el liberalismo es uno y tres.pdf

Upload: joan-molina

Post on 02-Jun-2018

220 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    1/29

    151RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

    El liberalismo es uno y tres.Hayek, Bobbio y Berlin*Recibido: septiembre 3 de 2010 | Aprobado: octubre 29 de 2010

    Liliana Mara Lpez Lopera**[email protected]

    * El texto presenta resul-tados de la investigacintitulada Las aporas delliberalismo inscrita enla de lnea losofa yteora poltica del grupode investigacinEstu-dios sobre poltica y len-

    guajedel Departamentode Humanidades de laUniversidad EAFIT.

    ** Magster en FilosofaPoltica, Universidad deAntioquia. Docente einvestigadora, Departa-mento de Humanidades,Universidad EAFIT, enla cual se desempea ac-tualmente como Jefe delmismo Departamento.

    El texto presenta las caras que asume el liberalis-mo cuando busca hacer compatible, incompati- ble o absoluto los valores liberales de libertad e

    igualdad. En particular, presenta el contraste entre los argumentosde un autor que, al considerar la libertad como un valor absolu-to y su ciente en s mismo, seala la existencia de una relacin

    necesaria entre la igualdad ante la ley, la libertad individual y ladesigualdad social (Hayek); las tesis centrales de un liberal socia-lista que de ende la posibilidad de hacer compatible e interde -pendiente la libertad individual con la igualdad material (Bob- bio), y los presupuestos de un liberal agonista que sostiene que losvalores polticos de libertad e igualdad no slo son incompatiblese inconmensurables, sino que, adems, se encuentran sometidos ajuicios comparativos, estimativos y evaluativos que pueden exigirelecciones dolorosas (Berlin).

    Palabras clave

    Liberalismo socialista, liberalismo evolucionista, liberalismo ago-nista, libertad, igualdad.

    The liberalism is one and trino. Hayek, Bobbio and Berlin

    The author shows in this text the faces of liberal-ism when it tries to make compatibles, incom-patibles or absolutes the liberal values of liberty

    and equality. In particular, put forward the contrast between thearguments of an author that, considering liberty as a absoluteand suf cient value in itself, point out the existence of a nec -

    essary relation among equality before the law, individual libertyand social inequalities (Hayek); the core of the thesis of a liberalsocialist who defends the possibility of render compatible andinterdependent the individual liberty with the material equality(Bobbio), and the premise of an agonist liberal for whom libertyand equality as political values not only are incompatibles and in-commensurables, but also are subdued to comparative, estimativeand evaluative judgments that could require painful choices(Berlin).

    Key wordsSocialist Liberalism, evolutionist liberalism, agonist liberalism,liberty, equality.

    Resumen

    Abstract

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    2/29

    152 El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

    Introduccin

    El ttulo, aunque en principio puede sonar extrao, pretende se-alar que, contario a lo que muchos piensan, el liberalismo no tieneun solo rostro. El liberalismo como idea, como rgimen poltico ycomomodus vivendi no es una doctrina homognea, sino uno deesos fenmenos histricos de naturaleza mltiple que con gura unode los lenguajes polticos predominantes en la modernidad.

    Toda aproximacin al liberalismo debera estar precedida porun trabajo de precisin y de nicin conceptual del trmino. Sinembargo, y pasando por alto esta cuestin, en este texto se acoge la

    tesis que a rma que el liberalismo ha sido, casi desde sus orgenes,plural y variado. Los liberalismos viejos o nuevos son sumamentediversos, tanto en sus posiciones polticas como en sus infraestruc-turas conceptuales, y esa variedad de discursos ha enriquecido consi-derablemente la importancia poltica, el alcance moral y la agudezasociolgica del liberalismo (Merquior, 1993: 13).

    El carcter heterogneo y discontinuo de la tradicin liberal hasido reconocido por otros autores. John Gray, por ejemplo, seala

    que no puede hablarse de una tradicin liberal homognea ya quelos regmenes liberales no pueden ser identi cados por un conjuntode propiedades esenciales y los pensadores liberales no se asemejanpor tener ideas comunes.

    La opinin de John Gray es que en el liberalismo siempre hancoexistido dos tradiciones. Aquella que busca el consenso racionalen torno a un modo de vida ideal, respalda la convergencia ltimade nes humanos y concibe los valores liberales como un medio de

    llegar a una civilizacin universal y, aquella otra, que parte del he-cho fctico de que en el mundo coexisten muchos modos de vida yregmenes que por lo general son rivales y encarnan valores en con-icto. En esta segunda tradicin el liberalismo se presentara comoun proyecto de coexistencia que permite que individuos y comuni-dades con valores e intereses en con icto puedan convivir en paz.(Gray, 2001: 36 y ss).

    En una lnea similar a la de Gray, Ronald Dworkin consideraque existen varias razones para poner en duda que elliberalismosea

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    3/29

    153

    una teora poltica distintiva y uniforme. La primera razn sea-la que hoy los polticos, los de profesin, tienden cada vez menosa identi carse con el adjetivo liberal. La segunda a rma que losprincipios de abolengo exclusivamente liberal son cada vez mscompartidos por tradiciones no liberales y legitimados por todos losregmenes polticos que quieran de nirse como regmenes polticosdecentes. La tercera anota que las banderas liberales, frecuente-mente asociadas a la igualdad jurdica, la libertad de expresin, laseguridad personal, la inhumanidad de las guerras, la lucha contra lasegregacin, entre otras, se han convertido en causas de sectores noliberales (Dworkin, 2003: 9-13).

    La lectura que se ofrece en este texto, seala que, a pesar de lafalta de uniformidad y de la imposibilidad para ofrecer una de ni -cin unvoca, es posible reconocer un ncleo central en el proyec-to poltico y los co del liberalismo. Este ncleo est constituidopor la defensa radical del individuo, de la libertad respecto de lacoaccin, de la igualdad jurdica y de la seguridad personal, y se en-cuentra asociado con banderas como: la formulacin de un gobiernoconstitucional con poderes divididos y limitados, la preocupacinhacia los problemas de la tolerancia, la paz universal, la coexistenciapac ca, la estabilidad de los regmenes democrticos, los derechoshumanos universales y el respeto por las convenciones blicas elius in bello. Aqu el liberalismo se muestra comoUno .

    Esta lectura asume que el carcter nico y distintivo del libe-ralismo deriva de la formulacin de un sistema ideal de principiosliberales que pretenden tener una autoridad universal. Con todo,

    cuando los valores liberales son sometidos a una suerte de raciona-lismo crtico stos devienen problemticos y divergentes. En otraspalabras, los complejos rostros del liberalismo aparecen cuando al-gunos autores intentan determinar el carcter armnico, compatiblee interdependiente de ciertos valores o cuando otros autores ponenel acento en algunos ideales como si tuvieran un valor absoluto y pre-eminente. Sin lugar a dudas, uno de los con ictos poltico divisivos alinterior del liberalismo est relacionado con las demandas enfrentaspor la libertad y la igualdad.

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    4/29

    154

    La manera como cada uno de los autores liberales desarrolla yresuelve la dicotoma existente entre la libertad y la igualdad, ma-ni esta y con gura los mltiples y complejos rostros de un pensa -miento liberal en el cual es posible encontrar, por ejemplo, autoresanti-igualitarios como Robert Nozick y F. A. Hayek que, en su de-fensa radical de la libertad negativa, rechazan la igualdad materialy social; autores liberales igualitarios como John Rawls y RonaldDworkin que matizan los contenidos de la libertad negativa a partirde la consideracin del principio moral del respeto igual y autoresdel liberalismo social, como John Dewey, Bertrand Russell, PhilippeVan Parijs, Jrgen Habermas y Norberto Bobbio, que amplan el

    concepto al desarrollar la nocin de libertad como poder positivo.En lo que sigue se presentar el contraste entre tres represen-tantes contemporneos del pensamiento liberal, Friedrich A. Ha-yek, Norberto Bobbio e Isaiah Berlin. Espec camente se esbozarnlos argumentos centrales de un autor que al considerar la libertadcomo valor absoluto y su ciente por s mismo, seala la existenciade una relacin necesaria entre la igualdad ante la ley, la libertadindividual y la desigualdad social. Se presentan las tesis centrales

    de otro autor, un liberal socialista, que de ende la posibilidad dehacer conmensurables e interdependientes los valores polticos dela libertad con los de igualdad material y, los presupuestos de otroautor que muestra la imposibilidad de hacer compatibles y conmen-surables dichos valores y que seala que todos los nes humanos seencuentran sometidos a juicios comparativos, estimativos y evalua-tivos que pueden exigir elecciones dolorosas. El contraste entrelos tres autores permitir mostrar tres caras del pensamiento liberal: la

    evolucionista, la socialista y la agonista.

