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* Lic. en Educación (UCAB). Cursante del Programa de Estudios Avanzados en Historia Regional (UCAB-Guayana).

Recibido: 12-03-2012 Aceptado: 15-06-2012

IMPULSO CARRETERO PROMOVIDO POR JUAN BAUTISTA DALLA COSTA (HIJO) EN EL ESTADO

GUAYANA (1870)

Marianela Tortolero Herrera*

Resumen

Guayana ha sido muy importante en la historia republicana de Venezuela, pero por su lejanía con el centro, no ha sido lo suficientemente estudiada en el ámbito historiográfico. A pesar del esfuerzo y el aporte investigativo realizado por distintos personajes sobre Guayana, resulta insuficiente y existen muchos vacios históricos que todavía no han sido estudiados. En ese sentido, son muchos los temas que están a la espera por una nueva generación de investigadores que comiencen a renovar y reconstruir nuestra historia local. Por ello esta investigación intenta aportar un granito de arena al conocimiento histórico de la región, y se centra en estudiar el papel de un personaje muy importante para Guayana como lo fue Juan Bautista Dalla Costa y el interés que tuvo cuando permaneció al frente del gobierno regional para impulsar el progreso material, cultural e intelectual. Una de sus políticas estuvo enfocada hacia la construcción de vías de comunicación, específicamente caminos carreteros, que permitieran la explotación de los distintos recursos de la zona como la minería, la madera y la sarrapia. Sin embargo, la distancia de la región con respecto al centro del país, un gobierno centralista, la inestabilidad política, las características geográficas y la vasta extensión de territorio, constituirán un obstáculo para poner en práctica el desarrollo de vías de comunicación alterna a la fluvial, representada por el río Orinoco y sus afluentes desde la

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IMPULSO CARRETERO PROMOVIDO POR JUAN BAUTISTA DALLA COSTA (HIJO) EN EL ESTADO GUAYANA (1870) Marianela Tortolero HerreraPP 105-119

segunda mitad del siglo XIX, como los caminos carreteros o líneas ferroviarias.

Palabras clave: Guayana, comunicaciones, camino carretero, progreso.

IMPULSE HIGHWAY PROMOTED BY JUAN BAUTISTA DALLA COSTA (SON) IN THE STATE

GUIANA (1870)

Abstract

This part of the country has been very important in the history of the Republic of Venezuela, but their distance from the center, has not been sufficiently studied in the field of historiography. Despite the research effort and contribution made by different characters of Guayana, is insufficient and there are many historical gaps that have not yet been studied .In that sense, there are many issues that are waiting for a new generation of researchers to begin to renew and rebuild our local history. Therefore, this research attempts to provide a bit for the historical knowledge of the region, and focuses on studying the role of a very important for Guyana as it was Juan Bautista Dalla Costa and his interest when he led the regional government to boost regional material, cultural and intellectual progress. Thus, one of his policies was focused on the construction of roads, wagon roads specifically, toallow the exploitation of different resources in the area such as mining, wood and Tonka beans. However, the distance of the center region of the country, a central government, political instability, geographical features and the vast expanse of territory, constitute an obstacle to implement the development of alternative communication channels to the river represented by the Orinoco River and its tributaries in the second half of the XIX century, such aswagon roads or railways.

Key words: Guayana, communications, cartwright way, progress.

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REVISTA MAñONGO Nº 38, VOL. XX, ENERO-JUNIO2012

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Introducción

Esta investigación aborda el estudio del impulso carretero que plan-tea Juan Bautista Dalla Costa durante los años 1868-1871, cuando le tocó dirigir por tercera oportunidad los destinos de la región de Guayana. En un recorrido realizado por todo el estado, pudo percibir la importancia que representaba desde el punto de vista económico y de un mejor desarrollo para la población, las dos zonas más pujantes del momento, en particular hacia la parte occidental en el sector de La Urbana por su explotación de la sarrapia y la más importante, la zona del Yuruari al sur, debido al auge en la explotación minera.

