denominación de origen de chile habanero aún sin...

10
Número 247 Abril 9, 2012 Denominación de origen de chile habanero aún sin aprovechar La producción de chile habanero es un elemento cultural en Yucatán. En esa entidad se genera más del 50 por ciento de la oferta nacional del cultivo y recientemente recibió la Deno- minación de Origen para las variedades Jaguar y Mayapán, ambas desarrolladas por el Instituto Nacional de Investiga- ciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP). Clima no afectó producción lechera La industria de la leche no ha resentido los efectos de la sequía en sus volúmenes de producción ni en el precio del lácteo. No obstante, la even- tual falta de lluvias y las altas temperaturas en los próxi- mos meses de verano son un escenario que causa mucha preocupación en el sector, porque representarían muer- tes de ganado. La miel de maguey y de agave son dos alternativas naturales para sustituir a los endulzan- tes que tradicionalmente con- sumimos, que por sus pro- cesos de refinamiento, como el caso del azúcar, o por sus componentes químicos po- drían causar problemas en el sistema intestinal. Miel de maguey y de agave, alternativa saludable Distritos de riego inviables económicamente por cambio climático y sobrexplotación de acuíferos Los impactos del cambio cli- mático afectarán de forma sensible la producción agro- pecuaria, uno de los cultivos más sensibles a los cambios en la climatología es el maíz, sobretodo en temporal, por lo que más de 2 millones 900 mil productores de baja esca- la que se dedican a dicho pro- pósito resultarán afectados. Jitomate en invernadero Diversas regiones del país se ca- racterizan por producir jitomate a campo abierto, garantizando así el abasto de esta hortaliza para la venta durante todo el año. Sin em- bargo, la producción de jitomate se enfrenta con frecuencia a diversas condiciones ambientales que difi- cultan su cultivo, además de que cada vez se demanda mayor cali- dad en el producto.

Upload: dangngoc

Post on 27-Aug-2018

215 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Número 247 Abril 9, 2012

Denominación de origen de chile habanero aún sin aprovecharLa producción de chile habanero es un elemento cultural en Yucatán. En esa entidad se genera más del 50 por ciento de la oferta nacional del cultivo y recientemente recibió la Deno-minación de Origen para las variedades Jaguar y Mayapán, ambas desarrolladas por el Instituto Nacional de Investiga-ciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).

Clima no afectó producción lecheraLa industria de la leche no ha resentido los efectos de la sequía en sus volúmenes de producción ni en el precio del lácteo. No obstante, la even-tual falta de lluvias y las altas temperaturas en los próxi-mos meses de verano son un escenario que causa mucha preocupación en el sector, porque representarían muer-tes de ganado.

La miel de maguey y de agave son dos alternativas naturales para sustituir a los endulzan-tes que tradicionalmente con-sumimos, que por sus pro-cesos de refinamiento, como el caso del azúcar, o por sus componentes químicos po-drían causar problemas en el sistema intestinal.

Miel de maguey y de agave, alternativa saludable

Distritos de riego inviables económicamente por cambio climático y sobrexplotación de acuíferosLos impactos del cambio cli-mático afectarán de forma sensible la producción agro-pecuaria, uno de los cultivos más sensibles a los cambios en la climatología es el maíz, sobretodo en temporal, por lo que más de 2 millones 900 mil productores de baja esca-la que se dedican a dicho pro-pósito resultarán afectados.

Jitomate en invernadero

Diversas regiones del país se ca-racterizan por producir jitomate a campo abierto, garantizando así el abasto de esta hortaliza para la venta durante todo el año. Sin em-bargo, la producción de jitomate se enfrenta con frecuencia a diversas condiciones ambientales que difi-cultan su cultivo, además de que cada vez se demanda mayor cali-dad en el producto.

