sin recreo 184

4
Mi- Protestan frente a la Secretaría de Gobernación Laura Poy Solano Profesores del magisterio mexiquense que se oponen a la reforma educativa efectuaron una manifestación frente a la Secretaría de Gober- nación para exigir justicia para las víctimas de la violencia en Iguala, guerrero, que dejo seis personas muertas y 43 estudiantes de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa desaparecidos. Cerca de 200 maestros acudieron a las inme- diaciones de Gobernación para expresar su repudio a la crisis de violenciaque enfrenta el país. Aseguraron que hay hartazgo, no sólo en Guerrero, sino en todo el país, por tanto abuso, corrupción y agresiones que no tiene límite, frente a la inoperancia de las autorida- des e instituciones públicas”. Pedro Ramírez Vázquez, del magisterio disi- dente, señaló que el Estado mexicano pretende soslayar su responsabilidad en los hechos de violencia, pues se menciona que los normalistas realizaban una labor de boteo en Iguala cuando fueron agredidos, pero no quiere reconocer que se ven obligados a realizar esas tareas porque sus escuelas viven en el abandono, sin recursos”. Agregó que el estado de México es una de las regiones del país con los índices más altos de violencia: Crecen los feminicidios, pero también los secuestros y robos. La calle se ha convertido en un peligro, al igual que el transporte público, y todo esto se ve reflejado en la escuela, donde además se viven los efectos nefastos de una reforma educativa que sólo ha generado mayor in- certidumbre laboral para miles de docentes que no saben si en diciembre próximo serán recontratados”. *Extracto de la nota aparecida en La Jornada el viernes 17 de octubre de 2014. Profesores mexiquenses exigen justicia para víctimas de la violencia* ¿ Cómo podemos leer la historia contemporánea? ¿Cómo podemos explicar a nuestros alumnos que la historia actual se debe leer con sangre? Sangre de quienes luchan por la defensa de sus ideales libertarios, como aquellos héroes que reivindicamos porque nos dieron patria y una Magna Constitución, una de las cuales se precia de ser de las mejores del mundo. ¿Cómo explicar que después de 200 años de la independencia y 100 de la revolución la injusticia y la violación de los derechos de los pobres aún recorren nuestra patria? En la década de los 60s, la represión a médicos, maestros, y estudiantes, demostraron los resquicios de la imposición de quienes se ostentaron como herederos del gobierno revolucionario. No hubo peor masacre que la del aquel negro 2 de octubre de 1968 don- de miles de estudiantes perdieron la vida a manos del gobierno y su ejército, quienes vieron en las aspiraciones de una libre expresión de los jóvenes, el mayor de los desafíos y peligro para su sistema corrompido. En los 70s, la Guerra sucia acallo las voces de inconformidad con la desaparición forzada y el asesinato de cientos de activistas estudiantes, maestros, obreros y campesi- nos de organizaciones sociales e incluso guerrilleras. Mientras que en los ochentas la muerte y desaparición de profesores de la CNTE como Misael Núñez Acosta, Pedro Palma y Modesto Patolzin, por mencionar algunos fueron los que marcaron ese tiempo. Bajo el gobierno de Ernesto Cedillo, el 26 de septiembre de 1996 es desaparecido el profesor Gregorio Alfonso Alvarado López, pese a la denuncia hecha por la familia y él mismo, del seguimiento que días antes había tenido por parte de policías federales. Caso como el de los anteriores, no resulto hasta la fecha, ningún dato, ninguna respuesta. En esa misma década la matanza de 17 campesinos en la comunidad de Aguas Blancas y de al menos 11 civiles muertos en el Charco Guerrero, dejan el precedente de que la Guerra en el Paraíso”, que nos narró Carlos Montemayor en su libro, aún no terminaba en el Estado de Guerrero. Igual ambiente de represión se preparó en Chenalhó ubicado en la re- (Sigue en la 4) ¿Cómo debemos leer la historia? PRONUNCIAMIENTO México, D. F., 11 de octubre de 2014. Los abajo firmantes reunidos en la primera asamblea de egresados de las Normales Ru- rales del País: Cañada Honda, Aguascalientes; Tenería, Edo. De México; Amilcingo, Mo- relos; Panotla, Tlaxcala; Teletes, Puebla y El Mexe, Hidalgo; ante los hechos violentos ocurridos el 26 y 27 de septiembre de 2014, los cuales constituyen un crimen de lesa hu- manidad, en contra de nuestros hermanos menores, estudiantes de la Escuela Normal Ru- ral Raúl Isidro Burgosde Ayotzinapa, Guerrero; manifestamos nuestro más enérgico repudio a la acción perpetrada por la policía municipal de Iguala en contra de los nor- malistas. Por lo anterior: Exigimos La inmediata presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos. El esclarecimiento del asesinato de las 6 personas por elementos policiacos. Castigo a los culpables materiales e intelectuales de los hechos mencionados. El cese del hostigamiento a las Normales Rurales del país a partir de los hechos ocurri- dos en Iguala Juicio político al gobernador del Estado de Guerreo, Ángel Aguirre Rivero. Por último hacemos responsables al Gobierno Federal y Estatal como únicos responsa- bles de los hechos acontecidos en Iguala, Guerrero. Nos declaramos en defensa del Normalismo Rural ¡EGRESADOS DE NORMALES RURALES DE NORTE A SUR, EN PIE DE LUCHA! ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos! LOS DERECHOS SON IRRENUNCIABLES T al parece que en la Sección 36 los derechos laborales son algo pasado de moda y sin importancia. Ahora resulta que los jefes de departamento de secundaria (Telesecundaria, Técnicas y Generales) y los subdirectores de educación primaria, por indicaciones de la Sección 36, están solicitando a los solicitantes de la jubilación que se trabaje los 3 meses de la prejubilación porque no hay sustitutos que vengan a cubrir las vacantes. Los derechos no son a contentillo. Se cumplen o se violan, no hay términos medios. A nivel mundial y en nuestro país, las leyes son muy claras con respecto a los derechos laborales, estos son: irrenunciables, intransferibles e inaliena- bles, entre otras características. No es una responsabilidad para el trabajador que se va, después de haber cumplido los años requeridos para gozar de su jubilación, si hay o no hay sustituto, es responsabilidad del patrón, en este caso del gobierno (llámese estatal o federal). Las “autoridades” (ja, ja, y más ja, ja) se defienden dicien- do: “no estamos obligando a nadie, el que quiere cubrir su propia prejubila- ción es voluntario, bueno y hasta les vamos a pagar un dinero extra”. No obligan a nadie pero no procede el trámite de la jubilación si no firman de “conformidad” y “a petición propia” de que se quiere cubrir la prejubilación. Y los charritos de la Sección 36 coadyuvando a que se acaben con nuestros derechos. Que más podíamos esperar de estos traidores. Compañeros: Ustedes deciden si permiten, si dejan que les sigan arreba- tando sus derechos.

