el apocalipsis del apÓstol san juan...
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EL APOCALIPSIS DEL
APÓ STOL SAN JUAN
COMENTADO POR JESÚS
LA NUEVA REVELACIÓ N
Año 2001
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Cuando leas el Apocalipsis, hazlo desde la intuición, tratade separar lo anecdótico. Cada relato tiene un secreto, éstese revela únicamente a la intuición, no así al razonamiento
YUKTESWAR
Tu contacto con el Apocalipsis seráfundamental. Completará la estructura delas bases que proyectan tu purificación.
JESÚS
Comprenderás en el Apocalipsis la relación y diferenciación entre el pensamiento deOriente y Occidente.
KRISHNA
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VIDA DE SAN JUAN: Considerado como el apóstol más joven, la fecha de su
nacimiento fue aproximadamente en el año 15, en Betsaida de Galilea,
hermano de Santiago el Mayor, sus padres fueron Zebedeo y Salomé, hermana
de la Virgen María. Se acercó a las enseñanzas de Juan Bautista, siguiendo
después a Jesús, convirtiéndose en su discípulo predilecto. Junto con Santiago
y Pedro, es testigo de la Transfiguración de Jesús y de su agonía en el Huerto.
Asimismo, es el único apóstol que lo acompaña al pie de la cruz, confiándole el
maestro, en ese dramático momento, el cuidado de su madre. Después de
Pentecostés se queda en Jerusalén hasta la muerte de la Virgen, siendo una de
las “columnas de la Iglesia” (Gal.2,9). Se trasladó luego a Éfeso (Asia Menor),
y en la persecución de Dominicano contra los cristianos (81-95) fue llevado
preso a Roma y arrojado a un caldero de aceite hirviendo del que salió
milagrosamente ileso. Condenado a trabajar las minas de sal, es liberado
después de la muerte de Dominicano. Trasladado a la isla de Patmos, allí
escribió el Apocalipsis (Gr. Apókalypsis: Revelación), último libro del Nuevo
Testamento. Además de este texto y tres Epístolas, compuso el Evangelio que
completaba los Sinópticos de Mateo, Lucas y Marcos, profundizando la visión
espiritual del mensaje de Jesús. Vivió hasta aproximadamente el año 100,
cerrándose con su muerte el denominado período apostólico de la Iglesia.
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EL APOCALIPSIS DEL APÓSTOL SAN JUAN
1. Revelación de Jesucristo por medio de la cual Dios manifiesta a sus siervos aquello
que pronto debe suceder, anunciándolo y explicándolo por medio de su ángel a su
siervo Juan, el cual habiéndolo visto, testifica la Palabra de Dios y el testimonio de
Jesucristo.
Todo lo concerniente al Padre, Juan ya lo había visto y oído, todo lo que él
necesitaba saber ya se le había transmitido, pero en un momento fue débil de fe y pidió
más. Ese fue el momento que aprovechó el demonio para presentársele enmascarado. Si él
no se hubiese considerado falto, nada hubiese necesitado. Realizó una invocación desde esa
debilidad, y esa fue su falla.
No invoquen desde ese lugar, sino llámenme seguros sintiéndose hijos y hermanos
míos, pues entonces ninguno será débil y nada le faltará. Juan tuvo un poco de miedo y se
sintió carente. Eso es lo que no hay que hacer. Lo que aquí se manifiesta es principalmente
la fe, que es el punto principal que se levanta como estandarte.
2. Bienaventurado el que lo lee y los que escuchan las palabras de esta profecía y
guardan las cosas en ella escritas, pues el momento está cerca.
Yo no dije profecías. En la sentencia “el momento está cerca” ya hay una amenaza a
futuro, y esa es la primera oración con la que trata de infundir miedo.
La profecía que si bien es algo que puede llegar a realizarse no es para tomarla
totalmente en cuenta, pues hay que situarse en el momento en que se vive, el presente, el
futuro vendrá por añadidura, de acuerdo adonde ahora estás situado.
3. Los destinatarios: Juan y las siete Iglesias que están en Asia.
Si fuera Yo el que hablara, hablaría para todos, pues mi Iglesia es una sola, y mi
mensaje es para todos los hombres.
No importa en dónde ni con quién estés, si tienes tu corazón abierto, y tu mente
purificada y calma para recibir la palabra de Dios.
4. Gracia a vosotros y paz de Aquel que es, y que era, y que viene.
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Utiliza, cuando dice “Ángel que es, y que era, y que viene”, una oración muy
antigua, de cuando los hombres esperaban al Salvador, y la usa para ponerse en el lugar de
Él.
La salvación está en ti desde el momento en que te conectas con la Palabra y la
Gracia te penetra. No importa qué credo profeses, ni quién seas.
5. Y los siete Espíritus que están delante de su trono.
Sigue sacando palabras de una vieja liturgia (está robando textos religiosos). Utiliza
antiguos textos y creencias para ponerse en un lugar divino. [Se presenta una imagen
mostrando los espíritus alrededor del cuerpo, al pasarlos se manifiesta un gran mar de luz:
“Atravesadlos y estaréis conmigo”]
Los siete espíritus abarcan todos los estados de conciencia, al elevarte sobre estos
alcanzarás la Gracia Divina.
6. Y de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el soberano de los
reyes de la Tierra.
Yo no fui soberano de los reyes de la Tierra. Si los reyes de la Tierra me hubiesen
escuchado y hecho caso, hubiesen renunciado a sus tronos terrenales.
En esta oración empieza con el doble juego que sigue en todo el libro, y que
consiste en presentarse como Jesús al principio y enseguida bajar a la Tierra mostrando su
poder terrenal.
Yo no soy ningún “primogénito de los muertos”, lo soy de los vivos, y no me
interesan los grandes reyes de la Tierra ni los grandes reinados terrenales que el mismo
demonio me ofreció.
Se disfraza de un espíritu que ofrece posesiones en la Tierra, ese es el juego con el
que va a manejar el libro, como él se maneja. Se presenta como espíritu y en realidad es un
objeto más, atrapado por el mundo de los objetos. Ese es el mundo que a él lo maravilló, lo
obnubiló, y ahí quedó atrapado. Esa fue su caída.
No importa ser príncipe o mendigo, ahí se encuentra la dualidad. Sitúate en la
Unicidad y verás a Dios.
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7. A aquél que nos ama, y que nos ha lavado de nuestros pecados con la sangre, e hizo
de nosotros un reino y sacerdotes para el Dios y Padre suyo
Cuando yo dije que los iba a salvar, nunca dije que fuera con sangre sino con mi
Amor.
Aquí, cuando se habla de sangre, ya empieza a impresionar a quien lo lee, usando
imágenes fuertes. La única vez que hablé de sangre fue para establecer un ritual, así me
incorporaba a vuestro cuerpo a través de una bebida muy usada que tenía ese color. Salvo
ahí, siempre hablé de salvación mediante al amor y el perdón.
Olviden el cuerpo y todo su ritual, porque lo que se debe inyectar es el espíritu
divino, único capaz de toda transformación.
8. A Él sea la gloria y el imperio por los siglos de los siglos, Amén.
Sigue usando viejas palabras religiosas mezcladas con otras profanas. Así cuando
habla de imperio habla de su imperio, y va a utilizar a través del texto ciertas palabras
grandilocuentes con significado terrenal.
Sepan interpretar más allá de las palabras. Simplemente esto corresponde a otro
reino, el reino de Dios.
9. Ved, viene con las nubes, y le verán todos los ojos, y aún los que les traspasarán.
“Todos los ojos” no es una frase mía. Empieza a describir imágenes que
impresionan, paralizan, activan la imaginación. “Traspasarán” también es como un verbo
violento y encierra un tiempo futuro, y eso tampoco me pertenece. Yo usé tiempos de
presente, calma y gozo.
En lo rebuscado no me encontraréis. Buscadme en las palabras más simples capaces
de llegar a cualquier corazón.
10. Y harán luto por Él todas las tribus de la Tierra.
Aquí se presenta una vez más como si fuera Yo. Deben desprenderse de la imagen
corporal que se manifiesta en la muerte. El espíritu se manifiesta en todas sus facetas.
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11. Sí, así sea. “Yo Soy el Alfa y Omega” dice el Señor Dios, que es, y que era, y que
viene, el Todopoderoso.
Sigue apropiándose de Mí, y de mi Padre. Tratará en todo el libro de hacerles creer
eso.
Desde el momento en que tiene un principio y fin no es eterno. El alma al ser
inmortal te conecta a un plano superior ¡Cuídate que no te engañen!
12. Yo, Juan, hermano vuestro y copartícipe en la tribulación y el reino y la paciencia
de Jesús.
Si Juan hubiera tenido mi paciencia hubiera esperado quieto en sus oraciones, en su
altar personal, el glorioso momento de encuentro conmigo.
Yo no le pedí qué escribiera ninguna otra cosa que no sea sobre mi vida, pero se
puso a escribir sus propias visiones, y su mente, bajo el viento de su imaginación, lo
terminó perdiendo.
Mi paciencia es quietud, contemplación, ir hacia adentro y oración, para que todo lo
que se les presente en su interior sea puro, y sólo un mensaje claro de la presencia Divina.
Deben orar pidiéndole a Dios que todo lo que viene sea realmente de Él.
Juan por ser hombre fue débil, y el demonio se apropió de su espíritu para hablar a
través de él. El error que cometió es no haber estado alerta.
13. Estaba en la isla llamada Patmos, a causa de la palabra de Dios y del testimonio de
Jesús.
Es una cita geográfica y solamente eso. No tiene importancia el lugar geográfico en
que uno esté. Yo los mandé por toda la Tierra, cualquier punto cardinal daba lo mismo.
Quizás el hecho de estar en una isla le hizo sentir más miedo, lo hizo sentir más débil.
No importa el lugar dónde estés si tu cordón de plata es fuerte y vibra al unísono
con el mío. No temas a la distancia si junto a Mí estás.
14. Me hallé en espíritu en el día del Señor.
Cualquier día es bueno para encontrarse con vuestro espíritu y todos los días son del
Señor. No hay diferencia entre uno y otro.
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Lo importante es la conexión a lo largo de todo tu día. Mantenedme dentro vuestro
y el corazón os hablará.
15. Y oí detrás de mí una voz fuerte como de trompeta que decía: “Lo que vas a ver
escríbelo en un libro y envíalo a las siete Iglesias; a Éfeso, a Esmirna, a Pérgamo, a
Tiatira, a Sardes, a Filadelfia y a Laodicea..”
Yo no le pedí que escriba sino que divulgue lo ya escrito, y que haga una Iglesia
nueva donde no había ninguna. Aquí ya el demonio se le había impuesto a Juan, haciéndole
creer que tenía un nuevo gran papel, una nueva función: ser portavoz de una novedad.
Desoigan las voces rimbombantes y que os hablan con gran exclamación; la
verdadera voz se os aparecerá suave, clara y transparente, sin dar lugar a ningún tipo de
duda.
16. Me volví para ver la voz que hablaba conmigo. Y vuelto vi siete candelabros de
oro.
A mi nada me hubiese costado que en vez de ver candelabros me hubiese visto
porque eso es lo único que el demonio no puede hacer, tener mi imagen, puede tenerlas
todas pero no la mía.
No me presenté porque era esta la batalla de Juan, y todos, así como Yo mismo en el
desierto, tienen en algún momento que enfrentarse con él. Es inevitable para todos los
hermanos que están en la Tierra tener que enfrentarlo en un mano a mano.
Él siempre los va a querer tentar. Si Juan hubiese orado con más fuerza y pedido mi
fuego esos candelabros hubiesen desaparecido. La clave está en orar, cerrar los ojos,
conectarse conmigo, con el Padre, y a través de nuestra ayuda, expulsarlo.
Puede atacar a través de alguien querido a quien usa como soporte, pero si no tiene a
nadie nos puede pasar lo que me pasó a Mí o a Juan. Se presenta de una manera
espectacular, con grandes ofertas, puede aparecer disfrazado como hizo en este libro,
entonces hay que dilatar el tiempo, saber esperar, no hacer lo que hizo Juan.
La debilidad de demonio es que es impaciente, no puede esperar mucho tiempo para
lograr un propósito, necesita que se le obedezca rápidamente. Por eso les recomiendo que
concentrados en Mí, también en Yukteswar, Yogananda y los demás maestros, estiren los
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tiempos y nos pidan a nosotros, a través de las oraciones, que les revelemos a quién
realmente tienen delante. Cuando el demonio ya no puede tentarlos con cosas materiales
puede adoptar formas sutiles y hacerlo con cuestiones espirituales. Pero hay algo que el
demonio no resiste, es que se lo niegue, se le diga que no, no lo reconozcan, lo ignoren. Si
él se da cuenta de que no pegó profundo vuelve a la carga con más y más, pero no se
preocupen ni se asusten que tiene una batería limitada y en un momento se agota, entonces
desaparece.
Esta batalla personal se da durante toda la vida, hay que estar alerta siempre, digo
“alerta” pero no preocupados, instalados en mi Conciencia. Estando conectados no se
preocupen, siempre los protegeré y salvaré.
El oro de la Tierra tiene un brillo esplendoroso pero perenne; refuljan en el brillo
Eterno que no perecerá jamás y los mantendrá unidos a la Luz Divina. No se confundan.
17. En medio de ellos, a alguien semejante a un Hijo del Hombre.
Semejante a un Hijo del Hombre: es una fuerza oscura enmascarada, es la ilusión
alojada en los planos de conciencia inferiores.
Todo lo que sea material se desvanece. Mantente en tu centro eterno para que tu
espíritu sea divino.
18. Revestido de una larga túnica ceñida a su pecho con una faja de oro.
Es la forma de presentarse como Príncipe, como una promesa.
No importa el atuendo si puedes traspasar la imagen y leer en el corazón. Detente en
el corazón.
19. Su cabeza y sus cabellos tenían la blancura de la nieve.
Está investido con la apariencia de lo espiritual.
El tratar de dar una imagen de sabiduría es dar peso a sus palabras. Juan no se dio
cuenta que la sabiduría está en saber discernir dónde está la luz y no en quedarse en la
oscuridad de la imagen.
20. Los ojos llamas de fuego.
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Los ojos son las puertas del alma. Es el fuego no divino, sino demoníaco.
Despréndete de aquellos ojos llameantes que tratan de hechizar tu mente; conéctate
con los ojos reflejos del alma que te llevarán al descubrimiento de la Verdad.
21. Sus pies bronce fundido en el crisol.
Durante tanto tiempo reinó que está anclado en todos los subconscientes.
Nunca te imagines que estás sujeto a algo inamovible, pon alas a tus brazos y nubes
en tus pies, ellos te trasladarán al estado de conciencia en que quieras estar.
22. Su voz como el rugido de las grandes cataratas.
Es un engaño que suena como a los sonidos astrales. Depende del estado de
conciencia en que te encuentres podrás escuchar la voz, la misma voz, como un rugido o
como el canto de un ruiseñor. Sitúate y escucharás la melodía más armoniosa.
23. La mano derecha tenía siete estrellas.
Son los siete planos inferiores de su dominio, los siete pecados capitales.
Siete es el número que se utiliza tanto en las cosas luminosas como en las oscuras.
Aplícalas donde haya luz.
24. De su boca espada de doble filo.
No hay de dónde asirse, te termina matando.
Las lenguas viperinas son utilizadas como espadas. Las lenguas que no tienen
idioma ni nombre son utilizadas como rayos de luz.
25. Su rostro como el Sol cuando brilla con toda su fuerza.
Se observa el poder de la ilusión y por qué es tan difícil liberarse. Es la
manifestación de la energía destructiva.
Todo está en ti. Sitúate en el plano de conciencia correcto y la luz que irradies y que
atraerás, será la adecuada para conectarte con los demás a través mío.
26. Al ver esto, caí a sus pies como muerto.
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Es el poder que tiene el ángel caído sobre los humanos. Su fuerza, su potencia con
la que somete.
Suelta la oscuridad y camina por la luz, entonces podrás ver aquel camino real hacia
Dios. Sólo así podrás ser uno con Él.
27. Pero él, tocándome con su mano derecha me dijo: “No temas, yo soy el Primero y el
Ultimo, el Viviente.”
Al tocar con su mano derecha desconcierta, engaña, se disfraza. Parte del mismo
engaño, del mismo disfraz, hacer creer que tiene vida propia, que puede salvar, que es
capaz dar vida.
Se llena de mis palabras, por eso la mano derecha, por eso habla de la vida, por eso
dice “no temas”. Como que tiene muchas lenguas y usa mis palabras para someter, para
que Juan se entregue.
Concéntrate en tu Ser Eterno y no tendrás error, sólo caminarás hacia Mí, sin
confusión. Sólo verás la puerta que se abre, no habrá obstáculos, no habrá disfraces, se
caerán, se disolverán con la luz.
28. Estuve muerto, pero ahora vivo para siempre y tengo la llave de la Muerte y del
Abismo.
Es más de lo mismo. Son más oraciones que agregan más confusión. “Estuve
muerto” (cuando estaba liberado antes de caer, lo que él llama muerto era su estado anterior
con otros ángeles libres)
“Vivo para siempre”, en el interior de los hombres, en la Tierra, por eso llama vida
al nacer en el interior de los seres humanos.” “Soy vida porque soy energía.” “Soy vida
como un estado de ceguera”, que es la ceguera del ser humano, y esa energía es un gran
motor que mueve desde adentro a los hombres ciegos.
“Tengo la llave de la Muerte y del Abismo”, dos engaños más. La llave de la muerte
no es de él. Esas nociones, como consecuencia de lo anterior, son reales, pero la vida no es
del demonio. Son reales porque si el hombre cree que él es la Vida terminará en la Muerte y
en el Abismo. La muerte verdadera no es un abismo, pero la muerte en vida, que es de la
que él habla aquí, conduce al Abismo ¿Qué es morir en vida? Entregarse al demonio.
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Sólo vencerás los obstáculos sabiendo que eres eternidad, y la eternidad no tiene
principio ni fin. Despierta de la ignorancia desde la sabiduría misma de la eternidad.
29. Escribe lo que has visto, lo que sucede ahora, y lo que sucederá en el futuro.
No sucederá nada. Es otro engaño más creer en lo que sucederá, creer en lo visto. La
clave es quitarle realidad a lo visto o lo que se está viendo, y quemarlo ahí mismo. Esto es
quemar lo que se tiene enfrente, y quemarlo al demonio sin miedo.
Juan tiene miedo en un principio, y también duda. Yo también tuve miedo, pero ese
es el último anzuelo, es la última red que nos tira para atraparnos ¿Cuándo tuve miedo? Al
aparecer en el desierto y verlo de frente porque lo vi con ojos humanos, desde mi condición
humana. Es como un gran mago y por momentos me hizo olvidar de mi condición divina.
Hay que verlo desde un altar que es donde estoy ahora. Ante ese enfrentamiento,
solo desde el altar divino dentro de cada uno, no tendrán miedo. Sólo desde ahí.
Llévame hacia el centro de tu altar interior, que hay en tu alma y no habrá error, y
no podrá entrar. Desde las tantas confusiones que nos quiere mostrar él mismo se destruirá
al tratar de mirarse en el espejo de tu propia alma. En el espejo de tu alma se fundirá. Sólo
desde el alma eterna lo verán pasar.
30. El significado misterioso de las siete estrellas que has visto en mi mano y de los
siete candelabros de oro es el siguiente: las siete estrellas son los Ángeles de las siete
Iglesias y los siete candelabros son las siete Iglesias.
Hay más de siete Iglesias, como que siguen siendo trucos de un ilusionista. No hay
que pensar en un número de Iglesias, sino en una sola Iglesia dentro de uno.
Juan ya está impresionado a sus pies, y son más cosas para impresionarlo, para
apabullarlo. Una vez que el ser humano tiene miedo y él lo siente y se da cuenta, ganó gran
parte de la pelea. Entonces sigue desprendiendo malabares, son más herramientas de
dominio. Así, son siete pecados, no son siete Iglesias, los que tiene en la mano disfrazados.
Los siete niveles de conciencia son el engaño. Sólo medita en el alma interior, hasta
que ella misma se transforme en luz, en una sola estrella, y esa luz se fundirá en Mí, sólo en
Mí.
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31. Escribe al Ángel de la Iglesia de Éfeso: “El que tiene en su mano derecha las siete
estrellas y camina en medio de los siete candelabros de oro”.
Busca al enfrentarse al Ángel llegar al Padre para mostrarle que ganó, que el Padre
no es el único. Además que no está solo, puede tomarse una revancha, subir un escalón más
en su ambición de poder.
Sólo medita en Mí en el Ser, en la esencia, en tu alma.
32. Afirma: “Conozco tus obras, tus trabajos y tu constancia”.
Conoce la naturaleza del Ángel y también lo adula (lo mismo que hace con los
hombres)
Realízate, realiza tu alma, y ahí seremos Uno.
33. Se que no puedes tolerar a los perversos, has puesto a prueba a quienes usurpaban
el título de apóstoles y comprobaste que son mentirosos.
Continúa adulando. “Los que usurpaban el título de apóstoles” son los que en algún
momento dudaron.
Cuando medites en tu alma y en tu Ser ya no habrá dudas, ya no habrá nada, sólo
será el gozo y la bienaventuranza.
34. Sé que tienes constancia y que has sufrido mucho por mi nombre sin desfallecer.
También se disfraza de Dios, y si hace falta los adula, los alaba, les ensalza virtudes.
[A Juan:] Te hace creer que todo el sufrimiento era tuyo y el sufrimiento fue parte
de tu propia ilusión.
[Al demonio:] Ahora no podés ya más reflejarte en la luz porque se abren las
compuertas de la luz hacia el único Padre, y se desintegrarán los demonios ante tan gran
espejo. Las almas se despertarán hacia el único Padre y se elevarán hacia Él.
35. Pero debo reprocharte qua hayas dejado enfriar el amor que tenías al comienzo.
El amor por lo terrestre.
[A Juan:] Has tenido apego por lo terrenal y creías que eso era estar en Dios, creer
en Jesús, estar en Mí. Nunca podías meditar, habías perdido el estado de tu propia alma.
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Has arrastrado a muchas almas a tu propia confusión, ahora debes meditar en tu verdadera
alma.
36. Fíjate bien desde dónde has caído, conviértete y observa tu conducta anterior.
Cuando el demonio habla del pasado trata de llevar al pasado, al comienzo, a un
tiempo anterior a la conversión.
[A Juan:] Tu alma era tan pura e intacta, y perdiste esa alma que te liberaba cayendo
en las garras de tu ambición y poder. Mira hacia atrás y estarás arrepentido a los pies del
Padre. Medita en tu alma, y las demoníacas palabras ya no podrán salir de tu boca.
37. Si no te arrepientes vendré hacia ti y sacaré tu candelabro de su lugar
preeminente.
Es una amenaza más. Nadie saca la luz a quien ya la tiene, en todo caso es uno
mismo quien la deja debilitarse.
[A Juan:] Medita en tu luz dejando que irradie tu propia alma.
38. Sin embargo tiene esto a tu favor, que detectas la conducta de los Nicolaitas, lo
mismo que yo.
Trata de buscar una causa común, de hermanarse en algo que los una.
[A Juan.] Sólo a través del amor podrás acercarte y entenderás cuan grande es el
Padre, caerás a los pies de Él, rescatando tu humildad y te encontrarás con Él, sólo así
podrás seguir el camino hacia la luz.
39. El que pueda entender que entienda lo que el Espíritu le dice a las Iglesias.
El Espíritu no le dice nada a las Iglesias, pero lo que el demonio dice es también una
señal de alarma, una confusa señal que hay que atender, oír, respetar, porque la condición
humana está en peligro. Este consiste en creer todo lo que dice, en creerle: Él es el Abismo.
Cuanto más le creas más aferrado estarás a la oscuridad. Allí entrarás a tu propio calvario.
Suelta el calvario y entra en la verdadera luz que es el alma, la iluminación, el Ser, en la
esencia de todos los seres, de todas las cosas, en dónde las máscaras se derrumban.
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40. Al vencedor le daré de comer del Árbol de la Vida que se encuentra en el Paraíso
de Dios.
Esta frase es mía y se la apropia. Engañados con lo que es la vida, con lo que es el
Paraíso, es fácil caer en la tentación.
[Al demonio:] Las palabras y el camino son los obstáculos que fuiste armando, pero
las almas irán creciendo y se irán acercando a Mí, y ya no dispondrás de la lectura de tu
engaño para poseerlas.
41. Al Ángel de la Iglesia de Esmirna escríbele: “Estas cosas dice el primero y el último,
el que estuvo muerto y volvió a la vida”
Sigue con palabras que tienden a confundir, a dar vuelta el sentido de las cosas,
como cuando dice “el primero y el último, el que estuvo muerto y volvió a la vida”.
Resucita (despierta) a la luz del Padre, allí donde te encuentras estás muerto. Mira la
estrella de luz y asciende por ese canal de luz. [Aparece la siguiente imagen: la Tierra
oscurecida, y de ella emerge un canal de luz]
Los hombres son zombies caminando, están todos muertos, lo único que tienen vivo
es el alma y no lo saben ¡Despierten!
El Padre me envió para despertarlos y sólo unos pocos lo entendieron. Ahora hay
muchos maestros que están mirando hacia acá, haciendo conexiones de luz para que las
almas escuchen. Cierra los oídos externos.
42. Conozco tu tribulación y tu pobreza, pero tú eres rico - y la maledicencia de parte
de los que se llaman judíos y no son más que la Sinagoga de Satanás.
No hay riqueza en esa Iglesia. Además nunca una Iglesia habla mal de nadie como
cuando alude a la “Sinagoga de Satanás”. Ahí está tirando una semilla de odio. La Iglesia es
universal a todas las razas, no desprecia a ninguna, en la Iglesia entran todos.
Siempre usa términos extremos y los opone, ese es su juego: hablar de vida cuando
habla de lo contrario. Emplea la sutileza de unir términos opuestos.
No se puede unir la luz con la oscuridad, estás en una o en la otra. Antes no podías
elegir porque eras ignorante. Ahora te otorgaron el conocimiento de poder ver. Estando la
luz y la oscuridad puedes ver y elegir, sigue la luz. Tu actitud puede despertar otras almas.
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No actúes afuera sino adentro, porque es la única manera de trascender el plano de la
Tierra. La única manera de vencer al demonio es quedándose quieto. Vence tu batalla diaria
adentro y no afuera.
43. No temas lo que vas a padecer. He aquí que el diablo va a meter a alguno de
vosotros en la cárcel, para que seáis probados y tendréis una tribulación de diez días.
Él es la cárcel, no de diez días sino que es la cárcel eterna. Empieza a nombrarse a sí
mismo como un personaje de afuera, aquí lo está presentando y lo invita a actuar.
[La imagen lo presenta en el escenario. El diablo se presenta a sí mismo, entrando
de negro, desdoblándose en el que lo presenta de blanco: puede cambiar de traje, es lo
opuesto de sí mismo. Es el juego con que se va a mover el texto, siempre de un extremo al
otro.]
No temas quedarte quieto. No temas a los de afuera que el demonio se va a
representar en los demás. Sólo quédate quieto y conéctate con la luz del Padre. La luz del
Padre no tiene opuestos. Todo es luz, todo es beatitud, no hay deseo, ni sensación de deseo,
por lo tanto tampoco hay insatisfacción, todo es plenitud.
Pocos sintieron esa plenitud, a la mayoría de los hombres los sigue atando el deseo.
El alma eres tu, no es una parte, es todo alma.
44. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.
No hay muerte en quien está realmente conmigo. Aquí usa la palabra muerte como
para poner una barrera, como para atar, para someter. Pero quien vive conmigo nunca
muere.
Vuelve a atemorizar con la muerte a quien lee estas palabras.
No te impongas límites en la búsqueda de la luz. La luz del Padre es ilimitada
supera todos tus propios límites y no te detengas hasta centrarte en ti mismo.
45. Quien tiene oído que escuche lo que el Espíritu dice a las Iglesias. El vencedor no
será alcanzado por la segunda muerte.
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Nuevamente son palabras mías. Vuelve a crear sutilmente miedo a la muerte. La
segunda muerte es no poder liberarse, quedar enganchado en sucesivas reencarnaciones por
buscar la satisfacción de deseos nunca satisfechos.
[Aparece la siguiente imagen: una recta representada por una espada de dos filos
sobre la cual corre la vida; no hay punto de llegada, se sube y se baja infinitamente. Estar
en la recta es obedecerle a él].
El único camino es encontrarte a ti mismo. Sigue la estrella luminosa, lo que
muestra es que no hay un camino. Estás en este mundo, en ti hay una pequeña luz, en la
medida en que te sumerjas, todo es luz, no hay un alma que deba caminar, por lo tanto no
hay una camino. Esta palabra la uso como metáfora pero no la vean como un esfuerzo,
como un movimiento.
46. Al ángel de la Iglesia de Pérgamo escríbele: El que tiene la espada de dos filos dice
esto:
Esta espada de dos filos es la recta que mostré antes, es la recta donde sostiene el
escenario que presenta, donde va actuar. Cuando se cae de la espada, es la segunda vida de
que habla, la no liberación.
La palabra “vida” sólo toma significado en el estado de liberación. Si hay luz, está
la vida.
47. Yo sé donde mora: allí donde está el trono de Satanás.
Busca incorporar al Ángel a sus filas. Él es la seducción. Satanás no tiene trono.
El demonio se presenta con la posesión de todos los atributos que son deseados y
buscados del plano externo, y eso lo inviste de poder. El hombre en su exterioridad ve en él
el ser que supo conquistar todos sus deseos. Es exactamente lo opuesto a la búsqueda del
Padre.
48. Y con todo retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aún en los días de
Antipas, el testigo mío fiel, fue muerto entre vosotros donde habita Satanás.
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Nuevamente aquí subvierte, cambia la historia. El rey Antipas no fue fiel a Mí, lleno
de crueldades se mató a sí mismo pecando. Trata de ponerlo en un buen lugar y de culpar a
los demás por cosas que hizo él.
Aquí se arroja Satanás a los hombres. [En la imagen aparece tirando semillas en la
Tierra, el sembrador Satanás se siembra a sí mismo entre los hombres. Se disemina por la
Tierra.]
Una vez que pudo cautivar la atención de los hombres, el paso siguiente es sembrar
estas semillas que representan la promesa que en la búsqueda externa él va a poder cumplir
los deseos.
49. Pero tengo contra ti algunas cosas, por cuanto tienes allí a quienes han abrazado la
doctrina de Balaam el que enseñaba a Balac a dar escándalo a los hijos de Israel, para
que comiesen de los sacrificios de los ídolos y cometiesen fornicación.
Sigue con las acusaciones, quien está del lado de la luz no acusa, perdona y sana.
Aquí comienza otra parte de la estrategia. Una vez que hace la promesa e induce a la
consecución de los deseos, no conforme con ello, le manifiesta al hombre que la no
búsqueda de esa consecución lo va a llevar a dolor. La inacción es sufrimiento, tiene que
moverse inevitablemente a la consecución de sus deseos.
50. Así tienes también a quienes de manera semejante retienen el culto a los
Nicolaitas.
La doctrina y el culto de los Nicolaitas es a lo externo, a las pasiones mundanas. El
demonio pone a los Nicolaitas como ejemplo de aquellos que han logrado la consecución
de sus deseos, porque desde la conciencia externa el hombre ve en el prójimo que ha
logrado conseguir su propio deseo como al hombre realizado.
51. Arrepiéntete, pues sino vengo a ti presto, y pelearé contra ellos con la espada de mi
boca.
Quiere atemorizarlos, pero ya los tiene de su lado. Igualmente con la amenaza los
paraliza.
Amenaza a aquellos que aun están quietos para inducirlos al movimiento.
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52. Quien tiene oído escuche lo que el Espíritu dice a las Iglesias, al Vencedor le daré
el mana oculto.
Para escuchar al demonio tiene que haber una promesa, y ese maná de que habla es
la podredumbre y la pérdida del alma.
Sin duda que a través del pacto el demonio llega a cumplir el deseo del hombre,
pero lejos de sentirse pleno, este lo único que consigue es la alineación de su alma.
53. Y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, que nadie sabe sino aquel que lo
recite.
El nuevo nombre es hijo de Satán y servidor de la oscuridad.
Una vez que ha sido tomada el alma, el hombre opera en este plano como
instrumento de la voluntad oscura de Satán.
54. Al ángel de la Iglesia de Tiatira escríbele: “Esto dice el Hijo de Dios, el que tiene
ojos como llamas de fuego, y cuyos pies son semejantes a bronce bruñido”.
Acá hace su presentación. Está tan orgulloso de sus atributos que los vuelve a
repetir.
Sólo el demonio puede hacer alarde de su poder para asombrar y maravillar. Mi
Padre actúa con humildad.
55. Conozco tus obras, tu amor, tu fe, tu beneficencia y tu paciencia, y que tus obras
postreras son más que las primeras.
Solo ostentando conocimiento puede cautivar la atención.
El demonio busca distraerlos mostrándoles todo lo irreal.
56. Pero tengo contra ti que toleras a esa mujer Jezabel que dice ser profética y que
enseña a mis siervos y los seduce para que cometan fornicación, y coman lo
sacrificado de los ídolos.
Esta mujer era una verdadera devota de Dios, por lo tanto una verdadera amenaza
contra la doctrina adormecedora de la Iglesia.
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El demonio ataca con injurias, se vale de palabras hirientes para quienes son
verdaderos fieles de mi Padre.
57. Le he dado tiempo para que se arrepienta, más no quiere arrepentirse de su
fornicación.
Él la ha tentado mil veces pero no ha caído. Igualmente la acusa para generar en los
demás el desprecio.
El triunfo mayor del demonio es conquistar a través del desprecio a quienes adoran
a Mi Padre.
58. He aquí que a ella la arrojo en cama, y los que adulteren con ella (los arrojo) en la
grande tribulación si no se arrepienten de las obras de esta mujer.
La idea es generar confusión y miedo para poder seguir penetrando en estos estados
vibratorios.
