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La comarca de la Cabrera Baja, situada al oeste de laprovincia de León, lindando con Zamora y Orense, es unade las que cuenta con una arquitectura especial con identi-dad propia. Llaman poderosamente la atención a quienesse acercan a descubrir estas bellas tierras, sus casas concorredores, sus hornos, pajares, palomares, molinos, fra-guas, etc.

El puerto del Carvajal divide ambas Cabreras: la Altade la Baja. A esta última vamos a adentrarnos. Según nosacercamos vamos comprobando cómo desaparecen de en-

tre nosotros los espacios abiertos que caracterizan a Ca-brera Alta: sus llanuras. Sin embargo, aquí en Cabrera Bajalas edificaciones se van escalonando. Poblaciones comoEncinedo, ubicado en lo alto de un monte contrastan conSaceda, situado a media ladera, así como con otros nú-cleos encajonados en el fondo de valles, dejando libre elpoco terreno que se puede aprovechar para cultivo o pas-toreo. Estos últimos son habituales en Cabrera Baja y sesituan en las laderas orientadas al sol, siendo acompaña-dos por cauces fluviales de aguas puras y cristalinas.

Es de destacar en toda Cabrera la perfecta integración desus ámbitos urbanos con el paisaje.

La mala comunicación existente hasta bien hace pocotiempo con el resto de la provincia leonesa ha sido en granparte el factor determinante para que esta comarca no hayasucumbido a la civilización del asfalto y el hormigón. Espor ello que Cabrera ha llegado a nuestros días con un va-liosísimo legado que es obligatorio proteger y conservar.

Miguel Ángel Cordero López

LA CABRERA BAJAUna restauración enraizada con la tierra

La arquitectura tradicional de la Cabrera es una de las más singulares y hermosas de la región. Y la belleza de estaarquitectura tradicional cabreiresa deriva de sus materiales: piedra, pizarra, paja, madera, y de sus tipologías, ambascosas armoniosamente enraizadas en el paisaje.( Concha Casado, etnógrafa).

Es de destacar en toda Cabrera la perfecta in-tegración de sus ámbitos con el paisaje.

Paisaje Cabrera Baja. Quintanilla-Ambasaguas

Conjunto Palomares restaurados. Robledo de Losada

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La etnógrafa leonesa doña Concha Casado ha sido laartífice de que todo el riquísimo patrimonio de Cabrera nohaya desaparecido. Por una parte, por su labor emprende-dora de museos etnográficos populares a lo largo de todala provincia, como es el caso del Museo de la Cabrera deEncinedo. En el mismo, se recoge toda la riqueza de la

artesanía del lino de tiempos pasados, la vida tradicional,su economía agrícola y ganadera, sus cultivos de lino ocenteno, objetos significativos, documentos, ilustraciones,dibujos, indumentaria, etc., y, por supuesto, el típico carrochillón cabreirés.

Por otra parte, Concha Casado ha sido y es hoy en día elbastión en pro de la conservación y la restauración. Prime-ramente, hace ya años emprendió junto con la Asociaciónpara la Protección del Patrimonio de la Cabrera la recupe-ración de todo un conjunto de hermosos palomarescabreireses repartidos por la comarca: Robledo, Quintanilla,Ambasaguas, etc. Ya desde el alto del Carvajal observa-mos los primeros de ellos, encalados, cilíndricos, con cu-brición a base de losas de pizarras y con piedras de cuarzo

sujetando las mismas, o también a modo de adorno. Suconstrucción está realizada a base de piedra, barro y cal.En su interior, una mesa hecha con losas de pizarra paradepositar la comida a las palomas durante la época del lar-go y crudo invierno cabreirés. Hoy en día, algunos conti-núan en uso.

Pero Concha Casado no se contentó sólo con esto. Esmás, se propuso «un imposible»: convencer, transmitir alos políticos del peligro inminente de la destrucción de estepatrimonio etnográfico-arquitectónico. Consiguió, en pri-mer lugar, que poco a poco se llevaran a cabo trabajos derestauración importantísimos de la mano del arquitecto-

restaurador don Javier López-Sastre, empleando para ellofondos de la Diputación de León y de la Junta de Castilla yLeón, a través de la Dirección General de la Consejería deCultura y Turismo.

