reto al cambio

1

La aceptacióndel cambio

Lo único constante es el cambioHeráclito

4 Preparación del proceso de cambio

El universo no es siempre el mismo, avanzan las constelaciones, lasestrellas y los planetas, todos ellos completan sus ciclos para volvera empezar. Así, casi todo después de terminar, empieza de nuevo,pero nunca igual. El Sol aparece todos los días pero cada amanecernunca es igual, existen pequeñas diferencias que lo hacen cambiar.

El hombre también cambia y su amanecer de cada día no esigual. Cada día es una nueva oportunidad de crecer y disfrutar quese puede observar y aprovechar o se puede dejar pasar. El hombretiene la oportunidad de aliarse a los cambios en su interior y en sumedio familiar y laboral, pero a veces también tiene la miopía que leimpide observar e integrar su proceso de cambio.

Cada día es una nueva oportunidad para aprender con la posibili-dad de mejorar. Tanto la calidad de nuestra vida y la de los demás.¿Cómo podemos aprovechar cada nuevo amanecer para integrarnosa una forma de cambiar que nos permita mejorar? Primero, cono-ciendo las circunstancias de nuestra realidad y, segundo, aceptandola inercia del cambio universal.

El conocimiento y la aceptación de que los cambios ocurren pue-de llegar a permitir a los seres humanos vivir sus propios procesosde cambio de una manera más integral. Parte de los cambios impor-tantes en nuestras vidas ocurren por influencia del ambiente y partede ellos pueden ser el resultado de una inquietud interior. Cambia-mos porque la realidad nos obliga y porque también deseamos y pla-neamos intervenir en la realidad.

En este capítulo vamos a enfatizar en la necesidad de aceptaciónde los procesos de cambio, tanto los originados en el entorno comolos que surgen en el interior del hombre para vivirlos positivamente.Hemos incluido ejemplos de todas las edades de la vida y preferente-mente de adaptaciones en los niveles personal, familiar y laboral.

Proponemos como metodología de cambio un sistema vivencialque hemos denominado: "Pásate por tu vida". El aprendizaje másimportante sobre la forma de cambiar será el entendimiento de larealidad mediante el paso por nuestra vida la experiencia de los de-más. Este libro no es una receta para cambiar, es una invitación paraque usted cree su propia receta de cambio después de reflexionar ysentir la experiencia humana del cambio.

El modelo estructural de cambio que ya hemos mencionado in-cluye todos estos pasos: Reto: Motivación e intención de cambiar;Salida: entendimiento (de las circun~tancias internas y externas),

La aceptación del cambio 5

aceptación (de las circunstancias y de la necesida? de cambi~r);Transición: (dejar ir -soltarse- quedar suspendido en el aire-agarrarse- completar); Llegada: (dejar atrás con vivencia de logrode cambio - nuevo inicio): Terminación; Nuevo reto.

El motor de la vida

El motor de la vida es el cambio. Los seres humanos cambiamos aun-que no nos lo propongamos; camb!a. nu~stra.~dad, tal,la ~ peso. Cam-bia nuestro metabolismo, estado CIVil,srtuacion sconorruca: nuestrasamistades, lugares de trabajo. El paso del tiempo es inexorable. ¿Porqué cambian las cosas?, se preguntó Raúl una mañana. ¿Por qué nopermanecen igual?

Raúl había ido a visitar a su madre enferma. El médico le acababade informar que su madre no reconocía a nada ni a nadie y que desa-fortunadamente su padecimiento era incurable. El médico recomen-dó resignación a la familia y salió del departamento de la anciana.

A Raúl se le llenaron los ojos de lágrimas. Ante él estaba su ma-dre con la mirada perdida sin poderse comunicar.

Raúl hizo un esfuerzo por sobreponerse Y tomó fuertemente lamano de su madre mientras pensaba. ¿Por qué tienen que cambiarlas cosas? ¿Por qué?

Raúl había estado muy ocupado en los días que antecedieron ala enfermedad de su madre. Problemas en su trabajo, en su relaciónsentimental y económicos relegaron a su madre a cuarto término. Pe-ro de repente la enfermedad de su madre ocupó el primer lugar desus intereses.

Raúl experimentó súbitamente una experiencia de cambio. Laenfermedad de su madre transformó su escala de preferencias y alhacerlo cambiaron también de orden otros asuntos que antes eranimportantes para él.

Las cosas cambian aunque los seres humanos no lo queramos.Las cosas cambian mientras los seres humanos nos hacemos viejos.Todos cambiamos, de embriones a niños, de niños a adultos, deadultos a viejos. El motor de la vida es el cambio. Algunas veces lascosas cambian para mejorar y algunas otras para empeorar. Algunasveces las cosas cambian para aparecer y otras para desaparecer Yno vuelven jamás.

-"----

t'reparación del proceso de cambio

cha~~,~~:~ perdemos lamentablemente la oportunidad de aprove-pasado A:a~ I~eque nos dota la vida, nos arrepentimos de nuestrochos "hubieraUS'~qPUaeS~rdo~muchos pensamientos por la cabeza. Mu-

In ican una búsqued de culoabnro culpabilidad interna. Si ella hubiera IIama~ e,c~ pabihdad ex.t~rna~~~~~:)e:ht~~~~~~~~~~~d~~ (~~:pabil~d:? i~~~~~~~~~~~/,'~d~~más yo (culpabilidad interna). El tiempo ~~~~g'r!lsa

,ash~,ble~a.cuidado

vez. . o o VIVimos una

El motor de la vida es el cambilamentar cómo se aleja la vida. no ~' ~ero no podemos sentamos avos y tristes. Es importante re~onoc:r ~~os ser observadores oasl-existen a nuestro alrededor para qu procesos de cambio que

e no nos tomen por sora que seamos parte de ellos parte del rpresa, pa-agentes de cambio y dejar nu~stra huella :~~~~~~u~~~sente como

A Raúl se le olvidó que el tie . ,por alto que los viejos necesitan ~~p~~~eJec~a a '~s pe~sonas. Pasóse acaba la vida No supo re la ya ecto, paso por alto quepor sorpresa. Mi~ntras RaúlPse~~~art:~ presente y .el futuro lo tomópoonar, ser los de cualquiera, se di~ cue~~ sus P~OPIOSc~~bios, quede ánimo, que tenía un poco de tri a qu.e .escendro su estadoque peleaba en desventaja contras~:z~:"Z:~~;~~~d:e dio cuenta

Cuando un ser humano como R '1negociar sus pérdidas y ganancias au no encuentr~ la manera detrarse y sentir que no hay salida Enal adaptarse a la vida, puede frus-provecha el tiempo que le da I~ . ~arte por eso se deprime y desa-y enfrentar el reto de adaptarse a ~~~~a~~~~e~gh~,ni~ar ,SUSfuerzasduce a la salida es el conocimiento del r . 10, e uz que con-vencimiento para resolverlo Deb p oblema y ellmpetu y el con-pretendo aca tarm ., o conocer a fondo aquello a lo quebardía, con l:frent:'e~e:itoUeySCdOebo decidirme ~ afrontarlo, sin co-

n una estrategia.

Conocer primero e intervenir El'simplista en realidad es mucho ~á sa es ~ f.ormula y a~nque parecemiento que parte de mi análisis d s comp eja. ~o es solo un conoci-y evaluación de mí mism el pr?blema, srno un conocimientoproblemas, cuánto van aO~~~;t~~::;ec~~~á~~~ ~ rea~cionar ~nte los

f,;~:~iF~~~~:~~~~O~o~~~:e~ir~~~~~~~e~ep~~;p~z~E~C~:f~~~


Raúl tuvo que iniciar una nueva planeación de su vida, empezóde nueva cuenta a aceptar los cambios ya dejarse llevar por el pasodel tiempo. Entendió la importancia de prever las oportunidades yaprendió también a valorar la vida y la salud más que ninguna otracosa y, por supuesto, se hizo el propósito de aprender de sus errorespara aprovechar mejor su tiempo y su vida.

