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PRIMERA UNIDAD: PRINCIPIOS DE LO MICROORGANISMOS EFICIENTES NATIVOS DEL DESIERTO (MENDE) Y SU APLICACIÓN PARA EL MEJORAMIENTO DE LA FERTILIDAD DE LOS SUELOS AGRICOLAS Y LA SANIDAD DE LOS CULTIVOS.

¿QUÉ SON LOS MICROORGANISMO EFICIENTES NATIVOS DEL DESIERTO (MENDE)?

En un suelo degradado debido al abuso de agroquímicos, la actividad de los microorganismos

es casi ausente mientras que en un suelo fértil, la fauna y la flora microbiana presentes son las

encargadas de regular los procesos de intercambio entre el suelo y las plantas.

Las bondades de los microorganismos pueden ser aprovechadas, bajo el enfoque de la

agricultura ecológica, para dinamizar el proceso de transición de los suelos degradados hasta

conseguir la restauración del equilibrio biológico del suelo.

El uso de la tecnología de microorganismos para la agricultura fue desarrollada en los años 80

por un japonés, el Dr. Teruo Higa y fue ganando popularidad a través de los productos

comerciales elaborados en laboratorios y conocidos como EM (Microorganismos Eficaz). Por

otro lado, se está desarrollando una tecnología para reproducir los microorganismos que viven

naturalmente en nuestros suelos del desierto. Estos microorganismos son llamados

comúnmente “Microorganismos Eficientes de Desierto” o MENDE casero fácil de implementar

y a un bajo costo.

Muchos de estos MENDE cumplen roles benéficos en los procesos biológicos de los suelos y

agroecosistemas, y pueden ser encontrados en la capa superficial y orgánica de todo suelo de

un ecosistema natural donde no haya habido intervención depredadora del hombre.

¿QUÉ FUNCION CUMPLEN EN EL ECOSISTEMA DEL SUELO?

Descomponen la materia orgánica.

Compiten con los microorganismos dañinos.

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Reciclan los nutrientes para las plantas.

Fijan el nitrógeno en el suelo.

Degradan las sustancias tóxicas (pesticidas).

Producen sustancias y componentes naturales que mejoran la textura del suelo.

¿CUÁLES SON ESTOS MICROORGANISMOS?

Conforme al orden natural, el mundo microbiano se puede clasificar, de una manera genérica,

en tres grupos: el grupo de microorganismos regeneradores, el de los desintegradores, y el de

los neutrales. La vida natural es un sistema cambiante, diverso y colectivo. Del mismo modo, el

mundo microbiano está formado por una gran diversidad biológica, entre los que se

encuentran las bacterias, levaduras y hongos, que se organiza en comunidades creando

biotopos estables. Estos biotopos no permiten la reproducción excesiva de colonias

individuales, ya que los microbios siguen al grupo que domina, organizando colectivamente el

medio. Los microorganismos que están presentes en esta tecnología son del grupo de los

regeneradores, siendo capaces de proteger el equilibrio y la salud del medio natural, de

detener, directa o indirectamente, el proceso de descomposición y putrefacción en todas las

sustancias, y de generar sustancias bioactivas.

Los MENDE contienen un promedio de 80 especies de microorganismos de unos 10 géneros,

que pertenecen básicamente a cinco grupos: bacterias fototróficas o fotosintéticas, bacterias

ácido lácticas, levaduras, actinomicetos y hongos de fermentación. Estos microorganismos son

muy conocidos, puesto que se llevan utilizando en medicina y en la producción de alimentos

desde la antigüedad, siendo muy beneficiosos para los suelos, agua, plantas, animales y, por

supuesto, para el ser humano.

