1Marzo - Abril 2012

Editorial

Sacrificio: “Dejar nuestras zonas de confort e ir hacia los lugares de frontera para encon-trarnos con la gente” (CG 2008 C 2). Nos hemos hecho esta llamada para vivir nuestrodinamismo misionero. Esta cláusula en nuestras decisiones del CG es un reto que searmoniza con una reflexión Cuaresmal sobre el sacrificio, encontrado casualmente en unartículo de Monica Duitton: ‘Nada de lo que vale la pena es fácil. Si no se nos pone aprueba, nunca conoceremos nuestro potencial. Es el sacrificio el que nos da la fuerza, lalucha la que nos hace resistentes’. La autora habla del espíritu, de los sacrificios duran-te la Cuaresma y del cambio que se produce en las diferentes etapas de la vida y en laépoca de los desafíos.

“… En el pasado también lo hicieron las disciplinas impuestas desde fuera. El enfoque de la Cuaresma cam-bió. Era necesario el cambio a nivel personal y esto hizo que las cosas fueran más complicadas!... Seguro queno sería demasiado difícil pensar en algo que ‘renunciar’ en Cuaresma –después de todo es lo que ¡hemosestado haciendo durante años! Sin embargo, cada vez era más evidente que no era suficiente ‘renunciar a’algo, tenía que darse un cambio del corazón, de la mente y del espíritu. ¡Esto fue enfrentarse de verdad! Larenovación personal auto-dirigida era un reto mucho más difícil. Utilizar un tiempo para reflexionar sobrenuestra vida y tomar medidas para dejar nuestras zonas de confort no es fácil. Nos hemos vuelto demasiadocómodas, hemos llegado a pensar que todo debe lograrse con un mínimo esfuerzo – que los aspectos incó-modos, difíciles o desagradables de la vida hay que evitar a toda costa. Estamos constantemente bombardea-das por la publicidad que nos muestra personas perfectas, que viven una vida perfecta, en casas perfectas.Parece como si hubiéramos olvidado que el crecimiento y el cambio son el resultado de un trabajo duro, dedisciplina y de lucha. Cuando un atleta triunfa no nos preguntamos si el entrenamiento, la resistencia y losmadrugones fueron difíciles – sino, si ha merecido la pena. La madre de un recién nacido no se detiene a pen-sar en lo que le costó dar a luz, sino que se deleita en el milagro de su precioso bebé.

Como la historia del famoso pianista concertista mundial, que caminaba agotado por el pasillo central enmedio de aplausos después de su tercera repetición. A medida que iba asediado por los fans después de laactuación, en la puerta del escenario uno de ellos le dijo: “Yo daría mi vida por poder tocar así!” Su respues-ta fue sencilla: “Yo la he dado”.‘Nada de lo que vale la pena es fácil. Si no se nos pone a prueba, nunca conoceremos nuestro potencial. Esel sacrificio el que nos da la fuerza, la lucha la que nos hace resistentes’.

Sabemos que hay sacrificios de redención que abundan en la vida de nuestras hermanas, tanto del pasadocomo del presente, sobre todo en ciertos países (por favor no os perdáis nuestra historia de China). Algunas,incluso ahora, están participando en situaciones críticas, como en Japón, Túnez, Egipto, Libia y Siria. Elmundo puede celebrar las victorias o los cambios cuando ha terminado la crisis, pero más allá de eso valora-mos la vida de ellas mismas – ofreciendo sacrificios.

Dentro de unos días celebraremos la Pascua. Sabemos que la Pasión del Señor preparó la Resurrección y laalegría brotó del árbol de la vida, la cruz. Todas estamos llamadas a participar y celebrar esta alegría de laResurrección, participando diariamente en la Vida de Cristo en la medida de lo posible.

¡Alegraos en el Señor!

Mary Lobo, fmm

Vaticano - Por primera vez una misa en el taller mecánico

Por primera vez se ha celebrado la santamisa en el taller mecánico de la Ciudaddel Vaticano.