Usted preguntará, ¿cómo le hizo Raúl para superar esos autorre-proches? La respuesta es muy simple: con una estrategia. La estra-tegia de clarificar sus intenciones antes de emprender nada y de che-car la compatibilidad de sus intenciones con las de los involucradosen sus decisiones; la intención de percibir la meta y el reto de contro-lar el cambio. Todas estas herramientas serán tratadas en los capítu-los siguientes.

Somos producto de nuestras historias. De un padre y una madre.De una familia, de un país. El ser humano, si se ama, debe apreciarsus raíces y amar a las personas que han influido en él por todo loque le han dado. Pero no debe aferrarse a las tradiciones del pasadoque en su momento fueron pilares en nuestro desarrollo. Para Fer-nando de Castiello: "La tradición no es una cómoda butaca que sirvepara sentamos a contemplar las glorias del pasado, es mas bien untrampolín para lanzamos a la conquista del futuro".

El futuro se construye en el presente. La calidad de lo que sea-mos como producto terminal se fabrica en el tiempo presente. La rea-lidad no es algo que ha sido o que va a ser. La realidad es algo pre-sente que nos ofrece la oportunidad de transformar y transformar-nos. La realidad se rige por reglas muy estrictas, una de ellas son loscambios. Heráclito, en 513 a. de C., decía: "No hay nada permanen-te excepto el cambio". Nos queda el presente, el presente para pen-sar, actuar, decidir, vivir y sentir. Un presente que camina incesante-mente sin retorno posible, un presente que se va, un presente quese convierte en pasado a cada instante.

Cada sábado Alejandro, estudiante de medicina, pasaba el díacon su abuela: Llegaba a la antigua casa, entraba por la puerta dela cocina y al pasar enfrente del sillón del abuelo. no podía evitar de-tenerse. Se detenía algunos segundos mirando aquel mueble. Mira-ba al mueble y al hacerlo siempre recordaba cuando hacía tres añoshabían sonado las campanas de la torre mayor de la pequeña iglesiade la localidad. Recordaba cuando él se acercó por última vez al fére-tro de su abuelo. Recordaba cómo no podía descubrir todavía lo queestaba pasando. Sabía que su abuelo se había ido. que ya no volve-


ría. Sabía que se había muerto. Pero no comprendía por completque sucedía a su alrededor. Pasaban por su mente muchas iogenes. m

-Lo siento mucho -le dijo una señora de avanzada edad sin .rarle a los ojos. mI-

-Que encuentre pronta resignación -le dijo otra señora vestidde negro. a

Recordaba cómo todos le miraban; recordaba también al abuelvivo, recordaba sus consejos, su presencia, su fuerza, su vigor, s~entereza. Luego volvía en sí, sumamente entristecido y melancólico'el abuelo había sido una figura muy importante en su vida, por es~lo buscaba y recordaba tres años después de su muerte.

y así, después de una pequeña meditación y recuerdo, el jovenestudiante de medicina se internaba en la casa y pasaba el día consu abuela. Así pasó los sábados Alejandro durante muchos años has.ta que un buen día su abuela también encontró la muerte.

La mayoría de nosotros podemos identificarnos con Alejandroporque también hemos experimentado la dificultad para aceptarcuando las cosas han cambiado a nuestro alrededor. Una personaque se aferra a la existencia de otra persona cuando ésta ya se hamuerto, prolonga su proceso de aceptación de la nueva realidad yposiblemente nunca completa la transición de esa pérdida, porquele falta el paso crucial: el dejar ir. Hemos visto que para enfrentar uncambio necesitamos conocimiento, de la realidad y de nosotros y unaestrategia. Pero el ejemplo de Alejandro es más complejo: como quefalta otro ingrediente más allá del conocimiento y de la estrategia: En-frentar los cambios sin sobrepeso.

Cuando uno está enfrentando un problema del presente pero vi.ve atormentado por problemas del pasado, lleva sobre peso que leimpide transitar con ligereza. El sobrepeso es el no dejar ir lo ante-rior, es como tener atrapada una pierna en una arena movediza. Esonos pone en desventaja.

Dejar ir implicó dejar atrás la necesidad de ver al abuelo vivo yenfrentar el presente. Implicó buscar la mejor manera de pasar eltiempo con la aouela; recordar las enseñanzas de su abuelo y hacerun balance positivo de todo lo que junto a él aprendió. Todo ello impli-ca 12 aceptación de un cambio.


ceptó el cambio de que su abuelo ya no estaría vivo enI 'andro a, bi dA eJ ro sí permanecena en sus recuerdos. El cam 10 eel presente, ~epresente) que el abuelo murió (en el pasado) implicóaceptar (en erdad y su ímpetu de no querer aceptarla, y significó el de-conocer la rea I estrategia intencional que será tratada posteriormente.sarrollo de una

Dejar ir .uzaco hasta ahora que para enfrentar los cambios nece-H mas ana I .

e d lar lo pasado conocimiento Interno y externo y una estra-'tamos eJ ' . , id d t

SI. A ntinuación vamos a analizar con mas protundi a es ategla co . .prim~ra etapa de cambio que se llama dejar Ir. .

Cuando subimos una montaña y llevamos una mochila, muyronto nos empieza a pesar I~ carga. Puede llegar el ~omento en

pue tengamos que decidir cuales c_~sasqueremos s~g~lr cargandoq a'les queremos dejar. El monteñísta escoge lo mas Importante yy cu . . bi d I tadeja lo que ya no hace falta. Eso le permite sequtr su ren o aman -ña con más facilidad.

Por ejemplo, el dejar ir (Ietting go ...) se ha. ido multiplicando y hainvadido casi todos los espacios de nuestras vidas. Antes se hablabade la secretaria que podía aplazar el cambio de ~u.nuevo or~enadoro computadora por su antigua maquina de escribir, Escuchabamosque pasaban semanas y hasta meses sin que este rechazo afe?taraa la empresa. Hoy, se habla de cambios de compu~adora~ sermnue-vas por otras más nuevas en solamente meses de dlferencl.a. Y se sa-beque el rechazo ni siquiera es imaginable, porque est~s sl~~ema.sdeinformación tienen datos imprescindibles para la orqaruzacion. SI an-tes la secretaria podía negociar el continuar con su maquina ahora nole queda otra que soltar rápido, tomar rápido, y esperar en muy pocotiempo que lo que ha aprendido deberá ser soltado nuevamente.

Estamos viendo en los mercados de antiguedades cosas que ha-ce muy poco fueron vanguardistas: fax, telex, teléfono fijo, entr~ ?tros.Si se encariñó con algunas de esas cosas, para poder sobrevivir ten-drá que romper esas ligas emocionales rápidamente.

Un cambio implica correr el riesgo de dejar atrás ciertas tradicio-nes, lo que es familiar, lo que nos ha sido cómodo, alo que estamosacustumbrados. Un cambio es como soltar lo que nos ancla a cos-tumbres y hábitos que limitan nuestra capaci.dad d.e aprendizaje enel presente. Muchas personas viven una existencia de deses~era-ción y aburrimiento por el miedo de entrar en aguas no conocidas,


por no soltar lo que conocen aunque ya no están satisfechas coque tienen. "Más vale malo por conocido que bueno por conocOes ~n d.icho popular que no sólo mata el espíritu emprendedor s~los instintos naturales de descubrimiento y por otra parte alientmediocridad y la inseguridad. a

"~ás vale malo por conocido que bueno por conocer". Si así tura mas vale habernos quedado en la cuna, sin aprender a caminhablar, leer, descubrir el ruido de la lluvia o nunca habernos salidel vientre de nuestra madre para hacernos individuos y adultos cpaces de tomar el timón de nuestras vidas.

Todos conocemos adultos que no han cortado el cordón umbilicy no han querido correr los riesgos correspondientes para llegar a slos dueños de su propia vida. En algunos casos, la consecuencia desta incapacidad puede llegar a producir trastornos mentales. Eotros, las consecuencias son el que se deja de desarrollar el potecial por una incesante resistencia al cambio. Esta resistencia no esttanto en la dificultad de adaptarse a cosas nuevas sino en separarnos de lo conocido. Es un aferrarse a lo que se tiene, por temorexperimentar lo nuevo. A veces porque pensamos que todo puedllegar a salir mal, o porque tememos llegar a ser culpables del resutado final. Existen algunas frases triviales que ayudan a la genteresistirse al cambio, algunas de las más comunes son: "Mejor nquedamos como estamos", "Ya veremos" y "Ya Dios dirá".

