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El abc de la BibliaA Dios Sea La Gloria

Por: Fernando Regnault --Todos Los DerechosReservados // www.m.abcdelabiblia.com

Los Fariseos y la JusticiaSu Justicia.

El Señor Jesús habloduramente a los fariseos y escribas,pero sin embargo también declaró queellos poseían cierta justicia, usando estopara exhortar a la Iglesia con lassiguientes palabras: “20 Porque os digoque si vuestra justicia no fuere mayorque la de los escribas y fariseos, noentraréis en el reino de los cielos.”Mateo 5.20 La Iglesia tiene que sersuperior en justicia que los fariseos; estotiene que motivarnos a verconcienzudamente la vida de losfariseos, pues nadie quiere equivocarseen algo tan transcendente.



Tradicionalmente se haenseñado en la Iglesia que, la Ley deMoisés nadie la podía cumplir, pero laBiblia en realidad nos dice lo contrario,no estoy hablando una falsa doctrinasino que usualmente repetimos comoloros sin verificar de primera manocomo los creyentes de Berea, a ver si loque nos están enseñando es realidad, yomismo confieso que he hecho estoconfiándome en que lo dice alguien queha estudiado las escrituras y tiene unoscuantos títulos colgado en la pared,bueno amado hermano si Ud. ama sualma debemos de dejar de hacer esto yestudiar por nosotros mismos la Palabra,sabiendo que ella se interpreta a símisma y que todo lo que entendamos odescubramos tiene que armonizar con elresto de la escritura. Retomando el temapodemos decir, que la Palabra nos habla



de personas que cumplieron la Ley yfueron reconocidas por el mismo Señor,veamos: “5 Hubo en los días de Herodes,rey de Judea, un sacerdote llamadoZacarías, de la clase de Abías; su mujerera de las hijas de Aarón, y se llamabaElisabet.6 Ambos eran justos delante deDios, y andaban irreprensibles en todoslos mandamientos y ordenanzas delSeñor.” Lucas 1.5–6 Zacarías y Elisabetandaban irreprensibles, esta afirmaciónviene del Espíritu Santo que inspiró lasescrituras, ellos fueron escogidos por sufidelidad, la cual el Señor siemprepremia, también el propio apóstol Pablodice de sí mismo lo siguiente: “6 encuanto a celo, perseguidor de la iglesia;en cuanto a la justicia que es en la ley,irreprensible.” Filipenses 3.6 El apóstolse refiere a su vida de fariseo, el ahora essiervo de Jesucristo y con toda la



extraordinaria revelación que tuvo sobreel evangelio y la vida espiritual él haceeste comentario por circunstancias en suministerio que no vienen a nuestro tema.Tomando en cuenta estos dos casospodemos comprender lo dicho por elSeñor Jesús que sí había cierta justicia enlos fariseos y es que ellos se contentabancon cumplir las obras que le mandaba laLey, sin que el amor de Dios entrara ensus corazones, para ellos la fe es algodespreciable aun al día de hoy. Tuve laexperiencia de tratar de compartir con unjudío la fe de Jesús y tratando decomenzar por Abraham, le comentésobre el hecho que Abraham recibió lapromesa porque le creyó a Dios y esoimplica que la fe es importante, pues surespuesta fue, que la fe era “estúpida” yno tenía nada que ver con Dios, que erauna invención de los cristianos etc.



La Palabra dice que ellostropezaron precisamente por desecharla fe, veamos: “32 ¿Por qué? Porqueiban tras ella no por fe, sino como porobras de la ley, pues tropezaron en lapiedra de tropiezo,” Romanos 9.32 Nohabía conexión entre el corazón de ellosy su vida espiritual, ésta sólo se basabaen una cantidad de “cosas” que teníanque hacer para al final ser salvos, erancomo una carga, más que una expresiónde su amor por Dios. Realmente era unareligión que abarcaba todos los aspectosde su vida externa, nada salía delcorazón, sino todo era las ordenanzas dela Ley, podemos decir que no había unarelación entre ellos y Dios, salvohonrosas excepciones tales como:Abraham, David, Samuel, Daniel ymuchos más que captaron la esencia dela Ley y siguieron a Jehová Dios con la



actitud correcta y de eso nos daconfirmación por ejemplo el capítulo 11de la carta a los Hebreos, donde se hablade los héroes de la fe, comparando estoscon los que no entendieron el verdaderopropósito de la Ley. A través de lahistoria de Israel podemos ver que laproporción entre unos y otros es de milesa millones que iban tras la ley sin fe.