Upload: ediciones-del-poder-popular

Post on 06-Apr-2016

234 views

Category:

Documents


2 download

DESCRIPTION

Periódico de la Sección 36 del SNTE-CNTE del Magisterio Democrático del Valle de México

TRANSCRIPT

Page 1: Sin recreo 184

Mi-

Protestan frente a la Secretaría de Gobernación Laura Poy Solano Profesores del magisterio mexiquense que se oponen a la reforma educativa efectuaron una manifestación frente a la Secretaría de Gober-nación para exigir justicia para las víctimas de la violencia en Iguala, guerrero, que dejo seis personas muertas y 43 estudiantes de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa desaparecidos. Cerca de 200 maestros acudieron a las inme-diaciones de Gobernación para expresar su repudio a la “crisis de violencia” que enfrenta el país. Aseguraron que “hay hartazgo, no sólo en Guerrero, sino en todo el país, por tanto abuso, corrupción y agresiones que no tiene límite, frente a la inoperancia de las autorida-des e instituciones públicas”. Pedro Ramírez Vázquez, del magisterio disi-

dente, señaló que el Estado mexicano pretende soslayar su responsabilidad en los hechos de

violencia, pues “se menciona que los normalistas realizaban una labor de boteo en Iguala cuando

fueron agredidos, pero no quiere reconocer que se ven obligados a realizar esas tareas porque sus escuelas viven en el abandono, sin recursos”. Agregó que el estado de México es una de las regiones del país con los índices más altos de violencia: “Crecen los feminicidios, pero también los secuestros y robos. La calle se ha convertido en un peligro, al igual que el transporte público, y todo esto se ve reflejado en la escuela, donde además se viven los efectos nefastos de una reforma educativa que sólo ha generado mayor in-certidumbre laboral para miles de docentes que no saben si en diciembre próximo serán recontratados”. *Extracto de la nota aparecida en La Jornada el

viernes 17 de octubre de 2014.

Profesores mexiquenses exigen justicia para víctimas de la violencia*

¿ Cómo podemos leer la historia contemporánea? ¿Cómo podemos explicar a nuestros alumnos que la historia actual se debe leer con sangre? Sangre de quienes luchan por

la defensa de sus ideales libertarios, como aquellos héroes que reivindicamos porque nos dieron patria y una Magna Constitución, una de las cuales se precia de ser de las mejores del mundo. ¿Cómo explicar que después de 200 años de la independencia y 100 de la revolución la injusticia y la violación de los derechos de los pobres aún recorren nuestra patria? En la década de los 60s, la represión a médicos, maestros, y estudiantes, demostraron los resquicios de la imposición de quienes se ostentaron como herederos del gobierno revolucionario. No hubo peor masacre que la del aquel negro 2 de octubre de 1968 don-de miles de estudiantes perdieron la vida a manos del gobierno y su ejército, quienes vieron en las aspiraciones de una libre expresión de los jóvenes, el mayor de los desafíos y peligro para su sistema corrompido. En los 70s, la Guerra sucia acallo las voces de inconformidad con la desaparición forzada y el asesinato de cientos de activistas estudiantes, maestros, obreros y campesi-nos de organizaciones sociales e incluso guerrilleras. Mientras que en los ochentas la muerte y desaparición de profesores de la CNTE como Misael Núñez Acosta, Pedro Palma y Modesto Patolzin, por mencionar algunos fueron los que marcaron ese tiempo. Bajo el gobierno de Ernesto Cedillo, el 26 de septiembre de 1996 es desaparecido el profesor Gregorio Alfonso Alvarado López, pese a la denuncia hecha por la familia y él mismo, del seguimiento que días antes había tenido por parte de policías federales. Caso como el de los anteriores, no resulto hasta la fecha, ningún dato, ninguna respuesta. En esa misma década la matanza de 17 campesinos en la comunidad de Aguas Blancas y de al menos 11 civiles muertos en el Charco Guerrero, dejan el precedente de que la “Guerra en el Paraíso”, que nos narró Carlos Montemayor en su libro, aún no terminaba en el Estado de Guerrero. Igual ambiente de represión se preparó en Chenalhó ubicado en la re- (Sigue en la 4)

¿Cómo debemos leer la historia?

