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Facultad de Pedagogía
Cultura e institución universitaria. El Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de
Monterrey, campus Colima
Tesis Que para obtener el grado de
Maestra en Pedagogía
Presenta
MA. DE JESÚS SAUCEDO AVALOS
Asesor
Dr. Antonio Gómez Nashiki
Villa de Álvarez, Col. Novie mbre 2009
Agradecimientos
A las instituciones Escuela de Trabajo Social “Vasco de Quiroga” Cursos de Verano y Supervisión Continua, Universidad Iberoamericana plantel Santa Fe, Le Institut Lumen Vite con sede en Bruselas, Bélgica, la Universidad de Guadalajara, el Centro de Estudios Ecuménicos, A.C., el Instituto de Promoción y Cultura, A.C., el Fondo Nacional de Becas Crédito, A.C., a la Fundación Justicia y amor, I.A.P., a la Fundación ProEmpleo, A.C., a la Institución Anáhuac Colima. La trayectoria compartida ha sido un incentivo en la realización del presente estudio. Al CONACYT Por su apoyo en la formación de profesionales en el área. A mi asesor de tesis El Dr. Antonio Gómez Nashiki, por su acertado acompañamiento durante la investigación y por su amistad. A todos mis profesores del programa de Maestría en Pedagogía Por haber contribuido en mi formación profesional. Mención especial al Mtro. Francisco Montes de Oca, y la Mtra. Carmen Silvia Peña Vargas por su apoyo significativo. A mis lectoras Las Maestras: Mirtea Elizabeth Acuña Cepeda y Hortencia Alcaraz Briceño, por sus conocimientos compartidos. A mi familia Por ser un espacio en donde lo sueños se convierten en desafíos y metas compartidas. A mis amigos y amigas A los de ayer, a los de hoy, a los de siempre.
En memoria, a mi padre Fernando (+)
A María, mi madre (+)
Con cariño
INDICE
INTRODUCCIÓN
Capítulo I Un modelo de educación privada
1.1. Educación y evangelización. El origen de un modelo educativo 18 1.2. La primera universidad en México 20 1.3. Educación y cambio social 22 1.4. El sistema educativo. Entre liberales y conservadores 23 1.5. Los cambios en la educación. La Revolución de 1910 25 1.6. La educación privada en México. La historia que nos acompaña 27 1.7. Regionalización de la educación privada 30 1.8. Comportamiento de la matrícula 33 1.9. Clasificación de instituciones de educación superior privada 37 1.10. Breve semblanza de la educación superior en Colima 38 1.11. El Estado de Colima. El sexenio de Miguel de la Madrid (1982-1988) 43 1.12. Iniciativa y prestigio social. El ITESM campus Colima 46
Capítulo II La institución: cultura, organizació n y estilo institucional 2.1. La institución. Un concepto y varias definiciones 50 2.2. Del origen a la función de la institución educativa 63 2.3. Cultura institucional 70 2.4. Cultura organizacional 78 2.5. Dinámicas instituidas e instituyentes 83 2.6. Los ejes fundamentales del caso investigado 85
Capítulo III Para reconstruir la historia: la ex ploración etnográfica 3.1. La perspectiva cualitativa y el enfoque etnográfico 92 3.2. El análisis como herramienta metodológica 94 3.3. El ingreso al campo de estudio 98 3.4. Análisis e interpretación de los datos 101
Capítulo IV El ITESM campus Colima. El análisis d e los hechos 4.1. El sistema educativo del Tecnológico de Monterrey 107 4.2. El campus Colima. La calidad como principio 109 4.3 Los fundadores y el proyecto fundacional 112 4.4. Una institución educativa de prestigio en la región 117 4.5. Los rasgos culturales característicos 121 4.6. El campus Colima. “Un oasis en el desierto” 126 4.7. El sistema de valores en la educación que se imparte 133 4.8. La universidad TecMilenio. “Un tesoro distinto” 135 4.9. Los EXATEC 139 Capítulo V El final que no concluye. Una instituc ión en constante cambio 5.1. El recuento del pasado que está presente
142
ANEXOS Anexo 1 Guía de observación no participante 156 Anexo 2 Guía de entrevista informantes 157 Anexo 3 Relación de entrevistas 160 Anexo 4 Carreras profesionales 1984-2007 161 BIBLIOGRAFÍA 162
RESUMEN
La tesis se centra en un estudio de caso, el Instituto Tecnológico y de Estudios
Superiores de Monterrey (ITESM) campus Colima. Es una investigación de corte
cualitativo que utiliza herramientas etnográficas, con la finalidad de dar cuenta de la
cultura y estilo institucional, así como los rasgos predominantes de su cultura
organizacional.
A partir de la utilización del análisis institucional, herramienta teórica-
metodológica, se analizan los objetivos de una institución de educación superior
privada: datos de su historia, rasgos fundacionales, trayectoria de los sujetos, oferta
académica y, desde luego, el modelo y los principios educativos que la caracterizan.
El trabajo teórico y de conceptualización utilizado se ilustra con los testimonios
y registros de momentos decisivos, en donde se muestran las opiniones de
informantes clave y testimonios de maestros, alumnos, ex _ alumnos, y directivos
que han participado en la conformación de un proyecto institucional con larga
trayectoria que recupera en su filosofía y mandato rasgos de una cultura que está
presente en el quehacer cotidiano y que es denominada por sus integrantes como
regiomontana.
9
SUMMARY
The thesis is center in one case study in the Technological Institute of Superior
Studies (ITESM) Colima campus. Is qualitative investigation, with ethnographic
methods with the porpoise of studying the organizational culture and it´s predominant
characteristics.
With the use of the institutional analysis as a theoretic-methodological tool, the
objectives of the institution of superior education are analyzed: historical data,
foundational characteristics, trajectory of the subjects, academic offer and the model
of the educative principles that characterized.
The theoretical work and conceptualization used, is illustrated with the
testimonies and the registration of decisive moments, in which they show the opinions
of key informants and testimonies of teachers, students and former students, who
were participants en the conformation of an institutional project with long trajectory
that recovers the philosophy and leadership of a culture, present in the everyday
which is denominated by his members as regiomontana.
10
Introducción
11
Las instituciones son insustituibles en la vida del ser humano. Constituyen un factor
primordial en la vida de las organizaciones sociales, en el desarrollo de las
sociedades y para impulsar el bienestar de un país; las instituciones son espacios
privilegiados para la generación y trasmisión de saberes, de aprendizajes colectivos
y por ende de una cultura que se va forjando al interior de cada una de ellas a partir
de sus fines y objetivos para los que fue creada.
Las instituciones educativas se ubican en un papel preponderantemente
privilegiado. Al interior de las mismas se generan esquemas culturales que son
reproducidos en los centros escolares, y que a su vez impactan en la sociedad en la
medida en la que sus integrantes y quienes egresan de dichas instituciones se
desarrollan e interactúan en las diversas esferas sociales. Ese es su fin último,
preparar a los individuos para vivir en sociedad, impulsar su desarrollo, para la
obtención del bienestar que requiere la sociedad.
El ITESM campus Colima, en tanto institución educativa nos permite identificar
aspectos de la cultura institucional, la cultura organizacional y el estilo de un
establecimiento de educación superior privado, en la que en la memoria de sus
integrantes aún está vivo el mandato social de sus fundadores, sus ideales, el sueño
de desarrollo, quedaron en el registro de la historia marcada por la cultura
regiomontana. En retrospectiva, la fundación del campus traería como consecuencia
prosperidad en la región; un sueño que para muchos se logró materializar, y en otros
la visión de ese sueño no se cumplió del todo.
El propósito es describir desde la narrativa las condiciones en las que se crea el
Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey campus Colima. En los
relatos juegan un papel importante: el contexto, las condiciones socio-económicas y
políticas que hicieron posible, la participación del sector productivo, el apoyo de los
pioneros, la respuesta de un sector de familias de la población colimense que apoyó
la iniciativa de tener una educación de mayor nivel y calidad con reconocimiento
internacional. 12
El enfoque exploratorio centra su atención en aquellos elementos que aportan
principios y fundamentos para caracterizar al ITESM campus Colima en tanto
institución educativa. Desde esta perspectiva, los aportes de las disciplinas: como la
historia, sociología, psicología educativa, psicoanálisis, pedagogía, teoría
institucional y la antropología, han sido fundamentales en la construcción de un
marco teórico-metodológico, herramienta para el análisis institucional. La finalidad
de construir un instrumento de análisis, nos da la posibilidad de conocer y estudiar a
las instituciones desde el origen: el mandato social, sus implicaciones en la sociedad
referidos a logros, dificultades, continuidad del proyecto, expansión, crecimiento,
decremento, surgimiento de nuevos proyectos, innovación o muerte de las
instituciones.
El análisis institucional aporta una serie de elementos fundamentales para la
comprensión de su quehacer, sin duda, le acompaña el cumplimiento de un ideal
educativo, que se debe reflejar en el desarrollo de todos los aspectos que la
conforman; así como conocer los esquemas culturales organizativos creados para
lograrlo. El sentido de inclusión y exclusión social implícitas en sus dinámicas
instituidas e instituyentes, Fernández (1994), es una forma de conocer cómo se
asegura la continuidad de la sociedad que las sostiene, a través de la trasmisión de
la cultura que la define como tal.
El punto de partida nos refiere a los siguientes cuestionamientos:
• ¿Cuál es el origen del conjunto de rasgos y particularidades propias e
inherentes del ITESM Campus Colima?
• ¿Cuáles son los componentes que le otorgan el distintivo de ser una
institución de prestigio social, con un alto nivel académico?
• ¿En qué sustenta su cultura organizacional que la distingue en ser una
institución con un estilo institucional propio y con una visión empresarial en la
forma de dirigir el establecimiento escolar?.
13
El proyecto de fundación como idea surge a finales de la década de los 70s, y
se funda en 1980. Es el Sr. Guillermo Brun, un reconocido empresario, cuyos
orígenes se remontan a las familias de inmigrantes francesas que se establecieron
en Colima y la región de Jalisco; quien toma la iniciativa y forma al grupo de pioneros
que asumieron el desafío y emprendieron el proyecto de la fundación. El Sr.
Guillermo Brun tiene una gran trayectoria, reconocido en el ámbito de la filantropía
por su compromiso social; es un gran promotor de proyectos para la beneficencia
asistencial y de promoción social. Fundador y Presidente vitalicio del Consejo del
Patronato del ITESM campus Colima. En el 2002, recibió el premio Eugenio Garza
Sada.
La fundación del campus respondió a la necesidad de elevar la calidad de la
educación superior, diversificar la educación y crear una opción de un sistema
educativo con las características del Tecnológico de Monterrey; tal y como lo señala
un directivo al que fue entrevistado:
La fundación del campus Colima, ¿Qué significaba?, calidad académica,
mentalidad innovadora, emprendurismo (…), liderazgo, modernidad, otra forma
de trabajo, otra forma de estudiar, definitivamente con todo el respeto lo digo. Y
para la gente que se adaptó al sistema educativo (…) muy bien verdad, y con
todo respeto: el mejor sistema educativo que conozco (E.01/ 03-10-08).
El relato anterior expresa un principio de calidad académica que da pauta a la
fundación del proyecto educativo: rigor académico, innovación, visión empresarial,
nuevas formas culturales de estudio. Aspectos que darían identidad y un estilo
particular, “Un componente esencial del modelo educativo del Tecnológico de
Monterrey es el proceso de enseñanza y aprendizaje, en el que los alumnos asumen
un papel activo y comprometido con su propio aprendizaje, bajo la dirección y guía
de sus profesores (El Modelo Educativo del ITESM).
