la homeopatía de méxico, no. 688 (enero-febrero de 2014)

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1 LA HOMEOPATÍA DE MÉXICO. Volumen 83, número 688, enero-febrero 2014.

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Número 688, Volumen 83, enero-febrero de 2014 / CONTENIDO: “El Abordaje Homeopático de la Tos”, Isis María Infante Regalado / “Pruebas de Función Respiratoria”, Cuauhtémoc Magaña Hernández, José Luis López Esceberre, Jesús Cuauhtémoc Magaña Cazares / “Un Caso Clínico de Oligohidramnios Severo Tratado con Homeopatía”, Héctor Montfort Cabello / “La Homeopatía Frente a Casos con Tratamiento Convencional”, Roger Morrison, Nancy Herrick / DIRECCIÓN: http://similia.com.mx/index.php?sec=revista

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  • 1LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014.

  • 2 LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014.

  • Fundada en 1933

    FUNDADOR DR. RAFAEL LPEZ HINOJOSA DIRECCIN MA. DE LOURDES LPEZ ANAYA ADMINISTRACIN LOLA M. LPEZ ANAYA

    EDITORIAL

    ARTCULO DE REVISINEl Abordaje Homeoptico de la Tos.Isis Mara Infante Regalado.

    ARTCULO DE REVISINPruebas de Funcin Respiratoria.Cuauhtmoc Magaa Hernndez.Jos Luis Lpez Esceberre.Jess Cuauhtmoc Magaa Cazares.

    CASO CLNICOUn Caso Clnico de Oligohidramnios Severo Tratado con Homeopata.Hctor Montfort Cabello.

    DE NUESTRA HEMEROTECALa Homeopata Frente a Casos con Tratamiento Convencional. Roger Morrison.Nancy Herrick.

    LIBROS

    CARTAS AL EDITOR

    3

    5

    15

    25

    29

    43

    46

    CONTENIDO

    ISSN 1870-3666

    La Homeopata de Mxico es una revista cientfica que publica trabajos nuevos y originales, artculos de opinin, temas de revisin, reportes de casos clnicos y notas de actualidad. Asimismo, se incluyen trabajos presentados en congresos y encuentros acadmicos, e investigaciones y controversias efectuadas en Mxico y el mundo, referentes al medio homeoptico.

    ENERO-FEBRERO 2014VOLUMEN 83 NM. 688

  • Director General AdjuntoC.P. Hctor Torres Carbajal

    Director EditorialJuan Fernando Gonzlez G.

    Director de InvestigacinDr. Gustavo Aguilar Velzquez

    CoordinacinMnica lvarez Soto

    DIRECTORIODirectora de MercadotecniaL.D.G. Mara de Lourdes Hernndez Lpez

    Coordinador Editorial y de Comunicacin Digital Rafael Meja Rosas

    Coordinador de Arte y Diseo EditorialL.D.G. Fabiola Reyes La

    Circulacin y suscripcionesRogelio Garca Luna

    CONSEJO EDITORIALDra. Josefina Snchez Resndiz

    Coordinadora del Comit de Productos Homeopticos, de la Comisin Permanente de la Farmacopea de los Estados Unidos Mexicanos.

    Dr. Jorge A. Fernndez Prez

    Presidente del Consejo Consultivo Nacional Mdico Homeoptico, A.C.Profesor e investigador de la Benemrita Universidad Autnoma de Puebla.

    Miembro del Sistema Nacional de Investigadores.

    Dr. Fernando Domnguez Vello

    Miembro fundador del Crculo Mexicano de Homeopata, A.C.Coordinador Mdico del Proyecto de Atencin Mdico-Homeoptico del Desierto (Wadley S.L.P.).

    Dr. Hctor Montfort CabelloCoordinador del Programa de Educacin Mdica Continua, del Instituto Superior

    de Medicina Homeoptica de Enseanza e Investigacin (ISMHEI).

    Dr. scar Michel Barboza

    Miembro del Colegio de Mdicos Homepatas del Centro, A.C.

    C.P. Hctor Torres Carbajal

    Director General Adjunto de Propulsora de Homeopata, S.A. de C.V.Ex presidente de la Asociacin Nacional de la Industria Farmacetica Homeoptica (ANIFHOM).

    L.D.G. Mara de Lourdes Hernndez Lpez

    Directora de Mercadotecnia de Propulsora de Homeopata, S.A. de C.V.

    La Homeopata de Mxico es una revista bimestral, fundada en 1933 y editada desde 1941 por la Divisin Editorial de Propulsora de Homeopata, S.A. de C.V. Administracin: Ma. de Lourdes Lpez Anaya y Lola M. Lpez Anaya. Franqueo pagado. Autorizado por SEPOMEX Permiso No. 0040360, Caractersticas 22 8251116. Licitud de ttulo No. 2559. Licitud de contenido No. 1639. ISSN 1870-3666. Fotografa de portada: Elizabeth Vinck Monroy. Precio por ejemplar: $60.00. Suscripcin anual en la Repblica Mexicana: $250.00; extranjero: 30.00 USD., ms gastos de envo. Contacto: 5547 9483 / 5547 5735 ext. 176; [email protected]. Direccin electrnica: www.similia.com.mx. Impresin: Digital Orozco, S.A. de C.V. Mxico, D.F.

    La Homeopata de Mxico es una publicacin indizada en Latindex, el Sistema Regional de Informacin en Lnea para Revistas Cientficas de Amrica Latina, el Caribe, Espaa y Portugal, as como en Peridica, el ndice de Revistas

    Latinoamericanas en Ciencias (Direccin General de Bibliotecas, UNAM).

  • 5LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014.

    El mdico tiene la misin de reestablecer la salud de los pacientes que recurren a l, no slo en el aspecto fsico sino tambin en las esferas mental y emocional, y de acuerdo con todos los parmetros establecidos internacionalmente. Sin embargo, el mdico homepata tiene como aadidura el cometido de hacer que el enfermo se recupere de la forma ms pronta, segura y duradera que se pueda, tal y como lo estableci Samuel Hahnemann.

    Esa es la razn por la cual, al tomar el caso y hacer la historia clnica, la elabora con la mayor atencin para recabar sntomas y signos, al mismo tiempo que incluye la informacin derivada de una acuciosa exploracin fsica que le per-mita integrar la totalidad sintomtica para, finalmente, prescribir el medicamento ms adecuado.

    Es justo hacer notar cmo fue que el Sabio de Meissen, sagaz visionario, describi las modificaciones que provocan en el paciente la ruptura de su homeos-tasis (su equilibrio dinmico vital), un comportamiento que muchos investigadores que sucedieron a Hahnemann han explicado con la ayuda de diversas disciplinas y el desarrollo de la tecnologa ligada a la medicina.

    El mdico homepata actual no debe reducir su atencin solamente al concepto curar, sino entender que tiene la funcin de diagnosticar, con toda pre-cisin, as como evaluar y pronosticar la evolucin del padecimiento, para lo cual se puede valer de los adelantos tecnolgicos actuales.

    El mdico de este tiempo debe tener la capacidad necesaria para esta-blecer medidas profilcticas o cuidados especiales al momento de enfrentarse a circunstancias espordicas o eventualidades, como traumatismos, epidemias y cirugas inesperadas, entre otras. Es evidente que se debe hacer lo posible por llegar a un diagnstico de certidumbre, y comprender las modificaciones objetivas asociadas a la evolucin subjetiva que el paciente ha tenido a favor del tratamiento homeoptico establecido.

    Debemos asumir que la ciencia mdica ha evolucionado en las ltimas dcadas gracias al desarrollo especfico de disciplinas como la fisiopatologa, la bioqumica, la endocrinologa, la microbiologa y la imagenologa, entre otras, y que todas estas materias ayudan a conocer el funcionamiento del organismo en-fermo y permiten evaluar los progresos que nuestro medicamento homeoptico consigue en el paciente.

    Se debe reconocer que las materias mdicas homeopticas describen en las patognesias de los medicamentos los sntomas que definen caractersticas singulares y precisas que permiten individualizarlos: frecuencia, horarios, agrava-ciones, mejoras, aspectos organolpticos, etctera, de cada uno de ellos.

    Editorialwww.latindex.unam.mx www.periodica.unam.mx

  • 6 LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014.

    Sin embargo, no debe bastarle al mdico homepata la informacin rela-cionada con estos elementos, toda vez que tiene que valorar todos los datos del paciente que se va a tratar para poder hacer la correcta eleccin del medicamento, tal y como lo ordena la Homeopata. Es un hecho, la clnica es fundamental y los aspectos tecnolgicos actuales son complementarios en la atencin de los pacien-tes, es decir, que el llamado ojo clnico sigue vigente.

    De acuerdo con lo expuesto, queda establecido que slo un mdico puede ejercer la Homeopata, de all que surja la necesidad de que el gremio mdico ho-meoptico unido, independientemente del origen y las caractersticas grupales, esta-blezca la obligatoriedad de pertenecer a uno de los colegios de mdicos homepatas.

    De esta manera, se podr rechazar la incursin de individuos que sin preparacin mdica y por circunstancias polticas o econmicas, pretendan auto-nombrarse homepatas poniendo en riesgo la salud y la vida de la poblacin que recurre a ellos. Es obvio que, al carecer de los conocimientos acadmicos, este grupsculo ser incapaz de establecer los lineamientos cientficos propios de la Homeopata.

    El uso de la tecnologa y el conocimiento de las investigaciones cient-ficas fortalecen la sapiencia del profesional de la Homeopata, lo cual queda de manifiesto en tres de los cuatro trabajos que presentamos en esta ocasin. En principio, nos referimos al que trata sobre las pruebas respiratorias, un texto pulcro y detallado que describe, entre otros conceptos, la naturaleza de la espirometra y la pulsioximetra, mtodos indispensables para comprobar la existencia de un padecimiento del mbito respiratorio.

    La tecnologa tambin sirve como soporte indispensable en el caso clnico urgente de oligohidramnios severo (OH), el cual relata cmo se logr revertir de manera pronta y total esta alteracin en una paciente primigesta que se encontra-ba en la semana 21 de gestacin. Es evidente que las ecografas permitieron ver el estado en el que se encontraba la paciente y comprobar, semanas despus, el xito del tratamiento que fue resultado de una prescripcin homeoptica compleja.

    Este primer nmero del ao ofrece una investigacin acerca del abordaje homeoptico de la tos, un artculo de revisin en el que se observan numerosos y bien organizados datos que explican los cambios biolgicos que ocurren en el organismo ante un sntoma, ya sea agudo o crnico, que puede ser el origen de un problema de pronstico reservado.

