la ciencia del bien morir: tanatología, de dora luz flores, psicóloga y tanatóloga

17
Querida Tere: Te envío este escrito que hice para una conferencia de TANATOLOGÍA, espero te sea de utilidad para tu página Web. Un abrazo y que estés muy bien. Con Cariño Dora Luz Flores Bravo. Nacer es comenzar a morir. Teófilo Gautier El término “tanatología” proviene del griego “tánatos”, muerte, y sirve para designar a la disciplina que aborda precisamente esta delicada cuestión. la tanatología como “una disciplina que busca encontrarle sentido a la muerte o a las pérdidas”. “Necesitamos aprender a morir y a dejar morir, ya que cada muerte es única, como lo es el modo de presencia de cada persona” La vida es Duelo, es decir, dentro de la vida tenemos un sinnúmero de pérdidas que deberán elaborarse en un proceso, es decir, en el DUELO: 1

Upload: teresaguirre

Post on 25-Jun-2015

2.024 views

Category:

Health & Medicine


1 download

DESCRIPTION

Esta es una descripcióm bastante completa y gráfica de Dora Luz Flores, sobre la Tanatología desde la perspectiva de una terapeuta pasa también por todo lo que implica la enfermedad grave de un ser querido.

TRANSCRIPT

Page 1: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

Querida Tere: Te envío este escrito que hice para una conferencia de TANATOLOGÍA, espero te sea de utilidad para tu página Web. Un abrazo y que estés muy bien. Con Cariño Dora Luz Flores Bravo.

Nacer es comenzar a morir. Teófilo Gautier

El término “tanatología” proviene del griego “tánatos”, muerte, y sirve para designar a la disciplina que aborda precisamente esta delicada cuestión. la tanatología como “una disciplina que busca encontrarle sentido a la muerte o a las pérdidas”.

“Necesitamos aprender a morir y a dejar morir, ya que cada muerte es única,

como lo es el modo de presencia de cada persona”

La vida es Duelo, es decir, dentro de la vida tenemos un sinnúmero de pérdidas que deberán elaborarse en un proceso, es decir, en el DUELO:

Por ejemplo, hay duelo de pérdidas no tan sólo por muerte, sino por cambios de casa, cambios de escuela, de trabajo, fallece un amigo, tu mascota, un divorcio, una enfermedad; en fin, toda pérdida te produce un duelo: lo que perdiste, lo que estás por perder, o lo que quisiste hacer y nunca hiciste…. y todo eso es materia de trabajo de los tanatólogos, para poder entender y afrontar de la mejor manera éste complicado proceso…

1

Page 2: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

¿Cómo surge la tanatología?

Desde el inicio de la humanidad ha habido una preocupación por la muerte, por tratar de explicar qué hay, si hay dioses, si hay muchos, si hay uno.

Particularmente, quien se dedicó más a trabajarla en sí fue la doctora Elizabeth Kübler-Ross. Ella era doctora y vio la necesidad de sus pacientes en fases o estados terminales, que traían cargas emocionales importantes que había que atender también.

La base de la Tanatología es acompañar al que sufre una pérdida, pequeña o grande, no importa el tamaño. Tanatología proviene del griego Thánatos, que en la mitología griega personificaba a la muerte. Este personaje era hijo de Nix (la noche) y hermano de Hypnos (El Dios del sueño). Aunque se lleva a cabo desde tiempos remotos, es hasta que la doctora Elizabeth Kübler Ross abundó en los fenómenos psicológicos experimentados por moribundos y creó clínicas regidas por el lema “ayudar a los enfermos terminales a vivir gratamente, sin dolor y respetando sus exigencias éticas”, cuando se funda formalmente la Tanatología, que es ciencia y arte.

¿Cómo define la tanatología la muerte?

La muerte es el fin de la vida, de las funciones orgánicas, vitales; sin embargo, la muerte también es un nuevo inicio, a través de la visualización de la trascendencia de la persona.