PRONUNCIAMIENTO

México, D. F., 11 de octubre de 2014.

Los abajo firmantes reunidos en la primera asamblea de egresados de las Normales Ru-rales del País: Cañada Honda, Aguascalientes; Tenería, Edo. De México; Amilcingo, Mo-relos; Panotla, Tlaxcala; Teletes, Puebla y El Mexe, Hidalgo; ante los hechos violentos ocurridos el 26 y 27 de septiembre de 2014, los cuales constituyen un crimen de lesa hu-manidad, en contra de nuestros hermanos menores, estudiantes de la Escuela Normal Ru-ral “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero; manifestamos nuestro más enérgico repudio a la acción perpetrada por la policía municipal de Iguala en contra de los nor-malistas. Por lo anterior:

Exigimos

La inmediata presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos. El esclarecimiento del asesinato de las 6 personas por elementos policiacos. Castigo a los culpables materiales e intelectuales de los hechos mencionados. El cese del hostigamiento a las Normales Rurales del país a partir de los hechos ocurri-dos en Iguala Juicio político al gobernador del Estado de Guerreo, Ángel Aguirre Rivero.

Por último hacemos responsables al Gobierno Federal y Estatal como únicos responsa-bles de los hechos acontecidos en Iguala, Guerrero.

Nos declaramos en defensa del Normalismo Rural

¡EGRESADOS DE NORMALES RURALES DE NORTE A SUR, EN PIE DE LUCHA!

¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!

LOS DERECHOS SON IRRENUNCIABLES

T al parece que en la Sección 36 los derechos laborales son algo pasado de moda y sin importancia. Ahora resulta que los jefes de departamento

de secundaria (Telesecundaria, Técnicas y Generales) y los subdirectores de educación primaria, por indicaciones de la Sección 36, están solicitando a los solicitantes de la jubilación que se trabaje los 3 meses de la prejubilación porque no hay sustitutos que vengan a cubrir las vacantes. Los derechos no son a contentillo. Se cumplen o se violan, no hay términos medios. A nivel mundial y en nuestro país, las leyes son muy claras con respecto a los derechos laborales, estos son: irrenunciables, intransferibles e inaliena-bles, entre otras características. No es una responsabilidad para el trabajador que se va, después de haber cumplido los años requeridos para gozar de su jubilación, si hay o no hay sustituto, es responsabilidad del patrón, en este caso del gobierno (llámese estatal o federal). Las “autoridades” (ja, ja, y más ja, ja) se defienden dicien-do: “no estamos obligando a nadie, el que quiere cubrir su propia prejubila-ción es voluntario, bueno y hasta les vamos a pagar un dinero extra”. No obligan a nadie pero no procede el trámite de la jubilación si no firman de “conformidad” y “a petición propia” de que se quiere cubrir la prejubilación. Y los charritos de la Sección 36 coadyuvando a que se acaben con nuestros derechos. Que más podíamos esperar de estos traidores.

Compañeros: Ustedes deciden si permiten, si dejan que les sigan arreba-

tando sus derechos.

Page 2: Sin recreo 184

Q uisiéramos en esta ocasión hablar de la cultura en el sentido amplio del término

"La cultura es el resultado de una serie de experiencias concretas que vivió a lo largo del tiempo el hombre como proce-so” (Antonio Gramsci), o bien: "El conjunto de rasgos distintivos espirituales y materia-les intelectuales y afectivos que caracteri-zan a una sociedad o grupo social y englo-ba, además de las artes y las letras, los modos de vida, las formas de convivencia, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias" (UNESCO). Nos preguntamos profundamente ¿en que cultura vivimos hoy los mexicanos? ¿Cuáles son nuestros valo-res y que formas de convivencia hemos construido o permitido que se establezcan entre nosotros? ¿Cuál es el rumbo de nues-tra salud social, cultural y de convivencia? Cuando nos enteramos de la barbarie co-metida por sujetos que matan con saña inaudita a sus semejantes, actos que quizá ninguna fiera sea capaz de hacerlos. Hoy con el corazón en la mano comparti-mos el profundo dolor, rabia e indignación de nuestros hermanos de Ayotzinapa ante los hechos horrorosos del 26 de septiembre de 2014 en Iguala Guerrero, donde 6 perso-nas fueron asesinadas, 3 de ellas estudian-tes, 20 lesionados y 43 estudiantes desapa-recidos de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, y desde nuestra trinchera de la cultura y el arte hacemos las siguientes reflexiones: Cuando hay pérdidas humanas en batalla de equilibrio de fuerzas, es decir cuando todos los contendientes poseen condicio-nes y armas similares, la percepción senso-rial social pudiera ser de razonable asimila-ción. Cuando hay certeza de que determi-nados individuos o colectivos cometen actos ilícitos, que actúan con crueldad

como en el caso que nos ocupa y se les aplica a los responsables el castigo mereci-do quizá se puede sentir que solo se hizo justicia. Pero cuando las acciones crueles son perpetradas contra seres humanos cuyas únicas "armas" y estrategias de "guerra" son la conciencia social y el pensamiento critico, y que actúan dentro del marco legal y legitimo luchando por sus derechos y libertades, cuando sabemos que dichas personas están indefensas en comparación con sus atacantes, y que sus actos son legítimos, nobles y limpios; entonces se desgarra el corazón, hay dolor empático y sentimiento de desgracia colectiva. El trauma es aún mayor porque ellos eran jóvenes estudiantes, que trabajaban y cultivaban su mente para construirse como sujetos pensantes y capaces de reinventar-se y reinventar su entorno, estas son pérdi-das que duelen en las entrañas y destruyen cada vez más la salud individual y social. Desde nuestra posición artística-cultural expresamos nuestro profundo sentir a través de esta humilde composición poéti-ca:

TIERNA PROMESA TRUNCADA

Destrucción de flores tierna promesa truncada futuro que nunca llegará porque la obscuridad lo ha devorado.

