j.f. jenkins - the corruption of mila
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J.F. Jenkins - The Corruption of MilaTRANSCRIPT
Agradecimiento al Staff
Escritora Solitaria
Walkiria
Lililamour
Eglan
Walkiria
Pily
Lexie
Silv ∞
Pily
Dayi Cullen
Walkiria
MaryJane♥
Contenido
Sinopsis
ila, tiene decidido no involucrarse en las citas. Ella es
independiente, exigente y piensa que lo sabe todo. Hasta que
su mejor amiga resuelve emparejarla en una cita a ciegas
con un tipo que responde al nombre de Jax, Mila decide dar un salto de fe.
Después de todo, con un nombre como Jax, ¿cómo no puede ser un barco de
ensueño?
Como la mayoría de las citas a ciegas, Jax no cumple con las
expectativas que Mila creó en su imaginación. Con lo fatal que han sido sus
relaciones pasadas, ¿esto realmente será tan malo?
M
Prólogo Traducido por Walkiria
Corregido por Lexie
o puedo decir que soy el tipo de persona que cree en el amor a
primera vista o algún otro cliché cursi al azar. El destino y la
idea de que todo sucede por una razón... Todavía estoy tratando
de averiguar si eso existe. Hay muchas cosas que han sucedido y me han
hecho un poco tosca, hastiada, y una escéptica sobre el romance. Cursilerías,
sensibilidades, sentimientos se supone que sólo existen en las películas. No
voy a decir que he encontrado un verdadero amor, pero tengo mucha fe en que
el universo no está simplemente en mi contra.
Déjame explicarte todo, contándote esta cita a ciegas a continuación...
N
Capítulo 1
Traducido por Walkiria
Corregido por Dayi Cullen
as citas a ciegas apestan. Es imposible evitarlo. Claro, algunas
personas conocerán al amor de su vida y vivirán felices para
siempre. Otros tienen la noche más incómoda de su vida. No
importa cómo vaya la noche, la ansiedad de llegar a esa cita siempre te pone
un freno bastante pesado en el asunto. Por lo menos, en una primera cita
normal, conoces al chico/chica primero. No tienes que preocuparte si es
guapo, si te vas a llevar bien, o ese tipo de cosas. ¿Por qué? Porque sabes que
al menos hay un poco de terreno común en que basarse cuando llega el
momento. Incluso si sólo has dicho: ¡Oye, tú eres lindo, vamos a salir! Al
menos es algo. Ese no es el caso de una cita a ciegas. Y déjame decirte, que
una cita a ciegas era lo último que quería hacer. Bueno, no de la clase de – que
esta era. ¿Quién lo hace, de todos modos? Hola, estamos en el siglo XXI. La
gente no les fija citas a ciegas a sus amigos, las personas salen con gente que
conoce por Internet con la esperanza que no sean trepadores.
De alguna manera, dejé que mi mejor amiga Morgan me convenciera de
que una cita a ciegas en San Valentín sería una idea maravillosa.
—¡No puedes estar sola en la fecha más romántica del año! —dijo—.
¡Eso es lo más patético que puedes hacerte a ti misma!
No, la cosa más patética sería ir a una cita, sólo por el hecho de ser una
cita, todo porque es día de San Valentín. Tenía planes perfectamente
impresionantes hechos para mí, para pasar la noche a solas en mi casa: viendo
películas de kung-fu y comiendo comida China para llevar. No tenía planes de
revolcarme amargamente tampoco. Bueno, tal vez un poco de revolcarse. El
punto es, no pido ni necesito una cita a ciegas. Sin embargo, Morgan fue
capaz de convencerme. Por otra parte, con un nombre tan delicioso como Jax,
¿cómo podría ir mal?
L
Así que me puse linda, pantalón apretado negro, con mi juego de corsé
superior y larga gabardina y me dirigí al encuentro con ese chico en el
elegante restaurante de barbacoa brasileña en el centro de la ciudad.
—¿Puedo ayudarle señorita? —me preguntó la anfitriona, mirándome
desde su podio.
—Tengo una reserva. Debe estar bajo el nombre de ¿Jax? —pronunciar
su nombre me dio cosquillas. Era tan sexy. Mejor aún si tiene un tatuaje... o
cinco.
La anfitriona miró sobre la lista, asintió y luego recogió un menú que me
llevaría a la mesa. Tragué saliva, la seguí e inmediatamente comencé a jugar
con mi pelo oscuro. Un tic nervioso, que siempre he odiado. Parece muy
obvio, ¿sabes lo que quiero decir? Además, no quería arruinar mi cabello antes
de ni siquiera conocer a mi cita. Había mucho tiempo para hacerlo más tarde.
Guiño, guiño.
Había al menos que doblar en cinco esquinas antes de llegar a la mesa.
Estábamos en la parte trasera del restaurante que parecía un ambiente privado
más agradable, seguro, pero los nudos en el estómago se estaban anticipando.
—La mesa —dijo la anfitriona.
La mesa era la más alejada de la parte delantera y estaba escondida en
una esquina. El joven sentado en ella de espaldas a la pared tenía el menú
sobre su cara. Lo bajó lentamente, dando un vistazo con un par de ojos azules
muy bonitos, seguido por un pelo despeinado y oscuro. Dejo el menú sobre la
mesa, se paró y me dio un mejor vistazo. Lo había imaginado alto, musculoso
y un poco tosco. Con algunos desaliñados vellos faciales o tal vez una cicatriz
y un atuendo que fuera más de chico malo-sexy que de casual de negocios.
En su lugar Jax era de altura media, bien afeitado y llevaba una camisa
azul marino de manga larga de cuello abotonado y pantalones caqui. El chico
tenía alguna definición muscular, me di cuenta por cómo la camisa se
aferraba a su pecho en todas las formas correctas y en sus bíceps que se
insinuaban tan ligeramente bajo la tela. Trabajaba, lo que siempre era un punto
a favor, pero había algo más sumiso que rudo en él. Algo en el chico también
me era vagamente familiar y absolutamente no podía poner mi dedo en él.
—¿M-Mila correcto? —preguntó. En realidad el tartamudeó. No sabía
qué pensar acerca de eso. En cierta forma era dulce porque estaba bastante
nervioso como para tartamudear, pero era también un poco raro. Bien, no un
poco, mucho.
Asentí, esperando que sus nervios se pasaran y que pronto llegara la
calma. —Esa soy yo y tú eres Jax.
—Sí.
Estoy segura de que mi sonrisa tembló un poco cuando le dije—:
Encantada de conocerte —Bueno no era el tipo de reunión que quería tener.
Capítulo 2 Traducido por Walkiria
Corregido por Silv ∞
sí qué, cómo conociste tú a Morgan? —Jax me
preguntó mientras veía el menú de bebidas. Yo hice lo
mismo, observé la llamativa lista de bebidas
alcohólicas y lo más importante, miré sus precios. Déjame decirte, he visto
comidas que cuestan menos que estos tragos, y no estoy hablando de comida
rápida.
Lo miré y vi cómo fruncía el ceño, como si tuviese dificultad para leer el
menú.
—Hemos sido mejores amigas desde que nacimos. La gente incluso
pensaba que éramos gemelas hace un tiempo. Morgan y Mila, con tres días de
diferencia y todo.
—Puedo imaginar por qué la gente pensaría eso. Ustedes incluso tienen
un parecido. —Me dio una pequeña sonrisa y luego sacudió la cabeza—.
Debería haberlo recordado. Ella me lo mencionó una vez. — Su ceño fruncido
después de sugerir eso, fue muy importante. No, no por mucho.
— ¿Y tú? —pregunté—. Morgan mencionó que trabajas con ella, pero no
me dijo si eran cercanos o conocidos.
La cara de Jax se suavizó.
—Vamos a la iglesia juntos también. En realidad, es cómo que nos
conocimos antes de trabajar juntos. Durante la Universidad, me uní a la iglesia
y nos caímos bien. Le dieron el trabajo de ayudante en Gizmo1. Es increíble, y
sabía que sería un contrato perfecto para ella. Salimos una vez por semana.
1 Gizmo: Es una empresa que proporciona un completo soporte técnico para una amplia gama de tecnologías
que se utilizan en el hogar o la oficina.
—¿A
—Son bastante cercanos —dije.
Por alguna razón, esa información me impresionó más de lo que
esperaba. Morgan nunca lo había mencionado antes. Por supuesto, no
hablamos demasiado sobre su vida en la iglesia. ¿Por qué? Porque no soy
religiosa, y mayormente no hay nada de eso que me interese escuchar. Todo lo
que hace es recordarme sobre los diferentes planetas en que Morgan y yo
vivimos. En el pasado, ha causado una gran cantidad de drama en nuestra
relación. Érase una vez, en que Morgan intentó convertirme a su pura forma
elitista. Yo los llamo elitista porque cuando quiero hacer algo que no le gusta
a ella me da una mirada que me recuerda mucho a mi madre. No me
malinterpretes, nos respetamos bastante, desde que no está intentando
empujarme hacia “la luz” y no estoy diciéndole que ella que es parte de un
culto, pero todavía tenemos un montón de diferencias. Cuando creo que tiene
que salir y vivir más, ella cree que tengo que sentar cabeza. Jax siendo un
niño de iglesia era la segunda bandera roja de la noche. Si él y Morgan iban
juntos a la iglesia, había muchos chances de que él haga las mismas cosas que
ella, principalmente influenciarme.
Se encogió de hombros y cuando la camarera llegó a tomar nuestras
bebidas, le ordenó un refresco. Otra bandera para mí. El tipo no estaba
bebiendo. Tal vez no signifique nada, pero quizá también significaba mucho.
Sus ojos azules estaban fijos en mí mientras hacia mi pedido.
—Un Martini —dije finalmente. Sonrió, así que fue un consuelo para mí.
—Soy un aficionado a la cerveza de cepa —dijo con un pequeño
movimiento.
—Genial —dije con un guiño y discretamente saqué el teléfono de mi
bolso y envié un mensaje a Morgan.
«No me dijiste que era un nerd total.»
Jax miró alrededor del restaurante.
—¿Has estado aquí antes?
Negué con la cabeza.
—No puedo decir que lo he hecho. ¿Cuándo vamos a pedir nuestra
comida o lo que sea?
—No lo harás. La comida viene a ti. —Levantó una pequeña muestra de
cartón. De un lado era verde y del otro era rojo. Tengo uno así, ahora que lo
pienso—. Cuando estés lista para comer, subes el lado verde. Entonces la
gente viene de todas partes ofreciendo de todo. Si no, puedes ir a la barra de
ensaladas.
—No puedo decir que soy una gran fan de la ensalada. No es demasiado
abundante —dije, deslicé la ficha entre mis dedos para inspeccionarla. Mi
teléfono tenía una respuesta de Morgan. Cuidadosamente hice clic en abrir.
« ¡No es un nerd! Es muy dulce. Algo que necesitas. ¡Y lindo! »
Jax era lindo; le concedo eso, pero tal vez era demasiado lindo. ¿Dónde
estaba el sexy fuego? Negué con la cabeza y escribí rápidamente una
respuesta.
«No es mi tipo. Seguro que me quemaré si lo toco. Demasiado puro para
mi alma corrompida. »
Su respuesta fue inmediata.
«No te haría daño intentar salir con un chico bueno para variar».
Rodé los ojos y volteé mi ficha para el lado verde, estaba lista para
comer, sufrir una incómoda conversación y luego volver a mi apartamento
vacío. Jax dio vuelta su ficha también y fuimos bombardeados por los
camareros trayendo carne de cada animal existente en el planeta, patatas y
plátanos fritos. ¡Yum! Llené mi plato y luego los invité a retirarse. Tener a
todos los camareros a mi alrededor me hizo sentir definitivamente como una
diva.
—Así que conociste a Morgan a través de la iglesia —dije entre
bocados—. ¿Qué haces además del trabajo y la iglesia?
—Camino —dijo entre bocados de patatas. Él también sonrió—. Soy
bueno en la naturaleza y al aire libre. También me interesa la electrónica.