    El rostro evolucionista del liberalismo. Hayek y elsistema de libertad natural

    Hayek ha sido incluido, y no injustamente, en el extremo de losultra liberales. Sus tesis sobre el liberalismo como partido de la liber-tad son bastante radicales y polmicas. Su pensamiento se mueve endos lneas que parecen contradictorias: por un lado la lnea clsica

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    5/29

    155

    liberal del gobierno limitado, los mercados libres y el gobierno dela ley, y por otro, la presentacin de un liberalismo evolucionista,respetuoso de la tradicin.

    Para Hayek el prototipo del liberalismo verdadero es aquel queculmina con la Revolucin Gloriosa de 1688 y que proviene delliberalismo ingles clsico de losviejos whigs -Locke, Adam Smithy Madison. Desde su concepcin aquellos liberales que pretendendemocratizar al liberalismo son socialistas y las formulaciones libe-rales-contractualistas son resultado de la fatal arrogancia de quienesdesconocen que el orden se genera de manera espontnea y evolu-tiva.

    EnLos fundamentos de la libertadHayek presenta, sin lugar a du-das, el tratado liberal ms completo sobre la libertad individual. Lapremisa de este trabajo es clara y enftica la libertad no es mera-mente un valor singular, sino la fuente y condicin necesaria de lamayora de los valores morales (Hayek, 1997: 20). Ligado al carc-ter de la libertad como valor preeminente se encuentra la unidadde la libertad y por tanto del liberalismo. Para Hayek, si se aceptala libertad ha de aceptarse con todas sus consecuencias. En ese sen-tido, liberalismo poltico y liberalismo econmico son inseparablesya que

    El principio fundamental por el que la intervencin coactiva de la au-toridad estatal debe limitarse a garantizar el cumplimiento de las nor-mas establecidas [] priva al gobierno del poder de dirigir y controlarlas actividades econmicas de los individuos (Hayek, 2001: 72-73)

    La importancia de Hayek en la discusin sobre el con icto exis -tente entre los valores de la libertad individual y de la igualdad,radica, en primer trmino, en la clara diferenciacin que estableceentre la nocin de la libertadcomo ausencia de coaccin y la nocinde la libertad como poder efectivo y, entre la igualdad respecto delas reglas de juego que jan las posiciones relativas de los distintosindividuos -la igualdad ante la ley o libertad igual-, y los resultadosparticulares que se derivan de este proceso para los individuos -laigualdad en los puntos de llegada o la igualdad de hecho- (Hayek,

    1997: 28). En segundo trmino su importancia se encuentra en la

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    6/29

    156

    formulacin de una teora poltica y los ca en la que se elogia elvalor de la libertad por encima de otros valores polticos.

    El propsito de este autor es doble, por un lado, presenta unaamplia y rigurosa exposicin de los diversos usos del concepto li- bertad para mostrar las fuentes corrientes de confusin respecto desu signi cado y, por otro lado, muestra su carcter de principio abso -luto y coherente por s mismo. Su tesis es simple: la libertad que elliberalismo reivindica exige, pues, la eliminacin de los obstculosde naturaleza social que encuentren los esfuerzos individuales, perono la concesin de ventajas concretas por parte de la autoridad es-tatal (Hayek, 2001: 75).

    Hayek se inscribe en la tradicin clsica o evolucionista1

    delpensamiento liberal. Esta tradicin, que proviene del liberalismo in-gls del siglo XVIII, establece como axioma bsico o punto de partidala concepcin de la libertad individual, exclusivamente, como ausen-cia de coaccin, es decir, como aquel estado en virtud del cual unhombre no se haya sujeto a coaccin derivada de la voluntad ar- bitraria de otro o de otros (Hayek, 1997: 26). De esta acepcinde la libertad, que pretende ser taxativa, el autor deriva tanto una

    concepcin del liberalismo como una acepcin de la igualdad.La igualdad debe entenderse, solamente, como igualdad en lospreceptos legales generales y en las normas de conducta social. Deesta nocin restrictiva de la igualdad se derivan tres argumentos: elprimero seala que la igualdad ante las normas jurdicas es la nicaclase de igualdad que conduce a la libertad individual y que cabe im-plantar sin destruir la propia libertad. El segundo argumento a rmaque la libertad no tiene nada que ver con otro tipo de igualdad y ella

    produce, incluso, desigualdades en muchos aspectos. Las desigual-dades deben ser consideradas, de acuerdo a este argumento, como elresultado necesario de un ejercicio de libertad individual previo quedemuestra que ciertas formas de vivir tienen ms xito que otras. El

    1 Hayek diferencia entre el liberalismo evolucionista y el liberalismo constructivista. El primero se basaen una interpretacin evolucionista de todos los fenmenos culturales y mentales, y en la concienciade los lmites de la capacidad de la razn humana. El segundo, llamado tambin racionalismo cons-tructivista, se apoya en una concepcin para la cual todos los fenmenos sociales, polticos y culturales

    son producto de un diseo deliberado (Hayek, 2001: 24-25). Un anlisis de la aplicacin del ordenespontneo en la vida moral y en la economa puede verse en (Gray, 1982).

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    7/29

    157

    tercer argumento seala que la libertad se relaciona con la posibili-dad que tienen los individuos de obrar o no obrar sin que otros pro-hban u obliguen el obrar de determinada manera. Este signi cadode la libertad nada tiene que ver con aquella acepcin que sealaque la libertad es, adems, ausencia de obstculos para la realizacinde nuestros deseos, o con aquella otra que plantea que la libertad serelaciona con un amplio mbito de realizaciones.

    El punto de partida de la teora poltica de Hayek es el anlisisdel mercado desde una perspectiva evolucionista2. Segn dicha pers-pectiva, el mercado y la naturaleza producen resultados que no sonsusceptibles de evaluacin moral, pues ellos no son el fruto de un

    diseo deliberado o de un acto de voluntad. La desigualdad materialy social, se constituye en el resultado del desarrollo espontneo delmercado y del ejercicio natural de la libertad. En este sentido, ladistribucin de recursos a travs del mecanismo de precios es moral-mente neutral, como la trayectoria de un huracn o la direccin delos vientos y, por tanto, no es un asunto susceptible de evaluacinmoral y no debe serlo de intervencin estatal3.

    En este sentido, resulta imposible para l realizar un ideal de

    igualdad material y de justicia distributiva, sin atentar contra elorden que se genera espontneamente cuando los individuos sonlibres de emplear sus conocimientos y capacidades naturales paraconseguir nes individuales. En el trasfondo de esta tesis se encuen -tra presente la idea segn la cual:

    El liberalismo se limita a exigir que el procedimiento, o sea las reglasdel juego por las que se jan las posiciones relativas de los distintosindividuos, sea equitativo (o por lo menos no inicuo), pero en modo

    alguno pretende que tambin sean equitativos los resultados particu-lares que se derivan de este proceso para los distintos individuos, yaque estos resultados dependeran siempre, en una sociedad de hombre

    2 Un orden espontneo se genera a s mismo a travs de las acciones de los distintos individuos y grupos,cada uno de los cuales persigue sus propios nes basndose en sus propios conocimientos. La gran ven-taja de un orden que se autogenera espontneamente, est dada por el hecho de que ese orden deja a losindividuos libres de perseguir sus propios nes, ya sean egostas o altruistas. Este tipo de orden no puedeestar sujeto a un control predeterminado, sino que debe con arse a la causalidad (Hayek, 2001: 77 y ss.).

