necios y hombres sabios, 1ª parte - webmedia.gty.orgwebmedia.gty.org/gracia/pdf/2183.pdf · ser...

24
1 Gracia a Vosotros: Desatando la Verdad de Dios, Un Versículo a la Vez Necios y Hombres Sabios, 1ª Parte Escritura: Mateo 2:1-3 Código: 2183 John MacArthur En esta noche regresamos al libro de Mateo y les pido que tomen su Biblia y pasen conmigo al segundo capítulo de Mateo; Mateo, capítulo 2. Y estamos viendo, comenzamos nuestro pequeño estudio la semana pasada, de la historia bíblica de la visita de los hombres sabios al nacimiento de Jesucristo en Belén. Y pasamos mucho tiempo la última vez presentándoles a los hombres sabios y quiénes eran y algo acerca de ellos con cierto detalle. Y no quiero tomar tiempo para repasar todo eso. Permítame simplemente decirle que en esencia vimos que estos hombres eran establecedores de reyes persas, que estaban viniendo debido a que eran conscientes del nacimiento del Rey que esperaban, que sin duda alguna vez habían oído de personas como Daniel y otros de los israelitas, quienes habían vivido en su tierra desde el tiempo de la cautividad babilónica. Y estos establecedores de reyes persas esperaban con mucho gusto ver a un rey porque no tenían a ningún rey. El rey en ese entonces había sido derrocado y querían a un gran monarca para que llegara al trono en el este, para que pudieran presentar una amenaza contra el gran Imperio Romano del occidente. Entonces, sus sentimientos eran tanto políticos como espirituales; y vimos que llegaron a la ciudad e inmediatamente fueron confrontados con una persona muy interesante llamada Herodes. Y vamos a hablar más de él en esta noche. Pero compartí con ustedes que la razón por la que Mateo incluye este segmento en particular del nacimiento de Jesucristo es porque Mateo presenta a Cristo como el Rey. Y qué podría ser más apropiado en una presentación de Cristo como Rey que tener a algunas personas de las que establecían reyes para que vinieran a coronarlo como Rey. Y no sólo establecían reyes, sino que establecían reyes gentiles. Y vimos cómo casi de manera paradójica fue que el pueblo judío, que debería haber estado esperando a su Mesías, ni siquiera se molestó con el nacimiento de Cristo mientras que los

Upload: ledieu

Post on 01-Oct-2018

224 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

1

Gracia a Vosotros: Desatando la Verdad de Dios, Un Versículo a la Vez

Necios y Hombres Sabios, 1ª Parte

Escritura: Mateo 2:1-3

Código: 2183

John MacArthur

En esta noche regresamos al libro de Mateo y les pido que tomen su Biblia y pasen conmigo

al segundo capítulo de Mateo; Mateo, capítulo 2. Y estamos viendo, comenzamos nuestro

pequeño estudio la semana pasada, de la historia bíblica de la visita de los hombres sabios al

nacimiento de Jesucristo en Belén. Y pasamos mucho tiempo la última vez presentándoles a

los hombres sabios y quiénes eran y algo acerca de ellos con cierto detalle. Y no quiero tomar

tiempo para repasar todo eso. Permítame simplemente decirle que en esencia vimos que

estos hombres eran establecedores de reyes persas, que estaban viniendo debido a que eran

conscientes del nacimiento del Rey que esperaban, que sin duda alguna vez habían oído de

personas como Daniel y otros de los israelitas, quienes habían vivido en su tierra desde el

tiempo de la cautividad babilónica.

Y estos establecedores de reyes persas esperaban con mucho gusto ver a un rey porque no

tenían a ningún rey. El rey en ese entonces había sido derrocado y querían a un gran

monarca para que llegara al trono en el este, para que pudieran presentar una amenaza

contra el gran Imperio Romano del occidente. Entonces, sus sentimientos eran tanto políticos

como espirituales; y vimos que llegaron a la ciudad e inmediatamente fueron confrontados con

una persona muy interesante llamada Herodes. Y vamos a hablar más de él en esta noche.

Pero compartí con ustedes que la razón por la que Mateo incluye este segmento en particular

del nacimiento de Jesucristo es porque Mateo presenta a Cristo como el Rey. Y qué podría

ser más apropiado en una presentación de Cristo como Rey que tener a algunas personas de

las que establecían reyes para que vinieran a coronarlo como Rey. Y no sólo establecían

reyes, sino que establecían reyes gentiles.

Y vimos cómo casi de manera paradójica fue que el pueblo judío, que debería haber estado

esperando a su Mesías, ni siquiera se molestó con el nacimiento de Cristo mientras que los

2  

gentiles, quienes en ese entonces eran pueblo fuera de los Pactos de Dios, buscaron conocer

al Rey. Entonces, Él era un Rey, cuando vimos la presentación de Mateo debido a Su linaje

de David. Y vimos eso. Y aquí vemos que Él es un Rey debido al hecho de que había gente

en el mundo que establecía a los reyes de manera oficial y lo reconocían como tal. Podría

decir que en el capítulo 1, Mateo dice: “Jesús merece honor,” y en el capítulo 2, Él lo recibe. Y

de hecho, Él aquí inclusive estaba siendo reconocido como Rey de Reyes y Señor de Señores

en un sentido por parte de estas personas que establecían reyes que eran persas.

Este es un refuerzo de la realidad de que Cristo es Rey, de Su derecho a reinar. Y como le

dije la última vez, no puedo evitar sino detenerme y pensar en el hecho de que el verdadero

Rey no fue conocido en Jerusalén, Su propia ciudad. En Su propia residencia real, el lugar de

todos los lugares en donde Él debería haber sido reconocido como Rey, no lo fue. Ellos no lo

buscaron. No les importó quién era Él. Ni siquiera se molestaron por venir a Belén para verlo.

Sino que más bien fueron algunos extranjeros de una tierra distante que estaban buscando

adorarlo. Y además, fuera de la gente común, los líderes y los gobernantes y los teólogos y

los sacerdotes de Israel que fueron totalmente indiferentes, estaba Herodes, lleno de

amargura y odio y envidia y celos.

Entonces, aquí, desde el principio mismo del Evangelio de Mateo vemos cómo va a ser.

Habrá personas que serán indiferentes. Habrá personas que serán antagonistas y habrá

personas que adorarán. Y veremos más de estos tres grupos conforme avanzamos.

Entonces, los magos representan las primicias de las naciones gentiles y nos muestran,

realmente, que Dios siempre los ha tenido en Su corazón. Ahora, observemos los versículos 1

al 12; y estaremos viéndolos de manera específica conforme entramos al texto -la última vez,

únicamente hablamos de la introducción. Pero conforme entramos al texto, quiero que vea

cinco actos en este increíble drama que se desarrolló en el capítulo 2. Cinco actos separados.

Y simplemente lo vamos a titular con una palabra para recordarlos. La llegada, acto uno.

Número dos, la agitación. Número tres, la actuación. Número cuatro, la adoración y número

cinco, la evasión. Ahora, ese no es un bosquejo muy brillante. Sino que son algunos ganchos

para colgar sus pensamientos.

3  

Veamos en primer lugar los versículos 1 y 2. La llegada. “Cuando Jesús nació en Belén de

Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos.” Y recordará que

realmente le dije que eso no se traduce y es una referencia a cierta línea de sacerdocio que

se recibía por herencia, una tribu de personas que originalmente, aparentemente vinieron de

los medos; pero a lo largo de los años, habían llegado a ocupar un lugar de gran prominencia

los reinos de Persia, en el reino de los medos y en el reino babilónico también. Y entonces, se

volvió sinónimo en muchas maneras con ser un hombre sabio. Ser un mago era tener un lugar

de un hombre sabio en la sociedad. Entonces, vinieron estos magos del este a Jerusalén

diciendo “¿dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque Su estrella hemos visto en

el oriente y venimos a adorarle.”

