ii.- trabajar nuestra autoestima para … · trabajar nuestra autoestima para crecer como ... para...

21
II.- TRABAJAR NUESTRA AUTOESTIMA PARA CRECER COMO PERSONAS Y PROFESIONALES.

Upload: nguyenkiet

Post on 21-Sep-2018

229 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .23

II.- TRABAJAR NUESTRA AUTOESTIMA PARA CRECER COMOPERSONAS Y PROFESIONALES.

Manual de autoestima para docentes24

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .25

2.1. ME PONGO EN CONTACTO CON MI REALIDAD: LOS SÍNTOMAS DEMI MALESTAR. “CONFIESO QUE ME MALTRATO”.

¡Conecta! : ¿Qué me está pasando?

Olvídate de todo lo que te ha pasado a lo largo del día o en estosúltimos días. No pienses en los muchos problemas que has tenido, tieneso vas a tener. Deja tu mente en blanco por unos minutos y ¡conectacontigo mismo/a! Quizá te sirva ponerte esa música clásica o modernaque tanto te relaja y te hace sentir a gusto. ¡Ponla, no te prives! Siéntatecómodamente y cierra durante unos minutos los ojos. Trata de entrar enti mismo/a y deja de lado todo aquello que te distraiga de esta tarea...

Considera estos momentos como una oportunidad única paraconocerte y sentirte una persona IMPORTANTE, ÚNICA, DIGNA. Lo eres.En todo el mundo no hay nadie con tus mismas características físicas nipsicológicas.

Repítete estas palabras: “Merezco estos minutos. Deseoaprovecharlos para ser consciente del origen de mi malestar. Sólo yopuedo cambiar. He de darme, un día tras otro, el cariño que necesito y laatención que preciso para poder superar el reto fundamental que tiene mivida: ACEPTARME, RESPETARME, QUERERME, ESCUCHARME... parapoder hacer lo mismo con todas aquellas personas con las que merelaciono. De la aceptación de mi realidad podrán fluir todos los cambiosque mi vida precisa para ser más sana, para mejorar mis relaciones, parasuperar mis defectos y limitaciones, para llegar a ser la persona quesiempre he querido ser”.

Partiendo de la situación en la que te encuentras -los posibles síntomas de tumalestar-, a lo largo de este libro vamos a hacer un repaso a todos aquellos factores quede una forma u otra contribuyen a que nuestra relación con nosotros mismos -yconsecuentemente nuestra relación con los demás- sea equilibrada y sana o, por elcontrario, autodestructiva y destructiva de la felicidad de los que nos rodean. El mundode la docencia, en el cual nos movemos, es sumamente complejo por múltiples factores(cantidad de personas que intervienen, relaciones personales que se producen,características de personalidad de los participantes, presiones que se reciben desdedistintas instituciones -familia, dirección, administración educativa, compañeros-,motivos desde los que se ha hecho la elección profesional, historia personal del docentey de los alumnos, situación socio-cultural y económica de las personas con las quetratamos...) y son muchos los profesionales que por unas u otras circunstancias pierdenel sentido de su labor como profesionales y, lo que es más importante, el sentido de sulabor como personas. Desligan su crecimiento profesional de su crecimiento personal ycomo muy bien ha expresado J.A. Aroca Bernal, atendiendo a esta realidad, “esinexcusable que un Plan de Acción Tutorial no tenga en cuenta o no se plantee comoobjetivo básico el desarrollo personal de los profesores”.

Manual de autoestima para docentes26

LOS SÍNTOMAS DE TU MALESTAR

Ha sonado el teléfono. Lo has cogido e inmediatamente has notado como elinterlocutor, que supuestamente quería hablar contigo, ha colgado. Te pones a pensar yllegas a la conclusión de que alguien pretendía saber si estabas en casa, pero querealmente no tenía ninguna intención de hablar contigo. Esto, que alguna vez te hasucedido en la vida real, es lo que también te sucede muchas veces cuando deseasconocerte a ti mismo: llamas a la puerta de tu interior, conectas contigo mismo, y trasconocer superficialmente dónde te encuentras, inmediatamente emprendes la retiradaporque realmente no quieres dialogar contigo, te da miedo lo que pueda salir a la luz, loque puedas conocer, las reacciones que puedas tener. ¡Actúas como un/a cobarde!

Muchas veces no lo quieres reconocer. Es más, no deseas pararte a pensar acercadel origen de tu malestar. Es doloroso quitarte ese vendaje que te protege de la luz,porque te puede descubrir muchas realidades a las que no quieres acceder ya que estásmás cómodo anclado en la inconsciencia. Pero sabes que el primer paso que has de darpara superar la situación de malestar que te invade es tomar conciencia de los síntomascon los que se manifiesta en tu vida. ¿Cuáles pueden ser esos síntomas?

Yo me he descubierto en muchos de estos síntomas que a continuación te voy adescribir. Quizá tengas pocos o muchos de ellos. Es posible que encuentres otros que yomismo no he reflejado en estas páginas. Creo que lo más importante es que adquierasconciencia del malestar que de una forma más o menos constante invade tu vida, loaceptes y a partir de aquí emprendas el camino de tu propia curación. Asume laresponsabilidad que en esta tarea te corresponde: no se trata de que alguien haga la tareapor ti. Solamente tú tienes el poder de salir del pozo en el que, por múltiplescircunstancias, te ha sumido tu historia. Mi historia, desde el momento en que descubrílos síntomas, se ha caracterizado por el esfuerzo, el dolor y la esperanza. La alegría, cadavez que he superado obstáculos que se cruzaban en mi camino, ha sido inmensa. Estoysatisfecho de lo conseguido, pero todavía me queda mucho por hacer. En realidad elcamino emprendido sé, porque quiero que así sea, que solamente acabará con mimuerte. No quiero cesar en el intento de ser yo mismo, de llevar a cabo lo que me gusta,de sentir que las personas que me rodean están a gusto, felices, porque mi presencia estállena de respeto, bondad, aceptación, cariño hacia mí mismo y hacia ellas.

