año xix • nº 1423 • 15 de julio de 2018 ¡la buena … · la biblia, el libro de la palabra...

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La hojita de los niños Año XIX 1423 • 15 de julio de 2018 ¡La buena noticia para todos! • Domingo 15° durante el año LAS 7 DIFEREN CIAS MENSAJE DE LA PALABRA DE DIOS PARA ESTA SEMANA En la primera lectura, Dios llama a un pastor y, en el Evangelio, Jesús envía a anunciar a doce personas comunes, del pueblo. A esa gente sencilla, sin grandes títulos, les encarga una gran misión: anunciar el amor, la salvación. Cada uno de nosotros, sea de la edad que fuese, también tiene una palabra de Dios para regalar a los demás. Oja- lá nos animemos a hacerlo: regalar palabras de aliento, de perdón, de amistad… Jesús los mandó de dos en dos. Buscá las 7 diferencias El dibujo es de Las Melli

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La hojitade los niños

Año XIX • nº 1423 • 15 de julio de 2018¡La buena noticia para todos! • Domingo 15° durante el año

LAS 7 D IFERENC IASMensaje de La PaLabra de dios

Para esta seMana

En la primera lectura, Dios llama a un pastor y, en el Evangelio, Jesús envía a anunciar a doce personas comunes, del pueblo. A esa gente sencilla, sin grandes títulos, les encarga una gran misión: anunciar el amor, la salvación. Cada uno de nosotros, sea de la edad que fuese, también tiene una palabra de Dios para regalar a los demás. Oja-lá nos animemos a hacerlo: regalar palabras de aliento, de perdón, de amistad…

Jesús los mandó de dos en dos.Buscá las 7 diferencias

El dibujo es de Las Melli

Las Lecturas de La Misa deL doMingo

La Biblia, el libro de la Palabra de Dios

Segunda lectura: Efesios 1, 3-10

endito sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendeci-

do en Cristo con toda clase de bienes espi-rituales en el cielo, y nos ha elegido en él, antes de la creación del mundo, para que fuéramos santos e irreprochables en su pre-sencia, por el amor. Él nos predestinó a ser sus hijos adoptivos por medio de Jesucris-to, conforme al beneplácito de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia, que nos dio en su Hijo muy querido. En él hemos sido redimidos por su sangre y hemos reci-bido el perdón de los pecados, según la ri-queza de su gracia, que Dios derramó sobre nosotros, dándonos toda sabiduría y enten-dimiento. Él nos hizo conocer el misterio de su voluntad, conforme al designio misericor-dioso que estableció de antemano en Cristo, para que se cumpliera en la plenitud de los tiempos: reunir todas las cosas, las del cielo y las de la tierra, bajo una sola Cabeza, que es Cristo. En él hemos sido constituidos he-rederos, y destinados de antemano –según el previo designio del que realiza todas las cosas conforme a su voluntad– a ser aque-llos que han puesto su esperanza en Cristo, para alabanza de su gloria. En él, ustedes, los que escucharon la Palabra de la verdad, la Buena Noticia de la salvación, y creyeron en ella, también han sido marcados con un sello por el Espíritu Santo prometido. Ese Espíritu es el anticipo de nuestra herencia y prepara la redención del pueblo que Dios adquirió para sí, para alabanza de su gloria.

B

evangelio: Marcos 6, 7-13

esús llamó a los Doce y los envió de dos en dos, dándoles poder sobre los espí-

ritus impuros. Y les ordenó que no llevaran para el camino más que un bastón; ni pan, ni provisiones, ni dinero; que fueran calzados con sandalias, y que no tuvieran dos túnicas. Les dijo: «Permanezcan en la casa donde les den alojamiento hasta el momento de partir. Si no los reciben en un lugar y la gente no los escucha, al salir de allí, sacudan hasta el pol-vo de sus pies, en testimonio contra ellos». Entonces fueron a predicar, exhortando a la conversión; expulsaron a muchos demonios y curaron a numerosos enfermos, ungiéndo-los con óleo.

J

Primera lectura: Amós 7, 12-15

Amasías, el sacerdote de Betel dijo a Amós: «Vete de aquí, vidente, refúgiate

en el país de Judá, gánate allí la vida y profe-tiza allí. Pero no vuelvas a profetizar en Be-tel, porque este es un santuario del rey, un templo del reino». Amós respondió a Ama-sías: «Yo no soy profeta, ni hijo de profetas, sino pastor y cultivador de sicómoros; pero el Señor me sacó de detrás del rebaño y me dijo: Ve a profetizar a mi pueblo Israel».

