AÑO 2014: UN AÑO DE GRACIA PARA CIUDAD RODRIGO

Nº 315Enero de 2014

Con este lema comenzó esta hermosa revolución solidaria, porque por prime-ra vez los pequeños actuaban en la Iglesia como protagonistas humildes, senci-llos, pero también creativos y valientes.

El Secretariado de Infancia Misionera, con el fin de conmemorar el 170 Aniver-sario de esta Obra, propone de nuevo este mismo lema para que los niños y ni-ñas de España se sumen a este proyecto misionero. Un proyecto que tiene comoprincipales objetivos colaborar con los padres y educadores en el despertar pro-gresivo de la conciencia misionera universal en los niños y niñas, ayudar a estos adesarrollar su protagonismo misionero, y moverles a compartir la fe y los mediosmateriales.

Con el impulso de la oración y con las aportaciones recibidas, Infancia Misio-nera podrá seguir atendiendo a muchos niños y niñas del mundo en sus necesi-dades más perentorias.

Hay que señalar que el vídeo promocional de la Campaña de esta Jornada hasido realizado en Ciudad Rodrigo por Contracorriente Producciones.

"Los niños ayudan a los niños"Jornada de la infancia Misionera

El Año 2014 recién estrenado en nuestra Iglesia local estará marcado so-bre todo por la celebración de la Asamblea Diocesana, proceso en elcual estamos todo el Curso Pastoral, desde septiembre. En el mes pasa-do de diciembre se realizaron los primeros encuentros diferenciados delos tres carismas. En los siguientes meses iremos publicando las aporta-ciones de los tres encuentros. En este número aparece la de los laicos.

Este mes de enero se trata en los arciprestazgos de “Hacer memoria del encuentro de diciembrey los ecos de los trabajos de los grupos en la asamblea de comunicaciones de la tarde”. Se haneditado desde la Vicaría de Pastoral las catequesis para el trabajo en las parroquias este mes.Se han hecho en formato y letra más grande para favorecer su lectura.

También el año que comenzamos viene unido a unaconmemoración y es la del paso del “pobrecillo deAsís”, san Francisco, por nuestra ciudad hace 800 años.Con la gala solidaria del pasado 3 de enero, organiza-da por el departamento de Evangelización y Nuevastecnologías de la Delegación diocesana de MCS, co-menzaron los actos de celebración. Informamos enpág. 3 de los distintas actividades que se proyectan.

Comienza el Año Franciscano ycontinuamos el camino hacia

la Asamblea Diocesana

La Delegación de Misiones para cele-brar la Jornada organiza la IV Mar-cha a Ivanrey. El domingo 26 de ene-ro a las 11 h. desde el Árbol Gordo.

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En el comienzo de este año nuevo pido unsolo deseo a los Reyes Magos: la defensa dela vida en toda su integridad, desde el co-mienzo hasta su final. En este sentido, tene-mos que cuidar y mucho a nuestros mayores.Por cierto que somos una de las Diócesis don-de, proporcionalmente, más centenarios viven.Tenemos que cuidar a los más pobres y des-protegidos. Tenemos que prestar muchaatención a los enfermos crónicos. Y, sobre to-do, tenemos que proteger a los niños y a losno-nacidos.

Seguro que continuará la polémica a pro-pósito de la reforma de la ley del aborto. Noentro en cuestiones técnicas o legales; tan so-lo quiero subrayar que en el tema del engen-drado y no-nacido hay tres derechos en juego:el de la madre, el del “nasciturus” (el que va anacer) y el del padre progenitor. Y, para un cre-yente, podemos hablar hasta de un cuarto de-recho: el del Dios de la vida. No se trata de cul-pabilizar o penar a la madre, pero tampoco decastigar o penalizar al no-nacido. Conscientede que las circunstancias de embarazo de mu-chas mujeres, y de su maternidad, son muycomplejas y dramáticas. Por eso, a los respon-sables sociales y, de puertas adentro, a nues-tras comunidades, hago una pregunta: “¿He-mos hecho, y hacemos, todo lo posible paraayudar a las madres con problemas para quepuedan traer a sus hijos a este mundo, que noes solo nuestro sino de Dios?...

El Papa Francisco, en este punto, ha habla-do muy claro en su exhortación “La Alegría delEvangelio” (nn. 213-214): entre los débiles, que

la Iglesia quiere cuidar con predilección, estántambién los niños por nacer, que son los másindefensos e inocentes de todos, y a quieneshoy se les quiere negar su dignidad humana.Frecuentemente, para ridiculizar alegrementela defensa que la Iglesia hace de sus vidas, seprocura presentar su postura como algo ideo-lógico, oscurantista y conservador. Sin embar-go, esta defensa supone la convicción de queun ser humano es siempre sagrado e inviola-ble, en cualquier situación y en cada etapa desu desarrollo. Es un fin en sí mismo y nunca unmedio para resolver otras dificultades. Si estaconvicción cae, no quedan fundamentos sóli-dos y permanentes para defender los dere-chos humanos, que siempre estarían someti-dos a conveniencias circunstanciales de lospoderosos de turno. Este no es un asunto su-jeto a supuestas reformas o «modernizacio-nes». No es progresista pretender resolver losproblemas eliminando una vida humana. Perotambién es verdad que hemos hecho poco pa-ra acompañar adecuadamente a las mujeresque se encuentran en situaciones muy duras,donde el aborto se les presenta como una rá-pida solución a sus profundas angustias, par-ticularmente cuando la vida que crece en ellasha surgido como producto de una violación oen un contexto de extrema pobreza.