Dios es fiel a su Palabra yaunque la Ley no era el propósito finalde Dios para los hombres como podemosver: “19 Entonces, ¿para qué sirve laley? Fue añadida a causa de lastransgresiones, hasta que viniese lasimiente a quien fue hecha la promesa; yfue ordenada por medio de ángeles enmano de un mediador.” Gálatas 3.19 LaLey fue una añadidura para evitar que latierra se volviera a corromper como en



los días de Noé, “hasta que viniese lasimiente a quien fue hecha la promesa,”esta simiente es nuestro Señor Jesucristo.Ahora bien durante el periodo de la Leyel Señor prometió: “El que hiciere estascosas vivirá por ellas.” Sin exigir la fecomo requisito, aunque la fe estabaimplícita pero no como prioridad comoen la Gracia, veamos: “12 y la ley no esde fe, sino que dice: El que hiciere estascosas vivirá por ellas.” Gálatas 3.12Claro que al hacer las cosas así esto nollenaba sus corazones, estaban vacios,todo lo que hacían era externo y nolograba transformar el corazón de ellos,pero sí calmaba su conciencia al saberque estaban haciendo lo que Dios lesdemandaba. Tenemos el caso del jovenrico que le dice a Jesús que ha cumplidolos mandamientos de la Ley, veamos: “18Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas



bueno? Ninguno hay bueno, sino sólouno, Dios. 19 Los mandamientos sabes:No adulteres. No mates. No hurtes. Nodigas falso testimonio. No defraudes.Honra a tu padre y a tu madre. 20 Elentonces, respondiendo, le dijo:Maestro, todo esto lo he guardado desdemi juventud. 21 Entonces Jesús,mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa tefalta: anda, vende todo lo que tienes, ydalo a los pobres, y tendrás tesoro en elcielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz.”Marcos 10.18–21 Como podemos ver larespuesta del Señor al oír que este jovenguardaba los mandamientos fue unamirada de amor y no le refutó nada, estoimplica que el joven dijo la verdad, sólole dijo que si quería ser perfecto; serperfecto era algo que no estabaestablecido para que lo alcanzarán losque seguían la Ley, sino que sólo puede



ser alcanzado por el Espíritu Santo dadoa la Iglesia de Jesucristo. No estoydiciendo que todos los judíos eran así,pues está claro que había una clasedominante, entiéndase: fariseos ysaduceos que se habían corrompido a talpunto que habían perdido todasensibilidad; así lo dijo nuestro Señor: “2En la cátedra de Moisés se sientan losescribas y los fariseos.3 Así que, todo loque os digan que guardéis, guardadlo yhacedlo; mas no hagáis conforme a susobras, porque dicen, y no hacen.” Mateo23.2–3 se habían llenado de hipocresía,y fueron éstos quienes rechazaron aJesús y obligaron a muchos que no lerecibieran con amenazas de serexpulsados de sus sinagogas, a éstos elSeñor reprendió muy duramente cara acara.