El interés particular de este ensayo surge por la importancia que tuvo Dalla Costa para la historia de Guayana y su influencia tanto económica como política, en la segunda mitad del siglo XIX, aspecto que lo llevó a ocupar la dirección del gobierno regional en tres opor-tunidades. La idea es aportar un granito de arena en la reconstrucción de la historia de Guayana, poco estudiada y cuya referencia principal en su mayoría ha sido la historia oficial.

En la primera parte se realizará un análisis de las características que presentaba el estado a partir del siglo XIX y del personaje referido. La segunda parte aborda lo referente al impulso carretero, las medidas y proyectos planteados por el mandatario regional, durante su visi-ta realizada en 1870 por el estado de Guayana, en lo referente a las mejoras que plantea para reparar los caminos carreteros. Para llevar a cabo esta investigación, se recurrió a documentos o fuentes primarias ubicados en el Archivo Histórico de Guayana y fuentes secundarias de distintos historiadores que han aportado de manera significativa al estudio de la región.

Guayana hacia la segunda mitad del siglo XIX

A mediados del siglo XIX, en la provincia de Guayana la vía de comu-nicación más usada la representaba el río Orinoco y sus afluentes. Para 1870 el estado de Guayana ya formalmente incorporado al Pacto

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Federal desde el 16 de diciembre de 1863, quedó dividido en cuatro departamentos: Heres, capital Ciudad Bolívar; Upata, con capital Upata; Alto Orinoco con capital Caicara y Bajo Orinoco con capital Piacoa. Esta región, en especial la capital del estado Ciudad Bolívar, se había constituido en un hinterland con un centro portuario de gran importancia desde hacía ya varios años, cuyo puerto no sólo mantenía estrecho contacto con el oriente, los llanos venezolanos y colombianos sino con Trinidad, el Caribe, Estados Unidos y Europa. Dicho privilegio tuvo su repercusión en el impulso cultural y en la conformación de una élite comercial que formaron grandes familias con personajes influyentes en el ámbito local, y que desde luego llevaron una vida activa con gran influencia tanto política como económica, que de alguna manera marcaron la historia de la región. Juan Bautista Dalla Costa (hijo) fue uno de ellos.

Este distinguido guayanés, nacido en Angostura (hoy Ciudad Bolí-var) el 16 de febrero de 18231, tuvo una excelente educación que le permitió conocer distintos países y formarse una amplia visión del ámbito mundial; aspecto que influenció y determinó su mentalidad y personalidad. Hombre de ideas progresistas, refinados gustos, alta elegancia y sobre todo de una gallarda postura, que lo posicionó como uno de los caudillos civilizados más respetables en la Guayana de la época.

Esta posición de liderazgo político, sumada a su formación, lo llevó a sembrar en la población una mejor conciencia de las libertades y derechos propios del movimiento liberal guayanés. La evolución y aprendizaje político de Dalla Costa tuvo varias etapas2, en la cuales se destacó como concejal, jefe político del cantón de Heres, jefe de milicias y miembro de la diputación provincial. Posteriormente con la caída de los Monagas en 1858, ocupó por pocos meses la gobernación de la provincia. Luego durante los cruentos sucesos de la Guerra Fede-

1 ReseñabiográficadeJuanBautistaDallaCostaSoubletteen:DiccionarioMultimediadeHistoriadeVe-nezuela. Caracas: Fundación Polar.

2 Rodríguez, M. (1995). Lecturas Guayanesas. N° 217. Academia Nacional de la Historia. Caracas. Pp. 64-69.

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ral asumió nuevamente la gobernación de 1861 a 1863, y volvió a ser presidente del estado de Guayana desde 1867 hasta 1871, gobierno bastante pujante para la región.