El 13 de enero viernes por la mañana, losobreros con sus trajes azules de faena,han participado a la Eucaristía presididapor el agustino P. Bruno Silvestrini,párroco de la iglesia de Santa Ana en elVaticano. Carpinteros, idráulicos, elec-tricistas y obreros de otros repartos delos Servicios técnicos delGovernatorato, han escuchado la homi-lía del sacerdote, que desde hace casi unaño ha sustituido al Jesuita P. Sironicomo capellán de los obreros de SCV. ElP. Silvestrini ha comentado el paso delEvangelio de Marcos, donde se narra lacuración del paralítico.

La animación litúrgica con los cantos,acompañados a la guitarra de GiacomoForconi, ha corrido por cuenta de lasFranciscanas Misioneras de María, Hnas.Besau Nguyen y Maria Smolen, delLaboratorio de Restauro de los Tapices.

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Arriba: Maria Smolen, fmm con su guitarraAbajo: en el centro: Hna. Besau Nguyen, fmm

@@En Breve...

Congo Lubumbashi - Eco de Luishia (formación de las formadoras)

E n t u s i a s m a d a spara ir al pozo deJacob, el 5 denoviembre 2011dejamos la ciudadde Lubumbashi enautobús hacia elpueblo de Luishia,situado a 80 km. dela capital. Nos reci-bieron las herma-nas de la comuni-dad, las formadorasy una muchedum-bre inmensa dealumnas del inter-nado.

La sesión de formación comenzó marcada por la ceremonia de apertura al estilo africano, con sus riquezas ysímbolos, gestos y danzas, seguida de la Eucaristía y del ágape fraterno. Éramos 28 hermanas de 8 naciona-lidades: los 4 miembros del equipo eran de nacionalidad mozambicana, polaca, senegalesa y congolesa(RDC) y las otras 20 participantes éramos de las provincias de Angola, Congo Brazzaville-Camerún, CongoKinshasa y Congo Lubumbashi.

El objetivo de la sesión era profundizar en nuestra vida fmm y también reducir la distancia existente entre loque estamos llamadas a ser y lo que a menudo somos. Los diferentes temas tratados, - a partir de nuestras dis-tancias- , marcaron una escala de la historia de la salvación, de la imagen de Dios que llevamos en nosotrasmismas, de la familia de origen y de nuestras culturas, del carisma, de la vida comunitaria, de la manera degestionar los conflictos, la sanación de los recuerdos, la vida consagrada, el liderazgo y el acompañamiento,para aterrizar en la estima de sí misma) nos ayudaron a realizar el recorrido de interiorización y a descubrirlas distancias existentes en nosotras, en nuestras comunidades y en nuestras provincias, para poner remedioa ellas. El tiempo de reflexión personal, los días de profundización y las dinámicas empleadas por los miem-bros del equipo nos ayudaron a vivir momentos fuertes donde cada una pudo tomar conciencia de lo que pasaen ella para comprometerse y superarlo. Tomamos conciencia de esta realidad y nos comprometimos en elcamino de conversión.Toda la sesión transcurrió en un ambiente fraterno de alegría, de confianza y respeto mutuo. Nuestros momen-tos de compartir en los grupos fueron ricos y llenos de emociones fuertes.

Damos gracias al Instituto por este hermoso regalo. Como formadoras hemos tomado conciencia de nuestrapropia pobreza y también de la pobreza de nuestras provincias. Llevamos en nosotras la preocupación dehacer vivir a nuestras hermanas este viaje interior para reducir nuestras distancias. Si cada una lo toma seria-mente, aunque sólo sea un centímetro, hará que el carisma florezca en ella. Regresamos con un nuevo impul-so. Que María de la Pasión nos acompañe en este viaje interior para que podamos llegar a ser las verdaderasFMM que el mundo de hoy necesita.

