los malos tiempos arderan

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  • 8/17/2019 Los Malos Tiempos Arderan

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    [Texto] Los malos tiempos arderán 

    El siguiente texto, titulado "Los malos tiempos arderán", fue extraído de la página web del GrupoSurrealista de Madrid, y se encuentra firmado tanto por el susodicho colectio, como por !xígeno

    Logro#o$, Las malas compa#ías de %urruti Logro#o&'arago(a$, )ahrenheit *+ Madrid$ y el

    -olectio de .raba/adorxs -ulturales de La )elguera Madrid&.enerife$0

    En 1l, se habla de las reueltas de 233+ en las "banlieus" de 4arís y otras ciudades francesas y se

    anali(an arios elementos como el concepto de metr5polis antrop5faga 6ue construye el 7mperio a

    tra1s del urbanismo carcelario, reflexionando sobre c5mo dentro de ese planteamiento territorial, los barrios&dormitorio /uegan un papel represio determinante tanto en lo social, como en lo psicol5gico,

    econ5mico y existencial0

    .ambi1n se habla de c5mo afecta esto a 6uienes han sido sistemáticamente excluidxs de toda promesa

    electoral o de futuro, condenadxs a sobreiir entre las ruinas del margen incontroladxs y embrutecidxs

     por la miseria, y sobre c5mo determinados sectores falsamente erigidos como "8eolucionarios" lai(6uierda stalinista y marxista&leninista de siempre$, con el más 6ue eidente ob/etio de soslayar sus

     propias contradicciones materiales y su incapacidad para actuar con eficacia, se sumaron al /uegoreaccionario de la propaganda mediática oficial 6ue criminali(5 los disturbios, aun6ue optando por su

     parte por la no menos miserable estrategia de declarar 6ue a6uellxs /5enes reoltosxs de los suburbioseran en realidad agentes del gobierno 6ue proocaban altercados para /ustificar el Estado policial al

    6ue lxs ro/xs decían oponerse, pero de cuyo /uego, más o menos deliberadamente, participaban$, del

    mismo modo 6ue hicieron cuando a#os despu1s, en %iciembre de 2339, las principales ciudades deGrecia estallaban en una tormenta de iolencia y /usticia mientras el ::E se refería a la insurrecci5n

    como "unxs pocxs agentes para&estatales"0 Se e 6ue cuando lxs aspirantes a bur5crata de pacotilla se

    topan con una situaci5n de reuelta 6ue no pueden controlar ni monopoli(ar con sus estrategias deanguardia dirigentista, sale a la lu( su erdadero carácter0

    .ambi1n se reflexiona sobre el concepto de ciudadanx, y sobre c5mo el capital lo usa para diidir explotadxs y hacer 6ue a6uellxs 6ue permanecen acurrucadxs en el mullido terciopelo con el cual elimperio forra sus cadenas a cambio de la seridumbre italicia, condenen, cual policía, /ue( o fiscal, a

    6uienes hartxs de ser inisibles y cansadxs de iir en basureros, asaltan la comodidad y la normalidad

    de la democracia burguesa sin esperan(as de obtener la ictoria, pero con la certe(a de 6ue es la ;nicaforma de existir más allá del espectáculo y de trasladar su rabia al terreno de la ida cotidiana,

    transformándola en una nuea forma de iir, y en una nuea forma de comunidad disidente0

    iblioteca

    Social

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     LOS MALOS TIEMPOS ARDERÁN 

     I !o ue vamos a decir lo decimos sin ninguna ilusión ni tampoco esperanza, ni sobre su utilidad ni sobre la verdad #ltima de nuestros argumentos $stamos demasiado lejos de los acontecimientos, tanto física como temporalmente, demasiado lejos, demasiado tarde, como para pretender tener ninguna

    influencia sobre ellos $stamos lejos, además, de su propia negación, pues a pesar de ueefectivamente compartimos una miseria análoga ue se debe a las mismas causas, no es sin embargoigual, ni tiene su misma intensidad Pero nos animan al menos dos deseos% contribuir, junto con los propios actos y a la luz de los mismos, al esclarecimiento del mundo en el ue sobrevivimos, y salir en su defensa, allí donde su acción por muchas razones ejemplar merece ser defendida, contra todas lascalumnias y mentiras ue se han levantado y se levantarán por los enemigos de afuera y los deadentro, y no porue los insurrectos de &rancia necesiten esa defensa, sino porue la necesitamosnosotros, los otros proletarios de tez 'blanca( y conciencia desteñida, para desenmarañar el tejido de ficciones ue nos encadena paralizando nuestra propia ira y nuestra propia revuelta )o pretendemostampoco idealizar ni glorificar nada, porue nada debe ser ensalzado en el terreno de la guerra social*an mísera es nuestra condición, ue el más mínimo triunfalismo es otro clavo más sobre el ata#d material y virtual ue nos encierra en la vida diferida Pero por eso mismo, deseamos seguir  permaneciendo a la escucha de cualuier signo ue venga de cualuier parte manifestando ue eseestado catatónico empieza a romperse Incluso aun cuando despu+s, aparentemente, el silencio vuelvaa reinar en $uropa% especialmente en este #ltimo caso

