el desafío de aprender a estudiar '14

Andrea V. Luna Prof. en Letras. U.N.P.L.

El desafío de aprender a estudiar 2

“L EO PERO RINDO MAL”: CUANDO LEER NO ALCANZA. ....................................................... 3

¿QUÉ SIGNIFICA ESTUDIAR? .............................................................................................. 4

ESTUDIAR PARA APRENDER. ¿POR QUÉ? ............................................................................ 5

LA ACTITUD: MENTE, CUERPO Y ESPÍRITU. ......................................................................... 6

Mente: factores cognitivos ......................................................................................... 6

Cuerpo: factores ambientales y organizativos ........................................................... 6

Espíritu: factores anímicos y volitivos ....................................................................... 7

LA INVESTIGACIÓN COMO PRINCIPIO DE TODO ................................................................... 9

La Biblioteca de la Escuela ........................................................................................ 9

La Biblioteca .............................................................................................................. 9

Internet ..................................................................................................................... 10

YA INVESTIGUÉ: Y AHORA, ¿QUÉ HAGO? .......................................................................... 11

Lectura general o Prelectura ................................................................................... 11

El Fichaje ................................................................................................................. 11

TÉCNICAS DE ABSTRACCIÓN: CÓMO SACAR LO QUE SOBRA. ............................................... 13

Lectura comprensiva ................................................................................................ 13

El resumen ................................................................................................................ 14

Esquemas de contenido ............................................................................................ 14

Esquema de Llaves ............................................................................................... 15

Esquema de Flechas ............................................................................................. 15

Mapa y Esquema conceptual .................................................................................... 15

Mapa conceptual .................................................................................................. 16

Red conceptual ..................................................................................................... 16

LO ÚLTIMO: ESTRATEGIAS PARA RECORDAR MEJOR. ......................................................... 18

Trucos para recordar mejor ..................................................................................... 18

Tomar bien los apuntes en clase............................................................................... 19

El método 6R ........................................................................................................ 19

BIBLIOGRAFÍA: ............................................................................................................... 20

ÍNDICE


–¡Profe! ¡Si hace dos días que estoy leyendo!

–Pero no sabés: leíste pero no estudiaste.

–Decime, ¿estudiaste?

–Sí, profe, un montón.

–¿Y por qué no sabés nada?

Diálogos como estos se dan habitualmente en las mesas de examen y en las aulas de nuestra Escuela, y de muchas otras, y suelen poner de mal humor tanto a profesores como a alumnos. Personalmente, no creo que los que dicen estas cosas convencidos falten a la verdad: seguramente dedicaron muchas horas a repasar los distintos temas y, de seguro, habrían sido suficientes si ese tiempo hubiera estado bien invertido. Pero, por lo general, no es así, y todo termina, mínimo, en una mala nota o, peor, un aplazo1 y, con él, surge una serie de sentimientos tan desagradables como el fracaso mismo: desconcierto, tristeza, bronca, susto, desgano y la terrible idea de no querer seguir más sin importar las consecuencias.

Como muchas cosas en la vida, a estudiar se mejora… ¡estudiando!, es decir: con la experiencia propia y la de otros… pero también se aprende utilizando diversas técnicas de manera adecuada. El objetivo de este librito es, entonces, proporcionarles a ustedes, mis alumnos, algunos métodos prácticos para aprovechar al máximo los momentos de estudio, tan poco abundantes por estos tiempos.

1 O en esas escenas tan desagradables de súplica y caras de “auxilio, que en mi casa me matan”.

Simplificando: cómo estudiar mejor en el menor tiempo posible2, a la vez que fijamos esos conocimientos de tal modo que puedan ser utilizados en momentos diferentes de la evaluación escolar.

Entonces, la propuesta que les hago es leer atentamente y comenzar, de apoco… “sin prisa pero sin pausa”, a poner en práctica los distintos consejos y técnicas que les sugiero. Tengan en cuenta que no se trata de utilizarlos sólo en Literatura o en las materias afines, sino en todos los campos de estudio y que estos consejos y técnicas no fueron inventados por mí sino por gente que sabe más y que se especializa, justamente, en ello. Lógicamente, la decisión de progresar y no quedarse en la Edad de Piedra, es de ustedes…

Por supuesto, ante cualquier duda, pueden consultar la bibliografía que les indico al final.

¡Animo, que todo puede ser más simple de lo que piensan!

2 Interesante… ¿no?

“Leo pero rindo mal”:

cuando leer no alcanza


Antes que cualquier otra cosa,

conviene ponernos de acuerdo en algo muy importante: estudiar no es memorizar… o, al menos, no sólo eso. Si bien en ciertas materias a veces es necesario “estudiar de memoria”, esto no es ni debería ser lo habitual.

