salas de pequeño formato en barcelona

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26 Cultura|s La Vanguardia Miércoles, 7 noviembre 2012 EN DIRECTO RITA PERÉ Aunque a menudo sigamos hablan- do de espacios alternativos, las ac- tuales salas de teatro de pequeño formato de Barcelona tienen muy poco en común con las que fueron las salas de teatro alternativo en sus inicios. En los años noventa, la marca alternativa nació por la ne- cesidad de crear espacios de exhi- bición fuera de los canales más ma- yoritarios que existían en aquellos momentos, tanto de ámbito priva- do como público (Centre Dramà- tic de Catalunya, Poliorama, Con- dal, Victòria, Teatre Lliure...). Ini- cialmente, estas salas eran espa- cios muy precarios, sin ningún ti- po de infraestructura ni soporte institucional y que, más allá de las diferencias individuales detecta- bles entre ellas, compartían una concepción similar sobre el teatro. Sirvieron para dar voz a una nueva generación de autores catalanes y como banco de ensayo, así como para recuperar autores foráneos contemporáneos que no habían en- contrado todavía una exhibición normalizada en nuestros circuitos comerciales. Actualmente, los teatros de Bar- celona herederos de aquel formato son eclécticos y difíciles de catalo- gar; el panorama está formado por una veintena de salas donde cada una tiene una acentuada marca de la casa. Es por esto que ha pasado de ser un sector que iba a la una a convertirse en diferentes barrios estéticos que en algunos casos tie- nen objetivos y líneas de trabajo se- paradas por un descarado abismo. Aún así, el estilo de cada pequeña sala de alguna forma dialoga con las otras y juntas todavía son una cantera de nuevos actores, compa- ñías y dramaturgos que actualmen- te, y a pesar de las dificultades, vi- ven un gran momento creativo. No es sólo un reducido aforo lo que caracteriza una sala de peque- ño formato. Existen salas de poca capacidad que no encajarían con la definición que correspondería a es- te tipo de teatro. También es el he- cho de estar fuera de los circuitos comerciales, entendiendo aquí que no forman parte de grandes empresas privadas ni de la red de teatro público. Son espacios de pro- ducción que acostumbran a estar dirigidos por un creador, compa- ñía creadora o tener compañías re- sidentes. Sus diferentes líneas de trabajo definen su concepto teatral y así ofrecen un tipo de programa- ción consecuente con su filosofía, que siguen conjuntamente con creadores afines. Al otro lado de las puertas de cada una de estas sa- las, conceptos como los timings y calendarios se relativizan; asumir riesgos no echa nunca para atrás y se dedica gran parte del esfuerzo al descubrimiento y a la experi- mentación teatral. La primera sala alternativa que nació en Barcelona (y seguramen- te podemos decir que en todo el Es- tado) fue la Sala Beckett, el año 1989, a partir de una iniciativa de Sanchis Sinisterra y el Teatro Fron- terizo. Autores tan significativos como Josep Pere Peyró, Lluïsa Cu- nillé o Sergi Belbel se vincularon con el proyecto. Después aparece- rían el Tantarantana, la Muntaner, el Brossa y el Versus, que compar- tían cartelera con los después des- aparecidos Malic y Artenbrut. Re- cientemente hemos visto como aparecían numerosas salas peque- ñas (Gaudí Barcelona –vinculada al Versus–, Círcol Maldà, Flyhard, Almeria...) que reformulan y am- plían la escena de pequeño forma- to y que reiteran su destacado pa- pel en las artes escénicas actuales. Haciendo un esfuerzo de clasifi- cación del panorama teatral de pe- queño formato actual, podríamos decir que la nueva hornada de sa- las independientes está compar- tiendo cartelera con salas peque- ñas consolidadas (Tantarantana, Beckett, Muntaner, Versus, Brossa –actual La Seca), que vivieron los inicios del circuito alternativo clá- sico y trabajaron para consolidar- lo. Por otro lado, están los espacios de formación teatral o de danza que en la mayoría de los casos han abierto las puertas al público para mostrar sus creaciones (Atrium, Akadèmia, Porta4, Ivanov, El Pol- En directo Teatro En Barcelona existen una veintena de espacios teatrales que trabajan al margen de grandes empresas privadas y son independientes de la red de teatro público. Radiografiamos la actualidad de estas salas de pequeño formato, que desde abajo alimentan y enriquecen el panorama teatral de la ciudad Por un puñado de butacas Aunque muchas salas pequeñas nacieron al amparo de lo ‘alternativo’, hoy algunos ven en este concepto connotaciones excluyentes 01

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En Barcelona existen una veintena de espacios teatrales que trabajan al margen de grandes empresas privadas y son independientes de la red de teatro público. Radiografiamos la actualidad de estas salas de pequeño formato, que desde abajo alimentan y enriquecen el panorama teatral de la ciudad.