2

Page 3: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

Cuando una persona muere, muere en lo físico, eso es innegable. Sin embargo, LA TRASCENDENCIA O EL SIGNIFICADO QUE LE DEJÓ EN LOS SUYOS, ESO, PREVALECE.

Por ejemplo, en el caso de los abuelos: mueren, pero los nietos siguen cocinando como la abuela, o alguien trabaja como el abuelo, o los recuerdan, en fin, es la huella que te deja una persona, podríamos hablarlo en el sentido de que la muerte no necesariamente tiene que ser un fin.

Por esto, es muy importante trabajar la dimensión espiritual que da gran contención al doliente por una pérdida dado que tiene otra perspectiva, la trascendencia de la pérdida, le da un sentido y un significado distinto al dolor.

Cuando la enfermedad terminal se hace presente en el núcleo familiar, en realidad es la familia total quien enferma, ya que las emociones, los temores, el desconcierto que son movilizados  por el padecimiento, van  a matizar cada día de la vida del paciente y de sus seres queridos más cercanos,

3

Page 4: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

con la característica primordial de experimentar la angustia de muerte  que habrá de acompañarlos hasta el final.   Así, en el aspecto psicológico,  los miembros de la familia se van encontrando con una doble carga: una intrapsíquica, que los hace plantearse su propia muerte, y otra interpersonal, que  contempla el proceso de la enfermedad como un personaje que se ha introducido a la familia sin ser invitado, y que plantea en un tiempo relativamente corto el  encuentro con la muerte de su ser querido.

“Muerte en la Familia “ Edward Munch

Para las familias que viven esta experiencia hay un antes de la enfermedad, un durante y un después,  que dejan huellas muy profundas a partir de la sospecha de que algo no anda bien en ese miembro de la familia que enfermó, de quién se trata en el sistema familiar, y de cómo el médico  les ofreció el diagnóstico y el pronóstico.  Ya desde que se presentó el malestar, se había iniciado, tal vez,  un largo peregrinar entre médicos, al que ahora se suman las  posibles internaciones y  cirugías, la pérdida de funcionalidad propia de la enfermedad y de los efectos de los tratamientos,  que alteran al paciente y a sus seres queridos modificando su dinámica habitual, sus emociones, sus proyectos y hasta su sentido de vida y creencias religiosas.  Ese “durante” de la enfermedad que no solo mueve a  cuestionamientos profundos  sino que  también plantea momentos en los que hay que tomar decisiones prácticas como puede ser la definición del mejor lugar para tener y atender a ese ser querido que ha enfermado.   

4

Page 5: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

Se trata entonces de encontrar un  lugar  que ofrezca un contexto de calidad de atención y cuidados, ya sea  un hospital, un asilo,  o el hogar propio o de algún familiar o amigo; en ocasiones esta decisión causa verdaderas movilizaciones en la dinámica familiar. 

La calidad de vida y el alivio del sufrimiento de la familia están  directamente relacionados con la concepción  de la misma como: “un organismo vivo al que cualquier alteración  en la  estructura o función de alguno de sus integrantes, influirá en todos y cada uno de ellos”. 

De ahí que al verse alterada la estructura y la función de ese ser querido enfermo, este organismo vivo se desequilibra. 

Organismo vivo del que hay que tomar en cuenta a nivel del Sistema Familiar: el tipo de familia que es (nuclear, monoparental, extensa, sin hijos, número de matrimonios,  etc.); quién es el paciente terminal dentro de esa familia y cuál ha sido su historia  (rasgos de personalidad, roles desempeñados, calidad de vínculos); su momento del ciclo vital (noviazgo, pareja sin hijos, pareja con hijos, escolaridad de los hijos, adolescencia, nido vacío, jubilación) Organismo vivo del que hay que tomar en cuenta: 

los miembros que lo conforman (edad, sexo, roles que desempeñan, rasgos de personalidad, estado de salud, capacidad de adaptación y cambio)

los límites que lo rigen (claros, difusos o rígidos) los conflictos preexistentes tanto a nivel individual

como intrafamiliar la espiritualidad y religiosidad de cada uno La Muerte Lempter

Entonces habrá que trazar para la familia,  un camino que los lleve a encontrar calidad de vida y alivio del sufrimiento ante la pérdida del ser querido.

