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UNIVERSIDAD DE MATANZAS
“Camilo Cienfuegos”
Título: “Transformación de la finca ganadera Dos Palmas del
Municipio Las Tunas, con bases agroecológicas”
Tesis en opción del título académico de Máster en
Pastos y Forrajes
Autor: Ing. Mirlín Rodríguez Santiesteban
Tutor(es): Dr.C. Raquel Ruz Reyes
Dr.C. José R. Ayala Yera
Ciudad de Matanzas, Cuba
Abril 2013
DEDICATORIA
Dedico este trabajo a los profesionales, estudiantes y campesinos
que en el puedan encontrar fuentes de inspiración y respuestas
a las problemáticas que en este trabajo abordó.
AGRADECIMIENTOS
A todos los profesores que han contribuido en mi formación profesional.
A José R, Ayala y a Ángel González por su colaboración incondicional
para lograr la realización exitosa de este trabajo.
A mi esposo, a mi primo JuanCa por estar siempre.
Y a los que no... Agradecida, por hacerme más fuerte.
A todos muchas gracias...
“Todos y cada uno de nosotros paga puntualmente su cuota de sacrificio
consciente de recibir el premio en la satisfacción del deber cumplido,
conscientes de avanzar con todos hacia el Hombre Nuevo que se
vislumbra en el horizonte”
Ernesto Che Guevara
RESUMEN
La agroecología se sustenta en los mecanismos de sinergia y complementariedad que
ofrece la biodiversidad en la agricultura. Este concepto, aplicado en las zonas que
muestren síntomas de deterioro y disfuncionalidad, es una opción que permite la
restauración de los equilibrios naturales fundamentales para su respuesta a los eventos
externos y la eficiencia en el uso de las características locales y las intervenciones
tecnológicas, principalmente las apropiadas. La asunción de este concepto constituyó el
motivo de este estudio, dado los problemas manifestados por la finca seleccionada. Dos de
los problemas identificados en la actualidad son la deforestación y la pérdida de
biodiversidad, los que estaban presentes en la finca "Dos Palmas” de la UBPC “Combate
de Levanón”, en la localidad de Villanueva del municipio de Las Tunas. El objetivo del
presente trabajo fue realizar un análisis sistémico para evaluar, temporal y espacialmente,
el impacto de la diversificación en el proceso de conversión hacia sistemas agroecológicos
e identificar indicadores apropiados. La finca cuenta con un área de 84 hectáreas,
dedicadas a la explotación ganadera, pero con pastizales de baja calidad y en franco
deterioro. Durante los tres años evaluados, el índice de diversidad de la producción
(Shannon) se incrementó considerablemente (de 0.57 en sus inicios a 2.7 en el tercer año),
mientras que en el mismo período la introducción de nuevas especies de cultivos menores,
árboles y animales permitieron un aumento de la riqueza de especies de 2.5 a 6.2
(Margalef). La incorporación de 22 especies de árboles incrementó la diversidad arbórea
en el mismo periodo de 1,4 hasta 3.9. Tanto la producción agrícola como la pecuaria se
incrementaron, con la obtención de 25 renglones agropecuarios, el rendimiento agrícola se
duplicó con respecto al producido en sistema en el inicio de la transformación. Se
demostró la validez de la metodología utilizada para la evaluación y manejo de sistemas
agroproductivos y se confirmó que los procesos de diversificación agrícola garantizan la
preservación del medio ambiente y la correcta utilización de los recursos naturales, a la
vez que reduce la contaminación ambiental y garantiza la producción sostenible y
suficiente de alimentos. Se concluye que el estudio de caso realizado constituye un modelo
para la implementación en condiciones locales o similares a las estudiadas y se
recomienda su socialización e introducción.
PALABRAS CLAVE: Agroecología, biodiversidad, agroecosistemas, deforestación,
contaminación ambiental.
Índice General
Item Página
INTRODUCCIÓN 1
CAPÍTULO I. FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA 5
I.1. La transformación de la agricultura cubana 5
I.2. La agricultura sostenible y su aplicación en el agroecosistema 9
I.3. La agrobiodiversidad en los sistemas agroecológicos 12
I.4. El enfoque de sistema en la agricultura 14
I.5. Sistemas integrados ganadería-agricultura, con bases agroecológicas 16
I.5.1. Relación suelo-planta-animal-ecosistema 18
I.5.2. El papel potencial de los árboles 21
I.5.3. Los animales en el Agroecosistema 23
I.6. Eficiencia y productividad de la agricultura sobre bases
agroecológicas 24
I.7. Impacto ambiental de los sistemas agroecológicos 25
I.8. Indicadores de sostenibilidad 27
CAPÍTULO II. METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 31
II.1. Metodología para la selección de la finca 31
II.2. Ubicación de la finca en estudio 33
II.3. Caracterización de la finca según Diagnóstico Rápido Participativo 33
II.4. Condiciones y características del sistema de producción 34
II.5. Características agroclimáticas 35
II.6. Metodología general de análisis 36
II.7. Estrategias implementadas 38
II.7.1. Sistema silvopastoril 38
II.7.2. Pedestales 39
II.7.2.1. Tecnología VERDEMAR 39
II.7.3. Reforestación 39
II.8. Análisis de los datos 39
CAPÍTULO III. RESULTADOS Y DISCUSIÓN 40
III.1. Diseño de la finca integral 40
III.2. Impacto ecológico 54
III.3. Manejo integrado de la nutrición 55
III.4. Indicadores de diversidad 56
III.5. Indicadores de productividad 59
CONCLUSIONES 64
RECOMENDACIONES 65
BIBLIOGRAFÍA 66
ANEXOS
INTRODUCCIÓN
1
INTRODUCCIÓN
En la entrada de un nuevo milenio persiste una preocupación mundial: la gran mayoría
de las naciones del mundo reconocen la emergencia de los problemas ambientales y
globales, desequilibrios que tienen como causa principal la presión que las sociedades
industriales ejercen sobre el medio ambiente. Los procesos productivos y las formas de
organización sociales en gran parte son los responsables de la devastación de los
recursos naturales, comparables de alguna forma con las grandes catástrofes ocurridas a
lo largo de la existencia del planeta.
La destrucción de la capa de ozono, las alteraciones climáticas, la desertificación de los
suelos, pérdida de la biodiversidad, la desaparición de los bosques, la contaminación de
las aguas y los océanos, los accidentes nucleares, el desarrollo de la industria altamente
contaminante son problemas que actualmente se denuncian en el mundo y tendrán que
ser modificados necesariamente si en realidad se pretende garantizar la sobrevivencia de
las futuras generaciones.
Para la mayoría de las poblaciones pobres la agricultura es la clave de su supervivencia,
por lo que el desarrollo constituye uno de los requisitos esenciales para alcanzar los
Objetivos de Desarrollo del Milenio con los que se pretende, de aquí al 2015, reducir a la
mitad la proporción de población que vive en condiciones de extrema pobreza y que
padece hambre crónica (Noa 2002).
El perfeccionamiento y la movilización de todas las formas de agricultura, son
esenciales para cambiar esta realidad, los que podrán ser sostenibles si se toman en
consideración los numerosos retos medioambientales actuales: cambio climático,
desertificación, de la que se valora que más de la mitad de los bosques han sido
transformados en pastizales (Wassenaaret al., 2007) como parte del crecimiento de los
sistemas de producción convencional, los cuales provocan pérdida y fragmentación de
áreas boscosas (Kaímowitz2001), la degradación de suelos, donde más del 50% de las
pastizales se encuentran en un estado avanzado de degradación (Szott et al., 2000),
reducción de los recursos hídricos y deterioro progresivo de la capa de ozono.
INTRODUCCIÓN
2
Por otra parte, el alza actual de los precios de los productos agropecuarios y las nuevas
aplicaciones no alimentarias de estos productos, están contribuyendo a modificar las
condiciones de desarrollo de las distintas formas de producción agrícola.
En tal situación internacional y de la región, la agricultura en Cuba se dirige a ritmo
acelerado al propósito fundamental de su adecuación a ese nuevo contexto. Por tal razón,
tiene lugar desde 1990 la transición hacia la agricultura sostenible, caracterizada por
sustituir insumos químicos por biológicos, con fuerte énfasis en la protección ambiental y la
agro biodiversidad Funes et al. (2001).
Las condiciones sociales, económicas y ecológicas de Cuba sugieren la búsqueda de
sistemas productivos sostenibles, con nuevos enfoques, teniendo en cuenta las
condiciones naturales de cada ecosistema, donde el ganado vacuno y otras especies de
rumiantes tengan una alta adaptabilidad, lo que constituye la vía de mayores posibilidades
para la producción de proteína de alto valor biológico para la alimentación de la población.
Las pequeñas y medianas fincas, altamente diversificadas, heterogéneas y complejas
han demostrado que pueden alcanzar niveles de eficiencia productiva y de utilización de
recursos más elevados que los sistemas especializados de agricultura y ganadería a
mayor escala (Funes-Monzote, 2009).
Se ha comprobado que la seguridad alimentaria de la humanidad depende de los
sistemas ecológicos y de todas las formas de vida que se encuentran en ellos: plantas,
animales y microorganismos diversos, los que actúan con diferentes componentes de la
naturaleza. Al establecer mayor biodiversidad en las fincas, es posible obtener una
producción agroecológica basada en la conservación de la naturaleza y el respeto al medio
ambiente, además de contribuir a la organización de los agricultores para enfrentar la
escasez de insumos de manera sostenible (Ríos, 2006). Además, las técnicas agrícolas
ecológicas pueden producir alimentos con rendimientos iguales o mayores que los
métodos convencionales y es una alternativa para reducir la pobreza y el hambre en el
mundo (Prettyet al., 2006).
INTRODUCCIÓN
3
El escenario actual de la economía mundial y en específico de la agricultura cubana,
requiere de un cambio de mentalidad y actitud hacia la producción de alimentos. Los
efectos directos del cambio climático en la inestabilidad de los patrones del clima, así como
la persistente incertidumbre generada por el aumento de los precios de los alimentos en el
mercado mundial, impulsan a rediseñar los sistemas agrícolas hacia un concepto de uso
racional de los recursos humanos, materiales y naturales disponibles.
Se requiere con urgencia la difusión y aplicación de la agricultura sustentable, basada
en el rescate y vigorización de sistemas y culturas originales de formas de producción
sostenible y conservadora de los recursos sustentada en los principios ecológicos y
localmente disponibles. Es importante valorar y promover sus principios como estrategia
para obtener producciones de alimentos de alta calidad, respetando el equilibrio eco
sistémico y reconociendo los conocimientos de los agricultores, que contribuyen a la
adaptación y mitigación del cambio climático global (Ríos et al., 2011).
Para mejorar el efecto de todos estos problemas, la diversificación de la producción
constituye una solución para el incremento de un mayor número de especies, tanto animal
como vegetal. Las evidencias ampliamente comprobadas y documentadas por numerosos
científicos a nivel mundial (Altieri, 1995; Gliessman, 2001; Prettyet al., 2006), demuestran
el alto potencial de los sistemas agroecológicos para lograr una producción agropecuaria
ambientalmente sana, ecológicamente sostenible, económicamente viable y socialmente
justa.
En este contexto la agroecología tiene un gran potencial (Altieri, 1997; Gliessman y
Rosemeyer, 2010). A través de sistemas agroecológicos también pueden disminuirse los
costos de producción en términos financieros y energéticos, los impactos ambientales y la
erosión de los suelos, logrando una mayor rentabilidad y sostenibilidad agrícola (Altieri,
2009).
Teniendo en cuenta todos estos elementos de juicio y la experiencia existente en el país
en la implementación de los sistemas agroecológicos, se encaminaron esfuerzos para la
búsqueda de soluciones viables para la conversión del sistemas productivo en la finca Dos
Palmas del municipio Las Tunas.
INTRODUCCIÓN
4
Problema
¿Cómo la diversificación agropecuaria puede influir en el incremento de los indicadores
productivos y en la sostenibilidad y resilencia del sistema en la finca Dos Palmas?
Ante el problema expuesto se propuso la siguiente hipótesis:
Hipótesis
La conversión hacia sistemas agroecológicos diversificados e integrados permitirá
utilizar de forma racional los recursos disponibles, incrementar de forma sostenible la
productividad agrícola y pecuaria y la resilencia en la finca Dos Palmas.
Objetivo general
Realizar un análisis sistémico para evaluar temporal y espacialmente el impacto de la
diversificación en el proceso de conversión hacia sistemas agroecológicos e identificar
indicadores apropiados para este fin.
Objetivos específicos
Realizar un estudio de la diversidad agrícola y pecuaria e identificar y calcular
índices que permitan demostrar el efecto de la diversidad en el incremento de la
sostenibilidad y resilencia del sistema.
Evaluar la funcionalidad de los componentes de la biodiversidad y su
relevancia en el comportamiento a nivel de sistema agroproductivo.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
5
CAPÍTULO I: FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA
I.1. La transformación de la agricultura cubana
La agricultura cubana se encuentra inmersa en un necesario proceso de cambio;
históricamente se dedicó a una agricultura agro-exportadora, monocultivos y
extracción indiscriminada de recursos naturales. Durante las primeras dos décadas
del siglo XX la siembra de caña de azúcar produjo la más intensa deforestación en la
historia de Cuba. Alrededor de 1925, la mayor parte de las llanuras cubanas estaban
plantadas de caña. Las propiedades más extensas, que ocupaban el 70 % de la tierra
agrícola, se dedicaban básicamente a la ganadería y el azúcar. Poco más del 1 % de
los propietarios poseía el 50 % de las tierras, mientras el 71 % tenía solo el 11 %
(Valdés, 2003).Al triunfo de la Revolución en el año 1959, se firmaron dos leyes de
reforma agraria que otorgaron la propiedad de la tierra a los campesinos que la
trabajaban, lo que redujo considerablemente el tamaño de las fincas (Anónimo, 1960;
Valdés, 2003). Se priorizaron cuatro objetivos para transformar la agricultura:
Satisfacer las necesidades crecientes de la población.
Generar divisas convertibles con la exportación de los productos.
Obtener materia prima para la industria de procesamiento de alimento.
Erradicar la pobreza del campo.
Además, se tuvo como objetivo primario cumplir los compromisos de exportar
materias primas como el azúcar, tabaco, café, cítricos y otros al Consejo de Ayuda
Mutua Económica (CAME), con lo que se forzó el cumplimiento de planes
quinquenales con altos costos ambientales (Espinosa, 1992). Esto trajo como
consecuencia que no se cumpliera con la diversificación de la agricultura, a pesar de
los deseos de la dirección del gobierno y se produjo la llamada agricultura
convencional o Revolución Verde. Este nuevo modelo de producción agrícola,
fundamentado en el uso de productos químicos, el empleo de maquinaria agrícola,
formación de grandes empresas dedicadas a un solo cultivo (monocultivo). En sus
inicios logró incrementar los rendimientos, pero con el tiempo comenzó a retroceder
en los niveles productivos ocasionados por:
Capítulo I: Fundamentación Teórica
6
La pérdida de fertilidad de los suelos.
Pérdida de la diversidad biológica.
Altos niveles de plagas y enfermedades.
EL deterioro medio ambiental.
Mayor dependencia de insumos externos y uso inadecuado de los recursos.
Introducción de tecnologías incompatibles con los recursos disponible y las
características propias de cada región.
Incapacidad para asegurar la calidad de los alimentos, la capacidad del
mercado y serios problemas de salud al hombre.