    3 Las nicas funciones legtimas que puede asumir el Estado remiten al suministro de un marco institu-cional para el desarrollo libre y la promocin de aquellos servicios que el mercado no puede proveer.Los

    poderes coactivos del gobierno deben limitarse a la aplicacin de reglas de mera conducta gobierno dela ley y Estado limitado en poder.

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    8/29

    158

    libres, no slo de los propios individuos, sino tambin de otras muchascircunstancias que nadie est en condiciones de determinar ni de pre-ver en su totalidad (Hayek, 2001: 86).

    En el marco de esta tesis resulta claro, entonces, que cualquierataque al desenvolvimiento espontneo de los individuos en el mer-cado debe interpretarse como un ataque a la sociedad de individuoslibres y autnomos. Un ideal de igualdad que trascienda la igualdadjurdica y que exija replantear la funcin clsica atribuida al Estado,constituye un paso en el camino hacia la servidumbre. Para elrostro evolucionista del liberalismo, el ideal de la igualdad materialdescansa en la formulacin y defensa de un principio de distribucin

    que conduce a una inaceptable violacin de los postulados bsicosde la sociedad libre y de la coaccin estatal mediante leyes iguales.Desde la mirada de Hayek, los riesgos que implica este paso hacia laservidumbre, hacen preferible los males de la desigualdad econmi-ca que el uso de la coaccin estatal para imponer una distribucinms igual o ms justa (Hayek, 1997: 111 y ss.).

    Desde tal perspectiva toda limitacin poltica de la economa demercado se considera un injusto recorte de las libertades. En el fon-

    do de esta postura se encuentra la intencin de sealar que la esen-cia de la libertad se encuentra en la espontaneidad y en la ausenciade coaccin y, por tanto, que las desigualdades econmicas y socialesno deben ni pueden mitigarse, pues toda poltica orientada a este napela a criterios de uniformidad que estorban a la igualacin inicial yreducen el campo de la libertad que la igualdad ante la ley otorga a losindividuos (Hayek, 1950: 143-145).

    El argumento de Hayek apunta a rescatar un signi cado de la

    libertad que pueda describir una cosa y slo una cosa, y que puedaser claramente diferenciado de otros estados apetecibles como losde justicia, igualdad o bienestar social. Esto signi ca que la pon-deracin entre las posibilidades fsicas, en virtud de las cuales unapersona puede elegir en un momento dado, y la cuestin de cuntasvas de accin se abren para una persona, son asuntos que no tienedirecta relevancia para la libertad (Hayek, 1997: 27-28). De mane-ra clara, este autor a rma que

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    9/29

    159

    El que una persona sea libre no depende del alcance de la eleccin,sino de la posibilidad de ordenar sus vas de accin de acuerdo con susintenciones presentes o de si alguien ms tiene el poder de manipularlas condiciones hasta hacerla actuar segn la voluntad del ordenancista

    ms bien que de acuerdo con la voluntad propia (Hayek, 1997: 28).Coaccin se entiende aqu como control por parte de otro de

    los principios que fundamentan la accin individual, es decir, comoaquel mecanismo a travs del cual las acciones y nes de un hombrese encaminan a servir a la voluntad de otro o a cumplir los nes deotro hombre.

    La intencin del autor deFundamentos de libertad es cuestionaraquella tradicin que emplea el concepto de libertad para describirla facultad fsica de hacer lo que uno quiera, el poder de satisfacernuestros deseos o la capacidad de escoger entre las alternativas quese abren ante nosotros (Hayek, 2007: 32), es decir, aquella tradi-cin que postula que la libertad es poder hacer lo que la libertadnegativa permite hacer. En esencia, su discusin es con el conjuntode autores que desde posturas socialistas y liberales igualitarias pos-tularon que la libertad es poder efectivo para una actuacin espec ca,es decir, con aquellos autores que sealan que las libertades efectivasde un ser humano dependen de los poderes de actuacin que los orde-namientos sociales existentes con eren (Dewey, 1996: 141).

    En sus argumentos, Hayek acepta que la libertad signi ca au -sencia de coaccin, sin embargo, ausencia de coaccin no signi -ca ausencia de obstculos para la realizacin de nuestros deseos oausencia de facultades, es decir, no acepta la tesis que a rma quela ausencia de provisiones materiales constituye una prdida de la

    libertad o de la vala de la libertad ante los ojos de los individuos. Ensus palabras: el cortesano que vive lujosamente, pero subordinado ala voz y mandato de su prncipe puede ser mucho menos libre que elpobre labriego o artesano; menos capaz de vivir su vida y de escogersus propias oportunidades (Hayek, 1997: 34).

    Lo que pretende mostrar es que no puede confundirse la liber-tad con la igualdad de hecho y, fundamentalmente, que no puedeconfundirse la existencia de una coaccin arbitraria, que impide que

    una persona acte de acuerdo con sus planes y decisiones, con la

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    10/29

    160

    existencia o no de un conjunto de circunstancias sociales. La clavecentral del pensamiento de Hayek gira en torno a una de nicin decampo libre de accin individual, en la cual se advierte la existenciade una clara diferencia entre, la posibilidad de elegir o no un deter-minado camino, y la existencia real de muchas o muy pocas vas deeleccin.

    Es indudable que ser libre puede signi car libertad para morir de ham - bre, libertad para incurrir en costosas equivocaciones o libertad paracorrer en busca de riesgos mortales. En el sentido que usamos el tr-mino, el vagabundo que carece de dinero y que vive precariamentegracias a una constante improvisacin, es ciertamente ms libre queel soldado que cumple el servicio militar forzoso, dotado de seguridady relativo bienestar. Pero si la libertad, puede, por tanto, no parecersiempre preferible a otros bienes, es un bien concreto que necesita unnombre preciso (Hayek, 1997: 35).

    Los dos ejemplos enunciados permiten mostrar que, para la con-cepcin de la libertad que subyace al liberalismo evolucionista deHayek, las razones a favor de la libertad, que exigen que el gober-nante trate a todos igualmente, no pueden presumir que los hom- bres sean de hecho iguales. La defensa de la libertad proclama quelos individuos son diferentes y su fundamento se encuentra en dichapresuncin. La tesis central de la que parte este autor a rma, enton -ces, que la igualdad ante la ley, que la libertad requiere, conducea la desigualdad material (Hayek, 1997: 111) y, por tanto, que elEstado debe tratar igualmente a todos y no utilizar la coaccin, quele es propia, con la intencin de igualar a los individuos. Segn esteplanteamiento, los postulados libertarianos exigen caractersticas

    importantes de igual libertad (por ejemplo inmunidad frente a la in-terferencia de otros), pero no aceptan alguna variable de la igualdadque pretenda ir ms all de libertad igual.

    La aspiracin por la libertad se expresa, de este modo, como lanecesidad de que los caminos estn abiertos a quien tiene talento,es decir, como la necesidad de eliminar todo impedimento que seafruto de una discriminacin jurdica entre los individuos en razn desu raza, etnia o sexo. Sin embargo, con esta frmula no se pretende

    igualar a los individuos en trminos de sus posibilidades, pues para

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    11/29

    161

    Hayek la ilimitada variedad de la naturaleza humana, el amplio gra-do de diferencias en la potencialidad y capacidad de los individuos,es una de las ms precisas realidades que ofrece la especie humana(Hayek, 1997: 110). Cualquier pretensin de igualar o de uniformarla naturaleza humana conduce, de este modo, a la desvalorizacin delos ideales bsicos de la libertad.

