deshonoris 43 pdf

Upload: des-honoris-causa

Post on 13-Apr-2018

247 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    1/12

    NMERO 43: SEPTIEMBRE 2014-FEBRERO 2015PARROQUIA DE LEN/AO NOVENO: DE LA GUATUSA.

    ...maqueando el bolillo...

    Intelectual Emergente...(o Sumergente?)

    ensayo, pose, etc.):escuelitas de prvulos en que el docente muestrasus enormes cualidades de autopromocin. Sirven como reproducto-

    ras de buenas prcticas para el gureo. Ntese que este concepto se

    circunscribe a Nicaragua, el contenido del mismo vara de pas a pas.

    Terneras Sagradas: Egos emperifollados en proceso de ser in-ados, se encuentran en la etapa de inamiento, para lo cual tienen

    conectada una manguera en el oricio anal que les llena la vanidad de

    nfulas de inmortalidad. Los aplausos y los reectores les producen

    sensaciones orgsmicas incomparables.

    Vacas Sagradas (cada vez menos Sagradas y ms Vacas):Im-prescindibles Egos Inados que rebotan, como papa caliente, de aplau-

    so en aplauso y sonren de oreja a oreja al comps de las adulaciones.

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    2/12

    Lostextos que presentamos en este nmero pertenecen a DanilJarms, miembro del Grupo Oberiu, cuyo nombre est formado por

    las iniciales de las palabras rusas que signican Asociacin por el

    Arte Real. Sus mayores exponentes son Danil Jarms y Alexander

    Vedensky, quienes se auto nominaban pensadores naturales y

    combatan la petricacin del gusto y la hipocresa del mundo

    circundante al cual eran particularmente sensibles. En una opor-

    tunidad Vedensky arm: Me domina una sensibilidad especialhacia la naturaleza ilgica del mundo y su fragmentacin.

    El grupo, organizado en las reas de literatura, bellas artes, teatroy cine, se form y trabaj en Leningrado entre 1927 y 1930 sin

    poder publicar y con escasas apariciones pblicas, puesto que

    el clima poltico de Rusia en esos aos exiga una literatura de

    mandato social que ms tarde se volvi de realismo socialis-ta.

    Todos ellos, sufrieron fuertes ataques de la prensa y fueron mar-

    ginados. Muchos de ellos, aunque sea de forma individual, con-tinuaron escribiendo durante los aos 30. Sin embargo, sus dos

    mayores lderes, Jarms y Vedensky, fueron detenidos en 1941.Jarms muri el ao siguiente en el hospital de la crcel, Vedensky

    poco despus en una crcel ucraniana.

    Los cuentos de Danil Jarms que publicamos, vienen del libro de

    George Gibian Literatura Rusa del Absurdo, 1975, EditorialPleamar, Buenos Aires, Argentina.

    Por otro lado, el fragmento del relato Cuando llora un guerrille-

    ro, que tambin es parte de este nmero, es el Testimonio de la

    experiencia personal del autor, Jos Centeno, del barrio Altagra-

    cia de Managua, quien muchos aos despus de los aconteci-

    mientos, y despus de emigrar primero a Canad y luego a Costa

    Rica, logra describir toda la trgica realidad de la poblacin, y

    en especial de la juventud nicaragense de los aos 70, bajo la

    represin de Somoza.As que, afortunados lectores de nuestra Deshonrada revista,

    aqu van a encontrar en lo Absurdo de los rusos, lo Real, y en lo

    Real del Testimonio Nica, mucha Absurdidad. Adelante

    E

    D&

    torial

    Flores,c

    epilladasylambetazosa:deshcau

    [email protected]/Politbur:

    Mimmo,E

    lvir,T

    llez,Pulido.

    Mi colegio, el Instituto Nacional de Comercio, o la Nacional(por su nombre corto) no escap tampoco a los disturbios: Huelgas, ma-nifestaciones, bombas molotov, pancartas, pintas en las paredes, etc.

    Pero yo permaneca imperturbable y cada vez que haba huelga,casi matemticamente bamos a parar a la pequea discoteca que ha-ba en el Centro Comercial Linda Vistano me resista a la pista ilumi-nada de colores, esfera rotativa de espejos en el techo, a los Bee Gees,Hearth Wind and Fire, Commodores, KC and the Sunshine Band y losotros grupos de msica disco de los 70s. Todos llegbamos con el uni-forme de colegio. Yo me deca: al Diablo con las huelgas Divirtmonos!

