entrevista función política de los medios en escandinavia

7
Entrevista ENTREVISTA A KAREN SI UNE Función política de los medios en Escandinavia CHASQUI: Chasqui es una revista la- tinoamericana de comunicación. En América Latina hay interés sobre el ftpel de los medios en las campañas políticas y en el propio debate polí- tico. ¿Cuál es la función de los medios en las elecciones de los diversos países escandinavos? KAREN SIUNE: Para entender el pa- pel de los medios masivos en la polí- tica escandinava, es necesario conocer la estructura de esos sistemas políti- cos, la estructura de los medios masivos, y el principio y la práctica del acceso político a su uso. CH.: Por supuesto. ¿Podría entonces describirnos a grandes rasgos la estruc- tura del sistema político en esos países? K, S.: Tendré que alargarme un poco. En todos los países escandinavos, en- contramos sistemas multipartidistas con un elevado número de partidos políti- cos que participan en las elecciones. En Noruega, diez partidos participa- ron en la campaña antes de la elección para el parlamento noruego, el Stortin- get, del 9 de septiembre de 1985. En Suecia, siete partidos se presentaron para la elección nacional del 15 de sep- tiembre de 1985, al Riksdagen. Y de Dinamarca se sabe que por lo menos 16 partidos están preparados para lan- zar candidatos en la próxima elección nacional, cuya fecha aún se desconoce. Además, en Finlandia el sistema es mul- tipartidista, con ocho partidos que Informa esta entrevista sobre el sistema político y el de los medios de comunicación en los países escandinavos, para luego centrarse en el debate acerca del uso de los medios en el área de lo político. Un aspecto del debate versa acer- ca del acceso a los medios por parte de los partidos, lo que muestra la confianza y expectativas que políticos ponen en los medios. Otro aspecto del debate se refiere a la dis- cusión del principio de apoyo a la prensa, y a la lucha por romper las monopolios de transmisión, lo que también refleja una amplia aunque subterránea creencia acerca del poder de los medios en la vida política de los partidos es- candinavos. comparten los votos de la última elec- ción nacional del 20 de marzo de 1983. En Dinamarca tradicionalmente participa un gran número despartidos en las elecciones. No menos de 28 par- tidos diferentes han participado desde 1920 hasta 1984. Antes de 1985, no habían contendido más de 13 partidos en uí.a sola ekcción. Se alcanzó este número en 1981 por primera vez, y nuevamente en 1984. Sin embargo, la actuación de varios partidos en elección no es un fenómeno nuevo que once partidos disputaron la i ción nacional de 1939. A más del as to del número de partidos que se sentan en una elección, hay el del mero de partidos que ganan puest< representación en el parlamento. El yor número de partidos elegido Folketing danés fue 11, en 1977, menor número fue cinco en 192 entrevista /

Upload: revista-chasqui

Post on 16-Mar-2016

219 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

comparten los votos de la última elec- ción nacional del 20 de marzo de 1983. En Dinamarca tradicionalmente participa un gran número despartidos en las elecciones. No menos de 28 par- tidos diferentes han participado desde 1920 hasta 1984. Antes de 1985, no habían contendido más de 13 partidos en uí.a sola ekcción. Se alcanzó este número en 1981 por primera vez, y nuevamente en 1984. Sin embargo, la entrevista /

TRANSCRIPT

Page 1: Entrevista Función  política de los medios en Escandinavia

EntrevistaENTREVISTA A KAREN SI UNE

Función política de los medios en

Escandinavia

CHASQUI: Chasqui es una revista la-tinoamericana de comunicación. EnAmérica Latina hay interés sobre elftpel de los medios en las campañaspolíticas y en el propio debate polí-tico. ¿Cuál es la función de los mediosen las elecciones de los diversos paísesescandinavos?

KAREN SIUNE: Para entender el pa-pel de los medios masivos en la polí-tica escandinava, es necesario conocerla estructura de esos sistemas políti-cos, la estructura de los medios masivos,y el principio y la práctica del accesopolítico a su uso.

CH.: Por supuesto. ¿Podría entoncesdescribirnos a grandes rasgos la estruc-tura del sistema político en esos países?