El profundo respeto a la arquitectura autóctona y el es-crupuloso miramiento y cuidado con el medio ambientede López-Sastre han hecho y están haciendo posible resul-tados que eran difíciles de imaginar hasta hace bien poco.

La restauración no debe llamar la atención, elrestaurador debe pasar desapercibido sin pre-tender poner su sello. (Javier López-Sastre, ar-quitecto-restaurador de Cabrera).

El enraizamiento con la tierra es fundamen-tal en Cabrera, utilizando únicamente losmateriales que da la misma: piedra, made-ra, pizarra, barro y paja.

Restauración Barrio Antiguo de Forna. Antes Conjunto restaurado.Horno circular. Después

Restauración Conjunto Ambasaguas. Antes Corredor semicerrado con balaustrada.. Después

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En palabras del propio técnico: La restauración no debellamar la atención, el restaurador debe pasar desaperci-bido sin pretender poner su sello.

De la mano de este experto vamos a adentrarnos en laarquitectura cabreiresa, con sus características tan espe-ciales. Comenzaremos por un recorrido muy significativo,como es el caso de la fragua de Ambasaguas, la cual nossorprende, pues en lugar de chimenea encontramos un sim-ple hueco de salida de humo en el propio tejado, denomi-nado bufarra o garroteira. Es ello algo muy típico en tie-rras de Cabrera, un elemento característico muy particu-lar. Se trata de un ventanuco realizado en la propia techum-bre, que se construye levantando sobre los canes una es-tructura que nos permita colocar más altas algunas losas,creándose con ello un hueco por donde saldrá el humo y asu vez penetrará algo de luminosidad en la sala.

En tierras de Cabrera Alta, en Iruela, nos encontramosalgo sorprendente. Muros-tapia de cerramiento de parce-las compuestos de piedra de cuarzo y de pizarra. Lo parti-cular de todo ello es que, en su zona más alta, la pizarra vacolocada verticalmente. En todo este armonioso conjuntose aprecia un intento estético además del funcional. El con-traste entre la pizarra y la piedra cuarcítica realza la visióndel muro.

Llegando a Quintanilla de Losada, nos desviamos hastaCorporales, de nuevo en Cabrera Alta. Aquí no podemosdejar de citar su asombroso pajar, máxima expresión de lapreocupación estética en la realización de mamposterías.

Con fecha del pasado veinte de junio fuimos testigos decómo se comete un atentado más contra el patrimonio, decómo dicho pajar ha desaparecido en su mayor parte gra-cias a la desidia institucional. Nos tememos que todo ellose convierta en otro garaje con puerta de chapa y cubierta

metálica. En las fotografías que acompañamos (pág. 54)observamos la belleza del pajar antes y después del atenta-do perpetrado. Desde estas líneas hacemos un llamamien-to a las autoridades responsables para que no se permitanlos destrozos que estamos viendo.

Era el pajar de Corporales una construcción donde apre-ciábamos claramente la intencionalidad estética a la horade colocar la piedra. Hiladas de los dos tipos: cuarzo ypizarra. Una cruz dibujada con la misma piedra cuarcíticapreside la bella construcción. Todo ello iba techado sobreuna estructura de madera cubierta con paja de centeno. Setrataba, hasta hace pocos días, de puro arte popular.

Como ya apuntábamos anteriormente, el enraizamientocon la tierra es fundamental, utilizando únicamente los ma-teriales que da la misma: piedra, madera, pizarra, barro ypaja. En Cabrera Baja, el barro es más marrón o negro yno tan rojizo como en Cabrera Alta. En cuanto a la piedra,aquí es más pizarrosa, mientras que en Cabrera Alta esmás cuarcítica.

Los métodos de trabajo son pobres como la tierra enque se levantan.

