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» Visión y experiencia delCapítulo General

Agradezco la invitación que se me ha hecho para escribir algunas líneas que nos sirvan de reflexión, como un aporte a la preparación de nuestro ix Capítulo General.

Siempre he pensado que un Capítulo General nos invita a vislumbrar tiem-pos nuevos y en éstos, nuevas espe-ranzas. Lo anterior llegará en la me-dida en que, durante la preparación del mismo y en su realización, los miembros de la comunidad estemos abiertos a las mociones del Espíritu y logremos, por medio de nuestra vi-vencia con el Señor, discernir cuáles son los nuevos caminos que Él nos invita a vivir.

Al hablar de tiempos nuevos, me re-fiero a ser capaces de encontrar ca-minos de esperanza, pero no de es-peranza limitada o reducida, sino ante todo de hallar la esperanza nueva en Jesucristo, quien nos ha llamado a esta vocación misionera. Permítanme compartir con ustedes un texto del documento Aparecida, que, desde mi punto vista, debe de iluminar esta nueva esperanza:

El discípulo, fundamentado así en la roca

de la Palabra de Dios, se siente impulsa-

do a llevar la Buena Nueva de la salvación

a sus hermanos. Discipulado y misión son

como las dos caras de una misma meda-

lla: cuando el discípulo está enamorado

de Cristo, no puede dejar de anunciar al

mundo que sólo Él nos salva (cfr. Hch 4,

12). En efecto, el discípulo sabe que sin

Cristo no hay luz, no hay “esperanza”, no

hay amor, no hay futuro.

Esta es la tarea esencial de la evan-gelización, que incluye la opción pre-ferencial por los pobres, la promoción humana integral y la auténtica libera-ción cristiana. (AP 146).

Estoy seguro que llevando a nuestra vida estos principios podremos tener tiempos nuevos y una nueva espe-ranza en Jesús.

Nuestro proyecto misionero se encuen-tra llamado por esta esperanza que te-nemos que vivir en un proceso personal y comunitario de verdadera evaluación sobre los últimos seis años, en los que cada uno de nosotros hemos sido pro-tagonistas de nuestro vivir misionero, y ante esto debemos de preguntarnos: ¿cómo me he comprometido con este proyecto?, ¿cómo vivo mi discipulado para poder ser misionero?

Cada Capítulo General debe de condu-cirnos a encontrar fronteras de espe-ranza, que actualmente nos interpelan en el Instituto, y ante las cuales el Ca-pítulo General tendrá que orientarnos. Pienso en las siguientes fronteras que esperan nuestra labor evangelizadora de discípulos misioneros: la curación de nuestras propias heridas; la evan-gelización de un mundo cada vez más secularizado; las oportunidades para el diálogo interreligioso; y la asistencia evangélica a los desplazados, de quie-nes sufren la pobreza, que cada vez

3

Boletín Informativo MG

Insurgentes Sur 4120Col. La Joya, Del. Tlalpan,

cp 14090, México, df

Tel. (01 55) 5573 2500

[email protected]

ProducciónDepartamento de Comunicación

DirecciónP. Antonio Camacho M., mg

Coordinación y Diseño EditorialLourdes Reyes Esquivel

Revisión y corrección de textosComisión Editorial

Colaboración:Angélica García S.Antonia Hidalgo L.

Consejo General

P. Juan José A. Luna E., mg

Superior GeneralP. Raúl Ibarra H., mg

Vicario GeneralP. Alejandro Gollaz M., mg

Segundo ConsejeroP. Gerardo López V., mg

Tercer ConsejeroP. Juan José Márquez E., mg

Cuarto Consejero

Publicación mensual de los Misioneros de Guadalupe

Año 11. Núm. 120. Octubre de 2008

EditorialOctubre 2008, año 11, número 120

excluye a más personas de las oportu-nidades mínimas de vida.

Los Misioneros de Guadalupe, del mismo modo que muchas comunida-des, estamos enfrentando una dis-minución en nuestros miembros, y el Capítulo General, en nombre de cada uno de nosotros, debe de cuestionar-se sobre esta situación. Es una reali-dad que no podemos negar, por eso, debemos de reflexionar para encon-trar caminos de esperanza.

Pienso que estas fronteras de espe-ranza, que se deben de tocar en el Capítulo General, nos conducirán a ser flexibles. También nos pueden pedir un cambio en nuestro contexto misionero que implicaría, por ejem-plo, cambiar y abrir fronteras y estar presentes en areópagos en los que no estamos acostumbrados a estar.

Estoy convencido que el Capítulo General nos convoca a anunciar con valor y testimonio de vida al Señor Je-sús como único Salvador, y Reconci-liador del mundo.

Él es el Hijo de Dios verdadero, el único

Salvador de la humanidad. La importancia

única e insustituible de Cristo para nosotros,

para la humanidad, consiste en que Cristo

es el Camino, la Verdad y la Vida. Si no

conocemos a Dios en Cristo y con Cristo,

toda la realidad se convierte en un enigma

indescifrable; no hay camino y, al no haber

camino, no hay vida ni verdad (Ap. 22).

