Para mi abuelo, Rubecindo

“EmpaTÍa heredada”

Historia de Nuestros Orígenes

por: Sara Alas

“Empatía Heredada” es la historia de mi abuelo, Rubecindo Álvarez Hernández, un hombre que cambió la vida de muchas personas por medio de la empatía y amabilidad con los demás. Nunca nos dimos cuenta del gran corazón que él tenía hasta que escuchamos las historias en el velorio de su muerte.

Muchas personas vinieron de diferentes partes para darle el último adiós, todas con una versión diferente de como lo conocieron y como les cambió la vida.

Y esta es su historia...

Historia de Nuestros Orígenes

EL

ADORSALV

1934

HISTÓRICOcontexto

Ubicandonos bajo los diferentes contextos en este lapso de tiempo el país sufrió una montaña rusa de buenos y malos momentos debido a diferentes situaciones que se presentaron.

En el sector económico experimentó un ascenso por medio de la red ferroviara nacional, la construcción de puentes y carreteras que beneficiaron la comunicación y la comercialización entre los diferentes departamentos. Por otro lado también se encontraba marcado las clases por medio de los terrenos que estos poseían.Paralelo a esto se sufrió la mposición del General Maximiliano Hernández Martínez con la cual los indígenas reaccionaron con las manifestaciones en su contra.Por último se vivieron destrucciones por medio de la naturaleza, pestes, enfermedades, terremotos, inundaciones, deslizamientos de tierra, incendios, erupciones volcánicas, sequías, un huracán, entre otros.

JUNIO 1934

El salvadorSanta Rosa de Lima,

La Libertad

En el cantón de Copetillos ubicado en Santa Rosa de Lima, un pequeño bebé al que llamaron Rubecindo.

Rubecindo nació y creció entre una familia trabajadora y con buenos valores, los cuales siempre le dieron amor a su único varón.

A pesar de la inmensa felicidad que había entre ellos, una trajedia sucedió, cuando él sólamente tenía 3 años presencia la muerte de su padre ante la enfermedad que estaba atacando el país en ese momento, el paludismo.

La trajedia para su familia fue inmensa pues su padre era la fuente de ingresos en el hogar.

Desde pequeño le inculcaron el pensamiento de que él en algún momento llgaría a ser la cabeza de la familia, aquél que velaría por el bienestar de ella y cada uno de sus miembros.

En dicha época aquellas personas que no tenían terrenos o no eran acendados vivían en casas de paja o de adobe, una combinación de barro, tierra y hojas verdes. Creció con su madre y su tío, los cuales le enseñaron sobre los diferentes oficios. Su tío practicaba el oficio de la herreria siendo este el que aprendió Rubecindo en su infancia.

Con el tiempo sus buenos valores y sus habilidades con la herrería fueron mejorando, siempre acompañaba a su tío cuando debía de hacer un negocio o un trato con alguien más, aprendió a tratar con las diferentes personas y sus necesidades,se le facilitaba socializar con cualquier persona. De igual manera estuvo al lado de cada trabajo que su tío realizó, viendo y aprendiendo como utilizar las diferentes herramientas y los diferentes usos de cada una de las máquinas que había que utilizar para el manejo del metal.

Rubecindo tuvo diferentes oportunidades por sus diferentes habilidades, en 1946 recibe una tentadora oferta; le ofrecen dejar el país e ir a trabajar al extranjero, bajo mejores condiciones y una mejor paga. A pesar que en esos momentos estaban viviendo una crisis económica, Rubecindo decide quedarse y cuidar de cerca a su familia, sin imoportar los problemas o sacrificios futuros.

1951

En el país se vivieron 2 terremotos de 5.9 y 6.0 en escala de Ritchter, lo cual obligó a una gran cantidad de poersonas a moverse a otros municipios mientras recontruían las ciudades, de igual manera se inauguraron las carreteras Panamericana y Troncal del Norte, lo que agilizó el comercio y la transportación en el país.

Aprovechando dicho momento, por primera vez pone en práctica todo lo aprendido y realiza su primer trabajo como herrero. Sale al pueblo a vender tijeras metálicas hechas con sus propias manos; gracias a sus habilidades para tratar con las personas comienza a hacerse conocido en el pueblo y a ganar fama. Lo buscan para hacer piezas a la medida, ya sea para pistolas como para carros. Sus diferentes aptitudes logran tal alcance que comienza a tener amistades políticas importantes, tomando en cuenta que el contexto histórico de la época, aún estaba la dictadura del General Maximiliano Martínez en cual incluyó en la rutina del país la pena de muerte a delincuentes e indígenas.

Gracias a su personalidad la cual genera confianza y seguridad en 1959 logra ser parte de un grupo de la policía el cual debía de velar por la seguridad de los diferentes cantones. En una de sus visitas conoce el amor de su vida, Paulina. Desde un principio se sintió atraído hacia ella, por lo que comenzó a robar su corazón con pequeñas serenatas con su guitarra y con canciones del afamado “Pedro Infante”.

A pesar de la romántica historia que vivían estos dos enamorados, sus padres no pensaban lo mismo, pues no aprobaban que su hija estuviera con un hombre 7 años mayor que ella. Esto no les importó y se escaparon a San Pablo Tacachico, Opico.

Se acompañaron y al cabo de unos meses tuvieron su primer hijo. Sin embargo no todo fue color de rosa, en estos tiempos la enfermedad de los 7 días se hizo conocida en los cantones, los bebés recién nacidos solamente vivían una semana, luego morían. Por la época no se tenía ningúna prueba científica, solamente los conocimientos heredados por medio de las generaciones.

1960

Gracias a su personalidad la cual genera confianza y seguridad en 1959 logra ser parte de un grupo de la policía el cual debía de velar por la seguridad de los diferentes cantones. En una de sus visitas conoce el amor de su vida, Paulina. Desde un principio se sintió atraído hacia ella, por lo que comenzó a robar su corazón con pequeñas serenatas con su guitarra y con canciones del afamado “Pedro Infante”.

A pesar de la romántica historia que vivían estos dos enamorados, sus padres no pensaban lo mismo, pues no aprobaban que su hija estuviera con un hombre 7

Y la historia continúa...

Por desgracia, yo no tuve la dicha de compartir muchos recuerdos con mi abuelo, cuando yo nací él tenía 59 años y vivíamos a 45 mins de distancia. Pasabamos toda la familia juntos algunas festividades, tengo vagos recuerdos de él conmigo, hablandome, ofreciendome comida, sentado junto a mí...

Cuando cayó enfermo estuvo en mi casa por unos cuantos meses hasta su muerte.

Durante el novenario recuerdo que su casa pasaba todo el tiempo llena,llegaba todo tipo de gente que nunca había visto y veía como hablaban con mis tíos y mi abuela, luego mi madre me comentaba todas las historias. El día del entierro logré comprobar que todo eso era cierto, me dejó pensando por mucho tiempo, nunca pensé que él sería de ese tipo de personas, las que hacían buenas acciones a escondidas.

Desde ese momento lo tomé como inspiración para cambiar, para ver que todas las buenas acciones sin importar las circunstancias, valen la pena; que las palabras mueven, pero las acciones arrastran.