TIPOLOGÍAS

Las necesarias para la vida cotidiana : vivienda- esta-blo, horno, molino, fragua, pajar, palomar.

“La restauración de esta arquitectura debeser como ella misma, utilizando los materialesy métodos tradicionales: pobre, sencilla, sinelementos caros o rebuscados”. ( Javier López-Sastre, Arquitecto).

Forna. Corredor con cerramiento vegetal en Casa del Forno

Forna. Típica Coladeira (sistema de desagüe arcaico)

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La restauración de esta arquitectura debe ser como ellamisma, utilizando los materiales y métodos tradicionales :Pobre, sencilla, sin elementos caros o rebuscados. ( Ja-vier López-Sastre, arquitecto-restaurador de Cabrera).

Fue en el año 2002 cuando comenzaron los trabajos enCabrera. Primeramente, por parte de la Diputación deLeón, emprendiéndose un lavado de cara a la calle princi-pal de Forna, recuperando cubiertas, manteniendo las ma-deras en buen estado y sustituyendo lo necesario para ga-rantizar la estabilidad de las casas. A partir de entonces,año tras año, ha sido la Junta de Castilla y León a través dela Dirección General de la Consejería de Cultura y Turis-mo quien ha venido llevando a cabo sucesivas fases detrabajo con bajos presupuestos pero con las ideas muy cla-ras de cómo hay que trabajar.

En Ambasaguas se ha recuperado un ámbito, que es laplaza donde se jugaba a los bolos, rehabilitando unas 15casas, creando el ambiente general, recuperando el con-junto total y confiriendo con ello coherencia y unidad a lasobras que se realizaron.

La restauración en sí se encamina a la recuperación desu entorno, intentando dar vida a un ambiente que un díaexistió. No se restauran edificios sin más. Se sigue un or-den, escogiendo ámbitos en los que se pueda recuperarmás que las casas, la calle, el pueblo. Al cabo de variosaños, y tras una serie de actuaciones de este tipo, se consi-gue un buen resultado: recuperar ámbitos de la historiapopular. Al visitarlo, el paseo nos lleva a tiempos pasados;en cierta medida es como trasladarnos en el tiempo.

Forna es el ejemplo. Aquí es donde se llega a fundir elbello y asombroso pueblo con el entorno que lo rodea yenvuelve.

El conjunto de recuperaciones llevadas a cabo ha traídoconsigo la creación de un recorrido etnográfico por la ca-lle Bodega y la calle La Mata, observando hornos de pie-dra circulares pegados a sus fachadas, alguno incluso enforma cuadrada, corredores cerrados de tabla pobre, cu-biertas de pizarra cuyo brillo refleja los destellos del sol.La Casa del Forno, (edificación destinada a horno dondese hacía el pan. En su interior, un impresionante suelo delosas de piedra nos recibe junto a la boca del horno).

Nuestro discurrir apacible, romántico, con mucho en-canto y rodeados de vegetación autóctona nos lleva al re-guero con balsa de agua realizada a base de lajas de piza-rra y que se aprovecha para hacer mover la maquinaria demadera antigua recientemente restaurada en un viejo mo-lino en funcionamiento hoy en día. ¡Un lugar idílico!

Seguimos con nuestro caminar por Forna y nos llega-mos de nuevo a la Casa del Forno, dando la vuelta alrede-dor del horno de piedra para penetrar en una vivienda típi-ca cabreiresa, con establo en su planta inferior y el hogar yla alcoba en la superior, separados por un tabique de entre-tejido vegetal enfoscado con barro. Ello aporta más pro-tección contra el frío y el viento. Generalmente se usabapara distribución interior de la vivienda, pero encontra-mos claros ejemplos en corredores y en algunos casos co-rrectos en fachadas. En varias de éstas observamos típicascoladeiras (piedra con canal de desagüe a la calle) a modode fregadero con un sistema arcaico de evacuación.