Mírate en el espejo que te ofrezco al describirte estos síntomas y no tengas miedoen aceptar que te encuentras ahí, en esa situación, con esos problemas que te impiden elsentirte a gusto contigo mismo/a y con los demás. Valora el grado en que aparece elsíntoma en tu vida.

El síntoma de la máscara Este síntoma se manifiesta cuando pienso: “Nome pueden querer como soy. Debo mostrarme como no soy para lograr tu aprecio,valoración y amistad”. Según el ambiente en el que me muevo me coloco la máscaramás apropiada para no desentonar. No expreso lo que siento, sino lo que creo que a laotra persona le gustaría oír. No hago lo que me apetece sino lo que a la otra persona legusta y satisface. Ser yo mismo/a lo vivo como peligroso y trato de evitarlo a toda costa.

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .27

Mi vida es teatro y son muy contadas las ocasiones en las que me permito serauténtico/a. Compro amor a costa de no ser y ello me crea una gran insatisfacción,inseguridad, ansiedad. He desterrado la autenticidad de mi vida y he convertido en unhábito la apariencia, el engaño, el fingimiento.

El síntoma de la falta de energía Me siento cansado, agotado, sin ganasni fuerzas para hacer frente a las responsabilidades que personal y profesionalmente meplantea la vida. No se trata de que me encuentre mal físicamente, más bien se trata delsentimiento de impotencia que me invade para seguir funcionando con normalidad en elquehacer cotidiano. La vida para mí se ha convertido en un cúmulo de “deberías” queme impiden disfrutar de lo que hago, porque me exijo una perfección que raramentelogro alcanzar. Alguien, a lo largo de mi vida, me ha estado introduciendocontinuamente la idea de que “debo hacerlo lo mejor posible”, “el fallo es síntoma deincompetencia e incapacidad”, “no me puedo mostrar débil”... y lo sigo creyendo. No mepermito conectar con la vida para sentir cómo todo mi cuerpo se carga de energía, paradisfrutar plenamente de mi condición humana, condición que va unida al fallo, al error, ala debilidad, en muchas circunstancias. “No siempre puedes hacer tu trabajo bien.Algunas veces te equivocas, en ocasiones alguien te puede utilizar sin que lo percibas,pero cuando te das cuenta de tus fallos, errores, debilidades, sientes que, a pesar de ello,eres un ser humano digno y con ganas de aprender de todas esas circunstancias,situaciones, hechos que tanto malestar te ocasionan”.

Lo que a nivel mental se traduce en “me siento quemado”, “estoy agotado”, anivel físico se convierte en un bajón energético que lo vivo como un “sentirme sinfuerzas para seguir viviendo”.

El síntoma del preso Vivo inmovilizado por una gruesa cadena o en unapequeña celda donde la salida es imposible. Creo que nada puedo hacer para cambiar.Siento que tengo lo que me merezco. La culpa se ha apoderado de mí y vivo según medicta. Veo el mundo desde una pequeña ventana que tiene unos gruesos barrotes. No soycapaz de ver otras perspectivas distintas de las que me ofrece esa ventana. Avanzo comoel burro con las orejeras: percibiendo solamente un ángulo de 90 grados de la vida,ignorando los otros 270 grados. Creo que llevo sobre mí una pesada carga con la quevoy caminando lentamente y con mucho esfuerzo, con la que siento que si desfallezcopuedo quedar aplastado. Todo lo evalúo a nivel de la inteligencia racional y no meplanteo en ningún momento la importancia que tiene para salir de mi prisión el utilizarmi inteligencia emocional (1) y mi inteligencia financiera (2).

El síntoma del lunes No deseo que llegue el lunes, desearía quedesapareciese del calendario. En el fondo no siento ilusión por mi trabajo, lo vivoangustiado y esto se traduce en que lo soporto de forma resignada: “De algo tenemosque comer”. Lo que más deseo es que pase rápidamente la semana, que llegue lo antesposible el nuevo descanso, que las vacaciones estén cerca... para antes de que acaben,sentir de nuevo que regreso a la “vida dura”. Las consecuencias son claras: vivosiempre pendiente del futuro. No disfruto del aquí y ahora. La locución “carpe diem”debo tomármela en serio para poder disfrutar de las múltiples oportunidades de gozo queme brinda cada día.

Manual de autoestima para docentes28

El síntoma del miedo Evito todas aquellas situaciones desconocidas que mecrean ansiedad y angustia. Todo lo desconocido me bloquea. “Atravieso siempre elbosque por el mismo camino, por miedo a lo que me pueda encontrar si me adentro porotros senderos que no he transitado”. No asumo el riesgo que conlleva la vida y lamonotonía es una constante en mi día a día. Me pierdo la vida por falta de confianza enlo que me ofrece. Jorge L. Borges se expresaba así a sus 85 años : “Si pudiera vivirnuevamente mi vida, en la próxima trataría de cometer menos errores. No intentaría sertan perfecto. Me relajaría más. Sería más tonto de lo que he sido; de hecho, tomaría muypocas cosas con seriedad. Sería menos higiénico. Correría más riesgos, haría más viajes,contemplaría más atardeceres, subiría más montañas, nadaría más ríos. Iría a más lugaresdonde nunca he ido, comería más helados y menos habas, tendría más problemas realesy menos imaginarios... Yo era uno de esos que nunca iban a ninguna parte sin sutermómetro, una bolsa de agua caliente, una paraguas y un paracaídas; si pudieravolver a vivir, viajaría más liviano”.

El síntoma de la autosuficiencia Creo que puedo solucionar todo por mímismo/a. Soy incapaz de solicitar ayuda. No me importa dar, pero cuando se trata depedir doy vueltas y más vueltas antes de hacerlo. En el fondo soy una persona muyorgullosa que piensa que el pedir ayuda es un síntoma de debilidad. Prefieroequivocarme, pasarlo mal, antes de mostrar que como ser humano no lo sé todo. ¿Quiénte inculcó que no debías mostrarte débil, que debías tener la respuesta adecuada paratodo, que no debías pedir ayuda a nadie, que no podías cometer errores?

