guÍa de estudio - up mun

GUÍA DE ESTUDIOReducción de riesgo de desastres naturalesComisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales

Del 20 al 22de septiembrede 2017

Sesión del 20, 21 y 22 de septiembre de 2017 Modelo de las Naciones Unidas de la Universidad del Pacífico

Estimados delegados, ¡Bienvenidos a la séptima edición del Modelo de Naciones Unidas de la Universidad del Pacífico (UP MUN)! Mi nombre es Karina Rodríguez y tengo el honor de ser la Secretaria General del Modelo de Naciones Unidas organizado por mi casa de estudios, la Universidad del Pacífico. Junto a la Universidad, he tenido la oportunidad de formar parte de diversos proyectos relacionados al MUN. He participado como directora principal de UP MUN en las ediciones del 2013, 2014 y 2015, y como Secretaria General de UP MUN 2016. Asimismo, en el 2015, fui parte del equipo organizador de la Asociación de Estudios sobre Naciones Unidas del Perú (Aenu Perú), quien, en alianza con la Universidad del Pacífico, trajo el Harvard National Model United Nations-Latin America (HNMUN-LA) por primera vez a Lima. Mi pasión por el MUN inició en el 2010 cuando, siendo estudiante de economía, me uní al equipo de debate de Aenu Perú, “Peruvian Universities” (PU). Junto a este equipo debatí en el Harvard National Model United Nations (HNMUN) 2011 y 2012, donde obtuve los premios Honorable Mention y Outstanding delegate, respectivamente. Luego de ello, he dirigido y entrenado delegaciones para conferencias internacionales, tanto para HNMUN, como para el Harvard World Model United Nacions (Worldmun) y HNMUN-LA. También he ocupado el cargo de Secretaria General Adjunta del Lima Model United Nations (LiMUN) 2015, el Modelo de Naciones Unidas para escolares más grande a nivel nacional. Actualmente, soy Directora General de Aenu Perú, asociación que busca utilizar el MUN como una herramienta para desarrollar habilidades de oratoria y negociación en los jóvenes y formar futuros líderes. El MUN te permite desarrollar una serie de habilidades muy valiosas para el crecimiento personal y profesional, tales como habilidades de oratoria y negociación, capacidad de redacción y síntesis, y un mayor conocimiento académico de la realidad internacional. Pero, quizás una de las habilidades interpersonales más importantes que desarrolla el MUN es la empatía. El juego de roles al representar a un país ajeno te da la oportunidad de ponerte en la situación de otros, teniendo la sensibilidad suficiente para entender estas perspectivas y defenderlas, a pesar de que puedan no estar en línea con tus propias opiniones. Además, en el MUN debes trabajar con otros delegados, por lo que aprendes a negociar y trabajar con distintos tipos de personas, y a manejar situaciones de estrés y constante cambio. En estos años, he visto de primera mano el impacto que puede tener el desarrollo de estas habilidades, por lo que estoy muy contenta de seguir siendo parte de proyectos MUN. Cada uno de los seis temas de UPMUN 2017 han sido seleccionado por su alta relevancia global y presentan una gama amplia de los principales problemas sociales, económicos y políticos de la actualidad. Espero disfruten leyendo las guías de estudios preparadas con mucho trabajo por sus directores y que disfruten aún más debatiendo estos temas en UP MUN 2017. ¡Nos vemos pronto en la Universidad del Pacífico! Karina Rodríguez Secretaria General Séptima edición del Modelo de las Naciones Unidas de la Universidad del Pacífico


Estimados delegados,

¡Bienvenidos a la Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales (SOCHUM)!

Mi nombre es Verónica Díaz y seré la Directora de SOCHUM en UP MUN 2017. Este año, el tema a

tratar en la Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales será la Reducción de Riesgo de

Desastres Naturales. El tema se puede abordar desde distintas aristas tales como el impacto económico y

social, el efecto en el bienestar de la población y enfoque de derechos, y las consecuencias generadas

por el cambio climático. Así, cuanto más comprendamos las causas y consecuencias de la generación y

acumulación de riesgos, mejor seremos capaces de adaptar, mitigar y prevenir en el futuro.

En SOCHUM, buscaremos analizar estos aspectos, lo cual no es una tarea sencilla dado que requiere de

una visión integral, adaptada a las distintas necesidades de los Estados Miembro y derivada a través de

un consenso. Se espera que nuestra Comisión tenga un enfoque interdisciplinario y, por ello,

incentivamos a delegados de diversas carreras a participar.

Soy ex alumna de la Universidad del Pacífico y he participado anteriormente en UP MUN como

delegada en los años 2013 y 2014, por ello es muy especial para mí poder formar parte de la mesa

directiva este año. Mi carrera en Modelos de Naciones Unidas empezó en simulaciones que llevé a cabo

cuando estuve en el colegio y luego retomé esta actividad en el año 2014 con el equipo Peruvian Debate

Society.

Soy bachiller en economía de la Universidad del Pacífico y actualmente trabajo en el Ministerio de

Educación. Asimismo, soy subdirectora de la sección de Políticas Públicas del área de Economía en el

diario web “Punto y Coma” donde escribimos de diversos temas que permiten que nos mantengamos

actualizados con la realidad del Perú y del mundo.

Acompañándome como Directora Adjunta estará Karina Campos, estudiante de la Facultad de

Psicología de la Universidad Cayetano Heredia. Karina se unió al equipo Peruvian Debate Society en el

2015 y, desde entonces, ha participado como delegada en el Harvard National Model United Nations

(HNMUN) 2015 y 2016 obteniendo grandes resultados. Además, ha sido directora del Fondo de las

Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en el Villa María Model United Nations (VMMUN) 2017.

Junto con Karina Campos, haremos nuestro máximo esfuerzo para que tengan una gran experiencia en

UPMUN. Esperamos que este comité propicie un debate dinámico y con alto nivel de contenido,

encuentren el tema interesante y, sobre todo, que aprendan y se diviertan discutiéndolo.

¡Nos vemos el 20, 21 y 22 de septiembre!

Verónica Lucía Díaz Hinostroza

Directora de la Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales

Séptima edición del Modelo de las Naciones Unidas de la Universidad del Pacífico


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Guía de estudio: Reducción del riesgo de desastres naturales Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales

Verónica Díaz (Directora)

Karina Campos (Directora adjunta)

Contenido de la guía de estudio 1. INTRODUCCIÓN .................................................................................................................. 3

A. Acerca de la Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales ........................ 3

B. Definición del problema ................................................................................................... 4

2. DISCUSIÓN DEL PROBLEMA ............................................................................................ 5

A. Conceptos principales ...................................................................................................... 5

B. Vulnerabilidad frente a desastres naturales ...................................................................... 7

C. Impacto de los desastres naturales ................................................................................. 10

D. Valoración errónea del riesgo ........................................................................................ 17

3. ACCIONES PASADAS DE LAS NACIONES UNIDAS ................................................... 20

A. Estrategia Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres ............................. 20

B. Oficina para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNISDR) .................................... 20

C. Plataforma Global para la Reducción del Riesgo de Desastres ..................................... 21

D. Marco de Acción de Hyogo (2005 – 2015) .................................................................... 21

E. Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres (2015 – 2030) .................... 22

4. POSIBLES SOLUCIONES .................................................................................................. 23

A. Soluciones a corto plazo ................................................................................................. 23

B. Soluciones a largo plazo ................................................................................................. 23

C. Desarrollando ciudades resilientes ................................................................................. 24

5. POSICIONES POR BLOQUE ............................................................................................. 24

6. PREGUNTAS QUE TODO PROYECTO DE RESOLUCIÓN DEBE RESPONDER ....... 26

7. RECOMENDACIONES FINALES ..................................................................................... 26

8. FUENTES CITADAS Y CONSULTADAS ........................................................................ 27


3

1. INTRODUCCIÓN

Actualmente, las pérdidas causadas por los desastres naturales son seis veces mayores al monto registrado

en la década de 1980 y el costo de los desastres naturales alcanza hasta 300 mil millones de dólares cada

año. 1 Producto del cambio climático, y otros factores, algunos tipos de desastres naturales

como aluviones, terremotos, huracanes y olas de calor, son cada vez más recurrentes, por lo que resulta

esencial comprender, fortalecer, invertir y aumentar la preparación en materia del riesgo de desastres

naturales tal y como se establece a través del “Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres

2015-2030”. Dicho documento tuvo como objetivo comprender mejor el riesgo de desastres en diversas

dimensiones relativas a la exposición, vulnerabilidad y características de las amenazas, además de

fortalecer la gobernanza del riesgo de desastres y establecer siete objetivos mundiales con respecto a la

reducción de riesgo de desastres.

