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“El juego es salud física, mental y emocional”

Entrevista a Imma Marín, fundadora y directora de Marinva

Marinva es una empresa que se en-marca en el terreno del juego como herramienta educativa. En motivo de su 20º aniversario, entrevistamos a Imma Marín, fundadora y directora de la compañía. Así, conoceremos cuáles son los beneficios del juego en el desarrollo de los más peque-ños y averiguaremos cómo los cam-bios en la sociedad están afectando a este ámbito.

Persiguiendo un sueño, Imma Marín, decidió tirar ade-lante el proyecto de creación de Marinva, una empresa que cumple 20 años de vida y trabaja para el desarrollo de la educación y la comunicación a través del juego y la actividad lúdica.

Pocos años después de su nacimiento, Marinva pasó de ser un proyecto personal a un proyecto en equipo en el que se defienden unos claros valores relacionados con el poder del juego. Según Imma Marín, “Marinva es como una partida de un juego de mesa que va creando exten-siones a partir de una misma base”. La compañía nació muy vinculada al juego y la educación, tanto en el entorno escolar como en espacios de ocio y socialización. Así, su trayectoria se ha ido consolidando a través de programas educativos realizados para la administración pública y, también, para empresas con tal de demostrar que el jue-go es una manera excelente de construir aprendizaje.

- ¿Cómo ha cambiado la manera de jugar de los niños en estos 20 años?- Ha cambiado considerablemente. Algunos han pasado de jugar en la calle a jugar solos en el sofá. La incorpora-ción de la tecnología y la falta de tiempo para jugar con los amigos han generado un juego más solitario. La obe-

sidad infantil no sólo es consecuencia de una deficiente alimentación, la falta de juego al aire libre, también tiene que ver.

El perfeccionamiento y sofisticación de la tecnología han consolidado un nuevo tipo de juego y una nueva ma-nera de jugar a través de juegos online, multijugador y multiplataforma, y para todas las edades y gustos. Estos juegos sumados a los juegos tradicionales son sin duda un enriquecimiento del juego.

Otro cambio importante es el descenso de la edad de juego. Los juegos tradicionales cada vez se abandonan antes. Dicho de otra manera, los niños dejan de ser niños muy rápido. Por el contrario, los videojuegos han alargado la edad de juego, de manera que la generación nacida en los 70 no ha dejado todavía de jugar.

Imma Marín, fundadora y directora de Marinva

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- ¿Las familias son conscientes acerca de la impor-tancia del juego para los niños?- Las familias son cada vez más conscientes de ello; sin embargo, a menudo se muestran inseguras en la manera de facilitar las condiciones de juego para sus hijos: espa-cios para jugar, tiempo para jugar, juegos y juguetes para jugar y compañeros de juegos. Llegado el momento, las actividades concebidas como “útiles” pasan por delante del juego y, entonces, los padres se lamentan del poco tiempo que tienen los niños para jugar, olvidando que la extraescolar más importante es la de “jugar”.

- ¿Qué es lo que más valoran los padres y familiares a la hora de regalar un juguete?- Las motivaciones de padres y familiares no suelen ser las mismas. Los familiares buscan la aprobación del niño, mientras que los padres valoran más que el juego sea adecuado a la edad, resulte estimulante, y puedan jugar juntos. Unos y otros buscan la seguridad y, por supuesto, que al niño le guste y se divierta.

- Y, por la parte de los profesionales, ¿tanto fabrican-tes como distribuidores tienen suficientemente pre-sente esta importancia del juego?- Por supuesto. Desde la Asociación Española de Fabri-cantes de Juguetes (AEFJ) se trabaja en esta línea. Los fabricantes cada vez más son conscientes de que sus productos son fundamentales para el desarrollo infantil

y la investigación de las tendencias tanto en pedagogía como en juego está siempre presente. Cada vez son más sensibles, especialmente en lo que a seguridad se refiere, porque además de divertir, el juguete debe ser seguro. La calidad de sus productos así lo demuestra.

En cuanto a los distribuidores, creo que ese conocimien-to es muy desigual. A la vez que encontramos cadenas de especialistas con un alto grado de conocimiento y sen-sibilidad por hacer llegar a los consumidores una oferta innovadora y de calidad, encontramos otros que se rigen casi exclusivamente por el precio. Hay demasiadas bue-nas propuestas de los fabricantes que no ven la luz o que no llegan al consumidor con la fuerza que debieran por el poco riesgo que asume una parte de la distribución.