    La tradicin liberal, que pretende ir ms all de esta supuesta le-gitimidad de las desigualdades naturales, acepta que cada cual poseeun derecho legtimo derivado de las circunstancias favorables y pue-de usar estas circunstancias libremente de acuerdo a los proyectosque elija. Sin embargo, para los autores ubicados en la perspectiva

    del liberalismo igualitario el resultado natural de la invariable e in-modi cable naturaleza humana exige reconocer, al mismo tiempo,que aquellos que no poseen las ventajas naturales y sociales tambintienen legitimo derecho sobre las ventajas sociales y naturales de losms favorecidos y, por tanto, estos ltimos debern tener una obli-gacin moral hacia los menos favorecidos. John Rawls, por ejemplo,ofrece un concepto de igualdad que intenta superar y corregir el idealde igualdad postulado por el sistema de la libertad natural. La inclusin

    del principio de la justa igualdad de oportunidades, del principio de ladiferencia y de la teora de los bienes primarios, da forma a una teorade la justicia que se opone al liberalismo econmico. El propsito deeste autor remite, en ltimo trmino, a la formulacin de una teorade la justicia en la cual es posible encontrar instituciones sociales concapacidad de entender, equilibrar y satisfacer los ideales de la libertady de la igualdad (Rawls, 2002: 177 y ss).

    El rostro social del liberalismo: Bobbio y la compati -bilidad de valores

    Si uno intenta hacer un juicio general sobre las especi cidadesdel pensamiento poltico de Bobbio, podra a rmar que este autorpostula una teora liberal de la poltica marcada por cuatro parti-cularidades. La primera, se re ere al desarrollo de un modelo deanlisis que intenta resolver las cuestiones del mundo poltico con-temporneo a travs de la recuperacin de sus grandes dicotomas:

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    12/29

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    13/29

    163

    Estado limitado en poder, neutral y laico frente a las concepcionesparticulares de ver el mundo. Se trata de un liberalismo poltico quepresenta el modelo ms completo de reconciliacin entre el libera-lismo y la democracia. Pero tambin es un liberalismo social que re-cuerda las tesis de John Stuart Mill, John Dewey y Bertrand Russellsobre la con uencia de doctrinas tradicionalmente antagnicas.

    Lo que se pretende sealar es que Bobbio, apelando a las ins-tituciones y juicios morales de la democracia liberal, nica demo-cracia pensable y posible para l, introdujo innovaciones tericas ymetodolgicas para inaugurar aquella cara del pensamiento liberalque se conoce como el liberalismo socialista. Su obra ofrece un ros-

    tro amable y ecunime del liberalismo en el cual se renuevan,a travs de ciertas apelaciones al pensamiento socialista, los viejosdebates ticos, morales y polticos sobre los derechos, la libertad y lajusticia (Anderson, 1988: 28).

    Para entender los ejes centrales de esta propuesta debemos partirde tres premisas recurrentes en la obra de este autor. La primera se-ala que la libertad negativa, es decir, la libertad como no coaccinla libertad liberal es un antecedente de la libertad como autono-ma postulada por la tradicin democrtica y de la libertad comoposibilidad efectiva de poder postulada por la tradicin socialista.La segunda anota que en un Estado democrtico y constitucional dederecho, estas tres nociones de libertad se encuentran vinculadasnecesariamente con tres nociones de igualdad: la igualdad jurdica,la igualdad poltica y la igualdad social. La tercera a rma que elindividualismo es constitutivo del liberalismo y de la democracia.

    Por ello, en la base de las democracias modernas se encuentran lasdeclaraciones de derechos humanos, que incluyen a los derechossociales.

    Lo primero que se debe sealar, entonces, es que Bobbio aceptala premisa segn la cual en el cuadro axiolgico de la cultura occi-dental existen signi cados relevantes, aunque contrapuestos, de lalibertad: la libertad del obrar y la libertad del querer, la libertad delindividuo y la libertad de la colectividad, la libertad como indepen-dencia y la libertad como autonoma, la libertad frente al Estado y

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    14/29

    164

    la libertad en el Estado, la libertad antigua y libertad moderna (Bo- bbio, 1993: 97 y ss.). Este autor se inscribe en la tradicin tericaque de ende un ideal individualista de la sociedad y una libertad quese de ne frente al Estado o, ms exactamente, frente a un posibleabuso del poder por parte del Estado. Sin embargo, su gran parti-cularidad, en relacin con otros autores liberales, es que no abando-na la defensa de los derechos polticos y no permite que stos seaninstrumentalizados en funcin de las libertades individuales. Bobbio,no reduce la poltica a una funcin de mediacin entre el aparatoestatal y la sociedad. En este punto aparece su defensa de la libertadpositiva y su tesis acerca de la necesidad de democratizar al liberalis-

    mo (Bobbio, 2003: 297).Ahora bien, Bobbio ha sido claro y enftico en sealar, que noslo es necesariodemocratizar al liberalismo sino que tambin es ne-cesarioliberalizar la democracia.Su propuesta teora y poltica expre-sa, entonces, una exigencia permanente de lucha contra el abuso delpoder. Como exigencia de liberacin, ella pone lmites a toda formade poder arbitrario y a toda forma de poder que pretenda atentar, re-primir o desconocer las libertades individuales. Ello incluye, claro est,las formas de poder de la sociedad entendida como un todo orgnico,es decir, las formas democrticas de tamiz iliberal. En relacin conesto, la doctrina liberal promulgada por Bobbio se presenta como teo-ra del Estado limitado por el principio de la garanta de los derechosindividuales y por el principio del control de los poderes pblicos porparte de los individuos. (Bobbio, 2003: 300).

    Una democracia pura, que no respete los principios clsicos del

    liberalismo, es decir, que no respete ni reconozca la libertad indivi-dual, estar condenada a convertirse en un rgimen iliberal y des-ptico. ste es el punto de partida de Bobbio y sobre l no dejaposibilidad de discusin. Justamente, este autor es consciente de lanecesidad deliberalizar los regmenes democrticos,es decir, de la ne-cesidad de hacer compatibles la libertad y la igualdad, las libertadesindividuales y las libertades polticas y de la necesidad de ampliar lademocracia a travs de la democratizacin de la sociedad. Su ataqueno es contra la teora rousseauniana de la democracia, es decir, no

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    15/29

    165

    es solamente contra la democracia de los antiguos, sino tambin yfundamentalmente contra la democracia de los posteriores, es decir,contra los ideales democrticos que entendieron como superados lospostulados del liberalismo4.

    Siguiendo las tesis de Bertrand Russell en las que seala que losideales polticos deben y solo deben estar basados en ideales de vidaindividual, Bobbio formula un ideario poltico que reconcilia el li- beralismo con la democracia. En la historia del Estado moderno

    Las dos libertades estn estrechamente ligadas y en conexin [y] alldonde cae la una cae la otra. De manera ms precisa, [este autor seala]que sin libertades civiles, como libertad de prensa y de opinin, comola libertad de asociacin y de reunin, la participacin del pueblo enel poder poltico es un engao; pero sin participacin popular en elpoder, las libertades civiles tienen pocas probabilidades de durar (Bo- bbio, 1993: 117).

    Sin embargo, debe quedar claro aqu que Bobbio considera alEstado liberal limitado en poder y a las libertades negativas, quesubyacen a los catlogos de derechos humanos, como las premisashistricas y las premisas legales incuestionables del liberalismo so-cialista. En otras palabras, asume que el Estado liberal y el Estadodemocrtico son interdependientes, pues el liberalismo proporcionalas bases necesarias para el ejercicio apropiado del poder y la de-mocracia garantiza la existencia y la persistencia de las libertadesfundamentales (Mouffe, 1999: 128).