Siempre hay un remanente.De la misma manera que entre losgentiles hay un remanente que ha oído lavoz del Pastor, así dentro del pueblo deIsrael había un remanente que temía aDios y aunque no entendía las figurasescondidas en la Ley, sin embargoguardaban los mandamientosreligiosamente, a estos les ofreció elSeñor: “12 y la ley no es de fe, sino quedice: El que hiciere estas cosas vivirápor ellas.” Gálatas 3.12 Les ofreció quesi hacían estas obras vivirían por ellas,también sabemos que la Palabra dice quenadie es justificado por las obras de laLey, veamos: “16 sabiendo que elhombre no es justificado por las obrasde la ley, sino por la fe de Jesucristo,nosotros también hemos creído enJesucristo, para ser justificados por la fede Cristo y no por las obras de la ley,



por cuanto por las obras de la ley nadieserá justificado.” Gálatas 2.16Pareciera una contradicción, pero¿alguno puede dudar que Daniel está conel Señor? o ¿puede alguien dudar queDavid está con el Señor? Ellos teníandentro de las ordenanzas de la Ley elsacrificar el cordero el cual era símbolode Jesucristo, y ellos eran rociados conesa sangre, así que ellos estabanamparados bajo el sacrificio deJesucristo, así como lo estuvieron enEgipto cuando la muerte de losprimogénitos, allí ellos sacrificaron uncordero y pusieron la señal de la sangresobre los dinteles de las casas para serprotegidos. Así el sacrificio de Cristotiene un efecto en el tiempo haciadelante y hacia atrás, pues en realidadnuestro Señor fue crucificado desdeantes de la fundación del mundo para



cubrir a todos, veamos: “8 Y la adorarontodos los moradores de la tierra cuyosnombres no estaban escritos en el librode la vida del Cordero que fue inmoladodesde el principio del mundo.”Apocalipsis 13.8 El sacrificio deJesucristo fue realizado al principio de lafundación del mundo, el Señor loestableció allá en el principio de lostiempos, y aunque no se habíaconcretado, era una realidad pues, elSeñor llama las cosas que no son comosi fuesen.

Retomando la justicia de losfariseos, puedo decir basado en laPalabra, que eran fieles a lo que elloscreían que era lo correcto, veamos: “1Hermanos, ciertamente el anhelo de micorazón, y mi oración a Dios por Israel,es para salvación.2 Porque yo les doy



testimonio de que tienen celo de Dios,pero no conforme a ciencia.” Romanos10.1–2 Quien mejor que Pablo que habíavivido toda su vida como fariseo paradecir esto, ellos era celosos de las cosasde Dios pero no conforme al corazón deDios, ellos cumplían la Ley a la letra, elmismo Señor Jesús dijo: “22 Si yo nohubiera venido, ni les hubiera hablado,no tendrían pecado; pero ahora notienen excusa por su pecado.23 El que meaborrece a mí, también a mi Padreaborrece.24 Si yo no hubiese hecho entreellos obras que ningún otro ha hecho, notendrían pecado; pero ahora han visto yhan aborrecido a mí y a mi Padre.”Juan 15.22–24 Si el Señor no hubieravenido ellos no habrían sidoconfrontados con el Espíritu de la Leyque ellos decían seguir. De acuerdo a laletra ellos eran irreprensibles como decía



Pablo, pero nunca entendieron laprofundidad de los mandamientos. Elloscumplían con hacer misericordia, pero“tocaban trompeta” cuando la hacíanpara que todos supieran cuan “buenos”eran, y estaban envanecidos por las cosasque hacían. Ellos ayunaban pero salíanpara la calle de tal manera que todospodían saber que lo estaban haciendo porlo decaído de sus semblantes, ellosbuscaban en realidad la aprobación delos hombres y no la de Dios. Ellosdiezmaban todo lo que tenían, veamos:“42 Mas ¡ay de vosotros, fariseos! quediezmáis la menta, y la ruda, y todahortaliza, y pasáis por alto la justicia yel amor de Dios. Esto os era necesariohacer, sin dejar aquello.” Lucas 11.42Ellos no tenían en cuenta el Amor deDios y mucho menos la Justicia, ladesconexión de Dios era total, por eso se



jactaban de las cosas que hacían así loescribió el apóstol, veamos: “27 ¿Dónde,pues, está la jactancia? Queda excluida.¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras? No,sino por la ley de la fe.” Romanos 3.27Las obras se habían convertido en unacuestión de status entre la comunidadjudía, hacerlas conocer vanagloriándosede ellas les hacía importantes delante delos hombre y eso les agradaba, nobuscaban la gloria que proviene de Dios,veamos: “29 sino que es judío el que lo esen lo interior, y la circuncisión es la delcorazón, en espíritu, no en letra; laalabanza del cual no viene de loshombres, sino de Dios.” Romanos 2.29Aquí Pablo habla sobre este temadiciendo que el verdadero judío busca elreconocimiento o alabanza de Dios y node los hombres.



