el ser en el mundo

7/25/2019 el ser en el mundo...

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Algunos dicen a la vida "eres digna de ser conocida" y no "eres dignade ser vivida". El hombre terico no vive ms que por y para elconocimiento pero, sin embargo, la cultura no es una coleccin deideas abstractas sino una manera de vivir, un sentimiento y un estilo

de vida. A veces, nos olvidamos que, para comprender al hombre, esnecesario compartir su vida hasta las heces. El pensamiento, lacultura, necesitan un anclaje en lo humano. Lo sistemtico, loespeculativo, lo terico, an en su autonoma, deben, en !ormamediata o inmediata, ser respuesta que encamine a los hombres. rgeuna gran simpata con la realidad del hombre, de cada hombre.

Este ser que es el hombre vive en un mundo que es el de las cosasy el de los hombres. Ese mundo es nuestro mundo, aunque a veces

nos resulte inhspito o e#tra$o, ya que nos condiciona. %ero lo quenos caracteri&a en 'l no es el estar sino la manera de estar. El mundoes el lugar del encuentro y la responsabilidad, aun cuando o!receriesgos. (iene, por lo mismo, un carcter mediativo, en la posibilidadde un estar hospitalario, descubierto en la contemplacin de nuestroser personal, que siendo corporal se reali&a en el espacio y el tiempo,en la historia.

)er en el mundo signi!ica vivir la realidad en la historia y descubrirall lo permanente. )igni!ica no vivir el nivel de lo abstracto, sino larealidad concreta de los hombres, en ntima simpata con suesperan&a y su dolor y, en medio de ella, descubrir lo trascendente.%or lo mismo signi!ica, tambi'n, capacidad para elevarse ms all delo inmediato, descubriendo su carcter mediativo, que impide todaapropiacin absoluta.

Es por eso que, en la historia de cada da, se escribe para cada

hombre, su destino trascendente o su "modo de aburrimiento" en larutina de un activismo desesperado por poseer, en la repeticin de losactos de cada da, todos iguales, da a da, semana a semana, en ladesesperacin de das sin esperan&a, todos ellos sin vislumbrar unsentido ms all de ellos mismos y del consumo de su tiempo.


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*esde all es necesario que nos preguntemos qu' sentido tiene,hacia dnde apunta, la vida de los hombres y no slo de aquellos queparecen poder ser capaces de pregunta, sino la de los miles de sereshacinados, intentando slo vivir. + no me pregunto por el trabajador de

una o!icina, el obrero que acarrea hora tras hora una carretilla de ripiocon un ritmo siempre igual, la dependiente un negocio o el gar&n deun restaurante. Es necesario mirar ms all y descubrir en su ser alque vende unos limones sueltos a la entrada de una !eria o un paquetede pastillas en el bus, cuida un auto, acarrea paquetes en el mercadoo espera botes en una caleta para subirlos sacndolos del mar...

*nde est all el sentido- *nde la contemplacin y el go&o en elhambre mil veces acumulada del que espera vivir- El tiempo se aturde

en horas de trabajo sin tiempo, en la esperan&a de un imposible !in desemana aturdido en el juego, el alcohol, la (, la convivenciapromiscua... /s all, dormir para poder 0vivir" otro da ms.

El hambre, la promiscuidad, la desorbitante e#plosin demogr!ica,que repleta con "remedos" de hombre" 12perdn34 hambrientos,paup'rrimos, las rutas de los pueblos pobres, mientras otros sonsometidos a la esclavitud de la migracin, impiden cultivar sus

atributos espirituales, que se es!uman en el urgido tr!ico y cansancio,en busca del tantas veces di!cil "pan de cada da5

La !alta de los ms indispensables medios para mantener unaelemental dignidad, de miles de millones de seres sin destino, di!icultaque salgan del subdesarrollo intelectual e impide que logren la mnimacondicin de dignidad espiritual a que todos tienen derecho, en laesperan&a de un ma$ana menos doloroso, que hoy se muestraincierto y hu'r!ano de amor para nuevas generaciones.

)in embargo, a ello se suman otras !ormas de aturdimiento, menosviolentas, pero no por ello menos dolorosas6 la del que vive su rutinasin sentido de todos los das, sin metas y sin anhelos, la del que todolo posee y en su a!n de posesin no encuentra sentido verdadero yse sabe in!eli& en su necesidad de poseer ms... )i somos capaces deverdadera contemplacin en nuestro mirar, tambi'n podemos


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descubrir esos rostros del dolor, el hasto o la rutina, por ejemplo, enmuchachos que, un domingo cualquiera, a!irmados !uera de suscasas, al sol, esperan... pues en ellas no tienen interior.

%ara qu' todo nuestro avance si no logramos descubrir y entregarsentido- (odo es un juego de ni$os si no logramos preguntamos y sino intentamos descubrirlo en nosotros, en nuestro mundo social y,tambi'n en el mundo de la naturale&a y de las cosas, que es el quemediati&a gran parte de nuestra corporalidad.

El ser del hombre, para 7eidegger, es el *asein 1literalmente, ser ah4,o sea el yo mismo, para el cual est siempre en juego su propio ser.)in embargo, el hombre entregado con los otros a sus quehacerescotidianos, se olvida de s mismo, sus actos brotan desde !uera de s.Este sujeto de la e#istencia cotidiana se masi!ica, se vuelve unodejando de ser yo.

El t'rmino *asein e#presa la relacin del ser con el hombre y larelacin del hombre con el ser. El ser 1)ein4 entra en la relacin con elhombre en cuanto, al revelrsele est ah 1*a4 para el hombre. 8ste es

el *asein del ser. El hombre es el *a del )ein, es decir, el mbito enque el ser se hace patente. %ero, tambi'n, el *a del )ein es el mbitoen que el hombre es. El *a del )ein es el *a 1ah4 del hombre. 9o esuna relacin objetiva, pues el hombre llega a ser hombre dentro de larelacin. La palabra *asein se$ala el punto en que se cru&an elhombre y el ser.

El ser:en:el:mundo es otro modo de ser del hombre. /undo equivaleaqu a hori&onte. El mundo es apertura del ser, en cuyo hori&onte est

la e#istencia. Este mundo cambia con los cambios en la historia de larelacin del hombre con el ser. 7eidegger ha e#presado que "el mundono es lo que es y cmo es por el hombre, pero tampoco puede serlosin 'l".

El *asein se temporali&a, si se entiende bien a 7eidegger, en el ir a supropio encuentro desde el mundo. El mundo es aquello hacia lo cual y


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por lo cual el *asein se temporali&a, es decir, e#iste. La e#presin porlo cual anticipa, originariamente, la posibilidad que se determina!cticamente. El proyecto originario de la posibilidad del *asein esponer:ante:s:mismo el mundo. Ese acontecer del supraproyecto

proyectante, en el que se temporali&a el ser del *asein, es el ser:en:el:mundo. El *asein es lo que con!igura el mundo. El ente no podrarevelarse de ningn modo si no encontrase ocasin de penetrar en sumundo.

el ser en el mundo

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