Estudiar, entonces, es algo más. Pero, ¿qué?

Bueno, implica una serie de procedimientos en los que, lógicamente, se ven involucradas las ideas de leer, comprender, seleccionar, recordar y aprender, entre otras, como partes interconectadas de un todo, de un objetivo único que no sería otro que incorporar conocimientos de manera útil y dinámica. Esto significa que todo aquello que sabemos como resultado del estudio, deberíamos poder utilizarlo apropiadamente más allá, del examen, por ejemplo, para el cual estudiamos (con la idea implícita y obvia de aprobar).

En este sentido, comencemos por una definición de “estudiar”:

Es una actividad personal consciente y voluntaria para analizar, comprender y profundizar conocimientos y experiencias poniendo en funcionamiento todas las capacidades intelectuales del individuo, con el fin de adquirir esos conocimientos, informaciones y habilidades y poder aplicarlos3.

Veamos, lo anterior significa que necesitamos, como elemento imprescindible, nuestro deseo consciente e

3 AA. VV. A estudiar se aprende.

incondicional y nuestra decisión personal a la hora de estudiar y de aprender: nadie más puede hacerlo por nosotros, nadie nos realizará una “transferencia de archivos” para que nuestra mente funcione mejor.

¿Es necesario ser un súper genio para rendir mejor? No. Aunque realmente estaría bueno, pero ese tipo de cerebros son poco abundantes. Entonces es cuando suplimos el alto coeficiente intelectual con un mayor rendimiento y logramos ese mayor rendimiento con una buena técnica y una decisión firme para aplicarla de forma efectiva.

Los grandes logros suponen grandes retos y grandes esfuerzos. Por lo tanto, no nos sería posible creer que el conocimiento y la habilidad para utilizarlo adecuadamente llegan a nosotros por arte de magia mientras dormimos o miramos la tele; se necesita tomar una decisión imprescindible: ocupar nuestro tiempo de manera adecuada e inteligente para poder tener controladas nuestras obligaciones sin descontrolar nuestros placeres. Estudiar de la mejor manera posible nos facilita disponer de tiempo para no perderle el tren a aquellas cosas que nos gustan, nos distraen y nos desestresan.

¿Qué significa estudiar?


Creo que si yo, o cualquier otro

adulto, les quisiera decir por qué deberían hacer tal o cual cosa, no resultaría tan convincente o eficaz como si lo conversaran entre ustedes mismos. Así que, para este capítulo, me pareció más conveniente copiarles algunos testimonios que recogí en los últimos años.

Que los disfruten.

• Espero que me beneficie en lo laboral y en lo económico en el futuro.

• Espero que me beneficie en tener un buen trabajo decente y una vida mejor a la que estoy viviendo ahora.

• Espero poder aprender más de lo que sé y poder demostrar a mis padres que puedo ser alguien importante.

• Espero que me beneficie en el futuro, para poder conseguir un buen trabajo y tener un buen estado económico, para el día de mañana concretar una familia sin problemas.

• Me gustaría, el día de mañana, tener mi trabajo y no depender de los demás. Me gusta ser independiente aunque estudio para poder cumplir mi sueño de tener una profesión.

• Espero que me beneficie en tener buena mentalidad y conducta, y conseguir un buen trabajo.

• Para poder tener un trabajo seguro tengo que recibirme, tener un título.

• Espero que me beneficie en elegir una buena carrera para estudiar y

seguir adelante con todas las ganas que tengo.

• Espero que me beneficie en el futuro, para tener un trabajo digno y tener un estudio completo para no quedarme sin trabajo.

• Espero terminar la escuela con un título, aprender y ser buen alumno.

• Espero aprender muchas cosas para que me sirvan para el futuro.

• Espero alcanzar un aprendizaje profundo en todas las materias.

• Espero poder dar lo mejor de mí y aprender todo lo que me enseñen.

Resulta extraño… al fin y al cabo, no fue tan distinto de lo que repetimos muchos profesores al principio del año… y durante el resto, también.

Sin embargo, necesito hacer un pequeño comentario: no resulta sano estudiar para contentar a otro o para ganarse su aprobación. Los logros personales son eso, propios, y ayudan a que podamos mejorar nuestra autoestima y nos ayuden a crecer y ser mejores personas… si además eso es festejado por otros, entonces habremos obtenido un aliciente extra, no menos importante, pero no el principal.

Estudiar para aprender: ¿Por qué?


La única manera de lograr el ansiado objetivo de MEJOR RESULTADO EN

EL MENOR TIEMPO POSIBLE es conocernos a nosotros mismos y conocer y aplicar las técnicas adecuadas. Veamos.

