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LA TUTORÍA EN LA ESCUELA NORMAL DE
AGUASCALIENTES. UNA EXPERIENCIA EN
EL PROGRAMA DE CAPACITACIÓN
NACIONAL PARA DOCENTES 2018
Liliana Noemí González Miranda [email protected]
Raul Amigon Garcia [email protected]
Benemérito Instituto Normal del Estado de Puebla “Gral. Juan Crisóstomo Bonilla”
RESUMEN
La Secretaría de Educación Pública
(SEP), a través de la Coordinación Nacional de
Becas de Educación Superior (CNBES), en
conjunto con la Dirección General de
Educación Superior para Profesionales de la
Educación (DGESPE), publicaron la
convocatoria del Programa de Capacitación
Nacional para Docentes de Escuelas Normales
Públicas 2018, intercambio de movilidad, con el
cual fue beneficiada una servidora, docente del
Benemérito Instituto Normal del Estado de
Puebla “Gral. Juan Crisóstomo Bonilla” (BINE),
con el propósito de llevar a cabo el proyecto
que comprende del 20 de agosto al 14 de
diciembre de 2018. El objetivo de la ponencia
es socializar los resultados de la investigación
realizada en la Escuela Normal de
Aguascalientes (ENA)..
PALABRAS CLAVE: Tutoría, formación de profesores, proyectos institucionales, educación normalista.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Actualmente, México presenta un elevado número de estudiantes que desertan del
nivel superior. Se han analizado las diferentes causas que lo provocan y éstas se pueden
englobar en la falta de recursos económicos, falta de vocación y problemas personales como
son: embarazos no planificados, desintegración familiar, depresión, desórdenes alimenticios,
bullying, falta de atención y motivación, etc.
De acuerdo con los datos de 2018 que expone el Instituto Nacional de Estadística y
Geografía (INEGI), se muestra la tasa de abandono escolar en el Estado de Puebla y
Aguascalientes, en ambos estados se puede observar que es alto el índice, las interrogantes
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que esto genera son ¿qué está haciendo mal el sistema educativo en el nivel superior?, ¿qué
trabajo falta realizar a nivel superior para evitar que los alumnos abandonen los estudios?, y
¿cuál es el secreto para evitar la deserción estudiantil en nivel superior?
Actualmente, las entidades educativas están tomando cartas en el asunto proponiendo
estrategias que beneficien a este nivel educativo; un ejemplo de ello lo podemos observar en
el Benemérito Instituto Normal del Estado de Puebla “Gral. Juan Crisóstomo Bonilla” (BINE).
Una de las acciones emprendidas por la institución es la implementación de la tutoría a través
de un programa institucional. Al igual que el Programa Institucional de Tutoría (PIT) existen
otros programas institucionales como Asesoría Académica y la unidad de Psicopedagogía,
los cuales buscan ofrecerle al alumno una educación integral y de calidad, es decir, brindarles
apoyo académico y personal que les ayude a culminar exitosamente sus estudios superiores
para insertarse al campo laboral.
MARCO TEÓRICO
La tutoría es un tema antiguo que se ha trabajado a través de los tiempos en diferentes
lugares como Grecia, Roma, Reino Unido, Australia, Estados Unidos, España etc.; cada uno
con un enfoque específico y dando como origen tres modelos de tutor específicamente: “El
modelo alemán o humboldtano que tiene como objetivo la formación científica; el modelo
francés o napoleónico que persigue como objetivo la formación para la profesión; y el modelo
anglosajón que concibe la tutoría para el desarrollo humano” (Díaz, Bravo, González,
Hernández, Menes, Bratuet, 2012, p. 91).
Por otra parte, respecto a México, la tutoría se incluyó hasta el año 2000 a diferencia
de otros países que la trabajan desde tiempo atrás.
Asimismo, la figura del tutor no es exclusiva de los estudiantes con dificultades
académicas y/o personales, sino que el estudiante debe poseer un tutor, quien lo acompaña
a lo largo de la carrera, como forma de alcanzar un mejor desempeño, consolidar relaciones
afectivas y comunicativas, así como para dar seguimiento a la evolución del educando (Díaz,
et al. 2012, p. 93).
Por otra parte, la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones en Educación
Superior (ANUIES, 2000) define la tutoría como “un proceso de acompañamiento de tipo
personal y académico del alumno a lo largo de su proceso formativo, con el objetivo de
mejorar su rendimiento académico, solucionar problemas escolares, desarrollar hábitos de
estudio, trabajo, reflexión y convivencia social” (p.50).