    Nuestro nmero enero-febrero rescata un interesantsimo anlisis, publi-cado originalmente en La Homeopata de Mxico hace 20 aos, en el que los doc-tores Roger Morrison y Nancy Herrick establecen algunas pautas generales que deben seguirse al momento de tratar de remplazar la medicina convencional por la medicina homepata.

    Finalmente, nos congratulamos por haber recibido una carta del doctor Renzo Galassi, presidente de la Liga Mdica Internacional Homeoptica (LMIH), en la que felicita a nuestra publicacin por su 80 aniversario y propone que se le otorgue un espacio a la institucin que representa para informar acerca de sus actividades. Esperamos que muy pronto se concrete esta alianza.

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    El Abordaje Homeoptico de la Tos

    El Abordaje Homeoptico de la Tos

    Resumen

    Abstract

    El organismo humano posee distintos mecanismos de defensa natural para sus di-versos sistemas, los que son conocidos como signos clnicos o lo que Hahnemann llamaba en los 6 y 7 del Organon la expresin de la fuerza vital.

    La tos es un fenmeno producido por un mecanismo reflejo que emerge en los receptores vagales situados a lo largo del tracto respiratorio. Se han descrito tres tipos diferentes de receptores, los receptores de estiramiento de adaptacin lenta (REAL), receptores de estiramiento de adaptacin rpida (REAR) y las fibras C. Este reflejo tusgeno consiste en tres fases: inspiratoria, compresiva y espiratoria.

    Es importante tener muy en cuenta que la tos es tan slo un sntoma de un cuadro clnico complejo e individual que se desarrolla en la totalidad del organismo. Incluso la medicina convencional reconoce que la tos, aunque puede ser un snto-ma problemtico, es una forma de curacin del cuerpo; en este sentido, se debe hacer lo posible por no erradicarla, menos an en menores de seis aos, a travs de antitusgenos de venta libre.

    Human organism has different natural defense mechanisms for its various systems, these mechanisms are known as clinical signs or what Hahnemann called in 6 and 7 of Organon expression of the vital force.

    Coughisaphenomenoncausedbyareflectionmechanismemergesvagalreceptors along the respiratory tract have been described three types of receptors, slowly adapting stretch receptors (SARs), rapidly adapting stretch receptors (RARs)

    *Isis Mara Infante Regalado

    *Mdico homepata egresada de la Escuela Libre de Ho-meopata de Mxico, I. A. P.

    Coordinadora de Consultorios de Farmacia Homeoptica Nacional.

    Artculo de revisin

    Recibido: septiembre, 2013. Aceptado: noviembre, 2013

    www.latindex.unam.mx www.periodica.unam.mx

    PALABRAS CLAVE:Tos, Tos aguda, Tos subaguda, Tos crnica, Tos seca, Tos productiva, Tos emetizante, Tos espasmdica, Tos sibilante, Tos convulsiva o convulsa, Tos de esfuerzo, Tos traqueo bronquial, Tos larngea, Receptores de estiramiento de adaptacin lenta (REAL), Receptores de estiramiento de adaptacin rpida (REAR), Fibras C, Reflejo tusgeno, Fases de la Tos, Nociceptores.

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    Isis Mara Infante Regalado

    KEYWORDS:Cough, Acute cough, Subacute cough, Chro-nic cough, Dry cough, Productive cough, Emetic cough, Spasmodic cough, Wheezing cough, Whoo-ping cough, Effort cough, Tracheobronchial cough, Laryngeal cough, Slowly adapting stretch receptors (SARs), Rapidly adapting stretch receptors (RARs), C-fibers, Reflex cough, Cough phases, Nociceptors.

    IntroduccinEl organismo humano cuenta con distintos meca-nismos naturales de defensa para el resguardo de sus diversos rganos y sistemas. El funcionamiento de dichos mecanismos genera las manifestaciones corporales que conocemos como signos clnicos, las cuales son el lenguaje con el que el organismo nos proporciona datos para el diagnstico clnico y lo que Hahnemann llam la expresin de la fuerza vital en los pargrafos 6 y 7 del Organon1. Sin embargo, y a pesar de que el maestro siempre hizo hincapi en la importancia de la observacin cuidadosa e imparcial del mdico sobre el paciente, da la impresin que los sntomas han perdido su valor en las nuevas ge-neraciones de mdicos homepatas. El ojo clnico del mdico, debido a la evolucin de los mtodos clnicos auxiliares electrnicos o computarizados, ha venido perdindose. Por esta razn, y sin restar va-lor a la valiosa informacin que puede ofrecernos un estudio clnico, el mdico homepata debe aprender a ser un atento observador de las cualidades espe-cficas que un mismo sntoma puede tener en cada individuo al que se preste atencin, tal como ocurre en el caso de la tos, para concretar una atencin ade-cuada a travs del medicamento ms semejante.

    El sistema respiratorio se encuentra en con-tacto directo con el medio externo, lo que permite un intercambio gaseoso adecuado y la realizacin de los primeros pasos en la oxigenacin del todo el orga-nismo, como son la ventilacin y la perfusin, pero el aire que inhalamos frecuentemente contiene una gran cantidad de elementos de diferentes tamaos y naturaleza, entre los que se encuentran distintos tipos de gases, partculas, microorganismos y com-

    puestos, los cuales no necesariamente son benfi-cos para el organismo y, ms bien, en muchas oca-siones resultan irritantes o incluso patognicos. Para protegerse de stos, el sistema respiratorio ha de-sarrollado mecanismos de defensa a lo largo de la evolucin, entre los que se encuentran bsicamente:

    a) Reflejo de los estornudos.b) Produccin de moco.c) Reflejo de la tos.

    Estos reflejos se pueden presentar aislada o espordicamente cuando existe una agresin al sis-tema respiratorio y forman parte de la defensa ante un proceso patolgico, el cual podemos identificar en la clnica. Los reflejos tambin pueden variar en magnitud y/o frecuencia, y pueden constituir el eje de sntomas particulares caractersticos que nos ayuden a identificar el medicamento que necesita el pacien-te, adems de que nos sirven como parmetro para determinar la evolucin del cuadro.

    El reflejo del estornudo se desencadena cuando aparece una irritacin directa a nivel de las fosas nasales; esta seal es enviada por medio de impulsos aferentes del quinto par craneal hacia el bulbo raqudeo, donde se libera el reflejo. El meca-nismo es similar al de la tos; sin embargo, en el caso de los estornudos la vula desciende de manera que permita rpidamente el paso de grandes cantidades de aire por la nariz, ayudando a eliminar sustancias extraas de manera rpida y violenta.

    Las vas respiratorias, desde las fosas nasa-les hasta los bronquolos terminales, se mantienen hmedas gracias a una capa de moco que reviste toda la superficie. Este moco es segregado en mayor

    and C-fibers. This cough reflex consists of three phases, the first inspiratory,compression and expiratory.

    It is important to bear in mind that the cough is just a symptom of a complex clinical picture and individual that develops in the whole organism, even conventional medicine recognizes that cough, but can be a troubling symptom, it is a form of healing the body, in this regard, it should be possible not eradicate it, even less in children under six years antitussives through counter.

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    El Abordaje Homeoptico de la Tos

    proporcin por las glndulas de clulas caliciformes aisladas o situadas en el revestimiento epitelial de las vas, y en una menor cantidad por las glndulas submucosas. La mucosidad fluye constantemente por todo el revestimiento de la superficie de las vas areas gracias al epitelio ciliado que permite que se desplace con una velocidad muy baja, aproximada-mente de 1 cm/min, hacia la faringe.

    Las tareas de estas secreciones son mlti-ples: humidificacin, adhesin, eliminacin de mi-croorganismos o de partculas, funcin antioxidante, etctera. Mientras que la produccin de moco en condiciones normales no representa malestar alguno ni siquiera por la necesidad de sonarse la nariz, una produccin excesiva y/o un trastorno en su transpor-te o en su reabsorcin se reflejan en una rinorrea. Las modificaciones del moco pueden alterar su volu-men, su viscosidad y su contenido celular, y en estos casos su funcin es proteger la mucosa respiratoria, rechazando o despejndola de partculas dainas y microorganismos peligrosos2.

    TosEs un fenmeno producido por un mecanismo reflejo que emerge en los receptores vagales situados a lo largo del tracto respiratorio, cuando son estimulados por diversos mediadores de la reaccin inflamatoria de la mucosa traqueobronquial (histamina, prosta-glandinas, sustancia P, bradicinina); estas sustancias son producidas por clulas del sistema inmune ante un estmulo inflamatorio, ya sea de origen alrgico, infeccioso, autoinmune o simplemente irritativo3.

    Este reflejo consiste en tres fases. La primera, llamada inspiratoria, donde se inhala una cantidad va-riable de aire que permite el estiramiento y la tensin de los msculos espiratorios. La segunda, conocida como compresiva, durante la cual la glotis tiene un cierre muy corto, manteniendo el volumen intrapulmo-nar en espera del aumento de la presin intratorxica, misma que se eleva por arriba de los 300 mmHg. Una vez alcanzada esta presin se llega a la tercera fase, nombrada espiratoria, en la que la glotis se abre luego de la compresin dinmica de la va area y provo-ca la expulsin de aire, liberando en un tiempo breve (30-50 milisegundos) el flujo espiratorio supramximo o pico de tos (12 L/s), seguido por un flujo espirato-rio ms lento (200-500 milisegundos), arrastrando de esta forma los cuerpos movibles que encuentre a su paso y reforzando al barrido ciliar para eliminar a las partculas que pudieran ser nocivas al organismo4.

    Gracias a mltiples modelos de investigacin se ha determinado que los receptores de los nervios aferentes vagales son los iniciadores del reflejo de la tos. Estos nervios tienen terminaciones abundantes en la mucosa y en las paredes de las vas areas desde su parte superior hasta los bronquiolos termi-nales, as como en el parnquima pulmonar; pueden dividirse en subtipos clasificados segn su origen neuroqumico, el tipo de mielinizacin, sus caracte-rsticas fisicoqumicas, la velocidad de conduccin del impulso nervioso y su capacidad de adaptacin a la distencin pulmonar5.

    La presencia de nervios aferentes ha sido descrita mediante estudios fisiolgicos, registrando los impulsos nerviosos de las rutas aferentes desde el receptor. Se han descrito tres tipos diferentes de receptores: los receptores de estiramiento de adap-tacin lenta (REAL), los receptores de estiramiento de adaptacin rpida (REAR) y las fibras C6.

