FOROBOLETÍN INFORMATIVO DEL CONSORCIO DE LA CIUDAD MONUMENTAL, HISTÓRICO-ARTÍSTICA Y ARQUEOLÓGICA DE MÉRIDA

Nº 3355, abril 2004

Puerta de acceso al anfiteatro.Fotografía localizada en la

excavación de un solar en la c/Dávalos Altamirano.

3El Consorcio

Excavación arqueológicaen el solar de Resti

© Foto: Gilberto Sánchez

2El Consorcio

La gestión del yacimiento arqueológico emeritense:una labor de documentación, investigación y difusión (I)

El Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida esel organismo que desarrolla la gestión integral del yaci-miento arqueológico de Mérida desde su creación en1996. Se trata de un órgano de gestión formado portodas las instituciones que poseen alguna responsabili-dad o competencia en materia de patrimonio históricoemeritense.

La Junta de Extremadura es la que posee las com-petencias de patrimonio histórico en la región desde1984; con el fin de consensuar las medidas de protec-ción patrimonial, delegó estas funciones en el Consor-cio para incorporar e involucrar en esta función al restode las instituciones.

El Ayuntamiento emeritense posee las competen-cias en materia urbanística y, a través de la Gerenciade Urbanismo, vela por el cumplimiento del Plan Gene-ral de Ordenación Urbana y Plan Especial actualmenteen vigor. Los puntos de confluencia entre las responsa-bilidades de ambas instituciones son tantos que, de noexistir el Consorcio como instrumento de relación institu-cional, los puntos en litigio serían continuos.

El ministerio de Cultura, forma parte también delConsorcio; garantiza la vinculación nacional del pro-yecto, colabora en la financiación de diversos proyec-

tos patrimoniales y permite una relación fluida graciasa la labor del Museo Nacional de Arte Romano.

Por último la Diputación Provincial de Badajoz seha implicado desde la creación del Consorcio encuantos proyectos han sido solicitados; publicaciones,congresos, actuaciones patrimoniales que han poseídoel aval y financiación de esta institución.

A pesar de que, en ocasiones, hayan existidoconflictos en el seno del Consorcio, debemos confirmarel éxito de este planteamiento que es puesto de mode-lo de gestión patrimonial en toda Europa. Resulta lógi-co que, en ocasiones, la presión diaria, dificulte con-templar con perspectiva la labor de esta instituciónque, más que ninguna, es de todos los emeritenses yque gestiona un patrimonio que es propiedad de todala Humanidad.

Lógicamente debemos avanzar en muchos aspec-tos de su funcionamiento y seguir trabajando en ladocumentación, investigación, conservación y difusióndel patrimonio arqueológico emeritense.

Desde el punto de vista de la documentaciónarqueológica debemos seguir trabajando para agilizarla realización de excavaciones arqueológicas previasa la concesión de la licencia de obras. En este sentido

todos debemos ser conscientes que Mérida es la únicaciudad europea que desarrolla la mayor parte de estetipo de intervenciones financiadas por la administra-ción, ya que en el resto del país es el promotor o pro-pietario quien asume el gasto de la excavación. Apesar de que en los últimos doce años se ha multiplica-do por seis el número de trabajadores –arqueólogos,dibujantes, topógrafos, auxiliares, peones– dedicadosa desarrollar las excavaciones arqueológicas en elConsorcio y de la gran implicación de algunos promo-tores en la agilización de los trabajos, somos conscien-tes de que debemos seguir creando mecanismos degestión para que, entre todos, minimicemos el tiemponecesario para estas intervenciones.

No obstante, resulta ineludible la realización deestas excavaciones que, además de ser obligatoriassegún establecen la Ley de Patrimonio del Estado Espa-ñol y la Ley de Patrimonio Cultural de la Junta de Extre-

madura, son un seguro de continua aparición de restosarqueológicos que, en ocasiones, amplían el númerode recintos monumentales visitables de la ciudad–cuyo número se ha triplicado en los últimos años– ysiempre suponen un avance en el conocimiento denuestro pasado histórico.