Denominación de origen de chile habanero aún sin aprovecharLa producción de chile habanero es un ele-mento cultural en Yucatán. En esa entidad se genera más del 50 por ciento de la oferta nacional del cultivo y recientemente recibió la Denominación de Origen para las varie-dades Jaguar y Mayapán, ambas desarro-lladas por el Instituto Nacional de Investi-gaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).

Sin embargo, los productores aún no pueden acceder a los beneficios de tal distintivo -que por lo general se tra-ducen en un sobreprecio de sus co-sechas-, debido a que aún hacen falta varios procesos, indispensables para regular esta denominación. Poner en marcha una deno-minación de origen es un proceso largo, porque una vez que se otorga requiere de una norma oficial que establezca los lineamientos que rijan la producción de las dos variedades de habanero ya autorizadas; también es necesaria la publicación del regla-mento de aplicación de la norma y un comité de vigilancia que garantice el adecuado aprovechamiento de la denominación, explica Germán Gil, director técnico de la empresa Indus-

tria Agrícola Maya, que procesa 600 toneladas al año, de la cuales la mitad se exporta. El proceso de reconocimien-to de la tradición y calidad de chile habanero yucateco tiene avances en otras áreas. Algo que se trabajó por más de 10 años y que involucró a pro-ductores, investigadores, institutos e industrias fue la certificación de las semillas de este cultivo con denomi-nación de origen. El Servicio Nacional de Ins-pección y Certificación de Semillas (SNICS) de la Sagarpa, fue la institu-ción que otorgó el certificado de ca-lidad y autenticidad a las variedades Jaguar y Mayapán. Es importante señalar que la variedad de chile habanero Jaguar se

encuentra protegida bajo un título de obtentor, por lo que su utilización sin autorización es causa de infracción. Se deben pagar regalías para poder sembrarla. El 28 de febrero de este año, cuando la directora general del SNICS, Enriqueta Molina Macías, hizo oficial la certificación de estas semillas, indicó que con este avance podrá incrementar la promoción in-ternacional del picante y promover la inversión en el campo mexicano, en particular para la ampliación del cul-tivo del chile habanero en la región.

Yucatán líder en producción

En Yucatán, principal productor, se siembran alrededor de 300 a 400

2www.imagenagropecuaria.com

Por Gerardo Suárez

hectáreas de chile habanero y gene-ran una producción de entre 3 mil a 4 mil toneladas por ciclo. Este es un cultivo anual, aunque bajo ciertas condiciones y cuidados especiales se puede volver perenne, comenta Ger-mán Gil. El precio promedio al pro-ductor, en los últimos tres años, ha sido de 14 pesos por kilo, aunque de-pendiendo la estacionalidad y oferta, el valor del chile puede alcanzar 30 pesos por kilo, si es de primera cali-dad. Como en todos los cultivos, los buenos precios vuelven una moda la siembra de un determinado pro-ducto, pero en el caso del habanero la superficie y volúmenes de produc-ción se han mantenido estables.

El costo de producción de una hectá-rea de este producto es de entre 130 mil y 200 mil pesos, dependiendo de los rendimientos. Esto se debe a que una de las labores más pesadas y cos-tosas en este cultivo es la cosecha. A los jornaleros se les paga

desde uno y hasta dos pesos por kilo recolectado. Si una plantación da 40 toneladas, se puede gastar hasta 80 mil pesos en el pago de jornales; pero si sólo genera 10 toneladas, pues el gasto es de 15 mil pesos. El chile habanero se comer-cializa de acuerdo con su calidad y existen tres clasificaciones: primera, segunda e industrial. La diferencia entre las tres es el tamaño, porque la final todos los chiles deben estar sa-nos, sin elementos que puedan afec-tar la salud del consumidor. Dependiendo de la estacio-nalidad y el comportamiento del mercado se determinan los precios de cada clase de chile. En tiempos de escasez, un chile pequeño se vende a precio de chile de primera; y cuando hay abundancia, los ejemplares de primera se venden a precios más ba-jos. En términos generales, to-mando como referencia el precio del chile industrial, los habaneros de pri-mera y segunda calidad pueden ele-var su valor hasta en 400 por ciento,

