CLASIFICACIÓN DE LAS HERIDASCIRUGÍA DE LA PIEL
62
CLASIFICACIÓN DE LAS HERIDAS HERIDAS CUTÁNEAS
63
La frecuencia de infección no debe pasar de un rango
de 2%.
Son el 75% de todas las heridas que se realizan en
cirugías de tipo electivo, sin tendencia a infectarse, por lo
que se utiliza el cierre primario para su reparación (fig. 2).
Heridas limpias contaminadasEn estas heridas existe contacto con la flora habitual
normal de los tractos respiratorio, digestivo, genital y
urinario (fig. 3).
Heridas contaminadasSon heridas abiertas, frescas y accidentales, en las que
han pasado más de seis horas desde su formación, en
las cuales se encuentran signos de inflamación aguda
no purulenta. Se deben incluir en esta categoría las he-
ridas que comprometan el tracto respiratorio, digestivo,
genital o urinario. El rango esperado de infección para
este tipo de heridas puede oscilar entre un 10 y 20%
(fig. 4).
Clasificación de las heridas
Existen muchas clasificaciones de las heridas, depen-
diendo del origen, dirección, forma, lesión de los tejidos,
futura cicatrización, contaminación, etc. A continuación
vamos a presentar diversas clasificaciones (tablas 1 y 2).
Según la contaminación microbiana
Heridas limpiasSon heridas no infectadas en las que no existe inflama-
ción y que no penetran en el tracto respiratorio, digesti-
vo, genital o urinario.
Han ocurrido en un tiempo menor a seis horas y pre-
sentan una incisión bastante limpia, por ejemplo, con un
cuchillo, un cristal, etc. (fig. 1).
Dirección Profundidad Forma Mecanismo
Transversas Arañazo Lineal Punzante
Oblicuas Herida superficial Angulosa Incisa
Longitudinales
Herida profunda Irregular
Arrancamiento
EspiroideasMordedura
Disparo
Tabla 1. Características de las heridas según el nivel y duración de la contaminación.
Tabla 2. Clasificación de las heridas según las características de su etiología.
Clasificación Grado de contaminación Duración de la contaminación Comentarios
Limpia Mínimo 0-6 horasHeridas quirúrgicas asépticas, sin invasión
de sistemas orgánicos
Limpia-contaminada Mínimo 0-6 horasHeridas quirúrgicas de sistemas orgánicos
contaminados
Contaminada Significativo 6-12 horasHeridas traumáticas abiertas
Heridas quirúrgicas sin asepsia
Sucias-infectadas Grande + 12 horas
Heridas traumáticas crónicas
Heridas infectadas
Vísceras perforadas
Figura 1. Herida limpia en la almohadilla digital del carpo en un perro.
Figura 2. Herida quirúrgica limpia.
Figura 4. Herida contaminada de la región perineal ventral con una evolución de 48 horas.
Figura 3. Herida limpia contaminada del paladar blando (a) y herida limpia pro-ducida por un anzuelo en la comisura labial (b).
Figura 3a
Figura 3b
CLASIFICACIÓN DE LAS HERIDASCIRUGÍA DE LA PIEL
62
CLASIFICACIÓN DE LAS HERIDAS HERIDAS CUTÁNEAS
63
La frecuencia de infección no debe pasar de un rango
de 2%.
Son el 75% de todas las heridas que se realizan en
cirugías de tipo electivo, sin tendencia a infectarse, por lo
que se utiliza el cierre primario para su reparación (fig. 2).
Heridas limpias contaminadasEn estas heridas existe contacto con la flora habitual
normal de los tractos respiratorio, digestivo, genital y
urinario (fig. 3).
Heridas contaminadasSon heridas abiertas, frescas y accidentales, en las que
han pasado más de seis horas desde su formación, en
las cuales se encuentran signos de inflamación aguda
no purulenta. Se deben incluir en esta categoría las he-
ridas que comprometan el tracto respiratorio, digestivo,
genital o urinario. El rango esperado de infección para
este tipo de heridas puede oscilar entre un 10 y 20%
(fig. 4).