    Y si no estaba abierta la discoteca, bamos a parar al Parque de LasPiedrecitas. Ese parque de la Carretera Sur, a la orilla de la Laguna Aso-sosca, donde me atrev a pedirle (verbalmente) a mi novia, que hicira-mos el amor y despus de la cachetada que recib, aprend que esono se pide verbalmente. Ella se llama o se llamaba Yadira. A quien pudevolver a ver despus de la guerra en las afueras del Teatro Nacional de

    Nicaragua, en un encuentro romntico al buen estilo de Hollywood, jaja-ja.

    JOS MANUELCenteno

    Mi

    Colegio

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    3/12

    Para esos das se oy la famosa proeza del Comandante Cero(la toma del Palacio Nacional de Nicargua). Recuerdo haber festejado amedias dicha proeza pues an estaba dormida mi conciencia patritica.Se puede decir que me alegr porque pareca ser algo trascendentaly los muchachos se vean muy orgullosos, como cuando tu equipofavorito se apunta un gol contra un contrincante que pareca invencible.Los muchachos era el trmino popular que designaba a los revolucio-narios. Hasta que un da, un fatdico da, casi morimos como muere unperro sin dueo: sin razn ni gloria. Ese da, para variar, haba huelgaestudiantil en la Nacional de Comercio (ay ay, ese colegio, al que nopude evitar volver varias veces cada vez que volv a Nicaragua despusde mi exilio, ese colegio que se dej la mitad de mi alma y que me (nos)guarda tantas historias) y creo que haba huelga general estudiantil enlos colegios y universidades de Managua. Entonces, me diriga a la dis-coteca con mi novia; lo siento, no recuerdo su nombre pero si recuerdo

    que me agarr a puetazos con mi mejor amigo de la clase por ella.Ellos haban tenido un deslice porque l s estaba implicado en la lu-

    cha y daba muestras claras de ser un hombre, un valiente. Me senttraicionado doblemente como ya pueden imaginarse.

    Bueno, bamos por la calle principal de Las Brisas, la que llevadirectamente a la temida y legendaria Cuesta del Plomo. Abrazadosbamos y entusiasmados con la idea de ir a bailar y pasar un buen rato,

    cuando divis en la distancia, a unos 150 metros y viniendo en direccinopuesta a la nuestra, un BECAT se le llamaba as a los jeep de las Bri-gada Especiales Contra Acciones Terroristas. Ambos nos miramos y nopudimos esconder la angustia muy bien reejada en nuestros rostros.Sabamos que La Nacional de Comercio, estaba en llamas y que aquelBECAT seguramente responda al llamado y que no se supona que lla-maramos la atencin forzosamente por ser jvenes y portar el uniformede colegio, lo cual era un pecado capital para la Guardia de Somoza. Yo,tratando de consolarla y mostrarme sereno, dije algo como: Tranquila,todo va estar bien. Lo cierto es que ni yo mismo me lo cre.

    No tuve tiempo de pensar en lo que podra decir si se detenana indagar algo. Tal vez porque tena la esperanza que no se detuvieran.Habamos odo decir, y ms tarde yo lo constat, que los soldados deSomoza tiraban a matar primero y despus hacan preguntas. Tenamos

    todo para ser considerados enemigos reales o potenciales. Ser joven desecundaria era igual a ser un revoltoso, embajador de la revolucin.

    Muchos de esos guardias eran escasamente mayores que nosotros,pero una cosa era casi segura, los soldados rasos eran campesinos,

    gente iletrada, muchos de ellos habiendo sido reclutados a la fuerza enlas zonas rurales ms alejadas, hijos de jornaleros, con poca o ningunaeducacin y muchos menos cultura de respeto. Eran chavalos que de re-pente se vean cargando un fusil y un uniforme que les daba un grado de

    autoridad y, ltimamente, el poder de decidir quin viva y quin mora.No perdan pues, la oportunidad de sentirse hombrecitos, de mostrarsuperioridad, de ser machos.

    Tal como lo temamos, se detuvieron al llegar hasta nosotros.Uno de ellos nos hizo seal de alto antes de bajarse y bajaron todos me-nos el chofer. De inmediato empez el interrogatorio, preguntndonosestupideces como: por qu estbamos ah, adnde bamos, y si partici-pbamos en las huelgas y otros movimientos terroristas. Eran ms bienpreguntas que intentaban incriminarnos. Acto seguido, nos registraronde pies a cabeza y las mochilas. Dije nos registraron, pero a ella aprove-charon para manosearla. Y yo sin poder protestar ni defenderla. Era mi

    novia, por Dios, a la que estaban mancillando! En cuanto a m, a pesarque negu toda participacin en la insurreccin, insistieron en registrarmis codos y rodillas, segn ellos, buscando seas de entrenamiento mi-litar. Segn ese soldado, yo tena endurecida el rea de mi pecho allado de mis axilas, segn l, era por el entrenamiento con fusil hastaraspones en mis rodillas y codos encontraron. Por supuesto yo neguuna tal situacin. Entonces, dada mi participacin en la guerrilla, tenan