Christine Kakudji y Julienne Makosso, fmm

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Lyon - Marcha por la PAZ

Canadá - Asamblea Nacional de JPIC

La Conferencia Religiosa Canadiense (CRC) ha organizado una Asamblea nacional de JPIC en Montreal(Canadá), para los religiosos, religiosas y asociados del 5 al 7 de octubre 2011. Hermana Arlene van Zyl y yo,hemos tenido el privilegio de representar en ella a la provincia fmm del Canadá. En la asamblea provincialdel 27 de octubre compartimos la experiencia que habíamos vivido. Os transmitimos algunos ecos.La asamblea reunió a más de 200 miembros de comunidades religiosas y algunos de sus asociados prove-nientes de distintas partes del país.Tomamos tiempo para contemplar con mirada nueva la situación trágica que vive nuestra Madre la Tierra y

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Domingo 13 de noviembre, son las 13h30,estamos reunidos en el anfiteatro de la CroixRousse, uno de los dos lugares donde fueronmartirizados los primeros cristianos deLyon. Allí, cada uno recibe un pequeñoecharpe blanco. Después de un intercambiofraterno, nos reagrupamos para escuchar laPalabra de Dios proclamada por uno denuestros hermanos cristianos. En nuestrogrupo somos 450 personas de diferentesconfesiones cristianas, algunos llevan unapancarta con la paloma de la paz; nos pone-mos en camino, guiados por un importanteservicio de orden.

Nuestra primera parada es en la plaza de losTerreaux, y allí nuestros hermanos musul-manes nos piden a todos que seamos cons-tructores de fraternidad y de paz. Luego seguimos a lo largo del Ródano, y como hace un tiempo preciosomuchas personas se unen a nosotros. Nuestros hermanos budistas a su vez nos interpelan. Una joven vietna-mita nos transmite un hermoso mensaje de paz. Nuestra última etapa es en la plaza Bellecour, y es a travésde nuestros hermanos judíos que recibimos la palabra de paz.

Al final, atravesando la Saona, llegamos a la plaza de san Juan, al pie de la colina de Fourvière. Nuestro grupoha aumentado a 650 personas. Entramos en el patio del colegio de los Lazaristas y un grupo de jóvenesFocolari nos acogen con cantos de alegría. Cada uno recibe una vela y un folleto con la regla de oro univer-sal y la famosa oración por la Paz de San Francisco.

Luego tenemos un tiempo de meditación preparada y animada por la fraternidad fmm de Oullins. Cécile leeun texto que habla de las cuatro velas que sostienen Marie Jia, Marie-Camille y otras dos hermanas de la fami-lia franciscana, Marie Boutier nos acompaña sonando un intermedio musical con la flauta. Las velas repre-sentan la Paz, la Fe, el Amor y la Esperanza, pero la Paz, la Fe y el Amor se apagan. Entonces, se acerca unmuchacho con la vela de la Esperanza y enciende las otras tres como signo de esperanza para nuestra vida.En ese momento, los representantes de cada religión toman cada uno una vela y encienden nuestras pequeñasvelas. Juntos leemos con gran convicción la oración por la paz.

De nuestros corazones se eleva una inmensa acción de gracias por este tiempo marcado por el espíritu de Asís.

Cécile Le Mener, fmm

Cécile le Mener, fmm, con el cartel de la paz

Bélgica - Marcha de la Esperanza de 30 bruselenses

Unos 30 jóvenes llenos de entusiasmo – entre ellos 8 de la unidad pastoral de Woluwe, acompañados porPierre y Aline fmm – están presentes en la Casa de Estudiantes “Ruach” para la Marcha de la Esperanza enel centro de Bruselas.