14
El trabajo de tesis que aquí se presenta, estuvo orientado por las siguientes
preguntas de investigación: ¿Cuáles son los rasgos que constituyen la cultura
institucional del Instituto Tecnológico y Estudios Superiores de Monterrey Campus
Colima?, éste cuestionamiento de fondo, dio paso a las siguientes preguntas:
� ¿Cuáles son las dinámicas instituidas e instituyentes de grupos y sujetos en el
espacio institucional?
� ¿Cuáles son los rasgos de la cultura organizacional sobre los cuales se
desarrolla el funcionamiento de la institución?
� ¿Cuáles elementos definen el estilo institucional del Instituto Tecnológico y de
Estudios Superiores de Monterrey Campus Colima?
Una etapa previa para el resultado final, fue haber hecho ese breve pero
sustancioso recorrido histórico de la educación privada en México y en Colima. Así
como, las condiciones sociales que dieron origen a la fundación del ITESM campus
Colima. Caracterizar el funcionamiento del establecimiento educativo para conocer
cómo se manifiesta la cultura institucional. Describir a los grupos, subgrupos, sujetos
e interacciones en la institución y su posicionamiento en la cultura institucional,
identificar los principios, motivaciones y valoración de la educación superior que
ofrece el campus Colima.
Desde este marco de referencia, el documento final está construido de la
siguiente forma:
El Capítulo I describe a través de un breve recorrido histórico cómo se fue
conformando un modelo de educación privada. Su carácter confesional arraigado en
la Nueva España a través de la pedagogía de la evangelización; posteriormente las
corrientes educativas socioculturales que impulsaron una educación de clase, en
vistas de crear cambio y desarrollo en la nación mexicana. Hasta la etapa de
regionalización y diversificación de la oferta educativa y cómo estos cambios se
fueron suscitando en Colima.
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El Capítulo II, está dedicado a la construcción del marco teórico del proyecto.
Lo conforman tres vertientes constituidos en el eje vertebral: el concepto de
institución, de estilo institucional y cultura organizacional. El punto de partida es la
definición de los conceptos desde los diversos aportes de los teóricos sociales. Las
definiciones que ofrecen las disciplinas de las ciencias sociales ayudan a la
comprensión de los componentes de una institución educativa, del concepto de
cultura y cómo se definen la cultura organizacional que la hace emerger y de su
estilo institucional que marca la diferencia.
El Capítulo III, la exploración y la etnografía. Para reconstruir la historia. Es el
capítulo destinado a describir la metodología empleada, explica el tipo de
investigación, el enfoque, el proceso metodológico para reconstruir la historia del
establecimiento a partir de los sujetos y actores involucrados.
El Capítulo IV. El análisis de los hechos. Se hace una caracterización de los
rasgos y particularidades propias de una institución de educación superior privada: El
Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey campus Colima. Su
estilo institucional, y la cultura organizacional que le sustenta.
El Capítulo V está dedicado a las conclusiones. El final que no concluye. Una
institución en constante cambio. Se retoman los hechos más sobresalientes y
trascendentales que permean la investigación, misma que concretan las grandes
líneas que guiaron el presente trabajo. Se hace alusión a los elementos que aporta el
estudio realizado sobre la importancia que adquiere el análisis institucional en la
investigación educativa. Se plantean posibles rutas para dar continuidad a la
investigación.
16
Capítulo I
Un modelo de educación privada
17
1.1. Educación y evangelización. El origen de un mo delo educativo
Si bien es cierto que la educación en la Nueva España, “las estructuras educativas
de la cultura prehispánica fueron destruidas por los conquistadores, siendo
necesario trasplantar a las nuevas tierras descubiertas el modelo educativo
imperante en España” (Tirado, 2002:17), no podemos negar el hecho de que la
composición social arraigada en la cultura indígena, haya sido la base sobre la cual
la Iglesia Católica, como institución desempeñaría su obra evangelizadora y
educativa del siglo XVI.
“De las concentraciones humanas mayores, surgieron las principales
poblaciones y ciudades, que fueron centros sociales, políticos, y
religiosos, de una amplia región; y en tales centros, la acción
educativa trascendió la forma vital, para especificarse en metas más
elevadas y complejas, y por lo tanto, en contenidos adecuados. De la
misión se pasó a la catequesis eclesiástica, luego a la educación
escolar” (Villalpando, 2000: 138).
El desarrollo educativo en la Nueva España se fue conformando por la
influencia de un modelo de producción imperante al cual le subyace una forma de
pensamiento social y filosófico que sustenta el poder y las diversas expresiones que
se derivan. La educación en “la Nueva España, se caracterizó por ser una
instrucción fundamentalmente teológica destinada a cubrir las demandas laborales,
docentes y de investigación generadas por la explotación de las riquezas naturales y
los servicios de grupos dominantes” (Robles, 1997:11). Las implicaciones de la
organización feudal establecida, dieron origen a una relación desigual, creando
situaciones de marginación entre los indígenas en contraposición al gran desarrollo
educativo de la época que se convirtió en un tema privativo de españoles,
peninsulares y criollos.
18
En este rubro se Incluyen a los establecimientos de origen laical, la enseñanza
tenía fuertes vínculos respecto a los objetivos del poder económico colonizador, los
beneficios socioeconómicos eran para los españoles en primer término. Es decir,
significó una lucha entre dos culturas, forjándose así una nueva visión de sociedad y
de Estado. Este hecho trajo consigo la adhesión de la religión católica a los usos,
costumbres, tradiciones, y legislación a la incipiente idea de nación en la Nueva
España.
Se puede decir que en México, la educación privada tiene su origen en las
iniciativas de la Iglesia Católica como institución, apoyadas por la Nueva España en
tanto gobierno; al mismo tiempo que surgen una serie de proyectos provenientes de
particulares; familias que ponían sus bienes a disposición de la Iglesia para apoyar la
educación. “El trasplante cultural planteó una primera exigencia: llevar a los
naturales a un cambio de vida (…), comprendía la adopción de usos, practicas y
costumbres de la civilización occidental” ( Villalpando, 2000: 137).
¿Qué rasgos característicos adquiere esta educación conforme a los cambios
socio-políticos?, ¿De qué manera la educación salvaguardó los intereses de la
elite?; en primera instancia, es importante ubicar que la educación privada
(confesional o no), se constituye a partir de la conformación de los grupos de poder y
sus tendencias dominantes.
Tendencias a las que le subyacen un conjunto de ideas filosóficas, religiosas,
culturales, sociológicas, económicas, políticas, pedagógicas, que finalmente definen
un sistema educativo impulsado por la Iglesia y apoyado por la Corona en la Nueva
España. En este sentido los cambios educativos a partir de la fundación del Colegio
de Tlatelolco, las escuelas parroquiales, y la serie de iniciativas en materia de
educación, fueron testigos del acontecer de una nueva etapa. “La fundación de la
Universidad simbolizaba, además, el término de una etapa y el comienzo de otra en
la vida novohispana. (…), implicaba la postergación del indio y el encumbramiento
del español, o mejor dicho del criollo” (Kobayashi, 1997:277).
19
1.2. La primera universidad en México
Las iniciativas en materia educativa en la Nueva España, fueron siendo notables,
Tirado (2002) refiere al mencionar que, a “escasos 30 años de la fundación de las
escuelas en la Nueva España, ya se percibía en los círculos cultivados de la élite
española y criolla la inquietud por crear una institución de alto rango académico
como las que existían en Europa, es decir, una universidad.
El propósito era convertir a esta institución en el centro de las ideas y
resolución de los conflictos suscitados entre los conquistados y los conquistadores
en la convivencia cotidiana. La primera Cédula de creación de la Real y Pontificia
Universidad de México, fue firmada en 1547, conforme a las constituciones de la
Universidad de Salamanca. La definitiva se conoce en 155, gracias al esfuerzo
constante del Virrey Antonio de Mendoza (Robles, 1997:15).
Para el siglo XVII, la Real y Pontificia Universidad gozaba de plena fama
entre criollos y europeos en toda América, siendo semillero de grandes y
prestigiosos intelectuales y académicos que servían a las diversas tareas
administrativas surgidas de las actividades eclesiásticas y de la Corona en la Nueva
España. “Las órdenes religiosas enseñaban en la universidad y también en los
colegios de estudios superiores como fueron el Colegio de La Santa Cruz de
Tlatelolco, El Colegio de Santa María Mayor de Todos los Santos, El Colegio de San
Ildefonso, en la ciudad de México y El Colegio de San Nicolás en Michoacán”
(Tirado, 2002: 24).
La formación preuniversitaria de las clases altas estaba en manos de la
Orden de la Compañía de Jesús, “los jesuitas fomentaban en dicho grupo los
principios fundamentales de la dominación económica y social. Las cuotas elevadas
y un estricto control en las inscripciones fueron requisitos básicos para conseguir
una alta calidad académica en sus escuelas. Los egresados de instituciones jesuitas
eran garantía de eficacia y habilidad para el ejercicio de las funciones más delicadas
en la jerarquía de poder (Robles: 1997:17).
20
Pero no sólo los jesuitas reprodujeron este modelo, los grupos religiosos se
sumaron a estos esfuerzos y se fueron incorporando a la tarea educativa y
evangelizadora de la Nueva España ya que la escuela formaba parte del aparato
ideológico dominante.
Referirnos al origen de “la historia de la educación superior en México, debe
visualizarse la constitución de un sistema privado de educación en su relación con
la constitución de la hegemonía de la clase dominante y por lo tanto de la expansión
de la hegemonía” (…), argumento que nos lleva entonces a ubicar que, en lo
referente a la educación pública de la privada, “no hay más diferencias entre ambos
sistemas que las fuerzas que los controlan: en un caso será el Estado y en el otro las
fuerzas particulares de la sociedad civil” (De Leonardo, 1983:21,22).
La diferencia fundamentalmente radica en cómo ejercen está función desde la
educación los grupos de poder, dígase el Estado, la Iglesia, los grupos socio-
culturales, los particulares. Cabe pues, preguntarnos: ¿Cuáles han sido sus
planteamientos políticos-educativos?, ¿Cuáles han sido las implicaciones, el impacto
y sus efectos en el sistema educativo en el país?. Preguntas de fondo que nos llevan
a considerar que la educación se ha concebido como un canal privilegiado por el
cual emana un sistema de ideas, creencias y postulados, y como tal, forma parte de
un aparato reproductor de una cultura; o de culturas, dependiendo de la institución,
organización o grupo que la impulse.
En la historia de los mexicanos, la educación trasmitida por españoles de
diversa índole y núcleo socio-económico, tuvo fuertes raíces en un modelo
económico; si bien es cierto que la Iglesia con su modelo educativo y pedagogía
evangelizadora pretendió trascender el interés de la Corona, aún la misma Iglesia
tuvo un marcado interés: la expansión del catolicismo. Así pues, las iniciativas
surgidas posteriormente están acompañadas de los intereses de clase. Intereses
que actualmente continúan permeando a la educación.
