Lecturas del día: Mateo 21:1–11; Isaías 50:4 –7; Salmo 22:8 – 9, 17–18, 19 – 20, 23 – 24; Filipenses 2:6 –11; Mateo 26:14 — 27:66. Comenzamos nuestra solemne conmemora-ción de los eventos que nos reconcilian con Dios, y nos lle-van al corazón de nuestra fe: “Cristo ha muerto, Cristo ha resucitado, Cristo vendrá de nuevo”. Al leer las Escrituras conmemoramos la entrada de Cristo a Jerusalén, su pasión y su muerte. En la liturgia de la Eucaristía miramos a la resu-rrección. Toda esta semana es una jornada en el misterio pascual: la muerte y resurrección de Cristo. Hoy, nuestros hosannas resuenan en lo alto y agitamos nuestras palmas proclamando: ¡Jesucristo es Señor para gloria de Dios Padre!

Todo en la liturgia de hoy nos sintoniza espiritualmente para el Triduo: la bendición de las palmas con agua bendita, la procesión, los vítores del pueblo, Jesús crucificado orando con el Salmo 22: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?”, y la cruz. Nos levantamos y sentamos, nos arrodillamos y nos inclinamos para celebrar el gran Triduo pascual. Todo esto nos impulsa a abrazar la pasión como un acontecimiento de sufrimiento generador de vida. La segunda lectura nos recuerda cómo el sufrimiento puede llevarnos a compartir en la gloria de Dios y así la Iglesia proclama: “¡Jesucristo es Señor!” Al iniciar la Semana Santa, recuerde alguna ocasión en la que usted se sintió traicionado o cuando su fe tambaleó. ¡Abrace esa cruz esta semana!

Domingo, 13 de abril de 2014Jornada a la cruz

Domingo de RamosPor el agua y la palabra a la cruzPor el agua y la palabra de la cruz,Padre de todos los pueblos y naciones, caminamos, de nuevo, en procesión.Sosteniendo nuestras palmas, cantamos hosannas, pasamos por la fuente bautismal, y meditamos la pasión y muerte

del Hijo amado. Dale a tu pueblo lengua santa, que dé al abatido una palabra

que lo levante. Ayúdanos a abrazar al marginado

y al que sufre.Condúcenos a actuar con justicia,

misericordia y compasión. Al entrar en este tiempo santo, ayúdanos a tomar la cruz y a caminar el sendero de la pascua, proclamando que Jesucristo es Señor para

gloria del Padre. Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo,

tu Hijo,que vive y reina contigo en la unidad del

Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.

Recursos reproducibles para Cuaresma-Triduo Pascual-Pascua 2014

Reproducibles para Cuaresma, Triduo y Pascua 2014. © Liturgy Training Publications. 1-800-933-1800. Texto bíblico conforme a La biblia de nuestro pueblo, ed. Mensajero-PBF, con el debido permiso. Comentarios de Michael R. Prendergast. Ilustración de James B. Janknegt. Derechos reservados. Permiso canónico de publicación: Arquidiócesis de Chicago el 24 de Octubre de 2013.

Esta semana en casaLunes, 14 de abrilEl cordero pascualEsta semana nos concentramos en la figura del siervo sufriente de Isaías, que los cristianos identificamos con Jesús. Él es la “alianza de su pueblo y luz de las naciones”. El relato de la pasión de Juan sólo en la crucifixión revela la realeza de Jesús, y su muerte coincide con el degüello de los corderos pascuales. María, al ungir los pies de Jesús, va más allá del simple gesto de hospitalidad (lavar los pies) al preparar a Jesús para su muerte inminente. Lecturas del día: Isaías 42:1–7; Salmo 27:1, 2, 3, 13 –14; Juan 12:1–11.

Martes, 15 de abrilDe la oscuridad a la luzEl cántico del siervo de Isaías habla del Siervo que ha sido llamado desde el vientre de su madre. Él proclama la palabra del Señor “como espada afilada”, que canta la salvación y pronuncia justicia. Durante la Última Cena, Jesús advierte a los suyos la traición y su inminente muerte, como una guerra entre el bien y el mal que se realiza en sus vidas. Al acercar-nos al Triduo pascual, ¿de qué oscuridades y maldades nece-sitamos liberarnos, para vivir a plena luz? Lecturas del día: Isaías 49:1– 6; Salmo 71:1– 2, 3 – 4a, 5ab – 6ab, 15, 17; Juan 13:21– 33, 36 – 38.

Miércoles, 16 de abrilAceptaciónEn nuestro propio andar, cada uno está llamado a proclamar la Palabra de Dios. Al encontrarnos con alguien abatido, necesitamos “levantarle el ánimo con una palabra”. El Siervo sufriente acepta el designio misterioso de Dios para él. La muerte de Jesús es el precio de nuestra salvación. Y nosotros confiamos en el Señor, a pesar de nuestro sufrimiento, y con las palabras del Salmo, clamamos: “Por tu fidelidad, sál-vame”. Lecturas del día: Isaías 50:4 – 9a; Salmo 69:8 –10, 21– 22, 31, 33 – 34; Mateo 26:14 – 25.

Jueves, 17 de abrilJueves SantoLa liturgia de hoy es rica en símbolos y textos. El evangelio nos da una forma de la Eucaristía, diferente a la de los sinóp-ticos. Al abajarse y lavar los pies, en señal de servicio, Jesús mismo se da completamente a los demás. ¡Gloriémonos en la cruz de Cristo! Lecturas del día: Misa vespertina de la Cena del Señor: Éxodo 12:1– 8, 11–14; Salmo 116:12 –13, 15 –16bc, 17–18 (ver 1 Corintios 10:16); 1 Corintios 11:23 – 26; Juan 13:1–15.

Viernes, 18 de abrilViernes de DoloresEn la adoración de la cruz, al tocarla, besarla y reverenciarla, conectamos nuestros sufrimientos con los de Jesús. Una práctica antigua en la Iglesia recomienda descalzarse para acercarse a ella, en señal de humildad. Escoge una frase o palabra del relato de la pasión para meditar. Lecturas del día: Isaías 52:13 — 53:12; Salmo 31:2, 6, 12 –13, 15 –16, 17, 25; Hebreos 4:14 –16; 5:7– 9; Juan 18:1—19:42.

Sábado, 19 de abrilSábado SantoEsta noche nos reunimos en torno al Fuego Nuevo, escucha-mos historias de fe, recibimos a los elegidos que entran en las aguas de la vida, y festejamos en la mesa del cielo en la tie-rra. Lecturas del día: Vigilia pascual: Génesis 1:1— 2:2; Salmo 104:1– 2, 5 – 6, 10, 12, 13 –14, 24, 35; Génesis 22:1–18; Salmo 16:5, 8, 9 –10, 11; Éxodo 14:15 —15:1; Éxodo 15:1– 2, 3 – 4, 5 – 6, 17–18; Isaías 54:5 –14; Salmo 30:2, 4, 5 – 6, 11–12, 13; Isaías 55:1–11; Isaías 12:2 – 3, 4, 5 – 6; Baruc 3:9 –15, 32 —4:4; Salmo 19:8, 9, 10, 11; Ezequiel 36:16 –17a, 18 – 28; Salmo 42:3, 5; 43:3, 4; Romanos 6:3 –11; Salmo 118:1– 2, 16 –17, 22 – 23 (Aleluya, Aleluya, Aleluya); Mateo 28:1–10.