Una Iglesia de fariseos. UnaIglesia de fariseos sería una Iglesia ideal,por supuesto que estoy refiriéndome a suapariencia externa, allí nadie dejaría dediezmar, ayunarían dos veces a lasemana, como dijo en su oración elfariseo de la parábola, veamos: “ 11 Elfariseo, puesto en pie, oraba consigomismo de esta manera: Dios, te doygracias porque no soy como los otroshombres, ladrones, injustos, adúlteros,ni aun como este publicano;12 ayuno dosveces a la semana, doy diezmos de todolo que gano.” Lucas 18.11–12 Nada depalabras deshonestas o groserías, nadiefaltaría a un culto o a una determinadareunión, las obras de misericordia serianabundantes, ellos se mostraban justos atodos los hombres, veamos: “27 ¡Ay devosotros, escribas y fariseos, hipócritas!porque sois semejantes a sepulcros



blanqueados, que por fuera, a la verdad,se muestran hermosos, mas por dentroestán llenos de huesos de muertos y detoda inmundicia. 28 Así también vosotrospor fuera, a la verdad, os mostráis justosa los hombres, pero por dentro estáisllenos de hipocresía e iniquidad.” Mateo23:27–28 Ellos salían a evangelizar ytendrían hasta buen testimonio de susvecinos.

El Señor hizo a la Iglesia unasolemne advertencia, veamos: “20Porque os digo que si vuestra justicia nofuere mayor que la de los escribas yfariseos, no entraréis en el reino de loscielos.” Mateo 5.20 Debe estar claroque las obras que hacían los fariseosestaban correctas, lo malo era la actitudde carnalidad con que las realizaban,pues las hacían no por amor al Señor ni



por fe, sino para ellos jactarse de sujusticia delante de los hombres así lo dijoPablo veamos: “3 Porque ignorando lajusticia de Dios, y procurandoestablecer la suya propia, no se hansujetado a la justicia de Dios;”Romanos 10.3 Ellos perdieron de vistalos atributos de Dios y aun su Palabraque muy claramente les indicaba elcamino y se llevaron por sus tradicionesy costumbres que a lo largo de los añosse habían añadido a su vida religiosa ycon esto para su mal invalidaban ydejaban de obedecer los mandamientosque les había el Señor establecido.Debemos de reconocer por nuestro bien,que gran parte de la Iglesia actual está enestas mismas condiciones, teniendo lasEscrituras, una gran mayoría duda deellas siguiendo a demonios disfrazadosde eruditos que le dicen por ejemplo: que



el infierno no existe, sólo basándose enrazonamientos humanos como: Dios esamor y nunca enviaría a sus hijos a unsitio como el infierno, esto en abiertaoposición a la Palabra del Señor.Siguiendo la misma tradición yasociando a los “eruditos” actuales conlos ancianos que tenía el pueblo deIsrael, ya que aquellos los seguíanporque suponían que poseían elconocimiento y la sabiduría, la mismarazón por lo cual los creyentes actualesle creen a los “eruditos” de hoy, puesaunque cada uno podemos tener más deuna Biblia en casa, sin embargo no lededicamos el tiempo que deberíamos poramor a nuestras almas, pues de suconocimiento dependerá nuestrasalvación, ya que estamos en tiempos degrandes engaños y cada vez son mássutiles y perversos, de tal manera que el



que no conozca la palabra, se ira detrásde cualquier profeta o apóstol del diablo,los cuales abundan en estos días.Siguiendo las enseñanzas de hombres,también creen que la salvación no sepierde y que pueden vivir adulterandocon este mundo y participando de suspecados, cuando la Biblia dice: “14Seguid la paz con todos, y la santidad,sin la cual nadie verá al Señor.”Hebreos 12.14 y la santidad comosabemos es ser apartados de este mundopara Dios.