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Cultura|sLa

Vanguardia

Miércoles,7

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ENDIRECTO

RITA PERÉAunqueamenudosigamoshablan-do de espacios alternativos, las ac-tuales salas de teatro de pequeñoformato de Barcelona tienen muypoco en común con las que fueronlas salas de teatro alternativo ensus inicios. En los años noventa, lamarca alternativa nació por la ne-cesidad de crear espacios de exhi-bición fuerade los canalesmásma-yoritarios que existían en aquellosmomentos, tanto de ámbito priva-do como público (Centre Dramà-tic de Catalunya, Poliorama, Con-dal, Victòria, Teatre Lliure...). Ini-cialmente, estas salas eran espa-cios muy precarios, sin ningún ti-po de infraestructura ni soporteinstitucional y que, más allá de lasdiferencias individuales detecta-bles entre ellas, compartían unaconcepción similar sobre el teatro.Sirvieron para dar voz a una nuevageneración de autores catalanes ycomo banco de ensayo, así comopara recuperar autores foráneoscontemporáneosquenohabían en-contrado todavía una exhibiciónnormalizada en nuestros circuitoscomerciales.Actualmente, los teatros de Bar-

celonaherederos de aquel formatoson eclécticos y difíciles de catalo-gar; el panorama está formado poruna veintena de salas donde cadauna tiene una acentuada marca dela casa. Es por esto que ha pasadode ser un sector que iba a la una aconvertirse en diferentes barriosestéticos que en algunos casos tie-nenobjetivos y líneas de trabajo se-paradas por un descarado abismo.Aún así, el estilo de cada pequeña

sala de alguna forma dialoga conlas otras y juntas todavía son unacantera de nuevos actores, compa-ñías ydramaturgos queactualmen-te, y a pesar de las dificultades, vi-ven un gran momento creativo.No es sólo un reducido aforo lo

que caracteriza una sala de peque-ño formato. Existen salas de pocacapacidadqueno encajarían con ladefiniciónque correspondería a es-te tipo de teatro. También es el he-cho de estar fuera de los circuitoscomerciales, entendiendo aquí

que no forman parte de grandesempresas privadas ni de la red deteatropúblico. Sonespaciosdepro-ducción que acostumbran a estardirigidos por un creador, compa-ñía creadora o tener compañías re-sidentes. Sus diferentes líneas detrabajo definen su concepto teatraly así ofrecen un tipo de programa-ción consecuente con su filosofía,que siguen conjuntamente concreadores afines. Al otro lado de

las puertas de cadauna de estas sa-las, conceptos como los timings ycalendarios se relativizan; asumirriesgos no echa nunca para atrás yse dedica gran parte del esfuerzoal descubrimiento y a la experi-mentación teatral.La primera sala alternativa que

nació en Barcelona (y seguramen-tepodemosdecir queen todoelEs-tado) fue la Sala Beckett, el año1989, a partir de una iniciativa deSanchisSinisterra y elTeatroFron-terizo. Autores tan significativos

comoJosepPerePeyró, LluïsaCu-nillé o Sergi Belbel se vincularoncon el proyecto. Después aparece-rían el Tantarantana, laMuntaner,el Brossa y el Versus, que compar-tían cartelera con los después des-aparecidos Malic y Artenbrut. Re-cientemente hemos visto comoaparecían numerosas salas peque-ñas (Gaudí Barcelona –vinculadaal Versus–, Círcol Maldà, Flyhard,Almeria...) que reformulan y am-plían la escena de pequeño forma-to y que reiteran su destacado pa-pel en las artes escénicas actuales.Haciendoun esfuerzo de clasifi-

cación del panorama teatral de pe-queño formato actual, podríamosdecir que la nueva hornada de sa-las independientes está compar-tiendo cartelera con salas peque-ñas consolidadas (Tantarantana,Beckett,Muntaner, Versus, Brossa–actual La Seca), que vivieron losinicios del circuito alternativo clá-sico y trabajaron para consolidar-lo. Por otro lado, están los espaciosde formación teatral o de danzaque en la mayoría de los casos hanabierto las puertas al público paramostrar sus creaciones (Atrium,Akadèmia, Porta4, Ivanov, El Pol-