Monseñor Roberto DomínguezCouttolenc, mg

4

Contenido

Octubre 2008, año 11, número 120

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02

05

06

14

16

17

21

Editorial

Efemérides

Artículo del mes

Desde México

Desde el Seminario

Desde las Misiones

Club de niños

» Visión y experiencia del Capítulo General

» Octubre» Noviembre

» Bibliografía sobre San Pablo

» Resonancia de los mg en el CAM 3 comla 8» Lo que vimos en el CAM 3 comla 8

» Seminario Menor 2008-2009

» Cuba (Segunda parte):Un país en pie de guerraFidel omnipresenteFidel y el Papa

» Japón: Noticias

» Participación de los niños en la iglesia universal» Cooperación de los niños en el Proyecto Cahama» Noti - Club

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«

Monseñor Roberto Domínguez Couttolenc, mg

Padre Sergio César Espinosa, mg

Padres Alejandro Gollaz Mares, José Carlos Romero Rocha y Jaime Romero Ramírez, mg

Padre Juan Antonio Muñoz, mg

Padre José Sandoval, mg

Padre José Auscencio López López, mg

5

octubre noviembre

A C T I V I D A D E S

A C T I V I D A D E S

01 01

03 02

07

09

19

11

24

20

30

23

29

xxxiii Aniversario de la Fundación de la Misión de Hong Kong.

Todos los Santos.

xviii Aniversario del Fallecimiento del Padre Andrés Toussaint Machain, mg.

Todos los Fieles Difuntos.

lix Aniversario de la Fundación del Seminario de Misiones.

La Dedicación de la Basílica de Letrán.

Domingo Mundial de las Misiones.

xxi Aniversario de la Fundación de la Misión de Guatemala.

xviii Aniversario del Fallecimiento del Padre Gustavo Rosillo Cornejo.

xcviii Aniversario de la Revolución Mexicana.

xv Aniversario de la Apertura de las Oficinas en Villahermosa, Tabasco.

Nuestro Señor Jesucristo Rey del Universo.

v Aniversario del Fallecimiento del Pa-dre Esteban Martínez de la Serna, mg.

04

02

05 05

09

16

23

30

07

Peregrinación mg a la Basílica de N.S. de Guadalupe.

Día del Padrino en Monterrey.

Día del Padrino en México.Retiro de los Padres mg en México.

Misas de los Padrinos difuntos.

Promoción en Morelia.

Día del Padrino en Guadalajara.

Concierto en el Seminario Menor en beneficio del Proyecto Cahama.

lix Aniversario de la Fundación del Instituto.Promesas de miembros temporales en el Seminario Mayor.

08

20

20-24

21

29-02 nov.

Retiro mensual de los Padres mg en México.

Reunión Cuatrimestral de Desarrollo.

Asamblea Nacional de Responsa-bles de Medios de Comunicación.

Reunión de la Dirección de Promo-ción en México.

Paseo Oficinas de la Ciudad de Méxi-co y Guadalajara a Manzanillo, Col.

E F E M É R I D E S E F E M É R I D E S

6

En este segundo texto de bibliografía sobre san Pablo, se anotan los libros (en español) que son comentarios a las cartas o que abordan temas teo-lógicos en la obra paulina. Se marcan con letras negritas las obras más re-comendadas.

Los expertos reconocen como autén-ticas cartas de san Pablo las siguien-tes siete: 1 Tesalonicenses, 1 Corin-tios, 2 Corintios, Filipenses, Filemón, Gálatas y Romanos. Es imposible fijar con exactitud la fecha de redac-ción de cada carta. La dirigida a los Filipenses probablemente esté com-puesta por dos cartas al menos, y la que corresponde a 2 Corintios quizás por dos o tres o hasta más escritos previos. Todas fueron redactadas en un periodo más o menos breve del apostolado paulino (según algunos, entre el año 50 y el 57, o quizás unos años más).

Otras cartas están cercanas a la teo-logía paulina, pero se piensa que ya no fueron escritas por él: Colosen-ses, Efesios y 2 Tesalonicenses, así como las llamadas pastorales: Tito, 1 y 2 Timoteo y por supuesto la carta a los Hebreos, que ya ni en la liturgia católica se le atribuye a Pablo. Este segundo grupo consta de otras siete cartas.

Parece ser que el orden en que apa-recen en el Nuevo Testamento obe-dece más bien a la extensión de las cartas que a su antigüedad o impor-

tancia, con la salvedad de que se po-nen juntas las dirigidas a una misma comunidad. Así nos encontramos con el siguiente orden: Romanos, 1 y 2 Corintios, Gálatas, Efesios, Filipen-ses, Colosenses, 1 y 2 Tesalonicen-ses, 1 y 2 Timoteo, Tito, Filemón y por último Hebreos.

Anoto la bibliografía siguiendo el or-den de las cartas en el Nuevo Tes-tamento, aunque sé que un estudio más minucioso preferiría ir de las car-tas reconocidas como más antiguas a las más recientes, para conocer el desarrollo del pensamiento paulino en torno a algunos temas.

Una manera sencilla y a la vez muy útil de comenzar a ver el plan y el de-sarrollo temático de cada carta es leer la introducción a la misma en algún buen comentario: Comentario a la Bi-blia. Vol. III. ppc, Madrid, 1996; Co-mentario Bíblico Internacional. evd, Estella, 1999; Comentario bíblico la-tinoamericano. evd, Estella, 2004; In-troducción al estudio de la Biblia. evd, Estella, 1990-2003; Nuevo comenta-rio bíblico san Jerónimo. evd, Estella, 2004; y otros estudios similares. Ade-más, se pueden leer fácilmente los li-bros de la colección Cuadernos Bíbli-cos (CB) que ha publicado la Editorial Verbo Divino (evd), donde aparecen cada una de las cartas paulinas, ade-más de los ya indicados, en el boletín de agosto, sobre la persona y obra de san Pablo.

» Bibliografía sobre San Pablo

7

artículo del mes

Barth, K., Carta a los romanos. bac, Madrid, 1998.