Ahora, obviamente tenemos la llegada aquí. Poco después del nacimiento de Jesús, los

magos llegan a Jerusalén. Ahora, hay dos cosas que debemos señalar al principio del

versículo 1. Primero, la frase “en Belén de Judea.” Ahora, Belén es un pequeño lugar

tranquilo, aproximadamente está a unos ocho o más kilómetros al sur de Jerusalén. En el

pasado, se llamó Efrata; y así es designada por el profeta Miqueas en el Antiguo Testamento.

Ahora, el nombre Belén es interesante. Significa “casa de pan.” Beth es casa, lehem es pan.

Casa de pan es un nombre apropiado para el lugar en donde el mismo Pan de la vida nació.

Ahora, esta pequeña aldea se encuentra en un lugar fértil en el campo y era muy productivo.

De hecho, le puedo dar a usted una descripción breve que podría ayudarlo a visualizarla.

Estuve ahí un par de veces y haré lo mejor que pueda.

Jerusalén como usted sabe, se encuentra en una planicie. Probablemente unos 2000 pies

sobre el valle que está abajo. Y está ahí en la parte de arriba de un monte alto. Y un poco al

sur. Lo que es interesante acerca del lugar donde Belén se ubica es que en un extremo está

un risco más alto y por otro lado, hay un risco más alto. Es casi así como un asiento, es como

una cuna y Belén está en el medio.

El área, en gran parte, está constituida por roca caliza gris. De hecho, es lo único que ve,

porque hay una norma ahí en la actualidad en Jerusalén, en esa área, que usted no puede

construir ningún edificio menos de que lo construye a partir de la piedra de Jerusalén.

4  

Entonces, los edificios simplemente se levantan del piso y se ven exactamente como se ve el

piso. Y es una especie de roca caliza gris y se ve como una pequeña ciudad. Es como un

anfiteatro, es impresionante.

La pequeña ciudad de Belén ha tenido una historia muy interesante. Se remonta hasta el libro

de Génesis, usted descubrirá que en Belén, Jacob sepultó a Raquel y estableció ahí un pilar o

una especie de memorial en su tumba. Inclusive, cuando usted toma un taxi Mercedes-Benz a

Belén, algún hombre le va a apuntar y decir ‘esa es la tumba de Raquel’, a un lado del

camino.

También descubrimos que cuando Rut se casó con Booz, en el libro de Rut, ella vivió en la

ciudad de Belén. Y desde Belén, Rut podía ver claramente al otro lado del valle del Jordán. Y

eso es verdad. Usted puede estar en ese lugar y puede ver al otro lado del valle del Jordán,

ver al otro lado del mar Muerto y ver a los montes de Moab al otro lado. Y Rut era una

moabita. Viviendo en Belén, ella podría haberse puesto de pie y ver su propia ciudad natal.

Pero sobre todo, la ciudad del Belén fue el hogar y la ciudad del gran rey de Israel conocido

como David. Y eso es lo que es característico acerca de Belén. Eso es lo que más sobresale

de Belén. Siempre será la ciudad de David. En 1 Samuel 16 y en 1 Samuel 17 y en 1 Samuel

20 encontramos indicadores de que ésta fue la ciudad de David. De hecho, en 2 Samuel 23,

cuando David era un fugitivo que estaba huyendo, él clama y dice que anhela el agua del

pozo de Belén. Esa era su ciudad natal.

En días postreros, más adelante, Roboam, después de que se partió el reino en la época de

Salomón, Roboam fortificó a la ciudad. Pero de manera única, está ahí; y muchas cosas

suceden en la historia, pero de manera única, sobresale por ser la ciudad de David. Y

realmente fue ahí -y esto es importante- realmente fue ahí, en ese pequeño lugar, en esa

pequeña villa, realmente no es una ciudad. Fue en esa pequeña villa que el pueblo de Dios

había esperado durante mucho tiempo que naciera su Mesías. Y había motivo para ello, y la

razón es que la profecía del Antiguo Testamento así lo indicaba. Ellos esperaban que el hijo

mayor de David saliera de la ciudad de David. Ellos esperaban que el Mesías naciera allí y

cuando nació ahí, ellos no se molestaron por reconocerlo.

5  

Ahora, un poco más de Belém para ayudarle a tener un retrato visual de la villa. Las casas de

Belén están construidas ahí por todas las colinas. De hecho, es muy difícil encontrar un lugar

plano a menos de que usted suba ahí donde está la plaza junto la Iglesia de la Natividad. Pero

parece siempre que son muchas colinas que suben y bajan y las casas están construidas por

todas estas colinas.

Y con mucha frecuencia, cuando se construía una casa en la colina, ahí abajo de eso, debido

a que la piedra caliza no era muy dura y debido a que había algunos hoyos naturales en el

monte, la gente simplemente construía una cueva hueca que usaban como establo. Y es muy

probable que en una cueva como esa haya nacido nuestro Señor Jesús. Inclusive hoy, la

Iglesia Católica cree que ha encontrado la cueva correcta. Claro, ellos siempre encuentran un

lugar donde poder construir una iglesia, en todos lados excepto por la mitad del mar de

Galilea. Ellos no han podido construir ahí donde Jesús caminó sobre el agua, pero en

cualquier lugar donde Jesús puso Su pie, ellos han colocado una Iglesia.

Y está cueva en particular que ellos creen que han encontrado al costado de un monte, ahí

arriba de eso han construido una Iglesia. Entonces, usted entra a la Iglesia y baja por las

escaleras y hasta abajo encuentra una pequeña cueva y tiene que agachar su cabeza y

también sus hombros para que en cierta manera pueda adentrarse a esta pequeña cueva y

ese es el lugar donde ellos dicen que Jesús nació.

Ahora, por cierto, esto no es algo nuevo. Esto se remonta al emperador Adrián. Cuando él

primero reconoció que los cristianos pensaban que esta cueva era el lugar sagrado, entonces

él pensó que la profanaría muy bien. Entonces, él construyó ahí una estatua a Adonis, un Dios

falso. Y llegó Constantino en el siglo cuarto y destruyó el templo a Adonis y allí construyó una

iglesia. Y esto ha continuado así, y se piensa que ahí es el lugar.

Entonces, es una pequeña villa que está construida en un montón de colinas en donde las

casas realmente tenían debajo de ellas un pequeño establo, un establo hecho de un lugar

hueco ahí en el monte.

6  

Ahora, esto es Belén de Judea. No es significativo. Quizás sea apropiado. Cuando uno piensa

acerca de Belén, uno quizás piensa en una cosa y es el nacimiento de Jesucristo. Y quizás

ese es el modo en que Dios quería que fuera y por eso Él escogió un lugar muy oscuro y sin

embargo, un lugar lo suficientemente cerca de Jerusalén como para que hubiera llamado la

atención de la población entera cuando el Rey naciera. Si ellos hubieran sido sensibles a

Dios, ellos habrían podido identificar esto como Él lo habría querido.