21
1.3. Educación y cambio social
De forma paralela en los colegios preuniversitarios, se fueron preparando los futuros
dirigentes de los cambios sociales y políticos del México independiente y de la
reforma. En la mayoría de los casos criollos beneficiados por una educación de
clase, fueron dando continuidad a la construcción de lo que sería una nueva nación,
formando intelectuales en quienes hace eco “la pedagogía de la Revolución francesa
emanada de la Ilustración que aborda frontalmente el problema de la educación
popular, proponiéndola como gratuita laica y obligatoria” (Soto, 2002: 44).
Si bien la instrucción religiosa se aceptaba con tolerante beneplácito, las
escuelas se ajustarían a las necesidades nacionales para proveer a México de
personas capacitadas para el trabajo y la participación en asuntos de carácter
sociopolítico” (Robles, 1977:40-41). Las primeras iniciativas de la reforma educativa
liberal 1842-1857, están orientadas a diseminar el corporativismo de Estado que
permita la formación de hombres libres, crear una nación moderna, lograr beneficios
personales y los que la nación requiera. “La construcción de una nación homogénea
y la lealtad hacía un nuevo Estado, son los objetivos políticos; la educación debe
crear los mecanismos para alcanzarlos” (De Leonardo, 1983: 40).
Los cambios que se realizaron en el sistema educativo, se crearon aún con la
estructura de las instituciones de educación privada tradicionales operados por la
Iglesia como Institución. Si bien, los incipientes cambios no lograron profundas
transformaciones educativas, si había claridad en la visión política de la educación:
organizar y educar a los nuevos grupos de dirigentes sin ideas dogmáticas, ni
religiosas, sino basados en elementos científicos. Sin embargo, el proyecto de
educación propuesto por los liberales lleva secuelas significativas, ante la situación
de inestabilidad política y los escasos recursos del erario provocan que estas
iniciativas quedaran en manos de particulares.
22
1.4. El sistema educativo. Entre liberales y conser vadores
La imperiosa necesidad de impulsar cambios estructurales en la educación, dio
origen a un sistema educativo diverso, plural y complejo que subsiste en la
actualidad y que tiene su origen en la Colonia. Con la República restaurada en 1867
los juaristas inician una reconstrucción de las instituciones, los conflictos entre
liberales y conservadores están orientados a resolver las diferencias socio-políticas
del país, visión que se trasmite al ámbito educativo. Las ideas emanadas del credo
liberal consideran que la educación debe ser una atribución de la sociedad y de los
individuos, y no del Estado, sin intervención de la Iglesia.
El nacionalismo y la orientación científica rigen las reformas educativas, por lo
que se va haciendo imposible que la Iglesia recupere su poder hegemónico, la
influencia del positivismo viene a formar parte de una teoría educativa que va a
replantear una reorientación del sistema educativo superior en el país. “La nueva
Ley de Instrucción Pública preconiza transformaciones en los métodos de la
enseñanza. De tal alcance que para 1869 se eliminan de la Universidad los estudios
teológicos, metafísico y filosóficos ( De Leonardo, 1983: 57).
Los establecimientos educativos fueron influenciados por la doctrina positivista, y
a diferencia de la educación privada que sigue prevaleciendo en esta época la
Escuela Nacional Preparatoria (antes Colegio de San Ildefonso), otorga becas a
estudiantes pobres, manutención que es asumida por el Estado, dando un sello de
institución con un compromiso social. Aparecen nuevamente los ataques
provenientes de grupos de conservadores, clericales y liberales moderados,
egresados de los establecimientos educativos, ahora convertidos en funcionarios
públicos, anarquistas y socialistas que criticaban al gobierno de la Dictadura de Díaz,
a esta nueva doctrina que da sustento a la educación.
23
Con Porfirio Díaz en la presidencia de la República, Robles (1977) menciona
que, los treinta y cuatro años del poder ejercido, la educación superior no fue
privilegiada, dado que Díaz dio prioridad a las importaciones y exportaciones con
miras a dinamizar la precaria economía que prevalecía por más de medio siglo en el
país. “Mientras Porfirio Díaz se ocupaba de incrementar el desarrollo económico, las
clases acomodadas recurrían a los establecimientos europeos y norteamericanos
para la formación profesional de sus hijos, a su regreso, se encargarían de introducir
en México los efectos de los avances filosóficos y científicos que recogían en el
extranjero” (Robles, 1997:68).
Durante los años de poder de Porfirio Díaz, fue notoria la desorganización en
los establecimientos educativos. Una característica del gobierno, fue el poco apoyo a
la educación y por ende el cierre de instituciones, centros educativos y
establecimientos que gozaban de gran prestigio. No así los centros educativos
provenientes de una formación militar, a quienes Díaz otorgaba todo el apoyo; “La
Secretaría de Guerrea contaba con el apoyo gubernamental para mejorar y ampliar
la cantidad académica de sus planteles. Tanto el Colegio Militar, como las escuelas
Naval, de Bandas Militares y de Maestranza llegaron a cobrar prestigio durante la
dictadura” (Robles, 1997:71).
De igual forma lo fueron toda clase de iniciativas que promovieran el arte y la
cultura privilegiando el gusto por lo “extranjero”, subestimando la cultura local. Los
grupos pertenecientes al poder bajo diversas formas, hacían lo posible por seguir
estableciendo vínculos con Europa; los valores y cultura del pueblo mexicano
estaban siendo minimizados.
Este era el contexto que prevalecía en el país; situación que trajo consigo que la
educación permanecía sin apoyos considerables para beneficio de un modelo
educativo que hiciera avanzar al país. “Al mismo tiempo, doce millones de
mexicanos inauguraban el siglo XX llenos de miseria, ignorancia y desesperanza
(Robles 1997:69).
24
El Maestro Justo Sierra fue un personaje clave en la historia de la educación en
México, que en medio de esta vorágine de situaciones de extrema pobreza y
analfabetismo en el que se encontraba el 80% de la población mexicana, recibiera su
primer nombramiento en 190, como Subsecretario de Justicia e Instrucción Pública.
Función con la que dio inicio a una serie de actividades en pro de la educación;
promoviendo la reforma integral de un sistema de educación. “Desde 1906 se inició
la revisión de las instituciones docentes que culminaría en 1910 con el
establecimiento de la Universidad que había sido suprimida por última vez en 1865”
(Robles: 1997:74).
La Iglesia va a desarrollar estas ideas que cobran fuerza durante la Revolución de
1910:
“El clero, entre todo este desorden, aprovechaba las oportunidades
derivadas de las demandas elitistas de las clases acomodadas para
reforzar y afianzar su discutido control de las actividades de
enseñanza, colocándose, con los terratenientes y grandes
empresarios como representante y trasmisor de la dominación
económica y social. Abandonadas casi en su totalidad las actividades
docentes de educación superior, los religiosos orientaban sus
esfuerzos hacia el monopolio de las instituciones de enseñanza
primaria y secundaria con la intención de mantener su hegemonía en
la sociedad mexicana “(Robles, 1977:72).
1.5. Los cambios en la educación. La Revolución de 1910
Los principales problemas que aquejaban al país, seguían sin solución pese a los
esfuerzos de Justo Sierra por reestructurar la educación; la más desprovista era la
educación superior. Sin duda reflejo de lo vivía el país.
25
Sin embargo, las iniciativas de profesionistas e intelectuales comprometidos tal
es el caso de Antonio Caso y Alfonso Reyes, entre otros; como lo menciona Robles
(1977), fueron haciendo eco entre la población para incorporar nuevas tendencias en
la educación para un país que requería de fortalezas: una de ellas fue implementar
una educación humanista. La educación pública requería de fundamentos jurídicos
y constitucionales que le otorgar fuerza y sustento; así como, orientación y línea, que
como sistema educativo recogiera las demandas y necesidades de la población.
A consecuencia de los cambios que trajo consigo la revolución y posteriormente
los cambios a la Constitución de 1917, el Estado logró tener el control de la
educación, la reglamentación de la vida civil y religiosa. “El laicismo quedó
definitivamente instaurado en las leyes constitucionales, aunque en la práctica el
Artículo Tercero no se aplicó a la letra ya que hubo tolerancia hacía las escuelas
confesionales tanto en el gobierno de Carranza como en el De la Huerta y aun en el
de Obregón” (Torres, 2004: 97). Pese a estas situaciones la educación tomó
impulsos, orientada a la formación de los futuros profesionistas que el país requería.
Para 1920, la incorporación de intelectuales que por diferencias con los
anteriores gobiernos tuvieron que salir del país, se fueron incorporando a diversas
funciones a fin de contribuir con las tareas de emanadas de la revolución; un ejemplo
de ello fue José Vasconcelos. Una vez integrado, “se dedicó a trabajar arduamente
en el programa educativo nacional (…), la educación sería la única vía eficaz de
unidad nacional y de ejercicio democrático (Robles, 1977: 91, 96).
La historia siguió su curso, la inestabilidad socio-política y religiosa centró su
atención en las políticas agrarias; en las que la educación apoyaría con una
formación vinculada a la producción.
26
Los ideales de educación impulsados por Obregón y Vasconcelos poco a
poco se fueron perdiendo; Robles (1977), menciona que entre los intereses y
políticas del modelo impulsado por Calles hasta el arribo del Presidente el General
Lázaro Cárdenas, se vislumbra la educación sujeta a los criterios y demandas del
mercado laboral; la educación superior se diversifica, se abren nuevas propuestas
de formación y áreas de capacitación técnica que se va incorporando a la educación
superior.
Al terminar el período de Calles, cinco eran las universidades que contaban
con mayor desarrollo: Puebla, Michoacán, Yucatán, Guadalajara y San Luis Potosí.
De manera que, posterior al conflicto religioso impulsado por el Presidente Calles, de
tendencia liberal, la idea de llevar a cabo una educación nacionalista y después
socialista tuvo su concreción en el período de Cárdenas. “Lázaro Cárdenas se gana
a las mayorías durante su campaña presidencial porque su ideario representaba,
precisamente, el eslabón que se necesitaba para unificar a todos los sectores en una
empresa que antecediera la lucha hacia el verdadero nacionalismo” (Robles, 1977:
155).
En el ámbito educativo Cárdenas, se encontró ante los movimientos que en las
regiones del país se organizaban para lograr la autonomía universitaria; y por otra,
impulsar las políticas educativas que el país requería: la de incorporar la educación
tecnológica en la formación universitaria.
1.6. La educación privada en México. La historia qu e nos acompaña Es un hecho que las transformaciones estructurales que históricamente ha vivido el
sistema educativo, han definido el tipo de educación que el país necesita; sin
embargo en la sociedad mexicana, como se viene mencionando siempre ha existido
una interacción entre los diversos grupos que la conforman.
27
Referente a la educación, “el 10 de enero 1938, Cárdenas solicitó a los
particulares su cooperación para solventar las dificultades que resultan de la
imposibilidad en que se encuentra el gobierno para satisfacer plenamente las
necesidades que presenta la población nacional en materia de educación” (Torres
2004: 135).
¿Qué significa este hecho?, las iniciativas de cooperación de los particulares al
Estado mexicano y a la educación en el país, le otorgaron una fuerza a las
instituciones de educación privada; de ahí la serie de iniciativas, propuestas y
protestas en pro de la defensa de la educación privada que permanecieron en la
conciencia de los grupos hegemónicos:
“La formación y reproducción de sus elites, la conformación ideológica del
catolicismo de las clases medias y altas, que ha nutrido desde los años
treinta, importantes movimientos sociales y partidos de oposición, o los
conflictos político-religiosos que continúan presentes en la conciencia del
Estado y de la Iglesia. No es posible comprender cabalmente el desarrollo
de la educación nacional ni del país sin reflexionar en la enseñanza
privada y su significado” (Latapí, 1998:1,2).