    Tabla 1. Receptores vagales posiblemente implicados en el reflejo de la tos7, a saber: fibras C, receptores de estiramiento de adaptacin rpida (REAR) y receptores de estiramiento de adaptacin lenta (REAL).

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    Isis Mara Infante Regalado

    Es importante entender cmo funcionan es-tos receptores, ya que poseen diferentes reacciones a los estmulos y se complementan entre s para un mejor cuidado de la mucosa respiratoria.

    Receptores de estiramiento de

    adaptacin lenta (REAL)Son terminales nerviosas mielnicas con una velo-cidad de conduccin de 30-50 m/s. Se localizan en el msculo liso de las vas areas centrales e intra-pulmonares, las cuales son altamente sensibles a las fuerzas mecnicas de estiramiento y distencin pulmonar durante la respiracin, siendo mayor su actividad durante la fase inspiratoria. Su activacin provoca la inhibicin de la respiracin y de la con-duccin colinrgica, llevando a una disminucin de la actividad del nervio frnico y del tono del msculo liso bronquial; por ello, son responsables del reflejo de inflacin de Hering-Breuer, que es la inhibicin en el comienzo de la inspiracin luego de una inflacin pulmonar sostenida, y del reflejo de broncodilatacin o distensin de las vas areas. A pesar de esto, se piensa que los REAL no son los principales respon-sables en el reflejo tusgeno, pero tienen gran influen-cia sobre el patrn respiratorio, controlando algunos reflejos defensivos de la va area8.

    Receptores de estiramiento de

    adaptacin rpida (REAR)Tambin se les conoce como receptores de irrita-cin. Son fibras nerviosas mielnicas aferentes con una velocidad de conduccin de 20-40 m/s. Algunas de sus ramas terminales se localizan en el epitelio respiratorio. Su principal caracterstica es la rapidez de adaptacin a la inflacin pulmonar sostenida, as como su respuesta a una gran variedad de estmulos mecnicos y qumicos; del mismo modo, son activa-dos por mediadores inflamatorios como la sustancia P, la histamina y la bradiquina, las cuales pueden provocar contraccin del musculo liso de la pared de los bronquios, generando broncoconstriccin refleja,

    obstruccin de las va area, secrecin de moco, tos, hiperventilacin y edema9.

    Fibras CSon terminaciones nerviosas de fibras amielnicas que presentan una velocidad de conduccin de 1-2 m/s. Estas fibras no mielinizadas proveen la mayor inervacin de la va area y los pulmones, por lo que se han clasificado en fibras C pulmonares y fibras C bronquiales. Son similares a los nervios sensorios somticos no mielinizados denominados nocicepto-res, que inervan la piel y el sistema msculo esque-ltico10.

    Los nociceptores son un grupo especial de receptores sensoriales capaces de diferenciar entre estmulos inocuos y nocivos. Son las terminaciones perifricas de las fibras aferentes sensoriales prima-rias. stos reciben y transforman los estmulos loca-les, como son las partculas en la va area, el polvo, los gases irritantes, los microorganismos, el humo de tabaco, etctera, en potenciales de accin que son transmitidos a travs de las fibras aferentes senso-riales primarias hacia el SNC. El umbral de estmulo de estos receptores no es constante y depende del tejido donde se encuentren11.

    Las fibras C pulmonares corresponden a los denominados receptores J, que se encuentran en las paredes alveolares yuxtapuestas a los capilares pul-monares; por ello son accesibles desde la circulacin pulmonar, mientras que las fibras C bronquiales se encuentran dentro de la mucosa de las vas areas y son predominantemente estimuladas por agentes colocados en este sitio. Este sistema de receptores nerviosos no colinrgicos excitatorios (fibras C) es estimulado por irritacin qumica (humo de cigarro, capsaicina, pH cido, etctera) o por diversos media-dores qumicos (histamina, bradicinina, acetilcolina, prostaglandinas, leucotrienos)12.

    La estimulacin de las fibras C bronquiales produce broncoconstriccin refleja, incremento en la secrecin de moco en las vas areas, hipotensin, bradicardia, respiracin rpida y superficial o apnea. Las fibras C bronquiales responden a la histamina, mientras que las pulmonares no13.

    Una caracterstica de las fibras C es su qui-miosensibilidad, an ms acentuada frente a la cap-saicina, principal componente del chile. La capsaici-

  • 11LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014, p. 5-14.

    El Abordaje Homeoptico de la Tos

    na acta como un componente activo excitatorio en neuronas aferentes primarias que contienen neuro-pptidos14.

    A pesar de conocer las funciones fisiopatol-gicas de cada una de estas vas, an no se tiene el receptor primario del reflejo tusgeno15.

    Todo esto nos muestra que el reflejo de la tos es un sistema complejo de interacciones en red de las vas neurolgicas aferentes que se integran a nivel central, y proveen una respuesta eferente a tra-vs de las races cervicales que inervan los msculos respiratorios, desencadenando finalmente la tos.

    Clasificacin e indicaciones en medicina

    homeopticaComo se ha mencionado, la tos es un sntoma vers-til y complejo que se manifiesta de distintas maneras

    en cada paciente; es por ello que se puede clasificar en formas diferentes para un mejor estudio y com-prensin. As, por ejemplo, se han descrito dos tipos fisiolgicos de tos:

    La tos larngea, verdadera o reflejo espirato-rio. Es producida por un estmulo mecnico larngeo causado principalmente por material extrao, y sirve como proteccin contra la aspi-racin del mismo.

    La tos traqueo bronquial. Tiene un origen lejano a la laringe y puede ser voluntaria, estimulada por quimiorreceptores en la va area inferior y por estmulos mecnicos. Su labor principal es limpiar y mantener funcional el aparato mucoci-liar, sobre todo cuando se inhalan grandes can-tidades de material extrao o cuando existe un volumen considerable de moco, edema o pus, debido a una secrecin excesiva.

    Adems, debido a su duracin, que es una caracterstica importante a considerar para el diag-nstico integral del paciente, la tos puede clasificarse en aguda, subaguda y crnica.

    Tabla 2. Estmulos a los receptores de las Fibras C y REAR16.

  • 12 LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014, p. 5-14.

    Isis Mara Infante Regalado

    1. Tos agudaSe considera as cuando cursa con una duracin menor a tres semanas; sus etiologas ms comunes son las infecciones virales del tracto respiratorio o ri-nosinusitis, la sinusitis aguda, la neumona adquirida en la comunidad, la exacerbacin de la enfermedad pulmonar obstructiva crnica (EPOC), la rinitis alrgi-ca y la laringitis secundaria a irritantes ambientales, siendo la ms comn dentro de este grupo las infec-ciones virales de tracto respiratorio superior17.

    Para este tipo de tos existen diversos medi-camentos homeopticos, entre ellos: Aconitum nape-lus, cuya principal caracterstica es la agudeza de su presentacin, con trastornos inflamatorios violentos, de aparicin rpida e intensa, generalmente febril, y acompaada de ansiedad y gran inquietud. Despus de exponerse al aire fro y seco, el paciente comienza con una irritacin larngea que le provoca tos dolorosa a tal grado que se agarra la laringe cuando tose18. Otro de los medicamentos en casos agudos es Belladona atropa; se indica cuando el paciente est muy inquieto y cuando la tos se manifiesta durante una inspiracin profunda o en temperaturas altas y climas secos. Ge-neralmente, el acceso de tos es desencadenado por la sensacin de humo y se presenta con mayor frecuen-cia por las maanas; asimismo, el pecho se encuentra congestionado y dolorido19.

    De igual manera podemos hablar de Kali bi-chromicum o Kali bich, indicado en aquellos cuadros de tos que se caracterizan por dolores retroesternales pequeos y punzantes; el paciente logra indicar con un solo dedo el sitio en el que se inicia el dolor y sea-la constantemente la altura de la carina bronquial con molestias agudas, lancinantes y errticas, de inicio y fin agudos, bruscos y constantes20. Pulsatila nigricans es un medicamento ms de indicacin aguda, cuando los cuadros de tos de los pacientes se dan al inspirar profundamente, provocando una sensacin de polvo en la garganta y presentando estertores audibles a distancia; adems, se manifiesta el deseo de aire libre y se mantiene en movimiento constante21.

    2. Tos subagudaSe trata de una tos persistente de tres a ocho se-manas que por lo general no se asocia a una causa infecciosa, sino a hiperactividad bronquial, hiperse-crecin de moco y deterioro del barrido mucociliar

    post-infeccioso22. En virtud de ello, Arsenicum lbum es indicado en pacientes definitivamente noctm-bulos, ya que sus sntomas se agravan luego de la medianoche, despertndolos de forma violenta entre la 1:00 y 3:00 hrs., durando a menudo hasta el me-dioda. De igual forma, los cambios de temperatura y el tiempo hmedo agravan el reflejo tusgeno de una forma caracterstica, presentndose luego de sema-nas de un cuadro larngeo de aparicin repentina23.

    Bryona es uno de los medicamentos ms empleados por los mdicos en casos de tos seca subaguda como secuela de un cuadro gripal o in-feccin de vas areas superiores, aquella que los pacientes refieren que inicia con un cosquilleo cons-tante en la laringe, provocando un acceso violento de tos dolorosa y que termina en una respiracin suspi-rosa y silbante24.

    Ipecacuanha es uno de los principales medi-camentos de la tos emetizante subaguda, as como de la disnea y el asma, especialmente en nios. El paciente tiene una produccin constante de moco que se acumula luego de un cuadro aguda de vas areas respiratorias, provocando nausea persistente, disnea, asfixia y fro precordial25. Por otra parte, cuando se detecta una tos espasmdica que logra contraer todo el cuerpo y se presenta al hablar, rer, leer, beber o por olores muy fuertes, es el turno de Phosphoro. Es el principal medicamento de la tos seca espasmdica irritante y agotadora que surge como secuela de un resfriado o evento agudo larngeo26.

    3. Tos crnicaSu presencia es mayor a ocho semanas; sus causas se limitan a un grupo de tres patologas: el sndrome de tos de va area superior, antes conocido como sndrome de goteo post-nasal; el reflujo gastroeso-fgico y el asma, excluyendo a pacientes fumadores y aquellos que ingieren IECAs (inhibidores de la en-zima convertidora de angiotensina). Aunque estas patologas son las ms comunes, existen otras con-diciones para un importante porcentaje de casos de tos crnica.