Para sus estómagos vacíos les prometen una comida de panecillos, pero antes cada uno recibe una tarjeta azulo roja que indica el local donde tienen que dirigirse. Por un lado, está la “mesa rica” llena de panecillos bienrepletos… por otro, la “mesa pobre” con algunas tazas, agua y algunos panecillos, insuficientes para 15 per-sonas.

las repercusiones que ha causado y sigue causando en la vida de todos los seres humanos y sobre todo en lacreación. Nos dimos cuenta, que el hombre “en vez de desempeñar su papel de colaborador de Dios en la obrade la creación, suplanta a Dios y con ello provoca la rebelión de la naturaleza” (cf nº 37 Centesimus Annus,Juan Pablo II 30/12/1991) Es algo tan cierto, que los media al darnos las noticias del mundo, nos hablan decatástrofes naturales (terremotos, inundaciones, etc.), de la proliferación de distintas enfermedades, de la fun-dición acelerada de los glaciares, del calentamiento de la tierra, de las guerras, etc…, en una palabra, de laviolencia bajo todas sus formas. Notemos que esta violencia,a través de la destrucción del medio ambiente, está dirigidacontra el hombre y contra la creación.

Michel Venne, en su conferencia de octubre 2012 sobre“Medio ambiente y justicia social: ¡hay que actuar”, afirmaque “el deterioro del medio ambiente está íntimamente liga-do a la crisis social en el mundo”. Para él, “los vínculos entreel medio ambiente y la justicia social hace años fueron pues-tos en evidencia bajo el vocablo Justicia climática”. Condesdeño dice, que ”a causa de los desórdenes climáticos, lascatástrofes naturales matan a millares de personas y amena-zan la vida de millones de ellas. Ahora bien, el 95 % de laspersonas amenazadas, casualmente viven en países de de-sarrollo”.

¿Nos inquietaeste cuadro tan poco reluciente de la situación del ser huma-no y de su medio ambiente? Si no se toma seriamente el pro-blema, ¿se podrá vivir en nuestro ‘Planeta Tierra’ dentro deunos años?

Para mí, es un grito de alarma que me interpela a hacer algo.Como FMM, ¿qué podríamos hacer hoy para responder aesta llamada de nuestra Madre Tierra?. En nuestroDocumento Capitular de 2008, una de las líneas de acción es“Defender la vida de nuestra Tierra realizando acciones sen-cillas y cotidianas, comprometiéndonos en proyectos signifi-cativos a favor de la justicia, la paz y la ecología” (D.C. C 7,5) ¿Dónde nos encontramos en este momento? Como FMMnuestra vocación nos compromete a vivir el voto de pobreza,a ocuparnos de toda clase de pobres, y a estar cerca del

mundo que sufre.

¿Cómo podremos cuidar de nuestra Madre Tierra, que yace en la pobreza y alberga en ella a los pobres de lahumanidad?

Anne Adounkpe, fmm

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A la izquierda, Hna Anne Adounkpe, y a la derecha Hna. Ariene van Zyl

Hermana Anne Adounkpe está con los pobres

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De esta manera, los jóvenes tienenla ocasión de reflexionar en el hechode quien tiene oportunidad de serrico o la desgracia de ser pobre. Unaasombrosa conversación alrededorde la mesa me induce a prestar aten-ción: “Lo que no tengo, iré a “pillar-lo”, esos siempre tienen suficiente”y “nosotros queremos compartir loque no nos gusta.” Estas reflexionesreflejan en “pequeño” la mentalidadde nuestra sociedad.

Después de esto visitamos la iglesiade Béguinage, donde nos esperabala sorpresa de una exposición deniños que viven en la pobreza.

Daniel Alliët nos acoge cordialmente. En un lenguaje sencillo, con anécdotas conmovedoras y ejemplos con-cretos con pasos bien escogidos del Evangelio, nos esboza la pobreza en Bruselas. “Hay una diferencia, dice,entre un pobre, un anciano, uno sin hogar, un migrante y el que busca asilo. Pero todos, son seres humanos.”