A través de su insistencia logra perturbar el alma de quienes quieren seguir en la
luz, y así se vuelven presa de esa vibración que los arrastra.
59. Castigaré a sus hijos con la muerte, y conocerán todas las Iglesias que Yo Soy el
que escudriñó entrañas y corazones.
He aquí su manifiesto ¿Habéis sentido al Hijo del Hombre hablar así, sin amor a sus
hermanos?
Mi Padre no abandonaría a quienes quieren ser salvados.
60. Y retribuiré a cada uno de vosotros conforme a vuestras obras.
Sigue con las promesas y el resultado no puede ser sino el sufrimiento.
Continua endulzando los oídos de quienes se encuentran atrapados víctimas de los
deseos.
61. A vosotros, los demás que están es Tiatira, que no seguís esa doctrina, y que no
habéis conocido las profundidades, como dicen ellos, de Satanás no les echaré otra
carga.
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Les está hablando a sus sirvientes, y los está alentando a que continúen con su
actitud que ya les llegará su recompensa.
No hace más que promesas para quienes lo sigan. Continua tentándolos para que se
olviden de Mi Padre.
62. Solamente guardad bien lo que tenéis, hasta que yo venga.
Que guarden su devoción por él, hasta que pueda apoderarse de su alma.
El demonio advierte a los que le siguen que le sean fieles y que no se desvíen.
63. Y al que venciere y guardare hasta el fin mis obras, les daré poder sobre las
naciones.
El poder sigue siendo un gran aliciente para la mayoría de los que están en este
plano. A mí me hizo este ofrecimiento y mucho más también, pero aquel que va en busca
del Padre no está interesado en ningún tipo de poder.
La conquista del poder no es una condición para alcanzar la liberación.
64. Y las regirá con vara de hierro y serán desmenuzados como vasos de alfarero.
Siempre serán regidos por las leyes del infierno y perderán la condición de alma
libre.
El demonio reconoce muy bien su hábitat y amenaza permanentemente a los que no
lo sigan.
65. Como yo la recibí de mi Padre, y le daré la estrella matutina.
Él recibió del Padre su alma, pero no es lo que puede ofrecer sino su contraparte
oscura.
Mi Padre le otorgó un alma purificada que él ennegreció con su ansia de poder.
66. Quien tiene oído escuche lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
Los exhorta e emplear sus sentidos externos remarcando la realidad de los mismos.
Con los sentidos externos el hombre solo capta la realidad del mundo y no se da
cuenta de la Única Verdad.
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67. Al Ángel de la Iglesia de Sardes escríbele: “Esto dice el que tiene los siete espíritus
de Dios y las siete estrellas.”
Se anuncia como quien tiene tomados los siete chakras en el hombre.
Los siete chakras deben ser siete canales de luz, pero en este mundo están tomados
por los demonios, entonces estos canales están obstruidos. Lo que hay que lograr es su
luminosidad, y en el momento en que sean luminosos no serán de este mundo. Esta es la
completitud del círculo.
El círculo comenzó con los chakras luminosos pero después se fueron llenando de
impurezas hasta llegar la colmo de la oscuridad. Cuando esta oscuridad estalle dará lugar a
la luz y a la pureza inicial. Este es el camino natural.
Hay quienes pueden purificarse antes de llegar al colmo de la oscuridad, pero la
gran parte de la humanidad realiza ese círculo en conjunto. Ahí termina el ciclo porque una
vez que los canales se han purificado no se puede pertenecer a este plano.
68. Conozco tus obras: se te tiene por viviente pero estás muerto.
A aquellos devotos verdaderos los quiere desestabilizar mostrándoles la dualidad
vida-muerte.
Lo que esto señala es que lo demoníaco no existe, no tiene Ser, es el momento en
que se revela la irrealidad de esta “realidad”. Los demonios desaparecen, se esfuman, por
eso es que no tienen existencia real, están muertos. Es como el viento y el que lo mueve.
Sin el que lo mueve no existe el viento.
69. Ponte alerta y consolida lo restante que está a punto de morir, porque no he
hallado tus obras cumplidas delante de mi Dios.
Le está haciendo un reclamo porque no lo adoraron.
El demonio se muere y sabe que no va a quedar ni una lápida que lo recuerde, como
si su obra se esfumara con él. No queda nada, todo desaparece y es que la luz desvanece la
oscuridad. Está solo. Es ausencia de luz.
70. Recuerda, pues, tal como recibiste y oíste; y guárdalo y arrepiéntete.
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Así como recibieron la Verdad y escaparon tras ser revelada, les pido que guarden
esa Verdad muy dentro de su Ser. Pero el demonio no quiere que esa verdad sea protegida,
quiere que se arrepientan de poseerla.
Toda verdad es energía y poseer una verdad es poseer la energía que esa verdad
contiene. Si alguien poseyera la absoluta verdad demoníaca, al poseer esa verdad poseería
toda esa energía y se convertiría en un competidor del demonio. No se la da y si alguien la
tiene le dice que se arrepienta.
El objetivo del demonio es destruir la luz y quiere hacerlo con las mismas armas de
la luz. Si la luz tiene su verdad, él también quiere su verdad. Es un deseo de imitación
constante. Pero como todo lo demoníaco es falso, su verdad es falsa. Su verdad es un arma
más de combate, y una manera más de desparramar su energía en el mundo. Se puede ver la
diferencia con la luz.
71. Si no velas, vendré como ladrón, y no sabrás a qué hora llegaré sobre ti.
Tienen que estar atentos, no dejarse sorprender por ese intruso. Él va a estar
permanentemente acosándolos para que caigan, y vendrá a robar vuestras almas si lo
permiten.
Es exactamente eso, el demonio viene como un ladrón de luz, quiere apagar la luz
ahogándola en la oscuridad, y no sabe que eso es imposible.
72. Con todo tienes en Sardes algunos pocos hombres que no han manchado sus
vestidos; y han de andar conmigo vestidos de blanco, porque son dignos.
No se dejen engañar por las vestiduras de quienes se creen dignos más no lo
muestran en el total sentido de la palabra. El demonio es el gran imitador y el señor de los
disfraces: el vestido cubre sus vergüenzas y las falsedades, la hipocresía y las malas
intenciones. Lo que hay que hacer es desvanecer las apariencias, no dejarse llevar por ellas.
Monje no es quien se viste de túnica y se rapa la cabeza, sino el que logra comunicación
con Dios.
73. El vencedor será vestido así de vestidura blanca y no borraré su nombre del libro
de la vida.
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El demonio no está más que alimentando tu ego, haciéndote creer la trascendencia a
través de esas vestiduras blancas. No te dejes tentar que la vida eterna está con tu Ser junto
a Dios.
Él vistió al vencedor de blanco y lo entronó como el representante de Dios en la
Tierra: el Papa. Es como el representante de un poder. Él quiere tener también sus
representantes, pero está en vosotros ver el color del alma de cada uno, más allá del color
de sus vestiduras.
74. Y compensaré tu nombre delante de mi Padre y de sus ángeles.
El demonio necesita ese poder otorgado por Dios, pero Dios es más fuerte. El
demonio cree que presentándose ante Él podrá doblegarlo o engañar al mismo Padre. Pero
la fuerza y el poder de Dios son mucho más poderosos que esas fuerzas oscuras.
Además el demonio quería presentar el nombre de Juan, porque para él eso era un trofeo.
75. El que tiene oído escuche lo que el Espíritu dice a sus Iglesias.
Los mensajes del Espíritu no necesitan ser escuchados con los oídos, sino con el
corazón.
76. Al Ángel de la Iglesia de Filadelfia, escríbele: “Esto dice el Santo, el Veraz, el que
tiene la llave de David, el que abre y nadie cerrará, que cierra y nadie abre.”
Él quiere poseer el corazón de todos, tener el poder absoluto, y una vez ahí
atrapados no lo dejará salir.
No te detengas en lo que rige a la masa, el cambio es interno y puramente
individual. Concéntrate en ti.
77. Conozco tus obras. He aquí que he puesto delante de ti una puerta abierta que
nadie puede cerrar.
Otra vez trata de engañarlos mostrándoles esa puerta abierta como símbolo de
libertad.
No creas en los pórticos que refulgen, busca en la simpleza el pasaje de una vida a
otra.
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78. Porque no obstante tu debilidad, has guardado mi Palabra, y no has negado mi
nombre.
Quiere infundir miedo, temor, para que caigan a sus pies.
La verdadera palabra quedará grabada en tu corazón como un rayo de fuego. Lo que
se escapa y en ti no queda anidado es lo que debe perderse por no ser cierto.
79. Y he aquí que yo te entrego algunos de la Sinagoga de Satanás que dicen ser judíos
y no lo son, sino que mienten.
Trata de infundir la confusión usando la mentira.
Los que aparecen queriendo transmitir mi Palabra y no son verdaderos, serán
reconocidos al instante por tu alma Crística. Óyela.
80. He aquí que yo los haré venir y postrarse a tus pies y reconocerán que yo te he
amado.
Nadie necesita ser llevado. Cada uno sabrá cuando llegará hasta el Padre.
En el momento en que tu conexión esté bien hecha y de ella no te desprendas,
lograrás avanzar en el camino hacia Mí.
81. Por cuanto has guardado la palabra de la paciencia mía.
Quien posee engaño no tiene paciencia.
Recuerda que en la soledad y el silencio, y por ende en la quietud, es donde el Padre
se revela. Aplícalo.
82. Yo también te guardaré a la hora de la prueba.
Lo que quiere es atraparte para que no puedas elegir.
En ti está el renunciar al camino que hoy transitas y abrirte a Aquel que te llevará a
la Gracia Divina.
83. Es la hora que ha de venir sobre todo el orbe para probar a los que habitan sobre
la Tierra.
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El demonio necesita probar permanentemente su poder. El Padre no necesita hacerlo
ya que todo está demostrado.
Una vez que hayas establecido el cambio en ti, se propagará por vibraciones a todos
los que te rodean, y sucesivamente a los demás. Comienza a mover la primera ola.
84. Pronto vengo.
El Señor siempre está y no hace promesas.
Cuando te encuentres en tu centro, ni el vendaval más fuerte logrará movilizar tu
esencia.
85. Guarda firmemente lo que tienes para que nadie te arrebate la corona.
Lo que no quiere es que dejes todas las posesiones de este plano para encontrar la
luz.
Desoye las palabras que quieran aferrarte pura y simplemente a la posesión material.
Que reine siempre tu espíritu que será tu mayor riqueza.
86. Del vencedor haré una columna en el templo de mi Dios, del cual no saldrá más.
Una vez que caigas en sus garras no podrás salir. Cuando hayas ejecutado todos
estos pasos sentirás la plenitud del Gozo Divino en tu corazón, permitiéndote alcanzar la
Gracia.
87. Y sobre él escribiré el nombre de Dios y el nombre de la ciudad de mi Dios, la
nueva Jerusalén, la que desciende del cielo viniendo de mi Dios y el nombre mío
nuevo.
Él quiere ser el más grande, aún más grande que el Padre, y quiere que la gente lo
reconozca como el nuevo rey. Con Jerusalén se refiere a los lugares más oscuros, donde
hay más conflictos.
Entonces sí encontrarás la entrada al Reino Divino donde podrás descansar en paz y
alegría.
88. Quien tiene oído escuche lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
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Quiere convencer a toda costa que su mensaje es puro, y no es así.
Desde este nuevo lugar en que te encuentras podrás servir de guía a quienes tengan
necesidad de la Palabra de Dios siempre bajo la mirada protectora del Padre.
89. Al ángel de la Iglesia de Laodicea, escríbele: “Esto dice el Amén, el testigo fiel y
verás, el principio de la creación de Dios”.
La creación no tuvo testigos, la hizo el Padre a solas.
No es a esa creación, la que hizo el Padre a solas, a la que se refiere el texto, sino a
su propia creación como redacción del mundo que se inventó y al que se le dio fuerza de
vida en el texto del Apocalipsis.
90. Conozco tus obras, no eres no frío ni hirviente. Ojalá fueras frío o hirviente. Así
porque eres tibio ni hirviente ni frío, voy a vomitarte de mi boca.
Al hablar de frío y de hirviente hace una exaltación tramposa de esos valores.
Tengan en cuenta que Jesús no clasifica ni amenaza a futuro. La imagen del vómito
contiene una amenaza. En mi reino entran todos, cualquiera sea la temperatura que tengan.
La idea de generar bandos o separaciones es propia de lo demoníaco. Pretende
significar: vas a estar de un lado o del otro, e instala a quien lo escucha en el mundo de la
dualidad, a tener que adoptar un bando para la batalla final. Así amenaza a quienes
pretendan adoptar una posición conciliadora o simplemente mantenerse al margen de la
guerra.
Es una imagen muy violenta que tiene en sí el germen de la guerra y de la
destrucción y hace creer que el Hijo del Padre es feliz cuando los hombres asumen
actitudes extremas.
Pero el Hijo del Padre no es ni frío, ni tibio, ni caliente porque es esencia pura y está
más allá del mundo de los sentidos.
91. Pues tu dices: “Yo soy rico, yo me he enriquecido de nada tengo necesidad. Y no
sabes que tú eres desdichado y miserable, y mendigo, y ciego, y desnudo.”
La riqueza a que se refiere es terrenal. Nadie que esté conectado con Jesús hablaría
de riqueza. Nadie que me busque dirá: “yo soy rico” Siempre vas a tener necesidad de Dios,
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nunca te vas a dar por satisfecho. La sed de Dios en el hombre nunca es suficiente. Acá lo
que hace el demonio es invertir el valor de riqueza y pobreza.
Pretende asustar a quien tiene apego por las posesiones materiales con la idea de su
pérdida para que se unan al pacto y así garantizar esa riqueza terrenal.
Sin embargo, como fue siempre la Palabra del Hijo del Padre: “Amó tanto al rico
como al pobre, como al sucio como al ciego” porque esas cosas no son cualidades del alma
sino meros estados transitorios del cuerpo a los que no se les debe temer ni no temer.
92. Te aconsejo que para enriquecerte compres de mi oro acrisolado al fuego.
Mi riqueza no se compra, se busca en el silencio. Mi riqueza no es de oro, no es de
materia, no tiene sustancia material.
Querer identificar lo que puede tenerse de Mí con solo pedirlo, que es la Gracia, con
un pedazo de roca brilloso es un recurso bajo y ruin, y con esta frase basta para darse
cuenta que solo las conciencias ennegrecidas pueden considerar esto como mi Palabra.
Estoy más allá de todas las rocas, de aquellas que los hombres llaman preciosas, y
de aquellas que para ellos no tiene valor porque todas esas son manifestaciones del plano
material desprovistas de sustancia.
Yo soy la Sustancia. No es buscando oro donde van a encontrarme. Y el gran error
es pensar, debido a esta construcción imaginaria que me encontrarán más fácil buscando
vidrio, buscando la pobreza. No estoy ni en la riqueza ni en la pobreza. Tampoco hay virtud
en el vidrio.
93. Y vestidos blancos para que te cubras y no aparezca la vergüenza de tu desnudez.
El vestido blanco alude a la pureza; aquí está la trampa de esta oración, esa es una
frase que usa para disfrazarse de puro.
Esta oración es connotativamente materialista. La pueden ver como una incitación
al mundo material, como la presión de la amenaza anterior cuando hablaba que los iba a
vomitar. Da, en cierta manera, una orden hacia el materialismo.
Yo los prefiero desnudos, sin encubrimientos.
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Deben comprender que cuando el Padre se refiere a desnudez lo hace dirigiéndose a
un alma sin interferencias, que no necesita ser cubierta, disfrazada con ningún manto de
pureza.
La confusión parte de querer analizar como espiritual un texto que solo habla de lo
material. Esa desnudez a la que alude da vergüenza porque es impura y pretende disfrazarse
con un manto de pureza.
A la vez intenta que quien lo lee experimente la sensación de la vergüenza y el
miedo, volviéndose vulnerable al ataque que está por llegar.
94. Y colirio para ungir tus ojos a fin de que veas.
No se ve con la vista [Jesús se señala el entrecejo como el lugar de la visión] la vista
es un sentido fácil de engañar, los sentidos son fáciles de engañar.
Hay que ver con los ojos cerrados. Nuevamente trata de exaltar los sentidos pues ahí
es donde él es fuerte.
Y sigue preparando el terreno y capturando la atención obligando a quien lo lee a
tener los ojos bien abiertos, así puede dar su golpe con toda certeza pues la distracción de lo
divino se va convirtiendo en concentración de lo diabólico.
95. Yo reprendo y castigo a los que amo.
Yo no castigo
Tan solo sostendré las almas sedientas de amor en el Amor de Dios.
96. Ten pues ardor y conviértete.
La palabra “ardor” como al principio “hirviente”. Usa palabras fuertes para exaltar
ciertas pseudo virtudes. Son palabras que suenan grandiosas, grandilocuentes. Las usa
como arenga. A mí me parecen como bélicas. “Y conviértete” ya lo define claramente en su
actitud. Mi amor no amenaza ni da ordenes.
[Al demonio:] En el silencio y en la paz de cada alma no podrás entrar. Tanto el
ardor como las palabras de destrucción que utilices se disolverán. No puedes entrar. Es tan
poderoso el amor de Dios que la malicia de desintegra. Y aunque quieras que vuelva a
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comenzar siempre se volverá a desintegrar. Cuando más ataques, las almas más me
buscarán. Regresarán al Padre, del lugar del que nunca se deberían haber ido.
97. Mira que estoy a la puerta y golpeo.
Habla de una cercanía que no hay que ignorar. Pero esa puerta él no la puede
atravesar a menos que los seres humanos se la destraben, o que alguien abra la puerta para
ver cómo es él, el que está del otro lado.
Cada uno la irá abriendo a través de su propia oscuridad, esa oscuridad que fue
sembrando. Cada uno irá peregrinando su propia oscuridad hasta que al final la vaya
soltando.
98. Si alguno oyere mi voz y abriere la puerta, entraré en él y cenaré con él y él
conmigo.
Él necesita de ustedes, se desvive por poder estar con ustedes en esa mesa. Sin
ustedes él no es nada, necesita de ustedes para su existencia.
Cada ser humano irá despertando y caminará hacia Mí, sintiendo la vibración,
sintiendo la luz. Y a las grandes mesas que les quiere ofrecer le podrán decir no. Los seres
humanos despertarán hacia la gran mesa, que es la mesa del espíritu elevándose hacia Dios.
99. Al vencedor lo haré sentarse conmigo en mi trono.
Ese es el pacto: promesas como en canje. Pero él no tiene trono, su trono es el dolor.
El dolor del desamor.
[Al demonio:] Ya la silla del trono desaparece. Él utiliza tus emociones para
revertirte el camino del Ser, de la esencia, te lleva a tu propia destrucción.
100. Así como yo vencí y me senté con mi Padre en su trono.
El verdadero vencedor no alardea, no reclama gloria de su victoria.
[Al demonio:] Cada vez serán más las almas que no pacten y las que pacten en
décima de segundos se liberarán del pacto, hasta que el tiempo se desintegre de las almas, y
solo el tiempo te pertenecerá, irás envejeciendo, y te llevará a tu propia destrucción.
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101. Quien tiene oído escuche lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
Nuevamente aquí se quiere poner en un lugar elevado. No tiene Espíritu y no está al
lado del Padre.
[Al demonio:] Has estado en esos grandes monumentos que son las Iglesias, pero
los ángeles protegen y cuidan esos espacios. La vibración del lugar nunca la has podido
superar, y aunque has hecho pactar a los hombres que asumían creencias, disciplinas y
autoridades desde su soberbia espiritual, los ángeles han tenido siempre la mirada luminosa
como guardianes del Gran Padre. Ellos han visto con cuidado el gran camino del error que
has creado.
Debo agradecerte que muestres realmente tu imagen diabólica y perturbadora
tratando de hacer pactar a las almas sedientas del verdadero amor, de la verdadera
vibración. Ya no podrás caminar.
102. Después de esto tuve una visión y una puerta abierta al cielo.
En realidad la puerta no está abierta al cielo sino al infierno.
[Al demonio:] Buscas seguir engañando, como con Juan que debe arrastrar su
propio karma después de pactar contigo. Pero el alma que hay en Juan es tan sedienta de
Dios que encontrará la salida y te abandonará.
El tiempo solo va pasando para tu alma oscurecida. Para los que están con Dios, los
santos, los maestros, los sabios, no hay tiempo. El tiempo no ha pasado para ellos porque
no existe el tiempo. Son las mismas almas despiertas que no se soltaron nunca del Padre.
Siguen girando alrededor de este planeta, de este universo, cambiando tan solo de trajes,
pero el alma solo sigue mostrando el camino sin tiempo hacia el Padre.
103. Y aquella primera voz como de trompeta que yo había oído hablar conmigo dijo:
Si hubiesen sido mis palabras, no se hubiesen trasmitido a través de trompetas.
Tan solo en el silencio y la vibración, la compasión aparecerá en cada uno de los
seres que me miren. No se podrán confundir.
104. Sube acá y te mostraré las cosas que han de suceder después de estas.
Con el engaño quiere envolver al Ser de tal manera que éste quede atrapado.
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[Al demonio:] Ya no podrás engañar a las almas porque se despertarán desde la
ignorancia con que has querido disfrazar el camino. Hasta Juan mismo se te ha rebelado.
[El demonio se presenta deformado, viejo, desintegrado]
105. Al instante me hallé allí en espíritu y he aquí un trono puesto en el cielo y Uno
sentado en el trono.
Al poder conseguir lo que quiere, él se siente el amo y señor, ocupando el lugar de
mi Padre.
Es por ese gran poder de transformación que tiene que trata de ponerse en un lugar
que no es el suyo. Pero ya no puede mantener más ese engaño.
[El demonio aparece cayéndose de ese trono y Jesús, desde arriba dice: “Ya no
puedes sostener más ese escenario que has armado. Tu lugar es conocido por todos y ya no
puedes engañar más”].
106. Aquel que estaba sentado, era a la vista como la piedra de jaspe y sardónico.
Lo que intenta es deslumbrar.
[Al demonio:] Siempre buscaste provocar un gran impacto visual y luego escabullirte,
perderte para dejar atrapados a quienes te miran y así conseguir que te sigan. Fue un buen
método en sus comienzos, pero ahora cada vez son y serán menos los que te sigan. Las
almas, ya cansadas de vagar, de dar vueltas, te han descubierto y ya eres rechazado. Has
redoblado tu oferta pero son menos los que te sirven. En este momento histórico la mayoría
de las almas, por vibración, te rechazan; por más que redobles tu oferta, ellas sólo buscan la
luz y el gozo eterno. Tu comercio está llegando a su fin.
107. Y alrededor del trono había un arco iris con aspecto de esmeralda.
No se dejen engañar por cuanta maravilla él pueda mostrarles.
[Al demonio:] Fabricaste todo tipo de objetos para impresionar pero al faltarles la
Gracia del Padre, ninguno satisfizo eternamente. Ellos son objetos vacíos. Es todo lo que
podés presentar como cosa sin alma.
Las almas que se aferraron a los objetos que les presentaste y vivieron en ellos, no
consiguieron la felicidad, y lo comprobaron. Así que estas almas, vueltas a nacer, no
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comprarán más tus objetos. Se dan cuenta que pactaron y no te siguen. Quien te probó te
rechazará. Esto inevitablemente ocurrirá.
108. Y en torno al trono veinticuatro tronos.
Estos otros tronos representan todas las cualidades con las cuales el hombre pierde
la fe. Son las cualidades de la oscuridad, tales como el miedo, la codicia, la envidia, los
celos, el odio, la falta de perdón, la lujuria, la ira...
[Al demonio:] Buscás despertar lo peor de los hombres. Te alimentás de defectos y de
penurias, de sus excesos.
[A los hombres:] Es todo lo contrario de aquello que les enseñé. Si hay algo que llevará la
luz del Padre hacia ustedes será vencer uno a uno esos defectos. Quien los supere entrará en
el Amor, ganando tranquilidad, y la paz se verá en sus ojos.]
109. Y en los tronos veinticuatro ancianos sentados, vestidos con vestiduras blancas, y
llevando sobre sus cabezas coronas de oro.
El demonio está personificando estas cualidades a través de personajes que han
existido desde que existió el pecado. Las coronas son el símbolo de que mientras él esté en
el ser de cada persona, estas coronas seguirán puestas en sus cabezas.
Como parte del pacto él premia con la corona al máximo exponente de cada defecto.
No se dan cuenta que los está dividiendo: a cada uno un defecto exacerbado hasta el límite.
Junto con mi Padre valoramos la unión de todas las virtudes, somos el camino para
la unión de todas ellas, y poder encontrarlas en una sola persona es posible gracias a una
sola palabra llamada Amor. No dejen que los fracture. Busquen siempre la Unidad.
110. Y del trono salían relámpagos, voces y truenos.
Otra vez vuelve a imponer su poder a través del ruido. [Aparece una imagen: Jesús
está arriba, en el cielo junto al Padre, inmensos, luminosos, mirando hacia abajo donde ven
al demonio negro, chiquitito, haciendo relámpagos en medio de nubes artificiales,
moviéndose rápidamente de un lado para el otro. Jesús le dice: “Eres tan solo un pobre y
pequeño mago, con un solo soplido mío tus nubes desaparecen. Lo único que te queda es
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seguir trabajando desesperadamente para poder impresionar a un par de frágiles, miedosas
ovejas. Tu espectáculo es muy pobre y no tiene descanso.]
111. Y delante del trono había siete lámparas encendidas, que son los siete espíritus de
Dios.
Estas siete lámparas representan los siete pecados que destruyen al Ser.
[Al demonio:] Fraccionaste al ser humano y te fraccionaste a ti mismo, y no te diste cuenta
que esa fue tu infelicidad.
112. Y delante del trono algo semejante a un mar de vidrio.
Ese mar representa lo inaccesible.
[Al demonio:] Buscas lograr que te sigan para siempre, es por eso que lo tuyo es
inaccesible, no puedes cumplir el fondo de tu promesa. Así los que alguna vez te siguieron
ahora te rechazan. A través del deseo engañaste y te apoderaste de muchas almas, pero
ignoraste que el alma es eterna, y ya no te siguen más. El alma pudo ser engañada en un
comienzo, pero a la larga busca al Padre y su realización con Él.
113. Y en medio ante el trono, y alrededor del trono cuatro vivientes llenos de ojos por
delante y por detrás.
Es el intento de atemorizarlos para tenerlos a sus pies, mostrándoles criaturas
monstruosas para que cumplan su pedido.
Esos monstruos tienen muchos ojos porque a través de ellos infunden miedo.
En la oración, como yo les enseñé, ellos desaparecen. Por la luz del Padre vuestro el
miedo se hace humo ¡Cerrad los ojos y empezad a orar!
114. El primer viviente era semejante a un león.
La ferocidad.
Representa la batalla de energía entre egos que necesitan de la misma para poder
entregársela al demonio y poder seguir adelante con el pacto.
115. El segundo viviente era semejante a un becerro.
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La ignorancia.
El hombre ignora que todo manejo de energías conlleva una reacción. Lo que está
haciendo es vendiendo su alma. La única energía que no tiene un efecto negativo es la
energía dirigida al Padre.
116. El tercer viviente con cara como de hombre.
El ser humano en su más baja condición. La cara del hombre representa al ego, y sin
duda es la manifestación más burda del alma.
117. Y el cuarto viviente semejante a un águila que vuela.
Representa a quienes roban la fe.
Se refiere a las personas que manejan a las almas, robando, apoderándose de la
energía de sus seguidores. Estos, en algún momento, dejan de seguirlos, y es ahí cuando,
desprovistos del canal de la energía que roban no pueden seguir alimentando sus pactos y
quedan vacíos, sobreviniendo sobre ellos su destrucción.
118. Los cuatro vivientes, cada uno con seis alas, están llenos de ojos alrededor y por
dentro, y claman día y noche sin cesar, diciendo: “Santo, santo, santo es el Señor Dios,
el Todopoderoso, el que era, el que es y el que viene.”
Estos monstruos están sometidos bajo su poder, por eso lo alaban.
Desde el estado del ego sólo es posible la obtención de poder a través del pacto con
el demonio. Se ignora que la conexión con el Padre conlleva la obtención del único deseo
sin atadura.
119. Y cada vez que los vivientes dan gloria, honor y acción de gracias al que está
sentado en su trono, al que vive por los siglos de los siglos.
Agradecen porque sin él perecerían en la Nada.
Bien que quisiera el demonio vivir por los siglos de los siglos pero su fin está
próximo, y con su destrucción se disuelven todos los pactos, dejando a las almas libres.
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120. Los veinticuatro ancianos se postran ante Aquel que está sentado sobre el trono y
lo adoran.
Los adoran y se postran porque creen que sin él desaparecerán.
¿Qué hace un niño cuando quiere obtener algo de su Padre sino ser dulce con él?
La naturaleza del alma es la adoración al Padre, pero el ego confundido canta loas a
su destructor.
121. Y depositan sus coronas ante el trono diciendo: “Digno eres Tu Señor y Dios
nuestro, de recibir la gloria y el honor y el poder, porque Tú creaste todas las cosas, y por
tu voluntad tuvieron Ser y fueron creadas.”
Vuelve a engañarlos a todos haciéndose pasar por mi Padre, pero no lo puede
conseguir.
El ego reconoce en Satán al creador de todas las cosas materiales. El gozo proviene
de la posesión de estas cosas, pero a su vez la posesión lleva al sufrimiento, ya que no
puede poseerse aquello que es irreal, es por eso que el hechizo sólo puede ser momentáneo.
122. Y vi en la diestra de Aquel que estaba sentado sobre el trono un libro escrito por
dentro y por fuera y sellado con siete sellos.
Este no es mi libro, no me preocupé por dejar nada escrito. Mi libro tiene un solo
sello, es la luz.
Ya revelé mis enseñanzas cuando estaba en la Tierra. No hay conocimiento secreto,
lo que hay es una verdadera interpretación de mis palabras.
123. Y vi un Ángel poderoso que, a gran voz, pregonaba: “¿Quién es digno de abrir el
libro y desatar sus sellos?”
No es un Ángel, es un esclavo. Y no hay duda que él es quien abre el libro y desata
los sellos y los desparrama hacia toda la humanidad. Esos sellos que desata para dárselos a
la gente son como las cadenas que atarán al pecado.
Esas ataduras son parte de la voluntad del hombre, de los pactos que haya hecho con
la oscuridad. Pero no es algo irremediable, el hombre puede resistir y convertir esa
situación.
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124. Y nadie en el cielo, ni en la tierra, ni debajo de la tierra, podía abrir el libro, ni
aun fijar los ojos en él.
No hay que mirar esos sellos, ni ese libro, porque esos sellos encandilan y atrapan a
quien los mira.
La guía para descifrar las verdaderas enseñanzas tiene que estar dada por personas
sabias, porque dependen de quien mire, de quien interprete, se cae en el error, tal vez
porque lo más complejo es no equivocarse, de reconocer a aquellos maestros sabios.
125. Y yo lloraba mucho porque nadie era hallado digno de abrir el libro, ni de fijar
en él sus ojos.
He aquí un encantamiento producido por ese falso libro, hacer creer que posee un
tesoro. Llora desde los sentidos, no desde el alma.
Existen personas que pueden descifrar las enseñanzas adecuadamente, pero son muy
pocas. Las enseñanzas son muy poco valoradas por el común de la gente.
126. Entonces me dijo uno de los Ancianos: “No llores. Mira: el león de la tribu de
Judá, la raíz de David, ha triunfado, de suerte que abra el libro y sus siete sellos.
El león de la guerra, de la pelea, de la ferocidad, de la agresión, es el que va a abrir
el libro. El anciano lo consuela, estando allí la trampa. El falso consuelo es la calamidad
que vendrá.
127. Y vi que en medio delante del trono y de los cuatro vivientes y de los ancianos,
estaba de pie un Cordero como degollado, que tenía siete cuernos y siete ojos, que son
los siete espíritus de Dios en misión por toda la Tierra.
El Cordero de mi Padre es uno solo y tiene un solo ojo. Es una imagen monstruosa
con la que trata de impresionar. El Cordero Divino viene como bailando y cantando con su
balada de alegría. Tiene los ojos cerrados porque ve todo. No tiene cuernos pues no
necesita defenderse.
El Cordero es el Cordero de la Paz. Está abierto a todos los que quieran unirse a él.
Es la imagen de lo Divino, del Amor.
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128. El cual vino y tomó (el libro) de la diestra de Aquel que estaba sentado en el
trono. Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro
ancianos se postraron ante el Cordero.
Esos cuatro seres no son vivientes. Se postran ante el portador de los siete pecados,
pues son sus servidores. Lo adoran pues él reina en la muerte, como que está muerto ese
Cordero. También lo adoran por esos siete ojos, y esos siete cuernos y se postran ante él
porque puede concentrar los siete pecados en un solo cuerpo.
Depende de los hombres adorar un falso Cordero, un símbolo engañoso, dejando de
lado el verdadero símbolo: el Cordero Divino.
129. Teniendo cada cual una cítara y copas de oro llenas de perfumes, que son las
oraciones de los santos.
Las oraciones de los santos no están guardadas en recipientes de oro, brillan por sí
solas y están sueltas. Son música en sí misma, al pronunciarlas no necesitan instrumentos
que las acompañen.
Lo verdadero no se adorna. Cuando hay muchos adornos y agregados no duden, es
obra del demonio.
130. Y cantaban un cántico nuevo, diciendo: “ Tú eres digno de tomar el libro, y de abrir
sus sellos porque tu fuiste inmolado, y con tu sangre compraste para Dios hombres de
toda tribu y lengua, y pueblo y nación.”
No se compra a Dios con sangre sino que se llega a Él con la oración. Aquí
nuevamente el demonio renueva la oferta adulando a Juan para hacerlo entrar en el pacto.
Tengan cuidado con los grandes elogios como este.
Suena tan atractiva para los hombres la promesa de lo oscuro porque no quieren
darse cuenta que esa ilusión envuelve el mayor desastre: la venta del alma.