K, S.: Tendré que alargarme un poco.En todos los países escandinavos, en-contramos sistemas multipartidistas conun elevado número de partidos políti-cos que participan en las elecciones.En Noruega, diez partidos participa-ron en la campaña antes de la elecciónpara el parlamento noruego, el Stortin-get, del 9 de septiembre de 1985.En Suecia, siete partidos se presentaronpara la elección nacional del 15 de sep-tiembre de 1985, al Riksdagen. Y deDinamarca se sabe que por lo menos16 partidos están preparados para lan-zar candidatos en la próxima elecciónnacional, cuya fecha aún se desconoce.Además, en Finlandia el sistema es mul-tipartidista, con ocho partidos que

Informa esta entrevista sobre el sistema político y el de los

medios de comunicación en los países escandinavos, paraluego centrarse en el debate acerca del uso de los mediosen el área de lo político. Un aspecto del debate versa acer-ca del acceso a los medios por parte de los partidos, lo quemuestra la confianza y expectativas que políticos ponenen los medios. Otro aspecto del debate se refiere a la dis-

cusión del principio de apoyo a la prensa, y a la lucha porromper las monopolios de transmisión, lo que también

refleja una amplia aunque subterránea creencia acerca delpoder de los medios en la vida política de los partidos es-candinavos.

comparten los votos de la última elec-ción nacional del 20 de marzo de 1983.

En Dinamarca tradicionalmenteparticipa un gran número despartidosen las elecciones. No menos de 28 par-tidos diferentes han participado desde1920 hasta 1984. Antes de 1985, nohabían contendido más de 13 partidosen uí.a sola ekcción. Se alcanzó estenúmero en 1981 por primera vez, ynuevamente en 1984. Sin embargo, la

actuación de varios partidos enelección no es un fenómeno nuevoque once partidos disputaron la ición nacional de 1939. A más del asto del número de partidos que sesentan en una elección, hay el delmero de partidos que ganan puest<representación en el parlamento. Elyor número de partidos elegidoFolketing danés fue 11, en 1977,menor número fue cinco en 192

entrevista /

Page 2: Entrevista Función  política de los medios en Escandinavia

• ;1vV-;V ,;: ;

Carlos XVI GustavoReyes de Suecia

y Silvia,

1971. Suecia muestra un patrón másestable con cinco partidos representa-dos en el Riksdagen, mientras que No-ruega viene contando con siete partidosrepresentados en el Stortinget hasta laelección de 1985 inclusive.

En Escandinavia, los políticos ge-neralmente se candidatizan en una lis-ta de su partido, y los candidatos quese postulan fuera de las listas partidistascasi nunca logran ser elegidos. Los sis-temas escandinavos están edificados so-bre el sistema de los partidos y no so-bre un sistema de políticos individuales.Los partidos políticos en Suecia y No-ruega conforman una lista ordenada porpreferencia de sus candidatos dentro deun distrito político para una determina-da elección. En cambio, Finlandia tieneun sistema con candidatos personales,no jerarquizados, mientras que Dina-marca tiene una mezcla de estos princi-pios, en la que los partidos de izquierdageneralmente ordenan a sus candidatospor preferencia.

CH.: Suena todo esto a algo complica-do. Hasta corren bromas sobre locomplejo del sistema en Escandinavia. Amenor extensión, más perplejidades.

K. S.: Así viene a ser, al menos aprimera vista. El sistema danés para lanominación y elección resulta relativa-mente complicado. Cada distrito electo-ral (Dinamarca tiene 17) está divididoen varios distritos de nominación. En lapapeleta, se enumeran todos los partidosy todos los candidatos nominados por eldistrito electoral, y el votante puedeseñalar con una X un partido o uncandidato. Los partidos pueden esco-ger diferentes maneras de presen-tar a sus candidatos, utilizando listasordenadas por preferencia o no. Si lalista no está en ningún orden especial,los votos personales para los candidatosdeterminarán el resultado de la elec-ción; en este sentido es similar el sis-tema danés al finlandés. La alternativaa la lista no ordenada que utilizan la

mayoría de los partidos es la listaquizada, en la que el partido decorden de nominación. Así, el fcandidato aparece en la papelettamente debajo del encabezanque indica el nombre del partid<dos los votos recibidos por un pque utiliza listas ordenadas se tnren al primer candidato en el delectoral, y al siguiente si el primídidato recibe de esta manera másde los necesarios para ser elegideste modo, la probabilidad de seto es una mezcla de visibilidad dtido (éxito del partido) y visilindividual, y depende en alto gr;la nominación del partido. Pero ididato puede "romper" la lista :be suficientes votos personales. Elro de votos personales ha disminuDinamarca del 70 por ciento eral 45 por ciento en 1981, y apndamente al 50 por ciento en 1;mas elecciones. En las eleccionesusualmente es mayor que en laciones nacionales.

CH.: Esto de la visibilidad tendver sin duda con la televisión...

K. S.: Por supuesto. La visibilitlos candidatos locales se rediEscandinavia con el aumento dellos medios masivos como la telen las campañas. La asistencia a 1niones políticas locales bajó y losdatos locales recurrieron a los feos locales para sus plataformadiante cartas al director, comentanuncios personales.