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    4/12

    que llevarnos. A empujones y jalones nos montaron en el jeep. De msest decir que nuestro estado de nervios y desesperacin nos llev asoltar en llanto a la vez que insistamos en nuestra inocencia y rogba-mos por piedad. Ya conocamos la suerte que corran normalmente losque eran montados en los BECAT. Todo el trayecto rogamos por nues-tras vidasbueno, rogu. Ella slo poda llorar mientras los soldadosla manoseaban y uno de ellos me retena con la punta de su Garand

    (fsil de reglamento de un soldado somocista) apoyado rmemente enmi pecho, como si yo hubiese tenido la intencin de salir como hroea defenderla contra ellos cuatro. Arrancamos en direccin siempre ala Cuesta del Plomo, la cual estaba relativamente cerca de mi colegio

    pero aqu no aplic aquel dicho que reza que cuando la ests pasandomal, el tiempo se te hace largo, a m se me hizo corto. Y era porque lavida se me iba a ir, en el mejor de los casos con un solo tiro y sin verlasufrir a ella. El trayecto se me hizo de 2 minutos. No quera constatar niaceptar que era para all donde nos dirigamos. Segn yo necesitabams tiempo para convencerlos de nuestra inocencia y que todo esto

    no era ms que un error. Que no era necesario llegar a tanto, pero slo

    perd mi tiempo. Vestamos el uniforme de colegio y ramos jvenes.Dos buenas razones para temernos. ramos enemigos, potenciales orealesdaba igual.

    Estaban ebrios. Pude sentir el aliento de los dos soldados queme agarraron de los brazos al arrastrarme dentro del jeep. Ahora puedorecordar ese detalle, hasta el olor de sus sobacos. Obviamente, en elmomento, no es eso en lo que uno se concentra. Algunas versiones queaos ms tarde o, es que a ellos se les permita drogarse o andar enestado etlico para que perdieran consciencia o lidiaran mejor con susactos.

    Llegados a la cuesta del plomo, no pude ignorar el olor ftido decadveres que luego vi inevitablemente tendidos a diestra y a siniestra

    del trillo que ya tenan los vehculos del ejrcito a fuerza de llevar gente.Algunos cadveres slo asomaban unas partes del cuerpo de entre lamaleza que era abundante y alta en algunos lugares. En otros lugares,aunque la maleza estaba presente y alta, el apilamiento de cuerposcreaba claros que permitan verlos desde el trillo donde pasbamos. Mepregunto ahora si ellos se tomaban la libertad de apilar los cuerpos o lepedan a la gente que caminara y subieran a la pila y ah les disparaban.

    La vista aterradora de esos cuerpos y el ftido olor fue lo nico que medistrajo de mi llanto y splica. Qued petricado ante tal paisaje y aun

    que no haba un rtulo que dijera Bienvenido a la Cuesta del Plomo, lasola vista me indic que no poda tratarse de otro lugar, a menos que ya

    hubiesen abierto una sucursal.

    S, ese era literalmente el matadero. Un lugar sucientementealejado de la ciudad como para darles la privacidad que su cobarda ysu mente mal sana necesitaba para violar, torturar y nalmente matarsin necesidad de pedir permiso o esperar rdenes de sus superiores ymuchos menos un juicio pues era claro que la actuacin de la Guardiase le haba salido de las manos al mismo Somoza.

    Y como quien est cansado de la misma escena o guin, nostiraron literalmente del jeep, hacindonos besar el polvo en la cadaaparatosa antes que el vehculo se detuviera. Pareca que ya conocanbien cmo deban hacer las cosas y en qu momento. Me incorpor casicomo si tuviera un resorte y yendo hacia ella fue cuando me di cuentaque ella ya no llevaba sus prendas interiores pues al caer del jeep y darvueltas su falda se levant. Me arrodill y gate hasta ella y la abracacomodando su cabeza en mi pecho, como para evitarle ver lo que se-guira. Nos quedamos de rodilla frente a ellos, no s si porque quera-mos implorar piedad hasta el ltimo momento o porque deducamosque esa era la posicin que debamos adoptar (de acuerdo al guin).

    Para m era evidente que no saldramos vivos de esa. Extraa-mente - creo yo el pnico que me impulsaba a llorar, temblar y rogar

    Foto reciente de la Cuesta del Plomo, tomada por el autor.

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    5/12

    por mi vida, se haba convertido en una especie de congelamiento (al-guien me dijo que me haba reconciliado con la situacin: ms all de laresignacin), como si de repente el tiempo se par por unos segundos,por unos minutos, no s la verdad. Fue como aquella tarde lluviosa demi niez, cuando el tiempo se par por primera vez mientras yo decidasi desobedeca a mi madre y mojarme los pies en aquella correntada ome dejaba arrollar por el camin.