1. Bacterias fotosintéticas:

Las bacterias fototróficas o fotosintéticas se encuentran en el arroz, en las algas verdes y en

cualquier componente del suelo. Son microorganismos autosuficientes que aprovechan la luz

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solar y el calor del suelo como fuentes de energía para sintetizar las sustancias beneficiosas

generadas por la segregación de las raíces, materia orgánica o gases nocivos (como el sulfuro

de hidrógeno). Las sustancias útiles que sintetizan las bacterias fototróficas son ácidos

nucleícos, aminoácidos, sustancias bioactivas y azúcares. Estos metabolitos o moléculas

producidas durante el metabolismo son asimilados directamente por la planta fomentando su

crecimiento. Además, al actuar como sustratos permite el crecimiento de las bacterias

fototróficas en los suelos, lo que favorece la multiplicación de los demás microorganismos

eficientes.

La actuación de la bacteria fotosintética o fototrófica segrega sustratos que, por ejemplo,

incrementan las reservas de aminoácidos o componentes nitrogenados, los cuales generan a

su vez un aumento de la cantidad de VA (vesicular / arbuscular) micorriza. La VA micorriza

proporciona fósforo a la plantas e intensifica la solubilidad de los fosfatos en los suelos, y

además mejora la disposición para asentar el nitrógeno, puesto que puede coexistir con el

Azotobacter como bacteria fijadora de nitrógeno.

2. Actinomicetos:

Los actinomicetos o actinobacterias son una categoría de bacterias Gram positivas. Tienen una

estructura intermedia entre las bacterias y los hongos, y contienen varias de las formas más

características de la vida en la Tierra. Generalmente, los actinomicetos están en la tierra y

desempeñan una función ecológica esencial en la descomposición de la materia orgánica,

reciclando las reservas de nutrientes en la tierra y creando el humus. A partir de los azúcares y

aminoácidos que producen las bacterias fotosintéticas y la materia orgánica, los actinomicetos

generan sustancias antimicrobianas que pueden eliminar hongos perjudiciales y

microorganismos patógenos. Los actinomicetos y las bacterias fotosintéticas pueden coexistir,

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de modo que las dos especies juntas aumentan la actividad microbiana, regenerando la calidad

de la tierra.

3. Bacterias productoras de ácido láctico:

La bacteria del ácido láctico se utiliza para elaborar alimentos y bebidas, como el queso, yogurt

o pickle, desde hace mucho tiempo, porque generan ácidos a partir de azúcares y

carbohidratos derivados de las bacterias fototróficas y las levaduras. El ácido láctico producido

por esta bacteria, al ser un eficaz esterilizador, es capaz de atacar a los microorganismos

nocivos y estimular la descomposición de la materia orgánica. Además, favorecen la

fermentación de materiales, como la celulosa, impidiendo que se produzcan daños por la

putrefacción de estos materiales. Otra capacidad muy importante de la bacteria ácido láctica

es la de eliminar la proliferación del fusarium (microorganismo patógeno que causa

enfermedades en los cultivos). El aumento de colonias de fusarium hace que la planta sea más

débil, lo que provoca la aparición de nematodos. Con la intervención de las bacterias de ácido

láctico, se eliminan los fusarium y, con ellos, los nematodos.

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4. Levaduras:

Las levaduras son usadas para elaborar pan, cerveza, vino, etc. Son hongos microscópicos

unicelulares capaces de descomponer materias orgánicas a través de la fermentación,

especialmente hidratos de carbono o azúcares, generando diferentes sustancias. Las levaduras

sintetizan y utilizan las substancias antimicrobianas que intervienen en el crecimiento de las

plantas, a partir de los azúcares y aminoácidos producidos por las bacterias fotosintéticas, así

como las de la materia orgánica y de las raíces de las plantas. Las levaduras producen

sustancias bioactivas, como las enzimas y hormonas que aumentan la actividad celular y la

cantidad de raíces. Además, segregan substratos que son útiles a determinados

microorganismos efectivos, como los actinomicetos y las bacterias productoras del ácido

láctico.

5. Hongos de fermentación:

Los hongos de fermentación, como el Aspergillus y la Penicilina, son capaces de descomponer

rápidamente la materia orgánica, produciendo esteres, alcohol y sustancias antimicrobianas.

