pi hib nta - memoria chilena: portal

4
PI HIB N TA Se publica los Jueves. Precio: 2 Centa- vos numero. Oficina i Redac¬ tion: San Pablo Ni'tmero 3. Se reciben avisos. ASfOI. Santiago, Setiembre 11 de 1890 NtJM. 5. LA PIMIENTA santiauo, 11 de Setiembre de 1890. Dices que no me quieres Porque soi chica Mas chica es la pimienta iOaramba i pica! Los fabricantes de cerveza, no content® con la pingiie ganancia que obtienen vendiendo ctgua da ce- vada i oblon, se constituyeron en Sociedad para monopolizer la fabri- cacion i espehdio de cerveza. Su primera rnedida fue rebcijar en un cinco por oiento la retribu- cion a los repartidores, imponien- doles por anadidura las mai mas truosas condiciones, como la de de- clararlos delincueut.es i const,ituir- les reos en caso de perdidas de bo¬ tellas, de quebrar algun car re ton, de vender al fiado, de admitir a un ayudante en su carreton, de correr por la calie, etc., etc. La segunda medida ideada por los monopolizadores, fue disminuir el mercado encareciendo el precio del artlculo. Asi de 16 botellas por peso que daban anteriormente, aho ra se ban comprometido a dar trece alegando que los comerciantes re- vendedores ganaban un sesenta por ciento i que era menester que se contentasen con gauar el treinta por ciento a lo mas. Pero la cjata les ha salido ccipada, 30jque los comerciantes en nfunero de ma's de 800, se ban reunido i puestose de acuerdo para no com- prar cerveza doble. ni sencilla, a los fabricantes comprometidos, a me- nos que se restablezca el antiguo mercado de dieziseis botellas por peso i que la cerveza tenga cierto numero de grades en rjqueza al¬ coholic;.!. Asi el publico tendril cerveza de buena calidad i no mectdos de caba- llo como aeostumbrnn darle los fa¬ bricantes, al mismo tiempo que aba- ratara el consume, porque el des- pachero podrd vender a peso la do- cena de cerveza sencilla, queddn- dole una pequena utilidad. Es una ridieulez pretender ■estan- car la produccion i venta de cerve¬ za, cuando hai tantos otros articulos que pueden reemplazarla i sobretodo cuando el compromiso favorece a las fdbricas grandes i mata a las chicas, que tienen poco capital i ne- cesitan vender pronto i barato i no les conviene el monopolio porque no tienen tanto gasto i derroche como las grandes i producen mejor articulo.

Upload: others

Post on 26-Jul-2022

4 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: PI HIB NTA - Memoria Chilena: Portal

PI HIB N TASe publica los

Jueves.

Precio: 2 Centa-vos numero.

Oficina i Redac¬tion: San Pablo

Ni'tmero 3.

Se reciben avisos.

ASfOI. Santiago, Setiembre 11 de 1890 NtJM. 5.

LA PIMIENTA

santiauo, 11 de Setiembre de 1890.

Dices que no me quieresPorque soi chicaMas chica es la pimientaiOaramba i pica!

Los fabricantes de cerveza, nocontent® con la pingiie gananciaque obtienen vendiendo ctgua da ce-vada i oblon, se constituyeron enSociedad para monopolizer la fabri-cacion i espehdio de cerveza.Su primera rnedida fue rebcijar

en un cinco por oiento la retribu-cion a los repartidores, imponien-doles por anadidura las mai mas •truosas condiciones, como la de de-clararlos delincueut.es i const,ituir-les reos en caso de perdidas de bo¬tellas, de quebrar algun car re ton,de vender al fiado, de admitir a un

ayudante en su carreton, de correrpor la calie, etc., etc.La segunda medida ideada por

los monopolizadores, fue disminuirel mercado encareciendo el preciodel artlculo. Asi de 16 botellas porpeso que daban anteriormente, ahora se ban comprometido a dar trecealegando que los comerciantes re-vendedores ganaban un sesenta porciento i que era menester que se

contentasen con gauar el treintapor ciento a lo mas.Pero la cjata les ha salido ccipada,

30jque los comerciantes en nfunerode ma's de 800, se ban reunido ipuestose de acuerdo para no com-prar cerveza doble. ni sencilla, a losfabricantes comprometidos, a me-nos que se restablezca el antiguomercado de dieziseis botellas porpeso i que la cerveza tenga ciertonumero de grades en rjqueza al¬coholic;.!.Asi el publico tendril cerveza de

buena calidad i no mectdos de caba-llo como aeostumbrnn darle los fa¬bricantes, al mismo tiempo que aba-ratara el consume, porque el des-pachero podrd vender a peso la do-cena de cerveza sencilla, queddn-dole una pequena utilidad.Es una ridieulez pretender ■estan-

car la produccion i venta de cerve¬

za, cuando hai tantos otros articulosque pueden reemplazarla i sobretodocuando el compromiso favorece alas fdbricas grandes i mata a laschicas, que tienen poco capital i ne-cesitan vender pronto i barato i noles conviene el monopolio porqueno tienen tanto gasto i derrochecomo las grandes i producen mejorarticulo.