De acuerdo al informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres 20152, estos

eventos son mucho más letales en países en desarrollo, en los que la falta de prevención, adaptación y

mitigación contribuyen a incrementar los daños generados. En este contexto, nuestra Comisión tiene la

responsabilidad de buscar estrategias y convertirse en un espacio de diálogo para encontrar soluciones

frente a esta urgente materia.

A. Acerca de la Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales

La Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales (SOCHUM por sus siglas en inglés), o

Tercera Comisión de la Asamblea General, fue fundada en el año 1945 junto con la creación de las

Naciones Unidas y las demás Comisiones Principales de la Asamblea General de las Naciones

Unidas. Dichas comisiones se caracterizan por contar con la participación de cada uno de los Estados

Miembros que forman a las Naciones Unidas, quienes están representados por un voto y cuyas

decisiones se toman mediante votación por mayoría absoluta de los Estados Miembros presentes y

votantes.3

Como se estipula mediante la Carta de las Naciones Unidas, la Asamblea General tiene una serie de

funciones, entre las que se encuentra examinar, debatir y hacer recomendaciones a la comunidad

internacional sobre temas relacionados con la paz internacional, el derecho internacional, los

derechos humanos, etc. 4 En específico, esta Comisión examina cuestiones relacionadas con el

desarrollo social tales como juventud, familia, personas con discapacidad, prevención del delito y

control internacional de drogas. Asimismo, las resoluciones debatidas y aprobadas en la Tercera

Comisión de las Asamblea General abordan cuestiones urgentes del mundo frente a las crisis

humanitarias que siguen asediando a la población mundial. Entre estas la protección de los niños, la

1 El Banco Mundial. (2017). Building Resilience. Recuperado el 11 de julio del 2017 de https://www.documentcloud.org/documents/835955-wbg-2013-building-resilience.html 2 Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html

3 Organización de las Naciones Unidas. (2017). Reglamento de la Asamblea General. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Asamblea General de la ONU: http://www.un.org/es/ga/about/ropga/ropga_cttees.shtml 4 Organización de las Naciones Unidas. (2017). Social, Humanitarian & Cultural. Recuperado el 23 de julio de 2017, de GENERAL ASSEMBLY OF THE UNITED NATIONS SOCIAL, HUMANITARIAN & CULTURAL - THIRD COMMITTEE: http://www.un.org/en/ga/third/


4

situación de comunidades indígenas y refugiados, la promoción de las libertades fundamentales

mediante la eliminación del racismo y discriminación racial.

SOCHUM es esencial para promover y proteger los derechos humanos y el desarrollo y el progreso

social. Así, la Tercera Comisión ha patrocinado muchas conferencias que han dado lugar a cambios

en las mentalidades, normas y políticas, incluyendo la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el

Desarrollo Sostenible (2012). Asimismo, uno de los documentos más cruciales producidos por la

comunidad internacional, la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH), fue discutido y

editado en la Comisión. A partir de ello, es evidente que SOCHUM puede tener un enorme impacto

en la comunidad internacional sobre algunos de los problemas y desafíos que enfrenta y enfrentará la

comunidad internacional.

Esta Comisión trabaja en conjunto con otras entidades de las Naciones Unidas para promover,

proteger e incentivar el respeto por los derechos humanos y libertades fundamentales mediante la

cooperación internacional de los Estados Miembros. Esto con la finalidad de fortalecer la

cooperación bilateral, regional e internacional para hacer frente al impacto adverso de las crisis

globales tales como crisis financieras y económicas, crisis alimentarias, cambio climático y desastres

naturales que abordaremos en la presente sesión.

B. Definición del problema

Los desastres, emergencias y catástrofes pueden ser naturales o provocados por el hombre y ocurrir

en cualquier momento. El desastre es un término usado para describir una variedad de situaciones

tales como inundaciones, huracanes, terremotos, incendios y más.

A partir del Manual de Gestión del Riesgo de Desastres para Comunicadores Sociales elaborado por

la UNESCO5 se define lo siguiente:

Desastre: se refiere a la alteración que se genera por el impacto de un fenómeno de origen

natural o producto de la acción del ser humano, incidiendo directamente en el

funcionamiento de una sociedad. La Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres

de las Naciones Unidas expresa que un desastre ocasiona una gran cantidad de muertes al

igual que pérdidas e impactos materiales, económicos y ambientales que exceden la capacidad

de la comunidad o la sociedad afectada para hacer frente a la situación mediante el uso de sus

propios recursos.

Riesgo: es la suma de las posibles pérdidas que ocasionaría un desastre u otro evento

adverso en términos de vidas, condiciones de salud, medios de sustento, bienes y servicios,

en una comunidad o sociedad particular en un período específico de tiempo en el futuro.

Peligro-amenaza: se define como la probabilidad de ocurrencia de un fenómeno natural o

tecnológico, potencialmente dañino para un periodo de tiempo específico, en una localidad o

zona conocidas. Dependiendo del país, el término peligro u amenaza toma definiciones

distintas. Por ejemplo, en el caso del Perú el término amenaza se utiliza para señalar un

peligro inminente. Los peligros-amenazas pueden ser:

5 Ulloa, F. (2011). Manual de gestión del riesgo de desastres para comunicadores sociales. Recuperado el 23 de julio de 2017, de

UNESCO: http://unesdoc.unesco.org/images/0021/002191/219184s.pdf


5

De origen natural o generados por los procesos dinámicos propios del planeta.

Socio-natural, si afectan a los seres humanos y sus procesos de desarrollo.

Inducidos por la actividad o acción de los seres humanos.

La Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales se enfocará únicamente en los

desastres de origen natural o aquellos que son generados por los procesos dinámicos propios del

planeta. La relevancia de este tema radica en que el establecimiento de medidas preventivas puede

evitar que un fenómeno natural se convierta en un desastre. En el 2011 como consecuencia de 302

desastres, 206 millones de personas sufrieron sus consecuencias y se produjo el fallecimiento de más

de 300 mil personas.6 Es así que se espera que los delegados resalten la importancia de la reducción

de riesgos de desastres, proponiendo iniciativas que refuercen la resistencia ante los desastres y que

construyan un futuro más equitativo y sostenible.

La gestión de riesgo de desastres es un reto sobre todo para muchos países en desarrollo, quienes no

invierten lo suficiente en medidas de prevención adecuadas para evitar y/o minimizar los efectos de

los desastres naturales. Se debe incorporar formalmente el componente de fortalecimiento y

seguimiento a las medidas de prevención para lograr mejores resultados. Será un reto para los países y

sus distintos niveles de gobierno, así como para todos los actores relacionados al tema, tales como

ONGs, unirse en su rol de enfrentar la reducción de riesgo de desastres y así consolidar una visión

sostenible y eficaz enfocada en la mitigación de riesgo. El impacto de los cambios climáticos al igual

que el crecimiento no planificado de la población son temas de suma importancia que se deben tener

en cuenta para poder implementar medidas sostenibles para reducir el riesgo de desastres.

2. DISCUSIÓN DEL PROBLEMA

A fin de enmarcar la discusión, se deben comprender ciertos conceptos claves, así como tener en cuenta

algunos factores que incrementan la vulnerabilidad de algunas regiones para posteriormente plantear

iniciativas sostenibles. Estas iniciativas a implementar deben ser propuestas luego de un análisis del

impacto económico y social que ocasiona un desastre natural para evitar una valoración errónea del

riesgo.

A. Conceptos principales

Existen cuatro áreas de alivio de desastres: mitigación, preparación, respuesta y recuperación. Estas se

describen brevemente a continuación7:

Los esfuerzos de mitigación son intentos para evitar que las amenazas naturales se

conviertan en desastres o para reducir los efectos de los desastres. Esta fase se centra en

medidas a largo plazo para reducir o eliminar el riesgo y que se son parte del proceso de

recuperación si se aplica después de un desastre.

6 Clark, H. (15 de agosto de 2012). Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Recuperado el 23 de julio de 2017, de http://www.undp.org/content/undp/es/home/ourperspective/ourperspectivearticles/2012/08/15/building-resilience-the-importance-of-disaster-risk-reduction.html

7 Ulloa, F. (2011.) Manual de gestión del riesgo de desastres para comunicadores sociales. Recuperado el 23 de julio 2017 de:

http://unesdoc.unesco.org/images/0021/002191/219184s.pdf


6

La preparación es la forma en que se puede cambiar el comportamiento para limitar el

impacto de los eventos de desastre en las personas. Esta implica un ciclo continuo de

planificación, capacitación, equipamiento, monitoreo, evaluación y mejora de las actividades

para asegurar una coordinación efectiva y el fortalecimiento de las capacidades de las

organizaciones para prevenir, proteger y responder a los desastres.

