teatro para lambayeque
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TEATRO PARA LAMBAYEQUE
Lima 15 de febrero de 2012
© Copyright 2012 Francisco Echeandía: La Mar 422, Dpto. 502, Miraflores, Lima 18, Perú. Teléfono (511) 986 726 624. Correo electrónico: [email protected]
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El trabajo dedicado e incansable de Paco
Echeandia en su labor teatral es admirable.
Su sensibilidad e identificación con Pimentel, su lugar de nacimiento, ha sido un tema
constante en sus obras. El “Pez de Oro” fue
una obra motivada en ese universo y que en su lenguaje simple y mágico caló muchísimo en
nuestra escena.
Paco es un soñador, en tiempos donde la utilidad, el escepticismo y lo concreto parece
imperar. Una persona dedicada de lleno al
teatro y por el que apuesta constantemente. Su inquietud y búsqueda plantean siempre riesgos
en sus obras. El tipo de artista que tanto se
necesita en nuestro teatro.
Jorge Villanueva Bustios
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TEATRO Y CULTURA REGIONAL: DOS PROPUESTAS QUE VIENEN
DEL NORTE
Wili Pinto Cárdenas
El aporte de Paco Echeandía y sus compañeros ha sido doble: tomar textos sugerentes, que en la cultura oficial por lo general son relegados,
por no provenir de “sectores conocidos” de la producción literaria, y
producir con ellos dos atractivos montajes. Así, la cultura regional norteña y su propuesta teatral, nos marcan un norte estimulante.
El Pez de oro
Tuve la suerte de ver el montaje de la obra El pez de Oro, con la
adaptación y dirección de Paco Echeandía y la actuación de Sofía Rebata, Ángelo Sandoval y Raúl Durand.
Un montaje sugerente, austero, cargado de sensorialidad y apoyado principalmente en el trabajo de los actores. Una historia de amor que va
más allá de lo obvio y logra explorar desde la especificidad del contexto
socio-cultural del pueblo de Pimentel, aspectos del alma humana que
traspasan espacios y tiempos. La propuesta transmite acción, atmósferas y matices a partir de la
presencia física de los actores, su interioridad y el uso plástico y
creativo de una red y un petate. En este caso, la sencillez es una virtud que nos lleva a lo esencial.
El trabajo actoral y los objetos manejados de manera polivalente, nos remiten al universo de la caleta norteña, a sus paisajes, su cultura y a
las relaciones de sus habitantes. Con el trasfondo de una Historia
signada por el estancamiento, nos encontramos con el mar interior de personajes cuyas corrientes, conflictos y vaivenes transitan de la ilusión
a la desolación, sin dramatismos ni obviedades, con un discurso fresco
y sutil.
La adaptación que platea Paco y su construcción escénica, tienen la
virtud de recrear y traducir a la acción los materiales literarios que el
cuento propone. El accionar, que va más allá de un planteamiento naturalista, entretejido con el discurso de imágenes y sonidos, la
narración y los diálogos, rescatan las particularidades ofrecidas por el
cuento y multiplican su aporte original.
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Zaña o el valor de la memoria
Muchas veces, abordar un texto de manera lúdica, es la mejor manera
de tomarlo con seriedad. Es lo que sucede con el montaje de Zaña que
Paco nos ofreció con el Grupo de Arte Herencias de Chiclayo.
Dos actores, que también danzan y tocan percusión y un músico
polifacético, nos conectan con sucesos y momentos medulares de la historia de Zaña, una historia contada en rima, con la frescura del
lenguaje juglaresco.
Como decía Bertold Brecht, en la sociedad y en la Historia hay cosas
anormales y perversas, que de tanto verlas nos crean costumbre, ya no
nos sorprenden, y peor aún, nos llegan a parecer aceptables, como si estuvieran signadas por un destino inmutable cuyo origen se pierde en
el tiempo.
Esas cosas que afectan nuestras vidas personales y colectivas, aquí y ahora, tienen conexiones profundas con un pasado que siempre es
saludable reconocer y volver a ver.
El teatro es memoria y es un puente que nos ayuda a comprender los
porqués del presente desde las raíces de la historia, nuestra historia,
con sus fuerzas y complejidades.
Pronto así se convirtió
En importante ciudad A la par que sin piedad
La injusticia sucedió
La nobleza promovió
Corrupción y esclavitud…
Zaña nos habla de un pasado conocido, del encuentro conflictivo y al
mismo tiempo enriquecedor entre lo indio, lo español y lo negro, un tema mil veces abordado, pero a la vez, mil veces más, irresuelto e
inagotado en nuestro país.
A través de este juego colectivo de memorias, el teatro nos provoca y
nos invita a mirar más allá, a descubrir los hilos que perduran, las
fuerzas que se entretejen y continúan su curso hasta nuestros días, un tiempo y un país “modernos” en los que seguimos encontrándonos con
piratas y usureros, con clérigos infamantes y cabecillas inconfesables,
como en la historia de Zaña, un país lleno de contrastes, donde lo
esencial está aún por construir.
El montaje de Zaña, con un gran potencial teatral que aún puede
madurar, nos refresca la memoria colectiva, explora identidades y nos conduce por la Historia, de una manera rítmica y placentera, con el
invalorable aporte de la cultura popular.
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EL PEZ DE ORO
Adaptación del cuento de José A. Gonzáles Sandoval por Francisco Echeandía
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UNA VISIÓN REITERADA DE SU IDENTIDAD
Los hechos transcurren en Pimentel, balneario y zona de pesca
artesanal del Norte del Perú. Su varadero, en el que se emplazan parte de los pescadores, en la playa, al sur de la ciudad, es el mismo quizá de
épocas inmemorables. Por eso está atiborrado de voces y movimientos
que el tiempo no se puede llevar, detenidos al fin, después de porfiadas travesías en el oceano fabuloso.
Los pimenteleños son de diversidad racial, pero los pescadores, quienes tienen marcada influencia en la vida de los otros, conservan
mayormente la herencia Mochicas. Nadie en Pimentel – ni los residentes
ocasionales – deja de vincularse con ellos obviamente
De este contraste de caracteres e historias nace “El Pez de Oro”
Meses después de publicar el cuento encontré un bote en la playa de Pimentel con el nombre “El Pez de Oro” – el que nunca había visto -,
asombrándome en extremo su tangibilidad. Y cuando Francisco
Echeandía, Raúl Durand, Ángelo Sandoval y Sofía Rebata integrantes del Laboratorio de Investigación Teatral, con sede en Lima,
escenificaron la historia en el departamento de Lambayeque, me cautivó
sobremanera la magia y la creatividad con que la interpretaron. Entonces ya no pude distinguir el grado de ficción comprometido con la
realidad.
José A. Gonzales Sandoval
Pimentel, 22 de Enero de 2004
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REPARTO
Angelo / Felizandro Periche Angelo Sandoval
Sofía / Sully Rojas Sofía Rebata
Raúl / Silvestre Moreno / Papá de Felizandro /
Fernanda Urbina Raúl Durand
DIRECCION
Francisco Echeandía Cevallos
La primera función fue en el “Buho Rojo” de Pueblo Libre el 24 de
septiembre del 2003
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Los actores ingresan con una red de pescar y un petate (alfombra hecha
de totora). Estos objetos serán utilizados de forma creativa, dándoles diferentes formas justificadas en cada momento durante toda la obra. Los actores hacer sonidos del mar miestras están parados sobre el petate y cubiertos con la red de pescar.