El síntoma del yo no importo, tú sólo eres él/la importante “Mesometo a tus ideas, caprichos, gustos... y renuncio a los míos para no perder tu afecto ycariño”. Me muestro complaciente, sonriente, amable, aunque me siento cansado, tristedeprimido. No soy capaz de poner límites expresando claramente mis sentimientos ypidiendo a los demás que no me demanden en estos momentos lo que no estoy encondiciones de dar. Soy una persona sumisa que no se atreve a afirmar sus sentimientos,convicciones, necesidades, por temor al rechazo. Compro el amor a costa de dejar de ser,de dejar de hacer, de no permitirme sentir lo que siento. Mi represión a veces sesomatiza y acudo con frecuencia al médico pues sufro de frecuentes dolores de cabeza,de malestar de estómago, de taquicardias, de mareos y vómitos...

El síntoma del sólo yo importo, tú no importas “Lo importante essatisfacer mis necesidades y deseos. Te utilizo para yo sentirme a gusto. Me importas enla medida en que contigo mis necesidades queden satisfechas; las tuyas son secundarias,no las tengo en cuenta”. Actúo como el sádico, el vampiro, el agresor... sin muchasveces ser consciente plenamente de ello. Someto a los demás, sobre todo a los que veomás débiles, porque ellos me proporcionan las energías que no puedo conseguir de unaforma más sana. Machaco para sentirme fuerte, pero la fortaleza que consigo a costa dehacer sentir mal a los otros es una fortaleza enfermiza que crea adicción en mí y unprofundo malestar a mi alrededor.

El síntoma del “escaqueo” Huyo de todo aquello que me suponga uncompromiso. Evito todas las situaciones en las que tenga que “mojarme”, “implicarme”,y lo hago por miedo al ridículo -“se reirán de mí”-, por temor al fracaso -“no lo harébien”-, por evitar sentir que otros lo hacen o son capaces de hacerlo mejor que yo -

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .29

“ellos son más competentes que yo”-, por comodidad y conformismo -“yo no necesitohacer eso, no me aporta nada que ya no sepa”. Tengo miedo a no responderadecuadamente a las expectativas de los otros. Evito la superación porque suponeesfuerzo, constancia y dolor. Renuncio al desarrollo de todas las maravillosaspotencialidades que están dormidas en mí.

El síntoma de la necesidad de venganza Necesito machacarte porqueme haces sentir débil, inferior, vulnerable, incompetente. “Me la has hecho y tienes quepagar por ello, poco importa el precio que cueste”. Predomina una actitud impulsiva,poco reflexiva, reactiva, que no tiene en cuenta los derechos del otro, su dignidad, elrespeto que merece, pues he sentido vulnerados los míos. La ley del talión es la quedeseo aplicar: “Ojo por ojo y diente por diente”. Entro en una guerra en la que “lo másimportante es vencer, no convencer”. No aplico el aforismo que John Keating dice aNeil Perry en El club de los poetas muertos: “Hay un momento para el valor y otro parala prudencia. El saber elegir es de inteligentes”.

El síntoma del aislamiento Evito el contacto, la relación con los demás,pues me pueden herir, manipular, maltratar, despreciar... y es más cómodo mantener laseguridad de lo conocido, renunciando al riesgo de los imprevisto, evitando lanzarme alvacío de lo desconocido. He renunciado a dar y recibir. He entrado en la fosa en vida.En muchas ocasiones creo que el muro de hormigón que he construido a mi alrededor esde tal calidad que mis esfuerzos quedan cortos para salir de esa enorme fortaleza en laque he convertido mi vida.

El síntoma del payaso “Conmigo te lo puedes pasar fenomenal, soy un tipodivertido, bromista, simpático... Conmigo te reirás mucho”. Oculto mis auténticossentimientos tras una nube de chistes, bromas, chascarrillos, anécdotas, que impiden alos demás conocerme realmente y saber cómo me siento. Los demás, antes o después, secansan o sólo buscan mi compañía para que los distraiga un rato. Ando siempre en lasuperficie -“estoy fuera”- porque profundizar - “estar dentro”- puede ponerme encontacto con el vacío y la nada.

El síntoma del “yo abandono” Vivo la vida como un suplicio. He nacido“estrellado”. No me sentí deseado. No me siento querido. La vida ha sido injustaconmigo. No merezco lo que me ha tocado. El hastío invade mi día a día. La solución atodo mi malestar es el abandono, la muerte. Sí, sé que soy un cobarde, pero prefiero lacobardía a seguir soportándome. Me he creído el mensaje que me lanzaron y me lanzan:“NO VIVAS”. Tengo una actitud y una visión pesimista ante la vida que me impideapreciar todo lo bueno que hay en ella.

El síntoma de la impotencia “Las cosas son como son y es imposiblecambiarlas. Yo soy así y nada me hará cambiar”. Los hábitos de pensamiento y decomportamiento tan arraigados me impiden sentirme plenamente responsable de mi vidapara guiarla por el camino que yo desee. Sigo alimentando mi mente con ideasdestructivas que no logran sanarme. Sigo escogiendo alimentos para mi mente que sonperjudiciales.

Manual de autoestima para docentes30

PIENSA en otros posibles síntomas que denoten el malestar queactualmente vives y qué remedios buscas para aliviarlos (el alcohol, el tabaco, lacomida, la sexualidad, el deporte, la lectura, la televisión, la religión, losmedicamentos, la droga, la actividad frenética...) (3):

SÍNTOMAS REMEDIOS EFECTOS

Creo que todos me debenaceptar y querer.

Lucho por ganarme elaprecio de los demás sintener en cuenta misauténticos deseos ynecesidades.

Me agoto en el esfuerzo deconseguir aquello que debedarse de forma espontánea.

Reflexiona acerca de si los remedios que empleas contribuyen a potenciar oa aliviar los síntomas.

Notas :

(1) Goleman, Daniel. Inteligencia emocional. Edita Kairós. Barcelona-1996.

(2) Domínguez and Robin. La bolsa o la vida. Planeta. Barcelona-1997.

(3) Lacasse, Micheline. Tengo una cita conmigo. Sal Terrae. Santander-1995. Puedesprofundizar más en el tema de los síntomas de tu malestar a través de la lectura de

(4) este libro.