Con la rápida industrialización de la agricultura, basada en métodos
convencionales se tendió a concentrar como nunca antes la tierra en grandes
empresas estatales, aumentó los niveles de producción y la calidad de vida en el
medio rural, pero al mismo tiempo creó consecuencias económicas, ecológicas y
sociales negativas que no pueden ignorarse (Anónimo, 1960; Valdés, 2003).
La crisis de los años noventa, propiciada por el derrumbe del campo socialista
Europeo y de la Unión de República Socialista Soviéticas (URSS), evidenció la
fragilidad de este sistema. Al desaparecer la mayoría de los insumos a precios
diferenciados (material y financiero), la agricultura cubana entró en la peor crisis de
su historia, unida a otras ramas de la economía. Desde estos mismos años surgió la
necesidad de construir un sistema agrícola alternativo y mucho más sostenible a
escala nacional.
El proceso de cambio se hace necesario, profundo e inevitable y las principales
razones son de índole económica, resultado de la escasez de capital e insumos
externos para continuar desarrollando el modelo de la Revolución Verde. En esta
época se produjo la transformación de un modelo altamente especializado,
convencional, industrializado y dependiente de insumos externos, a uno basado en
los principios agroecológicos y de la agricultura sustentable (Altieri, 1993; Rosset y
Benjamín, 1994; Funes et al., 2001).
Capítulo I: Fundamentación Teórica
7
El Ministerio de la Agricultura comenzó a realizar desde 1970, los programas de
investigación, los que mostraron la necesidad de una transición hacia sistemas de
producción con menos insumos y más racionales, basándose en la utilización de las
siguientes alternativas:
Utilización de leguminosas, biofertilizantes, controles biológicos, reforestación,
entre otros.
Sistemas de animales-cultivos.
Cerdos y aves criados a campo.
Sistemas integrados ganadería- agricultura.
Las diferentes alternativas empleadas han demostrado que con este modelo
agrícola se pueden obtener resultados productivos y económicos y a la vez proteger
el ambiente, la naturaleza y la salud humana.
Para dar respuesta a la precaria situación alimentaría existente en el mundo, en
la Conferencia Internacional para la Nutrición, celebrada en Roma en 1992 se
estableció un programa Nacional de Acción para la nutrición (PNAN, 1994), que trazó
estrategias básicas para amortiguar las consecuencias de la crisis como son:
Fortalecer la política agraria mediante la descentralización de la tenencia y
gestión de tierra y diversificar la producción agrícola.
Motivar a la población a participar en las labores agrícolas.
Incentivar la creación de autoabastecimientos o huertos familiares con el
objetivo de satisfacer las necesidades de áreas residenciales e instituciones
públicas.
Promover el desarrollo sostenible y compatible con el medioambiente.
Reducir las pérdidas post-cosecha a través de la venta directa de los
productores a los consumidores en las ciudades (agricultura urbana).
Incorporar los objetivos nutricionales a los programas de desarrollo agrícola.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
8
El modelo de sustitución de insumos prevaleció en Cuba durante los años de la
crisis y se considera el primer intento de convertir un sistema convencional a escala
nacional (Rosset y Benjamín, 1994). Estas estrategias de sustitución de insumos
reconocen los positivos resultados de estos enfoques para la autosuficiencia
alimentaria y el medioambiente. Sin embargo, estos enfoques necesitan evolucionar
si se desea alcanzar un nivel superior de sostenibilidad agrícola (Wright, 2005).
La conversión de un sistema agrícola especializado a uno agroecológico sigue
tres principios básicos; Diversificación (al incluir especies de cultivo, árboles y
animales); Integración (por el intercambio dinámico y el reciclaje de energía y
nutrientes entre los componentes del sistema) y el logro de la autosuficiencia
alimentaria (Funes-Monzote, 2009). Este mismo autor señala que las fincas
convertidas por tres o más años tuvieron menores costos energéticos en la
producción de proteína y valores de eficiencia energética mayores que los de uno a
dos años o no convertidas.
En las fincas agroecológicas donde se integran y diversifican las producciones
agrícolas y pecuarias, se hace un mejor manejo de los recursos, se logra un mayor
rendimiento en la producción de alimentos de origen animal y vegetal por unidad de
área y aumenta la eficiencia del sistema. Los volúmenes de producción más altos se
obtienen a partir del tercer o cuarto año de implementar el uso de prácticas
agroecológicas en renglones pecuarios y agrícolas respectivamente, además de
proteger, conservar y rescatar las especies de animales de la finca que contribuyen al
equilibrio biológico del ecosistema (González y Rivero, 2004).
Las líneas estratégicas más diseminadas en Cuba para integrar los conceptos de
manejo especializado en agroecosistemas holísticos, son la diversificación genética y
tecnológica, la integración ganadería-agricultura y la autosuficiencia alimentaria de los
animales y los seres humanos. Estas tres concepciones, combinadas en los sistemas
DIA (diversificados, integrados y autosuficientes), tienen características específicas,
pero todos poseen varios principios básicos en común, reportadas por éste mismo
autor:
Capítulo I: Fundamentación Teórica
9
Incrementar la biodiversidad del sistema.
Hacer énfasis en la conservación y manejo de la fertilidad del suelo.
Usar al máximo la energía renovable y optimizar los procesos de reciclaje de la
energía.
Aumentar la eficiencia en el uso de los recursos naturales locales.
I.2. La agricultura sostenible y su aplicación en el agroecosistema
Aunque existen diversas definiciones de sostenibilidad varios objetivos sociales,
económicos y ambientales son comunes a la mayoría y sientan sus bases en la
práctica y principios similares. Según Pretty (1995), la sostenibilidad es un término
complejo y contextual, por lo que resulta imposible elaborar definiciones precisas y
absolutas y ante cualquier análisis de sostenibilidad resulta importante aclarar
primero qué es lo que está sostenido, por cuánto tiempo, para beneficio de quién y a
qué costo, sobre qué área y con qué criterios será medido.
La ley 81 del Medio Ambiente de Cuba, recoge como concepto de agricultura
sostenible: Sistemas de producción agropecuaria que permite obtener producciones
estables de forma económicamente viable y socialmente aceptable, en armonía con
el medio ambiente.
La construcción de este mundo agrícola artificial se ha fomentado en la
disminución del mundo natural, convirtiéndolo en algo contable, previsible y
controlable. En consecuencia se necesita lograr un equilibrio y por esta razón surge
un movimiento de Agricultura Sostenible que propone estrategias dirigidas a resolver
los problemas que afectan la agricultura a nivel mundial. El término sostenible implica
una dimensión temporal y la capacidad de un sistema agrícola de permanecer y durar
de forma indefinida (Lores Pérez, 2009).
La agricultura sostenible se sustenta en el principio de satisfacer las necesidades
del presente sin comprometer las capacidades de las generaciones futuras para
satisfacer sus propias necesidades, donde el secreto de los agroecosistemas radica
en que deben ser manejados como un todo integral y de forma racionalizada; cuando
esto sucede no se está muy lejos de alcanzar la sostenibilidad (Bello, 2006).
Capítulo I: Fundamentación Teórica
10
La estrategia nacional de sustitución de insumos estableció la infraestructura y el
conocimiento básico acerca del sistema de gestión agrícola sostenible. Sin embargo,
es necesario reconocer sus lagunas tecnológicas para así alcanzar un enfoque más
integrado y ecológico. Los sistemas de monocultivo que aún prevalecen en la
agricultura, la dependencia de insumos externos y la falta de integración en el
agroecosistema son algunas de estas lagunas (Funes-Monzote, 2009).
Se trata de buscar la sostenibilidad de cada territorio. Se debe minimizar la
cantidad de productos de la agricultura que son necesarios trasladar de un territorio a
otro; desarrollar todo lo que se establece en los subprogramas de la agricultura
sustentable, la agricultura sustentable; proteger el medio ambiente, y el suelo y
garantizar además, la eficiencia en el riego (Rosales, 2009). Solo con grandes
cambios y a largo plazo puede alcanzarse sostenibilidad, considerando los sistemas
agrícolas alternativos como verdaderamente regenerativos, y no solo como una
manera de sustituir insumos, por lo que el modelo alternativo cubano necesita ser
fortalecido con un enfoque más poderoso, tanto sistémico como ecológico.
En Cuba la diversificación agrícola fue reconocida como un camino alternativo
desde inicios de los años noventa, tras el colapso del sector. Los productores que
ocupaban una proporción relativamente pequeña del área agrícola disponible,
lograron sustanciales aumentos en la productividad de la tierra y de la mano de obra
mediante modelos integrados ganadería-agricultura.
Funes-Monzote (2009), considera la agrodiversidad como base para el uso
eficiente de los recursos naturales; con este fin deben tenerse en cuenta tres
componentes básicos: disponibilidad, captura y conversión. Además, demostró que la
ventaja de un sistema basado en la diversidad reside fundamentalmente en que su
diseño permite una integración armónica y funcional entre sus componentes y que
con una mayor proporción de tierra dedicada a cultivos, se obtienen valores más altos
en los índices de agrodiversidad, en cuanto a riqueza de especie, diversidad de
producción y diversidad de árboles.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
11
Tecnológicamente, la integración agricultura ganadería ofrece muchas maneras
de lidiar con los desafíos ambientales y socioeconómicos que enfrenta la agricultura.
Los sistemas integrados han sido asociados a objetivos como la autosuficiencia
alimentaria, el uso óptimo de la tierra, la multifuncionalidad, la optimización de los
flujos de nutrientes y energía, y la agrodiversidad (Altieri, 2002; Schiereef al., 2002;
Pimentel et al., 2005).
Son diversas las alternativas prácticas que se pueden establecer en
agroecosistemas integrados de cultivo y ganado. Por lo general estas prácticas se
corresponden con:
Fomentar y manejar la diversidad vegetal (asociación de gramíneas y
leguminosas, como componentes fundamentales de los pastizales forrajeros).
Equilibrar y estabilizar el agroecosistema.
Mantener e incrementar la fertilidad con óptimo uso de la tierra en rotaciones
debidamente lotificadas, producción de fitomasa no comprometida con la
alimentación de los animales, pastoreo rotacional, pastoreo en los rastrojos en
vez de recogerlos).
La integración de cultivos y ganadería dentro de los sistemas de producción
diversificados, para crear sistemas integrados de producción, es una alternativa
fundamental. Las fincas integradas favorecen la biodiversidad lo que influye en el
comportamiento de las plagas al promover el efecto de los controles naturales,
disminuyendo las afectaciones a los cultivos y reducir o eliminar el uso de
plaguicidas. También se incrementa la biodiversidad del suelo debido a los métodos
de preparación y cultivos empleados:
En la búsqueda de soluciones a los problemas característicos de los sistemas
agrícolas especializados de bajos insumos, baja productividad, poco empleo de los
recursos naturales disponibles, escaso nivel de diversificación y pobres incentivos
económicos, los productores y los investigadores han realizado considerables
esfuerzos conjuntos.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
12
Estudios realizados por Blackburn (1998), plantea que la intensificación
sostenible de los agroecosistemas a través de la integración ganadería-agricultura, se
considera una tecnología promisoria y menciona tres factores fundamentales a favor
de los sistemas integrados:
Conservan la fertilidad del suelo a través del reciclaje de nutrientes y la
introducción de rotaciones, que incluyen diversidad de cultivos, árboles y
leguminosas forrajeras.
Mantienen la biodiversidad del suelo, disminuyen su erosión, conservan el
agua y proporcionan hábitat para la vida silvestre.
Uso óptimo de los residuos de cultivos.
Funes-Monzote, (2009) comparó la situación cubana y la de otros países, donde
la de Cuba es relativamente favorable para el desarrollo de modelos agroecológicos,
debido a la abundancia de tierras, la baja densidad poblacional, la experiencia
adquirida en una agricultura de bajos insumos externos, las tecnologías desarrolladas
durante los últimos quince años, los altos niveles de educación y salud de la
población, así como la organización social.
I.3. La agrobiodiversidad en los sistemas agroecológicos
Los agroecosistemas son comunidades de plantas y animales interactuando con
su ambiente físico y químico, y ha sido modificado para producir alimentos, fibra,
combustible y otros productos para el consumo humano y animal.
La agroecología es el estudio holístico de los agroecosistemas. Centra su
atención sobre la forma, la dinámica y función de sus interrelaciones y los procesos
en el cual están envueltas. Las últimas décadas se han caracterizado por una pérdida
acelerada de razas y una reducción alarmante de la biodiversidad a escala global.
Este fenómeno no solo es una tragedia ambiental, sino que tiene profundas
repercusiones en el desarrollo económico-social, pues los recursos biológicos
representan al menos el 40% de la economía mundial y el 80% de las necesidades
de los pobres emanan de los recursos biológicos (Morales, 2005).
Capítulo I: Fundamentación Teórica
13
La ley 81 del Medio Ambiente promulgada en 1997 por el CITMA, define como
diversidad biológica a la “Variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente,
incluidos entre otros, los ecosistemas terrestres y marinos y otros ecosistemas
acuáticos y complejos ecológicos de los que forman parte”. Comprende la diversidad
dentro de cada especie, entre las especies y los ecosistemas.
En el transcurso de los años se han manifestado diferentes causas que de una
forma u otra han incidido en afectaciones a la biodiversidad, entre los cuales se cita:
El inadecuado manejo de determinados ecosistemas frágiles.
La destrucción del hábitat natural de las especies.
La aplicación de una agricultura intensiva con la utilización excesiva de
recursos y baja rotación de cultivos.
Débil integración entre las estrategias de conservación y uso sostenible de la
biodiversidad.
La excesiva demora en el establecimiento legal y funcional del Sistema
Nacional de Áreas Protegidas.
Inadecuado control sobre la apropiación ilícita de especies de gran valor. s
Falla de control sobre el cumplimiento de la legislación vigente.
Falla de conciencia y educación ambiental de la población (Hernández et al.,
2001a).
La experiencia acumulada no resulta suficiente para cambiar formas de pensar y
hacer en cuanto a los aspectos económicos, políticos, sociales y territoriales, por
expresar los más importantes. De ahí que el término conciencia ambiental no sea
suficiente, como tampoco lo es el de capacitación, para modificar actitudes y acciones
en cualquier esfera de la sociedad. Es evidente y además constituye un logro
importante, que esas condiciones determinan la producción de alimentos sanos y un
nivel de empleo de técnicas agroecológicas con un alcance más integral (Cruz y
Sánchez, 2001).
Capítulo I: Fundamentación Teórica
14
I.4. El enfoque de sistema en la agricultura
Para el sector agropecuario del país, las estructuras y los cambios producidos
históricamente se han convertido en temas cotidiano, pero el propósito de éstas
propuestas convergen en lograr mayor eficiencia en los sistemas de producción
(Páez, 2008). La finca estatal será sin duda, una estructura viable en la medida en
que se le brinde a los que la integran mayores y mejores atenciones y se
proporcionen los medios que se necesitan para ser más productivos en la práctica de
una agricultura con enfoque agroecológico y principios de sostenibilidad, donde con
escasos recursos de aseguramientos se multiplica la productividad del trabajo.
Las prácticas de agricultura sustentable están basadas en las agroecológicas,
que potencian los mecanismos que usa la naturaleza para auto regularse y lograr
estabilidad (regulación interna), y estimulan también la capacidad de recuperación
frente a situaciones adversas, propiedad a la que se denomina resilencia(Altieri,
1997).