ANGELO, SOFIA y RAUL
Cuando Sully Rojas ordenaba lo que llevó de su casa, unos cuantos vestidos, un par
de zapatos, una toalla, los que habían sido
puestos apresuradamente en una caja de cartón. (Pausa). Halló un cuaderno con
fotos, algunas de medio cuerpo, de amigos,
con dedicatorias al reverso, otras en grupo
en diferentes lugares de Pimentel, y otras de ella sola. Las rompió todas porque creyó
ANGELO Molestarían al marido
ANGELO, SOFIA y RAUL Menos la que le tomaron con Matilde
Albújar al pie de un caballito de totora.
Estaba en una casita frente al mar, con la
que todavía no se familiarizaba. Era prácticamente el primer día allí
RAUL Felizandro Periche se la había sacado en la
noche. Para disimular, para alejar la
sospecha de que se la había llevado, él se fue temprano donde sus padres. (Pausa).
Ella aprovechó el tiempo para
acondicionarlo todo, las cosas que habían cargado hasta allí ella y él
ANGELO y RAUL
Hacia el medio día, esperando la presencia de Felizandro, se tendió en la cama, y
sintió otra presencia, su embarazo de tres
meses. (Pausa). Después miró la fotografía blanco y negro
RAUL En la que aparecía con Matilde
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ANGELO Estaba un tanto maltratada
RAUL
Y no se le ocurría el lugar
ANGELO
En que podía guardarla
RAUL
Como un recuerdo
ANGELO
De toda la vida
RAUL
Mientras tanto la dejó en el cuaderno
ANGELO y RAUL
Para ella esa foto tenía mucho valor,
porque Matilde había sido una gran amiga
RAUL
Se vio en la mañana soleada de invierno en que fue a despedirla al tren de las siete
para no saber más de ella. Significaba
también la multiplicación de otros recuerdos, de experiencias que no quería
olvidar, que le pedían ser conservados
ANGELO y RAUL Se explicó que todas estas reflexiones
venían porque había comenzado a conocer
el miedo. (Pausa). Liquidar esa foto era acabar con todo lo de atrás. (Pausa). La
concebía como un vago soporte de su
futuro. Recogió los pedacitos de las otras, caídos por descuido en el suelo. (Pausa). Y
los tiró al excusado
RAUL Iba a divisar a Felizandro por las rendijas
de la sala, en el espacio en que las cañas
de la pared exterior tenían el barro desprendido, en el momento en que éste
empujaba la puerta transportando una
bolsa de papel con comida. Se abrazaron tiernamente, y ella, estrujándole los ojos, le
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hablaba de que los días pasaran pronto para que todo se resolviera
Ángelo hace de Felizandro y Sofía de Sully
FELIZANDRO
La culpa, en todo caso, la tienen tus
padres
SULLY
No los toques a ellos
FELIZANDRO
Tienes que darte cuenta de que si les hubiera caído bien, no estuviéramos en
esta situación
SULLY Mis padres son muy buenos
FELIZANDRO Lo sé, lo sé. Siempre he sabido que don
Ruperto y doña Ana son buenas personas
SULLY
Pero se trata de su hija… comprende
FELIZANDRO
Me pongo en su caso, no te preocupes
SULLY Confío que en estos días se solucionará
todo
FELIZANDRO
¿Ni tu mamá estuvo de acuerdo?
SULLY
No sé qué decirte
FELIZANDRO
Tus padres no me quieren
SULLY No digas eso, Felizandro. Ha habido
problemas difíciles en mi casa en estos
últimos tiempos
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FELIZANDRO No me quieren porque soy un cholo
pescador
SULLY Yo te quiero, son nuestras vidas, no las de
ellos. (Pausa) No queremos discutir y
estamos discutiendo
FELIZANDRO
Lo había olvidado. Pero tenemos que conversar lo nuestro
SULLY
No molestes a nuestros padres. Ellos ya han hecho mucho por nosotros. Sus
problemas no deben envolvernos
FELIZANDRO
La verdad es que no tenemos a quien
recurrir. Ni tú a tus padres ni yo a los míos. No contamos con ellos
SULLY Solos tenemos que encontrar la salida
FELIZANDRO
Es así: tus padres no me quieren porque soy un pescador
SULLY No lo veas de ese modo
FELIZANDRO No podemos darle la espalda a la realidad
SULLY También, entonces, tus padres no me
quieren porque no soy como tu
FELIZANDRO Lo que estoy pensando es en qué bote me
embarcaré en estos días
SULLY
¿Crees que tu papá no te admita?
FELIZANDRO
Que sepa que ya saqué mujer, me botará
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SULLY
¿Sin ningún miramiento?
FELIZANDRO Sí
SULLY Ya no deberías ir
FELIZANDRO Voy por saber qué dice, por escucharlo.
(Pausa) Y por saber que dice de ti
SULLY Yo sé que no me lleva, que nunca me ha
llevado desde que supo que era tu
enamorada
FELIZANDRO
Me interesa oírlo, Sully. Si no pone obstáculos, habrá tranquilidad. Entonces
sólo faltará hablar con tus padres
SULLY
¿Qué dices de nosotros? ¿Ya nos
comprendemos?
FELIZANDRO
Pienso que sí. Era necesario estar juntos
SULLY
No digas cosas feas
FELIZANDRO
¿Cómo cuáles? ¿Lo de cholo?
SULLY
Sí, eso. No quiero volver a escucharlo
FELIZANDRO No debe incomodarte. Es la verdad
SULLY Estás equivocado. (Pausa) ¿Qué dirá tu
mamá?
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FELIZANDRO No sé qué dirá. Mi papá es el que tiene que
decir
SULLY No me has dicho quién te hizo el almuerzo
FELIZANDRO Lo compre en el mercado
SULLY Yo no quiero quedarme sola
FELIZANDRO Es cuestión de unas horas. Esta noche con
seguridad conoceré el parecer de mi padre
SULLY Bueno, Felizandro. Mañana no podemos
seguir así
FELIZANDRO
Ya sabes: no discutir
SULLY
Como tú dices, tenemos que conversar lo
nuestro, ¿no?
(Pausa)
FELIZANDRO Somos dos contra el mundo
SULLY Un mundo rodeado de mar y de peces
FELIZANDRO Es la vida de los pimenteleños. (Pausa)
Saldremos adelante, Sully, te lo prometo
SULLY Nuestro amor nace en la playa
FELIZANDRO En la playa, en el puerto
SULLY Con la mirada en el mar
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Juegan.
SULLY
Anda y ven
FELIZANDRO
Sí, voy y vengo
SULLY
No te vayas a poner con tu padre
FELIZANDRO
No, eso no
SULLY
No te entretengas tampoco
FELIZANDRO Estoy seguro que hoy se arreglará todo
SULLY ¿A nuestro favor?
FELIZANDRO De eso no estoy seguro
SULLY Ojala entienda
FELIZANDRO
Anda lava los platos. Regreso
SULLY
Me sentiría muy feliz si fuera a nuestro favor
En cuenteros.
ANGELO, SOFIA y RAUL
Felizandro volvió a pescar en la embarcación de su padre cinco meses
después
RAUL Sully todas las mañanas iba a la playa a
despedirlo y a ayudarlo
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SOFIA y RAUL Y todas las tardes, junto con sus familiares
y amigos, estuvo en el mismo lugar de la
partida esperándolo, repasando el
horizonte hasta distinguir su aparición mientras compartía la charla
RAUL Ella se acercaba a la orilla, antes de que la
lancha diera su cabeceo último para
plantarse en la arena, y se ponía al pié de él cuando pisaba tierra firme
SOFIA y ANGELO No había abrazos ni besos en público
ANGELO
A él le bastaba sentirla a su lado
SOFIA y ANGELO
En esos días de duras faenas y organización en el nuevo hogar de los
Periche. (Pausa). Una mañana
SOFIA
Cuando Sully se había retrasado un tanto
y Felizandro ingresaba solo en la playa,
Silvestre Moreno lo atajó con una conversación inesperada
Raúl hace de Silvestre y Ángelo de Felizandro
SILVESTRE
La hiciste cambiar a la chinita
FELIZANDRO
¿Cómo así? No te entiendo
SILVESTRE
Vamos. Te acompaño
FELIZANDRO
No. Prefiero que me lo expliques aquí
SILVESTRE
No quiero decirte nada malo
FELIZANDRO
¿Entonces?