La respuesta es la fase que incluye la movilización de los servicios de emergencia requeridos

y los primeros respondedores a la zona de desastre. Los equipos de respuesta rápida son

cruciales porque las lesiones y las condiciones peligrosas suelen causar la gran mayoría de las

víctimas de desastres a morir dentro de las 72 horas del impacto del desastre. La respuesta a

desastres también incluye organizaciones humanitarias tales como la Cruz Roja y la Media

Luna Roja, así como organizaciones de las Naciones Unidas.

El objetivo de la fase de recuperación es restaurar el área afectada a su estado anterior. Los

esfuerzos de recuperación se ocupan principalmente de las acciones que implican la

reconstrucción de las propiedades destruidas y la reparación de otras infraestructuras

esenciales. Se deben hacer esfuerzos para "reconstruir mejor", con el objetivo de reducir los

riesgos inherentes a las comunidades.

Gráfico 1: Peligros-amenazas de origen natural o generados por los procesos dinámicos

propios del planeta

Fuente: UNESCO

Según el informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres de las Naciones

Unidas del 20158, la tasa de desastres está creciendo con el tiempo. Entre 2005 y 2014, el promedio

8 Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio

de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html


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anual de desastres meteorológicos fue de 335, un aumento del 14 por ciento entre 1995 y 2004 y casi

el doble del promedio registrado entre 1985 y 1995.

Estos efectos principalmente aquejan a países en desarrollo dado que los países desarrollados están

mejor preparados para manejar el impacto de los desastres, así como las secuelas. El Gráfico 2

muestra como el nivel de riesgo frente a desastres aqueja principalmente a este primer grupo de

países. En los países en desarrollo, los desastres naturales atrapan a las personas en un ciclo de

pobreza porque no tienen los recursos para reconstruir sus hogares y satisfacer otras necesidades

básicas, haciéndolas menos capaces de recuperarse a largo plazo. Asimismo, algunos factores

presentes en los entornos de pobreza convertirán un peligro natural en un desastre:

• Edificios mal construidos

• Mala sanidad

• Rápido crecimiento demográfico / población de alta densidad

• Recursos limitados para la respuesta a desastres y la reconstrucción

• Falta de redes de seguridad económica

Gráfico 2: Nivel de riesgo frente a desastres naturales a nivel mundial

Fuente: United Nations World Risk Index

B. Vulnerabilidad frente a desastres naturales

Existe una serie de factores que aumentan la vulnerabilidad frente a los fenómenos naturales tales

como la falta de medidas de prevención adecuadas para disminuir las consecuencias, el desarrollo

urbano no planificado, la persistencia de la pobreza urbana, políticas públicas ineficientes y falta de

inversión en infraestructura segura. Por ejemplo, se calcula que, para el 2050, el 40% de la población

mundial estará viviendo en cuencas fluviales con estrés grave por déficit hídrico (falta o escasez de


8

agua), sobre todo en África y Asia.9 La situación más preocupante la viven los países en desarrollo,

pues los desastres atrapan a las personas en el ciclo de pobreza.10 A continuación se señalan 3

factores de gran relevancia que contribuyen a aumentar la vulnerabilidad: desarrollo y sostenibilidad,

la falta de medidas de prevención y el cambio climático.

Desarrollo y sostenibilidad

Según el informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres del 200911, en el

2008 más de la mitad de la población mundial vivía en zonas urbanas y para el 2030 se espera que dos

tercios de la población mundial viva en áreas urbanas.12

La creciente migración hacia estas zonas ha

resultado en la incapacidad de diversas autoridades municipales para garantizar terrenos seguros para

viviendas, infraestructura y servicios de calidad adecuados para responder al crecimiento demográfico

que está ocurriendo en muchos países, sobre todo en países en desarrollo.13

Es difícil, para dichas

autoridades, establecer un marco normativo que pueda garantizar los riesgos medioambientales que

se relacionen con el proceso de urbanización. De esta manera, las personas optan por habitar en

barrios marginales denominados asentamientos informales, lugares que se caracterizan por estar en

un entorno de pobreza y vulnerabilidad. El mencionado informe14 explica que casi mil millones de

personas en el mundo viven en estos asentamientos. Se estima que dicha cifra crezca al ritmo de 25

millones de personas cada año.

La expansión no planificada que está ocurriendo en diversos países para hacer frente al rápido

crecimiento de la población, junto con la planificación territorial inadecuada y el fracaso de las

autoridades para imponer normas regulatorias de construcción contribuyen en gran medida a

incrementar la vulnerabilidad de las poblaciones urbanas y rurales. Las casas tienden a construirse a

base de material noble sin refuerzos adecuados, que fácilmente son destrozadas por fuertes lluvias o

huaycos. Tal es el caso de Perú en el 2017, donde más de 900 mil personas fueron afectadas por el

fenómeno del niño.15

Muchas viviendas fueron destruidas por los huaycos y gran parte de estas

estaban ubicadas al borde del río o en las faldas de los cerros, lugares poco adecuados y de gran

riesgo para habitar. Además, en estas zonas existe una falta de inversión en infraestructura segura que

pueda evitar ciertos desastres. Por ejemplo, la construcción y mantenimiento de sistemas de

9 Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres. (2015). http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/gar-

pdf/GAR2015_SP.pdf 10

Organización de las Naciones Unidas. (2016). El desarrollo urbano no planificado aumentará la desigualdad e impactará el clima, advierte ONU Hábitat. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Objetivos de desarrollo sostenible: http://www.un.org/sustainabledevelopment/es/2016/10/el-desarrollo-urbano-no-planificado-aumentara-la-desigualdad-e-impactara-el-clima-advierte-onu-habitat/ 11

Oficina de las Naciones Unidas para el Reducción del Riesgo de Desastres. (2009). Factores causales del reisgo de desastres: un trío letal acentuado por el cambio climático. Obtenido de Preventionweb: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/press/documents/Insert_2-GAR_2009_Span.pdf 12 Organización de las Naciones Unidas. (2016). El desarrollo urbano no planificado aumentará la desigualdad e impactará el clima, advierte ONU Hábitat. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Objetivos de desarrollo sostenible: http://www.un.org/sustainabledevelopment/es/2016/10/el-desarrollo-urbano-no-planificado-aumentara-la-desigualdad-e-impactara-el-clima-advierte-onu-habitat/ 13 Oficina de las Naciones Unidas para el Reducción del Riesgo de Desastres. (2009). Factores causales del reisgo de desastres: un trío letal acentuado por el cambio climático. Obtenido de Preventionweb: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/press/documents/Insert_2-GAR_2009_Span.pdf 14

Ibid. 15 RRP Noticias. (30 de marzo de 2017). Gráfica - Las cifras que van dejando las lluvias en Perú. Obtenido de RPP Noticias: http://rpp.pe/peru/actualidad/mas-de-56-mil-damnificados-por-la-temporada-de-lluvias-a-nivel-nacional-noticia-1036219


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alcantarillado aumenta la probabilidad de inundaciones, que puede ser por sistemas deficientes o

inexistentes de alcantarillado. En el Informe Mundial del Estado de las Ciudades 201616, ONU

Hábitat explica que el desarrollo urbano no planificado puede conducir al aumento de la desigualdad,

de la miseria y tener impactos desastrosos en el clima.

Los entornos de pobreza convierten un peligro natural en un desastre natural debido a que los

edificios y casas mal construidas, la mala sanidad, los recursos limitados para la respuesta a desastres y

reconstrucción y sobretodo, la falta de redes de seguridad económica, aumentan la vulnerabilidad de

la población haciéndoles más difícil hacer frente a situaciones de amenaza.

Falta de medidas de prevención

La falta de inversión por parte del estado en medidas de prevención presenta un gran problema para

la seguridad de cada país. Se invierte más en la respuesta a situaciones de emergencia más no en

medidas preventivas para evitar grandes pérdidas.17

La falta de sistemas de financiamiento e

infraestructura y la participación del sector privado es un obstáculo importante para la reducción de

riesgos de desastres. Instituciones regionales como el Banco Interamericano de Desarrollo buscan

modernizar al Estado con la finalidad de fomentar la gobernabilidad y promover las alianzas

estratégicas para implementar medidas preventivas frente a los desastres.

La prevención de desastres se ha mostrado ausente en diversos países, entendiéndose más como un

gasto que como una inversión. Frecuentemente, la acción de diversos países de la región de América

Latina y el Caribe, ha estado dirigida a la elaboración de planes para hacer frente a situaciones de

emergencia. Sin embargo, estos se dirigen a los efectos de los desastres naturales más no a sus causas.