Conceptualmente, la agroecología enfoca el estudio de la agricultura desde una
perspectiva ecológica y se define como un marco teórico cuyo fin es analizar los
procesos agrícolas de la manera más amplia (Altieri, 1996a). La agroecología va más
allá del panorama unidimensional de la genética, la agronomía y la edafología de los
agroecosistemas, para comprender los niveles ecológicos y sociales de la co-
evolución, la estructura y la función. En lugar de enfocarse en un componente
particular del agroecosistema, enfatiza la interrelación de todos sus componentes, así
como las complejas dinámicas de los procesos ecológicos (Rosset, 1998).
Los sistemas agroecológicos tienen como objetivo esencial integrar el
agroecosistemas de manera tal que aumente la eficiencia biológica general y se
mantenga la capacidad productiva, según las apreciaciones de Lores y Pérez (2009).
Las rotaciones de cultivos, policultivos, intercalamiento de cultivos, integración
ganadería - agricultura son estrategias para restaurar la diversidad agrícola en tiempo
y espacio y lograr una mejor optimización de nutrientes y materia orgánica, conservar
el agua y el suelo, cerrar el flujo de energía y balancear las poblaciones de plagas y
enemigos naturales (Altieri, 2001).
Capítulo I: Fundamentación Teórica
15
En la agricultura cubana, los cambios producidos en años recientes dan
respuesta positiva a la aplicación y desarrollo de sistemas agrícolas sostenibles
adaptables a las condiciones locales y apoyados por instituciones de investigación
Funes-Monzote, 2004; Ríos, 2006). Estos sistemas agrícolas se caracterizan cada
vez más por la agrodiversidad y la heterogeneidad y tienden a ser manejados
descentralizadamente por agricultores con expectativas y tradiciones diferentes.
Durante casi dos décadas los productores y los investigadores han sido protagonistas
de la introducción y aplicación exitosa en Cuba de los sistemas de bajos insumos
externos (Funes et al., 2001).
Funes-Monzote, 2006), estima que las ventajas para la adopción de sistemas
agroecológicos y de la agricultura integrada de los trópicos son:
Alto potencial para la producción de biomasa a través de la energía solar.
Alta diversidad de los ecosistemas tropicales.
Posibilidad de cultivar durante todo el año.
Plantas altamente productoras de energía y proteína como la caña y la yuca.
Ventajas de la agricultura integrada:
Recupera los desperdicios.
Reduce la necesidad de los fertilizantes comerciales.
Mejora la estabilidad de las fincas.
Aumenta la producción total de alimentos.
Una idea implícita en las investigaciones agroecológicas es que, entendiendo
estas relaciones y procesos ecológicos, los agroecosistemas pueden ser manejados
para mejorar la producción de forma más sustentable, con menores impactos
negativos ambientales y sociales y un menor uso de insumos externos.
Los sistemas agrícolas con bases agroecológicas se han convertido en una
necesidad incuestionable y ver los sistemas agrícolas como un todo (Funes-
Monzote. 2001) y señala los principios de:
Sinergia: La suma de las partes es diferente al todo.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
16
Recursividad: Todo el sistema está formado por otro sistema (subsistemas).
Jerarquía: Cada sistema está formado por otro sistema (subsistemas), pero
cada uno está interrelacionado y uno es superior a otro (los interiores están
contenidos en los superiores).
Sistema: Unión de los componentes físicos relacionados entre sí, de forma tal
que actúan como un todo y con un objetivo determinado.
Los sistemas integrados han sido asociados a objetivos como la autosuficiencia
alimentaria, el uso óptimo de la tierra, la multifuncionalidad, la optimización de los
flujos de nutrientes y energía y la agrodiversidad (Altieri, 2002; Schiereet al., 2002 y
Pimentel et al, 2005). En el contexto cubano, los recursos locales pueden manejarse
de manera eficiente y obtener rendimientos razonablemente altos con bajos insumos
externos. Además Funes- Monzote(2009), confirmó que el contenido de materia
orgánica es mayor en los suelos que han estado durante mucho tiempo cubierto por
pastos, lo que ofrece un excelente punto de partida para desarrollar sistemas
integrados. Si se incluye el componente animal, se mejora la materia orgánica y se
reduce el déficit de nutrientes en las tierras agrícolas.
I.5. Sistemas integrados ganadería-agricultura, con bases agroecológicas
Mucha información científica y práctica demuestra las ventajas del modelo
integrado, ya que las condiciones ecológicas, económicas y sociales actuales
favorecen la conversión a sistemas integrados agroecológicos en el sector ganadero
(Funes-Monzote y Monzote, 2001). Debido a la disponibilidad de animales,
infraestructura y pastizales, puede haber resultados positivos inmediatos al convertir
las unidades ganaderas en sistemas agrícolas y ganaderos (García- Trujillo; Monzote,
1995 y Funes Monzote, 2001). La producción agrícola comercial especializada y la
rotación con el componente animal podrían favorecer el mejor uso de los recursos,
tales como los residuos agrícolas y los subproductos del procesamiento de los
alimentos.
En los sistemas integrados la rotación de cultivos y policultivos se desarrollan con
el fin de estimular la fertilidad natural del suelo, controlar las plagas, restaurarla
capacidad productiva y obtener mayor Uso Equivalente de la Tierra (UET); ello
Capítulo I: Fundamentación Teórica
17
demostró ser esencial para alcanzar altos niveles de producción y según Wright
(2005) se expandió por todo el país, especialmente en el sector cooperativo. Los
resultados de investigación y los datos reales de producción demostraron que los
policultivos y la rotación de cultivos podían aumentar los rendimientos en la mayoría
de los cultivos económicamente importantes (Casanova et al., 2001).
Estudios realizados por Funes-Monzote (2009) confirman que las fincas
integradas de una biodiversidad significativamente mayor, fueron también más
productivas y eficientes desde el punto de vista energético y mostraron mejor manejo
de los nutrientes que las especializadas, de pobres resultados en los indicadores
agroecológicos seleccionados. Se demostró que los dos rasgos primarios de los
sistemas integrados lo constituyen la multifuncionalidad y la biodiversidad, pues en
ellos los valores de los tres indicadores medidos fueron más altos (riqueza de
especie, diversidad de la producción y diversidad de árboles). También se comprobó
que los indicadores productivos fueron significativamente superiores en las fincas
integradas, ya que estas fueron de cuatro a seis veces más productivas, en términos
energéticos, que las especializadas y de tres a cuatros veces en cuanto a la
producción de proteína con un menor uso de insumos.
La agricultura sustentable con base agroecológica introduce la práctica de los
policultivos, en los cuales se obtienen simultáneamente un mayor número de
productos útiles, además de propiciar el reciclaje de lo que antes era considerados
residuos contaminantes, para beneficio de todo el agroecosistema. Así, una misma
superficie cultivada con este sistema puede producir una variada cantidad de
productos, la suma de los cuales puede sobrepasar varias veces el rendimiento total
obtenido con los métodos convencionales. Pérez Consuegra (2004) señaló que esta
agricultura sustentable es la más conveniente, tanto para los países desarrollados
como para los países en desarrollo, porque permite hacer un uso sostenible de los
recursos; incrementa los rendimientos de los cultivos sin la dependencia de los
insumos externos (semillas costosas, fertilizantes, plaguicidas y reguladores del
crecimiento, entre otros), reduce el uso de la energía y las emisiones de C02, estimula
el aumento de la biodiversidad y asegura la protección ambiental (Stockdaleet al.,
2001).
Capítulo I: Fundamentación Teórica
18
Autores como Brookfield y Padoch (1994); Gorfinkiel (2006), consideran la
agrodiversidad, como las diferentes maneras en que los productores utilizan la
diversidad natural del medio ambiente para la producción, incluyendo no solo su
opción de cultivo, sino también el manejo del suelo, el agua y la biota en su conjunto.
De hecho, el nivel de regulación interna de los agroecosistemas depende mucho del
grado de diversidad de plantas y animales y además, esa agrodiversidad es el
resultado de la interacción entre el ambiente, los recursos genéticos y el manejo, lo
que modifica su funcionamiento y permite mayor adaptabilidad a situaciones
extremas (Almekinderset al., 1995).
Las prácticas agrodiversas a pequeña y mediana escala, que ganen tiempo y
ahorren recursos, es un objetivo fundamental para dar respuesta a las inquietudes de
los agricultores, como lo es el caso del reciclaje de nutrientes y energía y la
producción de servicios ambientales. De esta manera se sientan las bases para una
agricultura más duradera y autosuficiente (Funes-Monzote, 2009). Este autor
demostró además que el uso más intensivo de los recursos naturales disponibles a
nivel de finca, mediante sistemas integrados, contribuye a la autosuficiencia
alimentaria, la obtención eficiente de productos comercializables y al incremento de
los ingresos familiares, sin degradar la base de recursos que los sostiene con un
impacto potencial grande. Al mismo tiempo, comprobó que las fincas más pequeñas
(menores que 10,0 ha) fueron más diversificadas, productivas, eficientes y usaron
mayores cantidades de fertilizantes orgánicos que las medianas y grandes. Esto fue
posible aproximadamente con los mismos niveles de insumos, aunque necesitaron
mayor intensidad de fuerza de trabajo humana. Mientras los indicadores riqueza de
especies, diversidad de producción y diversidad de árboles resultaron similares entre
las fincas medianas y grandes, fueron más altos en las menores.
I.5.1. Relación suelo-planta-animal-ecosistema
Los sistemas integrados agricultura-ganadería constituyen una alternativa
prometedora para el uso más sostenible de los nutrientes del suelo, del agua, de la
energía y de otros recursos naturales (NRC, 1989; Van Keulenet al., 1998). Mientras
los sistemas especializados convencionales cuentan con recursos fundamentalmente
Capítulo I: Fundamentación Teórica
19
del exterior (insumos), los sistemas diversificados e integrados hacen mayor énfasis
en la óptima utilización de los recursos locales disponibles.
La generación de la fertilidad orgánica enriquece e intensifica la relación suelo-
planta, produce una mayor estabilidad en el sistema que disminuye las pérdidas por
plagas y enfermedades. Los productos resultantes de la descomposición de
proteínas, carbohidratos y ligninas estimulan una diversidad de funciones de los
microorganismos. Se ha comprobado que la vida de las plantas no está desligada del
suelo. La degradación de los suelos se encuentra entre los problema más
apremiantes de la crisis alimentaria mundial y es más acelerada en las regiones
tropicales y subtropicales (Font, 2008), debido a las interacciones de las
características de los suelos y el clima, con las prácticas inadecuadas de manejo
agrícola.
El modelo agrícola integrado de baja demanda de insumos externos y alta
eficiencia con recursos locales, tales como abonos orgánicos y otros materiales que
contribuyan al mejoramiento del suelo, semillas rústicas, productos biológicos cara
combatir las plagas y las enfermedades, asociación de cultivos y la integración
ganadería-agricultura, permiten hacer un mejor uso de los recursos naturales (agua,
nutrientes y energía), sin recibir grandes volúmenes de recursos externos en forma
de insumos (Altieri, 2001).
La clasificación agroproductiva de los suelos tuneros es baja, según Hernández
(1999), y se ha visto afectada en los últimos 15 años por los efectos de la
desertificación y cambios climáticos en el territorio, lo que ha incidido en sus niveles
productivos (Castillo, 2008).
Lograr la armonía entre los componentes de los sistemas agropecuarios favorece
su estabilidad. Cuando no se logra interrelacionar e integrar los eslabones se pueden
apreciar daños que puede tomar años para recuperarse, por ejemplo, los animales
actúan perjudicialmente cuando no se realiza un manejo adecuado de las siguientes
formas:
Capítulo I: Fundamentación Teórica
20
Por pisoteo el animal compacta el suelo, disminuye la aireación e infiltración de
agua. El pisoteo provoca lesiones a las plantas. Además del daño a la planta en sí,
dichas lesiones significan una disminución del forraje cosechable.
a. Por alteración del balance natural entre especies por selectividad.
b. Por alteración en el crecimiento de las plantas por deyecciones.
La forma en que ocurre una óptima relación de los componentes suelo-pasto-
animal dentro de un sistema, es representado por un esquema detallado por (Crespo
et al., 2009). En él se distinguen los tres componentes principales de este sistema y
el complicado flujo y reciclaje de los nutrientes que ocurren entre estos componentes
(figura 1.1).
Figura 1.1. Sistema Suelo-Planta-Animal
Existen estimados que plantean que 1960 millones de personas dependen de la
ganadería para satisfacer, al menos, partes de sus necesidades diarias. En los países
en desarrollo, los animales constituyen una parte integral de los agroecosistemas y
Capítulo I: Fundamentación Teórica
21
proporcionan alimento, fibra, fertilizantes y combustibles; suministran el 60% del
trasporte en las comunidades rurales de todo el mundo y también seguridad
económica para los granjeros y las comunidades cuando las cosechas escasean
(Pérez y Álvarez, 2007).
I.5.2. El papel potencial de los árboles
Las plantas absorben los nutrientes asimilables del suelo para garantizar el
crecimiento y la reproducción. Una parte de esos nutrientes absorbidos son
translocados dentro de la planta y utilizados en varios eventos metabólicos. En el
pastizal, el ganado consume una gran proporción de las partes aéreas de los pastos y
es común encontrar una utilización que fluctúa entre 60-85%. Las ramas, hojas, tallos
y raíces senescentes, que constituyen la hojarasca, contribuyen también al reciclaje
interno de los nutrientes y ayudan a mantener la materia orgánica en el suelo (Crespo
et al., 2009).
En general, los árboles han sido subempleados en la agricultura, y aun cuando es
mucho lo que se ha escrito sobre sus virtudes (Smith, 1953, Douglas y Hart, 1976,
MacDaniels y Lieberman 1979), su potencial ha quedado relativamente inexplorado.
Ellos influyen sobre el resto de los componentes del sistema agrícola en virtud de su
forma y sus hábitos de crecimiento. Sus frondosas copas influyen en la radiación
solar, la precipitación y el movimiento del aire, mientras que sus extensos sistemas
radiculares llenan grandes volúmenes del suelo.
El sustrato o suelo donde crecen también puede ser alterado por la absorción de
agua y de nutrientes, la redistribución de estos últimos como desechos de hojas, al
igual que el movimiento alterado de las raíces y sus posibles asociaciones con
hongos y bacterias e incrementar la productividad animal.
Además, al incorporarlos en el manejo como cercas vivas perdurables y más
económicas, pueden aportar alimentos de gran valor nutritivo para el ganado y lograr
la auto sostenibilidad del sistema, propiciando la máxima recirculación de nutrientes y
la protección y mantenimiento del medio ambiente (Iglesias et al., 2007). Para lograr
Capítulo I: Fundamentación Teórica
22
la máxima respuesta socioeconómica y ecológica e incidir en la recuperación de
paisajes arbolados, se debe tener una visión de manejo integral de las fincas, lo cual
implica el diseño y manejo de diferentes usos de la tierra según su potencial
agroecológico.
Una de las más valiosas características de los árboles, es que muchos de ellos
producen un sinnúmero de productos diferentes e importantes para los humanos y
para los animales. No sólo son fuente de alimento y forraje, sino que también
proporcionan madera, subproductos tales como aceites y tinturas y se utilizan con
fines medicinales. El algarrobo (Rohiniapseudoacacia), por ejemplo, es una
importante planta para la producción de miel, fija nitrógeno y sirve para postes muy
durables. La Leucaena (Leucaena leucocephala), otra leguminosa con propiedades
para fijar nitrógeno es valiosa como alimento para aves y el ganado en las zonas
tropicales por su alto contenido de vitaminas y proteínas. Es asimismo, una fuente
importante de leña. Los árboles también pueden proporcionar un suplemento
importante a la producción de granos.