    Tal como se mostr aqu, la tesis libertariana -formulada porHayek- lleva implcita la a rmacin segn la cual carece de signi -cado el problema de si la consecuente distribucin de recursos o

    de recompensas es justa o no, pues el ejercicio sin cortapisas de lalibertad conduce, inevitablemente, a la desigualdad natural en losresultados y, en este contexto, la pregunta por la justicia distribu-tiva es irrelevante. De manera particular, Hayek considera que lalibertad econmica -la libertad de mercado- es un prerrequisito y un

    4 Aqu es ilustrativo el debate de Norberto Bobbio con Della Vollpe cuando critica los problemas de lademocracia no liberal o totalitaria y se opone a los argumentos que sealan que la verdadera libertad esuna libertad distinta a la formulada por las diversas doctrinas liberales. Al respecto: (Bobbio, 2003: 293y ss.).

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    16/29

    166

    presupuesto central de las libertades personales y las libertades po-lticas. En el marco de su teora, la libertad individual y el mercadovan al unsono y, por tanto, la intervencin estatal, con polticassociales o planes de redistribucin, es interpretada como un meca-nismo perverso que elimina al mercado y priva a los ciudadanos desu autonoma. Optar por la defensa de un Estado que intervenga enla economa para corregir las desigualdades sociales signi ca, enton-ces, abandonar aquella libertad en materia econmica, sin la cualjams existi en el pasado libertad personal ni poltica, es decir,signi ca desconocer que la libertad econmica es una condicin ne -cesaria de las dems libertades.

    En abierta oposicin con esta postura, los argumentos de Bobbiopretenden rescatar tres ideas bsicas sobre la relacin de comple-mentariedad entre los valores polticos de la libertad y de la igual-dad. La primera idea seala que la libertad negativa la libertadrespecto a la coaccin arbitraria es un antecedente de la libertadpoltica y, tambin, de la libertad como poder efectivo, es decir, dela libertad entendida como la posibilidad que tienen los individuosde poseer en propiedad o como parte de una propiedad colectiva

    los bienes su cientes para gozar de una vida digna. La segunda ideaa rma que los tres tipos o momentos de la libertad la libertad nega -tiva, la libertad positiva y la libertad como poder efectivo- correspon-den con tres tipos de igualdad. A la libertad negativa corresponde laigualdad jurdica, que consiste en el hecho de que todos los ciuda-danos son jurdicamente reconocidos por el ordenamiento legal; ala libertad positiva corresponde la igualdad poltica, que consiste enla igualdad para acceder a la participacin poltica y, nalmente, a

    la libertad como poder efectivo corresponde la igualdad social, que seencuentra relacionada con la igualdad de oportunidades y con el re-conocimiento de los derechos humanos sociales como condicionesindispensables para el ejercicio de la libertad.

    Recuperando las tesis aristotlicas sobre la justicia, Bobbio sesita en un punto medio entre aquellas doctrinas que exaltan la li- bertad del individuo, reducen la igualdad a la igualdad ante la ley ydespojan a la sociedad de toda bsqueda de un principio de justiciadistributiva, y aquellas doctrinas que pretenden igualar econmica

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    17/29

    167

    y polticamente a los individuos, sacri cando las libertades indivi -duales (Bobbio, 2003: 346). En el fondo de la re exin de Bobbio,se encuentra, de manera implcita, la preocupacin del autor porla legitimidad poltica del Estado liberal y por el desarrollo de unaamplia concepcin de la justicia que sirva de marco normativo parapensar un modelo desociedad justa compuesta por individuos libres.

    La reconstruccin que hace Bobbio del concepto de igualdadpuede resumirse en una crtica y en una propuesta. La crtica sinteti-za la oposicin de Bobbio al libertarianismo. Desde la perspectiva deeste autor el gran problema del liberalismo libertariano es la defensaque hace de la idea del Estado mnimo y del libre mercado, y de un

    concepto restrictivo de igualdad que excluye de la agenda pblicalas cuestiones sociales y reduce la funcin del Estado a la proteccinde las libertades individuales.

    La propuesta seala que es necesario recuperar los derechos hu-manos sociales, pues ellos constituyen las condiciones objetivas,materiales y originarias necesarias y los marcos de posibilidad parapoder hacer lo que la pura y simple libertad negativa permite hacer(Bobbio, 2003: 541). Norberto Bobbio introduce aqu la re exin

    contempornea sobre la libertad real, es decir, la re exin que seocupa de mostrar que el ejercicio de la libertad requiere la facultadpara hacer y, fundamentalmente, requiere condiciones materiales yeconmicas para poder hacer.

    El planteamiento central desarrollado por el autor italianoapunta a demostrar que si no existen unas condiciones econmicasy sociales mnimas y aceptables, las libertades pierden su valor antelos miembros de la sociedad. La reconstruccin y ampliacin del

    sistema de los derechos fundamentales, como supuestos centralesde un real ejercicio de la libertad y de la democracia, constituyen la base para poder a rmar que la legitimidad poltica del Estado requie -re de individuos que posean unas condiciones econmicas y socialesmnimas, pues slo as es posible un real ejercicio de las libertadesindividuales y polticas.

    El autor deTeora general de la poltica, al igual que todos los au-tores que han apelado al reconocimiento de los derechos humanossociales para resolver la dicotoma existente entre la libertad y la

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    18/29

    168

    igualdad, a rma que estos son derechos imperfectos, pues su realiza-cin exige condiciones objetivas difciles de alcanzar. Tambin reco-noce que la gran particularidad de estos derechos es que desafan losmarcos estrictamente constitucionales aun los ms progresistas,pues su garanta y proteccin es un asunto ms poltico que jurdico,en la medida en que exige que el Estado asuma obligaciones y de- beres de hacer (acciones positivas), es decir, acciones polticas quetienen como trasfondo la reformulacin del papel tradicionalmenteasignado al Estado por la tradicin liberal. Al respecto seala:

    Si slo existieran las libertades negativas todos seran igualmente libres,pero no todo tendran igual poder. Para equiparar a los individuos [sinnivelarlos] es necesario que se les reconozca otros derechos como losderechos sociales, derechos capaces de colocarlos en condicin de te-ner el poder de hacer aquello que es libre de hacer. El reconocimientode estos derechos requiere la intervencin directa del Estado, hasta talpunto que tambin se denominan derechos de prestacin, precisamenteporque requieren, a diferencia de los derechos de libertad, que el Estadointervenga mediante prestaciones adecuadas (Bobbio, 2003: 541).

    Con lo dicho hasta aqu, resulta ms o menos evidente la a rma -cin de Perry Anderson (1988) sobre la manera en que se entrecru-zan en el pensamiento de Bobbio, el liberalismo, la democracia y elsocialismo. Como liberal, este autor es un defensor de las libertadesnegativas. Como demcrata, es un defensor de la libertad poltica. Ycomo liberal social es un defensor de un igualitarismo que propugnapor la libertad respecto de la necesidad y la miseria y por la consti-tucionalizacin de los derechos humanos sociales.

    En la teora poltica de Bobbio, un modelo de democracia para

    las sociedades actuales supone la recuperacin del sujeto modernopara la vida pblica y poltica y, complementariamente, el estable-cimiento de muros de contencin frente a los imperativos sistmi-cos del mercado y la burocracia. En este punto, este autor invocala necesidad de una democratizacin del liberalismo, es decir, pos-tula la necesidad de democratizar a la sociedad civil y de incluirlos derechos sociales en la agenda poltica, pues ellosconstituyen el

    presupuesto o la precondicin de un efectivo ejercicio de los derechos de

    libertad. En los trminos simples de Bobbio: una persona instruida

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    19/29

    169

    es ms libre que una inculta; una persona que tiene un empleo esms libre que una desocupada, una persona sana es ms libre queuna enferma (Bobbio, 2003: 545).