     II !os barrios perif+ricos de los centros urbanos y económicos franceses han sido los protagonistas deuna revuelta ue ha puesto en cuestión la razón y la legitimidad de los estamentos y la oligaruíaeuropea !a periferia convertida en lugar de almacenaje, no sólo de mercancías ruinosas sino de sereshumanos no menos averiados, ha rebasado la mera condición separada de problema urbanístico !osrevoltosos, con la uema de edificios y coches, epresan lo ue es ya un hecho indudable% suimposibilidad de gestionar su propia vida y de controlar su destino, porue su vida se desarrolla en la periferia de todo !a violencia de los revoltosos, de auellos ue juegan al escondite con las fuerzasdel orden y cuyo signo distintivo es su rostro cubierto bajo las capuchas, demostró contra u+ ouienes se dirigía su rechazo *ras los ataues contra la policía -ue presenció cómo las paredescomenzaban a hablar bajo la frase de 'policía de mierda(. rápidamente se dio paso a la destrucciónde todo auello ue los situaba, ineorablemente, frente a su realidad como grupo social $s por estarazón por la ue los sociólogos no debieran necesitar mayor investigación ue la observación de losrestos de la violencia y su resultado $l paisaje de guerra del ue tanto hablan los medios no es otracosa ue el programa de la revuelta y las eigencias de los protagonistas, ue parecen absurdos eincomprensibles sólo al ue se niega a comprender, o ha comprendido demasiado bien -hasta el lavadode cerebro o el colaboracionismo. los razonamientos del poder /asta con oír a estos chicos ue supuestamente no saben ni pensar ni hablar 0sí se epresan, por ejemplo, tres jóvenes del barrio 112de 0ubervilliers% 'es una desgracia pero no tenemos elección, estamos dispuestos a sacrificarlo todo porue no tenemos nada -3. si un día nos organizamos, tendremos granadas, eplosivos, 4aláshni5ovs3nos daremos cita en la /astilla y será la guerra( Pero esto es lo #ltimo ue espera ladominación, y por eso se empeña en emborronar un discurso ue sin embargo es muy claro% se tratade ue, bajo ning#n concepto, pueda tambi+n llegar a ser contagioso

     III 6upermercados y centros comerciales no son sino los indicadores de la opresión económica y la falta de epectativas por acceder a las cuotas de bienestar anunciadas por republicanos y socialistas 0nte su presencia obscena estalla la constatación diaria de la escasez, del inalcanzable estado decobertura de necesidades básicas para familias de cinco o seis miembros y un solo sueldo, de tal forma

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    ue, ante esta verdad inocultable ue se vive radicalmente, la propaganda economicista se declara enuiebra y se hunde cualuier ilusión posibilista de lograr 'una vida normal( ue ya no eiste nieistirá para nadie, igual ue no se encuentran alimentos sanos o agua pura 0sí, la destrucción de los grandes complejos comerciales y de consumo se transforma en la +tica y la est+tica del rechazo, yaue niega el confort anunciado y, más a#n, niega todo un modelo de vida falsificada Por eso el pueblo franc+s, bajo un supuesto proyecto y destino com#n, se levantó el día 27 de octubre con los monstruos

    ue crearon treinta años de políticas de eclusión social, política y económica $n este sentido, lademocracia francesa -y el resto de democracias con ella. no está en crisis sino ue ha sido negada de facto y por la fuerza de la violencia, y no por la violencia juvenil precisamente, sino por la ue seejerce en su nombre y bajo su coartada todos los días, en todas las dimensiones de la vida, y prácticamente sobre casi toda la población 6ólo cuando tal violencia es devuelta por el espejo de lacontestación social, es cuando preocupa al poder y por tanto a la opinión p#blica 8uando 6ar5ozydice ue 'por supuesto ue hay miseria, racismo, desempleo3pero nada puede justificar la violencia gratuita(, es ue para el aprendiz de *hiers, sus cong+neres y todos auellos ue todavía le creen,cualuier violencia ue se levante contra el racismo, la pobreza, etc, etc3es y será siempre gratuita Porue el escándalo no lo provoca el espectáculo de la pobreza, sino el estallido de los ue la sufren,ue inmediatamente se intenta pasar por espectacular para así desacreditarla hasta ante sus posiblescómplices 9e esta manera el estado de ecepción y emergencia vuelve a retirar el velo democrático de su política hacia los inmigrantes al viejo estilo colonial, como cuando administró con mano de hierro 0rgelia y sus colonias $n este sentido, hoy, igual ue ayer, estamos con los ue llamaban a lainsumisión frente al gobierno franc+s, pero concretándolo en lo ue ya es asunto de salud p#blica% el ataue contra el proyecto social franc+s, contra el proyecto social europeo

     I: )o puede sino considerarse bajo la misma línea la deliberada y obstinada acción destructoracontra los centros educativos 6i los coches de segunda mano, los supermercados mal -o bien, seg#n semire. provistos de comida basura y uincallería barata, y los euipamientos miserables del $stado debienestar residual son los espejismos paródicos de la abundancia y la prosperidad, los colegios y losinstitutos son la parodia desencarnada de la igualdad de oportunidades y de la posibilidad de ascenso social ue la economía predica para no cumplir ; el fuego ue ha devorado a unos y a otros es la previsible respuesta desencantada y furiosa del ue despierta de su encantamiento '!os chavales de1< años ven ue los ue tienen 2< y fueron buenos estudiantes siguen en el paro, viviendo en casa de sus padres y sin futuro(, razonaba uno de esos 'irracionales( del barrio de /lanc=>esnil de 6aint= 9enis, y en sus palabras encontraremos todas las razones de esa furia sin ue haga falta ue ning#neperto añada ni una sola banalidad de más 0sí, negado el futuro a los hijos de los franceses, de losinmigrantes ya legalmente franceses, ante los pasmados rostros de sus mayores, esa población potencialmente escolar ue ahora ama la gasolina desprecia el sistema educativo por la misma razónue desprecia al propio $stado franc+s $llos, los bárbaros del proyecto de la 'vieja $uropa(, han sido estigmatizados como la racaille, es decir, la chusma, la gentuza canalla, y han aceptado eseestigma con el tradicional orgullo de los proscritos% como los 'mendigos del mar( en la ?olandarebelde del siglo @:I, como los enrag+s de 17AB o del >ayo del CD, como los pun5s londinenses de1A77 $llos, los revoltosos, han recogido el testigo y han declarado ue, una vez perdido el miedo a salir a la calle, han decidido pelear hasta el final '?a venido todo un representante de la Eep#blica ynos ha llamado escoria, y lo ue nosotros estamos haciendo ahora es eactamente eso, actuar comoescoria ?emos comprendido ue es la forma de ue nos presten atención(, dice un chaval de 1< añosde 6aint=9enisF 'nos ha lanzado un reto y nosotros lo hemos aceptado(, contesta otro de la mismaciudad 'Puesto ue somos escoria, vamos a dar trabajo en la limpieza a este racista !as palabrashacen más daño ue los golpes(, se oye en el barrio 112 de 0ubervilliers Por todas partes, la causaestá entendida, todo está dicho y todo está por hacer