A partir de la década de 1850, esta región comenzaba a adquirir impor-tancia no sólo como puerto comercial, sino por los descubrimientos auríferos de “El Dorado”, cuando ya era una realidad. Desde ese de entonces, gran cantidad de población y compañías extranjeras, a las cuales se les asignaron importantes concesiones para la extracción de oro, comenzaron hacer vida en las duras regiones del departamento de Nueva Providencia o Yuruari, organizado así para controlar la explotación minera.

En los años posteriores a la Guerra Federal, y a pesar haber sufrido algunos tras pies con el comercio, el equilibrio político que trató de mantener Dalla Costa hizo posible que la región experimentara cierto progreso y desarrollo. Esa impresión la percibió Geldner durante su visita a la región en 1868. Referente a ello expresó:

El Estado soberano de Guayana se encuentra separado del resto de Venezuela por el poderoso río Orinoco, como efecto de su distanciamiento, recoge el fruto de cierta independen-cia en nada menospreciable si se tiene en cuenta los conti-nuos disturbios. Además en aquel entonces recibió incremen-to en su valor por las circunstancias de haber estado dirigido por un hombre el cual, verdaderamente, estaba pensando en el bien del país y no como tantos otros presidentes, en pri-mer lugar a favor de su propio bolsillo. El presidente Dalla Costa no únicamente supo impresionar a los venezolanos en general con su firme actitud, sino que también fue capaz de ganarse la plena simpatía de los guayaneses especialmente por su sentido de justicia y las mejoras introducidas, y así afianzarse en su posición3.

3 Geldner, C. Anotaciones de un viaje por Venezuela 1866-1868, p. 194.

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El apoyo de la población fue fundamental. Los guayaneses se man-tuvieron firmes en una defensa férrea con su mandatario, contra la desorganización y violencia imperante, porque estaban seguros que un cambio no les traería sino algo peor. Durante esta etapa la economía del estado de Guayana llegó a sentir cierto impacto nega-tivo, producto de la inestabilidad nacional. Tal situación detuvo la entrada de algunos recursos capitalistas internacionales, pues ante el panorama reinante no sentían seguridad de invertir en un suelo amenazado por la inestabilidad política.

Dalla costa y los caminos carreteros a partir de su visita rea-lizada por el estado en 1870

Durante su tercer período de gobierno entre los años 1867-1871, Dalla Costa en el cumplimiento de sus funciones realizó grandes esfuerzos por enrumbar los destinos de Guayana. Para ello hizo visitas a lo largo y ancho de la región con la finalidad de conocer las características de la realidad general de Guayana y realizar los ajustes necesarios para acometer proyectos, de acuerdo a las insuficiencias encontradas y a los recursos disponibles. La amplitud recibida en toda la región le permitió elaborar la Memoria presentada a la Le-gislatura en el año de 18704, que por medio de los datos recopilados informó a la Diputación Provincial las condiciones evidenciadas y propuso reformas y sugerencias con la finalidad de promover su desarrollo.

Tal documento brinda datos reales acerca de las características so-ciales, culturales y económicas de la Guayana de la época, tomando en cuenta aspectos impulsados y logrados por él, tales como: la Ins-trucción Pública, el comercio, la explotación minera, la inmigración, las obras públicas y orden público principalmente. En su análisis hace alusión al hecho de que por el vasto territorio Guayanés, las

4 Archivo Histórico de Guayana (en lo sucesivo AHG). Década de 1870. “Memoria presentada a la Legislatura el año de 1870 por el Cdno. Juan Bautista Dalla Costa Presidente del Estado Guayana”. Ciudad Bolívar, octubre 27 de 1870. S/f

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características geográficas tan agrestes, y la casi inexistencia de buenos caminos carreteros, hasta la fecha solo se conocía en una tercera parte.