Bestias apocalípticas que arrasan con sus garras la pureza del pensamiento la soledad se familiariza.

Se enseñorea la maldad en noches negras y días aciagos valor en los espejos humanos ninguna represión nos detendrá.

Ayotzinapa vive la lucha sigue que regresen los desaparecidos. Y ¡que regresen vivos! Sí, ¡que regresen los desaparecidos, y que regresen vivos!

Profr. Crescencio Aguilar Macías

Página 2

N o hay palabras para describir lo que estamos viendo en Méxi-

co. No hay calificativos para descri-bir lo sucedido en el Estado de Guerrero en días recientes. De los asesinatos de 6 personas, entre ellos 3 estudiantes normalistas y de la desaparición de 43 jóvenes de la Normal de Ayotzinapan son res-ponsables directos el gobierno mu-nicipal, el gobierno estatal pero también el gobierno federal. Nadie duda que seguramente el narco está involucrado pero la res-ponsabilidad de la seguridad de los ciudadanos es del Estado (que in-cluye, entre otras “instituciones” a los tres órdenes de gobierno). Si fue el narco -como aseguran varias voces- entonces lo menos que ten-dríamos que decir, lo menos, es que el Estado esta infiltrado por el nar-co. Aunque muchas voces afirman que lo que vivimos es un narcoesta-do. De tal manera que la seguridad de los ciudadanos es sólo retórica. Los medios masivos de comunica-

ción –radio y televisión- están “preocupados por la suerte de los normalistas”. Pero esos mismos medios son los que una y otra vez han satanizado a los muchachos por luchar por mejores condiciones en sus escuelas. Esos mismos medios no se cansaron de repetir en muchas ocasiones que las Normales Rurales

eran nidos de revoltosos y agitado-res. Igual que hicieron contra los maestros que desde el año pasado nos hemos opuesto a la mal llamada reforma educativa; esos medios de “comunicación” se han cansado de satanizar la protesta social en con-tra de todas esas reformas que afec-tan al medio ambiente, a los pue-blos, a la gente, en una palabra a nuestro país. Todos los que nos hemos opuesto somos tratados por esos medios como nefastos para el “progreso”, o lo que ellos eufemís-ticamente llaman progreso.

Bueno, hasta el señor Chauyffet hoy se dice preocupado por la suer-te de los desaparecidos y por la sobrevivencia de las Escuelas Nor-males. No tiene vergüenza. Este señor es uno de los muchos que ha atacado a las Normales y a los maestros en general. Ante el horror que estamos vivien-

do la indignación es un buen co-

mienzo, pero debemos comprender

que es sólo eso, un comienzo. De-

bemos indignarnos ante todos los

atropellos que se cometen a diario

en nuestro país. Ante tanta violen-

cia que es propagada, en muchos

casos, desde las propias esferas

gubernamentales. Aunque para

detener esta violencia quizá no

baste con indignarnos, es necesario

actuar, hacer algo, todos y cada uno

lo podemos hacer. No permitamos

que el miedo se apodere de noso-

tros. Hay que participar en todo lo

que podamos para detener la vio-

lencia en contra de los movimientos

sociales y populares. Exijamos

todos la presentación con vida de

los 43 normalistas desaparecidos.

Esto no puede pasar ni olvidarse.

Editorial

HORROR E INDIGNACIÓN

D I R E C T O R I O

Esta publicación es responsabilidad del MDVM

Consejo editorial

╬ Profr. Marco Antonio Hernández Profr. Guillermo Ramos Profr. Enrique Andrés

Profr. Carlos Velásquez Profr. Francisco Cotero Profr. Gilberto Gómez Profr. Pedro Ramírez

Facebook: @sin recreo2012

COMENTANDO LA CULTURA SALUD SOCIAL Y CULTURAL

A RAUL ALVAREZ GARIN También tuve la suerte

de conocerlo, personalmente, después de una entrevista sobre la masacre de Tlatelolco;

me obsequió revistas y libros

en mayo, pero del ochenta

(y cinco).

Recuerdo sus buenos deseos

y sus palabras de aliento,

visitarlo nuevamente

… quedó pendiente.

Se fue el dirigente

que en todas las luchas

estuvo presente,

partió un fin de semana

el líder de ideas brillantes.

como el Che y cómo Zapata.

Fue en todo momento

(un ejemplo),

honesto y congruente

entre muchos, amigo

e inspiración de la CNTE.

Se fue el gran Raúl

a un cielo más azul,

indudablemente, a la Gloria,

allá lo esperaban Jesús

y los mejores hombres

que ha dado la historia.