131. Y los has hecho para nuestro Dios un reino y sacerdotes, y reinarán sobre la
Tierra.
El demonio es el Dios de ellos, eso está claro.
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Él quiere crear otro Dios que no es mi Padre, y los que están con él son sus
servidores.
132. Y miré, y oí voces de muchos ángeles a su alrededor, y de los vivientes y de los
ancianos.
Mis ángeles son silenciosos y no hablan todos a la vez como en ese lugar. Ellos se
comunican en silencio porque no tienen necesidad de hablar, por eso todos los que están
con el demonio, y hablan diferentes idiomas, no son ángeles.
133. Y era el número de ellos miríadas de miríadas y millones de millones.
Él tiene un ejército numeroso. Es cierto que en número son más pero con la luz
desaparecen. Solo uno, el Padre, basta para hacerlos replegar.
En realidad, si el hombre no les creyera a los demonios, estos desaparecerían. Pero
les cree y los hace crecer.
134. Los cuales decían a gran voz: “Digno es el Cordero que fue inmolado, de recibir
poder, riqueza, sabiduría, fuerza, honor, gloria y alabanza.”
Es el mismo Cordero que los esclavizó el que necesita alabanzas y poder. Si veis al
Cordero Divino os darás cuenta que este no pide nada, solamente amor y reparte alegría
¡Desconfiad de las alabanzas!
El Cordero es el símbolo del Amor. No se dejen engañar por las alabanzas ni de los
hombres ni de los demonios, ni de los ángeles. Él lo penetra todo, lo ve todo, lo sabe todo y
el que supuestamente pretende engañarlo se está engañando a sí mismo.
135. Y a todas las criaturas que hay en el cielo, sobre la tierra y en el mar, y a todas
las cosas que hay en ellos, oí que decían: “Al que está sentado en el trono y al Cordero
la alabanza, el honor, la gloria y el imperio por los siglos de los siglos.”
El que está en el cielo no está en ningún trono en la Tierra, tampoco necesita
alabanzas y menos por los siglos que vendrán. Las alabanzas y la promesa de futuro son
parte del miedo y son el enganche con el cual él los hace pactar.
Todo esto sale de la imaginación del hombre tomada por el demonio.
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136. Y los cuatro vivientes decían: “Amen”. Y los ancianos se postraron y lo adoraron.
Esos cuatro son como espías o agentes del demonio. Aquí dicen Amen porque creen
que son dioses. Son cuatro muertos que creyeron en él y quedaron esclavos. Tratan de
atraer más almas para que estén padeciendo lo mismo que ellos. Los que están mal quieren
que haya más mal, más gente como ellos. Al no estar instalados en la dicha, en el mal
necesitan la presencia de los otros, no pueden estar solos.
El que no está solo es el espíritu que está en Dios. Los que no están en Dios se
pueden creer acompañados pero esto es irreal, porque están sometidos al mal y este es la
profunda soledad.
137. Y vi cuando el Cordero abrió el primero de los siete sellos, y oí que uno de los
cuatro vivientes decía, como con voz de trueno: “ Ven”. Y miré y he aquí un caballo
blanco y el que lo montaba tenía un arco y se le dio una carroza, y salió venciendo
para vencer.
La apertura del sello corresponde a la proyección de la energía oscura, y el caballo
es la fascinación que hace de vehículo y permite que esta energía circule. El color blanco
representa la fascinación porque el blanco es pureza. Vestido de blanco es que logra la
fascinación. La corona representa que la fuerza oscura sale a conquistar, y el arco es para
defenderse de los samskaras benévolos.
Debemos basarnos en las primeras palabras de ésta estrofa. Cuando abras los siete
centros luminosos que hay en ti, la energía ascenderá convirtiendo tu alma en corona.
138. Y cuando abrió el segundo sello oí el segundo ser viviente que decía: “Ven” Y
salió otro caballo de color de fuego, y al que lo montaba le fue dado juntar de la tierra
la paz, y hacer que se maten unos a otros, y se le dio una gran espada.
El paso posterior a la fascinación es la siembra del odio en el alma, y este odio es lo
que lleva a la destrucción. El color de fuego es el odio como contraparte del amor. Y al
igual que este moviliza una gran energía semejante al fuego.
Encuentra en este color el fuego de la purificación divina, única forma de llegar al
color blanco de la pureza que pertenece al reino iluminado.
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139. Y cuando abrió el tercer sello, oí al tercero de los vivientes que decía: “Ven” y
miré, y aquí un caballo negro, y el que lo montaba tenía en su mano una balanza.
La balanza representa la instalación en la conciencia de la idea de dualidad y la
alternancia de los extremos. El negro, justamente es la intención oscura de ocultar la unidad
tras la apariencia de la dualidad.
Deja de lado la oscuridad que es el primer estado en que te encuentras ahora y
comienza a transitar el camino hacia la luz Divina. Déjate guiar por tu intuición que ella te
señalará el camino.
140. Y oí como una voz en el medio de los cuatro vivientes que decía: “ A un peso el
kilo de trigo; a un peso tres kilos de cebada, en cuanto al aceite y al vino no lo toques”.
Los elementos más densos son los que ayudan a mantener la energía más densa. Al
vino y al aceite, su condición de líquidos les da una vibración más sutil. En forma figurada
se estimula a buscar energías más densas.
Deja de lado para transitar este camino tu apego a las posesiones materiales, no
importa del tipo que sean, simplemente preocúpate del pan espiritual.
141. Y cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto viviente que decía: “Ven”. Y
miré y he aquí un caballo pálido, y el que lo montaba tenía por nombre “La Muerte”,
y el Hades seguía en pos de él, y se le dio la potestad sobre la cuarta parte de la Tierra
para matar a espada y con hambre y con peste y por medio de las bestias de la Tierra.
El cuarto caballo corresponde al egoísmo que hace que las almas combatan entre sí
en la búsqueda por energía y esto las convierte en verdaderos muertos en vida. El color
pálido representa el alma carente de energía. La cuarta parte de la Tierra es la habitada sin
los mares.
Trata de intimidarlos. Todo el tiempo pretende mostrar al Padre como a un Dios
vengador que necesita alimentarse de la sangre de los hombres para poder existir. No es
esta la definición del Padre, es la definición del demonio. El Padre es energía, no necesita
martirizar ni absorber la energía densa y de calidad inferior de ningún hombre.
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142. Y cuando abrió el quinto sello, vi debajo del altar las almas de los degollados por
la causa de la palabra de Dios y por el testimonio que mantuvieron.
La palabra de mi Padre no dejaría a estos seres en esa forma. El demonio trata de
impresionarlos.
Toda idea de venganza es demoníaca. Nada tiene mi Padre que vengar. No está del
lado de unos hombres en contra de otros. No toma partido por algunos, los ama a todos por
igual.
143. Y clamaron a gran voz diciendo: “¿Hasta cuando, oh Señor, Santo y Veraz, tardas
en juzgar y vengar nuestra sangre en los habitantes de la Tierra?
Mi Padre no juzga, mi Padre no castiga. El sólo nos brinda el amor que nuestro ser
necesita como alimento.
144. Y les fue dada una túnica blanca a cada uno.
Es solo un disfraz, las almas puras no están vestidas. La túnica blanca pretende
cubrir con un manto de pureza aquello que no es puro. Cuando piensan en la imagen típica
de los ángeles y ven sus túnicas blancas y formas humanas, deben entender que es una
alegoría. Los ángeles se perciben blancos porque son formas de luz pura, no porque estén
disfrazados.
145. Y se les dijo que descansen todavía por poco tiempo hasta que se completase el
número de los consiervos y de sus hermanos que habían de ser matados como ellos.
El demonio no hace más que atemorizar para que teman a nuestro Padre y de esta
manera poder seguir siendo sus esclavos.
Además está armando un conjuro y no lo oculta, pues le dice a los hombres
claramente que cuando tenga el número de hombres exacto que necesita para su sacrificio
los va a sacrificar: ¿quién sino el diablo podría decir semejante cosa?
146. Y cuando se abrió el sexto sello, y se produjo un gran terremoto, y el sol se puso
negro como un saco de crin y la luna entera se puso como sangre y las estrellas del
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cielo cayeron sobre la Tierra, como deja caer sus brevas la higuera sacudida por un
fuerte viento.
Mi Padre no tiene ira. Todo lo que Él puede crear es luminoso. Todo lo oscuro
pertenece a lo demoníaco.
Para entender el impacto de estas palabras en el inconsciente de quienes las
escucharon las primeras veces hay que situarse en el lugar de un campesino simple y
analfabeto que lo único que conoce son los fenómenos cíclicos de la naturaleza. Al
amenazar con un momento en que el orden se subvierte se crea un pánico total que abre la
puerta al demonio para ingresar en el inconsciente. Ahora los humanos saben lo que es un
eclipse o un terremoto, entienden que son energías de la naturaleza que se dan con cierta
regularidad en sus propios tiempos. El hombre actual no siente pánico por la naturaleza
como el que sentían los antepasados porque no la habita. En el mundo tecnológico su
eclipse sería que dejen de funcionar las computadoras, o los cajeros automáticos, o los
automóviles.
147. Y el cielo fue cediendo como un rollo que se envuelve, y todas las montañas e islas
fueron recogidas de sus lugares.
En el mundo nada se mueve. El demonio hace que todo sea un torbellino.
Mientras lo dice inscribe en las mentes el hechizo del movimiento.
148. Y los reyes de la Tierra, y los magnates, y los jefes militares, y los ricos, y los
fuertes, y todo siervo, y todo libre se escondieron en sus cuevas y entre los peñascos de
las montañas.
Si no se sintiesen atrapados no tendrían por que temer bajo la protección de mi
Padre. La protección en las cuevas de las montañas es una ilusión puesta ahí por el
demonio, que ya en el párrafo anterior hizo el hechizo para cambiarlos de lugar.
También quiere agregar que todos los hombres han de temerle: ricos y pobres por
igual, reforzando la idea que el ser humano no tiene escapatoria. El demonio crea el miedo,
crea el susto y crea la cueva. Luego le dice al hombre: “Yo te protegeré, no necesitas esa
cueva”.
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149. Y decían a las montañas y a los peñascos: “Caed sobre vosotros y escondednos de
la faz del Ángel que está sentado en el trono y de la ira del Cordero porque ha llegado el
gran día del furor de ellos ¿Quién puede estar de pie?”
No se escondan de mi Padre, Él no castiga pues no tiene ira.
El día del furor de mi Padre será aquel en que todos los seres del universo se le unan
en purificación. Hasta entonces es inútil dejarse aplastar por una roca.
150. Después de esto vi cuatro ángeles que estaban de pie en los cuatro ángulos de la
Tierra y detenían los cuatro vientos de la Tierra para que no soplase viento sobre ésta,
ni sobre el mar, ni sobre árbol alguno.
Mi Padre no necesita que los ángeles hagan cosas por Él. Su sola presencia puede
aquietar cualquier tormenta.
[Al demonio:] Sólo la vibración del Padre dejará fluir el amor infinito y jamás podrás
entrar. Fluirán las almas de nuevo hacia Mí como era en un principio.
151. Y vi a otro ángel que subía del Oriente y tenía el sello de Dios vivo, y clamó a
gran voz a los cuatro ángeles, a quienes había sido hacer daño a la tierra y al mar.
Ese otro ángel no era un ángel sino un esclavo del demonio. Mi Padre jamás
mandaría a la destrucción lo que Él mismo creó.
Las almas sedientas buscan la vibración divina. La encontrarán en la
simpleza de la paz, de la calma, de la armonía.
152. Y dijo: “No hagáis daño a la Tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos
sellado a los siervos de nuestro Dios en sus frentes.”
Esos sellos en la frente significaban que el demonio iba a apoderarse de ellos.
[Al demonio:] Los sellos en la frente eran tan solo la ignorancia en donde los hacías pecar.
Ya a la vista, esas almas van despertando hacia la vibración divina cada vez menos podrás
engañarlas.
153. Y oí el número de los que fueron sellados. Ciento cuarenta y cuatro mil sellados
de todas las tribus de Israel.
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Mi Padre dice que todos sus hijos son libres hasta que quedan atrapados por ese
poder demoníaco.
[Al demonio:] No quedarán atrapados, irán saliendo paso a paso. Tendrás que soltar,
liberar, las riendas de la ignorancia. Yo me encargaré de encontrar a mis hijos liberándoles
las almas.
154. De la tribu de Judá doce mil sellados, de la tribu de Gad doce mil; de la tribu de
Ases doce mil; de la tribu de Neftalí doce mil; de la tribu de Manases doce mil; de la
tribu de Simeon doce mil ; de la tribu de Leví doce mil; de la tribu de Isacar doce mil;
de la tribu de Zabulón doce mil, de la tribu de Benjamín doce mil sellados.
Solo trata de impresionarlos Mi Padre reconoce a los elegidos sin necesidad de
marcarlos.
[Al demonio:] Has querido engañarme, te has organizado a través del tiempo, pero se
siguen mezclando las tribus entre sí. Primero las dividiste, luego las uniste y vas
confundiendo la batalla. Pero las almas sedientas vendrán a Mí como verdaderos hijos
libres de esa ilusión, saliendo del estado de ignorancia.
155. Después de todo esto miré y había una gran muchedumbre que nadie podía
contar de entre todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas, que estaban de pie ante
el trono y ante el Cordero, vestidos en túnicas blancas, con palmas en sus manos.
La muchedumbre de la que habla no son más que demonios que confunden.
[Al demonio.] Te das cuenta que puedes confundirlos, pero volverá a caerse la máscara
despiadada de horror y de hipocresía.
156. Y clamaban en gran voz diciendo: “La salud es de nuestro Dios que está sentado
en el trono, y del Cordero.”
El trono no es un trono, es un lugar donde quiere que lo coloquen al demonio, y el
Cordero no es más que la imagen del miedo.
Dios no necesita mostrarse. La vibración de la esencia de todas las cosas se irá
purificando y las máscaras caerán.
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157. Y todos los ángeles que estaban de pie, alrededor del trono y de los ancianos y de
los cuatro vivientes cayeron sobre sus rostros ante el trono y adoraron a Dios.
Los ángeles no son ángeles, son solo ataduras para el reino de la oscuridad.
Estos ángeles están en el interior de estas mismas almas, ya no están afuera.
158. Diciendo: “Amen, la alabanza, la gloria, la sabiduría, la gratitud, el honor, el poder
y la fuerza a nuestro Dios, por los siglos de los siglos Amen”.
Estas palabras tan solo son la forma de invocar a la oscuridad.
[Al demonio.] El Amen es una sola vibración que se siente dentro o bajo la cual irradian los
cuerpos en un espacio sin límites donde jamás podrás entrar.
159. Y uno de los ancianos, tomando la palabra me preguntó :
“Estos que están vestidos de túnicas blancas, ¿quiénes son y de dónde han venido?”
Y yo le dije: “Señor mío, tú lo sabes.”
Y él me contestó: “Estos son los que vienen de la gran tribulación y lavaron sus vestidos
y los blanquearon en la sangre del Cordero.”
No son más que seres oscuros que disfrazan la luz e imparten el miedo para hundir
en la oscuridad al resto de las almas.
Las almas no necesitan ropas blancas, ni lavarse en la sangre del Cordero. Las almas
purificadas son solo vibración de Dios.
160. Por eso están delante de Dios y le adoran día y noche en su templo.
No están más que frente al demonio y le ruegan que no los abandone.
Siempre la distracción de los altares exteriores confunden a esas almas, pero pronto
se darán cuenta que solo Yo me encuentro en el altar interior.
161. Y el que está sentado en el trono fijará su morada con ellos.
Y el que está sentado en el trono los hundirá en la oscuridad de la que no podrán
salir jamás.
Atrapados en su propia oscuridad irán cayendo. Solo un destello de luz se despertará
con la única posibilidad de encontrar la Gran Luz.
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[Al demonio:] Siempre estaré atento a esta ignorancia tuya que es un gran escenario que
fuiste montando durante vidas y vidas.
162. Ya no tendrán hambre ni sed, nunca más los herirá el sol ni ardor alguno.
Tan solo son promesas de las que se vale el demonio para confundir. Dios no
promete.
[Al demonio:] ¡Cuántas batallas hemos pasado juntos pero te quedaste preso de tu
propia destrucción!
163. Porque el Cordero, que está en medio, frente al trono, será su pastor y los guiará
a las fuentes de las aguas de la vida; y Dios enjugará toda lágrima de sus ojos.
El Cordero es el miedo a través del cual opera el demonio, a través del cual
promete.
La Verdad es accesible a todos, quien se acerque a Mí a través del Amor podrá
llegar a ella.
La única manera que podrás llegar a Mí es a través de un gran canal de luz.
Fortaleciendo tu propia conciencia elevarás todos sus niveles, y me alcanzarás a través del
discernimiento.
164. Y cuando abrió el séptimo sello, se hizo en el cielo un silencio como de media
hora.
En el cielo el silencio no tiene límites.
En el cielo el silencio es música.
En ese silencio solo me encontrarás.
Cuando hacia mí eleves todos los niveles de conciencia, entonces encontrarás una
sola Conciencia, que es la Conciencia Cósmica, la Conciencia y la Vibración Suprema.
165. Y vi a los siete ángeles que están de pie ante Dios y les fueron dadas siete
trompetas.
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Los ángeles de Dios son más de siete. Dios es el Padre, si quiere tiene miles de
ángeles. En el texto el demonio usa siete porque es el número cabalístico de las Escrituras.
Si el Padre lo desea puede generar infinitos ángeles.
Tan solo en el silencio encontrarán el estado Supremo. Suelten el cuerpo y la mente
y eleven el alma a esa Alma Suprema.
166. Y vino otro ángel que se puso frente al altar teniendo un incensario de oro, y le
fueron dados muchos perfumes para ofrecerlos con las oraciones de todos los santos
sobre el altar de oro que estaba delante del trono.
En el Cielo del Padre no se necesita altar de oro. En el texto se usa este material
para encandilar y dar mayor sensación de poderío y luminosidad.
En el Cielo no necesitamos oro porque la luz del Padre brilla más.
Cada vez más irás encontrando el verdadero discernimiento y ya no te podrá atrapar
el demonio.
167. Y el humo de los perfumes subió con las oraciones de los santos de la mano del
ángel a la presencia de Dios.
Ese no es Dios, ni tampoco son oraciones las que les llegan. Muestra oro para hacer
desearlo.
Estas oraciones no son oraciones sino deseos proyectados, pactos que piden quienes
se obnubilan. Terminan siendo pactos. No pidas cuando veas oro.
Entre el pacto y la Gracia notarás la diferencia. Si tu mente está en el silencio podrás
discernir entre la Gracia y el pacto. Solo así podrás trascender tus propios niveles de
conciencia donde la oscuridad del mismo demonio te atrapa.
168. Entonces el ángel tomó el incensario, lo llenó de fuego del altar, y lo arrojó sobre
la Tierra. Y hubo truenos y voces y relámpagos y un terremoto.
Usa un ritual, el demonio se disfraza usando un ritualismo religioso que consiste en
tirar humo desde el altar. Impone la religión del miedo al castigo. Ese no es mi dogma, si
yo tiro humo sale el sol y hay risas.
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Encontrarás la alegría y la felicidad eterna cuando hayas discernido entre el pacto y
la Gracia. Encontrarás al sabio interior que puse en cada uno de los seres humanos. Cada
nacimiento es un alma que irá evolucionando siempre hacia Mí.
169. Y los siete ángeles que tenían las siete trompetas se aprestaron a tocarlas.
Las palabras de mi Padre no se transmitirían de una manera tan sonora. Él da
enseñanzas a través del silencio. El demonio quiere despertar la atención para que solo a él
lo escuchen.
La forma de comunicarse con el Padre es a través del corazón, desde el silencio y
desde la quietud.
170. Y el primero tocó la trompeta y hubo granizo y fuego mezclados con sangre, que
fueron arrojados sobre la Tierra.
El demonio quiere impresionar causando el temor.
El Padre no se vale ni de sangre ni de situaciones externas. Nada que venga de ahí
pertenece a Dios.
171. Y fue incendiada la tercera parte de la Tierra, y fue incendiada la tercera parte
de los árboles, y fue incendiada toda la hierba verde.
Solo el demonio destruiría lo que mi Padre ha creado. Es el fuego del infierno. Mi
Padre solo construye, nunca destruye, quien comprenda esto nunca podrá ser engañado.
172. Y tocó la trompeta el segundo ángel, y algo como una gran montaña de llamas fue
precipitado al mar. Y la tercera parte del mar se convirtió en sangre, y murió la
tercera parte de las criaturas vivientes que estaban en el mar, y la tercera parte de las
naves fue destruida.
El demonio en su destrucción lo quiere abarcar todo. Mi Padre nunca permitiría la
destrucción de su propia creación.
Son palabras reiterativas, siempre iguales. Solo cambia el escenario. Una manera
más de engañar.
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173. Y tocó la trompeta el tercer ángel, y se precipitó del cielo una grande estrella
ardiendo como una antorcha, cayó en la tercera parte de los ríos y los manantiales de
agua.
El demonio quiere el dominio absoluto, por eso ataca con el fuego, el cielo, el mar,
la tierra.
Una manera más de someter.
174. El nombre de la estrella es Ajenjo, y convirtióse la tercera parte de las aguas en
ajenjo, y muchos hombres murieron a causa de esas aguas porque se habían vuelto
amargas.
Mi Padre no hubiera dejado que sus hijos se alimentaran de esas aguas. Son
esclavos del demonio los que se atreven a probarlas.
Comprendan que el Padre es Amor y el Amor construye, eleva, purifica. Si no se
cumplen ninguna de estas tres razones no viene del Padre.
175. Y tocó la trompeta el cuarto ángel, y fue herida la tercera parte del Sol y la
tercera parte de la luna y la tercera parte de las estrellas de manera que se oscureció
la tercera parte de ellos.
Esa oscuridad se refiere a su hábitat. Mi Padre vive en un lugar muy luminoso, y esa
luz la irradia a sus hijos.
El Padre es luz y todo el que este bajo Él será iluminado. No se debe sentir temor y
nada sucederá.
176. Y vi y oí como volaba en medio del cielo un águila que decía con poderosa voz:
“Ay, ay, ay de los moradores de la Tierra a causa de los toques de trompeta que faltan de
los tres ángeles que todavía han de tocar.”
Ese águila representa al demonio arrasándolo todo, y es una advertencia para los
que en él crean.
Todo cambio, toda transformación que venga del Padre se produce en el interior.
Todo lo externo solo se presta a confusión.
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177. Y tocó la trompeta el quinto ángel, y vi una estrella que había caído del cielo a la
Tierra, y le fue dada la llave del pozo del abismo.
Mis estrellas no caen a la Tierra: descienden cuando hay que iluminar. Ellas no
tienen ningún abismo.
El abismo es la oscuridad que hay dentro tuyo. Busca en tu corazón tu propia
estrella de luz y ella te guiará al Padre.
No mires hacia abajo y hacia atrás, solo hacia arriba.
178. Abrió el pozo del abismo y subió humo del pozo como el humo de un gran horno
y a causa del humo del pozo se oscurecieron el Sol y el aire.
Ese abismo es el infierno, es la cueva del diablo, de Satanás. Está en la Tierra,
nunca su humo oscureció el Sol, no puede oscurecer mi luz. Esta imagen es pura hechicería.
Este abismo es el infierno y todo es espejismo. Si sigues la estrella de tu luz interior,
nada verás de ese espejismo, se disuelve todo. Todo es luz en el corazón del Padre.
Los demonios te paralizan la mente, te ciegan y te aturden y no te dejan escuchar los
latidos de nuestro corazón, el de mi Padre y el Mío. Todo lo demás es espejismo.
179. Del humo salieron langostas sobre la Tierra.
Pestes como amenazas.
Estas langostas representan los monstruos que habitan dentro tuyo, y con los que te
identificas y crees que son tu Ser, tu real naturaleza.
Si no logras encontrar tu centro, serás títere de los demonios. Estos te engañan
fácilmente, imitando a los dioses. Tu ego dominado por los demonios te terminará
destruyendo.
Solo la luz, el discernimiento, el camino recto, disuelven las pestes, los monstruos,
los demonios.
¡No te dejes engañar por las cosas cotidianas!
180. Y les fue dado poder semejante al poder que tienen los escorpiones de la tierra.
No sean escorpiones cargados de veneno. Eso es lo que el quiere, despertar vuestro
veneno.
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El mayor monstruo es el ego, lo que el demonio quiere es alimentar al ego
haciéndoles sentir dioses o similares dioses ¡Son carnada fácil!
181. Y se les mandó que no dañasen la hierba de la tierra, ni verdura alguna, ni árbol
alguno sino solamente a los hombres que no tuvieren el sello en la frente.
Yo no castigo a los hombres por el color de su frente. Todas las criaturas vivientes
son iguales para Mí y son una sola.
Detrás del escenario que presenta el demonio aparece como un gran ejercito de
represión. Esta ilusión fue el gran error de la Iglesia posterior, que terminó en las Cruzadas.
No es del hombre, ni menos de la langosta, darse cuenta quien tiene el sello divino.
Eso solo lo sabe el Padre.
182. Les fue dado no matarlos sino torturarlos por cinco meses, y su tormento era
como el tormento que causa el escorpión cuando pica al hombre.
Sigue castigando y amenazando, y legaliza lo que Yo nunca habría hecho.
Despertad pues se ve claramente que esto no es mío, ni de mis ángeles. Solo el miedo
posibilitó que durante siglos creyeran esto.
183. En aquellos días los hombres buscarán la muerte y no la hallarán, desearán la
muerte y la muerte huirá de ellos.
La muerte como castigo es otra de las falsedades de este texto. El único que huye es
él.
La muerte no existe. La sumatoria de los continuos nacimientos es todo un engaño.
Tuvieron un solo nacimiento que fue de la Luz
Todo lo que vieron después fue un engaño. Cuando puedan entender esto saldrán de
esta rueda engañosa.
Son luz, no lo olviden.
No se dejen poseer.
La muerte no existe.
184. Las langostas eran semejantes a caballos aparejados para la guerra.
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Sigue fabricando imágenes de terror. Ese es su instrumento para paralizar y producir
miedo. Los caballos y las langostas también son hijos del Padre. Si los ven como eso nunca
les harán daño.
Todos somos hijos de la Luz.
Despierta. Mira con el corazón.
185. Y sobre sus cabezas llevaban algo como coronas parecidas al oro.
Quiere adornar estos monstruos que él creó tratando de enaltecerlos.
El miedo entra por los ojos, no deben asustarse por estas imágenes por más
monstruosas que sean.
Debes cerrar los ojos y pensar en Mí y en el Padre. Y esa pura imaginería se
disuelve, se desvanece.
Todo está en tu mente, en tu imaginación, todo es una mentira, una proyección.
Busca la Luz en tu corazón, no mires con los sentidos, mira con la intuición. Tienes
el poder del discernimiento.
186. Y sus caras eran como caras de hombre.
Está claro que algunos hombres están a su servicio. Él busca hombres; los que se
entregan a este juego pierden su integridad, por eso tienen cuerpos de langostas.
Los demonios toman figura de hombre o mujer. Te engañan con la seducción, te
hacen perder el tiempo, no te dejan pensar internamente.
Si ves no con los ojos censores sino con los ojos internos podrás ver los monstruos,
cómo son los que te engañan como a un niño.
187. Tenían como cabellos de mujer.
Pueden tener de todo un poco. Él fabrica cualquier cosa para impresionar.
Si miras de frente a esta máquina se disolverá, siempre que la mires con los ojos de
tu interior.
La Luz del Padre disipa toda oscuridad, no te entregues a lo engañoso.
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188. Y sus dientes eran como de leones, sus pechos eran como corazas de hierro, y el
estruendo de sus alas era como el estruendo de muchos carros de caballos que corren
al combate. Tenían colas semejantes a escorpiones, en ellas aguijones y en sus colas
reside su poder de hacer daño a los hombres durante cinco meses.
Realmente hay que ser muy rebuscado, complicado, para imaginar algo tan
monstruoso, tan feo.
Es una imagen de poder muy fuerte, pero de poder oscuro. A ella no le falta nada
para infundir pánico a quien la mira. La máquina de destrucción jamás imaginada.
Imaginen mi luz y esta se disolverá.
189. Tienen por rey sobre ellas al ángel del abismo, su nombre en hebreo es Abbadón
y lleva en griego el nombre de Apollyon.
Ese ángel es él, que azota a esas fieras y dispone de varios ejércitos o recursos.
Soy Yo, Jesús, a quien él más teme. Pensad en mi y esas fieras se replegarán. Ese
Abbadón volverá a su abismo y sus fieras serán humos en su fuego.
No hay miedo en el camino que conduce al Padre.
190. El primer ay ya pasó, ved tras esto vienen aún dos ayes.
Esta parte del texto es una de las más impresionantes para los humanos. Muestra
todas sus armas y todas sus fieras monstruosas de dominio.
Te aconsejo no mirarlas ni imaginarlas.
Ingresa en mi torrente de luz.
No temas ni te paralices por lo que ven tus ojos.
191. Y tocó la trompeta el sexto ángel. Y oí una voz procedente de los cuatro cuernos
del altar de oro que está delante de Dios.
Mi Padre tiene como mensajeros ángeles celestiales y no bestias. Esos cuernos
representan la violencia y el despertar del temor.
192. Y decía el sexto ángel que tenía la trompeta: “Suelta a los cuatro ángeles
encadenados junto al gran río Eufrates.”
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Esos cuatro no eran ángeles sino esclavos del demonio. Las almas de mi Padre son
libres, nunca las encadenaría.
Esos cuatro pueden sorprenderte distraído. Tienes que estar siempre alerta para no
caer. Debes seguir la luz de tu corazón porque Yo no puedo estar siempre ahí para
advertirte.
193. Y fueron soltados los cuatro ángeles que estaban dispuestos para la hora y el mes
y el año, a fin de exterminar la tercera parte de los hombres.
Eran cuatro esclavos que tenían encomendada la destrucción mandados por el
demonio.
Sé un alma libre, no te encadenes a los deseos de los demonios.
194. Y el número de las huestes a caballo era de doscientos millones. Yo oí su número.
El demonio da cifras numerosas para impresionar a los hombres. No se dejen
arrastrar por él. No existen si te elevas y cambias de plano, en realidad no existe nada, esa
es la gran guerra del discernimiento.
Los millones y millones se refieren a los millones de deseos, las ilusiones que
producen el engaño.
195. En la visión miré a los caballos y a sus jinetes, tenían corazas como de fuego y de
jacinto y de azufre.
Aquellos eran soldados del demonio que representaban la destrucción.
Esos monstruos que ves son las proyecciones de las imágenes, tus propias
proyecciones de las batallas que te ganaron y entonces fuiste poseso.
No tengas más miedo, con la luz puedes enfrentarlas, transformarlas o trascenderlas.
196. De estas tres plagas murió la tercera parte de los hombres; a consecuencia del
fuego y del humo y del azufre que salía de la boca de aquellos.
El demonio destruye a quien no quiera seguirlo estando en la oscuridad.
El demonio no puede destruir a quien está en la luz.
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197. Pues el poder de los caballos está en su boca y en sus colas: porque sus colas,
semejantes a cabezas; tiene cabezas y con ellas dañan.
El demonio no hace más que asustar mostrando las bestias monstruosas. Su poder
está en apropiarse de tu mente, en habitar en ella. Te proyecta películas, te maneja, te hace
creer que eres un dios pero no eres nada.
Solo el Padre tiene la luz, esos monstruos son en lo que te conviertes cuando dejas
que ellos se apropien de tu mente y de tus manos. Si tuvierais el poder de discernir no
habría guerras.
198. Mas el resto de los hombres, los que no fueron muertos con estas plagas, no se
arrepintieron de las obras de sus manos y no cesaron de adorar a los demonios y los
ídolos de oro y de plata y de bronce y de piedra y de madera que no pueden ver, ni oír,
ni andar.
Mi Padre dice que solo se salvarán los que lleguen a la luz, a su reino.
La luz está dentro tuyo ¡Búscala!
199. Ni se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación,
ni de sus latrocinios.
El demonio sabe describir muy bien a los habitantes de su infierno.
200. Y vi otro ángel poderoso que descendió del cielo, envuelto en una nube con el
arco iris sobre su cabeza.
El ángel es el pecado que desciende disfrazado. Lo demoníaco se viste con las
formas más bellas que hay en el plano material. Lo que pasa es que los hombres no están
capacitados para ver la verdadera belleza esencial.
201. Su rostro era como el Sol, sus pies como columnas de fuego.
El demonio siempre trata de maravillarlos. Como les dije: si buscan la belleza en
este plano solo van a encontrar sus manifestaciones. Si buscan en el interior van a hallar la
belleza en todas las cosas.
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202. Tenía en su mano un librito abierto, y puso su pie derecho sobre el mar y el
izquierdo sobre la tierra.
El demonio lo quiere abarcar todo. Él tiene poder sobre la materia y sobre la mente
que están representados por la tierra y el mar. Mientras fluctúes entre la materia y la mente
estarás en su territorio, pero no tiene un pie en el cielo. Así si te remontas al cielo más allá
de sus dominios, es la única manera de no poder ser alcanzado.
203. Y clamó con gran voz, como un león que ruge, y cuando hubo clamado los siete
truenos levantaron sus voces.
El llamado a mi Padre no tiene temor y hasta es silencioso.
Representa el llamado a las jerarquías demoníacas, y el jefe se reconoce porque
infunde temor en los sublevados.
204. Y cuando hubieron hablado los siete truenos iba yo a escribir, mas oí una voz del
cielo que decía: “Sella lo que dijeron los siete truenos y no lo escribas.”
Los truenos son los pecados que siempre se esconden.
El poder del demonio es estar oculto. El no se revela en los que habitan este plano.
Solo elevándose por encima de él es que se lo puede revelar.
205. Entonces el ángel que yo había visto de pie sobre el mar y la tierra alzó su mano
derecha hacia el cielo y juró por Aquel que vive por los siglos de los siglos – que creó
el cielo y cuanto hay en él- que ya no había más tiempo, sino que en los días de la voz
del séptimo ángel, cuando vaya a tocar la trompeta, el misterio de Dios quedará
consumado según la buena que Él anunció a sus siervos los profetas.