El periodo de reconstrucción tampoco ha sido realmente efectivo pues se ha concentrado en reparar

los daños ocasionados y no en mejorar la infraestructura de casas, alcantarillados, muros de

contención entre otros para reducir el riesgo futuro. De esta manera, se reconstruyen viviendas en los

mismo lugares riesgosos sin medidas de seguridad necesarias, cuyo costo representa en muchos casos

menos del 10% del costo total de las obras de construcción nuevas.18

Cambio climático

El cambio climático puede no ser responsable del reciente aumento de los costos de los desastres

naturales, pero es muy probable que repercuta en futuras catástrofes. Según el Panel

Intergubernamental sobre el Cambio Climático, un aumento de los gases de efecto invernadero en la

atmósfera probablemente aumentará las temperaturas sobre la mayoría de las superficies terrestres,

aunque el cambio exacto variará regionalmente.19

16 Organización de las Naciones Unidas. (1 de octubre de 2016). El desarrollo urbano no planificado aumentará la desigualdad e impactará el clima, advierte ONU Hábitat. Recuperado el 30 de julio de 2017, de Objetivos de Desarrollo Sostenible: http://www.un.org/sustainabledevelopment/es/2016/10/el-desarrollo-urbano-no-planificado-aumentara-la-desigualdad-e-impactara-el-clima-advierte-onu-habitat/ 17 Banco Interamericano de Desarrollo. (marzo de 2000). El desafío de los desastres naturales. Recuperado el 31 de julio de 2017, de Banco Interamericano de Desarrollo: http://www20.iadb.org/intal/catalogo/PE/2010/05628es.pdf 18 Ibid. 19 NASA. (2016). The Impact of Climate Change on Natural Disasters. Recuperado el 31 de julio de 2017, de Earth Observatory: https://earthobservatory.nasa.gov/Features/RisingCost/rising_cost5.php


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El resultado combinado del aumento de las temperaturas sobre la tierra, la disminución de las

diferencias de temperatura entre el ecuador y el polo y el aumento de la humedad podrían generar

ciclos cada vez más intensos de sequías e inundaciones. Una atmósfera más cálida y húmeda también

podría afectar las tormentas tropicales (huracanes), pero los cambios en las tormentas tropicales son

más difíciles de predecir y seguir20, lo cual afecta directamente el tipo de prevención que se debe

llevar a cabo.

C. Impacto de los desastres naturales

Los desastres naturales causan graves impactos afectando aspectos sociales y económicos de cada

país. A continuación, se detalla el impacto por tipo de desastre natural, señalando las diferencias entre

los tipos más comunes de desastres, el impacto económico y el impacto social.

Por tipo de desastres naturales

A partir del Gráfico 3 se observa que cada desastre natural tiene un impacto particular. Las

inundaciones figuran como el desastre más común, con un porcentaje de 43% de ocurrencia seguido

por las tormentas y terremotos. Es importante determinar qué tipo de desastre tiene un mayor

impacto, de tal manera que se pueda priorizar los tipos de medida de prevención que se

implementaran en cada país. A continuación se muestra una breve explicación del impacto de los

desastres más frecuentes:

Gráfico 3: Porcentaje de ocurrencias de desastres naturales por tipo de desastre (1995 - 2015)

Fuente: The Human Cost of Weather Related Disasters

a) Inundaciones: Desde 1995, las inundaciones han representado el 47% de todos los desastres

meteorológicos, afectando a 2.300 millones de personas21.El número de inundaciones por año

aumentó a un promedio de 171 en el período 2005-2014, frente a un promedio anual de 127 en la

década anterior. La naturaleza de las inundaciones ha cambiado en los últimos años, con

20 NASA. (2016). The Impact of Climate Change on Natural Disasters. Recuperado el 31 de julio de 2017, de Earth Observatory: https://earthobservatory.nasa.gov/Features/RisingCost/rising_cost5.php 21 Banco Interamericano de Desarrollo. (marzo de 2000). El desafío de los desastres naturales. Recuperado el 31 de julio de 2017, de Banco Interamericano de Desarrollo: http://www20.iadb.org/intal/catalogo/PE/2010/05628es.pdf


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crecientes inundaciones fluviales y costeras cada vez más frecuentes. Las inundaciones

recurrentes de las tierras agrícolas, en particular en Asia, han tenido un fuerte impacto en

términos de producción perdida, escasez de alimentos y subnutrición rural. En la India rural, por

ejemplo, se ha observado que los niños en hogares expuestos a inundaciones recurrentes tienen

más retraso de que los que viven en aldeas no inundadas. 22Muchos de estos impactos son

prevenibles a través de tecnologías asequibles como presas y diques, mientras que medidas como

la educación de las madres también han demostrado ser eficaces para proteger a los niños de la

desnutrición relacionada con las inundaciones.23

b) Tormentas: Las tormentas, incluyendo huracanes, ciclones y oleadas de tormenta, causaron la

muerte de más de 242 000 personas entre 1995 y 2015, convirtiendo las tormentas en el tipo de

desastre meteorológico más mortal de los últimos 21 años. Estos eventos son los segundos

peligros naturales más frecuentes después de las inundaciones. The International Disaster Data Base

(EM-DAT) registra que en general, las tormentas afectaron a los países de ingreso más alto con

más frecuencia que los países de ingresos más bajos, con el 93% de todos los daños reportados

en las naciones de ingresos altos y medios altos.24

c) Sequía: EM-DAT registra 136 eventos de sequías en África entre 1995 y 2015 (alrededor del

41% del total mundial), de las cuales 77 sequías se dieron en el este de África. Las sequías tienen

un elevado número de víctimas humanas en términos de hambre, pobreza y perpetuación del

subdesarrollo. Se asocian con pérdidas agrícolas y de ganado, escasez de agua y brotes de

enfermedades epidémicas. Algunas sequías duran años, causando impactos económicos a largo

plazo. En total, EM-DAT registró más de mil millones de personas afectadas por sequías en el

período 1995-2015; es decir más de la cuarta parte de las personas afectadas por todo tipo de

desastres meteorológicos en todo el mundo, aunque la sequía representó menos del 5% de todos

los peligros naturales (Gráfico 3). Las cifras de las muertes por sequías son engañosas puesto que

se excluyen muertes indirectas por malnutrición, enfermedad y desplazamiento. Estas muertes

indirectas ocurren en gran medida después de que la fase de emergencia de un desastre haya

terminado y, a menudo, están poco documentadas o no se cuentan en absoluto.25

d) Las olas de calor, el frío extremo y los incendios forestales: Entre 1995 y 2015, las

temperaturas extremas causaron el 27% de todas las muertes atribuidas a desastres relacionados

con el tiempo, con la abrumadora mayoría (148 000 de 164 000 vidas perdidas) como resultado

de las olas de calor.26 En general, el 92% de las muertes por olas de calor se registraron en países

de ingresos altos; Europa reportó la mayor parte del 90%. La ola de calor en Rusia durante el

verano de 2010 tomó la vida de más de 55 000 personas.

22 Ibid. 23 Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html 24 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795 25 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795 26 Ibid.


12

Por otro lado, las olas de frío son cada vez más frecuentes en América Central y del Sur. Perú,

por ejemplo, fue golpeado por diez olas de frío sucesivas y condiciones de invierno severas de

2003 a 2015, que afectaron a 5,4 millones de personas. En Estados Unidos, 21 personas

murieron en una ola de frío en enero de 2014, lo que también causó daños materiales por valor

de US $ 2.500 millones.27

Los incendios forestales son otra amenaza climática importante en los Estados Unidos, con 38

incendios forestales clasificados como desastres desde 1995. Estos eventos afectaron a 108 mil

estadounidenses y costaron casi 11 mil millones de dólares en daños registrados. Es probable que

los incendios forestales extremos se vuelvan cada vez más frecuentes como resultado del cambio

climático ya que las temperaturas y las sequías inusualmente altas contribuyen al creciente

número de brotes.

Impacto económico

Las pérdidas económicas globales por desastres naturales tales como terremotos, inundaciones y

sequías continúan incrementándose cada año. El cambio climático, al igual que el rápido crecimiento

demográfico, son factores fundamentales que se deben de tener en cuenta para evitar grandes

pérdidas futuras.

Pérdidas económicas actuales

Las pérdidas económicas ocasionadas por desastres naturales se elevan hoy en día a un

promedio de entre 250 mil millones y 300 mil millones de dólares americanos al año. Las

pérdidas futuras (pérdidas anuales esperadas) se estiman actualmente en 314 mil millones de

dólares americanos. Esta situación se agrava cuando se evalúa en términos relativos. Las

pérdidas anuales esperadas de los denominados Estados en desarrollo equivalen a casi el 20%

del total de su gasto social, frente a las de América del Norte, equivalentes a solo el 1.19%, y

a las de Europa y Asia Central, equivalentes a menos del 1%.28

Los desastres en muchos países no se llevan a cabo de manera tan frecuente, pero las

consecuencias son sumamente graves. Los países que no cuentan con los recursos necesarios

para protegerse contra las pérdidas ocasionadas por los desastres se enfrentan a un déficit de

financiación por periodos. Esto aqueja a países como Argelia, Chile, Indonesia, Irán,

Madagascar y Pakistán, quienes no superarían una prueba de resistencia de su resiliencia fiscal

ante una situación de pérdidas cada 100 años. Su limitada capacidad para recuperarse en un

espacio corto de tiempo podría aumentar las pérdidas indirectas ocasionadas por los

desastres de forma significativa.29

El costo de oportunidad30 de no mitigar riesgos es significativo para el desarrollo, ya que los

recursos empleados en la reconstrucción podrían utilizarse para realizar inversiones en

27

Ibid. 28 Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html 29 Ibid. 30 El costo de oportunidad se entiende como aquel costo en que se incurre al tomar una decisión y no otra. Específicamente se refiere al costo de tomar una alternativa de mitigación de riesgo frente a otro tipo de inversión.