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SILVESTRE
Sólo que antes a la Sully se le veía un poco
pretenciosa
FELIZANDRO
¿Qué tiene que ver ella en todo esto?
SILVESTRE
Antes por supuesto de comprometerse
contigo
FELIZANDRO
¿Te das cuenta de lo que estás hablando?
SILVESTRE
Está bien que la hayas hecho cambiar
FELIZANDRO
La vida es así
SILVESTRE
Te felicito, Felizandro
FELIZANDRO
Nos comprendemos
SILVESTRE
Te felicito nuevamente
FELIZANDRO No sé por qué me hablas así, por qué te
importa
SILVESTRE
No se imaginó que al meterse con un cholo
su vida iba a ser distinta
FELIZANDRO
Mantén tu distancia Silvestre. Te estás propasando
SILVESTRE
Pensó que podría hacer otra persona de ti
FELIZANDRO
¡No me busques, Silvestre!
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SILVESTRE Sus padres, al menos, querían algo
diferente para ella
FELIZANDRO Sólo escucho al amigo y no quiero pegarte,
Silvestre
SILVESTRE
Justo porque eres mi amigo te digo todo
esto
FELIZANDRO
No entiendo nada de lo que dices
SILVESTRE
Si quieres entenderlo, entiéndelo. Es cosa
tuya. Yo tenía que decírtelo
FELIZANDRO
Te juro, Silvestre, que si sé que lo andas pregonando por la calle, te vas a lamentar
En cuenteros
SOFIA
Sully lo interrumpió. (Pausa). Ella intuyó,
por la mirada del marido, que algo malo había dicho Silvestre
RAUL y SOFIA Caminaron hasta unos metros antes de la
orilla. Allí, con otro tema, el que empezó
con la llegada de Sully, continuaron los tres. Ella le alcanzó a Felizandro una
canasta con comida, algunos utensilios y
una chompa, y él, que esta vez no colaboró a empujar la lancha hacia el agua, se
despidió en el momento de iniciarse la
navegación
ANGELO
Silvestre permaneció al lado de Sully. Ella,
cuando la nave ya se desplazaba dominando el oleaje, volteó, lo miró de pies
a cabeza y, sin decir nada, se retiró. El la
había pretendido un tiempo, declarándole su amor en un baile de un domingo de
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verano. A pesar de su persistencia, ella nunca le hizo caso
RAUL y SOFIA
Felizandro, superada la última ola rota, pensó en la conversación con Silvestre.
Sabía que decía la verdad, aunque algunas
expresiones lo alteraban; pero no sabía por qué tenía que meterse. Y esta actitud, con
ejecutor a un amigo, lo confundió
ANGELO, SOFIA y RAUL
La lancha, con la vela al tope, se alejaba.
El muelle, la playa, el malecón, eran todavía visibles en el puerto. Se cruzaron
con una lancha que llevaba una cuadrilla
de estibadores hacia el buque del
fondeadero. Allí iba el padre de Sully, Ruperto Rojas, a quien le levantó la mano.
La lancha se dirigía al lugar donde el día
anterior lo llenaron de Suco
SOFIA
A poca distancia de la lancha de estibadores, le ganaron nuevamente su
atención las palabras de Silvestre
ANGELO
Esta vez no pasó por alto la amistad de
éste con Sully, la que venía del tiempo en
que viajaban a estudiar a Chiclayo, ni su declaración de amor ni su condición de
pretendiente fracasado
SOFIA
Como Felizandro no estudiaba, lo vio
muchas tardes descender juntos del ómnibus, cuandoo regresaban del colegio.
Pero no lograba dar con el propósito de lo
que dijo. Su padre se acercó
Raúl hace de papá y Ángelo de Felizandro
PAPA Si las cosas siguen así, compraremos otra
lancha
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FELIZANDRO Que tengas la plata, papá. Ahora sólo hay
que ahorrar
PAPA Así lo hago, hijo. La otra lancha es para ti.
Quiero que tengas una vida independiente
FELIZANDRO
Trabajo contento contigo
PAPA
No hay como tener lo de uno, hijo
Pausa
FELIZANDRO
¿Qué dices de la Sully?
Pausa
PAPA
Veo que te ayuda. Ya vas a tener un hijo.
Yo seré abuelo
FELIZANDRO
¿Tú la quieres?
PAPA
Ahora me lo preguntas
FELIZANDRO
¿No la quieres?
PAPA
No entremos en el asunto que en la vida de
todos tiene una dificultad
FELIZANDRO
¿Sabes? Me gustaría que me dijeras tu pensamiento con mucha claridad
PAPA
¿Cuándo no he sido claro contigo?
FELIZANDRO
No le tienes aprecio
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PAPA ¿Te ocurre algo con la Sully?
FELIZANDRO
Nos llevamos bien. Es una buena mujer
PAPA
¿Por qué esa intranquilidad entonces?
FELIZANDRO
No hay ninguna intranquilidad. Quería escuchar si la estimas
PAPA Lo que pasa es que ahora empiezas a ver la
realidad
FELIZANDRO ¿Qué realidad no vi?
PAPA Es mejor que no volvamos a lo mismo
FELIZANDRO ¿No la estimas? ¡Dímelo!
PAPA Estás irritado, Felizandro. No es la forma
de tratar con su padre
FELIZANDRO Ya sé que no deseas que te hable de ella
PAPA Yo te advertí de todo esto
FELIZANDRO ¿Qué me dijiste? Que era una mujer que
no me convenía
PAPA
¿No es suficiente?
En cuenteros
SOFIA
Fue una pesca amarga para Felizandro. Nunca se había sentido así en alta mar.
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(Pausa). Ansió estar en sus hogar (Recrea un parto y canta)
ANGELO Y RAUL
Al regreso, le avisaron que Sully había dado a luz
ANGELO, SOFIA y RAUL Antes de bajar de la lancha, se lo
anunciaron a gritos desde la playa. En
casa encontró familiares de los dos. Ella
descansaba
RAUL
El quiso alzar al hijo, que estaba al lado de la madre. No se lo permitieron
ANGELO, SOFIA y RAUL Era un varoncito y todos decían que se
parecía a él. La luz de la lámpara sólo
dejaba ver imágenes deformadas en la habitación. (Pausa). Ella se despertó un
momento después y lo cogió del antebrazo.
Le refirió que había sentido los dolores
apenas volvió de la playa. (Pausa). (En susurro). Hacia la medianoche se habían
retirado todos, incluso la partera, quien
había ido y retornado tres veces. Sólo quedó la mamá de ella, que se había
encargado de los quehaceres. El no cabía
en sí, y ya había salido a comprar lo que le indicaron para el cuidado de ella y de su
hijo
SOFIA Soñoliento, porque pasó la noche casi sin
dormir, Felizandro se encaminó a la playa
para ir de pesca
Raúl hace de Papá y Ángelo de Felizandro
PAPA
(Abrazándolo) Buena hijo. Tenía que ser
varón
FELIZANDRO
Gracias. El domingo te esperamos en casa
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PAPA No hay necesidad de que me lo digas.
Estaba viendo en qué momento visitarlos.