La repartición de bienes entre pobres y ricos evoluciona con excesiva rapidez, con una diferencia de 1 sobre86. Un pan para 86 personas: ¡aquí está el brecha!Y nos fórmula un deseo inédito de Feliz Año 2012: “Os deseo buena salud y la audacia de querer vivir conmenos, no solamente porque el presupuesto lo requiere, sino…” Un pensamiento profundo que nos hace refle-xionar y nos deja silenciosos…

“Si continuamos con esta “marcha” de consumo, dejaremos para el futuro unas huellas que engullirán a másde 5 mil millones de personas, porque que ya no habrá lugar en la tierra para ellos. ¡La pobreza es local y glo-bal!“¿Quién es ese pobre, sin techo, en busca de asilo? Son seres humanos que tienen un rostro, que pierden amenudo el coraje para seguir viviendo y no se consideran capaces de nada. No tienen dirección, ni papeles yno tienen derecho a la asistencia ni a los cuidados. Legalmente no existen. Nosotros no les vemos porque que-remos protegernos a nosotros mismos. Quizá tenemos miedo a tomar la responsabilidad que su presencia nosobliga.”

A continuación nuestra marcha nos llevó al centro de servicios de “Anker”, (el Ancla) donde nos esperabaAna, la responsable. Esta señora tiene un carisma excepcional y hace lo posible por los marginados. “Tuvehambre y me diste de comer”. Esta pequeña frase del Evangelio es la fuente del compromiso de su vida. Losjóvenes literalmente están pendientes de sus labios al oírle hablar de aquellos que se atreven a reunirse conella cada día.

Todas estas impresiones dejan al grupo silencioso. Y todavía lo son más, cuando entramos en el “PequeñoCastillo” donde nos encontramos con los llamados “menores no acompañados”.Escuchamos la historia llena de esperanza de un joven Afgano de 16 años que realmente cree en el futuro. Suhistoria es simplemente una ‘espera’, un medio para encontrar y trazar ‘su camino’… como si viviera un ver-dadero Adviento.

Seguimos nuestro camino con Joost, un ex sin techo, que nos cuenta su historia y de vez en cuando la colo-rea con algunos detalles de humor.

Aline De Reys, fmm

Sri Lanka - Programa de Formación del Instituto

Provincias de Chennai, Ootacamund, Pakistán, Sri-Lanka

A partir del primer día de la sesión hubo actividades ofi-ciales y extra oficiales, preparadas para facilitar unacomunicación abierta entre las veintiuna participantes ylas cuatro facilitadoras. El tema: “De cara al futuroreducir la distancia existente viviendo una vida FMMauténtica” hizo hincapié en una previa reflexión perso-nal.“¿Quién soy yo? ¿Cómo reconozco la diferencia entremi yo verdadero y mi yo ideal?”Hemos sentido - el desafío para comprender esto, que espara nuestro crecimiento espiritual personal y para latransformación interior- como un don, y la responsabili-dad de una formación más integrada en los niveles de formación inicial y permanente, dentro de nuestras pro-vincias y en el Instituto.

Con esta idea en la mente, hemos articulado un proyecto comunitario para las seis semanas juntas, que nosmantiene en una visión común y un compromiso compartido para la transformación personal y de grupo.Hemos encontrado en nosotras mismas una nueva dimensión, caminando a través de nuestras experienciaspasadas y presentes, usando el esquema del “Huevo Cósmico” de Richard Rohr: Mi historia, nuestra historia,la historia. Rohr llama ‘La historia’ al tapiz sagrado que asegura y garantiza los otros dos, ‘aferrando los tresen un significado sagrado y mitológico’. Los que viven en este ambiente están en contacto con la verdaderatrascendencia. Conocen en lo profundo de sí mismos la llamada a un proceso interno de transformación a lolargo de la vida y lo acogen en la fe.Durante estas seis semanas, nos hemos fijado en los aspectos esenciales del programa de formación inicial,

con la vista puesta no ya en elcontenido sino en las posibilida-des creativas para el desarrollohumano auténtico. Esta orienta-ción creó nuevas energías, nue-vas confusiones, nuevas ideas ynuevas realizaciones de nuestroverdadero yo.