Esler, P. F., Conflicto e identidad en la carta a lo romanos. El contexto social de la carta de Pablo. evd, Estella, 2006.

Kertelge, K., Carta a los romanos. Herder, Barcelona,1973.

Kuss, O., Carta a los romanos. Cartas a los corintios. Carta a los gálatas. Herder, Barcelona, 1976.

Lyonnet, S., Historia de la salvación en la carta a los romanos. Sígueme, Sa- lamanca, 1967.

Perrot, Ch., La carta a los romanos. evd, Estella, 1989. (Cuadernos Biblícos, 65.)

Ramírez Fueyo, F., Justicia, paz y alegría en el Espíritu Santo: el reino de Dios en las cartas de san Pablo. Universidad Pontificia Comillas, Madrid, 2003.

Sánchez Bosch, J., Libertad y gracia en la carta a los romanos. Facultad de Teo- logía de Cataluña, Barcelona, 1973.

Sánchez Bosch, J., Escritos paulinos. evd, Estella, 1998. (Con estudio y co- mentario a cada carta.)

Schelkle, K., Anunciar el Evangelio de Dios. Comentario a la carta a los roma- nos. Sígueme, Salamanca, 1966.

Stanley, C., Vida a través de la muerte. Un estudio sobre la carta a los roma- nos. Alturas, Barcelona, 1974.

Trenchard, E., Exposición de la epístola a los romanos. Literatura Bíblica, Ma- drid, 1969.

Vidal, S., Las cartas originales de Pablo. Trotta, Madrid, 1996.

Wilckens,U., La carta a los romanos. Sígueme, Salamanca, 1989-1992. 2 vols.

• Carta a los romanos

• Cartas a los corintiosCarrez, M., La primera carta a los corintios. evd, Estella, 1989. (Cuadernos Bíblicos, 66.)

8

• Carta a los gálatas

Carrez, M., La segunda carta a los corintios. evd, Estella, 1985.

Díaz Rodelas, J. M., 1 Corintios. evd, Estella, 2003.

Díaz Rodelas, J. M., 2 Corintios. evd, Estella, 2004.

Fee, G., Primera epístola a los corintios. Eerdmans/Nueva Creación, Buenos Aires, 1994.

Foulkes, I., Problemas pastorales en Corinto. Comentario exegético pastoral a 1 Corintios. DEI, Costa Rica, 1999.

Inostroza, J. C., Moisés e Israel en el desierto. El Midrás Paulino de 1 Cor 10, 1-13. Universidad Pontificia de Salamanca, Salamanca 2000.

Kuss, O., Carta a los romanos. Cartas a los corintios. Carta a los gálatas. Herder, Barcelona, 1976.

Quesnel, M., Las cartas a los corintios. evd, Estella, 1985. (Cuadernos bíblicos, 22.)

Schelkle, K., Segunda carta a los corintios. Herder, Barcelona, 1969.

Trenchard, E., Primera carta a los corintios. Herder, Barcelona, 1971.

Walter, E., Primera carta a los corintios. Herder, Barcelona, 1972.

Bartolomé, J. J., El evangelio y su verdad. La justificación por la fe y su viven- cia en común. Un estudio exegético de Gál 2, 5-14. LAS, Roma, 1988.

Bruce, F. F., Comentario a los gálatas. clie, Terrassa, 2004.

Cothenet, E., La carta a los gálatas. evd, Estella, 1989. (Cuadernos Bíblicos, 34.)

González Ruiz, J. M., Epístola de san Pablo a los gálatas. Fax, Madrid, 1971.

Kuss, O., Carta a los romanos. Cartas a los corintios. Carta a los gálatas. Herder, Barcelona, 1976.

Pastor, F., La libertad en la carta a los gálatas. evd, Estella, 1977.

Schlier, H., La carta a los gálatas. Sígueme, Salamanca, 1975.

Schneider, G., Carta a los gálatas. Herder, Barcelona, 1965.

9

artículo del mes

• Carta a los efesios

Tamez, E., Contra toda condena. Gálatas. DEI, Costa Rica, 1991.

Tenney, M., Gálatas, la carta de la liberación cristiana. clie, Barcelona, 1973.

Blight, J., Carta a los efesios. Paulinas, Madrid, 1970.

Conzelmann, H. y G. Friedrich, Efesios. Filipenses. Colosenses. Filemón. Fax, Madrid, 1972.

Cothenet, E., Las cartas a los colosenses y a los efesios. evd, Estella, 1994. (Cuadernos Bíblicos, 82.)

González Campa, J. M., Comentario exegético y hermenéutico al libro de Efesios. clie, Terrassa, 2001.

González Ruiz, J. M., San Pablo. Cartas de la cautividad. Marova, Madrid, 1956.

Huby, J., San Pablo. Cartas de la cautividad. San Pablo, Madrid, 1967.

León, J. L., Teología de la unidad. La Aurora, Buenos Aires, 1971.

Moule, C. F. D., Estudios sobre efesios. clie, Terrassa, 1984.

Pérez Rodríguez, G., San Pablo. Cartas de la cautividad y pastorales. ppc, Madrid, 1974.

Schlier, H., La carta a los efesios. Sígueme, Salamanca, 1991.

Staab, K. y N. Brox, Tesalonicenses, Cartas de la cautividad y pastorales. Paulinas, Madrid, 1967.

Trevijano, R., En lucha contra las potestades: Exégesis primitiva de Ef 6, 11-17 hasta orígenes. Eset, Vitoria, 1968.

Zerwick, M., Efesios. Herder, Barcelona, 1967.