Ojalá este año que comienza sea, firme ydecididamente, el de la defensa de la vida entodas sus modalidades y momentos. Así se lopido a la Madre de la Vida, a la Nueva Eva, aSanta María de la Paz.

En defensa de la vida

RAÚL BERZOSA

MARTÍNEZ

OBISPO DE LA DIÓCESIS

DE CIUDAD RODRIGO

Con la Fiesta del Bautismo del Señorse da fin al tiempo litúrgico de Navidad.Esta fiesta viene acompañada por doscaracterísticas bien marcadas en la lec-tura del Evangelio: Claridad y novedad.El Bautista habla de manera muy clara:«Yo os bautizo con agua», pero esto solono basta. Hay que acoger en nuestravida a otro «más fuerte», lleno de Espíri-tu de Dios: «Él os bautizará con espíritusanto y fuego».

A veces los cristianos nos quedamosen la religión del Bautista. Bautizamoscon «agua», pero obviamos el bautismodel «espíritu». Tal vez, lo primero quenecesitamos todos es dejarnos transfor-mar por el Espíritu que cambió totalmen-te a Jesús. ¿Cómo es su vida después derecibir el Espíritu de Dios?

Jesús se aleja del Bautista y comien-za a vivir desde un horizonte nuevo. Nohay que vivir preparándonos para el jui-cio inminente de Dios. Es el momento deacoger a un Dios Padre que busca hacerde la humanidad una familia más justay fraterna. Quien no vive desde estaperspectiva, no conoce qué es ser cris-tiano.

Movido por esta convicción, Jesúsdeja el desierto y marcha a Galilea a vivirde cerca los problemas y sufrimientos delas gentes. Es ahí, en medio de la vida,donde se le tiene que sentir a Dios como«algo bueno»: un Padre que atrae atodos a buscar juntos una vida máshumana. Quien no le siente así a Dios,no sabe cómo vivía Jesús.

Jesús abandona también el lenguajeamenazador del Bautista y comienza a

contar parábolas que jamás se le hubie-ran ocurrido a Juan. El mundo debesaber lo bueno que es este Dios quebusca y acoge siempre a sus hijos per-didos porque solo quiere salvar, no con-denar. Quien no habla este lenguaje deJesús, no anuncia su buena noticia.

Jesús deja la vida austera del desier-to y se dedica a hacer «gestos de bon-dad» que el Bautista nunca había hecho.Cura enfermos, defiende a los pobres,toca a los leprosos, acoge a su mesa apecadores y prostitutas, abraza a niñosde la calle. Jesús mediante su manerade actuar en persona y por medio desus seguidores quiere que la gentepueda sentir la bondad de Dios en supropia carne.

NAVIDAD

12 DE ENERO - BAUTISMO DEL SEÑORLc 3, 15-16, 21-22; Hch 10, 34-38; Is 42, 1-4.6-7

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cARTAdel Obispo

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Entre los débiles,que la Iglesiaquiere cuidar conpredilección, estántambién los niñospor nacer, que sonlos más indefensose inocentes detodos, y a quieneshoy se les quierenegar su dignidadhumana.

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1. Que los presbíteros den pasos para llevar adelanteuna vida eclesial renovada en sus modos y estructuras.

2. Formación para ser cristianos más maduros y adultos.Formación continua, y abrir ámbitos fraternos, cuidar la vidainterior.

3. Estructurar las parroquias y arciprestazgos en clavede corresponsabilidad.

4. Hacer una pastoral más enfocada a los jóvenes; salira “la frontera”.

5. Catequesis que ayude a una fe más personal y de en-cuentro con el Señor para todas las edades. Interiorizar la feque se deje llevar y guiar por el evangelio.

6. Programar una pastoral con “altos” en el camino pa-ra fortalecer la fe.

7. A la hora de programar buscar criterios evangélicosque nos unan.

8. Que la vida cristina no se reduzca a rezos y misas, quelos cristianos nos impliquemos en movimientos sociales ypolíticos.

9. Conversión pastoral donde se atienda a la formación,oración, grupos comunitarios donde se cuiden espacios dediálogo y participación, y se atienda a una fe para la vida.

10. Las celebraciones que se hagan más acordes con elevangelio y la vida. Mejorar la liturgia (Homilías).

11. Que las parroquias se abran más a la pastoral comúndel arciprestazgo. Romper los territorios parroquiales.

12. Catequesis de la comunidad que ayude a leer elevangelio y la vida y buscar qué nos pide el Señor en cadamomento.

13. Que los encuentros de oración, formación… nos em-pujen a la misión y al compromiso, siendo testigos en elmundo.

DELEGACIÓN DE MEDIOS

La gala benéfico-musicalorganizada a través deldepartamento de Evan-gelización y Nuevas Tec-nologías de la Diócesis el

pasado 3 de enero, ha conseguido recaudar un total de3.800 euros que irán destinados en su totalidad a Cáritas,Manos Unidas, Infancia Misionera, Conferencias de San Vi-cente de Paul y la Asociación Hijos del Maíz.

En concreto, a la gala, celebrada en el Teatro Nuevo Fer-nando Arrabal, acudieron un total de 300 personas, por loque la recaudación a través de la taquilla fue de 900 euros.A esa venta de entradas habría que sumar otros 400 eurosde la fila 0 y los 2.500 euros aportados por La Caixa, lo queasciende a los 3.800 euros recaudados.

Desde la organización se ha agradecido a los diferentesartistas, “la generosa y elegante participación en la gala”, ypor supuesto, a todo el público asistente.

La gala se desarrolló bajo el hilo conductor del “Canto delas Criaturas” de San Francisco de Asís, que sonó a través dela voz de la periodista Rebeca Jerez, acompañada por lamúsica del trío formado por los hermanos Gutiérrez: ManuelJosé, Paloma y Tevi.