Ahora, notará que no hay duda alguna de que algo de tiempo ha pasado. Entre el capítulo 2 y

el versículo 1, cuando los hombres sabios llegan y el nacimiento de Cristo, hay un período de

tiempo que pasa. Y señalé esto la última vez y no voy a entrar en esto a gran detalle, pero me

parece que han pasado varios meses, por lo menos un par de meses. Hay un buen período

de meses, Jesús nació en algún momento cerca del fin de año y Herodes murió en algún

punto cerca del principio del año siguiente. Sabemos que murió, o por lo menos creemos que

él murió en algún punto cerca del fin de marzo o el principio de abril, en un eclipse lunar en el

año 4 a. C. No podría haber sido más de 4, 5 o 6 meses después, al menos en mi juicio,

después del nacimiento de Cristo.

Y también notarán esto: nos dice ahí en el versículo 11: “y al entrar en la casa, vieron al niño

con Su madre, y postrándose, lo adoraron.” Cristo ya no está en el pesebre. Ya no está en

establo. Él está en Su casa. Y le dije a usted la última vez que probablemente habían estado

en el templo para la purificación. Cuando una dama judía tenía un bebé, pasaba cierto período

de tiempo, ella tenía que ir purificarse y ofrecer un sacrificio. Y le dije que ellos ofrecieron lo

que ofrecía un pobre.

Y había pasado algo de tiempo después del nacimiento de Cristo. Sin duda alguna, habrían

llevado los regalos que los hombres sabios les habían traído. Ellos habrían comprado un

sacrificio más grande si hubieran tenido el dinero. Y entonces, me parece que todavía no

habían recibido los regalos de los magos, los cuales habrían usado en ese sacrificio, lo cual

significa que la purificación sucedió antes de eso, por lo cual nos coloca en un período de por

lo menos 40 días antes de que los hombres sabios llegaran allí. Entonces, el niño ha crecido

por lo menos un poco, quizás tiene unos pocos meses de edad.

7  

Ahora, aquí también hay algo interesante y sólo le estoy dando información para preparar el

contexto. Notará que dice “en los días del rey Herodes.” Ahora, podemos pasar literalmente

horas discutiendo esta persona y todo su trasfondo, de dónde vino; pero realmente no es algo

clave para nuestro punto. Permítame simplemente darle suficiente historia como para que

entienda lo que aquí está pasando.

Este hombre realmente no fue estrictamente un judío. Él era un edomita. Él era un edomita o

idumeo, es lo mismo, que vino de un área al este y al sur un poco de Jerusalén. Él se había

puesto a disposición de los romanos. Ahora, recuerde esto. Los romanos entraron y se

apoderaron de esa área y la gente que era inteligente en cierta manera se ponía a los pies de

los romanos, ¿no es cierto? La gente que quería obtener algo, simplemente buscaba caerle

bien a los romanos y este hombre fue uno de este tipo de personas. Durante las guerras

civiles en Palestina y durante el tiempo en el que Roma estaba tratando de establecerse a sí

misma antes del nacimiento de Cristo, Herodes jugó juegos con Roma y en cierta manera,

buscó busco caerles bien y confiaron en él. Él obtuvo su favor.

Y una vez que Roma finalmente había conquistado la tierra de Judea, ellos establecieron un

Procurador. Un Procurador era como un gobernador, algo así como un gobernante oficial de

ese pequeño país. Y su nombre era Antípater. Antípater. Y él era un edomita. Él era un

edomita y Herodes era su hijo. Cuando ellos querían a un gobernante, ellos encontraron a

este hombre Antípater y Herodes era su hijo. Pero Herodes se había esforzado tanto por

caerle bien a los romanos, que ellos establecieron a Herodes como el tetrarca de Galilea.

En otras palabras, ellos necesitaban un hombre que se encargara de Jerusalén y Judea y

alguien más que en cierta manera controlara el área rural. En cierta manera, era una posición

inferior en importancia, pero obstante, era una posición de honor entre los romanos. Entonces,

establecieron a Antípater en Jerusalén y Judea. Y también a Herodes en Galilea. Y entonces,

en el año 47 a. C., eso es antes del nacimiento de Cristo, Herodes fue hecho tetrarca de

Galilea.

Ahora, siete años después, en el año 40 a. C., esa área de los medo persas, los partos, de la

que hemos estado hablando de donde vinieron los magos, comenzó una guerra civil. Y ellos

8  

cruzaron y atacaron el área de Palestina y Siria y demás. Y Herodes se subió rápidamente a

un barco a Roma. Y se fue. Y él podía ver el escrito en la pared y se fue a Roma y les dijo lo

que estaba sucediendo. El este estaba comenzando a molestar esa pequeña área que era así

como un colchón. Y entonces, Herodes huyó a Roma. Y él es el hijo de Antípater.

Y llega a Roma y comienza a hablarle al Senado romano y realmente busca caerle bien al

Senado romano y los convence de que él es pro romano, pero que también viene de esa parte

del mundo y sabe cómo manejar las situaciones por ahí, etc., etc., etcétera. Él quiere

autoridad absoluta. Entonces, alrededor del año 40 a. C., el Senado romano hizo de Herodes

el rey de los judíos. Ahora recuerde eso. Ellos hicieron de Herodes el rey de los judíos y le

dijeron ‘llévate un ejército’. Y le dieron un ejército. Le dieron algunas tropas y le dijeron ‘ve ahí

y levanta tu propio reino por allá y tú haz lo que quieras’.

Bueno, le tomó tres años hacer eso. Le tomó tres años y finalmente, adquirió el poder que

tenía el título. Y finalmente, en el año 37 a. C. él ganó y se volvió el rey de los judíos. Y ese es

un título que mantuvo hasta que murió. Siempre trató de mantener el título de rey de los

judíos.

Ahora, ve usted ahí la pregunta que los magos hicieron el versículo 2 diciendo “¿dónde está el

rey de los judíos que han nacido?” Bueno, eso fue suficiente como para llenar de pánico a

Herodes. Digo, él había buscado esto como un político desesperado. Él había viajado hasta

Roma y había jugado su juego ante el Senado romano para caerle bien. Había obtenido el

derecho de ser rey de los judíos, tomó a un ejército y luchó durante tres años para ganarse el

derecho que es convertir eso en una realidad. Y entonces se había aferrado a eso; y ahora de

pronto, vienen un montón de hacedores de reyes de Persia, entran por la ciudad preguntando

por todos lados quién es el rey de los judíos que ha nacido y Herodes tiene miedo.

Ahora, algo del shock del miedo de toda esta escena se indica de nuevo en el versículo 1,

cuando dice: “Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del

oriente a Jerusalén unos magos.” No sólo vinieron magos, pero ¿puede usted creer que

vinieron magos? Si ustedes Herodes, estamos en problemas o lo que sea. Es inesperado. Es

asombroso. Lo deja boquiabierto. Impresionante. Vinieron magos del este preguntando dónde

9  

está el rey de los judíos que ha nacido.

Ahora, francamente, no debería haber sido tan sorprendente realmente. Si esa persona judías

hubieran analizado cuidadosamente el Antiguo Testamento, sin duda alguna, ellos habrían

llegado a ver que había una buena indicación de que el tiempo era el correcto. Los

historiadores nos reiteran que en ese entonces en el mundo, ahora escuche esto, me parece

fascinante que en ese entonces, en el mundo, había un tipo extraño de expectativa de que iba

a llegar un rey. La gente en el este tenía esta expectativa. Y eso es en parte por lo que los

magos vinieron. La gente en muchos lugares esperaba la llegada del rey. Ese era el medio

ambiente del día, de la época.