Hoy podemos decir que Augusta Emerita es laciudad romana mejor conocida del país; del mismomodo, las continuas excavaciones desarrolladas y lasinvestigaciones efectuadas por parte, no sólo, de lasinstituciones científicas instaladas en la ciudad –el pro-pio Consorcio, el Instituto de Arqueología de Mérida oel Museo Nacional de Arte Romano– sino también deinvestigadores procedentes de otros lugares e institucio-nes, han ampliado el conocimiento de la ciudad entodos los periodos.

PEDRO MATEOS CRUZ

Trama urbana conocida de la ciudad en época romana

VIII Edición Festival Juvenil de Teatro Grecolatino

54Una vez más, como viene ocurriendo desde hace yaocho años, a finales de abril volvieron a resonar, ennuestro milenario Teatro Romano, los versos de los anti-guos poetas con las voces renovadas de jóvenes acto-res que cada curso ponen mucho de ilusión y esfuerzoen llevar a escena sus comedias y tragedias.

Durante los días 27, 28, 29 y 30, unos diecisietemil alumnos de secundaria de todo el país asistieron,acompañados de sus profesores, al VIII Festival Juvenilde Teatro Grecolatino. En esta Edición las obras fue-ron: El Agamenón de Esquilo; La Antígona, de Sófocles;El Soldado fanfarrón, de Plauto; Las Tesmoforias, de

Aristófanes; Los gemelos, de Plauto; y la obra al esti-lo plautino de Chigo de Chiara, estrenada en Méri-da el 10 de julio de 1985, Comoedia.

No es de extrañar –lo vemos a diario– que anuestra ciudad acudan, durante todo el año, alum-nos y visitantes de todas las edades y lugares, puesel patrimonio arqueológico-monumental que ofreceMérida la hace uno de los centros más atractivospara el turismo cultural. Pero, si bien es verdad quela mera visita a la antigua colonia Augusta Emeritaresulta ya en sí misma altamente enriquecedora, nolo es menos que este Festival aporta también un altovalor añadido.

En efecto, en esos días uno de los monumentosmás emblemáticos de su patrimonio, el Teatro Roma-no, no sólo recobra la función para la que fue crea-do, sino que lo hace, y esto es lo verdaderamenteimportante, a través de los jóvenes. Ellos son, al fin yal cabo, quienes tomarán el relevo. A ellos debe diri-girse nuestro empeño de darles una educación lomás completa posible que les forme integralmentecomo personas. Y, sin duda, uno de los pilares bási-cos de esa educación descansa en el conocimientode las culturas Griega y Romana, puesto que éstasconstituyen una parte fundamental del componentehumanístico de la cultura occidental.

Es, por esto, nuestro objetivo que conozcan yvaloren el legado grecorromano.

Estamos convencidos de que una de las mejo-res formas de conseguirlo es poniendo a su alcancela oportunidad de una doble experiencia: de unaparte, la de participar de forma directa y viva, biencomo espectadores, bien como actores, de una delas muestras más significativa de ese legado: el tea-tro. De otra, la de tomar contacto con otros jóvenesa los que les une, aunque sea en muchos casos sólodurante esos días, el interés común por “lo clásico”.Si a esto le sumamos que el contexto en el que sedesarrolla es Mérida, la antigua capital de la Lusita-nia, y, en especial, su maravilloso e incomparableTeatro Romano, la experiencia no puede ser másmotivadora.

ISABEL GARCÍA PINEDA

El ConsorcioEl Consorcio

© Fotos: J. M. Romero

¿Se imagina una nochede primavera en el anfite-atro romano iluminado,mientras suenan cancio-nes populares del sur deÁfrica? ¿Le gustaría cono-cer la h is tor ia de lascolecciones arqueológi-cas que precedieron alos museos de la ciudad,y escuchar música barro-ca en el jardín de anti-güedades del ParadorNacional de Turismo?

En la segunda edi-c ión de “Enc lave deEspectáculos”, el Consor-cio de la Ciudad Monu-mental le propone reco-r rer t res edi f ic ios delyacimiento emeri tense,conjugando h is tor ia ymúsica.