    En ese momento no pens en mam ni en nadie, ni en el perrode la casa, muchos menos vi pasar toda mi vida frente a m, como al-gunos cuentan que les sucedi al frente a la muerte. No pens en qume esperara despus de morir. Mi mente estaba vaca. Supongo queeso es a lo que le llaman el momento presente. Ni ver para atrs ni paraadelante. Slo atento al momento, al momento verdadero, esperandoya slo que lo inevitable sucediera. No s si puedo decir que tena pazpero es la mejor reaccin que he tenido frente a un peligro de tal mag-nitud.

    Dije el momento verdadero porque entre sus diversiones pare-ciera que estaban jugar con nuestro miedo apuntndonos y acercandosus fusiles a diferentes partes de nuestros cuerpos y especialmente el

    entrepierna de ella. En esos momentos, de vivencia intensa, no sentala pestilencia ni vea la multitud de testigos silenciados antes que no-

    sotros. Ni el zumbido de las moscas de cadveres pareci distraerme.Nada ms exista ah y ahora. Slo el verdugo y yo. Ni a ella la sentaaunque permaneca apoyada a mi pecho. Fue como un instante de abs-traccin a la realidad.

    Jugando estaban con nosotros cuando omos el ruido de unas

    llantas que se desplazaban velozmente. Era un Mercedes Benz negro,que pareca tener prisa, coleando como si esquivara los cuerpos; no re-

    cuerdo si era eso lo que haca. Los soldados perdieron inmediatamente

    Entrenamiento de la EEBI., 1978. Foto de Susan Meiselas.

    la sonrisa y torpemente quisieron ponerse en posicin de alerta. Parecaque nalmente reconocieron el auto o a la persona en su interior. Salde mi enajenamiento y me di cuenta que ella dej de sollozar. El carrofren violentamente a escasos 10 metros de nosotros, aumentando lanube de polvo que ya vena produciendo por su velocidad y maniobras.Del carro sali un hombre uniformado, alto y fornido, con un traje mi-litar pulcro, como con barras y adornos (deca yo pues no conoca las

    condecoraciones ni rangos). Elegante. Todo esto le daba apariencia dealto rango, lo cual conrmaron nuestros verdugos pues lo reconocieroncomo tal al saludarlo respetuosa y militarmente. Su comportamientocambi totalmente. Ahora lucan nerviosos sobremanera, como si nohallaban dnde meterse.

    El hombre del Mercedes empez a vociferar con ademanes vio-lentos. Era evidente que estaba enfurecido y aunque no recuerdo sudiscurso, mostr su desaprobacin a los guardias. Slo recuerdo al quepareca ser el jefe de la patrulla tratando de justicar sus actos diciendoque nos haban pescado infraganti en el colegio participando en actos

    subversivos. El hombre slo respondi: les parece a ustedes que estosnios sean combatientes? Mrenlos, les parecen guerrilleros?. Aque-llos no pudieron decir una sola palabra. Ya para ese momento yo haba

    salido de mi letargo

    y el ansia se volvi aapoderar de nosotros.

    Acto seguido,nos orden subir a sucarro. Y adivinen quhicimos?... No tuvo querogarnos. Corrimos yentramos los dos por

    la misma puerta al lu-

    joso y ahora polvosocarro. Slo me detuveunos segundos y nos por qu me distra-

    jeron para mirar unpar de zapatos que es-taban frente a la puer-

    ta trasera por la queentramos. Esos

    Escuela de entrenamiento de la EEBI., 1978. Fotode Susan Meiselas.

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    6/12

    zapatos me hicieron estar consciente nuevamente de la mortandad queme rodeaba y del olor nauseabundo, y vi algunos cuerpos desnudos y

    alguno que le faltaban los pies.

    Entr y cerr la puerta y ella se puso a llorar otra vez, tal vez porel nerviosismo de quien recupera la esperanza o se saca la lotera. Estasalvada era ms que ganarse la lotera.

    Enllav las puertas traseras como si con eso pudiera detener elpeligro y mir al hombre haciendo ademanes amenazantes, los estabasermoneando. Dio media vuelta y vino al carro. Tom posicin del vo-lante y por el retrovisor nos pregunt si nos haban hecho dao y yo meaprestaba a decir que s cuando ella habl por primera vez y dijo No, alo cual no quise contradecir. Supongo que lo que ms contaba para ellaen ese momento era irnos. Salimos a la carretera y yo no poda pararde mirar hacia atrs como para asegurarme que los soldados no nosseguiran.