El que no quiere dejar ir puede estar sumergido en un procesde inseguridad y pesimismo. El que no quiere soltar renuncia a sresponsabilidad al no afrontar las consecuencias de las accionesmantiene cierta cobardía al no encarar las necesidades cambiantedel medio y le produce una gravísima falta de visión en el futuro y uestado defensivo en donde encontrará pretextos válidos para covencerse a sí mismo de que todo está bien y de que no hacer nades lo mejor.

Por otra parte, el que no puede dejar ir, puede encontrar ayuden sus apoyos personales, familiares y sociales. Podría ser escuchdo y orientado por los que le tienen afecto. Al que no puede dejar'se le debe enseñar el camino. Un consejo, una charla, una invitaciótener paciencia con sus amarras, tenerle afecto y disposición parayudarlo. Cuando los seres humanos se convencen a sí mismosque lo que hacen es lo mejor, cierran las puertas a la crítica construtiva que puede venir de algún buen amigo. Tendrá que aparecergún valiente que esté dispuesto a enfrentar las represalias emoci


. aparenta querer recibir consejos, sin permitirlo en elnales de qUien

fondo. _ a en una junta de consejo de una importante empre-Una ma;::aba.por dificultades económicas serias, el gerente ge-

sa que atra I que no le gustaba escuchar observaciones de otros,I hombre anera." nlón de la siguiente manera:

diriglO la reu.. n alguna pregunta o sugerencia con relación a la proba-

-r t:Tdleln~errede la planta? -dijo el gerente general de la empre-bilidad e CI

us ¡·etesde departamento.sa a s_¿Qué tal si recortamos el personal, pero no cerramos -dijo

una voz.-No creo que funcione -repondió el jefe limpiando sus gafas.

-Oiga, podemos hacer un pacto para trabajar con salarios másbajoS mientras mejoran las cosas.

-No me parece bueno pagar menos a alguien por su trabajo.

-Qué tal si trabajamos más horas para que la empresa salgaadelante Y solamente cobramos nuestra jornada de trabajo.

-Eso no me gusta, sería como estar explotando a la gente.

Los asistentes se miraron unos a otros.

-¿No hay más sugerencias? -insistió el gerente-, entoncescerramos la planta, gracias caballeros.

Éste es un ejemplo del funcionario que aparenta querer escucharsugerencias por parte de los implicados, pero en el fondo ya ha to-mado sus decisiones y no tiene ninguna intención de cambiar de pa-recer.

El ejemplo anterior no cumple con el conocimiento externo antesdel planteamiento de la estrategia. Él decidió con base en su propioconocimiento, que no tuvo retroalimentaciones, que lo mejor era elcierre. Y es importante hacer notar que no lo hizo de mala fe, lo hizoporque cometió errores en el procedimiento de conocer la realidada~tes de intervenirla. Dejar ir, por otra parte, significa el inicio decierta apertura a que todo puede suceder, apertura a la crítica, aotras opciones, a otras formas de resolver los problemas, apertura anuevos retos, nuevos horizontes, a cambios de estrategias, de mer-ca~os, de valores, de resultados. Dejar ir es apertura al cambio paramejorar.


La mujer madura de 50 años de edad cayó pesadamente sobrsu mecedora y se dispuso a hurgar entre su bolsa para encontrar Sudos agujas de tejido.

La señora Ramírez piensa que perdió a su marido hace 4 añosporque desde esa fecha su marido frecuenta poco la casa; los quehaceres de lagerencia de la empresa para la que trabaja lo han absorb'do que apenas tiene tiempo los fines de semana de ocuparse de Suesposa. Laseñora goza de buena salud aunque con los achaquenormales de su edad. Uno de sus hijos vive con ella. Guisa para élcuida sus flores y pájaros, va al mercado, ve las telenovelas y esperaque sus demás hijos la visiten. Dice que ya está cansada de hacerlos quehaceres de la casa y a la vez contenta de hacerlos todavía yno obstante que sus hijos la invitan a pasar días con ellos, no quieresalir de su casa.

Ella tiene todas las posibilidades de hacer una vida propia enri.quecida, oye bien, camina muy bien, goza de una peculiar condiciónfísica y ve perfectamente. Todo está bien, sólo que está atada a cosotumbres yobligaciones del pasado. No tiene por qué darle de comera su hijo adulto; no necesita ser mamá ni quedarse en su casa todoel día con los quehaceres que le cansan. Sin embargo, se resiste adejarlos. Essu costumbre, su rutina, lo que le ha dado sentido a suvida. Es loque conoce. Salir de su casa a trabajar o a visitar a susparientes sería arriesgarse a lo desconocido, a otro horario, otra ea-sa, otro silón, otros programas de televisión, y encontrar otro estilde vida q~e no es el suyo.

Se sientecómoda así, sin embargo está dejando de encontrar co-sas nuevas. La señora Ramírez no quiere experimentar otra vida,porque co- la salida de sus hijos y con la ausencia de su siempre OCU'

pado marido piensa que las oportunidades de disfrutar la vida ya seterminaron para ella; solamente espera la llegada de los nietos, seuna buena abuela para ellos y por eso no quiere correr el riesgo diniciar canbios que puedan desviarla del rumbo que ha elegido.

La señoraRamírez reúne uno de los factores que los seres humanos neces'tamos para hacer un cambio en la vida, está insatisfechcon la etapaprevia a la llegada de los nietos; si es que llegan y la frecuentan. Vive incompleta, le falta chispa a lo que hace.

No seescucha a sí misma, no presta atención a todas esas señales de unanecesidad de cambio, no quiere forzarse, y va a seguir insatisfecha mientras siga viviendo en el pasado. No oye esa vocecit


d· e' Oye ¿estás insatisfecha?, pues entonces cambia, así deque le IC· ,sencilla.

u insatisfacción se suma a la falta de habilidad de desprenderse~ t s rutinas Y hábitos del pasado, por eso no progresa a una

de cler a . d . taccic I teva con tantas posibilidades e satis accion como as an e-e.tapanCuuandolos hijos partan de casa, la mamá que ha dedicadorlores . deorirnidavsi. 'da a ellos puede encontrarse desubicada. epnrn: a, Sintoda su VI . I .b Si no encuentra un nuevo sentido en su vida corre e nesgarum o'una suegra entremetida que puede llegar a alejarse de esasde ser . d h"nuevas familias que estan forman o sus IJOS.

La señora Ramírez no quiere dejar ir sus responsabilidades, no. re soltar a su hijo, no quiere desprenderse de su pasado, sus

qUle .' del d . I tuníd dtumbres y sin embargo, Sin saberlo esta sjan o Ir a opor uru a

cos . I hiide hacer cambios en su vida, la oportunidad de impu sar a su IJOpa-ra que lleve una vida independiente Y madura ~ la qu~ tarde o tem~prano tendrá que enfrentarse. A ella no se le ha Ido la vida, se .IeestaIlendo la oportunidad de vivir plenamente esa etapa de su vida.

Los cambios llegan en cualquier etapa de la vida. Cada partici-pante de los diferentes ciclos del desarrollo vive sus propios proce-sos. Exploremos juntos la vivencia de un joven llamado Juan:

Juan tuvo que enfrentar muchos cambios repentinos en su vida.No se trataba de querer o de negociar espacios para tener la oportu-nidad de ajustarse a los cambios. Fue como sumergirse en el interiorde una piscina helada de un solo golpe. Inició sus peripecias el díaen el que terminó la preparatoria; casi ni se había dado cuenta de lorápido que había pasado el tiempo. De pronto se vio una tarde de ju-nio con un certificado en la mano que lo acreditaba como "listo parair a la Universidad".