Dalla Costa inició su recorrido en dirección al oeste (o margen dere-cha) de la ribera del río Orinoco en el departamento conocido como Alto Orinoco. En líneas generales esta parte de la región mostraba un ambiente afligido por el espíritu de la discordia, y se hacía latente con mucho más énfasis en el distrito de Caicara por su improductividad. Sin embargo, esa región presentaba una inmigración espontánea de propietarios provenientes de Guárico y Apure en busca de paz, lo cual era una posibilidad para que en un futuro cercano, se generara un ensanche con la industria pecuaria, maderera y de la sarrapia; todas propias de esta región.

De todos los pueblos visitados hizo referencia al potencial eco-nómico y mercantil que tendría el sector de la Urbana, la cual se encontraba bendecida por la naturaleza por su ubicación cercana al encuentro de los ríos Meta, Arauca y Apure; considerado como el segundo departamento en importancia después del Yuruari. Su ubi-cación geográfica le permite un provisorio futuro comercial. Para el momento sus habitantes se encontraban dedicados a la explotación del aceite de tortuga abundante en sus playas. En ese sentido, se planteó mejorar su administración para fomentar el progreso y eso pasaba por mejorar los caminos carreteros existentes y bastantes dificultosos.

Especial atención recibió la región ubicada al sur-este o ribera iz-quierda del rio Orinoco conocido como Bajo Orinoco, en particular el departamento de Nueva Providencia y los caminos que van desde la Capital en Ciudad Bolívar, hasta el Yuruari. La razón tuvo que ver con la importancia que había adquirido esa zona aurífera, por lo tanto, su prioridad será el establecimiento de caminos, para lo cual Dalla Costa ordenará en primera instancia limpiar los caminos que conducen de puerto de Tablas a Upata y de allí a Nueva Providencia.

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Tomando en cuenta la descripción que realiza Gestäcker en 18685, existían dos vías para llegar a las minas de oro. Por agua partiendo desde los puertos de Ciudad Bolívar o Barrancas para dirigirse a Las Tablas, llamado también San Félix, en veleros de cabotaje, y desde allí por tierra tomando la vía a Upata que por las características duras del terreno era vía muy penosa, dificultosa, riesgosa e inhóspita, debido a las inclementes condiciones selváticas. La otra vía era por tierra desde Ciudad Bolívar, cruzando el río Caroní hasta llegar a Upata y de allí en unos cuatro días a caballo por una red de caminos al sureste. (Ver mapa anexo).

Dentro del proyecto realizado desde la presidencia de gobierno regional, el principal cometido era cruzar cuanto antes las zonas potenciales de Guayana6. Las riquezas auríferas ya en explotación así lo requerían. Con esa misión se enrumbó Dalla Costa luego de su visita a los distintos pueblos de la región. A pesar de la pre-ocupación por lo despoblado del territorio y la falta de producti-vidad de zonas con rico potencial para explotar, consideró que la prioridad debían ser las buenas vías de comunicación hacia dos lugares específicos, por el potencial económico que representaban esos territorios.

Una primera vía debía construirse hacia la Urbana que por su ubicación constituía una ventaja para fortalecer el comercio y la prosperidad a dicha región; la importancia que representaba para el intercambio de productos el contacto directo con los llanos venezolanos y colombianos, así como con el oriente del país fue destacada por el mandatario regional. La segunda vía era la que comprendía desde la capital del estado a la población del Yuruari, por ser la zona donde se encontraba la explotación minera, que significaba un potencial económico importantísimo. En esta última

5 Friedrich Gestäcker, Viaje por Venezuela en el Año 1868. Citado por Adelina Rodríguez Mirabal (1992) en Concepciones Auiriferas e inversiones extranjeras en la Guayana Venezolana, 1850-1900.

6 Archivo Histórico de Guayana, en adelante AHG. Década de 1870. Comunicación al Cdno Prefecto del Yuruari por J. B. Dalla Costa Cdno. Presidente del Estado Guayana. Ciudad Bolívar. Febrero 22 de 1871. Ff .663

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vía el gobierno de Guayana prestó gran atención, sobre todo para regular la explotación minera y la organización poblacional, que iba en aumento debido a la explotación aurífera de dicha región.

