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Jornada en Madrid sobre `La crisis global de alimentos'

ALIMENTACIÓN ,AGRICULTURA ...Y ECONOMÍAEI pasado martes 18 de noviembre, en el Salón de Actos de laEscuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos de Madrid, tuvolugar la Jornada: La crisis global de alimentos: ^vuelve Malthus?

Una visión desde la economía, a la que asistieron destacadas

personalidades de los ámbitos académico, empresarial y profesional,

así como un gran número de estudiantes y profesores de este Centro.

MIGUEL CERV.4NTES

Maclñd

a jornada fue organizada por iniciativa de laAsociación España FAO IOrganización de las

Naciones Unidades para la Agricultura y la

Alimentación), cuyo Presidente, prof. Jaime

Lamo de Espinosa, actuó como presentador y mo-

derador. Como ponentes, los profesores RamónTa-

mames, Juan Velarde Fuertes y Juan Iranzo, máxi-

mas figuras en el panorama universitario y econó-mico español, que actuaron de manera sucesiva,

finalizando la Jornada con el consiguiente coloquio.

I EI punto de vista del prof. RamónTamames

Hizo una elocuente defensa de la tecnologíacomo medio para aumentar el rendimiento y laproductividad de la agricultura, sin olvidar el im-pacto que estas prácticas puedan tener sobre lanaturaleza. EI género humano, en su constanteevolución tiene que superar su fase de homo sa-piens y pasar a ser homo ecológicus, y los avan-ces en el campo de los nuevos fertilizantes, la lu-cha contra las plagas y enfermedades de las plan-tas y el desarrollo de nuevas variedades, mas

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resistentes y productivas, obtenidas por modifica-ción genética, deben ser compatibles con los prin-cipios de sostenibilidad y respeto al medio am-biente que garanticen la producción de alimentosen cantidad y calidad suficientes para cubrir las ne-cesidades de una población mundial en aumento.

También destacó que el incremento de pre-cios de los productos agrarios que se ha produci-do en los últimos años ha sido debido tanto al au-mento de los costes de producción como al incre-mento de la demanda de los Ilamados paísesemergentes. Este aumento de precios de los pro-ductos agrícolas se ha traducido en un mayor gas-to en el presupuesto que las familias destinan a la'cesta de la compra' y lógicamente su impacto esmayor en los países menos desarrollados, cuyogasto familiar en alimentación es proporcional-mente muy superior al que destinan las familiasen los países más desarrollados.

Otro aspecto interesante de su intervenciónfue el de la optimización en el uso de la energía,destacando que hay que fomentar el principio decoste de oportunidad y destinar los recursos haciaaquellas producciones que sean más eficientes enel balance energético (energía producida versusenergía consumidal. Como ejemplo dijo que, paraproducir las mismas calorías que contiene una to-nelada de patatas, haría falta cinco veces más deenergía si estas calorías proceden de los cerealesy veinte veces más si proceden de productos cár-nicos.

La 'globalización y las crisisalimentarias', segun el prof. JuanIranzo

Empezó diciendo que las pesimistas previsio-nes que estableció el economista inglés ThomasMalthus a finales del Siglo XVIII en su famoso En-sayo sobre el principio de la población, afortunada-mente no se han cumplido. Pero tampoco se hancumplido las estimaciones que hizo sobre los lími-tes de desarrollo el prestigioso Club de Roma, unaorganización formada por prominentes personali-dades, que busca la promoción de un crecimientoeconómico estable y sostenible de la humanidad.

La sociedad moderna está planteando nuevosretos, el aumento de la esperanza de vida y las le-gítimas aspiraciones de la población mundial dedisponer de más y mejores alimentos, hacen quesea necesario, no sólo aprovechar los avances tec-nológicos, sino que hay que trabajar mas horas ymejorar la productividad con ayuda de las nuevastecnologías de la información y la comunicación.

