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¡SOMOS TESTIGOS! Folleto Misionero 2015

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  • CSPJ - MJS Venezuela1

    SOMOS TESTIGOS!Folleto Misionero 2015

  • 2CSPJ - MJS Venezuela

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    NOTAS 77 CONTACTOS 81 CRDITOS 82

    DA A DA 12 ACCIN MISIONERA 60

    Nombre:

    Perfil Misionero:

    Edad: Cdula:

    Telef no: Correo:

  • 3CSPJ - MJS Venezuela

    PRESENTACIN

    Bienvenidos al camino de preparacin de nuestras Jor-nadas Misioneras para la Pascua 2015.

    El Folleto Misionero que tienes ahora en tus manos es fruto de la experiencia misionera que vivimos los tes-tigos del amor de Dios. Apenas en la preparacin para nuestra Semana Santa 2015, ya estamos sintiendo la alegra de reconocernos discpulos misioneros enviados de nuevo por Cristo para anunciar el gozo de su Pascua.

    La experiencia que venimos cosechando en el camino de este compromiso apostlico juvenil en Venezuela, nos da la satisfaccin de ofrecerles ahora algunos materia-les de apoyo que sern tiles para la vivencia de cada grupo misionero y para la animacin pastoral que se ofrezca en las comunidades cristianas a las que sea-mos enviados.

    En esta oportunidad el recurso que hemos preparado lo distribuimos digitalmente. Agradecemos la iniciativa local de cada agrupacin misionera para asegurar la impresin y la distribucin oportuna entre ustedes.

    Convirtmonos en multiplicadores de estos instru-mentos con los que podemos apoyar tantos procesos pastorales nacionales e internacionales. Debido a la escasez de papel para la imprenta y las dems co-nocidas restricciones en el racionamiento nacional, aprovechamos el formato digital. En el portal web del Movimiento Juvenil Salesiano de Venezuela, se en-cuentran las versiones anteriores de nuestro Folleto Misionero, segn los tres ciclos litrgicos, A, B y C.

    A continuacin una presentacin de los contenidos.

    Ledos inicialmente los saludos que nos envan nuestros Pas-tores, encontraremos algunos textos de reflexin personal y grupal para seguir ahondando en el ardor misionero de nues-tra fe. Con esa motivacin, aprovecharemos posteriormente los elementos de animacin que se proponen para cada jor-nada, a saber: el enfoque pastoral de cada da, las oraciones de la maana y de la noche, los instrumentos para la planifi-cacin y los de la evaluacin, y finalmente algunos recursos para los servicios pastorales y litrgicos de los misioneros.

    Este ao la preparacin y la vivencia de nuestras Jornadas Misioneras 2015 vuelven a estar en la situacin de conflicto que se mantiene en nuestro pas. Esto hace que nuestras reflexiones, oraciones y proyecciones de fe tengan en cuenta necesariamente este momento nacional tan determinante en nuestra historia. Por ello iremos entretejiendo la liturgia de cada da con una propuesta educativa y pastoral de ciudada-na que oriente la siembra de la paz, por medio de la verdad, la justicia, la fraternidad, para la preservacin de la cultura democrtica. Nuestro pas nos implora el testimonio que po-damos dar da a da: debemos emanar a Jess en nuestras palabras, en nuestra escucha; que el aroma de Cristo acom-pae nuestro andar misionero.

    Gracias inmensas a ustedes, Testigos Jvenes que han de-cidido no callarse lo que han visto y odo, gracias por su testimonio de fe comprometida con Cristo, desde la Iglesia, para el bien de nuestro pas amado: Venezuela.

    Rafael Andrs, sdb.

  • 4A LOS MISIONEROS

    CSPJ - MJS Venezuela

    MENSAJE DEL PAPA FRANCISCO

    Queridos Jvenes:La alegra del Evangelio llena el corazn y la vida entera de los que se encuentran con Jess. Quienes se dejan salvar por l son liberados del pecado, de la tristeza, del vaco interior, del aislamiento. Con Jesucristo siempre nace y renace la alegra.

    La primera motivacin para evangelizar es el amor de Je-ss que hemos recibido, esa experiencia de ser salvados por l que nos mueve a amarlo siempre ms. Pero qu amor es ese que no siente la necesidad de hablar del ser amado de mostrarlo, de hacerlo conocer? Si no sentimos el intenso deseo de comunicarlo, necesitamos detener-nos en oracin para pedirle a l que vuelva a cautivarnos. Nos hace falta clamar cada da, pedir su gracia para que nos abra el corazn fro y sacuda nuestra vida tibia y superficial. Puestos ante l con el corazn abierto, de-jando que l nos contemple, reconocemos esa mirada de amor que descubri Natanael el da que Jess se hizo presente y le dijo: "Cuando estabas debajo de la higuera, te vi" (Jn 1,48). Qu dulce es estar frente a un crucifijo, o de rodillas delante del Santsimo, y simplemente ser ante sus ojos! Cunto bien nos hace dejar que l vuelva a tocar nuestra existencia y nos lance a comunicar su vida nueva! Entonces, lo que ocurre es que, en definitiva, lo que hemos visto y odo es lo que anunciamos (1 Jn 1,3). La mejor motivacin para decidirse a comunicar el Evangelio es contemplarlo con amor, es detenerse en sus pginas y leerlo con el corazn. Si lo abordamos de esa manera, su belleza nos asombra, vuelve a cautivar-nos una y otra vez. Para eso urge recobrar un espritu contemplativo, que nos permita redescubrir cada da que somos depositarios de un bien que humaniza, que ayuda a llevar una vida nueva. No hay nada mejor para transmitir a los dems.

    La misin en el corazn del pueblo no es una parte de mi vida, o un adorno que me puedo quitar; no es un apndice o un mo-mento ms de la existencia. Es algo que yo no puedo arrancar de mi ser si no quiero destruirme. Yo soy una misin en esta tierra, y para eso estoy en este mundo. Hay que reconocerse a s mismo como marcado a fuego por esa misin de iluminar, bendecir, vivificar, levantar, sanar, liberar. All aparece la en-fermera de alma, el docente de alma, el poltico de alma, esos que han decidido a fondo ser con los dems y para los dems.

    Hay un estilo mariano en la actividad evangelizadora de la Igle-sia. Porque cada vez que miramos a Mara volvemos a creer en lo revolucionario de la ternura y del cario. En ella vemos que la humildad y la ternura no son virtudes de los dbiles sino de los fuertes, que no necesitan maltratar a otros para sentirse importantes. Mirndola descubrimos que la misma que alababa a Dios porque derrib de su trono a los poderosos y despidi vacos a los ricos (Lc 1,52.53) es la que pone calidez de hogar en nuestra bsqueda de justicia. Es tambin la que conserva cuidadosamente todas las cosas meditndolas en su cora-zn (Lc 2,19). Mara sabe reconocer las huellas del Espritu de Dios en los grandes acontecimientos y tambin en aquellos que parecen imperceptibles. Es contemplativa del misterio de Dios en el mundo, en la historia y en la vida cotidiana de cada uno y de todos. Es la mujer orante y trabajadora en Nazaret, y tambin es nuestra Seora de la prontitud, la que sale de su pueblo para auxiliar a los dems sin demora (Lc 1,39). Esta dinmica de justicia y ternura, de contemplar y caminar hacia los dems, es lo que hace de ella un modelo eclesial para la evangelizacin. Le rogamos que con su oracin maternal nos ayude para que la Iglesia llegue a ser una casa para muchos, una madre para todos los pueblos, y haga posible el nacimiento de un mundo nuevo. Es el Resucitado quien nos dice, con una potencia que nos llena de inmensa confianza y de firmsima esperanza: Yo hago nuevas todas las cosas (Ap 21,5). Con Mara avanzamos confiados hacia esta promesa.

    Exhortacin Apostlica Evangelii Gaudium(Cfr; 1, 264, 273, 288)

  • 5CSPJ - MJS Venezuela

    MENSAJE DEL PADRE INSPECTOR DE LOS SALESIANOS DE DON BOSCO EN VENEZUELA

    Somos testigos porque no podemos callar lo que hemos visto y odo (Hch 4, 20) en nuestro encuentro vivo con Jesucristo.

    Siento mucha alegra al enviarles este mensaje con el que quiero abrirles la lectura y la reflexin de este otro her-moso recurso de pastoral; ha sido preparado con mucho esmero para que sea til en la animacin misionera de nuestra prxima Semana Santa, 2015.

    Quienes nos lo han hecho, han sentido que con su arte y su preparacin estn anunciando lo que Jesucristo les ha hecho ver y or en sus corazones juveniles compro-metidos; ahora nos lo entregan.

    Tienes en tus manos unas pginas de mucho valor por-que recogen el brillo de la fe, la que nos inspira la vida y los servicios apostlicos que estamos viviendo como Iglesia en el camino de la Cuaresma.

    Encontrars lecturas que te dejarn el entusiasmo de la esperanza para que te sigas preparando al anuncio ale-gre del amor redentor de Jesucristo durante los das santos y en la Pascua de este ao.

    En la reflexin atenta de estas lneas sentirs la fuerza de la compasin de Dios, cuyo nombre es la caridad; viviremos as el gozo de la Pascua, con el ardor misio-nero de ser apstoles de Cristo.

    Ya es una hermosa tradicin del MJS que se desarrolla en nuestra Patria, el liderar en nuestras obras este gran proceso de evangelizacin al que nos incorpora-mos como Iglesia en Venezuela.

    Nos felicitamos y animamos mutuamente para seguir construyendo entre todos la Civilizacin del Amor, con el compromiso de darle a otros el gozo de nues-tro bautismo, anunciarles a todos lo que hemos visto y odo de Dios en el propio corazn.

    Pido a la Virgen Mara, manantial de la alegra, que nos re-fresque a todos con el amor de su Hijo.

    Dios nos bendiga, con amor paternal.

    Francisco Mndez, SDB

    MENSAJE DE MADRE PROVINCIAL DE LAS HIJAS DE MARA AUXILIADORA

    No podemos callar lo que hemos visto y odo.

    Que estas palabras de la Escritura se vuelvan profundamen-te verdaderas en ustedes. O sea, cuando estn delante de los nios y jvenes en esta Semana Santa, no les hablarn de algo que aprendieron de memoria, o de lo que les dijeron acerca de Jess, o de cmo otros lo han vivido, o lo que otros han escrito acerca de l.

    Qu maravilla: ustedes hablarn en primera persona. Dirn: queridos nios/as o jvenes, yo vengo a decirles a ustedes lo que Dios ha hecho en mi vida. Vengo a compartirles lo que he visto de l, lo que l me ha manifestado de s mismo. Lo que le oigo decir cuando me encuentro con l. Los nios/as y jvenes quedarn fascinados. Porque el que se ha encon-trado con Jess y habla de esa experiencia a otros, lo hace con todo su ser: Se le nota en la mirada, en los gestos, en la alegra, en su forma de amar.

    Queridos/as jvenes misioneros/as: No hay felicidad ma-yor. Ya ustedes dieron con la piedra preciosa por la que vale la pena vender todo lo dems.

    Los quiero.Sor Margarita Hernndez, FMA

  • CSPJ - MJS Venezuela6

    MENSAJE DE LOS OBISPOS

    Es necesario, como pueblo de Dios, dejarnos guiar por la voz de nuestros pastores, quienes han sido consagrados por l mismo para cuidar de nosotros. En esta ocasin comparti-mos un extracto de la Exhortacin Pastoral: Renovacin tica y espiritual frente a la crisis que nos han brindado al iniciar este ao.

