el hombre espiritual - · pdf filetomamos la cruz. esto se debe a que nuestra personalidad se...
TRANSCRIPT
EL HOMBRE
ESPIRITUAL
(Tres tomos en Uno)
Watchman Nee
CONTENIDO
1. Introduccin 2. Prefacio de la segunda edicin 3. Prefacio 4. Prembulo 5. Lista de palabras importantes
Primera seccin: introduccin con respecto al espritu, el alma y el
cuerpo20
1. El espritu, el alma y el cuerpo 2. El espritu y el alma 3. La cada del hombre 4. El camino de la salvacin
Segunda seccin: la carne..58
1. La carne y la salvacin 2. El cristiano carnal 3. La cruz y el Espritu Santo 4. La jactancia de la carne 5. La actitud que el creyente debe tener frente a la carne
Tercera seccin: el alma..101
1. Cmo ser libres del pecado y de la vida del alma 2. La experiencia del creyente anmico 3. Los peligros de la vida del alma 4. La cruz y el alma 5. El creyente espiritual y el alma
Cuarta seccin: el espritu..154
1. El Espritu Santo y el espritu del creyente 2. El hombre espiritual 3. La obra espiritual 4. La oracin y la guerra espiritual
Quinta seccin: el anlisis del espritu: la intuicin, la comunin y la
conciencia.196
1. La intuicin
2. La comunin 3. La conciencia
Sexta seccin: andar segn el espritu238
1. Los peligros de la senda espiritual 2. Las leyes del espritu 3. El principio de que la mente ayude al espritu 4. La condicin normal del espritu
Sptima seccin: el anlisis del alma (1): la parte emotiva...279
1. El creyente y las emociones 2. El amor 3. Los deseos 4. Una vida centrada en los sentimientos 5. Una vida de fe
Octava seccin: el anlisis del alma (2): la mente..324
1. La mente, un campo de batalla 2. La condicin de una mente pasiva 3. Cmo ser libre 4. La ley de la mente
Novena seccin: el anlisis del alma (3): la voluntad.370
1. La voluntad del creyente 2. La pasividad y sus peligros 3. Conceptos errneos de los creyentes 4. El camino a la libertad
Dcima seccin: el cuerpo.423
1. El creyente y su cuerpo 2. La enfermedad 3. Dios es la vida del cuerpo 4. La victoria sobre la muerte
INTRODUCCION
Esta obra consta de diez secciones distribuidas en tres tomos. Se comenz a escribir a
finales de 1925, y se concluy en junio de 1927.
La siguiente explicacin, dada por el autor acerca del carcter del libro, fue tomada de un
anuncio que l public en el nmero 3 de la revista El testimonio actual:
Esta obra da nfasis a la realidad espiritual. Por lo tanto, el contenido de cada tomo puede
ser verificado por la experiencia; ninguna porcin est en el mbito de la teora.
En la actualidad, lo que ms desalienta a los creyentes que desean progresar en la senda
espiritual es no encontrar la forma de hacerlo. Como resultado, buscan a tientas, su
condicin es inestable y se estancan en las mismas encrucijadas ao tras ao sin saber qu
camino deben seguir. El autor de este libro se hallaba en la misma condicin. Debido a eso,
en este libro se recalca una direccin clara con respecto a la senda apropiada. El propsito
de cada captulo es dirigir a los creyentes en la direccin correcta. Por lo tanto, todos los
que buscan a Dios con corazn sincero, podrn avanzar. Casi todos los captulos empiezan
presentando la posicin del pecador y avanzan paulatinamente hacia la cumbre de la vida
espiritual.
El libro en su totalidad tiene un enfoque muy amplio, pues en l se da respuesta a los
interrogantes que los creyentes tienen con respecto a la vida espiritual. Por ejemplo, se
explican clara y detalladamente asuntos difciles, tales como escuchar la voz de Dios y
entenderla. Despus de leer este libro, los problemas espirituales ms relevantes quedarn
resueltos.
La regeneracin, la salvacin, la santificacin, el negarse al yo, el ser llenos del Espritu
Santo y de poder, el bautismo del Espritu Santo, la comunin, la oracin, el estudio de la
Biblia, la identificacin con la muerte de Cristo, la carne, la vida del alma, las emociones,
las experiencias sobrenaturales, los milagros, el discernimiento de las lenguas, la intuicin,
la conciencia, la revelacin de Dios, la obra espiritual, la guerra contra Satans, los espritus
malignos, la posesin demonaca, el libre albedro, la renovacin de la mente, la pasividad,
la consagracin, los afectos, la sensacin de ser ferviente o de estar fro, el cuerpo, la
enfermedad, la manera de escapar de la muerte y muchos otros temas, son explicados de
manera profunda y al mismo tiempo con sencillez.
Si un creyente desea seguir el camino espiritual, debe leer este libro. Si alguien desea
ayudar a otros a que vean su condicin, no puede perderse este libro.