Tengo un laboratorio a la vuelta de casa a donde voy a construir robots y
artilugios, ese tipo de cosas.
—Lo que explica por qué trabajas en Gizmo. —Sí, definitivamente no
me equivoqué sobre lo de nerd. Podía matar a Morgan por hacerme esto. Las
cosas que este tipo y yo teníamos en común eran probablemente limitadas a
respirar aire y convertirlo en dióxido de carbono.
Él sacudió la cabeza y dio un mordisco. Después tragó, me miró y luego
hacia abajo en la mesa. Frotó sus manos en los pantalones, y entonces supe
que lo estaba intimidando. Eso o algo lo hacía poner más nervioso de lo que
debería estar.
—No trabajo para el Departamento de servicio al cliente.
—¿Y qué es lo que haces para ellos?
—Prototipos de desarrollo, publicidad, PR, productos, de todo un poco.
—Se encogió de hombros.
Parpadeé.
—¿Haces todo eso?
—Sí. —Asintió lentamente, y se negó a mirarme.
—Debes estar muy bien visto allí —dije y volví a comer.
Asintió otra vez.
—Sí, se podría decir.
—No me extraña que hayas podido conseguirle trabajo a Morgan.
—Era lo menos que podía hacer con lo mucho que me ha ayudado.
Un silencio incómodo nos había asfixiado durante al menos cinco
minutos. Atrapé un buen chisme de la mesa junto a la mía de un grupo de
damas, y aunque no tenía hambre, estuve hojeando mi ficha para poder tener
otra vez el bullicio de los camareros a mí alrededor. Estaba desesperada por
llenar el hueco en la conversación con un eufemismo.
Jax continuó comiendo, la frente se le surcaba ligeramente. Me di cuenta
que tampoco estaba disfrutando exactamente la noche.
— ¿Quieres postre?
—No, gracias —dije—. Fue un placer conocerte, Jax, pero creo que es
mejor decir que la noche ha llegado a su fin.
Sus ojos azules reunieron la mirada con mis queridos ojos oscuros.
—Morgan me dijo que probablemente no me adaptaría a tus costumbres
habituales, pero señaló que sería algo bueno. Mis habilidades sociales son un
poco extrañas. Dada la naturaleza de mi trabajo, hago una gran cantidad de
discursos y soy muy bueno con las charlas, pero no quería platicar de eso
contigo. Morgan dijo que serías una gran persona, si era yo mismo y me
mantenía distendido.
No es la descarga de información que estaba esperando, en absoluto.
Finalmente, dijo algo que me resultaba interesante por lo menos. Me incliné
hacia delante y tomé un trozo de chorizo.
—Así que tú eres uno de esos tipos reservados.
—Tengo que serlo, por razones obvias.
—¿Qué razones obvias son esas? ¿Tu colección de robots? Es diferente,
único, incluso tonto, para confesarlo muy abiertamente.
Movió la cabeza.
—No lo entiendes. —Se rio—. Guau. —Y todo su cuerpo se relajó. La
postura firme, rígida, cambió a un principiante insignificante, y tenía la más
pequeña de las sonrisas en su cara. Su sonrisa era sexy, pero también tenía un
secreto para mantenerme entretenida. Tal vez Jax no era un tipo aburrido
después de todo.
—No lo sé —dije—. Pero que has despertado mi interés, eso es seguro.
Se rió, y fue un lindo sonido genuino. No era la incómoda y forzada risa
que escuchas de mucha gente, o el tipo de risa profunda y espeluznante.
—Puedo ser interesante cuando me lo propongo. Voy a intentar no ser
tan cuidadoso, pero soy la clase de tipo de lo-que-ves-es-lo-que-hay en una
persona. Definitivamente hay guardias arriba, pero no son de mentira. No soy
tan emocionante como la mayoría de la gente espera, ya hablé mucho de mí.
Pero todavía sé cómo hacer una aventura interesante. ¿Y tú?
—¿Y yo? —pregunté, no me gustó el cambio de enfoque en la
conversación. Si Jax era resguardado, yo era Fort Knox.
—¿Qué clase de persona eres? ¿Qué tipo de cosas haces en tu tiempo
libre?
Me incliné hacia adelante.
—Podría mostrarte.
—Es inútil besarse en la primera cita —dijo.
Escondí mi mueca de dolor.
—No me refería a eso. No seas tan presuntuoso tampoco. ¿Quién dice
que quiero besarte?
—Puedes llamar eso un ejemplo de mi peculiar sentido del humor.
—Oh, que sólo era un chiste, lo tengo. —Rodé mis ojos, pero me
decepcionó un poco. No porque quería pegar mis labios a los de él, pero
coquetear un poco nunca mató a nadie—. Vamos a pedir la cuenta y te
enseñaré mi ejemplo de un buen momento. Después de comer toda esta
comida, me vendría bien un buen ejercicio.
Tragó.
—Lo haré mientras tenga una clasificación PG2.
—Podría tener también un trece pegado, pero no me gustaría corromper
tu inocencia. —Me guiñó el ojo y saqué mi cartera del bolso.
—Entiendo —dijo y entregó una tarjeta de crédito cuando el camarero
volvió para saldar la cuenta. No tuve ni siquiera la oportunidad de protestar.
—Gracias —dije en voz baja. Definitivamente un hombre que paga por
una cita, especialmente cuando esta no iba bien, era demasiado bueno para mí.
Hicimos planes, y seguiríamos con ellos, pero permítanme ser clara cuando
dije que no había grandes chispas y pensamientos lujuriosos. Me intriga Jax
— mucho — y eso era suficiente para hacerme no querer renunciar a la noche
por completo. Además, me veía muy sexy. Había pasado un tiempo desde que
finalmente hice el intento de ser tan sexy.
2 Clasificación PG: Guía Paternal Sugerida. Parte del material puede no ser adecuado para los niños menores
de 10 años.
Cuando le regresaron su tarjeta, Jax se paró y yo comencé a hacer lo
mismo. Caminó junto a mí durante todo el trayecto hacia la puerta, y me
refiero a mi lado. Casi nos tocábamos, dejando en claro que estábamos juntos,
aunque no lo estuviéramos. Probablemente porque la cita no había terminado
aún y por lo menos por una hora más seria suya. Al abrir la puerta, fuimos
atacados por el flash de una cámara. Inmediatamente, Jax cerró la puerta.
Él gimió.
—Tienes que estar bromeando. —Sacando su celular, hizo una llamada
con la variedad que nunca hubiera esperado escuchar en mi vida—. Vamos a
caminar, conduciré el coche. Sí, lo sé, he visto a los paparazzi. Estaremos
bien si vamos por una salida lateral, no hay problema. Si tomas el auto, tal vez
te sigan. Tómate la noche libre. Debería estar bien. —Y luego colgó. Su
mirada atrapó la mía y mi mandíbula debía estar abierta o algo así, porque él
levantó una ceja—. ¿Qué? ¡Oh, cierto! ¡No sabes quién soy! — Él extendió
su mano para un saludo—. Jackson Hamilton. Jax, abreviadamente.
Dejé caer mi bolso en el acto. El contenido del mismo se derramó por
todas partes en un desastre embarazoso. Algo muy malo ya que no tenía por
qué ver mi bolsa de gatito tejido, descuentos para pizzas individuales en la
cafetería local o mi tarjeta de descuento en la tienda de libros. Si se dio cuenta
eso, o de cualquier otra cosa que se había caído de mi cartera, no reaccionó.
Estoy segura de que se lo ha perdido, lo que era un alivio.
Levanté mis cosas tiradas en el suelo, intenté no pensar en el hecho de
que estaba parada con Jackson Hamilton. Multimillonario era la primera
palabra que se me vino a la mente cuando escuché ese nombre. Su padre era el
dueño de Gizmo Corporación, así que cuando Jax dijo que estaba en lo alto, de
la empresa, no estaba bromeando. ¡No es de extrañar que me resultase tan
familiar! Era el rostro de la empresa. Cada vez que salía un nuevo producto, él
daba los discursos, y también ha realizado un montón de comerciales. Era
ciertamente bueno, lo suficiente para el papel, mirándolo así tiene sentido. No
podía creer como no lo reconocí. Por otra parte, estar acechado por las
cámaras cambia las cosas acerca de la apariencia de una persona. Además, una
chica como yo no conocía a los multimillonarios.
Había un cuento de hadas esperando a suceder. Pero apestaba que no
fuera mi tipo.
Capítulo 3
Traducido por Walkiria
Corregido por Silv ∞
o siento —Jax lo repitió por quinta vez en el lapso de
cinco minutos. Tenía sólo dos palabras en su
vocabulario para este momento. Era molesto.
Sacudí la cabeza y caminé con él a través de los callejones oscuros de la
ciudad.
—No es tu culpa. No llamaste a los paparazzi y no les pediste que
aparecieran a tomarte fotos.
—Aun así...
—Si dices que lo sientes otra vez, creo que voy a pegarte en la cabeza
con mi bolso. —Nos miramos, trataba de mantenerme sutil, pero estoy segura
de que él sabía que hablaba en serio porque se estremeció. Lo llevó a estar
callado por lo menos.
Me tomé el tiempo para pensar en todo lo que sabía de Jax. No acechaba
los chismes como una adolescente para saber cualquier información que pude
encontrar en él ni nada. Lo único que se me ocurrió era que tenía veintisiete
años, que lo hacía tres años mayor que yo. No es de extrañar, Morgan
decididamente nos tendió una trampa. Probablemente pensó que sería una
bocanada de aire fresco para él, que caeríamos en el amor a primera vista, y
entonces tendríamos bebés de 5 millones para llenar todas las habitaciones de
la mansión. Puaj. Eso no estaba ni cerca del futuro que imaginé tener.
Después de caminar un par de cuadras por el callejón, dimos la vuelta y
caminamos hacia las aceras de la calle principal. Me sujeté el abrigo alrededor
de mí, temblando de frío. En febrero siempre hacía frío.
Reí entre dientes.
—L
—Bueno, tenías razón, definitivamente esto es una aventura fuera de lo
común.
—No hay nada ordinario en esta noche —dijo.
—Eso suena como un piropo cursi esperando a que suceda. —Lo miré—.
Es decir, si estabas planeando agregar, “Porque no hay nada ordinario de ti”.
Jax levantó una ceja.
—No eres ordinaria, pero no es eso lo que iba a decir. Hablaba de la
situación en su conjunto. Las citas a ciegas no son una cosa normal, y mucho
menos común. Para eso es lo que está Internet.
—¿Cierto, no? ¡Eso es lo que he estado pensando toda la noche!
Ambos reímos, y esa fue la primera vez que encontramos algo gracioso.
No he dejado que el momento durara mucho.
Dejé de caminar y le obligué a mirarme.
—¿Estás seguro que quieres seguir con esto? Porque lo entendería si
quieres llamarlo una noche. No sabía que eras una especie de mega
superestrella, y también sé que tú probablemente querrás mantener tu
reputación impecable. Lo que nos lleva a, que eso no podría ocurrir. Es decir,
nunca te han atrapado antes de fiesta en tu vida, ¿Verdad? Pensarán que te
estás cambiando al lado oscuro.
—¿No me vas a llevar a un club de caballeros? —preguntó, sonriendo—.
Mila, accedí a esta cita para intentar algo nuevo. Se trata de tomar riesgos, y
creo que encontrarás que no estoy tan lleno de sorpresas como crees. Por
supuesto, no soy como mi hermana menor, que probablemente ha matado a su
hígado por la cantidad de salidas. Y tampoco soy mi hermano mayor, quien
realiza lujosas fiestas en París cada fin de semana. —Se detuvo, poniendo sus
manos en los bolsillos mientras caminamos—. Y no soy una superestrella. Soy
un heredero, pero mis talentos no son dignos de ser celebridad.