    Con profunda y renovada esperanza en Dios, al inicio de este ao 2015 los Obispos de Venezuela saludamos a todos los venezolanos, y elevamos nuestras oraciones al Seor por el bienestar y la paz del pas. En medio de los problemas que nos agobian, hemos visto en Navidad la luz de Jess, nuestro Divino Salvador (Lc 2, 9), quien nos anima a ir ade-lante, en fidelidad a su palabra, para construir un mundo mejor. Confiando en El queremos una vez ms compartir con nuestro pueblo algunas inquietudes sobre la actual si-tuacin del pas, para contribuir a resolver la crisis que enfrentamos.

    Renovacin tica y espiritualLa grave crisis que confrontamos en Venezuela revela una situacin an ms profunda: una crisis moral, de valores, actitudes, motivaciones y conductas, que es preciso co-rregir. Tenemos que superar actitudes como el afn de riqueza fcil y la corrupcin, la soberbia poltica, la pre-potencia y el ansia del poder, el egosmo, la pereza, el odio y la violencia. Y hemos de rescatar los principios de lega-lidad, legitimidad y moralidad que sustentan el entramado de la convivencia social. Estamos convencidos de que es posible una Patria en la que impere la democracia, con instituciones eficaces y saludables, donde cada persona y la sociedad entera puedan desarrollar sus iniciativas, superarse y comprometerse con la promocin del bien comn. Es necesaria la prctica de las virtudes persona-les y cvicas, de lo cual fue preclaro ejemplo el Venerable Dr. Jos Gregorio Hernndez.

    Por eso, como pastores de la Iglesia en Venezuela, ha-cemos un insistente llamado a la conversin moral, y al cumplimiento de los Mandamientos de la Ley de Dios. Es necesario que escuchemos y cumplamos la palabra de Dios, camino hacia la felicidad personal y social

    (Lc 11, 28), que nos invita a rea-vivar lo mejor de nosotros mis-mos: el amor al prjimo para construir juntos una Venezuela renovada donde florezcan la vida digna y los derechos de todos.

    Esta crisis nacional no ser resuelta en su totalidad sin una renovacin moral y espiritual que lleve a lneas concretas de accin. No podemos creer en Dios y actuar de cualquier mane-ra. Rechacemos la injusticia, la corrupcin y la violencia como males morales que hunden al pas, y vivamos de acuerdo al pro-yecto del Reino de Dios predicado por Nuestro Seor Jesucris-to. Como nos recuerda el Papa Francisco: se trata de amar a Dios que reina en el mundo. En la medida en que l logre reinar entre nosotros, la vida social ser mbito de fraternidad, de justicia, de paz, de dignidad para todos (Evangelii Gaudium 180).

    En Cristo ponemos nuestra esperanzaQueridos hermanos y hermanas: este dramtico anlisis que hacemos con dolor, nace de nuestra cercana al pueblo que su-fre, y de la misin pastoral que nos impulsa a ser promotores de la dignidad humana y de la paz. Nos sentimos solidarios con quienes se sienten particularmente inquietos, afligidos y angus-tiados por la actual situacin. Manifestamos nuestra determi-nacin y compromiso de renovacin personal y comunitaria en la lnea de las exigencias del Evangelio proclamadas por el Papa Francisco, y de continuar trabajando para llevar firme esperan-za y el consuelo de Dios a los ms necesitados, en la lnea de la opcin por los pobres.

    En medio de esta crisis, proclamamos: Cristo crucificado y re-sucitado es nuestra esperanza. El venci la adversidad y el mal. El nos da su Espritu Santo para renovar el mundo. La esperanza no es pasividad ni conformismo. A pesar de las dificultades que se vislumbran para el presente ao, los cristianos sabemos que estamos en manos de Dios. En Jess, Dios con nosotros (Mt 1, 23), ponemos nuestra confianza. Sin derrotismo, actuemos con entusiasmo para superar la crisis que enfrentamos.

    Con estos sentimientos y con gran afecto, imploramos sobre todos los habitantes de nuestra querida Patria las bendiciones de Dios y la maternal proteccin de Mara Santsima, la Virgen de Coromoto, patrona de Venezuela. Amn.

    Caracas, 12 de enero de 2015

  • 7CSPJ - MJS Venezuela

    ENTRE MISIONEROS

    La experiencia misionera es plural, multicolor y verstil. Podramos afirmar que hay tantas formas de misin como misioneros, y esto se multiplica por cada ocasin en la que el misionero se enrumba en una nueva misin; en repe-tidas ocasiones escucharemos Cada misin es nica e irrepetible y esto es totalmente cierto, sin embargo, es necesario cuidar ciertos espacios que nutrirn nuestra jornada. Fruto de la experiencia, hemos tomado los mo-mentos que consideramos ms relevantes, con tu lectura esperamos remover tu vivencia y motivar tu testimonio para que nos lo compartas y as pueda enriquecernos y llegar a otros misioneros.

    OracinEl misionero inicia su da orando con su grupo de misin, en cada signo del da avanza viendo las manifestaciones de Dios y las guarda en su corazn y al culminar presen-ta su jornada al Seor, confindole su labor realizada y el descanso venidero.

    A travs de la lectura de la Palabra de Dios, de la medi-tacin, del canto, de la danza se favorece el encuentro del misionero con Dios. El primer evangelizado en la jornada es el propio misionero quien, como discpulo, depende del encuentro con su maestro; el discpulo se nutre de l para poder dar lo que ha recibido. Las for-mas de orar son diversa: desde rezar el rosario hasta

    visualizar elaborados videos, y eso es una riqueza invaluable de nuestra Iglesia pero, lo primordial es que sea cual sea la forma por la que optemos propicie el encuentro con Dios en un dilogo sincero y cercano. Sin duda, es el combustible de toda misin.

    PlanificacinPreviamente a cada jornada es necesario poner en comn qu plan se propone para vivir cada da de la experiencia misio-nera, de forma tal que el grupo de misin visualice las nece-sidades de la comunidad, en cuanto a la evangelizacin, y los recursos con los que cuenta, y en funcin de ello proponga actividades y se distribuya las responsabilidades.

    Planificar nuestras jornadas diarias contribuir a ser ms efi-cientes, efectivos y eficaces, es decir, a hacer el mayor bien posible y sin duda nos har crecer en una experiencia plena de misin.

    Como parte de nuestro Folleto Misionero Somos Testigos te entregamos una propuesta de instrumento de planificacin que indica los aspectos a cuidar en las actividades de cada da. Haz uso de l, complemntalo, de ser necesario, con otra pro-puesta con la que cuentes; pero, planea en dilogo con Dios y haz de nuestra experiencia de evangelizacin una experiencia de calidad para nuestro pueblo.

    EXPERIENCIA MISIONERA

  • CSPJ - MJS Venezuela8

    Encuentro con los miembros de la comunidadEl misionero vive la experiencia de salir de si para llevar a Jess a todos los pueblos, a todas las naciones, como lo seala la Palabra de Dios, por eso, es vital cuidar el encuentro con los miembros de nuestra comunidad de misin, involucrarles es los procesos de evangelizacin, formarles, aprender de ellos.

    La visita casa por casa nos ayuda a estrechar los vnculos con los miembros de la comunidad: conociendo en el es-pacio de su intimidad sus necesidades, valores, carencias y talentos. Es llevar a Jess casa por casa, es hacer del hogar un espacio de oracin y acercarse a los ms aleja-dos que no asisten a las celebraciones religiosas.

    La Semana Santa est carga de celebraciones religiosas tanto las que propone la liturgia como las que se han ido cultivando en la religiosidad popular. Como misioneros, debemos velar por la vivencia de la centralidad de cada da, preparando y favoreciendo con esmero cada cele-bracin. La eucarista, las procesiones, la adoracin al santsimo, el lavatorio de los pies, el viacrucis son expe-riencias en las que debemos involucrar a la comunidad de forma activa, deben ser nuestra prioridad.

    Los encuentros formativos de catequesis, de charlas, de meditacin son importantes porque nos permiten profundizar con los miembros de la comunidad en su formacin religiosa preparndolos y complementando las vivencias de estos das. Es necesario adaptar estos espacios a las edades de nuestros destinatarios: nios, jvenes y adultos, tambin al grado de instruccin de nuestras comunidades de forma que lleguen a cada uno en su justa medida y sean aprovechados al mximo.

    Como salesianos sabemos que ms moscas se atrapan con un gota de miel que con un ba-rril de vinagre por lo que pro-poner encuentros recreativos para nios, jvenes y adultos es una herramienta cla-ve para llevar el mensaje de Dios de for-ma cercana y alegre. Es endulzar el paladar para hacer llegar el mejor nctar que poseemos: el mensaje del Evangelio. As que no es nada descabellado mostrar el Evangelio del da en un Teatrino de tteres en la plaza para hacerlo llegar a ms personas que las que asisten a la misa o explicar el Triduo Pascual a travs de una Gran Juego, lo importante es no per-der de vista el mensaje por muy festiva que sea la herramienta que escojamos.

    EvaluacinNuestra planificacin debe proponernos un espacio para com-partir las experiencias del da con el grupo misionero y revisar qu tal ha sido nuestra vivencia en la dimensin personal, gru-pal y con la comunidad, de forma que este sea nuestro punto de partida para proyectarnos al da siguiente.

    La misin debe favorecer un proceso de aprendizaje y para ello es necesaria esta evaluacin que nos debe ayudar a so-pesar lo positivo y lo que se debe mejorar impulsndonos a ser cada vez ms consientes de nuestras fortalezas y debili-dades y presentrselas al Seor. En nuestro Folleto Misionero Somos testigos te brindamos una propuesta para evaluar tu da a la luz de la cita bblica que meditamos este ao pastoral Nosotros no podemos callar lo que hemos visto y odo (Hch 4, 20) Aprovchalo!

    A grandes rasgo, estos son los espacios a cuidar durante la jornada de un misionero en la Semana Santa, que ilustran de igual forma los espacios para los que debemos capacitarnos antes de la misin y las reas a evaluar una vez concluida nuestra semana. Esperamos tus aportes.

  • CSPJ - MJS Venezuela9

    QUIN ES EL MISIONERO?

    El misionero es llamado. Dios en persona pronuncia nues-tro nombre, pens en nosotros y busc una manera original de hacernos llegar la invitacin a travs de alguien o algo. l nos ha reunido en una sola familia, es iniciativa suya por eso estamos aqu.

    El misionero es un enviado. El sitio de misiones no se de-cide por los intereses de las personas que van a misionar, sino desde las necesidades de la Iglesia y los itinerarios de fe que vamos realizando. Todos los que vamos a participar de las misiones recibimos la designacin de nuestro des-tino, ya sea en la propia comunidad parroquial o en otra comunidad.

    Es un cristiano que quiere ser autntico. Somos piedra viva de la Iglesia que est edificada en Cristo. A travs de Espritu Santo, Dios nos convoca y anima a vivir la misin, dando razones de nuestra fe y anunciando con valenta el mensaje que da sentido a nuestra vida. Decidimos vivir como discpulos misioneros, haciendo la voluntad de Dios, alegrando la vida de los otros, siguiendo a Jess.

    Nuestro primer sitio de misin son nuestras propias Parroquias y Comunidades. Antes de decidir las misio-nes en otras comunidades, debemos cubrir los espacios que sean necesarios en nuestra Parroquia y Comunidad, velando para que en esta experiencia parroquial, los que participen en ella hagan su experiencia comunitaria de programacin, celebracin y evaluacin.

    La Experiencia Misionera favorece nuestro camino personal de fe. Son experiencias graduales. No es vol-ver a vivir lo mismo de todos los aos. El camino debe ir presentando exigencias progresivas de mayor liderazgo y compromiso, no solo en su comunidad parroquial sino con la experiencia de la Iglesia Universal.