Juan no tenía miedo de ir a la Universidad pero sí de dejar a sufamilia, y como desafortunadamente la única forma de estudiar la ca-rrera que quería era la de ir a una ciudad mayor, tuvo que elegir estu-diar en otra ciudad y por lo tanto dejar a su familia. No habia pasadotodavía la primera semana cuando una noche sintió que se le salíael corazón; despertó a las cuatro de la madrugada con un deseo de-sesperante de volver atrás. Quería regresar a su ciudad natal y 01vi-d~rse de aquella aventura: Vivir con compañeros que apenas cono-Cla, tener que cocinar, soportar el bullicio de la ciudad. ordenar suropa,etcétera. Muchos cambios en poco tiempo.


-Al ver a nuestros hijos con sus novios -añade la esposa-, ve-mos con claridad cómo al casarse tienen que dejar cada uno de ellosa su familia para formar una nueva, ellos dos, diferente a las anterio-res, tomando las lecciones y experiencias vividas en cada una sin tra-tar de ser réplicas o moldes de ellas.

-En el matrimonio se unen dos personas -prosigue el espo-so-, provenientes de distintas costumbres familiares, culturas dife-rentes, para formar una nueva familia. Tanto ellos como los papás te-nemos que dejar ir lo que ya no es.

Hay un tiempo para todo, siempre un espacio de tiempo, unaoportunidad; es como un juego en el que el hombre debe estar pre-sente y atento todos los segundos de su existencia para aprovechar,disfrutar, planear, crear, terminar, dejar ir y volver a empezar.

"Recordar es volver a vivir", dice la frase célebre; sin embargo,la vivencia del vivir solamente ocurre una vez, una vez se nace, unavez se vive y una vez se muere. El pasado ya no está, el futuro todavíano llega. Para Nhat Hanh (1991) ••nuestra cita con la vida es en el mo-mento presente". Los recuerdos son tesoros; sin embargo, aferrar-nos al pasado, añorar tiempos pasados, es malgastar nuestra viven-cia del presente en nostalgias que no estarán más. Tal vez la mejorpreparación para vivir las transiciones en nuestras vidas es vivir ple-namente lo que ahora tenemos.

Para Amado Nervo, el primer signo seguro de vejez, es empezara encontrar el ayer mejor que el hoy. Para Viorst (1986) el dejar ir esun proceso natural que acompaña al hombre y tarde o temprano setiene que aceptar: "Somos personas distintas, limitadas por lo prohi-bido y lo imposible. Vivimos a través de perder, dejar ir y soltar. Y tar-de otemprano, con más o menos dolor, todos debemos llegar a saberque la pérdida es en verdad 'una condición humana de toda lavida' ".

Suspendido en el aire

No es fácil vivir cambios importantes y quedarnos como si no pasaranada. No es fácil enfrentar los cambios de la vida sin estar preparadopara hacerla. Y tampoco es fácil aceptar los cambios si nos opone-mos, como miopes sin anteojos, a que éstos han llegado.


Los cambios importantes que ocurren en nuestras vidas requie-ren de todas nuestras fuerzas y habilidades .p~r~ sortearlos. y trat~rde resolverlos. Hay un largo camino entre el 1n.IC.IO.del cambio y el fi-nal de la transición. Kubler Ross (196.9 ~ha diVidido, en fragmentosla experiencia de adaptarse a un cambio Im~?rtante; est?s ~an desdela negación de la realidad, hasta la aceptacion. Es .un tr~nslto que ~oresulta nada fácil pero que da como resultado la vivencia de cambioy aceptación.

A nadie le gustaría quedarse aparentemente atorado a la mitadde un cambio o transición. Será como quedarnos estupefactos a lamitad de una gran avenida habiendo dejado la acera en la parte deatrás pero sin haber alcanzado la otra. Ni se está allá ni se está acá,se está literalmente atorado y sin embargo hacemos esto con fre-cuencia, no terminamos los cambios que han sido iniciados o por no-sotros o por nuestras circunstancias. Junto con otros propósitos, losmodelos vivenciales de este libro pretenden desatorar a las personasque se encuentran a la mitad de un cambio, que se encuentran sus-pendidos en el aire.

Ramiro, hombre fuerte de 61 años, empezó a trabajar a los 18años y siguió trabajando durante 43 años en la misma empresa dehilados y tejidos. Muchos gerentes pasaron frente a sus ojos, mu-chos cambios, mucho tiempo. A partir de sus 25 años como trabaja-dor de la empresa fue ascendido a supervisor; fue entonces cuandotodos los administradores le consultaban para saber su opinión so-bre los cambios que hubiera que hacerse. Al cumplir 43 años de anti-güedad vinieron nuevos cambios en la organización, mucha gente jo-ven vino a ocupar vacantes administrativas. Ramiro pensó que ésteera un cambio más, pero estaba equivocado. La gente nueva de laempresa decidió recortar el personal y decidió empezar por los másviejos.

Al día siguiente de los cambios Ramiro había sido citado juntocon otras 30 personas a entrevistarse con el jefe de recursos huma-nos. Éste presentó a todos un atractivo programa de jubilación y lesdejó entrever que quería un número mínimo de voluntarios. A Ramirole pareció tentadora la oferta, levantó la mano y aceptó.

-Lo siento mucho Ramiro -le dijo el jefe entregándole unos do-cumentos para que los firmara-o Te vamos a extrañar.

Ramiro recogió los documentos y volvió a su casa temprano. Des-pués de algunos días de no hacer nada sintió que el mundo se le ve-


nía encima. Se quedó encerrado durante más de dos meses sin que-rer salir a buscar empleo. De pronto, un día ocurrió como si un tornillose le acomodara en la cabeza; amaneció diferente, molesto, insatis-fecho y le dijo a su esposa.

-Al diablo con todo, he estado esperando dos meses una llama-da de la fábrica en la que me digan que todo fue un error y que quie-ren que regrese a trabajar, pero ahora he comprendido que esa lla-mada nunca va a llegar. Voy a salir a buscar trabajo.

y acto seguido, Ramiro se dirigió a la puerta, meditó un par deminutos junto a la cerradura, la movió con fuerza y salió de su casa.Ramiro fue a buscar empleo en otra fábrica de hilados en donde mu-cha gente lo conocía. No lo hicieron esperar, el encargado de contra-taciones lo recibió muy afectuosamente, le pidió que se sentara y lepreguntó el motivo de su visita.

-Estoy buscando empleo, creo que sé mucho de hilos y quieroque se aproveche mi experiencia.

El director se quedó con los ojos abiertos como platos. Le pidióque se esperara unos minutos, salió de la oficina y regresó despuésde hacer unas llamadas. Con una sonrisa le informó a Ramiro.

-Ramiro, con toda su experiencia, ¿por qué no nos ayuda comoasesor?

Ramiro tuvo que terminar una etapa para empezar otra, actual-mente es un asesor de supervisores, y todo el personal de base acu-de a él para consultarle las dudas habituales con el equipo. Ramirosabe que no debe sentir nostalgia, porque toda nostalgia se opondríaa su proceso de cambio, sería como permanecer atado con un hiloal pasado. Disfruta su trabajo y la desubicación originada por la sali-da de la otra empresa le sirvió para mejorar muchas otras cosas. Ra-miro vivió una experiencia de transición que llevó a feliz término.

No queremos dar a entender que siempre después de un procesode cambio las cosas salen mucho mejor de como estaban; algunasveces, después de cambiar quedamos un poco peor de como estába-mos. Lo que sí queremos resaltar es el hecho de que sí es posiblemejorar cuando enfrentamos los retos que suponen los cambios,cuando escuchamos a nuestros apoyos y emprendemos una bús-queda honesta de un futuro más próspero.