El sistema de educación superior privada en el país tiene un rasgo
característico distintivo, es la creación de una conciencia de clase
fundamentalmente por razones de pertenencia a un estrato social, no sólo por la
ideología que sustenta la acción educativa. Torres (2004), la educación particular
en México se forjó como producto de la voluntad individual de quiénes decidían
establecer una escuela aunque legalmente debieran ajustarse al régimen oficial.
Elitismo y exclusivismo fueron rasgos característicos de la educación privada,
estereotipos asignados a un determinado grupo de establecimientos que desde su
fundación han gozado de alto reconocimiento.
28
En este contexto al sistema superior de enseñanza le caracteriza por un lado, un
rasgo que la distingue, la de impartir una educación no sólo pública impulsada por el
Estado, sino confesional (mayoritariamente de origen católica). Torres (2004),
cuando refiere que las escuelas particulares y privadas de tradición en México, en el
proceso para reclutar estudiantes, tales como: Lasallistas, Jesuitas, Maristas; incluso
en las escuelas llamadas por Torres, “multiculturales”; eran métodos selectivos, en
la mayoría de los casos y de forma indirecta el criterio eran las altas colegiaturas.
Un criterio fuertemente aplicado era el rigor académico, quienes aspiraban a
formar parte de una determinada escuela tenían que presentar exámenes rigurosos,
incluso el dominio de un segundo idioma llegó a hacer un requisito fundamental. No
sin dejar de lado la pertenencia a una familia de “clase”, en la que regularmente se
podía identificar el estatus socioeconómico, el nivel de relación social, y por
consiguiente la integración a los círculos de los grupos que ejercían un determinado
poder en la sociedad.
Se puede decir que actualmente, este perfil que delinea Torres, no dista
mucho de lo que continúa siendo la educación privada en México. Específicamente
nos referimos a la que es considerada de gran tradición académica y de élite
también. Con el transcurso de la historia en México, la educación privada se
distingue mayoritariamente confesional:
“La escuela particular en México adquirió desde entonces el sentido
que tiene actualmente: el de ser una opción a la escuela estatal,
donde las políticas oficiales pueden ser cuestionadas y aun
combatidas. La escuela católica surgió como un lugar donde se
rechazaron las Leyes de Reforma, donde se criticaron violentamente
las políticas anticlericales del gobierno, pero sobre todo, como un
espacio donde podrían reproducirse valores y tradiciones
católicos”(Torres, 2004: 32,33).
29
En este tenor, se encuentran las iniciativas focalizadas a grupos socio-
culturales, que poco a poco fueron incorporándose a la vida social, económica,
política y cultural en el país. La educación impulsada por estos grupos busca
preservar la cultura de origen; de manera que, prioritariamente un rasgo distintivo de
esta educación es el de ser una enseñanza privada (de beneficio para la élite).
Impulsada en gran parte por instituciones surgidas de un determinado grupo
social que bajo la influencia de los movimientos educativos en Europa o en
Norteamérica incorporan iniciativas de modelos de enseñanza. Ambos rasgos
subsisten hasta nuestros días. En ellos se encuentran las “escuelas multiculturales”
(Torres 2004:351), como el Liceo Francés, el Colegio Israelita, el Liceo Japonés, los
colegios españoles fundados en la guerra civil española, un ejemplo de ello son: el
Colegio Madrid, o el Liceo mexicano español.
1.7. Regionalización de la educación privada
El tema de la educación privada en México, como se ha venido señalando tiene un
sustento fundacional, que le otorga una característica particular la de continuar y
preservar el deber ser; es decir, la misión, la visión, los valores y la cultura que los
sujetos involucrados en la institución educativa continúan creyendo. Por lo tanto,
consideran los fundamentos esenciales en el origen de la institución, para contribuir
a mejorar desde sus postulados lo que ellos consideran una propuesta diferente,
mejor y distinta.
Para Fernández (1994), la forma en la que se origina un establecimiento
escolar importa en la medida en que los fundadores se impregnen de emociones y
sueños, crisis y rupturas, luchas de poder, propias del nacimiento. En gran parte nos
encontramos también con ese mandato social, como lo señala Nicastro (1997) en los
proyectos de educación superior en el país con sus diferencias regionales.
30
La diversificación de la educación superior privada durante la era cardenista,
es considerada como una respuesta a un sector de la población. Recordemos como
los movimientos por obtener la autonomía universitaria tomaron fuerza en esta
época. El acelerado crecimiento de la clase media durante la década de los
cincuentas conlleva el fortalecimiento de las instituciones privadas de educación
superior (Robles, 1997: 189).
Durante los años que van de 1935 a 1959, se creó el grupo de los primeros
establecimientos de educación superior privada en México. Constituyéndose así,
en el primer grupo de universidades pioneras en cuanto a modelos organizativos
sustentados en las orientaciones sociales de la educación superior privada
mexicana. Aunque siempre salvaguardando los intereses de la historia fundacional;
es decir, surgen los sistemas educativos que marcarán la tendencia de la educación
superior privada en el país en las próximas décadas.
Tabla 1. Establecimientos de Educación Superior creados en e l ciclo 1935-1959
Año
Establecimiento
Lugar
1935 Universidad Autónoma de Guadalajara Guadalajara, Jal.
1940 Universidad de las Américas México, D.F.
1943 Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de
Monterrey
Monterrey, N.L.
1946 Instituto Tecnológico Autónomo de México México, D.F.
1947 Universidad de las Américas-Puebla Cholula, Pue.
1954 Universidad Iberoamericana México, D.F
1957 Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de
Occidente
Guadalajara, Jal.
Fuente: Acosta, S. A. (2005). La educación superior privada en México. IESALC-UNESCO.
31
En el cuadro anterior, se observa la diversidad de opciones que empiezan a
surgir en la educación superior privada. Es evidente que en cada oferta lo sustenta
un modelo pedagógico, una concepción sobre el rol de la educación en la sociedad
mexicana y un perfil característico que las distingue en el mercado educativo. Las
instituciones educativas antes mencionadas, han contribuido a la expansión y han
puesto de manifiesto la demanda del mercado regional que ha experimentado la
educación privada.
Una expresión de ello es el crecimiento de una serie de establecimientos cuyo
rasgo principal es justamente su heterogeneidad. En México, Muñoz (1996), las
investigaciones en materia de educación superior privada en los últimos años,
confirman que la creciente matrícula en los establecimientos de educación superior
privada, está por encima de la registrada en las universidades públicas.
Es importante precisar que no se pretende hacer un estudio exhaustivo
acerca de la historia de la educación superior privada en México, la razón es ubicar
el tema del presente trabajo en un contexto histórico, para identificar por un lado, el
antecedente que da origen a una educación superior privada, y por otro, cómo estás
iniciativas de particulares han tenido implicaciones profundas que han promovido un
modelo de atención privado con diversas connotaciones, por ejemplo, una de ellas
es la de reproducir una cultura que desde la perspectiva del análisis institucional
aporta elementos de interés; y es el caso que nos ocupa, la fundación del
Tecnológico de Monterrey Campus Colima.
La educación en las últimas décadas del Siglo XX de universidades de gran
tradición académica-cultural, regionalizaron la educación superior privada en cuanto
sistema educativo y oferta de estudio profesional. La educación superior privada
como se mencionó en el cuadro anterior, se caracteriza por llevar a cabo la
expansión del mandato institucional.
32
De acuerdo con Acosta (2005), el común denominador de la expansión es la
de instalarse en las principales ciudades del país, reconocidas por su desarrollo y
auge económico. Fundamentalmente en la capital mexicana, al norte del país la
ciudad de Monterrey, en el occidente, Guadalajara, Jalisco; en esta etapa de
expansión se privilegian también ciudades como Puebla, Veracruz y Hermosillo
Sonora.
En los albores del Siglo XXI, la vorágine de centros privados de nivel
profesional causa y efecto de una educación globalizada producto de los nuevos
mercados mundiales económicos, no se han hecho esperar. El estado de Colima no
ha sido la excepción. El surgimiento de nuevos establecimientos de educación
superior privada para mercados diversos y complejos en cuanto a su conformación,
ha implicado la demanda de nuevos planes curriculares, perfil docente, marca una
nueva tendencia y perfil de la educación superior privada.
1.8. Comportamiento de la matrícula
La educación privada se ha diversificado, las ofertas en el mercado educativo han
crecido. Como se demuestra en el estudio comparativo de la matrícula de las
licenciaturas de las Instituciones de Educación Superior (IES) privadas en México,
en relación con el que se registra en los establecimientos públicos; “durante el
período 1985-2001 el crecimiento de la tasa anual fue seis veces mayor en la
universidad privada, en comparación con la pública (15.4% contra 2.5%), (Muñoz,
Núñez y Silva, 2004:17).
A continuación la siguiente tabla muestra cómo se ha manifestado el
crecimiento de la matrícula de la educación superior privada, en relación a la
educación pública:
33
Tabla 2. Comparación del comportamiento de la matrí cula de licenciatura en
las IES de sostenimiento privado con la registrada en las de sostenimiento
público.
Fuente: Muñoz, Nuñez y Silva, 2004/ ANUIES.
Al observar la tabla anterior, refleja el crecimiento de la matrícula en los
establecimientos de educación privada. Los cambios socio-económicos generados
por el nuevo orden mundial, por consiguiente el impacto de estos cambios en la
educación universitaria, han modificado la matrícula en los niveles de educación
superior. La demanda de una educación profesional acorde a las necesidades del
cliente (estudiantes), ha hecho surgir una serie de establecimientos de educación
privada, en las distintas regiones del país. La tabla anterior es un ejemplo de ello.
34
Tabla 3. El crecimiento del número de planteles des de el punto de vista
geográfico, se puede observar gráficamente cuáles f ueron las regiones que
tuvieron un mayor crecimiento.
Fuente: Muñoz, Nuñez y Silva, 2004/ ANUIES.
Las carreras que son impartidas en los establecimientos con mayor matrícula
son las que se relacionan con las: Ciencias Administrativas, Comunicación y
Ciencias Sociales e Ingeniería y Tecnología. Los mayores crecimientos en el número
de planteles se registraron en aquellos cuyas carreras se relacionan con las citadas
áreas del conocimiento, así como en los establecimientos en los que se imparten
carreras relacionadas con la Educación y Humanidades. Por otro lado, el menor
número de planteles corresponde a aquellos cuyas carreras se relacionan con las
Ciencias Naturales y Exactas y con las Ciencias Agropecuarias” (Muñoz, 2004:76).
35
El crecimiento que se generó entre 1985 y 2000 en los planteles de
educación particulares de educación superior, como se podría esperar, fue mayor la
proporción de profesores que fueron contratados por hora de clase.
Tabla 4. Evolución de la modalidad en la contrataci ón
Fuente: Muñoz, Nuñez y Silva, 2004/ ANUIES
Los profesores contratados de tiempo completo están concentrados en los
planteles que atienden a más de 2000 estudiantes. (Ver tabla1 y 2). Es decir, se
observa una relación entre expansión de establecimientos, crecimiento de la
matrícula y la contratación de la planta docente. Ciertos analistas han afirmado que
el crecimiento de los establecimientos privados, registrado en los años noventa, se
debe a los cambios que fueron introducidos en las políticas reguladoras de
crecimiento de las instituciones educativas públicas. “El propósito, regionalizar la
expansión de las instituciones financiadas por el Estado” (Muñoz, 2004: 141).