El empleo de los árboles en los sistemas pecuarios, es una tradición milenaria
que tiene uso directo en la producción animal, como lo es el caso de las leguminosas,
que aportan un alimento fibroso de mayor digestibilidad y contenido proteico y
disponible incluso en los períodos de mayor escasez de alimentos Rodríguez, 2007).
Este mismo autor plantea que el uso de los árboles mejora la fertilidad del suelo
debido a que son capaces de fijar nitrógeno y la hojarasca incrementa los contenidos
de materia orgánica, y a la vez la biodiversidad del ecosistema es mayor, al facilitar la
nidación de muchas especies de aves. Existen especies arbóreas que tienen un valor
alimenticio más alto en proteínas, carbohidratos y grasas que algunos de los granos
más comunes.
El agrosilvopastoreo es un conjunto de técnicas y procedimientos mediante los
cuales se manejan de forma racional y sostenible cultivos agrícolas y ganado de
diferentes tipos en asociación con los bosques, persiguiendo con ello el uso múltiple y
el rendimiento máximo de los terrenos forestales.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
23
Cuando se utilizan árboles leguminosos, como leucaena, piñones, algarrobos son
capaces de fijar al suelo parte del nitrógeno del aire, lo que puede significar
aproximadamente 100 kg de nitrógeno por hectárea al año, además de mejorar el
ambiente para los animales y extraer nutrientes desde lo más profundo del suelo
ofrecerlo como alimento. Entre los diversos tipos que conforman los sistemas
silvopastoriles los bancos de proteínas y las asociaciones múltiples de leguminosa y
gramíneas, son las más importantes en Cuba para producir carne y leche (Pedraza,
2005).
Los árboles, además de ofrecer ventajas ambientales que permite establecer
agroecosistemas productivos, sostenibles y amigables con el entorno, y es una fuente
alternativa de ingreso por concepto de leña o venta de semilla.
Las leguminosas, los árboles, los arbustos y los abonos verdes se utilizan con
gran efectividad para mejorar la fertilidad del suelo y elevar la calidad del alimento
animal (Lal, 2005). Al combinar especies de alta producción de biomasa con
leguminosas en diversos lugares, condujo a una mayor disponibilidad de nitrógeno,
estimuló la producción de humus y el secuestro del carbono (Poweret al., 2001;
Christopher y Lal 2007). Como resultado de la integración ganadería y agricultura los
residuos de cosechas son utilizados primero como alimento animal y la biomasa
rechazada se aprovecha como mulch o se incorpora al suelo.
I.5.3. Los animales en el Agroecosistema
El papel de los animales en los agroecosistemas resulta importante para la
agricultura y quienes la ejecutan. Sus papeles principales se relacionan con su
contribución al reciclaje de nutrientes y capacidad de transformar la fitomasa en
fuentes de alimentos y bienes de uso para el hombre. Según Muñoz (2003), sus
principales beneficios son: contribución a la fertilidad del suelo y el reciclado de
nutrientes, aprovechamiento de los residuos de cosecha y la vegetación espontánea,
los desperdicios de la alimentación humana y el área no cultivable, producción de
proteínas, grasas y otros recursos útiles (pieles, lana, plumas), aporte de energía
para el trabajo y el transporte (tracción animal), permiten aumentar los ingresos y el
balance financiero de la finca, posibilitan un mejor balance nutricional de la familia y
actúan como controladores biológicos de insectos y hierbas no cultivadas.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
24
Las excretas de los bovinos están compuestas por agua, hierbas no digeridas, y
por una variada población de microorganismos y los productos del metabolismo de
éstos. Las excretas contienen una gran cantidad de nutrientes que retornan al
pastizal. Estas pueden perderse por lavado, volatilización, escorrentía y erosión,
mientras que la lluvia, el agua de riego y la fijación biológica de nitrógeno producen
importantes entradas en el ecosistema de pastizal.
Se considera que más del 80% del N, P y K que consume el ganado vacuno se
devuelve de nuevo al pastizal mediante las deyecciones (bostas y orina). Por su
parte, en la orina la mayor parte de N y K se presenta en forma rápidamente
asimilable (Crespo et al., 2009). Los invertebrados coprófagos, principalmente los
escarabajos, las larvas de dípteros y las lombrices, desempeñan un importante papel
en la descomposición de las bostas al promover la aireación y la actividad
microbiana, así como su incorporación en el suelo.
I.6. Eficiencia y productividad de la agricultura sobre bases agroecológicas
Los sistemas especializados industriales, con menor agrodiversidad, tienen
muchas dificultades para lidiar con condiciones de bajos insumos y variaciones en el
clima, así como con las fluctuaciones en los mercados. Los sistemas agrícolas con
poca diversidad tienen también menos posibilidades de usar los recursos locales y
por lo tanto, son más dependientes de los insumos externos, lo que contribuye a su
vulnerabilidad socioeconómica (Funes-Monzote, 2009). Este mismo autor señaló, que
la agrodiversidad temporal (años de conversión) y espacial (diseño de la finca)
resultaron los principales factores para alcanzar una mayor productividad de la tierra,
y demostró, a su vez, la casi inmediata respuesta productiva de los sistemas
agrícolas a la diversificación.
Además, el empleo de los residuos de cosecha para la alimentación animal, así
como el uso intensivo de los abonos en las áreas de los cultivos y los forrajes, fueron
dos prácticas comunes en las fincas integradas que derivaron en un uso eficiente de
los insumos energéticos. Pero además, el empleo más intensivo de los terrenos de la
finca en la rotación de cultivos a lo largo del año, también contribuyó a la mayor
eficiencia energética, con una disminución proporcional en la fuerza de trabajo.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
25
Actualmente, la estrategia de desarrollo agrario local sostenible con bases
agroecológicas, incrementa la producción de alimento como respuesta a la crisis
económica mundial y a las afectaciones por el azote de fuertes huracanes. La
organización de estos programas parte de las fincas como unidad productiva más
simple y pequeña, donde se concreta la producción y es necesario hacer más
eficiente el trabajo como estructura básica de producción ajustada a estos tiempos
(Funes-Monzote, 2009).
Según Pérez Consuegra (2004), la causa principal de la pérdida de la diversidad
biológica agrícola es el monocultivo; al desarrollo de éste contribuyó la mecanización
temprana de las prácticas agrícolas, la cual se desarrolló como respuesta a la
escasez de mano de obra. El monocultivo genera, además, otras prácticas agrícolas
insostenibles como el uso de fertilizantes inorgánicos y de plaguicidas de síntesis
química, que provocan la modificación de las propiedades del suelo y contribuye a la
salinización, la acidificación, la erosión, la compactación y la disminución del
contenido de materia orgánica, y, como consecuencia, la desertificación y la pérdida
de tierras aptas para la agricultura.
I.7. Impacto ambiental de los sistemas agroecológicos
El hombre trasforma la naturaleza a medida que se desarrolla y va transformando
la naturaleza pero la naturaleza tiene sus leyes y no se puede revolucionar
impunemente. Es preciso considerar esas leyes como un conjunto, es necesario,
imprescindible y vital no olvidar ninguna de esas leyes (Castro, 1964).
El empleo de tecnologías costosas y altos insumos en la agricultura cubana, no
alcanzó las expectativas deseadas y tuvo impactos ambientales negativos,
reportados por el Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA,
1997). Entre las más significativas se encuentran:
Reducción de la biodiversidad.
Contaminación de las aguas subterráneas.
Erosión de los suelos.
Deforestación.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
26
En 1994 fue instituido el Programa Nacional para el Medio Ambiente y el
Desarrollo y dos años después fue aprobada la Estrategia Ambiental Nacional
(Urquiza y Gutiérrez, 2003). En 1997, la Ley de Medio Ambiente se convirtió en
política de Estado (Gaceta Oficial, 1997). A pesar de que la protección ambiental no
se practica con todo el rigor que se debiera, la ayuda gubernamental para preservar
el medio ambiente ha contribuido a que la agricultura cubana transite sobre bases
más sostenibles.
Actualmente existen grandes oportunidades para adaptar tecnologías agrícolas
integradas a nivel nacional, pues desde el inicio de la crisis económica la Asamblea
Nacional del Poder Popular reconoció la ineficiencia del modelo industrial centralizado
y comercial (ANPP, 1991). Se reconoció el impacto ambiental negativo del modelo
convencional, documentado oportunamente por el CITMA, que unido al progresivo
deterioro de la infraestructura de monocultivos, reforzaron los argumentos de una
agricultura sostenible a menor escala (Funes- Monzote. 2009).
Los principios fundamentales en los cuales se basa el desarrollo de una
agricultura sustentable en armonía con la naturaleza y la sociedad (IFOAM, 2011)
son:
Principio de salud: Debe sostener y promover la salud del suelo, la planta, el
animal, la persona y el planeta como una sola e indivisible.
Principio de ecología: Debe estar basado en sistemas y ciclos ecológicos
vivos, trabajar con ellos, emularlos y ayudar a sostenerlos.
Principios de equidad: Debe estar basado en relaciones que aseguren la
equidad con respecto al ambiente común y a las oportunidades de vida.
Principio de precaución: Debe ser gestionada de una manera responsable y
con precaución para proteger la salud y el bienestar de las generaciones
presentes y futuras y el ambiente.
En los sistemas con bases agroecológicas, los árboles, introducidos para varios
propósitos (sombra, cerca y alimento), desempeñan un papel importante en el
reciclaje de nutrientes, ya que actúan como una “bomba”, desde las capas más
Capítulo I: Fundamentación Teórica
27
profundas del suelo (Breman y Kessler, 1995), por lo que disminuye el uso de
insumos químicos contaminantes y hace que se logren producciones y servicios
ambientales a mediano plazo, de establecimiento del proceso de conversión
(Monzote et al., 1999). La contaminación de las aguas y del aire, la extensa
deforestación y la pérdida de los nutrientes del suelo a través de la erosión, son
algunos de los retos ambientales asociados a los efectos para vencer el hambre en
los países en desarrollo. La intensificación de los agroecosistemas y la conservación
de la naturaleza no son mutuamente excluyentes.
Estos resultados coinciden con lo informado por Vandermeeret al. (1998);
Tilmanef al., (2001), de que el aumento de la agrodiversidad proporciona importantes
servicios ambientales y al mismo tiempo aumentar la productividad de los sistemas.
En los trabajos realizados por Vargas et al. (2009), donde se analizaron las fincas
orgánicas, de transición y convencionales, se demostró que, en los sistemas
productivos cubanos, la forma más interesante es la de transición, que no pierde su
objeto social de producir alimento en grandes cantidades y tiene concientizado el
problema del calentamiento global y como disminuir las emisiones de efecto
invernadero, con la reducción del uso de insumos externos altamente contaminantes
y agregando un manejo agroecológico en la finca.
I.8. Indicadores de sostenibilidad
Los indicadores, constituyen una herramienta para agregar y simplificar
información de naturaleza compleja, de una manera útil y ventajosa; deben servir
como base para la elaboración de modelos económico-ecológicos y para el análisis
de impacto ambiental, estos deben ser:
Fáciles de medir y eficientes desde el punto de vista de los costos.
Permitir repetir las mediciones a lo largo del tiempo.
Ofrecer explicación significativa respecto a la sostenibilidad del sistema
observado.
Adaptarse al problema específico que se quiere analizar.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
28
Sensibles al cambio.
Facilitar información básica para evaluar las distintas dimensiones de
sostenibilidad (Pérez Consuegra, 2007).
En Cuba, por las condiciones actuales, la entrada de alimentos y fertilizantes al
sistema es muy limitada y en ocasiones nula, por lo que no existe una tecnología para
mantener un equilibrio entre las entradas y salidas del sistema. Se debe tener en
cuenta que cada tecnología obtiene sus mejores resultados según las condiciones del
suelo, clima y tipo de explotación, por lo tanto, lograr el uso eficiente de todos los
recursos locales y el humano como recurso fundamental (Pedraza, 2005).
El éxito de la aplicación de una tecnología en la producción comercial, depende
del control sistemático y eficiente de los índices fundamentales de sostenibilidad que,
simultáneamente, deben garantizar un impacto positivo, al detectar los problemas a
tiempo y aplicar las medidas correctivas necesarias. El impacto ambiental de una
tecnología no se corresponde necesariamente con el impacto final productivo, ya que
el impacto ambiental, generalmente, es a más largo plazo, exige técnicas muy
específicas para su evaluación y puede depender de factores que no siempre
controla el productor (Senra, 2007).
El indicador de productividad es definido por Spedding (1988), como la capacidad
que tienen los componentes del sistema (cultivos, animales y árboles) de capturar y
convertir los recursos naturales disponibles (energía, agua, nutrientes y diversidad
genética) en biomasa de plantas y animales. El valor final de este indicador es más
elevado en los sistemas integrados que los especializados.
Los trabajos realizado durante diez años en la conversión de un sistema
especializado a otro integrado por Funes-Monzote et al. (2009) demostraron que el
asunto no es simplemente si se utilizan altos o bajos insumos, o si la producción es
especializada o diversificada, sino las características específicas de los sistemas de
producción y la manera en que se manejan los insumos y la agrodiversidad. Las
fincas integradas se destacaron por tener mayor diversidad de la producción y por lo
tanto, mayor variación de la agrodiversidad, en tiempo y espacio, contribuyendo
grandemente a reducir los riesgos y elevar la productividad.
Capítulo I: Fundamentación Teórica
29
Una mayor proporción de áreas dedicadas a cultivos arables (45 y 75%) derivó
valores superiores de los indicadores de agrodiversidad (Funes-Monzote et al., 2009),
riqueza de especie, diversidad de árboles y diversidad de la producción y valores
mayores de productividad por unidad de área total, con 21,3 GJ/ha/año de salidas
energéticas y 141,5 kg/ha/año. A su vez, el uso de fertilizante orgánico fue más
intenso y se puso de relieve que el uso óptimo de los recursos, tanto para la
producción animal como agrícola, ayudó a alcanzar la autosuficiencia alimentaria, sin
degradar el medio ambiente en las fincas altamente heterogéneas e integradas.
Pereda et al. (2009) estudiaron diferentes niveles de integración ganadería-
agricultura (50:50; 90:10 y 70:30 respectivamente) y reportaron valores superiores de
los indicadores estudiado por años transcurridos, con rendimientos totales de 6,7; 8,1
y 4,0 t/ha/año y relaciones energéticas de 11,6; 14,4 y 7,3 calorías producidas por
invertidas al final del período, respectivamente. Estos resultados, aplicados a otra
finca, elevaron los rendimientos de 2,3 a 7,2 t/ha de producción total y valores en su
eficiencia energética de 8,3 calorías producidas por invertidas al final del quinto año
de trabajo.
Para el buen funcionamiento de pequeñas fincas es necesario aprovechar la
tierra al máximo, con el uso de la técnica y la sabiduría del agricultor local. Se ha
demostrado que cuando se cultiva un solo producto se puede obtener una gran
cantidad de cosecha de este producto, pero no se está usando el espacio ecológico
tierra-agua en forma eficiente, los surcos del cultivo tienen suelo libre entre ellos, que
pueden ser invadidos y aprovechado por varias especies del ecosistema (malezas).