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .31

2.2. QUÉ ENTIENDO POR AUTOESTIMA Y CÓMO HA INFLUIDO EN MIVIDA.

2.2.1. Qué entiendo por autoestima.

Es un término sobre el que no me había parado a pensar. Lo conocía, sabía queestaba ahí, pero consideraba que no tenía nada nuevo que aportar a mi vida. ¡Habíafuncionado tantos años sin necesidad de saber acerca de él, que no sentía la necesidad detenerlo en cuenta!

A raíz del proceso más doloroso que he sufrido en mi vida, la separación de losseres queridos con los que había convivido durante más de una década - mi mujer, porentonces, y mis hijos - todas las seguridades que hasta entonces había tenido comencé aponerlas en duda. Hasta ese mes de Agosto de 1994, en que mi vida tomó un rumbo quenunca hubiera sospechado, había vivido inconsciente respecto a temas fundamentales parami salud mental y física. Desgraciadamente mi muerte en vida había comenzado con minacimiento y sólo al llegar a los 38 años comencé a plantearme, gracias a personas cercanasy queridas, qué había funcionado, y seguía funcionando de forma defectuosa, paraoriginar tanto sufrimiento en mí y en personas que tanto quería.

Pasé por el desierto, sediento de afecto, enfermo mental y físicamente. Entré en“guerra” conmigo mismo. Constaté, parafraseando a Antoine de Saint-Exupéry, que “loesencial permanecía invisible a los ojos de los que me rodeaban y que solamente si hacíanun esfuerzo para ver desde su corazón podrían conectar conmigo”. Una gran crisis, cuyoresponsable último era yo mismo, había invadido mi vida. Los fundamentos que habíansostenido mi vida hasta ese momento cayeron estrepitosamente, cual edificio con unexterior majestuoso pero cuya estructura estaba dañada, y entré en un túnel cuyo final novislumbraba. Inseguridad, lucha por sobrevivir, depresión, esperanza, angustia, ilusión,ansiedad, frustración, trabajo compulsivo... todo se mezcló durante mucho tiempo sin saberqué iba a dar como resultado. La compañía y el consejo de mis mejores amigos eran laúnica luz, maravillosa luz, que iluminaba mi vida en momentos tan tenebrosos. Mis padres,carentes de formación para poder apoyarme emocionalmente, estuvieron presentes ahí consu compañía, con su disponibilidad, con su apertura y respeto. El cariño de ellos semanifestaba en la acogida en la que fue la casa de mi infancia, en el plato de comidacaliente y bien preparada que me ofrecían, en sus silencios llenos de sentido con los que meacompañaron durante seis largos meses en los que personalmente trataba de asimilar quéhabía ocurrido con mi vida, por qué abandoné mi casa y las personas que, a mi manera,más había querido hasta ese momento.

Mi mejor amigo me aconsejó acudir a una profesional competente en el campo dela psicología clínica para no dejarme atrapar por el medicamento fácil, que a la larga mecrearía dependencia. Acudí, pese a mi desconfianza, y fue allí donde empecé a abrir otrasventanas distintas a la que había mantenido abierta durante toda mi vida. Desde querecuerdo, siempre en mi vida había mantenido ideas no realistas y minusvaloradoras de mipersona que me crearon gran sufrimiento, había convertido en un hábito el pensar de formapesimista respecto a mí mismo y a todo lo que me rodeaba. Era capaz de esforzarme por

Manual de autoestima para docentes32

agradar a los demás y escasamente procuraba sentirme a gusto conmigo mismo. Mismonólogos interiores eran habitualmente descalificadores y destructivos con respecto a loque hacía, decía y sentía. Nunca hacía ni me esforzaba suficientemente. Las demáspersonas siempre las percibía con más cualidades y bienes que yo. Me sentía inmovilizadopara conseguir aquellas cosas importantes en la vida que no se compran con dinero: saludmental, amor, amistad, sentido del humor, equilibrio... La vida la percibía como un oscurotúnel del que nunca vislumbraba el final, la salida, la luz.

¡Había que cambiar tantas cosas en mi vida! Las sesiones de terapia las tenía querecibir en otra población distinta a la que resido y esto suponía tener que realizar un gastoextra, semanal o quincenal., pero estaba claro que o me preocupaba por salir del pozo o nohabía vida posible para mí. Aquí inicié mi proceso de desapego por el dinero. El dinerocomencé a verlo como un medio para poder restablecer el equilibrio en mi vida. No mevalía de nada el tener dinero e ir arrastrándome, cual moribundo en busca de alimento, sinenergías para enfrentar la vida con optimismo e ilusión.

Fueron unos meses iniciales de un trabajo intenso de la psicoterapeuta conmigo, aello siempre uno el apoyo y afecto que recibí de mi amigo y su mujer, quienes en muchasocasiones me acompañaban. Nunca he valorado tanto como ahora la gran verdad de que“quien tiene un buen amigo tiene un tesoro”. Hubo días en los que la sesión se tuvo quecentrar en que me relajara, en que llorará, en que me tumbara en una colchoneta y sintieracómo mi cuerpo estaba sufriendo todo mi proceso mental. Energéticamente había días queestaba bajo cero y, tras la sesión con la psicoterapeuta, salía con la carga energética mínimapara poder seguir funcionando. Me costaba hablar, expresar lo que sentía. Mi gargantasangraba frecuentemente, produciéndome una gran alarma. “Estaba tan poco acostumbradoa expresar mis sentimientos, emociones, afectos... que la garganta me daba señales deenfermedad. La represión mental se convertía en un síntoma físico, somatizaba”.

Empecé después de varias sesiones a conectar conmigo y a expresar realmentemis emociones y sentimientos. Me hice consciente de los mensajes de “muerte” que una yotra vez me había ido dando a lo largo de mi vida y que se habían convertido en un hábito:“no sirves”, “no mereces que los demás te quieran”, “los otros son más importantes que túy debes anteponerlos a tus necesidades”, “no mereces el respeto de los demás”, “tienes quehacerlo mejor”, “debes exigirte más”... Conecté con el origen de esos mensajes.