Un camino que sea el adecuado para cada una de las personas que conforman la familia, considerando las características mencionadas, por lo que habrá de ser un camino  individual  y único,  trazado de acuerdo a las necesidades y a los tiempos de cada quien, pero que para todos  habrá de tener como

objetivo el reconocimiento y la aceptación de la realidad que faciliten la elaboración del proceso que implica la enfermedad, incluyendo la posibilidad más o menos cercana de que muera su ser querido. 

5

Page 6: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

Hay que trabajar la posibilidad de morir para perderle el miedo a la muerte hay que pensar en ella, nombrarla,  hablar de ella, llorarla, e integrarla como lo que es: parte de la vida.  

Esa muerte como parte de la vida que ahora se hace presente de una manera  violenta y sorpresiva  provocando en el paciente y sus seres queridos la necesidad de ser contenidos.   

Así, para lograr calidad de vida y alivio del sufrimiento de los familiares, es determinante que reciban por parte del o los especialistas una información veraz y continua, de acuerdo a la necesidad de información de

cada quien, un apoyo constante y la seguridad de una asistencia médica y ojalá, tanatológica, durante todo el proceso de  la enfermedad, hasta cuidados paliativos y clínica del dolor.  

También es fundamental para cada miembro de la familia lograr espacios en donde se propicie la comunicación y la sinceridad para expresar sus preguntas,  sus temores, sus dudas y sus emociones.  

En los momentos de duelo, se requieren como nunca ESPACIOS DE CONTENCIÓN en donde el descubrimiento del otro y de cada uno con  sus

propias reacciones ante la enfermedad terminal, les ofrezca la oportunidad de reconciliarse con ellos mismos, con sus seres queridos y con aquél que tal vez se encuentre próximo a morir.

Cementerio de la Recoleta

Espacios para reflexionar y para  confirmar o para descubrir desde la propia espiritualidad y fe religiosa, cuál es el sentido de la vida, de la enfermedad, del dolor, de la trascendencia, de la esperanza, de la muerte y de la vida después de la vida.   Además,  ese ser querido enfermo, a lo largo de su proceso, y más aún cuando siente que la muerte se aproxima, necesita saber que cuenta con la familia

6

Page 7: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

y/o con los amigos; que hay alguien que se ocupa de él y que se ocupará de lo que sigue después de su muerte.  

Esta certeza  propicia  tranquilidad en el enfermo y en sus familiares, quienes habrán de encontrar alivio psicológico y espiritual al reconocer sus acciones a favor de su ser querido, con  las cuales además,  favorecen su propia despedida y  la calidad de la vida que se aproxima a la muerte.  Cabe destacar que llega un momento del proceso de la enfermedad terminal, en que el tiempo del enfermo es aún más  diferente que el  tiempo de sus seres queridos, por lo que  éstos habrán de adaptarse a él. 

Tiempo en el que se aproxima la muerte y momento también, desde la propia espiritualidad, tal vez, de  acudir a los rituales que ayudan a simbolizar y a dar un sentido a momentos de significados especiales y que, en el caso de los rituales relacionados con la muerte, ayudan no solo a significarla sino también a ir elaborando el dolor y la tristeza. 

Así es que los RITUALES personales y familiares en ciertos momentos de la vida, adquieren mayores dimensiones,  y en el caso de la muerte, matizan y suavizan de manera especial el dolor de la mente y el corazón; lo mismo sucede con los rituales en el ámbito religioso para mantener la certeza de la presencia de ese Dios Personal,  y en el ámbito social, como la posibilidad de  recibir la compañía y el apoyo requeridos en situaciones de enfermedad, de dolor y de muerte. 