Inclusive los historiadores romanos reconocieron esto. Por ejemplo, Suetonio escribió: “se

había esparcido por todo el Oriente una creencia antigua y firme de que ya era apropiado el

momento para que hombres vinieran de Judea a gobernar el mundo. Ese es Suetonio. Y

Suetonio habría escrito más adelante, particularmente acerca de los días de Vespasiano. Y

Vespasiano conquistó Israel en el año 70 d. C. Entonces, quizás Suetonio escribió poco

después de eso. Pero él miró atrás y dijo que era un día en el que había una expectativa de

que hombres vinieran de Judea a gobernar el mundo. Ellos estaban viendo a ese lugar.

Tácito, el famoso historiador romano, habla de la misma creencia. Y cito: “Había una

persuasión firme,” dice Tácito en sus historias, “que en este mismo momento el este iba a

llegar a ser poderoso y gobernantes vendrían de Judea para adquirir un imperio universal.”

Así dice Tácito. Los judíos - de acuerdo con Josefo en su volumen Guerras de los Judíos -

dice Josefo lo siguiente, que alrededor de ese entonces, lo judíos creían que uno de su país

se convertiría en gobernador de la tierra poblada.

Poco tiempo después, encontramos a Tiridates rey de Armenia, visitando a Nerón en Roma

con sus hombres sabios junto con él, de acuerdo con Suetonio. Y encontramos a los magos

en Atenas sacrificando a la memoria de Platón. Y al mismo tiempo en el que Jesús nació,

encontramos a Augusto, el emperador romano, siendo reconocido como el salvador del

mundo. Y encontramos al poeta romano Virgilio escribiendo acerca de la época dorada que

acababa de comenzar. Como puede ver, los romanos estaban esperando una época dorada.

10  

El este venía al oeste con sus hombres sabios. Había un sentimiento tremendo de que en

algún momento, de algún lugar, vendría un gran salvador del mundo, un gran líder, un gran

gobernante.

Ahora, no sé de dónde vino la expectativa. El tiempo estaba listo. Y vinieron hombres sabios o

magos del este a Jerusalén. Quizás ellos reconocían lo que Pablo les dijo a los gálatas, que

en la plenitud del tiempo Dios envió a Su Hijo, hecho de mujer, hecho bajo la ley. Había un

sentido en el cual el tiempo era propicio y algunas personas podrían sentirlo.

Y estos magos, basaron su información en Daniel y otra información que habían recibido de

los judíos que estaban viviendo en su tierra desde la cautividad. Y en base a su propio sentido

de fe en el Dios verdadero y en base a su propia expectativa de que Dios cumpliría Su palabra

y en base a lo que ellos vieron en el cielo, que es llamado una estrella aquí, ellos vinieron a

Jerusalén.

La gente siempre pregunta cuántos eran. No lo sabemos, como les he dicho; tampoco

sabemos cuáles son sus nombres. Es especulación pura. Pero tenían un motivo por el cual

venir. Observe el versículo 2. Diciendo, y aparentemente la construcción griega aquí dice que

estaban diciendo todo esto por todos lados. Ellos continuamente estaban diciendo. “¿Dónde

está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque Su estrella hemos visto en el oriente y

venimos a adorarle.” Ellos seguían preguntando “¿Dónde está el rey de los judíos que ha

nacido?”

Todo el mundo se debió haber sorprendido cada vez que oían la pregunta de los magos. Algo

así como que la gente hubiera respondido: ‘¿Eh?’ Ellos deben haber asumido que estas

personas habrían sabido eso. Digo, después de todo, eran Los judíos y ciertamente ellos

habrían sabido cuándo Su rey había nacido y dónde había nacido.

Pero hay dos cosas que me impactan en este versículo conforme lo leo y quiero responder

esas preguntas, porque son dos cosas que me impactan. Pregunta número uno: ¿cuál fue la

naturaleza de la estrella? “Hemos visto Su estrella en el oriente y venimos a adorarle.” ¿Cuál

era la naturaleza de la estrella? Leí un poco esta semana y la semana anterior para tratar de

11  

entender cuál era la estrella. No van a creer las sugerencias.

En primer lugar, algunos dicen que era una estrella genuina, real, bonafide. Algunos dicen que

era Júpiter, porque Júpiter es llamado el “rey de los planetas.” Algunos dicen -y esta es la

teoría de Kepler- que era la conjunción de Júpiter y Saturno en la señal del pez. Y algunos

dicen que simplemente era un cometa errante. Algunos dicen que era un meteorito. Y algunos

dicen que era la estrella del destino en el corazón de la humanidad.

Esas realmente son teorías bastante ridículas. Les voy a decir lo que yo creo. Vean Lucas 2:9;

y quizás, esto le va a ayudar a responder una pregunta que usted quizás tuvo desde que era

pequeño. Y si todavía es un pequeño, todavía la tiene. Lucas 2:9. Aquí hay una buena clave.

Aquí no estamos en el incidente de los hombres sabios, sino en el de los pastores. Y fueron

los primeros que llegaron y eran de Israel. Y ellos, en cierta manera, son un retrato del

remanente.

“En esa misma región había unos pastores que pasaban la noche en el campo, turnándose

para cuidar sus rebaños. Sucedió que un ángel del Señor se les apareció. La gloria del Señor

los envolvió en su luz, y se llenaron de temor.” Ahora, ¿cuál era el brillo en el cielo cuando los

pastores lo vieron? ¿Qué era? Era la gloria del Señor. Y si usted regresa al Antiguo

Testamento y estudia el concepto de la gloria de Dios, descubrirá que la gloria de Dios se

manifiesta como luz, ¿no es cierto? Una, y otra, y otra vez en el Antiguo Testamento, la gloria

de Dios se manifiesta como luz. Cuando Dios irradia Su presencia, Él la transforma en una luz

inefable.

Cuando la gloria de Dios apareció de día, era como una nube de luz. Cuando aparecía en la

noche, era como un pilar de fuego. Cuando la gloria de Dios descendió en el tabernáculo, era

luz. Cuando Moisés ascendió al monte dijo: “Muéstrame Tu gloria,” Dios lo escondió en una

roca y Dios mostró Su gloria manifiesta como luz y había tanta luz que afectó su rostro y

cuando descendió del monte y le habló al pueblo, su rostro resplandecía.

La gloria de Dios es luz refulgente y cuando Jesús reveló quién era y reveló Su gloria en el

monte de la transfiguración, Él hizo a un lado Su carne y ellos vieron Su ¿qué? Su gloria como

12  

luz transparente. Y cuando Jesús venga la segunda vez del cielo, Él va a venir en luz

refulgente. Y Apocalipsis dice: “Dios va a apagar las luces del cielo. Las estrellas van a caer.

Todos los soles, las lunes, todos se vuelve totalmente oscuro, el cielo se enrolla como un

pergamino. Y cuando esté totalmente oscuro, y cuando venga Cristo, es revelado como luz

refulgente y la gente clama porque las rocas y los montes caigan sobre ellos para esconderlos

de la faz de Su gloria.

Ahora, todo eso para recordarle que la gloria de Dios se manifiesta en las Escrituras como luz,

como luz. Él le dijo a Moisés que no podía ver Su rostro y vivir. Porque sería consumido en

ella. Sería como estar a 10 pies del Sol, sólo que sería un millón de millones de soles. Y creo

que esa era la gloria del Señor que brilló esa noche, cuando la gloria de Dios estaba

descendiendo a la Tierra. Fue la gloria de Dios descendiendo a la Tierra, viniendo en forma de

hombre. Yo creo que esa gloria de Dios en lo que los hombres sabios vieron.