Clasificación de las heridas
Existen muchas clasificaciones de las heridas, depen-
diendo del origen, dirección, forma, lesión de los tejidos,
futura cicatrización, contaminación, etc. A continuación
vamos a presentar diversas clasificaciones (tablas 1 y 2).
Según la contaminación microbiana
Heridas limpiasSon heridas no infectadas en las que no existe inflama-
ción y que no penetran en el tracto respiratorio, digesti-
vo, genital o urinario.
Han ocurrido en un tiempo menor a seis horas y pre-
sentan una incisión bastante limpia, por ejemplo, con un
cuchillo, un cristal, etc. (fig. 1).
Dirección Profundidad Forma Mecanismo
Transversas Arañazo Lineal Punzante
Oblicuas Herida superficial Angulosa Incisa
Longitudinales
Herida profunda Irregular
Arrancamiento
EspiroideasMordedura
Disparo
Tabla 1. Características de las heridas según el nivel y duración de la contaminación.
Tabla 2. Clasificación de las heridas según las características de su etiología.
Clasificación Grado de contaminación Duración de la contaminación Comentarios
Limpia Mínimo 0-6 horasHeridas quirúrgicas asépticas, sin invasión
de sistemas orgánicos
Limpia-contaminada Mínimo 0-6 horasHeridas quirúrgicas de sistemas orgánicos
contaminados
Contaminada Significativo 6-12 horasHeridas traumáticas abiertas
Heridas quirúrgicas sin asepsia
Sucias-infectadas Grande + 12 horas
Heridas traumáticas crónicas
Heridas infectadas
Vísceras perforadas
Figura 1. Herida limpia en la almohadilla digital del carpo en un perro.
Figura 2. Herida quirúrgica limpia.
Figura 4. Herida contaminada de la región perineal ventral con una evolución de 48 horas.
Figura 3. Herida limpia contaminada del paladar blando (a) y herida limpia pro-ducida por un anzuelo en la comisura labial (b).
Figura 3a
Figura 3b
CIRUGÍA DE LA PIEL COLGAJOS AXIALES
168
COLGAJOS AXIALES COLGAJOS CUTÁNEOS
169
Figura 64. Patrón axial braquial superficial.
Figuras 65-68. Resolución de un defecto producido por exéresis mediante un colgajo dependiente de la arteria braquial superficial.
■ El colgajo de la arteria epigástrica caudal superfi cial
incluye la tercera y cuarta glándulas mamarias y está
irrigado por la arteria epigástrica caudal superfi cial y la
rama de la arteria pudenda (fi g. 69). Se emplea en la re-
Figura 69. Patrón axial epigástrica caudal superficial.
■ Los colgajos dependientes de la arteria braquial su-
perfi cial son apropiados para la reparación de defec-
tos en antebrazo y codo. Esta pequeña arteria surge
de la braquial, unos centímetros por encima de la ar-
ticulación del codo en su región anterior y cubre toda
la región humeral hasta por debajo de la tuberosidad
mayor del húmero (fi gs. 64-68).
paración de defectos localizados en abdomen caudal,
fl anco, prepucio, perineo, muslo y miembro posterior,
que en el perro alcanza la tibia y en el gato puede llegar
hasta el metatarso (fi guras 70-76).
Arteria braquial superfi cialArteria epigástrica superfi cial caudal
En el macho, la incisión debe respetar la base del prepucio en la vascularización
Colgajo modelo axial(epigástrico superfi cial
caudal)
CIRUGÍA DE LA PIEL COLGAJOS AXIALES
168
COLGAJOS AXIALES COLGAJOS CUTÁNEOS
169
Figura 64. Patrón axial braquial superficial.
Figuras 65-68. Resolución de un defecto producido por exéresis mediante un colgajo dependiente de la arteria braquial superficial.
■ El colgajo de la arteria epigástrica caudal superfi cial
incluye la tercera y cuarta glándulas mamarias y está
irrigado por la arteria epigástrica caudal superfi cial y la
rama de la arteria pudenda (fi g. 69). Se emplea en la re-
Figura 69. Patrón axial epigástrica caudal superficial.
