápido ahora, viven otras situaciones, todo eso provoca un cambio, no hay tanto estereotipo, quizás antes si”, piensa Mariel. “Las mujeres estamos más revolucionadas, luchamos más. No hay tantas peleas como antes entre las/os chicas/os”, opina. Además nos contó que

“acá todavía hay escuelas que las chicas tienen que usar guardapolvo y los varones no, dicen que las mujeres provocan, también les hacen sacar la gorra”, evidenciando cuánto camino queda por desandar respecto a las prácticas participativas y los Acuerdos Institucionales de Convivencia. Mariel señala que las inquietudes con respecto

a las cuestiones de género surgen constantemente, “por ejemplo cuando vimos mitología, surgió que hay un montón de cuestiones machistas dentro de esos relatos, y lo trabajamos”.Como todas/os las/os docentes, la profesora aborda el Diseño curricular, lo respeta y adapta. En Literatura de 5to año trabajan “género fantástico, policial, realismo, pero trato de darles textos que toquen temas sociales. Ellos preguntan, estamos en una escuela, uno tiene que despejarles las dudas y brindarles la información que necesitan”.

La profesora tiene dos hijos, uno en Primaria y otra pequeña de dos años que dormía la siesta mientras charlábamos. “Cuando empecé a trabajar mi objetivo era que los estudiantes aprendiesen sobre prácticas del lenguaje, sobre lengua y literatura, estaba muy esquematizada en los contenidos. Después uno en la experiencia va viendo que hay otras cuestiones”, reflexiona la profesora. Pensamos que tal vez, los objetivos se van transformando porque uno va aprendiendo y transformando su horizonte.

“Mi objetivo es que ellos sean personas críticas, que puedan tener juicios de valor, que puedan pensar por ellos mismos, que no se condicionen, que ellos entiendan que pueden expresarse libremente y que nadie los puede condicionar. Que no quede ahí, que puedan adaptarlo a sus vidas”, dice Mariel ampliando cuál es hoy su objetivo más allá de los contenidos curriculares. “Lo que me mantiene hoy en la docencia es estar con los chicos y colaborar en formarlos como personas críticas”, cierra la profesora.

Pág. 9

Las opiniones que estaban en contra sostenían que “hablar generalizando en masculino no significaba ser machista”, explica la docente, entonces había que reforzar la idea de que no se señala como tal a quienes no utilizan el lenguaje inclusivo sino que “ese lenguaje se creó con la intención de que el hombre sea superior a la mujer y desde ese concepto es que se plantea que es un lenguaje machista, no que quienes lo utilizan son machistas”.Y es que el debate recae sobre la estructura más subjetiva del lenguaje, “a mi me lo enseñaron así”, se escuchaba, por ejemplo. Entonces la profesora guiaba el intercambio introduciendo ejemplos, como: “todo el mundo dice ´te re cabió´ y no existe, en realidad la conjugación es ́ te cupo´, ¿quién dice te cupo? ¿y cuándo se cuestionó eso?”.En este sentido, la mayoría de las personas seguimos hablando de la manera tradicional pero lo que “está en discusión es cambiarlo para que sea más inclusivo”, explica la docente.Describe al curso como un grupo con inquietudes, interesado en trabajar educación sexual integral, de la interrupción voluntaria del embarazo, con ganas de organizarse y participar.

Llegaron a la conclusión de que “está bueno que se incluya a todos los géneros, entendieron que no solamente existe el género masculino o femenino, sino que hay personas que no se identifican con ninguno de esos dos géneros, y que está bueno incluir a todos”, comenta Mariel.

Épocas En el marco del “pañuelazo” por la despenalización del aborto, las chicas de la EES Nº 4 se pintaron las uñas de verde y se vistieron del mismo color. Una estudiante le dijo a Mariel si podía ir con ella al Congreso, porque sus padres la dejaban sólo si iba con un adulto. “En nuestra época, yo no tenía el acercamiento con mis docentes como tengo ahora con estos chicos, a mi nunca me hablaban

“Uno me dijo ´profesora, pero entonces si el lenguaje es una construcción social y

nosotros vamos formando las palabras, ¿por qué tenemos

que pedir permiso para modificarlo?´”, cuenta Mariel.

Publicación de la Direcciónde Educación Secundaria

Charlando con Mariel

Cuando tomé la dirección de la escuela el 4 de noviembre de 2013, era la ESB N° 15. Los profesores que estaban no elegían titularizar en ella, para muy pocos docentes era una opción para continuar su trayectoria. Los alumnos tenían serios problemas.Una escuela que ese mismo año tuvo cuatro directivos, porque no podían sostenerse en una comunidad que se presenta muy difícil. Los pocos alumnos que llegaban y realmente querían aprender y estudiar, al mes o al poco tiempo pedían el pase. No era una escuela “bien vista”, tampoco por los padres de la EEP Nº4, con la que compartiamos edificio. Los padres de alumnos de 6to año, no los inscribían por los serios problemas que había y que eran de público conocimiento en el distrito de Morón.

