la reforma católica del siglo xvi una reforma católica con sabor a mediterráneo los mil rostros...

La Reforma católica del siglo XVI

Una Reforma católica con sabor a Mediterráneo

Los mil rostros de la divinidadEspiritualidad y arte del siglo XVI

Tiziano, Asunción de la Virgen, óleo de 1516-18, Sta. María dei Frari, Venecia


índice

1. La maniera italiana encuentra sus caminos de Reforma: los primeros pasos

2. El impulso hispano: la Sociedad de Jesús y una nueva forma de vivir la misión cristiana

3. Los alternativos caminos de la Reforma

Jacopo Carrucci (Pontormo), Deposición, óleo de 1528, Santa Felícitas, Florencia

http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/9/9a/Jacopo_Pontormo_004.jpg


El manierismo: un movimiento en tres tiempos

Algunos artistas italianos, discípulos de pintores renacentistas reaccionaron contra el naturalismo y la simplicidad de sus maestros: se opta por un estilo más sofisticado intelectualmente, se deleitan con una luminosidad teatral y con figuras con extremidades alargadas y cabezas pequeñas

Allá por los 1520s-1540s, los primeros manieristas italianos, como Pontormo o Rosso Fiorentino, llenan de efectos dramáticos sus obras.

La obsesión anti-clásica de los primeros pintores será reemplazada por un gusto por las composiciones abigarradas, retorcidas, complejas…, como las de un tardío Miguel Ángel. Una maniera de arte imitando arte (incluida la tendencia de pintar retratos de personas vivas copiando temas clásicos)

El saqueo de Roma (1527) permitirá que varios artistas italianos emigren llevando estas ideas a Francia o a los Países Bajos

Tan espontáneamente como aparece, el manierismo será rechazado por la siguiente generación y su deseo de retomar el naturalismo

A. Bronzino, El almirante Andrea Doria como Neptuno, óleo de 1550, Brera

http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/4/49/Angelo_Bronzino_048.jpg


índice

1. La maniera italiana como rebeldía y como búsqueda

2. Los italianos encuentran sus caminos de Reforma: los primeros pasos

Tiziano Vecellio, “Amor sagrado y amor profano”, óleo de 1514, Galería Borghese, Roma


Cuando en Roma, al paso de los romanos

Mientras Lutero y Zwinglio apasionan a alemanes y suizos, los franciscanos van recuperando su deseo de vivir con mayor entrega a Cristo recuperando el espíritu original: los observantes [separados de los conventuales] logran la aprobación de su ‘rama’ en 1517 con el papa León X Médici; sin embargo, grupos más estrictos seguían presionando, siendo ellos el origen de los alcantarinos en España y de los capuchinos (iniciados con Mateo de Bascio en 1528) en Italia

La espiritualidad italiana, como en el arte, encuentra su propia maniera, un estilo distintivo que parte de premisas culturales diferentes y, me parece, de una visión de la divinidad disímil: el italiano ama a un Dios que le ama aún en su pecaminosidad; el reformista vive el drama de su propia inadecuación frente a un Dios juez

Rosso Fiorentino, Deposición, óleo de 1528, San Lorenzo, Sansepolcro


La reforma desde dentro: RomaAsí como los religiosos, grupos de sacerdotes

inician, también, nuevas congregaciones con el propósito de renovar la vida sacerdotal, la catequesis, escuchar confesiones, educar a los jóvenes, trabajando en hospitales y prisiones. Nacerán así los Teatinos de Cayetano de Conti de Teati y Giovanni Pietro Carafa [futuro papa] en 1524; un poco más adelante, se organizarán los Barnabitas o clérigos regulares de San Pablo, fundados en 1530 por Antonio María Zaccaria en Milán y, un poco después (1534) será organizada la “Compañía de los servidores de los pobres” o padres Somascos de Jerónimo Emiliano

Entre las mujeres, tenemos el caso de Ángela Merici, fundadora de las Ursulinas en 1534, dedicadas a la formación de niñas y jóvenes, en el área de Brescia, norte de Italia. Se dice que el Papa Clemente VII quería que Ángela se mudara a Roma, pero ella, odiando sentirse figura pública, prefirió regresar al norte y continuar su obra educativa y catequética desde allá