■ Los colgajos dependientes de la arteria braquial su-
perfi cial son apropiados para la reparación de defec-
tos en antebrazo y codo. Esta pequeña arteria surge
de la braquial, unos centímetros por encima de la ar-
ticulación del codo en su región anterior y cubre toda
la región humeral hasta por debajo de la tuberosidad
mayor del húmero (fi gs. 64-68).
paración de defectos localizados en abdomen caudal,
fl anco, prepucio, perineo, muslo y miembro posterior,
que en el perro alcanza la tibia y en el gato puede llegar
hasta el metatarso (fi guras 70-76).
Arteria braquial superfi cialArteria epigástrica superfi cial caudal
En el macho, la incisión debe respetar la base del prepucio en la vascularización
Colgajo modelo axial(epigástrico superfi cial
caudal)
PÉRDIDA CUTÁNEA POR QUEMADURA PÉRDIDA CUTÁNEA POR QUEMADURACIRUGÍA DE LA PIEL
200 201
CASOS CLÍNICOS
Exploración generalA la exploración el animal muestra una actitud en alerta,
aunque muestra indicios de deshidratación (pellizco
cutáneo) y mucosas pálidas. La frecuencia cardiaca es
de 180 ppm, y la temperatura de 39,3 ºC. La ausculta-
ción es normal.
Como se puede observar en las figuras 1 y 2, existe
un gran defecto cutáneo que se inicia centralmente en
la región esternal y línea media abdominal y se proyecta
hacia la línea media dorsal, manteniendo casi la misma
anchura en toda la lesión, para estrecharse ligeramente
sobrepasada la citada línea media dorsal.
PreoperatorioDado que el manejo del paciente es complejo y doloro-
so se considera necesario realizar una anestesia para
terminar el procedimiento. Se clasifica como ASA II. Se
administra medetomidina 0,1 ml y ketamina 100, 0,1 ml
por vía IM. La inducción y mantenimiento anestésicos
se realizaron con propofol vía endovenosa y se mantuvo
oxigenado con un circuito T de Ayre.
En esta primera cura se realiza un desbridamiento de
todo el tejido claramente inviable y se recubre el defecto
con extracto de centella asiática en pomada y con un
apósito que se cambiará cada 24 horas.
Como es típico de los grandes quemados, los datos
analíticos son malos; los más destacables son un hema-
tocrito del 15% y una hipoproteinemia de 2,5 g/dl, por lo
cual se prescribió una dieta hiperproteica e hipercalórica
y como cobertura antibiótica se administró penicilina-
estreptomicina a dosis de 106 UI vía IM, durante 8 días.
Al no surgir complicaciones y dado que el animal
precisaba de una preparación adecuada para una po-
sible cirugía, las curas se mantuvieron durante 20 días
durante los cuales se observó el crecimiento de un tejido
de granulación de aspecto saludable, con ausencia de
infección, y un descenso progresivo de la superficie de
la herida debido a la contracción secundaria (figs. 3 y 4).
Tratamiento de la pérdida cutánea por quemadura producida por el motor de un coche
Se presenta en nuestra consulta un animal de la especie felina, macho de 9 meses de edad, que presenta un gran déficit cutáneo situado en la región dorsal, lateral y abdominal derecha, producido por el motor de un coche hace 15 días. No ha recibido tratamiento anterior ya que no pensaban los propietarios que el problema era tan grave, y se han asustado mucho al despegarse la escara.
Figura 1. Aspecto inicial de la lesión (vista abdominal).
Figura 2. Aspecto inicial de la lesión (vista dorsal).
Figuras 3 y 4. Evolución a los 20 días de instaurarse el tratamiento conservador. Obsérvese la reducción de la herida, así como la existencia de un buen tejido de granulación.
Cuando se produjo el cese de la contracción y comenzó
un proceso de epitelización en los márgenes, se planificó
la cirugía reconstructiva.