    El sndrome de tos de va area superior se define como el drenaje de secreciones desde la nariz o los senos paranasales hasta la faringe, por lo que el diagnstico de esta entidad es clnico; durante la anamnesis se debe cuestionar acerca de la sensa-cin de escurrimiento posterior o descarga nasal, y durante la exploracin fsica se tiene que realizar una

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    El Abordaje Homeoptico de la Tos

    buena observacin para comprobar la posible pre-sencia de secrecin mucoide o mucopurulenta en la nasofaringe y la orofaringe28. Las principales carac-tersticas de los pacientes para los que es indicado Carbo vegetabilis son la postracin y el fro intenso corporal. El doctor Tyler hizo la observacin de que es un verdadero resucitador de cadveres, ya que la debilidad y el agotamiento son tan graves que los pacientes permanecen en cama durante das o se-manas, demostrando la disminucin de su energa de una manera casi palpable. Sus cuadros respiratorios son crnicos y les afecta inimaginablemente el calor, as como la ropa muy ajustada y las comidas copio-sas o grasosas29.

    La drosera es uno de los medicamentos con mayor tendencia a la cronicidad. Se le indica princi-palmente en los cuadros tuberculnicos, sobre todo en sus localizaciones laringotraqueal, pulmonar, sea, articular y ganglionar. Tiene una accin selec-tiva sobre los trastornos larngeos crnicos de los profesionales de la voz: predicadores, locutores, ora-dores, cantantes, actores u otros similares, quienes presentan sensacin de garganta o laringe seca y s-pera; poseen una voz ronca y sin tonalidad, lo que les lleva a esforzarse para hablar30. Spongia tosta es un medicamento indicado en tos crnica, seca, sofocan-

    te, ronca, agitante y espasmdica; tiene un sonido tan peculiar que se refieren a l como si se serrucha-ra una tabla de madera, se agrava por vientos fros y se presenta con una sensacin de cosquilleo en la garganta que al terminar el episodio de tos provoca una respiracin jadeante y acelerada31.

    Otra clasificacin de la tos se basa en los elementos que la componen:

    a) Tos seca. No existe ningn tipo de esputo o expectoracin; slo se presenta el aire a presin que sale de los pulmones. Aconitum napelus refiere la sensacin de un dolor cortante que agrava al inspirar aire fro, lo que lleva al paciente a presentar ronquera y resequedad larngea. La tos se manifiesta peor a medianoche, con un sonido ladrante, ronco, seco, y es acompaada de cosquilleo en las vas areas32. Arsenicum album se encuentra en cuadros de cata-rro larngeo de aparicin repentina, acompaados de una constriccin larngea ardorosa y quemante en la que no se tolera siquiera beber agua; la respiracin provoca una sensacin de polvo o humo que irrita la va area, desencadenando accesos agotadores de tos seca violenta, hueca y persistente que aumentan la sensacin de cosquilleo o cuerpo extrao en la la-ringe, aunada a dolor intenso en la espalda33.

    Tabla 3. Manifestaciones sistmicas de la tos27.

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    Isis Mara Infante Regalado

    Bryonia alba es uno de los medicamentos ms empleados por los mdicos homepatas en ca-sos de tos seca que inicia con un cosquilleo constan-te en la laringe, provocando un acceso violento de tos dolorosa que termina con una respiracin suspi-rosa y silbante34. Phosphoro es el principal medica-mento para la tos seca espasmdica irritante y ago-tadora, pero sobre todo dolorosa en laringe y trax35. Por ltimo, como hemos mencionado, Spongia tosta manifiesta una tos sumamente seca, la cual provo-ca un sonido peculiar (como serruchar madera), se agrava por los vientos fros y genera sensacin de cosquilleo en la garganta36.

    b) Tos productiva. Es en la que el reflejo ex-pulsa aire acompaado de esputo, es decir, produce expectoracin. Belladona atropa provoca un reflejo tusgeno tan violento que el paciente lleva sus manos hacia el trax para sostenerlo, o hacia la cabeza por el dolor explosivo que ste le provoca. La expectoracin es ms abundante por la maana; su color es marrn, sanguinolenta o estriada de sangre herrumbrosa, es de-cir, oxidada; cuando sta se presenta, la sensacin de ahogo lleva al paciente a sentarse o erguirse para sentir mejora37. En contraparte, el reflejo de Carbo vegetabilis es flojo y dbil; posee un sonido crupal hueco y grave, ya que la expectoracin es espesa (adems, verdosa y sanguinolenta, con un caracterstico sabor salado); al terminar de toser el paciente tiene la sensacin de as-fixiarse, as que busca el aire fresco y pide las ventanas abiertas, ya que la disnea respiratoria es muy marcada an con esfuerzos pequeos38.

    Kali bich presenta sensacin de sequedad bronquial durante los accesos de tos, as como dolor sordo que atraviesa el hemitrax derecho y agrava al inspirar. Luego de los accesos el paciente siente el trax pesado, tanto que lo despierta por la noche. Las expectoraciones se quedan en la laringe, son muy espesas y poseen un sabor metlico39. Por otra parte, cuando el paciente refiere mucosidad cons-tante que al expectorar se nota de color amarillento, consistencia filante y en ocasiones sanguinolenta, de gusto amargo o grasoso, y que se acompaa de lagrimeo, epistaxis, nausea e incontinencia urinaria, Pulsatilla nigricans es el medicamento de eleccin40.

    c) Tos emetizante. Hablamos de aquella en donde la produccin de esputo es tan filante y difcil de expectorar, que el esfuerzo produce vmito (con alimentos, bilis, etctera). Ipecacuahna coephelis pre-senta una tos espasmdica, violenta, incesante, de aparicin brusca, sofocante, que quita la respiracin y reaparece a cada inspiracin con estertores cons-tantes. Los nios presentan cianosis y rigidez; luego

    vienen nausea, arcadas y emesis mucosa. Al finalizar el acceso se presentan gastralgia y cefalea pulsante, as como diaforesis y calor en la cara. Son pacientes hipersensibles a los cambios de temperatura, sobre todo a los vientos; mejoran acostados del lado izquier-do y, sobre todo, mantenindose en reposo41.

    Otro cuadro igualmente violento es caracters-tico de Drosera. En estos casos encontramos una tos seca, desgarrarte, profunda, ladrante, ronca, espasm-dica, que sobreviene en violentos paroxismos o accesos sucedidos tan rpidamente que casi no dan tiempo a re-tomar la respiracin; adems, su intensidad es tal que la persona est obligada a sostenerse el vientre o el trax con las manos. Precisamente por su agresividad este reflejo se acompaa de nuseas, arcadas, vmitos ali-menticios o mucosos ligeramente estriados de sangre; tambin se observan cianosis perifrica y, a menudo, epistaxis, diaforesis y angustia. Por lo general, los acce-sos son provocados por leer en voz alta o por el humo del cigarrillo; durante o despus del sarampin y por ha-blar constantemente o en un tono muy alto. A pesar de la intensidad del cuadro clnico, estos pacientes agravan al estar en reposo y por el calor de la cama; prefieren el aire libre, el movimiento y tocar constantemente las zonas doloridas para sentir alivio42.

    Ahora bien, existe otra subdivisin de la tos, en virtud de su presentacin43:

    I. Tos espasmdica. En forma de espas-mos, el reflejo muscular es veloz y corto, con una fuerza de contraccin considerable y repeticiones constantes. El repertorio mdico homeoptico con-sidera medicamentos como Coccus indicus, Cuprum metallicum y Rumex crispus para este tipo de tos.

    II. Tos sibilante. Al espirar el aire se produce un sonido agudo, el cual ser indicador de una se-vera inflamacin del rbol bronquial; en tales casos pueden utilizarse Kreosotum y Spongia tosta.

    III. Tos convulsiva o convulsa. Se caracteri-za por accesos violentos, intermitentes y sofocantes; tambin se le refiere como golpes de tos o accesos de tos, adems de que en el repertorio se enuncia como tos sofocante. Engloba a medicamentos como Hepar sulphur, Dioscorea villosa y Sambucus nigra.

    IV. Tos de esfuerzo. Es provocada volunta-riamente, por lo general para expulsar alimentos o cuerpos extraos ingeridos. Dentro del repertorio se considera como Tos-esforzndose, y dentro de este rubro se encuentran remedios como Cuprum metalli-cum y Challidonium majus.

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    El Abordaje Homeoptico de la Tos

    Consideraciones finales

    Debemos tener en cuenta que la tos es slo un snto-ma de un cuadro clnico complejo e individual que se desarrolla en la totalidad del organismo, que merece un interrogatorio detallado y, sobre todo, una ade-cuada exploracin fsica de las vas areas, en espe-cial de los campos pulmonares, ya que esto definir tanto al diagnstico etiolgico, de suma utilidad para fines pronsticos, como al diagnstico medicamento-so, que servir para determinar el medicamento ho-meoptico ms indicado para orientar los esfuerzos que hace el organismo para recobrar la salud.

    Recordemos que la medicina homeoptica nos explica que los sntomas de las enfermedades no deben suprimirse, sino modularse y abordarse de manera global, abarcando la totalidad del paciente e identificando su sintomatologa mental, general y, en este caso, la particular caracterstica, ya que mues-tran el camino elegido por la energa vital para el restablecimiento del organismo. Incluso la medicina convencional reconoce que la tos, aunque puede ser

    una manifestacin problemtica, es una forma de cu-racin del cuerpo; en este sentido, se debe hacer lo posible por no erradicarla, menos an en menores de seis aos a travs de antitusgenos de venta libre44.

    As, la habilidad del mdico homepata debe llevarle a elegir alguno de los medicamentos asocia-dos con la tos, pero sobre todo con la totalidad de las manifestaciones. Dentro de la materia mdica homeoptica existen cuadros de tos diametralmente distintos, por lo que su estudio merece una meticu-losa revisin. En la tabla 4 pueden apreciarse aque-llos medicamentos homeopticos que poseen mayor puntaje dentro del repertorio mdico.

    En la Homeopata no se atienden enferme-dades, sino enfermos, y la tos es slo uno de los mu-chos sntomas que debemos considerar dentro del cuadro clnico del paciente; si logramos integrar una historia clnica completa, una exploracin fsica minu-ciosa y exacta, as como una traduccin de sntomas precisa, tendremos la totalidad de nuestro individuo para la eleccin del remedio con mayor semejanza posible.

    Tabla 4. Medicamentos homeopticos que se emplean con mayor frecuencia en la atencin de los distintos tipos de tos.