Parmigianino, Madonna del cuello largo, óleo de 1534-40, Uffizi


Roma: la ambivalencia

El pontificado de Clemente VII Médici (1523-34) dejó un saldo extraño para la Cristiandad: por una parte, el luteranismo se extendía por toda Escandinavia; Suiza se alejaba de Roma debido a Zwinglio, e Inglaterra prácticamente vivía un cisma con Enrique VIII; por la otra, Clemente sobrevivía el saqueo de Roma, lograba casar a su sobrina Catalina con el heredero francés y Florencia regresaba al control de la familia

La Iglesia crece y se organiza en América Latina durante el mismo pontificado que aplaudía los ideales políticos de Maquiavelo. A la muerte de Clemente, y después de un cónclave de dos días, el decano del colegio cardenalicio (67 años), Alejandro Farnese, sería electo pontífice (1534-49): ¡uno de los favoritos del papa Borgia!

Miguel Ángel, monumentos funerarios a Lorenzo y Julio Médici, Sacristía nueva, San Lorenzo, Florencia


La conversión de Paulo III

Alejandro Farnese había trabajado como tesorero del papa Borgia desde 1492 (probablemente como agradecimiento pontificio). Farnese disfrutó de obispados y beneficios ¡antes de ser ordenado sacerdote!, además de gozar de una amante de quien tendrá tres hijos y una hija

El concilio quinto de Letrán (1512-17), que tan pocos efectos produjo en la Iglesia, convenció al entonces obispo de Parma, Farnese, que era hora de tomar su tarea en serio: dejará a su amante, se dedicará a buscar la reforma junto a un partido de sacerdotes y obispos

Sin embargo, los carnavales romanos, el Palazzo Farnese, los intentos de enaltecer a la familia, el nombramiento de sus nietos de 14 y 16 años como cardenales, hicieron suponer que el papa Paulo seguiría la línea de sus predecesores

La única diferencia será que Paulo decide “tomar su cruz” y buscar la organización de un concilio ecuménico liderado por las mentes más brillantes de su época: Reginald Pole, Giampietro Carafa, Gasparo Contarini, Marcello Cervini…

Miguel Ángel, Cristo cargando la cruz, mármol de dos metros, Santa María Sopra Minerva, Roma, 1521


Pasar de los tiemposdel divertimento…


Al juicio de su épocaTanto Miguel Ángel como el Papa Paulo

III Farnese se encontrarán muy ocupados durante la década de los 1540s

El Papa apoyando su Consilium de emendanda ecclesia; motivando la reforma de los religiosos y aprobando el establecimiento de la Sociedad de Jesús (en 1540); además de establecer la Congregación del Santo Oficio (1542) y aceptando la iniciativa del emperador Carlos V de reunir al Concilio en la ciudad de Trento en 1545

El artista, tomando la dirección de las obras del Palazzo Farnese, diseñando un nuevo plan para la realización del Duomo de San Pedro y remodelando la plaza del Capitolio

Parecían llegar tiempos de cambio, pero, los romanos serán siempre romanos…


Los primeros pasos de la Reforma católica

Desde 1517, Lutero había solicitado que su caso fuese revisado por un concilio general reunido en tierras alemanas. Los temores políticos y religiosos –ante los remanentes del conciliarismo-, irían difiriendo la convocatoria de tal concilio

El papa Clemente VII lo intentó en varias ocasiones ante la negativa de los príncipes alemanes luteranos y del rey de Francia (enemigo del emperador Carlos V); igualmente, los pleitos entre autoridades políticas y religiosas harán intentos por fijar sedes que convinieran a sus intereses

Paulo III Farnese intentará por más de diez años reunir al concilio (desde su entronización en 1534); será preciso que Carlos V derrote e imponga la paz a Francisco I de Francia, momento clave que permitirá que en 1545 finalmente se inicien las sesiones

Miguel Ángel, Sagrada familia, (Doni tondo), tempera, 1506, Uffizi


Trento: demarcando el terreno

Reunidos en Trento por Carlos V, obispos, cardenales, abades, patriarcas y oradores de parte de los poderes civiles, se inicia el estira y afloja sobre procedimientos, y sobre el orden de los debates

Después de más de medio año de reuniones se había discutido sobre las fuentes de la Revelación (Escritura y tradición), sobre el pecado original y el bautismo (se niegan a debatir sobre la Inmaculada Concepción), sobre reformas a la posición, beneficios y deberes de los obispos; la sexta sesión se concentra sobre el tema de la justificación, una de las piezas clave de los debates con Lutero