Ahora, permítame darle algo más de apoyo en esto porque creo que es algo interesante,

rastrear en este pensamiento. La palabra clave en el Antiguo Testamento, la palabra hebrea

para estrella es la palabra kokab. No que eso sea importante, sino que es un punto de

contacto con el hebreo. Pero tiene un significado básico; y su significado básico es “brillar o

tener algo refulgente.” Ahora, algunas veces la palabra kokab es usada para usar hablar de

una estrella regular. Algunas veces es usada para hablar de un ángel. Algunas veces es

usada para hablar de hombres. Entonces, no necesariamente siempre significa una estrella

real. Puede significar cualquier cosa que está como algo refulgente, algo que brilla. Cualquier

cosa que brilla de una manera increíble.

De hecho, en Números 24:17, una escritura muy interesante. Dice, y esto es una profecía

mesiánica: “lo veré, pero no ahora. Lo contemplaré, pero no cerca.” Ahora escuche “y vendrá

una kokab de Jacob y un cetro se levantará de Israel.” Eso es Números 24:17. Esta es una

profecía mesiánica. Vendrá alguien brillante. Alguien refulgente. Vendrá una estrella. Y

escuchen, yo creo que la profecía es esta: que ningún otro, nadie más que la gloria de Dios

encarnada es la estrella, es el que brilla.

Vea, por un momento, Mateo, capítulo 24. Mateo 24:4. Bueno, vayamos al versículo 30.

13  

“Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, se oscurecerá el sol y no brillará

más la luna; las estrellas caerán del cielo y los cuerpos celestes serán sacudidos. La señal del

Hijo del Hombre aparecerá en el cielo.” La señal. En otras palabras, siempre que el Hijo del

Hombre está a punto de aparecer, va a haber una señal apuntando a Él. ¿Sabe usted para

que es una señal? Las señal es para dirigirlo a algo que debe ver. Usted está manejando por

el camino y la señal dice Roscoe Boulevard a tres cuartos de milla. La señal no es Roscoe

Boulevard, sino que está ahí para dirigirlo a Roscoe Boulevard. Tienen una función. Su

propósito es señalarle algo y el Hijo del Hombre tiene una señal.

La señal del Hijo del Hombre aparecerá en el cielo. Oh, es interesante. La señal está en el

cielo. ¿Y cuál es? “La señal del Hijo del HOMBRE aparecerá en el cielo… verán al Hijo del

Hombre venir sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria.” Ahora, aquí está Su kokab.

Su luz refulgente. Y aunque la palabra kokab, la palabra hebrea, no es utilizada en el Nuevo

Testamento, es la misma idea. Yo creo que esta señal del Hijo del Hombre no es nada más y

nada menos que la gloria Shekhiná de Dios mismo. Dios revelándose a sí mismo en luz

gloriosa inefable. De hecho, inclusive nos dice, creo que es en Apocalipsis 1:16 que el Hijo

brilla, el Hijo de Dios brilla, como si fuera el sol en su fuerza.

De alguna manera, escuche esto, Jesucristo está conectado con esta gloria refulgente de

Dios. Y es Su señal en los cielos. Él es un Espíritu. Él es un ser espiritual. Él también en un

sentido es un ser físico en el cuerpo glorificado que Él tiene a partir de Su resurrección. Pero

hay una señal que va con Él y es gloria refulgente y un día en el monte, Él se la mostró a los

discípulos. Y un día, cuando Él regrese, la señal de Su venida, la señal del Hijo del Hombre en

el cielo estará ahí, gloria refulgente en el cielo.

Bueno, ¿sabe usted lo que yo pienso? Yo creo que la misma señal estuvo ahí la primera vez

que vino. Simplemente, creo que era la señal del Hijo del Hombre en el cielo. La señal del Hijo

del Hombre en el cielo no es una estrella. No es un cuerpo astral. No es una conjunción de

planetas. No son los pensamientos del destino humano que están ahí en la mente mística de

alguien. La señal del Hijo del Hombre no es nada más ni nada menos que la gloria de Dios

Shekhiná revelada en luz refulgente, gloriosa en los cielos.

14  

Y añadiría este pensamiento. El versículo 2 dice: “hemos visto su astēr.” Su refulgencia, la

palabra astēr incidentalmente es la palabra que se traduce aquí estrella, pero es usada de

otras cosas diferentes de estrellas. Entonces, Él tiene Su propia y de nuevo, significa una

refulgencia o un brillo. Hemos visto Su kokab o Su astēr, Su gloria. El hecho mismo de que

sea Su estrella significa algo muy especial.

Ha aparecido. Una palabra interesante. Su estrella hemos visto en el oriente. Su estrella, dice

el versículo 7. Herodes dice: “quiero saber cuándo apareció la estrella. Y la palabra phainō en

el griego significa aquello que se enciende. ¿Cuándo fue el momento en el que eso se

encendió? La misma palabra -es un pensamiento interesante- la misma palabra utilizada con

relámpago. El relámpago es una forma de astēr. Algunas veces es traducida como estrella en

el cielo, algunas veces es traducida como relámpago. Algunas veces es como el brillo de algo

y aquí es el brillo. No podemos ir más allá de ello. No podemos hacerlo que signifique una

verdadera estrella.

Y aquí hay un sentido en el que Herodes dice “¿cuándo es que esto que empezó a brillar se

prendió?” Y aún eso es en cierta manera una pista de que fue algo que nunca antes había

existido y empezó a existir sólo porque Jesús venía. Y entonces, yo creo que esta fue Su

astēr, la señal del Hijo del Hombre en los cielos. Estuvo ahí en Su primera venida y amados,

estará ahí en Su segunda venida. Es Su señal. Es Su estrella. No algún tipo de cuerpo

celeste.

La pseudo ciencia de la astrología nunca había podido predecir al Señor. No estaban viendo

todas sus ideas y diciendo ‘bueno, ahí está el viejo Saturno y quien sea haciendo algo. Eso

significa que va a nacer.’ No, no. Lo que vieron fue algo que nunca antes habían visto y

sabían que tenía que ser algo único y lo conectaron con lo que decía el Antiguo Testamento y

lo que Daniel les había dicho. Ninguna investigación astronómica les dio la dirección. Dios se

reveló a sí mismo.

No fue diferente de la columna de fuego en el Antiguo Testamento. Y usted recordará la

columna de fuego y la nube en el Antiguo Testamento que estaba ahí encima del lugar

santísimo. Bueno, esto nos dice que fuera lo que fuera la estrella, ahí estuvo y estuvo sobre la

15  

casa en donde nació. Ahora, ¿me puede usted explicar cómo una estrella literal podía hacer

eso? No puede. Porque no es ninguna otra cosa que la señal del Hijo del Hombre. Usted dice

‘bueno, si era una gloria tan magnífica, refulgente de la señal de Cristo en los cielos, ¿cómo

es posible que los hombres sabios estuvieron ahí en Persia y nadie más lo vio?

Bueno, esa es una buena pregunta. Y esa es la segunda pregunta que yo hice. ¿Cómo puede

ser Dios tan selectivo? Bueno, usted sabe, eso no es nada nuevo para Dios. Él puede hacer

que todo el mundo en el mundo esté ciego a algo si Él así lo quiere. En Éxodo, capítulo 14

encontré un buen paralelo, Éxodo 14:19 dice: “El ángel de Dios, quien iba delante del

campamento de Israel, se quitó e iba atrás de ellos.” Ahora, ellos estaban atravesando el Mar

Rojo y entonces, los ángeles estaban guiándolos al Mar Rojo. Y una vez que llegan al mar

Rojo, Él va atrás de ellos. Usted pregunta si era para empujar. No, le voy a decir para qué iba

atrás.