    La experiencia misionera debe ser un anuncio en la familia de los mismos misioneros. Los padres y fami-liares deben estar informados y en la medida de lo posi-ble involucrados en la experiencia misionera, para ello se debe organizar una reunin previa con los familiares

    de los misioneros presentndo-le las experiencias de aos an-teriores, los sitios dnde se va misionar, los responsables de los grupos y el sentido de la experiencia a travs de los testimonios de quienes ya han ido a misionar y la experiencia de sus padres. Tambin es oportuna una celebracin al final de la ex-periencia para presentarles las fotos y evaluar juntos lo vivido.

    El Movimiento Juvenil Salesiano propone un camino gradual y procesual en la experiencia misionera, el cual consta de varios perfiles para garantizar una vivencia acorde al crecimiento del joven. Su divulgacin y vivencia apunta a que nuestras expe-riencias misioneras caminen de forma articulada, homloga y brinde al participante una propuesta de crecimiento en su discipulado dndole acceso a experiencias enriquecedora y siempre ronovada.

    SABAS QU?La Iglesia Catlica dedica cada mes del ao a una determi-nada devocin.

    Enero: Jess Nio.

    Febrero: Santsima Trinidad.

    Marzo: San Jos, esposo de la Virgen Mara.

    Abril: Resurreccin de Jesucristo y Alegra Pascual.

    Mayo: Mes de la Virgen Mara.

    Junio: Mes del Sagrado Corazn de Jess.

    Julio: La preciossima sangre de Nuestro Seor Jesucristo.

    Agosto: Mes dedicado al Corazn Inmaculado de Mara.

    Septiembre: Mes dedicado a los dolores de Nuestra Seora.

    Octubre: La Virgen del Rosario.

    Noviembre: A las Almas del purgatorio.

    Diciembre: A la infancia de Jess.

  • CSPJ - MJS Venezuela10

    PERFIL MISIONERO

    1. Colaborar misioneroEs una persona que realiza por primera vez su experiencia misionera y apoya la logstica de las actividades de evan-gelizacin y celebracin litrgica en su parroquia.

    Caractersticas: Primera experiencia de misin. Tiene como edad mnima 14 aos. Dispuesto a prestar un servicio parroquial. Presentar permiso firmado de su representante.

    2. Misionero parroquialEs una persona que participa activamente en las activi-dades de evangelizacin y celebracin litrgica dentro de la parroquia.

    Caracterstica: Participa en la catequesis de confirmacin de 2do nivel, en una actividad o en grupo de la parroquia. Tiene como edad mnima 15 aos.

    Mnimo conocimiento de las actividades la Jornada Misionera. Presenta carta de peticin para ser misionero. Participa en las Jornadas de Formacin Misionera. Presenta permiso firmado de sus padres para la participa-cin en las actividades. Elabora Carta de compromiso durante la preparacin de la ceremonia de envo). Presenta comprobante de participacin en grupo o actividad parroquial. Particip como mnimo en el 70% de las actividades para recoleccin de fondos.

    3. Misionero diocesanoEs una persona enviada por su parroquia como parte de un grupo misionero a un sector de otra parroquia de la dicesis (previo acuerdo con el prroco) para realizar las actividades de evangelizacin y celebracin litrgica.

    Caractersticas: Tiene como edad mnima 16 aos. Presenta Carta de peticin personal para ser misionero. Ha misionado dos (2) veces en la parroquia. Elabora la Carta de compromiso durante la preparacin de la ceremonia de envo. Tiene una participacin comprobada en las actividades de la parroquia, comprobada con una carta del asesor del grupo o del catequista o del coordinador de su apostolado. Ha asistido a los encuentros de formacin misionera. Si es menor de edad, tener permiso escrito por sus padres y permiso de viaje concedido por los consejos de proteccin de menores.

  • CSPJ - MJS Venezuela11

    Haber participado como mnimo en el 70% de las activida-des de recoleccin de fondos.

    4. Misionero nacionalEs un joven, mayor de edad, que enviado por su parroquia como parte de un grupo misionero a un sector de otra dicesis en coordinacin con los otros grupos que atiende el lugar.

    Caractersticas: Es mayor de 18 aos de edad. Ha presentado la Carta de compromiso y participacin voluntaria elaborada durante la preparacin de la cere-monia de envo. Ha presentado la Carta de postulacin avalada por las comunidades cristianas a las que pertenece. Asisti a todos los encuentros de formacin misionera. Ha misionado en la dicesis dos (2) veces. Ha presentado el comprobante de participacin en la catequesis, misiones, oratorio u otro apostolado duran-te dos (2) aos. Asisti al encuentro de recoleccin de materiales y dems recursos para la Jornada Misionera. Ha participado en todas las actividades para recolec-tar fondos.

    5. Misionero InternacionalEs un joven, mayor de edad que viviendo un proceso de acom-paamiento profundo opta por compartir su especia como discpulo y misionero en una comunidad fue de nues-tro pas que requiere el apoyo de la ac-cin apostlica.

    Caractersticas: Es mayor de 18 aos de edad. Presenta por escrito y a travs del dilogo su camino de experiencia pastoral en el que evidencia que ha vivido las dis-tintas experiencias de colaborador misionero, misionero pa-rroquial, diocesano y nacional en su proceso. Ha participado en las experiencias de encuentro que propo-ne la Pastoral Juvenil Salesiana para organizar su proceso de discernimiento y envo a la comunidad misionera de destino. Cierra los proceso y responsabilidades que ha venido llevan-do adelante en nuestras nacin, garantizando un conclusin sa-ludable para si mismo y para sus compaeros de experiencia. Realiza los trmites legales, econmicos y de dems logsti-ca para partir a la misin.

    6. Misionero ad genteSon aquellos misioneros que trabajan en los lugares de prime-ra evangelizacin.

    Caractersticas: Han realizado la experiencia de misionar en parroquia y en las poblaciones de su dicesis. Ha participado en la formacin especfica para misioneros ad gentes. Asumen el reto de encontrarse con otras culturas, por lo cual se prepara para conocer sus modos de vivir y compartir con ellos la alegra de conocer a Jess. El trabajo de misin ad gente se realiza primordialmente en el estado bolivariano de Amazonas y del Zulia.

  • 12CSPJ - MJS Venezuela

    DA A DA

    SEOR, ENVAME! TESTIGOS AL ENCUENTRO

    ORACIN DE LA MAANA

    Ambientacin: En el lugar elegido como capilla, des-pus de limpiarlo apropiadamente y retirando las sillas o bancas, se procede a colocar en el piso, en un lugar donde todos puedan visualizar, un mantel o sbana blan-ca, sobre ella se coloca una imagen o cuadro de Jess, tamao mediano y un cirio o veln blanco encendido. De fondo (detrs de la imagen) colocar palmas grandes en forma de abanico. Desde la imagen se colocan una capa de hojas de palma u otras ramas si estn disponibles, haciendo la figura de un camino abierto. En medio del camino colocar la frase: Seor, mndame a m! en letras separadas. Puede aadirse cualquier otro ele-mento que aporte la imaginacin del grupo, siempre y cuando sean coherentes con el tema del da y manten-gan la sencillez del lugar.

    Antes de entrar, cada misionero debe poseer en sus manos una palma o rama, explicarles la importancia de mantener silencio y la concentracin en ese mo-mento de oracin. Aqu pudiera ayudar un audio de msica instrumental de fondo o tocar una guitarra. Se aconseja NO hacer dinmicas en estos momentos. Se sentaran en forma de semicrculo frente a la imagen de Jess.

    Smbolo del Da: Palmas y ramos en las manos que se agitan al momento de entonar los cantos.

    Motivacin: Comenzamos este da celebrando la en-trada de Jess en Jerusaln y el recibimiento que le hacemos en nuestras vidas (Mt. 21, 1-11). La

    muchedumbre que lo segua estaba formada por hombres, mujeres y nios, cada uno con su nombre, su ocupacin, sus cosas buenas y malas, y con el mismo inters de seguir a Jess. Algunas de estas personas haban estado presentes enlos milagros de Jess y haban escuchado sus parbolas.Esto los llev a alabarlo con palmas en las manos cuando entr en Jerusaln. Fueron muchos los que siguieron a Cris-to en este momento de triunfo, pero fueron pocos los que lo acompaaron en su pasin y muerte.Mientras esto suceda, los sacerdotes judos buscaban pretextos para meterlo en la crcel, pues les dio miedo al ver cmo la gente lo amaba cada vez ms y como lo haban aclamado al entrar a Jerusaln.

    Canto: ENVAME

    Imi1. Como un grito en mi vidaLa miTu palabra escuch:La miQuin ir para hablar por m?Sol 1A quin enviar?mi- LaA esa voz que me apremiaLa Requiero yo responder,La miYa me tienes aqu estoy.La Si7 miSeor, envame! COROMi LaTOMAME-tmame; ENVIAME-envame;Si7 miQUIERO HACER TU VOLUNTAD.

    DOMINGO DE RAMOS

  • CSPJ - MJS Venezuela13

    La miSE QUE TU PENSABAS DESDE SIEMPRE EN MILa Si7 miPARA PREGONAR TU VERDAD,La miPARA SER TESTIGO DE TU AMOR SIN FIN,La Si7 miPARA DAR A TODOS LA PAZ. II2. Has venido a mi lado.Me has hecho comprenderlo que quieres de m, Seor;qu esperas de mi fe.T has querido que hicieraslo tu voluntad.Ya me tienes aqu, Seor,dispuesto a caminar.

    III3. Muchos, toda su vida,buscan sin descansar:no conocen que T, Seor,en esta vida ests.Cmo van a encontrarte?No te pueden or.Cmo van a creer, Seor,si nadie habla de Ti?

    Lectura Biblca: Evangelio segn San Mateo (Mt 21, 1-11)

    Estaban ya cerca de Jerusaln. Cuando llegaron a Be-tfag, junto al monte de los Olivos, Jess envi a dos discpulos con esta misin: Vayan al pueblecito que est al frente, y all encontrarn una burra atada con su bu-rrito al lado. Destenla y triganmela. Si alguien les dice algo, contstenle: El Seor los necesita, y los devolver cuanto antes. Esto sucedi para que se cumpliera lo dicho por el profeta: Digan a la hija de Sin: Mira que tu rey viene a ti con toda sencillez, montado en una burra, un animal de carga. Los discpulos se fueron e hicieron como Jess les haba mandado. Le trajeron la burra con su cra, le colocaron sus mantos sobre el lomo y l se sent encima. Haba muchsima gente; extendan sus mantos en el camino, o bien cortaban ramas de

    rboles, con las que cubran el suelo. Y el gento que iba delan-te de Jess, as como los que le seguan, empezaron a gritar: Hosanna al hijo de David! Bendito sea el que viene en el nombre del Seor! Ho-sanna en lo ms alto de los cielos! Cuando Jess entr en Jerusaln, toda la ciudad se alborot y pregun-taban: Quin es ste? Y la muchedumbre responda: Este es el profeta Jess, de Nazaret de Galilea!Palabra del Seor.

    Momento de Silencio: En estos breves minutos de silencio re-pite en tu corazn la frase del Santo Evangelio que ms ha lla-mado tu atencin. Luego reflexiona personalmente lo siguiente: Qu significado tiene esto en mi vida?

    Gua: Esta es una oportunidad para proclamar a Jess como el rey y centro de mi vida. Debo parecerme a esa gente de Jerusaln que se entusiasm por seguir a Cristo. Decir que viva mi Cristo, que viva mi rey... Es un da en el que le puedo decir a Cristo que yo tambin quiero seguirlo, aunque tenga que sufrir o morir por l. Quiero sea el rey de mi vida, de mi familia, de mi patria y del mundo entero. Quiero sea mi amigo en todos los momentos de mi vida.