CH.: Parecería, por lo que diclos partidos pequeños y los camlocales llevarían siempre la peor

K. S.: Bueno, no necesariamerNoruega y Suecia cada partido tpropia lista de candidatos. Enpaíses, el votante tiene derechichar nombres de candidatos dedel partido. En realidad, esta idad nunca tuvo ningún impacto jsobre el resultado de la elecciclas elecciones nacionales. En las ines locales en Noruega, se puedemar listas y presentarlas al eleía nivel local fuera de la estruclos partidos, y esta posibilidadutilizado a nivel local como unnativa a procedimientos tradic

ft I entrevista

Page 3: Entrevista Función  política de los medios en Escandinavia

A nivel nacional, es muy difícil que losvotantes individuales cambien el ordendispuesto por los partidos.

Generalmente, los partidos políti-cos en Escandinavia son partidos nacio-nales, pero los candidatos que están enla lista presentada al electorado para suelección son regionales. En la papeletano hay indicación alguna de relaciónentre los líderes políticos nacionales ylos candidatos locales, fuera del nombredel partido que consta como encabeza-miento para la lista de candidatos. Ge-neralmente, se conoce muy bien a cuálpartido pertenecen los líderes naciona-les, incluso en casos de coalición departidos.

Todos los países escandinavos es-tán divididos en distritos electoralesbasados en la idea de representacióngeográfica. El número de distritos va-ría de 15 en Finlandia, a 17 en Dina-marca y 19 en Noruega hasta los 28 enSuecia. El tamaño de los distritos elec-torales varía dentro de cada país, y elnúmero de delegados por elegirse encada distrito es proporcionalmente di-recto al número de votos en cada dis-trito únicamente en Finlandia.

Los partidos pequeños tienen efec-tivamente problemas para lograr repre-sentación, y para compensar la fal-ta de proporcionalidad en el sistema.Dinamarca y Suecia compensan a nivelglobal, sumando los votos de cada dis-trito que no dieron victoria a ningúncandidato, e incluyendo estos votos enel número total de candidatos por ele-girse de un partido determinado. Al mis-mo tiempo, hay un límite para el accesoal parlamento, del dos por ciento enDinamarca y cuatro por ciento en Sue-cia. El valor límite en Suecia ha impedi-do el ingreso de nuevos partidos al par-lamento, mientras que el límite menoren Dinamarca no ha podido mantenerfuera del parlamento danés a los parti-dos nuevos. En Finlandia y Noruega

I no existe ningún valor umbral de estetipo.

En Escandinavia, los diferentespartidos socialdemócratas eran los ma-

[yores partidos nacionales durante déca-i das, pero casi nunca tuvieron mayoría

absoluta. Los partidos más conserva-dores han venido recibiendo regularmen-te su porción del total de los votos,

j y asimismo los liberales, aunque general-mente con menor éxito. Los sistemasescandinavos multipartidistas muestranuna tendencia bipolar a grandes rasgos,

j pero falta aún mucho para que se dispu-I ten los cargos entre dos partidos domi-

nantes. Los gobiernos de coalición,como en Dinamarca, son ejemplos de

la falta de bipartidismo. Varios parti-dos, especialmente los más conserva-dores han tenido que unirse para formarun gobierno de coalición, ya que raravez han podido conformar gobiernosde minoría con apoyo de otros parti-dos, como ha sido a menudo el caso conlos gobiernos socialdemócratas.

CH.: ¿Qué elecciones son las realmenteimportantes en los países escandinavos?

K. S.: La elección de miembros a losparlamentos nacionales, pues las elec-ciones a los diferentes consejos locales ya los condados son de interés secunda-rio. Todos los candidatos representana un pa r t ido , aunque es posiblec a n d i d a t i z a r s e fuera de las lis-tas partidistas. En las eleccioneslocales trabaja a veces conjuntamenteun grupo de partidos, formando unalista bajo un nombre conjunto, o gru-pos de ciudadanos organizan una listallamada no-política. Pero el principiodominante es que el partido se repre-senta en el cuerpo político mediantevarios políticos. La república de Fin-landia es la única de Escandinavia dondese da una contienda política en formade elección de individuos para cargosespecíficos, en este caso para la eleccióndel primer mandatario. Hay eleccionesnacionales y locales en Noruega cadacuatro años y en Suecia cada tres. EnDinamarca, las elecciones nacionales ylocales son cada cuatro años, pero fre-cuentemente se convoca a eleccionesnacionales después de un período máscorto. En Suecia, desde 1970, las elec-ciones locales y nacionales tienen lugarel mismo día, mientras que en Noruegalas elecciones locales van intercaladasentre las elecciones nacionales.