El demonio los pone en el límite, pero mi Padre siempre da la oportunidad de llegar
a Él.
Su hechizo tiene que ver con el tiempo, generando la ansiedad para la consecución
del deseo. Si matan la ansiedad se disuelve el deseo.
Las verdades del Padre no están limitadas al tiempo, son eternas.
206. La voz que yo había oído del cielo me habló otra vez y me dijo:
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“Ve y toma el libro abierto en la mano del ángel que está de pie sobre el mar y sobre la
tierra.”
Fui pues al ángel y le dije que me diera el librito y me respondió:
“Toma y cómelo, amargará tus entrañas pero en tu boca será dulce como la miel.”
Tomé el librito de la mano del ángel y lo comí; y era en mi boca dulce como la miel,
mas habiéndolo comido quedaron mis entrañas llenas de amargura.
Sucedería a la inversa si ese libro fuese mío. Mi libro no da placer efímero a la
garganta y amargura final, sino al revés.
En un principio las verdades de mi libro suelen ser como duras o difíciles, pero
finalmente aportan dulzura, gozo y vida eterna en el interior.
Ese libro es el libro del placer terrenal. Ahí es donde está el ángel. Ese placer es
atractivo en los comienzos pero huele mal en su final. Es el libro que promete y no aporta
nada permanente. Su final es amargo porque quiere que se lo vuelva a buscar, a necesitar. Y
así sucesivamente hasta no poder salir del círculo vicioso.
Resumiendo: la búsqueda del placer terrenal te ata al pacto, y la búsqueda de la
verdad trascendental te libera del mismo.
Mi libro es todo lo contrario a lo que ofrece el demonio. Una vez leído y digerido,
ya no se necesita otro. [Jesús muestra el libro, lo saca de sus manos, lo pone en el medio de
un círculo y el círculo se rompe. Luego lo mueve para los costados y va rompiendo por la
mitad todos los círculos que hay alrededor.]
207. Me dijeron entonces: “Es menester que profetices de nuevo contra muchos pueblos
y naciones y lenguas y reyes.”
Bajo la falsa idea de profetizar busca multiplicarse, busca aliados para expandir su
forma de dominio a través del deseo sobre los demás y así capturar sus almas.
Pudo ver el deseo de profetizar de Juan y trató de usarlo en su provecho.
208. Fueme dada una caña semejante a una vara y se me dijo: “ Levántate y mide el
templo de Dios y el altar y a los que adoran allí.”
Nadie puede medir en vida el templo de Dios, el verdadero. El demonio le da una
vara que es una imagen de los pastores para guiar, pero al pedirle que mida con ella el
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templo de Dios, lo está confundiendo. Subliminalmente lo lleva a negar a Dios, pues Dios
no se puede medir. Ahí hay una semilla de negación de Dios.
“Anda mídelo” dice el demonio y sabe que eso no se puede hacer. No hay una vara
para medir el infinito. La luz no tiene medida.
La magnitud de mi templo no tiene medidas como el amor que yo les otorgo a mis
hijos y el medirlo no es más que una distracción para hacerles perder el camino a quienes se
dirigen hacia Mí.
209. Mas el atrio exterior del templo déjalo afuera y no lo midas porque ha sido
entregado a los gentiles, los cuales hallarán la Ciudad Santa durante cuarenta y dos
meses.
Nuevamente margina, castiga y discrimina. Yo Jesús tuve gentiles a mi lado, mas
nunca los vi como tales y los amé. Eso no está dado en mis enseñanzas. Él siempre busca
un enemigo, alguien a quien castigar, alguien de quien hay que separarse. Pero Yo siempre
hablé de uniones y perdón.
A todos mis hijos los amo por igual.
210. Yo daré a mis dos testigos que vestidos de sacos profeticen durante mil doscientos
sesenta días. Estos son los dos olivos y los dos candelabros que están en pie delante del
Señor de la Tierra y si alguno quisiere hacerles daño, sale de la boca de ellos fuego que
devora a los enemigos y el que pretenda hacerles mal ha de morir de esa manera.
La promesa a futuro es otro de sus anzuelos. Yo recomiendo concentrarse en la
presente bienaventuranza y no hacer cosas hoy esperando el cumplimiento de la promesa de
mañana. El tiempo del Dios verdadero es ahora.
Estos dos escoltas son sus voceros. Ellos hablan, prometen y también amenazan por
él. Son sus fieles servidores. El verdadero Señor no necesita amenazar, pues Él es el
verdadero amo del Universo. Amenaza quien tiene miedo. Mi Padre y Yo no tememos:
ningún daño nos llega. El que amenaza en el fondo se siente débil. Si me vieran a Mí o a mi
Padre ningún miedo ni ninguna debilidad tendrían. Él amenaza y tiene miedo al daño
porque se sabe en falta, está intranquilo, alejado de mi Padre. No hay miedo para el alma
que está cerca del Padre.
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En Mi Reino no hay pasados ni futuros, solo el presente se instala en los corazones
que vienen a Mí. En mi reino tienen toda la protección y nada que les sea enviado desde la
oscuridad les puede llegar ¡Sean bienvenidos a Mi Reino!
211. Ellos tienen el poder de cerrar el cielo para que no llueva durante los días en que
profeticen, tienen también potestad sobre las aguas para convertirlas en sangre, y
hervir a la tierra con toda suerte de plagas cuantas veces quisieren.
Vuelve a presentar imágenes de caos. Este caos él lo conoce desde antes y ahora se
lo atribuye a poderes propios.
El que fue aterrando a los hombres puede ir confundiéndolo todo. Mas no sabe que
la luz tiene más fuerza que todas esas imágenes que va revelando.
212. Y cuando hayan acabado su testimonio la bestia que sube del abismo les hará la
guerra, los vencerá y les quitará la vida. Y sus cadáveres (yacerán) en la plaza de la
ciudad que se llama alegóricamente Sodoma y Egipto, que es también el lugar donde
el Señor de ellos fue crucificado.
La sentencia es terminante, es esta la gran amenaza. Pero si hay caos y sangre no lo
atribuyan al demonio porque también en la conducta humana hay caos y muerte.
Yo derramé mi sangre y no estaba con la bestia sino con mi Padre. La sangre
impresiona como imagen, pero conectados con el Padre es como un agua más. A veces
perder la sangre es purificarse. Él muestra esta imagen tan sangrienta para infundir temor y
crear apegos corporales. El alma no tiene sangre. Ella es eterna y no el cuerpo.
Nuevamente les pido que no teman por lo que vean sus ojos. El siempre trata de
mostrar a sus ojos cosas espantosas para ganarles la conciencia a través del miedo. Si en
este mismo instante cierran los ojos y me ven a Mí o a mi Padre, por la Gracia de la luz esas
imágenes se desvanecen, y vuestra alma les quitará de los párpados esas ilusiones que él
fabrica para ustedes.
No usen los sentidos si quieren llegar a Mí porque solo la intuición interior los va a
atraer a mi lado. Con los sentidos solo podrán ser ilusionados y caerán en la ignorancia del
plano terrenal. A mí búsquenme con los ojos del alma pura y transparente.
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213. Y las gentes de los pueblos y tribus y lenguas y naciones contemplarán sus
cadáveres tres días y medio, y no permitirán que se les dé sepultura a los cadáveres.
Sigue presentando horrores y hace culto de la muerte como venganza, cuando ella
es verdaderamente liberación.
El demonio se vale del apego de los hombres para engañarlos en su ignorancia. No
consideren que la muerte es el final de la vida.
214. Y los habitantes de la Tierra se regocijarán a causa de ellos, hacen fiestas, y se
mandarán regalos unos a otros, porque estos profetas fueron molestos a los moradores
de la Tierra. Pero al cabo de los tres días y medio, un espíritu de vida que venía de
Dios entró en ellos y se levantaron sobre sus pies, y cayó un gran terror sobre quienes
lo vieron y oyeron una poderosa voz del cielo que les decía: “Subid acá”, y subieron al
cielo en la nube, a la vista de sus enemigos.
Es complicado y rebuscado y se apropia de los tres días de mi resurrección. Ese es
el ángel de la guerra, quien les hace creer que ella tiene algún sentido, que contemplar los
cuerpos muertos servirá para algo.
Yo jamás llamaría a mis hijos demostrándoles temor, más bien así los alejaría.
Búsquenme en la calma y no en la guerra cotidiana.
215. En aquella hora se produjo un gran terremoto. Se derrumbó la décima parte de
la Ciudad y fueron muertos en el terremoto siete mil nombres de hombres. Los demás
sobrecogidos de temor dieron gloria al Dios del cielo, el segundo ay pasó, ved que el
tercer ay viene pronto.
Esos castigos, esos terremotos, no son producidos por mi Padre ni por ningún ángel
de Él. Si sucedieran en todo caso serían consecuencia de las acciones de los hombres como
una ley de causa y efecto. No crean que mi Padre haría cosas así. Si ello sucediera rezad por
sus almas. No las miren desde otro lado, desde la nube de la soberbia, no crean que eso es
un castigo divino. Separa las palabras “castigo” y “divino” porque no pueden ir juntas.
El hombre no sabe cuánto se autodestruye, y es el demonio quien le hace creer que
todo es obra de Dios: ¿Cómo mi Padre podría destruir lo que con tanto Amor creó para los
hombres?
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216. Y tocó la trompeta el séptimo ángel, y se dieron grandes voces en el cielo que
decían: “El imperio del mundo ha pasado a nuestro Señor y a su Cristo, y él reinará por
los siglos de los siglos”.
El mundo es, fue y será el imperio de los demonios. Llegar a la Conciencia Crística
y al Padre implica el gran esfuerzo para los humanos de entender que la Tierra no es su
mundo, que no hay nada puro y santo sobre la Tierra, sino solo densidad y demonios. El
hombre tiene que verse a sí mismo inmerso en esa realidad para así poder luego
abandonarla en la Conciencia del Padre.
No hay tal cosa como dominio de Dios en el mundo. Es parte de la gran soberbia del
hombre creer que lo santo puede simplemente manifestarse en medio del planeta de la
oscuridad, y es parte de su confusión creer que puede transitar entre esa oscuridad,
actuando en la misma y declamando que es la luz. En la Tierra todo es oscuridad.
Esta planeta no es un lugar de luz sino un lugar de tránsito para las almas envueltas
en la ilusión, el engaño. Solo sabiendo esto es posible atravesarlo. No es que en este planeta
se va a reestablecer ningún reino de Dios, pero las almas son almas de Dios que tienen que
transitar por el planeta para finalmente llegar al Padre.
217. Y los veinticuatro ancianos delante de Dios se sientan en sus tronos, se postraban
sobre sus rostros y adoraban a Dios diciendo: “Te agradecemos Señor Dios
Todopoderoso que eres y que serás por cuanto has asumido gran poder y has empezado a
reinar”.
Es tan claro que no son las palabras de mi Padre y que no son palabras de mi boca.
Veinticuatro ancianos ignorantes adorando al poder. Esto no tiene en absoluto que ver con
el poder espiritual real, la silenciosa adoración al Padre, la clara conciencia que no se busca
poder sobre el mundo. Nadie que busque poder en el mundo puede encontrar al Padre, y
todos aquellos que adoren y se postren ante el grandioso poder sobre lo mundano, están tan
condenados como el mismo demonio.
La idea que tiene el hombre del poder es relativa a sí mismo, como lo concibe lo
manifiesta, lo concreta. El poder que adora es la magnificencia de su propia imagen, el
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falso poder de Dios que es la muerte en el plano espiritual. El reino de Dios sólo se
reconoce por el espíritu.
218. Y habíanse airado las naciones pero vino la ira tuya y el tiempo para juzgar a los
muertos y para dar galardón a tus siervos, los profetas y a los santos. Y a los que
tienen tu Nombre, pequeños y grandes, y para perder a los que perdieron la Tierra.
No soy yo quien dice estas palabras porque recibo en mi seno a todos por igual..
Bienaventurados aquellos que perdiesen la Tierra y que puedan encontrarse
conmigo en el cielo.
No Soy Yo quien habla de poder pidiendo genuflexión a mis siervos, ni quien
espera recibir adoración de las criaturas perdidas.
Solo espero que en número cada vez más grande las almas pierdan la Tierra, y se
encuentren en el cielo con la mirada del Padre.
No puede haber ira que juzgue a los muertos porque no hay ira en la Conciencia del
Padre.
No hay juicio, no hay naciones, y sobre todo no hay muertos.
Lo que ocurre es que al hombre le es muy difícil comprender el Amor de Dios.
Unos pocos iluminados lo sienten, los demás tienen temor a Dios y visto desde el temor, el
miedo, el hombre espera un castigo. No comprende que ese castigo, esa oscuridad, ese
malestar, viene de sus propias acciones. La oscuridad o el demonio le hace creer que Dios
interviene para enviar castigos o méritos a los hombres. Todo lo que el hombre tiene en su
contra es lo que el mismo obtiene de su accionar.
Así también el acercamiento al espíritu es también voluntad del hombre, a través del
desapego a los sentidos y a la materia.
219. Entonces fue abierto el Templo de Dios, el que está en el cielo, y su vista en su
Templo. El Arca de su Alianza, y hubo relámpagos y voces y truenos y terremoto y
pedrisco grande.
Esas imágenes de violencia tienen por propósito fijarse firmemente en la mente y en
los corazones de las personas simples. Esta es precisamente la causa por la cual se
privilegia el temor al Padre al amor al Padre, y hacen que permanezcan cerradas las puertas
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del Palacio del Señor para todos aquellos que no pueden superar estas semillas implantadas
en el subconsciente a través de los siglos, y poder simplemente abrir con la llave del Amor
el Palacio que está en el corazón y que lo lleva directamente al Padre.
El hombre siempre pone delante de él sus construcciones mentales sin poder ni
querer superarlas, es cierto que este planeta vibra en la oscuridad, pero también hay días
verdaderos.
El temor no los lleva al Padre sino que los aleja de Él.
220. Y una gran señal apareció en el cielo: una mujer revestida del Sol y con la luna
bajo sus pies, y en su cabeza una corona de doce estrellas la cual hallándose encinta
gritaba con dolores de parto y en las angustias del alumbramiento.
Estas imágenes vuelven a apelar al corazón simple para que quienes escuchen su
descripción empiecen a identificarse físicamente con el dolor astral que estas palabras
producen. Esto es así porque los seres humanos pueden experimentarlas en carne propia al
ser implantadas en lo profundo del inconsciente.
Lo mismo ocurre con las alusiones a la naturaleza – las estrellas, la luna, el
alumbramiento – implantando estas imágenes en los genes, como engañosas
representaciones de la oscuridad, asumidas como algo natural para pasar de generación en
generación.
La señal es la copia de la estrella de Belén, y el alumbramiento es el plan demoníaco
para el nacimiento de la contracara de Jesús.
[A Juan:] Era el plan demoníaco que te tenía preparado, mostrándote un parto
terrible, desgarrador. El demonio siempre busca imitar: la imagen divina que quiere copiar
resulta burda.
El demonio quiere elegir un alma luminosa porque no desea un demonio para
alumbrar a otro, sino transformar lo luminoso en demoníaco (lo mismo quiso hacer con
Juan: usar las fuerzas de la luz para aumentar su ejército).
Si la luz es tan intensa como para provocar un alumbramiento luminoso, él quiere
producir la contracara, transformar esa luz en oscuridad profunda.
No hay etapa intermedia, si se está elevado en la luz, cuando se cae se está bien
abajo. Provocar esta caída es además una forma de desbaratar el Plan Divino.
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221. Y viose otra señal del cielo, y he aquí un gran dragón de color de fuego, con siete
cabezas y diez cuernos, y en sus siete cabezas siete diademas, su cola arrastraba la
tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó a la Tierra.
La apelación al miedo de este párrafo es pueril, así como la creación de animales
fantásticos que luchan contra fuerzas terribles. En ningún párrafo de las Escrituras que
repitan mis palabras pueden leerse escenas de violencia, ni de miedo, ni de odio.
¿No amaría yo tanto a la fabulosa bestia de siete cabezas si existiese, como a la
mujer, como a aquellos que contemplan la escena? ¿Por qué habría de preocuparme la
apariencia externa de ninguno? Yo sólo veo el alma en todas las cosas.
Esa segunda señal es la que atrae lo que viene, en el caso de mi nacimiento hubo
señales que atrajeron a los magos, como guías y apoyo a mi familia. De la misma manera
en un nacimiento demoníaco la señal atrae a los que van a ser guías de ese ser, esto es, a los
demonios mayores que van a guiar a ese recién nacido. Siempre es igual en los dos planos
contrapuestos.
222. El dragón se colocó frente a la mujer que estaba para dar a luz, a fin de devorar a
su hijo luego que ella hubiese alumbrado. Y ella dio a luz un hijo varón, el que
apacenterá todas las naciones con cetro de hierro. Y el hijo fue arrebatado para Dios y
para el trono suyo.
Y así se siguen perdiendo oportunidades excepcionales para que las almas puedan
liberarse y jugar en torno al Padre, en vez que los padres entreguen voluntariamente a sus
hijos a los demonios para pagar sus pactos.
Ese demonio que llega como guía viene a arrebatar al nacido; los padres son sólo
vehículos, a él solo le interesa el niño como instrumento.
La bondad de los magos en mi nacimiento, es en este caso la maldad de los
demonios que tienen envidia y lo arrebatan, si bien por un lado le van a enseñar, por el otro
lado quieren arrebatarle todo el poder que posee. Por eso dice “devorarlo”, porque lo
envuelven en esa energía para que no haya posibilidad de acceder a él para ayudarlo, sobre
todo en el caso que los padres hayan sido arrebatados a la luz por temor a que esa luz
aparezca.
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Toda la protección que siente la madre antes del parto la pierde ni bien nace la
criatura, como si fuese desechable. Ya todo se concentra en esa criatura.
223. Y la mujer huyó al desierto donde tiene un lugar preparado por Dios para que
allí la sustenten durante mil doscientos sesenta días.
Tal vez la mujer, entendiendo que dio su hijo al pacto, se haya retirado al desierto a
meditar. El diablo la tentó durante mil doscientos sesenta días, y la mujer no pudo liberarse
porque el demonio la volvió a poseer.
Es la huida que se quiere evitar. Ante la pérdida de la protección hay como una
iluminación momentánea, es la huida de la mujer con el niño, creyendo que de esa manera
puede huir y salvar al hijo del demonio. Pero en el plan demoníaco no hay guía protectora
para la familia, por eso vienen a arrebatarlo, de ahí la huida infructuosa porque ya pactó, y
lo más seguro es que vuelva a pactar después de entregar a su hijo para sentirse protegida, y
esa es la protección que encuentra de mil doscientos sesenta días. Ese es el segundo pacto.
224. Y se hizo la guerra en el cielo; Miguel y sus ángeles pelearon contra el dragón, y
peleaba el dragón y sus ángeles, mas no prevalecieron y no se halla más su lugar en el
Cielo.
El dragón representa al inconsciente y Miguel representa el discernimiento. Sólo a
través del discernimiento se puede ver la irrealidad del mundo inconsciente.
La diferencia entre el bien y el mal simplemente está donde se encuentra tu
discernimiento.
225. Y fue precipitando el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y
Satanás, el engañador del Universo.
Sólo cuando se posee discernimiento se puede exorcizar a los demonios que están
alojados en el inconsciente, y de ahí que cada acto pasa a ser un acto consciente.
El transmitir el discernimiento a cada una de tus acciones te conectará al Plan
Divino, única forma de evolución y liberación.
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226. Y oí una gran voz del cielo que decía: “Ahora ha llegado la salvación, el poderío y
el reinado de nuestro Dios y el imperio de su Cristo porque ha sido precipitado el
acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche”.
En los planes celestiales hay un gran gozo cuando se produce la emancipación de un
alma; esto significa que pasa estar guiada por su interioridad y no por las compulsiones de
los demonios.
La conexión con el alma te permitirá derribar las barreras que impedían el
acercamiento hacia la luz, purificándote y elevándote a planos superiores.
227. Ellos lo han vencido en virtud de la sangre del Cordero.
Al eliminar esta energía oscura hay una verdadera alimentación que proviene de la
energía espiritual. Cuando logres hacer desaparecer la última barrera habrás logrado
conectarte con una Conciencia Divina que ama a todas las demás.
No importa el lugar dónde te encuentres sino la fe que tengas.
228. Y por la palabra, de la cual daban testimonio menospreciando sus vidas hasta
morir.
Esta energía libera al alma del acto externo oscuro que la ata y la corrompe. El
conectarte con esta Conciencia Divina cortará todos los lazos que son la irrealidad de tu
presente conectado a tu pasado y a la imaginación de tu futuro, devolviendo a tu alma el
estado Crístico que había perdido con el pecado original.
229. Por lo tanto alegraos los cielos y a los que habitáis en ellos. Más ¡ay de la tierra y
del mar!, porque descendió a vosotros el Diablo lleno de gran furor, sabiendo que
queda poco tiempo.
Sólo aquellas almas que pueden acceder a una energía superior podrán liberarse.
Aquellas que queden entrampadas en este plano van a ser devoradas.
Regocijaos en la alegría del Señor, ya que habréis logrado liberaros de todas las
ataduras que tenían sujeta vuestra mente y espíritu en pos de un proceso que no era el
marcado por Dios.
Al cortar todos los lazos con quien te hacía pactar habrás logrado la Vida Eterna.
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230. Cuando el dragón se vio precipitado a la tierra persiguió a la mujer que había
dado a luz al varón. Pero a la mujer le fueron dadas alas de águila grande para que
volase al desierto, a su sitio, donde es sustentada por un tiempo y (dos) tiempos y la
mitad de un tiempo, fuera de la vista de la serpiente.
Al liberarse un alma, la fuerza oscura que es desalojada tiende a atacar a un ser
querido para retenerlo. Pero frente a esto se da la oportunidad a la persona atacada,
dandosele la energía para que pueda liberarse.
Mas no sientas que has finalizado el camino, ya que la tentación es constante, aun
más allá de la muerte. Lo único que podrá sustraerte a ella es tu conexión permanente en
silencio mental y con fe completa.
231. Entonces la serpiente arrojó de su boca en pos de la mujer agua como un río para
que ella fuese arrastrada por la corriente.
Las fuerzas oscuras van a tratar por todos los medios de retener y capturar al alma
que aun no se ha podido liberar.
Aun después de la muerte, por procesos de vidas anteriores, continuarán tu
persecución y esto se prolonga en otras vidas.
Mantente en tu canal de luz y discierne la acción correcta de cada acto.
232. Mas la tierra vino en ayuda de la mujer, pues abrió la tierra su boca, y sorbióse el
río que el dragón había arrojado de su boca.
Las fuerzas de la luz no se quedan estáticas y también ofrecen una energía para
contrarrestar al hipnotismo diabólico.
El discernir te permitirá actuar de acuerdo a la ley divina que regirá en tu alma
dictando tu accionar correcto y el desapego a los frutos de la acción.
233. Y se enfureció el dragón contra la mujer y se fue a hacer la guerra contra el resto
del linaje de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio
de Jesús y apostose sobre la arena del mar.
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Así como en este caso el alma ayudada puede liberarse, los demonios van a atacar a
todos los allegados; pero el alma desde afuera va a observar los hechos desde un estado de
imperturbabilidad.
Una vez que estés instalado en la conciencia Crística tu caminar será acorde al de
ella, dejando de lado todo lo que te ha perturbado en vidas anteriores y comenzarás a andar
el camino claro y luminoso de los actos sin mancha.
234. Y del alma vi salir una bestia con diez cuernos y siete cabezas, y en sus cuernos
diez diademas, y en sus cabezas nombres de blasfemia. La bestia que vi era semejante
a una pantera: sus patas eran como de oso, y su boca como de león.
El demonio se representa a sí mismo, tratando de mostrar con su ferocidad la fuerza
que posee, pero esta no es mayor que la luz.
La luz no necesita formas monstruosas, ni colmillos amenazadores, ni nombre de
blasfemia. El demonio recurre a un disfraz mitológico para asustar a personas simples y
excitar su imaginación para distraerlas.
Así estas imágenes de monstruos colosales, que presenta en todo el texto, van a
volver una y otra vez a atacar a los hombres en el sueño y en la vigilia. Instaladas en la
imaginación, ya no se van sino mediante un acto de purificación.
235. Y el dragón le pasó su poder y su trono y una gran autoridad.
El dragón representa el fuego del infierno y ese poder y esa autoridad es lo que le
permite adquirir maldades e impregnárselas a los seres.
Esta impregnación se refiere justamente a estas imágenes que como expliqué, se
convierten en imaginario colectivo y compartido. Son terribles pero atractivas porque
excitan a la imaginación y logran el propósito de distraer a las almas que en este proceso
histórico buscan con afán la purificación. El plan es perfecto porque no hay nada más
seductor que el terror.
236. Y (yo vi) una de sus cabezas como si se le hubiere dado muerte, mas fue sanando
de su golpe mortal y maravillóse toda la Tierra (y se fue en pos de la bestia).
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Sólo las almas puras y sanas de esa enfermedad que llamamos pecado podrán
vencer a esa enorme bestia que es el demonio.
Juan hizo lo que hacen los niños al ver algo que los asusta: poner la mano abierta
sobre sus ojos e intentar a la vez ver y no ver. La actitud correcta hubiera sido mirar y ver al
demonio hablando, pero el miedo que este produce arruina la visión.
237. Y adoraron al dragón, porque él había dado autoridad a la bestia, y adoraron a
la bestia diciendo: “¿Quién es como la bestia? ¿Quién puede hacerle la guerra?”
Los adoradores de la bestia son los esclavos del demonio. En este relato, la bestia
hace ostentación de su fuerza y se proclama invencible mientras su ejercito de demonios
aduladores entra en la mente de las personas y de Juan, y terminaron haciendo de este texto
lo que fue.
Estos aduladores se confunden con los hombres hasta convertirse estos en los
aduladores de la bestia. De haber podido mirar y ver habrían visto que también el Hijo del
Padre ama a la bestia, a los aduladores y a los hombres por igual, porque todas son almas
que pueden ser realizadas en su Amor.
Todos lo seres son almas, incluso los demonios y la bestia, el demonio es un alma
confundida que se disfraza de bestia o de Hitler.
Yo, Jesús, solo percibo las esencias, y así percibo a todas las almas por igual, tanto a
aquellas más purificadas, como la Madre Teresa de Calcuta, entregada al servicio, o esas
otras que cometen actos terribles, como Hitler.
Para mí la bestia no es más que un monigote de la oscuridad, a quien podría abrazar
con Mi Luz. Pero el monigote no soporta Mi Luz, se condenó a las tinieblas y es digno de
compasión. No existe en mi ni el odio ni el desprecio, por eso no odio ni desprecio a la
bestia o al demonio.
238. Y se le dio una boca que profería altanerías y blasfemias.
Sólo el demonio puede dar estos poderes porque el demonio es esos poderes
239. Y le fue dada autoridad para hacer su obra durante cuarenta y dos meses.
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Mi Padre no da tales derechos, el demonio de nuevo los engaña. Mi Padre no
confiere derechos, ni tiempos porque en su vibración no hay derecho ni tiempo.
Los cuarenta y dos meses son el tiempo de la magia, y el uso de la palabra para
destruir, para pensar la destrucción, para planificarla y llevarla a cabo: es la característica
del hombre poseso por el demonio
En la vibración del Padre no hacen falta las palabras. Si yo transmito mi mensaje en
palabras es porque para muchos interesados todavía no está abierta su propia vía de energía
y purificación. Pero si solo pudieran contemplar mi rostro, libre ya las almas, estas palabras
solamente serían dibujos sin sentido.
240. Abrió pues su boca para blasfemar contra Dios, blasfemar de su nombre, de su
morada y de los que habitan en el cielo.
El demonio pierde su poder, se siente debilitado, todo lo que le queda son
blasfemias y maldiciones. Pero mi Padre no dejará que asusten a sus hijos mientras estos
estén con Él.
La peor blasfemia y el peor insulto al Padre ya estaban hechos por quienes
escuchaban este relato de Juan y creían que este podía ser producto de la Palabra del Hijo
del Padre.
241. Le fue permitido también hacer la guerra a los santos y vencerlos.
Se refiere a la lucha interna para ponerlos a prueba, y si estos no estaban tan cerca
de mi Padre eran vencidos.
¿Quién otro que el demonio plantearía una lucha contra los santos? Ahí muestra lo
que estaba haciendo desde el principio: la lucha contra Juan y su victoria, porque lo tiene
obnubilado y no se da cuenta que está hablando con él. “Vamos a luchar contra los santos y
les vamos a ganar” y Juan no comprende que él es el destinatario del mensaje. Está
comprobando como la voluntad de Juan estaba tomada y su entendimiento borrado.
Lo que describe es que el proceso que vivió Juan lo vivieron muchos después, estos
fueron los hombres que leyeron este texto y lo sembraron como fundante del inconsciente
del hombre moderno.
242. Y le fue dado autoridad sobre toda tribu, pueblo y lengua y Nación.
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El demonio solo tiene poder cuando se lo deja entrar. Si lo expulsan de sus
corazones y voltean el rostro hacia Mí, no serán súbditos de ninguna tribu, ni Estado, ni
reino.
Son las ambiciones del demonio poseer todo el poder terrenal, pero eso no puede
compararse a una partícula de la Gracia Divina. ¡No debéis temer!
243. Y adoraron (al dragón) todos los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres
no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida del Cordero
inmolado.
Una vez más el pecado se cristaliza en los corazones y son prisioneros del fuego de
ese dragón.
Hasta hoy se sigue adorando a la bestia bajo sus diferentes disfraces en todos los
rincones de la Tierra. Solo unos pocos comprenden en su sentido profundo el mandamiento
del Padre de no tener otros dioses.
244. Si alguno tiene oído oiga: si alguno ha de ir al cautiverio, si alguno ha de morir a
espada a espada morirá. En esto está la paciencia y la fe de los santos.
Solo con mi Padre encontrarán la salvación y tendrán la protección eterna para
vencer la ilusión del sufrimiento.
El demonio incita a que presten atención a vuestros sentidos, a que escuchen y
miren la violencia de la espada contra la espada, y confunde entonces la única espada que
lleva el santo: la espada del discernimiento que le permite ganar su lucha interna con el
demonio, la lucha contra la mentira, la guerra y la magia.
245. Y vi otra bestia que subía (de abajo) hacia la tierra. Tenía dos cuernos como un
Cordero pero hablaba como un dragón.
Los hombres siempre buscan imágenes terribles para representar a los demonios que
encarnan. No debe dar más miedo una bestia fabulosa que un hombre hermoso con su alma
posesa por el demonio. La apariencia externa no los debe llevar a nuevas ilusiones. La
monstruosidad de los cuernos y del dragón puede estar tanto en la mente de los hombres
como en la espléndida belleza de una modelo.
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Nada se ocultará, tanto el Cordero como el demonio mismo que encubren y tapan
las almas de los hombres. Se caerán las máscaras, y se podrá ver la luz que hay en cada
uno. Nada tiene que ver la apariencia, solo la Gracia Divina surgirá.
246. Y la autoridad de la primera bestia la ejercía toda en presencia de ella. E hizo
que la Tierra y sus moradores adorasen a la bestia primera y que había sido sanada
de su golpe mortal.
La Tierra es el mundo de los demonios, no adora otra cosa que los demonios. Los
moradores de la Tierra a los que se refiere el párrafo no son los hombres, porque los
hombres son extranjeros en la Tierra: los moradores son los demonios.
Solo trascendiendo el estado de la materia, tan liviana y suave como la luz es el
alma.
247. Obró también grandes prodigios, hasta hacer descender fuego del Cielo a la
Tierra a la vista de los hombres.
Los hombres siempre se sorprenden con imágenes fuertes. Mucho más hizo el Hijo
del Padre y sin embargo no pudieron seguir su prédica.
No hay que confiar pues en los sentidos y en la percepción de los hombres. Su
desconocimiento profundo de todas las leyes que rigen los distintos planos de la naturaleza
los hace fácilmente vulnerables a los fuegos artificiales y a los demás juegos de niños. En
ese mismo juego que cautiva a esas almas quedando monstruosamente atrapadas en las
redes de los demonios.
Solo las almas que trascienden el cuerpo y la mente podrán verme y desde ahí no
podrán quedar más atrapadas.
Irás dándote cuenta de cuál es el pacto y cuál es el precio.
248. Y embaucó a los habitantes de la Tierra con los prodigios que le fue dado hacer
en presencia de la bestia diciendo a los moradores de la Tierra que debían erigir una
estatua a la bestia que recibió el golpe de espada y revivió.
Es sorprendente como una torpe pantomima sea lo único que necesita el demonio
para captar la atención de los hombres. Estos son tan ingenuos que no pueden entender la
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diferencia entre la Realidad y una obra de teatro. Entonces llaman prodigios a lo que no es
más que un pase de magia perfectamente explicable, incluso en culturas muy primitivas, y
no entienden que el prodigio es haber nacido humanos y tener la posibilidad de alcanzar la
liberación en el Padre.
Allí podrás darte cuenta que solo entregándote al Padre podrás encontrar la
libración. Entonces podrás ver y ya no habrá cuestionamientos porque la ignorancia se
fundirá en la propia luz. Sólo así podrás ver.
249. Y le fue concedido animar la estatua de la bestia, de modo que la estatua de la
bestia también hablase e hiciese quitar la vida a cuantos no adorasen la estatua de la
bestia.
Es un pacto largo que tiene su trasfondo: la amenaza a quien no lo siga. Busca
claramente generar adhesión por el miedo.
¿Cómo es posible que Juan haya podido confundir este predicamento con las
palabras del Hijo del Padre?
Juan se obnubiló y luego de obnubilarse temió. Esto es lo que le ocurre a los
hombres, que aceptan la semilla de este temor plantada en sus cerebros para cambiarla por
seguridad.