• Carta a los filipensesBlight, J., Carta a los filipenses. Paulinas, Madrid, 1970.

Carballosa, E., Filipenses. Un comentario exegético y práctico. Portavoz Evan- gélico, Barcelona, 1973.

10

• Carta a los colosenses

Conzelmann, H. y G. Friedrich, Efesios. Filipenses. Colosenses. Filemón. Fax, Madrid, 1972.

Cuenca, J. A., Cristología actual y Filipenses 2, 6-11. clie, Terrassa, 1984.

Gnilka, J., Filipenses. Herder, Barcelona, 1971.

González Ruiz, J. M., San Pablo. Cartas de la cautividad. Marova, Madrid, 1956.

Huby, J., San Pablo. Cartas de la cautividad. San Pablo, Madrid, 1967.

Légasse, S., Filipenses. Filemón. evd, Estella, 1988. (Cuadernos Bíblicos, 33.)

Marín, F., Evangelio de la esperanza, evangelio de la unidad. Cartas de san Pablo a los tesalonicenses y a los filipenses. Universidad Pontificia Co- millas, Madrid, 1979.

Pérez Rodríguez, G., San Pablo. Cartas de la cautividad y pastorales. ppc, Madrid, 1974.

11 Staab, K. y N. Brox, Tesalonicenses, Cartas de la cautividad y pastorales. Paulinas, Madrid, 1967.

Conzelmann, H. y G. Friedrich, Efesios. Filipenses. Colosenses. Filemón. Fax, Madrid, 1972.

Cothenet, E., Las cartas a los colosenses y a los efesios. evd, Estella, 1994. (Cuadernos Bíblicos, 82.)

González Ruiz, J. M., San Pablo. Cartas de la cautividad. Marova, Madrid, 1956.

Moule, C. F. D., Estudios sobre Colosenses. clie, Terrassa, 1984.

Mussner, F. y A. Stoeger, Colosenses. Filemón. Herder, Barcelona, 1970.

Schweizer, E., La carta a los colosenses. Sígueme, Salamanca, 1987.

Staab, K. y N. Brox, Tesalonicenses, Cartas de la cautividad y pastorales. Paulinas, Madrid, 1967.

• Carta a los tesalonicensesBortolini, J., Cómo leer la primera carta a los tesalonicenses. San Pablo, Bo- gotá, 1993.

11

artículo del mes

• Cartas a Timoteo y Tito

Bortolini, J., Cómo leer la segunda carta a los tesalonicenses. San Pablo, Bogotá, 1995.

Dewailly, L. M., La joven Iglesia de Tesalónica. Studium, Madrid, 1971.

Egenolf, H. A., 2 Tesalonicenses. Herder, Barcelona, 1970.

Gil Arbiol, C. J., 1 y 2 Tesalonicenses. evd, Estella, 2004.

Kapkin, D., 1 y 2 Tesalonicenses. Ya viene el Señor. Fátima, Medellín, 1995.

Marín, F., Evangelio de la esperanza, evangelio de la unidad. Cartas de san Pablo a los tesalonicenses y a los filipenses. Universidad Pontificia Co- millas, Madrid, 1979.

Ortiz, F., 1 y 2 Tesalonicenses. clie, Terrassa, 1997.

Schlier, H., El apóstol y su comunidad. 1 Tesalonicenses. Fax, Madrid, 1974.

Schürmann, H., 1 Tesalonicenses. Herder, Barcelona, 1967.

Staab, K. y N. Brox, Tesalonicenses, cartas de la cautividad y pastorales. Paulinas, Madrid, 1967.

Trimaille, M., 1 Tesalonicenses. evd, Estella, 1998. (Cuadernos Bíblicos, 39.)

Ubieta, J. A., La Iglesia de Tesalónica. Desclée de Brouwer, Bilbao, 1988.

Vidal, S., El primer escrito cristiano. Texto bilingüe de 1 Tesalonicenses con introducción y comentario. Sígueme, Salamanca, 2006.

Cothenet, E., Las cartas pastorales. evd, Estella, 1991. (Cuadernos Bíblicos, 72.)

Jeremias, J., Epístolas a Timoteo y Tito. Fax, Madrid, 1970.

Pérez Rodríguez, G., San Pablo. Cartas de la cautividad y pastorales. ppc, Madrid, 1974.

Reuss, J., 1 Timoteo. Herder, Barcelona, 1970.

Reuss, J., 2 Timoteo. Herder, Barcelona, 1970.

Reuss, J., Carta a Tito. Herder, Barcelona, 1968.

12

• Carta a Filemón

• Carta a los hebreos

Staab, K. y N. Brox, Tesalonicenses, cartas de la cautividad y pastorales. Paulinas, Madrid, 1967.

Almirudis, H., Filemón. clie, Terrassa, 1998.

Conzelmann, H. y G. Friedrich, Efesios. Filipenses. Colosenses. Filemón. Fax, Madrid, 1972.

Huby, J., San Pablo. Cartas de la cautividad. San Pablo, Madrid, 1967.

Légasse, S., Filipenses. Filemón. evd, Estella, 1988. (Cuadernos Bíblicos, 33.)

Mussner, F. y A. Stoeger, Colosenses. Filemón. Herder, Barcelona, 1970.

Bruce, F. F., La epístola a los hebreos. Nueva creación, Buenos Aires, 1987.

Dussaut, L., Carta a los hebreos. Cristiandad, Madrid, 1985.

Mora Bartres, G., La carta a los hebreos como escrito pastoral. Herder, Bar- celona, 1975.