Algunas veces el inicio de transiciones dolorosas pone en telade juicio hasta la vida misma. Se pierden los ideales, el valor y el cora-


. vida Es en esos momentos cuando lo~_~ere~ nu-je, y el sentido de la. . ue el tiempo pase y digerir lo que e~ta ~a-manos ne~e.sltan dejar ~ Es tiempo para buscar las fuerzas mteno-sando e inlcl.a~un camdblo. nderse de obstáculos personales para

desperdiCiadas y espre~e~. un salto hacia el futuro.IniCiar . , uede

. r ir lo sigue una etapa de adaptaclon que p,El paso de deja de J' ubnarse un viernes despues de, f rnpo Uno no pue , '

durar algun ~e. r otro estilo de vida el lunes, aSI no mas.trabajar 40 ano~ Y ~mpeza bio todas las implicaciones que co~lIe-Uno tiene que dlg.e~lr.el ca~ ~iempo para aquilatar lo que se tieneva. El proce~o de 1~ICIOe~~~~e~~orar,ru~iar, culpar, envidiar, apretar

~u~~t~~:~:~lrl~So~i~~es y v~lver a empezar Y a sentir., miro al final de su vida laboral, ocurren

Tal y como le paso ~ ,Ra ara el ue llega a ocupar su lugar. ~ncl.u-periodos de d.esadaptaclon ~ d t~rminar su carrera univerSitaria,sive el estudiante que aca a.~ de despedir a sus invitados yadespués d.e la cena de grad~auc~~nn~evapreocupación con una nue-no es el ~Ismo, se ?ueda co é debo hacer? ¿Qué va a pasar? Esova incertidumbre ..¿Y ahora. qu . tras encuentre el final de su tran-es estar suspendido en el aire ml~nsición, que será el inicio de su Vida laboral.

ndidos en el aire de pronto,Algunas otras veces n.osven:os sU~~~cias que escapan a nuestro

bruscamente por una serie de Clrcunsentendimiento Y a nuestro control.

, r el difícil trance de dejar el sacerdo-James Carroll, que paso po entrevista de la siguiente

eio, describió su experlenCI~ durante ~~~a vida Tenía una imagenmanera: "Tuve que construir una seg """ l' ndo un acto. si estuviera rea Izaal haber dejado el sacerdoclO com~ I . estar dispuesto a quedaren trapecio. Tienes que soltarlo, dejar o Ir, taras con el otro trapeciosuspendido en el aire y esperar que conecen el momento justo".

. ue hay un periodo deLo que pasa con los cambios fuertes es q o es y un futuro que

ajuste. Es un espacio entre un pas~do qU~: s~ntir~os suspendidostodavía no acogemos por ~?m~let.o, es ~o en la cual el ser humanoen el aire. Es una suspenslon sin tierra firme d esos sentimientos,debe tener I~ disPosici?n de perd~rar a pesl~S f~rmas más comunesde lo contrario el cambio fracasara. ~~a de de suspensión en el aire.de no cambio, es el perdurable ~e.ntlmlento b' siempre ocurrirá eseSin embargo, al atrevernos a VIVI~,un ca~ 10, o meses o inclusivesentimiento. Puede ser una traccion de tiempo


años; los seres humanos nos sentimos desubicados, algo asi comosuspendidos en el aire.

Nicolas decidió salirse de la empresa en la que había trabajadodurante diez años para iniciar su negocio propio. Muchas experien-cias antecedieron a esta determinación. Un sentimiento de inconfor-midad con su sueldo, una historia de relaciones difíciles con sus su-periores y el sentimiento de haber sido despojado de un ascenso porparte del director. Todos esos factores se mezclaron y motivaron aNicolás a cambiar. De pronto se dio cuenta de que ciertas imágenesde cambio que no existían anteriormente empezaron a invadir sumente. Se veía en otro lugar, haciendo cosas diferentes acompañadode diferentes personas y corriendo riesgos distintos. Después de lavisión de ese futuro decidió presentar su renuncia, se fue a su pueblonatal e inició su empresa.

-Fue terrible -comentaba-, aunque pensé que estaría feliz desalirme de aquel infierno, en realidad la primera noche que pasé fue-ra de él se me ponía la carne de gallina; tuve miedo de lo que vendríadespués, me parecía demasiado poco el dinero que tenía y para aca-bar la de arruinar mis amigos me decían que estaba loco al tomar esadecisión en una época de recesión.

-Durante mucho tiempo -continuó diciendo-, estuve invadidopor resentimientos de mi empleo anterior e incertidumbre sobre mifuturo; llegué a darme cuenta que estaba viviendo un proceso quenadie podía vivir por mí, tenía que vivirlo yo solo.

Toda transición es un proceso personal, yo tengo que cruzar lacalle, nadie la puede cruzar por mí. Pero sí puedo beneficiarme enlas horas difíciles de suspensión en el aire, de la buena escucha yrelación de verdaderos amigos que me ayuden a convertir mi crisisen una nueva realidad.

-Vaya pedir socios porque me asusta la inversión inicial -co-mentaba a sus amigos.

-No -le respondieron-, vive solo el proceso, no te apresuresa salir y te arrepientas.

-Busca un préstamo -dijo otro-, yo te puedo ayudar.

-Aguanta -dijo un tercero-, tenemos fe en que vas a salir dela crisis, solamente aguanta y trabaja, trabaja muy duro.


_Échale ganas -dijo otro más-, que por ganas no quede y yaverás que sales adelante.

Estar suspendido en el aire es muy incómodo y se puede apresu-rar una decisión simplemente por salir de ese estado y luego arre-pentirnos. Por ~so Nicolás req.ui~i? de mucha paciencta y muchafuerza; no fue comodo, pero resístro hasta que el neqocro se consoli-dó al cabo de algunos años.

Si usted ya está viviendo una transición, no se desespere, escuando más paciencia necesita, escuche con atención, evalúe y vivasu proceso sin acelerar su búsqueda de nuevo bienestar. Muchas co-sas buenas vendrán delante.

Por otra parte existen numerosas causas de desubicación en elcamino de la vida: casarse, dejar a papá y mamá e iniciar una nuevafamilia requiere un tiempo de ajuste. Después de la luna de miel unose da cuenta de las diferencias. Él quiere arreglar el coche; ella quie-re comprar una estufa. Es como si cada uno de los enamorados trata-ra de jalar hacia sus intereses o convicciones al otro. Y en contrapar-tida el otro trata de jalar para los suyos. Se inician complejos juegosde control y sumisión, de dominador y dominado.

En los ajustes del inicio de un matrimonio algunas parejas no re-sisten la tentación de mantener una cierta dependencia con sus pa-pás (verse todos los domingos, hablar diariamente por teléfono, etcé-tera). Continuar la relación valiosa con los papás y hermanos es unacostumbre muy rica que valora la relación y la familia. El problemaes cuando una pareja no puede dejar de visitarlos un domingo por-que se sentirá culpable. Esta falta de terminación de una vida de hijode familia o de soltero en lugar de encontrarse con su pareja y crearsu propia cultura familiar es la causa de muchos problemas matrimo-niales.

Cuando uno logra sostenerse en el aire el tiempo necesario termi-na el corte con el pasado y se voltea con naturalidad hacia el futuro.

Un extranjero recuerda el proceso de su transición al mudarse avivir a este país:

"Durante mis primeros años de vivir aquí, cuando iba de vacacio-nes a visitar a mis papás, le decía a la gente, 'voy a mi casa'. Fue máso menos después de tres años de vivir aquí cuando me di cuenta deun cambio que se dio en mí. Empecé a decir, 'vaya la casa de mispapás'. Había aceptado que mi casa ya no estaba allá sino en este


país, con u~a esposa e hijos nacidos aquí. Después de varios añosh~bla ter~lnado con una realidad anterior. Y esto abrió una dispos;cien en mi para conocer valores y tradiciones diferentes yentrar.enprocesos de verdadera transculturación, acogiendo y apreciando lonuevo sin negar mis raíces".

" Un cambio ~e ciudad, de trabajo o de país requiere una termina.cien de lo anterior. Esto se manifiesta en acciones simbólicas comovender la casa y algunas posesiones que uno tiene que dejar atrás.Algunas molestias, emociones encontradas, titubeos, y al final decuentas determinación de cambio.

Algunas veces las personas apresuran el cambio, escuchan sóloa su parte racional y se olvidan de sus emociones. Un cambio es uncambio, se debe planear, anticipar, gobernar, sentir, disfrutar y ob-viamente terminar. Cambiar significa cambiar, y una vez hecha la de-terminación de hacerlo la persona madura ha de ir hasta el final.

Hernán Cortés fue más drástico: quemó sus naves.