Una escuela, no solamente sin Acuerdos Institucionales de Convivencia (AIC) , sino con un Proyecto Institucional (PI) que debía ser replanteado nuevamente desde los objetivos, perfil del alumno y docentes. Ese era el inicio, debía comenzar a trabajar proponiendo proyectos de trabajo con los profesores.No fue fácil, porque todo cambio trae aparejada una resistencia. Los cambios comenzaron a notarse al implementar la normativa y generar siempre un muy buen vínculo con todos.

Sabía que los chicos de la escuela debían sentirse queridos, importantes, por lo tanto todos los mediodias estaba en la puerta para recibirlos, y si llegaban tarde, preguntarles siempre qué les pasó. Estar cada tarde a la salida y despedirlos con un “-Hasta mañana CARIÑOS MIOS DE MI CORAZON!-”, frase que internalizaron. Tanto, que si yo no estaba, así se saludaban entre ellos, o se lo pedían a las preceptoras o secretarias, quienes fueron pilares muy importantes para el cambio que quería hacer y que ya había comenzado.

Estaba sumamente convencida que ese era el camino por el que debía llevar a la escuela: primero, el vínculo, que el adolescente se sienta importante en la escuela, porque de hecho lo eran para mí; segundo, conversar con ellos sobre el conflicto y reflexionar sobre cómo resolverlo, tercero, darles todo el tiempo que requerían para escucharlos, dándoles confianza, seguridad para que vean que el mejor lugar para estar es la escuela. Nunca me importó en qué cosas me atrasé, porque tenía que escucharlos. Una de las anécdotas de ese inicio fue

que la escuela tenía como costumbre inscribir muy tarde y eso traía como dificultad estar en el mes de febrero sin saber realmente cuántos alumnos iba a tener en cada año. Como estrategia, a fin de mejorar la inscripción, puse carteles en la puerta con la leyenda:

VACANTES LIMITADASPOR SER ESCUELA DE UN SOLO TURNO

Y UN CURSO POR AÑOSi bien quien fue mi Inspectora en ese momento me decía “Miriam, saca ese cartel”, yo le decía no, porque sino no vienen a inscribirse.

Tal estrategia, acompañada de entrevistas con alumnos y padres al momento de la inscripción, fue realmente muy acertada ya que ante el temor de quedarse sin vacantes, concurrían a inscribirse. Fue realmente muy positivo. A partir de ese año comenzamos a tener filas para inscripción y, además, con la entrevista se le dio otra impronta a la escuela y los alumnos quedaron muy comprometidos. De esta manera, fuimos generando los cambios dentro de la escuela. En noviembre de 2015, logramos la conformación con Orientación en Arte Música, esto mejoró a la institución por completo, eran alumnos felices. Las creaciones musicales invitaban cada vez más a venir a la escuela, es un lugar de encuentro donde se sienten queridos e importantes, una escuela con PROYECTOS. Todos sabían a dónde íbamos y qué queríamos.Había dejado de ser aquella escuela que había tomado en 2013, para ser ahora la que es, la EES N° 50 con Orientación en ARTE MÚSICA, un lugar como siempre les decía, para aprender, pero también para compartir y divertirse. Dejó de ser aquella ESB donde nadie quería ir, para ser la EES N°50 un lugar elegido por todos.

Miriam SorribasEES N°50, Morón

10

En primerapersona

Escribinos a:comunicacion.secundaria@abc.gob.ar

qUEREMOS QUEÉSTE ESPACIOLO LLENEN USTEDESPueden enviarnos relatos, historiasy fotos que quieran mostrar. Asunto “Lo llenan ustedes”.

Pág. 11

La Escuela de Educación Secundaria Nº 4 de Coronel Suárez desarrolla un interesante y dinámico proyecto de lectura y oralidad con estudiantes del Jardín Nº 913 y de la EEP Nº12, Nicolás Avellaneda.

Las/os estudiantes de 6to analizaron y seleccionaron cuentos infantiles para luego contarlos a las/os niñas/os del nivel inicial en las sesiones de lectura que tuvieron como escenario la Biblioteca de la Secundaria.

Este trabajo que fomenta la lectura, la oralidad y la articulación permite el encuentro entre niveles y la construcción del conocimiento, a través de la imaginación y los mundos posibles. Se potencia el discurso como herramienta para la elaboración de ideas liberadoras y transformadoras.

Los/as Jóvenes Narradores también elaboraron de manera artesanal dominós, animales de papel, entre otros juegos didácticos para entregar en el Jardín. Por su parte, los estudiantes de primaria compartieron actividades con los/as más pequeños/as en los recreos, luego de las lecturas con las obras leídas.

Este proyecto contó con la coordinación de la Profesora Ana Morante y la Bibliotecaria Sandra Acebal, junto a toda la comunidad educativa de las instituciones mencionadas.

Publicación de la Direcciónde Educación Secundaria

Jóvenes Narradores

Buenos AiresEDUCACIÓN

Publicación de la dirección de educación seCUNDARIA