Este proceso genera la desodorización y evita la aparición de gusanos e insectos nocivos.

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¿QUÉ ES LA RIZOSFERA Y SU RELACION CON LOS MENDE?

La rizósfera es una parte del suelo inmediata a las raíces donde tiene lugar una interacción

dinámica con los microorganismos. Las características químicas y biológicas de la rizósfera se

manifiestan en una porción de apenas 1 mm de espesor a partir de las raíces.

En un sentido más amplio, la rizósfera se puede considerar como la porción de suelo en la que

están las raíces de las plantas, ya que es un zona donde se dan toda una serie de relaciones

físicas y químicas que afectan a la estructura del suelo y a los organismos que viven en él,

proporcionándole unas propiedades diferentes.

Se pueden destacar tres características de la rizósfera:

Presencia de numerosos organismos en mayor densidad que en el suelo normal, como

pueden ser bacterias, hongos y microfauna (por ejemplo nematodos, ácaros, insectos).

Estabilidad de las partículas de suelo, tanto por la acción mecánica de las raíces, como por

la acción agregante de los exudados de los diferentes organismos presentes (plantas y

microorganismos).

Es el lugar de destino de carbohidratos productos de la fotosíntesis y que, las plantas

exudan por sus raíces para proveer energía a los microorganismos, quienes en retribución

protegen a las raíces de organismos patógenos y además solubilizan minerales

haciéndolos más asimilables. Se estima que al menos un tercio de los fotosintatos son

exudados para este propósito.[cita requerida]

La rizósfera provee un complejo y dinámico microambiente, donde bacterias y hongos, en

asociación con las raíces, forman comunidades únicas con un considerable potencial para la

detoxificación de compuestos orgánicos nocivos. Está controlada por la misma raíz a través de

exudados secretados en el sustrato cercano. Esos exudados se pueden clasificar en:

1) Compuestos volátiles como el CO2,

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2) Compuestos de alto peso molecular como mucílago y proteínas, y

3) Compuestos de bajo peso molecular que incluyen aminoácidos, carbohidratos, ácidos

orgánicos y metabolitos secundarios (e.g. citoquininas).

La rizósfera de una misma planta puede variar drásticamente como resultado de la producción

de diferentes tipos de exudados. Gracias a esos exudados se pueden establecer diferentes

interacciones microorganismo-raíz que afectan positiva o negativamente el crecimiento de las

plantas. Entre los organismos que participan positiva o negativamente en el crecimiento de las

plantas podemos distinguir:

Hongos: Forman interacciones de simbiosis con las raíces de plantas que favorecen la

ingesta de nutrientes, la tolerancia a heladas y la protección en contra de patógenos. Se

conocen como micorrizas y son redes de comunicación física que permiten el movimiento

de nutrientes entre hongos y plantas, e incluso entre plantas a través de los micelios. Un

ejemplo de esto son las micorrizas entre Vicia faba y Glomus intraradices que, a través de

redes miceliales establecen un puente de comunicación entre plantas, permitiendo a las

plantas que han sido atacadas por áfidos enviar señales para prevenir a las plantas vecinas

que no han sido atacadas.

Bacterias: Con las cuales pueden inducir la formación de nódulos radiculares, facilitar la

germinación de la planta o promover la adquisición de minerales, agua y fósforo.

Nemátodos: Pueden consumir tejidos de plantas o facilitar su descomposición.

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SEGUNDA UNIDAD: UBICACIÓN, IDENTIFICACION, CAPTURA Y PREPARACIN DE MICROORGANISMOS EFICACES NATIVOS DEL DESIERTO, PARA SU APLICACIÓN A LOS SUELOS AGRÍCOLAS, A LOS CULTIVOS Y PARA LA ELABORACION DE BIOFERMENTOS.

¿DÓNDE PODEMOS ENCONTRAR LOS MENDE PARA SU EXTRACCIÓN?