También dicen muchos queJesús perdonó nuestros pecadospasados, presentes y futuros, así que yapueden pecar sin problemas, ya sonsalvos y el pecado no es problema yaestá todo perdonado, pero veamos lo quela Biblia dice: “10 Entonces oí una gran



voz en el cielo, que decía: Ahora havenido la salvación, el poder, y el reinode nuestro Dios, y la autoridad de suCristo; porque ha sido lanzado fuera elacusador de nuestros hermanos, el quelos acusaba delante de nuestro Dios díay noche. 11 Y ellos le han vencido pormedio de la sangre del Cordero y de lapalabra del testimonio de ellos, ymenospreciaron sus vidas hasta lamuerte.” Apocalipsis 12.10–11 Hasta eldía en que sea expulsado del cielodurante la Gran Tribulación el diablo nosacusará delante de Dios día y noche, y laforma de vencerlo es por “medio de lasangre del Cordero y de la palabra deltestimonio de ellos, y menospreciaronsus vidas hasta la muerte,” el propósitode estas letras no es rebatir aprofundidad estas falacias, sino llamar laatención a los descuidados sobre las



acechanzas del enemigo de nuestrasalmas. También la Iglesia actual tomarazonamientos humanos para invalidar lasanta Palabra de Dios, han tomado paraofrecerle a Dios todo tipo de músicamundana y carnal, con la excusa que el“Señor entiende” y que “toda la músicaes de Dios”, eso no es así, hay músicadel diablo y la mayoría de esos ritmoshan sido creados para el placer ydistracción del mundo, para la fama y lavanagloria de la vida, pues ahora bastacambiarle la letra y ¡Ya! Tienen unamúsica cristiana, terrible error pues ¿leofreceremos a Dios la ovejaperniquebrada o la ciega o manchada? Eldiablo está burlándose de tanta gente queestá ofreciéndole a Dios cosas que eldiablo ha “baboseado”, esto es ofender alSeñor con un sacrificio ni siquiera comoel de Caín, pues aquel era limpio aunque



no fue acepto, esto son inmundos yofensivos al Señor. Habrá cambiado elSeñor su mentalidad o sus atributos, laPalabra dice que en Él no hay sombra devariación, siempre es el mismo ysiempre lo será. Pretendemos adorar aDios cada uno con su cultura ycostumbres, pero esto es contrario a loque nos enseña la Palabra de Dios, elSeñor ha llamado a un pueblo de entrelas naciones para que dejen su tierra y suparentela, para que dejen sus costumbresvanas y paganas y adopten lascostumbres que el Señor tiene paranosotros a través de su Palabra, esto sellama santificarse para Dios, serle unpueblo especial, veamos: “26 Habéis,pues, de serme santos, porque yo Jehovásoy santo, y os he apartado de lospueblos para que seáis míos.” Levítico20.26 Esto se lo dice el Señor al pueblo



de Israel pero también se lo dice a laIglesia, todos sabemos que lo que a ellosse les dijo quedo escrito para nuestraedificación, pero también a la Iglesia elapóstol le dijo: “15 No améis al mundo,ni las cosas que están en el mundo. Sialguno ama al mundo, el amor del Padreno está en él. 16 Porque todo lo que hayen el mundo, los deseos de la carne, losdeseos de los ojos, y la vanagloria de lavida, no proviene del Padre, sino delmundo. 17 Y el mundo pasa, y sus deseos;pero el que hace la voluntad de Diospermanece para siempre.” 1 Juan2.15–17 Los cantantes de músicamundana se convierte a Cristo y lo únicoque cambian es la letra a las cancionesmundanas que usaban antes y ya siguencon su “carrera musical” ahoracontaminando al pueblo del Señor, estoes el mundo dentro de la Iglesia, los



conciertos de cristianos no tienen nadaque envidiarle a los mundanos, estánllenos de efectos especiales y unambiente que en poco refleja la santidadde Dios. Pienso que los fariseos nuncahubieran hecho algo así, ellos tenían unconcepto muy elevado de Dios, teníanmuy claro la separación entre Israel y lasnaciones, ni pensar en tomar suscostumbres o asociarse con ellos, es esteel primer requisito que nos pide el Señor,la santidad.

