Bursitis del tobillo

INFORMACIÓN GENERAL:

¿Qué es la bursitis de tobillo? La bursitis es la hinchazón y el dolor que se presenta en una bursa. Una bursa es una bolsa (saco) que contiene líquido y que actúa como un colchón o amortiguador de golpes entre un tendón y un hueso. Un tendón es un cordón de tejido fuerte que conecta los músculos con el revestimiento de los huesos. Una bursa contiene normalmente una pequeña cantidad de líquido en ella. Al ser lesionada, la bursa se inflama (enrojecimiento y dolor) y se llena excesivamente de líquido. La bursitis en el tendón de Aquiles es un tipo de bursitis que se presenta en el tobillo, cuando se inflama la bursa ubicada entre el tendón de Aquiles y el talón. Es posible que usted presente bursitis y tendinitis (inflamación en el tendón) al mismo tiempo.

¿Cuáles son las causas de la bursitis de tobillo? La bursitis en su tobillo pudo ser causada por uno o más de los siguientes factores:

Presión en sus tobillos y talones. Esta presión es usualmente causada por correr o ejercitarse sobre un suelo disparejo. La forma como usted se ejercita también puede causar o empeorar la bursitis de tobillo. También puede ser causada por usar zapatos que rozan constantemente contra el talón debido al ajuste deficiente.

Un golpe fuerte y directo en el talón.

Una infección.

Problemas médicos como artritis reumatoide o gota.

Uso excesivo de sus tobillos. Este uso excesivo es cuando usted practica una actividad o deportes en los cuales usted hace los mismos movimientos una y otra vez. Como ejemplo de estos movimientos repetidos son: correr, caminar o saltar.

Algunas veces, las personas ignoran la causa de la bursitis de tobillo.

¿Cuáles son los signos y síntomas de la bursitis de tobillo?

Cojear.

Movimiento disminuido. Sus tobillos pueden sentirse rígidos o ser incapaces de moverse como usualmente lo hacían.

Dolor o sensibilidad en la parte trasera del tobillo. El dolor o la sensibilidad pueden empeorar al comenzar el ejercicio o cuando usted sube corriendo por una superficie inclinada. Es posible que también sienta dolor cuando usted usa zapatos.

Enrojecimiento y calor. Si la bursa está infectada, puede presentarse enrojecimiento o calor en la piel que cubre el tobillo. También es posible que usted presente fiebre.

Hinchazón en la parte trasera del talón.

¿Cómo se diagnostica la bursitis de tobillo? Un médico examinará el área de su tobillo y le preguntará lo relacionado con sus actividades. Si usted recibió un golpe directo y fuerte en el talón o su bursitis comenzó súbitamente, es posible que necesite radiografías (rayos X). Estas radiografías muestran imágenes de los huesos que se encuentran en el interior de su pie. Los médicos pueden usar los rayos X para determinar si usted tiene un hueso fracturado (roto o quebrado) o algún otro problema. También es posible que usted necesite otros exámenes, como ultrasonido (procedimiento que usa ondas sonoras para tomar imágenes de su tobillo) o imágenes con resonancia magnética (IRM). La resonancia magnética usa ondas magnéticas para observar su tobillo y los tejidos que lo rodean.

¿Cómo se trata la bursitis de tobillo? El tratamiento dependerá de la causa de su bursitis. En su tratamiento se pueden incluir una o más de las siguientes alternativas:

Descanso: La parte más importante del tratamiento para la bursitis es descansar su tendón de Aquiles mientras sana la bursa. Descansar su tobillo tanto como sea posible, puede disminuir la hinchazón y evitar que la bursitis empeore. Cuando disminuya el dolor, comience a realizar movimientos normales y lentos.

Hielo: El hielo hace que los vasos sanguíneos se constriñan (se estrechen) lo cual ayuda a disminuir la inflamación (hinchazón, dolor y enrojecimiento). Ponga hielo picado en una bolsa plástica o use un paquete de maíz o arvejas congeladas y envuélvalo en una toalla formando un paquete. Coloque este paquete sobre su tobillo durante quince a veinte minutos, tres a cuatro veces diarias. No duerma sobre este paquete de hielo porque podría sufrir una quemadura.