En cuanto al Plan de Apoyo a la Calidad Educativa y la Transformación de las Escuelas
Normales (PACTEN, SEP, 2018) estimula la organización, el funcionamiento y la
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transformación de las normales, en aras de la calidad educativa y su consolidación como
Institución de Educación Superior (IES). Por ello, las principales áreas de intervención del
plan se encaminan al desarrollo académico y de gestión de las Escuelas Normales (EN),
haciendo énfasis el día de hoy en “la realización de programas formales y permanentes de
tutoría y asesoría, así como programas de seguimiento a egresados” (SEP, 2018, p. 5).
Por otra parte, el PACTEN 2018-2019 menciona: Que el objetivo de los programas de
tutoría, asesoría y apoyo a estudiantes de nuevo ingreso es desarrollar programas y
actividades para estudiantes de 1º a 6º semestres, tener un acompañamiento para titulación
a estudiantes de 7º y 8º semestres. Por otra parte, crear programas de apoyo para alumnos
de nuevo ingreso, así como tutoría para la práctica docente dentro de las instituciones.
Finalmente, crear estrategias para los estudiantes que presenten carencias académicas
detectadas en los exámenes de ingreso al servicio (SEP, 2018, p. 6).
Finalmente, el nuevo modelo educativo propone en el rediseño curricular de las
normales, la incorporación de la educación socioemocional. Por lo tanto, se deben considerar
las problemáticas académicas y personales que los estudiantes presentan. Esto los apoyará
en su formación integral, así como en el cumplimiento de ofrecer una educación de calidad
(SEP, 2017).
De acuerdo con lo mencionado anteriormente, si un adolescente logra tener un
equilibrio entre la parte académica y emocional, el desempeño que logrará a lo largo de su
formación docente y en su vida diaria será el idóneo y se obtendrán egresados competentes
y satisfechos, de acuerdo al programa educativo en el que se encuentren.
Por lo tanto, se busca fortalecer el desarrollo de habilidades y competencias en los
estudiantes de las Escuelas Normales con la finalidad de incrementar el porcentaje de
egresados de cada institución educativa, así como lograr una educación integral para cumplir
una de las metas principales del Gobierno Nacional, que es ofrecer educación de calidad.
Se puede concluir que el tutor es un facilitador a cargo de un pequeño grupo de
estudiantes, a los cuales debe caracterizar y diagnosticar tras atender las dimensiones socio-
familiar, personal, académica y laboral para conocer y satisfacer los requerimientos
educativos (Díaz, et al. 2012, p. 92).
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METODOLOGÍA
La metodología que se llevó a cabo en esta investigación fue cuantitativa-descriptiva.
Según Hernández, et al. (2010), los estudios descriptivos buscan especificar las propiedades,
características y perfiles de personas, grupos, comunidades, procesos, objetos o cualquier
otro fenómeno que se someta a un análisis. Es decir, únicamente pretende medir o recoger
información de manera independiente o conjunta sobre los conceptos a los que se refieren
(p.80).
DESARROLLO
El objetivo de esta investigación se basó en fortalecer y estandarizar el proceso de
acción tutorial en la Escuela Normal de Aguascalientes (ENA), ubicada en Avenida Paseo de
la Cruz No. 904, Fracc. IV Centenario CP. 20260. El proceso de dicha investigación consistió
en:
1. Realizar la encuesta para las coordinadoras de ambas licenciaturas, coordinación
de tutoría, docentes, tutores y alumnas de la licenciatura en preescolar y primaria.
2. Aplicar las encuestas.
3. Llevar a cabo el análisis cuantitativo y cualitativo de la información.
4. Realizar la presentación de resultados.
5. Concluir con un taller para los tutores.
De acuerdo con lo mencionado anteriormente, se pretendió conocer la opinión, el
funcionamiento y las necesidades de los tutores, pero principalmente, se identificaron las
problemáticas que se presentan dentro del aula con las alumnas de la ENA. Así, se generó
una propuesta de intervención tutorial para mejorar el desempeño académico y personal de
las alumnas de dicha institución, para así formar docentes con el perfil de egreso idóneo,
evitando la deserción estudiantil.