Lo que más frecuentemente se piensa es que los alumnos no aprenden porque no estudian lo suficiente para aprobar la asignatura. Esto es cierto en un porcentaje de alumnos, pero existe otro porcentaje que estudia bastante pero, sin embargo, los resultados no son los esperados. En estos casos los estudiantes no saben cómo hacer para lograr una buena relación esfuerzo-rendimiento.

Estudiar no es sinónimo de aprender. No basta asistir a clases, estar matriculado en una escuela, estar frente al profesor dentro del aula y observar un pizarrón o un libro lleno de datos. Todo eso no asegura el haber aprendido las lecciones. Tampoco estar muchas horas frente a un texto lo garantiza.

Aprender es un proceso complejo de pensamiento y comportamiento en el que la persona está involucrada y requiere de la participación de múltiples factores para realizarlo con éxito.

A continuación veremos cuáles son esos factores.

MENTE: FACTORES COGNITIVOS

El aprendizaje se da de acuerdo a determinados procesos y procedimientos tales como las operaciones de pensamiento (percibir, observar, interpretar, etc.), el funcionamiento de los hemisferios

cerebrales, la capacidad de concentración (es decir, reflexionar profundamente, focalizando en forma consciente la atención sobre el material a estudiar) y memoria (conservación de experiencias e informaciones del mundo que nos rodea), y las técnicas y estrategias adecuadas (las que vamos a revisar más adelante).

CUERPO: FACTORES AMBIENTALES Y

ORGANIZATIVOS

El éxito del estudio depende en gran medida del cuidado que se tenga en detalles tales como:

• Una postura adecuada (espalda derecha, pies sobre el piso), relajada y que evite el dolor.

• Iluminación que no produzca sombras sobre el sector de trabajo ni que cause dolores o irritación en los ojos.

La actitud: mente, cuerpo y espíritu.


• Evitar ruidos molestos y todo aquello que distraiga nuestra atención (TV, radio, música que nos guste lo suficiente como para que nuestra mente prefiera seguir su ritmo y letras).

• Tener todos los elementos de trabajo a mano, para no perder el tiempo en ir por ellos.

• Organizar el sector de trabajo siempre de la misma manera.

• En nuestros escritos: Escribir con letra clara (evita que perdamos tiempo tratando descifrar qué quisimos escribir) y con diferentes colores que señalen jerarquías en la información (orden de importancia, títulos, llamados de atención… a igual orden jerárquico igual formato), tinta bien oscura sobre papel blanco.

• No estudiar con hambre.

• No estudiar después de haber comido en exceso.

• Evitar todo tipo de malestar: el dolor es uno de los principales enemigos de la concentración.

• No olvidar descansar adecuadamente: el cansancio nos endentece… largas maratones de estudio pocas veces dan resultados óptimos.

• Anotar todas las dudas y preguntar al que más sabe, conocer y manejar adecuadamente todo el vocabulario (específico y no específico): no puedo estudiar lo que no entiendo.

• Por último: calma y paciencia… el tiempo invertido sabiamente rendirá todos sus frutos.

También es conveniente realizar un cronograma, en el cual quedará establecido lo que haremos desde que nos levantamos hasta que nos vanos a dormir.

Para que sea exitoso, debemos tratar este cronograma con mucho respeto y hacer todo lo posible por respetarlo. Esto nos brindará la posibilidad de crear un hábito de estudio. Sólo deberíamos modificarlo frente a una circunstancia particular; y luego retomar el ritmo que él nos impone.

ESPÍRITU: FACTORES ANÍMICOS Y

VOLITIVOS

El estado de ánimo y el impulso de la voluntad deben subyacer en nuestras acciones. Que las cosas nos salgan por casualidad o como un mero resultado producto del azar no debería ser el eje de nuestras vidas. No podemos sentarnos a esperar que las cosas sucedan porque el destino está de nuestro lado… porque tal

Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes

8:00

9:00

10:00

11:00

(etc.)


Demóstenes [en griego clásico ∆ηµοσθένης /

Dêmosthénês] (Atenas, 384 adC - Calauria,

actual Grecia, 322 adC) Orador y político ateniense.

vez en alguna ocasión pueda darse, pero no ocurrirá siempre. No podemos pretender que por arte de magia durante un examen las respuestas se introduzcan en nuestra mente y un milagro nos permita aprobar; porque cuando esto no ocurra, nos sentiríamos angustiados y descreídos de todo lo que nos rodea.