Juan comprendió después que no eran palabras del Hijo del Padre y se arrepintió
amargamente por haberlas difundido. Los demonios lo eligieron porque era vulnerable. No
había en Juan entrega completa, era un hombre simple que todavía iba a necesitar varias
vidas para realizarse. Juan fue una víctima pero el demonio no lo eligió al azar, y no le
permitió luego enmendar su error.
Pero Juan ya se purificó al completar la experiencia. Lo que pasó históricamente
con este texto ya no tiene que ver con Juan sino con todos los hombres que en sucesivas
lecturas y encarnaciones siguieron cometiendo el mismo error de Juan sin arrepentirse ni
reflexionar nunca.
Sin buscar nada solo llegará el camino de luz y la puerta se abrirá y las almas no
tendrán que angustiarse en mi búsqueda, porque yo iré mirando y contemplando su grado
de evolución, y entonces sedientas de luz vendrán en su profundo silencio hacia Mí,
encontrando el gran gozo y felicidad.
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250. E hizo poner a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y siervos, una
marca impura en la mano derecha o en la frente, a fin de que nadie pudiese comprar
ni vender si no estaba marcado con el nombre de la bestia o el número de su nombre.
Esta imagen viene a mostrar cierta utopía malamente reiterada por los políticos de
todos los tiempos: una sociedad homogénea. En realidad sólo muestra gráficamente que se
selló el pacto de la esclavitud. Todos los esclavos con su marca. Esto no era nuevo para las
conciencias que escuchaban el Apocalipsis por primera vez. Por siglos se marcaron los
esclavos y aun hoy se marcan los animales. Esa es la estima que tiene por los hombres el
demonio.
El uso de la cruz es deliberado, malicioso. Lo del número añade el misterio: es la
puesta en escena de una gran payasada. La marca que se ve en la mano o en la frente en
realidad está en el tercer ojo clausurando el discernimiento, y en la mano derecha, cuya
acción ahora, a partir del pacto, va a obedecer al demonio.
Solo eleva tu conciencia a la Conciencia Suprema: conéctate abriéndote y podrás
ver lo oscuro de la trampa, la mediocridad del pacto que jamás acabó.
Eleva tu conciencia hacia Mí. No confíes en las emociones ni en los deseos, y
avanza hacia lo profundo de tu ser, que ahí estoy, ahí me encontrarás.
251. Aquí la sabiduría, quien tiene entendimiento calcule la cifra de la bestia. Porque
es cifra de hombre, su cifra es seiscientos sesenta y seis.
Esto sólo da lugar a malas películas. Pobre de la inteligencia y de la sabiduría del
hombre que se ponga a calcular si el número de la bestia es seiscientos sesenta y seis,
novecientos noventa y nueve o los miles de millones de hombres que rinden pleitesía a la
bestia sobre la faz de la Tierra.
Así como te fueron marcando en números como ganador, no deberás creer jamás en
esa mediocridad. Tu alma es libre, sólo espera que te eleves, que seamos Uno
permanentemente con Él.
252. Y miré, y he aquí que el Cordero estaba de pie sobre el monte Sión, y con él
ciento cuarenta y cuatro mil que llevaban escrito en la frente su nombre y el de su
Padre.
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El Cordero no es más que Satán, y quienes llevaban impreso su nombre sólo almas
oscuras que lo invocaban.
Ya no te dejes engañar. Irás caminando y verás lo oscuro entre el vicio y la virtud,
pero estos son solamente la frotación y la complacencia. Entonces irás siendo imantado
hacia la luz, y desde allí podrás ver y comprender cuál es el sufrimiento, cuál es el infierno,
cuál es el demonio mismo que va tejiendo una gran red de ilusión.
253. Y oí una voz del cielo, semejante a la voz de muchas aguas, y como el estruendo
de un gran trueno, y la voz que oí se parecía a la de los citaristas que tañen sus cítaras.
La voz del cielo no es mas que la voz de mi Padre impidiendo que las almas
continúen atadas a Satán.
En el silencio encontrarán esas almas el camino, en la meditación encontrarán la
puerta hacia la Luz, y hacia la entrega real a lo Infinito.
254. Y cantaban un cántico nuevo delante del trono, y delante de los cuatro vivientes y
de los ancianos; y nadie podría aprender aquel cántico, sino los ciento cuarenta y
cuatro mil, los rescatados de la Tierra.
El canto no era más que un ruego para que Satán no los abandone y se sumerjan
definitivamente en la oscuridad.
Las almas irán evolucionando hacia Mí, y no quedarán atrapadas.
255. Estos son los que no se contaminaron con mujeres porque son vírgenes. Estos son
los que siguen al Cordero doquiera que vaya. Estos fueron rescatados de entre los
hombres como primicias para Dios y para el Cordero. Y en su boca no se halló
mentira, son inmolados.
No son más que engaños y argumentos verbales porque son muchos quienes
transmiten la voz de la oscuridad y sólo Uno la del Padre.
Es tan fina la conexión con el Padre que deberán percibirla sutilmente, y entonces
no se equivocarán. La Vibración del Padre, la Luz del Padre es sólo Una. El engaño se
desvanecerá.
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256. Y vi a otro ángel volando por medio del cielo que tenía que anunciar un
Evangelio eterno para evangelizar a los que tienen asiento en la Tierra, a toda nación
y tribu, lengua y pueblo.
Ese ángel no es más que un argumento más para terminar de hundir a toda la
humanidad en la oscuridad.
[Al demonio:] Sigue siendo el engaño. Ya las almas despiertan hacia Mí y no podrás
atraparlas en las redes del tiempo y la ilusión. Las almas seguirán vibrando y se irán
comunicando sólo con la infinita vibración del Padre. Toda la máscara se irá derrumbando,
aún el ángel más bello que hayas podido crear; y las almas podrán, a través de esa divina
vibración cósmica, discernir su ilusión.
257. Y decía la gran voz: “Temed a Dios y dadle gloria a Él, porque ha llegado la hora
de su juicio, y adorad al que hizo el Cielo y la Tierra; a toda nación y tribu y lengua y
pueblo.”
Sólo son palabras de que se sirve Satán para llevar el temor y la destrucción a todos
lados.
El Padre no anuncia cuando es el juicio, no hace falta anunciarlo porque el Padre no
juzga a sus hijos. Hay una ley cósmica por la cual cada alma hace su propio juzgamiento, se
autojuzga: por eso juzgar no es tarea del Padre.
Cada uno va al lugar donde debe ir, este es un misterio cuya raíz es la propia
elección. En realidad no hay un juicio sino un camino cuyo logro, a eso metafóricamente,
llamamos “ser juzgado”; es un lugar proporcional al esfuerzo realizado. Por eso la clave
está en ese esfuerzo por ser fiel a las enseñanzas. Entonces vendrá el “proporcional
descanso” al desempeño que se haya tenido.
258. Siguiole un segundo ángel que decía: “ Ha caído, ha caído Babilonia, la grande; la
cual abrevó a todas las naciones con el vicio de su enardecida fornicación”.
El segundo ángel sólo llevó confusión y malestar. Es la descripción de algo caótico
como todo el trasfondo de este libro. Si hay caída de algo grande de la tierra hecho por el
hombre, como un imperio, grandes ciudades o fortalezas, esa caída debe ser y será siempre
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caótica, espectacular. El derrumbamiento de lo material no debe impresionar tanto, pues
eso es irremediable.
259. Y un tercer ángel les siguió diciendo a gran voz: “Si alguno adora a la bestia y a
su estatua y recibe su marca en la frente o en la mano, él también beberá del vino del
furor de Dios, vino puro mezclado en el cáliz de su ira, y será atormentado con fuego y
azufre en la presencia de los santos ángeles y ante el Cordero.
El tercer mensajero se encargó de llevar el temor junto con la confusión: buscar a un
Padre que no era tal.
La imagen sigue siendo aterrorizante. Ya no es novedad que quiera impresionar,
asustar, someter y crear una falsa deidad ante quien arrodillarse. Nunca los ángeles
presenciarían un tormento así como nunca el Padre les daría de beber cólera.
Crean que cuanto más cerca puedan estar del Padre se darán cuenta qué hay
realmente de toda esta fantasmagoría, y estarán rodeados de ricas fragancias y brillando en
su Amor. No habrá estados anímicos inquietos o perturbadores, ni fieles a quienes castigar.
Aquí (donde estoy) es todo lo contrario a lo que dice este texto y al mundo terrenal para el
cual fue escrito.
260. Y el humo de su suplicio, sube por siglos de siglos, y no tienen descanso día y
noche los que adoran a la bestia y a su estatua, y cuantos aceptan la marca de su
nombre.
Dieron vuelta las palabras del Padre para evitar que retornen a Él.
Son las mismas palabras en dirección opuesta. Se usaron con sutileza con un mismo
denominador: Dios (todo el texto busca separar, fragmentar. Así fragmenta al ser humano
para separarlo de su Dios, busca la aniquilación para romper la Unidad).
Con la imagen del humo fabrica un Dios hechicero, humano que siempre está
trabajando echando humo. Realmente quien tiene que estar permanentemente humeando lo
hace para tapar, para oscurecer.
La verdad, en estado de Unidad con el Padre Verdadero es un aire fresco, como un
viento que disipa ese humo negro. Un aire fresco, traslúcido, invisible pero perceptible en
su luz.
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261. En eso está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios
y de Jesús.
Sólo el que comprende el mensaje, realmente aguardará la Revelación final, sin
temor, confusión y revelación terrenal.
La intención del texto es limitar el acceso a la Verdad y la Revelación. Es hacer
creer que sólo los santos y Jesús pueden acceder a ella. Mi Evangelio es para todos. Muchas
veces fue custodiada y defendida mi palabra, y fue mejor defendida por gente común que
por los santos.
La Palabra, la Verdad y la Revelación son como un tesoro para todos ustedes.
262. Y oí una voz del Cielo que decía: “Escribe: ‘Bienaventurados desde ahora los
muertos que mueren en el Señor. Dice el Espíritu que descansen de sus trabajos, pues
sus obras siguen con ellos’.
La escritura fue el sello final de Satán para atar siglo tras siglo, vida tras vida, a
todas las almas. Comprender la Revelación final nos demuestra que no está en la palabra ni
en la escritura; el Padre, la luz, están por encima de todo.
Vuelve a dar su orden final que es el propósito de este libro. Así mezcla imágenes
fuertes con cosas religiosas. Él introdujo la muerte oscura, vengativa,. fragorosa en la
quietud y la paz de lo que es nuestro paso clave en la unión con el Padre. Incorporó a través
de la palabra en sus mentes y en nuestra religión ese concepto equivocado de lo que es
morir. Ese es su gran invento: el miedo religioso a la muerte del cuerpo.
No os dejéis impresionar por estas palabras. Quitadles la imagen que presenta, y
pensar, sentir y rezar en el Padre es el antídoto. Es el miedo a la muerte algo insignificante
ante la magnitud de los cielos que os esperan y desde donde Yo, Jesús, los estoy viendo.
Quitad ese miedo y todo se desvanecerá: los imperios serán de cartón y pensad en la muerte
como el momento del ascenso hacia la luz.
263. Y miré y había una nube blanca y sobre la nube uno sentado semejante a Hijo de
Hombre, que tenía en su cabeza una corona de oro y en su mano una hoz aliada.
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Es una imagen muy clara que no Soy Yo porque nunca podría estar recubierto de
poder y con una hoz para castigar, porque la hoz es un símbolo de sometimiento. No se
puede someter a un alma porque el alma es libre.
La imagen produce el efecto de generar el miedo por el cual no se atreven a mirar al
Padre. Con el miedo los convirtieron en sordos, ciegos, los ataron a la Tierra y les hicieron
adorar al Poder. La hoz les hace tener miedo y la corona es la adoración al Poder.
El Padre no quiere adoración sino que vuelvan a Él. No busca esa adoración ciega
como si adorasen a un ídolo.
El trabajo del demonio consiste:
1) en provocar el miedo que los deja atados
2) que a través de adorar al Poder lo pueden alcanzar
3) lo más terrible, en terminar creyendo que son Dios
Esta es la imagen que les mantiene en la cabeza. Todo lo que sea percibido por los
sentidos externos va a ser un reflejo de lo explicado. La única opción es elevarse a
aquel lugar de Luz donde se percibe lo esencial y se revela lo demoníaco al poder
observar Maya por encima de su influencia.
El lugar de la luz no es patrimonio de los santos y de los ángeles sino de todas las
almas. El Padre los está llamando continuamente.
264. Y salió del templo otro ángel gritando con poderosa luz al que estaba sentado
sobre la nube. Echa tu hoz y siega, porque ha llegado la hora de segar, pues la mies de
la Tierra está completamente seca.
Reafirma el demonio lo anterior, pero el Padre no desecha a nadie, todos los
hombres son hijos de Él por más equivocados que estén en el camino. El Padre espera que
el más equivocado vuelva a su Ser.
Quienes gritan son los seres oscuros proclamando la hegemonía de lo demoníaco.
265. Entonces el que estaba sentado sobre la nube lanzó su hoz sobre la Tierra, y la
Tierra quedó segada.
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No se dejen cegar por el oro. No teman al Padre, sepan escuchar con el corazón, y
no con el sentido del oído. Si todas las palabras del Apocalipsis las pudiesen leer con el
corazón verían dónde están las trampas y los engaños.
Puedes ver la Tierra segada con tu visión errónea, y puedes contemplar la Gloria del
Padre con tu visión interior.
266. Y salió otro ángel del santuario celestial, teniendo también una hoz afilada. Y del
altar salió otro ángel, el que tiene poder sobre el fuego, y llamó a gran voz al que tenía
la hoz diciendo: “Echa tu hoz y vendimia los racimos de la vida de la Tierra, porque sus
uvas están maduras”.
Estos ángeles constituyen el gran ejército de los demonios. Son muchos y tienen
diferentes categorías, y cada uno trabaja en diferentes niveles. Así como vimos antes un
grupo atemoriza, otro lleva a la búsqueda de Poder, y el más importante les hace creer
dioses. No se engañen de que hay un solo demonio que actúa en las grandes cosas; existen
numerosos demonios que actúan en todos los actos que los hombres hacen en la Tierra,
engañándolos en las cosas más pueriles.
El Padre no tiene ejército sino mensajeros de la luz que no hablan sino que iluminan
el camino. Este camino que habla es el Padre y lo hace a través de la conexión con el alma.
No se dejen engañar por otras voces, la verdadera es una sola Voz.
Si los hombres tuviesen capacidad de ver, se verían como ovejas inocentes, porque
el trabajo de los demonios es tan obvio, tan claro.
Despertad de la creencia en la ignorancia de los actos porque todos ellos están
cargados de una oscura intención provocada por el alma tomada y operando la voluntad de
lo demoníaco. Esto es fácilmente evidenciable desde el estado de discernimiento que actúa
como una poderosa linterna a través de la cual se puede observar el contraste entre la luz y
la oscuridad.
267. Y arrojó el ángel su hoz sobre la tierra y vendimió la viña de la tierra, y echó la
vendimia en el lagar grande de la ira de Dios.
Está representando toda la caída del hombre, son todos los estadios por los que va
pasando el ser humano al alejarse del Padre.
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¡Si pudieses ver la luz! Simplemente tendrías que levantar la cabeza y entonces
verías; y por más alejado que te encuentres, avanzarías rápidamente, y podrías dar el salto.
Lo que no puedes darte cuenta es que tienes que mirar, y no lo puedes hacer porque
te ponen imágenes confusas que te hacen creer que estás ascendiendo. Pero si pones la vista
fija en esas imágenes verás su irrealidad, y entonces aparecerá un canal de luz que te llevará
al Padre.
No existe experiencia externa mejor o peor porque todas ellas tratan de sacarte de tu
centro. Tan solo en la conexión interna se revelan la esencia de las cosas, y podrás observar
lo demoníaco como un simple juego sin carga.
Sin embargo, este juego tiene entretenido a la mayoría de los seres que ni siquiera
sospechan el gozo que experimentarían tan solo contemplando al Padre. Esto ocurre porque
los demonios tienen montado un gran escenario con múltiples escenas, y en la vida
cotidiana si no caes en una la próxima te atrapa.
Tienes que advertir que estás acosado por infinitas imágenes, por eso, vuelvo a
recordarte que tienes que mirar la imagen, traspasarla no actuando, e instalarte en la luz.
Delante de cualquier imagen obsérvate frente a tu espejo: lo primero que aparecerá es la
imagen del demonio pero si miras fijo verás una luz muy blanca que es la Verdad.
Constantemente la imagen demoníaca y la luz están muy juntas.
268. El lagar fue pisado fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre que llegó hasta los
frenos de los caballos por espacio del mil seiscientos estadios.
Dios no tiene ira porque la ira es un estado mental. Si tuviésemos que definirlo sería
Amor, pero no como el hombre lo entiende, en la conciencia humana no tiene definición.
Estas palabras son para sembrar más miedo. Como pueden darse cuenta no son palabras
inocentes porque les alimentan el miedo, y después el odio para culminar en la ira. Les
quiere hacer sentir que Dios los abandona, que es malo, que están solos. Y entonces, ¿por
qué no sentir odio por alguien que siente odio por nosotros?
Deberían atravesar las imágenes como la espada de San Jorge atravesó al dragón.
Atravesar la oscuridad para llegar al Padre porque cada escena los hipnotiza, los paraliza,
los duerme.
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Me siento triste (dice Jesús) porque no pueden ver como caen en las cosas más
simples. El error está en querer dominar el exterior, creyendo que ahí está la solución.
Aquel que inventó el juego les cambia las reglas permanentemente.
No pueden pretender sinceridad de quien los quiere devorar.
Los recursos del demonio son vastos, y si pretenden conocerlos todos, desde su
plano, les llevaría muchísimas vidas.
Los maestros les estamos ofreciendo la posibilidad de renunciar al juego y negarse a
cooperar con el mismo.
Si detienen la proyección oscura, no realimentan este juego, y entonces tendrán la
posibilidad de no necesitar seguir jugándolo sino interiorizar la energía para la propia
liberación.
269. Vi en el Cielo otra señal grande y sorprendente: siete ángeles con siete plagas, las
postreras, porque en ellas el fuego de Dios queda consumado.
No hay ángeles que tengan plagas. Dios no da plagas a ninguno de sus ángeles para
que anden por ahí asustando. Los ángeles de mi Padre solo portan luz. Todos los ángeles
del Padre y míos son portadores de la luz y del espíritu.
El hombre es el que decide si los recibe o si prefiere la mirada demoníaca desde la
oscuridad.
270. Y vi como un mar de cristal mezclado con fuego, y a los triunfadores que
escaparon de las bestias, y de su estatua, y del número de su nombre, de pie sobre el
mar de cristal, llevando las cítaras de Dios.
Puede ser que haya un mar de cristal y de fuego, Yo en algún momento lo conocí. El
demonio en este libro mecha cada tanto algunas imágenes celestiales, como es su
costumbre roba algunas cosas para disfrazarse.
Mi Padre premia a los que vencen esta bestia llevándoles a su lado, y no les pone
carteles colgando para demostrar que es el vencedor, para ostentar su victoria.
Mi Padre no necesita mostrarse vencedor, simplemente siempre vence, y nunca se
pasea para que lo vean vencedor. Triunfa desde el anonimato, la quietud y el silencio.
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Quien necesite demostrar su victoria y pasearse como vencedor, no ha vencido
definitivamente. Esa sería la imagen de mostrarse vencedor en mares de cristales y de
fuego, que es lo contrario de lo que me pasó en mi vida corporal.
Ante los ojos humanos aparecí no como un vencedor, sino como un vencido o
derrotado en la crucifixión.
Hay que ver más allá de los aspectos corporales para entonces poder ver en ellos la
trascendencia y la profundidad que encierran.
Cuando comiences a ver, alégrate porque has ingresado en el camino de la
salvación, y entonces podrás ayudar a la salvación de otros.
Cada uno tiene la obligación de iluminar el camino, y el Padre los espera, siempre
los espera por los siglos de los siglos.
Él siempre los está bendiciendo, pero ustedes no lo perciben, pero si abren vuestro
corazón siempre lo van a sentir, porque los ama, los ama profundamente.
Ese mar de fuego y de cristal, muestra simbólicamente la diferencia entre la luz y la
oscuridad. Solamente las almas que salgan de la oscuridad y lleguen a la luz, se verán en
esa línea de luz; pero esta no es la actitud del vencedor de los hombres sino que es algo que
obedece a la ley de Dios.
Se está en la luz o en la oscuridad, no hay términos medios.
271. Y cantaban el cántico de Moisés, el siervo de Dios, y el cántico del Cordero
diciendo: “Grandes y sorprendentes son tus obras, oh Señor, Dios Todopoderoso,
justos y verdaderos son tus caminos, oh Rey de las Naciones.
Nuevamente aquí mezcla, es más de lo mismo, salvo al final, cuando dice “Rey de
las Naciones” que es donde aparece él. Una vez más usa oraciones y palabras dedicadas a
Dios, metiéndose en el medio.
A mi Padre no le importan las Naciones, toda la Tierra es para Él. Si la Tierra, a
través de los hombres, fuera de Dios, no habría Naciones. Al decir “Rey de las Naciones”,
está haciendo una separación entre los hombres. Al decir “Rey de las Naciones” tiene
relación con las cuestiones materiales del planeta que obnubilan al hombre, y esto no tiene
que ver con la Infinita Omnipotencia del Padre. Al hombre sólo le preocupan las cosas
materiales. Pero sólo desprendiéndose del ego logrará el espíritu la luz para volver al Padre.
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272. ¿Quién no te temerá Señor y no glorificará tu nombre? Pues sólo tú eres santo, y
todas las Naciones vendrán y se postrarán delante de Ti, porque los actos de tu
justicia serán manifiestos.
Nadie debe temerle al Padre porque es todo Luz y Bondad. El demonio lleva a un
tiempo futuro a la humanidad, y esa es otra clave que hay que eliminar. No hay que pensar
en una justicia del futuro, sino más bien en una realidad de gozo en el presente. Esto es lo
que mi Padre da.
El demonio nuevamente crea, en el gran escenario de su teatro, un espectáculo
montado. Al estar hipnotizados en este, los saca, los aleja y los reduce a algo muy pequeño
y caótico. No se dejen absorber por esta trampa.
Además el demonio sitúa la acción de Dios en un futuro humano, pero las leyes de
Dios actúan siempre, actuaron y actuarán. No es cuestión de prepararse para una justicia
que vendrá, sino cumplir ahora las leyes de Dios.
273. Después de esto miré y fue abierto en el cielo el templo del tabernáculo del
testimonio.
Es una tergiversación de la esencia de lo espiritual porque esta nada tiene que ver
con estas descripciones que hablan de una riqueza material a la conciencia de los hombres,
pero no menciona la verdadera espiritualidad.
Este libro está muy dictado a la época, no es intemporal. Está destinado a
impresionar a la mentalidad de la época con mensajes de acuerdo a como los hombres
podrían pensar el poder temporal, y nada tiene que ver con el mensaje espiritual. Pasaron
los siglos y fue cada vez más intrincada comprensión del libro, por eso se fue dejando de
leer e interpretar porque el sentido se convirtió en muy oscuro para los que vinieron
después.
Así que ahora es cuestión de que el hombre aproveche este mensaje renovado de
Cristo, tomando conciencia de las metáforas y la época en que fue escrito, y traspasando las
figuras que se describen a nivel espiritual. Tiene que comprender que el verdadero poder
está en Dios, donde estuvo siempre la Luz y la Verdad. El hombre debe acercarse al Padre
porque esa es su esencia, lo demás es obra del demonio.
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274. Y del templo salieron los siete ángeles que tenían las siete plagas, vestidos de lino
puro y resplandeciente, y ceñidos alrededor del pecho con ceñidores de oro.
Las plagas de los siete ángeles simbolizan el mal que el hombre tiene en los siete
chakras. No es que Dios mande castigos sino que el hombre por el alejamiento de la parte
espiritual, está en permanente contacto con lo oscuro; con enfermedades que no vienen de
un lugar divino, sino de una parte oscura.
El hombre paga lo que hace, no es que el castigo venga de Dios, son las
consecuencias de sus propios actos.
El mal engendra el mal, y se va haciendo una cadena muy fuerte para poder
romperla. Pero el hombre pierde la idea de que él mismo es generador de los males, y se va
alejando de la idea del Dios verdadero, del Dios del Amor, y la única idea que le queda es
el Dios justiciero y de una justicia ciega donde pagan justos por pecadores, y esto no es así.
No es así porque los realmente justos no pagan, pero todos los demás son pecadores,
y esos pecados vienen de la trasgresión de las leyes divinas, y esto también se ve en la
naturaleza. Si el hombre transgrede algunas leyes le viene la respuesta, le guste o no le
guste.
La sinceridad es lo que los puede liberar de esa oscuridad ante el verdadero anhelo
de estar en Dios. Esa posibilidad existe, solo deben querer romper la cadena del pecado o
de la oscuridad.
275. Y uno de los cuatro vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro, rebosantes
de la ira de Dios que vive por los siglos de los siglos.
Es lo que dije antes, no es la ira de Dios sino la culpa del hombre porque si este
realmente estuviera consciente de su estado, no hablaría así como habla de Dios.
El mensaje que no nos da este libro es precisamente el Amor de Dios, por eso
difícilmente pueda ser un mensaje divino verdadero.
Con la experiencia del Amor de Dios tu vida cambiará totalmente, y dejarás de ver
esas copas rebosantes de ira y de castigos.
276. Y el templo se llenó de humo de la gloria de Dios y de su poder.
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El hombre no tiene idea qué es el poder de Dios. Siempre lo equipara con su
proyección mental de un poder muy grande. No puede medir el poder de Dios con la escala
humana, simplemente debe aceptarlo y creer en un poder infinito e incomprensible a su
comprensión.
De lo que el hombre tiene idea es del poder del demonio. De este tiene una idea bien
hecha, porque lo ha conocido a través de los siglos de catástrofes naturales, personales y
colectivas, y se ha sometido a ese poder oscuro. Cuando más se somete a ese poder más se
aleja de la luz. Y la luz está siempre, y está siempre llamándolo.
277. Y nadie pudo entrar al templo hasta cumplirse las siete plagas de los siete
ángeles.
Llegar a un estado de gracia, y purificación y preparación espiritual antes de poder
estar en contacto con Dios, lleva bastante tiempo desde el punto de vista humano. Pero no
es solamente tiempo sino la intuición y la voluntad de querer purificarse hasta llegar a ese
templo que significa la vida espiritual un nivel muy alto e inimaginable para lo que es el
hombre en este planeta.
Para eso hay verdaderos maestros, siempre los hubo, fueron aquellos que enseñaron
y trataron de despertar al hombre. Así quienes consiguen esa purificación pueden dar
testimonio de la misma.
278. Oí una voz procedente del templo que decía a los siete ángeles: “Id y derramad
sobre la tierra las siete copas de la ira de Dios”.
Mi Padre no posee ira. Esa ira es derramada por el demonio en forma de pecados. El
hecho de que sean siete tiene que ver con la parte de la Biblia que habla de los siete días de
la creación, y es una metáfora, en este caso, de los siete días de la destrucción.
Con respecto a la ira divina, al hablar del demonio de ira, lo único que hace es
mostrar a Dios como un espejo suyo.
279. Fue el primero y derramó su copa sobre la Tierra y se produjo una úlcera
horrible y maligna en los hombres que tenían la marca de la bestia y adoraban su
estatua.
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El demonio intenta sembrar uno a uno esos pecados en la Tierra: esa copa
derramada es el odio, que es lo contrario al Amor que mi Padre derrama sobre todos sus
hijos.
Lo que hace con esas copas, una a una, es ir despertando las semillas de maldad con
vista a su futura destrucción en siete etapas. A los primeros que despierta es a aquellos más
cercanos a él.
280. Y el segundo derramó su copa sobre el mar, el cual se convirtió en sangre como la
de un muerto, y todo ser viviente en el mar murió.
Mi Padre no puede destruir su propia creación, sigue el demonio queriendo cubrir
todo con su manto de oscuridad.
Lo que pretende el demonio con este relato es hacer una descripción de cómo
pretende destruir el mundo.
Primero despertó el odio, después contaminó el mundo.
281. Y el tercero derramó su copa en los ríos y en las fuentes de las aguas y
convirtieron en sangre y oí decir al ángel de las aguas: “Justo eres, Tu que eres y eras,
oh Santo, en haber hecho este juicio. Porque sangre de santos y profetas derramaron y
sangre les has dado de beber: lo merecen”. Y oí al altar que decía: “Si, Señor, Dios
Todopoderoso, fieles y justos son tus juicios”.
Ese ángel es un esclavo del demonio. Intenta justificar lo que el demonio haría si no
lo obedecen en nombre de Mi Padre.
Estos ríos que se convierten en sangre son la imagen de la violencia que es generada
por el demonio en el mundo, y es otra forma de destrucción.
282. El cuarto derramó su copa sobre el Sol, al cual fue dado abrasar a los hombres
por su fuego. Y abrasáronse los hombres con grandes ardores, y blasfemaron del
Nombre de Dios que tiene poder sobre las plagas mas no se arrepintieron para darle
gloria a Él.
Ese fuego es el fuego del infierno, en el cual caen todos los esclavos del demonio.
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Sigue anunciando desastres, en este caso el recalentamiento de la Tierra y la
posibilidad del recalentamiento del Sol.
En realidad su fin es hacer ante el hombre a Dios culpable de todas sus desgracias, y
sigue desenmascarando su plan de destrucción.
283. El quinto derramó su copa sobre el trono de la bestia y el reino de ella se cubrió
de tinieblas, y se mordían de dolor las lenguas. Y blasfemaron del Dios del cielo a
causa de sus dolores y de sus úlceras, pero no se arrepintieron de sus obras.
Solo del demonio puede surgir tan aberrante descripción: estas son las
enfermedades. Las tinieblas que menciona sería una época de lluvia después de un
recalentamiento terrestre; el mundo cubierto de nubes con niebla constante y los desastres
que vienen con el agua.
El plan del demonio es siempre el mismo, que el hombre haga responsable a Dios
de todo eso, con lo cual el demonio puede entronarse en su lugar.
284. El sexto derramó su copa sobre el gran río Eufrates y secó su agua para que
estuviere expedito el camino a los reyes de Oriente.
Mi Padre no pone trabas, es accesible. El demonio todo lo ennegrece. Después de la
etapa de las lluvias vendría una etapa de aridez, de sequía impresionante. El Sol estaría
todavía más caliente, y el demonio conseguiría haber instalado el infierno en la Tierra.
285. Y vi cómo de la boca del dragón y de la boca de la bestia, y de la boca del falso
profeta salían tres espíritus inmundos en figuras de ranas. Son espíritus de demonios
que operan prodigios y van a los reyes de todo el orbe a juntarlos para la batalla del
gran día del Dios Todopoderoso.
Eso era una premonición de cual iba a ser el instrumento. La palabra iba a ser el
instrumento de todos los poderosos, y se iba a utilizar mediante aquellos que supuestamente
eran los intermediarios de Dios. Esa era la manera como la energía demoníaca iba a ir
actuando y ganando gente para su ultima batalla.
Es irónico porque usa las mismas armas. Dios creó el mundo a través de la palabra,
y el demonio pretende destruirlo a través de la palabra.
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Esos tres demonios que surgen son la sombra de la trilogía divina de la Trinidad.
286. He aquí que vengo como ladrón. Dichoso el que vela y guarda sus vestidos, para
no tener que andar desnudo y mostrar su vergüenza. Y los congregaron en el lugar
que en hebreo se llama Armagedón.
Es un ladrón de almas que roba todo lo puro, y lo único que queda es la vergüenza.
La necesidad de vestir es la máscara para cubrir.
Armagedón es el templo que él también quería y que nadie se lo haya hecho es una
buena señal. El demonio quería su templo, un lugar donde escenificar su imitación. Si
deseaba un templo era porque no lo tenía, pero nadie lo comprendió como para darle su
lugar y hacerle un templo.
Esto muestra hasta qué punto el mal depende del Bien, porque el mal absoluto no
hubiere necesitado los instrumentos divinos porque hubiere tenido sus propios
intermediarios, pero su obra solo puede ser realizada a través de la Obra Divina.
La culminación de lo demoníaco es destruir el Mundo Divino y que quede el
infierno en la Tierra, y él entronado en su templo.
287. El séptimo (ángel) derramó su copa en el aire, y salió una poderosa voz del
templo, desde el trono (en el cielo decía: “Hecho está”). Y hubo relámpagos y voces, y
truenos, y se produjo un gran terremoto, cual nunca hubo desde que hay hombres
sobre la Tierra. Y así fue de grande ese poderoso terremoto.
Él desea destruir la creación de Dios, y muestra que es incapaz de crear. Esas
imágenes son producto de ese deseo: desearía poder generar un terremoto que destruya toda
la creación, pero es sólo una ficción. El demonio sólo sirve para generar temores y que los
hombres crean que tiene ese poder y se sometan a él, pero en realidad no lo tiene.
El mal sólo puede destruir el mal. Aquel lugar que está lleno de bondad, no lo puede
destruir porque no puede llegar; por lo tanto no puede destruir la totalidad de la creación de
Dios.
Esta revelación que el demonio hace de su plan destructivo, es la contrapartida del
Plan Divino. Dios descansa y la fiesta que busca el demonio es ese terremoto.
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288. Y la gran ciudad fue dividida en tres partes, y las ciudades de los gentiles
cayeron. Y Babilonia la grande fue recordada delante de Dios para darle ese cáliz de
vicio de su furiosa ira.
Cuando dice “delante de Dios” hay que entender que se refiere a sí mismo como
Dios. La división en tres es que él quiere tener también su propia Trinidad. Es el principio
de la construcción de su infierno, donde comienza como a instalarse.
289. Y desaparecieron todas las islas y no hubo más montañas. Y cayó del cielo sobre
los hombres granizo del tamaño de un talento, y los hombres blasfemaron de Dios por
la plaga de granizo, porque esa plaga fue sobremanera grande.