dependiendo de la oferta en el mer-cado, explica Germán Gil, quien tie-ne trato directo con los productores que proveen de materia prima a la empresa en la que labora. Las variedades de chile haba-nero se distinguen por sus cualidades físicas, de color, de sabor y picor. Hay variedades que maduran en rojo, en amarillo, en naranja y en tono choco-late. Es un producto que tiene mu-chas aplicaciones, pero en la región se utiliza para consumo alimenticio, ya sea fresco, deshidratado, en puré o salsa. A diferencia de otros tipos de chile como los guajillos o pasilla, el habanero se consume en pequeñas porciones por su elevado picor. Las otras variedades de chiles los pode-mos encontrar en muchos platillos y productos, el habanero no, refiere. Plantea que en todo México si no encontramos un chile específico nos comemos otro, pero en Yucatán sólo comemos habanero. Es un ele-mento cultural que se ha reconocido con la denominación de origen.

3www.imagenagropecuaria.com

4www.imagenagropecuaria.com

Clima no afectó producción lechera

La industria de la leche no ha resentido los efectos de la sequía en sus volúme-nes de producción ni en el precio del lácteo. No obstante, la eventual falta de lluvias y las altas temperaturas en los próximos meses de verano son un escenario que causa mucha preocupa-ción en el sector, porque representarían muertes de ganado.

En 2011, año marcado por la sequía más severa de los últimos 70 años, la producción de leche creció entre 2 y 3 por ciento, el incremento fue marginal, pero al menos no decreció, subraya el presidente de la Cámara nacional de industriales de la leche (Canilec), Raúl Riquelme Cacho. Las sequías o heladas que mermaron la producción de granos y forrajes no impactaron de forma significativa en el precio de la leche, pues esta se paga de 4.80 a 5.50 pesos por litro a los productores, depen-diendo la región en la que se ubiquen y la calidad de producto que generan, argumenta. Con relación al precio al con-sumidor, este sólo sufrió unos ajustes marginales de unos cuantos centa-vos, pero no tenemos previsto un in-cremento en valor de la leche durante el 2012. Puntualiza que el año pasa-do se alcanzó una producción de 10 mil 750 millones de litros equivalen-tes, mismos que equivalen al 70 por ciento del consumo nacional. El 30

por ciento restante, se cubre con im-portaciones, tanto de leche en polvo como de materias primas del lácteo. De enero a diciembre de 2011 ingresaron al país 620 mil toneladas de derivados lácteos, de los cuales 86 por ciento corresponde a materias primas; y el otro 14 por ciento fueron productos terminados como quesos de especialidad. Raúl Riquelme resaltó que si las condiciones de mal tiempo se complican durante el periodo de es-tiaje, los ganaderos y el gobierno se verán en la necesidad de tomar de-cisiones más drásticas que permitan la continuidad de la producción de leche y otros productos agropecua-rios, como trasladar los sistemas de producción hacia otras regiones con mejores condiciones de clima y dis-ponibilidad de agua, es decir, al sur-sureste del país.

Especialización de los consumidores

México se tiene que avocar en ga-rantizar el abasto interno de leche,

fomentando el incremento en la pro-ducción y únicamente compensar el déficit con importaciones. El consumo per cápita de los mexicanos es de 139.5 litros equiva-lentes de leche por año, que represen-tan un volumen diario de 385 milili-tros diarios. Este consumo está muy por debajo de lo recomendado por la Organización mundial de la Salud (OMS), pues señala que la ingesta óp-tima es de medio litro por día. Riquelme Cacho indica que no es tan sencillo crecer el consumo de los productos lácteos, debido a que por cuestiones de salud y pres-cripciones médicas no todas las per-sonas pueden incrementar su inges-ta. Además esta industria tiene muy bien delimitadas las etapas en las que más se bebe leche o comen productos lácteos, como son los niños menores de 12 años, los adultos de más de 30 años y los adultos mayores de más de 65 años. Las empresas están haciendo un buen esfuerzo, a través de la inves-tigación científica y de mercado para