Si por el contrario se intercalan cultivos, todo el espacio del nicho ecológico produce
algo útil en vez de requerir mayor inversión en mano de obra, dinero o herbicidas.
Podría parecer que la utilización del monocultivo es más productiva por unidad de
área, pero en el policultivo, se consideran otros productos que significan una
producción agrícola total mucho mayor por unidad de área y analizado como un
sistema, la integración de cultivos con la crianza de animales, el uso de estiércol
animal como fertilizante y el empleo de residuos agrícolas en la alimentación animal
propician una mayor sostenibilidad (Rosset, 2005).
Capítulo I: Fundamentación Teórica
30
La siembra en el policultivo debe hacerse de forma tal que involucre cultivos
diferentes en cuanto al nivel de exigencias de los principales factores de crecimiento,
nutrimentos, en el cual se produzca algún grado de competencia y no el uso de
especies con similitud de requerimientos, ya que podría afectar algunos de los
factores de crecimiento mencionados y por ende la exclusión de uno de los cultivos
(Vandermeer, 1998). En el uso eficiente de la tierra, las asociaciones de cultivos
constituyen la parte fundamental y son usadas para estimular la fertilidad natural del
suelo, controlar las plagas y las enfermedades y restaurar la capacidad productiva.
(Sotolongo et al., 2009) informaron que una hectárea con un marco de plantación
adecuado (1 000 árboles por ha), permite usar de manera más efectiva el área al
intercalar cultivos varios de ciclos cortos, ocupando un área de 0,72 ha y 0,28 ha con
los árboles forestales, por lo que el 72% de la tierra se dedica a la producción de
alimento con este modelo.
Tretoet al. (1997) demostraron que es posible implementar en la práctica fincas
agroecológicas y obtener rendimientos similares y, en ocasiones, superiores en
comparación con las fincas bajo métodos convencionales, así como obtener
ganancias económicas y mejorar la fertilidad natural de los suelos, se diversifica la
producción de la finca y se logra incrementar los rendimientos (promedio de 7 a 14
t/ha) en comparación con los sistemas convencionales. Como resultado de la
disminución de los plaguicidas los fertilizantes, y las superficies sin sembrar con el
uso de policultivos, se aumenta la producción total por hectárea con una relación
favorable de ingresos, gastos y utilidades, lo que incrementa la estabilidad económica
de los sistemas.
Capítulo II: Metodología Experimental
31
CAPÍTULO II. METODOLOGÍA EXPERIMENTAL
II.1. Metodología para la selección de la finca
El área por transformar abarcó una extensión de 84,0 hectáreas, de las
cuales 74,0 estaban dedicadas a la actividad pecuaria (pastos y forrajes en
malas condiciones), cuatro a la producción vegetal (sin explotación), dos
destinadas a la infraestructura de la finca y cuatro ocupadas por guardarrayas,
áreas de cercas y del río.
La selección de la finca se realizó a través de un Diagnóstico Rápido
Participativo (DRP), con la metodología utilizada en el Movimiento
Agroecológico de Campesino a Campesino (Sánchez, 2003), donde se tuvo en
cuenta las dimensiones agroecológica, social, económica y cultural (anexo 1),
mediante una encuesta informal a los productores. Se emplearon diferentes
elementos de los enfoques participativos de investigación, métodos de
investigación funcional e interactiva, la técnica de observación directa, talleres,
entre otros, realizadas a obreros y directivos de diferentes instancias de la
ANAP, MINAG y MINAZ (Tabla 11.1).
Tabla 11.1. Cantidad de participantes en los Diagnóstico Rápido
Participativo por organismos.
Organismos P H M Prof. TM 0 A E P
ANAP 15 14 5 5 2 4 45,1
MINAG 8 5 3 4 4 5 38,6
MINAZ 11 6 1 4 5 1 47,2
Total 34 25 9 13 11 10
P; Participantes. H; Hombres. M; Mujeres. Prof., Profesionales. TM; Técnicos Medios. O A;
Obreros agrícolas. E P; Edad Promedio.
El resultado del diagnóstico fue presentado y discutido con los participantes
mediante papelógrafos para establecer de forma rápida el orden de prioridad de
los problemas. Para ello se utilizó la matriz de doble entrada, una vez elaborada
se procedió a contar las veces que se repiten las demandas prioritarias, lo cual
Capítulo II: Metodología Experimental
32
recibe el nombre de frecuencia y a partir de esta frecuencia se le asigna un
rango, el cual refleja el orden de las prioridades de las innovaciones
seleccionadas por el campesino.
Con los problemas considerados y con un orden de prioridades, se procedió
a determinar cuáles eran las soluciones apropiadas para la entidad productiva.
El diseño experimental empleado se basó en un estudio de caso que tiene
un enfoque científico de sistema en el que los principios y prácticas de manejo
son replicables (Checkland, 1999). Se evaluaron datos de tres años y se
compararon las acciones y la evolución del sistema en cuanto a la integración
de la producción agrícola y ganadera, el ordenamiento productivo de la finca
para su óptima diversificación y la planificación del sistema.
Para lograr una rápida transformación de las áreas forrajeras y de pastos
mejorados, se decidió, a partir de enero del primer año, trasladar toda la masa
vacuna de esta área hacia otras zonas de la finca, efectuando para ello la
preparación de 35,0 ha de suelos en el primer año, mediante una preparación
convencional (rotura, grada, cruce, recruce y surca con bueyes), permitiendo
establecer en un periodo de ocho meses los pastizales de pangóla, bermuda
cruzada-1 (Cynodon dactylon), pasto estrella (Cynodon nlemfuensis) y guinea
común (Panicum máximum), así como de forrajes de king-grass y su clon CT-
115 (Pennisetum purpureum) caña de azúcar (Saccharumoficinarum).
Las áreas no transformadas en el primer año, se fueron transformando en
los años sucesivos hasta completar las hectáreas planificadas para el período
de estudio.
En el período seco fue necesario suministrar alimentos a los animales en
comederos, a razón de 35 kg de MV/animal/día, a base de kinggrass y caña,
con libre acceso de los animales al agua en cada cuartón. Además, la finca es
atravesada por un río que casi toda su rivera se encontraba deforestada, lo que
facilitó la erosión del suelo en sus orillas y mayor evaporización del agua. En el
período lluvioso la alimentación de los animales fue solo de pastos en los diez
cuartones con que contaba la finca.
Capítulo II: Metodología Experimental
33
Para una mejor atención de las áreas y animales se contó con dos obreros
agrícolas, los que realizaron las labores y rutinas diarias del ordeño. Se empleó
el sistema de amamantamiento restringido y el manejo y rotación de los
animales fue dirigido.
II.2. Ubicación de la finca en estudio
El estudio se realizó en la finca “Dos Palmas” en áreas de la UBPC
Combate de Levanon del Consejo Popular No. 9, de la localidad de Villanueva,
en la carretera a Manatí del municipio de Las Tunas, perteneciente a la región
oriental del país. Posee una altura de 48-50 m.s.n.m. Dicha finca se encuentra
rodeada de pequeñas y medianas fincas de campesinos, dedicados
fundamentalmente a la producción ganadera, además de frutas, viandas y
granos. Algunos poseen producciones de pastos y forrajes.
II.3. Caracterización de la finca según Diagnóstico Rápido Participativo
Según los resultados del diagnóstico rápido participativo realizado se pudo
conocer que, desde el año 1944 hasta el año 1961, las 84,0 ha objeto de estudio
se dedicaban al cultivo de la caña de azúcar, a partir del 1961 hasta fecha se
dedica a la ganadería, en sus inicios se explotaba con el ganado cebuino
(Bosindicus), Cebú. En el año 1965 se comienza a inseminar las hembras del
Cebú con la raza Holstein especializada en la producción de leche, donde se
obtuvo una masa de f1 (H x C) y se conformó una vaquería de 125 hembras
bajo plan de reproducción (100 vacas y 25 novillas). Así se mantuvo explotando
esta masa ganadera hasta el año 1985; en esta época se contaba con el cultivo
de pasto pangóla bajo condiciones de secano, donde se aplicaba150kg/N/ha al
año en el período lluvioso y se contaba con 25 cuartones, áreas forrajeras de
kinggrass y caña.
En este período se logró una natalidad del 75%, una producción de leche
entre 6-8 l/vaca por la buena tolerancia a los problemas ambientales.
Capítulo III: Resultados y discusión
34
El trabajo en la masa ganadera comenzó a decaer a partir del año 1985, con
una disminución del rebaño básico (hembra). En esta época se le suministraba
concentrados, mieles y sales minerales en el transcurso de los años 1985 - 1986
y a partir de aquí la masa fue cambiando y se comenzó a introducir animales
Siboney (5/8 Holstein x 3/8 Cebú), (5/8H x 3/8C). Los que no tienen la
adaptación de los anteriores genotipos (f 1) 7 y no mantuvieron la estabilidad
esperada en lo que respecta areproducción, intervalo parto a parto, lactancia y
producción de leche.
Este rebaño se mantuvo en explotación hasta la llegada del período
especial, donde se carece de fertilizantes, concentrados y medicamentos entre
otros.
El trabajo de genética y el sistema de control existente se fue perdiendo,
hasta los días actuales en que se mantiene una masa de vacas Siboney y otras
que se desconoce totalmente su árbol genealógico, al no existir los controles
estadísticos de su procedencia. Es también en este período donde comienzan a
degradarse los pastos por el mal o nulo manejo que se les dio. Por esta razón,
comienzan a brotar las especies indeseables y con menores rendimientos, más
adaptadas a las condiciones adversas, las que son menos palatables y ofrecen
una mayor resistencia a los animales en el campo.
II.4. Condiciones y características del sistema de producción
La finca contaba con un rebaño vacuno Mestizo Cubano, de doble
propósito, alimentado con pastos naturales de muy baja calidad, con predominio
de jiribilla (Dicantium caricosus), espartillo (Sporobolus indicus), camagüeyana
(Bothriochloa pertusa) y en menores proporciones se hallaban especies de
pastos mejorados tales como pasto estrella (Cynodom nlemfuensis) hierba de
guinea (Panicum máximum) y pangóla (Digitaria decumbens). En el sistema
existía una carga de 3 UGM/ha. El nivel de productividad y eficiencia existente
en la finca era de $ 1,75 por cada peso producido por lo que el sistema era
ineficiente. En la tabla II. 2 se refleja el estado de algunas de las áreas de la
finca al inicio de su transformación.
Capítulo II: Metodología Experimental
35
Tabla II. 1. Afectaciones de las áreas de la finca Dos Palmas
Afectaciones Hectáreas
Área con infestación de marabú (Dichrostachys cinerea) 9,0
Área con tendencia a la erosión (márgenes del río) 10,0
Área totalmente desforestada. 4,0
TOTAL 23,0
Para lograr la recuperación de las áreas afectadas por el mal manejo del
hombre y el efecto desbastador del aire y el agua, se aplicaron un grupo de
tecnologías sostenibles basada en la experiencia de los campesinos y
productores de mejores resultados en la producción. Para la recuperación de las
áreas infestadas por marabú se utilizó el control integrado de Ovino-Caprino,
con embalizamiento de las plantas cortadas en los cuartones de media
hectárea.
II.5. Características agroclimáticas
La finca cuenta con tres pozos profundos y fértiles, en los que se emplean
molinosde viento. En la mayoría de las áreas el nivel de las aguas subterráneas
se encuentra aproximadamente a un metro de profundidad. El tipo de suelo es
Fersialítico Pardo rojizo según la nueva versión de la clasificación genética de
los suelos de Cuba, (Hernández et al., 1999) de pH 5,8; bajos contenidos de
fósforo y materia orgánica, poco profundos, topografía llana con buen drenaje
interno y externo. Las condiciones climáticas históricas de la zona se exponen
en la tabla II. 3.
Como resultado del estudio del modelo propuesto se realizaron valoraciones
concretas de los componentes estructurales de un sistema, su relativa
autosuficiencia, agrobiodiversidad y su resilencia al cambio climático.
Capítulo II: Metodología Experimental
36
25.4
33,6
21,2
1 140,0
78.5
Tabla II.2. Comportamiento de las variables climáticas
Variables climáticas
Temperatura media anual (°C)
Temperatura máxima anual (°C)
Temperatura mínima anual (°C)
Precipitaciones media anual (mm)
Humedad relativa (%)
Fuente. Estación Meteorológica Provincial
II.6. Metodología general de análisis
El monitoreo de la información se realizó durante tres años consecutivos
(enero del primer año hasta diciembre del tercero),para evaluar temporal y
espacialmente los indicadores en estudio. Se cuantificó el número de especies e
individuos de cada una de estas durante el período de estudio y se
caracterizaron dichas especies de acuerdo a su funcionalidad dentro del sistema
como fue realizado por Funes-Monzote (2009).
Los indicadores empleados fueron riqueza de especies, diversidad de la
producción y diversidad de árboles. Se elaboró un modelo de análisis que guía
la investigación para la interpretación de los indicadores, así como su influencia
en la eficiencia y productividad del sistema, teniendo en cuenta la modelación de
sistema propuesta por Funes-Monzote (2009).
En la tabla 11.4 se describe el método de cálculo empleado con estos fines.
Para el cálculo de los índices de Shannon y Margalef, se consultó Gliessman,
(2006).
Capítulo II: Metodología Experimental
37
Capítulo II: Metodología Experimental
38
II.7. Estrategias implementadas
II.7.1. Sistema silvopastoril
Para un mejor establecimiento del sistema silvopastoril se realizaron las
labores dearado y grada con intervalo de 21 días entre una y otra labor, para la
siembra de la leucaena se escarificaron las semillas mediante inmersión en
agua a una temperatura de 80 C durante dos minutos. La siembra se realizó a
inicios de la primavera en los meses de mayo y junio, en surcos realizados con
bueyes a una distancia de un metro a doble hilera.
El silvopastoreo se estableció en 4 ha, con la combinación de especies
leucaena (Leucaena leucocephala) + guinea (Panicum máximum) +
pangola(Digitaria decumbens). Durante el establecimiento de este sistema que
abarcó un período de 8 meses, se intercalaron cultivos temporales tales como
yuca (Manihote sculenta); boniato (Ipomea batatas), girasol (Helianthusannus) y
sorgo (Sorghum vulgare) los que aportaron un valor agregado al sistema.
La poda de los árboles se ejecutó al final de la seca de forma escalonada,
por encima de un metro, con el objetivo de disminuir la competencia con la
gramínea, lo que facilitó el acceso de los animales a la biomasa comestible. No
se usó riego ni fertilizantes.
Para satisfacer las necesidades de alimentos de los animales, sobre la base
de los pastos y forrajes y lograr que el excedente que existiera en el periodo
lluvioso se conservara para la seca en forma de heno, se utilizó un método de
conservación rústico que consistió en cortar a machete todo el excedente de
forraje, se dejó en el campo por tres días y se le realizó un movimiento o volteo
cada 6 horas para lograr un buen secado y luego almacenar en forma de
pirámide.
Capítulo II: Metodología Experimental
39
II.7.2. Pedestales
Para la ubicación de los pedestales se tuvo en cuenta aspectos tales como,
cercanía de las instalaciones de la vaquería, la accesibilidad al lugar además de
las características edáficas, número de cuartones y planes de producción (leche
y/o carne).