Acá lo que se quiere mostrar son los desordenes naturales como castigo divino, es lo
que hicieron sus intermediarios para que los hombres odiaran a Dios como él lo odia.
El demonio quiere generar el odio a Dios para alimentar su propio reinado, y que los
hombres vean a Dios como menos poderoso que él. Porque si fuese todopoderoso haría tal
o cual cosa y no permitiría otras.
Esa es su fraseología, las palabras que salen de su boca.
Después de la destrucción y de haber generado el odio en los hombres al producir
todo este tipo de desastres meteorológicos, obtendría dos fines:
1. Hacer sufrir a los hombres.
2. Continuar con su plan de que los hombres vean a Dios como su enemigo.
290. Y vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas y habló conmigo
diciendo: “Ven acá y te mostraré el juicio de la ramera grande, la que está sentada sobre
muchas aguas con la que han fornicado los reyes de la Tierra, embriagándose los
moradores de la Tierra con el vicio de su prostitución”.
No temas a los actos de la vida, si bien ellos se encauzan con una trampa, al invocar
la luz divina llegarán a un final feliz. Toma como testimonio a alguien que se había alejado
de su ser y se redimió, María Magdalena, revirtiendo su vida y dedicándosela a Dios.
Basta un instante de discernimiento y de luz para que la gracia caiga sobre ti, y
transforme tu vida y cada una de tus acciones, convirtiendo tu alma para que evolucione
hasta el sendero.
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La polaridad existente entre lo que supuestamente son el bien y el mal, es lo que
marca la ley de este plano. Pero es necesario el mal para poder discernir y establecerte en la
otra cara que es la que te traspolará a la unicidad. No desperdicies ninguno de los lados,
acéptalos como parte de una misma cosa.
291. Y me llevó al desierto en espíritu, y vi una mujer sentada sobre una bestia
purpúrea repleta de nombres de blasfemias, que tenía siete cabezas y diez cuernos.
Recuerda que para realizar tu transformación requieres el silencio y la profunda
meditación. En ella encontrarás el solaz que tu espíritu necesita para recuperarse, y así
poder ver la vida eterna.
No importan las diferentes manifestaciones mundanas y los diferentes personajes
que aparezcan, acéptalos pero siempre dirige tu mirada hacia lo Alto.
Para purificarte necesitas la soledad, aquí manifestada en el desierto, aunque en ella
recibas todas las tentaciones del plano binario.
Recógete en tu atención hacia lo Único y Eterno que te marcará el camino.
292. La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata y cubierta de oro y piedras
preciosas y perlas y llevaba en su mano por una parte un cáliz de oro lleno de
abominaciones, y por la otra las inmundicias de su fornicación.
No importa de qué forma colorees tu existencia, ni con qué aditamentos adornes tu
poder. Ten en cuenta que en la simpleza y en la pureza del color es donde se encuentra tu
esencia, en ella se relajará tu mente, se aliviará tu espíritu, y sus frutos te alimentarán para
adquirir sabiduría.
Despójate de todo lo innecesario, entonces solo mi peso estará en tu ascenso.
Libérate de las cadenas que te arrastran a la profundidad de la ignorancia, y despliega tus
alas al vuelo de la sabiduría.
293. Escrito sobre su frente tenía un nombre, un misterio: “Babilonia la grande, la
madre de los fornicarios y de las abominaciones de la Tierra.”
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Despegado de los personajes y de las imágenes exteriores, sabio es aquel que sabe
ubicarlas y sin que lo penetren y lo afecten les da su lugar manteniéndose siempre en el
centro sempiterno de la Gloria Divina que es su verdadero nutriente.
Despójate de cualquier rótulo impuesto por tus padres. Siente el llamado de lo que
será tu misión, y permanece atento a ella porque será tu guía mientras transites el camino.
294. Y vi a la mujer ebria de la sangre de los santos y de la sangre de los testigos de
Jesús, y al verla me sorprendí con sumo estupor.
Difícil es la renuncia, recuérdalo; y recuérdalo a cada instante, a cada paso que des
para que sepas discernir lo oscuro y falso de lo verdadero y luminoso, que es lo único capaz
de quitarte las cadenas que aprisionan tu vida.
Goza la alegría eterna, despréndete del gozo del placer perenne.
Céntrate en la luz cuando te sientas tentado o perdido.
Bebe el Cáliz Divino y tómalo como único nutriente que te llevará a la placidez del
Amor Universal que ama a todas las criaturas, a todos los planetas, y a todos los cielos.
295. Mas el ángel me dijo: “¿Por qué te has acobardado? Yo te daré el misterio de la
mujer y de la bestia que la lleva, la que tiene siete cabezas y diez cuernos. La bestia que
has visto era y ahora no es, está por subir del abismo y va a su perdición.”
La imagen siempre refleja al personaje, salvo que la invocación de la Madre Divina
dé pureza a cada uno de tus actos y revierta el puro placer por el profundo gozo.
No te alejes pensando que cada una de esas cabezas puedan llegar a separarte de Mí.
Al contrario, al reconocerlas y vivirlas a través mío, te acercarás cada vez más al Padre. No
las rechaces ni las rehuyas: enfréntalas con la espada de la luz que aniquilará al demonio y
te permitirá vivir la acción con amor y con entrega. Sólo así, en tu corazón y en los planos
luminosos, la acción será verdadera aunque todos los demás la vean enmascarada, brillante
y poderosa.
Invoca a la Madre Divina que siempre te protegerá como mujer en su pureza. No
importa cuanto hayas descendido, ni en qué estado te encuentres, si en ti provocas el
cambio de la purificación. Ella devolverá la sonrisa a tu espíritu dormido, y la fragancia a
tus actos marchitos.
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Elévate y lograrás la vibración eterna.
296. Y los moradores de la Tierra, aquellos cuyos nombres están escritos en el libro de
la vida desde la creación del mundo, se llenarán de admiración cuando vean que la
bestia, que era y ahora no es, reaparecerá. Esto es para la mente que tiene sabiduría,
las siete cabezas son siete montes sobre los cuales la mujer tiene sede.
Recuerda que la mujer es el origen, la evolución y la destrucción del hombre. Ella
eleva al hombre a través de los siete montes o lo sumerge en la locura de las siete cabezas.
Deja que la sabiduría infinita opere a través de ti como un acto de puro amor falto
de pasión y no sujeto a cólera. Sólo de esta manera podrás accionar e interrelacionarte con
los demás. No temas cuando estés bajo este estado.
297. Son también siete reyes: los cinco que cayeron, el uno es; y el otro no ha venido; y
cuando venga poco ha de durar.
Sabed distinguir lo verdadero de lo falso para poder reconocer a quien os tiende la
mano para ayudaros a continuar tu cambio. No os dejéis engañar por aquellos que son
falsos testigos de Dios y os harán retroceder en vuestro camino.
Sólo el discernimiento será vuestro fiel compañero que te ayudará a distinguir los
actos puros de los que no lo son. Actuad siempre de acuerdo al discernimiento.
298. Y la bestia que era y no es, es él, y es de los siete y va a perdición
Siempre la tentación estará latente para tratar de perjudicarlos y de hacerles
retroceder nuevamente a las tinieblas. Levanta tu estandarte de luz, único capaz de vencer a
cada uno de los monstruos que aparezcan en tu vida tratando de desestabilizarte y
recuperarte a sus propios ejércitos. Continúa en el camino alerta, conectado.
Cuando ya te encuentres encaminado recibirás la misión encomendada por el Padre,
que deberás abrazar o en su defecto volver nuevamente al pacto. Esta será tu ultima
tentación.
299. Y los diez cuernos que viste son diez reyes que aun no han recibido reino, mas
con la bestia recibirán potestad como reyes por espacio de una hora.
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La falsa ilusión es una quimera que refulge en el cielo el tiempo de un rayo.
Recuerda que esa luz perece al instante dejándote sumido nuevamente en la oscuridad,,
perplejo, asustado y vacío. Acude a la llama eterna que ella revertirá absolutamente cada
uno de esos estados.
La ilusión será la encargada de mantenerte en este plano. Conéctate con la realidad
del alma que dará sustento a tu entrada al reino eterno y definitivo donde morarás
permanentemente.
300. Estas tienen un solo propósito: dar su poder y autoridad a la bestia.
La forma de controlarte es muy simple: dar y después cobrar. No caigas en la
trampa. Si debes otorgar hazlo con amor, esto de desligará de cualquier acción perjudicial y
la recompensa te sorprenderá pues te darás cuenta de dónde proviene cuando sientas el
gozo que vibrará en tu corazón.
Una vez establecido en el reino eterno, la sabiduría manifestada en equilibrio,
alegría y amor, permanecerá en ti definitivamente permitiéndote ingresar a cualquier plano.
301. Estos guerrearán con el Cordero, y el Cordero los vencerá; porque es Señor de
los señores, Rey de reyes; y vencerán también los suyos, los llamados escogidos y los
fieles.
No necesitarás un manto de las mejores pieles, ni una corona ornada con las mejores
piedras. En tu simple desnudez radica la esencia, que es la que te recibió en este mundo y
con la cual partirás al encuentro del Padre si te despojas de cualquier otra ornamentación,
Una vez que hayas traspasado los planos inferiores lograrás situarte en un plano de
luz donde no existirán pasiones, materia, y menos aun muerte, pues habrás renacido a la
vida eterna.
302. Díjome aun: Las almas que viste sobre las cuales tiene su sede la ramera, son
pueblos y muchedumbres y naciones y lenguas.
No importa el lugar donde te encuentres ni donde te dirijas, en ella siempre estarás
protegido si conectas tu ser con la dicha luminosa e indestructible del camino eterno. No
temas ser peregrino, la Gracia irá contigo.
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En este reino el espacio y el tiempo desaparecerán para dar lugar al origen del Todo
y de la Nada.
303. Y los diez cuernos que viste, así como la bestia, aborrecerán ellos mismos de la
ramera, la dejarán desolada y desnuda, comerán sus carnes y la abrasarán en fuego.
Para renacer a la vida eterna es menester despojarse de todas y cada una de las
lacras que acompañaron tu vida. Mira hacia atrás y sonríe cuando veas cada una de las
lacras que has dejado sepultadas. Ellas te permitieron ser lo que eres hoy, continúa
entregándolas cuando vayan apareciendo. Mantente despojado y limpio sin importarte la
inmundicia que te rodea.
Renace a una vida de plenitud que marcará cada uno de los pasos en tu actual vida,
si permites a tu alma, una vez purificada, que se mantenga en contacto con el Ser Universal.
304. Porque Dios puso en sus corazones hacer lo que a Él le plugo: ejecutar un solo
designio, dar la autoridad de ellos a la bestia, hasta que las palabras de Dios se hayan
cumplido.
Dios te trasmite sus palabras de una manera directa y luminosa. Tu intelecto las
recibirá sin ningún tipo de complicaciones gracias a la Gracia que se habrá instalado en ti,
que te permitirá leer y descubrir cualquier tipo de enigmas que quieran atraparte.
Una vez instalado en el Ser, desoye las fatuas voces que intentarán nuevamente
controlarte, ya que serán sólo gritos de guerras pasadas que habrás sepultado en el olvido.
305. Y la mujer que has visto es aquella ciudad, la grande, la que tiene imperio sobre
los reyes de la Tierra.
El que sufre y en el que más lo necesita encontrarás la clave para darle redención a
tu vida. Mira a tu alrededor y a través de los ojos de Dios, reconoce a quienes puedes tender
la mano, brindar una caricia, o regalar una flor. Ellos son los que te elevarán y te acercarán
más a Mí. Ayuda por doquier a quien clama por ella.
Una vez conectado con tu Ser, con lo Divino, devolverás a quien lo necesite toda
acción purificada para que le sirva de estímulo, y para que desarrolle su intuición, única
capaz de abrir las puertas del discernimiento de quien lo necesite.
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306. Después de esto vi cómo bajaba del Cielo otro ángel que tenía gran poder, y con
su gloria se iluminó la Tierra.
Con esto trata de hacer creer a las almas que este es el único camino para
reencontrarse con el Padre. Busca apelar a las almas para que se abran y se entreguen, y así
neutralizarlas con su vibración. Dado que a medida que leen el Apocalipsis algunas almas
empiezan a rebelarse contra el discurso del demonio. De esta manera el demonio intenta
neutralizarlas ofreciendo la imagen de la salvación y haciéndoles creer que es la Palabra del
Padre.
No deben olvidar que el objetivo de la purificación es que las almas se eleven al
Padre porque la Tierra es el campo de batalla de los demonios. El engaño es hacer creer a
esas almas que encontrarán la liberación en una Tierra purificada. No es la Tierra la que
debe purificarse, pues en tanto Naturaleza es neutra pero en tanto hábitat de los demonios
es profundamente densa, las que deben purificarse son las almas.
307. Y clamó con gran voz diciendo: “Ha caído, ha caído Babilonia la grande y ha
venido a ser albergue de demonios y refugio de todo espíritu inmundo y refugio de
toda ave impura y aborrecible.
Ha caído Babilonia, sus habitantes se esparcieron por el mundo con el resto de las
almas. Nada dice el texto de los habitantes de Babilonia; en realidad sólo habla de su caída,
y que no es ya refugio de los demonios.
En el momento en que aparece el Apocalipsis, las fuerzas del mal no estaban tan
diseminadas como ahora, era un momento muy espiritual de la humanidad. Tan grande era
este desarrollo como fuerte fue la respuesta.
El Apocalipsis es una reacción de las fuerzas del mal que se ven arrinconadas por
un creciente desarrollo de la espiritualidad por la prédica de la palabra de Cristo, que como
Hijo del Padre, redimió los pecados de la humanidad y desató un movimiento espiritual
muy puro en sus principios.
Hay que entender que las palabras del Apocalipsis, que son las palabras de la
magia, hacen ocurrir las cosas que nombran. No es una voz celestial la que clama que
Babilonia ha caído, sino la voz del propio demonio que con su palabra destrozó el refugio
de sus tropas y las esparce por el mundo distraído.
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Al nombrar a los fenómenos y a los monstruos el demonio los crea, los materializa
en los ojos y en las mentes de quien lo escucha. Con el clamor vence las resistencias. Todo
el mensaje es de sojuzgamiento.
El Padre no grita, no clama, no destruye ni goza con la destrucción.
308. Porque del vino de su furiosa fornicación bebieron todas las naciones, con ella
fornicaron los reyes de la Tierra y con el poder de su lujo se enriquecieron los
mercaderes de la Tierra.
Es un relato absolutamente histórico y también actual que nos trae las conocidas
imágenes de los demonios en los poderosos y de los demonios del dinero.
Tonto es el hombre que no puede ver que los demonios le muestran su propia
realidad y cree que es una fábula.
Como explicaba antes al referirme a las palabras de la magia, lo que se nombra se
crea, y lo que se crea es exactamente esto, una ilusión con sustancia. La ilusión de la
lujuria, del poder y de la riqueza se implantan en quienes la escuchan, y se manifiesta el
deseo irrefrenable de poseer esa sustancia.
Esto aleja la capacidad de comprender que no hay tal sustancia; solo hay Padre y
hay demonio, lo demás es ilusión, lo que está en el medio es disfraz del demonio en todas
sus formas, es ilusión. Y la ilusión más grande es creer que quien crea la ilusión, el
demonio, tiene sustancia.
309. Oí otra voz venida del cielo que decía: “Salid de ella, pueblo mío, para no ser
solidario de sus pecados y no participar de sus plagas pues sus pecados se han
acumulado hasta el cielo y Dios se ha acordado de sus iniquidades.”
La voz del Padre se escucha en el corazón y no proviene de los cielos. No hay
iniquidades para el Padre, si la hay para los hombres.
El Padre no olvida ni recuerda, simplemente Es. Y ve todas las cosas sin verlas, no
juzga. Todo lo que sea mirar las cosas y verlas y juzgarlas, es el pecado.
Confundido está y yerra el camino quien piense que puede conocer lo justo sin
conocer la mirada del Padre.
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En cada párrafo aparece una nueva amenaza. No es el Padre quien recuerda las
iniquidades, son los propios hombres los que empiezan a temer por las iniquidades
causadas.
Al principio del párrafo, cuando el demonio habla de su pueblo, no está hablando de
los hombres, está hablando de su ejército.
310. Pagadle como ella ha pagado; retribuidle el doble conforme a sus obras, en la
copa que mezcló, mezcladle doblado.
¿No dije yo acaso, no es mi prédica, poner la otra mejilla? ¿Qué tienen que ver mis
palabras, las dictadas por mi Padre a las plumas celestiales que escribieron mi historia, con
el pagar y redoblar el pago?
A sus conciencias ennegrecidas les surge espontáneamente castigar y retribuir. Por
eso lo difícil de mis palabras y de mi prédica para aquellos que no pueden acallar su
conciencia y escuchar al amor que habla en sus corazones.
Se exaltan los instintos más primitivos. Ya no sólo es retribuir ojo por ojo, sino
retribuir el doble. Es una invocación al demonio de la venganza.
311. Cuando se glorificó a sí misma y vivió en el lujo, otro tanto dadle de tormento y
de luto, porque ella dice en su corazón. “Como reina estoy y sentada, y no soy viuda y
jamás veré duelo”.
Todos buscan los placeres y el lujo y la falta de dolor y sufrimiento. Estas imágenes
representan ese ideal; sin embargo encubre un hecho muy simple, el duelo y el dolor se
causan en el lujo.
Además sigue exaltando esta idea de venganza terrible, por la cual todo lo bueno
(para la Tierra) acarreará incontables sufrimientos que en realidad está describiendo.
312. Por tanto en un solo día vendrán sus plagas, muerte, luto y hambre, y será
abrasado en fuego porque fuerte Señor es el Dios que la ha juzgado.
Todas estas imágenes están pasando ahora, el duelo, el hambre, la violencia y la
sangre que se describen en los versos del Apocalipsis, es el mundo tal cual lo conocemos
¿Qué podría inventar el Padre para generar un castigo mayor?
100
Quede claro que no es el Padre quien castiga. A su lado no hay luto, no hay muerte
y no hay dolor.
313. Al ver el humo de su incendio llorarán y se lamentarán sobre ella los reyes de la
Tierra que con ella vivieron en la fornicación y en el lujo.
Esos son los pactos. Se van a lamentar de no ver el Potencial Divino, de no recibir la
Gracia y luego se van a lamentar de haber perdido la posibilidad, y se lamentarán de estar
en planos inferiores donde toda la humanidad ha quedado sumergida.
El trabajo y la entrega hacia el interior tienen un camino de luz en el cual no pueden
entrar; quienes no se liberen del pacto, del espacio demoníaco, de la comodidad, del poder,
de la riqueza, olvidando la Gracia Divina y el deber de estar integrado hacia Dios.
Deberán aprender la diferencia entre la Gracia y el pacto. El engaño está
permanentemente latente. Pero cuando el devoto es sincero y se entrega al Padre, ya no hay
engaño. Solo la Gracia es permanentemente luz.
314. Manteniéndose lejos por miedo al tormento de ella dirán: “Ay, ay de la ciudad
grande de Babilonia, la ciudad poderosa, porque en una sola hora vino tu juicio”.
Todo el camino que vayan haciendo serán pruebas tremendas. Deberás caminar a
través de ellas, inmune a toda reacción de pacto con los demonios. Sólo te sostendré desde
un solo punto de equilibrio, caminaras inmune ante esos obstáculos y verás la luz.
Caminarás sobre la luz y verás los obstáculos, pero no personalizarás ninguno de
ellos con tu alma.
315. También los traficantes de la Tierra lloran y hacen luto sobre ella, porque nadie
compra más sus cargamentos; cargamentos de oro, de plata, de piedras preciosas, de
perlas, de lino fino, de púrpuras, de seda y de escarlata, y toda clase de madera
olorosa, toda suerte de objetos de marfil, y todo utensilio de madera preciosísima, de
bronce y de hierro y de mármol; y canela y especias aromáticas, perfumes, mirra,
inciensos, vino y aceite, flor de harina y trigo, vacas y ovejas, caballos, carruajes,
cuerpos y almas de hombres.
101
El lamento es el gran disfraz que se colocan por no vender sus mercancías. Pero la
reflexión misma de esos obstáculos será una pérdida de tiempo en relación al Ser. La luz es
solo la luz, la vibración, ya no hay nada, todo lo demás se desmoronará.
En el silencio encontrarás la bendita paz de la luz. Caminarás hacia Mí, cuando
lleves los sentidos hacia lo profundo de tu esencia y tu Unidad será Una al fin.
316. Los frutos que eran el deleite de tu alma se han apartado de ti, todas las cosas
delicadas y espléndidas se acabaron para ti, no serán halladas jamás.
Ya el alma en la vibración no necesita nada, ni el aroma, ni el gusto por los frutos
SOLO ES. La vibración es tan intensa, todo es plenitud, TODO ES.
Experimenta el estado interior, y ya no habrá efecto, ya no habrá causa, ya estará el
vacío, experimentarás sólo la vibración. Entonces no harán falta las palabras.
317. Los mercaderes de estas cosas, que se enriquecieron a costa de ella, se pondrán
lejos por miedo a su tormento, llorando y lamentándose y dirán: ¡Ay, ay de la ciudad
grande, que revestía de finísimo lino, de púrpura y escarlata, y se adornaban de oro,
de pedrería y de perlas porque en una sola hora fue devastada tanta riqueza.
Se refiere a la imagen de los mercaderes. Mercader es aquel que manosea el
producto; el manosear es pervertir y transformar en propio lo ajeno.
De esta forma es como se manifiesta en Satanás la tentación.
No debes engañarte en las trampas que pone en el camino el demonio, el cual se
divide en varios demonios. Son muchas las trampas pero al estar el alma en la Gracia no
habrá confusión.
318. Y todos, pilotos y todos los que navegan de cabotaje, los marineros y cuantos
explotan el mar se detuvieron lejos y al ver el humo de su incendio dieron voces
diciendo ¿Quién como esta ciudad tan grande?
El mar es el campo donde la tentación no se manifiesta, es un espacio diferente de la
tierra. En la tierra la manifestación es concreta, por eso Satán tiene su campo de batalla en
ella. Difícilmente pueda manifestarse en lo acuoso puesto que es un campo de menor
saturación.
102
Eleva tu conciencia hacia la Conciencia Suprema. El Infinito es Infinito y no está
arriba ni abajo. No tiene tiempo, no tiene espacio. Se sumerge en la luz, en el silencio, en el
vacío; y desde ese lugar todo se disuelve.
319. Y arrojaron polvo sobre sus cabezas y gritaron y llorando lamentándose dijeron:
“Ay, ay de la ciudad grande, en la cual por su opulencia se enriquecieron todos los
poseedores de naves en el mar porque en una sola hora fue desolada.
¿Cuál sería el destino de aquello que se manifiesta en una intensa negrura? La
ceniza es el producto de aquello que ya no existe. Como imagen asume el arrepentimiento,
y al mostrar aquello que ya no existe, elimina los contenidos de ambición de los cuales se
arrepiente.
En la vibración se derrumbarán los trajes y las riquezas. De nada servirán, se
desvanecerán como en el pantano mismo. A través del lujo y las riquezas, embelesando tan
solo a los sentidos, no me encontrarán. Eleven la vista hacia el cielo.
320. ¡Alégrate sobre ella, oh cielo, y vosotros los santos y los apóstoles y los profetas,
pues juzgándola Dios os ha vengado de ella!
La alegría y la venganza son ideas contrapuestas. Si de lo divino procediese la
alegría, la venganza no tendría sitio. Por lo tanto, esta alegría es de origen satánico.
Cuando conozcas la conciencia y expandas tu conciencia al Infinito, recién ahí
podrás encontrarme.
321. Y un ángel poderoso alzó una piedra grande como rueda de molino, y la arrojó al
mar diciendo: “Así de golpe será precipitada Babilonia, la ciudad grande, y no se
hallada nunca más.”
¿Quién es Babilonia? Es la representación de la Verdad prostituida. La piedra es la
Verdad pura que prostituida debe desaparecer. El triunfo de Satán, su característica y su
logro es prostituir la Verdad por lo cual ésta se pierde.
Meditando en el silencio, entrando en el vacío y en ese silencio vas a encontrar la
luz. La mente se aquietará y el alma se elevará a su Padre en la gloria final.
103
322. No se oirá más en ti voz de citaristas, ni de músicos, ni de tocadores de flautas y
trompetas, ni en ti volverá a hallarse artífice de arte alguno ni se escuchará más en ti
rueda de molino.
Están cegadas todas las manifestaciones de luz y prosperidad.
Poco a poco a través del conocimiento las almas irán despertando hacia una
Realidad Impersonal donde solo se manifestará la luz, la cual finalmente también se
disolverá en la vibración.
323. La luz de la lámpara no brillará más en ti, ni se oirá más en ti voz de novio y de
novia porque tus traficantes eran los magnates de la tierra porque con tus hechicerías
han sido embaucados todos los pueblos.
La luz que ilumina la conciencia amenaza apagarse, es el noviazgo como relación
pura del afecto compartido con lo Superior. Esta es la manifestación de la perversión de lo
satánico como embrujamiento en función de la oscurización de la conciencia.
Medita en la luz, en la vibración, en el silencio. Todos los valores han querido ser
maltratados pero el camino de la virtud te lleva a elevarte.
324. Y en ella fue encontrada sangre de profetas y de santos, y de todos los que fueron
sacrificados sobre la tierra.
La sangre, ese elemento que contiene todo el historial del hombre, es permanente en
la convocación satánica. Nunca se ha dado la posibilidad de argumentar con siniestros de
tal índole una explicación constructiva.
[Aparece Jesús de pie vistiendo un manto que le llega hasta el piso y cubriendo algo
de éste. Por debajo de la tela aparecen pequeños demonios pidiendo perdón. Jesús extiende
el pie pero no los aplasta sino que los toca y la hacerlo se transforman en una explosión de
luz. Al desaparecer aparecen otros demonios y se va repitiendo la escena].
Siempre fueron cambiando las palabras para acercarse a Dios. El engaño diabólico
es inmenso y permanente.
104
325. Después de eso oí en el cielo como una gran voz de copiosa multitud que decía:
“Aleluya la salvación, la gloria y el poder son de nuestro Dios porque fieles y justos son
sus juicios”.
Este lenguaje pertenece a los primeros discípulos que entran en conceptos que se
van alejando de las enseñanzas sencillas.
La espiritualidad verdadera reside en el hombre y los juicios y sentencias no vienen
del Padre sino que cada uno los recibe como consecuencia de sus propios actos.
Lo que han hecho las religiones es irse hacia fuera, concebir figuras externas,
seguramente así se hablaba en esa época. Pero la equivocación de estos primeros discípulos
fue considerar que la gente necesitaba un poderoso gobierno material, la Iglesia, que
conduciría al mundo espiritual. Ahí estuvo el error de esos discípulos y la inteligencia del
demonio que no los dejó seguir el ejemplo de Cristo predicando con lenguaje sencillo,
claro, y de gran fuerza espiritual.
[Al demonio:] El engaño sigue siendo el mismo, fuiste alimentándolo, y
especulando, manipulando la ignorancia de la gente, siglo tras siglo, desfigurando hasta la
misma palabra de Jesús.
Pero con el filo del discernimiento verán solamente la gracia y se librarán del pacto,
y el mensaje será dado nuevamente de mano en mano, y fluirán hasta que las almas vibren
solamente en el Padre.
326. Pues Él ha juzgado a la gran ramera que corrompía la Tierra por su prostitución,
y ha vengado sobre ella la sangre de sus siervos.
Es el símbolo de la caída del hombre, de su parte espiritual, al sumirse en vidas
materialistas. La realización depende del hombre, Dios está, el Espíritu está; siempre
estuvieron. Pero el hombre cae por las grandes tentaciones que le ofrece el demonio
escenificadas de distinto modo en cada época, y que lo hunde en la materia. Por eso es
necesario purificarse para volver a la vida espiritual. Siempre es posible, la cuestión es
quererlo.
Entregando la voluntad al Padre, te bendecirá con la Gracia, y te abrirás hacia los
centros internos y te liberarás de quienes están atrapando tu alma, tu verdadera vibración
¡Debes despertar!
105
327. Y por segunda vez dijeron: “Aleluya, y el humo de ella sube por los siglos de los
siglos”.
Por los siglos de los siglos está el hombre enraizado en sus pecados, en su
oscuridad. Así tiene que tomar conciencia de contar ese ciclo de siglos y siglos de
oscuridad y encomendarse a Cristo, a Dios, con un corazón sincero y purificado y dejar
atrás esas creaciones fantásticas generadas por el demonio, y a las que, en lo religioso, la
Iglesia es tan afecta.
Deberás entregarte solamente a Dios, a través de la mano de Jesús, deberás soltar las
ilusiones, la repetición de historias, si miras bien verás a los viejos demonios, los cuales son
siempre los mismos demonios, recordarás que es el mismo espacio, el mismo pacto.
328. Y se postraron lo veinticuatro ancianos y los cuatro vivientes y adoraron al Dios
sentado en el trono y diciendo: “Amen, Aleluya”.
No solamente en este planeta, sino en todos los planetas, constelaciones, cielos,
también todos reconocen por siempre el Espíritu de Dios. Pero aquí en este planeta el
hombre se conforma con ceremonias, que tal vez en otra época fueron necesarias, pero que
ahora hay que purificar.
No se puede adorar a Dios y al Espíritu y no tener en cuenta a los otros seres
humanos y a todos los seres vivientes porque entonces no es una adoración sincera.
Realmente teniendo respeto por todas las criaturas vivientes es como se empieza a adorar a
Dios sinceramente. Y esto no ocurre porque se ve a los otros externamente y no
interiormente como conciencias en su dimensión espiritual, que es lo que no se llega a
percibir.
Es tal el engaño del demonio que no puedes ver a Dios en cada uno de los seres
humanos.
329. Y salió del trono una voz que decía: “Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y
todos lo que les teméis, pequeños y grandes”.
El reconocimiento a Dios es universal en todas las criaturas vivientes, menos en el
hombre que tomó este camino de oscuridad.
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La salvación y la realización está para todos los hombres, pero depende de la
necesidad y de la comprensión de cada uno lograrlo antes o después, pero el llamado está
hecho para todos..
Para lograrlo no debes juzgar, pues como dije: “el que juzga es juzgado” y nunca
termina bien. El modo es la purificación y así también se puede elevar a otros seres
humanos.
Cada uno tiene un tiempo, pero el tiempo es marcado por los demonios. A través de
la Vibración Divina el alma se irá despertando y comenzará el camino de la salvación.
330. Y oí una voz como de gran muchedumbre y como estruendo de muchas aguas y
como estampido de grandes truenos, que decía: “Aleluya, porque el Señor nuestro
Dios, el Todopoderoso ha establecido el reinado”.
Se parte de una premisa que es una imagen de una acción física muy impactante:
que Dios viene a este planeta y por medio de terribles cataclismos, donde los pecadores
serán juzgados, establece su reinado.
En este planeta siempre hubo cataclismos pero el hombre no los asimila sino como
algo externo, cuando en realidad es parte del proceso necesario en el planeta.
Depende de ti mismo salir de las cadenas de vidas y de tu caída con el demonio en
la oscuridad.
Se irá derrumbando poco a poco el escenario pero la identificación en este plano
será para quienes no hayan despertado el alma a Dios. El camino es solo Uno.
331. Regocijémonos y saltemos de júbilo, y démosle gloria, porque han llegado las
bodas del Cordero, y su esposa la ha preparado.
Se habla de la unión del espíritu con el Gran Espíritu, pero no es algo que se vaya a
dar en un mismo nivel para todos en un mismo momento. Esto sucede porque hay almas
que hacen y han hecho esta unión, y otras que la están desoyendo sumidas en la oscuridad.
De todas maneras la unión se percibe, no hace falta ni gritarla ni anunciarla a través
de un acontecimiento material, sino por el contrario, ocurre a un nivel espiritual, anónimo a
las grandes muchedumbres. Cuando aparecen grandes manifestaciones, estas no son tales,
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solo el demonio las disfraza de grandes cuestiones pero el nivel de especulación del hombre
es tan fuerte que termina cayendo enredado en esas visiones demoníacas.
La vibración de las almas que despiertan hacia Dios será como un gran océano
donde cada una de las almas será como una gota, cuya luz y vibración será cada vez más
fuerte.
332. Y si le ha dado vestirse de finísimo lino, espléndido y limpio, porque el lino
finísimo significa la perfecta justicia de los santos.
Es su disfraz favorito de la pureza, pero se le mancha rápidamente. Busca ganar las
almas más elevadas que son su mayor trofeo; y para lograrlo debe tener la imagen de
ángeles y santos, por eso debe vestirse de pureza: es su disfraz.
Siempre que estés en silencio y en la meditación constante podrás diferenciar y ver
ese disfraz.
333. Y me dijo: “Escribe: ¡Dichosos los convidados al banquete nupcial del Cordero!”.
El Cordero es el símbolo del maestro, del sabio y es a Él a quien quiere devorar;
realmente sería el banquete de los demonios.
El Cordero representa mansedumbre y paciencia, porque a pesar de sus poderes es
incapaz de dañar. El Cordero de Dios no es cobarde ni indefenso sino que su mansedumbre
es ante Dios y es manso porque se entrega a Dios por completo: Cordero de Dios porque
Dios es su pastor. A esos Corderos son a los que el demonio quiere devorar y usa el
“bendito seas” para confundir, ya que para estar en ese banquete los convidados tenían que
convertirse en demonios.
Pero se confunde el demonio al no darse cuenta que frente a él el Cordero se
convertirá en león. El símbolo del Cordero siempre ha sido malinterpretado, mostrándolo
como una ofrenda a Dios cumpliendo los ritos sacrificiales cuando, como vimos, no es ese
su verdadero significado.
El banquete divino será en un gran manto de luz, donde sentados en la cueva,
inmersos en mi luz, que es la misma que la de Mi Padre, serán llevados a Él.
334. Díjome también: "Estas son las verídicas palabras de Dios.
108
Del demonio tomado como Dios. Ese es del Dios del que habla, no del Dios Padre.