Pasaron los meses y fui siendo consciente de que si no me quería a mí mismo, mecuidaba, me respetaba, me mimaba... difícilmente iba a poder querer, aceptar, respetar,mimar a los demás. Estaba empezando a entender lo que era la autoestima. Laeducación rígida que había recibido, debido al momento histórico en que se situaba y a laconcepción cristiana cerrada en la que se basaba, relegaba cualquier deferencia conmigomismo a un segundo lugar, poniendo siempre en primer término a los otros y haciendohincapié que era de personas egoístas cualquier sentimiento de amor y aprecio hacia mímismo. Desmontar todos los hábitos asimilados y repetidos a lo largo de muchos años iba asuponer un trabajo intenso que ocuparía los próximos años y que aún mantengo para nodar marcha atrás en un proceso que me ha supuesto un enorme esfuerzo para “conectar conla vida”.

Llegado a este punto entendí lo que significaba la palabra autoestima y comencé aprofundizar en lo que había implicado su carencia en mi vida y cómo debía de trabajar

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .33

para lograr adquirir la mínima necesaria para seguir viviendo. Comprendí que lospensamientos, sentimientos, actitudes y comportamientos que había tenido con respecto amí mismo habían sido autodestructivos y me habían llevado a percibirme como indigno. Noaceptaba mis errores y limitaciones, no me respetaba, me daba mensajes negativos, teníauna actitud intolerante y culpabilizadora conmigo mismo, estando, al mismo tiempo,cerrado a la mejora en todos los aspectos de mi vida. He aquí las características básicas deuna persona con una baja autoestima, con una estructura de personalidad enferma que no lefacilita la relación consigo misma y con los demás, creadora de sufrimientos innecesariosproducidos por hábitos enfermizos autodestructivos (1). Esta era mi realidad y a partir deaquí debía empezar a trabajar si quería VIVIR.

2.2.2. Importancia de la autoestima.

En mi vida no había faltado el alimento diario que me proporcionaba las energíasfísicas necesarias para seguir viviendo. Sin embargo, había tenido profundas carenciasafectivas. La auténtica expresión de mis sentimientos había sido durante largos añosreprimida y el teatro se había convertido para mí en la única manera de sobrevivir en losambientes rígidos e intolerantes en los que me movía. Había experimentado una exigenciabrutal por parte de personas que, aun buscando lo mejor para mí, desconocían la realidadprofunda que vivía. En numerosas ocasiones, me había sentido ridiculizado, despreciado,desvalorizado ante otras personas adultas en distintas situaciones y ámbitos de mi vida. Asílo había vivido y me había sentido en los momentos más importantes en que se fragua lapersonalidad del ser humano. Más tarde mi baja autoestima me llevó a no trataradecuadamente a personas con las que tenía que trabajar en las aulas y a las que deseabaayudar. Tampoco ponía las barreras adecuadas para no permitir ser tratado sin respeto. Nose trataba de un maltrato físico, sino de una falta de respeto y tolerancia que no era sinola manifestación de la propia falta de respeto e intolerancia que vivía conmigo mismo.Realmente no sabía lo que hacía y he aprendido a no culpabilizarme, ya lo hice bastante alo largo mi vida. Se trataba sencillamente de asumir que había sido el producto de unaspersonas que, de una forma un otra, habían sido también víctimas, maltratadas, ignoradas.Era también el resultado de una época muy concreta de nuestra historia reciente. Su"malestar" y "desgracia" su había convertido también en el mío.

La conclusión que fui obteniendo con la ayuda de personas cercanas y queridas,con el intervención de la profesional que me atendió y con mi propia experiencia era,fundamentalmente, que tener una buena autoestima me ayudaba a comprender y aceptar alos demás, me iba permitiendo estar más pendiente de los otros, me iba ahorrando enormecantidad de energía que malgastaba "soportándome" a mí mismo. En ese proceso llevotrabajando día a día, años, muchas veces con la sensación de cansancio ante la tarea tansumamente costosa que supone el romper con hábitos durante tanto tiempo afianzados.Trato de ser benevolente conmigo mismo y el conocimiento que tengo de lo difícil que meestá resultando cambiar mis actitudes me hace ser menos exigente y más comprensivo conpersonas que me transmiten energía poco transparente o que me expresan que ellos noquieren cambiar nada en sus vidas.

Resumiendo lo que ha ido suponiendo el proceso de comprensión, aceptación,respeto hacía mí mismo, diré que el trabajo de mi autoestima me ha abierto al sentimiento,la percepción de mí mismo, que me está permitiendo confiar en mis recursos y

Manual de autoestima para docentes34

posibilidades, sentirme a gusto conmigo mismo y con los demás y por tanto me estáfavoreciendo el disfrute de la vida en la doble vertiente: personal y profesional. Bonet, J.V.(1995) nos dice que LA AUTOESTIMA es “la clave del éxito o del fracaso, es la clavepara comprendernos y comprender a los demás”, expresando a continuación que “de todoslos juicios a que nos sometemos, ninguno es tan importante como el nuestro propio”. YBranden, N. (1994) concluye: "Desarrollar la autoestima es desarrollar la convicción deque uno es competente para vivir y merece la felicidad, y por lo tanto enfrentar la vida conmayor confianza, benevolencia y optimismo, lo cual nos ayuda a alcanzar nuestras metas yexperimentar la plenitud"

2.2.3.Quiénes han influido en nuestra autoestima (la mía y la tuya).

La imagen que tenemos de nosotros mismos no es algo que nos vengaimpuesto por nuestros genes, sino que lo hemos aprendido a través de las interacciones conpersonas significativas de nuestro alrededor: padres, compañeros, amigos/as, profesores/as...

Nuestros padres. Las expectativas que nuestros padres depositaron ennosotros, sus sentimientos y sus actitudes hacia nosotros, sus interacciones con nosotros...han influido de manera decisiva en nuestra propia autoestima. Hemos aprendido avalorarnos al sentirnos valorados por ellos. Aún más: La propia autoestima de nuestrospadres ha sido un factor importantísimo que ha incidido en la nuestra.