    Hoy vamos a unirnos a toda la Iglesia orante a travs del rezo de los salmos. Se pueden rezar solos o preferiblemente en comunidad. Existen muchas maneras de hacerlo, propongo la siguiente: Sentados en semicrculo se dividen en dos grupos Grupo uno (G1) y grupo dos (G2), mientras el grupo uno lee una estrofa, TODOS a una voz responden con el coro. Luego el grupo dos lee la estrofa siguiente y TODOS responden con el coro, y as sucesivamente hasta finalizar el salmo. Los salmos deben leerse pausados y meditados. Se inician y se terminan rezando el Gloria al Padre

    Salmo responsorial: Salmo 21Gloria al Padre, al Hijo y al Espritu SantoCoro/. Dios mo, Dios mo, por qu me has abandonado? Coro/. Dios mo, Dios mo, por qu me has abandonado? G1/. Al verme se burlan de m, hacen visajes, menean la cabeza: Acudi al Seor, que lo ponga a salvo; que lo libre si tanto lo quiere. Coro/. Dios mo, Dios mo, por qu me has abandonado? G2/. Me acorrala una jaura de mastines, me cerca una banda

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    de malhechores: me taladran las manos y los pies, puedo contar mis huesos. Coro/. Dios mo, Dios mo, por qu me has abando-nado? G1/. Se reparten mi ropa, echan a suer-tes mi tnica. Pero t, Seor, no te quedes le-jos; fuerza ma, ven corriendo a ayudarme. Coro/. Dios mo, Dios mo, por qu me has abando-nado? G2/. Contar tu fama a mis hermanos, en medio de la asamblea te alabar. Fieles del Seor, alabadlo, linaje de Jacob, glorificadlo, temedlo, linaje de Israel. Coro/. Dios mo, Dios mo, por qu me has abandonado?

    Gloria al Padre, al Hijo y al Espritu Santo

    Padre NuestroDespus del padre nuestro cada misionero (espontnea-mente) colocar su palma o ramo para dar continuidad a ese camino antes iniciado y dir en voz alta una frase en lo que se compromete a vivir en esta Semana Santa, diciendo: Seor, mndame a m a...

    Oracin a Mara (Todos)Mara, tus hijos llenos de gozo,Te proclamamos por siempre bienaventurada.T aceptaste gozosa la invitacin del Padrepara ser la Madre de su Hijo.Con ello nos invitas a descubrirla alegra del amor y la obediencia a Dios.T que acompaaste hasta la cruz a tu Hijo,danos fortaleza ante el dolory grandeza de coraznpara amar a quienes nos ofenden.T al unirte a la oracin de los discpulos,esperando el Espritu Santo,te convertiste en modelode la Iglesia orante y misionera.Desde tu asuncin a los Cielos,proteges los pasos de quienes peregrinan.guanos en la bsquedade la justicia, la paz y la fraternidad.Mara gracias por tenerte como Madre. Todos: Dios te salve Mara

    PLANIFICACIN

    OBJETIVO Para qu deseohacer esta actividad?

    QU? El nombre de la actividad a desarrollar

    CMO? Descripcin de la forma como se realizar la actividad

    CUNDO? Fecha y tiempo estimado de la actividad

    CON QU? Recursos humanos y materiales necesarios para el desarrollo de la actividad

    DNDE? Espacio determinado para realizar la actividad

    QUIN? Persona responsable de liderar la actividad

    Para comprenderlo, te presentamos un sencillo ejemplo:

    OBJETIVO Vivir una experiencia de encuentro y compartir en la fe con los jvenes animadores del MJS Venezuela

    QU? Participar en el CAMPOBOSCO NACIONAL MJS

    CMO? Realizar las fichas de preparacin al CAMPOBOSCOInscribirse en el CAMPOBOSCOComprar los pasajes y trasladarse hasta Duaca - Edo. Lara

    CUNDO? Del 28 al 30 de Agosto de 2015

    CON QU?Biblia, cdula, pasajes, artculos de aseo personal, franela, etc

    DNDE? Centro Juvenil Domingo Savio. Duaca - Edo. Lara

    QUIN? Animadores, Asesores y Acompaantes del MJS

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    PLANIFICACIN

    OBJETIVO

    CMO?

    CUNDO?

    QU?

    CON QU? DNDE?

    QUIN?

    CSPJ - MJS Venezuela

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    EVALUACIN

    CSPJ - MJS Venezuela

    De cada evangelio de la Semana Santa podemos sacar infi-nidad de hilos conductores pero, existe uno extraordinaria-mente curioso: cada uno nos va mostrando o demandando que demos la mejor parte de nosotros a Dios; Mara que da a Jess el perfume ms caro, Judas que niega lo mejor de s a Dios, el mismo Jess que se entrega en el servicio y en la cruz. Pero, para descubrir y dar la mejor versin de nosotros mismo es necesario revisarnos con frecuencia, evaluarnos.

    El evaluar nos permite degustar la experiencia que emana de la actividad. Es comentar los frutos de lo vivido, he aqu su importancia; el misionero que no evala es como aque-lla persona que prepara durante todo un da una comida deliciosa y al culminar no se la come, la tira a la basura.

    Si nos preguntamos Qu es evaluar? Podramos respon-der con sencillez es decir qu tal nos fue en el da; para los ms acadmicos y rigurosos evaluar se refiere a va-lorar, a medir algo; ambas definiciones se encuentran y nos dicen qu entendemos por evaluar.

    Como la mayora de las cosas en nuestro mundo, a eva-luar tambin se aprende y a continuacin te dejamos unos tips para nutrir la construccin de tus evaluaciones.

    Bitcora: Al evaluar cuida que se pueda hacer una re-visin de las actividades del da de forma relatada. En caso de la Jornada Misionera se recuenta qu hicimos hoy desde que nos levantamos hasta el momento de la evaluacin. Este ejercicio de bitcora ayudar a hacer memoria de qu evaluars, traer a la mente cada mo-mento permite que evitemos revisar solo una parciali-dad del da.

    Autoevaluacin: Como Movimiento Juvenil Salesia-no, en nuestros procesos formativos, colocamos a la persona como centro, por lo que es vital la evaluacin personal, ese ejercicio de autoevaluacin en el que vis-lumbremos de nosotros mismos: nuestras fortalezas, nuestras debilidades, nuestros retos.

    Cuando aprendemos a revisar nuestra propia experiencia "sin tabes" estamos capacitando al misionero en humildad, en autoestima y en conocimiento de s mis-mo. Es saludable velar porque cada uno se pueda ver de forma equilibrada, evitando quedarse solo con la dimensin negativa o positiva de s mismo.

    Coevaluacin En el grupo misionero el dilogo sincero y fraterno ayudar a que los misioneros crezcan en su relacin con su prjimo. Para ello toda buena evaluacin debe ayudarnos a ver qu piensa el otro y calificar desde nuestra subjetividad cmo lo vemos, qu sugerimos que mantenga y qu debe mejorar. Cre-cemos en franqueza, en objetividad, en comprensin del punto de vista del otro.

    Del conversar de forma respetuosa, clara y equilibrada debe emanar planteamientos que nos permitan incorporar en nues-tra mejora lo que nuestros compaeros han observado de nosotros.

    Con nuestros destinatarios: Es importante estar en un constante dilogo con los destinatarios y actores de las ex-periencias que planificamos para sopesar la huella que vamos dejando en ellos. Esto podemos hacerlo preguntndoles direc-tamente a ellos, permitindoles que evalen las actividades a travs de los instrumentos que les facilitemos o poniendo sobre la mesa nuestra percepcin de ellos, cmo hemos visto que han vivido estas experiencias. Podemos abordarlo por un camino o por otro, lo importante es no dejar de lado a los pro-tagonistas y participantes de nuestras actividades.

    Todas las dimensiones: Las evaluaciones deben partir de lo que hemos planificado, una evaluacin en el aire puede ser tan intil como la que no se hace o tan injusta como aquel que llega al final del da a opinar sobre lo que no ha visto ni odo. Por lo que la evaluacin debe cotejar la ejecucin de lo planificado, preguntar en qu medida se logr el objetivo propuesto, qu tal fue la actividad programada, qu tal el uso de recursos, de tiempo, del aporte de cada miembro del grupo y dems aspec-tos contemplados desde el plan del da. Propiciando as una evaluacin equilibrada en la que podamos ver lo positivo y a mejorar de cada aspecto y en la que se concluya con un plan-teamiento de mejora claro para la prxima jornada.

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    EVALUACIN

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    TESTIGOS

    SOMOS100% 75% 50% 25% 0

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    En este apartado rellenaremos los espacios para indicar en qu medida hemos podido alcanzar el objetivo que nos habamos propuesto en la plani-fi cacin para el da.

    A continuacin te presentamos el modelo de instrumento de evaluacin que deseamos implementar durante esta Semana Santa:Hemos recorrido nuestra vida pastoral de este ao con la consigna de que No podemos callar lo que hemos vis-to y odo, motivacin que ha cobrado ms volumen estos das de Cuaresma pero, paradjicamente, en este momen-to del da en el que nos disponemmos a realizar nuestra evaluacin te pediremos que calles, que hagas silencio. Ha llega-do el momento del da en el que seremos testigos del recorrido vivido a travs del siguiente modelos de evaluacin:Existir un primer momento de evaluacin personal

    En el apartado PODEMOS daremos respuesta a la interrrogante: Con qu potencialidades contamos como misioneros?: nuestros talentos, buenas acciones, habilidades, aciertos del da, etc.

    Seguidamente, en NO sealaremos qu debemos superar que no podemos permitir que suceda de nuevo durante nuestra jornada misionera, ni en nuestra vida: sentimientos, acciones, desaciertos, entre otros, porque no le favorecen, no nos ayuda.

    Luego, se favorecer un mo-mento de evaluacin de la experiencia grupal titulada TESTIGOS en la que seala-remos:

    Qu hemos VISTO del da?: Aqu comentare-mos la experiencia de Dios que hemos tenido en nuestra comunidad de misin,

    Qu hemos ODO de nuestro grupo:? Este espacio es de coe-valuacin en el que opinaremos acerca de nuestros compaeros misioneros.

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    TESTIGOS

    SOMOS

    En el da de hoyLa persona que dirija la evaluacin invita a recordar todo lo vivido du-rante el da y a llenar los espacios segn lo indica la motivacin inicial.

    Hemos alcanzado el da hasta...

    1. Cul ha sido mi capacidad de encuentro el da de hoy?

    2. Qu NO he aportado para la convivencia del da de hoy?

    3. En qu momentos con la comunidad de misin viste la llegada de Jess a tu semana misionera?

    4. De tus compaeros de misin quin fue testimonio de la llegada de Jess para ti hoy? Por qu?

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    ORACIN DE LA NOCHE

    Ambientacin: Mantener la misma ambientacin de la ma-ana y disponer las sillas en semicrculo alrededor del mo-numento.

    Smbolo del Da: Palmas y ramos colocados en el piso du-rante la oracin de la maana.

    En el nombre del Padre, del Hijo y del Espritu Santo. Amn

    Uno de los misioneros lee en voz alta y clara la siguiente motivacin y los dems escuchan con atencin.

    Motivacin: ENTRAMOS EN LA SEMANA SANTA

    Con la celebracin de hoy comenzamos el itinerario es-piritual de la Semana Santa. Una vez ms, pues, se nos convoca en torno a la realidad central de nuestra fe: el MISTERIO PASCUAL, es decir, el PASO confiado de Jess hacia el Padre a travs del dolor y la muerte. Nunca pro-fundizaremos lo suficiente en este hecho que nos sobre-pasa. Por eso debemos volver a l una y otra vez; como Iglesia del Resucitado, debemos dedicar a esta profundi-zacin un tiempo ms intenso de contemplacin plena y reposada. Ese es el objeto y el sentido de la semana que empezamos.