La columna de nube, aquí está la gloria de Dios, la columna la de nube se quitó de delante de

su rostro y se puso atrás de ellos. Ahora, detrás de los israelitas usted tiene ahí la columna de

nube, la gloria de Dios. Y tiene al ángel del Señor. ¿Quién es el ángel del Señor? Jesucristo.

“Y estuvo en medio del campamento de los egipcios y del campamento de Israel y era una

nube y oscuridad para ellos, pero les dio luz de noche a estos de tal manera que no se

acercaron el uno al otro toda la noche.”

¿Sabe lo que sucedió? Israel vio la luz y faraón y su ejército vieron ¿qué? Oscuridad. Y aquí

es lo mismo. Hay algo acerca de Dios revelando lo que Él quiere revelar a aquellos a quien se

los quiere revelar y eso es todo lo que puedo decir acerca de esto. ¿Cómo es que la

relacionaron con el nacimiento de Cristo? No sé. Realmente no sé, fuera de que Dios hizo que

fuera obvio que ellos lo supieran, que ellos lo supieran.

Ahora, ¿quiere saber algo que es fascinante? Esto podría conmoverlo un poco, podría afectar

su historia de navidad el próximo año. Pero, ¿sabe que en ningún lugar de la Biblia dice que

siguieron a la estrella de Belén desde Persia? No. No dice que los llevó a Jerusalén. No dice

que fue a ningún lugar en absoluto. Hemos visto su estrella en ¿dónde? En el oriente. Ellos

vieron la estrella en el este y no necesitaba decirles adónde tenían que ir, en dónde el Mesías

16  

judío estaría. Ellos sabían que la ciudad real era Jerusalén. Ellos sabían que allí todos los

reyes judíos reinaban. Ellos sabían exactamente dónde ir. No necesitaban que una estrella los

guiara.

Y cuando vino Su gloria y Dios lo hizo tan evidente y obvio como Él siempre lo hace cuando Él

lo revela y cuando quiere revelar a quien Él quiere revelar, ellos ni siquiera hicieron la

pregunta. Ellos se subieron a sus caballos y se fueron. Y llegaron al lugar correcto. Y Mateo

no nos da todos los detalles de cómo es que ellos prepararon al caballo de Persia, cuántos

kilómetros y cómo fue y todo lo que comieron, porque esa no es la historia de esas personas,

sino de Jesucristo. Y tienen un lugar sólo en lo que a Cristo tiene que ver. Entonces, los

detalles no están ahí.

Pero me parece increíble cómo Dios hace las cosas cuando Él quiere que Sus cosas sean

hechas. Les dio a estos magos, estos gentiles que temían a Dios, allá desde Persia, estos

establecedores de reyes, Su señal; y ellos sabían que era Su señal y ellos sabían que debían

ir a Jerusalén. Y el énfasis de Mateo es tan hermoso. Él dice en el versículo 2: “diciendo

porque Su astēr hemos visto en el oriente y hemos venido a adorarle.” Ellos sabían que Él

debía ser adorado. Venían a adorarle. Ellos sabían que no había otro digno como este, y

tenían razón.

Aquí tienen ustedes a paganos que no tenían nada que los guiara sino las indicaciones de las

profecías del Antiguo Testamento, nada que los guiara sino su propia ciencia mezclada con

sus supersticiones simpáticas. Sin embargo, son verdaderos buscadores de Dios. Y cuando la

señal vino, con toda su falta de información, ellos se embarcaron de manera entusiasta en un

viaje para buscar a un rey que habían esperado por mucho tiempo. Pero la jerarquía judía,

con el Pentateuco en su mano, estudiándolo diariamente, con las profecías en su mano,

leyéndolas diariamente, gobernados por un hombre amargado y malo llamado Herodes,

estuvieron satisfechos con ser totalmente indiferentes a lo que estaba sucediendo a 8 km de

distancia. Y aquí vemos de nuevo la actitud constante de Mateo de condenación hacia los

oficiales del judaísmo y su sensibilidad constante de que Dios está abriendo la Iglesia, le está

abriendo el Evangelio a los gentiles.

17  

Escuche, siempre hay en algún lugar corazones hambrientos anhelando a un Salvador divino

y dispuestos a seguir inclusive una señal débil que pueda llevarlos a Sus pies. Y siempre es

fabuloso cuando usted encuentra a alguien así. Siempre existen esos corazones que buscan.

Me acuerdo cuando estaba en un avión en una ocasión y quería estudiar porque tenía un

manuscrito que tenía que entregar y tenía que entregarlo a la casa de publicación. Entonces

yo, de modo quizás algo simpático, oré de manera silenciosa “Señor, por favor, que ningún

incrédulo se siente cerca de mí, para que no tenga que darle testimonio todo el tiempo desde

el St. Louis a Los Ángeles, porque tengo que terminar.”

Y claro, tuvimos que detenernos y me metí en el avión equivocado o el avión no estaba

funcionando bien y tuvimos que cambiar de aviones. Todas las cosas estaban mal. Y nos

subimos a otro avión. Y vino un hombre y se sentó a mi lado. Yo estaba estudiando y

estudiando; y él estaba dormido y só yo no lo quería despertarlo. Yo me moví un poco y él se

despertó. Y yo pensé ‘Oh’. Y entonces, él me preguntó si era un maestro. ‘Tienes esos

papeles y demás.’ Yo le contesté que sí, que era un maestro en cierto modo. Y él me preguntó

qué enseñaba. Yo le contesté que enseñaba la Biblia. Y él dijo: “¿enseñas la Biblia? ¡Oh,

escucha! Esto es fabuloso. ¿Tú podrías decirme cómo puedo tener una relación personal con

Jesucristo?” Es la verdad. Y entonces, empecé a hablarle.

Se supone que no debes comenzar ahí. Se supone que debes ser escéptico. Se supone que

al menos debe tener una hora de apologética antes de que entremos en eso. Pero en algún

punto ahí, volando sobre el Gran Cañón, él recibió a Cristo. Más tarde, lo bauticé y me dijo

que después de eso, él venía a Los Ángeles a trabajar para alguien. Le pregunté para quién.

Y él me dijo para quién era, para uno de nuestros ancianos. Fue interesante.

Siempre hay corazones preparados y aquí había algunos que vinieron a Jerusalén. Entonces,

veamos la llegada. En segundo lugar, y esto es realmente interesante, la llegada es la escena

uno. Y rápidamente llega la escena dos, la agitación. La agitación. Herodes es totalmente lo

opuesto de estas personas. Versículo 3: “Oyendo esto, el rey Herodes se turbó.” Oyendo esto,

esto es que estos hombres habían llegado “Herodes se turbó y toda Jerusalén con él.”

Ahora Herodes sabía muy bien que él estaba sentado ahí en un polvorín. En primer lugar, él

18  

sabía que la gente de la ciudad no lo quería y no querían el gobierno romano y querían su

propia independencia y autonomía. Y él sabía que ellos tenían aspiraciones de derrocarlo y

derrocar a Roma. Y él también sabía que si los persas se involucraban y formaban esta

enorme confederación que involucraba a este llamado el ‘rey de los judíos’, realmente estaría

en problemas. Su ejército estaba fuera del país temporalmente. Él sabía que el imperio

oriental presentaba una amenaza constante para Roma y el conflicto siempre estaba ahí

hirviendo y él sabía que su trabajo estaba en la cuerda floja y su vida estaba en la cuerda

floja, aunque tenía 70 años de edad, por lo menos para este entonces. Él todavía quería

aferrarse a todo lo que tenía.