    Estoy seguro que muchos hombres como l han hecho gestosparecidos en todas las guerras a travs de los tiempos. ngeles talvez?!...si es que existen.

    Jos Manuel Centeno, autor del libro Cuando un guerrillero llora prxi-

    mo a imprimirse. Combatiente contra la dictadura dinstica.

    Escuela de entrenamiento de la EEBI., 1978. Foto de Susan Meiselas.

    DanilJARMS

    Grupo OBERIU Asociacin por el Arte RealSINFONIA N 2

    Anton Mijailovich escupi, dijo Ugh, volvi a escupir, dijo Ughuna vez ms, escupi nuevamente, dijo otra vez Ugh y sali. Al diablocon l. Ser mejor que os hable de Ilia Pavlovich. Ilia Pavlovich naci en 1893 en Constantinopla. Cuando todavaera pequeo su familia se mud a Petersburgo, y ah se diplom en laEscuela Alemana de la calle Kirochnaia. Luego tuvo un empleo en nos qu clase de tienda, despus hizo otra cosa, y cuando empez la Re-volucin emigr. Bien, al diablo con l. Ser mejor que os hable de AnaIgnatievna.

    Pero no es fcil hablaros de Ana Ignatievna. En primer trminono s casi nada acerca de ella, y en segundo trmino, acabo de caerme

    de mi silla y he olvidado lo que iba a decir. De modo que ser mejor queos hable de m. Soy alto, bastante inteligente, visto atildadamente y con buengusto, no bebo, no voy a las carreras, pero me gustan las damas. Y yo noles disgusto a ellas. Les agrada que salga con ellas. Serana Izmailovname invit a su casa en ms de una oportunidad, y Zinaida Iakovlevnatambin dijo que siempre le complaca verme. Perocon Marina Petrovna me ocurri algogracioso que os quiero

    contar. Fue algo absolutamentenormal, pero divertido. Por m,Marina Petrovna perdi todoel pelo: calva como la palmade la mano. Sucedi as: unda fui a visitar a MarinaPetrovna y zas!Perdi todo elpelo. Y eso fue

    todo.

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    7/12

    AGENDA AZUL N 10

    Haba una vez un pelirrojo que no tena ojos ni orejas. Tampocotena pelo, de modo que llamarlo pelirrojo era slo una forma de decir.No poda hablar, porque no tena boca. Tampoco tena nariz.Ni siquiera tena brazos o piernas. No tena estmago, ni espalda, niespina dorsal, y tampoco tena otras entraas. No tena nada. De modo

    que es difcil entender de quien estamos hablando.Ser mejor entonces que no hablemos ms de l.

    EL CARPINTERO KUSHAKOV

    El carpintero Kushakov, un da sali de su casa y fue a una tien-da a comprar cola de carpintero. Era la poca del deshielo y la calle es-taba resbalosa. El carpintero dio unos pasos, patin, se cay y se rompila frente.

    -Ugh- dijo el carpintero, se levant, fue a la farmacia, compr una venday se emparch la frente.Pero cuando sali a la calle y dio unos pasos volvi a resbalar, se cay

    y se rompi la nariz.-Fu!- dijo el carpintero, entr en la farmacia, compr una venda y se

    FotografadeJoel-PeterWitkin(EEUU).

    remend la nariz.Luego sali nuevamente a la calle, resbal otra vez, se cay y se rompiel pmulo.Tuvo que volver a entrar en la farmacia para componerse el pmulo conuna venda.

    -Sabe una cosa?- le dijo el farmacutico al carpintero -usted se cae yse lastima tan a menudo que le aconsejo que compre varias vendas-.

    -No- contest el carpintero, -Ya no me caer.- Pero cuando sali a la calleresbal nuevamente, se cay y se rompi el mentn.

    -Maldito hielo!- exclam el carpintero, y volvi a entrar corriendo en lafarmacia.

    -Ve?- dijo el farmacutico. -Volvi a caerse-.-No- grit el carpintero. -Ni siquiera soporto que me hablen de eso. Demeuna venda, pronto-.El farmacutico le dio una venda. El carpintero se vend el mentn ycorri a su casa.En su casa no lo reconocieron y no lo dejaron entrar en el departamento.

    -Soy el carpintero Kushakov- chill el carpintero.-No diga!- contestaron los ocupantes del departamento, y echaron elcerrojo y pusieron la cadena.El carpintero Kushakov se qued un momento en la escalera, escupi ysali a la calle.

    Fotog

    rafadeJoel-PeterWitkin(EEUU).

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    8/12

    Fotografa

    deJoel-PeterWitkin(EEUU).