“A Dios rogando y con el mazo dando” decía ya Cervantes en el Quijote, queriendo indicar con ello que por más fe que uno pueda tener no debemos dejar de hacer todo lo que esté en nuestras manos para salir adelante.

Con el estudio ocurre lo mismo: el deseo, la voluntad y un estado anímico adecuado nos asegurarán un mayor rendimiento y una mayor confianza en nosotros mismos: todo se resume en una cuestión de actitud. No importa lo que puedan decir los demás sino lo que nosotros mismos estemos dispuestos a creer sobre nuestras capacidades y logros. Fe y esfuerzo caminan de la mano.

Compartir opiniones y conceptos con otros puede resultar de gran provecho:

ya sea para discutir opiniones sobre lo estudiado o simplemente para que te escuche y puedas compartir tus problemas4.

También puede que te sirva, antes de dar algún paso hacia atrás, la siguiente reflexión:

¿Sabés quién fue el mejor orador de la antigua Grecia? Se llamaba Demóstenes.

De chico, Demóstenes tenía un pequeño inconveniente (quizá más grande que cualquiera de los que podamos tener nosotros ahora). Pero él quería ser orador, y entonces se propuso ser el mejor orador. Una vez que logró superar su discapacidad inicial, para mejorar su dicción, se entrenaba hablando con piedras en la boca.

No fue el mejor orador porque le resultara fácil hablar en público, sino todo lo contrario; porque empezó con todas las desventajas: era tartamudo.

Al comenzar una tarea, de cualquier naturaleza, el resultado final depende de nuestra actitud. La actitud positiva es la conducta básica, el principio rector de todos los logros. Creer en las limitaciones, crea las limitaciones.

La experiencia demuestra que cuando algo nos resulta especialmente difícil, debemos persistir. Cuando superamos esa dificultad llegamos más lejos que aquellos que no necesitaron esforzarse tanto. Es decir, que cuanto más cuesta algo al principio, más lejos se podrá llegar.

4 Siempre es bueno encontrar la persona adecuada que nos ayude a liberarnos del peso anímico que llevamos de más, muchas veces injustamente.


Por regla general, debemos saber que un profesor no puede, ya sea por el factor tiempo o por factores sociales internos al aula o por diversas causas, muchas veces ajenas a la propia Escuela, enseñar todo lo que debe o todo lo necesario para que sus alumnos adquieran en clase todo lo que necesitan o todo lo que los programas de educación prevén para cada materia. Por eso, muchas veces, la tarea para casa incluye la investigación como ejercicio imprescindible para auto-procurarse de información que pueda completar lo que no hubo tiempo de trabajar con el docente o para ampliar o complementar o fijar conceptos. Esto significa que de no realizar la investigación de manera adecuada estaríamos sumando problemas en lugar de soluciones: esto es, que no tendríamos a mano todos los textos necesarios para poder estudiar un tema determinado y, con ello, alcanzar el rendimiento esperado.

De lo anterior se deduce que necesitamos de manera urgente aprender a investigar de manera ordenada para lograr que el resultado sea lo más académicamente correcto que nos sea posible y que, por lo tanto, nos resulte útil.

Sin asustarse, demasiado, veamos cuáles serían las posibles fuentes de

información y cómo acercarnos a ellas adecuadamente para que le saquemos el mayor provecho posible.

LA BIBLIOTECA DE LA ESCUELA

Mayormente, tiene libros específicos para cada una de las

orientaciones que cursan los alumnos, es decir, las

materias especializadas y, también, las del tronco común. Suelen hacerse

compras bastantes

frecuentes destinadas a abastecer las demandas de los

profesores y alumnos.

Los bibliotecarios suelen estar al tanto del contenido de los libros que cuidan, por lo tanto, hablar con ellos es la primera mejor opción cuando iniciamos nuestra investigación.

LA BIBLIOTECA

Toda ciudad tiene una Biblioteca central (en nuestro caso, la Biblioteca del Centro Cultural Sarmiento) destinada a toda la comunidad local. Suele tener “un poco de todo” y trata de abarcar la mayor cantidad de campos de estudio que le sea posible. Abunda en textos literarios.

La INVESTIGACIÓN

COMO PRINCIPIO DE TODO.


Al igual que lo que ocurre con los bibliotecarios escolares, siempre son ellos la mejor opción inicial.

INTERNET

Posee cientos de miles de páginas, o más, que son útiles a la hora de darle forma a una investigación… y sólo en castellano. Para aquellos que se animan a otros idiomas, los resultados se multiplican de una manera abismal.

Sin embargo, si bien esto puede parecer por momentos, lo mejor que nos puede pasar, también puede ser todo lo contrario: en ese exceso de información, cuesta mucho discernir quiénes son los autores idóneos y respetables de los que solamente son charlatanes.