Page 2: PI HIB NTA - Memoria Chilena: Portal

Alegan que el negocio es malopara el fabricaute, <ii si es malo pat'aque lo siguen? ipor que se estable-een cada dia nuevas f&bricas; comoes que algunos de los actuales fa-bricautes han principiado de lava-dores de botellas i ahora son grandescapifcalistas?

j Arriba los comerciantes! jlaunion es fuerza! No hai que aflojarde las 16 botellas, jmuera el mono-polio i el esfauco! [Viva la libertad!La Pimienta defiende a sus amigoslos despacheros i comerciantes.

La Redactoba

Un marido i su mujer

Pim.—MariditoAjl.—Yida mia.Pim.—Voi al comercio a...comprar.Ajl.—Mujer, ya vas a gastar

En alguna tonteriaPim.—Ai! que enojo, ave Maria

Que cdlera, que disgusto,Si no me quieres dar gustoDllo hijito sin rabiar,Que con mandarme cambiarSales al punto del susto.

Aji.—Ya vienes con la amenaza,I es lo que mas me incomoda.

Pim.—Por cierto, todas de modaI solo yo de esta traza;Ai! cuando estaba en mi casa,Que dejd de pura loca,No bien abria mi bocaPidiendo algo a mi mamitaMe decia: gasta hijita,Nada importa esa bicoca.

Aji.—jPero 110 vez la pobrezaQue nos confunde, mujer?

Pim.—Yo nada tengo que hacerCon semejante simpleza:Aij senor, tarde me pesa,Pero una vez que este viuda,No abrigues punto de dudaQue no me vuelvo a casarEs tonteria buscarEn los maridos ayuda.

Ai! Dios mioAji.—Basta, basta,

Basta de llanto i contienda,

Yete mujer a la tiendaDerrocha, tnalversa i gasta.

Pim.—Eres hijito una pastaI mis ofensas recojojNo te enojas?

Ajl.—No me enojo.Pim.—Pues entonces, dame un beso:

Quedas pagado con esoDel disgusto de mi antojo.

Aji.—I no me diras PimientaQue dije vas a comprar?

Pim.—Por que te lo he de ocultarSi es gasto que no te aruina?Comprare una potolinaBien abultada, estranjera,Una lojosa sombrera,Unas botas elegantes,Una docena de guantesI alguna otra friolera.

Ajl.—jFriolera.. .almas benditas!Bien gastas doscientos pesos;Estos, mujer son excesos,I en verdad me precipitas,Lae potolinas malditasDan hijita, al sexo belloLa apariencia de un camelloQue anda en las patas traseras;En fin, has tu lo que quieras,Ya no chisto ni resuello.

Pim.—Eso dices por mezquino.Ajl.—Tu acusacion es injusta.Pim.—Solo a tl nunca te gusta

El buen gusto femenino,Ajl—SI, vueatro gusto es divinoI as! probando lo est&nLos memories en que vanGuardadas las cabelleras,Llevando en vez de sombrerasUna canasta de pan.

Pim.—Nada te importa: hasta luego.Ajl.—Yete en camino de flores.

Oh! demonios tentadoresDe mi fortuna reniego!Al casarme estuve ciegoI obre de un modo fatal:Mas, si enviudo por su mal;No quiero mas matrimonio:Que cargue el mismo demonioCon la vida cunyugal.

Page 3: PI HIB NTA - Memoria Chilena: Portal

CORE, hS PGND ENCI

Senora Kditora de Ia Prmienta:

En mi otra correspondencia pro"meti a usted ocuparme do dos per-sonajes que tieuen una posicionbastante regular en la aristocraeia,pero koi le pidome disculpe de nocumplir con mi promesa, por cuau-to voi a entra atratar de otro asun-

to de siima importancia i en mi proxima lo hare.Debe usted recordar, senora edi-

tora, del atentado que se llevd aca-bo en el recinto del congreeo en lapersona del senor Ismae! Valdes V.por un oficialillo que solo tiene dejente la ropa que viste, porque susactos siemjpreh&n sido propios de tinanimal en dos -patas.Pues bien; esle mequetrefe, n'aci

do en las riberas del Maule i repu-diado hasta de los perros, se daunas mfulas de un pacha, por cuan-to crde haber nacido en cuna dora-

i no pasa de haber sido en una

pobre choza, eso si que sus padresdespues de algun tie'mpn consiguie-roii reunir unos cua'ntos morlacos ient6r>ces sus herederos se crejeronlos monarcas riberanos. Uno *deellos, es decir el oficialillo de quienme ocupo, consitjuio mediante fal-sas artimanas llegar a ocupar elpuesto de inspector de nuestra po-licia de seguridad, ya que en sutierra no sabia coino llenar la deperro.Nada importa, senora editora, ques hombres competentes, sean hi-

jos de guanelles, se proporcionenBuenas ocupaciones, al contrario, esun timbre de honor, siempre quecumplan como jente con sus debe-fes, pero este pobre diablo a fuerzatie apalear a todo el mundo, quiereconseguir algun ascenso, aunque

para ello tenga que castigar a surnismamadre; prueba de lo que di-go, es la villani'a cometida con elsefior Valdes i lo que el domingo lle-vo acabo en la persona d| un pobrehombre en la caliede Huefanos, sinhaber motivos poderosos. Segun seme dijo, este bruto de oficial, didtan feroz acbazo al dicho individuoque lo dejb en un estado lamenta¬ble, al tiernpo limpiaba el sable paraquitarle la sangre que tan villana-mente babia becbo verier.