(A sus espaldas, ya en la travesía) Será
como tú
FELIZANDRO
Será como yo, será también como tú
PAPA
Sólo que me hubiera gustado que fuera el hijo de la Paula. Su padre te hubiera
regalado una lancha. Y ya tuvieras lo tuyo
FELIZANDRO No sé, papá. Te noto que has cambiado
PAPA También tú. Ni siquiera te has casado. Has
comenzado a vivir desordenadamente
FELIZANDRO
No te entiendo
PAPA
He cambiado porque tú has cambiado
FELIZANDRO Porque no quieres a la Sully
PAPA Porque mi hijo no sigue el camino que le
señalé
FELIZANDRO
Creo que muchas cosas difíciles encierran
tus palabras
PAPA
No quieres aceptarlas
FELIZANDRO
¿Me dejarás que continúe pescando
contigo?
PAPA
Sé por qué lo preguntas. Si no te dejé un tiempo fue para que entendieras
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FELIZANDRO ¿Me dejarás?
PAPA
Sí, hijo, sí. Los problemas te los estás haciendo tú
FELIZANDRO Te lo agradezco
PAPA De todos modos yo te ayudaré para que
tengas tu propia lancha
FELIZANDRO
Yo también puedo hacerlo
PAPA Es muy caro. Partiendo de nada, te
pasarías muchos años
FELIZANDRO
Empiezo a explicarme por qué hasta ahora
no vas a mi casa
PAPA
Hoy iré
En cuenteros
SOFIA El tiempo transcurría sin que, pese al
esfuerzo del padre, se pudiera comprar la
nueva lancha
RAUL y SOFIA
El pequeño Felizandro creció en medio de las buenas relaciones de Sully y
Felizandro. Pero a sus tres años fue testigo
de graves disputas entre ellos. Los motivos eran diferentes, los que para ella eran más
bien pretextos del marido. De los furores
de él, ella se defendía con ardor, más
cuando sintió que iba perdiendo terreno. Una noche, el prolongado silencio de él, no
fue para ella señal de vuelta a la
tranquilidad, sino el anuncio de peores enfrentamientos
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RAUL No se equivocó
Ángelo hace de felizandro y sofía hace de sully
FELIZANDRO
¿El Silvestre fue tu enamorado?
SULLY
No. Nunca lo fue. Hace tiempo que te conté
que nunca lo fue
FELIZANDRO
¿Recuerdas esa mañana que me atajó en la playa?
SULLY
Sí
FELIZANDRO
No sé por qué me dijo que yo te había hecho cambiar a ti
SULLY No debiste escucharlo
FELIZANDRO Pero lo escuché
SULLY
Yo tampoco sé por qué lo dijo
FELIZANDRO
¿Pero estuvo contigo?
SULLY
Nunca. Me enamoró sí. Pero yo nunca le hice caso. ¿No entiendes? (Pausa) ¿Cómo a
mí me han dicho que te han visto con la
Paula? Y yo no me preocupo
FELIZANDRO
Debe preocuparte
SULLY
¿Acaso es verdad? (Pausa) ¿Acaso es
verdad? Si así fuera, tu padre ha influido mucho en esto
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En cuenteros
RAUL
El no obstante las avanzadas horas de la
noche, salió sin decir nada. Ella se mantuvo en vela sin verlo regresar
ANGELO En la mañana la rodearon con malas
noticias. Su voluntad sólo fue quebrada en
el momento en que Fernanda Urbina, su vecina, le contó que Felizandro ya vivía con
Paula
Raúl hace de fernanda y sofía de sully
FERNANDA
Sé donde la tiene
SULLY
¿Qué puedo hacer, Fernanda? Nunca le he fallado al Felizandro
FERNANDA Ha preferido a una chola como él. Hace
tiempo que está con ella. ¿No te diste
cuenta?... Y ya sabes que este domingo bendecirán a El Pez de Oro. La lancha que
le ha comprado el papá de la Paula al
Felizandro. Tú no sabes nada (Pausa) Yo te
acompaño mañana. No tengas miedo
SULLY
¿Crees que se haga un escándalo?
FERNANDA
Estás en todo tu derecho. Los que te conocemos estamos contigo
En cuenteros. En susurro como chisme
SOFIA
Haz visto
RAUL
Toda ella, consiguió lo que esperaba
SOFIA
El hijo está grande. Ah… lo deja con el hijo
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ANGELO
Calla. Chismosos
SOFIA Sí
ANGELO Chismosos
Al público
ANGELO, SOFIA y RAUL
Y El Pez de Oro, una lancha nueva que se exhibía en la playa, esperaba que su dueño
subiera
RAUL Primero lo hicieron los padres de Paula y
Felizandro, después ella
ANGELO
Finalmente él
ANGELO y RAUL
Les tomaron una foto. Los padres bajaron
RAUL
Felizandro y Paula permanecieron sobre la
embarcación
ANGELO y RAUL
Les tomaron sólo a los dos una foto
RAUL
Sully reparó que mejor hubiera sido no
haber ido
RAUL y SOFIA
Los que estaban alrededor, aunque no lo demostraban, estaban enterados de lo que
acontecía. (Pausa). Ella dio media vuelta,
tirando de la mano a su niño, a quien
instintivamente en ningún momento había soltado. (Pausa). La seguía Fernanda,
hablándole. Cayó nuevamente en el
ensimismamiento, y, nuevamente también, dejó de escuchar a su vecina. Le vino a la
mente Matilde Albújar, quien le había
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rogado para ir juntas a Lima. Ahora entendió…
SOFIA
… que para recordarle eso…
RAUL y SOFIA
… Había guardado la foto
RAUL
Nunca el regreso por el mismo camino de infinidad de mañanas y tardes fue tan
largo. Sus pensamientos buscaban un
cauce para discurrir. Cuando Felizandro se la sacó de la casa de sus padres, ella, a
sus dieciséis años, experimento un cambio
notable. Fue el segundo sentimiento de esa
espacie. El primero lo percibió cuando acompaño a Matilde hasta la estación, la
mañana soleada de invierno, en la que el
tren de siete se la llevó de Pimentel. (Pausa). Lo que no podía precisar era el
sentido que estos cambios le daban a su
vida.
FIN
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ZAÑA 1720 Creación Colectiva
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TEXTO
Décima inicial
Rubén Villegas Guanilo Décimas y canto festejo
Iván Santa María Saavedra
Diálogos de escena: Padre - hijo, Davis - Hopkins y Z – X
Sara Joffré
REPARTO
Rubén, Indio, Negro, Padre, Hopkins y Zeta
Rubén Villegas
Paco, Sacerdote, Hijo, Pirata Davis y equis
Francisco Echeandía Músico
Iván Santa María Saavedra
DIRECCION
Francisco Echeandía Cevallos
Pre-estrenada el 26 de marzo del 2007 en la “Casa Montjoy” de
Lambayeque
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A un costado del escenario sobre una alfombra hay instrumentos
musicales étnicos y afros. Entra Rubén con un cajón, se sienta sobre este.
RUBEN En andar de trota mundo
Conocimos a un viejito
Que nos dijo muy quedito Quiero que cuente al mundo
Hasta el rio más profundo
Lo que en mi pueblo pasó Todo lo que aconteció
En el norte del Perú
Con verdad y exactitud Digan que así sucedió
Rubén toca el cajón y llama a Iván, que estra con una guitarra y a Paco. Cantan a ritmo de festejo
A lundero le da A lundero le da
Oh Zaña como te quiero Tú me das la libertad
Yo te quiero con el alma Yo te quiero de verdad
A lundero le da
A lundero le da…
Iván va donde están los instrumentos. Rubén y Paco al público.