También se pudo escuchar parte del repertorio deEn3Jazz, y a Mons. Raúl Berzosa, interpretar varias piezas delos Beatles, en su 50 aniversario.

De igual modo, otra de las sorpresas de la gala era el es-treno nacional de un cortometraje, “La Revolución de Jéfer-son”, realizado en Ciudad Rodrigo por Contracorriente Pro-ducciones y encargado por las Obras Misionales Pontificias.

AÑO FRANCISCANOAdemás de esa parte solidaria y artística, la gala suponía

el inicio de los actos con motivo del denominado Año Fran-ciscano, que se extenderá a lo largo de 2014, y que quiereconmemorar el paso del santo hace ahora 800 años por Ciu-dad Rodrigo.

La Diócesis está muy involucrada en estas celebraciones,y es la Fundación Ciudad Rodrigo la que se está encargandode coordinar los proyectos, desde un punto de vista religioso,cultural y turístico.

De manera concreta, se ha detallado que la exposiciónsobre San Francisco, organizada por la Diócesis, y cuyo co-misario será Eduardo Azofra, se ubicará en la catedral en elsegundo semestre del año.

Entre septiembre y octubre, recalará en Miróbriga, en unlugar aún por determinar, la exposición itinerante sobre la“Sábana Santa” que ya ha estado en Oviedo, Sevilla, Málagay Alcalá de Henares, y que se podrá ver, por primera vez enCastilla y León, una vez que llegue a Ciudad Rodrigo.

El Día de San Francisco, se celebrará con la participaciónde escolares en el mes de mayo, y a lo largo del primer semes-tre del año, se han pensado concursos de dibujo, redacción,charlas en los centros escolares o un concurso de cortos.

La gala benéfico-musical recauda 3.800 €

Inicio de los actos del Año Franciscano

Recogidas en el Encuentro de Laicos celebrado el 6 de diciembre

N UESTRADiócesis Propuestas de los laicos para

la Asamblea Diocesana

Un momento de la ponencia con el Salón Mazarrasa lleno.

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ÁNGEL OLIVERA MIGUEL

El Decreto Perfectae Caritatis, sobre laadecuada renovación de la Vida Religiosa,fue aprobado en el cuarto año del Concilioen la sesión pública del 28 de octubre de1965, y contempla la Vida Religiosa Consa-grada tanto masculina como femenina.

Propone, primero unos principiosgenerales de renovación: la regla supre-ma es el seguimiento de Cristo; le siguen:la fidelidad al espíritu y propósitos propiosde los fundadores, la participación en lavida de la Iglesia, el conocimiento de lasituación de los hombres y de los tiempos yde las necesidades de la Iglesia y unarenovación espiritual personal. Convienerevisar la forma de gobierno de los Institu-tos religiosos, las Constituciones, los direc-torios, los libros de costumbres, preces yceremonias. Esta renovación correspondea los Capítulos Generales, con la aproba-ción de la Santa sede o de los Ordinariosdel lugar.

Los miembros de cualquier Instituto reli-gioso han de juntar la contemplación con elamor apostólico; cultivar el espíritu de ora-ción, el conocimiento de la sagrada Escritu-ra, la celebración litúrgica. Los Institutospuramente contemplativos se dedican soloa Dios en soledad y silencio, en asidua ora-ción y generosa penitencia, y ocupan unpuesto eminente en el Cuerpo Místico deCristo que es la Iglesia. Son honor de la

Iglesia y hontanar de gra-cias celestes. Los dedica-dos a la vida apostólica,están consagrados a lasobras de apostolado: elservicio, la enseñanza, lapredicación, el ejercicio dela misericordia…

Hay que conservar fiel-mente la vida monásticaen la Iglesia, de suerte quelos monasterios seancomo semilleros de edifi-cación del pueblo cristiano.

Existe también la vida religiosa laical,tanto de varones como de mujeres, que esun estado completo de profesión de losconsejos evangélicos.

Asimismo, están los Institutos Secula-res. No son Institutos Religiosos, pero laprofesión en el mundo de los consejosevangélicos les convierte en personas con-sagradas, que viven en el mundo.

El Decreto se detiene, a continuación,en la consideración de los tres votos o con-sejos evangélicos: la castidad perfectacomo signo especial de los bienes celestes;la pobreza voluntaria por el seguimientode Cristo pobre; y la obediencia, comoplena entrega de su voluntad, a ejemplo deCristo que vino a cumplir la voluntad delPadre.

El Concilio alaba la vidacomún, a ejemplo de laIglesia primitiva, perse-verantes en la oración yen la comunión delmismo espíritu. Estimulala clausura de las mon-jas puramente contem-plativas, acomodada alas circunstancias detiempos y lugares.Señala que el hábitoreligioso sea sencillo ymodesto, pobre y

decente, como signo de consagración.Estimula la formación de los religiosos:

de ella depende, en máximo grado, la ade-cuada renovación de los Institutos. No sehagan nuevos Institutos sin pensar seria-mente en la necesidad, utilidad y posibili-dad de desarrollo; los monasterios o Insti-tutos sin esperanza fundada de ulterior flo-recimiento, únanse a otro más vigoroso delmismo fin y espíritu; agrúpense por federa-ciones, los de la misma familia religiosa.Deben favorecerse las Conferencias deSuperiores Mayores, y poner especialempeño en el fomento de las vocacionesreligiosas.

El Concilio proclama su alta estima poreste género de vida virginal, pobre y obe-diente, y les estimula a dar testimonio ydifundir la buena nueva de Cristo.