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    : 8on un eceso de modestia o couetería, algunos rebeldes de 0ubervilliers concedían ue 'notenemos palabras para eplicar lo ue sentimos 6ólo sabemos hablar prendiendo fuego( ?ay uedecir cuando menos ue tal lenguaje es elocuente y eficaz, y nadie puede pretender ue no lo escucha6irve además para poner sobre la mesa las cuestiones molestas ue nadie se atreve a hacer Por ejemplo, los disturbios han supuesto la propaganda por el acto del urbanismo capitalista, cuyamonstruosidad inhumana ya nadie puede negar, hasta el punto de ue por toda &rancia se están

    derribando esas torres de tortura de 1G pisos donde la vida sólo podía asarse a fuego lento )adienegará tampoco su eficacia, no sólo como campos de concentración diseñados para aislar a las personas de sí mismas y de los demás, sino sobre todo en su función de cárceles invisibles de las ue sus presidiarios no se atreven a salir, incluso cuando se han amotinado% la aparente falta de decisiónde los rebeldes de llevar los disturbios a los centros de las ciudades, allí donde más imp#dicos seehiben los símbolos de la felicidad capitalista, y más determinante es su destrucción, dice mucho del +ito psicogeográfico de las banlieus como sistemas de represión y aislamiento autorregulados Peroel concepto de banlieu como basurero humano no se entiende sin la basura ue contiene en sus límites físicos, sociales y psicológicos, y su estallido ha contribuido a derribar otro de los mitos favoritos denuestro tiempo, repetido a veces muy imprudentemente por los ue se consideran sus enemigos, a saber, ue los inmigrantes 'son necesarios( y hasta imprescindibles para asegurar el crecimientoeconómico y enriuecer la aburrida cultura europea, dando esa pizca de color y alegría ue tanto gusta a los fanáticos del turismo eótico y del abigarramiento multiculturalista Pues bien, dejando aun lado la dimensión cínicamente oportunista de tan miserable cálculo, ya estamos viendo para u+necesita el capitalismo a estos inmigrantes, a sus hijos y a sus nietos, u+ utilidad uiere dar laeconomía a estos franceses de tercera generación% ni siuiera se toma la molestia de eplotarlos, yaue le salen más baratos sus hermanos de raza ue malviven en Hfrica o 0sia, y el uso masivo de unatecnología ue arrasa tanto recursos naturales como biografías humanas $l #nico enriuecimientoue el orden espera de ellos es el 'crecimiento( a una escala cada vez mayor del famoso ej+rcito dereserva de parados, y el 'desarrollo( de la panoplia de terrores securitarios con los ue atormentar ala población indígena ue tambi+n vive en la cuerda floja, para ue se mantenga disciplinada y bajolas faldas del $stado policial $sto es de lo ue se dan cuenta los rebeldes de los suburbios% los'treinta gloriosos( y los 'milagros económicos( de la $uropa de la segunda posguerra y susespejismos de prosperidad, bienestar y justicia social nunca volverán, no hay margen posible bajo el capitalismo bulímico y ecocida para las promesas reformistas de los políticos y de los arbitristasbienpensantes de la progresía 8omo decía el joven antes citado del barrio de /lanc=>esnil, 'la mala situación económica hace ue por primera vez haya franceses haciendo el trabajo ue antes sólohacíamos los emigrantes( Por primera3pero no por #ltima 8uando vemos cómo por todo ese nuevomundo feliz occidental cierran las fábricas y se adelgazan las plantillas, cuando comprobamos cómolos escasos 'afortunados( ue logran el ansiado empleo temporal trabajan 1 y 12 horas por todosauellos ue se uedan aparcados en el paro, entonces no ueda más remedio ue aceptar, y lo mejor  para todos nosotros es hacerlo ya y sin ecusas, ue cuando el poder habla de modelos de integraciónde los inmigrantes, reinserción social, reactivación de los barrios bajos, y cualuier otra patraña parecida, simplemente está volviendo a vender humo a nuestra costa ; ese humo es infinitamente másirrespirable y nocivo ue el ue ha salido de las hogueras ue se han prendido en los suburbios 0sí  por ejemplo, un sociólogo -y encima de origen argelino. cree encontrar la piedra filosofal asegurandoue 'hay ue eliminar los guetos y hacerlo sin complejos )o se trata de rehabilitar estos horriblesedificios de hormigón, hay ue derribarlos y tener la capacidad para convencer a la gente ue vive enellos de ue su futuro será mejor fuera del gueto, dentro de la ciudad y lejos de los suburbios !os guetos sólo desaparecen de una manera% fundi+ndolos con la ciudad( J)ada menosK, porue semejante reforma, ue no sería tal sino ruptura revolucionaria con el mundo desfigurado del capital,eigiría la fundición del orden totalitario ue diseña, construye y necesita esos guetos, por lo ue podemos preguntarnos ui+n es el ingenuo, si los críos obtusos y embrutecidos de la ciudad 