CH.: ¿Es de suponer que en esos paísesde larga tradición democrática la concu-rrencia de los votantes es más bien alta?

K. S.: Sí; durante décadas el índice departicipación en las elecciones ha sidoexcepcionalmente alto sobre todo si serecuerda que el voto no es obligatorio.Desde 1945 en Dinamarca ha votadoentre el 80 al 90 por ciento de los elec-tores, en Suecia el 91.4 en 1982 y 90por ciento en 1985. En Dinamarca, esalta también la participación en las elec-ciones locales, ya que, desde 1970,estas elecciones se celebran el mismodía que las elecciones nacionales. Laparticipación electoral ha oscilado enNoruega entre el 80 y el 85 por cientopara las elecciones nacionales. Las elec-ciones locales cuentan con una partici-

pación menor.

CH.: Queda bastante claro el panoramade los sistemas políticos. ¿Cuál es elde los medios de comunicación?

K. S.: Escandinavia ha tenido larga his-toria de prensa escr i ta pr ivadacon varios periódicos nacionales y lo-cales adheridos a partidos tradiciona-les. Por otro lado, la radio y televisiónson monopolios organizados como insti-tuciones independientes. Periódicos lo-cales eran el contacto principal entre unpartido y sus adeptos, y recopilaban suinformación. Las emisoras que se ini-ciaron en los años veinte con la radio yen los cincuenta con la televisión, to-davía son instituciones monopolistascon respecto a cobertura nacional.Sin embargo, hay actualmente experi-mentos con radio y televisión localesfuera de los monopolios nacionales.La libertad de prensa ha sido el princi-pio que guía el desarrollo de los perió-dicos, mientras que la responsabilidadsocial y la justicia en forma de equili-brio político han sido el principio queguía a la radiodifusión y televisión na-cionales.

Las restricciones formales sobretransmisión local en Escandinavia sonmenores que para la transmisión nacio-nal en lo que respecta al contenido polí-tico; pero esto no quiere decir que ha-ya desequilibrio político, sino más bienque las emisoras locales han crecidocomo experimentos en un ñujo librede toda clase de información. Usualmen-te la única exigencia es el porcentaje deproducción local, lo que significa enDinamarca el 50 por ciento de la pro-gramación.

El desarrollo de la estructura delos medios masivos escandinavos duran-te el siglo 20 ha tenido tres fases respec-to de la comunicación política. La pri-mera fue el crecimiento expansivo delos periódicos partidistas. La segundaestuvo caracterizada por la consolida-ción, con crecimiento en tamaño delos periódicos grandes y reducción desu número más una creciente importan-cia de la noticia político-electoral-partidista. La radio y luego la televisiónse convirtieron en el medio más impor-tante de información. La tercera faseestá dominada por una creciente in-fluencia de medios masivos electrónicos:satélites, cables, video y transmisiónlocal están rompiendo los monopoliosanteriores. Se introducen el teletex yvideotex aunque hasta la fecha no sehayan utilizado para información opropaganda políticas.

- • entrevista / 7

Page 4: Entrevista Función  política de los medios en Escandinavia

CH.: Mucho se comenta sobre lo "ho-nesto" (fair) del acceso dado a los par-tidos políticos en los medios. ¿Ks real-mente así?

K. S.: En general así es; hay sin embargoque hacer un poco de historia. El anti-guo principio escandinavo de afiliaciónpartidista extensiva a los periódicos lesdaba tradicionalmente una coberturabastante buena de la actividad electoral.

En Noruega y Suecia, la prensapartidista se ha mantenido en pie prin-cipalmente por el apoyo económicointroducido en los años sesenta. Esteapoyo tenía la intención específica demantener la variedad política de losperiódicos. Los antecedentes ideológicosde este apoyo se basaban en la firmecreencia de la necesidad de una estruc-tura de prensa equilibrada para quesiguiera funcionando la democracia. EnDinamarca, la reducción del número deperiódicos había ido en aumento has-ta que se introdujo el principio de sub-vención estatal a los periódicos para eldebate político en los medios. La pren-sa socialdemócrata casi había desapa-recido. Los argumentos para el apoyoeconómico que presentaron los social-demócratas no lograron convencer a losdemás partidos políticos sobre los be-neficios de subvencionar a la prensa co-mo se estilaba en los otros países escan-dinavos; muchos de los partidos bur-gueses tenían ya una prensa bastantebien establecida y que funcionaba.