En la última semana Hna.Marlene Hixon, una de las facili-tadoras, celebró su Jubileo deoro. Eligió como tema: “Para míel vivir es Cristo” (Flp 1,21).Cuando Marlene renovó susvotos sentimos el poder del amorde Cristo que nos une y nosimpulsa a seguir adelante con ella

en el compromiso compartido de ‘reducir la distancia’ en nuestras vidas y de cooperar con las hermanas denuestras provincias a crear verdaderas comunidades de formación, en la que cada una encontrará su propiaperla de gran precio: la imagen de Dios en la que continuamente está siendo creada.

Fatima Mary Anothonimuthu, fmm (Chennai),Rani Sebastian, fmm (Ootacamund)

Shakila Sardar, fmm (Pakistán)Luvina Muthukumaru, fmm (Sri Lanka)

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La casa de los PP. Sacramentinos donde se llevaron acabo las sesiones

Polonia - Misioneros que vuelven

FMM Lugar de Encuentro VII/508

En el Centro de Animación misionera de los sacerdotesPalotinos en Konstancino – Jeziorna, se llevó a cabo, porprimera vez, un Congreso para misioneros que vuelven aPolonia de la misión ad gentes. El tema fue “El misione-ro que vuelve... ¿y después qué?”

Los organizadores de la reunión pertenecían a cuatroInstituciones. Se habló de la situación de los misionerosque regresan, a veces después de haber trabajado muchosaños en la misión, por ello necesitan readaptarse a lasituación actual de la Iglesia y de la sociedad e incluso a

su familia religiosa. Se vio también otro aspecto: ¿Cómo utilizar en las parroquias de Polonia toda la riquezay experiencia excepcional? Hubo varias ponencias:

P. Wojciech Kluj OMI, dio “¿Quien es un misionero? Hizo hincapié en el fenómeno del cambio, en el enfo-que del envío misionero. A menudo el misionero de hoy deja su país sin la convicción de que parte para todasu vida. Por lo tanto el regreso de la misión no puede verse como una derrota o fracaso. Por desgracia muchaspersonas lo ven como una desgracia. Tal enfoque complica mucho la situación psicológica del misionero,hace que le resulte más difícil adaptarse de nuevo a su ambiente nativo.

El Rvdo. Tomasz Atlas, presentó: “La vuelta de un misionero: ¿oportunidad o problema?”. Habló de la situa-ción de los misioneros que han vuelto por motivos de salud, pero también porque han sido “llamados” por sussuperiores para trabajar en su país de origen, a causa de la drástica caída de las vocaciones. Sin embargomuchos de ellos no han podido adaptarse nuevamente a su país natal. Algunos, como en el caso de España,se han comprometido en la Pastoral de los inmigrantes de América Latina. En Polonia el 75% de los sacer-dotes misioneros después de haber trabajado en las misiones, parten para vivir permanentemente en nacionesde Europa occidental o en EE.UU. Es un hecho desconcertante. Se comprometen en estructuras de la iglesialocal y capellanías de la comunidad polaca en el extranjero. No se han examinado los motivos para perma-necer en occidente, pero es fácil adivinarque a su regreso han tenido dificultad paraadaptarse en Polonia.

La Dra. Dorota Przygrodzka, psiquiatra ypsicoterapeuta, en su ponencia “Aspectospsicológicos del regreso” habló del cam-bio radical de vida en el misionero queregresa. Recalcó que esta situación podríaser una razón de depresión, pero podría sertambién una oportunidad para liberar laintensa energía de los cambios en su pro-pia vida.

El Nuncio del Vaticano CelestinoMigliore, durante su homilía habló delhecho de que los misioneros a su regresopueden encontrar su patria completamentecambiada, pero en estos cambios es tam-bién posible darse cuenta de los elementos positivos: la alegría de la vida, la voluntad de progreso etc. perotambién podría haber elementos negativos como la crueldad de la competencia.“El volver de las regionesmisioneras a la patria exige un cambio de actitudes, elasticidad con el fin de ir desde el celo de la predicacióndel Evangelio al celo de la construcción de comunidades cristianas, que sean capaces de dar testimonio deDios con convicción.”

Cecylia Tymoszuk, fmm