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    dormitorio, o el hábil sociólogoF sea como fuere, mientras ue las autoridades deciden si hacen caso ono de tan brillantes perogrulladas, parece ue cierta juventud ya está lo suficientemente convencida deue su futuro no está en el suburbio, y por eso ha empezado a destruirlo sin complejos !a lucidez,como la acción, ha cambiado esta vez de bando% se trata ahora de constatar hasta u+ punto lo hahecho y en u+ medida se ha transmitido a uienes, por ahora, no se han sumado al combate

    :I Pero si el bando ue debe perder es capaz de mostrar alguna lucidez, aunue sea parcial, aunue se refiera más a lo ue se odia ue a lo ue se desea, entonces hay ue neutralizar sus razones y susactos por todos los medios, anegándolos bajo el consabido tsunami de mentiras y bajezas 6ólo nos ha sorprendido relativamente ue algunas de esas infamias provengan de los así llamadosrevolucionarios, ue se rebajan difamando a los revoltosos tachándolos de uemacoches al serviciodel $stado y sus estrategias policíacas de provocación y miedo 6in descender a tanta y tan obvia podredumbre, ue parece contentarse con ue el oprimido rumie en manso silencio su humillacióncotidiana hasta ue el lenin de turno -y de bolsillo. d+ permiso para iniciar el levantamiento, esnecesario discutir otros lugares comunes ue, por serlos, alcanzan a un n#mero mucho mayor de personas a las ue la dominación desea uitar cualuier tentación de comprensión o simpatía hacialos rebeldes $s evidente ue el espantajo de la violencia es el plato fuerte de cualuier men# ue se prepare para tales menesteres de intoicación ideológica y miedo social :iolencia ue, sin embargo,los pocos observadores honestos han reconocido como mucho menos salvaje e indiscriminada de loue se ha dicho, y ejercida además, en general, con plena conciencia de la gravedad y consecuenciasde la misma% 'es una desgracia(, admitían los jóvenes de 0ubervilliers, y como ellos muchos otros, sinrastro de ehibicionismo o crueldad )ada tiene ue ver por otro lado una violencia colectiva yespontánea ue se levanta contra la opresión cotidiana ue un buen día ya no se soporta más, por muylamentables y arbitrarios ue sean sus daños colaterales, y la violencia sistemática, hobbesiana y gangsteril de las bandas neofeudales y misóginas toleradas -y alentadas. por el poder >ás bien todolo contrario, pues lo ue ha sucedido no es el despliegue habitual de anomia afectiva, sensibilidad descompuesta, agresividad tribal, matonismo chulesco y aburrimiento letal ue coeisten junto conotras realidades muy distintas en los suburbios -sería asombroso ue en un mundo en ruinas auellosue sobreviven bajo los más hondos cascotes se mantuvieran absolutamente puros, para mayor  sosiego espiritual de los ue todavía vegetan en los estratos superiores., miserias ue han sidometabolizadas -y banalizadas. como una desgracia natural inevitable por los mismos ue tanto seescandalizan ahora, sino el intento de su abolición por la vía práctica del enfrentamiento a cara de perro con el sistema ue ha engendrado esas lacras -de las ue por cierto nadie está eento. y todaslas demás $s por esta razón ue esa violencia, antes tan llevadera, tan irrelevante para los jerarcasde la dominación ue no suelen vivir allí -y algo menos para los ue la sufren como propina adicional del terror ue les administra el $stado y la economía., se revela de repente como intolerable Por esoel espectáculo se ha regodeado con las imágenes, a veces dolorosas, a veces miserabilistas, decolegios y guarderías uemadas, buscando la empatía fácil y el reflejo condicionado contra losrebeldes, pero se ha cuidado muy mucho de hablar, por ejemplo, de las sucursales bancarias uetambi+n han ardido -si no lo han hecho más, es porue hasta los bancos desertan de las banlieus. Por otra parte, no deja de tener cierto inter+s ue los #ltimos informes judiciales ofrezcan un retrato sociológico de la revuelta en las antípodas de los clich+s ue se nos uieren vender% entre los primerosencarcelados, hay

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    cotidiana de los habitantes de los suburbios -especialmente de las mujeres, bajo el fuego cruzado del integrismo islámico y de la violencia seual neomachista., no son las ue más se han destacado precisamente% uizás porue son antes bien los socios de la policía ue sus enemigos 9a lo mismo')o somos vándalos, somos rebeldes(, intentaban aclarar los de 0ubervilliers )adie les hará caso% para su desgracia o no, ser rebelde hoy pasa necesariamente por ser tambi+n vándalo