Calor: Después de dos o tres días, usted usar calor para tratar de disminuir el dolor y la rigidez. Use una bolsa con agua caliente, un cojín eléctrico o una compresa caliente y húmeda. Para hacer una compresa, empape con agua caliente una toallita limpia. Exprima el exceso de agua y coloque la toallita sobre su talón durante quince a veinte minutos, tres a cuatro veces diarias. Su médico puede ordenarle que cambie el tratamiento de su tobillo alternando el frío y el calor. Al hacerse estos tratamientos, siga cuidadosamente las instrucciones de su médico.

Protectores (aditamentos o accesorios) para el tobillo: Los médicos pueden suministrarle aditamentos especiales con un recorte que queda alrededor del área sensible. También es posible que le ordenen usar zapatos con talón reforzado. Esto le dará un mejor control del talón. Usted puede necesitar otros aditamentos en forma de cuña para levantar su talón y evitar que presione contra la parte trasera del zapato. También puede usar zapatos que sean abiertos en la parte trasera, como sandalias sin tiras que presionen el talón.

Medicamentos:

o Antibióticos: Si es necesario, es posible que a usted le administren antibióticos para combatir las infecciones. Tómelos en la forma que le ordenaron hasta agotarlos, aunque su tobillo comience a sentirse mejor.

o AINEs: Los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINEs) pueden disminuir la inflamación (hinchazón) y el dolor o la fiebre. Estos medicamentos pueden comprarse con o sin receta médica. En algunas personas, estos medicamentos pueden provocar sangrados estomacales o problemas en los riñones. Antes de usar, lea siempre la etiqueta y siga cuidadosamente las indicaciones que vienen con este medicamento.

o Esteroides: A usted pueden aplicarle inyecciones de medicamentos conocidos como esteroides. Los médicos pueden agregarle anestesia local a estos esteroides para así ayudarle a disminuir el dolor producido por la bursitis. Como estas inyecciones disminuyen la hinchazón y el dolor, usted puede sentir que el tobillo ya se encuentra sano y que puede volver a ejercitarse intensamente. Es importante no ejercitarse antes que su médico lo autorice. Su bursitis puede empeorar si usted comienza a ejercitarse antes de tiempo.

Fisioterapia: Su médico puede ordenarle que asista a sesiones de fisioterapia. Los fisioterapeutas pueden usar ultrasonido para aumentar el flujo de sangre hacia el área lesionada. También pueden hacerle masajes para estirar los tejidos y producir calor en la lesión, de tal forma, que aumente el flujo de sangre hacia esa lesión. Estos y otros tratamientos pueden ayudar a que la bursitis mejore con más rapidez. Los ejercicios para estirar y fortalecer su tendón de Aquiles, pueden iniciarse después que la bursitis haya sanado. Cuando los fisioterapeutas lo autoricen, usted puede ir aumentando gradualmente la cantidad de peso que usted apoya en su pie lesionado. También pueden ordenarle que suspenda el ejercicio, si usted siente dolor en su tobillo.

Cirugía: Usted puede necesitar cirugía para extraer la bursa o partes de hueso del talón. La cirugía no es usualmente necesaria, si su bursitis no es muy grave y mejora con otros tratamientos.

¿Cómo podría proteger mis tobillos y ayudar a prevenir la bursitis de tobillo?

No corra si usted siente dolor. Cuando comience a correr nuevamente, evite correr rápido hacia arriba o hacia abajo en una superficie inclinada, hasta que el tendón haya sanado completamente.

Comience a ejercitarse cuando su médico lo autorice. Comience lentamente a hacer ejercicios, como montar en bicicleta, cuando los médicos lo autoricen. Al hacer ejercicios que hagan presión sobre sus tobillos, como correr o caminar, hágalo sobre superficies planas y parejas. Evite ejercitarse en superficies muy duras, como el concreto o el asfalto.

Haga estiramientos (elongaciones) antes de ejercitarse. Haga siempre ejercicios de calentamiento y estire sus músculos suavemente antes de ejercitarse. Al terminar de ejercitarse, haga ejercicios de enfriamiento. Esto aflojará sus músculos y disminuirá el estrés en su tobillo.

Use aditamentos (protectores) para el talón. Para ayudar a disminuir la presión contra su talón, use almohadillas (cuñas) de espuma blanda o de fieltro para proteger sus talones. Pregúntele a su médico cuáles almohadillas son más convenientes para usted.