Endirecto TeatroEnBarcelona existenunaveintenade espacios teatrales que trabajan almargendegrandes

empresasprivadas y son independientes de la redde teatropúblico.Radiografiamos la actualidadde estassalas depequeño formato, quedesde abajo alimentany enriquecenel panorama teatral de la ciudad

Porunpuñadodebutacas

Aunque muchas salas pequeñas nacieronal amparo de lo ‘alternativo’, hoy algunos venen este concepto connotaciones excluyentes

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ENDIRECTOvorí, y las veteranas La Caldera y

La Casona), y otro tipo de espacioque se dedica a la experimenta-ciónmás radical (AnticTeatre,Cin-co Monos, Conservas), que no tie-nen cabida en los otros apartados.El actual prolífico y multidisci-

plinarpanoramanohabría sidopo-sible sin la suma de esfuerzos quehicieron las primeras salas alterna-tivas, que se unieron para consoli-dar el sector y mejorar las preca-rias condiciones iniciales. JulioÁl-varez, director del Tantarantana,explica que trabajando juntos seconsiguió un cambio de sensibili-dad referente al sector. “Cuandoabrimos el teatro trabajábamosmuy coordinadamente con lasotras salas, porqué teníamos pro-blemas comunes por resolver”, co-menta Álvarez. “Era una época enla que se hablaba mucho de las sa-las alternativas desde el punto devista del teatro encatalánque se es-trenaba”, añade, y remarca que fuea partir de entonces, mucho antesde que apareciera el T6 en el TNC,que las administraciones y los tea-tros más comerciales se empeza-ron a interesar por la nuevadrama-turgia catalana.Durante estos 25 años, las salas

se han ido consolidando, pero “losúltimos tres años empieza a haberuna disminución bestial de ayudasque pone en peligro al sector, quees muy frágil”, dice Julio Álvarez,y confirma los peores pronósticos,comoque algunas salas deBarcelo-nanopuedenasegurar su continui-dad a partir de este diciembre.A parte de las subvenciones, al-

gunos teatros de pequeño formatobasan su subsistencia en activida-des complementarias, como porejemplo la formación, el alquilerde la sala o los espectáculos infanti-les. Desde el punto de vista creati-vo, se afrontan las dificultades connuevos retos y formatos; por otrolado, a menudo se buscan equiposafines para llevar a cabo coproduc-ciones y a la vez generar complici-dades que puedan permitir, porejemplo, rodar los espectáculos ymantenerlos en la cartelera unavez superadoel esfuerzodeprodu-cirlos. En este sentido, Mercè Ma-naguerra, directora del reciente-mente reinauguradoTeatreAkadè-mia, expresa unataquede coopera-tivismo y dice que “me gustaríaproponer a todos los espacios co-mo el nuestro la posibilidad de ha-cer rodar nuestros espectáculospor todas las salas de la ciudad”.Managuerra valora que en un mo-mento complicado como el actual,quizás tendrán que aparecer nue-vas formasde intercambioy asocia-cionismo que aligeren un poco lasdificultades del presente.Lo cierto es que, a nivel de coor-

dinacióndel colectivo, la salaMun-taner y elTantarantana son los úni-cos teatros de Barcelona que for-man parte de la Red deTeatros Al-ternativos españoles, creada en1992. “Este circuito nos hizo esta-blecer vínculos con otras salas del