Schierse, F. J., Carta a los hebreos. Herder, Barcelona, 1970.

Strathmann, H., La epístola a los hebreos. Fax, Madrid, 1971.

Trenchard, E., Exposición de la epístola a los hebreos. Editorial Literatura bí- blica, Madrid, 1974.

Vanhoye, A., El mensaje de la carta a los hebreos. evd, Estella, 1990.

Vanhoye, A., Sacerdotes antiguos, sacerdote nuevo según el Nuevo Testa- mento. Sígueme, Salamanca, 1992.

El Cardenal Martini tiene algunos libros de meditaciones sobre textos pauli-nos, en la línea de Ejercicios espirituales y de Lectio Divina. Conozco al menos estos dos:

Martini, C. M., El camino de Timoteo. ppc, Madrid, 1997.

Martini, C. M., Las confesiones de San Pablo, Ediciones Paulinas, Bogotá, 1986.

13

artículo del mes

Padre Sergio César Espinosa, mg

Si la cantidad de textos en español nos parece abundante, es de saber que son poca cosa comparados con la gran producción literaria, de todo tipo y calidad, que encontramos en otras lenguas, sobre todo en inglés (que muchos podemos leer) y alemán (que pocos leen y otros ignoramos).

Existen también numerosas obras, sobre todo de ediciones recientes, que estudian el paso de la persona de Jesús al cristianismo, en la medida en que se fue fijando en textos. Sería mo-tivo de otro ensayo ponerse a buscar toda la bibliografía al respecto, pero baste citar las obras de autores como Horsley y Silberman, Meeks, Crossan, Theissen, White, Stegemann y mu-chos más, que ya han sido traducidas a nuestra lengua.

Les paso el consejo que solía decirnos uno de nuestros profesores en tiem-pos idos: “No lean libros buenos, son demasiados, lean sólo los mejores”

Una vez más espero que esta biblio-grafía sea de utilidad para nuestra ce-lebración del Año Paulino, particular-mente en lo que se refiere a estudio, reflexión y aplicación pastoral de la obra del Apóstol de los gentiles.

¡Feliz Año Paulino!

14

Durante el Tercer Congreso America-no Misionero (CAM 3 comla 8), en re-petidas ocasiones se oyó la frase que marcó el encuentro: “América con Cris-to, escucha, aprende y anuncia”. Frase iluminadora para lanzarnos a la Misión Continental en América. Y a nosotros, como Misioneros de Guadalupe, reno-varnos en el discipulado, para ser par-tícipes de un nuevo Pentecostés y per-manecer en la alegría de evangelizar.

En este congreso, escuchamos que somos una comunidad discípula de Jesús, aprendimos que somos una colectividad que es empujada por el Espíritu, y que fuímos invitados a anunciar, como sociedad misionera para la humanidad, el Evangelio.

El CAM 3 comla 8 es la expresión de una Iglesia misionera que mantiene en movimiento a todos sus miembros: días de encuentro con los hermanos de todos los países de América y de quie-nes han venido de otros continentes. Se contó con la presencia de pasto-res de las Iglesias particulares, sacer-dotes, personas de vida consagrada, laicos comprometidos con la misión, entusiastas jóvenes, quienes pusieron la nota de buena voz, para retomar la misión encomendada a la Iglesia con ímpetu y proyectos de vida.

Por otro lado, cabe mencionar la mag-nífica organización y entrega de los

» Resonancia de los mg en el CAM 3 comla 8.

Quito, Ecuador

» Lo que vimosen el CAM3 comla 8

anfitriones ecuatorianos, desde los voluntarios, hasta los coordinadores, laicos y consagrados, las parroquias y sus familias, que nos dieron cobijo en sus hogares y nos hicieron sentir parte de ellos.

El objetivo del primer día fue: pro-piciar, en las Iglesias de América, el acontecimiento inminente de Pen-tecostés, para que, desde la expe-riencia del discipulado, se ponga en estado de misión e impulse la nueva evangelización y la misión ad gentes.

Las principales ideas compartidas por el Cardenal Óscar Rodríguez Maradiaga, Arzobispo de Tegucigal-pa, en su conferencia “Discipulado: comunidad discípula de Jesús”, fue-ron que el discípulo debe estar en

15

desde méxicoconversión continua; tener y abrazar el encuentro personal con Cristo; ser contraste, profecía, choque; dar la vida por Jesús y su Reino, desde la respuesta pronta y generosa en la caridad apostólica.

Fuimos exhortados por el cardenal a mirar la figura de Pablo de Tarso como modelo de discipulado e imitar sus virtudes, enseñanzas y medios para llegar a decir: “Ya no soy quien vive en mí”. También, para que sea un aliciente un aliciente que nos grite: ay de mí si no evangelizo, ay de ustedes si no son misioneros.

El segundo día estuvimos llenos de gozo y percibimos el dinamismo del Espíritu. Se habló sobre Pentecos-tés: comunidad llevada por el Espí-ritu Santo, que nos empuja a seguir y aprender del Maestro. El turno fue para el Arzobispo de Tunja–Colombia, Luis Augusto Castro, quien nos ayudó a descubrir cómo el Espíritu actúa en la Iglesia y en cada uno de nosotros, para empujarnos hacia todas las di-recciones de la misión, por caminos que quizá nos puedan parecer incom-prensibles. Nos invitó a ser auténticos misioneros de la bondad de Dios ma-nifestada en Cristo.