Las técnicas empleadas para la recogida de información fueron encuestas realizadas
al coordinador del área de tutoría, a las coordinadoras de ambas licenciaturas, a cinco de 14
tutores y se aplicó la encuesta a una muestra representativa del 35% del universo de alumnas,
es decir, 155 estudiantes de tercero, quinto y séptimo semestre de ambas licenciaturas, de
un total de 442. El tipo de muestra de dicha investigación es intencionada, ya que se eligieron
a las primeras diez o quince alumnas de cada grupo, de acuerdo a la lista de asistencia.
Cabe señalar que las alumnas de primer semestre no se tomaron en cuenta para la
muestra porque son de nuevo ingreso y es muy poco el aporte que pudieran dar a dicha
investigación con respecto al PIT.
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RESULTADOS
En cuanto a la presentación de resultados, la entrevista realizada a la coordinadora de
tutoría, quien lleva seis años laborando en la institución, de los cuales, un año y medio se ha
desempeñado como coordinadora del área, menciona que su función principal es dirigir a los
tutores de manera colaborativa al trabajo tutorial. Por otra parte, comenta que el objetivo de
la tutoría es orientar, apoyar y dar seguimiento en relación con los procesos de aprendizaje y
trabajo.
Es importante mencionar que anteriormente la tutoría en la ENA se había llevado de
manera extracurricular y los resultados no habían generado un alto impacto en la institución.
A partir del semestre A del ciclo escolar 2018-2019 se le asignaron a cada tutor tres horas a
la semana dentro de la carga horaria para realizar tutoría, de las cuales dos horas
corresponden a tutoría grupal y una hora para realizar tutoría individual o trabajo
administrativo del área.
También se menciona en la encuesta que no existe un plan de trabajo contextualizado
y colaborativo, es decir, no cuentan con un proceso de canalización de las alumnas en riesgo,
así como tampoco utilizan un canal de comunicación establecido que le permita a todas las
áreas tener conocimiento de las problemáticas que se viven dentro del aula y así poder
gestionar acciones correctivas.
En cuanto al seguimiento de la acción tutorial que tiene el coordinador, es a través de
tres reuniones con los tutores que se agendan a lo largo del semestre y algunas otras no
previstas de manera individual. Asimismo, cada tutor, al final del semestre, debe entregar una
carpeta física con las evidencias del trabajo realizado en el grupo y la evaluación que se
realiza es por medio de encuestas al final del semestre, con el objetivo de tomar decisiones
respecto a quién permanece como tutor. Sin embargo, no se profundiza en la información que
las alumnas proporcionan respecto a los tutores y no se realiza una retroalimentación con los
tutores de lo que están haciendo bien o de las áreas de oportunidad en las que deben trabajar.
Finalmente, la coordinadora hace mención de que el proyecto que tiene para el área
es realizar un taller de intercambio tutorial con las diferentes normales de Aguascalientes, con
el objetivo de unificar el enfoque y el proceso tutorial. De igual forma, hasta el momento no
se ha ofrecido capacitación al personal para desempeñar esta función.
En cuanto a la encuesta realizada a cinco de los 14 tutores, la cual tuvo como objetivo
conocer el funcionamiento y organización del programa de tutoría en la ENA, los resultados
se muestran de manera general y global a continuación.
El tiempo que llevan laborando en la institución varía entre cada tutor, siendo dos años
y medio quien tiene la menor antigüedad y 12 años el que ha prestado sus servicios por más
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tiempo. Asimismo, el tiempo que llevan siendo tutores varía, quien más ha durado
desempeñándose en esta área son cinco años y quien tiene menos tiempo, dos meses.
Respecto al perfil académico de los tutores es importante señalar que cuatro de los
encuestados tienen posgrado, mientras que un solo tutor cuenta con el grado de licenciatura.
Se hace énfasis en esta parte porque la mayoría de los docentes tiene el perfil idóneo para
desempeñar la labor docente.
Cabe mencionar que no se tienen bien identificadas cuáles son las funciones del tutor
porque en la encuesta la mayoría escribió características diferentes. Por ejemplo, que el tutor
es quien ayuda a las alumnas en lo cognitivo y emocional, brinda asesoría para trabajo grupal,
ofrece tutoría individual, promueve un ambiente cordial en el aula, orienta a las alumnas en
lo académico y las acompaña en sus actividades dentro de la institución, que es el vínculo
entre la dirección y el grupo y, por último, coadyuva el logro de propósitos en tiempo y forma.