Con respecto al número de par-tidos políticos en Dinamarca, su estruc-tura de prensa es bastante desequili-brada. La mayoría de los periódicospertenecen a los liberales agrarios o alos conservadores. Anteriormente, la es-tructura consistía en cuatro periódicosen cada localidad, uno por cada parti-do representado en el parlamento.La desaparición de este sistema produ-jo una caída en la afiliación partidista delos periódicos. Los periódicos se convir-tieron en producto, y su finalidad prin-cipal fue las ventas; este sigue siendoel principio rector para la actividad pe-riodística. La adhesión a la ideologíapartidista todavía subsiste, pero no enforma tan manifiesta como en la épocaen que la afiliación partidista iba junto alnombre del periódico en primera plana.Gradualmente, un número mayor deperiódicos iba declarando que no te-nía afiliaciones a partidos políticos;en principio, hoy están abiertos a infor-mar sobre todos los partidos políticos,pero en la práctica las crónicas, artícu-los y columnas privilegian sus viejasafiliaciones partidistas.

Los nuevos partidos carecen a me-nudo de cobertura en la prensa, espe-cialmente en Dinamarca, país con unaestructura de prensa más desequili-brada; pero las normas periodísticas yespecialmente el deseo de vender elperiódico en calidad de producto hanservido de contrapeso a la desigual cober-tura de los partidos en la prensa.

En Dinamarca prevalece el princi-pio de igualdad de acceso a radio ytelevisión para todos los partidos queparticipan en una elección. Para ello,debe ser un partido aceptado por elMinisterio de Asuntos Internos, luegode recoger un número de firmas queequivalga al 1/175 de los votos válidosde la última elección. El principio deigualdad de acceso en Dinamarca está"apoyado" por una declaración delOmbudsmand y ^el precedente jurídi-co de una decisión de la Corte Supre-ma a favor de un partido al que no se ledio acceso en la radio y televisión.Las dos premisas de esta conclusiónindican que la radio y especialmente latelevisión vienen a ser las fuentes pri-marias para la difusión de campaña yque debe, en consecuencia, haber igual-dad de acceso a todos los partidos.No así en Noruega. El Ombudsmandnoruego decretó que las decisiones so-bre "a quiénes, cuándo y cómo" incum-bían exclusivamente a la instituciónnoruega de difusión, NRK.

CH.: ¿Cómo se aplica en la práctica es-te principio de igual acceso?

K. S.: El principio de igualdad de acce-so incluye igual tiempo en la radio ytelevisión nacional danesa. Se asigna acada partido político un día específi-co en cada una de las tres semanas an-teriores al día de la elección. Allí, ca-da partido presenta sus puntos de vis-ta de 10 a 15 minutos, luego de lo cuallos periodistas preguntan a los líderesdel partido sobre sus programas y polí-ticas. Al final de la campaña, se invita atodos los partidos a participar en unpanel, con tiempo igual para todos lospartidos participantes. Se asignan losdías según el tamaño de cada partido;el partido más grande escoge el día,generalmente el más cercano posible ala elección y así sucesivamente por ta-maño. Durante años se usó el mismométodo para la radio; sin embargo,como compensación por el hecho deque los partidos más grandes siempreescogían los días más próximos a laelección, se optó por asignar el tiempoen la radio en el sentido opuesto, de-jando que el partido más pequeño esco-

giera primero. Usualmente, el programade los partidos debe iniciarse tres sema-nas antes del día de las elecciones afin de permitir que todos los partidospresenten su programa, y mantenerlibres de política los sábados, segúnla tradición.

"Democracia por minutos" es locaracterístico del acceso de los partidospolíticos noruegos a la radio. Estapráctica se impuso como reacción almonopolio que por decenios habíanejercido ciertos partidos. Para recibireste trato igualitario, un partido debecumplir tres condiciones: Haber tenidorepresentación en el parlamento norue-go (stortinget) en uno de los últimos pe-ríodos electorales; presentar candidatosen la mayoría de los distritos; y contarcon una organización nacional. Unaexcepción es que un partido que esté enel gobierno o que represente una claraalternativa al gobierno puede partici-par con más de un representante en eldebate final. La estructura del programanoruego no permite que los partidospolíticos utilicen como gusten las emiso-ras para sus presentaciones, sino solo através de programas en que el candidatoresponde a preguntas de un panel devotantes.

CH.: ¿Y en Suecia?

K. S.: En Suecia, hay cortas presen-taciones partidistas en la radio y Iuna conferencia de prensa por par-tido. Se difunden programas de pre-guntas de periodistas a los represen-1tantes de los partidos tanto en radio Icomo en televisión. Solamente lospartidos representados en el parlamen-to sueco (Riksdagen) tienen igual!acceso a la radio y televisión naciona-les. Los partidos pequeños sin repre-sentación tienen, en realidad, limitado|acceso a la difusión nacional.