Sentimientos que asustan

En los cambios que son buscados intencionalmente por los seres hu-manos pueden surgir sentimientos positivos, por ejemplo ilusión, ex-pectativas positivas, esperanza, "alboroto" positivo, etcétera. Sinembargo, también pueden experimentarse durante el proceso senti-mientos de enojo, rencor, depresión, frustración, desilusión, desubi-caci~n,. pérdida, soledad, miedo, duelo por lo perdido, culpa, arre-pentimiento, resentimiento, etcétera. Son sentimientos que surgenespontánea e involuntariamente. Nos incomodan y quisiéramos queno existieran. Sin embargo, algunas veces acompañan a procesosde cambio.

Son muy bonitos los planes que una persona hace cuando quiereinde~endizarse, sin embargo, una vez fuera del lugar donde la gentetrabajaba, pueden surgir sentimientos de frustración y duda mientraSse establece el cambio.

A veces una persona toma el control de sus circunstancias cuan-do decide salir del trabajo, pero en otras es víctima de las mismas cir-cunstancias cuando es despedido del trabajo. No es lo mismo dejarel trabajo porque he decidido dejarlo que cuando dejo el trabajOporque he sido despedido.


e ando le dieron la noticia a Roberto de que estaba despedido,. ., uque un aire frío le recorría todo el cuerpo.

slntlO_¿por qué yo, que tengo una familia que alimentar?

El empleado de recursos humanos de la fábrica de plásticos se

encOgió de hombros._porque la empresa está pasando por una crisis.

Roberto tuvo que cambiar de la noche a la mañana. Él no. eligió

Imbio pero era víctima de él. No le tomaron su parecer, slmple-

e ca "ente le informaron. Esa tarde cuando llego ~ su.~asa no quiso pro-~unciar palabra y se dirigió directo a su habltaclon.

-¿Que te pasa? -preguntaron todos.

-Nada importante. Ya no tengo trabajo y me siento frustrado,enojado y desilusionado. Estoy muy cansado.

Y acto seguido se metió en la cama y apagó la luz de su cuarto.

Los sentimientos de desánimo de Roberto son una consecuencianatural de un cambio importante Y desagradable en su vida. p~ro .loSsentimientos desagradables no sólo son product~s .de cam?l~s Im-puestos por el entorno. También o~urri~ro~ sentimientos similaresen el caso de Juan, el estudiante universitariO, aunque f~er~ ~na. de-cisión suya el estudiar fuera de su casa. Los ca.mbios Significativosasustan. Pero no debemos dejar que nos paralicen.

Dos años después del despido, Roberto tiene una ti~nda en laque vende juguetes. Se levanta muy temprano por. la ma.nana, abresu negocio, visita a sus proveedores, compara precios, atlend~ a susclientes y recibe considerables ganancias. La crisis del despido haquedado atrás.

Roberto es un ejemplo, como muchos otros, del personaje quesufriendo las consecuencias de la pérdida de un empleo que necesi-ta, no se desespera y busca en su interior orientación; busca ~poyoen sus seres queridos, en todos los que lo aprecian, busca ~pclon~s.No rechaza sus sentimientos, confía en los que en él contían y viveun proceso de cambio. A Ramiro se le acomodó un tornillo en la cabe-za, a Roberto las circunstancias de sus apoyos emocionales Y realesle ayudaron a que ese tornillo también se acomodara.

Muchas veces sumidos en la depresión de no haber participadoen el inicio de un cambio, los seres humanos pensamos que se aca-


ba el ~undo, .que se termi.nan la~ opciones, que no servimos para na-da mas. Lo cierto es que Impedimos con esa actitud el curso naturaldel cambio. Obstaculi,zamos su sentido y al hacerlo corremos el peli-gro de quedarnos atras, o al menos de no cambiar lo suficiente paraque el cambio se torne positivo.

Para Roberto no fue fácil. Probó muchas alternativas, un par demeses vendió productos de limpieza, un mes más buscó empleo enel periódico .~asta que estuvo con la persona y el lugar apropiados.En una reuruon con sus suegros conoció a un comerciante de jugue-tes que aprecia mucho a la familia. El señor mencionó que necesita-ba un socio para abrir una tienda en el centro de la ciudad. Robertoni siquiera dejó que el tipo terminara de hablar cuando dijo:

-Vo quiero ser su socio. Me gustan los niños, siempre me hangustado los juguetes.

V se inició su aventura, su visión, su posibilidad de cambio.

Lo más probable es que si Roberto aún hubiera tenido su empleocuando escuchó a ese hombre, hubiera bostezado y después de unadisculpa obligada se hubiera marchado del lugar Porque no estabapreparado para la posibilidad de un cambio. Increíblemente el despi-do le abrió un espacio para experimentar ese cambio. El resto fueconfianza, y proceso positivo de cambio.

Roberto tuvo un cambio positivo porque cambiaron varias esfe-:as de su vida. El salir del trabajo, aunque fue impuesto, trajo apare-J~dos una serie de cambios secundarios que él escogió; cambió suVida personal, la económica y la familiar, sus emociones sus creen-cias, su trabajo, etcétera, lo que le trajo a la larga más be~eficios quep~rjuicios. Si Roberto ::;e hubiera quedado sumergido en sus senti-mientos de duelo, lamentando su despido y lo injusto de la empresanunca habría encontrado una nueva visión del futuro.

Claro que no siempre los cambios deben ser necesariamente me-lores que antes.De lo que s~ trata es de terminar la transición yexpe-rirnentar una nueva etapa. Esta puede ser un poco peor, a veces te-nem~s que volver a empezar desde más abajo. Lo cierto es que sise orienta adecuadamente el cambio y nos damos oportunidades decrecer, a largo plazo podemos estar mejor que como estábamos an-tes de la transición.

Es interesante destacar que Roberto y Nicolás salieron del traba-jo para buscar fortuna; sin embargo hay una diferencia crucial, uno

La aceptación del cambio

e despedido y el otro renunció p~r i.nconfor.mi.dad. Sin arnbarqolosfu hombres experimentaron sentimientos Similares de resentlmlen-doS ."to Y desublcaclon.

C ando dejamos a nuestra hija en el kindergarten o jardín de ni-_ ur primera vez nos cuesta trabajo, duele, es como si se arranca-nos po . d I d

I O de nosotros mismos y se vuelve a repetir cuan o e amosra ag· . .'so para dormir fuera de casa, a salir con su primer novio o cuan-perml . . d 'd'd . t t

I deJ'amos en el altar. Es una experiencia e per I a y SI ra amosdo a . ' I ' .d retenerla, de parar el reloj o hacer que camine para atras o.urucoq~e lograríamos sería luchar inútilmente en contra de la realidad.

Cambios provocados por el entorno

HagamOS una breve reflexión en el camino. He~os propu~sto quepara cambiar, primero tratemos de ~nten~er las .clrcun~tanclas d~ larealidad, después, aceptemos la exlstencia de dichas circunstanciasy luego, iniciemos la transición; eso nos llevaría a queda.r p.or un tiem-po suspendidos en el aire; ex~erimentemos los ~entl~lentos queasustan y resistamos la tentacion de echarnos hacia atras para quefinalmente lleguemos a completar el cambio.

Hasta aquí hemos hablado de la mecánica del cambio; sin em-bargo faltan algunos ingredientes. Por ejemplo, cambiamos porquehemos sido empujados a cambiar, o movidos o invitados; lo hacemosporque queremos o porque no nos queda más remedio. Cambiamoscon o sin nuestra voluntad. ¿Por qué cambiamos?

Algunos de los cambios, como ya hemos señalado, tienen la ca-racterística de ser impuestos por otros: cierre de la fábrica donde tra-bajo, promoción a otro, rechazo a mi solicitud de cambio, mi hijo seva de la casa para estudiar, mi hijo se casa, estoy en la edad de jubi-larme, murió mi padre, aumento de precios, etcétera. Otros cambioscomunes son asumidos por decisiones propias como: estudiar unacarrera, entrar a trabajar, aceptar un nuevo trabajo o puesto, cambiarde ciudad, casarme, divorciarme, volver a casarme, etcétera. Perotodos estos cambios originan sentimientos difíciles muy similares, yaque implican una renuncia a algo.