También mencionaron que el objetivo de la tutoría en la ENA es darles
acompañamiento a las alumnas en el ámbito académico y personal; orientar y apoyar a que
las alumnas concluyan sus estudios y se inserten armónicamente al campo laboral; orientar
a las alumnas de manera integral; lograr que las alumnas superen dificultades que les impidan
estudiar y, finalmente, que su estancia sea acompañada hacia el logro del perfil de egreso.
En cuanto al tipo de tutoría que realizan los tutores, todos coincidieron en llevar a cabo
la tutoría individual y grupal. Por otra parte, entre 29 y 40 es el total de tutoradas que atiende
cada tutor. En cambio, es importante resaltar que los tutores no conocen muy bien el perfil
que se requiere para serlo, porque sus respuestas fueron que el tutor debe tener mucha
disposición, simplemente trabajar en la ENA, tener experiencia frente a grupo y los más
acertados dijeron que debe ser empático, tener solvencia moral, buena escucha, actitud de
servicio, compromiso, autoconocimiento y, finalmente, alto valor personal.
La información que proporcionaron los tutores sobre la implementación de un proyecto
enfocado al grupo del cual son tutores fue que no cuentan con el mismo y los otros tres tutores
hacen mención de que algunos temas son: desarrollo socioemocional, análisis de la vida de
mujeres que cumplieron sus sueños rompiendo paradigmas a través de la lectura de un libro
y, finalmente, fortalecer la identidad docente para lograr una calidad educativa. Sin embargo,
no existe un sustento o diagnóstico que avale el por qué, para qué y cómo del proyecto.
De acuerdo con el proceso de canalización para aquellas alumnas que presenten algún
tipo de riesgo académico y/o personal, se observa que los tutores no tienen un proceso
específico para canalizar a las alumnas, algunos comentaron que utilizan la matriz FODA
(fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas), otros que a través de la tutoría individual
y/o grupal y a través del llenado de un formato para canalización.
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Cabe resaltar que, según los tutores encuestados, las causas de deserción estudiantil
en las licenciaturas de la ENA es principalmente la falta de vocación, problemas económicos
o familiares y situaciones personales, como embarazos no planeados, entre otros.
Algunos tutores comentaron que desconocen si existen cursos de actualización tutorial
porque tienen muy poco tiempo desempeñando esta función, mientras que otros dijeron que
no existen dichos cursos y, finalmente, algún tutor mencionó que ocasionalmente lo organiza
la coordinación.
Respecto a si los tutores cuentan con las herramientas necesarias para llevar a cabo
su función como tutor, la mayoría contestó que no, porque consideran que no tienen el perfil
idóneo o tienen poco tiempo desempeñándose en esa área, mientras que los demás dijeron
que sí cuentan con el perfil, porque hay un psicólogo educativo y un docente que tiene
formación en teatro y emplea estas estrategias dentro del aula.
En cuanto a las estrategias funcionales que utiliza un buen tutor se encuentran:
conocer el propósito de las actividades, el diálogo cara a cara, la comunicación asertiva,
practicar ejercicios de autoestima y resiliencia, promover dinámicas basadas en el teatro para
el autoconocimiento, generar empatía, realizar actividades enfocadas en el trabajo
cooperativo, etc.
Asimismo, los tutores mencionaron que dos o tres veces al semestre la coordinadora
de tutoría realiza reuniones para tomar acuerdos o hablar sobre las diferentes problemáticas
con las alumnas. De igual forma, la coordinadora tiene apertura para hablar con los tutores
y/o alumnas cuando así lo requieran. Sin embargo, la problemática con la que se enfrentan
es el horario, ya que muchas veces no coinciden en los tiempos.
Finalmente, se les preguntó sobre el mayor reto al que se han enfrentado como tutores
y las respuestas fueron las siguientes:
· Falta de conocimiento sobre el programa de tutoría y sobre el rol del tutor.
· La tutoría individual es complicada cuando los grupos son numerosos.
· Falta de apoyo por parte de los directivos.
· La canalización no oportuna de las alumnas en riesgo.
A continuación, se presentan los resultados cuantitativos de la encuesta realizada, la
cual tuvo como objetivo conocer el trabajo que se realiza desde el programa de tutoría, así
como la perspectiva de las alumnas de la licenciatura en educación preescolar y primaria
respecto al ambiente que se percibe dentro del aula y su opinión de acuerdo al trabajo tutorial
que se ha tenido a lo largo de los diferentes semestres que han cursado.