Por Gerardo Suárez

5www.imagenagropecuaria.com

ofertar productos especializados en cada una de las exigencias de los distin-tos grupos de consumidores. Un ejem-plo son las leches deslactosadas, que han tenido un crecimiento exponen-cial en su participación en el mercado. Raúl Riquelme asegura que al día de hoy los productos sin lacto-sa representan alrededor del 16 por ciento del volumen total de leche; por ello las empresas intentan diversificar cada vez más su gama de leches y nos es muy fácil encontrar variedades light, descremadas, enteras, adicio-nadas con calcio, vitaminas, mine-rales, saborizadas, sin calorías; y en todo tipo de presentaciones. Tales innovaciones también son una respuesta al buen trabajo que han realizado otras industrias como la del agua, los refrescos, el té y hasta el café; que en el segmento de bebidas represen-tan una competencia para la leche.

Composición del mercado blanco y normatividad

El 80 por ciento de los más de 15 mil millones de litros de leche que se consumen en el país los ofertan las empresas que pertenecen a la Cani-lec, sólo 750 mil litros los elabora y

distribuye Liconsa. El resto corres-ponde a la importación de productos terminados como quesos; que tam-bién ofertan las pequeñas queserías artesanales, principalmente de la re-gión sur de la República, aunque de forma marginal. En el mercado se pueden en-contrar una infinidad de productos lácteos, con distintos porcentajes en su composición de derivados de la le-che, tales como las formulas lácteas y los productos lácteos combinados. Para distinguir esta vasta di-versidad, se promovió la implemen-tación de la Norma Oficial Mexicana (NOM-155) que el día de hoy está vi-gente y que consiste en la diferencia-ción entre los productos elaborados al cien por ciento de leche y los que contienen una menor concentración a través de un etiquetado visible al consumidor. La Norma ha ido avanzando y ya terminó el proceso de consulta pública. Ahora el proyecto ya lo tiene la Dirección General de Normas en-tidad que deberá publicarlo ya como norma definitiva. Tal denominación no ten-drá repercusión en el precio de estos productos ni de su participación en

el mercado, puesto que tanto los de-rivados como los productos elabora-dos de pura leche, ya tienen un posi-cionamiento en el mercado y en las preferencias de la gente, comenta el presidente de la Canilec.

Futuro incierto

El porvenir de esta industria depen-de, en gran medida, de las decisiones globales que se tomen en torno al consumo de granos básicos, como el maíz, trigo, soya, canola, entre otros; si la industria de los biocombustibles a base de estos productos sigue cre-ciendo, la presión en el precio de este insumo se elevará y por ende su valor. Asimismo, el crecimiento po-blacional significa un incremento na-tural en la demanda de estos cultivos y los precios podrían hacer inviable el desarrollo de la producción de leche y de otras actividades de la industria agroalimentaria. Por el momento, en la indus-tria mexicana de la leche hemos lo-grado mantener un ritmo de crecien-do, mínimo, pero constante, subraya Riquelme cacho.

Miel de maguey y de agave, alternativa saludable

6www.imagenagropecuaria.com

La miel de maguey y de agave son dos alternativas naturales para sustituir a los endul-zantes que tradicionalmente consumimos, que por sus procesos de refinamiento, como el caso del azúcar, o por sus componentes químicos podrían causar problemas en el sistema intestinal

Las personas que padecen algún tipo de diabetes pueden ingerir este edul-corante, que se extrae del corazón de los magueyes de pulque y de tequila, puesto que el índice glucémico de este néctar es inferior al del azúcar. Alejandro Silisreo, responsa-ble de comercialización de la empre-sa Poder Natural, que se dedica a la extracción de la miel de agave y ma-guey, explica que este producto con-tiene inulina, que es favorable para las personas que padecen gastritis, colitis o que tienen poco movimien-to en el sistema digestivo. La inulina coadyuva a la activación del sistema gastrointestinal, agrega. La única diferencia entre la miel de agave y la de maguey, es el color, la que se extrae de los mague-yes pulqueros tiene un color notable-mente más oscuro que la de agave, sin embargo, señala que ambas son aptas para todo tipo de consumidor, sin importar su edad.