Un truco5: los dominios terminados en .edu (educación,

5 Uno de muchos posibles. El resto, es práctica y experiencia.

universidades y esuelas), .gov (organismos oficiales de los distintos gobiernos) y .org (organizaciones no

gubernamentales, en su mayoría) suelen ser más confiables. Otro: evitar los blogs y los sitios donde cualquier usuario puede publicar lo que quiera (como aquellas en las que los alumnos publican sus trabajos escolares… los cuales no necesariamente están bien… ¿cómo saber si con ellos aprobaron?). Hay también otras fuentes de información que pueden resultar apropiadas según el objeto o materia que estemos estudiando: entrevistas, documentales, películas, revistas, publicaciones caseras, notas de clases, etc.

En todos los casos, cuando creamos haber encontrado lo que estábamos buscando, simplemente lo copiamos (o fotocopiamos) tal como está, y sin olvidarnos nunca de anotar la fuente (autor, libro, edición, año de publicación, editorial, dirección web,

etc.), ya que con estos datos elaboraremos una ficha, las citas correspondientes y, también, algún tipo de resumen, como veremos a continuación.


Primeramente, no entrar en pánico. Luego, elaborar una serie de fichas que nos permitan clasificar adecuadamente la información recopilada; simplemente porque no queremos leer tantas veces un mismo texto. Realizar un buen fichaje implica, también, descartar, momentáneamente, aquel material que consideramos prescindible. Para eso debemos, previamente, realizar el siguiente paso:

LECTURA GENERAL O PRELECTURA

Consiste en realizar una primera lectura rápida para saber de qué se trata el texto, de qué habla y obtener una idea general acerca de su contenido. Además, es importante:

• Examinar el título: Si está bien elaborado, condensa el mensaje del capítulo o tema. Representa la idea central del texto.

• Examinar los subtítulos: Encabezan cada uno de los subtemas en que está dividido el capítulo o el tema. De una primera lectura de ellos,

surge muy claramente la organización que el autor dio al material y se tienen elementos suficientes para preparar un esquema previo de la lección.

• Observa las ayudas visuales: las figuras, fotografías, mapas, diagramas, etc. También consideramos ayudas visuales a todos los recursos tipográficos que ha usado el autor para llamar la atención sobre ciertas porciones del texto: subrayados, mayúsculas destacadas, letras en negrita, etc.

EL FICHAJE

El fichaje es una técnica auxiliar de todas las demás técnicas empleadas en la investigación; consiste en registrar los datos que se van obteniendo en los instrumentos llamados fichas, las cuales, debidamente elaboradas y ordenadas contienen la mayor parte de la información que se recopila en una pesquisa por lo cual constituye un valioso auxiliar en esa tarea, al ahorrar mucho tiempo, espacio y dinero.

YA Investigué: y ahora, ¿qué hago?


Existen fichas bibliográficas y de contenido. La primera, es muy útil para clasificar los libros y datos de los mismos; la segunda, se utiliza para sintetizar el contenido de un libro o de un artículo periodístico (suelen ser más grandes que las otras y pueden incluir un resumen, un mapa conceptual, etc.).

Para elaborar una ficha bibliográfica, anotar:

Apellido del autor, seguido de coma.

Nombre del autor, seguido de punto.

Título de la obra, subrayado (o en cursiva o en versales), seguido de punto.

Nombre del traductor, prologuista o cualquiera otra indicación que figure en la portada, seguida de punto.

Número de la edición, si no es la primera, seguido de punto.

Lugar de edición, seguido de coma, Editorial, seguido de coma, año de edición seguido de punto o de punto y coma si se indican tomo, capítulo, página.

Si se indica colección o biblioteca y número, se abre paréntesis después del punto, se consigna la colección y el número y se cierra paréntesis seguido de punto.

Modelos para los distintos ejemplos de citas:

Citas de artículo de revista:

Mapes, E.K. "Escritos inéditos de Rubén Darío". En: Revista Hispánica Moderna, año II, Nº1, Nueva York, octubre de 1935; pp. 41-59.

Cita de capítulo de volumen de un solo autor:

Anderson Imbert, Enrique. "Darío y su tiempo". En: LA ORIGINALIDAD DE

RUBÉN DARÍO. Buenos Aires, Centro editor de América latina, 1967; pp. 13-17.

Cita de obra completa:

Hernández, José. Martín Fierro. Buenos Aires, Kapelusz, 1965.

Ficha erudita:

Su objetivo es facilitar la redacción de la monografía. En ésta se copian textualmente el o los párrafos que serán utilizados para ilustrar el texto.