Entonces, se turbó. Él estaba en pánico. Es una palabra que significa realmente estar agitado

y enojado. De hecho, no sé si existe una palabra más fuerte que esa en referencia a este

pensamiento. Una buena comparación de referencia sería en Mateo 14:26, cuando se usa la

misma palabra y dice lo siguiente: “Cuando los discípulos vieron a Jesús caminando sobre el

mar, fueron agitados.” Se turbaron. Es la misma palabra. Digo, esto realmente es algo

anormal. Esto es algo molesto, estaban en un estado de pánico.

Ahora, él está agitado y él tenía razón para estarlo. Después de todo, era el rey de los judíos y

en su propia mente él había peleado mucho por llegar ahí y mantenerlo. Y ahora, de pronto,

llegaba alguien que va a quitarle el trono y aquí están los hombres que establecen a los reyes

para asegurarse de que lo tenga. Hombre, esto es algo serio. Este tipo de rumor, él podía

imaginarse. Este tipo de rumor ahora está por toda la ciudad. Hay un nuevo rey. Hay un nuevo

rey de los judíos. Hay un nuevo rey de los judíos. ¿Oíste que los persas están aquí? Los que

establecen reyes están aquí. Hay un nuevo rey de los judíos.

Y él puede imaginarse toda la conmoción de libertad, se puede imaginar las manifestaciones

de libertad de los fanáticos entre los zelotes y los fanáticos y hombre, está temblando. Y él se

da cuenta de que tiene que tomar pasos radicales; y en su mente depravada putrefacta

comienza a pensar en un plan. Bueno, él francamente se excedió, porque a partir del registro

de Mateo no parece que la población de Jerusalén estaba impresionada con las preguntas de

los magos. Usted no ve aquí a una masa de personas que está llegando a Belén. No parecían

entender lo que estaba pasando. No parece haber ningún tipo de agitación.

19  

Me parece tan difícil creer, que es asombroso. Digo, aquí están estas personas famosas de

Persia que establecían reyes haciendo una pregunta como ésta y usted podría haberse

imaginado que el pueblo hubiera venido en multitudes. Pero es parte de la que manera en la

que será, porque la Biblia simplemente dice: “A los Suyos vino, y los Suyos no le recibieron.”

Él estuvo en el mundo y el mundo no le conoció. Y es verdad. Cuando todas las

circunstancias normales habrían dictado mucho interés, pero no hubo nada. Nada.

No hubo una especie de mentalidad de que ‘vamos a vencer, vamos a levantarnos en armas’

que se fomentaba en Jerusalén. No había un nuevo rey que buscara derrocar a Herodes. Y

creo que hay una razón para esto: básicamente la razón es que temían más a Herodes que

confiaban en Dios. Temían más a Herodes de lo que confiaban en Dios. De lo que confiaban

en la Palabra de Dios. Realmente temían lo que Él haría. Y observen lo que dice. Dice que él

se turbó y toda Jerusalén con él. ¿Por qué se turbaron? Porque le temían tanto. Y tenían

mucho por qué temer. Ellos habían aprendido mucho tiempo antes, a través de la triste

experiencia, que no había límites para la ira y venganza de este maníaco. Digo, realmente un

loco. Y ellos pensaron ‘hombre, estos hombres hicieron enojar a Herodes y aquí estaremos en

un baño de sangre.’ Ellos temían.

Ahora, permítame hablar de Herodes por un momento. Él cometió algunas atrocidades que

son difíciles de describir. Pero en primer lugar, permítame hablar de las cosas positivas. Él era

un hombre muy capaz y normalmente las personas diabólicas que llegan a este nivel tienen

alguna capacidad. Mientras que fue un gobernante joven en Galilea, él tuvo grandes victorias

sobre las guerrillas. Siempre existieron estas guerrillas de montaña, estos soldados. Él solía

derrotar a estas pequeñas bandas de guerrilleros en Galilea, él trajo paz verdadera allí. Era

muy eficiente al recolectar impuestos para Roma, entonces Roma lo quería. Él era capaz de

poner las cosas en orden y un diplomático muy sutil.

La historia nos dice que él era un líder muy decisivo y determinante en la batalla y él podía

cambiar el curso de una batalla de la derrota a la victoria. Él fue el único gobernante en la

historia de Palestina que inclusive tuvo éxito en mantener la paz y traer orden. En tiempos de

dificultad, él le dio a la gente de regreso su dinero de impuestos para que pudieran tener lo

20  

suficiente. En el año 25 a. C., hubo un hambre tremenda y él derritió las placas de oro en el

palacio y les dio el dinero a los pobres. Él era un hombre sutil y era un hombre inteligente y

hacia lo que podía para que el pueblo lo quisiera.

Él fue un gran arquitecto. Un gran constructor. Él construyó un teatro en Jerusalén. Construyó

un anfiteatro y construyó un hipódromo. Un lugar donde corrían carreras. Y también construyó

un palacio magnífico para sí mismo y comenzó en el año 19 a. C. la construcción del templo.

El gran templo herodiano. Y él murió mucho antes de que lo concluyeran. Y claro, fue

totalmente demolido en el año 70 d. C. cuando Tito Vespasiano y su ejército romano vinieron

y conquistaron a Jerusalén.

Él restauró a Samaria de su situación depravada. Él construyó la ciudad de Cesárea, como

una magnífica ciudad de puerto. Él mejoró y renovó ciudades como Beirut, Antioquía,

Damasco, Tiro, Sidón, Rodas e inclusive hizo contribuciones a los edificios en Atenas. Él

construyó una fortaleza en Masada, la cual fue una feroz fortaleza inexpugnable. Él tuvo un

gran programa de beneficios sociales y cuando el pueblo tenía problemas en encontrar ropa,

él importó ropa para ellos. Entonces, él hizo cosas para quedar bien con el pueblo, porque era

un político inteligente.

Pero él también fue cruel, diabólico y maniático. Todos los historiadores están de acuerdo con

esto. Y esta es la primera línea de todo artículo que leí acerca de Herodes. Herodes era

increíblemente celoso y él sospechaba de todo el mundo. Él se sentía amenazado por todo el

mundo y todas las cosas y entonces, pasó tu vida entera tramando el asesinando de las

personas. Él estaba tramando asesinatos constantemente. Él no quería a asmoneos, quien

era una familia de personas y entonces, tramó asesinarlos a todos ellos. Ellos eran los

descendientes de los macabeos; y usted recordará que los macabeos eran un grupo de

personas judías que había peleado por la libertad en contra de los griegos y cuando llegaron

los romanos, él temía que los parientes de los macabeos hicieran lo mismo en contra de él. Y

entonces, él simplemente prefirió matarlos a todos para que ninguno de ellos tuviera

esperanza alguna de llegar a hacer eso.

Él tuvo diez esposas y doce hijos. Y su esposa más conocida fue una en señora llamada

21  

Mariamna. No porque fuera importante, sino para que usted sepa, quizás en algún momento

puede ver la historia. Mariamna tenía un hermano. Su hermano se llamaba Aristóbulo y

Aristóbulo era el sumo sacerdote cuando él estaba en el poder, cuando Herodes estaba en el

poder. Y él tenía tanto miedo de Aristóbulo que decidió asesinarlo. Él es el hermano de su

esposa.