    Con la recuperacin del principio de la igualdad material, a tra-vs de los derechos humanos sociales, Bobbio postula una nocinde igualdad que garantiza la autonoma privada de los sujetos, elreconocimiento de sus libertades individuales y, al mismo tiempo,unas condiciones materiales para desarrollar sus planes particularesde vida. Esta defensa de la poltica igualitaria se construye a partirde la revisin, que hace el autor, de los argumentos liberales a favorde la justicia y de las crticas razonables formuladas por las teoras

    igualitarista y libertaria -no igualitarista-. En este sentido, este autorrecuerda que las diversas formas de socialismo liberal o de libera-lismo social son ambiguas, tericamente hablando, lo que no quitaque el problema de conciliar el propsito de la libertad de los indivi-duos con el de la sociedad justa sea un problema real. Sin embargo,precisamente porque es un problema que puede ser resuelto slo entrminos prcticos, ninguna solucin (excluyente) es ptima y me-nos an de nitiva (Bobbio, 2003: 346).

    El rostro agonista del liberalismo. Berlin y la incom -patibilidad de los valores

    El liberalismo de Berlin es altamente espec co, al menos, entres sentidos. En primer lugar, se trata de un liberalismo que poneel acento en la libertad de eleccin, en la eleccin como tal, y noen la eleccin racional entre bienes genuinos y opciones racionales.

    La concepcin de Berln segn la cual una de las cosas ms valiosasde la vida humana es la eleccin por la eleccin misma, no slo laeleccin de lo que es bueno (Berlin, 2004: 48), sita a la libertadcomo condicin de posibilidad para que los seres humanos se consti-tuyan a s mismos en toda su diversidad. Berlin ofrece, de este modo,una cara del liberalismo en la cual la libertad adquiere un estatuspreeminente (Berlin, 1998: 242). En segundo lugar, se trata de unrostro del liberalismo que como el de Bobbio y el de Hayek mantienela preocupacin por la presencia de cualquier limitacin, intromisin

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    20/29

    170

    o coaccin sobre el mbito de la eleccin individual. Esta caractersti-ca, tpicamente liberal, se explicita en el lugar otorgado a las libertadesnegativas, en la apelacin berliniana a cierto quietismo poltico, y enla denuncia de los peligros que para la libertad individual puede repre-sentar su identi cacin con la autoridad. En tercer lugar, se trata deuna concepcin liberal que pone el nfasis en el pluralismo de los va-lores, es decir, se trata de una concepcin que reconoce el hecho deque los nes humanos son mltiples, no todos ellos conmensurables, yestn en perpetua rivalidad unos con otros (Berlin, 1996: 242).

    Es ese ltimo aspecto el que otorga las caractersticas ms espe-c cas al liberalismo berliniano. Este autor trasciende el ideal liberal

    de la existencia de unos principios que se conciben como aplicacio-nes universales, e inaugura, tal como lo seala John Gray, una co-rriente en la cual la tolerancia se valora como una condicin de pazy los diversos, divergentes y con ictivos modos de vida se apreciancomo las marcas de la pluralidad. Se trata de un rostro del liberalis-mo que no elimina la posibilidad del con icto y de la tragedia en lavida personal y social. Este rostro liberal surge del reconocimientoal hecho de que los seres humanos se enfrentan por lo general a la

    eleccin entre nes igualmente ltimos y ante exigencias igualmen -te absolutas. La realizacin de algunos de esos nes implica inevita - blemente el sacri cio de otros (Gray, 2001: 18 y ss).

    En contraste con el liberalismo bobbiano que pretende hacercompatibles y conmensurables los valores de libertad, igualdad y jus-ticia y, en contra va a las tesis libertarianas que otorgan un valorpreeminente a la libertad individual, Berlin ofrece una propuesta enla que se rechazan las jerarquas de valores y se a rma por tanto el

    pluralismo. Este liberalismo que ha sido adjetivado por John Graycomo liberalismo agonista5, representa un liberalismo renovado enel que est siempre presente la competencia y la rivalidad entre talesvalores (Gray, 2001: 15).

    Berln fue enftico en sealar que dentro de una sociedad plu-ralista el con icto de valores es inevitable, pues los valores polticos

    5 Gray denomina liberalismo agonista a la perspectiva que asume que en la vida poltica y moral abun-

    dan las opciones radicales entre bienes y males rivales para las que la razn nos deja en suspenso y en lascualquier cosa que se haga implica prdida y, en ocasiones tragedia. (Gray, 1996: 7).

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    21/29

    171

    no pueden conciliarse ni combinarse. Sin embargo, estas ideas no loabrumaron y, por el contrario, estimularon su disposicin liberal y sucreencia en el hecho de que el mrito de una sociedad libre es queacepta gran variedad de opiniones en pugna sin necesidad de supri-mirlas (Berlin & Jahanbegloo, 1993: 189), y que en una sociedad detipo pluralista no se pueden eludir los compromisos con unos mnimosgrados de tolerancia, decencia y legitimidad.

    La idea de una solucin perfecta y de una nica respuesta acmo deben vivir los hombres, resulta conceptualmente incoheren-te y polticamente indeseable. Sus tesis contra el monismo moral ypoltico, sealan que las cuestiones humanas son demasiado com-

    plejas para las formulas jas y las soluciones claras (Berlin, 1992:363). En la vida poltica, social y cultural, Berlin pre ere lo mltiplea lo uno. De all que una de sus grandes convicciones sea aquellaque seala que no todos los valores positivos en los que los hombrescreen son compatibles, y que la persecucin de la armona total y delestado perfecto son una falacia en ocasiones fatal para las libertadesindividuales.

    Las concepciones de Berln sobre la libertad, la igualdad y el

    pluralismo de los valores se apoyan en la tesis segn la cual notodos los valores supremos perseguidos por la Humanidad, ahora yen el pasado, son necesariamente compartibles entre s (Berlin y Jahanbegloo, 1993: 81). Es justamente, este punto de partida, el quehace posible que el liberalismo berliniano sea adjetivado como libe-ralismo agonista. Las caractersticas distintivas de la postura de Ber-lin pueden resumirse en tres niveles de aplicacin: En primer lugar,los valores sonmuchos y no formas derivadas de un nico valor o deun conjunto jo de valores. En el seno de una moralidad o cdigode conducta existe una variedad de valores. As, por ejemplo, lalibertad es distinta de la igualdad, de la justicia, de la felicidad y deotras cosas que los hombres persiguen como nes en s mismos. Ensus palabras:

    la igualdad es un valor entre muchos: el grado en que es compatiblecon otros nes, depende de la situacin concreta, y no puede deducirsede ninguna clase de leyes generales; no es ni ms ni menos racionalque cualquier otro principio ltimo; ciertamente, es difcil entender lo

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    22/29

    172

    que se quiere signi car cuando se le considera racional o no racional.Sin embargo el principio de que cada hombre debe contar por uno, ynada ms, requiere que le presentemos un poco ms de atencin antesde abandonarlo nalmente como uno de los nes perseguidos por los

    hombres, que no necesita ni de explicacin ni de justi cacin, siendo,como es, l mismo, lo que explica a otras reglas o principios ticos(Berlin, 2002: 170).

    Los valores pueden serincompatibles entre s, es decir, no con-juntamente realizables en el curso de una vida o en el interior deuna sociedad. Desde la perspectiva de Berlin, los valores pueden ser,adems,incomparables e inconmensurables, es decir, no puede haberun aspecto relevante en referencia al cual un valor pueda ser juzgado

    en relacin a otro, y no puede existir un modelo comn a travs delcual se pueda establecer una gradacin entre valores, o un criterio apartir del cual se pueda juzgar a uno como superior, inferior o igual aotro. A rmar que un valor es inconmensurable, equivale a decir queno es objeto de comparacin (Gray, 1996: 70).

    En segundo lugar, el liberalismo sostenido por Berlin pone elacento sobre el lugar de los valores en el interior de conjuntos cul-turales y las formaciones nacionales. Los valores estn integrados a

    estos conjuntos, de modo que cada formacin cultural de ne sus cri -terios de excelencia y virtud, y tiene su propio centro de gravedad.Entendido as, el pluralismo berliniano va ms all de la clsica idealiberal que seala que los con ictos de valor provienen de los idealesdivergentes de los individuos y de sus concepciones particulares dever el mundo (Gray, 2001: 22).