36
El crecimiento provocó un desequilibrio en cuanto a la satisfacción de la
demanda, provocando que las instituciones de educación superior privada
absorbieran la demanda insatisfecha por los establecimientos educativos públicos.
En este contexto resulta importante identificar los grupos de establecimientos
privados.
1.9. Clasificación de instituciones de educación su perior privada
Estudiar la educación superior privada requiere de una clasificación de los
establecimientos que permitan un mejor acceso a la gama de proyectos educativos
que ofrecen, con la finalidad de conocer y analizar las diferencias encontradas al
interior de las mismas.
Si bien es cierto que existen varias tipologías, retomaré la clasificación de Levy
(1986), citado en Muñoz (2004), su propuesta se centra en la orientación social de
las instituciones, distingue tres grupos:
1) Las universidades (o instituciones a equivalentes), de elite, no confesionales,
por lo general son selectivas, desde el punto de vista académico, y social.
Gozan de apoyo empresarial o de patrocinios locales. La mayoría de ellas
están vinculadas a los mercados de trabajo.
2) Las universidades confesionales hacen referencia a las instituciones católicas
que son selectivas en lo académico y en el reclutamiento de sus alumnos. Se
preocupan por crear una tradición académica.
3) Las universidades de absorción de demandas estudiantiles, concentran su
oferta de servicios docentes en torno a un núcleo de carreras de alta
demanda y bajos costos de producción.
37
El tema de la educación privada “confesional” o no, desde las teorías que
abordan la perspectiva del análisis de la cultura institucional, son un referente que
permiten encontrar los puntos de coincidencia en los sistemas educativos que
ofrece, así como identificar la cultura organizacional en la que sustentan las formas
de operar los establecimientos. Para el presente estudio resulta importante identificar
en qué rango y perfil se encuentra el ITESM campus Colima, y cuál es la cultura
institucional que le imprime ese rasgo propio en tanto centro escolar.
Históricamente la educación privada bajo sus diversos sistemas educativos y
mandatos fundacionales expresados en su: misión, filosofía, valores, principios, y el
proyecto fundacional, ha sido el semillero de una formación profesional ante una
necesidad de responder a la reproducción de los sistemas económicos sociales y
culturales imperantes. “La educación privada en México fue un claro ejemplo del
fenómeno de reproducción de estructuras: es decir, se le consideraba un factor
importante en la transmisión de “ordenes” sociales, que en ocasiones resultaban
desiguales e injustos” (Torres, 2004: 305).
1.10. Breve semblanza de la educación superior en C olima.
El interés por abordar este tema, nos lleva a tener en cuenta el contexto educativo
del estudio:
“La educación en la provincia de Colima, en el Siglo XVI (…),
algunos maestros (…) enseñaban a leer y a escribir, y a rezar (…);
pero esta instrucción así de elemental como era salvo sus raras
excepciones, se daba a los hijos de familias pudientes quedando
fuera de este beneficio toda la masa popular formada por mestizos,
indios, negros y mulatos, que constituían en conjunto algo así como
las tres cuartas partes de la población de la población colimense”
(Rodríguez, 2007:24).
38
Las reformas educativas en las diversas etapas vividas en la nación mexicana
(Independencia y Revolución), dieron continuidad a la serie de iniciativas impulsadas
en la Colonia. En Colima, el ideal de sociedad impulsada de una parte por la Iglesia
Católica y el Estado por medio de la educación tuvieron expresiones muy
particulares. Las iniciativas que surgieron seguían las orientaciones del Reglamento
de General de Instrucción Pública de 1823, establecidas en la Constitución de todo
ciudadano estaba facultado para formar establecimientos particulares de instrucción
en las artes y en las ciencias, siempre y cuando estuvieran bajo la supervisión del
Estado. El Liceo de Colima en el último tercio del Siglo XVIII, representó una primera
experiencia de formación profesional por decirlo en el nivel de educación media
superior:
“Durante el siglo XIX, ésta fue la única institución con el más alto
nivel educativo en Colima (…), resultó ser de gran impacto social,
cultural y político en la región. De él egresaron muchos personajes
que destacaron tanto a nivel local como nacional, dos de ellos por
nombrarlos son Balbino Dávalos y Gregorio Torres Quintero”
(Rodríguez, 2007: 18).
Estos antecedentes, son importante para comprender ciertos hechos que han
marcado la vida cotidiana en Colima, y que en la actualidad ciertas expresiones
siguen siendo parte de esa cultura de arraigo. Acuña et al (2006), menciona un dato
muy curioso y al mismo tiempo significativo en este contexto de cómo se fue
desarrollando la educación en este entorno local, cuando refiere que Colima es una
región caracterizada por una serie de contradicciones, tales como: para 1920, aún se
escuchaba el español del siglo XVI, cómo la influencia de las corrientes de
pensamiento europeas, no hicieron que la Fe predominantemente de origen a la
religión católica se viniera abajo.
39
El caso de los alemanes que instalaron diversas industrias en Colima, mismas
que trajeron consigo una nueva forma de trabajo: la exportación de productos
provenientes del campo, de una tierra prodigiosa.
Un hecho sobresaliente, el catolicismo devoto de liberales y masones, y cómo
las familias llevan a sus hijos e hijas a escuelas confesionales de origen católico, y
ellos mismos son miembros activos de cierta asociación religiosa, y por si fuera aún
novedad, reciben cursos en el Seminario, lugar de formación de los futuros
sacerdotes católicos, siendo la única opción de educación superior junto con las dos
Normales Públicas y la Normal privada para mujeres de origen católica, ésta última
fue fundada en el año de 1906.
El Liceo de Colima, el Seminario Tridentino, las escuelas Normales, la
fundación de la Universidad Popular de Colima, son el antecedente de lo que sería la
educación superior en Colima, pública y privada mayoritariamente en sus inicios
confesional; no sin dejar de lado las vicisitudes que trajo consigo la Reforma y la
pugna entre liberales y conservadores. Sin embargo, hay quienes consideran que,
“no fueron los colegios civiles, institutos o, liceos, los antecedentes de la educación
superior, pues el intento predominantemente para la formación de la juventud
estudiosa, estuvo representado siempre por el normalismo” (Velasco, 1988: 37).
Sin duda, son hechos que ponen de manifiesto la relación dicotómica en la
educación que ha sido administrada en México, como se ha venido describiendo
anteriormente, y en Colima tal situación no es la excepción. De ahí que las
demandas educativas provenían de una manera particular de una población con un
legado español; “a fines del Siglo XIX, Colima vivía en una organización patriarcal,
por no decir semifeudal agrícola” (Velázquez, 2006: 5-6).
40
Se describe de esta manera, a los grupos que conformaban la sociedad de
este tiempo y el peso que tenían sobre la vida cotidiana en el desarrollo de la región,
“las tierras laborales y en producción, el comercio de mercaderías, el dinero
constante, el agio, la ley, la justicia y la política, eran el patrimonio de unos cuantos
apellidos” (Velázquez, 2006:107). Esta cita nos remite a lo mencionado por Acosta
(2005), el común denominador de los establecimientos privados de educación es que
son iniciativas sostenidas por grupos pertenecientes a un sector de la población
mayoritariamente de buena solvencia económica que incide en la sociedad, a fin de
contar con una propuesta de formación profesional que permita preservar por medio
de la cultura que ofrece la educación privada, estructuras que favorezcan la
reproducción de formas de relación, trabajo y desarrollo de interés al grupo que las
promueve y en perspectiva de generar impacto en la región.
Es el caso de Universidad Popular Colimense, por iniciativa del Coronel Pedro
Torres Ortiz, gobernador Constitucional, se iniciaron las gestiones para iniciar la
fundación de lo que sería la Universidad. “El 17 de julio de 1940, con la asistencia de
representantes de los maestros, profesionistas elementos militares, estudiantes,
hombres de empresa, campesinos y obreros, ante quienes el Gobernador expuso los
motivos por los cuales consideraba imperiosa la necesidad de fundar lo que se
designó como la Universidad Popular de Colima” (Velasco, 1989: Vol. II – 43).
La razón se debía a las necesidades sociales y económicas del Estado y en
general de todo el proceso que se gestaba en el país, habría que ofrecer alternativas
de estudio y formación profesional a las nuevas generaciones y por consiguiente
tendría impacto en la región. De esta forma las iniciativas de ambos sectores de la
población, dieron origen a lo que sería la Universidad Popular de Colima; las nuevas
generaciones de estudiantes vieron una alternativa en cuanto a sus aspiraciones de
formación profesional; mismas que se vieron reflejadas en las opciones de estudios y
modalidad que ofreció en ese entonces la Universidad.
41
Gráfica 1. Organigrama de la Universidad Popular de Colima. Primera época
Fuente: Velasco, M. M. (1989). La Educación Superior en Colima. Volumen II. La Universidad de Colima Primera Época (1940-1962).
42
La siguiente gráfica manifiesta de que manera las iniciativas por impulsar y
fortalecer las necesidades de educación toman forma. Las prioridades en la
formación, y los espacios educativos definidos para llevarlas a cabo.
Fue en el período de Gobierno del C. Arq. Rodolfo Chávez Carrillo, que impulsa
el “Proyecto de la Ley Orgánica para la Universidad aprobado por el H. Congreso el
26 de agosto de 1960, en lo sucesivo el nombre de la Institución sería Universidad de
Colima.” (Velasco, 1989: Vol. II, 199,). Ley orgánica que trajo consigo una serie de
beneficios profesionales, de carácter científico técnico, cultural y académico, ante la
apertura de la institución para estar acordes a las demandas requeridas de formación
profesional y de contar con un establecimiento educativo que estuviera a la altura de
las nuevas circunstancias del desarrollo del país y de la región.
1.11. El Estado de Colima. El sexenio de Miguel de la Madrid (1982-1988)
Los escenarios nacionales en la década de los ochenta en los sexenios de José
López Portillo (1976-1982) y de Miguel de la Madrid (1982-1988), fijarían los cambios
en la educación con miras de impulsar una reforma educativa en todos los niveles;
incluidas las áreas de investigación en ciencia y tecnología.
Las políticas educativas pusieron el énfasis en el fortalecimiento de la
educación superior. En el sexenio de Miguel de Madrid Hurtado (1982-1988), siendo
Colima lugar de procedencia del presidente, establece un Programa Nacional de
Educación, Cultura, Recreación y Deporte (1984-1988), el lema una “revolución
educativa”, siendo seis los objetivos planteados:
43
1. Elevar la calidad a partir de la formación docente.
2. Racionalizar el uso de los recursos y ampliar el acceso a servicios, dando
prioridad a zonas y grupos desfavorecidos.