Estado y nos permitió hacer circu-lar produccionesnuestras”, recuer-daJulioÁlvarez, unode lospromo-tores del ciclo Complicitats en xar-xa, que ya lleva tres ediciones acer-candoa compañías de todo elEsta-do al escenario del Tantarantana.Desde el Antic Teatre, trabajan

energéticamente para la interna-cionalización de algunos espectá-culos que producen, así como conlos intercambios con salas afines.“Nopuede ser que una producciónse represente dos veces y despuésmuera. No es sostenible y no lo te-nemos que permitir”, dice Semoli-nika Tomic del Antic Teatre, queactualmente tiene en marcha dife-

rentes proyectos para hacer circu-lar espectáculos porEuropa.Cuen-tan con el soporte del Institut Ra-mon Llull en el caso del cav_a, unproyecto que llevará creadores deBarcelona a París y de París a Bar-celona durante el año 2013. Porotro lado, trabaja con la Internatio-nalNetwork foContemporaryPer-forming Arts (IETM), que actual-mente lleva de gira por Europa elespectáculo Y por qué John Cage?,con el que también ha colaboradoLaPorta (Barcelona) yA ras de sue-lo (Gran Canaria).Las dificultades económicas que

sufren importantes infraestructu-ras teatrales como el Lliure hamo-

tivado una iniciativa inédita queha favorecido un intercambio conmuybuen resultadoentre el Lliurey una sala independiente. Por re-cortes de presupuesto, el TeatreLliure no pudo empezar la progra-mación en septiembre comoes ha-bitual, y como el equipo de direc-ción artística se había fijado en laobra Litus, de Marta Buchaca yproducida por Flyhard Produc-cions la temporada pasada, propu-so a la sala de Sants la cesión de suestructura (sala y personal) paraque la compañía invitada gestiona-ra el resto. Así, el Lliure ha conse-guido programación de calidad sinsobrecoste, y la Flyhard ha podidoexhibir durante más de unmes unmontaje suyo en en Espai Lliurede Montjuïc. El resultado ha sidotan positivo que abre las puertas afuturas colaboracionesde este tipocon la misma compañía u otras.“Llueve, y les tenemos que dar co-bijo”, declaraba Lluís Pasqual, di-rector del Lliure.

TránsitosA pesar de que en en el caso delLliure el procedimiento sí que hasido nuevo, Litus no es la primeraobra gestada en una sala depeque-ño formato que pasa al escenariode una infraestructura pública ocomercial. Recientemente se ha-bía visto en la VillarroelNit de rà-dio dos punt zero, de Cristina Cle-mente y gestada en la sala Flyhard,así com Burundanga, una obra cla-ramente orientada al gran públicodirigida por JordiCasanovas y condramaturgia de Jordi Galceran,que ya se trabajaba con garantíasdespués del éxito que había tenidoen el Teatro Maravillas de Ma-drid. Un cuarto ejemplo sería Séde un lugar, de IvánMorales ypro-ducida por Prisamata (en residen-cia en La Caldera), que interesó alGrup Focus después de su pasopor La Seca la pasada temporada,y que se puede ver (hasta el 11 denoviembre) en el Teatre Romea.Estos ejemplos vienen a ilustrar

muy bien el porqué muchas de es-tas salas sienten la necesidad dedesvincularse del concepto alter-nativo, que actualmente puede te-ner connotaciones demasiado ex-cluyentes o remitir a una excesivamarginalidad experimental. Alcontrario, y tal como lo demues-tran los casos citados, el tránsito aotros circuitos de exhibición másmayoritarios de textos o propues-tas escénicas nacidas en las salasde pequeño formato se puede pro-ducir de formamuynatural, consi-guiendo así la captación de un pú-blico más amplio y más hetero-doxo en su composición. Lo mis-mo pasa en el sentido inverso. Noes raro encontrarse en salas de pe-queño formato obras de autoresconsagrados y, a veces, incluso aclásicos del repertorio universalqueyahan llenadograndes escena-rios. Por ejemplo, el ¡Ay Carmela!de Sanchis Sinisterra recuperadaen los últimos tiempos con mu-

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01 La sala delGaudí durante suacondicionamientoROSER VILALLONGA

02 Vestíbulo de laSala Beckett, con elretrato del autorque le da nombre

03 El Akadèmia,reciente incorpora-ción a la ciudadXAVIER GÓMEZ

04 Entrada de lasede actual delTantarantana

05 El primer espec-táculo que se vioen el Antic Teatre >

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LA SEUMANRESA

Ciclo de concier-tos integrado enel programa dela Fira de laMediterrània:Tempus Fvgit (9de noviembre),Xavier de Béteray Evo (10) yYurdal Tokcan(11). www.fira-mediterrania.cat