Los MENDE por su naturaleza se desarrollan mejor en ecosistemas donde no haya habido

acción del ser humano, por ello se recomienda buscar MENDE en bosques naturales de árboles

nativos como el molle, el algarrobo, la tara, el chañal, tamarix, carzo, yaro, queñua, colle, aliso,

chalsa, jojoba nativa, etc.

Además, en segunda prioridad se recomienda probar en plantas herbáceas de naturaleza

frondosa como el tiquil tiquil, el callacaz, campanilla, tomate silvestre, grama salada, etc.

En tercera opción se puede consideras cultivos frutales que hayan tenido un manejo orgánico,

donde no se haya aplicado ningún tipo de productos químicos que hayan disturbado las

poblaciones nativas de microorganismos del suelo. Se tiene muy buenas experiencias en olivo,

palto, naranjas, granado, higuera, pacae, etc.

¿CÓMO SE EXTRAEN O CAPTURAN LOS MICROORGANISMOS EFICIENTES NATIVOS?

Los insumos y materiales necesarios para realizar la captura y extracción de MENDE son los

siguientes:

Materiales e Insumos (para 5 litros de MENDE Madre)

- 150 gr de arroz

- 1 Kg de melaza

- 1 litro de leche

- 120 gr de levadura seca

- 4 cucharadas de azúcar rubia

- 1 litro de concho de chicha (solo si no se cuenta con

levadura)

- 3 litros de agua sin cloro

- 10 peponas cortadas en su base

- 10 trozos de tela delgada limpia

- 10 ligas

- 1 balde de 20 litros

- 1 balde de 4 litros

- 1 licuadora

- 1 cuchara de madera

- 1 vaso graduado de 1 litro

- 1 olla pequeña

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Preparación

1. Preparación de los depósitos de captura

- Se cortan las bases de 10 envases de gaseosa de 2 litros de plástico descartable, que

tengan un alto de 12 cm.

- Estos depósitos ya cortados, se lavan bien con lejía y con jabón, y se dejan secando en

un lugar limpio.

- Se cortan 10 trozos de tela fina tratando de que su área cubra satisfactoriamente la boca

de los envases de gaseosa cortadas y permitan ser atados o sujetados en la parte

superior.

- Se cocina el arroz solo con agua y sin ningún aderezo o sal, agregando el agua suficiente

para que el arroz se cocine y no se deshaga.

- Una vez listo el arroz se procede a colocarlo dentro de los depósitos de captura (envases

de gaseosa cortados y limpios), un promedio de 100 gr de arroz cocido por envase.

- Se procede a tapar los envases con las telas previamente cortadas.

- Se amarra o se sujeta con un hilo o una liga de jebe.

- De esta forma ya están listas para ser colocadas en los sitios de recolección.

2. Captura y recolección de MENDE

- Buscar sitios apropiados, tal como se dijo anteriormente, de preferencia ir a bosques de

especies nativas como el molle, el algarrobo, la tara, el chañal, tamarix, carzo, yaro,

queñua, colle, aliso, chalsa, jojoba nativa, etc.., donde estemos seguros no haya sido

intervenido por la mano del hombre, lo más natural posible.

- Además, en segunda prioridad se recomienda probar en plantas herbáceas de

naturaleza frondosa como el tiquil tiquil, el callacaz, campanilla, tomate silvestre,

grama salada, etc.

- En tercera opción se puede consideras cultivos frutales que hayan tenido un manejo

orgánico, donde no se haya aplicado ningún tipo de productos químicos que hayan

disturbado las poblaciones nativas de microorganismos del suelo. Se tiene muy buenas

experiencias en olivo, palto, naranjas, granado, higuera, pacae, etc.

- Una vez seleccionado los árboles, arbustos o plantas donde colocar los depósitos de

captura, se procede a limpiar un poco la zona y hacer el agujero donde calce el depósito

satisfactoriamente.

- Dejar unos 2 centímetros de borde superior del suelo para poder tapar el depósito de

captura con la tierra y la materia orgánica del lugar.