En cuanto a las ‘actividades propias de la licenciatura’, de la primera pregunta de la
encuesta, 129 de las 155 de las alumnas encuestadas, es decir, el 83.2% están
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completamente de acuerdo en que la ENA debe generar visitas a parques, museos y
exposiciones.
Respecto a la organización de encuentros deportivos, 80 de 155 alumnas, es decir,
51.6% de las encuestadas están completamente de acuerdo con que se lleven a cabo.
Asimismo, 127 de 155 alumnas encuestadas, es decir, 81.9% están completamente de
acuerdo en que la ENA organice visitas académicas y culturales a otros estados de la
república para conocer otras ideologías, costumbres y tradiciones. Por otra parte, 49 alumnas
de 155 están completamente de acuerdo en cuanto a realizar servicios sociales o actividades
de vinculación en alguna casa cuna o casa hogar. En cuanto a organizar concursos de talento,
fonomímicas, etc., 40 de las 155 encuestadas están completamente de acuerdo en que se
lleven a cabo.
Respecto a la realización de conferencias en la ENA con expertos en diversos temas
de interés de las alumnas, los resultados fueron que 89 encuestadas están totalmente de
acuerdo con que se realicen este tipo de actividades.
Respecto al ambiente escolar, el objetivo fue conocer la forma en que las alumnas
perciben la situación que se presenta en el aula, siendo la convivencia sana un punto crucial
para el buen desempeño académico y que ayudará a los docentes a lograr un mayor índice
de aprobación y no deserción estudiantil.
En cuanto a que en el grupo existe un ambiente cálido de cercanía y unión entre las
compañeras, únicamente 12 de 155 encuestadas contestaron que esto es muy frecuente,
mientras que 61 alumnas lo consideran frecuente, 58 medianamente frecuente, 18 poco
frecuente y 6 dicen que no sucede.
Por otra parte, 65 de las 155 encuestadas, es decir, el 41.9% mencionaron que es muy
frecuente que existan compañeras líderes que organizan al grupo para alcanzar objetivos
comunes. Asimismo, 60 de 155 alumnas mencionan que es frecuente que en el grupo existan
ganas de cooperar para invertir en proyectos extra que pide la escuela.
En cuanto a que hay alumnas que son excluidas por otras compañeras, 69 de 155
alumnas contestaron que no sucede, es decir, el 44.5% se inclinaron por esta opción. De igual
forma se indagó si en los grupos existen rivalidades muy marcadas entre compañeras y 50
de 155 mencionaron que es poco frecuente.
Mientras que la opinión de las alumnas en cuanto a si el ambiente grupal se siente
tenso por diferencias entre las compañeras, 56 dijeron que es poco frecuente. En cambio, 44
de 155 encuestadas dijeron que es poco frecuente que en los grupos exista apatía para
participar en clase. Sin embargo, 52 de 155 encuestadas mencionaron también que es poco
frecuente que en los grupos haya compañeras introvertidas que no se integran a la dinámica
grupal.
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Por otra parte, 112 de 155 encuestadas, es decir, el 72.2% dijeron que los salones
están divididos por ‘grupitos’ muy frecuentemente. En cuanto a si las alumnas se encuentran
identificadas y con la ‘camisa puesta’ como estudiantes de la ENA, 69 de 155 encuestadas
dijeron que es muy frecuente.
Mientras tanto, en cuanto a la percepción de las alumnas acerca de la relación que
tienen con los docentes, directivos y administrativos, 66 de 155 encuestadas contestaron que
es cordial y de apoyo. Finalmente, 74 de 155 encuestadas dijeron que es frecuente que se
perciba un ambiente cordial y armonioso entre los docentes.
En cuanto al programa de tutoría, el objetivo fue conocer la opinión de las encuestadas
respecto al funcionamiento de dicho programa y así, poder realizar una propuesta de trabajo
en la ENA. Respecto a si el programa de tutoría ha servido de apoyo para las alumnas, 38
contestaron que están de acuerdo. Por otra parte, 61 de 155 encuestadas, es decir, 39.3%
dijeron que están completamente de acuerdo en que la figura del tutor está basada en la
empatía. De igual forma, 49 de 155 encuestas están medianamente de acuerdo en que el
tutor las ha orientado correctamente durante la carrera. Asimismo, se les preguntó su opinión
respecto a si el espacio físico para la tutoría individual y grupal es el idóneo, a lo cual, 44 de
155 alumnas contestaron que están completamente de acuerdo.