El Señor le advirtió a losdiscípulos y por ende a la Iglesia sobrelos fariseos, dejando muy en claro cuálera su problema, veamos: “1 En esto,juntándose por millares la multitud,tanto que unos a otros se atropellaban,comenzó a decir a sus discípulos,primeramente: Guardaos de la levadura



de los fariseos, que es la hipocresía.”Lucas 12.1 El Señor les dice a susdiscípulos: “primeramente,” esta es unaadvertencia que es para tomar muy encuenta pues, es primero que todas lasdemás cosas a hacer, les está diciendo,esto es prioritario de primer orden ytiene que ver con nuestra naturalezacarnal al cual tiende a la hipocresía,tratamos de aparentar lo que no somos,tratamos de mantener el status. Lapregunta sería: ¿dónde podemosconseguir la hipocresía dentro de laIglesia?, teniendo en cuenta que se tratade la hipocresía hacia Diosprimeramente, aunque hacia loshermanos sería igualmente hacia elSeñor, pues cada uno de nosotrosestamos hechos a la semejanza delSeñor. La Biblia nos enseña que todosacrificio al Señor debía ser salado con



sal, veamos: “49 Porque todos seránsalados con fuego, y todo sacrificio serásalado con sal.” Marcos 9.49 Esta salrepresenta el amor que debe llevarimplícito toda ofrenda y sacrificio alSeñor, es esto lo que le da “gusto” pordecirlo de alguna manera a nuestraofrenda, ningún sacrificio podía serofrecido sin sal, de allí podemos ver loimportante que es esto para Dios, de allíque: “7 Cada uno dé como propuso en sucorazón: no con tristeza, ni pornecesidad, porque Dios ama al dadoralegre.” 2 Corintios 9.7 El Señor amaal dador alegre, pues esto implica quehay gozo y amor al entregar la ofrenda,lo que busca el Señor de su Iglesia esque le corresponda con el mismo amorcon que el Señor la amó y se entregó porella. Así como Cristo lo dio todo hasta lamuerte por la Iglesia, así debe de amar la



Iglesia a nuestro Señor, en un amorapasionado que está dispuesto hasta lamuerte, el Señor no acepta nada menos,veamos: “26 Si alguno viene a mí, y noaborrece a su padre, y madre, y mujer, ehijos, y hermanos, y hermanas, y auntambién su propia vida, no puede ser midiscípulo.” Lucas 14.26 Esto essumamente importante tenerlo enconsideración pues, no podemosapoyarnos en nuestras costumbres ni ennuestras tradiciones, pues su Palabra estáallí para guiarnos a toda verdad ylibrarnos de pecar contra EL, veamos:“13 Por tanto, mi pueblo fue llevadocautivo, porque no tuvo conocimiento; ysu gloria pereció de hambre, y sumultitud se secó de sed.” Isaías 5.13 Elhecho es que cuando pecamos aunquesea por ignorancia, el enemigo denuestras almas toma ventaja enseguida



para llevar cautivos a los hijos de Dios,abrimos puertas para que el mal entre ennuestras vidas y sabemos que el enemigoviene a “hurtar, matar y destruir” así loenseñó nuestro Señor Jesús.