- ¿Qué debería tener en cuenta, tanto la industria como la distribución, para conseguir desestacio-nalizar el sector? ¿Qué iniciativas podrían poner en marcha para conseguir que el juguete no sea tan solo considerado un ‘regalo’?- Ese sí que es un gran reto. Se han llevado a cabo nume-rosas iniciativas y se siguen llevando. Webs informativas como Ludomecum o Juguete Seguro, festivales de juego como El DAU en Barcelona (y otros que se suceden en di-ferentes ciudades de España), el Observatorio del Juego Infantil y la celebración del Día del juego (el 28 de mayo), impulsada por la Asociación Internacional Play Associa-tion, entre otros, son una buena muestra del esfuerzo rea-

Equipo de profesionales de la empresa Marinva

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lizado por diferentes instituciones comprometidas con el derecho de niños y niñas a jugar.

Como iniciativa, se me ocurre una apuesta más clara y decidida de las administraciones por crear redes de lu-dotecas y espacios de juego, donde los juegos de mesa tengan un espacio destacado. También, la presencia de más juegos y juguetes en la escuela como valor añadido a la educación, herramienta de transmisión de valores, normas, conocimientos o actitudes. Así, las familias ve-rían que un juguete es un regalo maravilloso en cualquier época del año.

- ¿Considera que la oferta existente de juguete es de-masiado extensa? ¿Podría resaltar los beneficios e inconvenientes de este hecho?- La competencia en cualquier sector alimenta una oferta de calidad. Cada niño o niña es diferente y por lo tanto po-demos encontrar numerosos tipos de jugadores. Cuanta más oferta tengamos, más posibilidades de incorporar el juego tendremos.

Sin embargo, muchas veces la cantidad no es sinónimo de variedad si no de más de lo mismo. Existe una exa-gerada “veneración” por parte de la distribución de “la novedad” y los fabricantes se esfuerzan en responder a ella. Sin embargo, el que un juguete sea “de novedad” no significa que sea mejor, ni más divertido, ni mejor hecho que el del año anterior. Actualizar, cada año, un catálo-go con más del 50% de juguetes “nuevos”, todos buenos y con real aportación “nueva” de valor, es prácticamente

imposible y además obliga a eliminar buenos juguetes que podrían tener más recorrido.

- ¿Cómo están influenciando las nuevas tecnologías al sector del juguete? ¿Considera que se están introdu-ciendo adecuadamente a los diferentes productos?- A lo largo de toda la historia del juguete vemos repre-sentadas las modas, los valores y los avances técnicos de la sociedad que los ha creado. Vivimos en la sociedad de la información y la comunicación, por lo que los avances tecnológicos son impresionantes y los juguetes así los reflejan. Cada vez su aplicación beneficia más al juego, es decir abre las oportunidades del juguete haciéndolo más versátil y creativo. Cada vez más la tecnología está sabiendo enriquecer el juego tradicional y creo que ésta es una buena tendencia que crecerá.

- ¿Valora que esta tendencia va en detrimento de los juguetes tradicionales? - En parte sí, porque el juguete tradicional se abandona

antes. Pero a la vez que sucede esta admiración por todo lo tecnológico, vemos un resurgir del juego de mesa tra-dicional, así como todos esos juguetes que mencionaba antes en los que la tecnología enriquece el juego, como por ejemplo los juegos “makers”, que amplían las posi-bilidades de los juegos de construcción tradicionales. En definitiva, los fabricantes de juegos tradicionales se es-fuerzan para enriquecer el juguete tradicional a base de tecnología puntera, y los fabricantes de tecnología, poco a poco, están viendo la necesidad de acompañar lo virtual de objetos e interacciones tangibles y reales. De esta ma-nera, unos y otros ven la necesidad de que los niños to-quen, sientan, se muevan y que lo que hacen en el mundo virtual impacte en el mundo real y viceversa.

- La edad del juego cada vez es más reducida. ¿Cómo se podría invertir esta tendencia? ¿Qué valores se de-ben transmitir a la sociedad?- Debería transmitirse que el juego es una actividad para toda la vida y que no existe una edad para jugar. El hombre desde que nace juega; juega con la mirada y el balbuceo de bebé hasta que empieza con los juguetes, más tarde llega el turno de los juegos y videojuegos; y, después, has-ta los ancianos jugando a cartas o al domino son felices. La sociedad cada vez más valora este espacio milagroso de relación que se crea cuando jugamos porque nadie nos juzga y podemos ser quien queramos ser. Es divertido, nos alegra el ánimo y nos proporciona placer y divertimento. El juego es salud física, mental y emocional.

Marinva ha celebrado su 20º aniversario