    :II 8omo era de esperar en una sociedad ue adula a la juventud por su 'rebeldía( siempre ue laconsuma virtualmente y no pretenda eperimentarla en la realidad, el origen juvenil y adolescente delos protagonistas de la revuelta tambi+n está siendo utilizado para desacreditarla 6e insiste así en suinfantilismo, epresado no sólo en el absurdo aparente de la destrucción indiscriminada, sino tambi+nen el carácter de juego inconsciente y emulación compulsiva ue demuestra 0 continuación se hablade los juegos de ordenador, de la realidad virtual, de la 'generación game=boy(, de los 'pobreschavales( autistas ue reflejan en su violencia ciega los mecanismos de deshumanización ycompetitividad ue han aprendido de la misma sociedad ue les aniuila, porue todo lo eplica y a plena satisfacción la playstation maldita, como si sólo los cabecitas negras del arrabal jugaran conesos chismes, o fueran los #nicos afectados por su radiación venenosa 6e utilizan de paso las propias palabras de los jóvenes suburbiales, ue se uieren entender #nica y eclusivamente en el sentido uemás conviene, cerrando el paso a cualuier otra interpretación ue matice o corrija la versióninteresada Pues si es cierto ue en estos comportamientos puede haber mucho de la herencia malditadel vacío encarnado en la irresponsabilidad de mercado y en la adicción enfermiza a la ultraviolencia,igual ue pueden dar pie a su recuperación bajo la forma mediática y comercializable de nuevos yecitantes deportes de riesgo, no lo es menos ue se deben tambi+n a otras instancias, y ue entroncancon otros árboles genealógicos $n efecto, los desafíos entre las bandas rebeldes para ver uien ofrecelos fuegos artificiales más fastuosos a sus vecinos, uemando los trofeos de la riueza y del poder, pueden venir tanto de la contaminación mediática como ser la gozosa reactualización de la institucióndel potlach, y, si salvajes son, ue se les conceda al menos el derecho de regresión a las viejas ybuenas costumbres de los pueblos primitivos, sin ponerles bajo la perpetua sospecha de cretinismomultimedia Pero fue &ourier uien mejor eplicó las virtudes de la sana emulación entre los gruposrevolucionarios ue se retan en el juego de la subversión, y por una vez ue no ha sido la economíauien ha recuperado sus teorías -y poco importa si a &ourier se le lee o no en el gueto% las buenasideas, si los son, siempre acaban encontrando a uien las confirma en la práctica., no vamos aescandalizarnos3 9e la misma manera, los epertos aprovechan un comentario de los revoltososacerca de ue prefieren uemar coches en vez de contenedores 'porue hacen mucho más ruido(, para reírse de esos jovenzuelos ue confunden la realidad prosaica con los efectos especiales de laconsola, cuando el principio básico de toda guerrilla ue se precie es hacer el mayor daño posible,llamar la máima atención, con el menor coste en los medios utilizados $n todo caso, y como se ha sugerido ya, no es tan malo ue ciertas uimeras del inconsciente colectivo, ue a veces se cuelan por la pantalla aparentemente más banal en la forma del rap o de la mitología degradada de >atri,empiecen a materializarse en la calle, especialmente si se trata de los fantasmas de la subversiónL0caso lo imaginario no era lo ue tendía a ser realM

    :III 6in duda es mucho más perniciosa esa mala reputación ue acusa a los jóvenes de estar  separados de sus padres y de las generaciones adultas, y a todos los negros y magrebíes de estarlorespecto a sus vecinos blancos Eespecto a lo primero, se ha puesto en primer plano la angustia de la joven madre soltera ante la guardería uemada, o la del trabajador ante el utilitario abrasado,imprescindible para su supervivencia ?ay ue entender tal angustia y tal desesperación en unas gentes ue los golpes han moldeado demasiado bien, y ue por una intuición muchas veces acertada sólo esperan del acontecimiento nuevo lo malo de siempre Pero teniendo razones, la razón decisiva noestá de su lado sino de sus hijos, pues aunue dolor cause, pretende terminar con el dolor y con sus

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    causas $n este sentido, como en la Intifada palestina de los años ND o el levantamiento antirracistadel 6oOeto de 1A7C, la revuelta lo ha sido tanto contra los padres como contra el $stado, el racismo yla economía, en cuanto ue los adolescentes rabiosos han hecho lo ue las generaciones anteriores, en su gran mayoría, no se atrevieron o no pudieron hacer 0sí, cuando se habla del d+ficit de autoridad delos cabezas de familia 'porue no llevan un sueldo a casa(, no se cita otro tipo de respeto, tanimportante o más ue el anterior% el ue nace de la resistencia cotidiana a la opresión, ue, aun desde

    la derrota, se transmite a los hijos como el mejor ejemplo ue se puede dar en la vida ?ay auí undesgarro generacional ue no puede satisfacernos, puesto ue su mantenimiento y eacerbaciónconviene, sobre todo, al sistema ue lo ha hecho nacerF pero es un desgarro del ue en #ltimo t+rminoestos adolescentes no tienen la culpa, más bien son su producto y, tal vez, su solución, a poco ue tal brecha se colme y la ira con ella Por otro lado, sería verdaderamente sorprendente ue los medios decomunicación dieran voz a los vecinos ue sí puedan estar de acuerdo, en mayor o menor grado, conla revuelta de sus hijosF al contrario, siempre enfocarán al ue se ueja y no comprende tanta furiadesatada 6in embargo, como en todas las revueltas de este tipo, esas complicidades eisten, y no haymejor ejemplo ue la ridícula concentración 'por el fin de la violencia y la discriminación(convocada el día 11 de octubre por /anlieues Eespects, 'un colectivo de 1C< asociaciones sociales delos barrios de las periferias de las grandes ciudades francesas( 8omo un periódico tuvo ue admitir con desgana, tal demostración de fuerza de la mayoría silenciosa, adulta y reformista de las banlieuatrajo a3(no más de B personas, de los cuales una buena parte eran miembros de los medios decomunicación, y pocos los ue habían viajado desde las zonas ue han sufrido la violencia de estasdos #ltimas semanas( !a anunciada >archa de la Paz ue debía seguir a esta concentración 'fueanulada( 6obran los comentarios