II.7.2.1. Tecnología VERDEMAR
Esta tecnología se realizó en una hectárea con una orientación de este a
oeste, se utilizaron las especies de leucaena + glycine (Neonotoniawighti) +
guinea común. El establecimiento de ambas se basó en lo descrito por (Yañezet
al., 2003).
II.7.3. Reforestación
Para garantizar la reforestación de las áreas se realizó un pequeño micro
vivero con capacidad de producción de 10 000 posturas por año, en bolsas y a
raíz desnuda. Quienes fueron establecidas en todas las áreas de la finca. Se
tuvo en cuenta las necesidades primarias de conservación, tales como orillas
del río, cercas perimetrales, esquinas de poteros y otros.
II.8. Análisis de los datos
El análisis de los datos fue estadístico descriptivo y sebasó en un estudio'de
caso que tiene un enfoque científico de sistema en el que los principios y
prácticas de manejo son replicables (Checkland, 1999), se comparó con un
modelo conceptual (teórico) y otro real (práctico), donde se identificaron las
diferentes funciones de la agrobiodiversidad en relación con los indicadores de
productividad y eficiencia del sistema (Spedding, 1988; Checkland y Holwell,
1998; Schiere et al., 2002; Funes-Monzote, 2009)
.
Capítulo III: Resultados y discusión
40
CAPÍTULO III. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
III.1. Diseño de la finca integral
El Diagnóstico Rápido Participativo realizado en la finca permitió la
recopilación de datos referentes a la historia agraria de la finca, y seleccionar de
forma rápida las limitantes que los participantes consideraron como las
fundamentales y la matriz de doble entrada facilitó dar un orden de prioridad a
los problemas identificados, tabla 111.1.
Tabla III.1. Matriz de priorización de los problemas la finca
1 2 3 4 5 6
1 1 1 1 1 1
2 1 4 5 6
3 4 5 6
4 4 4
5 6
6
Leyenda:
1. Calidad de los pastos
2. Condiciones del ganado
3. Marabú
4. Deforestación
5. Baja fertilidad
6. Erosión
Los productores jerarquizaron los problemas; dándole un orden de prioridad.
Consideraron que la mala calidad de los pastos y la deforestación fueron los dos
de mayor impacto en el deterioro progresivo de la finca en estudio, mientras que
el marabú lo consideraron menos limitante dentro de este grupo tabla III.2.
Debido a la devolución de los resultados obtenidos y a su confrontación y
comparación con el propio análisis de los productores, el diagnóstico fue un
punto de partida en el proceso de formulación participativa del desarrollo de la
finca.
Capítulo III: Resultados y discusión
41
Tabla III.2. Orden de prioridades de problemas
Problemas Frecuencia Jerarquía
Mala calidad de los pastos 5 1
Condiciones del ganado 1 5
Marabú 0 6
Deforestación 4 2
Baja fertilidad 2 4
Erosión 3 3
El problema con más alta frecuencia (5) es el que se consideró de mayor importancia, y se le
asignólajerarquia número (1), así continua el orden de prioridades.
A pesar de que el marabú ha invadido el 10,7 % del área, su impacto es
atenuado por el hecho de que sirve de fuente alimentaria de ovinos y caprinos
que lo consumen sin rechazo.
La caracterización de los recursos del agroecosistema permitió la
optimización del uso de los espacios, un mejor aprovechamiento de
oportunidades y potencialidades productivas y considerar la implementación de
la rotación, la asociación y el intercalamiento de los cultivos. Con la aplicación
de tecnologías apropiadas para el mejoramiento de las áreas con limitaciones
se logró recuperar las 23 ha que se encontraban fuera de explotación, lo que
permitió restituir al suelos y al ecosistema gran parte de lo que se había perdido
con anterioridad tabla III.3.
Para revertir el proceso de degradación y comenzar a transitar hacia la
sostenibilidad, fue necesario construir un modelo de desarrollo sostenible que
requiere transformaciones útiles que incluyen las condiciones y estilo de vida,
los procesos sociales y económicos con la priorización del conocimiento local,
buscando conocer la historia de las comunidades incluso del medio ambiente
Sánchez (1994). Paneque y Calaña (2004) han señalado que es de gran utilidad
para mantener la capa vegetal del suelo, reducir la incidencia de malezas,
plagas y enfermedades, amortiguar el impacto de las lluvias y evitar serios
problemas de contaminación a las fuentes de agua.
Capítulo III: Resultados y discusión
42
Entre las acciones que mayor impacto logró el sistema, se destacó por su
importancia la utilización de la técnica campesina, del control biológico integrado
de ovinos y caprinos en el marabú, mediante el cual se logró incorporar al
sistema el 10.7 % del área y resultó de gran utilidad convertir esta planta
invasora, en una fuente de biomasa estable y beneficiosa para su uso como
combustible renovable, controlando su proliferación y recuperando tierras para
su cultivo (Leyva et al., 2009).
Las áreas afectadas por la deforestación y la erosión fueron recuperadas
mediante la forestación con especies de fácil adaptación en la zona, en las
laderas de arroyos y ríos se aplicó técnicas de arrope y barreras vivas con
especies de pastos adaptadas a estas condiciones de suelo.
Los resultados indican la efectividad de estas tecnologías sostenibles. Esto
significa que estas prácticas deben además tener un impacto local positivo y, al
mismo tiempo, demostrar soluciones válidas, confiables y relevantes, lo que se
ha evidenciado en este trabajo. Si se generalizaran en otras condiciones el
impacto puede ser mucho mayor al extenderse a otros ámbitos como municipio,
provincia o incluso país.
La diversificación de la finca y el uso óptimo de los espacios permitieron, en
un plazo de tres años, disponer de las instalaciones para la producción y el uso
múltiple de áreas marginales en funciones asociadas a la ecología y la
economía de la finca, una presencia arbórea en la que se integran los frutales,
las maderas, el pastoreo y la producción de alimentos.
Capítulo III: Resultados y discusión
43
Los resultados de la diversificación productiva y la agregación de valor a las
producciones estuvieron en correspondencia con oportunidades locales de
obtener ingresos económicos.
Flora et al. (2004a, 2004b); Gutiérrez Montes (2005) señalan que todas las
comunidades rurales, deben considerar la dirección racional de los recursos
para que los resultados en la economía, el ambiente y la equidad de la
comunidad sea satisfactoria. DFID (1999) propone para un diagnóstico integral
de una finca o comunidad considerar los capitales físicos, humanos, sociales,
financieros y naturales, los que en determinada medida están presentes en el
área estudiada.
Este estudio demostró que la restauración de la diversidad agrícola se
puede lograr con diferentes alternativas locales y la integración de los cultivos y
los sistemas de producción animal.
Ya en el primer año, se logró la transformación del 41,9 % del área de la
unidad, mediante la siembra y rehabilitación de un grupo de especies de pastos
mejorados, lo que junto a otros rubros se alcanzó un transformación final del
64,6 % tabla II 1.4.
Las hectáreas establecidas con especies pratenses y forrajeras de un alto
valor biológico permitieron incrementar los niveles de disponibilidad de
alimentos para el ganado y con ello la introducción de 110 vacunos en
desarrollo, los cuales se encontraban en un estado de salud crítico, con un peso
promedio de 90,0 kg y una edad de ocho meses, con los que se lograron niveles
de ganancia de 300 g/animal/día y un peso promedio de preceba de 120,0
kg/animal en un periodo de 150 días. En este término de tiempo se comercializó
un total de 19,5 t de carne en pie, a pesar del estado crítico de desnutrición en
que se encontraban los animales al inicio.
Capítulo III: Resultados y discusión
44
Tabla III.4. Evolución de la intervención transformadora de las áreas de la
unidad y las especies utilizadas
Año Especies Area (ha) % del área % del área
Silvopastoreo 4,0 4,8
Pasto estrella 19,0 22,6
Pangóla Común 3,5 4,2
1 CT- 115 3,0 3,6 41,9
Caña 3,0 4,2
Leucaena 2,0 2,4
Pangóla común 10,0 11,9
2 King-grass 4,0 4,8 16,7
3 VERDEMAR 1,0 1,2 1,2
Todos Cultivos Varios 4,0 4,8
los años 4,8
Total del área 54,0 64,6 64,6
El déficit de alimentos concentrados para los animales, la dramática
elevación de los precios de la leche, otros productos y la escasez de
combustibles fósiles que enfrenta el mundo, han estimulado el interés por el uso
intensivo de los pastos, forrajes y arbóreas para la producción integrada de
carne y leche, particularmente en el trópico americano (Ruiz, 2003). Esta
situación justifica la modelación diversificada de la finca ganadera en la que se
trabajó.
Las especies arbóreas que decrecieron significativamente en las áreas
pecuarias del país producto a los sistemas especializados de altos insumos, han
vuelto a constituir un elemento de vital importancia en los ecosistemas
ganaderos por sus variadas ventajas como sombra, alimento animal,
producciones agregadas de maderas, frutas, miel y otras, al conceptualizar la
finca o unidad agropecuaria orgánica como sistema holístico integrado, el árbol
juega un importante papel dentro de ella.
Capítulo III: Resultados y discusión
45
Un aspecto que avala la eficiencia alimentaria alcanzada con la
transformación es que en un corto periodo ya fue posible, además, entregar a
otras unidades de la UBPC, un volumen de 54,0 t de forraje verde, lo que
permitió alimentar a un grupo considerable de animales que sufrían de escasez
de alimento en una seca que duró más de 280 días.
El microvivero de la finca solo alcanzó la cifra de posturas planificadas en el
tercer año. La repoblación forestal se alcanzó principalmente con las especies
piñón de botija (Jatropha curcas), algarrobo (Samaneasaman) baria
(Gerascantusgerascantus), guásima (Guasumaulmifolia) y almácigo (Bucera
simaruba) cuyo aumento fue más notable, como recurso forestal, el suministro
del algarrobo tiene buena aceptación, resultado que coincide con lo expuesto
por Ribaski(2000), que su potencial reside en sus características de precocidad,
resistencia a la sequía y producción de madera de buena calidad para diversos
fines, además de la producción de vainas de elevada palatabilidad y valor
nutritivo, con la 3 ventaja de fructificar en la época seca tabla III.5.
El nivel de posturas producido satisfizo las necesidades de la finca, resultó
destacable la cantidad de postes vivos que se plantaron en las cercas
perimetrales. el excedente de posturas fue de 7 625 las que se comercializaron
a otras fincas de la UBPC, lo que permitió un incremento en los ingresos
económicos de $ 38 125,00 al final de los tres años de estudio, además del
beneficio ecológico como consecuencia de la reforestación de las fincas
colindantes (tabla III.6).
En la tabla III.7. se cuantifica la diversidad de árboles presentes dentro del
sistema después de la transformación, estando mejor representados los postes
vivos que brindan un valor apreciable a los animales en explotación así como a
la fauna silvestre de la zona, las abejas y otros beneficios.
Capítulo III: Resultados y discusión
46
Tabla III.5. Diferentes especies de árboles producidas en el vivero
No Especies 1 2 3 Total
1 Algarrobo (Samaneasaman) 200 400 1 500 2 100
2 Bambú ( Bambusavulgaris) 59 115 87 261
3 Guácima (GuasumaulmifoUa) 292 - 965 1257
4 Baria (Gerascantusgerascantus) 400 500 1 114 2 014
5 Caoba (Swieteniamahagoni) 27 54 155 236
6 Cedro (Cedrelaodorata) 13 43 69 125
7 Júcaro (Bucera bucera) 2 -- - 2
8 Mango (Manguitera indica) 20 - — 20
9 Guayaba (Piscidiumguajaba) 10 10 — 20
10 Aguacate (Persea americana) 63 60 100 223
11 Tilo (Moringa oleífera) 100 100 181 381
12 Almácigo (Bucera simaruba) 160 400 600 1 160
13 Piñón florido (Gliricidia sepium) 300 1 000 2 000 826
14 Ciruela (Spondiapurpuria) 10 28 90 128
15 Piñón de botija (Jatropha curcas) 300 100 2 000 3 300
16 Anón (annonasquamosa L) 34 75 200 309
17 Ateje americano (Cordia alba) 30 55 90 175
18 Anacahuita (Sterculiaapetala) — 30 -- 30
19 Coco (Cocos nucífera) 50 100 100 250
20 Chirimoya (Annonacherimolia) 20 50 150 120 21 Guanábana (.Annonamuricata) - 40 140 80
22 J ubaban (Trichiliahirta) 25 50 250 325
23 Jobo ( Spondiasmombin) 20 20 150 190
24 Mamey de santo domingo Mammea
americana)
15 15 100 130
25 Mamey colorado (Pouteriasapota) 20 - -- 20
26 Toronja (Citrus paradisi) 80 100 50 70
Total 2 181 3 245 10 091 15 517
La transformación a estos sistemas integrados, son estrategias de
producción diseñadas para promover una dieta más variada para el hombre y
los animales, nuevas fuentes de ingresos, estabilidad de la producción, uso
eficiente de la mano de obra.
El rescate, la siembra y establecimiento de especies arbóreas de diferentes
intereses económicos como alimento y madera, permitieron conservar y
devolver al agroecosistema aquellas que con anterioridad estaban presentes
pero que la tala indiscriminada había hecho disminuir. Existe una serie de
plantas melíferas donde se destacan el mango (Mangifera indica), piñón botija
Capítulo III: Resultados y discusión
47
(Jatropha curcas), piñón florido (Glyricida sepium), baria
(Gerancantusgerancantus), leucaena (Leucaena leucocphela), mamoncillo
(Melicocabejuga), varios tipos de cítricos (Citrus sinesis, Citrus aurantium y
Citrus lemonum).
Un efecto positivo logrado en este sistema es la diversidad de especies
arbóreas introducidas y rescatadas, permitiendo incrementar el número de estas
en 22 especies. Por su parte, el número de árboles por hectárea ascendió de 18
al que existían al inicio del estudio a 107 al final, lo que significa que su
población se incrementó en seis veces. (Anexo 3).
Esta densidad arbórea es comparable con los reportados por Simón (1999),
quienes señalan que en los sistemas de explotación ganaderos los niveles
óptimos de forestación deben alcanzar un rango de 90-120 árboles por
hectáreas, pero valores mayores pueden dañar el desarrollo de los pastos, por
lo que el nivel alcanzado puede considerarse óptimo.
Tabla III.7. Árboles según propósito presentes en el sistema al final del
estudio
No Nombre Comúr Nombre Científico Usos en la finca 1 Ateje Cordia alba Forrajes; Madera, sombra,
2 Algarrobo Albizialebbeck Forrajes; Madera,
alimentación animal.
3 Aguacate Persea americana Frutal, sombra
4 Almácigo Bursera simaruba Cercas vivas, miel
5 Almendra Terminaliacatappa Frutal, sombra
6 Anón Annonasquamosa Frutal
7 Bambú Bambusavulgaris Madera
8 Baria Gerascantusgerascantus Madera; miel
9 Caimito Chrysophyllumoliviforme Frutal, sombra
Capítulo III: Resultados y discusión
48
10 Cedro Cedrelaodorata Madera, sombra; miel 11 Ceiba Ceiba pentandra Madera, sombra; miel
12 Caoba Swieteniamahagoni Madera, sombra; miel
13 Chirimoya Annonareticulata Frutal, sombra
14 Ciruela Spondias purpurea Frutal, cercas vivas
15 Coco Cocos nucífera Frutal 16 Yagruma Cecropiapeltata Madera, sombra
17 Guasima Gu asuma ulmifolia Madera, forrajes, cercas vivas
sombra, alimentación animal.