Para la construcción del camino carretero de Upata a Puerto de Tabla, la junta de Camino carretero entre Puerto de Tablas y Nueva Providencia en 1867 ya había plasmado los primeros trabajos de de-limitación del camino realizados por el ingeniero civil Carlos Siegert en el que reza:

Son favorables los informes que da el ingeniero encarga-do de la demarcación de la línea que ha de llevar el camino proyectado, en la parte media entre Puerto de Tablas y esta ciudad (Upata) la delimitación ha logrado llevarse por una superficie plana casi en toda su extensión, y presenta ade-más la gran ventaja de la menor distancia, siendo esta tan notable que da una diferencia de seis leguas comparada con la demarcación por el camino que hoy conduce al Puerto de Tablas7.

Paralelo a los avances que ya existían con relación a la mejora de los caminos carreteros, Dalla Costa enfocó su interés por estimular la industria minera, cuya finalidad era convertir la región en un eje de progreso material y económico. Referente a ello expresó:

… todo el porvenir del Estado, todos sus proyectos de me-jora moral y material, se funda en el desarrollo y regulari-dad de la industria minera y en la favorable y decisiva in-fluencia que la riqueza aurífera del Yuruari ha de tener en sus destinos8

7 ARG. Década de 1860. Informe al Presidente del Estado Juan Bautista Dalla Costa por parte de la Junta Directiva de la Compañía del Camino Carretero entre Puerto de Tablas y Nueva Providencia. Ff. 18.

8 AHG. Década de 1870. Minas. “Memoria presentada a la Legislatura el año de 1870 por el Cdno Juan Bautista Dalla Costa Presidente del Estado Guayana”. Ciudad Bolívar, octubre 27 de 1870. S/f.

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Tal actividad económica cobró fuerza y transformó al territorio del Yuruari en un significativo foco de comercio y población. Asimismo, generó el ingreso creciente de capitales y mano de obra, tanto nacional como extranjera. Además del establecimiento de numerosas empre-sas interesadas en la explotación del oro, favoreciendo concesiones como la de la Compañía Minera de Potosí y la Compañía Anónima del Callao, vinculada a Dalla Costa y a la cual le va a dedicar los últimos años de su vida, luego de su retiro de la política.

Mientras se lograba el contrato con la compañía extranjera Nueva York por el Sr. J.B. Austin para acometer la construcción de la nueva carretera Cuidad Bolívar- Nueva Providencia (que se había dificul-tado por la renuencia a invertir en el país debido a la desconfianza, inestabilidad política y a las constantes guerras), se ordenaron las siguientes medidas9:

• EnlacarreteradePuertodeTablasaNuevaProvidenciasedeben asignar algunos terrenos ejidos para la construcción de posadas indispensables para los viajeros.

• Seconvinoadelantarlaconstruccióndelasegundaetapadela carretera y la de Puerto de Tablas a Upata.

• Seordenóestabilizarlospuentes,estribosycanalesdedesa-güe.

• Seordenó construir el caminodelCallao aNuevaProvi-dencia, cuya idea era que se uniera con la que está en la construcción de Puerto de Tablas a Upata y así formar una larga vía carretera.

Todas estas disposiciones le generaron un alto conocimiento y datos sobre esta parte del estado ubicada al sur-este de la capital. Varias

9 AHG. Década de 1870. Decretos. Presidente del Estado de Guayana J. B. Dalla Costa. Octubre 27 de 1870.

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fueron las órdenes y medidas dictadas, así como las sugerencias para que el desarrollo que tenía planificado hacia esa región no se desvia-ra por otro camino, producto de la falta de interés, administración dudosa o intereses políticos y personales.