Este hombre podría ser un modelo si se cambiara ese vestuario friki e
hiciera un poco más de ejercicio. Es decir, lo estoy asumiendo. Es que no
había fotos desnudas de él filtradas en ningún lugar, o incluso con cualquier
camisa como para hacer un juicio preciso. Sólo desde donde estaba parado,
parecía físicamente proporcional, pero definitivamente más del tipo que se
queda en casa y juega videojuegos. A pesar de todo, tenía un potencial total si
quisiera hacer el esfuerzo. ¿Quién era él para decir que no tenía talento digno
para su status?
Rodé los ojos, empecé a andar por la calle otra vez.
—Heredero de una corporación multimillonaria, celebridad. Es lo mismo
en estos días. Lo único que te estás perdiendo es un reality show.
—Ew.
—Exacto.
—Otra cosa que tenemos en común —bromeó, alcanzándome en unos
pocos pasos antes de emparejar mi ritmo.
Resoplé y señalé bajando la calle a la zona de almacenes. Un gran letrero
luminoso de neón que decía "Abastecimiento de Agua" se iluminaba en azules
brillantes, verdes y rosas.
—Ahí es donde vamos. ¿Tienes ánimo para ello?
Su rostro se puso un poco serio.
—Como he dicho. Estoy aquí para asumir riesgos, pero después de esto
vamos a hacer algo a mi manera.
— ¿No elegiste ir a cenar?
—Morgan eligió la cena. Estuve de acuerdo en que era un buen lugar,
siempre y cuando no fueras vegetariana. Ella me aseguró que no lo eras.
—No, definitivamente no. Has visto cómo comí —dije y acaricié mi
estómago. Probablemente podría haber aflojado los lazos de mi saco un poco
porque estaba probablemente embarazada de un bebé de comida.
Jax se rió.
—Lo vi. Me gustó. —Él extendió su mano hacia mí—. ¿Tenemos un
trato? Hacemos la actividad de tu elección, y entonces después, vamos a hacer
la mía. Por supuesto clasificada PG. Si aún no conjugamos, no pasa nada, pero
entonces por lo menos habremos hecho un buen intento. La cena no nos
permitió llegar a conocernos muy bien. Hubo mucha masticación.
Eso era porque necesitaba una razón para no hablar y especialmente para
no abrirme a él.
Con un suspiro y algunas vacilaciones, tomé su mano.
—Bien, trato hecho.
Capítulo 4 Traducido por Walkiria
Corregido por Silv
l “Abastecimiento de Agua” era como un oasis en el desierto. El
exterior era un mundo frío, oscuro y muerto; en el interior era el
paraíso tropical de una isla. Como su nombre lo sugería, había
mucha agua en el interior. Cascadas a lo largo de la parte de atrás de la barra y
un escenario con decoraciones refinadas pero elegantes. En la fuente cerca de
la entrada aparecía un enorme tiburón blanco. Había acuarios con peces
exóticos que abarcaban todos los colores del arco iris y entretenían a los
clientes sentados en sillones de cuero rojo a lo largo de la pared lateral. Los
empleados llevaban atuendos hawaianos. Ya sabes, esos feos estampados de
flores, collares y una chica linda muy ocasional paseando en un sostén de coco
o con una parte superior del bikini. El club era un festival de queso, pero era
uno de mis favoritos porque el DJ era increíble. Además sería lo más cercano
que jamás conseguiría a unas vacaciones exóticas.
Jax echó una buena mirada alrededor, y pude darme cuenta por sus ojos
azules que estaba sorprendido.
—No lo esperaba en absoluto. —Hizo una pausa y se asomó hacia fuera
en la pista de baile —. ¿Están bailando en espuma? ¿Eso es un caño?
—Te dije que podría haber un poco de trece añadido a esa calificación
PG —lo dije con una inocencia encogiéndome de hombros.
—Vamos a bailar —dijo, ofreciéndome su mano.
Lo miré, sorprendida de que haya hecho la sugerencia sin que tenga que
arrastrarlo a la pista de baile.
Me atrajo hacia él y aprovechó para cerrar mi mandíbula abierta con sus
dedos antes de agarrar mi mano.
E
— ¿Para qué más me traerías a un club nocturno? Tengo que advertirte,
que no soy un gran bailarín.
—Bailar aquí no es nada complicado de todos modos. Menear las caderas
y hacer algo sexy. Encajaras bien. —Sonrío—. ¿O va a estar fuera de tu
habilidad también? No vas a enloquecer por hacer algo sucio alguna vez
¿Verdad?
Rodando sus ojos, Jax siguió su camino sobre la pista de baile. ¿Estaba
loco o algo así? ¿Qué dije que lo puse tan mal? O tal vez lo llené con algún
tipo de nueva determinación. Su expresión era difícil de leer. La tensión que
aprisionaba su mandíbula sugería emociones negativas, pero el resto de él
estaba cerca de ser más tieso.
Seguí tras él, acortando la distancia entre nosotros rápidamente antes de
que una desvergonzada creyera que estaba en juego. No es que lo quería ni
nada, pero ¿Por qué someterlo a eso? Algunas de las mujeres en el club no
serían tan respetuosas en su deseo de mantener las cosas en PG.
Cuando nos metimos a la pista de baile, me presionó cerca de él y
comencé a perderme en la música. El baile siempre comienza en las caderas.
Se mecen hacia atrás y adelante, igualando el ritmo de la canción. Lo seguí
con mis brazos y piernas. Traté de mantener una distancia de Jax, así que traté
de no frotarme contra él o hacer algo igualmente más torpe. Hacer algo tan
jugado lo haría pensar que estaba interesada. Al mismo tiempo, me aseguré de
que, supieran, que bailábamos juntos. Bueno, al ritmo que baila Jax.
No estaba bromeando; realmente no podía hacer nada para salvar su vida.
Sus piernas estaban totalmente rígidas y solo rebotaba en su lugar. Por lo
menos mantenía el ritmo de la música, que hacia las cosas un poco menos
tonta si nos miraban. Podría encubrir su falta de habilidad con mi cuerpo.
Un par de canciones, y me asombró que Jax se quedara en la pista de
baile por tanto tiempo. El club era su lugar. ¿Cómo podría no darle puntos de
felicitación por eso? Incluso puso sus manos en mis caderas, con agallas. Yo
lo miraba y sonrió, cerré los ojos. Sus ojos azules brillaban bajo el arreglo de
luces.
Inclinándose sobre mi hombro, me susurro al oído—: Creo que ese tipo
quiere bailar contigo.
—Mmm, ¿Qué tipo? —Casi ronroneo. Algo sobre el aliento cálido de Jax
contra mi oreja lo hizo agradable. Debo haber estado desesperada por alguna
atención masculina. Por otra parte, Jax estaba sexi cuando había olvidado el
aspecto de buen chico y se había enfocado puramente en su estética. Incluso
su voz era agradable. No demasiado baja, pero no demasiado alta tampoco.
Era suave también, entre arena o carraspera encontrándose.
Jax me miró hacia abajo, antes de señalar.
—A las tres en punto. El chico rubio platinado con camisa tipo de plata.
¿Rubio platino? Mi corazón comenzó a latir en mi pecho y no de lujuria.
Arriesgué un vistazo hacia donde estaba apuntando Jax y jadeé, murmurando
una maldición. Eli quedó observando cada movimiento en toda la habitación.
—Vamos —dije, tratando de mantener la calma y estar serena.
Jax frunció el ceño.
— ¿Qué pasa? Mira, si quieres bailar con otras personas, puedes hacerlo.
No me molesta. De todos modos me vendría bien un poco de agua. Es muy
bueno aquí.
Sacudí mi cabeza.
—No, está bien. Ya estoy bailando. Es tiempo de hacer lo que sea que
quieras hacer. Podemos coger un poco de agua en el camino.
—Mila...—Jax suspiró—. Bien, ¿Dónde está la salida? Las luces me
hacen confundir.
Las luces estroboscópicas estaban en pleno vigor entonces, y la niebla
comenzó a derramarse sobre la pista de baile. Revisé para ver si Eli todavía
estaba sentado al otro lado del club y descubrí que no estaba más allí. Eso
debería haber sido mi gran bandera roja, pero todo lo que podía hacer era
suspirar con alivio. Hasta que sentí que alguien agarraba fuertemente mi
brazo. Me acordé de esas manos callosas demasiado bien.
—¿Dónde te vas amor? —Eli se burlaba de mí.
Intenté alejarme de él.
—Estaba a punto de salir.
—Espero que no sea por mí.
—En realidad...
Jax colocó una mano suave en mi brazo, ligeramente por encima de
donde Eli me retenía. Su otra mano se cernía sobre el antebrazo de Eli.
—La puedes soltar. Estoy seguro de que eso es una forma de agresión.
No me gustaría tener que llamar a la policía y arruinarte la noche.
Eli había relajado su control sobre mí.
—Gracias. Claramente, ustedes dos se conocen. ¿Quieres que te deje a
solas así pueden hablar?
—Sí —Espetó Eli.
Al mismo tiempo yo grité—: ¡No!
Me aleje de él, Jax mantuvo una mano protectora en mi cintura.
—Lo que esté pasando entre los dos tiene que esperar otra noche,
entonces.
Eli se adelantó, con los puños apretados. Él se atrevió a levantar uno
como si fuera a golpear a Jax, pero luego se detuvo. Eché una buena mirada
alrededor de la habitación. Claramente, no había forma de poder realizar
cualquier tipo de agresión física. Los gorilas se abarrotan a lo largo de la
multitud en el club.
Inclinándose hacia mí, gruñó—: Has tenido suerte esta vez, pero voy a
decirle a Donovan que estabas aquí. Te encontraremos de nuevo —. Y luego
se marchó.
Mis rodillas se pusieron débiles y empezaron a ceder. Tropecé con Jax,
quién me había estabilizado con sus manos fuertes y firmes. A diferencia de
Eli, su piel se sentía suave contra la mía. No suave como de niña, pero era la
clase de tipo que no golpearía a otras personas, o haría males inconfesables
contra la sociedad. Bueno, Eli no era mal tipo. Hubo un tiempo cuando solía
disfrutar de su compañía, pero era un matón y probablemente siempre sería
uno.
—Siéntate y yo llamare un taxi —dijo Jax y me llevó hacia los sofás.
Encontró un asiento en uno de ellos lejos de la mayoría de la gente y me
ayudó a sentarme.
Suspiré y coloqué mi cabeza entre mis rodillas por un momento, con la
esperanza de despejar las sensaciones de mareo fuera de mi cabeza.
—Puedo caminar, te lo prometo.
—Necesitaremos un taxi para ir donde quiero llevarte. Es en el otro lado
de la ciudad y no quiero caminar tan lejos con este frío. —Me dio una sonrisa
y le di una pequeña de vuelta en un intento de ser educada. Sin embargo mi
estado de ánimo estaba roto en mil pedazos, para disfrutar de una cita.
Capítulo 5 Traducido por Walkiria
Corregido por Lexie
o abracé mientras subíamos en el taxi hacia donde Jax quería
llevarme. Una locura, lo sé, entrando en un coche con un chico
que apenas conocía, para ir a un lugar que podría haber sido donde
dejaba a todas sus víctimas. Al mismo tiempo, confiaba en él. Jax no me había
dado ninguna razón para no hacerlo, y ¿ya sabes cuándo algunas personas dan
muy buenas vibraciones, las personas que no matan a sus arañas, pero las
ponen en libertad? Jax era uno de esos. Con buena vibra, tal vez demasiado
buena, pero me sentía segura. Por supuesto, probablemente me habría ido con
cualquiera para alejarme de Eli, me asusté mucho. Sin embargo, también sabía
que Jax saldría de su camino para asegurarse de que yo esté segura. No ha sido
como esos tipos que necesitan abandonar, y necesitaba un sólido sentido de
seguridad.
—¿Así que puedo curiosear, o no? —preguntó Jax en voz baja. Se
presionó hacia el lado opuesto del coche y me miraba por la ventana. Su rostro
se apoyaba en la mano, con claras señales de que estaba en el modo de
pensamiento profundo.
Suspiré.
—No tienes que indagar mucho tampoco. No hay mucho que contar
—Tenías miedo de él. Hay mucho que contar. ¿Debo llamar a la policía?