Use zapatos con buen ajuste. Compre zapatos de correr o para ejercitarse que soporten y ajusten bien sus pies. No use zapatos de corte bajo. Consulte con su médico o vaya a un almacén especializado en zapatos deportivos, para conseguir unos zapatos que se ajusten bien a sus pies. Pregúntele a su médico si usted necesita usar en sus zapatos unos aditamentos especiales conocidos como ortóticos. Los aditamentos ortóticos pueden alinear sus pies en los zapatos para ayudar a que usted pueda correr o ejercitarse correctamente.

Comience inmediatamente su tratamiento si usted presenta dolor, calor o hinchazón. Descanse sus tobillos y use tratamientos con hielo y calor. Pregúntele a su médico si usted debe usar medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE).

Llame a su médico si:

Aumentan su dolor e hinchazón.

Usted presenta nuevos síntomas que no tienen explicación.

Bursitis retrocalcáneaLa bursitis del talón (retrocalcánea) es la hinchazón del saco lleno de líquido (bursa) situada en la parte posterior del hueso del talón, por debajo del tendón de Aquiles.

Causas

La bursa actúa como amortiguador y lubricante entre los tendones o los músculos que se deslizan sobre el hueso. Hay bursas alrededor de la mayoría de las articulaciones grandes del cuerpo, incluso en el tobillo.

La bursa retrocalcánea está localizada en la parte posterior del tobillo, entre el talón y el gran tendón de Aquiles, que conecta los músculos de la pantorrilla con el hueso del alón.

El uso repetitivo o excesivo del tobillo puede hacer que esta bursa resulte irritada e inflamada. Las causas posibles son caminar, correr o saltar en exceso.

Esta afección frecuentemente está asociada con la tendinitis aquílea. Algunas veces, la bursitis retrocalcánea se puede confundir con este tipo de tendinitis.

Los riesgos de presentar esta afección abarcan el hecho de comenzar un programa de ejercicios agresivo o incrementar súbitamente el nivel de actividad sin un acondicionamiento adecuado.

Síntomas

Dolor en el talón, especialmente al caminar, correr o al tocar el área. El dolor puede empeorar al levantarse en los dedos de los pies (pararse de puntillas). Piel roja y caliente sobre la parte posterior del talón.

Pruebas y exámenes

El médico tomará la historia clínica para saber si se presentan síntomas de bursitis retrocalcánea. Examinando el tobillo se puede encontrar la ubicación del dolor. El médico buscará sensibilidad y enrojecimiento en la parte posterior del talón.

El dolor puede empeorar cuando el médico dobla el tobillo hacia arriba (dorsiflexión) o puede ser peor cuando usted se para en los dedos de los pies.

Al principio, los estudios imagenológicos, como las radiografías y resonancia magnética (RM), generalmente no son necesarios. Si el primer tratamiento no logra mejorar los síntomas, el médico puede recomendar estos estudios. La resonancia magnética puede mostrar inflamación.

Tratamiento

El médico puede recomendar los siguientes tratamientos:

Evitar las actividades que ocasionan dolor. Aplicar hielo en los talones varias veces al día. Tomar antinflamatorios no esteroides (por ejemplo, ibuprofeno). Ensayar con cuñas del talón hechas a la medida o sin receta para ayudar a disminuir la

tensión sobre el talón. Utilizar fisioterapia para mejorar la flexibilidad y fortalecer la parte alrededor del

tobillo, lo cual puede ayudar a mejorar la bursitis e impedir que retorne.

Si estos tratamientos no funcionan, el médico puede inyectar una pequeña cantidad de esteroides en la bursa. Si esta afección está asociada con la tendinitis aquílea, puede ser efectivo enyesar el tobillo para evitar el movimiento durante algunas semanas. En muy raras ocasiones, puede ser necesaria una cirugía para extirpar la bursa inflamada.

Expectativas (pronóstico)

Esta afección generalmente mejora en algunas semanas con el tratamiento apropiado.

Cuándo contactar a un profesional médico

Si usted presenta dolor en el talón o síntomas de bursitis retrocalcánea que no mejoran con el reposo, consulte con el médico para que le realice una evaluación y tratamiento.

Prevención

Para ayudar a prevenir esta afección, conserve una postura adecuada al hacer ejercicio, así como una buena flexibilidad y fortaleza alrededor del tobillo.

El estiramiento adecuado del tendón de Aquiles ayuda a prevenir lesiones.

Nombres alternativos

Dolor en la inserción del talón; Bursitis del talón