    Y hoy, domingo de ramos, la liturgia nos ofreci como una anticipacin concentrada de cuanto vamos a ce-lebrar durante la semana, al proponernos la figura de Jess Rey doliente, aclamado y escarnecido a un tiem-po: la cruz que se recorta sobre el horizonte del triunfo pascual.

    Sintonizar con Jess Servidor Doliente El relato de la pasin segn San Marcos que hemos escuchado subra-ya la grandeza moral y humana de Jess y, a travs de la actitud de los personajes de la pasin, nos exhorta a la relacin personal con Cristo.

    Nos es necesario sintonizar con Jess que sufre. Y no para quedarnos slo con impresiones sentimentales. Debemos llegar a una com-pasin ms profunda, a

    aquella actitud espiritual que nos hace PERCIBIR EL FONDO de la pasin de Jess, LA RAZ de su sufrimiento y LA NOVEDAD exaltante que de l brota.

    Contemplemos y admiremos la figura va-lerosa de Jess: este servidor generoso de Dios Padre y de todos los hombres hermanados ya por siempre en la encruci-jada de su muerte victoriosa. l ha sentido como nadie el dolor moral que pesa sobre las cansadas espaldas de la historia humana; l ha descendido por peldaos de injuria y hostilidad al fondo del pozo, al fondo absurdo y ciego del mal que los hom-bres hacen a los hombres. l ha bebido el cliz hasta la ltima gota... l ha asumido todo ese mal de los hombres, se lo ha hecho suyo y lo ha convertido en vida y oracin ante el padre.

    Y en un acto total de entrega consciente y lcida, llevando has-ta el extremo su obediencia, su fidelidad al plan de Dios en pro de los hombres, ha dado la vida. Contemplmoslo colgado en la cruz, entre el cielo y la tierra, entre Dios y la humanidad. Abiertos los brazos en crucificada actitud de plegaria, muere mostrndonos de par en par su alma de Hijo: Padre, me en-comiendo en tus manos. Brazos extendidos en la cruz como abrazando a toda la humanidad doliente, muere intercediendo por ella: Padre, perdnalos porque no saben lo que hacen.

    Qu resonancias despierta en nuestro interior el relato de la pasin, al hacernos entrever en el Hijo de Dios Crucificado la silueta de todos los crucificados de la historia, de todos los que sufren, los rechazados, las vctimas inocentes de las gue-rras y los conflictos internacionales por el poder, la religin, las riquezas; y al hacernos intuir que en Jess doliente todas estas calamidades de la historia humana han sido transidas de un nuevo sentido redentor?

    Jess por la cruz triunfa, nos obtiene la salvacin porque real-mente Jess en la cruz triunfa; Jess por la cruz se salva y nos salva con l. Ha convertido el sufrimiento en un momento de comunin con Dios y con los hermanos. Ha convertido la muerte libremente asumida en un paso creador de vida que transforma el mundo y la historia.

    Jess en la cruz ha destruido el mal profundo de los hombres. Con su entrega ha desbloqueado nuestra incapacidad para amar de verdad, con un amor de donacin y no de posesin

  • CSPJ - MJS Venezuela20

    egosta. Jess tendido en la cruz ha rehecho los puentes del dilogo entre el Padre y los hijos dispersos. Nos ha re-conciliado.

    Y el Padre lo ha resucitado victorioso, lo ha acogido con alegra como el primero de muchos hermanos, y en l todos hemos sido ya, en la certeza de la esperanza, acogidos y resucitados.

    Hermanos, la invitacin es a asimilar las actitudes pro-fundas de Jess. Que como sus discpulos y misioneros, durante estos das, tengamos los mismos sentimientos de Cristo Jess. Que las celebraciones litrgicas, el clima de nuestras parroquias, comunidades y lugares de misin, los momentos que cada uno pueda dedicar a la oracin (slo o con otros), hagan crecer en nosotros la adhesin perso-nal a Jess. Una adhesin que pase por la cruz para poder participar tambin en la resurreccin. Y alentados por esta prenda de victoria, mantengmonos en estos das despiertos y atentos en expectacin de la madrugada de Pascua.

    Para iniciar nuestro espacio de oracin entonamos el canto

    Canto: SOY TU TESTIGO-Elizabeth Vega

    Al amanecer luego de tanto buscar tu voz irrumpi mi silencio sin ms. Ante el desconcierto pude reconocer que eres tu quien me invit a creer.Te haces presente y comienzo a cambiar, mi fe se renueva y el miedo se va. Te entrego mi vida porque quiero ser tu testigo, tu amigo ms fiel.Testigos del amor que vence a la muerte, testigos de Cristo vivo y resucitado, se aleja el temor, has puesto en mi tu mirada: Quiero ser tu testigo Seor!Y aunque a veces me cueste seguir, llevar a todo el mundo tu luz sin medir.No le temo al desprecio el miedo se acab a mi lado camina el Seor.Testigos del amor que vence a la muerte

    Para la reflexin Personal

    Se hace un breve silencio, y a continua-cin se realiza el examen de conciencia de la siguiente forma, procurando un tiempo breve pero prudencial entre cada meditacin, recuerda usar un tono de voz apropiado, suave y confiado. Se designa a uno de los misioneros a dirigir el momento.

    Gua: Nos disponemos a tomar conciencia del da que hemos tenido, desde la intimidad de nuestros corazones conversamos con el seor. Revisamos con el recuerdo desde el momento que abrimos los ojos en la maana hasta ahora que estamos juntos ac. (Cada uno en silencio durante cinco minutos re-flexiona estas preguntas)

    1-Es Jess para m, realmente, el Mesas? 2-He asimilado las actitudes de Jess en mi vida?3-Qu debo hacer para asumir verdaderamente las actitudes de Jess?4-Realmente me siento enviado por Jess para trabajar por su Reino? De qu manera?5-Como enviado del Seor a esta comunidad de misin, qu estoy dispuesto a sacrificar, corregir, dominarme y compartir para hacer realidad viva el Evangelio de Jess?6-Qu significa para mi le expresin: Seor, mndame a m!? (La respuesta de esta ltima pregunta (6) puede ser compartida en grupo.)

    Gua En un momento de silencio doy gracias a Dios padre por los dones con los cuales hoy me bendijo, pido perdn a Jesu-cristo por lo que hice en contra de su voluntad, confo en el Espritu Santo mis mejores propsitos para maana.

    Todos PADRE NUESTRO

    OREMOS POR LAS MISIONES

    Espontneamente pueden ser ledas por los misioneros

    Para que en esta semana la Iglesia celebre en profundidad el mis-terio de la muerte y resurreccin de Jess. Oremos al Seor...R- Mustranos Seor el camino para ser autnticos testigos.

  • CSPJ - MJS Venezuela21

    Para que la celebracin de la Semana Santa aumente en no-sotros la fe y el deseo de trabajar cada da ms para que triunfe el amor sobre el egosmo. Oremos al SeorR- Mustranos Seor el camino para ser autnticos testigos.

    Por todos los que en esta semana descansan del trabajo, se reencuentran con la familia o viajan de vacaciones; para que el Seor les acompae y ellos puedan acompaarlo en estos das. Oremos al Seor.R- Mustranos Seor el camino para ser autnticos testigos.

    Por todos los pueblos pobres del mundo, que esperan -aun sin saberlo- un mesas que levante su esperanza; para que se alcen de la postracin y recuperen sus esperanzas. Oremos al Seor.R- Mustranos Seor el camino para ser autnticos testigos.

    Para que las comunidades cristianas, en esta Semana Mayor crezcan en madurez y profundidad en la fe, y con ayuda de la vivencia eclesial y litrgica se acerquen a los ms alejados de la Iglesia. Oremos al Seor.R- Mustranos Seor el camino para ser autnticos testigos

    Por todas las misiones, misioneros y misioneras de la Iglesia, que han aceptado la invitacin del Seor de mi-sionar en las periferias, para que el protagonista de la misin sea el Espritu Santo y no ellos. Oremos al Seor.R- Mustranos Seor el camino para ser autnticos testigos.

    (Se pueden aadir otras intenciones)

    Para finalizar espontneamente se recitan las tres Ave Mara diciendo:

    Un misionero: Madre querida Virgen Mara

    Todos: Haz que Dios salve el alma ma.

    Dios te salve Mara. Recitarlo (3 veces).

    Mara Auxiliadora de los cris-tianos. Ruega por nosotros.

    Propuesta de imgenes para las ora-ciones de la noche:

  • CSPJ - MJS Venezuela22

    LUNES SANTO

    TESTIGOS ELEGIDOS!

    ENFOQUE DEL DANuestra clave de sentirnos amados, tocados, observados por Dios, no es ms que una eleccin fundamental en la historia de la salvacin. Dios nos conoce profundamente, y hoy queremos que esta eleccin de Dios por cada uno de nosotros, tenga su correspondencia hacia aquel que nos ha amado primero: l. Dios no nos ama a todos, sino que ama a cada uno, ama en la individualidad y no en la masa de su pueblo.

    Hoy queremos recordar que somos imagen y semejanza de Dios. l nos ha dado su propia vida, en l nos movemos y existimos. Somos suyos por dos razones elementales, una, por amor, y la otra, para amarnos. Esta segunda es parte de nuestra misin en el mundo, sentirnos amados por l. Estamos llamados a testimoniar en este da el gozo de sentirnos elegidos por Dios, tal y como Mara Magdalena demostr a Jess su amor apasionado. Ella lo amaba con todas sus fuerzas, y su amor, lejos de volverla ciega, la llevaba a sentir y a respetar la misteriosa per-sonalidad de Cristo. En su momento, no todos los aps-toles comprendieron su gesto, ungirle los pies a Jess y secrselo con sus cabellos, porque todava tenan mucho que aprender sobre el amor a l.

    Ambientacin: A la vista de todos colocar un corazn grande y encima de l, unas monedas con una bolsa o una cartera o monedero (actualizando el evangelio), un frasco o botella (grande que sea visible, de ser posible acondicionarla para que se perciba como un perfume), un par de odos (dibujados/pintados creativamente), todo esto rodeando la biblia (quien estara al centro del corazn). En el lugar, para la maana es recomendable colocar: Y en el tuyo, qu hay?. En cambio para la noche: Yo, el Seor, te he llamado, formado y tomado de la mano. Smbolo del DaCada uno de los misioneros debe tener un corazn, preferiblemente en cartulina, ste lo deben llevar a su

    pecho, por la parte de adelan-te debe decir N:_____________ elegido de Cristo. (Ej.: Vanessa, al centro, y de bajo elegida por Cristo). La intencin es que a medida que vaya pasando el da, cada misionero le pida a las personas con quien se encuentre que coloque su nombre en la parte posterior. Porque Dios que nos ha elegido, llamado, nos enva

    MotivacinL1: Aqu estamos Seor frente a ti. T nos recuerda que la vida cristiana es sencilla; consiste en or tu Palabra y llevarla a los dems. Por eso, hoy, Seor, estamos aqu, dispuestos a llenar nuestro corazn de ti, para dar frutos abundantes.

    L2: Hoy no queremos leer, queremos hacer la experiencia de escucharte, de orte, de escudriar. Lo que queremos hoy es precisamente encontrarte en aquellos a quienes nos has en-viado.

    T: Queremos dejar todos nuestros afanes, preocupaciones, desilusiones, actividades, en fin, queremos sentirnos aban-donados en tus manos providentes. Porque solo as, siendo elegidos por ti, nos sentimos llamados a proclamarte solo a ti, nico Dios verdadero. Hoy nos sentimos implicados en nuestra sociedad como profetas.