RUBEN y PACO Érase una vez un valle
Con una tierra muy buena Donde se mostró serena
Con sus frutos en detalle.
No hubo nada que avasalle Su cultura en producción
Siempre estando en comunión
En las faldas de aquel cerro
El “Corbacho” como un perro Le brindaba protección
RUBEN y PACO Pero de pronto un sonido. RUBEN Aquel valle retumbó
PACO De la nada apareció
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RUBEN Quienes no eran bienvenidos. PACO Eran peludos tupidos
RUBEN y PACO Bien cubiertos de armaduras
De extraña cabalgadura
PACO Eran los conquistadores RUBEN Que a la ley de ser invasores
RUBEN y PACO Impusieron su locura.
PACO En el valle establecieron,
Nuevas normas nuevas leyes
RUBEN Con truhanes y virreyes Y patrones que trajeron.
RUBEN y PACO Y dueños así se hicieron
De los campos de las flores. Nuestros frutos con dolores
Paso a ser su propiedad.
Y de Zaña la ciudad
Santiago de Miraflores.
RUBEN Pronto así se convirtió
En importante ciudad A la par que sin piedad
La injusticia sucedió
PACO La nobleza promovió Corrupción y esclavitud,
RUBEN Pecando por su actitud
El clero se pronunciaba, RUBEN y PACO Y así triste excomulgaba
A Zaña su ingratitud.
RUBEN y PACO Pero el negro el su inquietud No tanto se lo creía
A pesar que le decían
Que era por bailar Lundú RUBEN Así la Kimba Bantú
Se mantuvo por la historia
RUBEN y PACO La Zaña canto su gloria Para ser eternamente
Lo que evoca aquí mi mente
Y disfruta mi memoria.
Musica pre inca. Sale paco, le tira la vincha a ruben que se ha quedado en el centro del escenario. Entra paco con una canasta con maiz y una
olla. Deja la olla frente al ruben que se va transformando en el indio. Paco recibe los zapatos y sale. El indio mientras desgrana el maiz.
INDIO De mi tierra yunga soy Donde el sol bien resplandece
Pero no me pertenece
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A donde quiera que voy Me la quitan y la doy
A estas fuerzas invasoras
Mi gente por mas que implora
Por la injusta esclavitud Solo ven una inquietud
De un indígena que llora
Y por mas que me empecino
No cambia mi realidad
No soy dueño es la verdad Ni lo soy de mi destino.
Tan pesado es mi camino
Que mi desgracia se agranda Ahora a todos se nos manda
Al otro lado del río
Mi tierra queda al vacío
Nos llevan a “La otra banda”
El trabajo mas el fruto
Se acompaña a nuestro son Para dárselo al patrón
Ahora pagamos tributo.
Bajo ley y resoluto Están todos mis hermanos
A la pesca muy temprano
Y otros van para la hacienda A otros se les encomienda
A la tierra con sus manos
Ante cruel explotación No se conoce la calma
Una tristeza en el alma
Me apuñala el corazón. La injusta alimentación
Mis hermanos van sufriendo
Poco a poco así estoy viendo Que vivir un nuevo día
Se convierte en agonía
Para terminar muriendo
El indio se acerca a primer plano, hace una ofrenda de comida al sol, se arrodilla. Entra paco como sacerdote con una cruz. Ivan hace la
sonoplasta de inglesia. El indio no sabe que es la cruz. El sacerdote lo hace poner en actitud de rezo. El indio se acerca a la cruz. El sacerdote lo coge de la espalda y lo fuerza a ponerse en actitud de rezo. El sacerdote reza. El indio coge la cruz y en actitud de procesion.
INDIO A la par con el patrón
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Nos llegó una cruz y un cristo También un diablo muy listo
Que enfrentaba una oración.
Supe que es excomunión
Y un infierno con desdén Más si me portaba bien
Ganaría un paraíso
Que no sé ni quien lo hizo Dicen que se llama Edén
Siguen en actitud de procesion. Vuelven a congelar
Ven arrodíllate negro
Y apréndete esta oración Ya no cantes tu canción
Que tus dioses no celebro;
Indio que entre en tu cerebro
Y póstrate ante la cruz Niégale al sol esa luz
Y no adores esa luna;
Indio y negro solo una Creencia para Jesús
Como si fueran a salir del escenario congelan cuando termina de sonar la campana. Paco se lleva la cruz. Ruben recoge lo que se quedo en el escenario. Ivan toca musica negra. Paco coloca las cadenas, un palo y una mascara de negro en primer plano a la izquierda del público. Rubén entra, se coloca en el mismo lugar donde estan los objetos. Se pone las cadenas, se pone la mascara, coge el palo. El negro en actitud de trabajar la tierra
NEGRO Como pobres animales
Conviviendo con la ratas
Hacinados en barracas Nauseabundas y fecales.
Son tantas cosas fatales
Que soportan mis hermanos Que ya casi los gusanos
Muestran cruel atrevimiento
Así es nuestro sufrimiento Por los blancos inhumanos.
Y si mi patrón me encuentra
Intentando yo escribir O algún libro descubrir
El lo toma como afrenta
Y todo su odio concentra En certeros latigazos.
Y después al cepo paso
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Mas si me atrevo a tocar. La guitarra sin dudar
Sin piedad me corta el brazo
Creo maldición será El que tenga este color
Pues mi sangre y mi sudor
Con mi lágrima aquí están Ya no tengo libertad
Mis hijos y mi mujer
Los vi desaparecer Para aumentar mi sufrir
Nuestro destino es tan vil
Mi dios solo a de saber.
Entra paco como hijo del patron, con un latigo, mientras el negro trabaja la tierra, el hijo del patron lo golpea con el latigo. El negro despues de ver varias reacciones de dolor sale disimuladamente. Aquí el hijo del patron se queda solo haciendo como que golpea al negro. Entra ruben como el padre patron
PADRE
En nombre de Dios detente
HIJO
Padre este esclavo me ha faltado
PADRE
¿Qué ha hecho?
HIJO Mis órdenes ha olvidado
PADRE Se comprensivo hijo, déjalo ir y que vea tu
piedad y tu cordura... pero adviértele, otro
error y del cepo no se salva
HIJO
Padre los estás acostumbrando muy mal son ociosos, pillos...
PADRE
Cuida tu boca hijo mío... sé muy bien que son todo eso y más. Pero atención que se
han muerto cinco porque tu hermano
pretende que trabajen y no coman, y no duerman... y tienes que comprender que
no hay bestia que eso aguante
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35
HIJO
¿Ah, entonces... ?
PADRE Claro un poco de caridad nos hará
provecho a todos, y así estos tristes me
adorarán y rendirán mucho más.
El hijo mira maravillado al padre.
PADRE
Quédate un momento, justo venía a
buscarte para que digas qué ha sido todo aquello que me fueron a informar que
encontraste a un esclavo intentando leer?
HIJO Así fue Padre
PADRE Y qué hiciste con ese insolente...ah los
muy bestias...qué van a poder leer (Ríe)
HIJO
No te preocupes padre que ya lo vendí
PADRE !Caramba, espero que hayas pedido un
buen precio!
HIJO
¡Querìa salir de èl!
PADRE
Pues hubieses hecho de la necesidad
virtud
HIJO
¿Qué dice usted padre?
PADRE
¡Ah, la juventud! Eso quiere decir que lo
deberìas ofrecer por su defecto...
HIJO
¿Cómo?