Ficha de regento:

Resume un párrafo, una opinión que es conveniente señalar, pero no copiar textualmente. Se conforma con características similares a las de la ficha erudita.


Dijimos que lo importante no es memorizar lo que leemos sino comprender las ideas y los conceptos, lo que nos permite entender mejor y, posteriormente, recordar lo necesario para realmente poder decir que sabemos.

Por lo tanto, no podemos pasarnos todo el tiempo del que disponemos (y, muchas veces, no es mucho) intentando recordar lo accesorio porque en su momento no pudimos discernir qué era lo importante y qué no. Hay muchas técnicas que nos permiten, justamente, eso: extraer las ideas principales, distinguirlas de las secundarias, relacionarlas y jerarquizarlas.

De entre todos estos métodos, vamos a ver algunos de los más utilizados por su eficacia y sencillez:

LECTURA COMPRENSIVA

Consiste en volver a leer el texto entero pero detenidamente: esto es párrafo por párrafo. Luego de la lectura general, tenemos que destacar las ideas esenciales del texto y de cada párrafo: qué es lo esencial y qué lo secundario. Para hacerlo utilizamos, entre otras, la técnica del subrayado. Mientras leemos tenemos que ir diferenciando la información fundamental, o ideas principales, de la información, o ideas secundarias. Es muy útil utilizar distintos colores, por ejemplo, uno para las ideas principales y otro para las secundarias. Recordemos que nuestra memoria fija mejor aquellas cosas que se ven destacadas.

Debemos subrayar:

• La idea principal, que puede estar al principio, en el medio o al final de

un párrafo, pero no entre paréntesis o en medio de los ejemplos..

• Palabras técnicas o específicas del tema que estamos estudiando y algún dato relevante que nos permita una mejor comprensión.

• Debemos evitar subrayar los ejemplos intrascendentes y las aclaraciones sucesivas.

• Para comprobar que hemos subrayado correcta y eficazmente, podemos hacernos preguntas sobre el contenido y si las respuestas están comprendidas en las palabras y frases subrayadas, entonces, el resaltado estará bien hecho.

Debemos detectar las ideas más importantes para subrayar porque son aquellas que le dan coherencia y continuidad a la idea central del texto. Y en torno a ella, giran las ideas secundarias y demás contenidos.

Importante: Nunca debemos subrayar en la primera lectura. El subrayado se realiza en la segunda o tercera lectura cuando hemos entendido, al menos, de qué se trata el texto aunque sea a grandes rasgos.

Técnicas de abstracción:

Cómo sacar lo que sobra.


ANOTACIONES AL MARGEN

La técnica de las anotaciones consiste en escribir al lado de cada párrafo las palabras-clave que sintetizan su sentido.

Generalmente, los distintos párrafos de un texto pueden:

• Definir un tema.

• Describir las características de algo: su forma, sus tipos, sus clases, etc.

• Expresar un problema o aportar soluciones al mismo.

• Referirse a las causas o consecuencias de un hecho.

• Describir la evolución de un proceso.

• Explicar el modo como se hace algo.

• Enumerar elementos.

• Hablar de los orígenes de un asunto.

• Dar ejemplos que apoyan una idea.

• Explicar una estructura.

• Defender una opinión, etc.

También podemos anotar las dudas que cada párrafo nos genera o aclaraciones en cuanto su significado.

A veces, resulta interesante trabajar con estas dos técnicas a la vez: resulta en una mejor y más práctica experiencia.

EL RESUMEN

Se utiliza para sintetizar el contenido de un texto. Se trata de elaborar otro texto, pero escrito por nosotros, más breve que el original y que exprese con nuestras propias palabras las ideas más importantes del texto o documento leído.

Los pasos que hay que dar para hacer un buen resumen son los siguientes:

• Leer en profundidad el texto, intentando captar sus ideas esenciales.

• Visualizar estas ideas aplicando las siguientes técnicas:

� Identificación de palabras clave.

� Anotaciones.

� Subrayado.

• Transcribir las ideas esenciales subrayadas, unas a continuación de otras, modificando, si es necesario, la redacción, añadiendo conectores, etc., para crear un nuevo texto que procure tener sentido.

ESQUEMAS DE CONTENIDO

En un esquema sólo se presentan las ideas principales y secundarias, escritas con pocas palabras o frases breves y que va desde la idea más general a las ideas secundarias. De forma tal que con un simple golpe de vista te podés enterar de la información que contiene un texto. El esquema puede tener diferentes estructuras; los más utilizados son el esquema de llaves y el de flechas.


ESQUEMA DE LLAVES

Se usa para organizar las ideas según su orden jerárquico aunque las relaciones queden un tanto relegadas.