3. Vincular educación y desarrollo.
4. Regionalizar la educación básica y normal, y desconcentrar la superior.
5. Mejorar la educación física, el deporte y la recreación.
6. Hacer de la educación un proceso participativo (Martínez, 2001: 41)
Las reformas educativas surgidas para todos los niveles de la educación, son la
antesala de las reformas estructurales en donde el énfasis estaba puesto en elevar
los niveles de calidad de la educación superior. La modernización demandaba poner
en marcha una serie de medidas para que las universidades se convirtieran
realmente en espacios educativos con un alto grado de eficiencia:
“En las últimas dos décadas, México, entre otros países, se ha
movido paulatinamente dentro del neoliberalismo privatizador y su
discurso apologético en la llamada “ineludible” globalización de la
economía. En el campo de la educación, y particularmente la
educación superior, las metáforas de la industria incorporan las del
mundo de los negocios al lenguaje educativo como complemento
discursivo a la tendencia de poner a las universidades al servicio de
la economía y la tecnología. La calidad, la excelencia, la
competitividad y la eficiencia de los “productos” educativos son
calificativos inseparables de todo discurso que mire hacia el cambio
de milenio “(Navarro, 1998)
44
Los sucesos anteriormente señalados y el ser el primer Estado, que a nivel
nacional era gobernado por una mujer, la Lic. Griselda Álvarez Ponce de León; y que
México tuviera como Presidente de la República a un colimense, el Lic. Miguel de la
Madrid Hurtado, sin duda fueron acontecimientos que dieron un gran impulso a la
educación superior en el Estado de Colima, siendo beneficiada la región colindante
con Jalisco y Michoacán.
Colima, fue el centro de atención por estos hechos; de acuerdo a las políticas
nacionales, Griselda Álvarez gobernadora, emprendió la tarea de elevar la calidad
educativa y apoyar la serie de iniciativas que vinieran a fortalecer a la educación:
“representa una exigencia actual e ineludible en la evaluación de los servicios” (…),
(Memoria de Gobierno, 1974-1985).
En este contexto se impulsó la creación de infraestructura educativa, teniendo
como resultado: 712 aulas, 49 laboratorios, 38 talleres, la creación del Bachillerato
Pedagógico, para quienes estaban interesados en proyectar en su desarrollo
profesional la carrera magisterial; con estas acciones contribuía al impulso educativo
bajo el lema “la revolución educativa” (ídem).
Así mismo, el Tecnológico de Colima, incrementó la matrícula a un 99%, en
relación a 1980. Otro hecho significativo, fue el impulso a todas las áreas a la
Universidad de Colima (Memoria de Gobierno. 1974-1895); atendiendo el nivel medio
y superior, en éste último se cubría aproximadamente el 72% de la demanda a nivel
estatal (ídem).
La Escuela Normal de Maestros, la educación Técnica, incluso la educación
particular, se fortalecieron durante estos años, por las políticas federales que tuvieron
eco en el gobierno de Griselda Álvarez.
45
Se puede concluir diciendo que la educación en Colima y su región se
privilegiaron, y junto con ello las nuevas generaciones que se formaban en la
perspectiva de una educación que se perfilaba en los albores de la modernidad, la
competitividad, y el mercado educativo hacía una economía globalizada.
1.12. Iniciativa y prestigio social. El ITESM camp us Colima
En Colima, identificar los actores que han intervenido en el desarrollo de la
educación están ubicados en grupos sociales organizados, frente a partidos o
asociaciones con grandes diferencias entre ellos, religiosas, políticas, económicas y
culturales “operan a niveles muy distintos, tampoco es fácil en algunas ocasiones
establecer diferenciaciones claras entre ellas; sus portavoces se encuentran aquí y
allá y muchas veces sus ligas son más de carácter interpersonal que institucional”
(De Leonardo, 1983: 17).
El nacimiento del ITESM Campus Colima se remonta al año de 1980, cuando
un grupo de empresarios colimenses, integraron una Asociación Civil con la finalidad
de apoyar el desarrollo de la región con soluciones concretas a la problemática
educacional. Educación Superior de Colima, A.C., es el nombre que representaría
al Consejo conformado por 27 miembros los que integraron esta asociación, por la
tenacidad de su fundador Don Guillermo Brun Ramos (www.col.itesm.mx).
Históricamente la sociedad civil representada por grupos religiosos católicos,
intelectuales, empresarios por mencionar algunos, ha jugado un papel importante
para deliberar acerca de la orientación y perspectiva de la educación en la región de
Colima. Sin embargo, están ausentes los espacios institucionales para abrir la
discusión sobre el debate de lo que ha sido el desarrollo de la educación superior
privada en Colima. En el devenir histórico en nuestras sociedades:
46
“El éxito en abrir espacios educativos “autónomos” por parte de estas
fuerzas de la sociedad civil, ha permitido la constitución de lo que
llamamos el sistema privado de educación. De aquí que definamos a
la educación privada como la educación formal o escolarizada que
aunque tiene carácter público o abierto, no se encuentra en manos
del Estado sino en manos de la sociedad civil” (De Leonardo, 1983:
18).
Educación Superior de Colima, A.C. planteó al Instituto Tecnológico y de
Estudios Superiores de Monterrey, la posibilidad de que operara una escuela
preparatoria en la Ciudad de Colima, de forma paralela se ofrecerían los estudios
profesionales de nivel superior.
El Tecnológico de Monterrey se encargaría del funcionamiento y administración
de la misma y la Asociación proporcionaría los bienes inmuebles para la operación
del Instituto, siendo propietaria de ellos.
Con aportaciones propias y de la sociedad en general, aportaron un predio de
52,000 m2 y los recursos para edificar un plantel con capacidad inicial de 200
alumnos de nivel preparatoria la cual tenía una duración de dos años. Actualmente
esta Asociación ha crecido al incorporar A diez jóvenes empresarios colimenses, con
el objetivo de que continúen la gran labor que han realizado los pioneros, para que
Educación Superior de Colima, A.C. siga comprometida con el desarrollo de Colima
que apoya al Tecnológico de Monterrey en su misión Educativa.
Desde esta perspectiva de la historia de la educación superior en México y su
carácter regional en Colima, los sucesos que marcaron a la educación adquieren
connotaciones particulares: “lo público y lo privado/particular interactúan
constantemente, resultado de las pretensiones heterodoxas de ambos sectores” (De
Leonardo, 1983: 16).
47
Iniciativas que desde su origen hicieron surgir un modelo de educación superior
privada privilegiando a un sector de la sociedad: creando una infraestructura
educativa particular, definiendo un perfil de egresado que lo distingue de otras
propuestas de formación, al establecer una oferta educativa para un mercado
preferencial, reproduciendo esquemas culturales con la intencionalidad de incidir en
la sociedad; modelo educativo sustentado en las políticas económicas que imperan.
Vemos pues, como la educación ha cumplido su cometido: reproducir esquemas
culturales que impactan en la sociedad, y en la que juegan un papel fundamental los
fines y objetivos. Instituciones educativas que históricamente por su perfil y estilo
institucional, se han logrado una distinción y clasificación dentro del ámbito socio-
educativo de universidades, a las que las define una cultura organizacional. Factores
que han fortalecido su desarrollo y permanencia en una sociedad que las hace surgir,
las asume y colabora con ellas.
48
Capítulo II La institución: cultura, organización y estilo institucional.
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2.1. La institución. Un concepto y varias definicio nes
Abordar el tema de la institución o de las instituciones, es acercarnos al ámbito de la
realidad social en la que los hombres y mujeres interactúan determinados por un
conjunto de normas, reglas, valores, que se reconocen como principios y que
permean el conjunto de relaciones de todos aquellos que las conforman; esta
reglamentación es lo que da paso al establecimiento de un espacio simbólico
determinado. Al respecto Zino Torrazza (2000), menciona que estos modelos o
pautas establecidas (instituciones) establecen una predecibilidad en la manera de
cómo los individuos responden los unos a los otros.
En la evolución de las sociedades las instituciones han jugado un papel
preponderante. De manera que, el nacimiento y acontecer del sujeto humano se
produce en una trama de relaciones y sucesos pautados por instituciones de diverso
nivel de generalidad (…), y por el proceso de socialización, pasan a formar parte del
interior de la subjetividad y a funcionar como un regulador social interno (Fernández
1994:17). De ahí que, los sujetos desarrollan comportamientos de aceptación o
rechazo ante el discurso proveniente de las instituciones, a través de los diversos
vínculos que se van creando.
Es decir, en el devenir socio-histórico de cada sujeto la institución es una
realidad que está presente. Conforme el desarrollo de las distintas etapas del ser
humano, la institución le marca las pautas a seguir y le transfiere un conjunto de
reglas, normas y valores que le otorgan un sentido de pertenencia a un espacio
social determinado, tales como: la familia, la escuela, la agrupación de su interés, la
sociedad a la que culturalmente pertenece. Cada sujeto irá creando sus propias
conjeturas, ideas, expectativas que le permitirán establecer las condiciones para
vivir, convivir en ellas, aceptar el pacto o contrato institucional, o en definitiva para
modificarlas. Las instituciones tratan de darse una historia y en esta historia dar
cuerpo a la identidad individual o colectiva (Ramedi, 2004:28).
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Para Fernández (1994), hablar de la institución es cuando nos referimos a las
normas-valor que adquieren fuerza en la organización social de un grupo o la
concreción de las normas-valor en un establecimiento, la institución expresa la
posibilidad de lo grupal o colectivo para regular el comportamiento individual. Un
ejemplo de ello es la autoridad paterna del núcleo familiar; en el rejuego de las
relaciones padres-hijos, se anticipa en cierta medida las consecuencias de no ser
respetada la autoridad.
La experiencia primera que es el núcleo familiar, el significado de transgresión
y culpa en el ser humano que comienza su desarrollo como un ente psíquico y
social, devienen en un catalizador para establecer futuras relaciones: aceptar o
rechazar las normas sociales en las que se verá involucrado.
Se podría decir entonces, que en esta búsqueda por conocer a la institución se
está frente a un campo del conocimiento en el que la incertidumbre acompaña a la
reflexión. La verificación plena de los resultados estará condicionada por nuestros
reflejos inconscientes dada nuestra historia institucional: temores, ideas
prefabricadas, conocimientos heredados, trayectorias institucionales violentas;
finalmente somos resultado y consecuencia de las mismas.
Para Fernández (1997), citado en Ramedi (2004), las verdades que
expongamos serán siempre reconstrucciones de las múltiples percepciones y voces
de diversos actores. Ellos sólo aportarán retazos de una realidad, que a su vez, han
construido para sí. Aproximarnos a la definición de lo que da origen y conforma la
institución, es a su vez un acto complejo porque el ser humano y sus necesidades
son el factor principal en la constitución de una institución. Se requiere entonces, no
perder de vista como refiere Clifford Geertz (1993), en La interpretación de las
culturas el conocimiento al que arribemos será, siempre local y a veces
menudamente restringido.
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¿Cómo definir una institución?, es un planteamiento básico para abordar el
tema de estudio en la presente investigación referida a la educación superior
privada. Es indispensable entonces, señalar los hallazgos que los estudiosos han
hecho acerca de los componentes de una institución, sus características, aspectos
fundacionales, los rasgos que las caracterizan, la forma de funcionar, las relaciones
instituidas e instituyentes que surgen al interior de la misma, el rol de los fundadores;
es decir todo aquello que hace que una institución cumpla con un mandato social:
proveer de bienestar a sus miembros y luchar por su permanencia.
Estudiar al ITESM campus Colima, también desde esta perspectiva implica
entonces reconstruir los cortes históricos de la institución para identificar los
elementos que conforman su cultura institucional. Reconocer los hechos
significativos en la historia que acompaña a la institución. ¿Cuáles fueron las
condiciones sociales al momento de su fundación?, ¿quién fue el grupo que llevó a
cabo la visión de los fundadores?, ¿cuáles fueron las estrategias para posicionarse
como una institución de educación superior privada en la región de Colima?