- Es importante verificar que la tela que cubre al depósito no se haya movido, sino que se

mantenga firme, esto para evitar posteriores problemas con el desplazamiento de la

tela y el ingreso de tierra, agua o insectos que malogren el sustrato de captura.

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- Se recomienda dejar el depósito en el lugar de captura como mínimo 5 y como máximo

7 días, después de lo cual se debe de proceder a realizar el recojo del depósito de

captura de MENDE.

- Finalmente siempre se debe dejar alguna señal para ubicarnos al volver a recoger los

depósitos de captura.

3. Recojo de los depósitos de captura de MENDE

- Pasados los 5 ó 7 días se procede a ir a recoger los depósitos de captura, para ello

debemos de llevar cajas de cartón o de plástico para colocar los depósitos sin dañarlos

y perjudicar su interior.

- Como se ha marcado con una señal los lugares donde se colocaron los depósitos de

captura, va ser fácil reconocer los sitios de recojo de los depósitos.

- Es importante retirar con mucho cuidado el material que cubre los depósitos para

evitar mover las telas de cobertura y que se dañe el arroz con los microorganismos

capturados.

- Entonces primero se retira el material de cobertura consistente en tierra y material

orgánica en descomposición.

- Segundo se limpia la tela de cobertura del polvo y la tierra, y se procede a retirarla para

verificar la situación del arroz con los microorganismos.

- En tercer lugar se colocan los depósitos en la caja para trasladarlos al lugar donde se va

a realizar una inspección más detallada de los envases y su contenido, para verificar la

correcta colonización con microorganismos.

- Para identificar las colonias de microorganismos se requiere un poco de práctica para

reconocer una correcta colonización de una que esta con problemas y que debe de ser

descartada.

- Por los colores y los olores de las colonias podemos reconocer una buena o una mala

colonia de microorganismos.

- La tabla que a continuación se muestra, nos da unas claves básicas para identificar los

tipos de colonias de microorganismos que han colonizado nuestro arroz de captura,

esta información también nos puede servir para diagnosticar la situación de nuestros

suelos con respecto a su riqueza microbiológica.

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Colores Tipo de Microorganismos Observaciones

Blanco y crema.

Bacterias benéficas de los grupos de Autotróficas, Lactobacilos y otras.

Amarillo, naranja, rojo, rosado.

Hongos del grupo de los Fusarium, catalogados dentro de los microorganismos que ocasionan muchas enfermedades de los cultivos.

Negro granuloso

Bacterias del grupo de actinomicetos, beneficiosas.

Verde Hongos del grupo de las Trichodermas, antagónicos de muchos hongos patógenos del suelo, benéficos.

4. Preparación de MENDE Madre

- Una vez identificadas y evaluadas las colonias de microorganismos capturados, se

procede a la preparación de los MENDE Madre, que viene a ser los microorganismos

concentrados, que van a servir para preparar posteriormente los MENDE activado, que

son los que irán al campo a cumplir su labor.

- Para producir 5 litros de MENDE Madre, se debe de contar con los siguientes materiales

e insumos:

03 depósitos de captura con arroz y microorganismos 01 litro de leche o suero de leche 120 gr de levadura de pan 01 kg de melaza 04 cucharadas de azúcar rubia 02 litros de agua sin cloro 01 litro de agua sin cloro tibia a 35º C. 01 licuadora 01 balde de 4 litros 01 balde de 20 litros 01 cuchara

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- En una licuadora colocar el contenido de los tres depósitos (arroz con microorganismos),

y con un litro de agua sin cloro proceder a licuarlo hasta obtener una pasta fina.

- Paralelamente deberá de ir preparando la levadura, en el balde de 4 litros, echar un litro

de agua sin cloro tibia y disolver las 4 cucharadas de azúcar rubia, luego de ellos disolver

los 120 gr de levadura y dejarlo reposar para que la levadura se active.

- En el balde de 20 litros agregar los 2 litros de agua sin cloro, y en ella disolver el kilo de

melaza, hasta que la melaza se haya disuelto completamente.

- Agregar al balde de 20 litros el batido del arroz y los microorganismos, y la leche o suero

de leche.