Entonces, en un día cuando hacía mucho calor, dijo que iban a tener una fiesta en Jericó.

Jericó era como Palm Springs. Usted va ahí a Jericó, al monte de Jericó, un lugar turístico,

hermosas palmeras, había agua agradable, buen sol. Era un lugar fabuloso. Entonces, en un

día caliente, él lo invito para nadar en el río Jordán, cerca de Jericó. Y la familia motivó el

joven para que se metiera el agua. Y cuando lo hizo, claro, tenía otros hombres que lo

esperaban pretendiendo jugar con él y se metieron al agua. Y mientras que ellos pretendían

jugar con Aristóbulo, lo mantuvieron ahí abajo del agua hasta que lo ahogaron y murió.

Realmente, nunca nadie supo lo que pasó y entonces Herodes proveyó un funeral magnífico;

y fue al funeral y lloró todo el tiempo. Inclusive él mató a su propia esposa, Mariamna. Él

también mató a la madre de ella porque no quería que lo molestara, Alejandra. Él tuvo dos

hijos que no le caían bien y entonces, mató a los dos porque temía de que ellos quisieran

quitarle el trono.

Cinco días antes de su muerte, él ordenó que su tercer hijo fuera ejecutado. Él tenía un

hambre de poder, sospecha, un deseo maníaco de vengarse que esclavizó al hombre todos

los días de su vida. Fue un hombre cruel, sediento de sangre, un tirano controlado por el

pánico. Y fue conocido como un asesino. La culminación de esta caracterización tuvo que ser

esto. Cuando él iba a morir. Digo, él sabía que iba a morir en una cuestión de días y entonces,

se retiró a Jericó. Y él dio órdenes de que se hiciera una colecta de los ciudadanos más

distinguidos de Jerusalén, que los trajeran a todos, los arrestaran e inventaran cargos contra

ellos, los encarcelaran. Todos los ciudadanos judíos más distinguidos de la ciudad y dijo: “En

el momento que muera, mátenlos a todos.” Y le preguntaron por qué. Y él dijo “porque nadie

llorará cuando yo muera. Y quiero que cuando yo muera, lloren en esta ciudad.”

Ahora, cuando estos magos llegan a la ciudad preguntando dónde está el rey de los judíos

que ha nacido, en la Biblia dice que se turbó. Él se turbó. Esto era lo que le turbaba más que

22  

nada, una amenaza a su poder. Y realmente, estaba agitado. Y esto me parece tan

interesante, el contraste entre la paz en los corazones de los magos y el pánico en el corazón

de Herodes. Y quizás esto es porque eran hombres sabios. Y había necios, y Herodes fue un

necio.

El doctor Gaeblein dice, y cito: “La gran ciudad con sus magníficas instituciones religiosas, su

maravilloso templo herodiano, todavía en el proceso de ser construido, su sacerdocio

aristocrático y sus instituciones benevolentes no tuvo conocimiento del Rey. No deseaban que

el Rey viniera. Ellos estaban satisfechos consigo mismos. Esto apunta a la historia entera del

rechazo del Rey. El Señor del cielo. No hubo lugar para Él en la posada, y tampoco hubo

lugar para Él entre los Suyos. No lo recibieron. Y Herodes, el rey, estaba turbado y toda

Jerusalén con él. Él temía por su trono el cual no era de él; y Jerusalén sabía que el temor de

Herodes significaba rebelión. Baño de sangre y sufrimiento.” Fin de la cita. De cierto, tiene

razón.

Lo que él está diciendo es que la razón por la que todo el mundo estaba enojado era porque

sabía qué tipo de hombre era Herodes y temían lo que sucedería. Y permítame decirle algo:

tenían el derecho de temer porque no fue sino una cuestión de días hasta que Herodes

mandó a sus soldados a matar a todo bebé en la tierra que tuviera menos de dos años de

edad, para asegurarse de matar a este rey potencial. Y esta es la razón por la que Jerusalén

se turbó. Esto es emocionante, ¿no es cierto? Oremos.

Padre Nuestro, estamos emocionados cuando vemos la Palabra de Dios abierta a nuestro

entendimiento. Y nuestro gozo viene porque anhelamos tan profundamente comprender Tu

Palabra. Y hay cierto sentido de emoción que viene con ese entendimiento. Pero nosotros

confesamos, Padre, que no hay una emoción en absoluto, que no hay gozo en absoluto

cuando nos damos cuenta de todo lo que esto significó. Miramos atrás y vemos a un hombre

como Herodes que ahora arde en el infierno eterno. Miramos hacia atrás y vemos a los

principales sacerdotes y a los escribas, a los ancianos del pueblo, ahora perdidos para

siempre y reconocemos que cuando el Rey vino, ellos no lo quisieron. Ellos no lo conocieron.

Ellos no se preocuparon por investigar. Y aún cuando 30 años más tarde llegó a Su ciudad y

anunció quién era, ellos no lo querían.

23  

Padre, sabemos que es un poco diferente el día de hoy. Ahora, muchas personas dicen ser

cristianas, pero estoy seguro de que no todas lo son. Y estoy seguro de que hay muchos que

lo rechazan de una manera tan abierta y desafiante como lo rechazaron en esos días. No hay

gozo en un hombre como Herodes. Padre, en lo único que puedo pensar es lo que él pudo

haber sido. Si tan sólo hubiera sabido que en lugar de reinar por un tiempo en la tierra él pudo

haber reinado para siempre contigo. Si tan sólo él hubiera sabido que en lugar de tener que

vengarse constantemente, él podría haber confiado en Ti y Tú habrías sido su vengador, si

alguien le hubiera hecho algo malo. En su búsqueda de paz, si él tan sólo hubiera sabido que

Tú eres el Príncipe de Paz.

Sólo podemos imaginar el tormento de un alma así en el infierno, con todo lo que debió haber

recordado acerca del asesinato y la matanza. Y no hay gozo en eso. Entonces Padre,

tenemos emociones encontradas en nuestros pensamientos en esta noche. Agradecidos por

entender mejor Tu Palabra y sin embargo, al mismo tiempo, tristes cuando nos damos cuenta

de lo que realmente dice. Y sin embargo, Padre, no podemos evitar el sentir una afinidad

profunda con algunos hombres con quienes sin duda alguna pasaremos la eternidad, aquellos

que la Biblia llama magos. Un remanente desde lejos que creyó, que se convirtió en Tu

pueblo. Gracias por ello, Padre. Ayúdanos a enfocarnos en el hecho de que toda la

humanidad está dividida en esas dos áreas: aquellos que rechazan y aquellos que creen.

Ayúdanos a reconocer que ése es el factor determinante de que divide el destino.

Y simplemente oro en esta noche Señor que nadie salga de este lugar que no sea creyente.

Que nadie salga de este lugar para tomar su lugar con Herodes o con los escribas y fariseos

indiferentes. Que todos nos alineemos con emoción y gusto y bendición adorándote a Ti,

postrados a los pies de Aquel que murió y resucitó para que nosotros viviéramos. Nuestro

Señor Jesucristo, en cuyo nombre oramos. Amén.

Disponible sobre el Internet en: www.gracia.org

DERECHOS DE AUTOR © 2015 Gracia a Vosotros

24  

Usted podrá reproducir este contenido de Gracia a Vosotros sin fines comerciales de acuerdo

con la política de Derechos de Autor de Gracia a Vosotros.