     I@ Podríamos decir algo parecido respecto a los ue rebuznan ue esta revuelta sólo es la epresiónde las tribus negras y árabes, sin relación posible con los proletarios franceses de pura cepa y sus'luchas(, y ue por lo tanto está aislada y no puede tener trascendencia alguna $n realidad, como enla rebelión de !os Hngeles de 1AA2, o en los disturbios de /riton de 1AD1, los jóvenes blancos perdedores se han sumado a la rebelión con tanto ímpetu como sus hermanos de otro color, mal ue les pese a !e Pen, a los islamistas y al $stado, ue medran por igual de las separaciones +tnicasartificiales y sólo temen ue puedan disolverse primero para disolver despu+s el chantaje económico; así a veces, las buenas noticias son tan buenas ue ni el espectáculo puede ocultarlas por completo'$l perfil sociológico de los detenidos corresponde a la población de los suburbios% abundan los jóvenes hijos de emigrantes, pero tambi+n los apellidos estrictamente franceses, los cabellos rubios ylos ojos claros(, reconocía con no menos desgana el mismo periódico )o es otra cosa la ue seescucha en los arrabales '!os alborotadores son magrebíes y subsaharianos, pero tambi+n francesesde toda la vida ue, hartos de tanta injusticia, salen a la calleF en este barrio todos sufrimos lainjusticia(, se dice en la banlieu de *oulouse, como se podría decir en cualuier otra parte dondereine la miseria pero todavía no la resignación !o mismo valdría para la tan cacareada inspiraciónislamista de los disturbios% ninguna prueba lo confirma, y los insurrectos se han cansado dedesmentirlo con sus palabras -'nadie nos controla, ni los caids de la droga ni los imanes islamistas(. y con sus actos -no haciendo ning#n caso de los llamamientos a la calma de las mezuitas y sus fatuasadormecedoras al mejor estilo de los estalinistas de antaño. Pero lo ue importa es negar laevidencia y, mejor a#n, suprimir las palabras del suburbio y su sentido% +stos ue son invisibles, ueno importan, tampoco tienen por u+ hablar y mucho menos ser oídos )i entendidos

     @ 0l mismo tiempo ue los modernos proletarios de $uropa jugaban con fuego y 'se uemaban(, en 0sturias varios mineros se encerraban en protesta por sus condiciones laborales y de vida $stoshechos visualizan la evolución del concepto de clase y de la conciencia de la eplotación por parte delos derrotados :ieja y nueva clase toman su relevo y adelantan lo ue será una realidad en unos

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    cuantos años en todo el continente Pero en este baile, los bailarines se mezclan formándose parejasinesperadas y prometedoras% si ponemos en relación la negatividad de los motines ue nos es vendidacomo suicida, nihilista y enlouecida, con otros conflictos sociales ue sólo merecen ese nombre porue comparten la misma desesperación, empezaremos a ver más claro $n efecto, más allá de ue provengan de una misma opresión, no tiene mucho sentido relacionar las actuales revueltas con lashuelgas generales de auí o de allá, las marchas de parados o las performances reivindicativas de los

    tunos de /ellas 0rtes% mejor hacerlo con conflictos como el de la fábrica de 8ellate en julio de 2,donde los trabajadores amenazados de despido amenazaron a su vez con volar la fábrica y los productos uímicos ue albergaba si no se les daba una salida mínimamente digna, arrojando al ríoun poco de sosa cáustica y de ácido sulf#rico para demostrar ue la pantomima no era su fuerte,ecelente ejemplo ue fue seguido por los obreros de la >ouline de 8ormelles -ue incendiaron partede las instalaciones. o los de la fábrica de cerveza alsaciana de 0delshoffen -ue se aprovisionaron debombonas de gas por si acaso., por no citar sino los conflictos más famosos de una reacción encadena de 'terrorismo social( -como lo llama el siniestro $uropean &oundation for the Improvement of !iving and or5ing 8onditions, ellos saben por u+. animada por el 'síndrome 8ellate( en el verano de 2, y ue se prolongará al año siguiente en las factorías tetiles de la firma >ossley conla uema de máuinas, mercancías y oficinas *ambi+n los periódicos -y los ecologistas orgánicos ylos revolucionarios del E+gimen. hablaron en estos casos de suicidio, nihilismo, locura, como lo hacen siempre ue se encuentran con lo incontrolable ue hoy, por desgracia, tiene ue presentarse con tanoscuros títulos para serlo de verdad !as mismas acusaciones se lanzan, por ahora en &rancia o Inglaterra y muy pronto por todas partes, contra esos nuevos obreros salidos de los suburbios, malosestudiantes ayer y peores trabajadores ahora, ue no contentos con escauearse todo lo ue puedenescuchando y bailando m#sica, bebiendo vino o hablando por el móvil, saltan sin previo aviso e'irracionalmente( a la mínima provocación de sus capataces, sin dudar en recurrir a la violencia y sin pararse a pensar en las obvias consecuencias de despido y, si las cosas han ido demasiado lejos,cárcel -1. )o discutiremos ue tal negatividad sea a su vez reflejo de la negación de la vida ue practica el capitalismo, y ue en sí es insuficiente Pero nos interesa señalar ue eiste, y ue eiste fuera de todo cálculo y de toda razón, especialmente de la Eazón de $stado -2., y ue es en esaeistencia y no en otra parte donde podrán encontrarse, si lo hacen, las diferentes revueltas, losverdaderos deseos, las nuevas utopías Por nuestra parte, y para empezar, sólo podemos volver a decir ue no será el miedo a caer en la ingenuidad el ue nos haga bajar tales banderas