En este contexto Clifford Geertz (1993), utiliza el concepto de la descripción
densa, como herramienta de investigación, como una forma de repensar lo que se
está haciendo por medio de la reflexión, de esa manera el elemento de lo histórico
adquiere relevancia porque integra el contexto en el que los acontecimientos se
fueron sucediendo. En el caso de las condiciones fundacionales del ITEMS campus
Colima, se pueden analizar en cuanto la ubicación del tiempo y el lugar en su
condición de ser un objeto investigado, resultados que sólo se han podido conseguir
al concebir que la misma apelación de historia nos sugiere una situación de
proximidad muy particular entre la operación científica y la realidad analizada (De
Certau, 1993: 35).
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En el presente estudio sobre el ITESM campus Colima, el objetivo es
reconocer e identificar los rasgos culturales distintivos de la institución educativa, en
cuanto instrumento de reproducción de una cultura escolar, la cultura institucional
que le imprime un estilo particular en su forma de operar en tanto establecimiento
educativo, y por consiguiente la cultura organizacional que lo sustenta.
Por lo tanto resulta significativo considerar los estudios de Fernández
(1994), en principio considera que la institución es un referente cultural con una
carga social que le otorga un poder insustituible. Es decir, el poder regulador de la
que son objeto, le otorga el derecho para “ajustar” las voluntades de sus miembros y
ser formados de acuerdo a los principios que las rigen; situación contraria en las que
al no prescribir las normas, su conducta es evidenciada, y en algunos casos se
culmina el hecho con acciones de expulsión.
En este tenor se encuentran los aportes de René Kaës (1989), en su libro nos
dice al respecto, como la institución nos proporciona identidad y representaciones
comunes, pero cuando ésta fracasa en su objetivo, se gesta la necesidad de atacar
a la institución por haber sido traicionado, negado o desatendido. La perspectiva del
psicoanálisis considera que la institución cumple la función de proveer ciertas dosis
de seguridad que calma la angustia del sujeto en su lucha por ser aceptado y
reconocido; de esta manera la institución implícitamente trabaja para sí, se asegura
su futuro y su permanencia.
Estas cuestiones son fundamentales para abordar el tema de las
instituciones, particularmente las instituciones educativas. Específicamente si su
estudio es desde la perspectiva del análisis institucional. “El objeto e importancia del
análisis institucional radica en mejorar la comprensión de los hechos que ocurren
dentro de un establecimiento y en las relaciones de éstos con su contexto
(Fernández, 1999: 39).
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La importancia del análisis institucional para el presente trabajo, nos ofrece
los elementos para caracterizar a la institución educativa y sus expresiones
culturales; cómo los sujetos se identifican con la institución, y estos a su vez
reproducen los estereotipos culturales institucionales en su entorno social.
Implica entonces, retomar los aportes de los primeros teóricos sociales en sus
búsquedas por comprender la complejidad del individuo y su relación con los
diversos sucesos que dieron origen a la definición de la institución.
Significativos son los aportes que se le atribuyen a Rousseau,
consideradas las primeras reflexiones en torno al tema de las instituciones. En un
contexto en que el concepto de autoridad monárquica era concebido como un poder
considerado divino; así de esa forma a sus soberanos eran legitimados. Rousseau
fundamenta la necesidad de pensar en la situación del ser humano desde un estado
de derecho para encontrar nuevas formas de asociación buscando el bien de la
persona y los bienes de cada asociado.
Más tarde Hegel considerará importante desde su formación filosófica, dar
continuidad al debate surgido en años anteriores, ya que considera que en las
sociedades se viven cambios constantes y etapas de desarrollo significativas por
ende las instituciones son una manifestación de ello. Así mismo, fundamenta que el
trasfondo de cómo suceden las cosas se debe a la lucha de contrarios, como causa
y efecto de esa misma evolución.
En este debate de pensamientos acerca de cómo definir a la institución y su
función en las sociedades, se ubica al término del siglo XIX, Herbert Spencer, gran
filósofo positivista y su teoría evolucionista. Spencer ponía de manifiesto que las
instituciones son el resultado de la acción de cada individuo. La estructura social, es
la base sobre la cual se desarrolla la trama de posiciones e interrelaciones del
individuo para la concreción de sus aspiraciones.
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El punto de vista antropológico de Malinoswski, establece que las instituciones
son unidades que organizan la conducta para satisfacer las necesidades individuales
de una manera estable y perdurable, inherente a ello. Torraza (2000), coincide al
considerar que los individuos se organizan a partir de un conjunto de valores
aceptados de común acuerdo.
Con la primera generación de sociólogos, se entretejen implícitamente las
ideas a cerca de la institución. El sociólogo Francés Emile Durkheim, gran estudioso
de la composición de la sociedad, a través de sus estudios, menciona que la
instituciones son consideradas sinónimos de regulación social.
En su aporte Durkheim distingue en la institución un elemento importante: "las
maneras de actuar, de pensar, y de sentir, exteriores al individuo, y que están
dotadas de un poder de coerción en virtud del cual se le imponen". Concebirla como
sinónimo de regulación social, distingue en ella la presencia de nociones como la
coerción y la obligación (exteriorité y contrainte) en los hechos sociales1.
De otra parte, Max Weber desde su teoría de la acción social explora el
concepto de institución a la que le atribuye ciertas condiciones insustituibles; como
aquellas que menciona Torrazza (2000), la institución tiene en cuenta el
comportamiento colectivo, posee un valor significante y simbólico para los demás, y
está en constante modificación.
1 La aportación de Durkheim a la pedagogía y particularmente a la fundación socializadora de la educación estriba en su idea acerca de la primacía de la sociedad sobre el sujeto, y el continuum de las instituciones cuando la moral de las instituciones se identifica con lo social y la obediencia hacía las instituciones por parte de los individuos. 55
Cuadro 1. El concepto de la institución en las teorías sociológicas
Teoría sociológica Concepto de institución
Marxismo
El estado
Durkheim
Los sistemas sociales establecidos
Sociología francesa (1950-1960) Instituciones-cosa: establecimiento. Instituciones-praxis: organización subyacente o interna de los grupos.
Terapia institucional Creación de nuevas relaciones en el grupo con objetivo terapéutico.
Psicosociología Creación de nuevas instituciones sustitutivas de las antiguas instituciones internas en el seno de cualquier organización o institución establecida.
Fuente: Modelo basado en: Colom, A. (2000). Pedagogía institucional. España. En el cuadro 1, se observa cómo desde la sociología las diversas escuelas y
corrientes ven en las instituciones los fines de un orden social de una determinada
época en las sociedades. Las categorías que se han intentado identificar a partir de
estas corrientes ilustran la evolución de las sociedades.
El Marxismo considera que la institución es símbolo de la represión, ya que el
concepto de institución como el de ideología son elementos de la superestructura
social (Lourau, 1975:72). En caso contrario Durkheim, manifiesta que existen otros
elementos en las instituciones que requieren ser estudiados de manera preferencial,
que influye en la realización de los individuos (Lourau, 1975:113). Por otra parte,
encontramos que la escuela Francesa de sociología considera que las instituciones
son objeto de conocimiento que implican fortalecerse y sin duda transformarse.
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Desde la perspectiva sociológica la institución es considerada una acción
social de por sí ya implícita de la vida institucional, que determina la asociación de
cada individuo. Asimismo, como objeto de conocimiento la institución no debe estar
al margen de las transformaciones de cada época, de lo contrario tienden a
desaparecer. De esa forma a diferencia de las teorías de grupos, el estudio de las
instituciones fue definiendo su propia identidad y sistema que la caracterizan.
Desde el punto de vista filosófico, el referente es Hegel, las normas, el aparato
jurídico, la jurisprudencia, la legislación de leyes y constituciones son aplicadas a
éstas; mientras que desde el derecho, el concepto de institución tiene otras
funciones las de tratar de volver evidente lo intocable y lo sagrado (Lourau, 1975: 40-
49). Hacer alusión a la perspectiva psicológica, nos remite a las maneras cómo la
institución alude a la naturaleza; desde el Psicoanálisis Freud menciona que formar
parte de las instituciones resulta ser una paradoja, porque, en tanto sujetos
psíquicos las situaciones que causan sufrimiento, devienen en referentes para la
sobrevivencia.
En tanto sujeto social, Fernández (1994), considera que el sujeto por sí solo
no tiene posibilidades de sobrevivir, siempre hay un otro (la institución) que lo está
protegiendo, buscando su bienestar siempre y cuando se respete el pacto social que
se haga, de lo contrario vendrá la manifestación del castigo, y la no inclusión.
Encontramos en René Kaës (1998), y su estudio sobre el Sufrimiento de las
instituciones, razones por las cuales aborda desde el enfoque del psicoanálisis el
análisis institucional; ya que analiza al individuo y su relación con la institución y a la
institución en sí misma desde la noción freudiana del sufrimiento y las patologías que
se viven dentro de un establecimiento educativo.
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Las instituciones pues, se convierten en guardianes del orden establecido,
violar los códigos establecidos, establecer posiciones críticas muy firmes sólo traen
consigo un riesgo: el castigo externo e interno de la autoridad (Fernández, 1994:18).
Desde lo dicho anteriormente se podría identificar algunos puntos convergentes
respecto a las aproximaciones de los clásicos desde una descripción actual del
concepto de institución.
Cuadro 2. Esquema descriptivo de la institución
Está formada por:
Perfiles:
Conjunto de sujetos humanos.
Con estilos propios de organización para asegurar las necesidades básicas.
Conjunto de producciones culturales.
Procuraran sostener ésta organización porque les ha sido útil.
Procesos de socialización.
Y otros procesos destinados al control social.
Tensiones inevitables.
La lucha entre los deseos del individuo y la necesidad de moldearlos a la forma social admitida.
Producciones culturales en orden al sacrificio.
Para convencer y generar el deseo individual en pro de la estabilidad colectiva.
Fuente: Fernández, L. (1994). Instituciones educativas. Dinámicas institucionales en situaciones críticas. Argentina,
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El cuadro anterior muestra la conformación sociocultural de las instituciones,
la dimensión de lo personal (sujeto), deviene en un conjunto de relaciones sociales,
resultado de procesos de socialización, mismos que van
dando la pauta del perfil que ha de desarrollar la institución para mantener el
bienestar de su integrantes.
Desde una perspectiva antropológica, definir a la institución “Implica un acuerdo
sobre una serie de valores tradicionales alrededor de los que se congregan los seres
humanos (…). De acuerdo con lo instituido los hombres actúan juntos y así
satisfacen algunos de sus deseos, marcando al mismo tiempo su impronta en el
medio circundante" (Malinowski, 1993: 44). Es decir, cada grupo humano establecen
una relación con su entorno natural, que implica la vida cotidiana: la solución de
satisfactores básicos para su desarrollo.
Sin embargo, a la institución la define no sólo el campo social origen y
concreción de la misma; sino que “la institución es el inconsciente político de la
sociedad”; es decir, “la institución censura la palabra social, la expresión de la
alienación, la voluntad del cambio” (Lapassade, 1972:77).
Esta perspectiva, considera un tema sustancial en el que difícilmente la
institución llega a aceptar del todo, porque siempre será fiel a sus orígenes, al
mandato social y la misión para la que fue creada. Porque de esa forma asegura su
permanencia en la sociedad. Por lo que las normas, leyes instituidas para su
funcionamiento serán estrictamente vigiladas por sus miembros y de todos aquellos
que forman parte de su dinámica cotidiana.