Los fariseos de hoy. En larevelación de Apocalipsis dada a laIglesia para estos tiempos, nos dice elSeñor que los hipócritas no entraran enel reino de los cielos, veamos: “14Bienaventurados los que lavan susropas, para tener derecho al árbol de lavida, y para entrar por las puertas en laciudad. 15 Mas los perros estarán fuera,y los hechiceros, los fornicarios, loshomicidas, los idólatras, y todo aquelque ama y hace mentira.” Apocalipsis22.14–15 En este texto el Señor noshabla de los que entrarán al reino de loscielos y muy específicamente dice que



no entrará: “todo aquel que ama y hacementira” esto no es otra cosa que unadescripción de la hipocresía, estamoshablando de la vida eterna ó de laperdición eterna, no es nada liviano; essumamente importante y de unatrascendencia total, por eso el énfasisque quiero hacer, es que aquí no entranconsideraciones de que Dios nosentiende, u otras por el estilo. Lo único aconsiderar aquí es que el Señor sólodejará entrar al reino de los cielos aaquellos que le amen en “Espíritu y enVerdad,” nada menos que esto, ya hubouna rebelión en el cielo y con seguridadel Señor no permitirá que ocurra otra, asíque los que entrarán serán sólo “losfieles y elegidos”, veamos: “14 Pelearáncontra el Cordero, y el Cordero losvencerá, porque él es Señor de señores yRey de reyes; y los que están con él son



llamados y elegidos y fieles.”Apocalipsis 17.14 y serán probadoscomo el oro, tendrán que tener vestidurasblancas y muy limpias, no estaráncontaminados con este mundo. ¿Cuántoscreyentes actuales han caído y estáncayendo en este gravísimo peligro de serhipócritas con Dios? Cuántos dejan de ira la Iglesia por cualquier vana excusacomo, un cumpleaños; ir a la casa delSeñor se ha vuelto para muchosopcional, si aparece algo “mejor”entonces dice: “vamos el próximodomingo”, pues, debemos de tener encuenta que el Señor nos exige que ledemos el primer lugar y si dejamos deservirle por disfrutar de este mundo nocalificaremos para entrar en su reino. Seestá siendo hipócrita con el Señorcuando estamos en su casa, la Iglesia, yestamos desesperados porque termine el



culto para ir a hacer lo que en verdad nosgusta, cuando estamos en el templo y noparticipamos de las alabanzas, no ledamos la importancia debida siendo quefuimos llamados para la alabanza de sugloria, quien hace esto se descalifica asímismo del llamamiento al reino de loscielos. Estamos siendo hipócritas con elSeñor cuando decimos que le amamos yno dedicamos tiempo a la oración ni a lalectura de su Palabra, siendo quedecimos que tenemos una relación conEl y estamos mintiendo, pues ¿cómo latendríamos si no pasamos tiempo en supresencia? Estamos siendo hipócritascon el Señor cuando sólo oramos porbendiciones terrenales, dinero, una mejorcasa, ropas, viajes etc. siendo que elSeñor nos ha llamado a poner nuestramirada en el reino de los cielos y a nohacer tesoros en esta tierra. Estamos



siendo hipócritas con el Señor cuandorobamos los diezmos y no damos lasofrendas que son necesarias para elsostenimiento de la Iglesia. Estamossiendo hipócritas con Dios cuando noamamos a nuestros hermanos ymurmuramos del pastor no sujetándonosa su autoridad. Somos hipócritas cuandola afición al deporte consume nuestrasenergías y sabemos más de sus reglas yde las victorias y triunfos de los atletas,que de la Palabra de Dios. Estamossiendo hipócritas también cuandotenemos en poco la reunión en la Iglesia,cuando un domingo hay un eventodeportivo “importante,” y sin pensarlodos veces preferimos ir al estadio, en finUd. podrá hacer una lista de las cosasque sabemos que no están bien y querevelan la falta de sinceridad en nuestroscorazones hacia nuestro salvador.