     @I !a cantinela mediática gusta tambi+n de mostrar un hipócrita asombro ante la destrucción'gratuita( -Lahora tambi+n hay ue pagar para participar en un levantamientoM. de los mismosbarrios y propiedades de los alborotadores, calamidad incomprensible propia de estos tiemposdesnortados 6e dice además ue esta destrucción ciega es in+dita en la historia, ue nada parecidohabía pasado antes en ninguna revuelta, y menos en una revoluciónF y ue este dato vuelve ademostrar el carácter alienado y alienante de estos desenfrenos de furia baldía, buena para nadie, sino lo es para la dominación ue en #ltima instancia, ui+n si no, ha teledirigido los acontecimientos 9ejando a un lado las consideraciones ue ya hemos apuntado sobre el valor de uso real de esosbarrios y esas propiedades, así como del problema de la violencia ue el poder llama irracional  porue no es suya, habría ue preguntarse ahora dónde está esa supuesta novedad histórica en el comportamiento de estos nuevos bárbaros, novedad ue les descalificaría irremisiblemente ante el recuerdo de otros bárbaros ue, si lo eran, eran bárbaros ilustrados, homologados, diríamos ue de pata negra para esos buenos conoisseurs universitarios aficionados a la ?istoria 6ocial ue sedeleitan con las luchas pasadas para aborrecer las actuales y, sobre todo, las futuras Porue, Lcómo se comportaban acaso los rebeldes de !os Hngeles de 1AA2M L; los de /riton, *oteth, !yon o >arsella en 1AD1M L; los vecinos rabiosos del barrio de atts de ! 0 en 1AC

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    ue se libra en las villas miserias, favelas y bidonvilles de todo el tercer mundo, del caracazo de 1ADAal estallido de la 0rgentina de 9iciembre de 21M L; las mismas sufragistas de principios del siglo @@, burguesas ue destruían escaparates y mercancías burguesas en nombre de unos derechos Rue fueran limitados es otra cuestión= ue la burguesía patriarcal no uería reconocerM ; esto por nohablar de otros movimientos ue tenían las ideas más claras, la sangre más caliente y los puños más prontos )o hay nada nuevo en estos furores% los marginados suelen empezar por destruir el decorado

    deprimente e insoportable de su marginación, iniciando de paso la reapropiación urgente de los bienesde primera necesidad por la vía del saueo y del pillaje, lo ue siempre es muy bueno, aunue noacierten despu+s a destruir todo lo demás, lo ue sería mucho mejor

     @II !o ue dice esta gente tampoco resulta desconocido ')o ueremos dialogar con el gobiernoFnuestros padres, nuestras familias ya han recibido demasiados abusos tras sus discursos $l diálogo seha roto definitivamente, no pens+is en adormecernos )o podr+is manipularnos, a pesar de lautilización de imanes y portavoces ue empujáis a ue hagan llamamientos a la calma -. !a sociedad nos ha creado, lo ue prueba ue esta civilización corre a su p+rdida )o tenemos nada ue perder, preferimos morir rodeados de sangre ue de mierda(, aclaraba un panfleto firmado por unos'8ombatientes de la revuelta del AB(, y esas palabras se han pronunciado en otras bocas y en otrostiempos y lugares -B.% por ejemplo y para no ser reiterativos, este mismo año en )ueva Srleáns, dondeotra 'canalla(, por razones distintas pero no tanto, tambi+n saueó )o vamos a caer en la adulación y en la tentación de afirmar ue estas palabras y estos actos constituyan el #nico programarevolucionario posible *odo lo contrario% uizás sea el ue más se euivoca, precisamente por ser el más radical Pero es ue la guerra social hoy es así% fea, vulgar, euívoca, tan convulsiva comoepisódica, lastrada por mil adulteraciones del abyecto espíritu de la +poca, y seguramente condenadaal fracaso, una y otra vez 6in embargo, más allá de cualuier aprobación o condena teórica, práctica,moral, est+tica o pret=a=porter, es la guerra social ue nos ha tocado vivir en el peor de los mundos posibles, porue es el ue menos opciones da y dará para su hipot+tica superación )egar unarevuelta ue pasará a la historia como la primera gran toma de conciencia en $uropa por parte de susnuevos eplotados, ue ha obligado al $stado a tomar medidas de ecepción ue no se adoptaron ni enel >ayo del CD -decisión ue, no lo dudemos, nunca agrada al poder en cuanto ue permite atisbar ue no está tan seguro de sí mismo y ue le castañean los dientes al primer atisbo de enfrentamiento serio., ue se ha contagiado a otros países, ue no va a desaparecer tan fácilmente de la memoria delos insurrectos por mucho ue se empeñe el espectáculo, y ue ni siuiera ha terminado sino ue se hatransformado en una revuelta de baja intensidad, negar su cualidad radical porue hay platos rotos, o porue falta programa, programa, programa, o porue no se aprecian sus frutos inmediatos, o poruetenga efectos 'contraproducentes( cuando lo verdaderamente contraproducente es ue se etinga laidea misma y la práctica real de la revuelta, es falsificar el problema en vez de ayudar a su resolución

     !a revuelta ha llegado, y lo ha hecho para uedarse !os inmigrantes, y con ellos todos los proletariosue a base de sangre, sudor y lágrimas reaprenden ue lo son, han pasado de dar las gracias a eigir  su derecho a vivir Por todos los medios necesarios $l dilema es bien sencillo y ya se planteó en 1A77%L*e haces con la situación o acatas órdenesM L:as hacia atrás o vas hacia delanteM

     )oviembre 2<

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    Trupo 6urrealista de >adrid 8olectivo de *rabajadores 8ulturales !a &elguera ->adrid=*enerife.Sígeno -!ogroño.