18 Guanábana Annonamuricata Frutal, alimentación animal
19 Guayaba Psidiumguajaba Frutal, alimentación animal
20 Guinda dulce Pithecellobium dulce Frutal, sombra, alimentación animal
21 Jobo Spondiasmombin Frutal
22 Jubaban Trichiliahirta Sombra, Madera
23 Jucaro Bu cera bu cera Madera, sombra; miel
24 Limón Citrus limonum Frutal
25 Leucaena Leucaena leucocefala Cercas vivas, banco de proteína, I, silvopastoreo sombra, protección I suelo, miel
26 Mango Manguitera indica Frutal, sombra, miel
alimentación animal
27 Mamey
colorado
Pouteriasapota Frutal, sombra
28 Mamey santc
domingo
Mammea americana Frutal, sombra
29 Mamoncillo Melicoccusbijugatus Frutal, sombra, alimentación animal
30 Marañón Anacardiumoccidentaie Frutal, sombra, alimentación animal
31 Majagua Taliparitieiatus Madera, sombra, miel
32 Naranja agria Citrus aurantium Frutal
33 Naranja dulce Citrus sinesis Frutal
34 Níspero Eriobotryajaponica Frutal, sombra
35 Piñón botija Jatropha curcas Cercas vivas miel, forrajes
36 Piñón florido Giiricidia sepium Cercas vivas, miel, forrajes
37 Palma real Roystonea regia Alimento animal, madera
38 Palma Cana Sabalcausiarum Madera, alimento animal
39 Tilo Moringa oieifera Cercas vivas, miel, forrajes
40 Toronja Citrus paradisis Frutal
41 Tamarindo Tamarindus indica Frutal, sombra
La biodiversidad lograda beneficia la obtención de alimentos para la crianza
animal, en las diferentes áreas donde radican se crearon condiciones con la
siembra y establecimiento de árboles como: el ateje (Cordia alba), el mango, el
Capítulo III: Resultados y discusión
49
marañón (Anacardium occidentale), el mamoncillo (Melicoca bejuga), y
diferentes especies de anonáceas, que junto a otras como la guayaba (Psidium
guajaba) proporcionan alimentos de los que consumen estas especies y que se
recogen en la diversidad del sistema.
Un aspecto ambiental positivo lo proporcionó la aparición de especies de la
avifauna, entre las que se pueden mencionar la tojosa (Columbina passerina),
sabanero (Sturnella magna) torcaza (Palogioena senomata), tomeguines (Tearis
canora), zunzún (Mallisuga alinea), cernícalos (Falco sporverius), las que según
los vecinos de la zona no se veían desde hacía varios años.
Algunos estudios revelan aportes ecológicos de los usos de la tierra con alta
cobertura vegetal. Por ejemplo, Decker (2007) encontró 112 especies de aves
en un estudio a nivel del agropaisaje de la subcuenca Copán. Se evidenció que
los pastizales con alta densidad de árboles presentan riquezas de aves
similares a los bosques (más de 35 especies), lo cual confirma, al igual que
otros estudios en agropaisajes de Nicaragua y Costa Rica, la importancia de los
usos de la tierra con cobertura arbórea diversa para la conservación de la
biodiversidad.
Dentro de la transformación de la presencia arbórea en la finca, se debe
incluir el silvopastoreo. El establecimiento de un sistema silvopastoril de 4
hectáreas mediante la asociación de leucaena + guinea + pangola, hizo posible
la diversificación del sistema y mejorar la calidad de la dieta ofertada a los
animales, lo que se expresó en un mayor nivel productivo y de especies en la
finca.
Por lo general los sistemas silvopastoriles, además de proveer sombra y
alimentos ricos en proteína a los animales (Mac Dicken y Vergara 1990)
incrementan la producción y el contenido de nitrógeno de las gramíneas
asociadas, mejoran la estructura y permeabilidad de los suelos e incorporan
grandes cantidades de materia orgánica, funcionan como bombas extractoras
de agua y nutrientes desde las capas más profundas. Además la sombra
Capítulo III: Resultados y discusión
50
aumenta la actividad del suelo y mejora su capacidad de retención de agua
(Ørskov, 2005).La presencia de los árboles en los pastizales contribuye al
aumento de reciclaje y propician un microclima favorable para la diversificación
de la fauna de forma general. Según Hauser (1993) parte del beneficio aportado
es atribuido a la fauna del suelo asociada a los ellos.
La sostenibilidad del silvopastoreo racional se fundamenta en que con su
implantación se puede lograr un incremento en la rentabilidad de las unidades,
en sus producciones (principal y agregada), así como un efecto positivo en el
medio ambiente. Su impacto económico viene dado por los incrementos que se
obtienen en 1,5 a 2 veces la producción de leche y por la mejora de los
indicadores reproductivos de las vacas con una natalidad de más de 80%,
sustituyendo con este sistema importaciones de pienso y de leche. Esta
tecnología es válida para hembras en desarrollo, el mejoramiento de animales
en desechos con destino al sacrificio y para el ganado de cría.
En el contexto actual de América Central se presenta un interés creciente
por el diseño y manejo de sistemas silvopastoriles en paisajes dominados por la
ganadería para aprovechar los beneficios económicos y ecológicos. Desde el
punto de vista económico, los sistemas silvopastoriles permiten diversificar los
ingresos de las fincas y su capacidad de encajar las fluctuaciones de los
mercados y adaptación al cambio climático (especialmente a la sequía). En la
parte ecológica, se favorece la conservación de las fuentes de agua y el flujo
hidrológico (Ríos et al., 2007), coincidiendo con investigaciones realizadas por
(Souza y otros, 2010) en zonas del Bosque de Minas Gerais y Sáenz et al.
(2007), Enríquez et al., 2007) es de destacar la mejora de la calidad del suelo, el
aumento de la agrobiodivercidad y la recuperación y conservación de los
recursos hídricos; además del secuestro de carbono (Ibrahim et al., 2007).
Los largos años de experiencia de los agricultores han permitido el
desarrollo de agroecosistemas más sostenibles, tanto del punto desde el punto
de vista socio económico como ambiental (Cardoso y Ferrari, 2008).
Capítulo III: Resultados y discusión
51
Con el mejoramiento de la base alimentaria de los animales mediante la
transformación de los pastizales y el establecimiento de las especies arbóreas
multipropósito fue posible incrementar los niveles productivos tanto pecuarios
como agrícolas contar con una producción de carne en pie que se comercializó
a precios razonables en el mercado nacional, la producción de leche aumento
más de cuatro veces, las carnes disminuyeron en sus ventas por la estrategia
prevista en la transformación, pero la producción total aumento más de cuatro
veces con respecto al primer año tabla III.8
Los sistemas silvopastoriles ayudan a diversificar las fuentes de ingreso
familiar. Además de los productos animales (leche y carne), se obtienen
productos maderables para consumo local o venta, como madera de aserrío,
postes y leña (Pezo e Ibrahim, 1999). Estos resultados coinciden con Sheltonet
al. (2005) que plantean el uso de forrajes de árboles como suplemento puede
incrementar la producción de leche entre un 18 y 27% cuando la cantidad y
calidad de los pastos no es suficiente, según Souza (2002) y Restrepo et al.
(2004) señalan que la producción de leche y carne se incrementa en 10-15% en
potreros con alta cobertura arbórea en comparación con potreros de baja o nula
cobertura. Esto se atribuye al efecto de la sombra que reduce el estrés calórico,
especialmente en zonas de trópico seco, subhúmedo y húmedo.
Tabla III.8. Producción pecuaria (t/ año) en el sistema
PRODUCCION Años Total
PECUARIA 1 2 3
Leche 18,4 54,8 88,0 161,2
Carne bovina * 28,0 10,1 38,1
Carne ovino 1,3 0,8 0,8 2,9
Carne caprino 1,4 0,8 1,2 3,4
*No hubo ventas en este año.
Investigaciones desarrolladas en Cuba y América Central (Benavides, 1998;
Hernández et al., 2001) han reportado incrementos en la producción de leche y
carne, así como mejoras en el bienestar animal en los sistemas ganaderos tras
la introducción de árboles, sobre todo de leucaena y otras especies
leguminosas.
Capítulo III: Resultados y discusión
52
Se demostró en el período de estudio que las asociaciones de árboles y
pastos en una misma unidad de área es una opción viable para la ganadería
cubana, en producción de leche, lo que coincide con lo expresado por (Lamela
et al., 2004; Muñoz et al., 2004).
Ha sido demostrado experimentalmente que las hierbas mejoradas pueden
producir tantas unidades de alimentos por hectáreas como el maíz (Zea mays) o
las otras gramíneas de forrajes. Las hierbas producen forrajes a más bajo costo
por unidad de área y con mayores beneficios por unidad hombres/horas que el
terreno cultivado. Ellas pueden producir además heno y ensilado o heno para
silos, la mayoría de todos los alimentos requeridos para el ganado. Las vacas
lecheras pueden producir el 80% de la leche, de la que darían con los mejores
alimentos concentrados solo con los pastos mejorados. Durante el
establecimiento de este sistema, que abarcó un período de 8 meses, se
intercalaron cultivos temporales yuca, boniato, girasol y sorgo y dieron un valor
agregado y contribuyeron a satisfacer las necesidades de alimento de los
obreros de la unidad, además de comercializar el excedente. Así, en el tercer
año la producción agrícola que incluyen forraje, viandas, granos, frutas y
hortalizas, aumento en más de dos veces en el tercer año, con respecto a las
producciones obtenidas al final del primer año de transformación tabla III.9.
Como se puede apreciar existe una diversificación considerable de la
producción y al evaluar la sostenibilidad del sistema los 25 productos agrícolas y
pecuarios significan un indicador de importancia, que supero a lo reportado por
Pérez, Pérez-Osorio y Oquendo (2004), en una finca de 32 ha en la provincia de
Holguín durante 5 años, establecieron una producción diversificada con 17
productos de origen animal y vegetal.
Se comprobó que con el aumento de la agro biodiversidad se eleva la
autosuficiencia alimentaria, lo que se repercute en una mayor producción de
energía y proteína en el sistema; y confirman el potencial que tienen los
sistemas integrados ganadería - agricultura para enfrentar las limitaciones
productivas de las regiones tropicales (Funes et al., 2001) y las urgentes
Capítulo III: Resultados y discusión
53
limitaciones ambientales, económicas y sociales actuales del desarrollo agrícola
sostenible, ya que aumenta la agro diversidad y proporciona importantes
servicios ambientales aumentando la productividad de los sistemas
(Vandermeeret al., 1998 y Tilmanet al., 2001), se demostró que la integración de
cultivos y ganadería dentro de los sistemas de producción diversificados para
crear sistemas integrados de producción es una de las alternativas para reforzar
el modelo alternativo cubano con un enfoque más poderoso, tanto sistémico
como ecológico.
Tabla III.9. Producción agrícola (XI año) en el sistema
PRODUCCION
AGRÍCOLA
1 2 3 Total
Maíz seco 2,9 * * 2,9
Maíz verde 16,0 * * 16,0
Calabaza 2,3 * * 2,3
Girasol 4,5 * * 4,5
Sorgo 1,0 * * 1,0
Boniato 8,5 8,0 * 16,5
Plátano Burro 8,0 10,0 11,5 29,5
Fríjol 2,2 * 1,0 3,2
Yuca 3,2 3,0 4,2 10,4
Pepino * 4.1 4,3 8,4
Pimiento * 10,0 13.2 23,2
Tomate * * 14,2 14.2
Guayaba 4,2 4,8 6,3 15,3
Limón 1,0 1,1 1,8 3,9
Coco 7,1 7,4 8,3 22,8
Naranja dulce 3,2 4,8 5,9 13,9
Mango 9,2 9,7 10,5 29,4
Aguacate 6,0 6,8 8,9 21,7
Forrajes 459,8 935,6 1 019,6 2 415,0
Leña 21,2 37,2 51,8 110,2
Total 560,3 1 042,5 1 161,5 2 764,3
* Áreas ocupadas por otros cultivos en rotación o policultivos.
Capítulo III: Resultados y discusión
54
III.2. Impacto ecológico
Las estrategias de diversificación agroecológica tienden a incrementar la
biodiversidad funcional de los agroecosistemas, una colección de organismos
que tienen funciones ecológicas claves. Las tecnologías promovidas son
multifuncionales en tanto su adopción implica, por lo general, cambios
favorables simultáneos en varios componentes y procesos agroecológicos,
incrementan la entomofauna benéfica, activan la biología del suelo, mejoran el
nivel de materia orgánica y con ella la fertilidad y la capacidad de retención de
humedad del suelo, más allá de reducir la susceptibilidad a la erosión (Altieri,
1995).
Los del presente trabajo concuerdan con los de Funes-Monzote et al.,
(2009) al reconocer la capacidad que tienen los sistemas integrados,
diversificados, de obtener producciones con alta eficiencia biológica, productiva,
económica, energética y ambiental, al mismo tiempo que garantizan la
conservación y correcta utilización de los recursos naturales, reducen la
contaminación ambiental, evitan la degradación de los suelos y suministran
alimentos sanos y abundantes para la población.
Se demuestra además que estos resultados se corresponden con
Rodríguez (2007) al lograr mejoras en la fertilidad del suelo, por la capacidad
que poseen de fijar nitrógeno y la hojarasca incrementa los niveles de materia
orgánica, al mismo tiempo aumenta la biodiversidad del ecosistema al facilitar la
nidación de muchas especies de aves y ventajas ambientales que permitan
establecer agroecosistemas productivos, sostenibles y amigables con el
entorno.
La biodiversidad lograda en la finca permite plantear la positiva estabilidad
ecológica y económica que debe tener el agroecosistema, asegurado en la
medida que se alcance un manejo adecuado del suelo, los cultivos y los
animales.
Capítulo III: Resultados y discusión
55
II.3. Manejo integrado de la nutrición
La producción de materia orgánica, en la que se incluye el humus y los
residuos, tuvo un aumento creciente desde el primer año con respecto al tercer
año, el que se triplicó el humus y los residuos aumentaron más de dos veces.
Además, con los residuos se produjo una pequeña cantidad de compost
adicional tabla 111.10.
Tabla 1. Producción de materia orgánica (t) para la fertilización de las
áreas.
Años Residuos Humus producido
1 52,0 13,1
2 96,7 24,1
3 125,2 38,6
Con los resultados se demuestra que es posible reducir los fertilizantes
químicos y aumentar la capacidad de utilización de fertilizantes orgánicos (Lal,
et al., 2007), las buenas prácticas de manejo y de recuperación de los suelos,
como la siembra de árboles, leguminosas y arbustos los que se utilizan con gran
efectividad para mantener e incluso incrementar la disponibilidad de materia
orgánica; mejorar la fertilidad del suelo y elevar la calidad del alimento animal.
Se corresponden estos resultados con los reportados por Lal (2005), con la
aplicación entre 4 y 6 t/ha de compost y vermicompost que favorecieron el
contenido de materia orgánica de los suelos.
Una buena integración ganadería - agricultura a través de producción de
castos y arbóreas en la misma parcela, permite producir una mayor cantidad de
sconos orgánicos. La acumulación de la fertilidad natural producida por el
terreno, en los pastos y los árboles, se valoriza de manera óptima con la
producción de materia orgánica regenerando nutrientes y ayuda a la
conservación de sus características físicas, químicas y biológicas (Apolliny
Cristophe, 1999).