El niño asimila, ya desde antes de su nacimiento, los mensajes que losadultos más significativos le van transmitiendo. El afecto, cariño, aceptación, amor... quelos padres, a través de su lenguaje no verbal y verbal, están lanzando al niño le convierte enun ser digno de amor, respeto, confianza, aceptación o de todo lo contrario. Eso es lo quenos viene a expresar la Sociedad Filium con las ideas que exponemos a continuación.

LOS HIJOS APRENDEN LO QUE VIVEN

Si un niño vive criticado aprende a criticar.

Si un niño vive con hostilidadaprende a pelear.

Si un niño vive avergonzadoaprende a sentirse culpable.

Si un niño vive con toleranciaaprende a ser tolerante.

Si un niño vive con estímulosaprende a confiar.

Si un niño vive apreciadoaprende a apreciar.

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .35

Si un niño vive con equidadaprende a ser justo.

Si un niño vive con seguridadaprende a tener fe.

Si un niño vive con aprobación aprende a quererse.

Si un niño vive con aceptación y amistadaprende a encontrar amor en el mundo. Sociedad Filium

Nuestros hermanos/as.

Las interacciones con nuestros hermanos, las comparaciones que establecimos conellos o que los adultos establecieron entre nosotros... han sido también factoresimportantes en el desarrollo de nuestra autoestima.

Más importantes que las interacciones que tuvimos con nuestros hermanos/asfueron los aciertos o errores educativos que nuestros padres tuvieron con nosotros:comparándonos innecesariamente, trazándonos metas poco realistas, "pasando" de nuestrasdiferencias de carácter, capacidades, cualidades...

Nuestros compañeros/as.

La escuela como marco en el que se desarrolla la sociabilidad del individuo asumeun valor enormemente importante en la evolución de la autoestima. En ambienteseducativos donde no se respetan las diferencias los niños fácilmente se vuelven crueles conlos más débiles, con los que presentan algún defecto físico o psíquico, con los que tienenproblemas de aprendizaje o de conducta, con todos aquellos que no responden al patrón denormalidad establecido a nivel social. La escuela viene a contrarrestar o a aumentar elgermen que el ambiente familiar ha depositado en el niño.

Los profesores y profesoras.

La imagen que le devuelven al niño los profesores y profesoras se convierten encriterio evaluador para sí mismo.

Numerosas investigaciones (Rosenthal, 1966; Rosenthal y Jacobson, 1968; Jussin,1986...) demuestran que el nivel de aspiración de los alumnos está en función delcomportamiento y de las expectativas del profesor o de la profesora. Las interacciones, lasactitudes, el lenguaje verbal y no verbal, los sentimientos implícitos y explícitos... sonemisiones que llegan al alumno y que le hacen sentirse bien o mal, aceptado o rechazado,útil o inútil, valioso o despreciable. El profesorado mitiga o aumenta los sentimientos devalorización o de rechazo que el niño ha vivido en la familia y que vive a diario con loscompañeros.

Manual de autoestima para docentes36

2.2.4. Cómo se llega a tener una autoimagen positiva o negativa.

A) A través de la atención que percibimos que nos prestan los demás. Esa atenciónse manifiesta inicialmente a través del lenguaje corporal que detectamos en las personasmás cercanas: padres, hermanos, compañeros/as, amigos/as, profesores/as... Es desde elrespeto y el cariño que la persona se siente aceptada, segura, confiada. Siente que esimportante y que merece el tiempo, la atención, el afecto de los demás. El mejor regaloque podemos recibir de otra persona es su tiempo, su atención, su escucha activa.Cuando alguien nos ofrece su tiempo para estar con nosotros, para escucharnos, paraatender a nuestras necesidades, nos está diciendo “eres importante para mí”,“mereces mi atención y mi tiempo”.

El lenguaje corporal también es importante. Mirar a los ojos, tener una posturarelajada, la sonrisa, los brazos y manos sueltas, el cuerpo erguido... son indicativos de quela otra persona nos interesa.

Ejemplos de ese lenguaje corporal:

¿Qué mensajes reciben los siguientes niños?

§ Madre dándole el biberón al niño mientras lee un libro. El niño solicita su atencióny la madre sigue con su lectura. Mensaje : “Para mi madre el libro es másimportante que yo”.

§ Niño que solicita a su padre que le cuente un cuento, que juegue con él, que le lleveun rato de paseo. El padre no atiende a los requerimientos del niño: sigue viendo latelevisión, leyendo el periódico, dormitando... Mensaje : “No merezco la atenciónde mi padre. Tiene cosas más importantes en las que ocuparse. Yo soy menosimportante que esas cosas”.

b) A través de las experiencias que vivimos. Las personas necesitamos pasar porsituaciones en las que podamos probar que somos capaces, que podemos, que valemos,que estamos preparados para afrontar los retos que la vida nos presenta. El éxito en esasexperiencias nos hace sentirnos valiosos y dignos. Es importante en este sentido elconceder mayor capacidad de decisión, autonomía, al niño conforme va creciendo.Darle autonomía para que se sienta capaz de hacer las cosas por sí mismo. Es importantetambién permitirle expresar sus sentimientos, comentar sus apreciaciones sobre laspersonas y los hechos... Y más importante que todo lo anterior es escucharle. Incidiendode nuevo en lo expresado anteriormente: Cuando escuchamos a alguien le estamosdemostrando que es importante para nosotros, que merece nuestra atención y nuestrotiempo. Escuchar supone trabajar en nosotros una serie de actitudes: cercanía, dejar delado nuestra propia manera de pensar, mirar a la persona que trata de comunicarse connosotros, adoptar una postura abierta a la recepción del mensaje...

c) A través de la palabra. Las palabras pueden servir para erigir o derrumbar el propiorespeto que todos nos debemos a nosotros mismos. "Torpe", "irresponsable", "no sepuede hacer nada contigo", "eres un pelmazo" tienen un mensaje cualitativamentediferente a "eres fenomenal", "lo has hecho muy bien", "me lo paso muy bien contigo",

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .37

"agradezco tu ayuda"... Tan importante como la palabra son los gestos que laacompañan, el tono de voz, la situación en que se produce.