Dejando clara las metas como jefe máximo de la entidad y en comuni-cación con el prefecto del departamento del Yuruari, hace un llamado de atención para que dirija sus esfuerzos al apoyo del gobierno estadal. Al respecto fue muy enfático al señalar lo siguiente:

El Estado ha querido estimular el progreso de ese departa-mento tomando a su cargo aquellas obras más costosas que han de contribuir en primer término a su engrandecimiento progresivo i es justo i conveniente que ese municipio secun-de con interés i patriotismo esos esfuerzos de que él ha de derivar directas e importantes beneficios. Por esta razón i por el deseo de ver cruzado cuanto antes ese departamen-to de buenas vías de comunicación con un hospital capaz de brindar cómodo asilo i esmerado tratamiento a los enfermos desvalidos...10

Como se puede observar, su objetivo primordial estuvo enfocado en la generación de progreso social y material del Yuruari y para ello era fundamental la construcción de vías de comunicación, vitales para garantizar el avance, la calidad de vida de la región y sobre todo favorecer la acción del gobierno, de tal manera que pudiese ser eficaz, oportuna y en pro del fomento de los adelantos en materia moral e intelectual, la transformación del medio físico y la construcción de vías de comunicación.

Durante la administración de Guzmán Blanco, estando Dalla Costa fuera del gobierno de Guayana, se construyeron dos puentes sobre el río Upata en la vía Las Tablas (San Félix), lo que hacía más transitable

10 AHG. Década de 1870. “Comunicación de la Presidencia del Estado al Prefecto del Departamento del Yuruari”. Cuidad Bolivar, 22 marzo de 1871, F 636.

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la ruta. No obstante, la inaccesibilidad del área constituía un obstáculo que impedía favorecer el poblamiento en los alrededores del camino carretero, en consecuencia, resultaba muy dificultoso y costoso; sin contar lo caro que resultaba la vida en la primitiva región aurífera11.

La importancia excepcional de esta zona con relación a la producción de oro, se ubicó entre los años 1870-1888. Tiempo en el que el princi-pal caudillo nacional Guzmán Blanco va a participar activamente en los negocios mineros, y por lo tanto, se mantendrá la preocupación por la limpieza y apertura de caminos con la finalidad de sacar para la exportación el oro extraído en las distintas minas activas.

La política para mejorar el sistema vial de esta parte del estado de Guayana, y siguiendo la misma línea de construcciones de ferroca-rriles como en otras partes del país, para la zona aurífera también se plantearon distintos proyectos. Según refiere Murguey12, en 1883 el Ejecutivo Nacional aprobó un contrato, sin resultado alguno, con el General Venancio Pulgar para la explotación de minas y la cons-trucción de una vía férrea para esta región. Igualmente, nos refiere el autor citado, otros contratos realizados con la compañía Guayana Limita, C.C. Fitzgerald, Teodoro Delort y Eugenio Firminach, con De la Hante y Compañía y finalmente con Henrique Chaumer. Todos estos contratos vencieron sin ejecutarse obra alguna. Las posiciones encontradas y de rivalidad entre el gobierno central y estadal afec-taron la eficacia y puesta en marcha de este tipo de proyecto vial que hubiese traído progreso a la región.

consideraciones finales

Guayana, una región con un extenso territorio y unas condiciones geográficas muy variadas y agrestes, propias del trópico, brindaba en las últimas décadas del siglo XIX la oportunidad para explotar

11 Friedrich Gestäcker, Viaje por Venezuela en el Año 1868. Citado por Adelina Rodríguez Mirabal (1992) en Concepciones Auríferas e inversiones extranjeras en la Guayana Venezolana, 1850-1900.

12 Murguey, José. (1990). La explotación aurífera y el ferrocarril del Yuruari. En: Tierra Firme. N° 30. Año 8, Vol. III. Caracas, pp. 309-318.