Todo aquel que lea este libro encontrar luz incluso en temas que ordinariamente son
pasados por alto. Aun un asunto tan conocido como es la regeneracin, se podr entender
de una manera que antes habra sido inimaginable.
PREFACIO DE LA SEGUNDA EDICION
Damos gracias al Seor porque desde que publicamos este libro en el otoo de 1928,
creyentes de muy diversos lugares lo han estado solicitando. En un lapso breve la primera
edicin se nos agot. Muchos nos han comunicado francamente la liberacin que han
experimentado por medio de la verdad contenida en este libro. Esto nos muestra que lo que
Dios nos encomend no ha sido en vano. Verdaderamente tenemos que agradecerle al
Seor por la manera en que los hijos de Dios han recibido este libro.
Desde entonces, en estos dos aos no hemos podido ofrecer este libro en su forma
completa, como juego de tres tomos. Originalmente, yo no tena la intencin de que se
imprimiera la segunda edicin, pensando que dos mil ejemplares en circulacin eran
suficientes. Al mismo tiempo, me opona a publicar apresuradamente otra edicin porque
quera ver el resultado de poner en prctica las verdades contenidas en este libro. Pero
durante los ltimos dos aos se han solicitado varios centenares de ejemplares de este libro.
Tambin vimos, por muchos testimonios, que las verdades contenidas en este libro se
pueden practicar, que pueden liberar al hombre y que los hijos de Dios las necesitan. Por
consiguiente, no podemos posponer ms la reimpresin de este libro.
Esta edicin no difiere mucho de la primera en cuanto a la enseanza y a la verdad. Sin
embargo, debido a que he recibido ms luz y he obtenido un nuevo conocimiento con
respecto a cosas que an no estaban claras cuando escrib la primera edicin, decid incluir
en esta edicin muchos cambios y adiciones. Para llevar a cabo la obra de redaccin, ped
ayuda al Seor, y trat de conservar, hasta donde fue posible, la terminologa utilizada
usada en las Escrituras.
Estamos conscientes de que en muchos casos nuestras terminologa difiere de la que se usa
en la Biblia. Por ejemplo, utilizamos el trmino redencin con relacin a la obra completa
que el Seor Jess llev a cabo en la cruz, pese a que el significado bblico de la palabra
redencin se limita exclusivamente a la accin de cubrir el pecado.
Existen muchos trminos que nos parecen correctos, pero que al examinarlos a la luz de la
Biblia, son inexactos. Por ejemplo, hemos odo las expresiones vencer el pecado,
crucificar el yo, crucificar la vida del alma y sabemos a lo que ellas se refieren. Pero en
la Biblia no se encuentran estas expresiones. La Biblia no habla de vencer el pecado, sino
de ser libres del pecado. El fin de la salvacin no es que venzamos al pecado, sino que
nuestro viejo hombre sea crucificado y que seamos librados del pecado y de su poder.
(Cuando se usa la expresin vencer los pecados, se alude a la experiencia individual.) De
igual manera, la Biblia no dice que debemos morir al yo, sino que debemos negarnos a
nosotros mismos. Uno no puede crucificar el yo, pues ste es quebrantado cuando
tomamos la cruz. Esto se debe a que nuestra personalidad se halla en el yo y no puede ser
crucificada. Una vez que el yo muere, nuestra persona muere. El yo es nuestra propia
persona. Por lo tanto, solamente podemos negarnos al yo y tomar la cruz para ponerle fin.
El significado de llevar la cruz no es morir, sino estar dispuesto a morir. De la misma
manera, la Biblia no dice que debemos crucificar la vida del alma, sino que debemos perder
la vida del alma, pues si nuestra vida natural fuera crucificada, nuestra vida fsica tambin
terminara.
Esto no significa que en la primera edicin no estbamos conscientes de estas diferencias.
Creemos que si los principios y hechos espirituales son correctos, la terminologa no es tan
importante. Al hacer cambios, aun en esta edicin, no hemos tratado de corregir esas
disparidades. Pero recientemente el Seor nos record que debemos ser ms cuidadosos en
este asunto. El nos ha mostrado cmo un trmino impreciso puede producir una verdad
inexacta y cmo la exactitud en la terminologa es importante. Por supuesto, preferimos
tener la realidad espiritual que la terminologa exacta. Pero cuando tenemos la realidad
espiritual, tambin vale la pena que tengamos la terminologa precisa. Adems, una
terminologa exacta nos proporcionar ms luz. Debido a esto, en muchos casos hemos
cambiado la terminologa. Espero que podamos hacer lo mismo en las dems publicaciones.
Quisiera que los lectores prestaran atencin al efecto especfico y personal que la verdad
produce en nosotros. Por esta razn no he mencionado muchas verdades objetivas. Este es
el carcter de este libro. Emprend la escritura de este libro debido a que cre que haba un
vaco en cuanto a la