—No —Sacudí mi cabeza—.Eso probablemente empeoraría las cosas.
—Sería lo mejor.
—No —repetí firmemente—, Eli... No creo que en realidad lo hubiera
hecho si hubiera ido a hablar con él. Fue una de esas conversaciones que me
gustaría ahorrarme hasta más tarde. No es él quien me da miedo.
L
Jax me miró más de cerca.
—¿Hay más tipos aparte del que me enfrentó?
—Sí.
—¿Ex novios? ¿Voy a tener que pelear contra todos?
Esnifé en el pensamiento. No había ninguna duda en mi mente de que Jax
trataría de luchar y defender mi honor. Algo me dijo, sin embargo, que podría
estar tirado en el suelo después de 10 segundos. También odiaba cómo dijo ex
novios3 como si yo fuera una especie de descarada.
Fruncí los labios juntos, y me acerqué una rodilla hasta el pecho.
—Sólo tengo un ex novio, y su nombre es Donovan.
—¿Cuál es la historia con Eli?
—Es el mejor amigo de Donovan. Por supuesto, una vez intentó tener
algo conmigo mientras Donovan estaba en la cárcel, Pero…
—Espera, ¿tu ex novio estaba en la cárcel? —Jax parpadeó.
Rodé mis ojos.
—Sí, estuvo en la cárcel durante dos años. ¿De acuerdo? No todos
pueden ser perfectos como tú.
Sostenía sus manos juntas.
—No lo juzgo, necesariamente, pero no me ayuda a sentirme mejor
acerca de tu seguridad ahora.
—Estoy bien —murmuré.
—No te ves bien. Te ves un poco alterada, en realidad.
Suspirando, incliné la cabeza contra la ventana y miré las luces al pasar.
Los rascacielos del centro de la ciudad relucían en su resplandor.
3 Ex novios: En inglés novio es boyfriend. Boy- chico, friend- amigo, el da a entender que el tiene ex
“amigos” con derechos.
—Donovan y yo nos conocimos en la Universidad. Fue lo
suficientemente amable al dejarme sentarme con él en la cafetería ocupada, un
día cuando todo era una locura. Ya sabes, una de esas personas que toman
toda una mesa para cuatro con todos sus deberes. El hizo un espacio y nos
pusimos a hablar, una cosa llevó a otra, y bla, bla, bla….
—Se enamoraron y todo estaba bien en tu mundo. —Jax lo dijo
tranquilamente, y odiaba la tristeza en su tono. No pidió que continuara, pero
sabía que debía hacerlo. Había abierto la caja de Pandora.
—Las cosas estuvieron bien por un tiempo. Después de cuatro o cinco
meses, empezó a ponerse un poco más agresivo conmigo. No necesariamente
físicamente, pero definitivamente verbalmente, e intentó presionarme a hacer
cosas. —Miré a Jax, tratando de conseguir una lectura en cuanto lo que decía.
Estábamos en la primera cita. Derramando nuestras historias de vida, lo que
no es generalmente una buena idea. Al mismo tiempo, confiaba en él, y la
relación probablemente no iba a ir de todos modos más allá de la condición de
amistad. No había mucho que pudiera hacer o decir para hacernos más
incompatibles uno con el otro.
Tomé una respiración profunda y continúe.
—Una noche finalmente cedí, pero luego cambié de opinión. No importa
y... bla, bla, bla, inserté la tragedia allí.
La mirada de Jax se endureció y su mandíbula estaba tensa. Podía incluso
ver la ira destellando en sus ojos.
—Así que te violó, básicamente.
—Violación, creo que es el término técnico. No luché con uñas y dientes
cuando tomó su decisión.
—Todavía cuenta como violación.
—Lo sé, y he llegado a entenderlo con lo que pasó hace mucho tiempo.
Y no era a la única que le hizo esto, porque mientras estuvimos juntos, decidió
obligar a otra chica en una fiesta. Sólo que no era una gallina, y ella presentó
cargos —expliqué en voz baja.
Jax nunca dejó de mirarme, y era un poco raro.
—Y eso explica la parte de la cárcel.
—Muy bien —Le di un gesto un poco sarcástico con los pulgares—.
Donovan estaba muy enojado porque me deshice de su trasero. Eli sintió que
debía arreglar las cosas y lo arreglé. Eso es lo que el amor verdadero hace,
¿no? Y ahora Donovan cree que realmente me ama.
—¿Lo suficiente como para hacerte daño, humillarte y engañarte? No
sabía que esas eran las cosas que uno hace por alguien que ama.
—Fue impactante para mí también. —Y no sabía cómo comunicarle a
Jax que no quería hablar de ello sin ser tan grosera. Ya había hecho mi tiempo
en terapia y sí, era un buen chico, pero no quería pasar mi tiempo centrándome
en los horrores del pasado. Estábamos en una cita y no necesitaba hacerlo
saltar y ser el héroe por mí.
Debe de haberse decidido a hacerlo de todos modos porque me alcanzó
por encima y colocó una mano suavemente sobre mi brazo.
—¿Va a venir a buscarte, Mila? ¿Necesitas algún lugar más seguro para
pasar la noche?
No pedí ayuda, pero me reí.
—¿Besarse en la primera cita es inútil, pero invitarme a quedarme en tu
casa no?
Resoplando, Jax me soltó como si estuviese hecha de fuego y lo hubiera
quemado.
—En realidad, número uno: pensaba en conseguirte una habitación en
algún lugar fuera del radar así no tendrías que preocuparte por dormir con un
ojo abierto. O, al menos, podría llamar a Morgan y ver si tiene alguna idea.
—Claro, claro. ¿Qué estaba pensando? —Rodé mis ojos—. El Sr.
Perfecto no soñaría con tenerme de una manera escandalosa. —Y por alguna
razón, sentí en mi pecho un dolor ante la idea de que él no estuviera interesado
en mí lo suficiente como para querer dormir conmigo. ¿Era enorme o algo así?
¿Por qué no querría estar conmigo o bien pasar una noche? Yo debo haber
estado ceñuda, porque movió la cabeza con una mueca bastante disgustada en
su cara.
—Mila, no tiene nada que ver contigo. Eres hermosa. Simplemente no
me gustaría dejarme vagar por ese camino, especialmente en la primera cita.
—Estoy sorprendida de que tú no quieras pasearte por este camino. —
Las palabras sólo salieron de mi boca antes de que ni siquiera pudiera pensar
en lo que estaba diciendo.
Estoy segura que lo hizo enojar, porque su mandíbula estaba apretada
otra vez y tenía los puños en su regazo.
—No me hables así, porque tengo las normas de la moral por encima de
la mayoría de los hombres en el planeta.
—No me refiero a ti. Solamente no puedo decir que haya conocido a un
chico virgen con dieciocho años, y mucho menos con más de veinticinco.
Él suspiró.
—Sigues escrutando y te diré cuando aciertes.
—¿Perdón?—pregunté.
—Haces muchas suposiciones. ¿Te han dicho alguna vez eso? —Espetó
Jax. Estaba mucho más enojado de lo que esperaba.
Por un momento lo miré sin pestañear.
—Algunas personas pueden haberlo mencionado una vez o dos veces.
Pero me gusta pensar que es como hacer una conjetura.
Movió la cabeza.
—Estás equivocada. —Suspiró, y su cuerpo se relajó. Él movió sus
manos sobre sus rodillas y las golpeó. Veía su cara arrugarse, casi podía ver
los engranajes rodando dentro de su cabeza.
—¿Por qué piensas eso, de todos modos? —preguntó.
—Te ruborizas con facilidad, crees que besar es inútil, y vas a la misma
iglesia con Morgan. Sólo la he visitado una vez, y sé a ciencia cierta que están
en ese grupo esperando lo del matrimonio —dije con un pequeño
encogimiento de hombros—. Es razonamiento deductivo. Además, sé
demasiado como para estar al tanto de que has estado solo durante la mayor
parte del nuevo milenio.
Asintiendo, me miró y comenzó a hablar una vez que nuestras miradas se
encontraron.
—En primer lugar, no creo que besar sea inútil. Era una broma. Creo que
lo aclaré antes. En cuanto a mí y a mis creencias religiosas, sí, tal vez quiero
esperar hasta casarme —Se detuvo—. Un chico ruborizado, eso no es extraño.
—Es raro.
—No, no lo es. —Él frunció el ceño.
—Lo es, pero tal vez no para los nerds. No puedo decir que sé mucho
sobre ellos.
Jax rodó sus ojos.
—Me estas estereotipando otra vez, pero al menos esta vez estás más
cerca del camino correcto.
Sonrió.
—La otra cosa que me pregunto es que no pareces ser del tipo que alguna
vez ha tenido una novia. Ahora que lo pienso, tampoco pareces del tipo que
hace de soporte toda la noche.
—Razonamiento deductivo —Se encogió de hombros—. ¿Recuerdas tu
comentario acerca de cómo he estado solo durante la mayor parte del nuevo
milenio? ¿Notas como eso no significa todo? Por supuesto, que he tenido una
novia, eso fue antes de que comenzara a trabajar para mi padre. En el ojo
público, debo aclarar, porque trabajé con mi padre detrás de las escenas sólo
por diversión y sin goce de sueldo. Hemos desarrollado un montón de cosas
juntos cuando estaba en la secundaria, pero no quise quedarme atrapado en los
medios de comunicación hasta que pensé que tenía edad suficiente como para
tomar una decisión por mí mismo. Mi hermano ya estaba causando sensación
con la prensa con sus suntuosas fiestas.
—Sí, cada fin de semana hay un nuevo chisme acerca de sus fiestas en
otro país. —Le ofrecí una pequeña sonrisa. No es que sea una lectora del
periódico sensacionalista, en lo más mínimo, pero son difíciles de no notar en
la caja del supermercado.
Él se rió.
—Kevin tiene su propia revista de viajes ahora, en realidad. Eso en parte
por qué documenta todas sus aventuras tan bien en los sitios de medios
sociales. Es lo suyo. Me gusta mucho más que lo que hace mi hermana en su
tiempo libre. Claro, gasta mucho dinero, pero siento que está recibiendo algún
tipo de experiencia cultural, en lugar de sólo conseguir estar borracho.
—Si tuviera esa cantidad de dinero, querría ver el mundo —admití—. Y
no sólo verlo, sino vivirlo.
—Me gustaría hacer lo mismo, pero soy mucho más discreto en ello.
—Me di cuenta —dije con una pequeña sonrisa—, no plagas los
revisteros o los temas en los medios sociales muy a menudo. La que me
preocupa más es tu hermana.
Jax sonrió tristemente y miró hacia abajo sus manos.
—Es mucho más joven que yo. Espero que crezca un poco, antes de que
se meta en problemas.
El taxi se detuvo frente a un rascacielos. Jax había pagado al conductor,
luego salió y abrió la puerta de mi lado del coche. Me ofreció la mano, se la
tendí y me bajé con cuidado. Miraba hacia arriba al edificio y noté que
estábamos frente a la oficina principal de Gizmo Corp.
Capítulo 6 Traducido por Walkiria
Corregido por Pily
—¿Presumiendo tu lugar de trabajo? — Bromeé.
Con una sonrisa tímida, me escoltó al lado del edificio. El exterior,
incluso por la noche, era un espectáculo para la vista. Era el más alto de todos
los rascacielos en el centro. Las luces lo hacían parecer como si fuese una
fuente. La parte superior era de un blanco brillante, y gradualmente a lo largo
del edificio el color se iba convirtiendo en un azul profundo, oscuro. Precioso.
A pesar de la altura, no me importaría trabajar en un edificio tan increíble en
lo más mínimo.
Una vez dentro de Gizmo Corp, casi me detuve en la puerta por el aire.
La primera cosa que noté fue el mármol blanco en el piso y las columnas de
apoyo por la puerta principal. El oro adornaba las ventanas y cada cosa
metálica en la entrada. Podría haber sido falso, pero sabiendo cuánto dinero
hacia Gizmo Corporation cada año, no me sorprendería si era real. Un grupo
de sirenas formaban la pieza central de una gran fuente que era apagada por la
noche. La iluminación era tenue a excepción de unas pequeñas luces en la
recepción. Un oficial de seguridad estaba sentado leyendo un libro. Al parecer,
Jax no le pagaba al tipo demasiado dinero, porque parecía como si fuera un
vago.