Uno de los objetivosfundamentales de esteprograma es hacer un usosocial de los recintosmonumentales, ofreciendoal emeritense la posibili-dad de pasear por ellosmientras agrupacionesmusicales de la ciudad(Conservatorio Municipal“Esteban Sánchez” yEscuela de música “Juandel Encina”) hacen suyosestos espacios, llenándo-los de sonidos que evo-can sensaciones.

Si le apetece acompañarnos, las citas serán:““OOttrroo ÁÁnngguulloo””, día 7 de mayo, en el Teatro roma-

no, con la colaboración de los alumnos del Conserva-torio Municipal “Esteban Sánchez”. Visita guiada y acti-vidad musical.

““PPoorr llaa PPaazz””, día 11 de junio, en el Anfiteatro roma-

no, con la colaboración de los alumnos de la Escuela deMúsica “Juan del Encina”. Actividad musical.

““UUnn eejjeemmpplloo ddeell BBaarrrrooccoo EEmmeerriitteennssee””, en el ParadorNacional de Turismo, antiguo Convento de Jesús, con lacolaboración de los alumnos de la Escuela de Música“Juan del Encina”. Visita guiada y actividad musical. 7

Nuevoshallazgos

© Foto: J. M. Romero

El Consorcio

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Enclave de espectáculos,segunda edición Cabeza de león

Capilla delParador Nacional de Turismo

© Foto: J. M. Romero

La intervención efectuada en el solar de la C/ HernánCortes, nº 37 ha permitido en gran medida conocer eldesarrollo histórico de una zona de la ciudad de Méri-da en la que las intervenciones arqueológicas hanestado muy limitadas.

El solar excavado se halla en un área posible-mente intramuros si nos atenemos al trazado queactualmente manejamos para la ubicación de la mura-lla en esta parte de la ciudad. Los primeros vestigioscorresponden a una vivienda del s. I que se halla aunos 6 m. de profundidad respecto al nivel de calle.Por lo tanto, en la actualidad, las viviendasde la citada C/ Hernán Cortés y limí-trofes con J. R. Mélida, se asien-tan sobre un importante nivelde rellenos. A esta viviendase le superpone unasegunda domus en la 1ªmitad del s. II. Posterior-mente , se e leva lacota de edificaciónen 2’80 m., nivel quese alcanza medianteuna acumulac iónmasiva de tierras conescombros (materialconstructivo), cenizas ycarbones asociados a unvertedero sobre el que selevanta una vía de tierra.

Es en uno de estos estra-tos de relleno en el que ha apareci-do la pieza que ilustra esta página quese halló descontextualizada y mezclada conmaterial diverso.

Se trata de un objeto de bronce en altorrelieveque representa una cabeza de león de perfil cónico.La zona más prominente se corresponde con la narizbajo la cual aparece la boca abierta a través de laque se dejan entrever los colmillos del animal. En elcentro de la misma tenemos un orificio circular semejan-te a los que se sitúan a ambos lados de la boca. Losojos aparecen perfectamente tallados, apreciándose lacarencia de iris y con el arco supraciliar muy marcado.En torno a las facciones se desarrolla una gran melena

dispuesta en corona, con los mechones esquematiza-dos colocados en una única hilada de trazos rectilí-neos y muy cortos. A ambos lados de esta melena sur-gen las orejas del animal de forma redondeada conlíneas que convergen hacia el interior dando profundi-dad a los elementos.

El león se inserta en una composición circularmoldurada delimitada por sendas líneas de enmarquetanto al interior como exterior. En el espacio de estamoldura se han perforado cuatro orificios circulares,equidistantes entre sí, de pequeño tamaño: 3 mm. El

diámetro de la pieza es de 7’1 cm. y eltamaño de la representación central

no excede de 4’5 cm. La pieza se adscribe a

una serie de elementos simi-lares identificados como

badajos de puertas demadera, apareciendosos ten idos en e lbatiente por clavosde bronce, en estecaso cuatro, que secorresponden con loscuatro orificios descri-

tos. En la boca, y atra-vesando los or i f ic ios

incisos en los lateralesde la misma, se colocaba

una ani l la igualmente enbronce.