Los procesos de adaptación al cambio son muy importantes enla salud mental de los seres humanos, de hecho, la neurosis, malcomún en esta época, es definida por Fritz Perls en su libro Testimo-nios de psicoterapia como la incapacidad del ser humano para adap-


tarse a su entorno. En otras palabras, independientemente de la im-portancia que revisten los cambios iniciados desde dentro del ser hu-mano, es innegable la importancia de los cambios provocados desdeel entorno. Son esos los cambios que requieren de adaptaciones pa-ra la sobrevivencia.

Los cambios desde dentro requieren vivir transiciones completasy clarificar intenciones para salir adelante. Son procesos personalespara los que no existen fórmulas generales. Los cambios desde fue-ra, por otra parte, son procesos de ajuste al medio, dependen de lacapacidad que tengamos para evaluar y caminar con los cambios delentorno.

La organización Ziz es una empresa que fue planeada como unaorganización familiar que tuviera impacto en su entorno, que produ-jera fuentes de trabajo y que proporcionara ingresos a los Pérez. Deesa forma, don Eulalio Pérez la fundó en el siglo pasado, la hizo cre-cer discretamente y la heredó al mayor de sus hijos. Éste la adminis-tró durante la primera parte de este siglo y a su vez la heredó a sudescendencia, y así, en la actualidad la empresa es administrada porla quinta generación de los Pérez.

Los Pérez siempre se adaptaron a las necesidades del entorno;cuando había que tramitar un permiso lo hacían; cuando había queviajar para obtener materia prima, lo hacían. Cuando había que aso-ciarse con otros productores para tener mejor precio, también lo ha-cían. Sin embargo las situaciones cambiaron drásticamente. Depronto el país, cerrado a las importaciones de telas sintéticas, abriósus fronteras. Los Pérez bajaron su producción, se desplomaron losprecios y las ventas de la fábrica. Hubo necesidad de ajustes a loscambios.

Para sobrevivir los Pérez tuvieron que enfrentar cambios desdefuera que provocaron cambios internos. Estos cambios requirierondejar ir hábitos y formas acostumbradas de trabajar y dirigir, porejemplo:

1. Cambio del' estilo de dirección de la empresa: a la calidad total,al de una empresa familiar a una administración profesional, a un sis-tema de participación, al de cultura organizacional, a una organiza-ción más plana con menos niveles ...

2. Cambios en el personal: por la entrada de un jefe nuevo, porla salida de una persona, jubilación, terminación de contrato, promo-ción ...


3. Cambios en el equipo: nuevas máquinas, herramientas, técni-as, procedimientos ...

c Cambios por ajustes administrativos: cierre de parte de la ope-4. t 't.' asociación con otras empresas, e ce era.raclOn,5. Un compromiso con la mejora continua en todos los aspectos

de la empresa. .Sobre todo, los Pérez tuvieron que asumir un ca~b.io en la rnaoru-

ud de las ganancias; ellos aceptaron el reto y decldl~ron cambiar.t I ñnal, aunque experimentaron transiciones en los metodos, sobre-~iv'ieron Yconservaron los viejos ideales .del tatara?uelo, generar ~~-

ímpactar a la sociedad y producir ganancias para la familia.pleos, . . .y aunque pudieran parecer simples .Io.sacont~clmlentos, en reali-

dad fueron momentos de difíciles transiciones: simplemente el ca~-bio de liderazgo requirió del cruce de todas las e~ap~s del cambio,desde el entendimiento de las circunstancias, dejar Ir costumbr~s,control de sentimientos extraños y finalmente el logro del carnbio.

Es interesante también comentar que cambios planeados en lamanera de hacer las cosas pueden tener gananci~~ ~dicionales, poruna parte incrementan la productividad y competltlvldad'y por. ?tra,también, mejoran el clima organizacional y producen satisfacción ybienestar.

Los Pérez vivieron durante muchos años felices, pero fueron sor-prendidos por el tiempo. Tuvieron que hacer cambios para enfrentarlos retos. . .

Algo parecido aconteció en 1999, poco antes ~el cambio de mlle~lo.En la víspera de que esto ocurriera hubo == .tIPOde amenazas. elfamoso Y2K (año dos mil), por el error del ~llenlo, que. supuest~,men-te causaría un caos generalizado en los sistemas de intormación entodo el mundo. Hubo dos tipos de jefes: 1) Los que se pr~pararon parala contingencia pero no sensibilizaron a su gente, g~nero ~n ellos an-gustia y errores productivos debidos al temor y la incertidumbre. 2)Los que se prepararon y tomaron en cuenta el ~emor de su .ge~te ypacientemente le explicaron que se estaba trabajando p.ara dlsmln~lrlos riesgos, durmieron y permitieron que su gente durmiera tranquilala noche del 31 de diciembre.

Uno de los errores más grandes en los procesos de cambio en I.asempresas es no tomar en cuenta a la gente y su necesidad de deJ~rir Costumbres y formas de trabajar, experimentar y engendrar senti-mientos de inseguridad, de pérdida y de sentirse parte de una nuevavisión.


80b Tannenbaum comentó durante un congreso de DesarrolloOrganizacional: "Mi hipótesis actual es que la mayor parte de losprogramas de cambio no tienen éxito porque no estamos lo suticían.temente interesados o preocupados nosotros mismos por el procesode luto, de la necesidad de morir". La reflexión anterior invita a tomaren c,u~nta los procesos humanos y no nada más pensar en lamecaruca del cambio. Es ayudar a las personas a vivir el luto por lamaquinaria que se va y permitir el archivo de los viejos hábitos quefueron muy buenos en el pasado, pero que ya no son apropiados.

No POdemos tenerlo todo

Por mucho que cambiemos hay que entender que somos seres hu-manos, tenemos limitaciones y aunque a veces la imaginación, comoc~a.ndo éramos niños, pretende resolverlo todo, la realidad es muydistinta. Frecuentemente nos tropezamos con el principio de que nopodemos tenerlo todo.

., Pablito fue a la tienda con solamente tres pesos. Tenía la inten-cron de comprar un refresco, unas papas fritas y un chocolate.

-Quiero estas tres cosas -le dijo al dueño del establecimiento.

Lentamente el dueño alcanzó de una alacena el refresco, tomóde,un cajón el chocolate y desprendió de un mostrador las papas. Su-mo las cifras y le dijo:

-Pablito, me debes cinco pesos.

-Sólo traigo tres -respondió el pequeño.

-Pues tendrás que dejar algo.

-Es que quiero tenerlo todo.

El tendero que era un hombre muy humano, le prestó los dos pe-sos faltantes a Pablito y así éste pudo comprar lo que quería.

En la vida real, desgraciadamente no siempre tenemos al viejotendero para que nos tienda la mano y nos complazca; la vida reales muy distinta, simplemente no podemos tener todo al mismo tiem-po. Aún las tarjetas de crédito tienen su límite. Usted gasta de acuer-do a sus posibilidades, no puede tenerlo todo. Sólo en las fantasíasinfantiles es posible tenerlo todo.


El escoger es excluir otras miles de opciones. Inclusive, ponertención es dejar de atender otras cosas. Mientras usted leía estas

~ eas dejaba de ver la televisión, hablar, jugar, dormir o hacer cual-I~ier otra actividad. Descartó lo que no iba a atender en estos mo-~entos. No podemos tenerlo todo simultáneamente, pero podemosen contraparte lograr un equilibrio entre tres grandes tendencias quelos seres humanos desarrollamos:

1. La tendencia a la acumulación, que consiste en obtener cosasQue nos atraen, para ~ivir mejor, más cómodamente, o sólo por elgusto de tenerlas, etcetera.

2. La tendencia al aseguramiento, que es tomar medidas para re-tener lo acumulado, para proteger lo que tenemos, es aferrarse a laconvicción de que no se puede vivir sin esas cosas.

3. La tendencia al desprendimiento, que es cuando el ser huma-no se empieza a desprender de algo que le pertenece, es compartirparte de su tiempo y de sus cosas.

Estas tres tendencias existen y alternan continuamente en nues-tras vidas, por eso los seres humanos debemos cuidarnos para po-der dar algo a los demás y mantener un equilibrio. Si exageramosuna, sería en detrimento de las otras dos y ello causaría desbalanceen nuestra satisfacción con nuestra vida.