CH.: Fuera de la cobertura en los me-ldios, ¿se han introducido otros modoi\ comunicarse electoralmente con loií

votantes, se emplean quizás nueva¡\

K. S.: Si, con el empleo del video enlas|calles por los partidos políticos enúltima elección en Noruega, por ejem-lpío. La modalidad antigua del contacto!personal se utiliza también, mientrasjque poco se usa el correo y las visitas]personales.

La cobertura noticiera es alta-lmente valorada por los partidos polrti-jeos. De varias entrevistas con repre-lsentantes de partidos, se puede inferiil

-

8 I entrevista

Page 5: Entrevista Función  política de los medios en Escandinavia

que se considera valiosa la coberturaque un partido puede recibir en progra-mas noticiosos y artículos periodísti-cos. El valor especial asociado a estabrma de comunicación indirecta es que,según los representantes de los parti-dos, los votantes no perciben esta formade comunicación como propaganda enel grado en que son percibidos los anun-cios de los partidos en la época deelecciones.

CH.: ¿Los gastos de campaña en publici-iad son elevados?

K. S.: En la elección directa de 1984para el Parlamento Europeo hubo varie-dad de datos sobre los gastos de lospartidos políticos daneses. Oscilaban en-tre 100.000 y 2.5 millones de coronasdanesas (aproximadamente 10.000 a250.000 dólares). El dinero empleado

Ingvar Carlsson, Primer Ministro de Suecia

en programas se calculó para 1984entre 28.000 y 300.000 coronas. Lospartidos más grandes fueron los quemás gastaron, pero no necesariamentelos que más votos ganaron. Todos lospartidos reciben subvención de la Difu-sión Danesa (DR) por un monto igualal de producir un programa normalde diez minutos de duración. En 1984se estimaba ese costo en 52.800 coro-nas. El tiempo en el aire es gratuitoen el canal nacional. En la eleccióneuropea, el presupuesto de la Comuni-dad Europea asignó fondos de campañapara suplementar los fondos recaudadosde varias organizaciones, grupos deinterés y otros actores políticos nacio-nales para ese fin.

En Dinamarca, no hay ley sobreel dinero para fines de campaña elec-toral. Varía grandemente el monto del di-nero gastado para anuncios, afiches, etc.

CH.: ¿Cómo organizan los partidos suscampañas? ¿Cuáles —muy en general—son sus estrategias?

K. S.: La meta principal para un partidopolítico es alcanzar el mayor númerode votos. Cómo se alcance esta metaes cuestión de estrategia y distribuciónde recursos. Un método es convertirtodas las posibilidades de comunicaciónen una plataforma del partido. Desdeesa plataforma, los políticos puedenperfilar una mejor imagen.

Los partidos políticos escandina-vos se valen de gerentes de campañaen diverso grado; pero estos gerentesy agencias de campaña no cumplen conun papel independiente o público enninguna parte de Escandinavia. El ge-rente de campaña es un actor descono-cido o un agente oculto en los sistemaspolíticos escandinavos, aunque un buennúmero de partidos haya acudido aagencias comerciales de publicidad y aotros especialistas en comunicación.

Para el candidato su meta perso-nal es la misma: lograr el mayor núme-ro de votos. Pero en las campañas na-cionales se pone usualmente poco énfa-sis en los candidatos. A veces los parti-dos sí hacen política a través de unapresentación especial de sus candidatos,pero en la mayoría de los casos, es através de los líderes del partido, losministros actuales o los exministros.Habitualmente el candidato es un ins-trumento en la comunicación, y no suobjeto. Muy a menudo se utiliza a "vo-tantes ordinarios" y desconocidos en es-te tipo de presentaciones de plataformapara "asegurar" a los votantes poten-ciales que podrán beneficiarse votan-do por el partido.

Las características individuales delcandidato desempeñan un papel másimportante en las elecciones localesy esas cualidades son la base del éxitomás que la identificación con los parti-dos. Esto conduce a que la gente cambiede afiliación de una a otra elección.

CH.: Sin duda, la mujer es muy activaen las elecciones...

K. S.: En esta década ha habido deba-tes sobre el sexo como principal iden-tificación de los candidatos. En Dina-marca, el debate no ha tenido mayortrascendencia, y su único resultado fueuna mayor conciencia de la necesidadde que figuren mujeres en las listas delos partidos y en sus presentaciones enla televisión. En Noruega, las candida-tas femeninas para la elección local de1971 se agruparon en una lista de solomujeres y tuvieron éxito.

entrevista / 9

Page 6: Entrevista Función  política de los medios en Escandinavia

Entrada principal del Parlamentosueco

CH.: ¿Qué temas suelen ser los tocadosen las campañas?