13

infraestructura, protección social, salud pública y educación pública. En los últimos años, la

preparación nacional y las respuestas más eficientes a los desastres han reducido

considerablemente el número de personas que mueren por los peligros relacionados con el

clima en algunos países. India, China, Indonesia, Bangladesh, Tailandia y Myanmar, por

ejemplo, han asumido compromisos importantes para reducir las pérdidas de desastres. En

Indonesia, la reducción de riesgo de desastres se convirtió en un pilar del desarrollo nacional

inmediatamente después de la catástrofe del tsunami del Océano Índico de 2004.31

De acuerdo con el Informe Global de Evaluación de la Reducción del Riesgo de Desastres

del 2015 32 , las pérdidas medias anuales 33 esperadas por terremotos, tsunamis, ciclones

tropicales e inundaciones en los ríos se calculan ahora en US $ 314.000 millones. El informe,

basado en una revisión de las bases de datos nacionales sobre pérdidas de desastres, estima

que las pérdidas económicas por desastres están alcanzando un promedio de US $ 250 mil

millones a US $ 300 mil millones cada año.

Gráfico 4: Los 15 países con las proporciones más elevadas de pérdidas anuales

económicas por tsunamis

Fuente: Informe Global de Evaluación de la Reducción del Riesgo de Desastres

Pérdidas económicas futuras

31 Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html 32 Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html 33 La pérdida media anual esperada es la cantidad que los países deberían dejar de lado cada año para cubrir pérdidas futuras de desastres.


14

Debido a los cambios en las temperaturas, las precipitaciones y los niveles del mar, entre

otros factores, el cambio climático global aumenta los niveles de amenaza y exacerba el

riesgo de desastres. Sin embargo, los efectos del cambio climático no se distribuyen de modo

uniforme. Por ejemplo, el riesgo de sufrir daños causados por el viento se duplicaría en

Anguila y se quintuplicaría en Trinidad y Tobago. En cambio, en México se observaría una

reducción real del riesgo.34

Unido al cambio climático, la creciente desigualdad mundial, la rápida urbanización y el

consumo excesivo de energía y capital natural afectan significativamente el aumento de las

amenazas y el nivel de riesgo.

Gráfico 5: Ciudades en relación al riesgo climático

Fuente: PNUMA, Cepal y PNUMA/GRID-Arendal

El Gráfico 5 muestra que en la región de América Latina y el Caribe el 75% de la población

vive en la ciudad. Este alto nivel de urbanización aumenta la incidencia de desastres naturales

pues degrada el ambiente natural y genera presiones en la infraestructura de la ciudad.35

Debido a la desigualdad en el acceso a la tierra, las poblaciones de escasos recursos se ven

forzadas a migrar a zonas urbanas y ocupar zonas peligrosas como márgenes de ríos o

terrazas fluviales donde fácilmente ocurren inundaciones y deslizamientos, además de ser

34 Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html 35 Banco Interamericano de Desarrollo. (2016). Gestión de riesgo de desastres. Recuperado el 30 de julio de 2017, de Banco Interamericano de Desarrollo: http://www.iadb.org/es/oficina-de-evaluacion-y-supervision/cambio-climatico-y-la-gestion-de-riesgo-de-desastres,18289.html?isajaxrequest&actionuserstats=close&valcookie=


15

extremadamente vulnerables a sismos. Por ejemplo, en Santa Fe, Argentina luego de las

inundaciones del 2003 y 2007, las autoridades locales reconocieron que durante 50 años no

existió una política territorial urbana que pusiera orden. Esto ocasionó que la población

construya sus viviendas en zonas peligrosas. Managua, Nicaragua, está ubicada en una zona

donde es posible encontrar 18 fallas geológicas activas y una cadena extensa de volcanes.36 A

pesar de ello, la planificación urbana carece de diagnóstico de riesgo y una adecuada

supervisión de normas de construcción. Como consecuencia, 79% de las viviendas están mal

construidas y 18% deben repararse por completo.37

En varios países de ingresos bajos y medios, el desarrollo urbano se caracteriza por un acceso

altamente desigual al espacio urbano, a las infraestructuras, los servicios y la seguridad. Los

hogares de bajos ingresos suelen verse forzados a ocupar zonas expuestas a amenazas con

terrenos de poco valor, infraestructura y protección social deficientes o inexistentes y niveles

elevados de degradación ambiental.

Por otro lado, principalmente frente a los efectos del cambio climático, se calcula que para

2050, el 40% de la población mundial estará viviendo en cuencas fluviales con estrés grave

por déficit hídrico, sobre todo en África y Asia. En la Cuenca del Caribe, el cambio climático

sumará 1 400 millones de dólares americanos adicionales a las pérdidas anuales esperadas

solo por daños de vientos ciclónicos. El estrés del recurso hídrico afecta directamente a la

producción agrícola de muchas regiones dependientes de esta actividad económica: “es muy

probable que el cambio climático tenga un efecto negativo general sobre la producción de los

principales cultivos de cereales de África”.38

Impacto social

Los desastres naturales tienen grandes impactos en la población mundial. Al perder sus hogares,

muchas personas se desplazan a otras regiones en busca de refugio aumentando la población de

ciertas áreas. Esto genera un desabastecimiento de recursos básicos tales como agua limpia y

alimentos. La pérdida de sus pertenencias luego de haber vivido sido impactados por un desastre

natural afecta psicológica y físicamente a las personas, presentado cuadros de estrés post traumático y

grandes riesgos para la salud.

Poblaciones desplazadas

Uno de los efectos más inmediatos de los desastres naturales es el desplazamiento de la

población. Cuando los países son devastados por terremotos u otras fuerzas poderosas de la

naturaleza, muchas personas abandonan sus hogares y buscan refugio en otras regiones. Una

gran afluencia de refugiados puede interrumpir la accesibilidad de la atención sanitaria y la

36

Banco Interamericano de Desarrollo. (2016). Gestión de riesgo de desastres. Recuperado el 30 de julio de 2017, de Banco Interamericano de Desarrollo: http://www.iadb.org/es/oficina-de-evaluacion-y-supervision/cambio-climatico-y-la-gestion-de-riesgo-de-desastres,18289.html?isajaxrequest&actionuserstats=close&valcookie= 37 Watanabe, M. (Junio 2015). Gestión del riesgo de desastres en ciudades de América Latina. Recuperado el 4 de agosto de 2017: http://www.solucionespracticas.org.pe/Descargar/714272/2158950 38

Organización de las Naciones Unidas. (2015). Global Assessment Report on Disaster Risk Reduction 2015. Recuperado el 15 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/english/hyogo/gar/2015/en/home/download.html


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educación, así como los suministros de alimentos y agua limpia.39 Por otro lado, una encuesta

a gran escala de los desplazados por el huracán Katrina mostró que la incidencia de la

violencia familiar se había más que triplicado después del desastre y se mantuvo elevada

durante dos años.40

Estrés post traumático

Los desastres naturales pueden ser particularmente traumáticos para los niños. Estos

enfrentan escenas de destrucción y pérdidas de familiares, amigos y otros seres queridos, lo

que lleva al desarrollo de trastorno de estrés postraumático (TEPT), una condición

psicológica grave resultante de un traumatismo extremo. De no tratarse, los niños que sufren

de TEPT pueden ser propensos a sufrir daño psicológico duradero y sufrimiento emocional.

Sin embargo, este tipo de enfermedades no solo afecta a los niños. Una proporción

significativa de personas, por ejemplo, padecen enfermedades crónicas o problemas de salud

mental después de un desastre, con impactos negativos a lo largo de su vida. En Australia, un

reporte 41 indica que 1 de cada 10 personas expuestas a desastres naturales reportan

desarrollar daños psicológicos en algunos casos persistentes para el resto de sus vidas.