El cuentoSonia sueña

—¿Qué pasa Sonia? —preguntó la mamá que llegó corriendo al cuarto de su hija al oírla gritar.—Sueño, sueño con co-sas graciosas –dijo Sonia medio dormida.—¿Eso eran carcajadas?Sonia soñaba mucho, tanto, tanto que a ve-ces tenía más historias de sueño que de la vi-da despierta. A Sonia le encantaba contar los sueños. Su familia sos-pechaba que inventaba o, al menos, exageraba.No conocían a otra per-sona que, como Sonia, sintiera olores, tu-viera sensaciones de suavidad, aspereza o viscosidad en los sueños.Algunas noches, a Sonia le costaba dormir-se, temía tener una pesadilla. Una de esas en que soñás que caés, o que estás en el baño y mojás la cama, o que alguien te per-sigue… Sabía que las pesadillas no solían ser originales, ni lindas, ni brillantes, ni con buen perfume. Eran comunes, oscuras, gri-tonas. Sonia había hablado mucho con sus compañeras acerca de los sueños y de dor-mir con la luz apagada o encendida.Alguna amiga le había contado que su papá le había dicho: "Ya sos grande, ahora vas a dormir con la luz apagada". Ella no quería apagar la luz mientras dormía. Al mismo tiempo, también deseaba crecer porque

quería que le compraran un celular, y esa era la condición. Así que, después de pen-sarlo bien, decidió que iba a apagar la luz.

Desde que tomó la deci-sión hasta el día en que lo hizo, pasaron varias semanas; noches en que antes de acostarse, to-maba la perilla del ve-lador y hacía esfuerzos para apretarla, pero su dedo no respondía. Hasta que, por fin, se de-cidió.La oscuridad era total, y su habitación tenía una ventana al patio, pero

era una noche sin luna y no entraba ni un poquito de luz. No había diferencia entre tener los ojos abiertos, cerrados o taparse con el acolchado. Se concentró en la respi-ración, como decía la maestra. Inhalar, ex-halar, despacio, profundo… La oscuridad permanecía, y parecía que era el aire lo que se iba poco a poco. Le costaba respirar. No aguantó más y pegó un grito. Su papá y su mamá llegaron corriendo y encendieron la luz.Sonia les contó que quería ser grande y por eso, había apagado la luz.Su mamá fue a buscar una cajita que estaba en la parte más alta del mueble del come-dor. Sonia la conocía, recordaba que alguna vez se la había pedido a su mamá para jugar, pero no se la había dado. Era de la abuela.

de María inés casaLá y aPortes de andrés Pisano casaLá • dibujo de Hania KoLLenberger

Si querés contactar con la autora, escríbele a: [email protected]

Curiosidades de La hojitapor Gladys y Margarita Pérez

Las Melli

Jesús los envió en su nombre

La palabra "apóstol" significa "envia-do". Los judíos decían que, cuando alguien enviaba a otra persona pa-ra realizar algo, era como si fuera él mismo. Por eso, los apóstoles (los enviados de Jesús) tenían la misión de hacerlo presente con sus acciones y con sus palabras. ¿Vale también pa-ra nosotros?

Le sorprendió que apareciera con esa ca-jita. La traía como si fuera un tesoro. La abrió, había un platito de cerámica gasta-do por el tiempo y por el uso. Todavía tenía restos de vela. —Este platito lo usó mi abuela desde chi-quita hasta que murió con 91 años. No se dormía si no encendía una velita. Decía que no podía dormir sin luz. Mi abuela fue una mujer fuerte, una de las primeras que entró en la Universidad y consiguió una beca en el exterior. Sin embargo, si se quedaba sin velita para la noche, la ibas a encontrar sentada en el sillón. ¿A dónde me van a llevar los sueños si no hay una pequeña luz? –decía siempre. —A mí me pasa lo mismo —dijo Sonia—, me parece que, sin la luz, los sueños no sa-ben adonde ir.Desde esa noche, Sonia durmió con la caji-ta sobre la mesa y, algunas noches, con la luz apagada.

Para pensar yconversar después de

leer el relato

¿Qué te hace sentir “grande”?

Jesús te puede ayudar a crecer, ¿lo sentís así?

www.sanpablo.com.ar

La hojita de los niños. Semanario religioso infantil de uso litúrgico. No reemplaza el uso de los leccionarios.Nihil Obstat: Conferencia Episcopal Argentina. Imprimatur: Arquidiócesis de Buenos Aires. Edita: Sociedad de San Pablo.Propietario Sociedad de San Pablo (Paulinos). Registro Nacional de la Propiedad Intelectual: nº 5291558 del 31/5/16Dirección: P. Fernando Teseyra. Redactora: Inés Casalá. Diagramación: Alfredo Repetto. Corrección: María Laura RubinoDibujos: Hania Kollenberger (cuento), Maia Pisano, Gladys y Margarita «Las Melli» Pérez.Dirección y administración: Riobamba 230 C1025ABF Bs. As., Argentina. Horario: Lunes a viernes de 9.00 a 18.00

Teléfono (011) 5555-2424 / Fax: (011) 5555-2425 / E-mail: [email protected] / Impreso en G.S.Gráfica s.r.l. Charlone 958 - B1868DZF Piñeyro, Avellaneda, Bs. As. Correo Argentino Suc. 2 (B): Franqueo a pagar cuenta 14.471. En Uruguay: SAN PABLO, Colonia 1591 (11200) MONTEVIDEO. Tel.:24018332, cels.:09494307/095728681, Mail: [email protected]