    Canto: EL PROFETA

    Tengo que gritar, tengo que arriesgar, Ay de m si no lo hago!!Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.Tengo que andar, tengo que luchar, Ay de m si no lo hago!!Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.

    Antes que te formarasDentro del vientre de tu madre,Antes que t nacieras,Te conoca y te consagr,Para ser mi profetaEn las naciones yo te escog,

  • CSPJ - MJS Venezuela23

    Irs donde te enve,Lo que te mande proclamaras.

    Tengo que gritar, tengo que arriesgar, Ay de m si no lo hago!!Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.Tengo que andar, tengo que luchar, Ay de m si no lo hago!!Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.

    No temas arriesgartePor que contigo yo estar,No temas anunciarmePor que en tu boca yo hablar,Te encargo hoy mi pueblo,Para arrancar y derribar,Para edificar, destruirs y plantars.

    Tengo que gritar, tengo que arriesgar, Ay de m si no lo hago!!Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.Tengo que andar, tengo que luchar, Ay de m si no lo hago!!Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.

    Deja a tus hermanos,Deja a tu padre y a tu madre,Abandona tu casaPorque la tierra gritando esta,Nada traigas contigoPorque a tu lado yo estar,Es hora de lucharPorque mi pueblo sufriendo esta.

    Tengo que gritar, tengo que arriesgar, Ay de m si no lo hago!!Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.Tengo que andar, tengo que luchar, Ay de m si no lo hago!!

    Como escapar de ti, como no hablar,Si tu voz me quema dentro.

    Lectura Biblca: Jn 12,1-11Seis das antes de la Pascua fue Jess a Betania, donde estaba Lzaro, a quien Jess haba resucita-do de entre los muertos. All lo invitaron a una cena. Marta serva y Lzaro estaba entre los invitados. Mara, pues, tom una libra de un perfume muy caro, hecho de nardo puro, le ungi los pies a Jess y luego se los sec con sus cabellos, mientras la casa de llenaba del olor del perfume. Judas Iscariote, el discpulo que iba a entregar a Jess, dijo: ese perfume se podra haber vendido en trescientas monedas de plata para ayudar a los po-bres. En realidad no le importaban los pobres, sino que era un ladrn y, como estaba encargado de la bolsa comn, se llevaba lo que echaban en ella. Pero Jess dijo: Djala, pues lo tena reservado para el da de mi entierro. A los pobres los tienen siempre con ustedes, pero a m no me tendrn siempre. Mu-chos judos supieron que Jess estaba all y fueron, no solo por ver a Jess, sino tambin por ver a Lzaro, a quien haba resucitado de entre los muertos. Entonces los jefes de los sacerdotes pensaron en dar muerte tambin a Lza-ro, pues por su causa muchos judos se alejaban de ellos y crean en Jess. Palabra del Seor

    Orar desde la Palabra de DiosEn este momento se les invita a los misioneros a tener una actitud orante frente al texto evanglico que hemos odo. Para esto, les proponemos seguir los siguien-tes pasos:

    I. Qu me dice el texto: Subrayar los personajes, los verbos, las frases que han llamado mi atencin Qu me dice la Palabra de Dios hoy? El Seor que me est indicando, pidiendo, reclamando? Cul es el perfume con el que voy a ungir al Seor?

    II. Qu le digo al texto: Qu surge en mi corazn como respuesta a lo que el Seor me ha dicho? Qu le quiero decir al Seor?. En este momento se invita a elaborar una oracin personal para el Seor.

    Padre Nuestro

    Canto: Quiero Seor mi vida ofrecerQuiero, Seor, mi vida, ofrecer, como ofrenda de amor y sacrificio.Quiero, Seor, mi vida a ti levantar, como ofrenda viva ante tu altar. Pues, para adorar, fue que yo nac, haz de m (bis), tu querer (bis), haz lo que est en tu corazn. Y que cada da yo pueda ms y ms, estar a tu lado (3v), Seor

    Gua: Consagremos nuestro da a nuestra Madre,la primera discpula-misionera Dios te salve...

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    PLANIFICACIN

    OBJETIVO

    CMO?

    CUNDO?

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    CSPJ - MJS Venezuela

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    TESTIGOS

    SOMOS

    En el da de hoyLa persona que dirija la evaluacin invita a recordar todo lo vivido du-rante el da y a llenar los espacios segn lo indica la motivacin inicial.

    Hemos alcanzado el da hasta...

    1. Qu cualidades, rasgos y acciones tuyas mostraron a tus hermanos el aroma de Jess? Su olor de piedad, alegra, compasin, misericordia, fe...

    2. Qu NO te permiti oir la voz de Dios hoy?

    3. Cmo ha sido el olor de la comunidad hoy: fetido, fresco, agradable... Por qu?

    4. Qu talentos visualizaste en tus compa-eros hoy? Puedes comentar el de varios de ellos.

  • CSPJ - MJS Venezuela26

    ORACIN DE LA NOCHE

    MotivacinGua: Aqu estamos Seor, postrados ante ti. Venimos, para renovar nuestra entrega, recordar el motivo por el cual estamos, hoy aqu. Rendidos a tus pies queremos recono-cernos pecadores, reconocemos nuestras flaquezas y de-bilidades. Hemos sido llamados por ti y en esta llamada nos pides conversin. Con este canto Seor nos acercamos a tu infinita misericordia e imploramos tu gracia sobre cada uno de nosotros.

    Canto: RENUVAME (En clave de examen de conciencia)

    L1: Hoy tienes frente a ti tantos jvenes que, como Mara Magdalena, nos hemos puesto a los pies del maestro para servirle. Aqu estamos como perfumes, siempre agrada-ble, impregnando cada uno de los lugares en los cuales nos has permitido estar. Este perfume hoy tiene un olor ms agradable que nuca, porque el perfume eres t.L2: Queremos agradecerte en esta noche por tu riqueza, por tu don, por la vida, por hacernos capaces de llevarte a ti. Hoy te decimos:T: Gracias, por hacernos tu mejor perfume.

    Gua: En esta noche queremos traer a nuestra mente a cada una de esas personas que colocaste en nuestro ca-mino de hoy. Gracias porque te nos das a travs de los ms sencillos y pobres. Es en ellos, en nosotros mismos, en quienes te encontramos siempre. (En este momento se les invita al grupo a dar gracias a Dios, de la siguiente manera, revisando el corazn que hemos llevado como escarapela y en clima de oracin nombrar a algunas de las personas quienes han plasmado su nombre en nuestro corazn. Ej.: Gracias Seor por.....)

    Canto: COLABORACIN

    Estbamos divagando en lo superficial sin entrega y trabajo ni lo esencial A lo lejos estaba un viejo crucifijo cubierto de polvo y olvido. De repente, me mira y me guia un ojo y me invita a limpiarlo con gozo.

    Una mirada que llena de ternura. Y me invita a dejarlo todo e ir con l.

    COROCristo no tiene manos y pide las tuyas. Cristo no tiene voz que cante su cancin. Cristo no tiene pies para caminar el mundo y pide COLABORACIN.

    El camino no es fcil, se hace largo ya. Entre flores y espinas he de caminar. Para darle a la gente un bello final de alegra y gozo en la eternidad CORO (Bis)

    Cristo tienes mis manos salas cual tuyas Cristo tienes mi voz que cante tu cancin Cristo tienes mis pies para caminar el mundo Cristo aqu tienes mi amor.

    Gua: Nos unimos como comunidad misionera y de forma lit-nica rezamos juntos.Te entrego, Seor, mi vida; hazla fecunda.Toma mis manos; hazlas acogedoras.Toma mi corazn; hazlo ardiente.Toma mis pies; hazlos incansables.Toma mis ojos; hazlos transparente.Toma mis horas grises; hazlas novedad.Toma mi niez; hazla sencilla.Toma mis cansancios; hazlos tuyos.Toma mis mentiras; hazlas verdad.Toma mis muertes; hazlas vida.Toma mi pobreza; hazla tu riqueza.Toma mi obediencia; hazla tu gozo.Toma mi nada; haz lo que quieras.Toma mi familia; hazla tuya.Toma mis amigos; hazlos tuyos.Toma mis faltas de amor, mis desilusiones; hazme nuevo en la donacin, alegre en la entrega, dame gozo desbordante al darte la vida, al entregrtela, al gastarme por los nios y los jvenes. AMN Gua: En esta noche, Seor, queremos colocar en tus manos nuestro descanso. Unimos nuestras manos y voces, para can-tar: Padre Nuestro.

  • CSPJ - MJS Venezuela27

    MARTES SANTO

    TESTIGOS ELEGIDOS PARA UNA MISIN!

    MotivacinEl smbolo de hoy es la mesa de Jess rodeado de sus aps-toles y el anuncio de quin lo traicionara. Judas, quien trai-ciona al Seor, representa a aquellos que han optado por el rechazo a Dios, por darle la espalda para ir en busca de otros intereses.

    En esta mesa est Jess en el centro; el traidor, lo ms cerca de l; los once discpulos, entre ellos, Juan y Pedro que estn dispuestos a dar su vida por Jess; y nosotros. O bien podramos decir: Jess, el traidor, los discpulos y T.

    Tras el anuncio de Jess, Judas sali a hacer lo que tena que hacer. Ahora nos toca a nosotros salir. Ahora te toca a ti: sal y haz lo que tienes que hacer, para glorificar a Dios.

    ORACIN DE LA MAANA

    AmbientacinConviene simbolizar la imagen de Jess en la ltima cena con sus apstoles. Se puede colocar en el centro y todos alrededor, cualquiera de estas opciones: materiales que representen una mesa con trece puestos; la imagen de Jess con sus apstoles; u otros recursos que bien les pueda ayudar a representar la imagen del da: Jess con sus apstoles.

    MonicinGua: La experiencia del da de ayer confirm el llamado que Dios nos ha hecho como misioneros y que estamos dispuestos a seguir, a tocar puertas, a caminar lugares que no conozcamos, a encontrarnos con rostros que necesitan de nosotros, como nosotros de ellos. Hoy el Seor nos invita a reconocerlo en cada persona que nos encontremos y a expresarle lo que l ya no has dicho: Que nos ama profundamente y que ha dado su vida por nosotros. HEMOS SIDO ELEGIDOS PARA ESTA

    MISIN. En el Nombre del Padre, y del Hijo y del Espritu Santo. Amn

    Oracin: Seor Jess, que en tu infinito amor has dado tu vida por cada de noso-tros, concede en este da los dones para anunciarte sin lmites y con alegra porque nos ha llamado a esta misin. Queremos colocar este da en tus manos. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amn.

    CANTO Himno del ENAJ 2015

    Fue su eleccin venir al mundo, ser carpintero en Nazaret, el Hijo de Dios hecho hombre. Fue su eleccin tener amigos, para acercarlos mucho ms a l,hacerlos pescadores de hombres, y anunciar a todos la salvacin. Ahora t eliges s caminar, junto a ese amigo incondicional, que entreg su vida y la muerte venci, que cambi al mundo slo con amor.

  • CSPJ - MJS Venezuela28

    JOVEN, ES LA HORA DE ACTUAR, EL CAMINO ES LARGO Y FUERTE, CRISTO NOS VA A ACOMPAAR. VEN SGUELO AHORA, SU VERDAD ESTAR CONTIGO, PORQUE NO HAY AMOR MS GRANDE, QUE QUIEN DA LA VIDA POR SU AMIGO.

    Recitado: Mira que te manda, a que te esfuerces y seas valiente, no temas ni desmayes, porque el Seor tu Dios estar contigo a donde quiera que vayas Con humildad nos ense a vivir, sirviendo al prjimo aun siendo Rey, el ms grande hombre que este mundo vio, hasta pudo dividir la historia en dos. A mis enemigos me ense a querer, aunque no parezca fcil de entender, hacer lo extraordinario es su invitacin, camina con Mara siempre en oracin.