2.2.5. Características de una autoestima sana:

Bonet, José V. señala las siguientes características, a las que llama las “Aes” de laautoestima:

a) Aprecio por uno mismo como persona, independientemente de lo que puedahacer o poseer. Aprecio que incluye todo lo positivo que pueda haber en uno/a mismo/a:aspecto físico, inteligencia, habilidades, afectos, sentimientos...

b) Aceptación tolerante y esperanzada de sus limitaciones, debilidades, errores yfracasos. Se reconoce un ser humano falible, como todos los demás, y no le extraña niacongoja demasiado el hecho de fallar con mayor o menor frecuencia.

c) Afecto: Una actitud positivamente amistosa, comprensiva y cariñosa hacia símisma, de tal suerte que la persona se sienta en paz, no en guerra, con sus pensamientos ysentimientos (aunque no le agraden), con su imaginación y con su cuerpo (con todas susarrugas y verrugas). Y, así, sabe disfrutar de la soledad sin desdeñar de la compañía. "Seencuentra bien consigo mismo dentro de su propia piel" (L. Racionero).

d) Atención y cuidado fraternal de sus necesidades reales, tanto físicas comopsíquicas, intelectuales como espirituales (no hablamos de las "necesidades innecesarias"creadas artificialmente por una publicidad agresiva y engañosa).

Y añade a las anteriormente dichas: Apertura, Autoconsciencia y -en una palabraque incluye todas las antedichas- Afirmación.

2.2.6. Cómo influye la autoestima en nuestra vida.

La autoestima tiene una influencia decisiva en nuestra vida, podemos considerarque es la clave de nuestro desarrollo personal y social, de nuestra maduración comopersonas y como profesionales. La autoestima nos ayuda a saber quiénes somos y dóndenos situamos y, por tanto, no darle importancia a las críticas destructivas que nos puedanhacer. El sentimiento de dignidad que lleva aparejado el concepto de autoestima nos hacediferenciar claramente lo que somos de lo que hacemos, haciéndonos fuertes frente asituaciones y/o personas que pretendan invalidarnos por errores, imperfecciones,“desbordamientos emocionales” ocasionales que son propios de todo ser humano.

Personalmente, conforme he ido aumentando mi autoestima se han ido produciendolos siguientes cambios:

• He puesto progresivamente mi atención en todo lo bueno y positivo que hay en mi vida.

• He ido aprendiendo a no generalizar mis problemas, dificultades, “meteduras de pata” atoda mi vida.

Manual de autoestima para docentes38

• Distingo con claridad lo que es una actuación inadecuada de lo que es un hábito queentorpece mis relaciones con los demás o me hace sentir mal conmigo mismo.

• Trato de discriminar entre las ideas no realistas y las que corresponden a hechos ysituaciones en las que es necesario asumir las responsabilidades derivadas de una formade actuar no adecuada.

• Voy asumiendo riesgos que antes me consideraba incapaz de afrontar.

• Acepto lo que pienso y siento. Trato de ser auténtico, sin importarme lo que los demáspuedan pensar o decir.

En definitiva, la autoestima me va haciendo percibirme a mí mismo y a los demásde forma realista y al mismo tiempo optimista: Sé que soy así, que no lo he hecho todo lobien que debería, que me he equivocado en lo que he dicho, pero... ¡puedo aprender de esasituación para no volver a repetirla! TODO EN MI VIDA PUEDE MEJORAR SI ME LOPROPONGO. Los obstáculos no son fuente de sufrimiento, sino un MANUAL DEAPRENDIZAJE con el que voy cambiando mi forma de actuar, de pensar y de percibir mivida y las relaciones con los demás.

Ahora considero la autoestima como fundamental para gozar de la vidaplenamente, sentirme dichoso a pesar de mis fallos y adoptar una actitud abierta, tolerante,respetuosa, abierta al cambio y crecimiento personal.

Fundamental : Si deseas desarrollar tu autoestima pon tu atención en lomucho de bueno que hay en ti. Esas cualidades, valores, actitudes,comportamientos... crecerán, se desarrollarán. CRECERÁS COMO PERSONA YCOMO PROFESIONAL.

Si pones tu atención en tus defectos, fallos, imperfecciones, en lo que te hacedaño... será eso lo que crezca y, por tanto, te “machacarás”. No sacarás nada positivo de tuactitud negativa.

Tu autoestima te hará consciente de que en el mundo existen las personas conactitudes deshonestas, irrespetuosas, intolerantes, envidiosas, destructivas, falsas...APRENDE A DISTINGUIRLAS Y DA TU CONFIANZA SOLAMENTE A QUIEN DEVERDAD LA MERECE. No las juzgues haciendo referencia a su SER. Como personasson dignas y sus actitudes siempre pueden cambiar.

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .39

2.2.7. La influencia de la autoestima del profesor en sus alumnos.

De forma resumida voy exponer unas ideas que considero básicas, teniendo encuenta a los profesionales a los que va dirigido, de forma especial, este libro:

1. Si no te aceptas, te respetas, te quieres... no podrás sintonizar con tus alumnos yalumnas. Habrás puesto una barrera que te impida disfrutar de la relación con ellos ygastarás enorme cantidad de energía en el planteamiento de estrategias para sentirteseguro y cómodo dentro de la máscara que te has colocado. SÉ TU MISMO/A comoprimer paso para transmitir ilusión, ganas de aprender, optimismo y amor por la vida.

2. Si te sientes a gusto contigo mismo estarás más atento a percibir lo bueno de los demás,

tus críticas serán constructivas y realizadas desde el respeto y el amor, serás transmisorde paz y no entrarás en GUERRAS que no te corresponden ni benefician.

3. Los alumnos, al igual que cualquier persona observadora, perciben claramente el tipo de

energía que transmites. Si transmites cariño, aceptación, respeto... estarán máspredispuestos al cambio. Si aprecian en ti deseos de venganza, ira, odio... te devolveránesa misma energía pero de una manera que quizá te resulte muy difícil de contener,aceptar y asumir.

4. Tu conducta verbal y no verbal son indicadores para el alumno de cómo te cae, de lasexpectativas que tienes sobre él o ella, de la confianza o desconfianza que te merece.Cuida mucho tu lenguaje verbal y no verbal, como un aspecto fundamental paraentablar relaciones de respeto con tus alumnos.