Francisco Soto

Sep./oct. 2014

Page 3: Sin recreo 184

Página 3

E l maestro Fernando se decidió por fin a realizar ese viaje que hasta entonces había

sido solo imaginario y pospuesto por mucho tiempo. Llegó al puerto de Acapulco y de inme-diato se alojó en un modesto hotel. El calor era intenso, así es que se dio una refrescante ducha y se preparó para ir a la dirección que estaba escrita en un trozo de papel celosamente resguardado por él desde hacía más de treinta y cinco años. La letra aún era clara: “Si algún día quieres venir a visitarme en Acapulco, Guerrero, mi domicilio es: cerrada del Taconche número 25, queda detrás del mercado”. Durante todo ese tiempo el maestro Fernando había pospuesto este viaje, aunque durante su matrimonio había visitado el puerto varias veces con su familia en plan recreativo. Pero ahora, ya viudo, jubilado y libre de la responsabilidad de sus hijos, había decidido por fin realizar esa visita, aceptar esa invitación aunque con treinta y cinco años de retraso. El maestro caminó con paso firme a pesar del calor hasta el mercado y ahí preguntó por la cerrada. “Está aquí a la vuelta, aunque ya no es cerrada, ahora es avenida”, le contestó alguien. El maestro no tuvo mayores problemas para dar con la aveni-da y llegar a la casa marcada con el número 25. Era una casa modesta pero cuidada y se veía recién pintada, lo que le hizo pensar en la presencia de un hombre. Pero ese era un escenario que ya tenía calculado. Lo que verdaderamen-te lo cimbró, aunque también era una posibilidad prevista, fue ver arriba de la puerta un moño negro, evidencia de un no muy lejano duelo. Antes de decidirse a tocar a la puerta, el maestro Fernando se volvió a decir a si mismo lo que ya se había dicho muchas veces, pero ahora con mayor con-vencimiento: “esto es una locura. Tienes que estar loco para haber hecho este viaje y estar en este lugar”. Pero en realidad el maestro durante toda su vida había hecho cosas que para otros eran locuras y siempre le habían salido bien, así es sin dudarlo más tocó a la puerta y hasta el tercer llamado ésta se abrió y apareció ante él una mujer madura, morena, de rasgos mulatos y voz firme que le preguntó: “¿Si?, dígame. ¿En qué le puedo servir?” El maestro Fer-nando tardó en responder, pues ya la había reconocido: estaba ante quien fue su primera novia allá en sus lejanos años de estudiante normalista. La mujer tuvo que volver a preguntar al ver la mirada incrédula del hombre que había llamado a su puerta y solo

entonces éste le contestó: “perdón por la molestia, pero ¿aquí vive la señora Eva Florinda?” La señora cambió la posición de sus pies y contestó inmediatamente: “Si, soy yo, ¿para qué soy buena?” El maestro le aclaró: “pues yo soy Fernando Martínez. Ambos fuimos compañeros de estudios en la normal allá en la Ciudad de México y usted me invitó a visitarla” Entonces le mostró tímidamente el trozo de papel. La señora tomó el papel en sus manos y lo leyó. Luego lo miró detenidamente y le preguntó sorpren-dida: “¿así que tú eres Fernando?, Fernando ¿el novio que tuve en México?” y antes de que el maestro pudiera decir algo, la mujer estalló en una verdadera carcajada que duró varios segundos y el maestro no tuvo más que reír también, luego de lo cual le confirmó: “si, ese soy yo”. Y ya más calmada, la mujer le preguntó: “¿y qué haces aquí? ¿Qué buscas por acá?” “pues nada… solo vine a visitarte. A ver cómo estás”. Sin darse cuenta, ambos ya se habían tuteado, señal de confianza y la mujer lo invitó a pasar. Fernando y Eva Florinda habían sido sus respectivos primeros novios en sus años de estudiantes normalistas, cuando ambos no pasaban de los diecisiete años. Él era reconocido como el alumno más estudioso del grupo y ella por su belleza física, aunque también por ser mala estu-diante. En ese entonces, Eva Florinda era una hermosa joven costeña que acaparaba la atención de todos en la escuela y no solo por su hermoso cuerpo, sino porque acostumbraba asistir con ropa corta y ligera que apenas lograban ocultar sus encantos femeninos. Y fue en alguna ocasión que Eva Florinda le pidió a Fernando ayudarle en alguna tarea, que primero se hicieron amigos y luego novios. Ambos se complementaban mutuamente, pues mientras ella contaba con su apoyo para mejorar sus califi-caciones, Fernando disfrutaba no solo de sus atributos físicos, sino de su carácter alegre, bromista y relajado. Y en la escuela, cuando todos se enteraron de su relación, Fernando tuvo que soportar las bromas pesadas de sus envidiosos compañeros, pues había logrado conquistar a la

chica más guapa de la escuela. Eva Florinda vivía en un modesto departamento que rentaba junto con su hermano, tres años mayor y que era un practicante de judo. Por lo tanto tenía un cuerpo atlético y musculoso. Así es que cuando ella se lo presentó como su novio, en una de esas noches en que la acompañaba a su casa, su

“cuñado” no hizo más que imponer respeto y temor en Fernando. En consecuencia, cuando la llevaba a su casa, al momento de despedirse sólo lo hacía con un apretón de manos, pues el cuñado los observaba a la distancia. Sin embargo lo que tanto Fernando como Eva Florinda espera-ban, sucedió. Fue una noche de viernes que al llegar a su casa, ella lo invitó a entrar, pues según le explicó, su her-mano había tenido que ir a Acapulco por alguna emergen-cia familiar, así es que estarían solos. Y como dicen los que no pueden dejar de hablar: “para no hacerles el cuento largo”, pues pasó lo que ya se imaginan que pasó… Para ambos fue su primera vez y por lo tanto quedó grabado en sus historias de vida. Al siguiente lunes, Eva Florinda no asistió a clases y tampoco lo hizo el resto de la semana. Por esos años no existían los teléfonos celulares, ni el correo electrónico, ni el Facebook y menos el WhatsApp, así es que Fernando no tuvo ningún medio para comunicar-se con ella. Días después fue a su casa esperando encon-trarla o saber el motivo de su ausencia. Tocó varias veces a la puerta sin recibir respuesta, hasta que una vecina salió y le preguntó: “¿tú eres Fernando? Pues la señorita Eva me dejó un recado para ti” y le entregó un pedazo de papel arrancado de un cuaderno que tenía escrito un mensaje: “querido Fernando: ha sucedido algo muy grave en mi familia y seguramente ya no voy a poder seguir estudiando en México. Me regreso a Acapulco. Te quiero mucho y ojalá que no me olvides pues yo nunca te olvidaré. Si alguna vez me quieres visitar, vivo en cerrada del Tacon-che número 25. Está detrás del mercado”. FIN (de la pri-mera parte) Esta columna de “Histerias Magisteriales” se une a la exigencia y al clamor popular por la presentación con vida de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero. ¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUERE-MOS!