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PADRE (Riendo a carcajadas mientras el hijo lo mira perplejo. Pequeña pausa) Claro pues
imagínate decías: (Como un pregonero de feria) ¡Aquí señores mìos tengo para ofrecerles algo que jamás ni ustedes ni yo
hubiésemos podido imaginar siquiera
(cambiando a tono confidencial) Los miras a
todos los que se hayan acercado a los ojos y con gran misterio a uno por uno les
afirmas (cambiando a gritos) Pues que este
esclavo es el màs inteligente de cuántos se puedan encontrar...¿sabe Ud por qué? Y
ud? Y ud. (Hace el juego con varios
imaginando que hay una gran ronda) Pues
el gran misterio es que por las barbas de San Camilo un viejecito monje franciscano
este hombre ya casi sabe... (Hace como que la ronda lo persigue entusiasmada por conocer el secreto) Este esclavo casi sabe
(Pausa mientras traga aire y se da importancia) Mis queridos señores este
esclavo fue criado por unos franciscanos (Igual a lo anterior) ¿Y casi sabe?
(Cambiando al tono para hablar con el hijo)
Aquí ya están todos locos por saber qué tiene para vender y tú con más fuerza y
convencimiento sigues. Pues que casi sabe
leer... (Cambiando al tono para hablar con el hijo) Y allí verás tú la que se arma, eso es sacar de necesidad virtud, muchos
perezosos que no saben leer siendo
hidalgos españoles querrán tener un ganapan que además les informe de
cualquier papel escrito que caiga por allí...
HIJO
¿Lo cree Ud así padre?
PADRE No lo creo, estoy seguro, y nunca juzgues a
los demás sólo a partir de tí. Hay de todo
en este mundo y bobos no han de faltar...además ahora que lo pienso si tú
no supieras leer...de repente hasta yo...
¿Pero tú sabes verdad?
HIJO
(Inseguro y con temor) Sí, sí padre
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37
PADRE
Entonces, bueno pero no te olvides que
todo se puede manipular
Se hace oscuro total. Paco como si fuera un poblador advirtiendo al pueblo dice
¡Pueblo de Zaña, misericordia de Dios
pidamos, ha llegado el Pirata Davis y con
sus cañones acaba la ciudad!
Iván hace sonidos de estruendo, de cañonazos, gritos. Paco como si fuera un poblador dice
¡Pueblo que tranquilo duermes, despierta
que mientras duermes plácidamente los
piratas te arrebatan tu ciudad!
Más efectos sonoros.pausa en silencio. Se enciende la luz.entra paco que hace del pirata davis con una espada en una mano y muy divertido lo sigue rubén que hace de su lugarteniente hopkins. Los piratas se miran, sacan sus espadas y hacen un juego de esgrima. Terminan
DAVIS
¡Ah, qué negros tan divertidos! (Suelta la carcajada) Una veradera lástima mi
querido Hopkins que haya que diezmarlos para vernos libres de sus absurdos
patrones
HOPKINS
Y son fieles de asco señor
DAVIS
¡Y con lo que saben de divertirse qué bien
estarían en nuestras naves. ¿Te imaginas cómo sería entrar a asaltar las ciudades al
son de sus músicas y movimientos!
HOPKINS Esta gente sabe divertirse...pero...
DAVIS Bueno, no queda otro remedio que
matarlos...pero durante estos siete días de
saqueo y diversión mucho nos han servido para cargar los galeones de oro, plata y
millones de pesos...
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38
HOPKINS
Pero veo yo señor que hay un problema
mayor...
DAVIS
¿Cuál?
HOPKINS
La niña
DAVIS
¿Qué niña?
HOPKINS
Entiendo que con tantas mujeres como hay
a disposición, el recuerdo de una en
especial, no es fácil
DAVIS
¿De qué hablas?
HOPKINS
De doña Mencia, la prometida de Don Juan de Salazar
DAVIS ¡Ah, sí, bueno el padre ya pagó los 50 mils
pesos de plata ahora a devolverla
HOPKINS Ese es el problema señor
DAVIS ¿Problema? ¡La devolvemos y ya, cuanto
más pronto mejor¡
HOPKINS
¿Es que ella acaso quiere aceptar su
retorno?
DAVIS
¿Aceptar? Tiene que irse y no se diga más,
no quiero entrar en nuevas complicaciones
HOPKINS Convencer a una mujer enamorada...
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39
DAVIS ¡Bah, tonterías
HOPKINS
Tal vez sería bueno...
DAVIS
¿Qué?
HOPKINS
Que ese encargo lo tome Ud., en persona.
DAVIS
¿Cómo te atreves?
HOPKINS
Es que tal vez si la orden partiera
directamente...
DAVIS
¡Tú te encargas de ese compromiso!
HOPKINS
¡Señor!
DAVIS
Nosotros en esta ciudad ya no tenemos por qué quedarnos más, nos han pagado
sumisamente su tributo...lo que no
podemos llevarnos lo quemaremos...dile
eso a Mencia...sus padres o al fuego...de los pobladores sólo llevemos a unas
cuantas entendidas...
HOPKINS
¡Señor Mencia...es una mujer enamorada!
DAVIS
Entiende. Por eso mismo no quiero volver a
verla...estoy yo para amor...embárcate unas cuantas mujerzuelas y este asunto se
acabó
Congelan se sacan los pañuelos de la cabeza. Ruben y paco hacia el publico dicen
RUBEN Fueron 50,000 pesos
Que Davis pidió en rescate
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40
A la par que de remate A Mencia le robó un beso
Y así Zaña estuvo preso
De este ambicioso pirata
Que el miedo y terror desata Cuando la ciudad invadió
Dicen que así se llevo
Todito el oro y la plata
PACO Al sonar del María Angola
Sale corriendo la gente Un exilio esta presente
Fuga la gente española
Va quedándose muy sola De nobles curas y pillos
Unos van para Trujillo
Lambayeque y Ferreñafe
Va dejando este linaje Sus haciendas y castillos
A pesar de la desgracia La ciudad tuvo apogeo
Aunque casi no la veo
Segura su aristocracia Pues sienten que ni la gracia
Del señor los acompaña
La muerte con su guadaña Ha cobrado muchas vidas
Pocas familias heridas
Se atreven quedar en Zaña
RUBEN Un divino protector
Fue del indio y del esclavo
Defendiendo como bravo Los mandatos del señor
Entregó todo su amor
Siendo humano y generoso Es mi santo bondadoso
Toribio de Mogrovejo
Cerca de mi y a lo lejos Fue mi santo milagroso
Mi patrón Santo Toribio
Santo que a Zaña proteges Que la luz nunca se aleje
De tu corazón muy tibio
Alivia nuestro martirio Y no permitas jamás
Que este río muy voraz
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Arrase con nuestra gente Te lo pido dulcemente
Que en Zaña reine la paz
PACO También fue bien conocida La famosa monja Alférez
Que por darse los placeres
Cuestionada fue su vida Fue española decidida
Pues era de armas tomar
La hizo también de juglar Puso palabra en empeño
A tres novias quito el sueño
No llegando hacia el altar
RUBEN Treinta y cuatro años pasaron
Y así con tantas desgracias
A Zaña con suspicacia Poco a poco así acabaron
Parece que así lograron
De su importante ciudad Perder tanta majestad
Que injusto fue su dolor
Una desgracia mayor Vendría con mezquindad
IVAN A unos 51 kilómetros al sureste de
Chiclayo, el viajero encuentra con
sorpresa, semihundidos entre la arena, los
restos de recios muros, columnas, arcos, bóvedas y galerías de los que
evidentemente fueron en el pasado
importantes templos, conventos y casonas coloniales...”
Apagon. Se escucha el sonido del palo de lluvia y entran ruben y paco ahora como dos señores, cada uno con un candelabro prendido. Esta escena va en crescendo
EQUIS
Bueno, creí que la lluvia pararía
ZETA Más parece que va en aumento
Pausa angustiosa
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EQUIS Bueno nuestra casa...