Se han citado diversos factores, el hecho es que los legados pontificios piden trasladase a Bolonia mientras un grupo de obispos, fieles al emperador Carlos, se niegan. Lo que llevará a la primera cancelación de las sesiones de Trento en 1547

Domenico Theotokopoulos, El espolio, óleo monumental, catedral de Toledo, 1577-79


Decreto sobre la edición y el uso de la Sagrada Escritura

(sesión IV)

Considerando además de esto el mismo sacrosanto Concilio, que se podrá seguir mucha utilidad a la Iglesia de Dios, si se declara qué edición de la sagrada Escritura se ha de tener por auténtica entre todas las ediciones latinas que corren; establece y declara, que se tenga por tal en las lecciones públicas, disputas, sermones y exposiciones, esta misma antigua edición Vulgata, aprobada en la Iglesia por el largo uso de tantos siglos; y que ninguno, por ningún pretexto, se atreva o presuma desecharla. Decreta además, con el fin de contener los ingenios insolentes, que ninguno fiado en su propia sabiduría, se atreva a interpretar la misma sagrada Escritura en cosas pertenecientes a la fe, y a las costumbres que miran a la propagación de la doctrina cristiana, violentando la sagrada Escritura para apoyar sus dictámenes, contra el sentido que le ha dado y da la santa madre Iglesia, a la que privativamente toca determinar el verdadero sentido, e interpretación de las sagradas letras;

http://multimedios.org/docs/d000436/

Tiziano, Presentación de la Virgen en el Templo, óleo de 1534-38, Galería de la Academia, Venecia

http://multimedios.org/docs/d000436/


Trento: ¿una contra-reforma?

CÁNONES DE LA CONFIRMACIÓN• CAN. I. Si alguno dijere, que la

Confirmación de los bautizados es ceremonia inútil, y no por el contrario, verdadero y propio Sacramento; o dijere, que no fue antiguamente mas que cierta instrucción en que los niños próximos a entrar en la adolescencia, exponían ante la Iglesia los fundamentos de su fe; sea excomulgado.

• CAN. II. Si alguno dijere, que son injuriosos al Espíritu Santo los que atribuyen alguna virtud al sagrado crisma de la Confirmación; sea excomulgado.

• CAN. III. Si alguno dijere, que el ministro ordinario de la santa Confirmación, es no sólo el Obispo sino cualquier mero sacerdote; sea excomulgado

Tiziano, Ecce Homo, óleo de 1548, Prado


Un nuevo intento: el segundo periodo

La muerte del Papa Farnese elevó al trono de Pedro, por compromiso entre políticos, a Giovanni Cardenal del Monte (1550-55), papa Julio III

Se le ha denominado el ‘último pontífice del Renacimiento’, como lo demuestra la Villa Giulia; el apoyo al compositor Palestrina, al coleccionista e historiador Vasari o la amistad con el septagenario Miguel Ángel

Amante de la buena vida, de la cacería y del teatro, de apoyar a sus parientes y de un joven de 15 años (Innocenzo), el buen Julio representa las virtudes y vicios de los papas renacentistas

Bajo ‘presión’ de Carlos V re-abre el concilio de nuevo en Trento en 1551 pero debido a la presencia de protestantes debatiendo sobre el decreto de Eucaristía y las exigencias del nuevo rey francés, Enrique II este segundo periodo terminará pronto y en tonos de mayor distanciamiento con los luteranos

Julio III será un buen apoyo para la naciente Sociedad de Jesús con quienes trabaja para la fundación del Collegium Germanicum para misioneros

Asimismo, Julio III vive el breve retorno de Inglaterra al catolicismo bajo el reinado de María Tudor


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1. La maniera italiana como rebeldía y como búsqueda2. Los italianos encuentran sus caminos de Reforma: los

primeros pasos3. El impulso hispano: la Sociedad de Jesús y una nueva forma

de vivir la misión cristiana

Domenico Theotokopoulos, Tríptico de Módena, tempera, 1568


Despierta, España

Los tiempos de Carlos V habían estado marcados por un influjo artístico y espiritual de tipo flamenco e italiano: Cisneros leía a Erasmo; los alumbrados nos recuerdan los postulados de la devotio moderna, artistas como Berruguete o Pedro Machuca estudiaron en Florencia o Roma