En cambio, 50 de las 155 encuestadas están de acuerdo con las actividades que
realiza el tutor porque son las adecuadas para lograr el objetivo que busca el programa.
Referente a la necesidad de canalizar de forma externa a las alumnas para atender
problemáticas personales no resueltas en la institución, 50 de 155 encuestadas, es decir,
32.2% están completamente de acuerdo con la opción de canalización externa. También, 98
de las 155 encuestadas, es decir, 63.2% están completamente de acuerdo con que el
acompañamiento psicológico sirve de apoyo para un buen desempeño académico y personal.
Finalmente, 96 de 155 encuestadas, lo que equivale al 61.9%, dijeron que están
completamente de acuerdo en que aceptarían el apoyo de una dependencia externa para
atender algunas problemáticas específicas, si así se requiriera.
Por otra parte, el instrumento tiene un apartado de preguntas cualitativas, las cuales
se basan en el conocimiento de los temas de interés para que se tomen en cuenta al momento
de ofrecer conferencias, de igual forma, la opinión de las alumnas en cuanto al programa de
tutoría, recomendaciones que le harían a su tutor para mejorar el desempeño en el aula y,
por último, conocer cuáles son las mejoras que le hacen falta a la ENA para ofrecer una
educación de calidad. Esta información se presenta en el apartado de anexos junto con las
gráficas que sustentan lo mencionado anteriormente.
A continuación, se muestran los resultados del taller para fortalecer la tutoría en la
ENA, llevado a cabo el día martes 27 de noviembre de 2018 en el salón multimedia de dicha
institución, en un horario de 18:30 a 20:30 hrs.
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El objetivo principal de este taller fue, en primera instancia, darles a conocer los
resultados de las encuestas realizadas a las alumnas y, en segunda instancia, fortalecer el
programa institucional de tutoría para estandarizar el trabajo del docente tutor en la ENA.
Cabe resaltar que se esperaba la asistencia de entre 18 y 20 docentes, entre ellos, la
directora, el subdirector, los coordinadores de las licenciaturas, la coordinadora de tutoría y
los tutores de ambas licenciaturas. Sin embargo, fueron en total 14 asistentes al taller y cabe
resaltar que entre las asistentes estuvieron las coordinadoras de bachillerato, turno matutino
y vespertino, así como la coordinadora de tutoría de bachillerato, la directora, el sub director,
etc.
En cuanto al desarrollo del taller, originalmente se tenían contempladas tres horas para
llevarlo a cabo, sin embargo, por la hora y por el cansancio de los docentes se solicitó reducir
el tiempo, por lo que se decidió no llevar a cabo dos actividades. Una fue la actividad “El ciego
y el lazarillo”, la cual tenía como objetivo romper el hielo y la otra no se pudo realizar por falta
de internet, pues se trataba de la transmisión de un cortometraje llamado La luna. Es así
como se le dio prioridad a mostrar la información obtenida en la investigación, así como al
contenido teórico del taller. El contenido del taller consistió en:
1. Antecedentes de la tutoría
2. Definición de tutoría
3. Objetivos de la tutoría
4. Perfil del tutor
5. Habilidades del tutor
6. Tipos de tutoría
7. Dimensiones de la tutoría
8. Fases de la tutoría
9. Propuesta de plan de acción tutorial
10. Proceso de canalización
11. Canal de comunicación
12. Estructura de carpetas digitales
13. Revisión propuesta de formatos estandarizados
Finalmente, al término del taller se entregó a los asistentes una lista de cotejo con el
objetivo de evaluar el desarrollo y el contenido impartido en el taller, así como observaciones
que pudieran hacer de acuerdo a lo que se presentó.
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CONCLUSIONES
Es de suma importancia el fortalecimiento de la tutoría en las Escuelas Normales, ya
que es una estrategia innovadora que le servirá a la ENA para disminuir la deserción
estudiantil, así como para ofertar una educación integral y de calidad que al mismo tiempo
beneficie a la sociedad de Aguascalientes.
De acuerdo a Castellanos mencionado por Ramos (2011), la tutoría debe considerarse
como un aspecto esencial de la función docente, así como estar sujeta a una adecuada
planificación y organización que requiere la participación de diversos actores (pp. 49).