El hecho de que la familia se ponga de acuerdo con el enfermo, sobre si sus restos habrán de ser inhumados o incinerados puede formar parte de los rituales familiares, ya que es frecuente que  el cementerio o el lugar donde se depositen las cenizas tengan un significado especial que se comparte.  Tener resueltos asuntos como éste, propician la tranquilidad de los familiares. También es conveniente que determinen quiénes habrán de tomar las primeras acciones una vez acontecida la muerte: escoger la ropa con que quieren vestir a su ser querido, llamar al médico o acudir al hospital para obtener el certificado de defunción, avisar a los demás familiares y amigos, hacer los trámites de la agencia funeraria, organizar los rituales religiosos…   Poder compartir estos temas antes del fallecimiento de su ser querido va facilitando el camino de la adaptación a una realidad que cada día se presenta diferente,  matizada de angustia, de temor, de incertidumbre, pero también de fe y esperanza,  mientras el enfermo se aproxima a su último día. 

7

Page 8: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

A lo largo de este proceso, y como una forma real de curar el sufrimiento, es importante que la familia haya ido aprendiendo, en su relación con su ser querido, -en palabras de Schwarcz-,  a “SOSTENER SIN RETENER”   y a  “SOLTAR SIN EMPUJAR”. 

 Así el adiós final se va construyendo día a día, tal vez con breves momentos de profundo silencio y recogimiento al lado de ese ser querido, ocupados en agradecer, pedir perdón y perdonar; y otros, ocupados en escuchar, recordar y disfrutar experiencias compartidas; final que se va construyendo  para dejar morir en el momento adecuado, que,  será como el momento mismo del nacer: único e irrepetible. 

Asimismo, Schwarcz sostiene que, cuando el paciente RENUNCIA a seguir adelante, es porque puede reconocer que ya llegó a su límite o que ya alcanzó su fin. OJO: Se trata aquí de una renuncia que no es sinónimo de fracaso, EN ESTE SENTIDO, EL SER HUMANO DECIDE EL MOMENTO DE SU MUERTE. 

 Así, esta Renuncia a la vida para pasar a la muerte, se vive entonces  como un ACTO DE GENEROSIDAD: “Me recorro para que otros ocupen mi espacio”…

En este momento, la muerte se convierte también en  un límite que ordena la vida y en una generosa entrega que deja preparado  un lugar para las siguientes generaciones. Es entonces que la muerte del otro adquiere un sentido integrador; se trata de  la muerte del otro sintonizada con los valores de la vida: amor, generosidad, crecimiento, paz y aceptación.  

8

Page 9: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

AYUDA A QUIENES HAN SUFRIDO UNA PÉRDIDA DE LA MEJOR MANERA POSIBLE.

• Explícar al doliente lo que sentirá en los próximos meses. Asumir la muerte de un ser querido requiere atravesar una serie de etapas sucesivas: SHOCK EMOCIONAL, desorganización mental, NEGACIÓN de la realidad, DEPRESIÓN anímica, sentimiento de culpa por no haber actuado mejor, miedo a no poder sobrevivir sin el fallecido, IRA contra las personas del entorno del difunto por no haberle ayudado u otras razones. Finalmente llega la ACEPTACIÓN.

• Escuchar de un modo activo. En lugar de “hablar y aconsejar” de entrada, presta atención al familiar del fallecido con todos los sentidos puestos en lo que dice y siente. Ayúdalo a expresar lo que siente, pero sin forzarlo.

• Exprésarle que lo que siente es normal. Explícale que, inevitablemente, debe pasar por un período de duelo, y que los contradictorios y cambiantes sentimientos que experimenta son lógicos y naturales.