JUAN CARLOS BERNARDOS

Concluimos este ciclo de artículosdonde hemos intentado reflexionar sobre“¿Qué es la fe? ¿Tiene sentido la fe en unmundo donde la ciencia y la tecnologíahan abierto nuevos horizontes hasta hacepoco impensables? ¿Qué significa creerhoy en día?“ Porque la fe no es más queestar interiormente tocados por Dios, unacondición que nos lleva por la vía de lavida. La fe nos introduce en un estado en elque la quietud de Dios se apodera denosotros y nos convierte en peregrinosque están interiormente en camino haciael verdadero rey del mundo y su promesade justicia, verdad y amor” (Benedicto XVI,6-1-2013). Así comenzaba el primer artícu-lo que escribía y hoy lo concluyo con dosafirmaciones: CREER ES ADORAR Y CREER ESAMAR Y SERVIR.

Creer es adorar (8)Creer es reconocer a Dios como el

único absoluto. Ante Él todo lo demás queconocemos se vuelve «penúltimo» y relati-vo. Por Él todo llega a adquirir y tener unnuevo sentido. De ahí el carácter unificadory central que la fe tiene para el conjunto dela vida del creyente. Pero no son las ideasni las normas religiosas las que se convier-ten en el centro de nuestra vida, es elmismo Dios al que aquellas solo sirven

como cauce de relación o camino de acce-so. La fe en Dios consiste en reconocerlocomo eje y centro de toda mi existencia.Esta es la forma esencial de adorar a Dios:vivir ante Él sin construir ni aceptar ningúnídolo.

Descubrir a Dios como el único absolu-to me impulsa a consagrarle mi vida, comouna ofrenda personal de lo que soy y loque tengo, entregándome a Él por entero.Esto no constituye ninguna forma de alie-nación, pues mi vida centrada y apoyadaen Él la experimento más libre y, al mismotiempo, más segura. Desasido de la escla-vitud de todo lo demás, soy más dueño demí mismo. Me descubro más grandecuando me inclino en su presencia.

Este reconocimiento me anima a rela-cionarme más estrechamente con Dios enla oración. Busco la oportunidad de escu-char con atención su Palabra que iluminami vida, para ofrecer mi disponibilidad asus proyectos. Procuro encontrar la paz ensu presencia, reconocer con gratitud susdones y celebrar con gozo su bondad.Brota en mi corazón la confianza y de mislabios la alabanza de su nombre. Meapoyo en Él en mis necesidades y debilida-des, seguro de su misericordia y su per-dón. Deseo darlo a conocer, invitar a mishermanos a descubrir su grandeza, por-que sé que no quedarán defraudados.

Creer esamar y servir (9)

Quien conoce de verdad a Dios, el Diosde Jesucristo, ha conocido el amor «porqueDios es Amor» (1 Jn 4,8) nos ha dicho sanJuan en este tiempo de Navidad. Quienllega a conocer el amor de Dios respondecon amor, pero no solo a Dios, sino tam-bién a los hermanos. De tal modo que laverdad de Dios se prueba por el amor a loshermanos, «no de palabra ni de boca, sinocon obras y según la verdad» (1 Jn 3,18).

Un verdadero creyente no puede vivirsu relación con Dios de forma individual,intimista o solitaria. Hacer de Dios el centrode nuestra vida nos exige vivir abiertos alos demás. Creer es relacionarse con losotros en actitud de servicio: solidarios ensus necesidades, cercanos a sus sufri-mientos, unidos en sus gozos, disculpandolas debilidades y perdonando las ofensas.Este amor de servicio no conoce límites decercanía, afinidad o reciprocidad, porque«si amáis solo a los que os aman, ¿quémérito tenéis?» (Lc 6,32).

Una vida transformada por la fe y elamor de Dios se manifiesta al compartircon los demás todos los bienes, en espe-cial el más valioso, la clave de la propiafelicidad: la misma fe. La comunicación delos otros bienes será signo y camino parala transmisión de la propia fe. Creer es,pues, transmitir la fe.

Renovación de la vida religiosaA LA ESTELAdel Vaticano II

¿Qué es creer?A ÑO DE LA FE2012-2013

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El año del Papa Francisco:2013 y también 2014i GLESIA

en España y el mundo

JESÚS DE LAS HERAS

2013 ha sido el año del Papa Francisco. Las siembras de es-te año y sus primeros frutos auguran que 2014 será también elaño del Papa venido casi del fin del mundo.

Nuevas reuniones de la Comisión de Cardenales para la re-forma de la Curia, creación de nuevos cardenales, visita ad li-mina de obispos (entre ellos, los españoles de finales de fe-brero a primeros de marzo), importantes nombramientos epis-copales pendientes (La Habana, Santo Domingo, Madrid, Co-lonia, Barcelona, Maguncia, Chicago, Palermo, Bolonia, dentrode la Curia…), las canonizaciones de Juan XXIII y de Juan Pa-blo II, la posible beatificación de Pablo VI, la peregrinación aTierra Santa a finales de mayo y su encuentro en Jerusalén conBartolomé I, el Sínodo extraordinario de los Obispos sobre lafamilia son solo algunas de las citas seguras en su agenda.

LA SIEMBRA DE 2013No obstante, todo comenzó en

2013… Y es que si todos los añosen que hay cónclave, es decir, re-levo al frente de la Sede de Pedro,son, para la Iglesia, y también, enmayor o en menor medida, parala entera humanidad, históricos ytranscendentales, 2013 lo ha sidoespecial, extraordinaria, inequívo-ca, gozosamente.