No suele ser muy práctico debido a su organización horizontal.

Idea general Idea principal Ideas secundarias Detalle Detalle Tema Idea general Detalle Idea principal Idea secundaria Detalle

ESQUEMA DE FLECHAS

Muy similar al anterior, pero podría organizarse hacia la derecha y hacia abajo, dándole algo más de espacio.

Si se hace bien, puede derivar en un mapa conceptual o una red.

Idea secundaria

Tema Idea general Idea principal Idea secundaria

Idea secundaria Detalle Detalle

MAPA Y ESQUEMA CONCEPTUAL

Son esquemas de contenidos que constan de tres elementos fundamentales: conceptos, conectores y palabras enlace o nexos.

• Conceptos: los conceptos son las representaciones o imágenes mentales que tenemos de un determinado objeto. Constituyen las ideas claves de un texto.

• Conectores: son las líneas que establecen la unión entre dos o más conceptos. Pueden ser sólo líneas o flechas, según sea necesario marcar una dirección de conexión o una relación determinada.

• Palabras enlace o nexo: son palabras que nos sirven para unir dos o más conceptos y señalan el tipo de relación que existe entre ellos. Sin embargo, no siempre es necesario anotarlas.


MAPA CONCEPTUAL

Proporciona siempre un orden jerárquico, lo que se demuestra en forma vertical. También puede establecer las

distintas relaciones, pero siempre dentro de los mismos conceptos que sirven de eje.

RED CONCEPTUAL

Sirve para establecer las relaciones entre diferentes ideas. Bien hecho, es una herramienta importantísima para comprender adecuadamente los textos. Su

dificultad radica en que, como es la expresión del pensamiento de quien la realiza, muchas veces es de difícil lectura para otros.


3

2

1

1. Tema. 2. Conceptos centrales. 3. Conceptos secundarios.

Por más que tengamos todas las técnicas a nuestro alcance, de nada sirven si no logramos concentrarnos adecuadamente.

Tratemos, de evitar las distracciones externas… e internas.

Veamos…


Una vez que tenemos todo resumido, entendido, interrelacionado y prolijamente esquematizado… ¿qué se hace? Bien, lo más probable es que ya todo esté rondando nuestra mente y sólo haga falta terminar de aprenderlo del todo. Ahí es cuando necesitamos emplear otro tipo de técnicas: técnicas de memorización. Generalmente, esas técnicas son diferentes según el campo de estudio al que nos estemos dedicando. Es decir, que debemos adecuar método, organización y razonamiento atendiendo las características peculiares de cada materia.

Según lo dicho, hay algunos trucos que podemos tener en cuenta; sin embargo, el mejor truco es que te convenzas de que se recuerda mejor aquello que se comprende. También recordamos mejor aquello que hemos trabajado más (lo que hemos subrayado, hecho resúmenes, esquemas mapas conceptuales, etc.).

TRUCOS PARA RECORDAR MEJOR

1) Concentrarse en el estudio. Se memoriza y recuerda mejor aquello a lo que prestamos una mayor atención. Tratá de motivarte para prestar el máximo de atención.

2) Tener conocimientos previos o relacionados. Aquello de lo que sabemos algo ya, o bien hemos pensado antes.

3) Comprender y saber su significado. Aquellas cosas que hemos comprendido o que tienen un significado para nosotros son mucho más fáciles de memorizar.

4) Crea "pistas" para ayudarte a recordar las cosas. He aquí algunos ejemplos: Tipos de pistas:

a) Reglas Mnemotécnicas: Son especialmente útiles si tienes que memorizar algo en materias como matemática o las Ciencias. Esto es el de abreviaturas, ritmos, imágenes acrónimos o números que podemos asociar al material que necesitas memorizar.

b) Fichas rápidas: Muchos estudiantes tras trabajar a fondo, nos las necesitan durante el examen. Veamos. Se trata de escribir un concepto o una fórmula matemática en una cara de la ficha; y en el otro, más detalle o la demostración formal. Se examina uno a sí mismo viendo la ficha y tratando de recordar los detalles de la otra cara.

Lo último:

Estrategias para recordar mejor.


5) Los trucos efectivos para memorizar listas pueden resumirse en tres:

a) Repetir. Repetir las palabras hasta aprenderlas es un viejo truco y funciona. Aunque sea aburrido hay que tener paciencia.

b) Agrupar en categorías. Se agrupan los datos por conjuntos de significados.

c) Asociar cada palabra a algo que conocemos. Mejor a cosas que podemos visualizar y que nos sean fáciles de recordar. Por ejemplo clorofila (una piscina llena de un cloro verde). A veces las asociaciones más disparatadas son las que más se plasman en nuestra mente… y en nuestro espíritu.

d) La escritura en el estudio ayuda mucho a memorizar, también nuestra actitud en clase.