    JOVEN ES LA HORA DE ACTUAR...

    Y es el amor de Dios mismo, el que mueve al mundo y lleg a tu vida, para quedarse en tu corazn, l siempre te amar. Joven s testigo del amor de Cristo! Juventud venezolana se congrega para Ti, Seor somos tus discpulos y venimos a servir, somos todos tus discpulos y venimos a servir.

    JOVEN ES LA HORA DE ACTUAR...

    Lectura Biblca: Evangelio segn San Juan. Jn 13, 21-33. 36-38 Puede ser representado y guiado por un lector.

    En aquel tiempo, cuando Jess estaba a la mesa con sus discpulos, se conmovi profundamente y declar: Yo les aseguro que uno de ustedes me va a entregar. Los discpulos se miraron perplejos unos a otros, porque no saban de quin hablaba. Uno de ellos, al que Jess tanto amaba, se hallaba reclinado a su derecha. Simn Pedro le hizo una sea y le pregunt: De quin lo dice?

    Entonces l, apoyndose en el pecho de Jess, le pregunt: Seor, quin es? Le contest Jess: Aqul a quien yo le d este trozo de pan, que voy a mojar. Moj el pan y se lo dio a Judas, hijo de Simn el Iscariote; y tras el bocado, entr en l Satans. Jess le dijo entonces a Judas: Lo que tienes que ha-cer, hazlo pronto. Pero ninguno de los comensales entendi a qu se refera; algunos supusieron que, como Judas tena a su cargo la bolsa, Jess le haba encomendado comprar lo necesario para la fiesta o dar algo a los pobres. Judas, despus de tomar el bocado, sali inmediatamente. Era de noche. Una vez que Judas se fue, Jess dijo: Ahora ha sido glorificado el Hijo del hombre y Dios ha sido glorificado en l. Si Dios ha sido glorificado en l, tambin Dios lo glorificar en s mismo y pronto lo glorificar. Hijitos, todava estar un poco con ustedes. Me buscarn, pero como les dije a los judos, as se lo digo a ustedes ahora: A donde yo voy, ustedes no pueden ir. Simn Pedro le dijo: Seor, a dnde vas? Jess le respondi: A donde yo voy, no me puedes seguir ahora; me seguirs ms tarde. Pedro replic: Seor, por qu no puedo seguirte ahora? Yo dar mi vida por ti. Jess le contest: Con qu dars tu vida por m? Yo te aseguro que no cantar el ga-llo, antes de que me hayas negado tres veces. (Breve silencio antes de continuar)

    Gua: Seor estamos agradecidos porque sabemos que escu-chas nuestra oracin. T le has dicho a uno de ellos Haz lo que debes hacer, si tomamos para nosotros esa expresin: Haz lo que debes hacer, Qu debemos hacer hoy para que seas glo-rificado? Qu es lo que yo debo hacer hoy por ti, Seor, para glorificarte? Breve espacio de silencio para respondernos:

  • CSPJ - MJS Venezuela29

    Gua: Comenzamos este da con la alegra de sentirnos ele-gidos por Dios y responsables por la misin que ha colocado en nuestras manos. Con el salmo 17 pidamos su bendicin para que en este da salgamos a hacer lo que tenemos que hacer. Lo vamos a proclamar a dos coros.

    Un primer grupo inicia y sigue el otro. Si la mayora no tienen el folleto, se puede leer por lectores espontneos. Todos: Escucha, Seor, mi oracin y mi splica

    Coro 1: Escucha, Seor, mi justa oracin, atiende a mi splica; presta odo a mi plegaria, porque en mis labios no hay falsedad.

    Coro 2: T me hars justicia, porque tus ojos ven lo que es recto: si examinas mi corazn y me visitas por las noches, si me pruebas al fuego, no encontrars malicia en m.

    Todos: Escucha, Seor, mi oracin y mi splica.

    Coro 1: Mi boca no se excedi ante los malos tratos de los hombres; yo obedec fielmente a tu palabra, y mis pies se mantuvieron firmes en los caminos que T me indicaste: Mis pasos nunca se apartaron de tus huellas!

    Coro 2: Yo te invoco, Dios mo, porque T me respondes: inclina T odo hacia m y escucha mis palabras. Muestra las maravillas de tu gracia, t que libras de los peligros a los que buscan refugio a tu derecha.

    Todos: Escucha, Seor, mi oracin y mi splica

    Gua: Sintindonos hermanos en la misin para la que hemos sido elegidos, digamos juntos confiada-mente la oracin que Jess nos ense: Padre Nuestro.

    Gua: Nos encomendamos tambin a la proteccin maternal de Mara, a ella le decimos: Dios te salve Mara...

    Oracin: Seor Dios, rico en bondad y misericordia, T que nos has elegido a cada uno de nosotros por nuestro nombre y has trazado nuestros pasos para cumplir tu misin, haznos en nuestras palabras y acciones, instrumentos de la manifesta-cin de tu amor en cada una de las personas que hoy visitare-mos. Por Jesucristo nuestro Seor. Amn

  • 30

    PLANIFICACIN

    OBJETIVO

    CMO?

    CUNDO?

    QU?

    CON QU? DNDE?

    QUIN?

    CSPJ - MJS Venezuela

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    EVALUACIN

    CSPJ - MJS Venezuela

    NO

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    100% 75% 50% 25% 0

    TESTIGOS

    SOMOS

    En el da de hoyLa persona que dirija la evaluacin invita a recordar todo lo vivido du-rante el da y a llenar los espacios segn lo indica la motivacin inicial.

    Hemos alcanzado el da hasta...

    EVALUACIN

    1. Qu accin, sentimiento y pensamiento del da de hoy me llev a sentarme a la mesa con Jess?

    2. A qu tentaciones NO puedo seguir sediendo?

    3. Cmo la comunidad vende a Jess hoy? Por qu razones po-sitivas y negativas los miembros de la comunidad se sientan a la mesa con Jess?

    4. Qu valores veo en los miembros de mi grupo?

  • CSPJ - MJS Venezuela32

    ORACION DE LA NOCHE

    AmbientacinConviene mantener los smbolos que representen a Jess en la ltima cena con sus apstoles pero con un puesto me-nos (el de Judas). Favorecer el resalte del vaco de Judas en la Mesa.

    MonicinLa experiencia de hoy nos permite reflexionar sobre la mi-sin a la que hemos sido elegidos: cada puerta que toca-mos, cada llamada que hicimos, cada calle, escalera, calle-jn que caminamos es lograr que el Seor sea glorificado, anunciar su mensaje de salvacin. Demos gracias al Seor porque con todo lo que hemos hecho en este da, le hemos dado gloria.

    En el Nombre del Padre, y del Hijo y del Espritu Santo. Amn

    Canto: Gracias por tu don

    No fuiste T quien me escogi,Fui yo quien te llam a ti,para que dieras frutos de verdad,frutos de gozo y de paz.Para seguir mis pasos, ven,renuncia a lo que tienes hoydselo todo a quien nada prob,deja tu yo y toma la cruz.

    Seor Jess, que confas en m y me envas a ser luz y a ser seal gracias por tu don, gracias Seor.

    Vete y predica con tu accin,con la palabra y con tu serla Buena Nueva de servicio y paz,no tengas miedo te hablar.Yo te escog para ser sal,para ser luz e iluminar.Que todos vean a mi Padre en ti,de los sencillos se hace ver.Seor Jess

    No sirve para mi misinel que comienza a caminary an recuerda aquello que dej pues no podr servir a dos.Pon tu confianza en Dios y en M,ya que mi gracia bastar.Sers ms fuerte en la debilidadque yo en tu barro me qued. Gua: Proclamemos el salmo a dos coros. Un primer grupo inicia y sigue el otro. Si la mayora no tienen el folleto, se puede leer por lectores espontneos.

    Todos: Slo en Dios descansa mi alma, porque de l me viene la salvacin.

    Coro 1: Slo l es mi Roca salvadora,l es mi baluarte: nunca vacilar. Hasta cundo se ensaarn con un hombre para derribarlo entre todos, como si fuera un muro inclinado o un cerco que est por derrumbarse?

    Coro 2:Slo piensan en menoscabar mi dignidad y se complacen en la mentira; bendicen con la boca y maldicen con el corazn. Slo en Dios descansa mi alma, de l me viene la esperanza.

    Todos: Slo en Dios descansa mi alma, porque de l me viene la salvacin.

    Coro 1: Slo l es mi Roca salvadora, l es mi baluarte: nunca vacilar.Mi salvacin y mi gloria estn en Dios: l es mi Roca firme, en Dios est mi refugio.

  • CSPJ - MJS Venezuela33

    Coro 2: Confen en Dios constantemente, ustedes, que son su pueblo;desahoguen en l su corazn, porque Dios es nuestro refugio.

    Todos: Slo en Dios descansa mi alma, porque de l me viene la salvacin.

    Gua: Seor t conoces nuestro corazn y nos has dado una misin, toca nuestro corazn para que seamos dignos de servirte, sin mentiras, sin engaos, sin traicin y reco-nociendo los errores que tuvimos hoy, sirva para mejorar maana y caminar junto a ti, nico maestro, que obras maravillas y somos testigos de ello.

    Para la reflexinSe puede favorecer encuentros en pequeos grupos para compartir. Se sugiere que alguien dirija este espacio de compartir en cada grupo. Gua: He sido instrumento de Dios? O me he dejado lle-var por la arrogancia y los impulsos sin estar consciente de lo que digo como le ocurri a Pedro. He transmitido el mensaje de Dios o mi mensaje? Cul fue mi mensaje hoy? Me sent hoy testigo del amor de Dios? En qu situaciones o momentos?

    Terminamos los encuentros por grupos para reunirnos todos.

    Ahora en un breve silencio co-loquemos las necesidades que vimos hoy en las casas que visitamos, algunas personas enfermas (algn difunto, si hay), por al-guien que nos haya pedido oracin, por los nios y jvenes con quienes pudimos compartir y por nosotros. Breve espacio de silencio. Si el am-biente favorece pueden compartir brevemente intenciones.

    Gua: Todas estas intenciones las recogemos con las palabras que Cristo nos ense: Padre nuestro, que ests en el cielo.

    Oracin

    Seor que has concedido a todo el que te sigue los dones de tu misin, te damos gra-cias una vez ms por lo que haces por nosotros, por ele-girnos como testigos y por amarnos tanto. Te pedimos en esta noche nos concedas un descanso en el cuerpo y en el espritu, para que ma-ana fortalecidos con tu pa-labras sigamos anuncindo-te. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amn

    Gua: Pidamos a Mara su Auxilio maternal, repitiendo como Don Bosco nos lo en-se: Madre querida Virgen Mara. Dios te Salve Mara...

  • CSPJ - MJS Venezuela34

    MIRCOLES SANTO

    TESTIGOS QUE CAMINAN JUNTO AL MAESTRO!

    ENFOQUE DEL DAEn la poblacin venezolana est muy arraigada la devocin al Nazareno. Son muy populares las imgenes del Nazareno de San Pablo en Caracas y el de Achaguas en Apure, pero en general, no hay pueblo o parroquia de la geografa na-cional donde no se vea salir la imagen de Jess cargando con la cruz, vestido de penitencia y con un sinfn de feli-greses que, hasta vestidos a su semejanza, caminan junto a l e imploran su misericordia. Sin embargo, no faltar quien quizs en medio de los cantos salga a la puerta de su casa y observe pasar al nazareno sin ninguna intencin de acompaar a los que caminan junto a l. Ms de uno ver pasar a Jess, ver la fe del pueblo que confa en sus milagros, pero se quedar como un simple espectador.