ZETA
Es grande y...
EQUIS
Fuerte...
ZETA
Mira
Como si miraran afuera por las ventanas
EQUIS
Va el torrente como un río
Se oye un trueno
ZETA
Es el Zaña...
EQUIS
Se desbordó
Van perdiendo serenidad y miran como locos a todas partes mientras la lluvia y los ruidos de maderos que caen, crujidos aumentan
ZETA
Pasan las ramas de los árboles como
pajitas arrastradas por el agua...
EQUIS
¡Mira allá este es el diluvio universal.
ZETA
¡Es el tejado de los Méndez!
Se apagan las velas ambos gritan
ZETA y EQUIS
¡Corramos!
En la oscuridad aumenta el ruido del agua gritos confusos y desesperados. Estruendo de la casa que se viene abajo. “Zeta” que se ha quedado en platea dice al público
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ZETA ¡Pero el río, no tuvo piedad de
nadie...muchos huyeron, pero la ciudad
destruida se quedó y nadie, nadie, aunque
no me lo crean… pueden ir a verlo, nadie la reconstruyó.
A oscuras, los tres hacen sonidos y gritos de desesperacion. En susurro proyectado se escucha este canto de tradicion (d.r.)
IVAN Hablan los negros del Congo RUBEN Contestan los de Tumán
PACO Los de Salamanca dicen RUBEN, IVAN y PACO En Zaña como estarán
Alundurundurun durunda
RUBEN De onde vienes vienes
De onde vienes hora
RUBEN, IVAN y PACO Yo vengo de la laguna De segar totora
De segarte ahora
Alundurundurun durunda
Se enciende la luz y aparece en el centro ivan el musico tocando un checo. Hace un solo musical. Se acercan ruben y paco, cada uno con un checo. Sin romper la musica se incorporan en el toque de los checos a coro.
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Terminan de tocar, se ponen de pie.
IVAN De africano recuteco Vino el golpe e’ tierra al vuelo
PACO Como hicieron tus abuelos
Zañero toca ese checo RUBEN y si bailo yo no peco
Un tondero y un lundú
RUBEN, IVAN y PACO Porque gozo como tú Pues zañero lo heredaste
Con tus décimas quedaste
Como orgullo del Perú
FIN
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LOS MITOS DE SIPAN Creación Colectiva
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TEATRO, VÍNCULO COHESIONADOR
En el 2006 participé, como parte de un equipo multidisciplinario, en un proyecto de desarrollo social en las comunidades de Huaca Rajada y
Sipán; la amplitud del proyecto era tal, que involucraba temas de
diversa índole, desde infraestructura turística hasta capacitación de los pobladores en diversas actividades productivas.
Uno de los principales retos del proyecto era rescatar la Identidad Cultural de los pobladores de Huaca Rajada y Sipán, pues es sabido
que esta funciona como elemento cohesionador dentro de un grupo
social y que es la base para que los individuos que lo forman puedan desarrollar su sentimiento de pertenencia.
Una vez en la brega, pensamos que el principal reto sería encontrar
dentro de estas comunidades grupos muy variados de gente que hicieran que la diversidad interior sea aún más rica de lo calculado,
pues vimos que respondían -no solo al proyecto- de manera muy
distinta a diferentes estímulos y motivaciones; en el camino, nos dimos cuenta que el reto en realidad fue constatar que no existía un
comportamiento homogéneo en una comunidad tan pequeña.
Los pobladores nos manifestaron su interés de ser partícipes del
desarrollo, turístico, económico y social de su comunidad, pero sin
perder su identidad como pueblo, lo que nos llevó a deducir que se sentían herederos del legado cultural que los antiguos Mochicas dejaron
en este “valle Moche” ubicado en tierras lambayecanas. Sin embargo,
descubrimos que no existía un sentimiento arraigado de pertenencia
que los vinculara con su “origen mochica” pues Sipán y Huaca Rajada son centros poblados “modernos” habitados por gente de diversos
orígenes. Entonces, ¿existía un vínculo cohesionador?, ¿valoraban su
pasado e identidad?, ¿se sentían orgullosos de descender de una cultura tan maravillosa? La respuesta siempre fue “sí”, pero un “sí”
siempre complejo, debilitado por el desconocimiento de sus orígenes y
por la pluriculturalidad de sus miembros.
Es en este punto de discusión, cuando Paco sugiere fortalecer esta
identidad y crear el “vínculo cohesionador” con un sentimiento moderno pero común a todos los pobladores de ambas comunidades… “No
somos el único poblado del norte del Perú herederos de la cultura
Moche, pero sí exclusivos depositarios de la magnificencia y
majestuosidad del único gobernante y guerrero del antiguo Perú, somos los dueños y herederos del Señor de Sipán”. La perspectiva de Paco y su
equipo es que la identidad cultural no es algo que siempre se hereda,
sino algo que se construye, es dinámica, maleable y se fortalece.
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Durante nuestra convivencia con la comunidad, los pobladores compartían, por las noches, con nosotros sus historias y experiencias
vinculados con la “huaca” a raíz del gran hallazgo arqueológico, que
data hace poco más de 20 años, estas historias con el tiempo se
volvieron mitos, algunos pobladores manifiestan que son reales y sucedieron; otros que no; pero todos las consideran como suyas y
generan un vínculo cohesionador; es así que producto de una creación
colectiva dirigida por Paco se rescatan los modernos “Mitos de Sipán”, un compendio entre las creencias y los relatos de los más viejos del
pueblo, enriquecidos con la mixtura que sólo nuestra diversidad y
orígenes pueden otorgar y que hoy tengo el gusto de presentarles.
Jorge Frías Vassallo
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DIALOGOS
Sara Joffré
REPARTO
Lorena Lorena Silva Silva
Sara
Sara Patricia Cachay Ramos Jorge
Jorge Arrascue Mendoza
Patty Patricia Zeña Paz
Zanquero Gentila
Gustavo Willis Roman Zanquero Pato 1
Raysza Alvarado Perez
Zanquero Pato 2
Yhersson Alvarado Perez Zanquero Pato 3
Nora Perez Alvarado
DIRECCION
Francisco Echeandía Cevallos
Los Mitos de Sipan fue presentado el 19 de agosto del 2007 en la
comunidad de Huaca Rajada – Sipan
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ESCENA I
SARA ¡Lore, Lore apúrate (Silencio mientras sara espera respuesta, espera ansiosa) ¡Oye
tengo una cosa muy importante que contarte... (Se rie porque la está engañando)... de Fernando
LORENA (Sale secándose las manos)¡Ay oye, cómo
gritas eso! ¿Qué te costaba entrar?
SARA
¡Entrar? Ay no, no lo aguanto al pesado de
tu hermano con sus bromitas...seguro que está ahí componiendo sus radios viejos...
LORENA
¡Ay, le vas a hacer caso a ese sonso...¡ya cuéntame, cuéntame!
SARA Te lo cuento por el camino...
LORENA ¡Ay, no, no puedo salir (Le muestra las manos húmedas) estaba lavando no ves...?
No puedo acompañarte...
SARA
¡Ay, no seas malita, tengo que ir por un
encargo de mi mamá...y hay que cruzar la huaca!
LORENA ¡Ya cuenta primero!
SARA ¡Ya, acompáñame tú! (Lo convierten en un juego con risas)
LORENA ¡Mentirosota!
SARA ¡Miren quién habla!
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LORENA
¡Pesada eres no?...bien que tienes miedo de
ir solita por la huaca...