6) Los repasos. Repasar es fundamental y se debe hacer guardando los debidos intervalos en el tiempo que empleamos para no saturarnos.

TOMAR BIEN LOS APUNTES EN CLASE

Los apuntes ayudan a reforzar tu atención sobre lo que dice el profesor. La propia acción de tomar unas notas refuerza nuestra capacidad de prestar atención. Aprendemos a fijarnos en detalles que más tarde seremos capaces de recordar a través de nuestros apuntes.

Sabremos la importancia que le concede un profesor a un tema, una cuestión... Más allá de lo que recogen nuestros libros.

Los alumnos que toman apuntes y los toman bien tienen garantizado el éxito en un porcentaje muy elevado respecto de los que no los toman (o lo hacen de forma muy deficiente...).

EL MÉTODO 6R

Cada hoja para tomar apuntes se divide en tres zonas: columna de apuntes, columna de observaciones y la parte de abajo destinada a un resumen.

Registra. En la columna de apuntes, registra tantos hechos e ideas significativas como puedas. Utilizá oraciones telegráficas. Escribí legiblemente.

Resumí. Después de clase, resumí tus notas escribiendo en la columna de observaciones, palabras clave y frases cortas. Resumir clarifica significados, revela relaciones, establece continuidad, y consolida la memorización.

Recitá. Tapá la columna de apuntes con una hoja del papel. Entonces, mirando las palabras y las frases en la columna de observaciones solamente, recitá en voz alta y con tus propias palabras la clase o tema completo.

Reflexioná. Debés reflexionar haciéndote preguntas, por ejemplo: ¿Cuál es el significado de estos hechos? ¿En qué principio se basan? ¿Cómo puedo aplicarlos? ¿Cómo los integro con lo que ya sé?

Revisá. Pasá diez minutos cada semana repasando tus notas. Si los hacés podrás retener mucho mejor su contenido de cara a los exámenes.

Recapitulación. Deja un espacio al final de cada hoja para una síntesis a modo de recapitulación.

Si nos limitamos a usar reglas o trucos para recordar y “zafar” en el examen, corremos el riesgo de desarrollar una conducta mecánica y poco inteligente, que no nos permite relacionar los conocimientos que teníamos con la información reciente, ni resolver nuevos desafíos.


Ejemplo: MODELO SENCILLO DE 6R

• Mejor una carpeta de hojas sueltas Esto te permitirá agregar, quitar, y re-numerar páginas y materias, especialmente si completás tus apuntes con libros (u otros compañeros que tomen buenos apuntes).

• Organizá y clasificá de forma muy clara todas las hojas. Buenas ideas:

o Encabezados, fecha, incluso número de clase en una esquina.

o Dejá espacio en blanco para añadidos. No se debe ahorrar papel con los apuntes.

Columna de

Observaciones

Resumen

Palabras clave

Columna de Notas de Clase

Cuando se toman apuntes:

• Identificar los puntos principales

• Captar las ideas principales

No se trata de recoger "todo" lo que dice el profesor. De ser así es preferible una grabadora (si el profesor deja).

Parte Final: Una síntesis a modo de recapitulación.

Biblio y Webgrafía: García-Huidobro B., Gutiérrez G., Condemaría G. A estudiar se aprende. Metodología de estudio sesión por sesión. Santiago, Ed. Univ. Católica de Chile, 1998. http://www.estudiantes.info/Blogs/tecnicas/como-estudiar.htm http://www.isftic.mepsyd.es/w3/eos/MaterialesEducativos/mem2006/aprender_estudiar/index2.html http://test-estudiantes.euroresidentes.es/como-estudiar.html

Aportes: Silvana Migazzi, orientadora escolar.

Ahora, solo te resta respirar profundo, Ahora, solo te resta respirar profundo, Ahora, solo te resta respirar profundo, Ahora, solo te resta respirar profundo, y encarar el exameny encarar el exameny encarar el exameny encarar el examen con el mayor de los optimismos: con el mayor de los optimismos: con el mayor de los optimismos: con el mayor de los optimismos:

el que te brinda saber que hiciste todo lo mejor de vos. el que te brinda saber que hiciste todo lo mejor de vos. el que te brinda saber que hiciste todo lo mejor de vos. el que te brinda saber que hiciste todo lo mejor de vos. AsAsAsAsí que:que:que:que:

¡ExitosExitosExitosExitos!!!!

el desafío de aprender a estudiar '14

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