La globalízación de la economía y el recienteestancamiento económico de países tan impor-tantes como Japón y los Estados Unidos trajo co-

mo consecuencia la bajada de los tipos de interés.Se ha roto la dualidad entre países capitalistas ypaíses socialistas, lo que ha hecho posible el desa-rrollo de países emergentes, que se han converti-do en grandes ahorradores, que junto a los paísesproductores de petróleo, son los que proporcionanla mayor parte de los recursos financieros que ne-cesitan las economías occidentales para seguirdesarrollando su actividad económica. Por otraparte estos países emergentes son grandes con-sumidores de bienes de equipo y de materias pri-mas lo que hace que estas se hayan convertido enproductos estratégicos a corto y medio plazo.

Respecto a la polémica suscitada por la utiliza-ción de productos alimenticios (cereales y grasasvegetales) para producir biocombustibles destina-dos al sector de la automoción, el Prof. Iranzo dijoque hay que tener en cuenta el coste de oportuni-dad y analizar detalladamente si es rentable produ-cir biocombustibles considerando la cantidad derecursos que hay que poner en juego para su ob-tención.

Por otra parte señaló que no hay que dejarnosIlevar por una falsa euforia sobre el futuro de estosproductos, ya que la demanda energética de losparques automovilísticos es cada vez mayor y lasuperficie agraria útil es limitada, e incluso se estáreduciendo como consecuencia de la desertiza-ción y de los usos alternativos de la tierra. Comoejemplo destacó que para producir el etanol quenecesita un automóvil que recorra 10 000 km alaño se necesita el producto obtenido en una hec-tárea de cultivo. Haciendo unos sencillos cálculosse comprueba que esta solución es inviable ennuestro país que cuenta con una superficie agrariaútil de poco más de 20 millones de hectáreas.

Sin embargo, el profesor Iranzo se mostró op-timista respecto a la capacidad del hombre en ha-cer frente a los retos que plantea el aumento de-mográfico y la lucha por la existencia. Dijo que la

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innovación tecnológica nos permite compatibilizarel progreso y el desarrollo con el mantenimientodel medio, resolviendo la mayor parte de los pro-blemas que se presentan, y terminó su interven-ción con una frase de Engels que dice: "Siempreque el hombre ha apelado a la Ciencia ésta le harespondido"

1 La opinión del prof. Juan Velarde

Empezó resaltando la gran brecha que secular-mente separaba a la agricultura de de la actividadindustrial, no sólo en España sino en el resto delmundo. Una agricultura muy atrasada, casi de sub-sistencia y sin apenas tecnificación, mantenía ocu-pada a una gran parte de la población activa, mien-tras que la industria, con avances permanentes ymejoras de la productividad derivadas de la cre-ciente mecanización de los procesos de fabrica-ción, era el principal motor del desarrollo y unafuente de empleo cualificado y mejor remuneradoque en la agricultura.

Actualmente esa brecha se ha cerrado y losagricultores de los países desarrollados puedenbeneficiarse de los avances tecnológicos produci-dos en los campos de la mecánica, la electrónica,la genética y las telecomunicaciones. La agricultu-ra ha pasado a ser una industria más, una industriade tipo agroalimentario.

Una de las principales preocupaciones de lasociedad es la seguridad alimentaria. Para garanti-zar esta seguridad hay que disponer de una pro-ducción agrícola propia y suficiente, lo que ha Ile-vado a que se establezcan distintos sistemas deproteccionismo en los países productores. Esteproteccionismo es lo que inspiró la Ilamada PolíticaAgrícola Común (PAC) en la Unión Europea, queahora se está revisando. Sin embargo, los paísespobres presionan para que desaparezcan todas lasmedidas proteccionistas que les impiden competiren los mercados libres internacionales en condi-ciones de igualdad (reuniones de la OrganizaciónMundial de Comercio, Ronda de Uruguay, Rondade Doha, etc.).

Cuando los intereses están bajos se favoreceel acaparamiento y la especulación de productosagrícolas por parte de aquellos operadores o enti-dades que tienen capacidad financiera para adqui-rirlos. Esta situación trae como consecuencia unasubida de precios de los productos agrícolas. En-tre finales de 2006 y comienzos del 2008, el pre-cio internacional de los productos agrícolas subióen torno al 70%, pero ciertos productos subieronde forma descomunal, como el arroz que subió un217%, el trigo un 136% y el maíz un 125%.