    En tercer lugar, cada uno de los valores es internamente comple-jo y, a la vez, inherentemente pluralista. La igualdad, por ejemplo,

    puede descomponerse en igualdades rivales: igualdad ante la ley,igualdad en resultados, igualdad de oportunidades, igualdad natural.Lo mismo sucede con la libertad. Ella tambin contiene libertadesrivales e inconmensurables; libertad como autonoma, libertad ne-gativa, libertad como poder efectivo y libertad positiva6.

    6 Por libertad negativa entiende aquel mbito en el que un hombre puede actuar sin ser obstaculizadopor otros (Berlin, 1996: 192). Ella hace referencia, a la ausencia de impedimento a la posibilidad dehacer- y, al mismo tiempo, a la ausencia de constriccin a la posibilidad de no hacer-. As, ser libre en

    el sentido negativo del trmino, [...] quiere decir para m que otros no se interpongan en mi actividad.Cuanto ms extenso sea el mbito de esta ausencia de interposicin, ms amplia es mi libertad (Berlin,

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    23/29

    173

    Berlin fue enftico al sealar que la libertad negativa y la liber-tad positiva no son la misma cosa, cualquiera que sea el terreno co-mn que tengan. Las dos son nes en s mismos y, por tanto, puedenchocar de manera irreconciliable. Precisamente, uno de los choquestradicionales ha sido la contraposicin entre la libertad y la sobe-rana o, ms exactamente, entre el liberalismo y la democracia. Lapreocupacin liberal no es por quin ejerce la autoridad, sino porcunta autoridad debe ponerse en sus manos (Berlin, 1996: 234).Los liberales aspiran a restringir la autoridad en s, lo demcratasaspiran a ponerla en sus propias manos.

    Del mismo modo que la libertad no puede asimilarse a la autori-dad y al autogobierno, ella no puede identi carse con las condicio -nes de la libertad. Para Berln, sin embargo, el mbito de la libertadpoltica no consiste, solamente, en la ausencia de obstculos queimpiden decisiones reales, sino tambin y fundamentalmente, en laausencia de obstculos que impidan elecciones posibles. La libertaddepende del alcance de la eleccin, es decir, de cuntas puertasestn abiertas para el individuo?, de lo abiertas que estn y de laimportancia relativa de esas puertas para su vida? En este punto,Berlin se separa de las tesis del libertarianismo de Hayek en las que sea rma, como se mostr, que la libertad de una persona no dependedel alcance de la eleccin.

    Berlin sostiene, tal como lo hiciera Hayek, que es necesario dife-renciar la libertad de las condiciones de su ejercicio. Con este argu-mento busca rescatar un signi cado de la libertad que pueda describiruna cosa y solo una cosa, es decir, un signi cado que describa un esta -do apetecible por razones diferentes de aquellas que nos hacen desearo necesitar otras cosas que con frecuencia se nombran como libertad.Sin embargo y a diferencia del liberalismo evolucionista de ste au-tor, Berlin no postula un concepto absoluto de libertad, ni otorga unaprioridad a la libertad negativa por sobre otros nes humanos, comolos de la igualdad y participacin poltica.

    1996: 193). La libertad positiva, por su parte, hace referencia a la situacin en la cual un sujeto tiene laposibilidad de orientar su voluntad hacia un objetivo determinado sin verse obligado por la voluntad deotros. Aqu la libertad, bajo la forma de la autodeterminacin racional (manifestacin de la voluntadracional), no se re ere a la carencia de algo sino a la existencia de un atributo espec co de la voluntad,

    que es precisamente la capacidad de moverse hacia un objetivo sin ser movido ni condicionado porotros.

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    24/29

    174

    La propuesta de Berlin no puede leerse, simplemente, como unapoyo ciego a la libertad negativa.7Pues para l, la libertad en to-dos sus signi cados no es inviolable y su ciente, en un sentido abso -luto. Que no sea inviolable signi ca que en condiciones anormalesy, slo en condiciones anormales, es posible traspasar las fronterasque desde Benjamin Constant y Locke se consideraron como sagra-das. Que no sea su ciente en un sentido absoluto signi ca que elgrado de libertad que goce un hombre, o un pueblo, para elegir vivircomo quiera, tiene que estar medido por contraste con lo que pre-tendan signi car otros valores de los cuales quiz sean los ejemplosms evidentes la igualdad, la justicia, la felicidad, la seguridad o el

    orden pblico (Berlin, 1996: 241).En este sentido resulta claro, segn l, queEs verdad que ofrecer derechos polticos y salvaguardias contra la inter-vencin del Estado a hombres que estn mal alimentados, enfermos yque son analfabetos, es rerse de su condicin; necesitan ayuda mdica yeducacin antes de qu puedan entender qu signi ca un aumento de sulibertad o que puedan hacer uso de ella. Qu es la libertad para aquellosque no pueden usarla? Sin las condiciones adecuadas para el uso de lalibertad, cul es el valor de sta? (Berlin, 1996: 194).

    La pretensin de hacer utilizables las libertades no puede conducir,sin embargo, a identi car la libertad con otros valores como la justicia,la igualdad o la equidad social. La libertad no es la primera necesidadde todo el mundo y tampoco el nico n del hombre. En este puntoBerlin se separa de los liberales socialistas y liberales igualitarios como Norberto Bobbio, que en su defensa de lalibertad como poder efectivo yen su apelacin a la necesidad de hacer compatibles las demandas deigualdad y justicia con las demandas por libertad, han asegurado comose mostr que una persona instruida es ms libre que una inculta; unapersona que tiene un empleo es ms libre que una desocupada, unapersona sana es ms libre que una enferma (Bobbio, 2003: 545). A

    7 En la introduccin aCuatro ensayos sobre de la libertad, escrita 19 aos despus de la publicacin deDos conceptos de libertad, Isaiah Berlin responde a su crticos. All seala que la argumentacin sobre lalibertad no pretende ser un apoyo ciego al concepto de libertad negativa como opuesto al de su her-

    mano gemelo la libertad positiva. Su argumentacin estaba dirigida, de manera enftica, a defender elpluralismo de los valores.

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    25/29

    175

    juicio de este autor, esta concepcin da forma a doctrinas polticas quepueden destrozar la libertad individual y permiten la dominacin delpoder colectivo sobre el individuo y sus libertades.

    En sus argumentos, Berlin acepta que la libertad signi ca ausen -cia de limitaciones impuestas por otras personas, sin embargo, estaslimitaciones no hacen referencia a la presencia de toda clase de males,es decir, este autor no acepta la tesis que a rma que la ausencia deprovisiones materiales constituye una prdida de la libertad. Lo quea rma es que no puede confundirse la libertad con la igualdad de con -diciones materiales y, fundamentalmente, que no puede confundirsela existencia de una coaccin arbitraria, que impide que una persona

    actu de acuerdo con sus elecciones, con la existencia de obstculosmateriales y econmicos que pueden, como es obvio, limitar el alcan-ce de las oportunidades y el valor de la libertad ante los ojos de losindividuos. En sus palabras:

    Cuando la bsqueda de la igualdad entra en con icto con otros neshumanos, cualesquiera que sean como el deseo de felicidad o de placer,o de justicia o de virtud, o de la variedad y el color en una sociedad por smismos, o de la libertad de eleccin con n en s misma, o del desarrollo

    ms pleno de todas las facultades humanas- slo el ms fantico de losigualitaristas exigira que tales con ictos se decidan invariablemente afavor slo de la igualdad, haciendo caso omiso, de los dems valores deque se trate (Berlin, 2002: 169).