- Verificar si al levadura ya esta activa, si es así, también se debe de agregar a la mezcla

del balde de 20 litros.

- Mezclar todos los ingredientes, tapar y dejar en lugar sombreado y fresco por 5 a 7 días

para que los microorganismos se reproduzcan en un medio anaeróbico.

¿QUÉ ES LA ACTIVACION, Y CÓMO SE ACTIVAN LOS MENDE?

La activación es el proceso mediante el cual vamos a permitir una mayor propagación y

multiplicación de los microorganismos eficientes, utilizando los medios, las condiciones y los

envases apropiados, lograremos tener MENDE en condiciones optimas para realizar su trabajo

en campo, tanto para la elaboración de compostajes, violes, biofermentos, para la inoculación

de campos agrícolas, para la mineralización de la materia orgánica, etc.

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La activación de los MENDE se realiza de la siguiente manera:

Materiales:

- Para activar 20 litros de MENDE activo se necesitan:

- 1 litro de MENDE Madre

- 1 Kg de Melaza

- 18 litros de agua sin cloro

- 1 balde o galonera de 20 litros

Procedimiento:

- En un balde de 20 litros, se debe agregar 18 litros de agua sin cloro, de preferencia el agua

de riego de su parcela.

- Agregar 1 kilo de melaza y disolver completamente en los 18 litros de agua.

- Agregar 1 litro de MENDE madre, y mezclar en el agua con melaza.

- Completar el volumen hasta los 20 litros, tapar y dejar reposar bajo sombra por 5 a 7 días.

- Pasado el tiempo de reposo correspondiente, se procede a almacenar los MENDE activo en

frascos o botellas descartables de gaseosa de 1, 2 o 3 litros, tapado al ras de volumen y

almacenado bajo sombra, hasta por tres meses.

- Se recomienda usar los MENDE de manera inmediata y no guardar por mucho tiempo,

porque hacen mayor falta en los terrenos de cultivo.

¡CÓMO, PORQUE Y DONDE SE USAN Y APLICAN LOS MENDE?

Los MENDE tienen una amplia aplicación en los campos de cultivo, y van a contribuir

eficazmente a mejorar la sanidad y la productividad de las cosechas, y la inversión es muy baja

debido a la facilidad con que se puede obtener y multiplicar estos microorganismos benéficos.

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El uso de microorganismos para mejorar los suelos es la más nueva opción con que hoy

cuentan los agricultores. Su presencia es indispensable para el desarrollo de las demás formas

de vida, aunque los agricultores y productores pecuarios convencionales los perciban como

perjudiciales, pues consideran que causan la mayoría de las enfermedades en sus cultivos y

animales.

La realidad es totalmente diferente, pues solo el 3% de todas las bacterias y hongos conocidos

por el ser humano son perjudiciales, el restante 97% aportan amplios beneficios a los sistemas

naturales y a los sistemas productivos.

Las bacterias y los hongos se alimentan de materia orgánica e inorgánica y en pocas horas se

multiplican a gran escala en las zonas más cercanas a las raíces de las plantas, ayudándolas a

desarrollar sus principales funciones, que terminan por favorecer a los cultivos, de estas

funciones destacamos las siguientes:

Descomposición de la Materia Orgánica: El suelo queda cargado de minerales y muchos otros

nutrientes que alimentan a los microorganismos y a los cultivos.

Control biológico de patógenos: Los microorganismos benéficos que se multiplican a gran

escala, compiten y suprimen patógenos como Fusarium, Phytium y Rhizoctonia, causantes de

enfermedades extendidas por todo el mundo.

Fijación de Nitrógeno: Ciertos microorganismos toman el nitrógeno del aire en sus

organismos, lo procesan y lo transfieren a las raíces de los cultivos.

Regulación del crecimiento de las plantas: Muchos microorganismos elaboran sustancias que

estimulan el aumento de la cantidad y el tamaño de las raíces y de otros tejidos y órganos

vegetales.