Riesgos a la salud

Además de los traumatismos y lesiones inmediatos sufridos por las víctimas de los desastres

naturales, los estudios han demostrado que varias condiciones médicas secundarias tienen

una mayor incidencia en las horas y días críticos de la evaluación y el período de

recuperación. Por ejemplo, después de una disminución inicial en la incidencia, las

enfermedades respiratorias comienzan a mostrar un aumento sustancial en los días a semanas

después de un desastre. Este aparente cambio en la enfermedad se atribuye más a la

transmisión de enfermedades transmisibles como la influenza o incluso la tuberculosis en

refugios temporales abarrotados.42 Por otro lado, las inundaciones severas pueden resultar en

agua estancada que permite la cría de bacterias transmitidas por el agua y mosquitos

portadores de malaria. Sin ayuda inmediata, los casos de muertes pueden aumentar incluso

después de que el peligro inmediato haya pasado.

39

Child Fund International. (2 de junio de 2013). The Devastating Impact of Natural Disasters. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Child Fund International: https://www.childfund.org/Content/NewsDetail/2147489272/ 40

Deloitte. (2013). The economic cost of the social impact of natural disasters. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Australian Business Roundtable for Disaster Resilience & Safer Communities: http://australianbusinessroundtable.com.au/assets/documents/Report%20-%20Social%20costs/Report%20-%20The%20economic%20cost%20of%20the%20social%20impact%20of%20natural%20disasters.pdf 41

Deloitte. (2013). The economic cost of the social impact of natural disasters. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Australian Business Roundtable for Disaster Resilience & Safer Communities: http://australianbusinessroundtable.com.au/assets/documents/Report%20-%20Social%20costs/Report%20-%20The%20economic%20cost%20of%20the%20social%20impact%20of%20natural%20disasters.pdf 42 March, G. (2002). Natural Disasters and the Impacts on Health. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres: http://www.eird.org/isdr-biblio/PDF/Natural%20disasters%20and%20the%20impacts.pdf


17

Escasez de alimentos

Después de desastres naturales, los recursos y en particular los alimentos a menudo se

vuelven escasos. Miles de personas en todo el mundo pasan hambre como resultado de

cultivos destruidos y la pérdida de suministros agrícolas, ya sea que suceda de repente en una

tormenta o poco a poco en una sequía. Como resultado, los precios de los alimentos

aumentan, reduciendo el poder adquisitivo de las familias y aumentando el riesgo de

desnutrición severa o peor. Los impactos del hambre después de un terremoto, un tifón o un

huracán pueden ser tremendos, causando daño permanente al desarrollo de los niños.43

Gráfico 6: Ejemplo de cómo los efectos derivan en costos

Fuente: The economic cost of the social impact of natural disasters

D. Valoración errónea del riesgo

Las inversiones tienden a dirigirse hacia lugares que ofrecen ventajas comparativas, como bajos

costos de mano de obra, acceso a los mercados de exportación, infraestructura y estabilidad, entre

otros. Como consecuencia, grandes volúmenes de inversión fluyen a zonas propensas a amenazas. La

continua valoración errónea del riesgo muestra que las consecuencias no se suelen atribuir a las

decisiones que generan los riesgos y esta falta de atribución y de rendición de cuentas genera

incentivos perversos para continuar con este comportamiento de generación de riesgos, ya que

quienes se benefician del riesgo rara vez asumen sus costos. Para gestionar los riesgos inherentes a la

actividad social y económica, es necesario combinar tres enfoques:

La gestión prospectiva del riesgo, cuyo objetivo es evitar la acumulación de nuevos

riesgos;

La gestión correctiva del riesgo, que busca reducir los riesgos existentes;

La gestión compensatoria del riesgo para respaldar la resiliencia de las personas y las

43

Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. (2000) Efectos de los fenómenos climatológicos adversos en la producción y el comercio de los alimentos: http://www.fao.org/docrep/meeting/x4583s.htm


18

sociedades que enfrentan un riesgo residual que no se puede reducir de manera efectiva.44

Se calcula que las pérdidas anuales esperadas mundiales habrán aumentado en el 2030 hasta los 415

000 millones de dólares americanos debido a las necesidades de inversión solo en infraestructura

urbana. Sin embargo, este crecimiento de las pérdidas esperadas no es inevitable, ya que unas

inversiones anuales de 6 000 millones de dólares americanos en estrategias adecuadas de gestión del

riesgo de desastres podrían generar beneficios en términos de reducción del riesgo por un valor de

360 000 millones de dólares americanos. Una inversión anual de este tipo en la reducción del riesgo

de desastres representa tan solo el 0,1% de los 6 billones de dólares americanos que tendrán que

invertirse cada año en infraestructura durante los próximos 15 años. Sin embargo, para muchos

países, esa pequeña inversión adicional podría suponer una diferencia decisiva a la hora de alcanzar

los objetivos nacionales e internacionales de acabar con la pobreza, de mejorar la salud y la educación

y de garantizar un crecimiento sostenible y equitativo.45

Leyendo las cifras

China e India, dominan la tabla de clasificación de los países más afectados por los desastres

relacionados con el clima. En conjunto, estas dos naciones representan más de 3 mil millones de

personas afectadas por el desastre entre 1995 y 2015. Eso equivale al 75% del total mundial de 4.100

millones de personas. Brasil es el único país de las Américas que figura en la lista de los 10 primeros,

y Kenia y Etiopía son las únicas naciones africanas. Cuando los datos están estandarizados para

reflejar el número de personas afectadas por cada 100 mil habitantes (o el porcentaje de la población

afectada), el panorama mundial parece muy diferente, con seis de los países más afectados ahora en

África y sólo tres en Asia (Gráfico 7).46

44 Deloitte. (2013). The economic cost of the social impact of natural disasters. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Australian Business Roundtable for Disaster Resilience & Safer Communities: http://australianbusinessroundtable.com.au/assets/documents/Report%20-%20Social%20costs/Report%20-%20The%20economic%20cost%20of%20the%20social%20impact%20of%20natural%20disasters.pdf 45 Deloitte. (2013). The economic cost of the social impact of natural disasters. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Australian Business Roundtable for Disaster Resilience & Safer Communities: http://australianbusinessroundtable.com.au/assets/documents/Report%20-%20Social%20costs/Report%20-%20The%20economic%20cost%20of%20the%20social%20impact%20of%20natural%20disasters.pdf 46

Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795


19

Gráfico 7: 5 países con mayor mortalidad relativa (muertes por millón de habitantes) 1995 -

2015


Los datos del EM-DAT muestran que cuando los países se agrupan por ingresos, el mayor número

de desastres relacionados con el clima ocurrió en los países de ingresos medios bajos. Estas naciones

sufrieron 1.935 de todos los eventos registrados (30% del total mundial), con un costo de 305 mil

vidas perdidas, que representa la mitad de todas las muertes reportadas entre 1995 y 2015 (Gráfico

8).47

Los datos de EM-DAT indican que los países de ingresos altos ocupan el segundo lugar después de

los países de ingresos medios bajos en términos del número promedio de muertes por desastre. Este

es un patrón muy diferente al de los muertos por los terremotos, incluidos los tsunamis, que afectan

abrumadoramente a la población de los países de bajos ingresos (Gráfico 8). Las diferencias radican

en los tipos de desastres que aquejan a cada uno de estos grupos.48

Gráfico 8: Número de desastres naturales y muertes por grupo de ingreso (1995 - 2015)

47 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795 48 Ibid.


20


3. ACCIONES PASADAS DE LAS NACIONES UNIDAS

A. Estrategia Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres49

En diciembre de 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Estrategia

Internacional para la Reducción de Desastres y estableció la Oficina para la Reducción del Riesgo de

Desastres (UNISDR por sus siglas en inglés), que es la secretaría encargada de velar por su aplicación.

La experiencia adquirida durante el Decenio Internacional para la Reducción de Desastres Naturales

(1990-1999), que lanzó la Asamblea General en 1989 sirvió de insumo para la Estrategia

Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres. La Estrategia incorpora los principios

planteados en una serie de documentos que fueron examinados durante el Foro del Programa sobre

el Decenio Internacional, celebrado en Ginebra del 5 al 9 de julio de 1999, el cual también adoptó el

Mandato de Ginebra sobre la Reducción de Desastres.