La teología hispana de la primera mitad del siglo XVI está marcada por el tomismo de los dominicos de Salamanca, Francisco de Vitoria y una generación de alumnos brillantes como Melchor Cano, Domingo Soto, Bartolomé Carranza…, todos ellos participantes en Trento, como parte del ala ortodoxa y conservadora; asimismo, en 1550, miembros de la Junta de Valladolid, estos tomistas deberán escuchar la disputa entre Ginés de Sepúlveda y Bartolomé de las Casas sobre la conquista de América. El tomismo hispano será la base de estudios sobre una economía justa, sobre una política internacional más humana en relación con los indígenas de América

Otra línea de religiosos, constantes sospechosos, parecerán dedicarse más a la predicación y a la ascética, así encontramos las bellas páginas y las conflictivas vidas de Luis de Granada o de Juan de Ávila

Sin restar mérito a estos hombres geniales, podemos decir que son fecundos lectores, intérpretes y actualizadores de corrientes teológicas y espirituales nacidas en otras partes de Europa


un soldado convertido para purificar el Templo

Será un soldado vasco de aproximadamente treinta años, herido en las batallas contra los franceses en Navarra quien abrirá las puertas para una nueva forma de entender la participación ‘religiosa’ en el mundo: Iñigo de Loyola

Serían sus lecturas o sus visiones lo que convence a Ignacio de ‘abandonar su mundo’ para dedicarse a Dios. En Montserrat decide despojarse de su hábito militar y, será en Manresa donde viva la experiencia fundante de la Sociedad: cambiar el ideal del peregrino solitario por el de trabajar en bien de las almas, con compañeros que quisiesen seguirle en la empresa

Sintiendo la necesidad de prepararse estudia en Alcalá y en Salamanca; para 1528, le encontramos camino de París lugar en el que se topará con sus primeros compañeros: Francisco Javier, Pedro Faber, J. Lainez, A. Salmerón, S. Rodríguez (portugués). Para 1534 han decidido su proyecto de vida; éste sería reconocido por el papa Paulo III

D. Theotokopoulos, La purificación del Templo, óleo ca. 1571, Minneapolis. Los rostros de la esquina inferior derecha corresponden a Tiziano, Miguel Ángel, Giulio Clovio y ¿Rafael?


“Militar para Dios bajo la bandera de la cruz…”

La Compañía de Jesús se caracterizará por el ‘cuarto voto’: la disponibilidad para responder a las necesidades pontificias (siempre Ad maiorem Dei gloriam)

Su visión misionera les permitirá entender el valor de atender a los estudiantes de educación superior; valorando, ellos mismos, los estudios científicos

Tres consignas: educar fundando colegios y seminarios; misionar entre los no creyentes y, detener los avances del protestantismo

La disciplina casi militar de la Compañía y su obediencia al pontífice les transformará en la herramienta perfecta de la Reforma católica

Por otra parte, su organización ‘no religiosa’ les permite libertades y es respaldada por un optimismo antropológico que los distingue de los mendicantes

Para calcular el dinamismo de la Compañía, se calcula que para la fecha de la muerte de Iñigo (1556) ya eran 1000 los compañeros

D. Theotokopoulos, Adoración del nombre de Jesús, óleo de 1578-79, Escorial


De España al mundo

Las reformas de las órdenes religiosas y el papel de los Jesuitas como misioneros darán un tinte hispano al catolicismo de los siglos XVII y XVIII

El largo y polémico reinado de Felipe II (1556-98) protagonizará simultáneamente duras rebeliones debido a las diversas guerras y la presencia de misioneros españoles evangelizando en la India y en Japón; el Soberano atestiguará la aparición de una literatura hispana que marcará huella con Cervantes, una arquitectura monumental con Herrera; pero, también, los desgarradores incidentes en los Países Bajos o en las Alpujarras (contra los moriscos); victorias inauditas (Lepanto) y derrotas humillantes (la Armada invencible)

España cerrará el siglo XVI como la potencia europea; se impone militarmente en medio mundo y ¡se endeuda lo suficiente para hacer honor al título de potencia!

