La Psicopedagogía... a la distancia

A MODO DE INTRODUCCIÓN O PRÓLOGO

Bienvenida una investigación que trata de rastrear los orígenes de la disciplina psicopedagógica. En ese entramado de datos, documentos, relatos, testimonios, se teje el recorrido de lo que comenzó como

praxis y fue buscando referentes teóricos que la fundamentaran. Esta búsqueda, oportuna y necesaria, contribuye al armado de la identidad profesional durante mucho

tiempo cuestionada ¿Es ciencia o disciplina? ¿Es una rama de la psicología o de la pedagogía? ¿Qué tiene en común con la

educación especial? Estos y otros interrogantes atraviesan el texto, interpelan a las autoras y dan cuenta de un trabajo riguroso

y respetuoso que rastreando datos, hilvanando fechas y experiencias, se encontró con personas que con vocación y pasión, trazaron caminos y dejaron huellas.

En ese transitar hubo que sacudir certezas, sostener preguntas, incorporar referentes teóricos, cambiar posiciones terapéuticas.

Al decir de Lacán en Escritos I: “Mejor que renuncie aquel que no puede unir a su horizonte la subjetividad de su época.”

Y en estos tiempos, la subjetividad sufre embates de un sistema que objetaliza, medicaliza, conduce al anonimato, por lo que no resulta sencillo sostener una práctica que apunte al rescate del sujeto, a su condición singular e irrepetible

Al terminar de leer el texto, queda la sensación de una historia difícil, polémica, cuestionada, pero que ha logrado conformar una disciplina que tiene presencia en el ámbito de la salud y la educación y que viene a dar respuestas y nuevas preguntas frente al impactante fracaso educativo y escolar .

Esa historia merece que los psicopedagogos de hoy asumamos el desafío de ejercer la práctica a sabiendas de que hay cuestiones no negociables: el inconsciente, el deseo, la transferencia, la lógica desde la que el paciente construye el conocimiento.

Ocupados en las cuestiones del aprender y el enseñar, y ante el peligro de la desaparición de la condición infantil, por el debilitamiento del juego simbólico y por el desvastamiento de la palabra, tenemos que tomar posición

Y tomar posición es dejarse atravesar por una ética del bien decir y el bien hacer como recaudo para transitar la práctica, disfrutando del increíble, único e irrepetible paisaje de la subjetividad.

Llegar hasta aquí fue una conquista histórica narrada en las páginas que siguen y que no hacen más que

Liliana González

UN COMENTARIO

Este siglo, se caracteriza por generar problemas humanos y, paradójicamente, por implementar tecnologías comunicacionales que permiten denunciarlos simultáneamente. Ya sea por esto de poder estar al tanto de los sucesos sin demora o porque la carga del progreso acentúa los problemas individuales, no podemos dejar de saber

una sola disciplina para abordar los sujetos en situaciones de aprendizaje, en las puertas del siglo XXI. Este recurrir

tiene trayectos que no son muy conocidos. Y suponemos que cualquier dato histórico en general, puede poner luz sobre

hasta en las personas que aún sin estudiar sistemáticamente, “aprenden” en la vida, en tanto sus experiencias y sus vivencias.

Basándonos en que no sólo desde ahora se registran problemas de múltiple naturaleza en los aprendizajes, investigamos una historia, que es la que queremos contar.

Quizás a partir de nuestros recorridos personales, de nuestro tránsito por el Instituto “Dr. Domingo Cabred”, de habernos ocupado casi siempre por aquéllos que “no podían” aprender, decidimos reconstruir la historia de la Psicopedagogía. Esta es una disciplina ecléctica que toma saberes de muchos lados y que ha sido cuestionada en cuanto a si es o no “ciencia”. Por eso nos preocupa más la construcción de la Psicopedagogía, porque desde la década del treinta, fue el actuar el que ha ido poniendo soluciones a esta realidad: tomar conocimientos no es una cuestión

sola meta, cada uno llega a distintos puertos y por caminos a veces insospechados. Y la Psicopedagogía se ocupó de esto. Saber cómo toma este lugar, nos resultó importante. Presumimos que también puede serlo para todos los que trabajan con sujetos en situación de aprendizaje.

El propósito fue trascender “el ámbito del puro nombrar, contar o fechar” (Cardoso, 1985: 151) El intento fue analizar las ideas presentes en cada una de las versiones y prácticas, relacionadas al campo disciplinar psicopedagógico:

sustenta la práctica y el ámbito o sector desde donde surgió la demanda de respuestas a los requerimientos de los sujetos con problemas en el aprendizaje.

Y quizá con esto, se pueda contribuir también a la mencionada discusión acerca de si la Psicopedagogía es o

El trabajo nos llevó a establecer nexos entre todo esto y la institucionalización académica en el Instituto Superior “Dr. Domingo Cabred”, alrededor de 1960.

Sentimos el derecho y el deber de escribir una historia que estaba, sin estar escrita. La letra escrita sirve de documento y a la vez, de señal para guiar recorridos de la teoría y de la práctica.

Analia Giannone y Mariana GomezNuestra labor fue descubrir la historia, reconstruirla.