Prof. Carlos Velázquez Henríquez Correo Electrónico: [email protected]

HISTERIAS MAGISTERIALES

“UNA HISTÉRICA VISITA” (PRIMERA PARTE)

Profesor Juan García Ro-dríguez, tengo 40 años de servicio de manera ininterrum-pida. Trabajo en el nivel prima-ria, en el municipio de Naucal-pan. Aunque ya cuento con los años suficientes (hasta me so-bran) para poder jubilarme estoy esperando a que los maestros jóvenes –tanto los de recién ingreso como los que

tienen pocos años de servicio- despierten y luchen por sus derechos. ¿Van a luchar por mí? ¿Lucharan por beneficiar a los viejos? No, es por ustedes, por los jóvenes. Nadie va a venir a defender lo que ustedes no están dispuestos a defender. Aunque nunca hay que olvidar “que como me ves te verás”, no los convocó a que defiendan a los maestros que ya tenemos muchos años de servicio, los convocó a que se defiendan. Con la nueva ley del ISSSTE (2007) ya no goza-rán de una pensión, ahora con la mal llamada reforma educativa ya no podrán disfrutar de una estabilidad laboral. Los viejos nos vamos a ir pero ustedes se quedaran… bueno… si los dejan. Ustedes tienen la palabra, confórmense con lo que les dicen (autoridades y sindicato) o bien pónganse de pie y demanden y defiendan sus derechos.

Profesor Ciro Lozano Andrade,

cuento con 38 años de servicio, siempre

en el nivel de Telesecundaria. Me in-

corpore como trabajador en la Escuela

Telesecundaria 06, de la colonia Cara-

coles, Tlalnepantla, desde 1975. Desde

ese año participó en las filas democráti-

cas. Fui parte de la Comisión Nacional

de Maestros de Telesecundaria que dio

una importante batalla por lograr una

plaza base. Si, esa plaza que hoy osten-

ta el maestro que llega al nivel fue una conquista que obtuvo la

Comisión Nacional. Desde entonces participo en la lucha porque

estoy convencido que es la única forma legal y legítima para con-

seguir y defender nuestros derechos. Desde 1975 he estado en pie

de lucha por mejores condiciones salariales y laborales en benefi-

cio de todos, de todos los trabajadores sin excepción. Mientras

pueda seguiré luchando, no tengo ninguna duda y a esto los invito,

a que reflexionen y participen.

Todos y todas a defender la educación pública, la estabilidad laboral y nuestra plaza base

Encuentro del Magisterio Mexiquense realizado en Ixtapaluca, Estado de México, el sábado 18 de octubre

Page 4: Sin recreo 184

L A MASACRE DE ESTUDIANTES INDÍGENAS en Iguala el 26 y 27 de septiembre reviste una

gravedad extrema, aun para un país como el nuestro con tantos y tan severos síntomas de enfermedad y deterioro. Mutilado y en poder de políticos y millonarios irresponsables, corruptos, mentirosos, nuestro México doliente conoce ahora un nuevo tipo de dolor, un brutal avance del horror.

El crimen es racista en primer lugar. Los “ayotzinapos”, como los designó coloquialmente un funcionario local antes de echarse a correr como prófugo de la justicia que él representaba, suelen ser despreciados y temidos por la población mestiza de Guerrero, especialmente de Iguala. Comercian-tes, profesionistas, políticos, policías, burócratas y clases medias ven a los indios con rechazo. Como en todas partes, ni que tuvieran la exclusiva. Sus vidas y sus muertes son percibidas como fáciles y baratas, más ahora que llevamos años cargando miles de muertes gratuitas, noticias para arruinarnos el desayuno o desgraciarnos la vida de un momento a otro.

El indio puede venir en cualquier presentación: maestro, campesino, policía comunitario, cargador, migrante, chofer, comerciante, artesano, dirigente social, autoridad ejidal… estudiante. El sistema les tiene declarada una guerra de exterminio a todos. Lo mismo si se rebelan que si no. Y por eso vuelven a rebelarse, oportunidad que aprovecha el sistema, no para escucharlos sino para golpearlos más.

La obvia participación del crimen organizado en los “hechos” (expresión impoluta del presidente Enrique Peña Nieto) no descarga de responsabilidad al Estado; de hecho la incrementa, dada la relación no por reiterada y común menos escandalosa, de que el sistema político (partidos, funcionarios del nivel que sea, fuerzas de vigilancia y seguridad) está vinculado con agrupaciones criminales, las cuales representan solamente una forma más de hacer negocios en el actual neoliberalismo donde unos y otros se sienten tan cómodos; pueden incumplir ciertas leyes, pero nunca las del mercado. Hoy no se gobierna, los poderes hacen negocios. La guerra misma es parte de un esquema de expansión e inversión.