D. Theotokopoulos, Resurrección, óleo de 1577-79, Iglesia de Santo Domingo, Toledo


Preparando un catolicismo barrocoLos primeros dos periodos del concilio de Trento nos han permitido

descubrir que ser católico, ahora, consistirá en NO ser protestante, por ello:

a) Se enfatizará en la obediencia al Papa y en el papel de la comunidad como intérprete de la voluntad de Dios (contra la sola Escritura)

b) Se insistirá en la necesidad de que la fe se traduzca en buenas obras (congregaciones de sacerdotes, de religiosos e incluso de laicos, se dedicarán a los hospitales, a los huérfanos, a la educación)

c) Se enfatizará en el papel de María y de los santos contra los ‘iconoclastas’ protestantes

d) Se acrecentará la veneración a la presencia eucarística (contra la negación de la transubstanciación) y a las devociones populares colectivas (contra individualismo)

e) Pero, se aceptará la crítica y la necesidad de reformar la disciplina eclesiástica (la residencia episcopal; la necesidad de preparar a los sacerdotes de modo más exigente…)

f) Igualmente, se buscarán nuevos métodos de catequesis: más emotiva, más sensible (contra el ‘frío’ intelectualismo de los protestantes)

g) Además, especialmente gracias a la convicción mediterránea y jesuita, se defiende una cierta bondad intrínseca al ser humano (contra la teoría luterana de la depravación total de la Humanidad)


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1. La maniera italiana como rebeldía y como búsqueda2. Los italianos encuentran sus caminos de Reforma: los

primeros pasos3. El impulso hispano: la Sociedad de Jesús y una nueva

forma de vivir la misión cristiana

4. Los alternativos caminos de la Reforma


La recepción de Trento en Roma

Muerto Julio III (1555) resultó electo otro miembro del partido reformista, Marcello Cervini quien mantendría su nombre de bautismo como Papa Marcelo II. Las esperanzas puestas en él terminarían en 22 días: agotado, el pobre hombre moría después de intentar evitar gastos de coronación y de mantener alejada a la familia.

Los cardenales, sin embargo, sostienen su apuesta y eligen a otro reformista, G. Carafa, papa Paulo IV (1555-59). Nadie imaginaba el carácter radical del nuevo pontífice. En la mente de Paulo, él era capaz de reformar la Iglesia sin necesidad de Concilio: en la realidad, terminó enajenándose a los españoles (a los que odiaba como buen napolitano); rompiendo definitivamente con Inglaterra al pelearse con Elizabeth; apoyando a una Inquisición romana más persecutoria (incluso ‘revisando’ a sus antiguos compañeros reformistas); publicando por primera vez el Índice de libros prohibidos y preparando nuevas ediciones del Misal

Furioso anti-protestante, Paulo IV rechaza toda concesión; moralmente ascético, persigue a obispos y monjes que no cumplan con los decretos reformistas; anti-judío al extremo de forzarlos a vivir en ghettos en Roma; su muerte será objeto de celebración (entre ellas, la de Miguel Ángel) y de venganza contra su familia


Exigencia y brazo izquierdo

Su nepotismo, paradójicamente, produjo frutos reformistas: Carlo Borromeo, arzobispo de Milán. Este exigente arzobispo y las habilidades diplomáticas del Cardenal Morone, presidente del Concilio, lograrán sacar adelante las dificultades para celebrar el tercer periodo en Trento (1562-63)

La habilidad de Pío será reemplazada por la santidad (algo radical) de su sucesor: Pío V Ghislieri (1566-72), quien aprovechará su vocación de dominico y de asceta para reforzar las políticas disciplinarias y acelerar los trabajos pendientes: se publican el nuevo breviario y el nuevo misal; se revisa la Vulgata. Se toman medidas contra la herejía en Italia, se hacen circular decretos reformistas desde Goa, India, hasta México

Bajo su convocatoria, España y Venecia lograrán unir fuerzas y derrotar a los turcos en la batalla naval de Lepanto

Tiziano, Cristo y el buen ladrón, óleo de 1566, Pinacoteca de Bolonia

Lo que el estilo de Paulo IV no logró, lo haría la astucia diplomática de su sucesor Pío IV Medici (1559-65)

A pesar de una vida personal algo discutible, tiene el colmillo de reconocer a sus aliados Habsburgo : Felipe, hijo de Carlos I y a Fernando, emperador alemán, hermano de Carlos V