La empresa obtiene toda su materia prima de una superficie de alrededor de 20 mil hectáreas que se ubican en el estado de Hidalgo, pero como no siempre alcanza ese volu-men de producción para abastecer los requerimientos de la empresa, de-cidieron trabajar en convenio con los pequeños productores de la región. Este esquema, asegura Ale-jandro, es benéfico tanto para la em-presa como para los productores, puesto que ellos pueden vender su producto a un buen precio y nosotros abastecemos nuestras necesidades de materia prima. Comercializan la miel de aga-ve en presentaciones de 660 mililitros

a un precio de alrededor de 90 pesos, que es similar al costo de la miel de abeja. Destaca que no emplean nin-gún tipo de conservador, endulzante o colorante artificial, por lo que cuen-tan con tres certificaciones, Kosher, orgánica y como producto apto para el consumo de personas con diabetes. Además de surtir a distri-buidores de las regiones centro, sur y norte de México, comenzamos a exportar pequeños volúmenes a Ca-nadá, que es un país con un consu-mo per cápita más alto que le de los mexicanos, a pesar de que nosotros somos el país que más produce la miel de agave, enfatiza.

Por Gerardo Suárez

8www.imagenagropecuaria.com

Distritos de riego inviables económicamente por cambio climático y sobrexplotación de acuíferos

Los impactos del cambio climático afec-tarán de forma sensible la producción agropecuaria, uno de los cultivos más sensibles a los cambios en la climatología es el maíz, sobretodo en temporal, por lo que más de 2 millones 900 mil producto-res de baja escala que se dedican a dicho propósito resultarán afectados.

Este sector de la población suele vi-vir en la pobreza, puesto que apenas cuenta con superficies para generar el grano necesario para su auto abas-to. Los máximos esfuerzos de adap-tación al cambio climático se tienen que dar en este rubro, por lo pronto los subsidios que perciben estos agri-cultores son insuficientes para tomar las medidas necesarias de adaptación y mitigación ante dicho fenómeno. Los distritos de riego no co-rren con mejor suerte, pues de acuer-do con proyecciones del Instituto Na-cional de Ecología (INE) para el año 2030 estas áreas de producción deja-rán de ser económicamente viables, a consecuencia de la sobreexplotación de los acuíferos y la variación climá-tica. Dependiendo de las condi-ciones particulares de cada región del país, en los próximos años la produc-

ción agropecuaria resentirá disminu-ciones en las superficies cultivables, en la productividad de los cultivos, en el volumen de las precipitacio-nes. Asimismo, se intensificarán los periodos de sequía y la presencia de plagas. Las cosechas de los distritos de riego de las regiones áridas y se-miáridas del país, junto con las re-giones de temporal serán las que se verán más comprometidas, indicó la coordinadora del Programa de cam-bio climático del INE, Julia Martínez Fernández. En su participación en el XII Foro de expectativas del sector agropecuario y pesquero, subrayó la importancia de diseñar y adoptar medidas a corto, mediano y largo plazo para adaptar la producción de alimentos a la variabilidad climática; estas políticas tienen que ser integra-

les, viables y sustentables. La migración y el envejeci-miento de los productores de tempo-ral son otro obstáculo para la adop-ción de medidas de mitigación, como el cambio en los patrones de cultivo o la incorporación de sistemas de riego por goteo. Las iniciativas a corto plazo pueden ser la modificación o mejora en las prácticas agropecuarias actua-les, además es necesario conocer a detalle la vulnerabilidad y capacidad de adaptación de cada región, para elaborar planes de acción más efica-ces. La especialista sugirió que el uso de nuevas variedades de semillas acordes a las nuevas condiciones de clima de cada localidad, la diversifi-cación y reconversión productiva y un uso más racional de agroquímicos coadyuvará a mantener una produc-