La masacre de Iguala es un crimen político. Que la mano ejecutora sea basura del PRD es irrelevan-te; ayer eran del PRI, y sus seguidores y secuaces mañana lo volverán a ser. La orden de desgraciar a los muchachos de Ayotzinapa no se explica como “locura” de un sicario encarrerado. Devela una situación social y una clase dominante harta de los indios levantiscos en cualquiera de sus presentacio-nes, y si “ayotzinapos”, peor. Y es un mensaje elocuente a los pueblos, municipios y comunidades indígenas de Guerrero y otras entidades de donde

llegan jóvenes a la Normal Rural agredida (los “afectados”, del eufemismo presidencial). A los me’phaa, na’ savi, amuzgos y nahuas de la región, cuyos hijos son alumnos de Ayotzinapa. A la de por sí asediada Policía Comunitaria de la Montaña y la Costa guerrerenses. A los defensores de derechos humanos. A los maestros democráticos. A las organizaciones indígenas y campesinas indepen-dientes.

Ahora, abiertamente, la represión incluye un nuevo socio: el aparato de matones, violadores, secuestra-dores y extorsionadores que llamamos pomposa-mente “crimen organizado”. Resulta ya inequívoca la asociación policías-criminales. Y sería estúpido pensar que se trata de un problema municipal del Guerrero bronco, o de unos cuantos vivales incrus-tados en un ayuntamiento. Contra lo que fabrican el discurso oficial y sus ecos mediáticos, la masacre los desnuda a todos, a los “buenos” y a los “malos” (como lo veían los panistas en su Disney-landia), se hacen trabajitos unos a otros todo el tiempo. Necesitamos recordar cuán conveniente resulta para mineras y desarrolladores turísticos la actuación de paramilitares, bandas armadas, policías al servicio de quien los contrate para permanecer agazapados como fuerzas del orden. El orden, la seguridad, la administración de justicia, la protección de los ciudadanos. En manos de ellos.

Como la de Acteal, la masacre de Iguala es de trascendencia nacional, y por ende escándalo mundial. El “tamaño” de una masacre no sólo se mide en el número de víctimas directas e indirectas, por más que cada vida perdida cuenta, y aunque medios y funcionarios tiendan a diluir, falsear o

trivializar las cifras y el fondo de los acontecimien-tos, sobre todo las papas calientes como ésta. Toda vida humana es sagrada (aunque en México nos quieran convencer de que vale madres). Los críme-nes masivos abren grietas terribles por las cuales, pese a nuestro dolor y nuestro espanto, se cuela la luz y los vemos a ellos tal cual son: delincuentes con fuero y poder. Acteal fue parte orgánica y calculada de una guerra “de baja intensidad” que salió del escritorio presidencial, en una situación de contrainsurgencia diseñada por profesionales, dirigida a un “enemigo interno”: la rebelión zapatista y su entorno. Aquellos caídos eran familias de unas cuantas comunidades vecinas. Sus asesinos (con entrenamiento, respaldo y encubrimiento de solda-dos federales, policías estatales y municipales, y la tolerancia del gobierno estatal) eran hermanos, primos o vecinos suyos, convertidos en un arma letal, “desde dentro”. Ése fue un caso flagrante de crimen de Estado.

Lo ocurrido en Iguala es un agravio con muchos destinatarios. Un disparo de grueso calibre cuyas balas expansivas impactan blancos múltiples, algunos imprevisibles. Los estudiantes vivos, fallecidos y “desaparecidos” (un ser humano no desaparece, según sostienen los defensores de derechos) son hijos y hermanos de gente que lucha y lo ha hecho durante generaciones. Gente que, a diferencia de los gobernantes y los ricos, no se asocia con los grandes consorcios llamados cárte-les del narcotráfico y el sicariato profesional. Gente que, ahí donde la ven, defiende la propiedad social y comunal, la educación pública, sus lenguas, el territorio y la dignidad, inagotable en ellos.

¿Mano negra en Iguala? ¿Ejemplo palmario de la “trivialidad de mal” que encontró Hannah Arendt en los verdugos nazis? Manifestación horrible de la debacle moral que permite que un cuerpo de policías y ministerios públicos acate órdenes para liquidar a decenas de estudiantes revoltosos y tirarlos al basurero, de por sí lleno de cadáveres de la temporada actual de cacería humana. Fosas de la vergüenza nacional en caminos con olor a muer-te, en tierras donde el silencio quiere mandar. Ahora la muerte ha chocado con la Normal Rural de Ayotzinapa, escuela de individuos libres y concien-tes, comprometidos con el cambio social y la resistencia de sus respectivos pueblos.

No nos engañemos, la matanza “municipal” que nos quieren vender (ah que alcalde tan cabrón) no es mera nota roja triple A, sino señal de alerta, un llamado. Además de provocación, es una demostra-ción: el poder en México es criminal. Con su eviden-cia hemos topado. Nuevamente. ¿Y ahora qué?

Fuente: Ojarasca, Suplemento mensual en línea de

La Jornada, N° 210, octubre de 2014.

Página 4

La hora del horror ¿municipal?