Intervención: plastia triangular y colgajo de avance monopediculadoPara la resolución plástica, consideramos el defecto
como la unión de dos defectos de tipo geométrico. La
cara lateral del flanco lo consideramos como un defecto
triangular y la zona dorsal como un defecto cuadrangu-
lar. Este hecho nos permitió mover las zonas adyacentes
de forma que se aprovecharan mejor sus posibilidades
elásticas. El esquema muestra los defectos imaginarios
y su solución de forma individual (fig. 5).
Figura 5. Esquema de los defectos imaginarios y su resolución de forma indi-vidualizada.
PÉRDIDA CUTÁNEA POR QUEMADURA PÉRDIDA CUTÁNEA POR QUEMADURACIRUGÍA DE LA PIEL
200 201
CASOS CLÍNICOS
Exploración generalA la exploración el animal muestra una actitud en alerta,
aunque muestra indicios de deshidratación (pellizco
cutáneo) y mucosas pálidas. La frecuencia cardiaca es
de 180 ppm, y la temperatura de 39,3 ºC. La ausculta-
ción es normal.
Como se puede observar en las figuras 1 y 2, existe
un gran defecto cutáneo que se inicia centralmente en
la región esternal y línea media abdominal y se proyecta
hacia la línea media dorsal, manteniendo casi la misma
anchura en toda la lesión, para estrecharse ligeramente
sobrepasada la citada línea media dorsal.
PreoperatorioDado que el manejo del paciente es complejo y doloro-
so se considera necesario realizar una anestesia para
terminar el procedimiento. Se clasifica como ASA II. Se
administra medetomidina 0,1 ml y ketamina 100, 0,1 ml
por vía IM. La inducción y mantenimiento anestésicos
se realizaron con propofol vía endovenosa y se mantuvo
oxigenado con un circuito T de Ayre.
En esta primera cura se realiza un desbridamiento de
todo el tejido claramente inviable y se recubre el defecto
con extracto de centella asiática en pomada y con un
apósito que se cambiará cada 24 horas.
Como es típico de los grandes quemados, los datos
analíticos son malos; los más destacables son un hema-
tocrito del 15% y una hipoproteinemia de 2,5 g/dl, por lo
cual se prescribió una dieta hiperproteica e hipercalórica
y como cobertura antibiótica se administró penicilina-
estreptomicina a dosis de 106 UI vía IM, durante 8 días.
Al no surgir complicaciones y dado que el animal
precisaba de una preparación adecuada para una po-
sible cirugía, las curas se mantuvieron durante 20 días
durante los cuales se observó el crecimiento de un tejido
de granulación de aspecto saludable, con ausencia de
infección, y un descenso progresivo de la superficie de
la herida debido a la contracción secundaria (figs. 3 y 4).
Tratamiento de la pérdida cutánea por quemadura producida por el motor de un coche
Se presenta en nuestra consulta un animal de la especie felina, macho de 9 meses de edad, que presenta un gran déficit cutáneo situado en la región dorsal, lateral y abdominal derecha, producido por el motor de un coche hace 15 días. No ha recibido tratamiento anterior ya que no pensaban los propietarios que el problema era tan grave, y se han asustado mucho al despegarse la escara.
Figura 1. Aspecto inicial de la lesión (vista abdominal).
Figura 2. Aspecto inicial de la lesión (vista dorsal).
Figuras 3 y 4. Evolución a los 20 días de instaurarse el tratamiento conservador. Obsérvese la reducción de la herida, así como la existencia de un buen tejido de granulación.
Cuando se produjo el cese de la contracción y comenzó
un proceso de epitelización en los márgenes, se planificó
la cirugía reconstructiva.
Intervención: plastia triangular y colgajo de avance monopediculadoPara la resolución plástica, consideramos el defecto
como la unión de dos defectos de tipo geométrico. La
cara lateral del flanco lo consideramos como un defecto
triangular y la zona dorsal como un defecto cuadrangu-
lar. Este hecho nos permitió mover las zonas adyacentes
de forma que se aprovecharan mejor sus posibilidades
elásticas. El esquema muestra los defectos imaginarios
y su solución de forma individual (fig. 5).