Los periodistas abusamos, condemasiada frecuencia, a la horade calificar como históricos distin-tos acontecimientos. No exagera-mos, no exagero, ahora al considerar como histórico y comoexcepcional el año eclesial 2013 y, en particular, las fechas dellunes 11 de febrero, a media mañana, y la del miércoles 13 demarzo, pasada la media tarde, con epicentro común en Romay un mismo protagonista, el Romano Pontífice.

En recientes declaraciones, el padre Federico Lombardi, di-rector de la Sala de Prensa de la Santa Sede, ha manifestadosu convicción de que ya nada será igual en la Iglesia tras la re-nuncia, pasadas las once y media de la mañana del lunes 11de febrero de 2013, del Papa Benedicto XVI. El Papa maestro,el Papa sabio, el Papa humilde trabajador de la viña del Señor,se convertía en esa hora y en ese día en el Papa peregrino y enel Papa profeta. En los umbrales de sus 86 años de edad, elentrañable y venerable Benedicto XVI, que nos donó casi ochoespléndidos, luminosos y complejos años, entraba definitiva-mente en la historia con un gesto cargado de generosidad, sa-biduría, servicialidad, profecía y don de lo Alto. Su renuncia, talcual inédita a lo largo de la historia de la Iglesia, situaba a es-ta en una nueva dimensión, en una nueva encrucijada, en unfuturo ya presente, donde nada será ya igual que antes. Conella, el Papa Joseph Ratzinger nos ofrecía un precioso y hastatal vez preciso testimonio evangélico y evangelizador y su pe-núltima lección magistral y sublime…

Un mes y dos días después, en el atardecer de una lluvio-sa y venturosa tarde romana, la sorpresa -inmensa sorpresa-de la fumata blanca del cónclave volvía a situarse en el terrenode la Providencia. El cónclave demostraba que no es “cosa” decábalas y de conjeturas terrenales, sino acción del Espíritu San-to. Cuando pasadas las ocho de la tarde de aquel miércoles 13de marzo de 2013, el cardenal protodiácono anunciaba elnombre del nuevo Papa -Jorge Mario Bergoglio, cardenal ar-zobispo de Buenos Aires, desde aquel momento Santo Padre

Francisco- y este aparecía, tímido, quedo, humilde, por la bal-conada central de la basílica vaticana la historia de la Iglesiaquedaba, de nuevo, uncida por el rocío de la gracia y “algonuevo estaba naciendo, ¿no lo notáis?”…

DIEZ APASIONANTES MESES DE VÉRTIGODesde entonces se han sucedido diez meses de vértigo, de

sorpresas, de gestos, de símbolos, de palabras y más que pa-labras. De gracia, sí, y de bendición de Dios. Su “¡cómo megustaría una Iglesia pobre y para los pobres!”, frase pronun-ciada ante varios miles de periodistas, en la mañana del sá-bado 16 de marzo, se ha convertido en mucho más que una fra-se, un lema o un eslogan. Es todo un programa, un proyecto,una realidad encarnada ya en primera persona por el nuevoDulce Cristo -el pobre de Nazaret- en la tierra, por el Sucesor de

San Pedro. La llamada a la conver-sión personal y pastoral desde elEvangelio es su reclamo perma-nente. Jesucristo y su Evangelio sonpara Francisco la reforma la Igle-sia, el criterio primero, último y has-ta único para responder a un mun-do que vive no solo en una épocade cambios, sino, sobre todo, enun cambio de época.Importan, sí, los cambios y las re-formas en las estructuras y en laspersonas. Pero importan muchomenos que los cambios y las refor-mas en los corazones. Y la prime-ra de las reformas la viene ya pre-dicando y practicando en primera

persona el mismo Papa Francisco con su manera humilde,sencilla, cercana, cordial, popular, generosa, pobre y evangéli-ca de ejercer el ministerio apostólico petrino.

El semanario norteamericano Time, el diario francés LeMonde y el británico Financial Times han elegido al Papa Fran-cisco personaje del año, a la que he sumando el mismísimoJustin Welby, nuevo primado de la Comunión Anglicana.

PERO, ¿QUÉ ES LO HA PASADO?Sí, ¿qué es lo ha pasado? Su misma elección fue ya un acon-

tecimiento: argentino, latinoamericano, jesuita, de 76 años, yque tomaba el nombre de Francisco -por primera vez en la his-toria- eran ingredientes básicos para la sorpresa. Sus primeraspalabras, su gesto de inclinarse para recibir la bendición deDios acompañado por la plegaria en silencio del pueblo fiel ysus primeros y tan pródigos pasos, todos en la misma direcciónhacia los pobres, la austeridad, la autenticidad y las periferiasconmovieron por doquier e inauguraron una cadena ininte-rrumpida de gestos, de gestos evangélicos para más señas.

La Iglesia pobre y para los pobres con la que Francisco sue-ña se ha ido traduciendo también en estos meses en Iglesia encamino; en Iglesia sinodal; en Iglesia en discernimiento; enIglesia de puertas abiertas, madre y acogedora, no aduana; enIglesia peregrina, entre y con discípulos, de Emaús hacia Jeru-salén; en Iglesia samaritana; en Iglesia con olor a grey, a ove-ja y a humanidad; en Iglesia discípula y misionera, siempre mi-sionera, siempre discípula: en Iglesia ni autorreferencial, ni en-simismada, ni triunfalista, ni pesimista, ni controladora sino dis-pensadora de la ternura y de la misericordia del Dios que tan-to ama y cuyos apellidos son, somos, los de todos y cada uno

(continúa en pág. siguiente)

El Papa en uno de sus particulares gestos.