El tercer día, bajo la consigna de anunciar, tocó el turno al Obispo de Xingu (Brasil), que compartió la po-nencia sobre evangelización: “Comu-nidad misionera para la humanidad”.Ésta nos motivó a considerar las si-tuaciones que debemos considerar en la realización de la misión enco-mendada y describir sus dimensio-

Padres Alejandro Gollaz Mares,José Carlos Romero Rocha y Jaime Romero Ramírez, mg

nes, evitando los reduccionismos u ópticas miopes de la misma. Nos lan-za a comprometernos con el necesi-tado y mostrar la gratuidad de Dios en nuestra acción, pues recordemos que la Iglesia es la casa de los pobres.

En los tres días, se realizaron 16 fo-ros con temas distintos alusivos a los destinatarios y a los agentes de la misión; en los cuales se dio el espa-cio de compartir nuestra experiencia y hacer propuestas para fortalecer la acción misionera de la Iglesia en el mundo.

El Tercer Congreso Americano Misio-nero cerró con una magna clausura en la que se enviaron a los misione-ros a los diferentes continentes, y se dio inicio a la Misión Continental, una misión permanente en el continente.

Estimados hermanos Misioneros de Guadalupe, deseamos fervorosa-mente que este acontecimiento en nuestra Iglesia de América traiga a jóvenes interesados a nuestro Institu-to, y a nuestra labor evangelizadora, abundantes frutos en nuestro ardor misionero.

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» Seminario Menor2008-2009

• Agosto

Padre Juan Antonio Muñoz, mg

Con el fervor de Dios, inició el año formativo 2008-2009 el mes de agos-to, con los ejercicios espirituales, en los que participan 22 alumnos de pre-paratoria (un joven de Guerrero, uno de Tabasco, otro de Puebla, siete del Estado de México y 12 de Jalisco).

El año escolar en el Colegio Escalante fue inaugurado con gran entusiasmo por parte de profesores y estudiantes, a quienes se les exigirá promedio de ocho en el Seminario.

Año nuevo, vida nueva –dice el refrán– por lo cual, se efectuó el cambio de coordinadores general y de grupo, se realizó la distribución del personal por equipos de trabajo: liturgia, animación misionera, biblioteca-ciber, trabajo, de-porte, campanero, etc., y la planificación de las actividades correspondientes.

Cabe mencionar que los chicos de nuevo ingreso recibirán el curso tra-dicional de catequesis, y los alumnos de niveles avanzados impartirán ca-tequesis a párvulos de Parques de Santa Cruz del Valle, colonia cercana al Cuatro, cuyo templo ha sido erigido en honor de san Rodrigo Aguilar, már-tir de la persecución religiosa.

Los miembros del equipo formador pedimos que sus oraciones nos ayu-den a adecuarnos a la voluntad de Dios, para que los jovencitos que se nos han encomendado den pasos fir-mes hacia su configuración con Cris-to, misionero del Padre.

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Un país en pie de guerra

Fidel omnipresente

» CubaEsa es la impresión que uno se lle-va al ver por todas partes los anun-cios alusivos a la revolución: “Patria o Muerte. Venceremos”; “Hasta la Victoria. Venceremos”; “Unidad, Fir-meza y Victoria”; “Este es el Partido de todas las batallas”; “Proseguimos adelante el combate. Venceremos”; “No hay poder en este mundo que pueda doblegarnos”; “Este país ja-más podrá ser sometido ni coloni-zado”; “Más firmes que nunca”; “La Revolución es hoy”; “Revolución es Patria”; “Firmeza, Dignidad, Resis-tencia”; “Con la Revolución hasta el final”; “Unidad, Resistencia y Vic-

toria”; “Es la hora de gritar: Revolu-ción!”; “La Revolución soy yo”; “Esta humanidad ha dicho basta y echó a andar”.

También se pueden ver otras frases que hacen referencia a la revolución: “Revolución es: no mentir jamás ni violar principios éticos”; “Revolu-ción es: Igualdad y Libertad plenas”; “Porfiada y digna Revolución, Fidel”; “Nuestro pueblo jamás entregará la Revolución y el Socialismo”; “Revo-lución es ser consciente del momen-to histórico”.

Fidel es el dueño del país, el omni-potente e indiscutible líder de Cuba. ¡Pobre de quien se atreva a criticarlo! Su nombre y efigie se encuentra por todas partes, rindiendo culto a su per-sona: “Con Fidel, Revolución”; “Si está Fidel hay Revolución”. Indiscutible-mente él tiene una mente muy brillan-te y una inmensa facilidad de palabra. Esto lo reconocen aun sus enemigos, pero es tan grande el envilecimiento de su equipo de trabajo, que celebran y publican sus dichos más sosos e intrascendentes, como aquel que se expone en un gran letrero en el centro

(Segunda parte)

de Camagüey: “¡He visto que ustedes tienen edificios muy bonitos en esta ciudad! Fidel”.

Otros que ya partieron de este mun-do siguen compartiendo con Fidel esa omnipresencia, como el Che Gueva-ra, representado por todas partes, y de quien se puede ver una gigantesca efigie que cubre todo un edificio de va-rios pisos en la plaza José Martí con la leyenda: “Hasta la Victoria, siempre”. Otra figura revolucionaria que se pre-senta en muchas partes es la del co-mandante Camilo Cienfuegos.

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Este régimen es sostenido obviamen-te por el ejército. En la barda de un cuartel militar se pintó el lema: “Fieles al Partido, a la Revolución y a Fidel”.