    Hoy Jess nos invita a ser sus testigos, pero no testi-gos de una mera ancdota, como aquel que ve pasar la procesin y luego comenta lo que vio, sino testigos que habiendo comprendido el extremo amor del sufriente de Nazaret se lancen a contagiar al mundo de ese amor.

    Aquel que nos ha llamado a tomar nuestra cruz y que nos ha encomendado una misin concreta hoy clama jvenes testigos que sean valientes para tomar su cruz con res-ponsabilidad, pero que en medio del camino su actitud sea tan parecida a la del Nazareno que motiven a otros a car-gar con la propia y a seguirlo como autnticos discpulos.

    Ambientacin del espacio: Al centro del lugar que se disponga durante la semana para hacer la oracin una imagen de Jess Nazareno y entorno a l las preguntas que aparecen en el texto bblico: Quin luchar contra m? Quin es mi adversario? Quin me acusa? Quin se atrever a condenarme?

    Smbol del Da: Rostro o imagen alguna de Jess Nazareno

    ORACIN DE LA MAANA

    Motivacin a la oracin: El texto bbli-co que compartiremos esta maana nos anima a mantenernos fieles ante las adversidades pues, si El Seor est con nosotros Quin puede estar en contra? El seguimiento a Je-ss implica dificultades, pero el testigo fiel tiene puesta su confianza en aquel que no defrauda, el testigo fiel toma su cruz del da a da y camina al lado del maestro pues junto a l no hay nada que temer.

    Cul es tu cruz? Qu tan pesada es? Qu tan cerca del maestro estoy caminando?

    Canto: NO TEMAS

    No temas que estoy contigo y de tu lado nunca me alejarConfa pequeo mo porque delante de ti caminar.

    Si tienes que pasar por fuego no te quemars,Si tienes que cruzar por ros no te ahogars,

    Porque yo soy tu Seor, tu salvador, yo soy el Dios, el Santo de Israel y estoy contigo.No temas.

    Te he rescatado porque te amo, por salvarte hombre y naciones entregar.Llevas mi nombre, llevas mi sangre,me perteneces y nunca te dejar.No te dejar.

    Si tienes que pasar por fuego no te quemars,Si tienes que cruzar por ros no te ahogars,

    Porque yo soy tu Seor, tu Savador, Yo soy el Dios, el santo de Israel y estoy contigo.Porque yo soy tu Seor, tu salvador,Yo soy tu padre, tu protectorY t eres mo. No temas pueblo mo

  • CSPJ - MJS Venezuela35

    Lectura Biblca: Isaas 50, 4-9En aquel entonces dijo Isaas: El Seor me ha dado una len-gua experta para que pueda confortar al abatido con pala-bras de aliento. Maana tras maana el Seor Despierta mi odo para que escuche yo como discpulo. El Seor me ha hecho or sus palabras y yo no he opuesto resistencia, ni me he echado para atrs. Ofrec mi espalda a los que me golpeaban, la mejilla a los que me tiraban de la barba. No apart mi rostro de los insultos y salivazos. Pero el Seor me ayuda por eso no quedar confundido, por eso endure-ci mi rostro como roca y s que no quedar avergonzado. Cercano est de m el que me hace justicia Quin luchar contra m? Quin es mi adversario? Quin me acusa? Que se me enfrente. El Seor es mi ayuda, Quin se atre-ver a condenarme?

    Salmo: Salmo 68

    A dos voces proclamamos el salmo:

    El Seor es mi luz y mi salvacin,a quin temer?El Seor es la defensa de mi vida,quin me har temblar?

    Cuando me asaltan los malvadospara devorar mi carne,ellos, enemigos y adversarios,tropiezan y caen.

    Si un ejrcito acampa contra m,mi corazn no tiembla;si me declaran la guerra,me siento tranquilo.

    l me proteger en su tiendael da del peligro;me esconder en lo escondido de su morada,me alzar sobre la roca;

    y as levantar la cabezasobre el enemigo que me cerca;en su tienda sacrificarsacrificios de aclamacin:cantar y tocar para el Seor.

    Gloria al padre, al hijo...

    GUA Confiados en la recomen-dacin de Jess, el Maestro junto al que caminamos, nos atrevemos a decir: Pa-dre Nuestro...

    GUA Nuestra madre, primera misionera, nos acompaa en esta misin de caminar junto al Maestro, A ella le decimos: Dios te salve Mara.

    SABAS QU?En 2011 en Swiebodzin, al oeste de Polonia, se erigi la estatua de Cristo ms alta del mundo, superando al Cristo Redentor de Ro de Janeiro.

    SABAS QU? En la restauracin del cuadro "La ltima cena" de Leonardo Da Vinci, participaron 100 personas que emplearon unas 50.000 horas cada una?. Esta obra de arte, concluida en 1498, mide 8,8 metros y se en-cuentra en el refectorio de la iglesia de Santa Mara delle Grazie, en Miln. El trabajo cost ms de 15.000.000 de dlares y demand 21 aos de labor.

  • 36

    PLANIFICACIN

    OBJETIVO

    CMO?

    CUNDO?

    QU?

    CON QU? DNDE?

    QUIN?

    CSPJ - MJS Venezuela

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    EVALUACIN

    CSPJ - MJS Venezuela

    NO

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    TESTIGOS

    SOMOS

    En el da de hoyLa persona que dirija la evaluacin invita a recordar todo lo vivido du-rante el da y a llenar los espacios segn lo indica la motivacin inicial.

    Hemos alcanzado el da hasta...

    EVALUACIN

    1. En qu contribu para hacer mas liviana la cruz de Jess?

    2. Cules de mis acciones condenan a Jess a un cruz ms pesada?

    3. Qu cruces vi que agobian a las personas de mi comunidad?

    4. Ya han transcurrido unos das de la mi-sin y nos conocemos un poco ms... Por ello hoy te planteamos que escojas a un compa-ero, en secreto, para ayudarle a cargar su cruz durante el prximo da: puede ser el que le cueste ms llegar puntual, el que le cueste

    caminar con agilidad, hablar en pblico... etc. Coloco en este espacio su nombre.

  • CSPJ - MJS Venezuela38

    ORACIN DE LA NOCHE

    Ambientacin del espacio y smbolo; Frente al sagrario (si se dispone) o entorno a una imagen de Jess que trans-mita serenidad las siguientes frases: Vengan a m, yo los aliviar, Mi yugo es suave, Mi carga Ligera

    Motivacin: Que duro es cargar con nuestra propia cruz y ser testimonio del amor de Dios con alegra. Jess nos alienta esta noche con su palabra: Vengan a m todos los que estn afligidos y agobiados, y yo los aliviar. Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de m, porque soy pa-ciente y humilde de corazn, y as encontrarn alivio. Por-que mi yugo es suave y mi carga liviana. Mt 11, 28-30

    Canto: VENGAN A M-Hna. Glenda

    Vengan a m los que sufren Vengan a m los que estn sin paz, Que yo los consolar, Que yo los aliviar, con mi Amor.

    Vengan a m los que solos estn Vengan a m los que viven sin ver Que los iluminar, Que yo los abrazar con mi Amor

    Vengan a m los cansados Vengan a m los sedientos Vengan a m con sus pecados Que los sanar, los liberar, los salvar con mi Amor.

    Vengan a m los cautivos Vengan a m los que heridos estn Que yo los liberar, que yo los aliviar con mi Amor.

    Vengan a m los enfermos Vengan a m los que heridos estn Que yo los levantar, Que yo los sanar, con mi Amor

    Vengan a m los cansados Vengan a m los sedientos Vengan a m con sus pecados Que los sanar, los liberar, los salvar con mi Amor.

    Examen de Conciencia

    El yugo de Jess es suave, somos no-sotros quienes nos llenamos de tantas cosas que nuestra cruz adquiere un peso imposible de llevar. Recorta en una hoja blanca el signo de una cruz y en ella escribe las respuestas a las siguientes preguntas.

    Dentro de la experiencia misionera y en mi vida personal:

    1. Qu me hace sufrir?

    2. Qu me quita la paz?

    3. Qu me produce tristeza?

    4.Qu me produce cansancio?

    5. Qu me quita libertad?

    6. Qu me hiere?

    Luego de dar un espacio prudencial para el desarrollo del exa-men de conciencia, se coloca una vez ms el canto mientras van pasando a colocar las cruces frente a Jess como signo de abandono en sus manos.

    Confiados en aquel que nos alivia con su amor, pidmosle que con alegra seamos capaces de llevar nuestras cruces y ha-blmosle con las palabras que el mismo Jess nos ense.

    Saludamos a nuestra madre del cielo, rogando su compaa 3 Ave Mara (Espontneas)

    Cierre Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea, en tan graciosa belleza. A Ti Celestial Princesa, Virgen Sagrada Mara, yo te ofrezco en este da alma, vida y corazn. Mrame con compasin, no me dejes Madre Ma...

  • CSPJ - MJS Venezuela39

    JUEVES SANTO

    TESTIGOS DEL AMOR!

    ORACIN DE LA MAANA

    Ambientacin: Se coloca en el centro del saln una cesta o caja pequea, una jarra con agua, una pochera, una tolla y la frase mense unos a otros como yo los he amado.

    Motivacin: Saber que el Hijo de Dios, ha venido a servir y no a ser servido, nos confronta como cristianos y mucho ms como misioneros, el ejemplo de Jess nos invita a imi-tarlo. En varios pasajes del Evangelio, se le pregunta a Je-ss cual es el mandamiento ms grande o ms importante de todos y es en la ltima cena cuando concluye su prdica con sus amigos ms ntimos: Les doy un mandamiento nuevo: mense unos a otros como yo los he amado y con el gesto de lavar sus pies nos ensea que ese amor es en-tregado, es servicial, es generoso. Adems nos advierte: En esto reconocern que son mis discpulos. Abrimos en esta maana el corazn para que descubramos el amor inmenso de Jess en el servicio fraternal al prjimo, so-bre todo al ms necesitado.

    Canto: HAZME UN INSTRUMENTO DE TU PAZ

    Gua: Dios nos ha enviado a su hijo para mostrarse cer-cano a su pueblo, demostrando su amor a los que en aquel momento eran despreciados por la sociedad. Me-ditemos la palabra de Dios y descubramos de qu forma Jess favoreca la fraternidad entre sus discpulos.

    Lectura Biblca: Juan 13, 1-15En el transcurso de la cena, ya el diablo haba puesto en el corazn de Judas Iscariote, hijo de Simn, la idea de entregar a Jess. Jess consciente que el Padre ha-ba puesto en sus manos todas las cosas, y sabiendo que haba salido de Dios y a Dios volva, se levant de la mesa, se quit el manto y tomando una toalla, se la ci; luego ech agua en una palangana y se puso a lavarles los pies a los discpulos, y a secrselos con la toalla que se haba ceido. Cuando lleg a Simn Pedro, ste le dijo: Seor, T me vas a lavar los pies a m? Jess

    le replic: Lo que estoy hacien-do t no lo entiendes ahora: lo comprenders ms tarde. Pe-dro replic: T no me lavars los pies jams. Jess le contest: Si no te lavo, no tendrs parte conmigo. Entonces le dijo Simn Pedro: En ese caso, Seor, no slo los pies, sino tambin las manos y la cabeza. Jess le dijo: El que se ha baado no necesita lavarse ms que los pies, porque todo l est limpio. Y ustedes estn limpios, aunque no todos. Como saba quin lo iba a en-tregar, por eso dijo: No todos estn limpios. Cuando acab de lavarles los pies, se puso otra vez el manto, volvi a la mesa y les dijo: Comprenden lo qu