Como se mencionó anteriormente, el proceso de acción tutorial es complejo, las fases
que lo comprenden son la planeación, el diseño, la implementación y la evaluación, pero
cuando el trabajo está organizado y realizado con base en un diagnóstico y enfocado a un
propósito en específico, el proceso de acción tutorial es mucho más sencillo de llevar a cabo
y los resultados son mucho más tangibles (Ramos, 2011).
De acuerdo con lo anterior, es de suma importancia realizar un trabajo colaborativo
con las diferentes áreas involucradas, que son la dirección y la subdirección, las
coordinaciones de las licenciaturas, las coordinaciones de tutoría, el departamento de
psicología, los tutores y las alumnas de la Licenciatura en Educación Preescolar y Primaria
de la institución para lograr el impacto y el fortalecimiento en el programa de tutoría en la
ENA.
Es importante mencionar que la evaluación dentro del proceso tutorial es crucial, ya
que los resultados obtenidos son el punto de referencia de lo que está bien y lo que no está
funcionando, para poder tomarlo como un área de oportunidad. Lo que debe ser evaluado
cada semestre es el impacto del proyecto de la coordinación de tutoría, así como el
desempeño que cada tutor tuvo en el aula, para que este último sea evaluado por parte de
las alumnas a través de una encuesta. De igual forma, los tutores deberán recibir una
retroalimentación del trabajo realizado durante el semestre para lograr una mejora continua.
Por otra parte, para llevar a cabo la tutoría en el nivel superior, se necesitan diferentes
recursos, como los personales, los económicos, los tecnológicos y los administrativos. Esto
para implementar todas las modalidades de tutoría, ya sea presencial o virtual, individual,
grupal o entre pares.
Asimismo, la capacitación y actualización tutorial debe ser constante, ya que esto
permite expandir el conocimiento, aprender nuevas estrategias que se puedan implementar
en el aula y el desarrollo profesional de cada tutor. Por lo tanto, esto se debe considerar dentro
del Plan de Acción Específica (PAE) que elabore la coordinación de tutoría.
A su vez, se debe estandarizar la información solicitada por la coordinación de tutoría
y emitida por los tutores, por ejemplo, los instrumentos de canalización, los proyectos de cada
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tutor, el plan de acción tutorial de la coordinación, las carpetas físicas que se deben entregar,
entre otros. Lo anterior, con el objetivo de facilitar el trabajo administrativo y recabar la
información más relevante del área de una manera organizada.
Por su parte, el modelo humanista que la ANUIES (Ramos, 2011) propone para el nivel
superior, tiene como objetivo preparar seres humano capaces de afrontar de la mejor manera
las problemáticas que se presenten a lo largo de la vida. Por ello, la ENA debe considerar el
apoyo psicológico para que sirva de guía y orientación en la vida profesional y personal de
las estudiantes (p. 37).
Por lo anterior, se concluye que la acción tutorial va más allá de una comisión laboral,
de manera que debe otorgarse a los docentes que tengan el interés, compromiso y el perfil
idóneo para ser tutor, porque como se menciona en el documento, la empatía y el trabajo
colaborativo son las características principales para lograr un buen desempeño entre alumno
y tutor, logrando así el desarrollo integral de las alumnas.
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REFERENCIAS
Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior. (2000).
Programas Institucionales de Tutorías, Una propuesta de la ANUIES para su
organización y funcionamiento en las Instituciones de Educación Superior. México,
ANUIES.
Cisneros, L. y Robles, S. (2004). La tutoría académica y la calidad de la educación. Colección
apoyo al tutor. México: UDG.
Díaz, J., Bravo, G., González, Y., Hernández, E., Menes, L. y Bratuet, Y. (2012). El papel del
tutor en la Educación Superior. Cuba: MediSur.
Hernández, R., Fernández, C. y Baptista, M. (2010). Metodología de la investigación. México:
McGraw-Hill
Instituto Nacional de Estadística y Geografía. (2018). Tasa de abandono escolar por entidad
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2017/2018. Recuperado de:
http://www.beta.inegi.org.mx/app/tabulados/pxweb/inicio.html?rxid=85f6c251-5765-
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Ramos, A. (2011). La tutoría una estrategia innovadora en el marco de los programas de
atención a estudiantes. México: ANUIES.
Secretaría de Educación Pública. (2018). Plan de Apoyo a la Calidad Educativa y la
Transformación de las Escuelas Normales 2018-2019. México: SEP.