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variados recursos naturales como la sarrapia, el balatá, la madera y en especial el oro. Por ello el interés del presidente del estado Juan Bautista Dalla Costa, en mejorar y construir dos vías carreteras ade-cuadas, que unieran de manera rápida y eficiente, el occidente y el sureste del estado con Ciudad Bolívar, su capital, donde se encontraba el principal puerto de la región que comerciaba por su gran arteria fluvial, el río Orinoco y sus afluentes, todo tipo de productos, no solo con el interior del país, sino con el exterior.

A pesar de la influencia política y el respeto que inspiraba la figura de Dalla Costa, un hombre con una visión progresista, que planteó la mejora de los caminos carreteros, en especial los que conducían hacia el departamento del Yuruari, no fue mucho lo que pudo lograr, debido a que la crisis económica producto de la recesión que vivía el país, tras haber sufrido varias revoluciones, generó un ambiente de inestabilidad política. Ambiente que producía recelo entre los inver-sionistas extranjeros; necesarios en esos tiempos, por el adelanto y manejo de tecnología y recursos, para llevar a cabo cualquier proyec-to de envergadura relacionado con la construcción de nuevas vías carreteras, o mucho más ambicioso, la construcción de vías férreas muy de moda a partir de la década de los 70 durante la hegemonía de Guzmán Blanco.

El estado de atraso que presentaba el país en general, impedía que los propios venezolanos pudiésemos llevar a cabo este tipo de pro-yectos. En el caso de ciertos personajes influyentes a los cuales se les asignó algunos contratos para la construcción de vías, los mismos, subcontrataban a compañías extranjeras.

En la región de Guayana, a aparte de la inestabilidad política señalada por Dalla Costa, la falta de interés político, o los distintos intereses encontrados entre el gobierno central y el regional, durante toda la segunda mitad del siglo XIX, no solo retrasaron el mejoramiento de las vías carreteras o la construcción de nuevas vías, sino que todos los proyectos para la construcción de vías férreas muy de boga en el resto del territorio nacional, fracasaron antes de nacer. Guayana

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tendrá que esperar hasta bien entrado el siglo XX para ver cambiar sus paupérrimos y desasistidos caminos carreteros por nuevas vías de comunicación.

MAPA ANEXo

Mapa realizado por el Dr. Lucien Morisse, durante su viaje a la región aurífera del Callao que muestra detalladamente las vías carreteras existentes, bien sea desde Cuidad Bolívar capital del estado a Upata y el Callao, o desde Puerto de las Tablas (San Félix) al Callao pasando por Upata. A pesar de que el mapa fue realizado en 1901, puede utilizarse como referencia, para las últimas décadas del siglo XIX, debido a que los caminos carreteros descritos por Morisse, no presentaron ningún cambio significativo.

FuENtEs

Archivo.

A.H.G. Archivo Histórico de Guayana. Ciudad Bolívar.

Década de 1870.

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referencias Bibliográficas

Geldner, C (1998). Anotaciones de un viaje por Venezuela 1866-1868. Caracas: Editorial Arte.

Morisse, Lucien. (1986). Excursión a El Dorado, el Callao. Corporación Venezolana de Guayana. Caracas: Cochano Films. Pp 60-61.

Murguey, José. (1990). La explotación aurífera y el ferrocarril del Yuruari. En: Tierra Firme. N° 30. Año 8, Vol. III. Caracas. Pp 309-318.

Rodríguez M, Adelina. (1992). Concepciones auríferas e inversiones extranjeras en la Guayana venezolana, 1850-1900. En: Inversiones Extranjeras en Venezuela siglo XIX. Caracas: Academia Nacional de ciencias económicas.

Rodríguez, M. (1995). Lecturas Guayanesas. N° 217. Academia Nacional de la Historia. Caracas. Pp. 64-69.

Fuentes Digitales

Dalla-Costa Soublette, Juan Bautista en: Diccionario Multimedia de Historia de Venezuela. Caracas: Fundación Polar.

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