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DELEGACIÓN DE MISIONES

El próximo domingo 26 de enero,celebramos la Jornada de la InfanciaMisionera, y este año lo hacemos conuna ilusión especial puesto que el ví-deo que promocionará esta Campañaha sido rodado íntegramente en nues-tra Diócesis, gracias a la colaboración

del centro educativo Misioneras de laProvidencia-Santa Teresa de Jesús.Bajo el título “La revolución de Jefer-son”, los niños nos aportan su particu-lar punto de vista sobre las circunstan-cias que hacen que nuestro mundosufra las divisiones que desembocanen ricos y pobres, norte y sur, países

en paz, países enguerra. Los máspequeños nosdemuestran, gra-cias a su espon-taneidad, que lasúnicas barrerasque existen sonlas que nosotrosqueremos man-tener, pero siem-

pre podemos saltar por encima deellas. Este mensaje se hace presenteen el lema de este año: “Los niñosayudan a los niños”. Una frase quepudiera parecer tan simple, escondeacciones que a los adultos a veces noscuesta realizar. Con Jesús, amigo delos niños, la infancia se muestra comouno de los momentos de la vida máspuros y más idóneos para que los pe-queños aprendan el valor de la cari-dad bajo la fuerza de la fe. ¡Aprenda-mos de ellos!

El acto central de esta Jornada ten-drá lugar con la IV Marcha de la Infan-cia Misionera a Ivanrey; esperamospoder compartir con vosotros este her-moso día de fiesta y de convivencia.

La revolución deJeferson

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i GLESIAen Misión

El año del Papa Francisco:2013 y también 2014i GLESIA

en España y el mundo

de sus hijos; en Iglesia alegre y callejera que hace lío…; en Igle-sia libre de componendas, ataduras y categorías humanas ymundanas; en Iglesia de periferias, de barrios, de suburbios,de villas y favelas… En Iglesia, en suma, más de Jesucristo y desu Evangelio.

Y Francisco, además, lo hace no contra nadie, sino para to-dos y por todos. Francisco habla y busca la comunión. No soncriterios hermenéuticos adecuados y válidos para entender loque está pasando -ese algo nuevo que está naciendo- la com-paración, el mirar al pasado reivindicativamente o pensar queahora sí y antes no… Sí Juan XXIII fue el Papa bueno y del pue-blo, que abrió a la Iglesia a la ternura y a la primavera del Con-cilio Vaticano II; si Pablo VI fue el Papa del diálogo con una com-pleja y cambiante humanidad, que se dejó los girones del al-ma y del cuerpo en pro del Evangelio y del hombre de contem-poráneo; si a Juan Pablo I le bastaron 33 días para iluminarnose interpelarnos a todos con su sencillez, su humildad, su donde catequizar y su sonrisa; si Juan Pablo II fue el bendito atletade Dios que recorrió, cuál un San Pablo del siglo XX, todos loscaminos del mundo y del hombre, llevando amor, evangelio yesperanza; si Benedicto XVI fue el teólogo, el catequeta, elmaestro que nos confortaba y confirmaba en la verdad; Fran-cisco, aunando y valorando tanto don y carisma, nos conmue-ve y emociona y, con el ejemplo, nos marca el camino de la po-breza, de la alegría y de la misión del Evangelio.

La Prefectura de la Casa Pontificia ha hecho público un co-municado en el que señala que en el año 2013, a partir de suelección el 13 de marzo, más de 6.600.000 fieles han participa-do en los diversos encuentros con el Papa Francisco: audien-cias generales (1.548.500) y especiales (87.400), celebracioneslitúrgicas en la Basílica Vaticana y en la plaza de San Pedro(2.282.000), Ángelus y Regina Coeli (2.706.000).

Estos datos se refieren solamente a los encuentros que hantenido lugar en el Vaticano, y no incluyen otros actos con gran

participación de fieles, como el viaje apostólico a Brasil en elmes de julio con motivo de la JMJ de Río de Janeiro, y tambiénvarios viajes en Italia, a Lampedusa, Cagliari y Asís, y tambiénlas visitas en la diócesis de Roma. El total de los fieles se estimaen 6.623.900.

OTROS APUNTESHay ya que concluir no sin una mención siquiera telegráfica

de las misas diarias y matutinas de Francisco en la capilla desu casa, la Residencia Santa Marta; sus entrevistas periodísti-cas: la rueda de prensa en el vuelo de regreso a Roma de laJMJ 2013 Río y las concedidas a las revistas de la Compañía deJesús y a los diarios italianos La Repubblica y La Stampa; o suanuncio de que 2015, año de centenarios de nuestra Santa Te-resa de Jesús (¿traerá esta, el octavo centenario de la peregri-nación a Compostela de San Francisco de Asís, al Papa Fran-cisco a España en 2015?) y de San Juan Bosco, será el año dela vida consagrada.

¡Ah, se me olvidaba…! Francisco también arrasa en Twitter,con más de once millones de seguidores, más del 40% en sucuenta en español. Y San José, el esposo de María, el Custodiodel Redentor, está ya en las plegarias eucarísticas II, III y IV.

(viene de pág. anterior)

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MARIBEL YUGUEROS

Hemos vivido días entrañables. Na-vidad, momentos de encuentro, de fa-milia, de celebración… Año Nuevo,tiempo de cambio y de buenos propósi-tos… Reyes, días de ilusiones y sueños,de emociones infantiles y buenos re-cuerdos de otro tiempo…

Posiblemente, muchos de nosotrosal comienzo de un año nuevo nos he-mos propuesto hacer grandes cambiosen nuestra vida relacionados con de-fectos que nos hemos descubierto yqueremos superar, con comportamien-tos y actitudes que no nos gustan o quenos aportan poco… ¿Quién no ha sen-tido, impulsado por el calendario, el de-seo de comenzar de nuevo? Creemosque todo va a salir bien y nos conduci-rá a la felicidad; pero llegamos a finalde año y las cosas siguen igual, no he-mos conseguido introducir los cambiosdeseados y creemos que es culpanuestra, que no tenemos fuerza de vo-luntad, que no tenemos palabra,...