A la izquierda,el grupo vocalcorso TempusFvgit. A la dere-cha, el laudistaYurdal Tokcandurante unensayoFOTOS NOSTRUM

Y GERARD GARCIA

MIQUEL CUENCASi paseando por Estambul, ya seapor las empinadas callejuelas delbarrio de Gálata o por las moder-nas avenidas de Taksim, de prontoveis algunos transeúntes pararsepara saludar conun apretóndema-nos acompañado de una reveren-cia a un hombre de mediana edady generosa cabellera cargado conuna funda de laúd, no os quepa lamenor duda, os habéis cruzadocon Yurdal Tokcan. Este laudistanacido hace cuarenta y seis añosen un pueblecito a orillas del MarNegro está considerado uno de losmaestros indiscutidos de su nobleinstrumento, al lado de intérpretesde la talla del iraquí Naseer Sham-ma, los marroquíes Driss el Malo-umi y Saïd Chraibi, el palestinoAdel Salameh o el egipcio Mam-

doh El-Gebaly, por citar algunosnombres. Como todos estos virtuo-sos, Tokcan ha labrado su presti-gio a golpe de técnica, de un domi-nio prodigioso del “sultán de losinstrumentos del mundo árabe”,pero tambiénmerced a una habilí-sima capacidad para fecundar losrepertorios clásicos con las aporta-ciones más modernas. En el casode Tokcan se trata de la tradiciónmusical otomana, que el propioYurdal conocemejor quenadie, pe-ro a la queha sabidodotar de reno-vadas vigencias aliñándola conotras músicas, ya sean tradicionespopulares turcas o lenguajes con-temporáneos como el jazz. Tam-bién en su faceta de compositorTokcanha sabido conciliar la expe-rimentación con la fidelidad al es-píritude lamúsica otomana, ese ar-te sutil que hasta los propios sulta-nes cultivaron personalmente, co-mopor ejemplo Selim III, contem-poráneodel reyFederico II dePru-sia y notable flautista como él.Con estas credenciales artísticas

no es de extrañar que Yurdal Tok-

can seaunode los intérpretes esco-gidos por la Fira Mediterrània deManresa para que protagonice unconcierto del ciclo Nostrum, unanueva propuesta concebida paramostrar algunas de las joyas sono-ras más relucientes de las dos ori-llas del mar Mediterráneo. Unaapuesta exquisita que lleva el in-confundible sello del nuevo direc-tor artístico de la Fira, David Ibá-ñez, y que no es ninguna sorpresapara los que han tenido la fortunade gozar de alguna de sus progra-maciones gerundenses en los últi-mos años, primero en el AuditorideLaMercè i después enelAudito-ri-Palau de Congressos, pasandopor el añorado Festival de Músi-ques Religioses i del Món. AhoraIbáñez aterriza en el queprobable-mente es el encuentro profesional

de referencia en nuestro país en loque a músicas tradicionales se re-fiere dispuesto a dejar su propiahuella. Y con Nostrum tiene oca-sión de proponer una aproxima-ción abierta y dúctil a las tradicio-nes más bellas del Mediterráneo.De Valencia a Estambul pasandopor la isla de Córcega, cuatro con-ciertos que hacen escala en músi-cas tradicionales bañadas por elMediterráneo como son la polifo-nía corsa, el cant d'estil valencianoy la ya citada música otomana.De la primera desembarcarán

enManresa los integrantesdel con-juntoTempusFvgit, unode los gru-pos vocales corsosmás en boga delmomento, digno continuador deformaciones ya legendarias comopor ejemplo IMuvrini, Donnisula-na o A Filetta. Ellos se encargaránde entonar este misterio a tres vo-ces y de nuda belleza que es el can-to polifónico corso.Nomenos fascinante y de raíces

inextricables es el cant d'estil, “es-te cant clar i noble” quehanpreser-vado hasta hoy cantaores y can-

taorscomoJosepaBlasco, laPilare-ta o el Xiquet del Carme, pero quesehapopularizadomás allá del cír-culo de iniciados gracias a las revi-sitaciones de un Miquel Gil, unPepGimeno Botifarra o incluso unCarles Dénia. En este caso nos lle-gará servido por la que se presentacomo una de les revelaciones de laFira, el jovencísimoXavierBenedi-to, más conocido como Xavier deBétera.También de tierras valencianas