La recepción institucional

Trento será vivido de modo radical por Carlos Borromeo (1538-84), sin haber cumplido 30 años este arzobispo de Milán y sobrino de Pío IV, irá por la ciudad visitando parroquias y a enfermos; desnudará la catedral de los excesivos adornos y símbolos de privilegios familiares; fundará seminarios y casas de preparación para candidatos a las órdenes sagradas. Su lucha provocará la irritación de Roma y de Madrid (Milán era ducado español desde 1540) pero, su brazo duro contra sacerdotes y políticos, irá siempre acompañado y recordado por la gente sencilla que recibió su cuidado pastoral

Un modo distinto, pero no menos institucional, será el del teólogo jesuita y cardenal Roberto Belarmino (1542-1621): intelectualmente brillante, será un vivo representante de la opción pontificia por el tomismo con todos sus recursos. Debatirá con teólogos y reyes; será celoso vigilante de la ortodoxia (participa en la condena de Giordano Bruno y amonesta a Galileo). Sus escritos provocarán reacciones en países protestantes tratando de refutar las afirmaciones de este Doctor de la Iglesia

Dos pontífices fuertes (Gregorio XIII (1572-85] y Sixto V [1585-90]) ayudarán a gestar el rostro reformista (o contrarreformista) de la Iglesia católica. Se reorganiza la Curia (durará hasta el Segundo Vaticano); se fortalecen los seminarios y los jesuitas; las misiones llegan a China y a Brasil; se recupera la iglesia en Suiza y Alemania; se acogen nuevos santos (Felipe Neri o Teresa de Ávila), se ajusta el calendario; se embellece Roma; pero, palidece la presencia internacional del Papa


La Reforma contra corriente: Teresa

De una familia necesitada de piedad (un abuelo había sido condenado por cripto-judío), Teresa de Ávila (1515-82) resulta una devoradora de textos místicos y espirituales

La vida de Teresa parece ser una lucha constante, primero, contra los que objetan sus visiones y sus arrebatos místicos; más adelante, contra las autoridades religiosas que quieren impedir su labor de reformadora de Conventos (de lo que saldrá victoriosa temporalmente con el apoyo del obispo) y, por último contra su misma orden (Carmelo) por la radicalidad y exigencia de vida que imponía en las nuevas fundaciones lo que la llevará a ser amenazada por la Inquisición (saldrá librada con el apoyo de Felipe II, primero; y del papa Gregorio XIII, posteriormente)

Por otra parte, Teresa triunfará gracias al apoyo de otros ‘agentes libres’ como el franciscano Pedro de Alcántara, el jesuita Francisco de Borja o su compañero carmelita y soporte moral, Juan de la Cruz

Tiziano, España socorriendo a la religión, óleo de 1575, Prado


El amor doliente del misticismo

Si para recobrar lo recobrado tuve que haber perdido lo perdido si para conseguir lo conseguido tuve que soportar lo soportado.

Si para estar ahora enamorada fue menester haber estado herida tengo por bien sufrido lo sufrido tengo por bien llorado lo llorado.

Porque después de todo he comprendido que no se goza bien de lo gozado sino después de haberlo padecido. Porque después de todo he comprobado que lo que tiene el árbol de florido vive de lo que tiene sepultado

Teresa de Jesús

D. Theotokopoulos, Cristo con la cruz a cuestas, óleo de 1580, Metropolitan Museum of Art


La Reforma desde abajo: el ‘apóstol de Roma’

En 1515, año del nacimiento de Teresa de Jesús, nace cerca de Florencia, Filippo Neri. Después de una juventud llena de las limitaciones normales de cualquier italiano de clase trabajadora, llegará casi de 20 años a la ciudad de Roma

Triste por la situación decadente de la Urbe decide hacer algo, como laico se dedicará a visitar hospitales y enfermos; se dice que por las noches se dedicaba a visitar prostitutas tratando de convencerlas para que cambiasen de vida. En este periodo de su vida rechaza la invitación de Ignacio de Loyola de hacerse jesuita

En 1548, junto a un par de amigos, funda la Confraternidad de la Santísima Trinidad para peregrinos y convalecientes. Su caridad llega a oídos del Papa quien insistirá en ordenarle sacerdote. El Oratorio de Felipe se vuelve lugar de reunión y de inspiración para hombres, mujeres; sacerdotes y laicos: de ahí brota una espiritualidad encarnada y optimista. Roma se transformará en la medida en que cada uno haga algo, todos los días, por mejorar la calidad de vida de los habitantes