    En su propuesta terica Berln no pretende formular, entonces,ni una teora de la libertad, ni una teora de la igualdad que puedaser justi cada en una estructura de derechos fundamentales o en unesquema coherente de libertades bsicas iguales para todos. Esta es,

    justamente, otra de las diferencias del liberalismo berliniano con al-gunas de las teoras liberales dominantes del siglo XX la de Rawls,la de Hayek y la de Bobbio, por ejemplo. Sus tesis a la vez liberalesy a la vez pluralistas, son claras, las cuestiones relativas a valorespolticos y morales no pueden ser respondidas mediante una y slouna proposicin, los valores polticos que se consideran nes en smismos no necesariamente son compatibles y no necesariamentetienen que encajar en un sistema armonioso.

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    26/29

    176

    A manera de recapitulacin

    Berlin, Bobbio y Hayek, han sido incluidos por Ralf Dahrendorfen el selecto grupo de las erasmistas. Se trata de esa clase especialde intelectuales pblicos del siglo XX, que aunque expuestos a lostiempos del totalitarismo y del socialismo iliberal, mantuvieron in-tacto su espritu liberal. En este grupo de intelectuales pblicos he-rederos del mpetu de Erasmo de Roterdam, Dahrendorf, incluye atodos aquellos autores que pusieron a prueba su conviccin por ladefensa de la libertad individual en tiempos de revolucin, guerra ycambios (Dahrendorf, 2009).

    En este texto se han presentado los argumentos de Bobbio, Ha-yek y Berlin sobre el estatus de la libertad individual y la relacinde exclusin o complementariedad con otros valores polticos. Lastesis y argumentos de los tres autores sirvieron para presentar unpanorama general de las diversas caras que adopta el liberalismocuando busca equilibrar o separar, en un marco estrictamente libe-ral, las demandas por las libertades individuales negativas con lasdemandas por la igualdad material.

    La breve reconstruccin de las tesis de Hayek sobre la igual-dad de los preceptos legales generales y de las normas de mera con-ducta social, ilustra las lneas habituales del modelo ms radical dela tradicin liberal. Este autor ha sido incluido en el marco de lasdoctrinas libertarianas y no igualitarias de centro-derecha. Estasdoctrinas mani estan un profundo miedo a la igualdad econmica,a la irrupcin desmesurada de las masas en el poder y a la extensinde un poder arbitrario sobre la esfera privada. Este liberalismo, que

    hace suya la defensa del individuo, de la libertad negativa y del idealdel libre mercado, formula una teora poltica marcada por un con-tundente rechazo a cualquier ideal de igualdad que pretenda ir msall de la igualdad ante la ley.

    En abierta oposicin con esa tradicin, con los argumentos de Norberto Bobbio, se present una versin del liberalismo que a travsde la inclusin de los derechos humanos sociales, formula un princi-pio de igualdad orientado a mitigar las desigualdades moralmentearbitrarias. Los argumentos de Bobbio muestran que la nocin de li-

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    27/29

    177

    bertad, entendida simplemente como la implantacin de la igualdadde todos los seres humanos ante la ley y, como libertad frente a lacoaccin arbitraria por parte del poder estatal, es insu ciente y debecomplementarse con la de nicin de las posibles vas de eleccinque se abren para los individuos.

    La reconstruccin de algunos de los argumentos berlinianospermiti mostrar la cara agonista del liberalismo, es decir, aquellapostura para la cual el con icto de valores forma parte del ideal dela libertad, en la medida en que la libertad y la igualdad se presentancomo valores inconmensurables entre los que se debe elegir sin el

    bene cio de un criterio racional. Que todo no lo podemos tener, es

    una verdad necesaria y no contingente (Berlin, 1998: 241). Contratodas aquellas teoras que buscan hacer compatibles y conmensura- bles los valores polticos y que pretenden que los propsitos huma-nos puedan armonizarse en un sistema coherente, Berln sostieneque la posibilidad del con icto y la tragedia no puede ser eliminadapor completo de la vida humana.

    Acudir a tres autores que se sitan en lugares antagnicos delpensamiento liberal, nos permite mostrar que el anlisis de las rela-

    ciones existentes entre la libertad y la igualdad no puede plantear-se, simplemente, como una discusin centrada en la existencia -ono- de un concepto de libertad absoluto y coherente, que se opongaa la existencia o no de un concepto de igualdad, tambin absolu-to y coherente (Fred, 1994: 91-132). Los planteamientos de Hayek,Bobbio y Berlin permiten a rmar, parafraseando a Amartya Sen, quela discusin sobre la libertad o la igualdad -igualitarismo versus libera-lismo- es un error categrico, dado que toda teora del orden social

    exige la igualdad de algo que se considera fundamental en esa teoraespec ca. La libertad se encuentra entre los posibles campos deaplicacin de la igualdad y la igualdad, se halla entre los posiblesesquemas distributivos de la libertad (Sen, 2000: 35)

    RevistaCo-herencia Vol. 7, No 13 Julio - Diciembre 2010, pp. 151-179. Medelln, Colombia (ISSN 1794-5887)

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    28/29

    178

    Referencias

    Anderson, P. (1988). La evolucin poltica de Norberto Bobbio. En: J.M. Gonzlez & F. Quesada (coords.)Teoras de la democracia. Barcelona:Anthropos.Berlin, I. (1983).En dilogo con Ramin Jahanbegloo. Madrid: Anaya y MarioMuchnik._____. (1992).Pensadores rusos. Mxico D.F.: Fondo de Cultura Econ-mica._____. (1996).Cuatro ensayos sobre la libertad. Madrid: Alianza Universidad._____. (2002).Conceptos y categoras. Mxico D.F.: Fondo de Cultura Eco-nmica.

    _____. (2004).La traicin de la libertad. Seis enemigos de la libertad humana. Mxico D.F.: Fondo de Cultura Econmica.Bobbio, N. (1993).Liberalismo y democracia. Bogot: Fondo de CulturaEconmica._____. (1993).Libertad e igualdad. Barcelona: Paids._____. (1996).Derecha e izquierda. Madrid: Trotta._____. (2003). (ed.)Teora general de la poltica. Madrid: Trotta.Bovero, M. (2003). La idea de una teora general de la poltica. En: N.Bobbio (ed.)Teora general de la poltica. Madrid: Trotta.Dahrendorf, R. (2009).La libertad a prueba. Madrid: Trotta.Dewey, J. (1996).Liberalismo y Accin social. Valencia: Edicions Alfons ElMagnnim.Dworkin, R. (2003).Liberalismo, comunitarismo y democracia. Buenos Ai-res: La Isla de la Luna.Fried, Ch. (1994). Es posible la libertad?. En: J. Rawls & A. Sen (et. al).Libertad, Igualdad y derecho. Barcelona: Ariel.

    Gray, J. (1982). F. A. Hayek y el renacimiento del liberalismo clsico.En: http://www.eseade.edu.ar/servicios/Libertas/49_1_Gray%20John.pdf(5-VI-10)._____. (1996).Isaiah Berlin. Valencia: Edicions Alfons el Magnanim._____. (2001).Las dos caras del liberalismo. Barcelona: Paids.Hayek, F. A. (1950).Camino de servidumbre. San Jos: Universidad Aut-noma de Centroamrica.______. (1997). Los fundamentos de la libertad. Barcelona: Folio.

    ______. (2001).Principios de un orden social liberal.Madrid: Unin Editorial.

    El liberalismo es uno y tres. Hayek, Bobbio y Berlin Liliana Mara Lpez Lopera

  • 8/10/2019 El liberalismo es uno y tres.pdf

    29/29

    Merquior, J. (1993).Liberalismo viejo y nuevo. Mxico D.F.: Fondo de Cul-tura Econmica.Mouffe, C. (1999).El retorno de lo poltico. Barcelona: Paids.Rawls, J. (2002).La justicia como equidad. Una reformulacin. Barcelona:Paids.Sen, A. (2000). Nuevo examen de la desigualdad. Madrid: Alianza.