Toca en esta oportunidad al signo de “Géminis”, o sea a los nacidos entre el 21 de mayo y el 20 de junio. SÍMBO-LO: los gemelos (de un lado el malo y del otro el peor). ELEMENTO: aire o sea que es muy volátil… a las primeras de cambio, vuela. PLANETA: Mercu-rio, dizque por elocuente. GEMA: ága-ta, tu lado “hippie”. METAL: mercu-rio, o sea el primero. FRASE CLAVE: “yo hablo sin parar y qué”. ¿CÓMO RECONOCER A UN “GÉMINIS”?: Como director: está de la fregada traba-jar con él, pues a cada rato cambia de opinión el muy ca…becilla. En un mo-

mento dice esto es negro y al rato dice que es blanco. Así es que lo mejor es seguirle la corriente. Como maestra: un día

deja una tarea y al siguiente dice que fue otra. Y a todos les pone tache en tareas. Como maestro: acostumbra decir si pero no, no pero si, de acuerdo a las circunstancias, muy camaleón el rejijo. Como hombre: un golfo. Como mujer: una zorrona. PREDICCIONES PARA “GÉMINIS” EN ESTE CICLO ES-COLAR: si no cambias vas a seguir contradiciéndote a cada rato, vas a seguir con tu maldito mal humor. Te vas a dar cuenta de que tu pinche mal hu-mor ya llegó a su límite y que en verdad eres una persona mala onda. Trabajo y escuela: nadie en tu escuela sabe quién

serás hoy y menos quién mañana. Vaca-ciones: cuando estás trabajando quieres vacaciones y viceversa ¿quién te entien-de? Alumnos: te seguirán aplaudiendo por tus ocurrencias, pero ya están hasta la madre de ellas, pues siempre son las mismas. Sexo: eres extremadamente generoso y te gusta lo variadito, pero tus variaciones ya aburrieron. Evaluación docente: como tu trabajo te aburre hasta el cansancio, estás en espera de que los charros sindicales hagan circular las respuestas del próximo examen. Y en vez de estudiar, estás ahorrando para comprarlo. Y para finalizar: ¿POR QUÉ UN GÉMINIS CRUZÓ LA CALLE? Porque pensó que su alma gemela vivía enfrente. Fuente inspiradora: Revista Algarabía Número 6

TARJETA OBLIGATORIA

Que no nos van a preguntar… bueno nunca nos preguntan, menos nos consultan. Ni siquiera tuvieron la amabilidad de explicarnos porque en la 2da quincena de septiembre modi-ficaron la clave presupuestal y porque en la primera de octubre regreso a la anterior. No, nadie nos informa ni nos explica. Ahora salen con que ya todos vamos a cobrar la quincena con tarjeta bancaria. El artículo 123 constitucional y la ley de trabajadores al servicio del Estado, dice que se “nos pagará con moneda corriente”. Ni siquiera dice cheque. Los que tenemos ya algunos años de servicio recordamos que antes se nos pagaba con cheques de la Tesorería

Federal que podíamos hacer efectivo en cualquier institu-ción bancaria. Luego no lo restringieron a un solo banco, ahora a plástico. ¿No sería mejor que se nos volviera a pagar con cheques universales que pudiéramos cambiar en cualquier banco? ¿No sería mejor que cada quien decidiera si tiene una o varias tarjetas del banco de su preferencia? (Lo anterior suponiendo que existiera un banco de preferencia). ¿No sería mejor que cada quien manejará su sueldo, ya ganado, como mejor le parezca? Nos tratan como niños tontos porque nos dejamos. Siga-mos dejándonos y después no habrá nada que decir, ni nada que hacer.

Horóscopos en Sin recreo

“Géminis”

S I L A B A R I O

Cartel, mitin en Gobernación

gión de los Altos de Chiapas donde 45 indígenas tzotziles incluidos niños y mujeres embarazadas, fueron acribilla-dos so pretextos de problemas étnicos y religiosos, no obstante fue más que claro que el objetivo fundamental era desarti-cular las bases sociales que ahí se orga-nizaba. Para el 2011 el Gobierno de Guerrero se ve manchado de sangre al ser respon-sable del asesinato de dos estudiantes normalistas de Ayotzinapan. No confor-me con ello nuevamente el Gobierno José Luis Abarca del municipio de Iguala con anuencia de Ángel Aguirre gobernador del estado, se mancha las manos de san-gre con la muerte de seis personas donde se encuentra una maestra, un niño de 15 años, un alumno normalista desollado y 43 estudiantes normalistas desaparecidos. Situación que deja a colación importan-tes hechos, por un lado, los nexos que sabe tienen el gobierno en todos sus niveles con las bandas organizadas y el narcotráfico. Por el otro, que no importa que partido sea, los lazos de corrupción existen y perduran en cualquier gobierno sea del color que sea. La violación a los derechos de libre expresión de organizaciones sociales, sindicales, estudiantiles políticas y de reporteros será una constante, en tanto los mafiosos que se apropian de las estructu-ras gubernamentales vean en ello un peligro para su sobrevivencia, en tanto permanezcamos desorganizados e indo-lentes frente al asesinato a mansalva y a la desaparición forzada. Parafraseando al cantautor Piero “¿Cómo le cuento a mi gente lo que pasa en esta tierra?… Las cosas se cuentan solas, solo hay que saber mirar... ¿Cómo contar lo que pasa, con mi gente y su pobreza?... ¿Cuantos voces se callaron a machetes y a balazos? Hay país, hay país, hay país”. ¿Cómo contar esta historia a nuestros niños y gentes? ¿Cómo decir que las muertes de miles, a veces quedan sin frutos cuando se sigue masacrando, asesi-nando y violando a todo a aquel que le sea incomodo a quienes se apropiaron de nuestro país bajo el garrote, la bala y sangre?

Maestras de Secundarias Generales

de Nezahualcoyotl

¿Cómo debemos… (Viene de la 1)