¿Cuándo somos hipócritascon el Señor? En fin somos hipócritascuando decimos que le amamos peronuestros hechos dicen lo contario, comodice en Apocalipsis: “todo aquel queama y hace mentira,” pues si leamaramos como decimos lereverenciaríamos como nuestro Padrecelestial, pero cuántos en medio del cultoatienden llamadas telefónicas o mandanmensajes de texto en medio de laalabanza o la predicación de la Palabra,o conversan animadamente irrespetandola majestad de Aquel a quien se estáministrando, debo decir que estos atraenmaldición sobre sí mismos mientrasestán sobre esta tierra. Tomamos alSeñor muy a la ligera sin entender elrespeto y la reverencia que debemos demantener en su presencia, sientendiéramos que por esta causa mucha



gente está enferma y aun ha muerto, porirrespetar el Nombre del Señor dentro dela Iglesia, pues si ofendemos, al Señorno se quedará sin consecuencias pues laPalabra dice: “29 Porque el que come ybebe indignamente, sin discernir elcuerpo del Señor, juicio come y bebepara sí.30 Por lo cual hay muchosenfermos y debilitados entre vosotros, ymuchos duermen.31 Si, pues, nosexaminásemos a nosotros mismos, noseríamos juzgados;32 mas siendojuzgados, somos castigados por el Señor,para que no seamos condenados con elmundo.” 1 Corintios 11.29–32 Elapóstol se refiere aquí específicamente ala celebración de la santa cena de unamanera irreverente, pero ¿no es elservicio al Señor importante? ¿No está lapresencia del Señor cuando hay uno omás en su nombre reunidos? Tenemos



que decidirnos a conocer a Dios, pues nopodemos tratar al Señor como nosparece, eso hicieron los hijos de Aarón ymurieron por su irreverencia: “1 Nadab yAbiú, hijos de Aarón, tomaron cada unosu incensario, y pusieron en ellos fuego,sobre el cual pusieron incienso, yofrecieron delante de Jehová fuegoextraño, que él nunca les mandó.”Levítico 10.1 Estos jóvenes quisieronhacer las cosas para Dios como a ellosles pareció bien; fue de buen corazón,pero allí es que vemos que las cosas noson como nos parecen sino como elSeñor manda, ellos murieron por ofrecerun fuego que el Señor no les mandó, elSeñor no ha cambiado; si no veamos elcaso de Ananías y su mujer Safira, ellosmurieron delante del Señor por lo quellamaríamos hoy día una mentiritablanca. La hipocresía es una condición



interna del corazón que se manifiesta ennuestras acciones, es algo como la fe quese evidencia por nuestras obras, así lahipocresía dará sus perversos frutosapenas le demos cabida en nuestroscorazones, es diabólica pues es mentir alque amas, es decir que amamos ynegarlo con nuestros hechos, sientendiéramos que nuestro Dios esceloso, El nos cela de este mundo, de lasvanidades de esta vida, no quiere elSeñor lo que nos sobra, pues, El es GranRey, hay que darle lo mejor de nuestrocorazón y adoración, ya nuestro SeñorJesús lo advirtió: Guardaos de lalevadura de los fariseos, que es lahipocresía.” Lucas 12.1 Recordemosque somos salvos no sólo porquehicimos una oración aceptando a Cristo,que somos salvos por honrar ese llamadoy esa oración que hicimos guardándonos



en santidad apartados de este mundo yreverenciando el Nombre del Señorquien nos salvó de la ira venidera, poreso el apostol nos advierte: “17 Y siinvocáis por Padre a aquel que sinacepción de personas juzga según laobra de cada uno, conducíos en temortodo el tiempo de vuestraperegrinación;” 1 Pedro 1.17 Somosperegrinos, estamos de paso,preparémonos para alcanzar la patria quebuscamos, la celestial, este mundo serádestruido, nada tenemos que buscar aquío esperar de él, sino que: “1 Si, pues,habéis resucitado con Cristo, buscad lascosas de arriba, donde está Cristosentado a la diestra de Dios.”Colosenses 3.1 Porque: “20 Porque osdigo que si vuestra justicia no fueremayor que la de los escribas y fariseos,no entraréis en el reino de los cielos.”



Mateo 5.20 Dios te bendiga y te deentendimiento en todo y “29 El que tieneoído, oiga lo que el Espíritu dice a lasiglesias.” Apocalipsis 2.29

Fernando Regnault

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