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     !as malas compañías de 9urruti -!ogroño=Uaragoza. &ahrenheit Gadrid.

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    1 ?asta tal punto ha llegado la 'falta de respeto( y la ingobernabilidad de estos trabajadores

     sauvageons -salvajes, insociables. salidos de las banlieus, ue se ha propagado una ola dedepresiones y bajas laborales entre los jefes de personal y de recursos -in.humanos $l síndrome de laenfermedad vergonzosa, la llaman, porue ning#n directivo uiere reconocer ue ahora, por una vez y para ue sirva de precedente, es +l el maltratado en vez del maltratador Vn detallado análisis de tandelicioso fenómeno puede ser leído en $changes nW AA, invierno 21=22% 8uando las empresasbuscaban asalariados 'honestos y manejables(, ? 6

    2 9ebería ser innecesario contestar a los reprimidos y a los tristes ue sólo ven en las revueltas #nica y eclusivamente las maniobras del poder, ue se serviría de ellas para dirimir rencillas dentro del  gobierno franc+s, facilitar el control parapolicial de mafias y mullahs, o incluso hasta para lanzar un Plan Eenove más grosero de lo habitual >aniobras hay, y para todos los gustos Pero tambi+n acciónautónoma de los resentidos con causa, porue de ninguna manera toda reacción popular está ya prevista y descontada por el poder *al apriorismo significaría, como decía el Trupo 6urrealista de8hicago ante parecidas acusaciones en los días del levantamiento de !os Hngeles, 'reducir a lasmasas al estado de meros objetos de la historia, víctimas inevitables de una autoridad omnipotente(-*res días ue estremecieron el nuevo orden mundial, 1AA2. Puede ue así lo sean a veces, pero no siempre, ni totalmente Por eso se rebelan% ese es el #nico sentido de la historia ue todavía les ueda, y es ue, en materia de rebelión, ninguno de ellos necesita antepasados )o es poco% si a losinsurrectos les falta tal vez teoría revolucionaria -y a ui+n no., les sobra en cambio, como a suscamaradas de !os Hngeles, una nueva conciencia radical ue no admite recuperación posible

    B 'Para el poder y los ue piensan como +l, los saueadores del 1 de diciembre no se oponían a nada, puesto ue nada reivindicaban -3. ; en efecto, si no han rechazado nada en particular es poruerechazan todo lo ue emana del p#trido orden mercantil, amo y señor de todo lo ue eiste !osamotinados habían abandonado toda consigna particular y plasmaron en la fachada del edificio saueado el programa ue habían esbozado sobre el terreno% '>uerte al 4apital( -9efensaincondicional de los vándalos del 1 de diciembre, diciembre de 1ADD, Vnos 8aníbales. '0lgunosimb+ciles afirman ue la juventud de hoy no tiene ue rebelarse, sino integrarse LIntegrarse a u+ML0 un barco ue ha naufragadoM L0l comercio polucionante ue llamamos economíaM L0 esta películainconsistente donde el aburrimiento lujoso de una minoría prospera sobre la opresión real de lamayoría de la humanidad ue llamamos sociedad modernaM $n esto consiste el euilibrio% en ladomesticación de los seres humanos( -:olcán de otoño, diciembre de 1ADC, >arie=Qeanne.'Provocadores, anaruistas, comunistas, pun5s, rojos, heavys, mods, roc5ers, macarras y sinvergXenzas, toda esa fauna nos concentramos allí, no sólo por reivindicaciones estudiantiles, sino porue tambi+n estamos hartos del paro, de la mili, de la democracia burguesa, de la represión policial, de las cárceles -3. ; es ue está muy claro% no hay futuro para nosotros !a violencia estatal  genera violencia en la calle 6i se desata nuestra violencia es porue tenemos ue sufrir la violencia social día a día )o se etrañen, pues, del vandalismo de los jóvenes 8abría preguntarse uien es el más vándalo auí, si nosotros o el sistema en el ue, por desgracia, nos ha tocado vivir Yue no diganue la violencia nunca está justificada, porue en nuestro ambiente la violencia es obligada(-declaraciones de un joven 'provocador( a $l País, citado por >iguel 0morós en Informe sobre el movimiento estudiantil, 1AD7. ')o tenemos ning#n porvenir ue pueda calmarnos )os uieren carnede fábrica o carne de prisión% y no ueremos ser ni la una ni la otra $scandalizamos, porue no

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    tenemos ning#n fin positivo cuya satisfacción pudieran administrar nuestros enemigos 6omostotalmente negativos, y ahí reside nuestra fuerza( -$pedición sin retorno, otoño de 1AD1, !es fossoyeurs du vie monde. Eeleyendo estas declaraciones, tan similares a las de hoy, ue seescribieron y dijeron en otras +pocas y respecto a otros conflictos -un motín en Uaragoza ue desbordóla campaña de preparación de la huelga general del 1G=9 de 1ADD, las manifestaciones estudiantiles francesas de 1ADC y españolas del año siguiente, las revueltas inglesas y francesas de 1AD1., hay ue

    reconocer ue los insurrectos de 2< no viven completamente sumergidos en el vacío de la memoriahistórica del ue se ha hablado -y ue en efecto eiste., ni han olvidado las viejas verdadesantipolíticas de la guerra social% al menos, saben recordarlas por intuición, o las redescubren en lacalle por necesidad !os dos procesos suelen actuar unidos