En el caso de las instituciones educativas de carácter privado, se aseguran
de que lo instituido se consideren como lo menciona René Lourau, como esas
formas sociales visibles desde el momento que están dotadas de una organización
jurídica y material, que les permite funcionar en tanto centro escolar, y salvaguardan
su capital humano, material y fundamentalmente el mandato social.
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Esta forma de operar, les va otorgando una cultura institucional particular que
la diferencia de entre otros establecimientos públicos o privados, confesionales o no.
Por lo que en principio como menciona Fernández (1994) la institución es un objeto
cultural que expresa cierta cuota de poder social.
Sin embargo René Kaës (1987), considera que existen ciertas dificultades
para concebir a la institución, implica tomar en cuenta los elementos psíquicos que
juegan un rol fundamental en las formas de establecer una relación con la institución.
Es decir, las imágenes de autoridad con los que los sujetos crecen y se desarrollan
en cierta medida condicionan y marcan la relación con las instituciones. En la
actualidad los nuevos referentes resultados de un mundo globalizado, han hecho
surgir una serie de nuevas corrientes relacionadas con el neoinstitucionalismo:
“El institucionalismo aplica las categorías e instrumentos de la teoría
económica convencional, pero las ha criticado y desarrollado para
estudiar el papel de las instituciones, las normas, los valores y la
cultura en el intercambio, asumiendo explícitamente una perspectiva
de análisis multidisciplinario” (Ayala, 1999:26).
Es decir, el resurgimiento de iniciativas de la sociedad civil en los últimos años,
han reconsiderado el papel y función primordial de las instituciones; los individuos
por su relación socio-política y cultural, crean, diseñan, aprueban o desaprueban
formas de organización social que van a la par de los cambios económicos y
políticos. Ayala (199), menciona que la institución va al ritmo de los cambios
históricos y de la incidencia privada de la gestión y diseño de instituciones para
competir en el mercado, a través de distintas “arenas”, lo crucial son las reglas y las
convenciones diseñadas de los individuos para convivir en sociedad.
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En el Siglo XXI la historia nos ha mostrado una serie de cambios, en ésta
búsqueda por definir a la institución como bien lo menciona Ramedi (2004) nuestro
interés no está en hacer una historia de la institución; en realidad pretendemos
construir una historia de los hombres en la institución, porque son los sujetos quiénes
son los protagonistas en las instituciones. Su idiosincrasia, la cultura, las
cosmovisiones que acompañan sus iniciativas, el legado de un pasado de historia y
cómo la transforman en propuestas concretas, en opciones sociales en un presente
de historia.
Es a partir de este planteamiento que los escenarios institucionales, son el
espacio privilegiado en el cual se logran identificar los elementos y rasgos culturales
que las caracterizan. En la presente investigación se privilegia al análisis institucional
como una herramienta que permite identificar las prácticas de los sujetos en su
espacio institucional, para caracterizar la cultura institucional que permea a un
establecimiento de educación superior privada como es el caso del Instituto
Tecnológico de Estudios Superiores campus Colima; de esa forma se analiza el
conjunto de rasgos y particularidades propias, que permiten dar cuenta de las
características que conforman su cultura, estilo institucional y su cultura
organizacional.
Se puede decir entonces que, las instituciones procesan dinámicas sociales
en la que cada sujeto vive con una carga ideológica, que le es trasmitida
institucionalmente, sustentada en un conjunto de creencias relacionadas con el fin
para el que fue creada, con base en los testimonios de los fundadores y pioneros,
historias de mitos, héroes, leyendas que se van convirtiendo en experiencias de vida,
al momento de ser trasmitidas por los continuadores de la obra, en las que se
reflejan los deseos y las aspiraciones del mandato social de la institución; pero no sin
dejar de lado las frustraciones, y las imperfecciones. Nicastro (1997), expresa aún
así las instituciones reflejan el ideal y como tales se verá reflejados en la dinámica
cotidiana del espacio institucional.
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En este contexto podríamos concluir diciendo que, generalmente llamamos
institución al conjunto de personas cuya actividad laboral o académica está definida y
regulada por la búsqueda de ese fin relevante y funcional, en ese sentido, la escuela
es una institución.
Para comprender las dinámicas que se generan al interior de las instituciones
educativas y que van dando forma a esos rasgos característicos, se han retomado
conceptos de diversas disciplinas como: la Sociología, la Antropología, la Historia, la
Psicología Social, el Psicoanálisis, y la Pedagogía Educativa, constituyen el marco
teórico-conceptual que permite definir a la institución, en tanto objeto de estudio.
Sus aportes llevan a ubicar en el tiempo, en el espacio y en la historia una
institución educativa de corte privado como es el ITESM campus Colima.
La sociología, aporta los elementos para el estudio del entorno que hace surgir a
las organizaciones sociales y al proceso de institucionalización que la hace
permanecer y prolongar el mandato institucional. Por la antropología, se explican los
esquemas culturales en los que una institución establece su normatividad, en ese
conjunto de ritos y ceremonias, esquemas de representación cultural que le otorgan
identidad y pertenencia a sus integrantes.
Las diversas formas de expresión cultural con las que el sujeto se identifica con
la institución, no son más que la continuidad de estereotipos culturales que van
convirtiendo al imaginario social y a un conjunto de mitos, ritos, valores, hasta formar
un sistema de creencias que son encontrados en la cotidianidad.
Los sujetos al establecer vínculos con la institución, se convierten en
trasmisores de modelos de reproducción cultural en el entorno social al que
pertenecen. En este sentido la psicología social, la pedagogía educativa y el
psicoanálisis, aportan elementos para el estudio de las dinámicas instituidas e
instituyentes en las que se relacionan los miembros de una institución.
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Fernández (1997), menciona al respecto cómo en cada institución, importante
será evaluar a la institución misma desde la cotidianidad de sus integrantes para
asumir las responsabilidades del funcionamiento.
2.2. Del origen a la función de la institución educ ativa
Para Fernández (1994), la diferencia entre una institución social de una institución
educativa, es ese conjunto de rasgos peculiares incuestionables en donde la razón
de la esclavitud y la razón de la libertad están fuera de toda negociación. Porque las
instituciones educativas definen su existencia como espacios de regulación informal
que operan en la vida cotidiana a través de una red de interacciones, deberes y
derechos formales.
El supuesto de que partimos entonces, es que las sociedades de acuerdo al
momento de la historia y de la coyuntura social, económica y política instituyen sus
normas, valores y reglas a las diversas formas de organización en este caso la
institución educativa no está al margen. “La institución universal Escuela es el
resultado de la especialización – es un tipo particular de establecimiento – de una
parte de la trasmisión cultural que requiere una sociedad compleja” (Fernández,
1994: 26).
Es decir, la escuela es el lugar en donde los individuos reciben las normas y
valores aceptados por la sociedad; acción que realiza a través de programas
curriculares, métodos pedagógicos, siempre logrando obtener el fin último que es
lograr ese conjunto de conocimientos académicos, y los relacionados con el
desarrollo humano.
Lo anterior lleva a considerar lo mencionado por Fernández (1994), cómo en las
dinámicas escolares se manifiestan una serie de circunstancias que difícilmente
podrían ser consideradas como normales en otro tipo de organizaciones:
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Las pugnas por el afecto, los códigos de preferencia, las distinciones, los
premios, incluso los temas-tabú sobre sexualidad; los conflictos de autoridad y poder
que son considerados “aristas” de la vida institucional. Cómo se abordan los
mandatos sociales, y no menos importante la lucha eterna entre la tendencia a
reproducir los modelos educativos pasados y la tendencia a modificar el contexto en
el que se vive.
Gráfica 2. Relación entre la estructura social, la institución y los sujetos
Fuente: Basado en apuntes de J. Zino Torrazza (2000). La estructura social, Murcia, Universidad Católica San Antonio. En la figura anterior, se evidencia la interacción entre las instituciones; y los individuos como la cultura y la estructura social perciben la actividad y/o interacción entre los sujetos.
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Individuos
Acción social – organización- estilos de vida
Estructura Social
Instituciones
Esquemas de acción, percepción y apreciación
Cultura
Sentido compartido de la
realidad
.
Se hace evidente que en el espacio de la estructura social se determinan las
posiciones o status que estos individuos ejercen. Estos status tienen asociadas
ciertas pautas de comportamiento (instituciones) que orientan las relaciones
(quienes se relacionan y de qué manera) entre los miembros de la estructura social.
Cuadro 3. Base (contradicciones) de funcionamiento de una escuela
Exigencia formal de comportamiento homogéneo enseñar y aprender con el mismo estilo: el que fija la norma.
Deseo de los individuos y grupos de actuar siguiendo sus propio estilo y criterios.
Presión para basar las acciones en los criterios de la autoridad de la tradición y los reglamentos.
Tendencia a basar la acción en el análisis crítico científico de la realidad.
Tendencia a encubrir la violencia que supone la dirección de los comportamientos y la presión de la homogeneización.
Tendencia a develar las condiciones de la violencia y suplantadas por otras que permitan el respeto por las diferencias.
Demanda de conservar las características del contexto en sí y tal como se dramatizan en el espacio institucional.
Demanda de transformar las condiciones institucionales, reflejar especialmente el contexto y revertir sobre él modificándolo.
Fuente: Fernández, L. (1994). Instituciones educativas. Dinámicas institucionales en situaciones críticas. Argentina.
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El cuadro número tres, nos hace pensar que en la cultura escolar, la cultura
institucional es definitoria y tiene que ser compartida por quienes están involucrados
en las instituciones. Un elemento importante es como la cultura aporta a los sujetos
un sentido compartido de la realidad; en la que están comprometidos a actuar en
ella. La socialización implica que los diversos roles que juegan estén sustentados
por los referentes culturales de la institución
Para Fernández (1994), los trabajos de análisis institucional aplicado a
instituciones educativas, ilustran las búsquedas por construir y caracterizar ciertos
componentes de orden universal de los establecimientos, que pueden acercarse a la
idiosincrasia institucional. Un elemento importante es, como la cultura aporta a los
sujetos un sentido compartido de la realidad en la que están comprometidos a actuar
en ella.
Los centros educativos con trayectorias académicas reconocidas, son puntos
de atracción en su entorno social: docentes, alumnos; incluso es atractivo su clima
laboral. EI TESM campus Colima, no es la excepción, existe en la memoria colectiva
la conciencia del grado de exigencia, disciplina y competitividad que permea la vida
institucional. “Cuanto más joven sea, más cerca del origen, más enraizada en la
gestación comunitaria que significa el acto fundacional de una escuela (debería ser),
más fuerte y definitoria la dinámica, más potente del proyecto institucional”
(Fernández, 1994: 27).
Es decir, cuando se comparte la visión institucional, hay una experiencia del
sentido de pertenencia que se va gestando en las dinámicas cotidianas de sus
integrantes. Al ser asumidas por los sujetos, las relaciones laborales, están
impregnadas de una cultura institucional que permea las funciones y tareas que sus
integrantes deben de desarrollar y cumplir, para ser files a la misión y al proyecto
fundacional.
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La tarea global
Sistemas de organización
Gráfica 3. Aspectos que conforman una institución e ducativa
Fuente: Esquema elaborado a partir del libro:
Dinámicas institucionales en
La gráfica expresa l
estructura interna de un establecimiento educativo, refiere como c
guarda un vínculo insustituible con los ideales fundacionales, con la visión y los
valores que la institución educativa se ha forjado para sí, en función de su
trascendencia social.
El
espacio educativo
Los sujetos
El proyecto
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