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    Isis Mara Infante Regalado

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    19. Ibid. p. 79-84.

    20. Vannier L. Materia Mdica Homeoptica, 20a ed. Ciudad de Mxico: Editorial Porra; 2011. p. 276-280.

    21. Ibid. p. 409-415.

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    23. Vijnowsky B. Op cit, tomo I. p. 154-163.

    24. Vannier L. Op cit. p. 291-297.

    25. Vijnowsky B. Op cit, tomo II. p. 112-116.

    26. Vannier L. Op cit. p. 409-415.

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    29. Vijnowsky B. Op cit, tomo I. p. 370-376.

    30. Ibid. p. 612-617.

    31. Ibid. p.372-1376.

    32. Vannier L. Op cit. p.7-10.

    33. Vijnowsky B. Op cit, tomo I. p.154-163.

    34. Vannier L. Op cit. p.291-297.

    35. Ibid. p. 409-415.

    36. Vijnowsky B. Op cit, tomo III. p.372-1376.

    37. Ibid. p. 79-84.

    38. Vannier L. Op cit. p.128-130.

    39. Ibid. p.276-280.

    40. Vijnowsky B. Op cit, tomo III. p.151-164.

    41. Ibid. p.112-116.

    42. Ibid. p.612-617.

    43. Canning BJ. Anatomy and neurophysiology of the cough re-flex: ACCP evidence-based clinical practice guidelines. Chest. Ene 2006; 129(1 Suppl): 33S-47S. PMID: 16428690.

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    Pruebas de Funcin Respiratoria

    Pruebas de Funcin Respiratoria

    Resumen

    Abstract

    Las pruebas de funcin respiratoria son mtodos de observacin que permiten ampliar el horizonte clnico, al tiempo que facilitan la recopilacin y la cuantificacin de los datos de la funcin del aparato respiratorio dentro de la bsqueda de la totalidad sintomtica, situndose como parte de los exmenes recomendados en diferentes guas teraputicas.

    Este trabajo ofrece, adems, informacin puntual acerca de conceptos fun-damentales relativos a la fisiologa respiratoria y la ventilacin pulmonar, y relata detalladamente la naturaleza de la espirometra (mide la capacidad y la rapidez de los volmenes respiratorios), as como la de la pulsioximetra, una tcnica no inva-siva que mide la saturacin de oxgeno de la hemoglobina en la sangre circulante.

    Respiratory function tests are observational methods that expand the clinical horizon, while facilitating the collection and quantification of information aboutrespiratory function in search of totality of symptoms, thereby becoming part of the Recommended therapeutic guidelines in different tests.

    Thisworkalsoprovidestimelyinformationonkeyconceptsofrespiratoryphysiology and pulmonary ventilation, and describes in detail the nature of

    *Cuauhtmoc Magaa Hernndez**Jos Luis Lpez Esceberre

    ***Jess Cuauhtmoc Magaa Cazares

    *Mdico cirujano y partero, Facultad de Medicina U.N.A.M.Mdico especialista en anestesiolo-ga, I.M.S.S.Especialidad en medicina homeopti-ca, Instituto de Estudios Tecnolgicos y Superiores Matatipac, A. C.Diplomado en investigacin clnica, I.M.S.S.

    **Medicina general, Universidad Aut-noma de Sinaloa.Especialidad en medicina homeopti-ca, Instituto de Estudios Tecnolgicos y Superiores Matatipac, A. C.

    ***Medicina general, Universidad Au-tnoma de Sinaloa.Especialidad en medicina homeopti-ca, Instituto de Estudios Tecnolgicos y Superiores Matatipac, A. C.

    Artculo de revisin

    Recibido: octubre, 2013. Aceptado: diciembre, 2013

    www.latindex.unam.mx www.periodica.unam.mx

    PALABRAS CLAVE:Pruebas de funcin respiratoria, Espirometra, Pulsioximetra, Asma, EPOC, Bronquitis, Volumen respiratorio, Flujo respiratorio, Enfermedad pulmonar obstructiva crnica, Enfisema, Bronquitis crnica (no obstructiva), Falla cardiaca congestiva, Tuberculosis, Bronquiectasias neumoconiosis, Bronquiolitis constrictiva y bronquilitis difusa.

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    Cuauhtmoc Magaa Hernndez, Jos Luis Lpez Esceberre, Jess Cuauhtmoc Magaa Cazares

    Como sabemos, el propsito mas importante en la clnica homeoptica es llevar a cabo una toma del caso lo ms completa posible para posteriormente encontrar el medicamento que nece-sita el paciente. As pues, el mdico escuchar con atencin y detenimiento la narracin del enfermo y, posteriormente, realizar una minuciosa exploracin fsica que le permita prescribir con la mayor exactitud posible en base a la totalidad sintomtica.

    Si se quiere ser todava ms preciso en el diagnstico, especialmente en la magnitud del dao y el desequilibrio en el que se encuentra el paciente, as como tener constancia de la mejora producida luego de la prescripcin homeoptica, hay que echar mano de los estudios de laboratorio y gabinete. Tal es el caso de la pruebas de funcin respiratoria (PFR).

    Las PFR son mtodos de observacin que permiten ampliar el horizonte clnico, al tiempo que facilitan la recopilacin y la cuantificacin de los da-tos de la funcin del aparato respiratorio dentro de la bsqueda de la totalidad sintomtica, situndose como parte de los exmenes recomendados en di-ferentes guas teraputicas. Dentro de las pruebas ms utilizadas en la clnica diaria se encuentran la espirometra y la pulsioximetra, las cuales tienen una funcin de diagnstico, pronstico, evaluacin y seguimiento a la respuesta teraputica en las en-fermedades crnicas pulmonares. Hablamos, entre otras, del asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crnica (EPOC), antiguamente conocida como en-fisema, y algunas patologas ms como bronquitis crnica (no obstructiva), falla cardiaca congestiva, tuberculosis, bronquiectasias, neumoconiosis, bron-quiolitis constrictiva y bronquilitis difusa1.

    spirometry (measuring the capacity and speed of the respiratory volumes) as well as pulse oximetry, a noninvasive technique that measures oxygen saturation of hemoglobin in circulating blood.

    KEYWORDS:Respiratory function tests, Spirometry, Pulse oximetry, Asthma, COPD, Bronchitis, Respiratory volume, Respira-tory flow, Chronic obstructive pulmonary disease, Emphyse-ma, Chronic bronchitis (non-obstructive), Diffuse bronchio-litis congestive heart failure, Tuberculosis, Bronchiectasis, Pneumoconiosis and constric-tive bronchiolitis .

    Tabla 1. Utilidad de las pruebas de funcin respiratoria.

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    Pruebas de Funcin Respiratoria

    Los estudios en referencia son auxiliares diagnsticos y pronsticos muy importantes en el proceso preoperatorio, principalmente para la valora-cin del riesgo quirrgico y anestsico en cierto tipo de pacientes que por su edad o sus antecedentes (asmticos, tabquicos, presencia de EPOC) pudie-ran tener mayor riesgo. Es un hecho que las PFR han sido subutilizadas tanto por los mdicos generales como por los mdicos homepatas.

    Estos anlisis resultan muy tiles en el diag-nstico y el control de los enfermos que padecen al-guna enfermedad respiratoria, e incluso no respirato-ria (extratorcica), ya que proporcionan informacin clara y precisa sobre los aspectos ms importantes de la funcin respiratoria: la mecnica pulmonar y el intercambio gaseoso.

    Vale la pena anotar que estas pruebas no proporcionan un diagnstico etiolgico, sino que in-forman la manera en que se altera la fisiologa normal de la respiracin, al mismo tiempo que indican si una prescripcin homeoptica pudo corregir el problema, y en qu magnitud. Es importante sealar que, an sin presencia de sntomas, un individuo puede tener resistencia aumentada al flujo areo por mucho tiem-po y una distribucin no uniforme del aire inspirado antes de que se presente dificultad respiratoria; de all que este tipo de pruebas puedan ayudarnos enor-memente cuando se sospeche de alguna alteracin en el parnquima pulmonar (especialmente en fuma-dores), detectndola mucho antes de que se mani-fieste con sntomas.

    Su interpretacin debe ser clara e informati-va, ya que slo mencionar los valores obtenidos no nos dice nada. La valoracin de estas pruebas debe

    realizarse con el conocimiento de los dems aspec-tos del paciente, es decir, dentro de la totalidad del individuo2.

    Conceptos fundamentalesPara entender a las pruebas de funcin respiratoria es importante recordar algunos conceptos sobre la fisiologa respiratoria y la ventilacin pulmonar. Se analizan varios volmenes y capacidades:

    a) Volumen corriente (VC): es el volumen de aire que una persona inhala y exhala cuando se encuentra en condiciones basales, es decir, es el aire que se mueve en condiciones normales. A este volumen de aire tambin se le denomina volumen tidal (VT).

    b) Volumen de reserva inspiratoria (VRI): se trata del volumen que ingresa al pulmn cuando, a partir de una inspiracin normal, se hace una inspiracin mxima voluntaria.

    c) Volumen de reserva espiratoria (VRE): de modo contrario, si a partir de una espiracin nor-mal se hace una espiracin mxima voluntaria, se obtendr del pulmn un volumen de aire extra. A esto se le llama volumen de reserva espiratoria.

    d) Volumen residual (VR): este concepto se re-fiere al volumen de aire que queda dentro del pul-mn despus de arrojar todo el aire que se pueda expulsar en una exhalacin.

    Figura 1. Representacin grfica de los diferentes volmenes respiratorios.