La representación del león esun elemento muy recurrente en las repre-

sentaciones iconográficas de época romana ymás concretamente en este tipo de elementos ornamen-tales, conociéndose ejemplos semejantes en el Museode Padua, Brescia, Frenz o Nápoles. El león en épocaromana tiene un valor profiláctico y apotropaico, loque estaría en relación con la ubicación del mismo pro-bablemente ocupando la puerta principal de acceso auna domus altoimperial (s. I) como protector de lavivienda, no descartándose su relación con los vesti-gios hallados en el solar.

ANA BEJARANO OSORIO

9Sondeos y

excavaciones

Panorámica de la excavacióndel cuartel Hernán Cortés© Foto: Carmen Pérez

8Sondeos y

excavaciones

Intervención arqueológica en el solar del cuartel Hernán CortésGracias a las intervencio-nes arqueológicas realiza-das en el solar ocupadopor las instalaciones delcuartel Hernán Cortés, hoyposeemos más datos acer-ca del mundo funerario enAugusta Emerita.

Cuando este espa-cio dejó de ser utilizadocomo cantera a mediadosdel s. I d.C., el gran y pro-fundo foso creado por laextracción de piedra seaprovechó como vertede-ro. De este modo, fue relle-nado por sucesivos estra-tos de “basura” más omenos un i formes en sucomposición: desechos demateriales orgánicos comoceniza, carbones, huesosde animales y conchas; einorgánicos, como frag-mentos de cerámica,vidrio, metal, hueso traba-jado o piedra ; y restos demateriales constructivosdecorativos como estuco ypintura mural. Además, sedepositaron y arrojaronallí al menos a 64 indivi-duos humanos, cuyosesqueletos nosotros encontramos en múltiples posturasy orientaciones. Esta actividad no resulta extraña sitenemos en cuenta que las áreas funerarias, ademásde ocupar los suburbios, podían compartir espacio conactividades insalubres. Sin embargo, el hecho de queúnicamente hayamos documentado inhumaciones (enuna época en que el rito predominante era la incinera-ción), con los individuos dispuestos en posturas tan inu-suales y forzadas, con depósitos funerarios o ajuar encontadas ocasiones y carentes en su gran mayoría deestructuras funerarias, indica que estamos en un áreadonde se enterraban los miembros de los sectores más

bajos de la sociedad (pobres, esclavos o criminales).Estos individuos, que no tenían medios económicos pro-pios o donados para adquirir una sepultura o unaplaza funeraria en un columbarium, tenían la posibili-dad de ser enterrados en grandes áreas funerariascolectivas creadas por donantes voluntarios o bien,quedar relegados a fosas comunes, como es nuestrocaso, que en Roma eran denominadas puticuli (pudri-deros). Estos lugares eran clasificados como loca publi-ca, propiedad de todo el pueblo y designados para eluso de todos. Además, eran sitios seculares, no religio-sos, extendiéndose esta condición al tratamiento del

cuerpo de los individuos que allí se inhumaban, que notenía que ser purificado ritualmente. El derecho a unfuneral (funus) y a una sepultura (locus sepultae) era unhonor que se concedía sólo a quienes hubiesen presta-do un servicio especial a la comunidad.

El buen estado de conservación en el que seencontraban los huesos que hemos exhumado nos hapermitido saber que se trataba tanto de hombres comode mujeres y de diferentes rangos de edad incluyendononatos (fetos). La disposición de los esqueletos nos haindicado que algunos de ellos fueron literalmente arro-jados y otros colocados, bien directamente sobre labasura, bien introducidos en posturas antinaturales enestrechas fosas. Incluso la postura de algunos indivi-duos presentaba una actitud tan forzada que parecenhaber apoyado los brazos para amortiguar del golpeal caer al foso. Algunas inhumaciones habían sidoremovidas para alojar a un nuevo individuo y, en algu-nos casos, un individuo fue depositado sobre otro.

Sabemos que la mayor parte de los individuosadultos habían estado desarrollando en vida un granesfuerzo físico (que deja huella en los huesos largosdel esqueleto) y en ocasiones observamos lesionesprovocadas por sobrecarga o enfermedades como laartrosis. Como dato curioso, decir que las piezas den-tarias de la mayoría de los individuos no presentabancaries, lo que indica una alimentación baja en azuca-res e hidratos de carbono.