K. S.: Generalmente las campañaselectorales escandinavas se orientan acuestiones controvertidas, variando es-tas de elección a elección. Por depen-dencia de los medios con una audienciamasiva y difusa, los grupos hacia loscuales orientan sus estrategias políti-cas los partidos grandes son amplios;por ejemplo, el grupo de los asalariados.Rara vez toman en cuenta a gruposmás limitados, pero frecuentemente es-tos son el objetivo de partidos nuevoscomo el "Pensionista" danés en pro dequienes viven de una pensión pública,el "Ensliges Parti" noruego para la gen-te que vive sola.

CH.: Con un sistema tan organizado,una tradición partidista tan sólida, yuna relativa ausencia de temas funda-mentales, ya que muchos de los proble-mas a los que podrían referirse estánresueltos al menos en lo esencial, elnúmero de indecisos debe de ser relati-vamente bajo...

K. S.: En la elección noruega de 1985,el 25 por ciento de los votantes norue-

gos estaba indeciso a dos semanas delas elecciones.

Las encuestas danesas entre 1970y 1980 han demostrado que, aunque lamayoría de los votantes esté ya decidi-da antes de la campaña, todavía un 22a 32 por ciento se decidía durante elperíodo de la campaña o en los últimosdías antes de la elección.

CH.: ¿Cómo influyen los medios enel electorado? ¿Hay estudios sobreeste aspecto ?

ti. S.: Sí. En Escandinavia los votantesusan bastante la información ofrecidapor los medios. En Dinamarca, un estu-dio de Jay Blumler y Denis McQuaildemostró que la mayoría de los danesesseguía las campañas por televisión parainformarse o por costumbre. Un núme-ro relativamente menor (23 por cientoen 1975 y 35 por ciento en 1973)respondió que seguía las campañas na-cionales en televisión para decidir porcuál partido votar. El mismo estudiopone en segundo lugar a los periódicoscomo fuente de información, en pri-mer lugar entre los mejor educados;la radio ocupó el tercer lugar. La comu-nicación personal tuvo en ese estudio unimpacto menor.

Suecia tiene una prensa partidiíjta fuerte. Por lo menos una vezsemana, uno de cada dos suecos lee iperiódico de "su propia" afiliación pailtidista, y uno de cada tres lo hace todojlos días. La gente tiende a escoger ¡principal periódico local, aunquecomparta su afiliación de partido,concentración de periódicos ha demos]trado que la necesidad de informadóillocal es más fuerte que la necesidad elleer un periódico afiliado al partidofpropio.

Los datos de Noruega indican qu¡los votantes noruegos leen los perióíeos para comunicación política milque en Dinamarca, y muestran claiilmente que la literatura de campaña)las visitas a casa tienen poco impacto.

En un estudio finlandés, unpor ciento consideró los periódicos diljríos como su fuente más importade información política, mientras qmjun 40 por ciento citó la televisión. 1radio y las publicaciones periódicas tijvieron un lugar secundario durante 1¡campaña electoral nacional finlandésde 1983; apenas lograron un 30ciento. Entre el 24 y el 30 por deise fijaban en las vallas en las callesJleían los anuncios de los candidatos!

10 I entrevista.

Page 7: Entrevista Función  política de los medios en Escandinavia

partidos en los periódicos dejados enel buzón de correo. Solamente el 3por ciento reportaba haber asistido areuniones políticas organizadas por lospartidos.

Entre los resultados de las eleccio-nes de 1973 y 1975, los votantes da-neses que tenían un alto grado de des-confianza eran quienes, con mayor pro-babilidad, veían la televisión y leían lostabloides. No puede precisarse si la des-confianza era resultado de la cobertu-ra, pero el alto nivel de desconfianzaexpresada hacia los candidatos polí-ticos durante los debates podría apoyaresta idea.

Los conocimientos ganados de lacomunicación política se demuestranmuy escasamente en la investigaciónsobre la comunicación en Escandi-navia.

Citaré un par de ejemplos. Siune yBorre utilizaron datos del estudio de laelección de 1971, incluyendo entrevis-tas con una muestra representativa an-tes y después de la campaña electoral,y un análisis del contenido de la campa-ña electoral transmitida, para demostrarque sí hubo- cambio en los votantes,gradas a la campaña electoral en televi-sión y radio nacionales, aunque seguíapesando la consideración de aspectosrelevantes percibidos antes de la campa-ña electoral.

El impacto de los medios noticie-ros se ilustra en un estudio de la luchapor la agenda en la campaña electoralsueca de 1979, de lo cual Kent Aspconcluía que los medios noticieros sonmás poderosos que los partidos como fi-jadores de agenda para los votantes.