    DEFENSA

    No quiero jactarme. Pero cuando Volodia me peg en la oreja y me es-cupi en los ojos, le di una leccin que jams olvidar. Fue entoncescuando le pegu con la hornalla de gas; ayer le pegu con la plancha.Pero no se muri en seguida. Y dnde estn las pruebas de que ese dale amput la pierna? Todava estaba vivo. Y mat a Andriusha a golpes

    solo porque me dej arrastrar por el impulso. No soy en modo algunoresponsable por eso. Por qu se metieron all Andriusha y Lisa Antono-va . Quin los oblig a trasponer ese umbral? Me han acusado de sersanguinario. Se ha dicho que beb la sangre. Eso es mentira. Solo lamlos charcos y las manchas. Es natural que uno quiera borrar los rastrosincluso de la transgresin ms inocente. Y no olvid a Lisa Antonova. Enprimer trmino, ya ni siquiera era virgen. En segundo trmino, lo que te-

    na entre manos era

    un cadver. Demodo que la acusa-

    cin era desatinada.Y qu importa queestuviera a punto

    de dar a luz? Yo lesaqu el chico deadentro. Y si no pudosobrevivir, la culpa

    no es ma. Yo no learranqu la cabeza.La culpa la tiene supescuezo frgil. Sen-

    cillamente no eraapto para vivir. Claroque pisote al perro.Pero es realmente

    cnico acusarme de

    asesinar a un perro, cuando all mismos se haban perdido tres vidashumanas. No cuento al beb. Digamos, y es posible que incluso yo lo ad-mita, que fui un poco cruel. Pero juzgarme porque defequ sobre esasvctimas es, si me disculpan, absurdo. El defecar es una necesidad hu-mana natural. Cmo puede ser entonces indecente? Entiendo algunostemores de mi abogado defensor, pero creo que quedar totalmente

    absuelto.

    LLUVIAS DE

    VIEJITAS

    Una viejita se cay por una ventana porque era demasiado cu-riosa. Se cay y se rompi en pedazos.Otra viejita se asom a la ventana y mir a la que se haba roto en peda-zos, pero como era demasiado curiosa tambin se cay por la ventana,se cay y se rompi en pedazos.Luego una tercera viejita se cay por la ventana, y una cuarta, y unaquinta.Cuando la sexta viejita se cay por la ventana yo me aburr de mirarlasy me fui al mercado Maltesevsky, donde decan que le haban regaladouna bufanda tejida a un ciego.

    Fotografa de Joel -Peter Witkin (EEUU).

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    9/12

    UNA FABULA

    Un cierto hombre bajito dijo: -Dara cualquier cosa por ser unpoco ms alto.Apenas haba terminado de decirlo cuando vio a una bruja frente a l.Qu desea?- pregunt la bruja. El hombre bajito se qued inmvil, tanasustado que no pudo articular palabra.

    -Y bien?- insisti la bruja. El hombre bajito sigui inmvil, callado. Labruja desapareci.En ese momento el hombre bajito se ech a llorar y empez a comerselas uas. Primeramente se comi las uas de las manos y luego las delos pies.

    Lector, piensa atentamente en esta fbula y te sentirs muy raro.

    Fotografa de Joel -Peter Witkin (EEUU).

    UN SONETOMe sucedi algo asombroso: de pronto olvid cul estaba antes si el 7o el 8.Fui a casa de mis vecinos y les pregunt qu pensaban de eso.Me qued atnito cuando ellos me dijeron que tampoco recordaban lasecuencia de los nmeros. Recordaban, 1, 2, 3, 4, 5, 6, pero habanolvidado lo que segua. Fuimos todos al almacn ubicado en la esquinade las calles Znamesky y Basseinaia y consultamos con la cajera. Lacajera sonri tristemente, se sac un martillito de la boca, y haciendo

    un mohn dijo: - Pienso que el 7 est despus del 8 en aquellos casos enque el 8 est despus del 7.Le dimos las gracias a la cajera y salimosalegremente del negocio. Pero luego, al recapacitar sobre las palabrasde la cajera, volvimos a quedarnos callados, porque descubrimos que loque haba dicho no tena sentido. Qu podamos hacer? Entramos en el jardn botnico y contamosrboles. Pero cuando llegbamos al 6 nos detenamos y discutamos.Algunos pensaban que a continuacin vena el 7, y otros que a conti-nuacin vena el 8. Discutimos un largo rato, pero afortunadamente unniito se cay de un banco del parque y se rompi las dos mandbulas.Esto nos distrajo de nuestra controversia.Despus nos fuimos todos a casa.