Por Gerardo Suárez

9www.imagenagropecuaria.com

tividad estable. Por el lado de las políticas pú-blicas es importante que se refuercen los programas sociales de apoyo ali-mentario en las comunidades de alta marginación; que se diversifiquen las fuentes de ingreso y se generen em-pleos no agrícolas en el medio rural; así como incrementar la cobertura de los seguros agrícolas ante contingen-cias climáticas. A pesar de que algunas regio-nes pueden resultar beneficios por la modificación en los patrones clima-tológicos, se espera que el impacto general en la agricultura y la segu-ridad alimentaria sea cada vez más negativo, especialmente en zonas ya de por sí propensas a sufrir desastres como sequías, inundaciones y hura-canes, y a padecer inseguridad ali-

mentaria, aseveró Julia Martínez.

Riego en México

*México ocupa el sexto lugar en el mundo con infraestructura hidroa-grícola, al contar con 6.4 millones de hectáreas organizadas en 85 Distritos de Riego y 39 mil Unidades de Riego. *Del total del agua concesio-nada para uso agropecuario (59.4 mil millones de metros cúbicos), 67% co-rresponde a aguas superficiales (39.7 mil millones de metros cúbicos) y 33% a aguas subterráneas (19.7 mil millones de metros cúbicos). *A partir de la década de los setentas, ha aumentado sustancial-mente el número de acuíferos so-breexplotados, en el año 1975 eran 32 acuíferos, 80 en 1985, y 101 acuíferos sobreexplotados al 31 de diciembre de 2008.

Jitomate en invernadero

Diversas regiones del país se caracte-rizan por producir jitomate a campo abierto, garantizando así el abasto de esta hortaliza para la venta durante todo el año. Sin embargo, la pro-ducción de jitomate se enfrenta con frecuencia a diversas condiciones ambientales que dificultan su cultivo, además de que cada vez se demanda mayor calidad en el producto.

Este libro es una guía para todos aquellos interesados en la horticul-tura protegida, especialmente en el cultivo del jitomate, y en conocer más sobre su manejo. Los autores proponen técnicas que permitan aprovechar al máximo las ventajas que proporcionan las condiciones ambientales de cada lugar. Basándose en experiencias obtenidas durante quince años, los autores hacen una puntual descrip-ción de las condiciones necesarias para que el cultivo tenga éxito, en la producción bajo invernadero des-tacan factores ambientales, como radiación, temperatura, humedad y ventilación; detallan la forma ade-

cuada de favorecer y regular la dis-ponibilidad de estas condiciones, así como los niveles óptimos según la etapa de desarrollo de la planta para hacer más eficiente el crecimiento de la misma y evitar enfermedades fun-gosas difíciles de controlar. El texto habla de la calidad y cantidad de agua para el riego del cultivo, así como los sustratos em-pleados; debate sobre ventajas de los injertos de jitomate, como una mayor productividad y resistencia a bajas temperaturas, a cambios climá-ticos y al ataque de patógenos; en las desventajas enfatiza el alto costo de la plántula. Los autores examinan las

principales enfermedades y plagas a las que está expuesto el jitomate, las razones por las que éstas pueden desarrollarse o incidir en el cultivo y brinda asesoría para poder no sólo combatir estas enfermedades, sino prevenirlas. El libro resulta de gran uti-lidad como guía que orienta al pro-ductor en cada paso de la producción de jitomate en invernadero, desde el tipo de variedad a elegir, sus propie-dades y los materiales a emplear para su crecimiento; brinda recomenda-ciones para la cosecha y el empaque de tal forma que se garantice que el producto tenga mayor tiempo de vida en anaquel.

10www.imagenagropecuaria.com

Reseñas