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    Cuauhtmoc Magaa Hernndez, Jos Luis Lpez Esceberre, Jess Cuauhtmoc Magaa Cazares

    Por su parte, las capacidades pulmonares se refieren a los distintos volmenes de aire caracters-ticos en la respiracin humana. El pulmn de un ser humano adulto sano puede almacenar entre cinco y seis litros de aire en su interior, pero una cantidad significativamente menor es la que se inhala y ex-hala durante la respiracin. Al describir los procesos del ciclo pulmonar, en ocasiones es deseable que se consideren dos o ms volmenes pulmonares juntos. A dichas combinaciones de volmenes se les deno-mina capacidades pulmonares:

    a) Capacidad inspiratoria (CI): es la cantidad de aire que una persona puede respirar, comen-zando en el nivel de una espiracin normal y dis-tendiendo al mximo sus pulmones (3,500 mL, aproximadamente). En otras palabras, la capaci-dad inspiratoria es la suma del volumen corriente y el volumen inspiratorio de reserva (CI = VC + VRI).

    b) Capacidad pulmonar total (CPT): es el vo-lumen de aire que hay en el aparato respiratorio despus de una inhalacin mxima voluntaria, que corresponde aproximadamente a seis litros de aire. Es el mximo volumen al que pueden ex-pandirse los pulmones con el mximo esfuerzo posible (5,800 mL, aproximadamente). Es decir, la capacidad pulmonar total es la suma del vo-

    lumen corriente, el de reserva inspiratorio, el de reserva espiratorio y el residual (CPT = VC + VRI + VRE + VR).

    c) Capacidad vital (CV): es la cantidad de aire que es posible expulsar de los pulmones des-pus de haber inspirado completamente. Son alrededor de 4.6 litros. La capacidad vital es el resultado de sumar el volumen de reserva inspi-ratorio con el volumen corriente y el de reserva espiratoria (CV = VRI + VC + VRE).

    d) Capacidad funcional residual (CFR): se refiere a la cantidad de aire que queda en los pulmones tras una espiracin normal (2,300 mL, aproximadamente). Esto significa que la capaci-dad funcional residual es la adicin del volumen de reserva espiratorio ms el volumen residual (CFR = VRE + VR).

    En trminos generales, la cuantificacin de cada uno de estos volmenes y capacidades en con-diciones normales puede apreciarse en la tabla 2.

    As pues, una vez que se conozcan los valo-res de los diferentes volmenes podremos entender qu es lo que sucede ante las diversas alteraciones patolgicas, a los diferentes niveles, y de que forma el pulmn se va alterando.

    Tabla 2. Valores normales aproximados de los diferentes volmenes pulmonares3.

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    Pruebas de Funcin Respiratoria

    Espirometra

    La espirometra, que fue introducida a la clnica por John Hutchinson en 1844, consta de una serie de pruebas muy sencillas que miden la capacidad y la rapidez de los volmenes respiratorios en la unidad de tiempo; dicho de otro modo, sirve para medir el volumen de aire que el aparato respiratorio puede movilizar en funcin de un determinado periodo de tiempo. Se trata de una tcnica indispensable cuan-do se sospecha de una alteracin respiratoria.

    La prueba se realiza a una temperatura de entre 17 y 40 C. El paciente debe permanecer en reposo durante 15 minutos, tiempo durante el cual se le debe explicar en qu consiste el procedimien-to para evitar que haya fugas alrededor de la pieza bucal (boquilla indeformable). A continuacin, la per-sona realizar un esfuerzo inspiratorio mximo, se-guido de una espiracin forzada mxima y sostenida; estas maniobras se producen por triplicado4.

    Se presentan a continuacin las variables espiromtricas ms utilizadas:

    a) Capacidad vital forzada (CVF) o forced vi-tal capacity (FVC). Es similar a la capacidad vi-tal (VC), pero esta maniobra es forzada y con la mxima rapidez que el paciente pueda producir.

    b) Volumen espiratorio forzado (VEF y VEF1) o forced espiratory volume (FEV y FEV1). Es el mximo de volumen de aire es-pirado en el primer segundo desde una inspi-racin mxima. Probablemente, ste sea uno de los parmetros ms utilizados en la clnica.

    c) La relacin entre las dos variables anterio-res: FEV1/FVC.

    d) Flujo espiratorio mximo (FEM) o peak espiratory flow (PEF). Tambin conocido como flujo espiratorio pico, es la tasa mxima de flujo que puede obtenerse por medio de una maniobra espiratoria forzada. Esta modalidad es una medida simple y reproducible de la ob-turacin de las vas areas, toda vez que se correlaciona muy bien con el FEV15.

    As, el anlisis de estas variables permite clasificar a la ventilacin pulmonar y sus trastornos en diferentes patrones:

    a) Normal.b) Obstructivo, o de limitacin del flujo areo.c) Restrictivo, o de limitacin de volumen.d) Mixto, o combinacin de los dos anteriores.

    a) Patrn normal. Los valores de referencia se encuentran por encima del 80%.

    Figura 2. Espirmetro.

    Figura 3. Patrn normal en la ventilacin pulmonar.

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    Cuauhtmoc Magaa Hernndez, Jos Luis Lpez Esceberre, Jess Cuauhtmoc Magaa Cazares

    b) Patrn obstructivo. Se refiere a la reduc-cin del flujo areo que se produce por el aumento de la resistencia de las vas areas (asma, bronquitis), o bien, por la disminucin de la retraccin elstica del parnquima (enfisema). Dicho de otro modo, es la disminucin del flujo espiratorio mximo con respec-to a la capacidad vital forzada, y se detecta mediante la relacin FEV1/FVC, la cual ser menor del 70%.

    Las causas de los patrones obstructivos son: la contraccin del msculo liso que recubre la pared de los bronquios en un episodio agudo de asma; edema e infiltracin celular inflamatoria de la muco-sa; retencin de secreciones; neoplasias; estenosis cicatricial; cuerpo extrao y disminucin del soporte elstico de las vas areas intrapulmonares.

    c) Trastorno ventilatorio restrictivo. Indi-ca una disminucin del volumen de aire que circula en las vas areas, la cual se produce por el decre-mento de la capacidad vital y la capacidad pulmonar total (CPT), ya sea por alteraciones del parnquima (fibrosis, ocupacin, amputacin), del trax (rigidez, deformidad) o de los msculos respiratorios y/o de su inervacin.

    La capacidad pulmonar total es la suma de la capacidad vital y el volumen residual, por lo que para una identificacin completa de la afeccin ser necesario medir los volmenes estticos del pulmn, incluyendo el volumen residual (mediante pletismo-grafa). En condiciones de consulta externa se sos-pechara de una patologa con restriccin pulmonar si existe FVC disminuida, acompaada de un FEV1 disminuido.

    Figura 4. Patrn obstructivo en la ventilacin pulmonar.

    Figura 5. Trastorno ventilatorio restrictivo en la ventilacin pulmonar.

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    Pruebas de Funcin Respiratoria

    d) Patrn mixto. Combina las caracters-ticas de los dos anteriores. Algunos pacientes con EPOC muy evolucionados, por ejemplo, tienen un grado de obstruccin tal que presentan cierto grado de atrapamiento areo. En estos casos, ese aire atra-pado se comporta como volumen residual, por lo que disminuye la FVC. Para diferenciar esta situacin de otra que tuviera realmente obstruccin y restriccin (una bronquitis crnica en un paciente con fibrosis pulmonar, por ejemplo) hay que recurrir a un estudio completo de volmenes pulmonares en un laborato-rio de funcin pulmonar. En atencin primaria sospe-charemos de un sndrome mixto si encontramos en la espirometra una FVC disminuida, as como un FEV1 y un FEV1/FVC disminuidos.

    El diagnstico de EPOC se establece cuan-do el FEV1 est por debajo del 80% del predicho, o si la relacin FEV1/FVC es menor a 0.7. Un FEV1 normal excluye el diagnstico de EPOC.

    Vale la pena sealar que al valorar una espi-rometra es recomendable analizar la relacin FEV1/FVC para saber si existe una obstruccin de las vas areas; luego se debe hacer lo mismo con la FVC para comprobar si existe restriccin, y por ltimo el anlisis correspondiente del FEV1.

    Si lo que se pretende es valorar la respuesta al tratamiento de un paciente con obstruccin de vas areas, el parmetro ms adecuado es el FEV16.

    As pues, en la medida en que los resultados de las pruebas se alejen de los valores normales el paciente se encontrar en condiciones ms graves; de modo contrario, si los valores regresan a la nor-malidad estaremos ante el medicamento adecuado. Este tipo de pruebas nos permitirn obtener un pa-rmetro objetivo y cuantificable de la evolucin del paciente.

    Contraindicaciones de una espirometra

    En virtud de que una espirometra implica un esfuer-zo importante por parte del paciente, es necesario

    Tabla 3. Resumen de los patrones espiromtricos.

    Tabla 4. Clasificacin de la gravedad en las enfermedades respiratorias, de acuer-do con la Sociedad Torcica Estadounidense (AmericanThoracicSociety)7, 8.

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    Cuauhtmoc Magaa Hernndez, Jos Luis Lpez Esceberre, Jess Cuauhtmoc Magaa Cazares

    tomar en cuenta que existen contraindicaciones re-lativas: presin diastlica en reposo >110 mmHg o presin sistlica en reposo >200 mmHg; lesiones espinales u oculares recientes; pacientes poco co-laboradores o incapaces de realizar la prueba por debilidad; dolor, fiebre y disnea, as como falta de coordinacin o psicosis.

    Existen tambin contraindicaciones abso-lutas, como la enfermedad cardiovascular aguda o descompensada en los ltimos tres meses, un infar-to agudo del miocardio, insuficiencia cardiaca o un accidente vascular cerebral. Tambin en pacientes que hayan presentado neumotrax en los tres meses previos, que tengan riesgo de hemoptisis o ruptura de aneurisma, as como enfermos que hayan sido sometidos a ciruga de trax, abdomen, ojos u odos en los ltimos tres meses, o que tengan infecciones respiratorias agudas en las ltimas dos semanas. Del mismo modo, se encuentran contraindicadas en pa-cientes con tuberculosis pulmonar activa y en casos de embarazo avanzado o complicado9.

    La realizacin de la espirometra en un pa-ciente asmtico se realiza de una forma basal; pos-

    teriormente, se repite la prueba con la administracin de un broncodilatador (por lo general, salbutamol 200) para indagar si la obstruccin bronquial es re-versible. Debe puntualizarse que una prueba normal no excluye el diagnstico de asma y obliga a prose-guir el protocolo de estudio en este tipo de pacientes, de all que se recomiende un estudio de variabilidad del flujo espiratorio medio10.

    La espirometra indicada en el preoperatorio tiene como objetivo:

    a) Identificar a la persona que presenta un ries-go pulmonar preoperatorio.b) Establecer regmenes teraputicos preope-ratorio y posoperatorio.

    Dichas pruebas hacen posible que un candi-dato marginal se transforme en uno con riesgo acep-table. Si el FEV es menor del 50%, o si existen sig-nos de compromiso del flujo areo, entonces deben indicarse estudios adicionales. Si despus de una preparacin intensa el volumen espiratorio forzado al primer segundo (FEV1) es menor que 1 L, entonces el riesgo puede calificarse de elevado.

    Figura 6. Papel de la espirometra en la valoracin quirrgica.