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    10/12

    We are all Tunisians (Tunisian Jasmine)

    Mr. Prime Minister Mohamed al-Ghannoushi

    You dont hold constitutional power

    We dont wax nostalgic for Ben Ali or his times

    For us thats past history

    The dictatorship of a despotic and oppressive regime

    Against which the people have raised their revolutionary voice

    We only criticize the disgrace and the horror

    And when we praise somebody its only because of our personal convic -

    tions

    Oh revolutionary hail the struggle with the blood of the peopleCarve the value of rebellion in the soul of the free

    And tell those who are holding their shroud

    That every victory bears its ordeals

    Ah, when shall it be the turn of that country whose foolish king

    Believes he can rely on the American military

    Ah, when shall it be the turn of the country whose people are empty bellied

    While its government time and again praises the growth of nance?

    Ah, when shall it be the turn of the country where you go to sleep a citizen

    And you wake up stateless the next morning?

    Ah, when shall it be the turn of that repressive and hereditary regime?Until when shall you remain a slave to selshness?

    MOHAMMED al-Ajami

    Todas somos Tnez (la Revolucin de los

    Jazmines)

    Seor Primer Ministro Mohamed al-Ghannoushi

    Usted no detenta poder constitucional

    Nosotras no nos apegamos nostlgicos a Ben Ali o a su tiempo

    Para nosotros eso es historia pasada

    La dictadura de un rgimen desptico y opresivo

    Contra el cual las gentes han elevado su voz revolucionaria

    Nosotras slo criticamos la desgracia y el horror

    Y cuando alabamos a alguien es slo a causa de nuestras convicciones

    personales

    Oh la revolucin clama la lucha ante la sangre de la genteImprime el valor de la rebelin en las almas de los libres

    Y le dice a quienes abrazan su mortaja

    Que cada victoria conlleva sufrimiento

    Ah, cundo llegar el turno de ese pas cuyo tonto rey

    Cree que puede conar en el ejrcito estadounidense

    Ah, cundo llegar el turno del pas cuyas gentes estn hambrientas

    Mientras su gobierno elogia, una y otra vez, el crecimiento nanciero?

    Ah, cundo llegar el turno del pas donde te duermes siendo ciudadano

    Y te despiertas a la maana siguiente sin estado?

    Ah, cundo llegar el turno de ese rgimen represivo y hereditario?

    Hasta cuando seguirs siendo un esclavo del egosmo?

    MOHAMMED al-Ajami

    El poeta qatar Mohamed ibn ad-Dib al-Ajami, fue condenado en 2012 a cadena perpe-

    tua por las autoridades de su pas, acusado de escribir textos que contienen afrentas al

    Emir de Qatar y a su hijo. Los textos en cuestin datan de 2010.

    Durante las protestas en Tnez en 2011, y en ocasin de un tradicional duelo potico

    con otro autor en que cada contendiente recita versos en los que se reta al contrincante,

    al-Ajami compuso el presente texto. Hay quienes dicen que es este poema el verdadero

    motivo de su condena.

    Hemos decidido presentar una versin en ingls y una traduccin libre de la misma rea-

    lizada expresamente para nuestra revista. En la red pueden consultarse otras versiones.

    Sobra decir que acogiendo en nuestras pginas este texto, nos preguntamos sobre un

    manjar bien cotizado al que llaman libertad de expresin que para unos es aplicable y

    para otros no, dependiendo del color de la gente y de los billetes que se tengan.

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    11/12

    Para degustacin de los lectores, va una brevsima muestra del Diccio-

    nario Epidmico Deshonoris Causa, fruto de nuestra experiencia acu-

    mulada a lo ancho y largo de este terreno movedizo que es la literatura.

    Aqui las primeras cucharadas:

    Acadmico:persona autorizada para de-cir LA VERDAD. Especialmente si pro-

    viene o estudi en el Primer Mundo, su

    VERDAD es an ms mayscula.

    Canon literario nacional:conjunto de

    repeticiones y similitudes que conrmannuestra moral y buenas costumbres siem-

    pre acordes con el poder de turno.

    Certmenes literarios: Competenciaque consiste en saber quin tiene ms y

    mejores contactos y relaciones con los cr-

    culos de poder.

    Consenso:cobarda compartida. Aco-

    modamiento.

    Convocatoria para publicacin de

    obras literarias:eventos cuyo objetivoprincipal es el ejercicio de la adulacin y

    la hipocresa. En general son de mucha

    utilidad para visibilizar la bondad de la

    institucin que convoca.

    Crticos Consagrados:Rimbombantespajarracos frustrados cuya venganza con-

    siste en rankear a los poetas menores;

    para ello entornan los prpados , elevan

    el mentn y miran por encima del hombro

    mientras recitan de memoria textos desdeAlthuser hasta Adorno, pasando por

    Benjamin, Paz, Mann,

    Joyce, Jesucristo, Los

    Tigres del Norte, El

    Rey del Chinamo y

    dems

    Debate entre poetas

    y/o escritores: in-

    tercambio gratuito, decontenido soez, a veces

    animado por brebajes

    etlicos. Esta suerte de

    pasatiempo suele ser

    ms rico cuando se da

    por escrito en medios

    de comunicacin o re-

    des sociales.