procede el cuarteto Evo, que pre-senta una relectura de la músicamedieval en clave panmediterrà-nea. Una propuesta que entiendela música como lingua franca delMediterráneo, mar de vecindadesque baña por igual Oriente y Occi-dente, la Cristiandad y el Islam.En esta su primera cita, Nos-

trum sólo ha tenido tiempo de va-rar en cuatro de les tantas tradicio-nes labradas durante siglos por elvaivén incesantedel oleajemedite-rráneo. Tradiciones que nunca re-nuncian a otear nuevos horizon-tes, soñar en otros puertos, perosin tampoco olvidar nunca cuál fueelmuelle de donde partieron. A findecuentas nopodía serdeotromo-doque, en estasmúsicas, lamoder-nidad nunca deje de estar ancladaen la tradición, pues de unmar an-tiguo como el nuestro se trata. Loresume con su mágica precisión elautor croata PedragMatvejevic enel su nunca suficientemente leídoensayoMediteranski brevijar (Bre-viariomediterráneo), quizá la obraindispensable sobre el Mare Nos-trum junto con el clásico historio-gráfico La Méditerranée de Fer-nandBraudel: “Las ciudadesmedi-terráneas viven más que otras delos recuerdos. En ellas, a menudo,el pasado esmás importante que elpresente. Su futuro se apoya en losdías que han transcurrido antesque en los que transcurren”. |

cho éxito en el Tantarantana o elAlmeria.Otro caso ilustrativo seríaPerversiones sexuales en Chicago,de David Mamet, que ganó trespremios en laMostra de Teatre deBarcelona en el año 2004 e hizotemporada en el Tantarantana;ahora, el mismo texto acaba de pa-sar por la Villarroel en formatomuycomercial, repleto de caras te-levisivas.Otro de los valores de las salas

de pequeño formato es que pue-den servir para redescubrir a auto-res que en otros tiempos habíanocupado grandes escenarios y quehan quedado medio olvidados. Esel caso del autor francés JeanGira-doux, que en los últimos años sóloha pasado por el Tantarantana y elAlmeria y que ahora se ensaya enel Akadèmia. “Espera, no entresque creo que están todos en bolaso alguna cosa así”, diceMercèMa-naguerra entreabriendo la puertadel Akadèmia. En el interior, dosactores recién salidos del Institutdel Teatre ensayan Amfitrió 38, deGiradoux. La compañía ya estrenóla obra en elAlmeria en junio, peroahora la recupera tras haber pro-fundizado en el texto y redibujadoel trabajo interpretativo. “Este tra-bajo de exploración y de profundi-zación sería imposible en otro tipode teatro”, dice Managuerra, y serefiere a que la reformada sala jun-to a la avenida Diagonal, “no tienecomo objetivo el rendimiento eco-nómico”. Es gracias a ello que losque trabajan aquí pueden dedicar-se a lo que la actriz, profesora y di-rectora del Akadèmia considera la

base de todo, “el descubrimiento”.Jordi Casanovas, director de la

Sala Flyhard, coincide con Mana-guerra cuando habla de las venta-jas del formato de su sala: “las pro-ducciones se montan con modes-tia, se hace con un tiempo largo,con cariño, con dedicación y conmuchoamor.Nohace falta serma-temático para ver que los númerosno salen con una sala de 40 locali-dades”. La gente implicada en elproyecto, dice Casanovas, sabeque losbeneficios sonmínimos, pe-ro que “a cambio pueden hacer untrabajomás entregado y dedicado”que el que se hace en teatros quetienen calendarios y timings máscerrados. De ahí que Casanovasjustifique la aparición de nuevaspequeñas salas en tiempos difíci-les: “En parte es la situación actualque creo que pide tener un espaciopropio. Puedeque sin esperar a ob-tener un resultado económico conbolos y gira, cosas que parece quetienden a reducirse, pero ejercien-do la esencia de tu profesión conlibertad”. |

NostrumLaFiraMediterrània deManresa consagraunciclo de su 15.ª edicióna las tradicionesmusicalesmás exquisitas delMediterráneo

Oleajes delMareNostrum

Los beneficios sonmínimos en estas salas,pero es posible hacerun trabajo “másentregado y dedicado”

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