Figura 5. Esquema de los defectos imaginarios y su resolución de forma indi-vidualizada.
HERIDA POR QUEMADURA POSQUIRÚRGICA HERIDA POR QUEMADURA POSQUIRÚRGICACIRUGÍA DE LA PIEL
230
CASOS CLÍNICOS
231
Es, pues, un aspecto muy importante a considerar en el
control hospitalario.
Por lo demás, la herida respondió muy bien al trata-
miento conservador y la evolución de la misma fue la que
marcó el momento de realizar la plastia cutánea (dos
curas consecutivas sin evolución positiva o involución).
ConclusiónLo interesante de este caso es el origen del problema
cutáneo. Un manejo inadecuado puede acarrear com-
plicaciones graves como ha ocurrido en esta ocasión.
La presencia de la quemadura puede ser explicada por
la salida de exudado a través de la herida quirúrgica de
la hernia diafragmática, pero sin duda puede haberse
empeorado por la aplicación de fuentes de calor direc-
tas en periodos de inconsciencia o semiinconsciencia
(posoperatorio inmediato, por ejemplo). Temperaturas
de 45 ºC pueden causar daños cutáneos graves con
periodos de exposición muy breves (pocos minutos).
Después de 45 días de tratamiento, toda la
porción caudal ha cerrado y la craneal se ha redu-
cido considerablemente (fig. 6). El paciente se en-
cuentra totalmente recuperado de las patologías
anteriores y observamos la ausencia de evolución
tras dos curas consecutivas (con 48 horas de se-
paración) por lo que se decide planificar la cirugía
plástica (figs. 7-9).
Figura 6. Evolución de la herida tras 45 días de tratamiento.
Intervención: plastia en H
Figura 7. Imagen de la intervención en la que se realizó una plastia en H para el cierre definitivo de la herida.
Figura 8. Imagen posoperatoria inmediata.
Figura 9. Aspecto del animal tras la retirada de puntos cutáneos a los 10 días de la intervención.
▲
HERIDA POR QUEMADURA POSQUIRÚRGICA HERIDA POR QUEMADURA POSQUIRÚRGICACIRUGÍA DE LA PIEL
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CASOS CLÍNICOS
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Es, pues, un aspecto muy importante a considerar en el
control hospitalario.
Por lo demás, la herida respondió muy bien al trata-
miento conservador y la evolución de la misma fue la que
marcó el momento de realizar la plastia cutánea (dos
curas consecutivas sin evolución positiva o involución).
ConclusiónLo interesante de este caso es el origen del problema
cutáneo. Un manejo inadecuado puede acarrear com-
plicaciones graves como ha ocurrido en esta ocasión.
La presencia de la quemadura puede ser explicada por
la salida de exudado a través de la herida quirúrgica de
la hernia diafragmática, pero sin duda puede haberse
empeorado por la aplicación de fuentes de calor direc-
tas en periodos de inconsciencia o semiinconsciencia
(posoperatorio inmediato, por ejemplo). Temperaturas
de 45 ºC pueden causar daños cutáneos graves con
periodos de exposición muy breves (pocos minutos).
Después de 45 días de tratamiento, toda la
porción caudal ha cerrado y la craneal se ha redu-
cido considerablemente (fig. 6). El paciente se en-
cuentra totalmente recuperado de las patologías
anteriores y observamos la ausencia de evolución
tras dos curas consecutivas (con 48 horas de se-
paración) por lo que se decide planificar la cirugía
plástica (figs. 7-9).
Figura 6. Evolución de la herida tras 45 días de tratamiento.
Intervención: plastia en H
Figura 7. Imagen de la intervención en la que se realizó una plastia en H para el cierre definitivo de la herida.
Figura 8. Imagen posoperatoria inmediata.
Figura 9. Aspecto del animal tras la retirada de puntos cutáneos a los 10 días de la intervención.
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