B. Oficina para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNISDR)

En 2001, se amplió el mandato de la UNISDR para que sirviera como el centro de coordinación

dentro del sistema de las Naciones Unidas para asegurar las sinérgicas entre las actividades de la

ONU y las organizaciones regionales para la reducción de desastres y las actividades en los ámbitos

socioeconómico y humanitario (Resolución 56/195 de la Asamblea General de las Naciones

Unidas).50

La UNISDR respalda la aplicación, el seguimiento y la revisión del Marco de Sendai para la

Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030 (Marco de Sendai) y su documento predecesor: el

Marco de Acción de Hyogo. Entre sus áreas de trabajo se incluyen tareas para velar por que se

49 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2017). Nuestro Mandato. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres: http://www.eird.org/americas/we/nuestro-mandato.html 50 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2017). Nuestro Mandato. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres: http://www.eird.org/americas/we/nuestro-mandato.html


21

aplique la reducción del riesgo de desastres a los esfuerzos para el cambio climático, aumenten las

inversiones en estos esfuerzos, se construyan ciudades, escuelas y hospitales resilientes a los desastres

y se fortalezca el sistema internacional para la reducción del riesgo de desastres. Además, la UNISDR

está encargada de publicar el Informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de

Desastres cada dos años, prestar apoyo a los países para observar y seguir las tendencias del riesgo y

la aplicación del Marco De Sendai, y dirigir campañas mundiales sobre la reducción del riesgo de

desastres para lograr ciudades, escuelas y hospitales más seguros. 51

La visión de la UNISDR se fundamenta en las cuatro prioridades de acción que se estableció en el

Marco de Sendai: (i) comprender el riesgo de desastres, (ii) fortalecer la gobernabilidad para gestionar

el riesgo de desastres, (iii) invertir en la reducción del riesgo de desastres para la resiliencia, y (iv)

aumentar la preparación de los casos de desastres, una solución de una respuesta eficaz y "reconstruir

mejor" en el ámbito de la recuperación, la rehabilitación y la reconstrucción.

C. Plataforma Global para la Reducción del Riesgo de Desastres

La UNISDR organiza y dirige el seguimiento de la Plataforma Global para la Reducción del Riesgo

de Desastres, la cual es establecida en 2006 (Resolución 61/198 de la Asamblea General de la ONU).

La Plataforma Global se ha transformado en el principal foro mundial para abordar la reducción del

riesgo de desastres, para ofrecer orientación congruente y estratégica para la aplicación del Marco de

Sendai y para los diferentes grupos interesados.52

La quinta sesión de la Plataforma Mundial para la Reducción del Riesgo de Desastres tuvo lugar del

24 al 26 de mayo de 2017 en Cancún, México. Esta fue la más grande de todas Plataforma Global

con más de 7000 personas registradas.53

D. Marco de Acción de Hyogo (2005 – 2015)

El 22 de enero de 2005, la Conferencia Mundial sobre la Reducción de los Desastres aprobó el Marco

de Acción de Hyogo para 2005-2015. La Conferencia constituyó una oportunidad para promover un

enfoque estratégico y sistemático de la reducción de la vulnerabilidad a las amenazas/peligros y los

riesgos que estos conllevan. El Marco de Acción de Hyogo es el primer instrumento para la

implementación de la reducción del riesgo de desastre que adoptaron los Estados Miembros de las

Naciones Unidas.54

51 Ibid. 52 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2017). ¿Qué es la Estrategia Internacional? Recuperado el 22 de julio de 2017, de Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres: http://www.eird.org/americas/we/que-es-la-estrategia-internacional.html 53 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795 54 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2005). Marco de Acción de Hyogo para 2005-2015: Aumento de la resiliencia de las naciones y las comunidades ante los desastres. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres: http://www.eird.org/cdmah/contenido/hyogo-framework-spanish.pdf


22

El Marco de Acción de Hyogo se concibió para dar un mayor impulso a la labor mundial en relación

con el Marco Internacional de Acción del Decenio Internacional para la Reducción de los Desastres

Naturales de 1989 y la Estrategia de Yokohama para un Mundo Más Seguro: Directrices para la

prevención de los desastres naturales, la preparación para casos de desastre y la mitigación de sus

efectos, adoptada en 1994, así como su Plan de Acción, y la Estrategia Internacional para la

Reducción de los Desastres de 1999. 55

En general, el Marco de Acción de Hyogo ha sido un instrumento importante para la sensibilización

del público y las instituciones, para generar compromiso político y para centrar e impulsar medidas

por parte de una amplia gama de actores a todos los niveles. Así, desde la adopción del Marco de

Acción de Hyogo en 2005, los países y otros actores han logrado avances en la reducción del riesgo

de desastres a nivel local, nacional, regional y mundial, lo que ha contribuido a la disminución de la

mortalidad en el caso de algunas amenazas.56

El Marco de Acción de Hyogo proporcionó directrices y ha ayudado a progresar en el logro de los

Objetivos de Desarrollo del Milenio. Sin embargo, su aplicación puso en manifiesto varias carencias

en el tratamiento de los factores de riesgo subyacentes, en la formulación de los objetivos y

prioridades de acción, en la necesidad de promover la resiliencia a los desastres a todos los niveles y

en asegurar que se cuente con los medios de aplicación adecuados. 57

E. Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres (2015 – 2030)

El Marco de Sendai se adopta el 18 de marzo de 2015 durante la tercera Conferencia Mundial de las

Naciones Unidas sobre la Reducción del Riesgo de Desastres, celebrada en Sendai, Japón. El Marco

de Sendai es un acuerdo voluntario, no vinculante de 15 años de duración que se plantea un enfoque

centrado en las personas para abordar la reducción del riesgo de desastres. Este Marco es el

instrumento sucesor del Marco de Acción de Hyogo.58

El Marco de Sendai se basa en elementos que garantizan la continuidad del trabajo hecho por los

Estados y otras partes interesadas en relación con el Marco de Acción de Hyogo. Entre los cambios

más importantes son el marcado énfasis puesto en la gestión del riesgo de desastres en lugar de en la

gestión de desastres, la definición de siete objetivos mundiales, la reducción del riesgo de desastres

como resultado esperado, un objetivo centrado en evitar que se produzcan nuevos riesgos, la

reducción del riesgo existente y reforzar la resiliencia, así como un conjunto de principios rectores,

incluida la responsabilidad primordial de los Estados de prevenir y reducir el riesgo de desastres, y la

participación de toda la sociedad y todas las instituciones del Estado.59 El documento establece que

los Estados deben adoptar medidas específicas en todos los sectores, en los planos local, nacional,

regional y mundial, con respecto a las siguientes cuatro esferas prioritarias:

55 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2015). Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres: https://www.unisdr.org/files/43291_spanishsendaiframeworkfordisasterri.pdf 56 Ibid. 57 Ibid. 58 Ibid. 59 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2015). Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030. Recuperado el 20 de julio de 2017, de Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres: https://www.unisdr.org/files/43291_spanishsendaiframeworkfordisasterri.pdf


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• Prioridad 1: Comprender el riesgo de desastres.

• Prioridad 2: Fortalecer la gobernanza del riesgo de desastres para gestionar dicho riesgo.

• Prioridad 3: Invertir en la reducción del riesgo de desastres para la resiliencia.

• Prioridad 4: Aumentar la preparación para casos de desastre a n de dar una respuesta e caz y

para “reconstruir mejor” en los ámbitos de la recuperación, la rehabilitación y la

reconstrucción.

4. POSIBLES SOLUCIONES

Los riesgos frente a desastres naturales afectan a todas las regiones en distintas magnitudes y las acciones

a tomar deben ser pertinentes al contexto y teniendo en cuenta un adecuado diagnóstico. Para anticiparse

a los desastres naturales se debe tener un enfoque más global e integral que abarque la reducción de

riesgos previos al desastre, medidas preventivas, medidas de acción (durante el periodo de crisis) y

también el periodo de recuperación, todo encuadrado en políticas públicas sólidas y mecanismos

institucionales que promuevan una acción eficaz.

A. Soluciones a corto plazo

Se debe contemplar las respuestas a llevar a cabo frente a las diversas vulnerabilidades latentes que

aquejan las distintas regiones y por tipo de desastre. El Programa de las Naciones Unidas para el

Desarrollo presenta cuadernillos de Gestión del Riesgo de Desastres a nivel regional y local que

indican pasos básicos a seguir en respuesta al desastre. 60 Los cuadernillos constituyen una

herramienta informativa para autoridades nacionales que deseen familiarizarse con los socios

humanitarios, el sistema de las Naciones Unidas, los donantes, las ONG y otros organismos, en sus

diversos niveles de agregación y desagregación, sus funciones y responsabilidades, los servicios y

herramientas disponibles en caso de una situación de desastre. Además, a través de una presentación

estructurada en cuatro ámbitos (coordinación, movilización de recursos financieros, movilización de

equipos y manejo de la información), la guía facilita la identificación de espacios de coordinación, el

análisis de las capacidades existentes y permite ver qué herramientas necesitan ser fortalecidas. Al

entender estas distintas estrategias a seguir y los roles, el reto más grande se encuentra a nivel de la

implementación.

B. Soluciones a largo plazo

Una de las recomendaciones específicas frente a la culminación del Marco de Acción de Hyogo es

que se deben adoptar medidas más específicas para luchar contra los factores subyacentes que

aumentan el riesgo de desastres. Estas surgen como las consecuencias de la pobreza y la desigualdad,

el cambio climático y la variabilidad del clima, la urbanización rápida y no planificada, la gestión

inadecuada de las tierras, y factores agravantes como los cambios demográficos, entre otros. Se debe

revisar si es que el Marco de Sendai contempla todos estos factores o sería pertinente tomar acción

frente a algunas limitaciones.