    PFR

    FEV1 > 2 l FEV1 < 1 lFEV1 = 1-2 l

    Ciruga

    Ciruga apropiada

    Gammagrafa Inoperable

    Rehabilitacin

    Revaluacin

    Evaluacin

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    Pruebas de Funcin Respiratoria

    PulsioximetraLa pulsioximetra es una tcnica no invasiva que mide la saturacin de oxgeno de la hemoglobina en la sangre circulante. Se utiliza un pulsioxmetro, que es un mtodo fotoelctrico que se coloca en los de-dos de la mano o del pie, o bien, en el lbulo de la oreja del paciente. El aparato emite luces con longi-tudes de onda roja e infrarroja que viajan de mane-ra secuencial de un emisor hasta un fotodetector a travs del paciente. Al medir la absorbancia de cada longitud de onda causada por la sangre arterial (com-ponente pulstil), es posible calcular la saturacin de oxgeno en sangre.

    Esta metodologa es muy til, toda vez que permite valorar condiciones en donde la oxigenacin del paciente puede variar rpidamente y de un mo-mento a otro, como es el caso de las salas de urgen-cias y de terapia intensiva que atienden a pacientes neumpatas y con problemas cardiacos. Tambin es muy til para conocer la efectividad del tratamiento en individuos con padecimientos respiratorios crnicos.

    En casos de EPOC, la pulsioximetra ayuda en el control de pacientes inestables con enfermedad grave, o bien, cuando se presenta empeoramiento de sntomas u otros signos de reagudizacin. Incluso

    puede llegar a ser una herramienta que los pacientes pueden usar en casa para ayudarles en el manejo de su enfermedad bajo supervisin de sus mdicos.

    Es pertinente hacer nfasis en que la pul-sioximetra es un complemento, pero no sustituye a la espirometra en la evaluacin de pacientes con EPOC. Mientras que la espirometra nos proporciona el diagnostico y la clasificacin de la enfermedad, la pulsioximetra nos proporciona el grado de compro-miso respiratorio en tiempo real. As, debe puntuali-zarse que aunque la pulsioximetra es muy til como auxiliar en la toma de decisiones ante un paciente con dificultad respiratoria, de ninguna manera puede sustituir una buena evaluacin clnica; por lo tanto, los datos que proporciona no tienen un valor diag-nostico11.

    Si tomamos como ejemplo al asma, pode-mos afirmar que la pulsioximetra complementa los datos obtenidos por la espirometra para valorar la gravedad de las exacerbaciones de los cuadros y su respuesta al tratamiento homeoptico. Por otra par-te, en casos de infeccin de vas areas inferiores, como neumona, influenza o infecciones pulmonares relacionadas con el sndrome de inmunodeficiencia adquirida (VIH/sida), la pulsioximetra puede ser til para evaluar la gravedad de la enfermedad y, junto con otros criterios, determinar cundo se debe remitir al paciente a un tratamiento hospitalario.

    Tabla 5. Conducta clnica a seguir dependiendo del ndice de saturacin de oxigeno.

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    Cuauhtmoc Magaa Hernndez, Jos Luis Lpez Esceberre, Jess Cuauhtmoc Magaa Cazares

    Indicaciones, aplicacin y utilidad

    Existen algunas pruebas que complementan el estu-dio de la funcin pulmonar, como las gammagrafas de perfusin y las de ventilacin/perfusin. Existe tambin la gasometra arterial, que debe considerar-se como parte integral de los estudios de una valora-cin de la funcin respiratoria.

    As pues, en el manejo de los pacientes con problemas de vas areas inferiores ser muy im-portante no solamente un adecuado interrogatorio para la recopilacin de sntomas mentales, genera-les y particulares caractersticos, sino tambin una adecuada y profunda exploracin fsica que permita dimensionar la gravedad del problema. Por otro lado, este tipo de estudios hace posible que se documen-te la mejora del paciente, la cual es muy difcil de valorar si se atiende exclusivamente la opinin del enfermo o la primera opinin del mdico, ya que en muchas ocasiones estas obstrucciones pulmonares existen an sin generar sntomas.

    REFERENCIAS BIBLIOGRFICAS

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    Un Caso Clnico de Oligohidramnios Severo Tratado con Homeopata

    Un Caso Clnico de Oligohidramnios Severo Tratado con Homeopata

    Resumen

    Abstract

    Este artculo relata un caso clnico urgente de oligohidramnios (OH) severo, en una paciente primigesta que se encontraba en la semana 21 de gestacin, y con un pronstico de terminacin de la misma en las siguientes 48 a 72 horas. La inter-vencin con una prescripcin compleja permiti la reversin pronta y total del OH hasta permitir la conclusin a trmino de un producto sano. Dada la carencia de bi-bliografa en esta patologa, se describe la justificacin de la conducta teraputica.

    Thispapertalksaboutamild-severe,urgentcaseofoligohydramios(OH)ina21yearswomanon her first pregnancy,with a fatal prognosis during the next 48-72hours.Homeopathicinterventionwithacomplexprescriptionproducedarapidand total reversion of OH, leading a term birth of a healthy boy. Due to lacking of homeopathic bibliography on this condition, it is presented rational of therapeutic conduct.

    * Hctor Montfort Cabello

    *Coordinador del Programa de Educacin Mdica Conti-nua del Instituto Superior de Medicina Homeoptica de Enseanza e Investigacin (ISMHEI).

    PALABRAS CLAVE:Oligohidramnios, Alteraciones del lquido amnitico, complicaciones en el embarazo, Problemas obsttricos y Homeopata.

    Caso clnicowww.latindex.unam.mx www.periodica.unam.mx

    Recibido: noviembre, 2013. Aceptado: diciembre, 2013

    KEYWORDS:Oligohydramios, Amniotic fluid disorders, Pregnancy complications, Obstetric disorders and Homeopathy.

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    Hctor Montfort Cabello

    IntroduccinEl presente es un reporte de caso clnico visto en la consulta privada durante el segundo trimestre de 2013. Se trata de una paciente femenina atendida por primera vez en la semana 21 de su primera gestacin, y que acudi por un diagnstico de oligohidramnios progresivo, moderado a severo y con expectativa de prdida del producto en las prximas 48-72 horas.

    La presentacin del caso carece de muchos elementos de una consulta mdico homeoptica, ya que fue una consulta de urgencia, y su inclusin obe-dece ms a la falta de informacin de su tratamiento en nuestra literatura, y al hecho de documentar el be-neficio de la teraputica homeoptica en estos casos.

    Cabe sealar que, para la realizacin del presente artculo, se obtuvo la autorizacin verbal de la paciente para su publicacin, siempre y cuando su identidad se mantuviera en el anonimato.

    Fisiologa del lquido amnitico (LA)1,2

    A las nueve semanas de gestacin, la cavidad am-nitica est totalmente formada, y el LA rodea al feto. El LA mantiene constante intercambio con las circula-ciones materna y fetal. Hasta las 20 semanas, la par-ticipacin materna es fundamental en la formacin del LA, con algunas secesiones fetales, digestivas y respiratorias, y escasa participacin de la membrana amnitica. Existe, a esta edad gestacional (EG), una gran similitud entre el LA y el plasma materno, que puede considerarse como una dilisis materna.

    A partir de las 20 semanas comienza la partici-pacin fetal en la formacin del LA, cada vez ms rele-vante, fundamentalmente a travs de los riones y los pulmones. El volumen de LA suele aumentar con lenti-tud, alcanzando 30 ml a las 10 semanas, 350 ml a las 20, y entre 700 y 1000 ml alrededor de las 37 semanas. La cantidad deglutida es de alrededor de 17 ml diarios.

    El LA se mide mediante el registro ecogrfico, obteniendo el ndice de lquido amnitico (ILA) y que en condiciones normales va desde 10 cm3 hasta 20-22 cm3. Cifras por debajo de 10 cm3 se diagnostican como OH, y cuando rebasan los 22-24 cm3 reciben

    diagnstico de polihidramnios (PH). Si el ILA es menor a 5 cm3 se enfrenta una alta probabilidad de prdida del producto, por lo que se debe extraer cuando haya posibilidades de supervivencia extrauterina.

    Funciones del lquido amnitico

    Son numerosas las funciones que se le reconocen al lquido amnitico (LA)3:

    a) Es un medio en el que el feto se mueve libre-mente.

    b) Acta como proteccin fetal contra las agre-siones externas.

    c) Mantiene una temperatura fetal uniforme.

    d) Ofrece proteccin fetal a las agresiones por contracciones.

    e) Constituye un ambiente ptimo para el creci-miento y el desarrollo fetal.

    f) Es un medio til para valorar la salud y la ma-durez fetal.

    g) Es un medio til que permite administrar me-dicacin al feto.

    h) Es un elemento favorecedor de la dilatacin cervical.

    El oligohidramnios (OH) es la cantidad insu-ficiente de LA para realizar sus funciones, poniendo en riesgo el desarrollo y viabilidad del producto. En el tercer trimestre, menos de 400 ml se consideran OH, o bien, menos de 500 ml en las primeras 30 a 36 se-manas de gestacin. En la mayora de los casos se documenta como origen una insuficiencia placenta-ria con disminucin del flujo vascular, aunque nunca confirmada histolgicamente; otros factores mater-nos son la diabetes mellitus y el lupus sistmico4, 5.

    Con menor frecuencia encontramos como causas de OH a los defectos congnitos del rin y el tracto urinario del producto, o el dao renal inducido por el uso de antihipertensivos como captopril o ena-lapril. Las complicaciones de OH en el producto in-cluyen a la hipoplasia pulmonar o digestiva, adems de defectos faciales y de los miembros; asimismo, se

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    Un Caso Clnico de Oligohidramnios Severo Tratado con Homeopata

    incrementa la posibilidad de compresin del cordn umbilical al momento del parto.

    El pronstico del OH durante el final del ter-cer trimestre es de poco riesgo para el producto y la madre, pero se incrementa si es al principio, y es muy alto cuando se presenta durante el segundo trimes-tre, con mortalidad del feto del 80-90% cuando es antes de la semana 21-22 de gestacin.

    Presentacin del casoPaciente femenina de 22 aos, en la semana 21 de su primera gestacin que acudi por presentar una prdida progresiva del lquido amnitico desde la se-mana 16, de acuerdo con las evaluaciones semana-les por ultrasonido. Su origen no fue identificado por las evaluaciones hechas por dos gineclogos que le haban atendido al momento de la entrevista, y no haba recibido tratamiento alguno. Dada la progre-sin y la severidad del OH, se le recomend practicar aborto teraputico a la brevedad.