Este encarecimiento produjo un aumento dela inflación en las economías más desarrolladas ybastantes conmociones en los países en vías dedesarrollo. Sin embargo, cuando los tipos de inte-rés suben, los precios de los productos agrícolasbajan, y esto es precisamente lo que ha ocurridoen los últimos meses.

A diferencia de la industria, la agricultura estaexpuesta a la incertidumbre derivada de la inesta-bilidad del clima, y en este sentido se ha especula-do y se ha exagerado mucho, afirmando que el cli-ma esta cambiando y se esta produciendo un ca-lentamiento global por causa de los Ilamadosgases de efecto invernadero.

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EI profesor Velarde mantiene que no hay se-ries estadísticas climatológicas que sean realmen-te fiables y que, por ahora, tendremos que planifi-car y actuar asumiendo ese factor de incertidum-bre que es la variabilidad del clima. Terminódiciendo que es muy importante transmitir a lasgeneraciones futuras la herencia de un paisajebien conservado y una biodiversidad rica y variada,pero que esta responsabilidad no nos debe impe-dir cumplir con una obligación mayor y es el evitarque las poblaciones actuales pasen hambre.

Las puntualizaciones del p rof. JaimeI Lamo de Espinosa y el coloquio

Tras la intervención de los tres invitados, elmoderador, Profesor Jaime Lamo de Espinosa, hi-zo algunas puntualizaciones sobre los contenidosde las exposiciones anteriores, tales como que lasuperficie agrícola útil per cápita esta bajando yque la producción de biocombustibles a partir deproductos alimenticios no es la causa directa delaumento de los precios agrarios, ya que se hanproducido fuertes aumentos en el precio del arrozy de la leche y ninguno de estos productos se utili-za para la producción de biocarburantes.

Posteriormente, dio paso a un animado colo-

quio entre la mesa y los numerosos asistentes aesta jornada en el que se trataron temas relaciona-

dos con la utilización de variedades genéticamen-te modificadas para mejorar la productividad de las

explotaciones, la influencia del cambio climáticoen la producción de cosechas, la desaceleración

del ritmo de crecimiento demográfico a nivel mun-

dial, y la dificultad de ayudar a los países mas ne-

cesitados debido fundamentalmente a que estospaíses tienen unas malas políticas económicas,

unas malas políticas demográficas y un alto nivel

de corrupción a todos los niveles.

^Y EN EL COLOQUIO FINAL SE DIJO

QUE EL PROBLE MA DEL AGUA NO ES

CUESTIÓN DE CANTIDAD Y CALIDAD,

SINO DE UNA MALA DISTRIBUCIÓ N

EN EL PLANETA ^j

EI profesorTamames puntualizó que EI Club deRoma acertó en sus alarmas y preocupaciones pe-ro se equivocó en cuanto a cifras y fechas, por loque no es justo decir que sus previsiones son to-talmente erróneas. Respecto al problema delagua, como elemento imprescindible para la activi-dad agraria, se dijo que es similar al de los alimen-tos, que por ahora no es cuestión de cantidad y

calidad, sino de una mala distribución entre las dis-tintas regiones y países del Planeta.

Contestando a una pregunta sobre si los políti-cos están haciendo todo lo posible por atajar elproblema de la agricultura, y por extensión delhambre en el mundo, el profesor Velarde contestóque los ciclos políticos son más cortos que los ci-clos económicos y que muchas veces los dirigen-tes actúan más buscando la rentabilidad políticade sus decisiones a corto plazo que las ventajasque puedan derivarse de una actuación de mayorenvergadura cuyos beneficios se pondrán de ma-nifiesto a medio o largo plazo.

EI profesor Lamo de Espinosa cerró el acto

agradeciendo a la Escuela de Ingenieros Agróno-mos el apoyo y la ayuda recibida para celebrar esta

jornada y recordando que son los técnicos los que,con argumentos científicos, tienen que realizar

una verdadera labor de información a la sociedad y

desmontar los prejuicios, los mitos o las falacias

de los falsos ecologistas y otros grupos de interésque influyen y manipulan la opinión pública. n

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