• Conectar con la persona en duelo. Intenta comprender sus sentimientos y ponerte en su lugar. Así comprenderás por qué se tambalea su mundo. Comparte sentimientos y buenos recuerdos sobre la persona fallecida. Incluso es beneficioso evocar algunos momentos divertidos del desaparecido.

*Dile que puede utilizar técnicas de liberación emocional a través de:

Platicar lo que siente con una red de apoyo: amigos, familiares, personas que le den cobijo y amor, o sea, escucha y empatía.

Escribir en una carta de despedida a la persona que está enferma o que falleció, donde le diga todo lo que no le dijo en vida, donde le pida perdón y lo perdone y al final le agradezca lo que vivieron juntos, libere sus emociones, llorar es una forma de deshacerse del dolor.

Hablar con la persona que se vivió la pérdida a través de una foto y que ahí le diga todo el dolor de la pérdida que siente ante su muerte y que se despida de él con esa foto e igual, que le pida perdón y lo perdone y al final le de las gracias con amor por todo lo que vivió con él, pero que se despida.

Que haga el ritual del velorio y el entierro de la persona que se va a despedir por muerte (de manera simbólica) dejándolo ir a través de un acto creativo, por ejemplo de lo que escribió que lo queme y lo vaya a tirar al mar, como si fueran sus cenizas, que el fuego al ir quemando la carta sea su ritual de despedida

Otra forma es que frente a una pared ella se coloque sentada y enfrente ponga una vela y se ponga a hablar con el abuelo de manera virtual y que se vaya despidiendo de él de esta manera diciéndole adiós, , puede combinarlo con lo de la fotografía del difunto y así, al llorar su pérdida y

9

Page 10: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

despedirse irá trabajando para que su herida emocional de muerte del ser querido vaya cicatrizando poco a poco.

Dios Padre. Ma. Eugenia Elizabetha Ravasio

Finalmente, la familia encuentra  alivio a su sufrimiento, y puede seguir viviendo con calidad, e iniciar un adecuado proceso de duelo, gracias al reconocimiento de su propia actuación con su ser querido, y de lo que de él recibió;   gracias  al reconocimiento de lo que sí hubo, pero también de lo que faltó en la historia que compartieron; y sobre todo, la familia encuentra alivio cuando se ha dado la oportunidad de AGRADECER,  DE PERDONARSE, DE PEDIR PERDÓN Y DE PERDONAR, reconociendo el valor

de TRASCENDENCIA  de cada uno de los que estuvieron cercanos en este proceso, capaces de  ofrecer NUEVAS RESPUESTAS Y SIGNIFICADOS QUE DESDE LA PROPIA ESPIRITUALIDAD les ha permitido experimentar paz interior y encontrar FORTALEZA   EN LA RELACIÓN AMOROSA CON  SU DIOS PERSONAL y con  quienes habrán de continuar compartiendo el apasionante misterio De la vida y la muerte.

Eclesiastés 3No hay valores absolutos

Hay bajo el sol un momento para todo,Y un tiempo para hacer cada cosa:

Tiempo para nacer, y tiempo para morir;Tiempo para plantar, y tiempo para arrancar lo plantado;

Tiempo para matar y tiempo para curar;Tiempo para demoler y tiempo para edificar;

Tiempo para llorar y tiempo para reír;Tiempo para gemir y tiempo para bailar;

Tiempo para lanzar piedras y tiempo para recogerlas;Tiempo para los abrazos y tiempo para abstenerse de ellos;

Tiempo para buscar y tiempo para perder;Tiempo para conservar y tiempo para tirar fuera;

Tiempo para rasgar y tiempo para coser;Tiempo para callarse y tiempo para hablar;

Tiempo para amar y tiempo para odiar;Tiempo para la guerra y tiempo para la paz.

Al final ¿qué provecho saca uno de sus afanes?

10

Page 11: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

En conclusión, la clave es vivir una "vida impecable" como decía don Juan, "morir con arte" o "ars moris", que consistiría en afrontar el momento último de nuestra existencia sin desear ni pensar en nada, sin mantener apego a ser o cosa alguna.