El guardia nos miró desde arriba, preparándose para protegernos.
Jax le mostró su placa al empleado mientras caminaba hacia el
mostrador.
—Soy yo, Bernie. ¿Por qué no estás en casa con tu esposa? Pensé que
dijiste que tenías grandes planes para las vacaciones.
Riendo, el guardia le entregó un listado. —No celebramos el día de San
Valentín en la actualidad. Todo está tan atareado; que es más fácil salir más
tarde.
—Al menos deberías recordar llevarle algo a casa —dijo Jax. Firmó en el
listado y luego se lo devolvió. —No creo que vayamos a estar mucho tiempo.
—Bueno, usted puede quedarse hasta tan tarde como quiera, jefe. Los
únicos aquí que me hacen compañía son el personal de limpieza —dijo
Bernie.
Jax lo saludó. —No me digas lo que sucede en el libro. Voy a ponerme a
leerlo uno de estos días. —Me llevó hasta el ascensor a la vuelta de la esquina,
colocando una mano en la parte baja de mi espalda. Apenas pude sentirlo. Jax
no debía estar seguro de si era una manera apropiada que me toque o no. No
me hubiera importado, pero probablemente era mejor no hacerlo. A mi lado
vulnerable podría gustarle demasiado, y desde que tuvimos esa conversación
en el taxi, definitivamente me sentía vulnerable.
—¿A qué piso estamos yendo? — pregunté.
Él me movió a un lado, sacó una llave del bolsillo de su abrigo y la
introdujo en el ascensor. Este tipo de cosas sólo deberían suceder en el cine.
Después de que la llave fue dada vuelta, presionó uno de los botones
inferiores. Podía ser honesta y decir que estaba feliz de estar aquí. He oído
mucho sobre la plataforma de observación en la parte superior del edificio de
Gizmo. Se supone que es hermoso y en un día despejado se puede ver
supuestamente la mayor parte del estado. Desafortunadamente, probablemente
estaría demasiado paralizaría del miedo para disfrutar el momento.
El ascensor era poderoso. Tardaba unos tres segundos en bajar varios
pisos. ¿Cuántos? no podía estar segura, porque no había ninguna indicación en
la pantalla.
Me reí nerviosamente mientras las puertas se abrieron y nos metimos
hacia fuera en un llano y oscuro pasillo. —¿Es este tu laboratorio secreto?
—Algo así. —Jax presionó el interruptor de encendido y caminó por el
pasillo hacia una puerta cerrada. Analizó su tarjeta, y la puerta se deslizó
abriéndose.
Hice un puchero. —Estoy decepcionada, esperaba que te revisara el iris
de los ojos o tus huellas.
Se rió. —No soy un espía. Además, he diseñado la tarjeta. Es
prácticamente imposible copiar el código.
—¿Voy a ver algo aquí que potencialmente me podría matar?
—No, dejo todas esas cosas en mi otros laboratorios secretos —guiñó el
ojo—. Hago computadoras y teléfonos. Sí, hay algunas cosas que quiero
conservar en secreto, pero puedes relajarte. Todos esos guardias, se quedaran
aquí durante toda la noche. No hay acuerdos de confidencialidad, no hay
amenazas de muerte. Sólo somos nosotros.
Entramos y fuimos recibidos por una dulce voz, melódica yfemenina.
— Buenas noches, Jackson y su invitado.
—Buenas noches, Vanessa —dijo Jax en una voz tranquila —mi
asistente computarizado. Espero poner una versión de ella en el nuevo modelo
de teléfono.
—Eso no es nada nuevo — dije. Los teléfonos de Gizmo Corp tenían un
Asistente informático programado hace tiempo en sus discos duros.
Se rió. —Francesca es muy diferente a Vanessa. Ella no es muy especial.
—Me alegro de que esté satisfecho con mis servicios señor. ¿Usted me
compartirá en sus nuevas unidades? —preguntó Vanessa. No voy a mentir, era
raro tener un ordenador escuchando nuestra conversación y haciendo
comentarios.
—Nunca, Vanessa. Siempre serás mía —dijo en un tono juguetón.
Doblé mis brazos delante de mi pecho. —¿Tengo competencia ahora?
Una de sus cejas se elevó y sus ojos azules se ampliaron con sorpresa por
un momento. —¿Pensé que habías dicho que no tenía oportunidad contigo?
¿Uy, había dicho eso, no? Lo recordé rápidamente. —Hipotéticamente.
—No, Vanessa y yo somos estrictamente profesionales. Ella tiene una
relación a largo plazo con Michelangelo.
—¿Has creado a un acompañante de computadora para ella? O sólo
inventaste ésta loca historia para su personaje, porque fue un día aburrido, y
en realidad no existe.
Jax curvó un poco su labio inferior y se dio vuelta lejos de mí. Estoy
segura de que él estaba sonrojado. —Un poco de ambas partes. Michelangelo
existe. Es el prototipo para el nuevo asistente en los siguientes teléfonos. Me
gustaría ofrecer una opción para los usuarios masculinos y femeninos. Sin
embargo, creé una pequeña historia entre los dos sólo porque era un día
aburrido. Para tu diversión y risas, cuando un teléfono asistente masculino
enlaza con una hembra, podrán realmente flirtean con el otro. Esa parte está
un poco fallada, sin embargo. Es una de las características que estamos
estableciendo en el nuevo lanzamiento. Si tengo que guardarlo para la próxima
vez, lo haré, pero creo que sería divertido.
Asentí. —Definitivamente deberías hacerlo, eso es seguro. Quizá sea un
poco una función innecesaria, pero sería divertido jugar y haría el trabajo
menos aburrido. Me gusta que estés pensando en los usuarios femeninos. Es
decepcionante no tener un asistente masculino sexy hablándome en el
teléfono.
—He oído esa queja un par de veces, en realidad. Atendemos las
sugerencias que recibimos de los usuarios —sonrió—. Vanessa, por favor,
enciende las luces en el estudio siete.
—Por supuesto, señor —dijo Vanessa.
Levanté una ceja. —¿Estudio siete?
—Es una de mis salas de presentación —explicó Jax—. Tú me mostraste
lo que te gusta hacer para divertirte, así que pensé que haría lo mismo contigo.
Me llevó a su laboratorio, y no podía evitar fijarme como el lugar estaba
impecable. Estoy segura de que podría duplicarse, como una sala de
operaciones, estaba tan limpio. Es espeluznante. Los lugares estériles siempre
me ponían nerviosa, generalmente porque tenían una asociación con la muerte
y la enfermedad. El estudio siete, sin embargo, no me dio el mismo tipo de
vibración. Aunque estaba limpio, no me hacía sentir mal, porque me hacía
pensar en un teatro de lujo en lugar de un hospital. Sólo había sillas. El techo
también era alto y redondeado. Cada pared contaba con una pantalla. No podía
dejar de preguntarme qué tipo de presentaciones a Jax le gustaba dar dentro de
la habitación.
—Adelante y ponte cómoda donde desees. —Caminó hasta el centro de
la habitación y se volteó para abrir un ordenador portátil. Pronto sus dedos
fueron golpeando las teclas con velocidad y gracia—. Siéntate, acomódate,
acuéstate, es todo lo mismo, solo asegúrate de mirar hacia arriba y cerrar los
ojos hasta que te diga que los abras.
Eso me dio curiosidad. Hice lo que me dijo; decidí acostarme para
conseguir el efecto completo de lo que fuera que iba a ver. La sala se llenó con
un zumbido tranquilo, noté que las luces se apagaron por un momento, y luego
se encendió otra cosa en su lugar. Con los ojos cerrados no lo podía ver, pero
me daba cuenta porque el contraste entre la luz y la oscuridad eran diferentes.
—Está bien, puedes abrirlos — dijo.
Abrí mis ojos y miré hacia arriba con temor, allí estaba el más hermoso
cielo estrellado. Como si estuviera acampando o saliendo en medio de la
noche cuando el cielo está despejado. ¿Has notado cómo hay millones de
estrellas allá arriba, y cómo puedes ver perfectamente el contorno de la vía
láctea? Eso es lo que estaba viendo. Una réplica exacta de un cielo nocturno
perfecto.
Jax se sentó a mi lado. —Vengo cuando quiero pensar. Es simplemente
relajante. Hay algo humilde y calmante sobre la naturaleza.
—¿Incluso en la naturaleza artificial?
—No es lo mismo, pero es algo. —Se encogió de hombros y luego sonó
sus dedos. La escena de arriba cambió. Era similar, pero ahora en lugar de
sólo el cielo nocturno, las luces del norte estuvieron presentes también.
—Nunca las he visto en persona —admití.
Se rió. —Tampoco yo. Sería bueno tratar de detectarlas algún día —me
miró—. ¿Algo que quieres ver en particular?
—¿Cualquier cosa? —pregunté.
—Dentro de lo razonable, pero sí, puede ser cualquier cosa.
Pensé por un momento. —El fondo del océano.
—Es un poco oscuro, pero tengo una idea. —Sonó los dedos otra vez. La
pantalla cambió a una jungla. Otro complemento y estábamos en una playa.
Una vez más y estábamos bajo el agua observando un enjambre de peces en
un arrecife de coral. Los colores eran tan vivos y la pantalla tan refinada, que
pensé que podrían ser reales.
—¡A todo esto le falta 3D! —Me maravillé.
Me dio una pequeña sonrisa. —No quise abrumarte con esa
característica. Además, ¡no te he mostrado todos mis trucos todavía!
Palmeé el lugar junto a mí, instándole a recostarse. —Claro, ya me lo
mostrarás en otro momento.
—¿Vas a mantenerme a tu lado, eh? —Se rió.
—Te dije que no funciono bien románticamente. Pero eso no significa
que no nos podamos llevar bien como amigos. —Jugueteé con mis manos.
Su mirada se posó sobre mí; Pude sentirlo sin tener que mirar. No quería
mirarlo, porque sus ojos eran tan azules y hermosos. Podría haberme
desvanecido, porque el ambiente era muy bueno.
Después de un minuto de sólo escuchar el zumbido del proyector, Jax
habló. —Creo que tenemos más en común de lo que crees, Mila.
—Tú eres un nerd.
—¿Entonces? No actúes como si no hubiese una tarjeta de compra de
cómics en tu bolso. Yo la vi. Vi un montón de cosas que sugieren que no eres
tan genial como pretendes ser. Además, incluso si soy un nerd, no por eso
somos incompatibles. Tener distintos intereses no es una sentencia de muerte a
una relación.
—He matado a muchos de los míos —murmuré.
Se rió. —Sin ofender, pero parece que has salido con los perdedores en el
pasado.
—¿Y qué te hace pensar que eres un ganador? —Lo reté.
—Sólo tendrás que decidir si vale la pena descubrirlo o no — respondió.
Gruñí un poco. —Muy bien, ahora estás muy tímido y misterioso
hablando de mí. Lo que hace que mi corazón se acelere. Porque una chica no
quiere saber si un hombre merece la pena o no, nunca.
—Todo lo que digo es, no creo que pudiera mostrarte todo sólo por esta
noche. Esa es una razón por la qué odio las primeras citas. Es la única
oportunidad para tratar de hacer una buena impresión, pero si la gente tiene
expectativas poco realistas, es casi imposible golpear la barra.
—¿Así que mis expectativas son irreales? —Solté una carcajada ante la
idea—. Lo único que esperaba era que seas lindo y no una bola de lodo
grasoso. Bueno, tal vez un poco peligroso, pero hay una diferencia entre vivir
en el borde y ser un pervertido, desesperado, e imbécil.
Él miró. —Creo que pasé entonces. Tal vez sólo estoy ofendido por tu
postura anti-nerd.
