5 poetas de Latinoamérica Por Héctor Hernández Montecinos

Carlos Manuel Villalobos (Costa Rica) trae a colación una serie de mitos que van desde la antigua Grecia, pasando por la América precolombina hasta lo que hoy solemos llamar contingencia o mitos modernos que se han hecho ya tan parte de nuestras vidas que parecen más bien arquetipos como el caso de Charlie Brown y Snoopy que por cierto no dejan en este contexto de recordar al Quijote y Sancho por ejemplo. Pareciera que en esta poesía se deseara abarcar todo el mundo, su pasado, su presente y un porvenir más justo, tanto como temáticas como en el uso de formas métricas como el soneto, el verso latino o la oración sufí.

Delia Cabrera Marky (Perú) se inscribe en la tradición del poema lírico y en la afectación de la palabra como expresión. De algún modo el hecho de confiar en el lenguaje a tal punto es un acto de fe que no tiene más explicación que sí misma. En su propio imaginario que de tan íntimo se convierte en una experiencia global es que esta poesía pareciera ser un solo gran poema escrito por cientos de poetas a lo largo del mundo y del tiempo de ese mundo. Nuevos rapsodas, aedos, trovadores que en los confines del buen gusto, digo el buen gusto de la academia o la crítica especializada, mantienen vivo un afecto, una pulsión que lo más probable sea el origen mismo de la propia poesía

Jorge Quintanar (México) construye una poesía nómade que se refiere al vuelo como leit motiv mediante el vuelo de las mismas palabras en la página. Hay acá un despegue de la gravedad del papel que nos lleva a senderos no transitados como diría Whitman o al azar de los dados que Mallarmé lanzó hace unos pocos momentos. El mundo maya, ciudades del continente, casas, lugares que aparecen y desaparecen, brillan y regresan al recuerdo, saltan hacia los ojos como cataratas simbólicas pero sobre todo se hacen huellas en un paisaje mental que el autor logra recrear en cada uno de sus lectores como si fuera cada poema una despedida siendo todo lo contrario.