SARA
¡Ay, y tú que valiente eres no?
LORENA
¡Más que tú claro!
SARA
¡Fíjate ah, ni más te acompaño yo
tampoco...!
LORENA
¡Ya pues voy, pero cuéntame lo de
Fernando!
SARA
¡En el camino pues!
LORENA
¡Ya ves cómo eres¡
SARA
¡Ay y tú eres muy buena no?
LORENA
¡Más que tú, claro!
SARA
¡Entonces ven conmigo y no fastidies!
LORENA
¡Entonces cuéntame!
SARA
(Riéndose pícara) ¡Es que no tengo nada
que contar, ja ja
LORENA
Encima mentirosota
SARA
(Rogando) Ya pues, Lore, no seas
malita...con tu amiguita Sarita vas a ser así? Anda pues, ya sabes que tengo miedo
de pasar sola por la huaca anda pe´
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51
LORENA
¡Ay Sara, qué pesada eres, ni me he
peinado...
SARA
Vamos manita... sé buena con tu amiga del
alma...
LORENA
(Vencida) ¡Ya dejo mi trapo y le aviso a mi hermano que ya vengo...(Hace lo dicho muy rápidamente y regresa) Pero cómo otro día
me vengas con mentiras... (Empiezan a
caminar saliendo)
SARA
(Riendo) ¡Ya pues Lorenita...(Salen hablando)
ESCENA II
Un grupo de gente coloca plantas del maíz. Aparición misteriosa de la Gentila, que casi en una danza se roba los choclos en sus pancas.
ESCENA III
Sara y lorena entran caminando y jorge las alcanza
JORGE
¡Pucha! Que si ustedes caminan rápido, las he estado llamando desde allá rriba, van
corriendo...
SARA
¡Casi...
LORENA
¡Ay claro si esta le tiene miedo a cruzar la
huaca!
SARA
Ustedes saben muy bien, que hay muchos
cuentos de por aquí...
JORGE
¡Habría que ver, cuentos son cuentos
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SARA ¡Bueno, pues yo me los creo, y no me gusta
pasar sola ni despacio por la huaca...oyen?
(Los cuatro se ponen en actitud de escuchar. Sólo sara parece oir. Y el público efectivamente escucha también a los músicos. Patty, jorge y lorena no oyen nada)
PATTY
¿Por dónde oyes tú la música?
SARA (Como en trance) ¡Por allá!
LORENA (Casi enojada) ¡Ay, oye, tú si que eres...
SARA ¡Es que dicen que hay quien tiene ojos de
ver...
LORENA Entonces que será que tú tienes orejotas
para oír
(Patty, Jorge y Lorena celebran el chiste. Sara sigue escuchando y ni les hace caso. Aquí el director dirá si efectivamente vemos y oímos a los músicos. Jorge para que sara no se moleste hace como que le cree)
LORENA
(Primer distanciamiento – al público) Así
pasa pues que algunos dicen que han visto y otros nunca van a ver. Pero aquí en
nuestras tierras de Zaña se conoce desde
antiguo tres mitos bien repetidos. El primero es el de la señora Gentila, una
dama que nadie sabe cómo ni cuando
llegó. Pero su nombre ha quedado, Gentila y ¿ por qué la llamarían así?... Saben
ustedes que en los tiempos de los tiempos
“gentiles” eran llamados los caballeros más refinados y educados. Pero también, en la
Biblia, “gentiles” eran los que no tenían la
religión judía. Nosotros no sabemos por
qué la llamaban Gentila, lo que sí se cuenta de ella es que le gustaba llevarse
los choclos que estaban apuntando en los
maizales. Que era muy, pero muy arrugadita...
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53
SARA
¿Pero que no escuchan nada, Lorena,
Patty, Jorge?
PATTY
(Siguiéndole la cuerda a sara) ¡Ah, sí, si
claro a ver díme de donde escuchas que viene la música!
LORENA Es muy bonita y viene de allá... (Señala)
SARA
(Segundo distanciamiento - Al público) ¡Ah, claro no hay sólo el mito de la Gentila, que
muchos aseguran haberla visto robándose
los choclos de las cosechas... hay también el de los patos (Mira hacia el cielo) pero ese
sucede sólo en noches de luna llena.
Miren, antes de que ocurriera el saqueo de
1987, una pata muy galana, salía con sus patitos... ¿Y ustedes se preguntarán qué de
raro tiene eso? ¿Verdad? Y es que estos
patitos no eran patitos cualquiera... eran patitos ¡de oro! ¡y relucían con la lumbre
que la luna enviaba desde el cielo, si señor!
¡Salían de la Pirámide grande, luego cruzaban hacia la Plataforma Funeraria,
rodeándola, luego regresaban por donde
habían venido y se guardaban otra vez en la Pirámide! (Aparecen los patos caminando. Sara se dirige a una persona como tomándole el pelo) ¡Perdón, perdón
señor pero ni se le ocurra intentar moverse para llevarse uno o todos los patitos...
usted tampoco señora... (Rie) Ah ya
sintieron cómo que una fuerza extraña no los dejó moverse? Pues bien en aquel
tiempo así decían que pasaba, y que luego
los que habían intentado coger a los patitos se quedaban dormidos en el sitio...
(Pausa) Y por eso muchos habían creído
que se trataba de un sueño... ¿y por qué
no verdad?... Pero... cuando, muchísimos años después los arqueólogos encontraron
en la tumba del señor de Sipán...
¿Adivinan, entre todas esas maravillas de oro que allí descubrieron? ¿Qué había
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también? Sí junto a todos los tesoros y bellísima orfebrería... figuras de patos de
oro que adornaban al señor de Moche... Y
así quién sabe, el mito se mezcló con la
realidad... y como me lo contaron se los cuento yo.
LORENA (A Jorge como si el regresara de haber estado fuera) ¿Y, oye viste quiénes tocaban
la música?
JORGE
¿La música?
SARA
Sí ¿Quién tocaba la música que oí yo?
JORGE
¡Ah, si, yo creo que venía por allá!
LORENA
Sí pues tú dijiste que ibas a fijarte ¿qué
pasó?
JORGE
¡Ah, si, si, este saben?
PATTY, SARA Y LORENA
(Enojadas) ¡NO!
JORGE
Que no quería dejarlas solitas sin mi
protección... (Las chicas se rien y como que lo van a “apanar”)
LORENA
¡Vamos, vamos pues los tres juntos a ver si encontramos a los músicos que Sarita
(BURLONA) dice que escuchó...
(Salen corriendo y jugando entre ellos. Por el lado opuesto al que ellos salen entra la gentila con su canasta donde lleva los choclos y mira muy
misteriosa por aquí y por allá, va a decirnos algo cuando entra “el pueblo” - hombres y mujeres - la gentila reparte los choclos. Están en eso cuando se vuelve a oir a “los músicos” todos bailan en fin de fiesta. Los cuatro jóvenes regresan y en medio del baile y algarabía, jorge se escapa para decirnos)
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JORGE (Al público) ¡Ay me estaba olvidando... la
tercera historia es el mito de los músicos...
y dice así... De los músicos se dice, que
cuando cruzaban la huaca, no importa la hora que era, se escuchaba una banda y el
sonido salía de adentro de la pirámide.
Estos tres mitos:
SARA
La Gentila
PATTY
Los Patitos
JORGE
La Banda de Músicos
LORENA
Forman parte de la rica historia de nuestro
pueblo y por eso es bueno conocerlos ¿verdad que el Perú es un cofre de
tesoros?... Pues bien, por hoy…
PATTY, SARA, LORENA y JORGE
¡Este cuento se acabó!
Música de fin de fiesta. Todos rompen y bailan
FIN