Para nadie es secreto que durante estos 50 años Fidel ha tratado de una

Fidel y el Papa Juan Pablo ii

manera u otra de ejercer su influencia sobre los pueblos de América Latina. Esto lo sugiere un gran anuncio que dice: “Por Cuba va a cuajar la eman-cipación de la América”. Y vemos que por ahora uno de sus más fieles se-guidores es Hugo Chávez.

En uno de sus encuentros con el Papa Juan Pablo ii, Fidel le dijo: “Nos identifi-can el culto a la libertad y a la dignidad plena del hombre”. Unos días antes de la partida del Papa de Cuba, Fidel dijo que él y el Papa realizarían “un en-cuentro entre dos ángeles al servicio de los pobres”. Cuando le preguntaron al Papa su opinión sobre esto, expresó simplemente: “No somos dos ángeles, sino dos hombres”. Y, ya en el avión, los periodistas le preguntaron al Papa si era posible conciliar la revolución de Cristo con la revolución de Castro, a lo que contestó: “La revolución de Cris-to quiere decir revolución del amor; en cambio, la otra es la revolución del odio, de la venganza, de las víctimas”.

De alguna manera el Papa se dió cuenta de la profunda pérdida de valo-res en el pueblo cubano, la corrupción en todos los niveles, la falta de hon-radez y de moralidad. Por eso se ex-presó del régimen comunista como de “una ideología que no ofrece normas morales altas y precisas”.

Ésta es la realidad en la que nuestros misioneros desarrollan su labor evan-gelizadora. Después de 50 años de adoctrinamiento ateo, las nuevas ge-neraciones crecieron sin fe en Dios.

Padre José Sandoval I., mg

Los más fervorosos cristianos con-servaron su fe en el seno de la fami-lia. Ahora la Iglesia tiene una libertad limitada para predicar el Evangelio. Se dice que 50% de los cubanos se con-sideran cristianos y, de ellos, sólo 1% asiste a la Eucaristía dominical. La fa-milia, la Iglesia y el Estado son las tres instituciones encargadas de educar a las nuevas generaciones, sin embar-go, el gobierno ha usurpado este dere-cho, llevándose a los niños, desde los años de primaria, a internados donde no reciben la enseñanza de alguna doctrina religiosa, y donde además de estudiar juntos varones y mujeres, tienen los dormitorios uno enfrente del otro. Se habla de una deplorable pro-miscuidad en la que los mismos profe-sores toman parte.

La Iglesia en Cuba no puede tener ni escuelas ni hospitales, ni permiso de construir iglesias nuevas y, cuando ne-cesita material de construcción para reparar las iglesias derruidas, tiene que pagarlo a precios exorbitantes, nada más por el hecho de ser la Iglesia.

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Padre José Sandoval I., mg

Se llevó a cabo una reunión general, del 26 al 28 de agosto, en la casa re-gional de Tokio con miras a la prepara-ción del ix Capítulo General.

Los Padres Juan Martínez y Felipe Cuevas se encuentran en la patria en su regreso trienal. El Padre Anto-nio Valdés regresó a la misión el 12 de este mes, después de una breve estancia en Guatemala, tarea que le encomendó Caritas Japan. El Padre Auscencio López regresó de México el seis de agosto para retomar las activi-dades aquí.

En agosto, la Iglesia de Japón celebra, desde hace 25 años, diez días de jor-nadas por la paz. El evento comienza el día seis, fecha de la caída de la pri-mera bomba atómica sobre Hiroshima, y concluye el 15, fecha de la rendición y el final de la guerra. Cada diócesis organiza un programa de actividades para conmemorar estos acontecimien-tos. El segundo domingo del mes, Kioto celebra una Misa internacional y realiza una llamativa procesión por la paz.

Después de la edición de los boletines de Tokyo, impreso en marzo, Sendai, publicado en junio, se está preparan-do el de Kyoto, que saldrá a la luz en septiembre, éste comprenderá infor-

Noticias

» Japónmación de cada una de las regiones. Pueden solitcitarlo, si lo desean, a la casa regional de Tokyo o al Departa-mento de Comunicación de la Casa Central en México.

Por otro lado, nuestros ejercicios espi-rituales se llevarán a cabo del 6 al 11 de octubre, también asistirán a estas actividades varios Padres de la misión hermana de Corea, lo mismo que ami-gos misioneros del Instituto Misiones Extranjeras de España. El director será el Arzobispo de Yucatán, México, Emilio Carlos Berlie Belaunzarán.

La iglesia de Japón está en plena pre-paración de la ceremonia de beatifica-ción del Padre Pedro Kibe y sus 187 compañeros de martirio. La conferen-cia episcopal ha pedido esta prepara-ción. En la Iglesia de Japón, los márti-res tienen una especial relevancia: de ellos hubo miles y miles, sobre todo cuando se efectuó la primera etapa de evangelización pocos años después de que arribara san Francisco Javier. Por ello, se le llama a Japón La isla de los mártires. Este grupo es el tercero, después de los famosos 26 mártires de Nagasaki, entre los cuales se en-cuentra donde se cuenta a san Felipe de Jesús, nuestro protomártir mexica-no, canonizado el 10 de junio de 1862. Esta agrupación es conocida como San

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Pablo Miki y sus compañeros mártires, ellos fueron sacrificados en la colina de Nagasaki el 5 de febrero de 1597. El Papa Pío ix los canonizó el ocho de junio del 1862. El segundo grupo es llamado Doscientos cinco bienaventu-rados mártires ejecutados por todo el país entre los años 1617 y 1632. Ele-gidos por Pío ix, fueron beatificados en una ceremonia que se efctuó el año de 1867. La solemnidad del próximo 24 de noviembre incluye gente martiriza-da entre los años de 1616 y 1621, per-sonas de todas las clases sociales y edades. Entre los integrantes de estos 188 mártires, se encuentra el grupo de los 52 de Kyoto, conocido como El gran martirio de Kyoto acaecido el 6 de octubre de 1619. Entre las víctimas se halla la familia Hashimoto: santa Tecla, su esposo y sus cinco hijos.