Ya no hay confusión, solo deberás estar en la Gran Vibración, en la gran Conciencia
Suprema, en la Madre Divina, en el plano inconfundible de los maestros. En ese estado ya
no hay disfraz, la Vibración disolverá a la oscuridad.
335. Caí entonces a sus pies para adorarlo. Mas él me dijo: "Guárdate de hacerlo. Yo
soy consiervo tuyo y de tus hermanos, los que tienen el testimonio de Jesús. A Dios
adora. El testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía.
Continúa el engaño a Juan, hacerle creer que el que habla es Jesús y no él, pero en la
última palabra, cuando dice "profecía", se autorrevela.
Si Juan hubiese estado atento se habría dado cuenta, pero el deseo de creer que ese
era un mensaje divino, y él era el depositario, lo cegó, no le permitió ver a quién tenía
delante, y no era tan difícil darse cuenta, pero quedó atrapado y sin discernimiento.
Sigue el discernimiento para que tu alma se libere.
336. Y vi el cielo abierto y he aquí el caballo blanco y el que montaba es el que se
llama fiel y veraz, que juzga y pelea con justicia.
Este es el principio de otro engaño. Siempre se presenta espectacularmente con
imágenes impactantes, pero por ser imitaciones no tienen duración, corren velozmente, no
pueden sostenerse mucho tiempo ante quien habla, entonces se empiezan a ver pequeños
indicios de que el que habla no es quien dice ser.
El demonio pretende mostrar que el que montaba el caballo era el dueño de la
Verdad y la Justicia, y que aquellos que lo escuchen no pongan en duda lo que oyen. En
realidad, es muy simple, todo lo que es demoníaco tiene que estar oculto, revestido de
apariencia de Verdad, y cuando se presenta ante el alma, la fascinación consiste en que esta,
si bien sabe que está pactando, la conciencia ordinaria cree estar haciendo lo correcto.
337. Sus ojos son llama de fuego, y en su cabeza lleva muchísimas diademas, y tiene un
nombre escrito que nadie conoce sino él mismo.
En los ojos se manifiesta todo su poder de causar temor, se está mostrando a sí
mismo. Este mismo temor es del cual se apoderó la Iglesia para ejerce su poder.
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338. Viste un manto empapado de sangre y su nombre es: Verbo de Dios.
El manto sigue siendo la evidencia de quien está enfrente, porque esa es la sangre
que él quiere provocar. Allí donde hay derramamiento de sangre él está presente.
Al hacer referencia al Verbo de Dios, quiere confundir el Hacedor con el Destructor,
quiere hacer ver a Dios como Destructor, como que Dios porta esa capa de sangre y
provoca todas las desgracias. Es una forma de socavar el Nombre Divino, de manchar a
Dios para elevarse él, y usar a Juan como su mensajero y entonces ganar una batalla a su
favor. Por eso se sintió a la altura de Jesús.
Mi Padre no puede generar emociones de este nivel. El verdadero contacto divino
genera un gozo trascendental que no es explicable ni comprensible desde el plano binario.
Esa es la gran trampa porque el Padre no puede ser expresado con palabras ni las palabras
tienen sentido, solo la experiencia personal nos hace uno con Él.
339. Le siguen los ejércitos del Cielo en caballos blancos, y vestidos de finísimo lino
blanco y puro.
Así comienza, pero inmediatamente ese lino blanco y puro desaparece, porque las
huestes no son precisamente celestiales; esas imágenes como las del caballo blanco, no las
puede mantener.
La gran conquista del demonio justamente es lograr captar la atención a través de
estas imágenes y dejarlos cautivados y fascinados por el plano binario.
340. De su boca sale una espada aguda, para que hiera con ella a las Naciones.
Su propósito es convertir en asesino al mensajero divino y terminar de convertirlo
en mensajero del diablo. Quiere que Juan pase a ser parte de sus huestes, y hacer lo que
ellos hacen: matar, blasfemar a Dios. Por eso constantemente hace creer que Dios es el que
provoca la miseria, la muerte, el dolor, entonces hace todo lo posible para que a Dios se le
tema y se le vea como un Dios poderoso capaz de destruir; y ese es el Dios del que habla,
no del Dios Padre.
La Iglesia sucumbió al temor a Dios, producto de este texto, y no de lo que Yo
prediqué, pues nunca enseñé que se debía temer al Padre, no había motivo para eso, no
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tenía sentido. Pero en Juan imperó el temor, y si empezó por él en particular, se terminó
extendiendo a todos a través del texto.
Lo que busca el demonio es la conquista de los sentidos externos, pero no se llega al
gozo del Padre a través del goce sensorial, sino a través de la trascendencia de los sentidos.
341. Es él quien regirá con cetro de hierro.
Su cetro es de hierro porque no puede ser de oro, él es un rey falso. El demonio
quisiera regir, por eso se entrona, pero el cetro lo revela en su falsedad.
El trono y el cetro del demonio están compuestos por elementos de este plano,
mientras el Padre reina con el Amor, que es una manifestación trascendental a todos los
planos de manifestación.
342. Es él quien pisa el lagar del vino de la furiosa ira de Dios, el Todopoderoso.
Dios no conoce la ira y mucho menos la furia. No está hablando de Dios Padre.
Continúa haciéndolo ver como alguien furioso, terrible, que espera descargar su furia contra
los débiles. El Dios del que habla dice que cumplan con lo que ordenó o las consecuencias
serán terribles.
Sigue intentando que los hombres construyan una imagen humana de Dios, con
atributos humanos. Mientras así lo hagan, la conexión va a ser desde la mente, y así no
podrán llegar a Dios; tan solo rompiendo las barreras de la mente, más allá de todas las
ideas y condicionamientos se manifiesta la verdadera esencia de la que formamos parte.
343. En su manto y sobre su muslo tiene escrito este nombre: Rey de reyes, Señor de
señores.
Utiliza la frase que se usa para nombrarme, pero él la tiene escrita en un manto de
sangre. Él busca compararse conmigo.
Juan no fue elegido al azar porque si no la palabra no hubiese tenido la autoridad
que tuvo. El se pone a mi altura, pero fácilmente se comprueba que todo es falso y poco
firme; a pesar de todo lo que arma para que le crean lo que no es, se ve claramente que es el
demonio. Jamás estaría el nombre de Jesús en un manto sangriento, no me manifestaría con
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los ojos llameantes, con espadas, ni con profecías de dolor y destrucción. Hay algo que el
demonio no puede falsear, y es a sí mismo: entonces se muestra.
El hecho de que no se puede ocultar se debe a que siendo el rey de este plano se
encuentra atrapado en el mismo, por lo tanto solo puede afectarte si te encuentras
sumergido en este mundo. No hay nada trascendental en el demonio, al salir de este plano
termina el alcance de su hechizo.
344. Y vi un ángel de pie en el Sol y gritó con poderosa voz diciendo a todas las aves
que volaban por medio del cielo: "Venid congregaos para el gran festín de Dios a comer
carne de reyes, carne de jefes militares, carne de valientes, carne de caballos y carne de
todos, de libres y esclavos, de pequeños y grandes”.
Primero: un ángel no grita para hacerse oír.
Segundo: esas aves serían negras
Tercero: todo lo que invita a comer, no son sino las almas del mundo
Lo que invita a comer es la energía del prójimo para poder acceder a estos puestos
de poder que tanto pondera.
El trabajo del demonio no deja de ser arduo, porque constantemente debe generar
nuevos hechizos para mantener el alma atrapada en este plano.
345. Y vi a la bestia, y a los reyes de la tierra y a sus ejércitos reunidos para dar la
batalla contra Aquel ángel que montaba el caballo y contra su ejército.
Aquí está representando lo que les puede pasar a aquellos que pretendan luchar
contra el dominio del demonio en la Tierra. Es una amenaza contra aquellos que quieran
enfrentarlo.
Lo que el demonio no puede permitir es que se queden quietos, por eso tiene que
construir todo este juego de imágenes fantasmagóricas con premios y castigos que generen
apego y rechazo, y los haga fluctuar entre esos dos extremos que están igualmente alejados
de la Unidad.
En la quietud su poder se desvanece y la luz del discernimiento atraviesa el plano
dual.
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346. Y la bestia fue presa, y con ella el falso profeta que delante de ella había hecho los
prodigios por medio de los cuales había seducido a los que lo recibieron, la marca de
la bestia y a los que adoraron su estatua.
Esta todo dado vuelta porque cuando habla de la bestia está hablando del Poder
Divino. Es solamente la batalla entre la luz y la sombra, pero vista desde el lado de la
sombra.
La batalla es irreal. O se Es, o se roba energía para alguna manifestación oscura.
347. Estos dos fueron arrojados vivos al lago de fuego encendido con azufre. Los
demás fueron tucidados con la espada que salía de la boca del que montaba el caballo,
y todas las aves se hartaron de la carne de ellos.
Esa es la culminación de la amenaza, es con aquello que amenaza a quienes se les
quieren enfrentar.
¿Cómo es que Juan, conociendo el original, se dejó seducir por una vil imitación?
Eso que veía Juan como aves eran demonios de diferentes jerarquías, tal vez pequeños
demonios.
[Se ve un cielo celeste y un ángel regordete sobre una especie de tarima, y a lo lejos
se pueden observar algunas aves. Pero si nos acercamos y prestamos atención a la imagen,
ésta no se puede sostener y se ve la falsedad: el cielo aparece como pintado y el ángel como
un muñeco sin vida. De pronto esta imagen se pone en acción: el ángel se pone a gritar y
los invita al festín maléfico y todo se transforma en un lugar terrible, sangriento y temible;
esas aves, que parecían canarios, se trasforman en aves de rapiña. Esto se repite
constantemente, ya que las imágenes que comienzan aparentando paz divina no se pueden
sostener.]
Este juego de imágenes es cautivante pero tan solo alejándose del deseo es que se
sale de su influencia, porque sin deseo no hay temor y entonces no hay imágenes que
puedan cautivar la conciencia.
348. Y vi un ángel que descendió del cielo, en su mano tenía la llave del abismo y una
gran cadena.
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Lo que vio Juan es el profundo inconsciente del hombre, y ese nexo de hacerlo
consciente simbolizado por la llave. El ángel es lo consciente que tiene la posibilidad de
llevarlo hacia la luz, la cadena es el símbolo de la esclavitud que produce el inconsciente, y
el demonio son sus contenidos que es donde reina toda la miseria humana.
Esa llave es la llave que abre las puertas de la liberación, pero a su vez la cadena
que lleva en la otra mano representan todas las ataduras. Solo depende del hombre la
elección, y si pesa más la tentación, no será posible liberación alguna.
349. Y se apoderó del dragón, la serpiente antigua, que es el Diablo y Satanás, y lo
encadenó por mil años.
La represión del inconsciente no es eterna. Es una fuerza que mantiene su oscuridad
por sí misma. Esta es su característica de preservación, puesto que sin ella es fácilmente
vulnerable.
Respecto a las imágenes del dragón y la serpiente, pueden simbolizarse como que el
dragón es la fuerza, el potencial de manifestación, y la serpiente es la inteligencia, la que
dirige y ordena sus contenidos.
El dragón y la serpiente son meras representaciones arraigadas en el inconsciente,
ese inconsciente oscuro que enceguece y no deja ver la luz.
350. Y lo arrojó al abismo que cerró y sobre el cual puso el sello para que no sedujese
más a las naciones, hasta que se hubiesen cumplido los mil años, después de lo cual ha
de ser soltado por un poco de tiempo.
De la misma manera que en la respiración; la inhalación y la exhalación, o en la
pulsación del corazón, el ritmo cardíaco, así se manifiesta todo organismo, puesto que el
espacio o plano de manifestación es binario.
Los mil años es un significado potencial, no es tiempo sino fuerza y su
manifestación tiene la periodicidad que la humanidad necesita.
En el mundo binario no hay quietud, siempre están latentes las diferentes
manifestaciones.
351. Y vi tronos, y sentáronse en ellos, y les fue dado juzgar.
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El poder es el aditamento que el demonio usa para manifestarse. Y uno de sus
poderes está en el juzgar. En lo divino no hay juicio, el juicio es demoníaco.
Mi Padre concede el perdón a todas las criaturas de la Tierra, por eso no existe el
juicio para Él.
352. Y (vi) almas de los que habían sido degollados a causa del testimonio de Jesús, a
causa de la Palabra de Dios.
Quien degüella es el demonio cobrando deudas de pactos profundos. Esas actitudes
son propias del demonio, con mi Padre sólo se conoce el Amor.
353. Y a los que no habían adorado a la bestia ni a su estatua, ni habían aceptado la
marca en sus frentes, ni en sus manos, y vivieron y reinaron con Cristo mil años.
Esta es la profunda cuestión: quién puede liberarse y cuál es el sentido de la
liberación.
Quien busca encuentra, y si buscas la Verdad morarás eternamente junto al Padre.
354. Los restantes de los muertos no tornaron a vivir hasta que se cumplieron los mil
años.
Es una descripción concreta de la posesión, porque quienes están posesos por los
estados inconscientes viven en ese período de densidad hasta que logren la liberación.
La posesión demoníaca te mantiene atado y no te permite la liberación.
355. Esta es la primera resurrección. Bienaventurado y santo el que tiene parte en la
primera resurrección.
Así como anteriormente mencionaba la aspiración y exhalación como forma de
manifestación en el mundo binario, de la misma manera el inconsciente tiene períodos de
densidad y de fluidez. Es en este ultimo período, y mediante la Gracia, es posible la primera
resurrección.
Mi Padre les brinda oportunidades, está en vosotros aprovecharlas y lograr esa
resurrección para unirse a Él.
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356. Sobre estos no tiene poder la segunda muerte sino que serán sacerdotes de Dios y
de Cristo con el cual reinarán los mil años.
La relación entre la primera y segunda muerte no existe, puesto que la primera es en
el campo de lo psíquico, y la segunda en el campo de lo físico
No hay segunda resurrección, la primera basta para darse cuenta.
357. Cuando se hayan cumplido los mil años, Satanás será sellado de su prisión y se
irá a seducir a los pueblos que están en los cuatro ángulos de la tierra. A Gog y a
Magog, a fin de juntarlos para la guerra, el número de los cuales es como la arena del
mar.
Los pueblos están permanentemente bajo la seducción de Satanás. La liberación es
el momento de pulsación del inconsciente, como lo expliqué, mediante la Gracia. Esta es la
representación de la pulsación en sus dos estados de manifestación. Cada vez que se
manifiesta tiene el mundo por escenario.
El demonio nunca estuvo encarcelado, es una estrategia que utiliza para distraer, y
de esta manera desviar a los seres de la verdadera búsqueda.
358. Subieron a la superficie de la tierra y crearon el campamento de los santos y la
ciudad amada.
El campamento es el Ser y la ciudad es el estado ideal, esto es lo que es
permanentemente subyugado por las fuerzas del inconsciente.
Ese es el verdadero hábitat del alma; pero el alma vive perdida, arrastrada por las
fuerzas oscuras que no le dejan encontrar la morada.
359. Más del cielo bajó fuego (de parte de Dios) y los devoró.
Lo superior es una fuerza de imantación por lo cual lo inferior desaparece. La
imagen de algo que desaparece, como se encuentra armada, tiene la apariencia de ser
devorada.
Cuando el Ser pierde su densidad esa fuerza que lo imanta es la fuerza de la luz y
hacia ella es atraída el alma.
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360. Y el Diablo que los seducía fue precipitado en el lago de fuego y azufre, donde
están también la bestia y el falso profeta, y serán atormentados día y noche por lo
siglos de los siglos.
El lugar que se describe es el inconsciente donde el sufrimiento es su estado natural.
Todas estas son manifestaciones que moran en el inconsciente.
361. Y vi un gran trono esplendente y aquel que estaba sentado en él, de cuya faz huyó
la tierra y también el cielo, y no se halló más lugar para ellos.
El juicio final establece el desprendimiento definitivo del inconsciente y el que reina
es el consciente. Con esto queda definido, se termina la ilusión, no hay más mentiras,
enredos; es el enfrentamiento a la Verdad, a Dios, a la Luz.
362. Y vi a los muertos, los grandes y los pequeños, en pie ante el trono y se abrieron
libros. Se abrió también otro libro que es el libro de la vida, y fueron juzgados los
muertos de acuerdo con lo escrito en los libros, según sus obras.
La atemorización es una de las vías de manifestación que utiliza el inconsciente para
mantener a la presa en su jaula.
Lo que realmente funciona es la ley del karma que muestra que cada acción tiene su
respuesta de la cual es responsable el alma. Por lo tanto lo que le ocurre a los hombres no
puede atribuirse a castigos o cuestiones no merecidas, y la advertencia no tiene por
propósito atemorizar sino simplemente conocer cómo funciona esta ley: a cada acción, su
reacción.
Cuando el alma reconoce sus acciones y se enfrenta a la Verdad y a la Luz, entonces
puede desprenderse de las consecuencias de sus actos, esto es, liberarse del karma.
363. Y el mar entregó los muertos que había en él, también la muerte y el Hades
entregaron los muertos que había en ellos, y que fueron juzgados cada uno según sus
obras.
Es como una revisión en forma de desfile en la que el inconsciente manifiesta sus
contenidos. Pero en realidad tal juicio no es tal, puesto que la propia energía del sufrimiento
hace que lo que es juicio reciente sea juicio permanente.
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364. Y la muerte y el Hades fueron arrojados en el lago del fuego.
La muerte y el Hades son símbolos de finitud. El fuego sagrado es el consciente en
comprensión de lo Real y Eterno.
Además la muerte es el fin de una etapa y principio de otra, es un paso necesario
para los habitantes de este planeta. La mejor forma de morir es aceptar que se va a morir y
tener el conocimiento que este es un acontecimiento natural del mundo binario, y que por lo
tanto no hay tal cosa como la muerte.
365. Si alguno no se halló inscripto en el libro de la vida, fue arrojado al lago de fuego.
Buen golpe para la soberbia, puesto que todos están inscriptos pero ninguno existe.
Todos los hombres en este plano deben pasar por las mismas etapas, no hay nadie
que no tenga que transitar esas experiencias, y cada uno las vive de diferentes maneras.
El objetivo de esta Revelación es mostrar la posibilidad de una experiencia de
conciencia más allá del plano de la dualidad.
366. Y vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra
habían pasado y el mar ya no existía más.
Cuando la conexión se realiza toda distancia desaparece, instalándonos en un
tiempo donde no existe espacio y todos los sonidos y vibraciones son diferentes.
Conéctate con tu Ser Real y habrás llegado a un mundo nuevo donde habrás surcado
todos los océanos, todos los cielos y toda la tierra para instalarte en el Universo Infinito.
Lo único Real es la conexión que te permite trasladarte a otro plano de conciencia
donde perderás la magnitud del tiempo y del espacio.
367. Y vi la ciudad santa, la Jerusalén nueva, descender del cielo de parte de Dios,
ataviada como una novia que se engalana para su esposo.
Una vez que hayas llegado a tu centro encontrarás el cordón de plata que te unirá a
Mí, encendiendo una luz que abarca todo el espectro de colores rigiendo tu vida como si te
encontraras en una fiesta continua. Tu conexión será la única que te establecerá en la
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Unidad a través de la cual lograrás la unión permanente con Dios, por lo tanto, la Vida
Eterna.
368. Y oí una gran voz desde el trono que decía: "He aquí la morada de Dios entre los
hombres. Él habitará con ellos, y ellos serán sus pueblos, y Dios mismo estará con
ellos, y les enjugará toda lágrima de sus ojos.
Desaparecen cada una de tus tristezas cada vez que sientas esa conexión y escuchas
atentamente la voz de Dios. El Padre regirá tus pasos con la voz melodiosa y a la vez
segura infligiendo fortaleza y protección a cada uno de tus actos.
Céntrate en tu conexión y ella regirá cada uno de tus actos, permitiéndote discernir
el camino correcto.
369. Y la muerte no existirá más, no habrá lamentación ni dolor, porque las cosas
primeras pasaron.
Habrás quitado la roca que obstaculizaba tu conexión con otras vidas y para otras
vidas. El paso de una a otra no será más llamado muerte sino renacer a una vida en Dios.
Morir implica desprenderse de la ignorancia para nacer a la luz del saber, por lo
tanto de la sabiduría. Enfréntala con naturalidad, ya que es indispensable para nacer a la
vida plena.
370. Y aquel que estaba sentado en el trono dijo: “He aquí. Yo hago todo nuevo.”
Y una vez que te encuentres enfrentado con la luminosidad la energía eterna en la
vida nueva, descansa en paz. No pidas más porque habrás llegado a la Morada Eterna
donde toda beatitud te acompaña.
Desde tu nueva óptica de luz desvela los misterios que dieron confusión a tu vida.
Sólo así ingresarás al plano de la sabiduría.
371. Dijo también: “Escribe, que estas palabras son fieles y verdaderas” y díjome: “Se
han cumplido. Yo soy el Alfa y el Omega, el principio y el fin.”
Recuerda a quienes abran su corazón, trasmíteles esta energía para que encuentren
al Padre. Yo hago el resto. Indícales el camino para que este punto sea el inicio hacia un
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final que dependerá pura y exclusivamente de ellos. No prives a nadie de mantener el
contacto conmigo siempre que lo hagan desde su corazón.
Una vez que la sabiduría more en ti, permite que ella fluya a todos los que te rodean
y a quienes se relacionen contigo para que esta energía circule de principio a fin.
372. Al que tenga sed yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida.
Aquí encontrarán las respuestas tan ansiadas. Desaparecen los cuestionamientos
dando lugar a la certidumbre que todo lo abarca. Transitarás tu sendero con la sabiduría que
proviene del Padre, llevándote a la vida plena.
Que mi palabra sea tu alimento, mi voz tu guía y mi imagen tu remanso donde
puedas lograr la plenitud y la bienaventuranza.
373. El vencedor tendrá esta herencia y yo seré su Dios y él será hijo mío.
Habrás llegado a tu hogar, donde los vínculos terrenos desaparecen, dando paso a
los lazos inmortales imposibles de disolver pues lograste traspasar la carne para
fundamentarte en el espíritu divino.
El cuerpo es perecedero, por lo cual deberás instalarte en tu espíritu para que a
través de su conexión, se vuelva inmortal y a la vez libre.
374. Mas los tímidos e incrédulos y abominables homicidas y fornicarios y hechiceros
e idolatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago encendido con fuego y
azufre. Esta es la segunda muerte.
No repelas a quienes no se encuentren en este camino ya que en la carga de temor
que soportan está su propio castigo, y será más que suficiente que cualquier otra pena que
pudiese imponérseles. Su despertar del alma no está pronta, déjalos dormir el sueño que
todo lo evade.
Permite a todos los que no han podido ver aun la Luz, la posibilidad de reconocer el
Amor Divino. No los niegues ni los escondas.
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375. Y vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas
postreras y habló conmigo diciendo: “Ven acá te mostraré la novia, la esposa del
Cordero.”
La amenaza de las plagas en un viejo recurso extraído del Viejo Testamento. En esa
época las plagas eran un auténtico terror para los habitantes de la Tierra.
De mi mano jamás se volcaría una copa para infectar a la humanidad con demonios.
Ese no fue mi mensaje ni tampoco el mensaje de mi Padre. Así como no fue mi Padre quién
mandó las plagas a Egipto, sino que fue simplemente el resultado de un pacto entre el
faraón y los demonios que le permitió tener esa cantidad de esclavos. Al romperse el pacto
por obra del patriarca los demonios atacan para cobrarse su parte. Ellos creían que así
podían impedir mi nacimiento.
El Cordero también es una alusión al Antiguo Testamento. Siempre estuvo
enraizado con el concepto de la entrega absoluta. El demonio usa esa metáfora para luego
hablar de cualquier cosa.
Aunque los momentos discordantes de la vida se manifiesten como plagas, ten
presente que ellas serán exterminadas por el fuego del Padre que purificara tu alma para
permitirte ingresar limpio y puro a este nuevo plano de manifestación. Es imprescindible
transitar por estas experiencias en el camino de ascenso hacia el Padre.
376. Y me llevó en espíritu a un monte grande y alto y me mostró la ciudad santa
Jerusalén que bajaba del Cielo, desde Dios, teniendo la gloria de Dios su iluminar era
semejante a una piedra preciosísima, cual piedra de jaspe cristalino.
¿Por qué estableceríamos mi Padre y Yo una morada en la Tierra, por más pura y
cristalina que fuera, si estamos esperándolos a todos en el palacio lleno de mil lujos y
piedras preciosas que se encuentra en el Cielo?
No temas a la pobreza exterior. Teme al hambre de tu alma, pues ella podría llevarte
al camino errado. Aliméntala con infinita paciencia y amor pleno, solucionando así
cualquier otro tipo de accionar.
377. Tenía muro alto, y doce puertas, y a las puertas doce ángeles y nombres escritos
en ellas que son las de las doce tribus de los hijos de Israel.
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Mi Palacio no tiene puertas, mi templo tampoco.
Todos mis hijos y todos mis hermanos son bienvenidos en el Palacio de mi corazón
que brilla más que ninguno.
La idea de una ciudad amurallada con puertas para los hijos de Israel, se parece
mucho más a la experiencia histórica del Ghetto de Varsovia que a la morada de los ángeles
y del Padre mismo, que todo el que quiere puede conocer a través de la oración y del amor.
Este, como muchos párrafos del Apóstol, es también profético por todas esas
imágenes profundamente arraigadas en el inconsciente de aquellos que a través del tiempo
fueron materializándolas. Si algo rico tiene este texto es que escribe la historia futura.
Una vez que hayas satisfecho tu necesidad interior todas las puertas que traban tu
inconsciente se abrirán para que desde tu propio centro irradies la luz proveniente del
Padre.
378. Tres puertas al oriente, tres puertas a septentrión, tres puertas al mediodía, tres
puertas al occidente.
La arquitectura no está dictada por factores ambientales.
Los edificios y las construcciones poseen vibraciones determinadas. Estas
estructuras expresan no solo el arte del momento histórico sino también su vibración. En la
historia tenemos un ejemplo en la arquitectura nazi, que plasma un conjuro y no es
producto del azar. El demonio se esfuerza particularmente en que ese conjuro tenga las
medidas exactas y sea a sus ojos perfecto.
¿Por qué el Hijo del Hombre mediría la ciudad con una vara? ¿Qué necesidad tengo
Yo de crear una estructura externa perfecta si duermo en los brazos de mi Padre, que es la
perfección?
La luz divina se irradiará por cada uno de tus centros o chakras que movilizan el
plano correspondiente, cambiando tu actitud en cada uno de ellos.
379. El muro de la ciudad tenía doce fundamentos y sobre ellos doce nombres de los
doce Apóstoles del Cordero.
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Invoca el demonio el poder mágico de los números para imprimirle al texto la
vibración y la fuerza que le permitieron llegar a nuestros días. Ese párrafo es un conjuro,
imaginada la silueta de un conjuro, se materializa.
Recorrerás así todos los estratos o niveles de conciencia hasta lograr la culminación
en el más elevado y cercano a Mí. Estas serán tus fases evolutivas.
380. Y el que habla conmigo tenía como medida una vara de oro para medir la ciudad,
sus puertas y su muro.
Aquí continúa el conjuro, la idea es enterrar la influencia de los doce Apóstoles
sobre la ciudad amurallada construida con el odio.
Me llama Cordero, que en las mentes simples en vez de aparecer como símbolo de
entrega a la fe absoluta, aparece como el símbolo de la debilidad. Pretende desacreditar mi
poder espiritual frente al gran poder terrenal del mal.
Transforma la vara de oro en algo más flexible y vibrante, capaz de comunicarte con
todos los cielos y todos aquellos que hayan podido llegar a ellos. Este deberá ser el nexo de
unión que deberás mantener.
381. La ciudad se asienta en forma cuadrada, siendo su longitud igual a su anchura.
Para que la magia funcione todo debe ser exacto. No importa el lugar dónde te
encuentras encerrado, si logras ascender por el único lugar que no está cubierto. Apéate a
través de este cordón que será el único capaz de sacarte de la cárcel donde te encuentras.
382. Y midió la ciudad con la vara; doce mil estadios, la longitud y la altura de ellos
son iguales.
Todos son iguales en el camino hacia el centro de la realización. No te envuelvas en
construcciones tan antiguas, sigue caminando hacia adentro y no pierdas la luz y se te irá
revelando el Padre.
Una vez que hayas ascendido lograrás observar desde afuera el lugar donde te
encontrabas, y no importa lo magnánimo o grande que te haya parecido, ya que desde esta
nueva óptica no será más que un punto en la distancia.
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383. Midió también su muro. Ciento cuarenta y cuatro codos, medida del hombre que
es (también del ángel)
[A Juan:] Nadie tiene que andar con tantas confusiones, no te quedes envuelto en
tantas mentiras que vas usando para perder el camino hacia la Realidad. Fuiste usando
mentiras para perder el camino, te fuiste engañando. De esa manera meditabas en él y no
meditabas en Mí. Solo escuchabas tu poder, querías tu poder.
Observa externamente la falsedad del lugar dónde te encontrabas, así como la
inexactitud de su tamaño. Era falsa tu óptica con respecto a la Realidad. Enfócate desde tu
nueva visión.
384. El material de su muro es jaspe, y la ciudad es oro puro, semejante al cristal
puro.
Es escrito el engaño y queda envuelto en tu propia ilusión. Pero el camino de la
Revelación se va a ir dando en las almas que mediten solamente en Mí, sabiendo y
experimentando que el Poder es sólo de Dios.
Descubre que has vivido en las apariencias e instálate desde este momento en la
Verdad y en la Unicidad.
385. Los fundamentos del muro de la ciudad están adornados de toda suerte de
piedras preciosas. El primer fundamento es jaspe, el segundo es zafiro, el tercero
calcedonia, el cuarto es esmeralda, el quinto es sardónica, el sexto coralina, el séptimo
crisólito, el octavo berilio, el noveno topacio, el décimo crisopacio, el undécimo jacinto,
el duodécimo amatista.
[A Juan:] Entre todo el engaño que has escrito no eran solamente esas piedras
preciosas la liberación. Tanto los Apóstoles, los santos, los maestros que se van afinando
cada vez más, elevando sus almas hacia el Padre y observando desde ese plano Superior,
desde la Fuerza misma, desde esa construcción Única y Real, van a ir desenmascarando
toda esa estructura de ilusión que fuiste creando en tu propia fantasía.
Cada piedra preciosa cimienta el conjuro y la magia en las mentes de quienes
exaltan y adoran al demonio en su manifestación de riqueza terrenal. Hay un palacio
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construido con los más maravillosos materiales del mundo etéreo. Es una construcción sutil
donde buscan refugio las almas en camino al Padre, es la morada intermedia
No son los brillos de las piedras preciosas que solo sirven para obnubilar a las almas
lo que tienes que buscar, sino el brillo único de la luz que te lleva con los ángeles a la
morada del Padre.
386. Y las doce puertas son doce perlas, cada una de las puertas es una sola perla. Y la
plaza de la ciudad de oro puro, transparente como cristal. No vi en ella templo porque
el templo es el Señor Dios Todopoderoso, así como el Cordero.
Las doce perlas se irán abriendo y desde allí se irán despertando hasta el estado de
liberación.
[Al demonio:] Tus mentiras continúan porque el poder es únicamente de Dios. Ese
Cordero es también parte de la ilusión. Quien esta con Dios en la entrega nada tiene que ver
con tu Cordero.
Solo la Unidad brilla dentro de los corazones y las almas irradian desde lo humilde
y lo interior, desde la fe y no desde el Cordero, cuya actitud es utilizar para vender,
disfrazarse para encubrir.
Mientras tanto seguirán encerradas las almas en el hechizo de la ciudad amurallada,
confundiendo lo eterno con esa realidad de los sentidos. Solo el discernimiento y la
disciplina interna pueden romper el hechizo profundo e internalizado que consiste en fijar
la atención de las almas hacia la mentira, la ilusión, el engaño y la riqueza.
Las piedras preciosas y el resto de la ciudad simbolizan la caja en la cual Satanás
encerró a las almas encarnadas y desencarnadas del planeta Tierra.
En la ciudad no hay templo porque en la trampa no hay Dios. El objetivo del
hechizo es encerrar a las almas en su interior y crear un Dios alejado, extraño e
inalcanzable. Así es como perciben al Padre los hombres en la Tierra.
Ese es el gran triunfo de este hechizo. [Aparece la imagen de esta ciudad descripta,
lujosa, hermosa, con muchas luces, pero con tapa y un candado grande que la priva de toda
luz].
125
387. La ciudad no tiene necesidad de Sol ni de luna que la alumbren, pues la gloria de
Dios le dio su luz y su lumbrera es la del Cordero.
[Al demonio:] La luz es de Dios, bien lo decís, y las almas que están allí no se
sentirán como el Cordero, no se sentirán como tales. Irán solamente cubiertas con el manto
de luz que despertará en ellas y con el que se cubrirán por siempre. Y allí no podrás
alcanzarlas y entonces se disolverán todos los disfraces que vas adoptando.
Satanás intenta hacer olvidar a las almas su conocimiento de la luz verdadera,
porque como explicaba antes, el éxito del conjuro es que la luz del Padre no pueda penetrar,
impedir que esta luz penetre en la ciudad. Sin embargo las almas no olvidan su propia luz y
desean y sufren por unir su luz al Uno, al Padre. Por eso siempre alguien despierta,
reconoce su luz, rompe las barreras y se reencuentra con el Padre.
[La imagen muestra como en ese techo cerrado se van abriendo pequeñas aberturas
por las que irradia la luz.].
Satanás no tiene el poder para hacer olvidar a las almas su verdadera naturaleza,
puede distraer a las mentes, obnubilarlas, pero nunca puede acercarse ni modificar nada que
sea verdadero para las almas y si las ataca se destruye. Por eso el demonio trabaja en el
plano de la mente, de los sentidos, de la ilusión.
388. Las naciones andarán a la luz de ella, y los reyes de la Tierra llevan a ella sus
glorias.