No somos conscientes de que el en-tusiasmo no basta para seguir adelan-te, no conocemos los mecanismos delcambio y no somos capaces de mante-ner nuestros proyectos. Iniciar una“nueva vida” significa mucho más que

mirar el calendario; implica, por unaparte, revisar nuestras actitudes y com-portamientos y, por otra, sortear losobstáculos que encontraremos en elcamino. Si no lo hacemos, no consegui-remos nada, volveremos al punto departida pero un poco más frustrados.Sin embargo, las intenciones de cambiono fracasan por incapacidad personal,sino porque nos creamos trampas quetenemos que superar.

La primera trampa es creernos queel cambio es cuestión de voluntad. Notenemos en cuenta que nuestras actitu-des, incluso las que no nos gustan y de-seamos cambiar, tienen una razón ynos sirven para algo, cuando descubra-mos la función de lo que queremoscambiar y cómo reemplazarla, el inten-to de cambio será más sencillo.

Otra trampa está en creer que elcambio se produce de hoy para maña-na, cuando se trata de un proceso conmomentos de avance y momentos deretroceso; frecuentemente, damos dospasos hacia delante y uno hacia atrás,y no podemos permitirnos que los re-trocesos paren el proceso, sino que hayque volver a empezar para que el pro-ceso avance.

Normalmente queremos hacer bo-rrón y cuenta nueva, pero si queremos

cambiar no podemos prescindir denuestro pasado sino aprender a cons-truir sobre él. Para cambiar es impres-cindible aprender de las experienciasdel pasado, teniendo en cuenta los ca-minos recorridos, podremos establecercambios aprendiendo de nuestros erro-res. Planeando nuevos cursos de ac-ción, porque es posible reinventarse.Todos los días crecemos y envejece-mos, se producen cambios tanto ennuestro cuerpo como en lo que pensa-mos o sentimos. Hay que nutrirse de loaprendido para dirigir los cambios quedeseamos introducir.

Ortega y Gasset dijo: “el hombre noes, el hombre se hace”. Por tanto, tene-mos la posibilidad de transformarnos anosotros mismos a través de lo que ha-cemos. El proceso de cambio es un ca-mino que hemos de recorrer paso a pa-so, construyendo sobre lo anterior. Loque elegimos nos va configurando co-mo personas, por eso tenemos que es-tar dispuestos a perder algo de lo quesomos en aras de lo que podemos lle-gar a ser. Si nos atrevemos a trabajarsobre lo que hemos vivido, podremosencontrar el rumbo para llegar a serquien queremos ser.

Año nuevo, vida nuevaR INCÓNde Cáritas

JOSÉ SÁNCHEZ GONZÁLEZ

En su breve mensaje, antes del rezodel Ángelus, en la fiesta de la SagradaFamilia, el domingo último del año2013, el Papa Francisco, invitó a orarpor la Asamblea del Sínodo de losObispos convocada para el mes de oc-tubre del presente año 2014, sobre lafamilia.

Por otra parte, el Mensaje del Papapara la Jornada Universal por la Pazdel pasado 1 de enero tiene como títu-lo “La fraternidad como fundamento ycamino para la Paz.” Ya en el párrafosegundo nos dice que la fraternidad,que “es una dimensión esencial delhombre, que es un ser relacional…normalmente se empieza a aprenderen la familia. La familia es la fuente detoda fraternidad, y, por eso, es tambiénel fundamento y el camino primordialpara la paz, pues, por vocación, debe-ría contagiar al mundo con el amor.”

Fraternidad y familia nos son pre-sentadas por parte del Papa Franciscocomo dos palabras programáticas pa-ra el presente Año 2014 en íntima rela-

ción y fecunda interacción. A mayor vi-da de familia, mayor y más fecundafraternidad; a mayor fraternidad, másauténtica vida de familia, abierta ycomprometida en la construcción de lafraternidad universal.

La proyección de la fraternidad, quenace, se aprende y se ejercita en pri-mer término en la familia, se acreditacomo fundamento y cambio para lapaz en la medida en que conduce avencer la pobreza, actúa eficazmenteen la economía, hace desaparecer laguerra, que se sustituye por el diálogo,el perdón, la reconciliación, en la justi-cia, la confianza y la esperanza. Con lafraternidad desaparecen también lacorrupción y el crimen organizado, laexplotación laboral, la prostitución, latrata, la esclavitud… La fraternidadayuda a proteger y a cultivar la natura-leza y a reconocer y practicar el destinouniversal de los bienes.

Es indudable que para la vida enfraternidad y para esta ingente tareade la misma, que necesita ser descu-bierta, amada, experimentada, anun-ciada y testimoniada, “solo el amor da-

do por Diosnos permiteacoger, y vi-vir plena-mente la fra-ternidad.”No podemos dejar de tener en cuentasiempre la dimensión trascendente delser humano. Sin ella la política y la eco-nomía corren el peligro de quedar re-ducidas a “un tecnicismo privado deideales” y “toda actividad humana sevuelve más pobre.”

Como norma y estilo del comporta-miento en la familia, me quedo con lastres palabras pronunciadas por el Pa-pa en italiano, que invitó a repetir a to-dos los convocados en la Plaza de SanPedro; a saber: “Permesso, grazie, scu-si”, que en español decimos: “Por favor,gracias, perdón”.