Capítulo III: Resultados y discusión
56
El uso del estiércol animal es un objetivo importante en la gestión de
nutrientes en los sistemas integrados ganadería-agricultura, si el objetivo final
es la correcta utilización de los recursos que se disponen, en el presente estudio
se demostró que los sistemas diversificados e integrados hacen mayor énfasis
en la óptima utilización de los recursos locales disponibles.
III.4. Indicadores de diversidad
Los indicadores de biodiversidad seleccionados abarcan tres aspectos:
riqueza t especies, diversidad de la producción y diversidad de árboles, los que
tuvieron un incremento sostenido sobre todo en la diversidad de producción
tabla III.11.
Tabla III.11. Comportamiento de los indicadores agroecológicos y de
productividad de la finca.
Indicadores Índices Sistema de producción
Inicio 1 2 3
Riqueza de especies Margalef 1,9 2,5 4,8 6,2
Diversidad de árboles Shannon 1,4 3,1 3,5 3,9
Diversidad de la producción Shannon 0,23 0,57 1,5 2,7
La riqueza de especie medida a través del índice de Margalef, que combina
el número de especies en el sistema con el número de individuos por especies,
que a inicios de la transformación fue de 1,9 alcanzó valores de 2,5; 4,8 y 6,2 en
correspondencia con los años estudiados, estos valores aumentaron de forma
significativa y específicamente en la cantidad de especies de plantas
comparado con el inicio del proceso de conversión, estrechamente asociado a
la diversidad de la producción. Este índice proporciona una medida más
significativa de la diversidad a nivel de la finca.
Comparando los resultados con los obtenidos por Funes-Monzote (2009)
quienes reportaron índices de 9,1 y 10,4 en fincas integradas, los valores
logrados en la finca Dos Palmas son inferiores, pero continua la tendencia al
incremento por lo que se espera alcanzar índices superiores en la medida que
aumente el período de conversión.
Capítulo III: Resultados y discusión
57
Los resultados del presente trabajo demuestran que la biodiversidad vegetal
desempeña un papel importante en la diversificación del sistema, y tiene un
efecto positivo en su productividad en lo que se refiere a rendimientos
energéticos y proteicos y se cumple el principio demostrado por Breman y
Kessler (1995) acerca de que las raíces profundas bombean los nutrientes del
subsuelo y contribuyen sustancialmente al reciclaje hacia las capas
superficiales. Los valores alcanzados se corresponden con los reportados por
Funes-Monzote (2009) que logro índices entre 1.5 y 1,7 en fincas integradas. No
obstante, estos resultados demostraron que su utilización como cercas vivas
perdurables y más económicas, pueden aportar alimentos de gran valor nutritivo
para el ganado y lograr la auto sostenibilidad del sistema, propiciando la
máxima recirculación de nutrientes y la protección y mantenimiento del medio
ambiente, y se concuerda con iguales resultados obtenidos por Iglesias et al.
(2007).
En la transformación de finca se obtuvieron buenos índices de diversidad de
árboles que en el inicio fue de 1.4 se logró incrementar a (2,2; 3,5 y 3,9)
respectivamente. La diversidad de la producción a inicios del primer año fue de
22 y se logró aumentar a (0,75; 1,5 y 2,7) respectivamente. Los resultados
obtenidos concuerdan con Gliessman (2001) en que los valores del índice de
Shannon tienden a ser mayores cuando la distribución de especies e individuos
es más equitativa, y para los ecosistemas naturales relativamente diversos
puede ser tres y cuatro.
De hecho, los resultados indican que los árboles, como componentes
importantes en la diversificación de los sistemas integrados, tuvieron un efecto
positivo en la productividad del sistema en lo que se refiere al rendimiento de la
finca multifuncionalidad de los árboles que brindan sombra, aportan forrajes y
frutos, fijan nitrógeno atmosférico, reciclan nutrientes, abaratan el costo de los
cercados, conservan y mejoran el suelo, la vegetación herbácea, protegen el
potencial híbrido del lugar y sirven de hábitat a muchas especies de animales, lo
concuerda con lo planteado por Paretas (2001) que constituyen verdaderas
joyas dentro de un sistema diversificado lo que coincide con los resultados
Capítulo III: Resultados y discusión
58
obtenidos por Hernández et al. (2001) quienes reportaron incrementos de las
producciones de leche y carne y mejora en el bienestar animal con la
introducción de árboles en los sistemas.
Debido a la influencia de los árboles como mejoradores del entorno y la
creciente importancia que se le concede al recurso forestal dentro de las
estrategias y acciones orientadas a la protección del medio ambiente,
especialmente en la esfera agropecuaria, la diversidad arbórea con potencial
agrosilvopastoril existente en la finca, valora la riqueza y abundancia
proporcional de estas especies, en el papel que éstos desempeñan dentro de
los agroecosistemas.
En sentido general, en la finca las áreas de sombras son abundantes para
los animales en explotación vacunos, ovino-caprino, por lo que no están
expuestos a estrés de calor durante el día, siendo este factor favorable en los
niveles productivos.
Algunas especies de árboles y arbustos forrajeros, además de producir gran
cantidad de follaje, presentan buen balance de nutrientes y pueden contribuir a
reducir la dependencia de insumos importados para la alimentación del ganado.
Según Pérez (2003), resultan superiores al de concentrados comerciales
comúnmente usados en la alimentación vacuna.
Los sistemas integrados y diversificados que combinan cultivos, ganado y
árboles ofrecen considerables oportunidades para la sostenibilidad de los
agroecosistemas y la eficiencia en el uso de los recursos internos y externos
(Prettyet al., 2006; Gilleret al., 2006; Herrero et al., 2007).
Los resultados corroboran que a mayor diversidad de plantas y animales y
como resultado de su interacción con el ambiente, los recursos genéticos y el
manejo, los sistemas integrados posen mayor adaptabilidad a situaciones
extremas, por una mayor resiliencia (Almekinderset al., 1995) y por
consiguiente, la sostenibilidad agroecosistémica (Altieri, 2002; Tilmanef al.,
Capítulo III: Resultados y discusión
59
2001), además de desempeñar un papel importante en el reciclaje de nutrientes
y sus producciones y servicios ambientales se logran a partir del tercer año de
establecimiento (Monzote et al., 1999). Esta agrodiversidad favoreció el control
de plagas a través de los cultivos perennes, como los pastos naturales, que
actúan como hospederos alternativos para los controladores de las plagas
agrícolas (Vandermeeret al., 1998) y de esta forma se logra la sostenibilidad del
sistema.
La integración ganadería-agricultura, permite producciones con una alta
eficiencia biológica, productiva, económica, energética y ambiental (Funes-
Monzote et al., 2009). Los resultados expuestos dan fe de la anterior afirmación
porque se producen alimentos sanos y abundantes y se combinan con el uso -
racional de los insumos, lo que propicia mayores ingresos a la finca y mejoras
en el bienestar de los trabajadores. Se demuestra, además, que las ventajas de
los sistemas basados en la diversidad reside fundamentalmente en que su
diseño permite una integración armónica y funcional entre sus componentes y
que con una mayor proporción de tierra dedicada a cultivos, se obtienen valores
más altos en los índices de agrodiversidad.
III.5. Indicadores de productividad
El sistema diseñado, tuvo como fundamento esencial la biodiversidad,
concibiendo el desarrollo rural ligado a las tradiciones de la localidad. Su
multifuncionalidad lo hace capaz de adaptarse a las fluctuaciones del cambio
climático y condiciones socioeconómicas imperante en el lugar como señalan,
Rosset (1999) y Ríos et al.(2011).
La diversidad de las producciones mostró valores positivos en cuanto a la
cantidad producida por años (tabla III.12), en el subsistema pecuario, el valor
total de la producción fue de $ 363 501,10 en el periodo de estudio, con la
introducción de nuevas especies de árboles, pastos y forrajes y se cumplió con
los indicadores de eficiencia productiva y en el sistema, según Altieri (2009) el
incremento de reducciones de forrajes proteicos y energéticos de manera
Capítulo III: Resultados y discusión
60
intensiva, así como el jso de residuos de cosecha dentro de la finca o en sus
alrededores, puede icrementar la autosuficiencia de alimento animal del
sistema.
Tabla III.12. Producción mercantil pecuaria de la finca Dos Palmas
Producción Año 1 Año 2 Año 3 Total
Pecuaria S
Leche 18 396,00 54 760,00 87 965,00 161 121,00
Carne bovina * 73 952,10 32 881,00 106 833,10
Carne ovino 20 963,00 13 163,00 13 163,00 47 289,00
Ca^e caprino 14 625,00 13 163,00 20 470,00 48 258,00
Total 53 984,00 155 038,10 154 479,00 363 501,10
* No hubo ventas en ese año.
Los sistemas basados en la producción de pastos y forrajes presentan una
mayor eficacia energética por su alta captación de energía solar para convertirla
en biomasa (Skerman y Riveros, 1992).
Al realizar el análisis de los volúmenes de producción agrícola obtenidos
durante el período de conversión evaluado en de la finca Dos Palmas, se
observa una tendencia al aumento, donde el valor total de la producción fue
$807 831,34 lo que es muy significativo. Según Fonseca y Vázquez (2004) la
díversificación de la producción es la vía más certera para obtener buenos
resultados económicos y vos. lo que se demostró en este estudio, ya que la
relación costo beneficio disminuyó de $1.75 al inicio de la transformación a 0,64
centavos al concluir este trabajo (tabla III.13).
La evaluación económica de las producciones del sistema agroecológico
diversificado e integrado, permitió que los trabajadores y directivos conozcan las
necesidades del sistema y valoren un grupo de decisiones para que el sistema
logre una sostenibilidad y resilencia acorde a su desarrollo actual, disminuyendo
insumos del exterior mediante el mejor aprovechamiento de los recursos
internos que posee la finca y una mayor organización del sistema productivo
(tabla 111.14).
Capítulo III: Resultados y discusión
61
Tabla III.13. Producción mercantil agrícola de la finca Dos Palmas.
PRODUCCION Año 1 Año 2 Año 3 $ Precio $ Valor
AGRÍCOLA unitario Total
Maíz seco 12 609,20 * * 200,00 qq 12 609,20
Maíz verde 52 170,00 * * 150,00 qq 52 170,00
Calabaza 4 500,00 * * 0,90 Ib 4 500,00
Girasol 8 804,70 * * 0,90lb 8 804,70
Sorgo 2 934,90 * * 1,33.00 Ib 2 934,90
Boniato 15 652,80 16 631,10 * 1.00 Ib 32 283,81
Plátano Burro 8 696,00 10 870,00 12 500,00 0,50 Ib 32 066,50
Fríjol 28 696,80 * * 600,00 qq 28 696,80
Yuca 3 478,40 3 161,00 4 565,40 0,50 Ib 11 304,80
Pepino * 8 913,4 9 348,2 1,00 Ib 18 261,60
Pimiento * 65 220,00 88 090,40 300,00 qq 151 310,40
Tomate * * 30 979,50 1,00 Ib 30 979,50
Guayaba 8 217,70 9 391,70 12 326,58 0,90 Ib 29 935,98
Limón 1 274,00 3 587,10 4 239,30 1,50 Ib 7 848,14
Coco 18 522,50 19 305,12 21 653,04 1,20 Ib 59 480,66
Naranja dulce 3 478,40 5 217,60 6 413,30 0,50 Ib 15 109,30
Mango 16 000,60 16 870,20 18 261,60 0,80 Ib 51 132,24
Aguacate 13 044,00 14 783,20 19 348,60 1,00 Ib 34 262,24
Forrajes 32 186,00 65 492,00 71 372,00 70,00 t 169 050,00
Posturas 1 650,00 6 750,00 29 725,00 * 38 125,00
Total 232 816,00 2 461 92,42 328 822,92 807 831,34
Aquí se confirma la validez del postulado que avala la hipótesis de esta
trabajo donde se afirma que la conversión hacia estos sistemas permite utilizar
los recursos localmente disponibles y es una herramienta fundamental para el
diseño de estrategias de manejo agrícola y ganadero, y está encaminada a
incrementar a productividad del trabajo, la mejor utilización de los recursos,
mejorará la productividad y eficiencia del sistema a la vez que tendrá un impacto
positivo en la calidad de vida de los trabajadores, y la conservación y
mejoramiento del medio ambiente.
Capítulo III: Resultados y discusión
62
Tabla III.14. Análisis financiero de la finca en el periodo de estudio.
Análisis financiero Cantidad ($)
Ingresos agrícolas (1) 807 831,34
Ingresos pecuarios (2) 363 501,10
Otros ingresos (3) ¨¨¨¨¨¨¨¨¨¨
Total ingresos (4) 1 171 332,00
Gastos agrícolas (5) 265 877,00
Gastos pecuarios (6) 378 625,85
Otros gastos (7) ¨¨¨¨¨¨¨¨¨¨¨
Total gastos (8) 744 503,08
Resultado 426 829,00
Relación costo/beneficio 0,64
Nota: Resultado = (1 + 2 + 3 + 4) - (5 + 6 + 7 + 8);
Relación costo/beneficio = Total de gastos / Total de ingresos
De esta forma se puede valorar el comportamiento de la producción
agropecuaria de la finca lo que contribuyó de forma importante en los resultados
económicos, lo cual coincide con los resultados alcanzados por Jovaet al.
(2001) en sistemas integrados de producción agropecuaria gráfico III 1.
Capítulo III: Resultados y discusión
63
El desarrollo de actividades que generen ingresos, diversifiquen la
producción, priorice el uso de recursos naturales disponibles, minimice los
insumos externos, promueva la agricultura familiar, aplique las tecnologías
ecológicas traerá consigo a factibilidad económica.
La transformación social continuará evolucionando con el tiempo en la
implantación del sistema pues constituye la fase más avanzada del proceso lo
que supone dotar a las dimensiones productiva, socioeconómica y cultural de un
contenido sociopolítíco al considerar la realización de actividades conjuntas
investigador- agricultor para el diseño participativo de acciones productivas y de
cambio social que mejoren su nivel de vida (Sevilla y Martínez, 2004).
Conclusiones
64
CONCLUSIONES
La integración agrícola-ganadera, con la introducción de árboles,
constituyó una alternativa para reforzar el modelo agrícola de la finca "Dos
Palmas” con la participación incrementada de los indicadores de diversidad
evaluados que favorecieron su conversión agroecológica.
Los resultados generales demostraron que los sistemas diversificados e
integrados poseen un alto potencial para lograr niveles de productividad y
eficiencia en el uso de los recursos locales, lo que contribuyó a la seguridad
alimentaria y a una mayor sostenibílidad y resilencia a factores externos.
El equilibrio que permite este modelo productivo lo hace sustentable en la
medida en que se consolida en el tiempo.
Recomendaciones
65
RECOMENDACIONES
Establecer un programa de capacitación que permita a los productores de
la finca y de la UBPC la implementación de tecnologías introducidas.
Sugerir a la dirección de la agricultura la socialización de los resultados.
Continuar aplicando y perfeccionando tecnologías y modelos de sistemas
agroecológicos para incrementar la diversificación, eficiencia y productividad,
así continuar la evaluación a largo plazo los resultados de la conversión
iniciada, a través de los indicadores definidos y otros que incorporen el uso de
los recursos locales para la sustitución posible de los insumos externos con
énfasis.
En los forrajes energéticos y proteicos de pastos mejorados y árboles, así
como granos y plantas medicinales para la alimentación y salud animal.
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