la revolución francesa en el cine - periódico diagonal

4
La Revolución Francesa en el cine Publicado en Periódico Diagonal (https://www.diagonalperiodico.net) La Revolución Francesa en el cine Enviado por pabloelorduy el Lun, 07/14/2014 - 08:00 Antetítulo portada: Filmoteca Foto portada: Página 1 de 4

Upload: others

Post on 08-Nov-2021

4 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

La Revolución Francesa en el cinePublicado en Periódico Diagonal (https://www.diagonalperiodico.net)

La Revolución Francesa en el cineEnviado por pabloelorduy el Lun, 07/14/2014 - 08:00 Antetítulo portada: FilmotecaFoto portada:

Página 1 de 4

La Revolución Francesa en el cinePublicado en Periódico Diagonal (https://www.diagonalperiodico.net)

Antetítulo (dentro): FilmotecaSección principal: CulturasCuerpo:

Texto de Alfredo Torrado

Llama la atención la escasez de películas sobre la Revolución Francesa. Un tema tan ideológico, contanta acción y violencia, sorprende que el cine le haya metido tan poca mano. Además, pocos se hanatrevido a entrar de lleno en el tema y la mayoría de las películas lo tratan de forma lateral, tanto esasí que la película que cubre el tema de forma más directa y amplia fue un encargo para elbicentenario.

La Révolution Française (1989), película en dos partes dirigidas, respectivamente, por RobertoEnrico y Richard T. Heffron, está influida por la corriente revisionista, iniciada por François Furet, quese volvió dominante precisamente en las proximidades del bicentenario y que sigue siéndolo en laactualidad. El rey (cuya interpretación a cargo de Jean-François Belmer es lo mejor de la película) yla reina son víctimas inocentes y sus ejecuciones constituyen los momentos más pretendidamentelacrimógenos. Por supuesto, Robespierre es un neurótico, entre obsesivo e histérico, unfundamentalista o un integrista, por emplear términos más actuales. Saint-Just es aun peor,si cabe: en Robespierre el fanatismo vence sobre un lado humano, razonable incluso; Saint-Just esmás robespierista que Robespierre, con el agravante de su juventud. Danton es, cómo no, el justotérmino medio, el verdadero héroe de la película: revolucionario, patriota, pero moderado, realista;"héroe de los dos mundos", como su rival La Fayette; corrupto como Mirabeau. Todo lo contrario queRobespierre, "el incorruptible”, pero precisamente por ello más humano. Por otro lado, el perritofaldero de Danton, Desmoulins, es el bueno sin más. Y si Desmoulins es el bueno, Marat es el Malo;como Saint-Just, pero sin los agravantes o los atenuantes de la juventud y el seguidismo; Marat esdirectamente un psicópata. Y, aun con todo, La Révolution Française resulta casi neutral encomparación con otras películas.

Con Danton, de Andrzej Wajda (1982), seguimos en el mismo punto de vista ideológico. El guiónsigue de cerca, sin decirlo, a La muerte de Danton, de Georg Büchner, y tiene asimismo el mérito de

Página 2 de 4

La Revolución Francesa en el cinePublicado en Periódico Diagonal (https://www.diagonalperiodico.net)

reconocer desde el título quién es el héroe. La actuación es de una exageración que llega aextremos cómicos, como la cena de Danton con Robespierre, que constituyen lo mejor de la película,junto con la fotografía.

Puede decirse que La inglesa y el duque (2001), de Eric Rohmer, es una película “muy bonita”, yque el trabajo de los actores es especialmente bueno en el caso de la actriz protagonista. Pero lapelícula representa una de las visiones más reaccionarias y ñoñas sobre el tema, ademásde directamente tergiversadas, en tanto que se basa en las imaginativas memorias de la cortesanainglesa Grace Elliot, amante de Felipe de Orleans.

Marie Antoinette (2006), de Sofía Coppola, ni siquiera es bonita, es sólo ñoña o, mejor dicho, tanpija y “cool” como su directora. La única idea de la película, la de presentar a María Antonieta comouna niña pija neoyorquina (nada nuevo desde Vida sin Zoe...) y hacerlo utilizando elementosactuales, no es mala, pero apenas está desarrollada y sólo está bien llevada en un par (comomucho) de escenas, como la del baile con “Hong Kong Garden” de Siouxie & the Banshees de fondo.En definitiva, la película no es más que una sucesión de vídeos musicales, unos peores que otros,con un final atropellado.

Como película centrada en la reina es sustancialmente mejor, sin que ello constituya apenas unmérito, Adiós a la reina (2012), de Benoît Jacquot, que tiene la ventaja de presentar con mayorprofundidad la vida cortesana, dándole un giro: la corte es vista, a la vez desde dentro y desdefuera, a través de la protagonista, una criada en Versalles. Pero la obra exagera el tópico de unacorte constituida por una nobleza domesticada por la monarquía absoluta, tópico que tienesu origen en el clásico de Norbert Elías “La vida cortesana” y que ha sido revisado por obras como“Viena y Versalles”, de J. Duindam.

Las dos únicas películas que conozco que escapan a la visión dominante son La noche de Varennes(1982), de Ettore Scola, y Marat/Sade (1967), de Peter Brook.

En la road movie La noche de Varennes, el camino entre el Antiguo Régimen y el nuevo esrecorrido por una serie de personajes entre los que figuran Cassanova (interpretado porMastroianni), el escritor Restif de la Brettone y el diputado Thomas Paine, apuntando ya lascontradicciones de la burguesía revolucionaria.

Página 3 de 4

La Revolución Francesa en el cinePublicado en Periódico Diagonal (https://www.diagonalperiodico.net)

No se puede decir que Marat/Sade trate el tema de forma lateral. Pero precisamente el problemaque le veo ya a la obra original de Peter Weiss es que, por la pretensión de exponer el tema centralde la Révolution, se pierde la riqueza de su contenido. En cualquier caso, el tema escogido es laconfrontación entre el “libertarismo” de Sade y el igualitarismo (y aquí me imagino a Weissañadiendo: “liberticida...”) de Marat.

Es hasta cierto punto sorprendente que a estas alturas haya habido tan pocos intentos, y tantímidos, de tratar la Revolución Francesa desde la izquierda. Al contrario que la Revolución Rusa,que ha sido despreciada por el cine occidental, pero que tiene su Eisenstein, la Révolution ha sidoentregada casi totalmente a la narrativa liberal. Quizás sea precisamente que la Revolución Rusatomó el testigo de la francesa, también en el cine. En este caso se cumpliría una vez más eldicho de que la historia la escriben los vencedores. La Révolution cuenta con una larga ysólida historiografía escrita desde la izquierda, empezando por Jean Jaurès, pasando por AlbertMathiez y Georges Lefebvre, hasta Albert Soboul, Daniel Guérin o Peter Mcphee. Sin embargo,siguen faltando películas en las que los héroes sean Robespierre, Saint-Just, Marat, Hebert o Babeuf,en vez de los reyes, Mirabeau, Danton, Desmoulins o... Napoleon.

Temáticos: CineEdición impresa:

Licencia: CC-by-SAPosición Media: Cuerpo del artículoCompartir:

Tipo Artículo: NormalTipo de artículo: Normal

Página 4 de 4