La convocatoria por parte de nues-tro Obispo de la Asamblea diocesanapara el presente curso y su celebracióncontribuirán, sin duda, a descubrir laimportancia de la fraternidad y a ejerci-tarnos en ella, empezando por el ámbi-to de nuestra familia.

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Año 2014 de fraternidad yde familiaD ESDE

mi retiro

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VIDAL RODRÍGUEZ ENCINAS

“Derrama sobre nuestros hermanosla abundancia de los donesdel Espíritu Santo cuando sean ungidos con este crisma,y que los lugares y objetos consagradospor este óleo sean para tu pueblomotivo de santificación”. (Oración de la consagración del Crisma).

Con el santo crisma no solo son un-gidas las personas, sino también luga-res y objetos como las iglesias y altares.El mes pasado nos hemos fijado en elsignificado del nombre del Crisma y enla unción de los bautizados con él; estemes trataremos de la unción con el cris-ma en la Confirmación, en el Orden Sa-cerdotal y la unción de iglesias y altares.

1.- El gesto central de la Confirma-ción es la unción con el crisma y se rea-liza de la siguiente manera: el Obispoimpone su mano derecha sobre la ca-beza del confirmando y con el dedo pul-gar, impregnado de crisma, le unge lafrente al tiempo que dice: “recibe por es-ta señal el don del Espíritu Santo”. La im-posición de la mano sobre la cabeza delque se confirma recuerda el mismo ges-to con el que los apóstoles trasmitían elEspíritu Santo. El sentido simbólico de la

unción apunta a la consagración e in-corporación a Cristo y a su Iglesia: “eldon del Espíritu Santo, que ahora vais arecibir, os marcará con un sello espiri-tual y os hará miembrosmás perfectos de la Igle-sia, configurándoos másplenamente con Cristo,que fue ungido tambiénen su bautismo”. La un-ción hecha en la frenteapunta a su visibilidad:“recibe por esta señal eldon del Espíritu Santo”.Los confirmados sonmarcados con una se-ñal, signo de su perte-nencia a Cristo y del tes-timonio que están llamados a dar: “vaisa recibir ahora toda la fuerza del Espíri-tu Santo…, desde ahora tendréis la mi-sión de ser ante el mundo testigos…con el buen olor de Cristo” (Ritual de laConfirmación nº 26).

2.- En la celebración del sacramentodel Orden el Obispo unge las manos delsacerdote con el crisma mientras dice:“Jesucristo, a quien el Padre ungió con lafuerza del Espíritu Santo, te auxilie parasantificar al pueblo cristiano y para ofre-cer a Dios el sacrificio”. El simbolismo deesta unción indica que, en adelante,

esas manos han de ser prolongación delas manos de Cristo: manos para aco-ger, levantar, curar, bendecir, perdo-nar… y ofrecer el sacrificio eucarístico.

En la ordenación episco-pal el obispo es ungidocon el crisma en la cabezapara indicar su más plenaparticipación en el sacer-docio de Cristo como Ca-beza y Pastor y guía de lacomunidad: “Dios que teha hecho partícipe del su-mo sacerdocio de Cristo,derrame sobre ti el bálsa-mo de la Unción y con subendición haga fecundotu ministerio”.

3.- Cuando se construye una nuevaiglesia es ungida con el crisma haciendocuatro cruces en las paredes, indicandolos cuatro puntos cardinales, indicandocon ello que esa iglesia “está dedicadatoda entera y para siempre al culto cris-tiano”. En la iglesia el altar ocupa un si-tio central y hacia él se dirige la miradade la comunidad. El nuevo altar es ungi-do con el crisma que así “se convierte ensímbolo de Cristo, que es llamado el Un-gido, puesto que el Padre lo ungió con elEspíritu Santo para que en el altar de sucuerpo ofreciera el sacrificio de su vida”.

http://wwwdiocesisciudadrodrigo.org• Díez Taravilla nº 15 • Tel. 923 46 08 43 • Fax. 923 48 04 01Diseño e impresión: Lletra s.l. - Tel. 923 48 12 68 - www.lletra.esDepósito legal: S. 1363-2001

El Santo Crisma (II)INCÓNLitúrgico

PARA ORAR

Amigo Jesús: aunque soy pequeño,Tú confías en mí para cambiar el mundo,

convirtiendo en gestos misioneroslas cosas sencillas de cada día.

Tú me invitas a compartiry a pensar en los demás;

a rezar con confianzay a hablar de Ti a mis amigos;

a ser un niño que ayuda a otros niños,alegre, agradecido y generoso.

Tu Madre, la Virgen María,nos enseñó a hacer lo que Tú nos digas.Por eso, yo quiero escucharte y seguirte,

y ayudar a que te conozcan mis hermanos,los niños de los cinco continentes.Te pido que me ayudes a lograrlo

por medio de Santa Teresa del Niño Jesús,Patrona de las Misiones.

PARA

ORA

R

R

Los materiales para laSemana de Oración porla Unidad de los Cristia-nos 2014 han sido pre-parados inicialmentepor un grupo ecuménicode Canadá, proceden-tes de varias partes delpaís y pertenecientes adistintas Iglesias ycomunidades eclesiales,a saber, la Iglesia Unidade Canadá, la bautista,la presbiteriana, la orto-doxa y la católica.El texto bíblico elegidoestá tomado de la pri-mera carta de San Pablo

a los Corintios: 1 Co 1, 1-17. En este texto, el apóstol habla dela comunidad cristiana que se reúne en esa ciudad comoauténtica ‘Iglesia de Dios’, plena expresión del único pueblode Dios y no una porción local de él, pero que está unida a“todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de Jesu-cristo, Señor suyo y nuestro” (1 Co 1, 2).