Desconocemos aún la causa de las muertes, perono parecen haber sido violentas, a excepción de unindividuo adulto, cuyas lesiones en la columna verte-bral, realizadas con un objeto punzante, pudieron pro-vocar su muerte.

Todos los datos recogidos concluyen en queestamos ante el primer puticuli de época Altoimperialdocumentado en Mérida.

CARMEN PÉREZ MAESTRO

Fragmento de máscara teatral© Foto: Carmen Pérez

10 11Hoy es

memoriaHoy es

memoria

Pequeños documentos del si glo pasado

Es conocido por la mayoría de la gente el hallazgo,durante el proceso de excavación arqueológica, demúltiples objetos realizados con diversos materiales ypertenecientes a las distintas etapas históricas, normal-mente bastante alejadas de nosotros en el tiempo. Den-tro de los sucesivos estratos de tierra que se van levan-tando, la cerámica, convert ida normalmente enfragmentos, es el material más abundante. Todos estosmateriales arqueológicos sirven al investigador paraorientar sobre la cronología del yacimiento.

En las intervenciones arqueológicas que se reali-zan en Mérida se documentan todas las etapas históri-cas, inclusive la fase contemporánea de los solaresque la mayoría de las veces se corresponde con lascasas tradicionales de la ciudad.

En la excavación realizada en la calle DávalosAltamirano esquina Los Maestros se encontraron, duran-te la limpieza previa a la excavación, una serie dedocumentos, pequeños retazos de la historia de loshabitantes de la casa, que fueron desechados y aban-donados y que pudimos recoger como material arqueo-lógico.

El objeto más llamativo es el negativo de unafotografía de uno de los accesos al anfiteatro de la ciu-dad con parte del mismo aún sin excavar. La imagenfue realizada o revelada por BOCCONI, fotógrafo ins-talado en Mérida a principios del siglo pasado.

También encontramos una carta mecanografiaday escrita en Lérida el 11 de Julio de 1938; en ellaManuel del Río escribe a sus padres en plena guerra

civil. Sus palabras no dejan traslucir nada del conflicto,sólo el sobre con un manifiesto “¡Arriba España!” nospone en antecentes de la ideología política de la fami-lia.

Dos pequeños cuadernos de notas nos sitúan en1907 y en 1933. En el primero aparece una redac-ción sobre geografía y sobre una serie de descripcio-nes de diversos animales como el reno, el caballo, elcerdo, el jabalí, etc. En el siguiente sólo aparecen dis-tintas anotaciones sobre gastos domésticos generales,siendo muy interesante la relación de precios de ali-mentos de uso común en nuestros días y el precio delcine y el periódico.

Por último, también hallamos dos folletos de prin-cipios del siglo pasado sobre distintos productos médi-co-estéticos, uno es la Galegine de Nubia, “obleaspilulares según la fórmula del Doctor Deschamp” utili-zadas para “adquirir y conservar un hermoso pecho” yel otro es una medicina “Pulmosérum Bailly” utilizadocomo el remedio “más eficaz y más constante contra labronquitis crónica”.

Aquí sólo pretendemos mostrar estos documentosque quedan como pequeñas sombras, aparecidas enuna excavación, de la vida cotidiana a principios delsiglo XX de una familia emeritense.

ROCÍO AYERBE VÉLEZ

FOROBoletín del Consorcio

de la Ciudad Monumental,Histórico-Artística y Arqueológica

de Mérida

Redacción: Reyes Huertas, 5

Tel. 924.00490806800 Mérida

(Badajoz)

Suscripción gratuita:924 004909

didactica@consorciomerida.org

Fotomecánica:Sérprex

Impresión:Imprenta Moreno

Depósito legal:BA-030-1997

HHoorraarriiooss ddee vviissiittaass del Conjunto Monumental

de Mérida(todos los días)

Verano: 9,30* a 13,45

17 a 19,15

Invierno:9,30* a 13,45

16 a 18,15

(*) El centro de interpretación yexcavación de la Basílica deSanta Eulalia se abre a las 10.

En verano, Semana Santa ypuentes el horario de visita

al Teatro y Anfiteatroes ininterrumpido.