—No soy anti-nerd. Haces un montón de cosas buenas para la sociedad,
y he llegado al punto hace un momento de que algún día gobernarás tu tipo de
mundo. —Me detuve mientras traté de pensar en la manera correcta de
expresar todos mis temores sobre Jax abierta y honestamente—. Lo nerd es un
defecto. Pero ese no es el problema. Es el perfeccionismo el punto.
—Morgan dijo que tal vez tengas problemas con eso —murmuró—. No
te ofendas Mila, pero ¿con cuántos chicos malos te has metido?
Levanté las manos a la defensiva y me senté. —Sí, lo sé, yo salgo con un
montón de chicos que son unos idiotas impresionantes. Pero no he salido con
muchos chicos, espero que lo sepas. Serías el número tres. Donovan es el
único hombre con el que he estado íntimamente, si se puede llamar así, y con
el otro que salía apenas si cuenta como una experiencia de relación. ¡No me
hables como si fuera una especie de inconsolable desvergonzada!
—Lo siento, eso no es lo que pretendía hacerte entender. Mi punto es...
—Agarró mi mano y el toque casi me obligó a mirar hacia abajo— Los
buenos también conocen la aventura. Podemos proteger, prevenir y ser todo lo
que es un chico malo. La única cosa que no será igual es el tipo de angustia.
—No prometas algo que no estés seguro que puedas cumplir. Incluso el
más amable puede meter la pata y herir a otros. —Me enfurecí.
—No dije que un buen tipo no va a hacer daño. Las chicas buenas
también pueden ser hirientes. —Exhala profundamente—. Pero un hombre de
verdad va a hacer todo lo posible para asegurarse de que eres feliz. Luchará
para ti, por la relación, y él definitivamente nunca te obligará a hacer algo que
no quieras. Las malas personas sólo se preocupan por ellos mismos y por
mantenerte cerca hasta conseguir lo que quieren. ¿No quieres estar con alguien
que no te trate como una cosa?
Puse mis rodillas contra el pecho. —Por supuesto que sí. Entiendo lo que
dices, Jax. Tienes una gran lógica que es difícil discutir. Si piensas que
puedes ajustarte a esto, te reto a intentarlo.
Se rió. —He estado tratando. Cuando tu mente está atrapada en algo, es
difícil de cambiarla. ¡Realmente eres terca!
—¿Lo que Morgan te ha estado diciendo de mí? —Rodé los ojos ante la
idea de los dos chismorreando sobre mí. Ella sin duda le había contado todo
sobre mis pecaminosas actitudes. Créeme cuando te digo que a mi parecer
debería ser quemada en la hoguera, porque hago cosas raras cuando bebo, juro
y bailo con algunos chicos en los clubes los fines de semana. Además, mi
último gusto para los hombres no era exactamente un brillante ejemplo de
comportamiento maduro, pero no puedo evitar que me atraigan.
Se sentó lentamente. — Me dijo que eras terca y valiente, pero que no
dejara que tu lado brusco me alejara. Eso es todo, a pesar de lo de miss
perfeccion. Me advirtió que podrías ser aprensiva porque soy bueno. Luego
balbuceó algo, pero no le hice caso, como ella pensaba. No le digas eso. No
quise ser grosero y generalmente no lo soy, no quería tener mucha
información antes de tiempo. Eso no me parece justo ya que sabes muy poco
de mí. Además, quería ser sorprendido.
—Me gustan las buenas sorpresas.
—Igual. ¡Mira! Otra cosa que tenemos en común. —Guiñó el ojo—. No
quiero presionarlo para que me gustes. Honestamente no es algo que haga.
Pero tengo esta sensación, sin embargo, de que estás tratando de inventar
excusas para no darme una oportunidad. Por favor, suelta cualquier tipo de
concepto erróneo que tengas y sigue a tu corazón. Yo voy a hacer lo mismo.
Mi corazón ha sufrido mucho, así que sólo esta tan asustado como el tuyo en
abrirse y sentir de nuevo. Tal vez al final de la noche no conectamos de todos
modos. Dale una oportunidad justa. Eso es todo lo que quiero. Es lo que te
estoy dando a ti.
Cuando un chico derrama su alma, es difícil que no se convierta en un
charco viscoso en el interior. Algo acerca de su tierna vulnerabilidad, suavizó
mi corazón herido, hasta el punto donde por un momento pensé en aceptar su
aparentemente sencilla petición. Darle una oportunidad justa era lo correcto.
Lo supe muy en el fondo, dentro de mí. Lo correcto nunca fue fácil para mí,
sin embargo.
Asentí de todos modos. —¿Voy a hacer lo que pueda. Trato?
Capítulo 7 Traducido por Lililamour
Corregido por Walkiria
espués de haber terminado en el laboratorio "secreto", Jax cerró,
firmó nuestra salida, y me llevó de regreso a la puerta lateral.
—En algún momento te puedo dar un tour completo del
edificio. Si gustas, quiero decir. —Sostuvo la puerta abierta para mí para que
pudiera salir primero.
—Podría ser interesante —dije. No quiero animar una amistad con él.
Sería genial pasar el rato con él de nuevo en algún momento, y también sería
bueno tener más amigos en común como Morgan. Ya que no pasábamos
mucho tiempo juntas. Ella tenía su vida y su familia, y yo tenía la mía, una
vida que es, sin muchas visitas en mi departamento, aparte de mis padres y
hermanos. Nada de gente con la que pasar el rato de una manera habitual. Jax
sería un buen intermediario entre Morgan y yo siempre y cuando ella decidiera
no "sermonearme". Me sorprendió que no lo hubiera intentado ya, porque
estoy bastante segura de que una de las razones por las que Morgan nos
presentó era para él que pudiera "salvar mi alma".
Me miró por encima. —¿Estás bien?
Asentí. —No veo por qué no debería estarlo.
—Te quedaste tan callada y retraída de repente, que pensé que debería
preguntarte —dijo—. No sabía si te había ofendido de alguna manera allá en
el estudio. Si es así, no fue mi intención. A veces me apasiono por cosas que
no son mi asunto.
Negué. —No estoy ofendida, así que no te preocupes por eso. Encuentro
interesante que estés tan apasionado por mi vida amorosa.
Se encogió de hombros, con una pequeña sonrisa asomándose en sus
labios. —No me gusta ver a nadie innecesariamente herido, pero parte de eso
también es una motivación egoísta. Uno de mis mayores fastidios es la gente
D
que piensa cosas de mí que no son verdad, y no se molestan en llegar a
conocer mi verdadero yo. Tal vez eso es mucho pedir dado mi estatus de
hombre de mundo.
—A nadie le gusta ser juzgado. No es pedir demasiado —murmuré.
Guau, me sentí como una hipócrita. Le di aflicción por juzgarme y yo hice lo
mismo con él.
—Me alegro de tenerte de mi lado.
—Mi opinión no vale mucho con los medios de comunicación.
—No me importa lo que piensen los medios de comunicación. Ya
escriben lo que quieren de mí. Algunas personas piensan que soy mentalmente
inestable y es por eso que me escondo mucho. Otros piensan que tengo una
amante secreta escondida en mi sótano. —Se rió, intensamente y por largo
tiempo—. De las personas de verdad, por otra parte, sus opiniones son
significativas.
Puse mis manos dentro de mis bolsillos, pensando en todo lo que estaba
diciendo. ¿Cómo se mantenía tan anclado con todo lo que sucede a su
alrededor? Sus hermanos eran del tipo problemáticos. Si mis hermanos
hicieran algunas de las cosas que su hermano y hermana hicieron, estaría
enferma de preocupación. Eso sin mencionar que sus padres estaban
divorciados, y que su padre era una especie de idiota de piedra, por todos los
reportajes que he visto. El chico no salía en público a menudo, pero cuando lo
hacía mostraba poca emoción. No puedo decir que he visto algo acerca de su
madre. El dinero fácilmente echa a perder a la gente al parecer.
Con el ceño fruncido, hice una pregunta que me sorprendió incluso a mí.
—¿Cómo es que un tipo como tú ha estado soltero por tanto tiempo? No
tiene sentido. Seamos sinceros, estás más cercano a lo perfecto de lo que un
hombre podría llegar.
—Yo no iría tan lejos. —Dio una sonrisa que sonaba nerviosa y pasó una
de sus manos a través de su cabello antes de también colocar sus dos manos
dentro de sus bolsillos—. No veras mis defectos en la primera cita. Si crees
que soy cercano a la perfección, debo estar haciendo algo bien.
—Todavía no has contestado la pregunta. Vamos, me abrí
completamente ante ti —bromeé. No es como si quisiera presionarle
exactamente, pero es sólo que parecía justo que obtuviera por lo menos un
poco de su historial de citas. Además, quería saber más sobre esta muchacha
con la que intimó. El hecho de que incluso había estado con una mujer me
desconcertó porque las buenísimas vibraciones eran muy fuertes con él.
Jax se mordió el labio inferior. —Me parece justo. Estoy soltero porque
es difícil para mí encontrar una mujer que esté genuinamente interesada en mí.
La mayoría de ellas sólo quieren el dinero y la fama. Antes estaba en la carrera
del soltero más codiciado, y tenía mi novia del instituto. Eso no funcionó muy
bien cuando nos graduamos porque ella quería pasar al siguiente nivel y yo
estaba decidido a seguir esperando.
—¿Ella quería el anillo en su dedo, y tú no estabas listo para eso? —Qué
típico.
—No, ese no fue el problema. Yo estaba listo para esa parte de la
relación, pero éramos tan jóvenes. Sabía que iba a decir que no si le pedía que
se casara conmigo. Ella había dicho varias veces que no quería casarse hasta
después de la universidad, y que no quería un compromiso largo. Respeté sus
deseos. Ella no respetó los míos. —Suspiró—. Mi fe es importante para mí, y
por eso, yo quería esperar hasta que me casara. Quería ser ese buen chico que
al parecer crees que ya soy.
Procesé esa información. —¿Ella te dejó porque no estabas listo para
tener relaciones sexuales? —Parecía una locura para mí.
Jax me miró. —Básicamente, pero fue un poco más complicado que eso.
No estábamos en la misma sintonía con todo, es a lo que se redujo. Ella quería
que nuestra relación progresara y creía que significaba que deberíamos ser
más físicos. Mis puntos de vista eran diferentes. Ella cambió, yo también lo
hice, y así que terminamos poco después de que comenzara la universidad.
Naturalmente, estaba bastante afligido por todo el asunto. Quiero decir, pensé
que iba a casarme con esta chica. En mi triste estado de ánimo, me mezclé con
la multitud no tan agradable de la escuela y me sumergí en la escena del beber.
Y eso explicaba por qué no bebió nada de alcohol en la cena o en el club.
Todo encajaba, pero todavía tenía curiosidad en cuanto a dónde su historia
terminaría. Estaba al borde de mi característico asiento.
—Hubo una chica que conocí —continuó—. Era de último año, y estoy
bastante seguro que sólo estaba saliendo conmigo por mi dinero. Estaba
sinceramente demasiado ebrio para que me importara. Ella fue la mujer con la
que intimé. Mi fe ya no me importaba tanto. Las razones de mi celibato no
estaban bien. No quiero decir que desear esperar para agradar a Dios es una
cosa mala, pero es mucho más fácil e importante cuando entiendes por qué.
¿Eso tiene sentido?
Asentí. —Es bueno saber por qué estás llevando cualquier tipo de
tradición a la práctica.
—Exactamente, y para mí, en ese momento, no tenía sentido. No veía el
punto. Durante la mayor parte de mi primer año estuve borracho y no me
importaba nada más que sentirme bien. Rompí con la mujer mayor bastante
rápido, hice la cosa del sexo telefónico por un tiempo, y luego una vez que
logré enderezar la cabeza todo terminó. —Cerró los ojos—. No habría sido
capaz de hacer nada de eso, regresar a ser quien era sin la ayuda de Morgan.
Es por eso que le debo mucho, porque ella básicamente salvó mi vida. A
veces, todavía me siento avergonzado y apenado por todo lo que sucedió. Me
tomó mucho tiempo perdonarme por haber sido tan estúpido. Puedo ser un
chico, y puedo tener necesidades, pero tengo un corazón también. El amor es
importante, y lo mismo el ser necesitado y querido por alguien. Todo es
naturaleza humana básica. No debería haberme conformado con menos.