    Des Honoris Causa:paneto realizado por

    individuos de dudosareputacin y forma-

    cin, envidiosos y vul-

    gares que no tienen la

    ms remota idea de lo

    que dicen.

    Des Encuentro cen-

    troamericano de

    narradores: reuninde personas proceden-

    tes de Centroamricapara discutir cmo vender libros cuyos temas son la violencia, el crimen y

    el gureo.

    Escritor nicaragense:persona afecta a los escenarios y los halagos quea veces escribe literatura, no necesariamente de calidad.

    Escritor leons:escritor nicaragense bien orgulloso de su catedral y de laTumba de Don Rubn.

    Escritor/poeta joven:individuo, generalmente menor de 60 aos, que re-

    pitiendo los esquemas tradicionales de adulacin, servilismo e hipocresaarchiconocidos, aspira a obtener, a mediano plazo, el calicativo de escritor

    nicaragense.Escritores/as Pre-miados/as:Para escupir en rueda en el Chinamo de

  • 7/26/2019 Deshonoris 43 PDF

    12/12

    los/as Insignes, de-

    ben ser olidos/as,

    palpados/as, sabo-

    reados/as por estos/

    as...si son acepta-

    dos/as debern pa-

    sar por el ritual de

    recibir las corres-

    pondientes miadas

    previas, de lo con-

    trario quedan fuera

    de la argolla

    Exilio interior:prctica de cierto

    gnero de letrados,

    sobre todo poetas,

    que consiste en la

    supuesta indiferen-

    cia hacia el entornoinmediato. Se ma-

    niesta en general

    cuando estn ase-

    gurados los frijoli-

    tos o en su caso la

    baguette, las bichas

    diarias o la copa de

    vino tinto, la conexin a internet en la laptop de ltima generacin o en el

    Smartphone. Puede ser un sinnimo de solipsismo o interiorismo.

    Festival de poesa: evento en el que se juntan muchos egos con propsi-tos etlicos.

    Intelectual Emergente: Aquel o aquella criatura que comienza a asomarla cabeza en medio del turbulento mar de la sabidura local. Para ello acos-

    tumbra a pararse encima de otros que an no han aprendido bien el matrero

    ocio de mantenerse a ote.

    Intelectual Sumergente:Criatura saturada de alcohol y conferencias; hametido tantas veces las patas que se hunde solo y tira manotazos a diestra y

    siniestra para no ahogarse en el olvido.

    Intelectual Detergente:Para este ejemplar nada sirve, todo hay que cam-biarlo, la crisis literaria actual no tiene antecedentes, hay que hacer lim-

    piezas profundas, bl, bl,bl,bl,blpero disfruta enormemente de los

    convivios y carga un cepillo gigante para adular a las dos categoras ante-

    riores.

    Intelectuales y /o artistas alternos:individuos cuya estrategia para lo-grar un cupo en el canon consiste en atacar los discursos hegemnicos con

    argumentos o actitudes falaces y sobre todo acrticas. Dentro de esta rama

    pueden caber los intelectuales emergentes y los intelectuales detergentes.

    Iniciativas culturales dependientes: aquellas que conesan con toda

    honestidad servir a una cpula, cofrada, corporacin, club, asociacin, liteo gremio.

    Iniciativas culturales independientes: aquellas que aspiran a formarnuevas cpulas, cofradas, capillas o parroquias distintas de las ya existen-

    tes. Sus prcticas, rituales y feligreses terminan siendo los mismos que ya se

    reunan alrededor de las iniciativas culturales dependientes.

    LA VERDAD: conjunto de argumentos, razones, explicaciones y reexio-nes elaboradas por los grupos hegemnicos que no admite discusin.

    Malditismo: estrategia para lograr un cupo en el canon literario que con-siste en decir malas palabras, no baarse, ofender a otros, hacerse la vctima,

    ngir desdn por todo y hacer alarde de alcoholismo y/u otras adicciones.

    Muchasgracismo:Nueva corriente literaria

    festivalesca o simposia-

    na en la cual absoluta-

    mente todos y todas sus

    representantes TIENEN

    que terminar la lectura

    en voz alta de su poema,

    cuento, ensayo, o lo que

    sea, con la expresin:

    muchas gracias.Post-muchasgra-

    cismo: Aplaudenlnguidamente a los

    anteriores.

    Recital: actividad deautocomplacencia cuyo

    nico propsito es el

    aplauso del pblico.

    Talleres literarios

    (de cuento, poesa,minicuento, chisme,