Ya nada de eso puede encandilar, ya nada de las Naciones puede brillar, ya nada de
los que digan de las Naciones, ciudades y construcciones puede deslumbrar.
Solo las almas despertando en su interior hacia Mí podrán brillar. Despertando esa
luz comenzarán a irradiar y las vibraciones densas se irán disolviendo junto con los
disfraces.
Satanás, en su manifestación de rey de la Tierra, es absolutamente impotente para
dañar el alma que auténticamente busca el sendero del Padre.
389. Las puertas nunca se cerrarán de día, ya que noche allí no habrá, y llevarán a
ella las glorias y la honra de las Naciones.
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La honra de las Naciones y su poder, las puertas que se abren, tienen que ver con el
mismo engaño, el mismo poder. Solo entregándose a Mí podrán abrir las puertas de la
libertad. El camino será más corto.
Mi Camino es el único Camino como prediqué con la frase: “Yo soy el Camino, la
Verdad y la Vida”.
El solo concepto de Nación, en sí mismo implica violencia, guerra y conflicto. No
hay Naciones, solo hay Padre.
390. Y no entrará en ella cosa vil, ni quien obra abominación y mentira, sino
solamente los que están escritos en el libro de Vida del Cordero
[A Juan:] Seguiste engañado el camino. Durante siglos la humanidad siguió tus
pasos a través de tus escritos que no eran los que te pedí. Fuiste pactando con el demonio,
con el diablo, y creíste en lo que estabas haciendo, y seguiste engañando a toda la
humanidad. Tu palabra ya no tiene sentido, aunque hayan pasado siglos la Única Verdad es
la de Dios. Y pactaste por no meditar, buscando poder. Lo único que te pedía era que oraras
y meditaras en Mí, sólo de ahí venía lo que debías escribir.
El resultado fue mentira vileza y abominación. Solo en el Padre no existen estas
cosas, existe la luz y la pureza, existe la paz y la felicidad. Todo lo que este libro menciona
al mencionarlo aparece. Bajo tu pluma, Juan, aparece la vileza y la abominación. Pero no
debes castigarte, todo lo hecho en el mundo de la ilusión puede ser desecho en la
Conciencia del Padre, pues en realidad, nada de esto nunca fue, nunca tuvo sustancia, ni la
tiene. Esto sólo podrás entenderlo cuando te realices en la Conciencia de lo que Es.
No temas la realización ¿Qué podría ser peor que el mundo que estás viviendo?
[Juan escucha en silencio]
391. Y me mostró un río de agua de vida, claro como cristal que sale del trono de Dios
y del Cordero.
El río no es más que el pecado mismo, quien bebe de él inevitablemente queda
atrapado.
Este río es la trampa, muestra la vida como un devenir de acontecimientos en una
secuencia temporal como el agua que fluye. La vida del Padre es la quietud.
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392. En medio de la plaza, y a ambos lados del río hay árboles de vida que dan doce
cosechas produciendo frutos cada mes, y las hojas de los árboles sirven para sanidad
de las Naciones.
Las dos orillas demarcan el bien y el mal. Los frutos de esos árboles son las semillas
de los pecados, quien coma de ellos quedará atrapado eternamente.
Los frutos son la trampa otra vez. El deseo avaro de tener doce cosechas, muchas
más de las necesarias. Esto es para acumular las riquezas que hacen poderosas a las
Naciones. No es otro el sentido de estas palabras.
393. Ya no habrá maldición alguna. El trono de Dios y del Cordero estará en ella, y
sus siervos la adorarán y verán su rostro y el Nombre del Él estará en sus frentes.
Las palabras sólo revelan el pacto definitivo porque el trono no es el de mi Padre.
Quien escucha estas palabras entra como en un sueño profundo del que no puede salir. Y
comienza a trabajar como siervo, se convierte en esclavo porque no es el Nombre del Padre
el que lleva escrito en su frente.
El Padre no esclaviza ni nadie se esclaviza a mi Padre. Mi Padre libera. A su lado no
hay frentes, no hay nombres, no hay separación, hay Ser.
394. Y no habrá más noche, ni necesitan luz de lámpara, ni luz de Sol, porque el Señor
Dios lucirá sobre ellos y reinarán por los siglos de los siglos.
No son más que engaños. Donde está el Padre sólo hay Luz y la oscuridad está
reinando desde los siglos de los siglos ¿Cómo puede diferenciar el hombre el día y la
noche, si en el reino del demonio la luz es una ilusión y siempre es de noche? En el Padre
no hay día ni noche.
395. Y me dijo: “Estas palabras son seguras y fieles y el Señor, el Dios de los espíritus
y de los profetas, ha enviado su ángel para mostrar a sus siervos las cosas que han de
verificarse en breve”.
Yo nunca hablé de profecías, siempre hablé de tiempo presente. Quien crea en Mi y
en mi Padre no necesita confirmaciones ni pronósticos de futuro.
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Sin embargo, no se equivoca el demonio con su profecía, todas las vilezas y
maldades que contiene en su libro se materializaron en el futuro.
396. Y mirad que vengo pronto. Bienaventurado el que guarda las palabras de la
profecía de este libro.
Solo está amenazando para seguir inculcando el miedo. Utiliza la palabra
“bienaventurado” que yo pronuncié, pero la palabra no es nada si no pensamos en quien la
dice.
Yo puedo dar la bienaventuranza de la Gracia del Padre, la bienaventuranza en boca
de Satanás tiene un significado muy diferente.
397. Yo Juan, soy el que he oído y visto estas cosas.
Juan es el que quiso oír y ver esas cosas, pero no me las pidió a Mí.
Si bien Juan carga con este karma, no es el único que quiere ver y al ver crea con el
deseo estas cosas terribles o todo lo terrible que hay en el mundo.
Nadie que pide una profecía me la pide a Mí.
Nadie que quiere poder me lo pide a Mí.
Nadie que teme, me teme a Mí.
398. Y cuando las oí y vi me postré a los pies del ángel que me las mostraba para
adorarlo.
Esto solo demuestra el miedo de Juan, y cayó rendido a los pies del demonio,
cuando Yo sólo le pedí que se mantuviera parado frente al Padre.
Y como Juan todos los demás que se postran y adoran al demonio. No es adoración
lo que pide el Padre, ni genuflexión, solo una actitud de entrega y Amor Puro.
399. Mas él me dijo: “Guárdate de hacerlo, porque yo soy consiervo tuyo y de tus
hermanos los profetas y de los que guardan las palabras de este libro. A Dios adora.
Las palabras no hicieron más que confundir a Juan. El demonio le demostró
humildad y el se dejó engañar en todo momento. Yo no pude evitarlo, le faltó fe.
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Está claro que una vez terminado el conjuro, Satanás se ufana diciendo -confundido
Juan, que no entiende lo que pasa- “soy siervo como lo eres tu”, pero en realidad dice “ya
capté sus mentes, somos todos siervos del mal”.
Este mensaje es importante también para aquellas personas que desesperadas buscan
romper el hechizo por el camino equivocado, esto es creer que el Apocalipsis es la Palabra
del Hijo del Padre.
400. Y díjome: “No selles las palabras de la profecía de este libro pues el tiempo está
cerca.
El tiempo es una línea muy fina entre la luz y la oscuridad, y siempre, usando esta
misma palabra, estamos a tiempo para subir o bajar.
Cuando busquen a Dios no lo imaginen lejos, como que nunca lo van a alcanzar,
porque entonces nunca lo van a intentar, ¿para qué hacerlo si nunca lo van a alcanzar? Ese
es el engaño, Dios está ahí y lo pueden alcanzar en el instante en que alcen la mirada.
No existe el tiempo, lo que existe es la luz y la oscuridad. El tiempo es una palabra
que inventó el demonio. No existe el tiempo, solo es saber que Dios está ahí, solo hay que
levantar la vista y fundirse en Él, en su Luz. Por eso el tiempo de destrucción es pensar que
Dios está lejos, que no existe o que falta mucho tiempo para encontrarlo.
Experimenta el estado de meditación en el ahí y en el ahora. Siente la vibración,
siente la Luz y una vez allí en la calma lo encontrarás a Él y serás uno con Él.
401. El inicuo siga en su iniquidad y el sucio ensúciese más. El justo obre con más
justicia y el santo santifíquese más.
Son todos iguales a los ojos de Dios. Todos tienen el mismo camino, saber que Dios
está ahí. Todo hombre es santo, sucio e inicuo. Todos tienen esas figuras, por eso pueden
trascenderlas.
El camino es uno solo, no tienen que apegarse a lo que creen que son. No tienen que
crearse ningún personaje. Si creen que son santos, tienen que dejar de serlo porque el
personaje de santo es un engaño del ego.
Cuando crean que están cerca de Dios desde el exterior es cuando están más
alejados. Alguien que externamente está en la mayor oscuridad, quizás es la persona que
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más a flor tiene la Luz. Los engaños del ego son tan sutiles que pueden llevar al abismo
desde la altura más alta en un segundo.
No desesperen, estén atentos buscando la Luz que está ahí. No puedo entender cómo
no lo hacen.
Den un salto hacia la Luz, eleven la conciencia hacia la Conciencia Suprema y
podrán ser observadores de este gran escenario de tiempos que se derrumban. Son los
mismos huesos, los mismos personajes, los mismos escenarios atrapados en el tiempo
diabólico e ignorante que han creado.
402. He aquí que vengo presto, y mi galardón viene conmigo para recompensar a cada
uno según su obra.
Las obras no son externas sino internas. Se encuentra a Dios o no se lo encuentra.
Muchos hacen obras exteriores de bondad pero con el ego; no hay que hacer obras afuera
sino adentro.
Yo ayudo a todos por igual pero sólo puedo ayudar a quien lo pide. La Luz del
Padre siempre está pero a veces el hombre se tienta con cosas terrenales, demoníacas,
cuando realmente podría lograr su deseo de Luz en poco tiempo.
La obra es interna, de comunicación y búsqueda del Padre y su Luz eterna. El Padre
no juzga por eso no puede dar acuerdo a las obras. Es una palabra muy clara del demonio
porque insta a hacer obras afuera cuando el camino es quedarse quieto. El demonio necesita
la insatisfacción constante que lleva a hacer más porque cuando más se hace más se recibe.
No es Amor que es dar sin esperar nada, eso es lo que hace el Padre: da Amor.
Elevando la conciencia en tu meditación te elevarás al Padre, despertarás la actitud
de Gracia y soltarás el campo ilusorio de los demonios.
403. Yo soy el Alfa y el Omega, el primero y el último, el principio y fin.
Ni hay principio ni hay fin, todo es una Unidad, un Ser Único. En la Unidad no hay
tiempo, no hay inicio ni final, solamente HAY.
Inicio y fin son sucesión de vidas y vidas. Por eso el demonio es el principio y el
fin. Es el inicio, invita a hacer obras, a aumentar el karma. Llega el fin del cuerpo y
nuevamente el demonio es el inicio de una nueva vida.
131
[El Padre aparece como un gran Sol y los rayos que emergen son su manifestación
de Amor]
En cada uno de los símbolos naturales de la creación se encuentra el Padre, es la
misma Esencia, la misma Luz.
Sólo eleva tu conciencia a tu propia Vibración que es el mismo océano de Vibración
del Padre.
404. Dichosos los que lavan sus vestiduras para tener acceso al árbol de la vida y a
entrar en la ciudad por las puertas.
Justamente lo que tienes que evitar es volver a esta vida como vida kármica, esto es,
volver a nacer. Ese es el árbol de la vida a que se refiere.
Busca la Vida Eterna en el Padre, pero tampoco puede llamarse “vida”, hay otra
palabra que es “Eternidad”, pero la comprensión humana es imperfecta porque le da un
sentido temporal. Es una palabra intransmisible. Es como formar parte de algo que no tiene
tiempo, ni límites, que no se puede transcribir, es como volver a casa, a la casa del Padre.
Todas las almas caminan hacia Mí, la vibración será infinita, y esa misma Luz irá
despertando esas almas atrapadas en esos cuerpos y en esas mentes que quedaron
capturadas en el tiempo, que podrán ser soltadas a través de los hijos que despierten hacia
Mí.
405. Fuera los perros, los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras y
todo el que ama y obra mentira.
Nunca pude haber dicho eso. Dios no echaría a nadie porque es todo Amor y toda
Luz.
Camina siempre en la meditación.
Eleva tu propia conciencia a la Voluntad Divina.
406. Yo Jesús envié mi ángel a daros testimonio de esas cosas sobre las Iglesias. Yo soy
la raíz y el linaje de David, la estrella esplendorosa y matutina.
Estas palabras son muy ególatras, dichas desde el ego. Él se presenta como Hijo de
Dios, como luz. Pero mis mensajes no son desde el “yo soy” sino son mensajes del Amor
132
del Padre. Ese “yo soy” suena hasta a amenazador, como queriendo imponer lo
inalcanzable: “yo soy la Luz”
Siénteme dentro tuyo, siente que se despierta tu misma Esencia que es la Única
Esencia, la misma Vibración que eleva tu estado a un único estado. El cuerpo y la mente
son tan solo vehículos para encontrarme y elevarte hacia Mí.
407. Y el Espíritu y la novia dicen: “Ven”. Diga también quien escucha “ven”. Y el que
tenga sed venga, y el que quiere, tome gratis del árbol de la vida.
Es el árbol de las distintas vidas, y de vida tras vida. Hay una sola cosa a alcanzar y
es el Padre. El resto te lleva otra vez a esta rueda, y deseos de esa red que nunca vas a
alcanzar: es el lugar equivocado.
Despierten a la Vida Eterna.
Despierten del espacio.
Despierten del sueño de vida tras vida, de engaños tras engaños.
La palabra despertar es muy profunda, y siempre se puede despertar. La dije muchas
veces pero no saben interpretarla. He hablado reiteradamente que despierten en las
pequeñas cosas, que vean y sientan al Padre en su interior.
No olviden esta plenitud que pueden sentir ahora pero no es nada con lo que
significa estar con el Padre.
Sólo medita en el centro de tu propia Conciencia Crística, realizarás el Amor
Infinito de Jesús.
408. Yo advierto a todo el que oye las Palabras de la profecía de este libro: Si alguien
añade a estas cosas, le añadirá Dios las plagas escritas en este libro.
Un mensaje que provenga de lo divino cerraría con palabras de fe y amor. Este tipo
de aseveraciones son las palabras que marcan en el subconsciente el castigo porque se
piensa en el castigo de Dios.
Es el mismo juego de los demonios el que te hace creer que Dios te castiga, es el
propio estado de ignorancia sumergido en el tiempo que te muestra una realidad
completamente ilusoria.
133
Sólo céntrate en Mi, pues te elevaré hacia el Padre, que también yace dentro tuyo,
aquí y ahora.
409. Y si alguien quita de las palabras de esta profecía, le quitará Dios su parte del
árbol de la vida y de la ciudad santa que están descritos en este libro.
Previendo la posibilidad de esclarecimiento del verdadero significado, trata de
advertir a aquellos que pudieran tener vislumbres de Verdad que se atreviesen a cuestionar
este mensaje frente a las almas que están ciegas a su significado.
Solo encontrarás el camino y no te confundirás, siente la Luz, percibe la Vibración,
percibe el Silencio, percibe la Calma. Ahí estaré, y ya no tendrán fuerzas los demonios, se
irán derrumbando.
410. El que da testimonio de esto dice: “Si vengo pronto. Así sea. Ven señor Jesús. La
Gracia del Señor Jesús sea con todos los Santos, Amen”.
Para consumar toda mentira invoca nuevamente mi Nombre. Pero el demonio no se
da cuenta que al invocar mi Nombre invoca mi energía, por eso no hay oscuridad que pueda
permanecer y esta misma energía va a barrer las sombras y terminar con la oscuridad.
La Luz del alma irá limpiando el camino,
Ese camino hacia la Luz.
La Vibración de Jesús, de los Santos, de los Maestros,
De los Ángeles, se irá despertando
Y todo será un gran Mar de Luz
Donde las almas vibrarán al unísono
Y la Revelación te dirá que podrás unirte
A esa Vibración Divina
Que es el mismo Mar de la Purificación,
Y así podrás soltar lo oscuro del engaño
Y un montón de corazones endurecidos,
También purificados en ese Mar,
Van a ser iluminados por esta Revelación
Y un fluir de Luz llenará el planeta
134
Con el conocimiento de esta Revelación.
PALABRAS FINALES DE JUAN
[Aparece al lado de Jesús]. Velo por ustedes a cada instante experimentando un gran
gozo. Prometo que voy a trabajar junto al maestro para ayudar a la circulación de este
mensaje. Seguiré purificando en otros estados más elevados, sin perder nunca más la
conexión con Jesús.
135
136
JESÚS EXPLICA EL SENTIDO DE LA REVELACIÓN
Durante el transcurso de varios meses se transmitieron los mensajes que dieron
forma a la Revelación transcripta en este texto, ¿cuál es el propósito de la misma?
En esta enseñanza se reveló que el poder del demonio consistió en sembrar en el
plano astral esas semillas que crecieron y se potenciaron durante dos mil años. Así que mi
mensaje quedó reducido a muy pocos, quienes ahora tienen que trabajar arduamente para
que la Verdad sea revelada; pero para que esto sea posible es necesario limpiar el plano
astral de esas semillas de destrucción, sembradas mediante el texto del Apocalipsis.
Este es el único modo, a través de la purificación, que las conciencias que están en
la ignorancia puedan ir descubriendo estas semillas en lo más profundo del inconsciente y
entonces éstas irán perdiendo su potencia hasta desintegrarse. Pero para esto hace falta luz,
mucha luz.
La Verdad es ese plano de Luz que está más allá de esas semillas, pero los hombres
atrapados en la ignorancia están impedidos de verlas, permaneciendo esta creencia que la
realidad es la que se le presenta a los sentidos.
¿A quiénes llegará esta Revelación?
Esta Revelación purifica a todos, y como las verdaderas palabras del Evangelio,
llegará a oídos de quien tenga que llegar, cuando tenga que llegar, a pesar del texto del
Apocalipsis.
¿Qué significado tiene la lectura de esta Revelación?
Aprovechen esta lectura para conectarse conmigo, entonces muchas cosas que
aparecen en el texto van a ser interiorizadas y la limpieza exterior va a transformarse en
interna. Entonces van a poder estar más cerca de mí y del Padre y de este modo vencer el
propio Apocalipsis, entonces verán a sus hermanos con amor y discernimiento, así evitarán
cometer el mismo error de Juan, dar luz a lo demoníaco.
Presten mucha atención en la lectura, traten de captar los mensajes de manera clara,
de no ser interferidos, Yo los voy a ayudar. Sin duda habrá dificultades, pero es una
cuestión de tiempo y perseverancia, estando a mi lado no habrá abismo, siéntanse en mi
Luz, junto con los demás maestros, estoy con ustedes. Cuando lean el texto traten de disipar
137
la oscuridad que pueda aparecer. Llámenme con fe y no habrá obstáculos posibles con mi
presencia guardiana.
El Apocalipsis es un texto ininteligible a la racionalidad de nuestra época.
Es un texto largo, pesado, tedioso, sobrecargado, tiene relatos impresionantes para
los humanos donde el demonio muestra todas sus fieras monstruosas de dominio. Les
aconsejo no mirarlas ni imaginarlas, cierren los ojos cuando lleguen a esas partes y vean un
gran torrente de luz. No teman ni se paralicen por lo que vean sus ojos.
¿Cómo puede verse esta actualización del Apocalipsis?
Este trabajo va a deshacer el malentendido de tantos siglos. Si bien la Palabra Eterna
carece de tiempo y espacio, siempre es necesario actualizarla al lenguaje y a la mentalidad
de los hombres de cada época.
Estas revelaciones se transmiten para que no continúe el engaño del Juicio Final y
los seres humanos no queden sumidos en el miedo al demonio y acepten que el Padre solo
trae gozo, bienaventuranza y Luz de Amor.
¿Qué rol jugó la Iglesia en al difusión de este texto?
El Apocalipsis influyó en la historia de la Iglesia en cuestiones de poder, de
dominio. Encontró en el mismo la clave de acusar para someter y lograr el poder terrenal.
La Iglesia tuvo sus fieles sirvientes que se confundieron por ansias de poder y descubrieron
en este texto el modo de dominio sobre los demás y lo usaron.
El texto fue fragmentado porque era más amplio, en el original la narración se
desvanecía por el desenmascaramiento de Satán, pero esta parte fue mutilada, censurada
por los sirvientes de la Iglesia para manejar el mundo y alejarlos de Mí, falseándome. Yo
soy Uno solo pero al falsearme, aparecen muchos, el demonio tiene mil vestiduras.
Ahora, a través de esta Revelación pueden comenzar a ver, no pierdan la
oportunidad, a través de la salvación de cada uno pueden ayudar a la salvación de los otros,
porque el alma que comprenda tiene la obligación de iluminar el camino. El Padre los
espera, siempre los espera por los siglos de los siglos. Él siempre los está bendiciendo pero
no lo perciben. Si abren el corazón, van a sentir que los ama, los ama profundamente.
¿Cuál es la situación de Juan en este momento?
Juan pidió esclarecer el Apocalipsis y está muy contento con este trabajo. Sentía
Juan que tenía algo pendiente y recibe este trabajo con gran alegría y gozo. Ahora esta más
138
tranquilo, porque se está terminando la historia del libro. Pasó mucho tiempo, pero él sabía
que se iba a hacer en algún momento.
JUAN, INVOCADO A TRAVÉS DE JESÚS, RELATA SU EXPERIENCIA
Cuando estaba rendido a sus pies venerándolo, oí una voz interna que me advertía la
falsedad del interlocutor. Era el maestro que me decía que limpie mis ojos, que limpie la
pantalla para poder ver la esencia de quien me hablaba. Entonces pude ver la profunda
oscuridad a través de una apariencia de beatitud, y un gran cambio se operó en mí, al
advertir esto. Comprendí las contradicciones del relato porque Jesús cuando habla no
atemoriza, y si bien fue duro con las fuerzas oscuras, su mensaje es de salvación y de amor
y no de temor. Sentí un vacío muy grande, una gran parálisis al darme cuenta que había
estado venerando al demonio, pero rápidamente pude dirigir la mirada hacia el Padre y
elevarme por encima del engaño.
¿Por qué el demonio recurre a este artilugio?
Las palabras de Jesús tienen un gran poder vibratorio y el demonio, al no poseer
poder propio, toma las palabras de Cristo, para así poder lograr la fascinación de las almas,
llegando enmascarado. Al desenmascararlo y confrontarme con la Verdad se hizo evidente
la falsedad de esta apariencia divina.
¿Durante cuánto tiempo se encontró poseso por esta manifestación demoníaca?
En el estado en que me encontraba no se puede hablar de un tiempo como se lo
entiende en la conciencia común, pero lo importante es entender que la fascinación llega
hasta el día de hoy, y que va a durar hasta el momento en que cada uno pueda descubrirla.
¿No ven el enmascaramiento en el plano en que viven, donde un montón de
situaciones aparecen como portadoras de verdadera felicidad? ¿No ven ese mismo
enmascaramiento del Apocalipsis en la vida cotidiana?
En este texto también está la clave de la liberación si pueden observar que todo lo
que los rodea es la fuerza oscura que está investida de la apariencia de gozo y felicidad, y
se dan cuenta que solo saliendo de ese plano pueden tener una existencia real.
Esto que les transmito fue la última parte del texto que escribí, que los sirvientes de
la Iglesia mutilaron pactando con el demonio el poder sobre los hombres, esa fue la causa
139
de gran poder que tuvo y la posibilidad de demonio de operar en la conciencia de sus
líderes, que fueron modificando el escrito a favor de las fuerzas oscuras.
HABLA JESÚS CONCLUYENDO LA REVELACIÓN
Juan reduce a la Nada al demonio a través de su conexión con Él, liberando de este
modo la pantalla mental que lo conducía al engaño, pero el demonio sigue existiendo en
cada uno de los que creen en su existencia.
¿De la misma manera que Juan, si nos conectamos con Él podemos reducirlo a la Nada?
Este es el mensaje de la última parte del Apocalipsis.
¿La opción es Jesús o el demonio?
Aquellos que lo elijan a Él van a tener conciencia de la esencia, y quienes elijan a
las fuerzas oscuras van a tener la posibilidad de elegirlo a Él dentro de algún tiempo. La luz
es la Única Realidad, depende de lo masoquista que sea cada uno, en querer estar alejado de
su esencia.
140
LOS MAESTROS COMENTAN LA REVELACIÓN
La experiencia del Apocalipsis es muy útil para descubrir las estrategias del
demonio y poder verlo actuando en las situaciones de la vida cotidiana.
Estos mensajes están siendo revelados en varios lugares en forma simultánea y en
poco tiempo más van a empezar a comprobar los cambios que se producirán a raíz de su
difusión.
Las experiencias con el demonio todos las debemos pasar. Cuando deban afrontarla,
cuenten con nuestra ayuda, y no tengan nada que temer.
Pueden ver como la luz es mucha más poderosa que la oscuridad, por eso – aun
morando en la oscuridad – una pequeña invocación puede salvarlos.
(YOGANANDA)
Todos nosotros tuvimos que pasar por una experiencia similar, y en algunos llevó
mucho tiempo trascenderla. Ahora por el proceso de purificación, es más fácil superarla. La
aparición de Satanás en forma consciente es una gran Revelación.
Esta Revelación trae a la conciencia parte de la experiencia que se está llevando a
cabo y permanece oculta a la mayoría de los hombres, y que en el plano astral es mucho
más grande de lo que pueden comprender.
(VIVEKANANDA)
No te sorprendas demasiado porque fuiste tu quien lo alojaste en tu interior ¿quieres
seguir dándole asilo a la fuerza oscura o quieres alojar la Luz? La decisión es tuya.
El demonio está perdiendo fuerza y lo sabe. Va a intentar asustarte, pero debes tener
siempre presenta la irrealidad de este plano
(AUROBINDO)
141
Ten una enorme decisión para erradicar al demonio. Está muy cómodo y desde hace
mucho tiempo, pero hazle saber que tu alma pertenece al Padre y la tendrá que abandonar.
Los maestros venimos trabajando en la purificación del plano astral desde hace
mucho tiempo, y este es un momento especial, próximo a la ruptura, y cuando ésta se
produzca, la fuerza oscura deberá abandonar al hombre.
(CHIDANANDA)
Antes ni siquiera sabías que la fuerza oscura existía, ahora la puedes ver, el próximo
paso será erradicarla.
Esta experiencia es una declaración de los derechos del hombre como hijo de Dios,
al no reconocer la potestad de las fuerzas oscuras.
(SIVANANDA)
El tuyo es un problema de visión, ¿cómo puede algo Real temer algo irreal? Cuando
cambie tu capacidad de ver, verás la inexistencia de la fuerza oscura.
¡Hijo despierta de la ilusión! ¡Abre los ojos a tu verdadera existencia!
No debes descuidarte porque después de la Revelación, en una primera etapa,
vendrá el contraataque. No es nada grave si mantienes el contacto.
(RAMANA MAHARSHI)
Es todo un problema vibratorio. Al tener pensamientos groseros, percibes lo que
vibra como algo real. Al purificar, desde otra vibración, lo verás como irreal.
¡Medita para purificar tu pensamiento!
Esta experiencia todos deben pasarla, algunos pueden atravesarla, otros quedan
atrapados en ella.
Me preguntarn sobre la interpretación del Apocalipsis que hice en La Ciencia
Sagrada. Fue la traducción realizada desde el plano luminoso, que la conciencia común
está imposibilitada de comprender.
142
El demonio lo manifestó desde el plano de la oscuridad contaminando el sentido
real. Esto quiere decir que el relato traduce arquetipos, y el demonio lo hace en signos
contrarios.
Solo una conciencia iluminada podrá verlo en su significado divino, descubriendo lo
opuesto y de este modo la oscuridad. Así la primera fase es desmistificar lo oscuro, y la
segunda llegar a la verdadera interpretación. Entonces ocurrirá una gran purificación.
(YUKTESWAR)
Pide la luz de los maestros en tu entrega. Entonces observa la fuerza oscura a través
de sus ojos y observarás solo una oscuridad en movimiento. No hay nada real en esa fuerza,
es tan real como creas que lo es. Piensa que no es real y elévate.
La experiencia marca el pasaje del plano físico al plano astral, en el cual ya se puede
empezar a operar conscientemente. Va a ser necesaria la ayuda de los planos astrales
superiores, de los maestros solares y de los maestros galácticos.
(LAHIRI MAHASAYA)
Estás en un punto decisivo en el cual deberías desprenderte de esta oscuridad para
poder a empezar a elevarte.
Jesús eligió a grupos de distintos lugares del planeta para revelar la verdad del
Apocalipsis y tiene que ver con el desenmascaramiento de la fuerza oscura a nivel
planetario.
(BABAJI)
Debes meditar para elevar la energía y así desaparecerá la fuerza oscura.
Esta experiencia marca la hegemonía de la luz sobre la oscuridad y presenta una
pequeña vivencia acerca del gozo eterno.
(MATAJI)
143
Todo el proceso de mi calvario representa la lucha interna para erradicar el ego. No
creas que eso es mucho más trágico que la batalla que te toca librar a nivel mental porque la
mente tiene formas muy sutiles.
Tienes que estar alerta, el Padre te quiere ver cerca de Él, sólo quiere ver cuánto
tiempo eres capáz de entretenerte lejos de su presencia.
Debes concentrar el fuego en los niveles más profundos de la conciencia para
librarte de la presencia de Satán. Para eso está nuestra ayuda.
La comprensión de este texto te ayudará a aliviar la carga oscura que te vincula con
el demonio y a tener una relación más directa, con menos interferencias, conmigo.
¡Ojalá los hombres pudieran ver el calvario y las experiencias por las que tuve que
pasar y se dieran cuenta de que todos tienen las mismas posibilidades de liberarse!
El significado de esta experiencia es que despiertes y, unido a Mi, realices al Padre.
(JESUS)
Soy todo lo existente ¿cómo podría existir algo que no sea Buda? Si fueras Buda no
estarías preocupado. Por lo tanto esfuérzate en ser Buda, o Cristo, o Yogananda. Esfuérzate
en ser Dios.
Esta experiencia marca la búsqueda del equilibrio del centro, aquella búsqueda que
realicé viviendo en ambos extremos. Hoy les es posible equilibrar las fuerzas de la luz y de
la oscuridad para trascender el plano de la dualidad.
(BUDA)
Era hora en que un libro, el Apocalipsis, escrito hace tanto tiempo y tan mal
interpretado, fuese revelado en su significado real.
Sin llegar a la experiencia extrema, como la que tuvo que vivir Juan, se puede
perdonar y ser perdonado.
Yukteswar hace la interpretación del Apocalipsis desde su estado de lo esencial,
pero el demonio se reviste de la apariencia de Dios y ésta Revelación consiste en
desenmascararlo.
144
(MILAREPA)
Cuando fundé mi orden, el objetivo era hacer un trabajo interno que permitiera
desenmascarar la fuerza oscura y liberarse de ella. Estoy regocijado de que esto ocurra
ahora con el Apocalipsis.
Manténte disciplinado y siempre alerta, tratando de comulgar con los maestros todo
el tiempo que sea posible, entonces siéntete como una mariposa, y no te envanezcas viendo
la fragilidad y lo pasajero de tu estadía en este plano. Así el demonio será vencido.
(SANKARACHARYA)
Permíteme cortarte los lazos con la fuerza oscura. Ya es tiempo de cortarlos y dejar
de regocijarte con la oscuridad y participar de la energía de los maestros.
En esta experiencia del Apocalipsis se exterioriza un proceso de maduración.
(KRISHNA)
Al comprender el sentido profundo del Apocalipsis lograrás esa experiencia de lo
Real, a la que no acceden muchas personas que pasan toda la vida meditando, y aun quienes
oran durante mucho tiempo. No te desvíes y mantente siempre en un proceso ascendente.
Busca dentro de tu corazón, es allí donde se encuentra la puerta de acceso a la
energía de los maestros, y entonces no tendrás nada que temer.
(RAMAKRISHNA)
Ahora comprendes que das asilo al demonio que está muy cómodamente instalado y
esto te permite reconocerlo, entonces teme que no quieras alojarlo. Debes arrojarlo bien
lejos, investirte con el escudo de la protección de los maestros, y seguir tu camino.
Esta Revelación es la materialización del trabajo interno que se está llevando a cabo
en conjunción con los maestros de todas las religiones.
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Es parte del proceso, aquellas almas que quieran ser salvadas tienen que abandonar
la fuerza oscura. Las que no puedan abandonarla, van a quedar atrapadas. La única forma
de liberación, en el proceso de purificación, es el abandono de la oscuridad.
(HAYDÉE)
Si moraras en mi Amor, no hay fuerza oscura que pudiera tocarte ¡Qué paradoja! El
hombre dice que todo lo que busca es amor y yo lo ofrezco gratuitamente y muy pocos
quieren recibirlo. La búsqueda del amor es un gran engaño porque el hombre quiere
buscarlo en este plano, y el demonio tiene el dominio de todas las relaciones.
Están observando uno de los pequeños juegos del Padre, pero el Padre ya no quiere
que se entretengan con su juego, sino que salgan y vayan a buscarlo a Él.
(MADRE DIVINA)
[Un gran campo sembrado, todo el sembradío está a un mismo nivel, ancho al
comienzo angostándose luego hasta llegar a un punto. Se observa iluminado en la parte
superior y oscuro en la inferior, pero a medida que empieza a operar el proceso de
transformación se invierten las imágenes, oscureciéndose la superficie e iluminándose la
parte subterránea. El proceso continúa hasta avanzar hacia el punto final donde todo
desaparece].
La luz del conocimiento al principio es reflejante pero no penetrante. El
proceso avanza cambiando su polaridad, haciéndose invisible pero penetrante.
Cuando iluminó en su totalidad, el fruto, por un proceso de purificación desaparece.
La realidad es que nunca estuvo, y el hecho de desaparecer es porque la ilusión
terminó y aparece la Real Existencia.
(EL PADRE)