Por último, transitando por una estrecha calle rodeadade corredores de madera que llegan a chocarse entre sí,evitando el paso del sol y la lluvia, volvemos la miradapara observar algo insólito y verdaderamente hermoso yespectacular, la casa con corredor más impresionante detoda Cabrera: la casa de doble corredor de Forna.

Así llegamos hasta el día de hoy con las esperanzas pues-tas sobre lo que se pretende seguir haciendo en el barrioantiguo de Forna hasta completarlo, recuperando edifica-ciones y elementos relevantes de esta arquitectura tan pe-culiar. Instituciones como la Diputación de León, la Juntade Castilla y León, como así mismo el ayuntamiento deEncinedo, están haciendo posible todo ello. Destacar dedon Ramiro Arredondas, alcalde de Encinedo, su sensibi-lidad en pro de la conservación del patrimonio cabreirés.Ahora bien, como ya hemos dicho, el alma de todo estotiene un nombre: Concha Casado. Es ella la que se mueve,la que consigue todo, la que organiza... Sin ella esto no sehubiera podido llevar a cabo.

Forna es el ejemplo. Aquí, donde se llega afundir el bello y asombroso pueblo con elentorno que lo rodea y envuelve.

El alma de todo esto tiene un nombre: Con-cha Casado. Es ella la que se mueve, la queconsigue todo, la que organiza, etc. Sin ellatodo esto no se hubiera podido llevar a cabo.

Forna. La casa de doble corredor

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FICHA PRÁCTICA

Dentro de Cabrera Baja nos vamos a centrar en el Municipio de Encinedo, donde la riqueza y el atractivo deesta tierra es su naturaleza y su gente. Nuestro recorrido comienza por el Lago de la Baña, declarado Monu-mento Natural.

Pueblos que no debemos dejar de visitar:-Trabazos, sus corredores.-Robledo y Quintanilla de Losada, sus palomares típicos.-Castrohinojo y Stª Eulalia, sus iglesias e imágenes.-Ambasaguas, el conjunto formado por la fragua y el molino.-Forna, antiguo Barrio de Arriba.-Corporales, su espectacular pajar (Cabrera Alta).-Encinedo, su Museo de la Cabrera.-Asimismo, a lo largo de toda la comarca de Cabrera Baja, encontraremos molinos y fraguas ubicados en

lugares inimaginables.-No debemos desaprovechar la visita y conocer los viejos canales romanos que nacen en Stª Eulalia y

llegan hasta las Médulas bercianas con casi 100 Km de longitud. Fue a comienzo del siglo I denuestra era cuando comenzaron las explotaciones auríferas. Prueba de ello son los numerosos castrosromanos de esa época existentes.

Actividades.--Senderismo, parapente, etc.-Pesca : lago de la Baña, río Cabrera, donde encontraremos las más exquisitas truchas de Europa.-Caza mayor, caza menor.-Una rica gastronomía elaborada con productos artesanos y naturales, como no, a la vieja usanza.-No olvidar la fecha de 8 de julio en Forna, cita que conmemora el Día de la Cabrera.

Establecimientos Hosteleros.--Encinedo: mesón El Abuelo.-La Baña : Alberto, Carrillano, Fonticas, Galaxia-Quintanilla de Losada: Sabugo, Hotel Virgen de Viforcos.-Forna: Centro de Turismo Rural Forna.

Museo.-De la Cabrera (Encinedo)(teléfono Ayuntamiento Encinedo: 987664069)

Texto.- Miguel Ángel Cordero LópezFotos y Documentación: Concha Casado y Javier López-Sastre.

Colaboración: Javier López-Sastre.Agradecimientos: Concha Casado Lobato.

Ayuntamiento de Encinedo.

Vista tradicional del pajar de Corporales Pajar de Corporales sin cubierta de centeno,con la puerta metálica a colocar

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Iruela. Cercado rematado con losas de pizarra verticales Fragua de Ambasaguas

Reguero CabreirésCalle Real de Trabazos La Baña. Horno y corredor

Chimenea típica Cabreiresa con Bufarra o Garroteira

Trabazos. Corredor