Retención de la humedad: Esta cualidad les permite a los cultivos tolerar por más tiempo

condiciones de sequía.

El uso continuado de MENDE es una forma sostenible de producción agrícola. Para el agricultor

resulta con el aumento de sus cosechas y sin tener que recurrir a la perniciosa costumbre de

aplicar pesticidas y fertilizantes químicos, por lo que garantizamos un menor costo de

producción y una mayor rentabilidad, siendo la mayor ganancia, la recuperación de la fertilidad

natural de sus terrenos de cultivo.

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¿Cómo actúan los MENDE en el suelo agrícola?

Cuando los MENDE son aplicados al suelo,

las raíces de los cultivos emiten sustancias

nutritivas a través de sus raíces, sustancias

que son muy apetecibles para los

microorganismos, los MENDE

inmediatamente empiezan a alimentarse de

estas ricas sustancias alimenticias.

Al aprovechar estos nutrientes, los MENDE

en pocas horas comienzan a multiplicarse y

la vida del suelo empieza a revitalizarse

intensamente. Los microorganismos

patógenos de las plantas como hongos y

bacterias empiezan a perder espacio y se

reducen sus poblaciones en el suelo,

porque no pueden competir con las

enormes poblaciones de los MENDE.

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Una elevada población de MENDE

en el suelo, va a producir a la vez

grandes cantidades de vitaminas,

ácidos orgánicos, minerales,

hormonas y enzimas, que estimulan

el buen crecimiento de los cultivos.

Los MENDE toman el nitrógeno del

aire y lo transfieren a las raíces de

las plantas, a esto se llama fijación

del nitrógeno y fertilización

indirecta de los cultivos.

El uso de los MENDE debe de ser

acompañada de una buena aplicación de

materia orgánica (MO), lo cual va permitir

el buen desarrollo de los microorganismos,

y no solo de ellos, sino de organismos más

grandes como las famosas lombrices de

tierra.

Juntos, MO, MENDE y macroorganismos

son los que van a ayudar a mejorar las

propiedades físicas, químicas y biológicas

del suelo.

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Los MENDE aceleran la descomposición de la

materia orgánica (MO). Así el suelo se carga

de minerales y de otros elementos que

mejoran su equilibrio natural y restablecen la

vida en el suelo, para beneficio de los

cultivos.

Los MENDE mejoran la

estructura del suelo, le agregan

partículas, aumentan los

espacios porosos y mejoran la

infiltración del agua.

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Todos los fertilizantes

químicos, especialmente los

ricos en nitrógeno, provocan

un alto grado de oxidación,

que se manifiesta a través de

la formación de moho y sarro

en el suelo. La oxidación

destruye bacterias, hongos,

algas y todo ser vivo presente

en la materia orgánica.

En cambio, los MENDE

producen antioxidantes,

sustancias que combaten esa

oxidación y restablecen la vida

del suelo.

Los MENDE mejoran los mecanismos de

resistencia natural de las plantas a las

plagas y enfermedades, fenómeno que

se ubica dentro de la Trofobiosis.

Además de que muchos micro y macro

organismos resultan ser antagónicos a

plagas y enfermedades. Inclusive existen

fenómenos de microorganismos que

atacan insectos, nematodos y otros

agentes causales de daño en los cultivos.

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Los MENDE mejoran el desarrollo radicular y foliar de los cultivos, incrementando su capacidad

de aprovechar mejor el agua y los nutrientes en el suelo y un mejor aprovechamiento de la luz

solar en la parte foliar, lo que se ve reflejado en una mejor producción tanto en cantidad como

en calidad.

Por sus evidentes efectos en las zonas responsables del crecimiento y desarrollo de las plantas,

los MENDE mejoran, la floración, la fructificación y la maduración de los cultivos.

Los suelos donde se aplican los MENDE,

obligatoriamente tienen que recibir una

buena aplicación de materia orgánica, que

incluya restos de cosecha, restos de

malezas, de podas, abonos verdes, estiércol

y otros.