Se ha medido la falta percibida deconocimientos - sobre la política en en-cuestas danesas donde el 82 por cientoen 1971, el 81 por ciento en 1973y el 68 por ciento en 1975 concorda-ron con la afirmación de que "A vecesla política es demasiado complicadapara personas como yo. Realmente nopuedo comprender lo que pasa". Gene-ralmente, las personas con menos edu-cación también tienen menos conoci-mientos, y para ellos no es solamente"aveces".

Durante las elecciones nacional ylocal suecas de 19'79, se recopilarondatos para examinar la amplitud relati-va de la brecha de información en polí-tica local y nacional. La conclusión deeste estudio fue que la brecha de conoci-mientos era considerablemente menor anivel local, y que, a pesar del aumentoa la exposición de los medios masivos,los de menor educación seguían menosinformados.

Fundándose en encuestas sobreelecciones en Noruega, Ragnar Waldhalllegó a la conclusión de que no hay co-rrelación entre la participación de losvotantes en las campañas electorales ysu reacción a ellas. El interés políticoinfluye en la participación en campañaselectorales, participación medida por laexposición a material de campaña,debates políticos, etc.; pero tienemuy poca inñuencia directamente sobresu reacción a la campaña electoral.

El interés político se asocia conla lealtad al partido: cuanto mayor elinterés, mayor será la adhesión al parti-do. Y ya que la gente con lealtad a unpartido de ordinario ha decidido cómovotar antes de la campaña electoral,los que tienen un interés menor y unabaja identificación con los partidos,son los que pueden ser motivados porlas campañas electorales. Esta conclu-sión se apoya en los resultados danesesde la elección nacional de 1975. Laconclusión de esto podría ser que laestrategia para una campaña óptimadebe dirigirse hacia quienes tenganpoco interés y conocimientos con res-pecto a la política.

Hay indicaciones del impacto dela televisión en las campañas en Finlan-dia; Matti Oksanen reporta experienciasde tres elecciones claramente orienta-das hacia la televisión. Los datos deOksanen comienzan en 1966, cuandoel debate televisado fue un factor sig-nificativo en la victoria de la izquierda,y mandó a los conservadores a la oposi-ción. En la elección parlamentaria en1970, y en la elección presidencial de1982, la televisión desempeñó un papelconsiderable en el resultado final. Enla investigación finlandesa, fueron espe-cialmente los debates por televisiónlos que demostraron el fuerte impactode este medio. Las respuestas sobredebates televisados sugieren que uno decada cinco votantes fue un "votanteganado por la televisión" en las elec-ciones parlamentarias de 1983. Unade las características estructurales quehizo posible la elección por televisiónfinlandesa fue que los partidos políticosen Finlandia no utilizan listas partidis-tas con un ordenamiento de los candi-datos por preferencia, como en Noruegay Suecia.

CH.: ¿Se perfila para el futuro una ten-dencia hacia el bipartidismo? ¿Contri-buirán los medios a ello?

K. S.: El contexto del papel políticode los medios masivos es diferente queel de los Estados Unidos; en los países

escandinavos, como en muchos otrospaíses europeos, los sistemas son multi-partidistas y no están dispuestos a su-frir un colapso que los convierta en sis-temas de solo dos partidos. Por lo co-mún los resultados de los estudios delimpacto de los medios masivos sobreel comportamiento electoral se consi-deran tan válidos en Escandinavia,como en los Estados Unidos, pero elimpacto sobre el sistema político esdiferente por la diferente estructurapolítica. El aspecto significativo delcontexto para el empleo de los me-dios masivos es el sistema de igualdadde acceso y tiempo. El intensivo uso dela difusión en las campañas electoralesescandinavas junto con el principio dela igualdad de acceso, ha hecho quesea más fácil que en la mayoría de lospaíses europeos, establecer partidos nue-vos y pequeños, y mantenerlos vivos.La difusión y especialmente la televi-sión los hace visibles al electorado,aunque no es frecuente que los parti-dos pequeños puedan establecer unaplataforma. Los partidos nuevos enDinamarca tienen, en principio y en lapráctica, una mayor posibilidad de es-tablecer la agenda para una elecciónnacional o local, ya que con el tiemporecibirán cobertura noticiera gracias alprincipio de la igualdad de acceso.

KAREN SIUNE, danesa, máster enCiencias Sociales y doctora en

I Ciencias Políticas, es profesora de\ de Comunicación y Comu-| nicación Política en la Universidad\ Aarhus (Dinamarca). Autora de

varios libros, editó con DenisMcQuail New Media Politics yHandbook of European Media Policy

! (1986).

. entrevista I 11