Con cierta vacilación, enrollé mi brazo en el de él, esperando ofrecer
algún tipo de consuelo. —Estabas tratando de llenar un hueco. Nadie puede
culparte por eso.
—No, supongo que no. Una vez que vi qué tipo de destrucción me estaba
haciendo, regresé al contacto con mi fe. Al hacerlo, aprendí mucho sobre mí
mismo y por qué tenía que hacer ciertas cosas para cuidar de mí. Me dediqué
de nuevo a mí, a mi Dios. Es difícil, la cosa del celibato, pero lo entiendo
ahora. Ser uno con alguien, incluso si no lo amas, te cambia. Una parte de ti es
llevada por esa persona. No quiero seguir entregando partes de mí y ser un
rompecabezas inservible.
Una vez más, tuve que absorber sus palabras. Eran sabias, hermosas y
dolorosas a la vez. —Es tu manera de protegerte. Estás poniendo una
protección.
Dio un ligero movimiento de su mano. —Me dije hace mucho tiempo
que no iba a cometer los mismos errores dos veces. Me respeto mucho más
que eso. Es insultante que las mujeres piensen que los hombres sólo están
interesados en las necesidades carnales.
Miré hacia él. Toda la historia me impactó. Nunca habría pensado que
era capaz de semejante cosa, pero sólo sirve para demostrar que cualquier
persona, no importa qué tan buena sea, puede caer a lo largo del camino. Él
estaba tan roto y asustado como yo. No hace falta decir que me sentí
comprendida.
—¿Así que realmente vas a esperar hasta que estés casado la próxima
vez? Eso es un poco loco y dulce al mismo tiempo. Quiero decir, ahora que
has explicado por qué lo quieres —dije al fin.
—Sí, no soy un beato lavador de cerebros de la Biblia. —Guiñó un ojo—
Lo prometo. Por supuesto mi fe me ha influenciado. Estaría mintiendo si
dijera que no lo ha hecho, pero soy una de esas personas que le gusta entender
por qué está haciendo las cosas en lugar de seguir un montón de reglas
ciegamente. Es parte de la etapa en la que estoy, en qué creo. Tal vez algún
día aprenderé a confiar en mi instinto de todo corazón. Como que tenía la
esperanza de que esta noche fuera una buena prueba para poner en
funcionamiento esos instintos.
Antes de que pudiera preguntarle si sus habilidades intuitivas estaban a la
altura o no, me di cuenta de que Eli se acercaba a nosotros… y rápido.
Capítulo 8 Traducido por Eglan
Corregido por Dayi Cullen
l principio, pensé que Eli iba a darle un puñetazo a Jax. Pero no
lo hizo. En lugar de eso, fue directamente a quien estaba detrás
de mí, y ese era Donovan. Tampoco estaba muy feliz de verme,
pero hubiese sido muy estúpido de mi parte el esperar que esto fuera una feliz
reunión. No me sorprendería que alguno de ellos me siguiera por todas partes
después de que dejamos el club. Donovan, era de ese tipo de loco
espeluznante, y cualquier cosa que hacía, Eli lo seguía.
Gemí. —Jax, ¿Quieres conseguir un taxi para que podamos salir de aquí?
Él observaba a Eli y a mi ex mientras se acercaron. Asintió y sacó su
teléfono para marcar. —Claro que sí.
—¿Así que esto es por lo que me dejaste? —gritó Donovan. La siguiente
cosa que pude ver, es que se plantó frente a mi rostro, recriminándome y
llamándome por una cantidad de nombres que no voy a repetir aquí. La
mayoría de ellos me fueron demasiados impresionantes como para creer que
estos salieron de sus labios. Sin embargo, lo que fue aún más sorprendente,
fue cómo Jax intervino y empujó a Donovan apartándolo de mí.
Un gruñido salió de los labios de Jax. —No se le habla a una dama de esa
manera. De hecho, no se le habla a ningún ser humano de esa manera, punto.
¿Quién te enseñó esos modales?...
Donovan empujó a Jax apartándolo del camino. —Esto no es asunto
tuyo, así que te sugiero que te pierdas.
—En realidad, si es asunto mío ya que ella es mi cita de esta noche —
respondió Jax molesto. No voy a mentir, esto me pareció un poco
emocionante, el ver a su lado agresivo. Tal vez fue porque no dudó en salir en
mi defensa, o podría haber tenido algo que ver con el hecho de que realmente
A
decía en serio cada palabra que dijo. En cualquier caso, todo esto me dio un
nuevo tipo de respeto por él.
La fría mirada que Donovan le dirigió a Jax me asustó. Aún tengo
pesadillas sobre esto porque me hizo darme cuenta de que mi ex haría
cualquier cosa para vengarse. Obviamente, Donovan no se detenía ante nada
para conseguir lo que quería, pero no sabía cuan grave podría ser hasta esta
noche.
Eli fue el siguiente en hablar. —Te dije que teníamos que hablar, Mila.
Deberías regresar conmigo al Club.
Aspiré una bocanada de aire. —Esto no está a discusión. Por favor,
¿Puede esto esperar hasta otra noche?
—No —respondió Donovan molesto—. No puedo creerte. Estuve en la
cárcel por tu culpa. ¿No me prometiste que me esperarías?
—Estuviste en la cárcel por ti mismo. Yo no tuve nada que ver con lo
que le hiciste a esa otra chica —Cerré los ojos—. No te amo, tenía miedo de
ti, así que no, no pude mantener mi promesa de esperar por ti. Y en este
momento también me estás asustando.
Metió la mano alrededor de Jax para agarrar mi antebrazo. —Si crees que
esto te atemoriza, no has visto nada.
Jax aparta con fuerza la mano de Donovan que me sujeta, dándole un
empujón para alejarlo. —¿Acabas de amenazarla?
— ¿Qué si lo hice?
Sacudiendo la cabeza, Jax me obligó a retroceder unos cuantos pasos. —
Este tipo no es demasiado brillante ¿Verdad? Acabas de salir de la cárcel.
¿Estás buscando regresar tan pronto?
—¡No te metas en esto! —Donovan se lanzó sobre Jax y lo empujó
apartándolo de mí. No, no lo empujó, lo lanzó. Jax casi se cayó. Él se agarró
de Donovan, así que los dos hubiesen rodado sobre el suelo si se hubieran
caído.
Jax gruñó y no se soltó de Donovan, se podía ver la determinación en su
penetrante mirada y como tenía su mandíbula apretada. Jax y Donovan tenían
las mismas condiciones, tanto físicas como en estatura. Si hubiera una pelea
uno a uno, no estoy segura de quien la ganaría. Al final, esto no importaría
mucho porque Donovan tenía a Eli, y yo sabía con certeza que ninguno de
ellos pelearía limpio.
Todo sucedió tan rápido. Primero Donovan rápidamente le lanzó un
golpe a Jax, quien lo esquivó con mucha más gracia y delicadeza de lo que
hubiera imaginado. Mi ex golpeó el aire, pero Eli se unió a la pelea y golpeó a
Jax a un costado de su caja torácica. Haciendo una mueca, Jax se inclinó hacia
delante y cubrió su rostro con sus brazos mientras los otros dos se turnaban
para golpearlo.
No lo dudé. Saqué mi teléfono para marcar el 9-1-1. Sin embargo,
Donovan me sorprendió antes de que pudiera marcar. Detuvo su ataque a Jax,
arrancó el teléfono de mis manos y lo arrojó a la calle. Escuché el crujido del
plástico al romperse y mi corazón dio un vuelco. Las náuseas subieron a través
de mi garganta y yo estaba bastante segura de que en cualquier momento
arrojaría la cena en los zapatos de Donovan mientras veía de reojo por
encima de mí.
—Yo te amaba —gruñó. Me agarró por los hombros bruscamente y
aplastó sus labios contra los míos. El imbécil incluso intentó deslizar su
lengua en el interior de mi boca, pero no le permitiría nada de eso. En el
momento en que pasaba a través de mis dientes lo mordí con fuerza. Aulló y
me apartó. La sangre estaba en mi boca, y no podía saber si era la de él o la
mía.
El suelo rápidamente se acercó hacia mí mientras caía en la acera. Tuve
el tiempo justo para girar mi cuerpo, así que caí en mi brazo en lugar que en
mi cara. Dolió, pero no tanto como debió de ser, estaba de cara en el concreto.
Con los ojos llenos de lágrimas, vi a Jax encorvado. Eli se burló de él, pero
todos los sonidos estaban empezando a escucharse confusos. Todo el asunto
fue demasiado para que pudiera manejarlo. Una vez más, vi algo feroz dentro
de la mirada de Jax, y entonces hizo algo raro…sonrió.
En un rápido movimiento, le dio una zancadilla a Eli para que cayera
entonces salió volando hacia mí justo cuando Donovan estaba a punto de
tomarme por el cuello de mi chaqueta. Me sacudí para que la soltara, y Jax
empujó a Donovan contra el muro de un edificio cercano. La siguiente cosa
que pude ver, fue el brillante destello de las luces rojas y azules que nos
rodeaban. La policía salió rápidamente de sus vehículos y corrieron hacia
nosotros. Uno de ellos apartó a Jax de Donovan. Jax fue inteligente y puso sus
manos en alto, se entregó y se hizo hacia un lado. Donovan, por otro lado,
todavía quería luchar. Hicieron falta dos oficiales para poder contenerlo. Lo
esposaron y lo empujaron contra el coche, leyéndole sus derechos como
podían. Me reí porque uno de ellos era una mujer. Fue como un poco de buen
karma.
El oficial masculino se inclinó hacia mí para ayudarme a levantarme del
suelo y me entregó mi chaqueta. —¿Estás bien?
—Ahora lo estoy —dije en voz baja. Lentamente me fui levantando, me
puse la chaqueta, envolviéndola a mí alrededor con fuerza.
—¿Qué fue lo que sucedió?
—Estaba en una cita —Entonces me aseguré de apuntar a Jax—. Nos
dirigíamos a nuestro siguiente destino, cuando esos dos... —Señalé hacia
Donovan, quien estaba en el coche de la policía, y a Eli quien iba esposado —
... nos atacaron. Mi cita sólo estaba intentando protegerme después de que uno
de ellos me golpeó.
—Ella se lo merecía —Donovan gritó desde el interior del coche.
—Si no se tranquiliza, con mucho gusto le mostraré lo que es sentir la
ira de una mujer —le dijo sombríamente la mujer policía.
El oficial que me interrogaba miró por encima de su hombro hacia Jax
que estaba hablando tranquilamente con otro oficial y, educadamente, caminó
hacia la parte de atrás de un coche que estaba al otro lado del de Donovan.
También a él lo esposaron, pero no protestó. Tragué saliva. El perfecto récord
del tipo se manchará por mi culpa. Estaba bastante segura de que Jax se
pondría furioso como ningún otro. Sin embargo, cuando su mirada se encontró
con la mía, guiñó un ojo, la pequeña sonrisa burlona antes de que volviera a
sus labios.
—Tendrás que venir a la estación con nosotros para responder a algunas
preguntas más —dijo el oficial, trayéndome de regreso a la realidad.
Mi mirada vagó sobre Eli a quien ahora lo estaban metiendo en el coche.
Asentí. —Está bien...
Capítulo 9 Traducido por Walkiria
Corregido por SilV
l interrogatorio parecía que iba a seguir durante toda la noche. En
realidad, sólo habían pasado un par de horas. Todos fuimos
separados en diferentes habitaciones para ser interrogados. O al
menos eso es lo que creo. En su mayor parte, los policías fueron comprensivos
conmigo, pero había una evidente superioridad en su tono, sugiriendo que no
me meta con ellos, o todo cambiaría. Por lo que, confiando en mí, no me
gustaría hacerlo, ya que la policía me asustaba. Desde que Donovan había sido
arrestado la primera vez, me ponían nerviosa. No sé por qué. No es como si yo
alguna vez hubiese herido a uno.