Cierto día un mesero atendió en un lujoso restaurante a un co-nocido multimillonario; al terminar de comer, éste, dejó el 3% de pro-pina.

-Caray don José -le reclamó el mesero-, cuando viene su hi-ja, ella me deja el 15% de propina. Y Usted ni siquiera el 10%.

El anciano magnate lo vio de reojo y sarcásticamente le dijo:

-Es que ella es hija de rico. y yo no.

El ejemplo anterior es una exageración de la tendencia deacumulación y aseguramiento. Don José eligió el placer de tenerunos cuantos pesos más en vez de disfrutar un proceso de despren-dimiento.

" Henry David Thoreau (1966), hablando de las posesiones dijo:... el hombre es rico en proporción al número de cosas que puede

dejar de tener". Es decir, enfatiza el desprendimiento. Pero puedecausar la ruina de quien lo practique indiscriminadamente.


y así, es muy conocida la frase de Schopenahuer: "el hombregasta su salud tratando de conseguir dinero y más tarde gasta algode ese dinero para tratar de recuperar algo de su salud". La saludse vuelve prioridad cuando los seres humanos llegamos a viejos aun-que la salud es una prioridad siempre. Hay quienes exageran la ten-dencia a la acumulación de salud, pero también se hacen viejos.

Querer todo para mí puede convertirse en una conducta altamen-te egoísta. El egoísmo es un cuidado e interés permanente en unomismo en perjuicio de los demás. Estamos viviendo en un ambienteque nos hiperestimula a comprar, nos genera necesidades nuevasconstantemente. Nos asusta el dejar ir cuando en realidad nosdebería asustar nuestra exagerada tendencia a querer tenerlo todo.

Hay dos aspectos que queremos resaltar al terminar este capítu-lo. Primero, que debemos dejar cosas viejas para tener algo nuevoy segundo, que lo nuevo a lo mejor no va a ser todo lo bonito que es-perábamos.

Algunos cambios deseables no pueden repartirse entre todos.Sólo una persona va a llegar a la gerencia de una empresa yeso vaa significar gozo para uno pero dolor para otros; a veces estaremosubicados en el lado del gozo pero otras muchas en procesos doloro-sos. y en ambos casos tendremos que entender y aceptar las cir-cunstancias, en uno, para no sentirnos derrotados y en los dos parano entorpecer nuestro bienestar y crecimiento.

Puedo no haber sido elegido gerente, pero nadie va a comprome-ter mi bienestar personal; hay que buscar el sentido positivo y tratarde aprender del aparente fracaso. Dice bien el dicho: "No hay malque por bien no venga", le toca a cada persona encontrar ese bien.

Esa es una de las mayores imperfecciones y limitaciones delcambio, que no podemos tenerlo todo o cambiar al1 00%, y por favorque eso no se confunda con conformismo. La meta del cambio pro-ductivo debe apuntar a lo más alto aunque no siempre podamos lle-gar a donde pensábamos.

El reto al cambio no significa ganar siempre, sino aprender y me-jorar constantemente. Después de haber intentado el cambio, nadapermanece igual; aun cuando el investigador descubre que no sirveuna sustancia, ha encontrado algo valioso ... que no sirve la sus-tancia.


Resumen

El cambio es un proceso que para enterderlo, debe iniciarse con laevaluación de las circunstancias, con la disposición a aceptarlo, conel inicio de la transición, dejando ir el pasado, la suspensión en el ai-re, el reconocimiento de los sentimientos que asustan y que puedenabortar el proceso y finalmente el logro de la meta de cambio, enten-diendo que no siempre el resultado responde totalmente a las expec-tativas.

El cambio es el motor de la vida. Nunca nada permanece igual.Hay cambios significativos que son verdaderas transiciones en nues-tras vidas, que exigen una respuesta intelectual y emocional denuestra parte. Si aprendemos a adaptarnos a los cambios en lugarde criticar y añorar el pasado podemos vivir más plenamente.

A veces los cambios son impuestos, provocados por el entorno,también hay algunos buscados por nosotros mismos. Entendiendosus características podemos manejarlos más efectivamente, tantoen nuestras familias y vidas personales como en nuestro trabajo y po-demos ser mejores recursos para otros.

El paso probablemente más difícil ante las transiciones es el actode dejar ir, de soltar, de separarnos física y emocional mente del pa-sado para vivir el proceso natural de cambio. Allí está la resistenciamás común.

Dejar ir y aceptar nuestros sentimientos difíciles como algo nor-mal es un enfoque más objetivo para aceptar y vivir la realidad; pre-tender oponerse al cambio resulta un vano intento de detener la vidao de poseerla.

Entre un pasado que ya no es y un futuro que todavía no llegaexiste una experiencia que es como estar suspendido en el aire entreuno y otro. Es un periodo de desubicación en que surgen sentimien-tos incómodos, difíciles. Ellos también pasarán pero toda transiciónimplica una pérdida, como una pequeña muerte y sentimientos dolo-rosos.

Los cambios son comunes. Salimos de la casa por primera vezpara ir a la escuela. Llega el momento de dejar la escuela para traba-jar, casarnos, ser padres, abuelos y finalmente entregamos nuestravida a otros en el último acto de dejar ir.


No podemos detener la tendencia natural de cambio y crecimien-to. Tal vez la mejor preparación para vivir el cambio es vivir plena-mente lo que ahora tenemos porque no será siempre así.

Un cambio completo inicia con una terminación y termina con unnuevo inicio. El nuevo inicio ocurre porque existe una nueva inten-ción, ésta será explorada en el siguiente capítulo.

Autoayuda

En este capítulo hemos descrito muchos cambios relacionados conla vida personal, familiar y laboral y un modelo para entenderlos. Sinembargo, cada persona se encuentra en procesos de cambio muyparticulares. Nadie puede hacer la transición por usted. Respete supropio proceso y tiempo. No se desespere. Cada persona tiene queprocesar sus sentimientos de pérdida, cruzar una etapa de incerti-dumbre, quedar suspendido en el aire y, en su momento, encontrarsu propio camino de nuevo. Los siguientes ejercicios están diseña-dos para ayudarlo a vivir mejor sus procesos de cambio actuales.

Responda en las líneas, por orden de importancia. ¿Cuáles sonlos cambios más significativos en que está usted inmerso actual-mente?

1.

2.

3.

Para cada uno de los cambios significativos que está usted vi-viendo subraye de los siguientes su posición actual en el proceso decambio:

Reto (ante la posibilidad de un cambio, sin tomar la decisión aún)

Salida (terminación, todo lo que necesita dejar ir, que es parte delpasado)


Transición (suspendido en el aire; ya dejó lo anterior sin acomo-darse en lo nuevo)

Llegada (ubicado en el nuevo inicio)

Terminación

Nuevo reto (ante la perspectiva de nuevos retos de cambio)

Marque en la siguiente figura el proceso donde se encuentraahora.

Proceso estructural del cambio

Nuevoreto

1Reto Terminación

1

¿Cuáles son los aspectos más difíciles de aceptar, donde usted ex-perimenta más resistencia en sí mismo? ¿Qué tiene que dejar ir?Responda por orden de importancia en las siguientes líneas:

1.

2.

3.


¿Qué necesita hacer todavía para completar cada proceso de cam-bio? Responda por orden de importancia en las siguientes líneas:

1.

2.

3.

Bibliografía

Kubler-Aoss, Elizabeth. On death and dying, Macmillan Publishing Company. NewYork. 1969.

Nervo, Amado. Grandes clásicos, Amado Nervo, Obras Completas Tomo 111MAguilar, México. 1991. ' ,.

Nhat-Hanh, Thich. Peace is every step. Bantam Books, New York. 1991.Perls, Fritz. Testimonios de psicoterapia. Cuatro Vientos. Santiago.Thoreau, Henry. Henry David Thoreau, Walden and Civil Disobedience, W. W. Nor-

ton, New York. 1966.Viorst, Judith. Necessary losses. New York: Fawcett Gold Medal. 1986.

2

Exploración de nuestrasintenciones

"Lo que haces habla tan fuerte que nopuedo escucharlo que dices".

(Proverbio Indio-norteamericano)

reto al cambio

Documents