En 1559, bajo el feroz Paulo IV, el apostolado con peregrinos dirigido por Filippo es cuestionado; crisis que será superada gracias a la muerte del cardenal acusador y al sentido de humor y de humildad del padre Neri

Esta lucha por ‘ser bueno si se puede’ irá abriendo caminos entre estudiosos, incluso futuros cardenales. Con Gregorio XIII, el Oratorio es reconocido y recibirá espacios más amplios para liturgia (Chiesa Nuova) y un reconocimiento a estas formas ‘alternativas’ de compromiso evangélico


Un corazón dilatado: el estilo de Neri

Se dice que Filippo vivió una experiencia mística cerca de las catacumbas que afectó su corazón. Lo que es cierto, es que este genial hombre supo tocar corazones mediante la humildad y el sentido del humor.

Se comenta que cuando andaba por el Trastevere y otros barrios ‘bravos’ de Roma, los jóvenes se reían de él. Filippo Neri les contestará: “Fratelli, state allegri, ridete pure, scherzate finché volete, ma non fate peccato!

Tiene lecciones geniales sobre la tentación: debemos endurecernos para no caer en tentación pero, en el caso de las tentaciones de la carne, ¡mejor salir corriendo para lograr alguna victoria!

Al buen humor, Filippo intuyó brillantes estrategias de predicación: ¡cantar! (recordemos que el Oratorio es, antes que nada, un espacio musical). En Italia es conocido como el ‘juglar de Dios’ o el ‘santo de la alegría’

Miembros de su grupo llegarán a pontífices pero, Neri siempre rechazó los intentos por hacerle obispo o cardenal. El ‘santo de la alegría’ sostendrá siempre que el mejor remedio contra la vanidad, será la simplicidad evangélica


Cristianismo en 1600Al llegar los últimos años del siglo XVI, Europa se

encontrará con una Cristiandad dividida: a) con una fuerza ortodoxa creciente entre los “zares de todas las Rusias” en Moscú (Iván IV quería que su capital fuese la nueva Constantinopla) y que logrará el título patriarcal en 1589 gracias a Boris Godunov; también con una iglesia ortodoxa respetada, pero prácticamente silente en los Balcanes (bajo control de los turcos)b) con un luteranismo ortodoxo apoyado en el Libro de Concordia de 1580 (exposición de los documentos autoritativos para los luteranos), con tintes escolásticos (incluido el uso excepcional del latín), si bien con un desarrollo musical importante, extendiéndose desde el norte de Alemania hacia la península escandinava (el reino conjunto danés-noruego es oficialmente luterano desde 1536 con Christian III; el Sínodo de Uppsala, Suecia, bajo la conflictiva familia Vasa, declaró a este reino oficial y únicamente luterano en 1593)

http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/3/30/St_Basils_Cathedral_closeup.jpg


c) con una robustecida Inglaterra bajo Isabel, líder de la iglesia anglicana viviendo un renacimiento literario y musical (la época de Shakespeare o Isabelina) e impulsora del presbiterianismo escocés (de orígenes calvinistas con John Knox)

d) con un calvinismo que dividirá los Países Bajos en dos entidades políticas distintas

e) con un catolicismo combativo en Europa central (Polonia, Austria, Baviera) y misionero en la península ibérica, controlada por Felipe II

Tiziano, Retrato de Felipe II, óleo de 1550, Prado

Cristianismo en 1600

N. Hilliard, Elizabeth (the Phoenix Portrait), 1575, Tate Gallery


Parte de examen final preparada con anterioridad

Después de leer el artículo Miguel Luis López – Guadalupe Muñoz, “Religiosidad institucional y religiosidad popular”, elaborar un ensayo personal comentando la relevancia de los hechos vividos durante los periodos de las reformas para la vivencia católica en América Latina

A diferencia de un ensayo tradicional (en que no hay citas); aquí le pido incluir, por lo menos, diez referencias (entrecomilladas) del texto, a partir de las cuáles usted elabore con los datos y las vivencias de nuestra situación regional

la reforma católica del siglo xvi una reforma católica con sabor a mediterráneo los mil rostros...

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