Padre José Auscencio López López, mg

Algunos de los Misioneros de Guada-lupe asistiremos a la ceremonia.

Finalmente, el vento nacional denomi-nado Justicia y paz está celebrando, los días 13, 14 y 15 de este mes, la 34 Asamblea Nacional, bajo el títu-lo “Superando todas las diferencias” en la ciudad de Osaka. Se contó con asistencia de 700 representantes de toda la nación, entre ellos estuvieron presentes obispos.

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Dios constantemente invita a cada niño y a cada uno de nosotros a compartir lo que hemos recibido de Él; es así que, cuando los pequeños son generosos con lo poco o mucho que tienen, tam-bién aprenden a darse, a compartir a Jesús y a entregarse con Él.

Infundimos en los niños el valor de ayudar, y buscamos que otros chicos sean amigos de Jesús, hablándoles sobre el amor a Dios.

Así, la motivación de ayudar y coope-rar no será solamente la de calmar el hambre material, sino de atender la necesidad de la presencia de Dios. Si logramos que esta motivación entre en el corazón del pequeño, él dará con mayor generosidad y alegría su ayuda.

» Participación de los niños en la iglesia universal“Mayor felicidad hay en dar que en recibir”(Hch 20, 35), (RM, 81).

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» Cooperación de los niños en el Proyecto de Cahama

El área del Club de Niños participa en este gran proyecto: informa y mo-tiva a los pequeños miembros para que cooperen y sean solidarios con las necesidades de otros niños, que, al igual que ellos, buscan conocer y amar a Jesús.

El pasado dos de agosto fuimos in-vitados a participar en la Misa de ce-lebración del 25 aniversario de la Or-denación Sacerdotal del P. Alejandro Gollaz Mares, mg, que se llevó a cabo en el Templo Expiatorio de la ciudad de León, Guanajuato.

Aprovechamos la ocasión para invitar a los miembros del Club de Niños de la localidad a realizar una actividad con ellos y su familia. El encuentro comenzó antes de la Misa, en el sa-lón parroquial, con cantos y algunas dinámicas.

Con la presentación de material fo-tográfico, explicamos brevemente el trabajo que llevan a cabo los Mi-sioneros de Guadalupe en África y la labor que desempeñó el Padre Ale-jandro Gollaz en la misión de Kenia. También, platicamos de la necesidad de continuar llevando el Evangelio a otros lugares. Dimos, como ejemplo, el Proyecto de Cahama que busca ayudar social y espiritualmente a esta comunidad del país de Angola.

Les explicamos, a los pequeños in-tegrantes del club, nuestra propues-

Recientemente, la Dirección de Desa-rrollo de nuestro Instituto ha sido invi-tada a colaborar espiritual y económi-camente en el Proyecto de Cahama, en la misión de Angola, que consiste en la construcción de un templo pa-rroquial.

ta para contribuir en la realización de este objetivo: invitarlos a ellos y a sus papás a que elaboren tarjetas con material reciclable para que lue-go, sean vendidas. De esta manera, aportarían su granito de arena para la construcción de esta magna obra. Hicimos hincapié en que los niños, desde su situación y con sus recur-sos, pueden ayudar a las misiones y al proyecto, sin necesidad de dar una contribución económica.

La respuesta que recibimos de los pequeños y sus padres fue muy po-sitiva, participaron con entusiasmo y creatividad en las tarjetas con el ma-terial que les proporcionamos.

Terminamos la actividad con un canto de animación y preparamos a los chi-cos para colaborar en la Misa; algu-nos de ellos participaron en la oración universal.

Nos dimos cuenta de que los niños se sienten motivados al descubrir su lugar en la Iglesia Universal, que no únicamente son misioneros en su co-munidad local, sino que su coopera-ción, ayuda y oración puede llegar a

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Encuentro misonero con niñosde la Parroquia de Tecámac,Estado de México.

Promoción del Club de Niños y Misade Padrinos en Morelia, Michoacán.

Promoción y Misa de Padrinoen Querétaro.

» Noti - Club

otras partes del mundo; así, ellos des-cubren que todos somos hermanos sin importar raza, color o condición, y sienten especial interés por nuestros hermanos, que no conocen a Jesús.

Si nos limitamos a medir de manera cuantitativa la ofrenda económica que dan los pequeños, tal vez no resulte mucho, pero ante Dios y ante los de-más chicos será siempre un obsequio muy importante.

Juan Pablo II en el discurso “A los di-rectores de las Obras Pontificias Mi-sionales en el 150 aniversario de la institución de la Obra Pontificia de la Santa Infancia” (6 de mayo de 1993):

“La cooperación de los niños en la evangelización es insustituible para nuestro mundo...Con la seguridad de que todos reconocen la validez de vuestra tarea, invitad a todos los ni-ños a cooperar a través de su oración y sus ofrendas en la acción misio-nera de la Iglesia”. Pontificium opus a sancta infantia, “La cooperación misionera de los niños”, en Vatican [en línea] <http://www.vatican.va/ro-man_curia/congregations/cevang/p_missionary_works/infantia/docu-ments/rc_ic_infantia_doc_20011109_esamp27_sp.html>. [Consulta:30 de septiembre, 2008.]