Adicionalmente, se recomienda desarrollar la capacidad local mediante la transferencia de

conocimientos. Los gobiernos, el sector privado y todos aquellos que tienen una participación en las

cadenas mundiales de suministro deben dar prioridad a la transferencia de conocimientos,

60 Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. (2012). Cuandernillos de Gestión del Riesgo de Desastres a nivel regional y local. Santiago: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.


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información y capacidades para la creación de capacidad de resiliencia local.61 Estos actores deben

poder actuar bajo medidas preventivas pero también bajo medidas de respuesta rápida e inmediata

para atender a los afectados.

Es importante desarrollar reformar legales e institucionales (medidas no estructurales) para

transformar los métodos tradicionales usados por diversos países para hacer frente a situaciones de

emergencia en sistemas multisectoriales de reducción de riesgos. Algunas medidas no estructurales

pueden ser códigos de construcción, fomentar la investigación y evaluación constante y programas de

concientización públicas.

Por otro lado, las implementaciones de medidas estructurales son de suma importancia para evitar

futuros desastres. La construcción infraestructura segura y aplicación de técnicas de ingeniería son de

gran ayuda para lograr la resistencia y resiliencia de estructura y sistemas frente a las posibles

amenazas. Las medidas estructurales para la reducción de riesgo de desastre incluyen represas, diques

y alcantarillados para evitar inundaciones, construcciones antisísmicas y albergues para casos de

evacuación.

C. Desarrollando ciudades resilientes

Por otro lado, se sugiere centrar más el financiamiento en generar infraestructura resiliente.

Actualmente sólo el 4% de toda la ayuda humanitaria internacional se canaliza para ayudar a construir

la resiliencia zonas prioritarias, muy por debajo del 10% recomendado por la ONU. Se calcula que

cada dólar gastado en hacer a las comunidades más resistentes puede ahorrar hasta cuatro dólares en

ayuda de desastre en el futuro62. Hacerlo proporcionaría una mejor vida a los residentes y aseguraría

un uso más efectivo del dinero de los contribuyentes del Reino Unido, por ejemplo. Se busca un

enfoque integral relacionando riesgo/desastre y desarrollo/planificación que se vincule con los

objetivos de desarrollo sostenible. Para poder desarrollar ciudades resilientes es importante identificar

el riesgo, analizar aspectos relacionados con el desarrollo urbano planificado, la gestión integral de los

barrios o asentamientos marginales y gobernabilidad y protección financiera que se enfoque en el

fortalecimiento institucional

5. POSICIONES POR BLOQUE

En esta sección se destaca las posiciones de las regiones de acuerdo a los principales riesgos que

enfrentan, además es necesario identificar su nivel de vulnerabilidad por contextos específicos de ingresos

y los recursos que tienen disponibles para enfrentarlos.

A. África

La sequía afecta más a África que a cualquier otro continente. Los fracasos consecutivos de las lluvias

estacionales en África oriental en 2005, por ejemplo, provocaron inseguridad alimentaria para al

61 Ibid. 62 Institution of Mechanical Engineers. (2013). Recuperado el 23 de julio de 2017, de Natural Disaster Saving Lives Today, Building Resilience for Tomorrow: http://www.indiaenvironmentportal.org.in/files/file/natural-disasters-saving-lives-today-building-resilience-for-tomorrow.pdf


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menos 11 millones de personas.63 Se calcula que, para 2050, el 40% de la población mundial estará

viviendo en cuencas fluviales con estrés grave por déficit hídrico, sobre todo en África y Asia.

B. Europa

Recientemente, Europa fue testigo de una ola de calor en el verano de 2015, pero todavía hay que

evaluar los impactos. Los eventos de olas de calor son cada vez más recurrentes. Sin embargo, gran

parte de Europa ya no se encuentran entre las áreas de mayor riesgo según las pérdidas como

proporción del PIB gracias a sus esfuerzos frente a la mitigación del riesgo.64 Asimismo, países de

Europa son aquellos que financian a otros países con menores ingresos y alta vulnerabilidad a riesgos

naturales.

C. Sudamérica

En América del Sur, por ejemplo, 560.000 personas fueron afectadas por inundaciones en promedio

cada año entre 1995 y 2004. Para la siguiente década (2005-2014) ese número había aumentado a 2,2

millones de personas, casi cuatro veces más.65 Pero este es solo un tipo de riesgo de desastre natural

al que se enfrente la región. Un informe del Banco Interamericano de Desarrollo revela que nuevos

indicadores muestran algunos avances en la gestión del riesgo de desastres, pero la región necesita

hacer más frente a sus vulnerabilidades.66

D. Asia

Se contrapone el gran estrés hídrico de las cuencas del Asia con la creciente cantidad de inundaciones

más que otros continentes. Además, Asia es particularmente afectada por las tormentas,

especialmente en las regiones Sur y Sur-Oriental, que representan el 21% del número total de

tormentas y más del 80% de la mortalidad por tormentas.67

E. Norteamérica

Estados Unidos se ve afectado por intensas olas de frío, calor e incendios forestales altamente

relacionados con los efectos del cambio climático. Según el Análisis de Riesgo Global del Banco

Mundial (2005) los Estados Unidos son dignos de mención en el hecho de que más de un tercio de

su población vive en zonas propensas a riesgos, pero sólo el 1 por ciento de su área de tierra ocupa

un alto nivel de riesgo de mortalidad.68

63 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795 64 El Banco Mundial. (2005). Natural Disaster Hotspots, A Global Risk Analysis . Recuperado el 23 de julio de 2017, de El Banco Mundial: http://documents.worldbank.org/curated/en/621711468175150317/pdf/344230PAPER0Na101official0use0only1.pdf 65 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795 66 El Banco Interamericano de Desarrollo. (30 de septiembre de 2010). Los riesgos de desastres naturales continúan altos en América Latina y el Caribe, sostiene el BID. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Banco Interamericano de Desarrollo: http://www.iadb.org/es/noticias/articulos/2010-09-30/desastres-naturales-en-america-latina-y-el-caribe-bid,8017.html 67 Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres. (2016). “The Human Cost of Weather Related Disasters”. Recuperado el 23 de julio de 2017, de Prevention Web: http://www.preventionweb.net/news/view/46795 68 El Banco Mundial. (2005). Natural Disaster Hotspots, A Global Risk Analysis . Recuperado el 23 de julio de 2017, de El Banco Mundial: http://documents.worldbank.org/curated/en/621711468175150317/pdf/344230PAPER0Na101official0use0only1.pdf


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6. PREGUNTAS QUE TODO PROYECTO DE RESOLUCIÓN DEBE RESPONDER

A. ¿Qué estrategias y respuestas de corto plazo son las más efectivas para reducir el riesgo de desastres

naturales? ¿Qué medidas son las más efectivas en respuesta a una situación de emergencia?

B. ¿Qué medidas son las más efectivas frente a la reducción de riesgo de desastres naturales en el largo

plazo? ¿Son replicables entre regiones? ¿Cuál es el rol de la comunidad internacional frente a estas

medidas de largo plazo?

C. ¿Se considera de carácter urgente una revisión del Marco Sendai? ¿Qué aspectos deben ser revisados?

¿Cómo puede lograr la comunidad internacional qué más países adopten más y mejores estándares en

miras a las cuatro esferas prioritarias del Marco de Sendai?

D. ¿Qué rol debería cumplir instituciones gubernamentales en la gestión de desastres? ¿Qué tipo de

sistema sería el más adecuado para la reducción de riesgos de desastre: sistema centralizado o

descentralizado de gestión de desastres?

E. ¿Con qué medidas se puede hacer frente al crecimiento urbano insostenible? ¿Cómo se pude elaborar

un marco normativo que pueda garantizar los riesgos medioambientales que se relacionen con el

proceso de urbanización?

F. ¿Se debe considerar como función del estado proporcionar servicios de salud física y mental a

aquellos que han sufrido algún desastre? ¿Qué tipos de servicio se ofrecería? ¿De qué manera se

gestionaría?

7. RECOMENDACIONES FINALES

Recomendamos a los delegados investigar más a fondo el tema y revisar los documentos a los que se hace

referencia a lo largo de la guía. Se sugiere que a través de su investigación busquen dar respuesta a las

preguntas que todo proyecto de resolución debe responder, así como a los intereses del país que les sea

asignado (¿qué es más importante para el país que represento?, ¿cómo interviene mi país frente a la

comunidad internacional respecto a este tema?).


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8. FUENTES CITADAS Y CONSULTADAS

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