5. Admite los errores, fallos e imperfecciones, tuyos y de ellos. Muéstrate flexible. Nadie

ha nacido sabiendo y hemos de dar a los niños, adolescentes y jóvenes la posibilidad deaprender sin sentirse invalidados por nuestras palabras, actitudes o conductas.

6. Mantén una actitud perceptiva activa (de visión, escucha e intuición) que te permita ver,escuchar e intuir mucho más allá de los gestos, palabras y actitudes que te muestren laspersonas con las que te relacionas.

7. Plantea, dentro de tu plan de Acción Tutorial, programas de trabajo en la línea deestimular tu autoestima y la de tus alumnos, el desarrollo de habilidades sociales y lasolución adecuada de conflictos y problemas. Ayuda a tus alumnos a conectar con sussentimientos, a aceptarlos y a plantear estrategias para que nunca se conviertan enperjudiciales para ellos ni para los demás.

8. No desligues tu crecimiento profesional de tu crecimiento personal. Hacer bien tutrabajo, sentirte a gusto haciéndolo, esforzarte y ser constante en la búsqueda deestrategias que solucionen o mitiguen los problemas a los que te enfrentas, te conduciráa sentirte satisfecho y realizado en la doble vertiente: personal y profesional. Tu trabajopersonal contribuirá a que los alumnos con los que tratas se sientan bien contigo,aprendan a ser personas y a convivir.

Manual de autoestima para docentes40

NOTAS :

(1) Estas son algunas de las definiciones que distintos autores han dado sobre laautoestima:

"Actitud valorativa hacia uno mismo. Consideración, positiva o negativa desí mismo. La autoestima está estrechamente relacionada con el propio autoconcepto y es elresultado o cristalización de sucesivas autoevaluaciones". Diccionario Enciclopédico deE.E. Diagonal/Santillana.Madrid-1985.

"Es la suma de la confianza (sentimiento de capacidad personal) y elrespeto por uno mismo (sentimiento de valía personal)" Branden, N. 1987.

“La autoestima tiene que ver con la medida en que me respeto o tengo unaopinión favorable de mí”. Hare, Beverly. 1988.

"Es el conjunto de las actitudes del individuo hacia sí mismo" R.B. Burns.El autoconcepto. EGA. Bilbao 1990.

"La autoestima es la experiencia de ser aptos para la vida y para lasnecesidades de la vida. Más específicamente, consiste en: 1. Confianza en nuestracapacidad de pensar y de afrontar los desafíos básicos de la vida. 2. Confianza en nuestroderecho a ser felices, el sentimiento de ser dignos, de merecer, de tener derecho a afirmarnuestras necesidades y a gozar de los frutos de nuestros esfuerzos". Branden, N. 1992.

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .41

2.2.8. DOCUMENTOS PERSONALES DE TRABAJO.

DOCUMENTO PERSONAL DE TRABAJO. 1.

“PARA SER CONSCIENTE DE...”

¿QUÉ TAL SE PORTARON CONMIGO?

"Cuando emprendía algo que te desagradaba y tú me amenazabas con un fracaso,mi respeto a tu opinión era tan grande que el fracaso era inevitable, aun cuando no debieraproducirse hasta más tarde. Perdí toda la confianza en mis propios actos. Me tornévacilante, indeciso. A medida que me iba haciendo mayor iba aumentando el material quepodrías oponerme como prueba de mi escasa valía. Poco a poco los hechos te dieron larazón en ciertos aspectos."

Kafka. "Carta al padre".

Vas a analizar qué sentimientos tienes con respecto a las conductas yactitudes que personas significativas en tu vida (padre, abuelos, hermanos/as,profesores/as...) tuvieron contigo durante tu infancia, adolescencia y juventud:

PERSONAS CONDUCTAS/ACTITUDES SENTIMIENTOS

PADRES

COMPAÑEROS/ASAMIGOS/AS

PROFESORES/AS

OTRAS PERSONAS

Manual de autoestima para docentes42

¿En qué manera influyen las conductas/sentimientos enumerados en miautoconcepto y autoestima actual? P.e.: Tengo una actitud benevolente ante mis fallos yerrores.// Soy muy exigente conmigo mismo/a...

¿Qué conductas y actitudes negativas, quizá aprendidas en tu historia, son unoshábitos que te dificultan la aceptación incondicional de ti mismo y de los demás?

Ayúdate a ser un/a buen/a tutor/a. J.J. Albaladejo Nicolá .43

DOCUMENTO PERSONAL DE TRABAJO 2 ¿Qué tal mi autoestima?

Aspectos a considerar NO

(1)

AVECES

(2)

SI

(3)1. Acepto mi cuerpo, mi físico tal y como es.2. Reconozco y acepto mis cualidades y limitaciones.3. Soy consciente de los sentimientos (*) que tengo y losexpreso de modo adecuado.4. Tengo confianza y seguridad en mi mismo/a.5. Mis aspiraciones son realistas.6. Acepto mis errores, equivocaciones, limitaciones.7. Respeto, valoro y acepto a los demás como son.8. Suelo adoptar una postura optimista ante la vida.9. Soy capaz de integrarme activamente en un equipo detrabajo.10. Disfruto, me divierto en mis relaciones con los demás.11. Soy capaz de pedir lo que necesito.12. Acepto mi sexo.13. Autocontrolo mis impulsos.14. Soy una persona abierta y flexible.15. Tomo la iniciativa en el contacto social.16. Me esfuerzo y soy constante a pesar de lasdificultades.17. Soy capaz de asumir los riesgos que implica una tareanueva.19. Tengo una actitud empática. Conecto bien con lasnecesidades de los otros.20. Soy autónomo en mis decisiones y disiento sinagredir.

SUMA DE LAS PUNTUACIONESTOTAL: (1)+(2)+(3) =

Importante : Los aspectos enumerados en este cuestionario habrás de analizarlosbuscando indicadores de que cumples o no con esa conducta, actitud. Losvalorados con “NO” son los que deberás considerar como objetivos prioritarios detrabajo para fortalecer tu autoestima.