No sb, senora editora, en qudquedo la recomendacion que haciael senor Iritendente a nuestros pa-cos, sobre el trato que debia darse-le a las personas que se tratase deconducir presos; ami convenienteseria que ia autoridad tomara carlas en el asunto i esclareciera este

becbo, por cuanto mucbas personaspresenciaron cuando este estupidooficial sac o de la casa de la familiaCerda al individuo que tan inbuma-namerite trato.

Cachito.

DE LA ALCUZA

Un pobre diablo, que tiene a sumujer enferma, llama a un doctorpara que la vea.

—<;Me pagani uste? observa eldesconfiado galeno.—jOdmo no, senor! contesta el

marido; aqul tengo veinte pesos. Silisted sana o mata a mi mujer, se losentrego en el acto.La enferma muere, i el doctor

reclama la suma estipulada.■—Dispense usted, dice el viudo.

iHa muerto usted a mi mujer?—N6.—(iLa ha sanado?

Tampoco.—Entdnces, sino la ha muerto

ni la ba sanaclo, estamos fuera de

Page 4: PI HIB NTA - Memoria Chilena: Portal

lo convenido, i, por lo canto, no ledebo nada.

En el acto de poner las bendi-ciones a una pareja, dice el cura:—El marido debe pr.ofce.jer a la

mujer, i la mujer debe seguir almarido a todas partes......La novia infcerrumpe al eclesias-

tico:—Dispense tisted, sefior cura; con

esa condicion no puedo casarme.,iPor qu6?— Porque mi npvio es c.trtero

ambulante.

H unbre, ipor qud has refiido conel patron que tomah'a por 11 tan toin teres...? H *

Pues por eso, habiendo conclui-do con el interes principaba a to¬rn arse el capital.

Belisario tocame un poco el violin.Imposible, se ha cortado la prima.Toca en el de Coche C4me.Pues ese fcieue corfcada toda la fa-milia.

Encontrose Alberto, dias pasadoscon un insigne pefcardista i en tabidcon el, el dialogo:

— Amigo, ^tienes- por alii un parde pesos que me prestos?—No, querido, ni cristo.—l>. en tu casa?—fodos buenos, gracias...

Un escribano modelo. Muere un

individuo dejando por herencia on¬ce carneros, i ordena en su tes-tamento lo siguiente:Dejo a mi hijo mayor la mitad de

los earneros, al segundo la euartaparte i al tercero la sesta i es mivoluntad que no se divida al hacerlas particiones ningun carnero.

Como es natural, la confusion delos herederos era grande, porquela mitad de los once son cinco i me¬

dio, la cuarta parte dos tre's cuartos,i la sesta uno cinco seis avos i no

habia forma de hacer la divisionsin sacrificar carneros.En este conflicto llamaron a un

escribano mui avispado que habiaen el pueblo, i le espusieron su

apuro. El escribano se hizo cargode la cuestion i resolvio rdpidamen-te de una manera injeniosisirna.^Ustedes tienen incon veniente,

dijo a los bermanos, en que yo ana-da a los once carneros uno de mipropiedad?

No seiior, repitieron todos a una.Pues que lo traigan de mi casa.Enviose por el carnero del escri¬

bano, i cuando estuvo reunido conlos once del muerto, el curia! hizolas particiones en esto forma:

La mitad de 12 son 6, esta es laparte del mayor; la cuarta parte de12 son 3, esa es la del segundo, lasesta parte de 12 son dos, esa es ladel tercero.

Seis, del primero, mas tres, delsegundo, mas dos del tercero, sononce; queda pues Jaecha la divisionde los once carneros que dejb el di-funto i yo me ilevo mi carnero a ca¬sa.

Por donde quedo heeha la divi¬sion de los once carneros sin sacri¬ficar a ninguno de ellos i.salieadotodos los bermanos gananciosos.

Yo conte los amigos que teniaCuando mimaclo fni por la fortunaI halle tantos i tantos,Que me costo trabajo liacer la suma.La desgraeia despues a verme vino

I qnise repetir la operacion:Solamente una cifra me restaba:iSabeis quien era...; Yo!

SE vende un perro perdiguerode raza fina. Tratar de ocho a on¬

ce de la mailana. Ohacabuco 140 imedio.

Imp. de Las Provincias