    Entre los antecedentes slo se encuentra que la paciente es portadora de un soplo cardaco, apenas detectado al inicio de su embarazo y todava sin eva-luacin ni diagnstico por parte de cardiologa.

    Durante el interrogatorio se encuentra una pa-ciente casi asintomtica en lo que toca a la gestacin; el resto del interrogatorio arroja un estreimiento crnico con heces duras, pequeas, secas y obscuras, las cua-

    les provocan dolor en la regin del colon transverso que se agrava por el movimiento y cede al reposo.

    En la exploracin se encuentra a una pacien-te en un estado de agitacin fsica intensa, con movi-miento de pies y manos constante, con angustia por la expectativa del trmino de la gestacin en corto plazo. La tensin arterial (TA) es de 90/60 mmHg, y se percibe un soplo sistlico en foco artico de inten-sidad 3/6, sin repercusiones hemodinmicas.

    TratamientoDebido a la falta de reportes de casos tratados con Homeopata, a la falta de reportes previos o biblio-grafa6, 7, y tomando en cuenta los signos y sntomas mencionados (estreimiento/dolor de colon, soplo ar-tico y estado de agitacin fsica intensa), as como en ocasin a la premura del caso, se opt por una pres-cripcin compleja que abarcara los datos recabados.

    Se incluyeron tres medicamentos: Tarentula hispanica 6C; Bryonia 6X y Naja tripudians 12C, al-ternados cada 2 horas durante las primeras 72 horas. Al reporte telefnico de las mencionadas 72 horas, el ILA aument de 5 a 7.7 cm3, y luego de siete das de tratamiento alcanz 9 cm3. Se mantuvo un incre-mento progresivo, y a los 15 das de la medicacin se obtuvieron cifras normales de ILA, de 15-17 cm3. Asimismo, cedieron de forma progresiva el estrei-miento y el estado mental.

    Figura 1. Se aprecia una cantidad escasa de lquido amnitico (9 de septiembre de 2013).

    Figura 2. Se observa un incremento marcado del liquido amnitico e ILA de 17.5 cms (11 de octubre de 2013).

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    Hctor Montfort Cabello

    Cuando la paciente cursaba la semana 38, las condiciones clnicas y ecogrficas del producto eran de total normalidad. En tales circunstancias, fue programada para operacin cesrea en 7 das ms. Finalmente, el producto naci por la mencionada operacin, en total estado de salud. De igual forma, la madre curs el puerperio normalmente.

    DiscusinAun con la premura con que se presentan algunos casos, y sin contar con la totalidad sintomtica o poder buscar y elegir el similimum, la Homeopata puede brindarnos un recurso invaluable en cuadros clnicos donde aparentemente no tendra nada que aportar. Conocer el o los mecanismos fisiopatolgi-cos de una entidad clnica nos permite intervenir, con uno o varios medicamentos, a fin de convertir una evolucin esperada en un resultado inesperado.

    Se eligi Bryonia por el dolor en colon agra-vado por el movimiento, as como por las heces duras y secas. Por su parte, la eleccin de dos me-dicamentos que contienen fosfolipasas en su com-posicin (Tarentula hispanica y Naja tripudians) fue tanto por el estado de agitacin fsica intensa como por el soplo cardaco; adems, sabemos que las fos-folipasas son capaces de afectar la permeabilidad de las membranas de intercambio de gases/lquidos, como lo son el pulmn, el rin y la placenta, y de su tropismo por las vlvulas del corazn, en el caso de Naja tripudians.

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    Figura 3. Se aprecia claramente el aumento del lquido amnitico, desde niveles por debajo de la normalidad

    a niveles considerados normales.

    014 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41

    2468

    10121416182022242628

    20.2453

    15.3103

    10.3753

    Edad Gestacional

  • 31LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014, p. 29-42.

    La Homeopata Frente a Casos con Tratamiento Convencional

    *La Homeopata Frente a Casos con Tratamiento Convencional

    Resumen

    Abstract

    Durante mucho tiempo se crey que un paciente no poda ser tratado con Homeo-pata si es que, al momento de la consulta, se encontraba siguiendo un tratamiento aloptico. Los doctores Morrison y Herrick establecen las pautas generales que de-ben seguirse al respecto y los inconvenientes que aparecen al momento de tratar de remplazar la medicina convencional por la medicina homepata. Una parte del trabajo rescata la opinin que tienen algunos pacientes acerca de los dos sistemas clnicos teraputicos, as como las expectativas de la familia (y de la sociedad, por extensin) en torno al mtodo clnico configurado por Samuel Hahnemann.

    For a long time it was believed that a patient could not be treated with Homeopathy if,at thetimeofconsultation,wasfollowinganallopathic treatment.ThedoctorsHerrick Morrison established the general guidelines to be followed in this regard and disadvantages that appear when trying to replace the conventional medicine homeopathic medicine. Part of the work rescues the opinion they have some patients on the two treatment clinical systems as well as the expectations of the family (and society by extension) about the clinical method set by Samuel Hahnemann.

    **Roger Morrison ***Nancy Herrick

    *Este artculo, basado en una conferencia, apareci originalmente en ingls en el Journal of the American Institute of Homeopathy [1992; 85(4): 155-168]. En su mayora se public en espaol en tres entregas de La Homeopata de Mxico, nmeros 572 (1994; 63: 6-10), 573 (1994; 63: 2-7) y 574 (1995; 64: 13-17). La actual versin fue proporcionada por el doctor Germn Guajardo Bernal.

    **El doctor Morrison es mdico homepata fundador del Hahnemann Medical Clinic y catedrtico del Hahnemann College of Homeopathy (Albany, California).

    ***Nancy Herrick es cofundadora y catedrtica del Hahnemann Medical Clinic y del Hahnemann College of Homeopathy (Albany, California).

    PALABRAS CLAVE:Frmacos alopticos, Tratamiento convencional, Tratamiento homeoptico, Tratamiento aloptico, asma, psoriasis, desrdenes tiroideos, dismenorrea, dermatitis atpica, osteoartritis, atrofia vaginal, artritis reumatoide.

    De nuestra hemerotecawww.latindex.unam.mx www.periodica.unam.mx

    KEYWORDS:Allopathic drugs, Conventional treatment, Homeopathic treatment, Allopathic treatment, Asthma, Psoriasis, Thyroid disorders, Dysmenorrhea, Atopic dermatitis, Osteoarthritis, Vaginal atrophy, Rheumatoid arthritis.

  • 32 LA HOMEOPATA DE MXICO. Volumen 83, nmero 688, enero-febrero 2014, p. 29-42.

    Roger Morrison, Nancy Herrick

    IntroduccinAl iniciar nuestra prctica mdica, hace unos 16 aos, la recepcionista recomendaba a los nuevos pa-cientes suspender toda medicacin, pues no habra citas si tomaban otro tratamiento. Tal proceder dur unos ocho aos, pero ya lo hemos superado. Esto fue apropiado en su momento y nivel de experiencia, pero a lo largo de los aos hemos madurado; consi-deramos que es necesario tratar personas que estn utilizando un tratamiento aloptico, y ya no exigimos aquel requisito a nuestros pacientes. Se pueden tra-tar pacientes que se encuentren con medicacin alo-ptica y a la mayora de ellos se les puede atender con gran xito.

    Presentamos esto a sabiendas de que mu-cho depende de la destreza del homepata y su conocimiento, tanto de los frmacos homeopticos como de los alopticos.

    Cul es el problema de los frmacos alopticos?

    Los frmacos alopticos son un problema en la prctica homeoptica, pero no podemos desatender a quien los toma, pues aceptaramos tan solo al 1 o 2% de los pacientes que nos buscan. Debemos, pues, enfrentar esta realidad y manejar con xito la Homeopata.

    Veamos por qu tales frmacos pueden ser un pro-blema en Homeopata.

    a) Es comn que los frmacos enmascaren al verdadero caso y los sntomas tiles para el ho-mepata. Si llega alguien con asma y se le interro-ga: desde cundo sufre ataques de asma?, suele contestar: no s, pues siempre tomo medicinas y as nunca me da. Todos los sntomas tiles a la clnica homeoptica y en los que basa su prescripcin des-de hace 200 aos, desaparecen con una cucharada de esta o aquella medicina. Sucede con frecuencia no slo en el asma, sino con casi cada enfermedad tratada con alopata; los frmacos ocultan los snto-mas del paciente. Esto puede ser devastador para la toma del caso homeoptico.

    b) Conocemos la siguiente objecin: los fr-macos alopticos son antdotos o bloquean la accin del medicamento homeoptico. El tratamiento ho-meoptico mejora el caso y de pronto ante una gripe el paciente busca a su mdico general o familiar; le prescriben antibiticos y dos semanas despus re-gresa quejndose de que el tratamiento homeop-tico ya no le funciona. Este segundo problema se complica si el paciente toma alopata continuamente. Con frecuencia no podemos quitar la alopata y sin embargo puede ser antdoto del medicamento. Por ejemplo: en un caso severo de asma, el paciente puede morir si se suspende su medicacin para tra-tarlo con Homeopata. Obviamente, todos queremos evitar esto. Debemos pues salir al paso del antdoto o minimizar sus efectos, sin dejar el tratamiento ho-meoptico. Ms adelante veremos algunas estrate-gias para manejar este desafo.

    c) Otro problema es la divisin de opiniones en la familia, particularmente cuando se trata del nio: la madre tiene gran confianza en los frmacos homeopticos, y por otro lado el padre piensa que es charlatanera y prefiere los antibiticos en la pul-mona del nio. La familia se divide y la controver-sia introduce un nuevo nivel de tensin que obliga al mdico homepata a actuar como mediador; en el momento decisivo le preguntan qu hacer. Y se debe tomar la decisin, as como consultar al pediatra, que seguramente tendr su opinin al respecto.

    Esto es comn en una sociedad en la cual las familias estn distanciadas. El homepata que-da en territorio intermedio en un campo de batalla creado por dos padres que deciden sobre su hijo. O bien, es el paciente quien duda entre la opinin del homepata y lo que el alpata le dice. Entonces, el paciente nos busca diciendo ingenuamente: pue-de ayudarme con mi problema?, y le respondemos: S, pero desatienda todo lo que diga el otro mdico. Esto coloca al paciente en un dilema; sus decisiones dividen entre el criterio del homepata y el del otro mdico.

    El conflicto se acenta si es la primera con-sulta: el paciente todava no ha establecido una rela-cin con su mdico homepata; ha acudido con su mdico durante 20 aos