Creo que era porque siempre tenía miedo de que Donovan viniera por mí
a causa de ellos. Si me mantenía al margen, entonces no habría ninguna razón
para que me buscara. Bueno en teoría, pero obviamente lejos de la realidad.
Donovan aún me guardaba un desagradable rencor. Por alguna razón, nunca
me lo imaginé haciendo algo violento, especialmente hacia mí. Simplemente
no tenía sentido, y eso era en lo que estaba pensando cuando Jax entró en la
habitación.
— ¿Estás bien? —preguntó. Posó algunos de sus dedos en mi rostro para
examinarlo. Fuera de un labio partido y una contusión leve, no estaba nada
mal.
Asintiendo, encontré su mirada con la mía. Las lágrimas se amontonaron
en mis ojos otra vez, ugh, pero traté de no darme mucho tiempo para llorar.
Estábamos atravesando una experiencia muy traumática, así que creo que era
perfectamente aceptable demostrar mi lado más débil y más vulnerable. Si
alguien preguntara, negaría lo sucedido o les diría que era solo algo hormonal.
Tenía una reputación que proteger. Pero Jax era el único que podía ver a
través de ese lado duro de mí esa noche, porque lo vivió conmigo. Fue una
experiencia que no me importaba compartir con él porque hacia la carga más
ligera.
E
— Me preocupo más por ti —murmuré—. Al parecer has sido golpeado
bastante mal por ellos. Por supuesto, a simple vista, no se ve un rasguño.
Bueno, tal vez uno aquí. —Toqué su mandíbula donde tenía un pequeño
corte—. A diferencia de mí, no aparentas demasiado que te hayan pateado el
culo. Probablemente podrías decirles a todos en el trabajo lo contrario.
Se encogió de hombros.
—No hay ninguna razón para mentir ni para proteger mi honor. Era uno
contra dos, y aunque tengo un cinturón negro en tae kwon do, eso no
necesariamente significa que estoy a salvo.
—¿Tiene un cinturón negro?
—Sólo en primer año. He estado muy ocupado, pero, ¿Tal vez debería
volver? —Se rió.
Sacudí mi cabeza.
—Estás cavando tu propio pozo.
—La violencia no es la respuesta. Tengo que centrarme en protegerme
así puedo protegerte. Eso significaba dejar que ellos ganen en lugar de ir a
matar, por así decirlo. Además, aunque esto me haga menos hombre para ti,
estaba asustado. No me habría sorprendido si uno de ellos tuviese un arma.
Por poco me ahogo.
—¿Te ahogas? —Me reí—. Si eso te asfixia, no quiero verte en completo
modo de ataque. Sacaste a la niña que tengo dentro, y lo digo en el buen
sentido. ¡Yo absolutamente no me habría acobardado del tipo de no ser porque
parecía tan... rawr!
Jax también se echó a reír, con tanta fuerza que roncó, y su nerd interior
volvió a salir.
—¿Rawr? ¿Ese es el término oficial para él?
—Sí.
—Yo, obviamente, no podía dejar que te haga daño, y no quería tener
una charla. Ser razonable estaba fuera de discusión. Aún así, podía haber
recordado la película de kung-fu y dejarlos inconscientes a ambos con mis
meñiques.
—¿Puedes hacer eso?
—¡Ja! No —Negó—. Ya me gustaría.
Mi risa se desvaneció y le di una pequeña sonrisa.
—¿En serio, no estás herido? Yo los vi golpearte muy fuerte en las
costillas. No hay nada roto, ¿No?
Se encogió de hombros.
—Probablemente fui golpeado por un buen rato, pero te prometo que
estoy bien.
—¿Qué va a pasar ahora? ¿Se llevaron una ficha policial tuya? ¿Pasarás
la noche en la cárcel? —Fruncí el ceño, más aún cuando me di cuenta de su
falta de preocupación. Podría haber arruinado seriamente la vida de este tipo,
y todo lo que hizo fue sonreírme. ¿No estaba en lo más mínimo molesto
conmigo?
Jax se relajó en una silla y extendió sus brazos. Estoy segura de que
haciéndolo así podía ser el tipo de las películas donde lo utiliza como excusa
para poner su brazo alrededor de la chica. ¿Por qué pienso eso? Porque él puso
su brazo alrededor de mí y me abrazó suavemente.
Inclinó su frente contra la mía.
—Ninguna ficha policial. Todo va a estar bien. Fue en defensa propia.
Donovan es bastante elocuente acerca de todo el asunto, así que él hará su
parte. Eli no ha dicho mucho, pero no me preocupa demasiado. Realmente no
puede hacer nada más que empeore las cosas para nosotros. Les dije que no
iba a presentar cargos contra él.
—¿No lo harás? —Parpadeé—. ¿Por qué?
—Eli estaba bastante destrozado —dijo—. No, no es una excusa, pero
sería obstaculizar su juicio. No creo que hubiese sido violento de no ser por
Donovan. Va a volver a la cárcel, ya lo veremos. Seguro que de todos modos
está violando algún tipo de acuerdo condicional.
Todavía estaba atónita. Él no presentará cargos contra Eli.
—¿Estás seguro de que es lo que quieres hacer?
—Estoy seguro. La pelea se mantendrá en el expediente. Si Eli intenta
venir a buscarte otra vez, puedo cambiar de parecer. —Chasqueó los dedos—.
Lo escuché hablar en el pasillo. Dijo que quería volver a hablar con nosotros
dos. Creo que sólo quería ayudar a su amigo y todo lo sucedido lo puso fuera
de control.
—Eres demasiado indulgente —dije y sacudí la cabeza.
Cerró sus hermosos ojos azules y suspiró.
—Quiero pasar de esto tan rápidamente como sea posible. Si le fijara
cargos, iría a la corte, sería arrastrado a hacer más cosas, y no quiero tener que
pasar por todo eso. Los medios de comunicación ya se van a tragar esta
historia lo suficientemente fácil. ¿Eli te asusta? Porque si lo hace, voy a hacer
que también vaya tras las rejas.
¿Eli asustarme? Había un tipo diferente de furia dentro de él esa noche,
no era lo habitual. Siempre había sido ferozmente leal a sus amigos. Era una
de las cosas que más me gustaba de él hasta que desmoronó su lealtad hacia
mí. ¿Qué significaba esa palabra? ¿Los amigos eran lo principal? Si hubiera
estado borracho, podría no haber estado pensando con claridad. Al mismo
tiempo, no quiero buscar excusas para él. El hombre necesitaba a un nuevo
mejor amigo, de eso estaba segura.
Acaricié el pecho de Jax con mi nariz, apreciaba más la comodidad de su
cuerpo caliente y sus fuertes brazos alrededor de mí.
—No lo ha hecho antes, pero siempre hay una primera vez para todo. Es
genial que hagas esto por mí, creo que tienes razón. Si todo lo que quería
hacer era hablar, él probablemente sólo quedó atrapado en el momento. Algo
así como tú dices.
—Además, sólo me pateó una vez. Donovan fue quien más se abalanzó
sobre mí. Eli estaba parado allí y solo miraba.
—Parecía todo lo contrario desde donde estaba yo — admití.
Se rió.
—Podía sentir la diferencia de sus zapatos. Bien, él me derribó para
mantenerme lejos de ti. Cuando Donovan te golpeó, todo en él cambió. Creo
que eso le abrió los ojos. Al menos eso espero. Quizás debería intentar
llamarle más tarde.
—Espera. ¿Quieres hablar con Eli? ¿Después de qué…? —Por un
momento no podía dejar de preguntarme si Jax estaba mal o algo así—. Estás
loco.
—Es algo por lo que voy a tener que rezar —dijo suavemente—. Por la
gran mayoría de estas cosas. Tal vez no voy a despejar mi mente hasta la
mañana y los dos bien podremos pasar la noche en esta celda.
—Todavía pienso que estás loco —bromeé. Y luego me aseguré de que
él me estaba mirando antes de continuar, porque lo que iba a decir a
continuación era muy grave—. ¿Cómo supieron? ¿Es decir, como supo la
policía que tenía que venir?
Jax sacó su teléfono celular y me mostró su historial de llamadas
recientes. En la parte superior se veía el 911.
—¿Recuerdas cuando me dijiste que llamara a un taxi? En su lugar los he
llamado. Escucharon la mayor parte de la lucha a través de mi teléfono.
Sollocé, las lágrimas volvían a mis ojos.
—Lo siento por todo esto. Puedes decir que no es mi culpa, lo cual es
verdad hasta cierto punto, pero eso no cambia el hecho de que se trata de una
forma bastante horrible de terminar la noche.
Se encogió de hombros.
—Eh.
Mi mandíbula se cayó.
—¿Eh? ¿Te gusta tener tu culo golpeado? Hombre, tal vez no quiero salir
contigo después de todo. Yo también tengo mis límites, sabes.
Jax inclinó su rostro más cerca del mío, su mirada sostenía la mía una vez
más. Su cálido aliento rozaba sobre mi piel. Incluso podía oler un leve toque
de menta en él, así de cerca estábamos. Entonces dijo en voz baja.
—No te olvides de las cosas que pasamos esta noche. Personalmente
pasé una noche maravillosa, con el trasero pateado y todo. Lo que la hará ser
una impresionante historia.
Me lamí los labios y tragué.
— Eso es seguro.
Se movió más cerca, sus ojos estaban cerrados y sus labios ligeramente
arrugados. Mi corazón latía como nunca antes en el interior de mi pecho.
También cerré los ojos y di vuelta la cara, dejándolo besar mi mejilla. Sus
labios eran tan suaves como me imaginé que serían. No pude evitar sonreír por
la sensible presión contra mi piel.
—Lo siento —susurró, apartándose. Todavía se mantenía bastante cerca
de mí y su rostro se tiño de un color rosa.
—¿Hmm? —murmuré.
Tímidamente, me sonrió.
—Pensé que tuvimos un momento. Es decir, pensé que querías que te
besara.
Sonreí.
—Oh, sí quiero, pero he oído por ahí que era inútil besar en la primera
cita.
Eso causó que su rostro fuera desde un ligero rubor a estar
completamente rojo. Su boca se abrió y cerró varias veces, cambió de posición
en su asiento e incluso tosió. Era estúpido, pero él estaba empezando a
importarme, ese lado tierno de Miss perfección era parte de él. Probablemente
me di cuenta que podía ser exactamente el tipo de hombre que necesitaba. Era
en todas las cosas correcto y sin embargo era perfectamente imperfecto.
—Yo he dicho eso, ¿No? —Arrugó la nariz.
—¡Algo de eso dijiste al respecto! —No le sirvió ser tan prejuicioso al
principio de la noche.
—¡Vaya! —Todo su cuerpo se aflojó, sus hombros caídos, su mirada
evitándome, fijada al piso, y dejó caer una larga y lenta respiración.
Negué hacia él y tomé su barbilla con mi mano, tocando su nariz
ligeramente con el dedo índice.
—No he oído nada sobre el segundo.
Una pequeña sonrisa se extendió por su cara.
—Te llamaré.
—Pero no en tres días, ¿Cierto?
—Pero eso significaría que me gustas. —Guiñó el ojo—. No, te llamaré
mañana por la tarde, apenas me despierte. Podremos pensar algo entonces.
Asentí, con suficiente entusiasmo, que probablemente me hizo parecer
tanto a un nerd como él.
—¿Supongo que no te gustan las películas de kung-fu y la comida China
para llevar?
Su sonrisa se agrandó. No pensé que era posible incluso sonreír tan
ampliamente.
—La mejor manera de pasar la noche.
Sobre la Autora
Jenkins vive en
Minneapolis Minnesota
con su marido, su hijo, y
dos gatos. Se graduó de la Universidad
de Bethel en 2006 con una
licenciatura en Medios de
Comunicación con especialización
en escritura y cine.
Cuando no está ocupada
escribiendo, ocupa su tiempo libre
jugando juegos, leyendo y pasando
tiempo con su familia.
JF