Y esto se lograría tan sólo a través de la práctica de un camino espiritual, que no necesariamente religioso. La consecución de una visión espiritual implica ni más ni menos que mirar hacia dentro nuestro, disolviendo aquellos aspectos fragmentarios y en perpetuo conflicto en nuestra conciencia, relajando la tensión del ego y volviendo a reposar en la naturaleza de la mente. Se podría decir que consiste en una metodología, una praxis tendiente a lograr una plena conexión con nuestra esencia más íntima.

. Longaker, dice que las 4 tareas básicas para experimentar con plenitud la vida y la muerte son:

1) darnos cuenta de que el sufrimiento existe y que se puede transformar en una experiencia de plenitud

2) mantener una comunicación con nosotros mismos y con los demás, donde nos expresemos con todo nuestro ser y fundamentalmente con nuestro corazón, lo más compasivos y libres de apego que podamos

3) prepararnos espiritualmente para la muerte, lo que implica el ser capaces de vivir en el momento presente, sin dejar situaciones inconclusas que sólo han de constituir un lastre que incrementará nuestro dolor y sufrimiento y el de quienes nos rodean

4) encontrar significado a nuestra existencia, sintiéndonos seres plenos a pesar de nuestras imperfecciones, aceptando nuestros errores y expiando los que podamos haber cometido.

Aprende a vivir y morirás bien

11

Page 12: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

Finalmente querida Tere, te regalo mi canción de “Por Amor”, con la letra y música de esta canción pretendo dar cobijo de amor, fe, esperanza, paz y seguridad y confianza ante las pérdidas, en un acompañamiento para los momentos de pérdida y de dolor, heridas emocionales que cicatrizarán, con el mensaje de que, aunque en el momento del duelo no vean los beneficios del arte del buen morir, éstos existen y se manifestarán enriqueciendo su nuevo camino por recorrer evolucionando a cada momento y descubriendo la vitalidad que pueden disfrutar en el arte del buen vivir segundo a segundo de su vida….

MANEJO DE DUELO POR ENFERMEDAD, MUERTE Y ROGRESIVO

“POR AMOR” L. y M. Dora Luz Flores Bravo Cerrar Ciclos

Ayer, cuando me dejastete desvaneciste, Desapegote deje partirpor amor,por amor,por amor,más que amor,mucho amor…de dolor..por amor,por amor... Conexión de energía positiva: TransformaciónY hoy, yo sé que estás lejos,no sé si recuerdas, pero yo te amo…

Por amor... te dejéser tan libre…como el aguaser tan libre…como el aireser tan libre…¡como el sol!¡como tú!...

Mañana… no sé si veremosnuevo amanecer, Aprendizaje y crecimientosi platicaremos...Pero amor, ¡fuiste en mí!la pasión... que formólas palabrasque juntarona tu ser con mi ser...¡Por amor,Por amor!

12

Page 13: La ciencia del Bien Morir: Tanatología, de Dora Luz Flores, psicóloga y tanatóloga

¡Por amor!Por amor!¡Por amor!

GRATITUD POR EL PASADO….

GOZO POR EL PRESENTE….

FE EN EL FUTURO…

Telia, gracias por invitarme a escribir en tu página Web y, aunque últimamente no nos hemos visto, te llevo grabada en mi corazón, estás presente en mi vida con cariño y admiración, eres una mujer sabia, guerrera, muy profesional y espiritual, con gran don de gentes, creativa y con alta vocación de “partera” en la creatividad, por eso quiero dejar de ser “una promesa” para ser una realidad en la escritura de lo que he ido aprendiendo en esta vida; que Dios te siga bendiciendo hoy y siempre: ¡Hasta pronto! ¡¡¡ Un abrazo!!!: Dora Luz.

“La verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido”.

Sir Francis Bacon (1561-1626) Filósofo y

estadista británico.

13